(Adaptación de Meditaciones escritas para las Esclavas del Divino Corazón por el Cardenal Spínola pág. 11ss; 593ss; 643 ss)
“Daremos un sentido de revisión general
al día de retiro de fin de año” (D. 24).
Nota 1 - Se puede ambientar este día la Capilla con un Calendario del
2012 y otro del 2013. Además: Biblia, Catecismo de la Iglesia Católica, Constituciones, Conclusiones del XIX Capítulo General… Nota 2 - La estructura del retiro son varios apartados formado cada uno por unos puntos de Nuestro Padre para la reflexión, unos textos bíblicos en consonancia, y unas preguntas que ayuden a profundizar. Nota 3 - No es preciso que trabajes todos los textos que se indican además es posible que tengas “los tuyos” para días como hoy. Si te va mejor toma “los tuyos”.
“Imaginémonos que vamos de viaje, y llegados a una altura, desde la
que se divisa parte del trayecto recorrido, volvemos la vista atrás para ver lo que hemos andado. Pidamos al Divino Corazón de Jesús que veamos claro, ahuyentando las nieblas que puedan impedírnoslo” (Medit. pág. 643) “Santificarse es, bien miradas las cosas, caminar…, la meta, es el amor de Dios, mas no cualquier género de amor, sino el amor generoso, encendido, que nos une al objeto amado, hasta el punto de que en el mismo se pierde en algún sentido nuestra vida”. (Cf. Gál 2,20) “Cada año que pasa es una jornada en el camino de la vida, (…) como es otra jornada en el camino de nuestra santificación; porque para el cristiano, vivir y santificarse son dos cosas inseparables”. “Estamos a punto de terminar en el presente instante una de esas jornadas. (…) El año se va, (…) llevándose consigo un pedazo (…) de nuestra vida, que no podemos recobrar”. “¡Ay, mirad bien!”
Mira la paciencia que el Señor ha tenido contigo…no ha
retirado de ti su mano…ha esperado y aún sigue esperando. Gal 5, 22; St 5, 7-12; Apc 2, 2-4 A la luz de su paciencia, mira la paciencia tuya con tus hermanas de tu comunidad, tus alumnos, tu familia,… contigo misma… El Señor te ha colmado de beneficios a lo largo de los doce meses del año… Sal 145(144), 16; St 1, 17 ¿En qué has experimentado el favor, la ayuda de Dios? Y los demás, ¿qué beneficios han recibido de ti? Te ha amado con ternura. El móvil de todos sus actos hacia ti fue el amor… un amor de Padre lleno de detalles. Miq 6, 8; 1Cor 13, 4-8 ¿Cómo te ha mostrado su ternura? Y tú, ¿cómo se la has mostrado a Él? ¿Para quién han sido tus detalles? Su mano te ha sostenido en la lucha y por eso no has abandonado a pesar de la pereza, la cobardía, el desánimo… Sal 18(17), 3.4; Sal 26(27) Haz memoria y agradece… ¿Quiénes han necesitado ser sostenidos por ti? ¿Han encontrado el apoyo que buscaban? Porque te ama, no es indiferente a tus cosas, y se compadece de tus dolores y se alegra con tus alegrías. Se interesa por ti, quiere tu bien…Es Dios capaz de socorrer y ayudar a quien ama. Confía… la confianza es acto de fe, y la fe mueve montañas… la confianza es la vara de Moisés, instrumento de prodigios nunca vistos… El que algo se propone no fiado en sus propias fuerzas y merecimientos sino apoyado únicamente en la bondad de Dios Padre, no quedará confundido. Desconfiar de nosotros, esperar en Dios es el secreto de la perseverancia en el bien. Sal 118(117), 6; Mt 6, 25-34; Apc 3, 19 ¿Cómo ha sido tu confianza en el Señor, en el año que termina? Las personas que tratan contigo, ¿pueden sentir que te fías de ellas? Tu tibieza en el amor te ha llevado en ocasiones a medir el Corazón de Dios por el tuyo atribuyendo a su Corazón el desamor del tuyo. Pide perdón por tu impaciencia, por tu ingratitud, por tu mediocridad, por tus incoherencias por decir cada mañana que te consagras a Él y vivir a veces como si no lo estuvieras, por… Sal 25(24),6.7; Sab 11, 23-26 Y gózate en su perdón que es la máxima expresión de su Amor… Y agradece… Col 3, 12-15 “Después de haber mirado hacia atrás, miremos adelante” “Nos queda, pues, mucho que andar. (…) Ese camino (…) ofrece peligros (…) y es uno de ellos el del cansancio (…) y es otro peligro la distracción. (…) No hemos de desanimarnos; pero tampoco nos debemos descuidar. Vigilantes y prudentes no habrá inconveniente ni dificultad que no venzamos. De ordinario la mayor parte de las catástrofes que acaecen en las carreteras (…) proceden o de falta de vigilancia, o de imprudencia. (…) No otra cosa sucede en el camino de la santidad. Es preciso que el viajero lleve puestos los ojos en el punto a que se encamina (…): la santidad. Hay en punto de virtud lo bueno, lo perfecto y lo mejor (…) Lo mejor es buscar entre lo que a Dios es grato lo que le agradará más, lo que se hallará en más cumplida armonía con su voluntad. Si alguna vez decae nuestro ánimo, Jesucristo, lo esperamos, no nos abandonará, y comunicándonos su aliento, nos convertirá en llano lo áspero y escabroso (…). Pensémoslo bien y digamos: <¡Adelante!>”
Y adelante siempre. Así llegaremos al término, siendo
para nosotros el año próximo mejor que el pasado” Sal 37(36),4; Sal 61(60), 5.6; Mt 7, 7-11; Col 3, 12-17; 1 Tim 6,11; Heb10, 36-37; 1 Pe 3, 8-10. A la luz del camino recorrido, ¿por dónde intuyes que quiere llevarte el Señor? ¿Qué medios necesitas para caminar por ahí…?