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5.

Diferencia entre interculturalidad y pluriculturalidad

Interculturalidad y multiculturalidad son dos términos que, aunque hacen referencia al

mismo concepto, el de la mezcla de culturas en un mismo ámbito, tienen algunas diferencias

que hoy te vamos a explicar para que puedas distinguirlos bien.

Para empezar, vamos a definir el concepto de cultura, pues es la base de ambas palabras

y debemos tener claro qué significa: una cultura es el conjunto de valores, creencias, hábitos,

costumbres, comportamientos, tradiciones y expresiones artísticas aprendidos y transmitidos

por un grupo de personas en una sociedad. En este sentido, podemos afirmar que la cultura,

aunque esté arraigada en el lugar en el que se conforma, no está limitada a nacionalidades,

etnias o religiones.

Interculturalidad
La interculturalidad hace referencia, al igual que el término anterior, a la convivencia de

dos o más culturas dentro de un mismo espacio, pero con una diferencia crucial: incluye la

expresión, interacción y comunicación entre ellas para enriquecerse entre sí. El carácter de

una sociedad intercultural es abierto, imparcial y respetuoso. Por tanto, el concepto de

multiculturalidad simplemente expresa una realidad: la de la existencia de dos o más culturas

en un mismo lugar que puede o no enfrentarse entre sí. La interculturalidad, por su parte, se

manifiesta en el momento en que dos culturas se comunican entre sí y aprecian las diferencias

que pueda haber.

Pluriculturalidad
Como pluricultural denominamos la situación de una colectividad o sociedad en cuyo seno

coexiste una variedad de culturas. En este sentido, son pluriculturales aquellos países o
Estados en cuyos territorios cohabitan distintas etnias o grupos culturales con tradiciones,

costumbres, creencias y lenguas diferentes

 La pluriculturalidad representa la característica de las culturas actuales, es decir el

resultado de una cultura que ha evolucionado a través del contacto con otras

culturas, y la interculturalidad representa la relación respetuosa, el proceso, entre

estas culturas.

o La pluriculturalidad define una situación, mientras que la interculturalidad

define una interacción.

o La pluriculturalidad representa una única identidad cultural, conformada por

múltiples identidades socioculturales.

o Mientras que la interculturalidad se refiere a la interacción entre culturas, o

entre factores diferentes como edad, genero, condición social, por ejemplo:

interacción entre un hombre y una mujer, un niño y un anciano, un rico y un

pobre, un marxista y un liberal, etc.

En resumen, podemos decir que la Pluriculturalidad representa una “realidad social”,

mientras que la interculturalidad, como si mismo nombre sugiere; es la “interacción”.


6. Aspectos de una conducta intercultural positiva

No puede haber práctica intercultural positiva si es que los miembros de los grupos

humanos no asumen una conducta de tolerancia hacia la diversidad cultural. La intolerancia

niega al otro, haciendo que la relación intercultural sea prácticamente inexistente.

La tolerancia en si es insuficiente, pues solo asegura que el otro exista. Un paso más

avanzado para propiciar la interculturalidad será el respeto mutuo de los componentes de la

posible relación intercultural. Tolerancia y respeto hacen bastante, pero no todo. Se necesita

un esfuerzo cognoscitivo y de comprensión del otro como diverso de uno para construir una

relación intercultural creativa, duradera y positiva.

En el marco de tolerancia, conocimiento y comprensión del otro como diverso, los seres

humanos estamos descubriendo y enriqueciendo nuestra percepción de la humanidad,

reconociendo a la diferencia y a la especificidad como un derecho humano, tal vez el más


importante, que está en la base de la increíble diversidad de la vida misma en el planeta. A

partir de esta aserción resulta fácil identificar a la diversidad como un bien intrínseco y como

un recurso para el desarrollo de la vida y de las sociedades humanas.

7. Interculturalidad en el Perú

Según un estudio realizado el año 2005, el país latinoamericano que más preocupa en

términos de cultura social autoritaria (orden sin libertad) y de ilegitimidad del sistema

democrático es el Perú. Al parecer, los peruanos preferimos el orden al ejercicio de las

libertades, de ahí la demanda social de liderazgos personalizados fuertes que ofrecen orden

y disciplina. La educación no ha hecho nada significativo para erradicar el autoritarismo

como cultura social. Si no priorizamos la educación ciudadana en la educación pública, el

retroceso continuará, la gobernabilidad democrática será cada vez más frágil y la

institucionalización del país seguirá siendo una retórica sin contenido.

El estado actual de la cultura ciudadana y de la legitimidad del sistema democrático en el

Perú es deplorable. Y si comparamos estos fenómenos con los otros países de la región el

panorama es bastante preocupante.

Frente a la "cultura autoritaria instalada en el sentido común" que no concibe el orden con

libertad, ¿qué podemos y qué debemos hacer desde la educación? Una primera posibilidad

es ajustarnos a estas expectativas y empezar a ofrecer una educación conservadora que

refuerce los prejuicios existentes. Creo que esta posibilidad hay que descartarla de entrada.

La educación es, por esencia, opción por el cambio, el mejoramiento, la excelencia humana.

Por ello, los educadores son por naturaleza disconformes. Un educador conformista es una

contradicción. La otra posibilidad, es optar por introducir cambios en la cultura social


existente, ilustrarla, democratizarla. ¿Y cómo se democratiza el sentido común desde la

educación? La respuesta es: construyendo ciudadanía.

Creo que de no ser atacada desde sus raíces la cultura social autoritaria actualmente

vigente, ésta se reproducirá incontroladamente y el descrédito de la democracia que tenemos

seguirá en ascenso. Si no optamos por introducir cambios en la cultura autoritaria de las

escuelas para ir sustituyéndola paulatinamente por una cultura democrática auténtica, el

autoritarismo social seguirá creciendo y la legitimidad social de las opciones políticas

autoritarias irá en aumento. Si las prácticas democráticas de resolución de conflictos -vía

deliberación en común- están ausentes en el día a día de la vida escolar, los educandos

incorporarán los hábitos autoritarios que encuentran e internalizarán los valores

antidemocráticos que la cultura de la escuela les inculca.


Conclusiones

 La interculturalidad es importante para poder compartir nuestras riquezas culturales

que nos permiten conocer las diferentes formas de vida.

 Es importante mirar a nuestros pueblos indígenas, no sólo en función de sus carencias,

sino para reconocer la diversidad de organizaciones y sistemas de relaciones que han

desarrollado y que aún se conservan.

 Hablar diferentes lenguas tiene una importancia para tener una buena competencia

cognitiva, entre diferentes culturas tanto del Perú como de América Latina.

 La interculturalidad se relaciona con la tolerancia para saber convivir con diferentes

grupos y personas, de forma simétrica sin que una cultura central se imponga a otras

locales para crear una monocultura, sino que se relacione de forma horizontal en

diálogo entre diversas culturas que conviven adecuadamente.

 Desde nuestro punto de vista como futuros docentes debemos reconocer los derechos

que tienen las personas de diferentes pueblos indígenas y preocuparnos por que estas

personas sean reconocidas como parte de la sociedad, con igual dignidad que el resto

de las personas y por lo tanto merecen el respeto y una protección adecuada.

 Cada cultura presenta diferentes formas de vida que se caracterizan por su

particularidad en: religión, vestimenta, costumbres, dialecto propio, etc.

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