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INTRODUCCIÓN
Por el año 1900, los Estados nacionales formados en América latina durante el siglo
XIX habían consolidado sus instituciones y se habían integrado, política y
económicamente, en la comunidad internacional. En las primeras décadas de
nuestro siglo se mostraron que ya no era posible gobernar ni mantener una
organización de la vida social y económica sin tener en cuenta al conjunto de la
sociedad.
Los sectores excluidos del poder clases medias, obreros, campesinos- hicieron
notar su descontento de diversas maneras. A veces, como en la revolución que
asoló a México entre 1910 y 1917, desatando una ola de violencia que costó muchas
vidas.
Había llegado el momento de realizar transformaciones que permitieran una mayor
participación en la vida social y política, así como una distribución más justa de la
riqueza.
Durante la primera mitad del siglo XX, las naciones de América latina emprendieron
modificaciones que tuvieron importantes consecuencias en la organización de la
sociedad y en la política.
Estas modificaciones tuvieron como escenario principal al Estado, que fue
reorganizado. En los años ’20, ’30 y ’40, el Estado comenzó a jugar un nuevo rol, a
ampliar su esfera de acción, a intervenir en todos los aspectos de la vida social y
económica, y a llevar adelante una política que fortaleciera la idea de nación.
En la primera mitad del siglo XX, los estados latinoamericanos jugaron un rol
intervencionista que se manifiesto, principalmente, en cuatro áreas:
■ en la economía, regulando las importaciones y las exportaciones, el valor de la
moneda, controlando el sistema financiero, estimulando la industria nacional y las
empresas estatales;
■ en la política, modificando el sistema vigente y formando nuevos partidos que
incorporaron sectores populares que hasta ese momento no participaban;
■ en la organización de la sociedad, regulando las relaciones entre patronos y
obreros, organizando servicios sociales (jubilación, salud, vacaciones), estimulando
la formación de sindicatos y otras organizaciones corporativas;
■ en la cultura, reivindicando la cultura nacional, en especial la de origen popular.
La consecuencia fue un Estado más grande, con mayor ingerencia en la vida de los
individuos y en las organizaciones de la sociedad (lo que favoreció, a menudo,
diversas formas de autoritarismo) y de un marcado nacionalismo.
Amplios sectores de la sociedad, especialmente sectores populares, encontraron
que este nuevo Estado (llamado, a veces, nacional y popular) les proporcionaba un
lugar en la vida política, económica y cultural y un reconocimiento social del que
hasta ese momento habían carecido. Como resultado, la sociedad nacional
apareció fortalecida y la nación misma, más consolidada.
De esta manera, los dirigentes que se pusieron al frente de estas transformaciones
en la sociedad latinoamericana del siglo XX lograron popularidad y la formación de
partidos y movimientos políticos de gran significación: por ejemplo, Lázaro
Cárdenas en México, Getulio Vargas en Brasil, Juan Perón en la Argentina, Haya
de la Torre en Perú o Rómulo Betancourt en Venezuela.
En Latinoamérica, en general, el mayor desarrollo industrial se inició con motivo de
la crisis financiera internacional de 1930, que impulsó una política sustitutiva de
importaciones, es decir, el reemplazo de los productos manufacturados de consumo
final que tradicionalmente se importaban. Así, la producción industrial respondía a
una circunstancia internacional desfavorable. Superados aquellos años de crisis, se
creyó que la industrialización debía continuar, privilegiando la industria del hierro y
el acero, la metalmecánica, la eléctrica y la química, junto con la infraestructura de
energía, transporte y telecomunicaciones.
Este desarrollo, no obstante, se dio a costa de importar maquinarias, tecnología y
capital para infraestructura. Como resultado, las exportaciones se han diversificado
muy poco mientras que las importaciones de un conjunto mucho más amplio de
productos han aumentado. Basta con mirar a nuestro alrededor la procedencia de
ropa, calzado, galletas, lácteos, golosinas, alimentos envasados, bebidas, autos,
heladeras, televisores, computadoras, artículos de plástico, de librería , y demás
artículos.
