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Clasificación de sustancias

Depresoras del SNC


Inhiben el funcionamiento del SNC ralentizando la actividad nerviosa y el ritmo de las
funciones corporales, produciendo sueño, disminución de la ansiedad, relajación,
somnolencia, etc. Entre las principales drogas depresoras están, el alcohol, la heroína,
la morfina, codeína, la metadona, y algunos psicofármacos, como las benzodiacepinas
o los barbitúricos.

Alcohol
Es una sustancia depresora del SNC que inhibe progresivamente las funciones
cerebrales; afecta a la capacidad de autocontrol y a pesar de que produce en un inicio
euforia y desinhibición, no debe confundirse con un estimulante. Su principal
componente es el etanol o alcohol etílico, pudiendo tener diferente concentración
dependiendo del proceso de elaboración. Las bebidas alcohólicas pueden ser
fermentadas (vino, cerveza, sidra, etc.) y destiladas (con mayor concentración de
alcohol, tales como whisky, vodka, ron, etc.).

El alcohol ingerido en una bebida es absorbido en el aparato digestivo, desde donde


pasa a la circulación sanguínea en la que puede permanecer hasta 18 horas. Sus
efectos inmediatos en el organismo son euforia, desinhibición, relajación, dificultad
para asociar ideas, descoordinación motora, etc. Determinadas circunstancias pueden
agravar sus efectos, tales como ser joven, menor peso, sexo femenino, la cantidad y
rapidez de la ingesta o incluso la combinación de diferentes bebidas alcohólicas, así
como consumir alcohol junto con otras sustancias (López, Ortega , & Suárez, 2016).

Cabe mencionar que el consumo de alcohol en la adolescencia es especialmente


peligroso debido a que afecta procesos importantes como la memoria y el aprendizaje,
interfiere en el desarrollo madurativo y aumenta el riesgo de consumo de alcohol en la
adultez.

Heroína
La heroína es una droga sintetizada a partir de la morfina, derivada del opio que se
obtiene de la planta Papaver somniferum, se la incluye en el grupo de los opiáceos y es
considerada una droga depresora. Originariamente se presenta como un polvo blanco,
inodoro y fino que, dependiendo de su proceso de producción, puede presentarse con
otro color y textura.
En 1874 fue sintetizada tratando de buscar un fármaco con igual potencia analgésica
que la morfina, pero sin su capacidad adictiva, sin embargo, se comprobó que sus
riesgos y efectos negativos eran superiores a los de la morfina por lo que varios países
suspendieron su uso médico.

La heroína puede ser adulterada con quinina, lactosa, bórax, azúcar, almidón, etc.,
incluso se ha utilizado con depresores del sistema nervioso central como barbitúricos y
sedantes. Estas adulteraciones son las causantes de gran parte de los problemas
médicos derivados de su consumo, a lo que hay que añadir la “contaminación” con
bacterias, virus, hongos o partículas tóxicas.

Esta droga suele fumarse, inyectarse o inhalarse por la nariz; las dos primeras vías de
administración son las de acceso más rápido al cerebro y, por tanto, las que producen
efectos de forma más rápida. Muchos jóvenes se inician aspirándola por la nariz o
fumándola, pensando, erróneamente, que de esta manera no se llega a la adicción. Sin
embargo, a medida que el organismo se acostumbra a la droga y los efectos que
produce se hacen menos evidentes, recurren a la inyección para obtener resultados más
intensos (Plan Nacional de Drogas, 2007).

Estimulantes de la actividad del SNC

Activan el funcionamiento del SNC, produciendo un incremento de la actividad de las


funciones corporales. Sus efectos más comunes son sensaciones de excitación y
euforia, hiperactivación, ataques de ansiedad, taquicardias, estimulación del sistema
cardiovascular, disminución de la sensación de fatiga, sueño y hambre, etc. Se
distinguen estimulantes mayores (tales como cocaína o anfetaminas) y estimulantes
menores (tales como la cafeína o la teína).
¿ Qué hace el café en nuestro cuerpo? Averígualo a través de estos videos interesantes

Tabaco
Es una droga estimulante del SNC, la combustión del tabaco produce una mezcla
química compleja de más de 4,000 componentes que contienen 90 carcinógenos
conocidos y alrededor de 250 sustancias tóxicas que causan una amplia variedad de
enfermedades. Entre tales componentes destacan por su peligrosidad la nicotina
(posee una gran capacidad adictiva y es la causante de que el consumo de tabaco
produzca dependencia), los alquitranes (responsables de los distintos tipos de cáncer),
el monóxido de carbono (se encuentra en el humo del tabaco y pasa a la sangre a través
de los pulmones) y varios irritantes tales como fenoles, amoníacos, etc. (López, Ortega
, & Suárez, 2016).

