Nuestro planeta se enfrenta al colapso eco- Mientras, nuestra clase, la trabajadora,
lógico, es evidente. Calentamiento global, es la que se ve afectada, e incluso respon- pérdida de biodiversidad, desertización o sabilizada, presentando a la clase obrera contaminación atmosférica, son algunos como causante de ésta situación, culpabili- de los muchos problemas ambientales zándola por reciclar poco o consumir mu- que nuestra generación enfrenta. cha electricidad o agua y en consecuencia el capitalismo busca remontar su crisis es- El capitalismo se ve forzado a producir tructural con el desarrollo de líneas de in- sobrepasando los límites biofísicos del tervención y desarrollo “verdes” que son planeta para sobrevivir, llevando con ello una nueva patraña por la que seguir car- a una parte mayoritaria de la humanidad gando su crisis en las espaldas de la clase a sobrevivir en la más extrema miseria y trabajadora y los sectores populares. otra pequeña (USA, Canadá, UE y Japón) en una miseria camuflada con el consu- Recordemos también que las mismas per- mismo extremo como forma de vida. sonas que causan el problema, son las mismas que pueden permitirse huir de él. Frente a esta situación tenemos como las Véase como ejemplo que son los barrios herramientas estatales, gubernamentales o más obreros de las ciudades los que ma- internacionales de control medioambien- yores niveles de contaminación atmosfé- tal, pese a componer extensísimas legisla- rica tienen -fruto de estar al lado de los ciones, leyes y decretos son absolutamente complejos industriales de los capitalistas inútiles. Por una parte, se encuentran to- mientras las zonas residenciales que solo das ellas sometidas a la máxima del rendi- se pueden permitir los estratos más ricos miento económico; y, por otro lado, por están en mejores condiciones ambienta- el hecho de que los tratados internaciona- les. les sobre el Medio Ambiente (como Kyo- to, Río o París, entre otros muchos desde La única solución a estos graves proble- hace ya casi 50 años) son una mera suma mas pasan por el triunfo de la revolución de objetivos abstractos, sin cuestionar socialista que instaure un modelo econó- nunca la realidad económica del sistema mico no basado en la apropiación priva- que impulsa los problemas ambientales. da de los beneficios, que implante plani- ficación económica colectiva. De nuevo, si analizamos las circunstancias en las que se desarrollan los crecientes No podemos cambiar de planeta, pero problemas ambientales, se observa un pa- podemos cambiar de sistema. trón muy claro. Una clase social -la bur- ¡Socialismo o barbarie! guesía- se ve enormemente enriquecida a costa de explotar los recursos del planeta de manera unilateral, poniendo en riesgo nuestra calidad de vida presente y la de las generaciones futuras.