Fuente:
Educación Cívica 2 – Edit. Santillana – Casullo-Bordone-Hirschmann-Masquelet-Podetti-
Rasnosky-Rubinich-Pujato-Tadei
EN AMERICA LATINA:
En 1850 cuando los países centrales se consolidan económicamente, salen al
mundo en busca de materia primas y ventas de productos manufacturados. Estos
países comienzan una política imperialista en Asia y África, y Latinoamérica logra
ciertos acuerdos con los gobiernos reinantes. Grandes capitales de empresas y
banqueros son depositados en los países del cono sur.
Europa necesitaba carne, cereales, lanas, cueros, salitre, minerales, cacao, azúcar,
café, etc., productos que América podría exportar.
Por lo tanto los países tuvieron que realizar diversos ajustes para formar un estado
moderno y lograr prosperidad. Tales ajustes fueron:
– Acabar con las guerras civiles, lograr paz interna
– Redactar leyes o constituciones
– Crear las instituciones para hacer cumplir las leyes.
– Enseñar el respeto por las autoridades.
– Infraestructura civil, como caminos, puentes y puertos.
– Medio de transporte como el ferrocarril
– Comunicaciones instantáneas tipo telégrafo
– Medio de almacenamientos adecuados como silos
– Preparar ejércitos
Los hombres de mayor poder político y económico de encargaron de organizar el
país, ellos fueron terratenientes, hacendados, agricultores, ganaderos, grandes
comerciantes exportadores, banqueros, etc.
Lucharon contra el indio y ganaron tierras
Confiscaron tierras a la Iglesia
Promovieron la inmigración europea
Prepararon especialistas para diversas labores
Abolieron la esclavitud
Concedieron créditos
Nacieron los gobiernos oligárquicos (de unos pocos)
LECTURA COMPLEMENTARIA:
LA ECONOMÍA EN AMÉRICA LATINA
La Globalización Económica se vio fortalecida después de la desaparición de la
URSS y la caída del socialismo, cuando se desarmó la división bipolar del mundo
formado por un bloque de países capitalistas, dirigidos por EE.UU. y por otro de
países comunistas, liderados por la URSS. Como resultado el capitalismo se
presenta como el sistema dominante en el ámbito mundial.
Los países con antiguas economías socialistas, como los que hoy forman la
Comunidad de Estados Independientes (CEI), todavía están resolviendo las
dificultades surgidas de su traspaso a una economía de mercado. Entre uno y otro
polo, se encuentran aquellos países que se rigen por una economía capitalista pero
que le dan un papel importante al Estado en el área del desarrollo social; se trata
del caso de algunos países de Europa nórdica, como Suecia, Noruega o Dinamarca,
donde prevalecen las llamadas “socialdemocracias”.
HOLDING
Agrupamiento de empresas pertenecientes a capitales individuales para asegurarla
valoración de éstos. Los agrupamientos de empresas conducen a la formación de
grupos económicos con distintas situaciones de integración. El “holding’ es la
empresa madre” que rige el funcionamiento del conjunto de empresas que
constituyen exclusivamente un grupo económico.
TERCIARIZAR
Estrategia comercial por la cual una gran empresa se desliga de la comercialización
con sectores minoristas subcontratando a otras. Dichas empresas se convierten en
intermediarios en la cadena de distribución y en responsables de la venta a los
pequeños y medianos clientes.
DISTRIBUCION DE LA POBLACION QUE VIVE CON MENOS DE 1U$S POR DIA
HISTORIA ECONOMICA DE AMÉRICA
LATINA ANTECEDENTES Y
CONSECUENCIAS
https://historiaybiografias.com/historia_latina/
Las economías de América Latina muestran una notoria diversidad no solo en los aspectos
sociales, culturales y demográficos; sino también en lo que se refiere a las políticas
económicas existentes.2Latinoamérica es una región diversa en lo referente a lo político y
económico, y así mismo inestable, por el continuo cambio de enfoque en lo que se refiere a
políticas monetarias en los distintos países de la región, lo cual ha generado constantes
conflictos tanto internos como externos, con distintos desenlaces en la historia
latinoamericana.