La nicotina es un agente farmacológicamente activo que produce toxicidad aguda,


ingresa fácilmente al cuerpo y se distribuye por el organismo. Después de una inhalación
la nicotina tarda menos de 10 segundos en llegar al cerebro, donde se activan unos
receptores específicos que fijan la misma denominados “receptores nicotínicos”. Esta
sustancia tiene una vida media de aproximadamente dos horas, pero a medida que
disminuye su concentración en la sangre se incrementa el deseo de fumar. La fuerza de
la dependencia de la nicotina también se debe a factores tales como su reforzamiento
positivo, el poder del fumador para modular su propia dosis de nicotina, la repetición de
la conducta de fumar, la exposición a señales ambientales que despiertan el deseo de
consumo o su alta disponibilidad (Becoña, Programa para dejar de fumar, 2007).

En general, la conducta de fumar se mantiene debido a factores sociales


(disponibilidad, accesibilidad, etc.), psicológicos (de reforzamiento y procesos
cognitivos) y biológicos o de dependencia fisiológica de la nicotina. En la actualidad
se ha demostrado que el tabaquismo es el causante de diferentes enfermedades como
cáncer, enfermedades respiratorias y cardiovasculares, trastornos inmunitarios o
problemas en la función reproductora.

Cocaína
La cocaína es un potente estimulante del sistema nervioso central y una de las drogas
más adictivas y peligrosas que existen, se obtiene a partir del procesamiento químico
de las hojas del arbusto de coca Erythroxylum coca. A finales del siglo XIX, se consiguió
aislar el principio activo contenido en las hojas y surgieron diversas formas de consumo
que producen efectos más rápidos e intensos que la hoja simplemente masticada, por
lo que aumenta el riesgo de desarrollar una adicción y posterior dependencia (Plan
Nacional de Drogas, 2007).

Existen diferentes preparados de la cocaína:

• Cocaína en polvo o clorhidrato de cocaína. Es la forma habitual de presentación.


Se suele consumir esnifada (aspirada por la nariz) y tiene unos efectos casi
inmediatos que duran entre 2 y 3 horas.
• Pasta de coca: Es sulfato de cocaína y se fuma mezclado con tabaco o marihuana.
Su consumo en Ecuador es “habitual”
• Crack o cocaína base: Se consume fumada y su efecto es rápido, intenso y breve.
Es muy adictiva.

En el argot callejero, a la cocaína se la conoce por diferentes nombres: coca, perico,


farlopa, merca, dama blanca, nieve, etc. Representa una de las drogas consumidas más
adictivas y peligrosas que existe actualmente.

Éxtasis
Es la droga sintética que más se fabrica y por ende la de mayor consumo,
generalmente se presenta en forma de pastillas de tamaño pequeño y diversos
colores, aunque en algunos casos también puede consumirse en forma de polvo.

Las drogas sintéticas son aquellas producidas y/o fabricadas a través de


procesos químicos, este tipo de drogas a diferencia de la cocaína o marihuana
no se obtienen como producto de un vegetal, sino a partir de cambios
moleculares realizados en laboratorios para lograr resultados psicoactivos; la
mayoría de estas drogas se derivan de las anfetaminas. La forma de distribución
de estas drogas suele ser en pastillas, cápsulas, polvos o líquidos. En muchas
ocasiones, son principios activos abandonados por las industrias farmacéuticas,
por sus efectos indeseables que son rescatados para ser utilizadas como
sustancias de abuso. La fabricación en laboratorios clandestinos y el
desconocimiento de su composición final, las convierte en especialmente
peligrosas, porque sus efectos no son claramente previsibles. Expertos
mencionan que este tipo de drogas, afectan los sistemas neurológicos de
manera aguda o crónica, como efecto de su uso repetido, dando paso a
desarrollar cierta tolerancia y aumentar riesgosamente la dosis.

Entre los efectos psicológicos que produce el éxtasis se da sensaciones de euforia,


placer y sensación de omnipotencia debido a su efecto estimulador, así
como alteraciones sensoperceptivas y alucinaciones ocasionales. En dosis elevadas
puede inducir ansiedad, pánico, confusión, irritabilidad e incluso cuadros psicóticos.

Entre los efectos físico suelen aumentar la energía, la sensibilidad, puede producir
taquicardias, arritmias e hipertensión, pueden disminuir el apetito, provocar sequedad
de boca, aumento de sudoración y sobreestimulación. Su consumo en dosis elevadas
suele producir náuseas, vómitos, temblores, hiperactividad motora, escalofríos y
deshidratación.

Por su composición, el éxtasis no genera dependencia física, sin embargo, se puede


iniciar una elevada adicción y dependencia psicológica si se consume de forma
frecuente. Los efectos se empiezan a sentir una media hora después de su consumo y
pueden durar entre 4 y 6 horas según la tolerancia.

El consumo de éxtasis con alcohol es peligroso, pues puede desencadenar un cuadro


conocido como golpe de calor, con alto riesgo de deshidratación.

Otros nombres son: MDMA (3,4-metilendioximetanfetamina) Adán, XTC, pastillas

Perturbadoras de la actividad del SNC

También conocidas como alucinógenos, se definen como sustancias que alteran el


funcionamiento cerebral produciendo un estado de conciencia alterado, caracterizado
por distorsiones cognitivas, alteraciones perceptivas, alteraciones del estado de ánimo,
etc. Sus representantes más característicos son la Marihuana (Cannabis sativa), el
ácido lisérgico (LSD), mescalina del peyote, psilocibina de hongos alucinógenos (López,
Ortega , & Suárez, 2016).

