Agradezco tu ejemplo y tu vida, Noche y día actuaste con amor, fiel a tu fe.
Mostrabas amor a tu prójimo,
A los animales y a todo ser vivo, Reías y curabas con cariño innato. Tornabas en paz cada ambiente tuyo. Implorabas piedad por tus hermanos que No querían paz en sus propios corazones. Contigo siempre Íbamos en armonia Tanto que no Ocupabamos de males
Defendías sin juzgar y orabas por
El mundo, Gracias Martin de Porres. Santo nuestro.
Podemos también ser bondadosos, como tú lo fuiste,
Obrar de buena fe, velar por nuestro entorno, Revalorar la paz y la armonía de la naturaleza. Retarnos a nosotros mismos para bien. Y Emular a perro, gato y pericote que compartieron Siendo diferentes porque los uniste con tu amor. MARÍA FERNANDA
María Fernanda Arribaste a nuestra vida Risueña y juguetona Ingenua y llena de vida Amada mía
Felicidad nos trajiste
Especial brillo y alegría Regocija los corazones de Nuestro hogar tras tu llegada Amada mía Nunca dejes de brillar Dándonos tu paz A todos los que te queremos