https://es.wikipedia.org/wiki/Econom%C3%ADa_de_Am%C3%A9rica_Latina
Entre 1980 y 2000, en varios países llegaron al gobierno diversos políticos y dirigentes
favorables a programas económicos neoliberales. Esto sucedió especialmente en los
países anglosajones y en América Latina, la siguiente lista, incluye algunos de los
presidentes que aplicaron, en distinto nivel y efectividad, varias políticas descritas como
neoliberales:
Argentina: Carlos Menem y Fernando de la Rúa (El programa Cavallista de economía
estaba basado en políticas Keynesianas y no clásicas liberales. Investigar)
Bolivia: Gonzalo Sánchez de Lozada
Brasil: Fernando Collor de Mello y Fernando Henrique Cardoso
Costa Rica: Oscar Arias
Chile: Augusto Pinochet
Colombia: César Gaviria y Álvaro Uribe Vélez
Estados Unidos: Ronald Reagan
México: Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox
Quesada y Felipe Calderón
Paraguay: Juan Carlos Wasmosy
Perú: Alberto Fujimori
Reino Unido: Margaret Thatcher
Uruguay: Luis Alberto Lacalle y Julio María Sanguinetti
Venezuela: Carlos Andrés Pérez
España:Jose Maria Aznar, Esperanza Aguirre
Puerto Rico:Luis Fortuño.
1º CHILE, 1973, como ya se decía antes, Chile fue el laboratorio donde se experimentó por
primera vez el Proyecto Neoliberal. Fueron justamente los economistas de la Universidad
de Chicago, los "Chicago Boys", bajo la dirección del premio Nobel Milton Friedman, los
encargados de dicha experimentación;
2º BOLIVIA, 1985, bajo el Gobierno de Víctor Paz Stenssoro, que aplicó por primera vez el
Proyecto Neoliberal la política del "shock", es decir aplicar simultáneamente todas las
políticas y con la mayor rapidez posible;
3o. MÉXICO, 1988, bajo el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari, que por su fidelidad en
la aplicación del Proyecto Neoliberal fue condecorado públicamente por Margaret Tatcher;
4o. ARGENTINA. 1989, bajo el gobierno de Carlos Saúl Menem y su famoso ministro de
economía, Cavallo;
5o. VENEZUELA, 1989, bajo el Gobierno de Carlos Andrés Pérez, cuya aplicación inicial
dio origen al famoso "caracazo";
6o. PERÚ. 1989, Fujimori, ahora escapado de la justicia peruana, que ganó con un
programa no neoliberal y compitiendo contra un neoliberal declarado, -Vargas Llosa-, pero
que una vez llegado al gobierno abandonó;
7o. BRASIL, 1989, primero bajo el gobierno de Fernando Collor, pero sobre todo bajo el
Gobierno de Sarney, cuyo Ministro de Hacienda fue Fernando Henrique Cardoso y que
implantó el famoso PLAN REAL.
El modo más sutil que puede arbitrar una ideología para imponerse y perdurar es
proclamar la muerte de las ideologías y mostrarse bajo otro semblante, por ejemplo, la
ciencia. Es lo que sucedió por casi un siglo con el positivismo.
La ciencia positiva hace las veces de la política, la filosofía y la teología, y siempre como
evidencia apodíctica y sagrada. Y así, disentir razonablemente de una hipótesis científica,
pasa a ser un sacrilegio y una rebelión; y el que se atreve a tanto no merece el honor de
una respuesta científica sino la marginación condescendiente o brutal: ha perdido la
contemporaneidad y no tiene sentido dirigirle la palabra.
Eso pasa hoy con el Neoliberalismo. Es un modo de practicar la economía políticaque está
alcanzando vigencia planetaria. Pero el que esta práctica haya logrado imponerse no
significa la convalidación de sus postulados; sólo atestigua la contundencia de los medios
(tanto políticos como económicos).
