En la actualidad nos encontramos inmersos en un mundo de información de carácter

mediático, es decir, se presenta de una forma tan volátil que pertenecemos a una
época en las cuales se caracteriza en ser un mundo de información alcance de un
par de “clics” para poder conocer los sucesos en tiempo real que acontecen en
cualquier parte del mundo, sin embargo esa misma información recae en un limbo
de conocimiento incierto, o bien puede fungir como un medio que a puesta por
informar sobre un acontecimiento determino, apostando por el derecho a la
información.

Para esta ocasión hablaremos de uno de los temas que carcomen los
problemas de información. Como lo son los múltiples incendios en el país de Brasil
que a su vez se está extendiendo a Bolivia y Paraguay. En primer momento se debe
tener en cuenta la tardanza para la divulgación de este acontecimiento, la cual tuvo
que llegar por medio de Twitter realizando una comparación por del poco interés
mostrado ante el incendio de Catedral de Notre Dame de Paris. Agregando la
llegada del humo y la ceniza a ciudad que se encuentran a una distancia
considerable (ej. Sao paulo) crenado la interrogante: ¿Cuántos días tardaron para
dar inicio a las brigadas antincendios?

Es ahí donde da comiendo a las múltiples versiones, incluso una de las más
tardadas así como polémicas fue por parte del presidente Jair Bolsonaro, el cual
culpa a las ONG de haberlos provocado de forma deliberada. Aunque de lo que va
del año (enero- agosto se han reportado cerca de 74 000 incendios) afectando a 5
estados. Causando al menos la pérdida de 68 reservas naturales además de la flora
y fauna del lugar, esto sin duda conduce a Brasil a decretar un estado de emergía
pues en los últimos siete años viven una amplia oleada de incendios en distintas
partes de su territorio.

A lo anterior es necesario sumar los incendios forestales que ya arrasaron

casi un millón de hectáreas de los bosques bolivianos a lo cual nadie ha quedado
ajeno en Bolivia al desastre ambiental que se agravó esta semana por la quema en
todo el territorio nacional, que incluyen áreas boscosas y amenazan el parque Noel
Kempff, el valle de Tucabaca, el Bosque Seco Chiquitano y una parte del Pantanal,
considerados pulmones de la humanidad. Desde los clubes de fútbol hasta la Iglesia
católica boliviana han comenzado cruzadas por la solidaridad con las zonas
afectadas, pero el gobierno demora la declaración que permitiría facilitar la ayuda
nacional e internacional.

Pese a las movilizaciones de ambientalistas que reclaman a Evo Morales

(presidente del Estado Plurinacional de Bolivia) la declaratoria de "desastre
nacional" para liberar recursos y recibir ayuda internacional, por su lado, el
presidente de Francia, Emanuel Macron, adelantó que en la cumbre del G-7 de este
fin de semana planteará tratar con urgencia el problema de los incendios en la
Amazonia.

Extra;

 Las Áreas de protección ambiental, instituidas por la ley 6902/81 (BRASIL,

1981a), son Unidades de Conservación (UCs) clasificadas como de uso
sustentable según el Sistema Nacional de Unidad de Conservación de la
Naturaleza (SNUC), ley nº 9985/00, pudiendo constituirse en áreas privadas
o públicas generando, en cualquiera de los casos, normas y restricciones
para el uso de la propiedad localizada en su interior. Lineamiento de carácter;
Económica-política- ecologista.
 Intenta reglamentar la figura de las Áreas de Protección Ambiental: «las
Áreas de Protección Ambiental - APA son unidades de conservación
destinadas a proteger y conservar la calidad medioambiental y los sistemas
naturales existentes, buscando la mejora de la calidad de vida de las
poblaciones locales y también concentrándose en la protección de los
ecosistemas regionales.