Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
El descubrimiento
El proyecto colombino.
1
Paolo dal Pozzo Toscanelli: (Florencia 1397 - id., 1482) Científico italiano. Basándose en los
relatos de Marco Polo y de Nicolás de Conti, calculó la posibilidad de dirigirse a Oriente a
través del océano Atlántico, estimando erróneamente que la distancia entre las islas Canarias
y Cipango (Japón) era menos de la mitad de la real. Intercambió información con Fernão
Martins, al que envió una carta (1474) en la que exponía que esta ruta era más corta que la
que pretendían seguir los portugueses a través de las costas de África.
Fuente: https://www.biografiasyvidas.com/biografia/t/toscanelli.htm
2
En la negociación final, Colón exigió que se le concediera el título hereditario de Almirante del Mar
Océano, el cargo de virrey y gobernador y el diez por ciento de las ganancias del descubrimiento.
Historia de América latina 1 |
no fueron aceptadas por los reyes, por lo que de nuevo fue rechazado, pero
cuando Colón ya había salido de Granada un alguacil enviado por los reyes le
pidió que volviese, que querían hablar con él otra vez. Se cree que este cambio
de opinión de los reyes fue gracias a Luis de Santángel, que intercedió
directamente ante la reina aportando él el capital que se supone tenía que cubrir
la corona y convenció a los reyes de que había poco que perder y mucho que
ganar.
El primer viaje
Bethell: “[…] pero a finales del s XV la combinación del aparejo cuadrado de los
europeos del norte con la vela latina del Mediterráneo produjo en la carabela un
impresionante barco para navegar en el océano. Al mismo tiempo que las nuevas
necesidades de los viajes atlánticos ayudaron a perfeccionar las carabelas, así
también ayudaron a mejorar las técnicas de navegación.
Una vez que los barcos navegaron por aguas
desconocidas fuera de la vista de tierra, las viejas
técnicas de la estima ya no
fueron adecuadas y los
portugueses se volvieron a la
observación del cielo para
medir distancias y determina
latitudes haciendo uso de
instrumentos largamente
utilizados por los astrónomos:
el astrolabio y el cuadrante.
Cristóbal Colón estaba convencido de que había llegado a las llamadas Siete Mil
islas que Marco Polo narraba en sus relatos y que antecederían al continente
asiático. Allí debería de encontrar el ansiado oro y las especias y al Gran Khan
con el que tenía previsto entrevistarse y presentarle los respetos de los Reyes
Católicos.
En pocos días visitaron y pusieron nombre a numerosas islas: San Salvador,
Santa María de la Concepción, Fernandina, Isabela, etc. Llegaron a Cuba el 28 de
octubre, isla bautizada con el nombre de Juana. Al almirante le pareció tan
grande que creyó sin duda que habían llegado al continente, afirmando en su
Diario que se encontraban entre Zaiton y Quinsay, legendarias ciudades chinas.
Las primeras impresiones de Colón, a pesar de lo que deja entrever en su Diario,
debieron de ser decepcionantes, ya que se supone que deberían de haber
llegado a una tierra rica, con ricos habitantes, suntuosas y grandes ciudades y
hasta el momento no habían visto más que gente pobre, prácticamente desnuda,
que vivía en pequeñas aldeas y que no conocían ni el hierro, cuando en Asia este
metal ya era usado siglos antes.
Supuso que tierra adentro se podría encontrar algo de interés y por ello envió a
cuatro emisarios a explorar el interior de Cuba: dos españoles, Rodrigo de Jerez y
Luis de Torres, este último traductor de caldeo, hebreo y algo de árabe, y dos
indios, uno de la isla de San Salvador y otro de la propia isla de Cuba. Tras varios
días de marcha regresaron el 6 de noviembre con pobres noticias: internados
varias decenas de kilómetros encontraron varias aldeas de no más de cincuenta
casas, algo más grandes que las costeras, pero igualmente pequeñas. Contaron
que los indios allí residentes les habían tratado de forma extremadamente
hospitalaria y que creían que ellos venían del cielo, enviados por los dioses.
Los conquistadores siempre preguntaban a los indígenas que veían con alguna
pequeña pieza de oro o de plata de dónde lo había sacado y había casi total
unanimidad en señalar hacia el sureste, en donde decían que había una isla
grandísima donde el oro se podía recoger con las manos de las riveras de los ríos.
Por eso continuaron navegando en dirección sureste hacia la isla conocida por los
nativos como Haití.
El 22 de noviembre sin previo aviso Martín Alonso Pinzón y la Pinta
desaparecieron y continuaron la expedición por su cuenta, dejando a Colón
materialmente tirado en Cuba. Nunca ha trascendido los motivos de dicha
maniobra, pero todo apunta a que quiso adelantarse a Colón en encontrar el oro
y las riquezas asiáticas.
Tras varios días en los que no pudieron navegar por corrientes y vientos
contrarios las naves de Colón avistaron la referida isla de Haití, concretamente el
5 de diciembre, a la que pone el nombre de la Isla Española. Oficialmente es
Colón el descubridor de la isla haitiana, pero si tenemos en cuenta que Martí n
Alonso Pinzón les dejó atrás este debería de ser el auténtico descubridor y primer
europeo en ver sus costas.
La conquista
Bethell: Conquistar, por tanto, puede significar colonizar, pero también puede
significar invadir, saquear y avanzar.
En cuanto al contexto político-social: […] En el s. XV, Europa era una sociedad
que todavía sufría las desarticulaciones sociales y económicas causadas por los
estragos de la peste negra. Había escasa oferta de trabajo; los ingresos de los
aristócratas habían disminuido; los monarcas y los nobles competían por poder y
recursos.