"Se ha demostrado que los organismos de decisión política o administrativa no obedecen
al tipo de comportamiento altruista que postuló, con cierta ingenuidad, el intervencionismo
económico del siglo XX".
El postulado principal del Neoliberalismo es que la competencia pone a funcionar hasta el
tope las energías latentes en los individuos que conforman el todo social, y así la extrema
movilidad que se genera, tras una etapa dolorosa de ajustes, provoca una sociedad de
bienestar. Para que este postulado se realice, el Estado no puede sobreproteger al pueblo:
el populismo o la planificacióncentral mantienen al pueblo en perpetua minoridad; al
atrofiarle la iniciativa y la responsabilidad lo mantienen no sólo improductivo para la
sociedad sino débil y carente de valor a sus propios ojos.
"El liberalismo económico defiende el mercado como instrumento productivo: para asignar
los recursos escasos de la sociedad a sus usos o empleos alternativos a través de los
precios libre, porque se respeta de ésta manera las prioridades de la gente en esas
asignaciones, y no se imponen las de los elencos políticos y burocracia.
Como los precios (libres) de los productosfinales son espejo en el cual los criterios de
valorización de la gente se reflejan de manera directa e inmediata, el liberalismo económico
defiende también en principio al mercado como instrumento distributivo del producto social;
porque es menos imperfecto que los instrumentos estatales.
También sus criterios de distribución reflejan - aunque indirectamente - las preferencias,
valorizaciones y prioridades de la gente: los precios de los bienes y servicios finales
determinan los precios de los factores - entre ellos el trabajo -; y estos a su vez determinan
sus ingresos, que constituyen la vía de distribución del mercado. Los instrumentos estatales
de distribución del ingreso en cambio se prestan - no siempre inevitablemente - a diferentes
formas de distorsión y corrupción. Entre ellas, la de ser distribuidos o negados en función de
criterios discriminatorios".
Igual que la nación tiene que salir al mercado del mundo, el pueblo debe salir también al
mercado nacional pagando los servicios y el consumoen su valor real y sometiéndose todos
al mercado de trabajo. Tampoco el Estado puede sobreprotegerse a sí mismo y entrar en
el mercado como si fuera una corporación privada. El Estado es público; su función sería
crear condiciones para que funcione el mercado y velar porque no se alteren. Su finalidad
es velar por el bien común, no realizarlo. Ese bien lo realizan los ciudadanos a través de
las organizaciones económicas en la concurrencia del mercado.
1. El Neoliberalismo como Ideología Política
Los neoliberales se dedican a ensalzar la competencia capitalista, afirmando que el
mecanismo de esta última garantiza automáticamente las mejores condiciones para
la evolución de las fuerzas productivas.
"Una peculiaridad del Neoliberalismo es que combina la exaltación de la libre competencia
y de la restauración automática del equilibrio con el reconocimiento de la necesidad de la
intromisión del Estado en la economía. Lo peculiar de esta argumentación reside en que la
defensa de la intervención del Estado en la economía se presenta como una lucha por la
libre competencia".
La argumentación del Neoliberalismo es que la libre competencia es el estado ideal de la
economía, pero no siempre puede ponerse en vigor, porque los monopolios la
contrarrestan. Esta reacción puede ser superada y la libre competencia puede ser
restablecida tan sólo aplicando una serie de medidas de política económica.
La crisis económica de los años setenta altera de manera fundamental la perspectiva de la
intervención del Estado. De hecho el dictum de la era reaganiana según el cual "el Estado
no es la solución, es el problema", atribuye el exceso de intervención del Estado,
el desempleomasivo, la inflación, la debilidad de crecimiento, lo que por supuesto
preparaba el campo para la crítica a la intervención estatal en los asuntos económicos.
Desde entonces, se empezó a centrar más el análisis de las políticas públicas, no en los
fallos del mercado que pudieran corregirse con las intervenciones del Estado, sino en los
fallos del Estado, en el exceso de intervención, en la burocratización, etc.
La teoría de los neoliberales se basa, en forma enmascarada, en la idea del papel decisivo
del Estado en la economía, es decir, el rol del Estado debe ser el de promover la
competencia.
