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Valoración económica de los recursos naturales mediante el método de los costos

evitados o beneficios inducidos

1. Valoración económica de bienes y servicios ambientales

1.1. ¿Por qué valorar económicamente?


En su mayoría, los bienes y servicios ambientales carecen de un precio. Ello ocasiona
que sean explotados de forma abusiva, produciendo así inequidades sociales y una
mínima aportación a la economía (Sánchez, 2008).

Por otro lado, el ambiente al ser un bien público, no posee precios de mercado que
reflejen el valor verdadero de sus atributos y funciones. En consecuencia, se generan
ineficiencias económicas en el uso de recursos tanto naturales como ambientales
(García, 1982; Gowdy, 1995). Valorar los bienes y servicios ambientales se convierte en
una necesidad debido al agotamiento y la degradación de los recursos, consecuencia
directa del deterioro ecosistémico (Azqueta, 1994).

En resumen, una falla del mercado que conduzca a una asignación ineficiente de los
recursos es el argumento a favor de la valoración económica de los bienes y servicios
ambientales, pues produce daños para la sociedad: pérdida de bienestar social ante el
deterioro e indisponibilidad de bienes y servicios ambientales (Pérez, 2016).

1.2. Métodos de valoración económica


De acuerdo con el Ministerio del Ambiente (2016), con el fin de cuantificar parcial o
integralmente el valor económico de un bien o servicio ambiental, se han desarrollado
diversos métodos de valoración. Por lo general, la elección del método de valoración
depende principalmente de: la información disponible, el bien o servicio ambiental, el
objetivo de la valoración, el tipo de valor económico, el tiempo y los recursos
financieros. En el Cuadro 1 se resumen los criterios referenciales para la elección de un
método de valoración económica.
Cuadro 1. Métodos de valoración económica

Enfoque Métodos Tipo de valor Requerimientos necesarios Ejemplo de bien y/o servicio
Valores de mercado Precios de mercado Uso directo Bienes y servicios que se transen en el mercado Productos agrícolas
Cambios en la Bienes y servicios constituyen el insumo de los Variación de la producción agrícola ante
productividad Uso indirecto productos del mercado la disminución del agua
Costo de viaje Uso directo Existencia de beneficios recreacionales en un espacio Recreación por visitar un parque
Bienes y servicios como atributo característico de un
Precios hedónicos Uso directo / indirecto bien del mercado Calidad del aire
Existencia de evidencia que las personas o la sociedad
Preferencias reveladas Costos evitados Uso directo / indirecto tienen intención y capacidad de efectuar el gasto Gastos de filtración de agua contaminada
Preferencias
declaradas Valoración contingente Uso y no uso Bien sin mercado Especies en peligro de extinción

Fuente: Ministerio del Ambiente


Elaboración: Propia
2. Método de los costos evitados o beneficios inducidos
La premisa fundamental es que los agentes económicos (entiéndase por estos al
gobierno, empresas e individuos) están dispuestos a modificar su comportamiento y
realizar inversiones para reducir o evitar los efectos no deseados de la degradación
ambiental o de un mayor riesgo que afecta su bienestar. Este método se usa para
medir dichos gastos, cuando los bienes o servicios son sustituidos (Ministerio del
Ambiente, 2015). Por tanto, su aplicación está limitada a los casos en que los servicios
provistos por un ecosistema tienen una influencia directa en los agentes económicos, y
es posible adoptar medidas defensivas para reducir o evitar los impactos negativos
resultantes de los cambios en la calidad ambiental (Dickie, 2003).

Por otro lado, supone que los costos que evitan ciertos daños sobre el ambiente o los
servicios que estos proveen, constituyen estimaciones de su valor. Dicho supuesto se
basa en el hecho de que si las personas están dispuestas a incurrir en este tipo de
costos para evitar los daños causados por la pérdida de algún bien o servicio
ambiental, entonces, estos servicios deben valer, por lo menos, el monto que la gente
paga por ellos. La principal ventaja de este método es que su implementación no es
costosa y la información que requiere no es difícil de obtener. Son dos las limitaciones
que posee: (1) en algunos casos resulta difícil sustentar un alto grado de sustitución
entre el bien o servicio ecosistémico y el bien que cuenta con mercado, y (2) para las
estimaciones del valor económico no usa las medidas de bienestar.

La investigación de Gomez (2018) valoró económicamente los efectos que la calidad


del agua tiene en la salud de los niños de 0 a 5 años del anexo San Antonio en el
distrito de Yarabamba (Arequipa). Para ello, primero se evaluó si el agua de las dos
fuentes de abastecimiento (conexión domiciliaria y cisterna) cumplía con los
parámetros de calidad del agua para el consumo humano, evaluando los parámetros
físicos, químicos y microbiológicos. Se determinó así que el agua por conexión
domiciliaria es de peor calidad que el agua provista por cisterna, puesto que excede los
límites máximos permisibles en los distintos parámetros, pero que ninguna de estas
fuentes cumplen con los parámetros establecidos.
Luego se realizó una encuesta a los padres de los niños de 0 a 5 años de este espacio
geográfico para identificar la situación actual del uso y consumo de agua de ambas
fuentes. Con ello se encontró que el uso es inadecuado dado que almacenan el agua
provista por conexión domiciliaria hasta por 14 días en recipientes no adecuados
(bidones, baldes de plástico o metal) y en lugres expuestos al sol, lo que ocasiona que
el agua presente cambios en el color, olor y sabor con frecuencia. En cuanto al agua
provista por cisterna las condiciones son iguales pero en una proporción menor.
También se reveló que gran parte de la población no realiza tratamiento alguno
adicional en el agua (hervirla o usar cloro) antes de usarla en el lavado de manos o
higiene del niño, pero si la hierve si se destina al consumo o preparación de alimentos.

Para efectuar la evaluación económica se emplearon los datos obtenidos de la


encuesta realizada (tiempo de almacenamiento del agua y frecuencia de aseo del niño)
y los resultados de la calidad del agua de ambas fuentes fueron tomados como una
variable dicotómica en una función lineal que permitió demostrar que la calidad del
agua es una variable que estima significativamente los costos de los efectos en la salud
(ver ecuación 1). Como resultado final se tiene que el consumo de agua de una mala
calidad incrementaría en 427.7 soles los costos anuales en enfermedades dérmicas y
estomacales en niños de 0 a 5 años en el anexo San Antonio.

Costi=a0 +a1Calidi+a2Talmi+a3Higi+ei i=1, … , 30 [1]

Donde: Cost=Costo en enfermedades estomacales y dérmicas producidas por el agua

Calid=Consumo de agua de mala calidad

Talm=Tiempo de almacenamiento del agua

Hig=Frecuencia de higiene del niño

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