Marihuana
Es una droga perturbadora de la actividad del SNC que se extrae de la planta
Cannabis sativa, con cuya resina, hojas, tallos y flores se elabora una de las sustancias
ilegales más consumidas en todo el mundo: el hachís y la marihuana. Sus efectos
sobre el cerebro son debidos principalmente a uno de sus principios activos, el
Tetrahidrocannabinol o THC. Los preparados (hachís, marihuana o aceite de hachís)
se suelen ingerir junto con el tabaco. Al consumirse fumado, sus efectos se sienten
inmediatamente y perduran entre dos y tres horas, mientras el efecto es más lento
cuando la absorción es vía oral, pues sus efectos aparecen entre la media hora y las
dos horas, llegando a durar hasta las seis horas (Plan Nacional de Drogas, 2007).

- Marihuana: obtenida de la trituración de flores, hojas y tallos secos, posee una


concentración de THC entre el 1 y el 5%.
- Hachis: elaborado a partir de la resina almacenada en las flores de la planta
hembra, tiene una concentración de THC entre el 15 y el 50%.
- Aceite de hachis: resina de hachis disuelta y concentrada, con una concentración
de THC entre el 25 y 50%.

El THC tiene una vida media de aproximadamente una semana, esto implica que incluso
una semana después de su consumo el organismo no ha logrado eliminarlo
completamente. Cuando una persona consume cannabis, se activa el sistema
endógeno (responsable del comportamiento, el aprendizaje, la gratificación, entre
otros) de forma artificial y por ello se alteran sus funciones (López, Ortega , & Suárez,
2016).

LSD
LSD es la abreviatura de “Dietilamida del ácido Lisérgico”, este tipo de droga es
comúnmente conocida como “ácido” una droga alucinógena o psicodélica que se fabrica
a partir del ácido lisérgico, encontrado en el cornezuelo, un hongo que crece en el
centeno y otros cereales.

Se vende en forma de minúsculos sellos con diferentes formas y colores. Carece de olor
y color y tiene un sabor ligeramente amargo, se consume de forma oral, ingiriendo o
tragando los micropapeles impregnados con el LSD.

Los efectos que causa su consumo son descritos como un "viaje" porque se experimenta
una sensación de traslación a otro lugar-espacio-tiempo. Esta experiencia se puede
dividir en cuatro fases:

Fase de Subida:
Entre treinta minutos y una hora luego de su ingesta, los colores empiezan a
ensombrecerse, los objetos en movimiento dejan tras de si una estela. Incluso
con los ojos cerrados se pueden tener visiones similares.

Fase de Meseta:
Alrededor de la segunda hora, los efectos se hacen más intensos. Aparecen
visiones fantásticas y alucinaciones visuales.

Fase o Pico Máximo:


El tiempo parece que se detiene y se experimenta una especie de traslación a
otro mundo. Esta experiencia puede ser algo místico o, por el contrario, producir
temor y miedo.
Fase de Caída o bajada:
Entre cinco o seis horas después de la toma, van
desapareciendo todos los efectos de la sustancia.

En el plano psicológico, el uso de LSD puede precipitar graves alteraciones mentales


como: paranoia, alucinosis, esquizofrenia, ansiedad extrema, ataques de pánico.
Debido a estas posibles alteraciones mentales, cuando se ha tomado LSD se cometen
muchas imprudencias y temeridades.

En el plano físico u orgánico, se evidencian pupilas dilatadas, aumento en la temperatura


corporal, aumento en la frecuencia cardiaca y la tensión arterial, sudoración, pérdida de
apetito, insomnio, sequedad de la boca y temblores.

Inhalantes (Poopers)
Son un grupo de sustancias especial porque no actúan directamente sobre el SNC, sino
sobre los vasos sanguíenos. El popper es una droga compuesta en su mayoría por
nitritos de amilo, butilo o isobutilo; en el caso del nitrato de amilo es una sustancia volátil
e inflamatoria que al ser ingerida puede provocar una muerte inmediata.

Es una droga líquida, incolora e inodora que se consume a través de la inhalación y se


comercializa mediante pequeños frascos de cristal con diferentes envolturas.

Su consumo, a través de inhalación, provoca una estimulación y una vasodilatación muy


elevada en el cerebro que se percibe a los pocos segundos de inhalar, se experimenta
una elevada sensación de euforia, sensación de ligereza, desinhibición y placer.
Pasados unos minutos estos efectos desaparecen rápidamente dando paso a una
sensación de agotamiento y decaimiento.

También puede provocar una serie de alteraciones físicas como enrojecimiento de la


cara, cefalea, náuseas, vómitos, taquicardia. Es considerada una sustancia peligrosa
debido a la elevada adicción que puede inducir y a la dependencia física que originan.

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