REPRESENTANTES:
ADAM SMITH:
Adam Smith vino al mundo en Kirkcaldy, pequeño pueblo escocés de pescadores, cercano
a Edimburgo, en un día primaveral de fecha desconocida del año 1723 y fue bautizado el 5
de junio del mismo año. Hijo único del segundo matrimonio de Adam Smith, inspector de
aduanas, y de Margaret Douglas, quedó huérfano de padre a los tres meses bajo la tutela
de su madre, hija de un rico propietario de la comarca, a quien siempre permaneció muy
unido.
A los cuatro años vivió lo que parece haber sido la única aventura de su vida: fue raptado
por unos gitanos. Tras una desesperada búsqueda por parte de la familia, el niño fue hallado
en un bosque en el que había sido abandonado por sus raptores. Luego, sin trauma alguno,
continuó siendo un niño bueno, aunque débil y enfermizo, de carácter dulce, prodigiosa
memoria y amor al estudio, excelente alumno de la escuela elemental de Kirkcaldy.
ADAM SMITH
A los catorce años abandonó su pueblo natal para ingresar en la Universidad de Glasgow.
En este centro se apasionó por las matemáticas y recibió la influencia de Francis Autcheson,
afamado profesor de filosofía moral y hombre de fuerte personalidad, cuyas ideas
económicas y filosóficas fueron decisivas en la formación de Smith, aunque sólo fuese por
su posterior y profunda discrepancia respecto de ellas. Tres años después se graduaba,
obteniendo una beca para estudiar en el Balliol College de Oxford. A los veintitrés años de
edad concluyó brillantemente los estudios haciendo gala de un profundo dominio de la
filosofía clásica y de la de la época. A continuación regresó a Kirkcaldy con su madre para
empezar a buscar trabajo.
En 1748, gracias a un amigo de su familia, el filósofo y jurista lord Henry Kames, se le
presentó la oportunidad de dar una serie de conferencias en Edimburgo. Lejos de
desaprovecharla, durante los dos años siguientes disertó sobre diferentes temas, desde la
retórica a la economía y la historia, y se dio a conocer con éxito como escritor con la
publicación de algún artículo en la Edimburgh Review. En esta época conoció al filósofo
David Hume, quien se convertiría en su amigo más íntimo.
Con las conferencias cosechó un éxito tal que en 1751 le ofrecieron un puesto de profesor
de lógica en la Universidad de Glasgow. Tras un año en este puesto, cambió las clases de
lógica por las de filosofía moral, que además de resultarle más interesantes estaban mejor
remuneradas. Para Adam Smith, se trataba de una etapa de gran creatividad que él definiría
luego como el período más feliz de su vida; parecía decidido a seguir la carrera docente e
incluso en 1758 fue nombrado decano de la facultad, se reveló como un profesor excelente
cuya fama traspasaba las fronteras, y se decía que Voltaire, desde Francia, le enviaba
alumnos deseosos de asistir a sus clases y embeberse en su sabiduría.
En Glasgow formaba parte de un selecto círculo integrado por intelectuales, científicos y,
sobre todo, por destacados comerciantes dedicados al comercio colonial desde que en
1707, a raíz de su unión con Inglaterra, éste quedara abierto para Escocia. Sus ideas y
opiniones sobre el comercio y los negocios representaron una información de primera mano
para el futuro economista y, en contacto con dicho círculo, conformó las tesis que
cristalizarían más adelante en su obra.
LA MORAL Y LA ECONOMÍA
El primer libro de Adam Smith, The Theory of Moral Sentiment (Teoría de los sentimientos
morales), su obra maestra desde el punto de vista filosófico, se publicó en 1759. En ella
exponía los principios de la naturaleza humana que guiaban el comportamiento social del
hombre, y hablaba por vez primera de «la mano invisible» que sin saberlo y sin proponérselo
orientaba el egoísmo humano hacia el bien de la sociedad.
En 1763 recibió una nueva oferta de trabajo que le había de resultar mucho más lucrativa
que cualquiera de las tareas que había realizado hasta el momento: preceptor del joven
duque de Buccleuch. Renunció a la docencia y en 1764 partió hacia Francia en compañía
de su pupilo. En Toulouse pasaron dieciocho meses, en cuyo transcurso Smith combatió el
aburrimiento provinciano con la redacción de una nueva obra.
Los viajeros se dirigieron después a Ginebra, ciudad en la que pasaron dos meses; Smith
aprovechó dicha estancia para conocer personalmente a Voltaire, por quien siempre sintió
una gran admiración. Siguió luego una breve pero provechosa estancia en París; su amigo
Hume, secretario de la embajada británica, le introdujo en los más selectos salones de la
capital; entre otros, conoció a François Quesnay, médico y economista, fundador de la
escuela fisiocrática, que fue la primera que atribuyó de forma coherente a la naturaleza el
origen de la riqueza. Los fisiócratas eran acérrimos seguidores de la máxima de Le Mercier
de la Rivière, «Laissez faire, laissez passer, le monde va de lui même», que hicieron suya.
Parece que influyeron en Adam Smith lo suficiente como para que pensara dedicar a
Quesnay el libro que estaba escribiendo, pero la muerte del francés antes de que fuera
publicado le hizo cambiar de idea. En 1767 el repentino fallecimiento del hermano menor
del duque de Buccleuch, que se había reunido con ellos en Toulouse, les obligó a un
precipitado regreso a Londres.
En los años 90 imperó en América Latina el “consenso de Washington” como recetario obligado
para que las economías de la región salieran de la crisis de la deuda y aseguraran el crecimiento.
No se consiguieron los objetivos, no hubo crecimiento y sí, en cambio, varias y severas crisis
financieras que dejaron desastrosos resultados. Sin embargo, las políticas del Consenso se
convirtieron en el catecismo para aplicar a todos los países en vías de desarrollo, se convirtieron
en el núcleo del neoliberalismo.
Europa participaba en tal consenso en la medida en que sus países forman parte de los
organismos financieros que lo apoyaban, singularmente el FMI y el Banco Mundial. Participaba del
lado cómodo de la situación, era el acreedor, recuérdese el Club de París. Ahora les tocó el lado
malo y ser tratados por estos mismos organismos y mercados, como a países en desarrollo
aplicándoles la misma nefasta receta conocida como Consenso de Washington, pero que en
Europa se la denominó “consenso de Bruselas” cuando en realidad es el “consenso de Berlín”.
El premio Nobel Amartya Sen atribuyó la crisis europea a cuatro fracasos; i) fracaso político, ii)
fracaso económico, iii) fracaso social y iv) fracaso intelectual. La crisis financiera mundial, que
comenzó en 2007 con la burbuja especulativa de los préstamos hipotecarios de alto riesgo en USA
y creció hasta convertirse en una crisis de la deuda soberana y la banca europeas; ha planteado
interrogantes que Europa no puede responder y peor superar al solo aplicar este recetario tan
simple y general que no alcanza a explicar las intrincadas consecuencias políticas, económicas,
sociales, demográficos y ambientales de la misma.
Para comprender la dimensión de la crisis europea basta mencionar que luego de casi medio siglo
de conversaciones en pos de la integración regional la misma se ve seriamente afectada con la
inminente salida de Grecia de la zona Euro. ¿Y por qué sucederá esto en Grecia? Simple una
economía con iliquidez, insolvencia y falta de competitividad en un escenario de impresionante
incertidumbre política está nada más y nada menos al borde del colapso total.
Una salida traumática de Grecia de la zona Euro implicaría adoptar una nueva moneda con un
costo social sea igual o peor que el ya padecido; pero, admitiría a mediano plazo que la economía
se vuelva más competitiva. Una salida algo armónica y apoyada por el resto de Europa presentaría
consecuencias; pero, consentiría un menor contagio directo al resto del continente bajo la figura
de un efecto dominó. Estos dos escenarios se prevén dependiendo de los resultados de las
elecciones griegas las cuales son concluyentes para el futuro del continente.
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consenso.html