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Índice general

3. Métodos de demostración 3
3.1. Definiciones, teoremas y demostraciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
3.2. Demostración directa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
3.3. Demostración por contrarrecíproco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12
3.4. Reducción al absurdo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
3.5. Demostración de bicondicionales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
3.6. Demostración por casos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
3.7. Teorema de la forma P → (Q ∨ R) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17
3.8. Teorema de la forma P → (Q ∧ R) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
3.9. Teoremas con cuantificadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
3.9.1. Teoremas con un cuantificador universal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
3.9.2. Teoremas con un cuantificador existencial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
3.9.3. Teoremas con varios cuantificadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
3.10. Demostración de unicidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
3.11. Conjeturas y contraejemplos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
3.11.1. Conjeturas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
3.11.2. Demostrar o refutar. Contraejemplos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27

1
2 ÍNDICE GENERAL
Capítulo 3

Métodos de demostración

Se puede decir sin lugar a dudas que que los tres pilares principales de las matemáticas se llaman
definición, teorema y demostración.
Las definiciones las utilizamos en matemáticas para introducir conceptos o para darle nombre a
objetos que tienen ciertas características. Los teoremas son proposiciones verdaderas acerca de los
conceptos dados por las definiciones. Pero para que una proposición sea considerada un teorema, es
necesario que tenga una demostración. De esta forma, una demostración es la justificación irrefutable
de la verdad de un teorema.
El principal objetivo de este capítulo es mostrar diferentes métodos usados para escribir demos-
traciones de teoremas.
Se asumirá que el lector tiene cierto conocimiento sobre los números naturales, los números
enteros, racionales y reales, así como las operaciones de suma y multiplicación con ellos y algo de
álgebra elemental.

3.1. Definiciones, teoremas y demostraciones


Una definición es una explicación exacta y sin ambigüedad del significado de un término o frase
matemática. A continuación damos la definición de número par.
Definición 3.1.1. (Par) Sea n un número entero. Decimos que n es par si existe un entero k tal
que n = 2k.
Nota 3.1.2. Aunque las definiciones se expresan usualmente como proposiciones condicionales,
en realidad siempre debemos tomarlas como proposiciones bicondicionales. Así, por ejemplo, la
definición de número par debemos interpretarla de manera más correcta como sigue: n es par si y
sólo si existe un entero k tal que n = 2k.
Podemos simbolizar la definición de par como sigue:

n es par ⇔ (∃k)(n = 2k).

Inmediatamente observamos que

n no es par ⇔ (∀k)(n 6= 2k).

3
4 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Ejemplo 3.1.3. a) Los números 2, 4, 0, 18, −14 son pares puesto que
2=2·1 (k = 1)
4=2·2 (k = 2)
0=2·0 (k = 0)
−14 = 2 · (−7) (k = −7).

b) El número 57439276 es par. Para verificarlo sin necesidad de hacer la división por 2, observemos
lo siguiente:
57439276 = 57439270 + 6
= 10 · 5743927 + 6
= 2 · 5 · 5743927 + 2 · 3
= 2 · (5 · 5743927 + 3)
= 5k,
donde k = 5 · 5743927 + 3. Observamos que k = 5 · 5743927 + 3 es un número entero porque
resulta de una combinación de sumas y productos de enteros.
Ahora presentamos la definición de número impar.
Definición 3.1.4. (Impar) Sea n un entero. Decimos que n es impar si existe un entero k tal que
n = 2k + 1.
La simbolización y la negación de impar son como sigue:

n es impar ⇔ (∃k)(n = 2k + 1).


n no es impar ⇔ (∀k)(n 6= 2k + 1).
Nota 3.1.5. Todo número entero, o es par, o es impar, pero no ambos a la vez. De esta forma,
decir que un entero no es par es equivalente a decir que es impar, y de igual manera, decir que un
entero no es impar es equivalente a decir que es par.
Ejemplo 3.1.6. 1. Los números 1, 17 y −17 son impares puesto que
1=2·0+1 (k = 0)
17 = 2 · 8 + 1 (k = 8)
−17 = 2 · (−9) + 1 (k = −9).

2. El número 5743927 es impar puesto que


5743927 = 5743920 + 7
= 10 · 574392 + 7
= 2 · 5 · 574392 + 2 · 3 + 1
= 2 · (5 · 574392 + 3) + 1
= 2k + 1,
3.1. DEFINICIONES, TEOREMAS Y DEMOSTRACIONES 5

donde k = 5 · 5743927 + 3. Observamos que k = 5 · 574392 + 3 es un entero porque resulta de


una combinación de sumas y productos de enteros.

Definición 3.1.7. (Divisibilidad) Sean a y b enteros. Decimos que a divide a b si existe un entero
c tal que b = ac. Cuando a divide a b, lo simbolizamos como a | b. En esta situación también se dice
que a es un divisor de b o que b es un múltiplo de a.

A continuación simbolizamos la definición de divisibilidad y su negación:

a | b ⇔ (∃c)(b = ac).
a - b ⇔ (∀c)(b 6= ac).

Ejemplo 3.1.8. Tenemos que 4 divide a 28 porque 28 = 4 · c donde c = 7; así, podemos escribir
4 | 28. Sin embargo, 5 no divide a 12 pues no es posible hallar un entero c de tal forma que 5c de
como resultado 12. Escribimos en este caso 5 - 12.

Definición 3.1.9. (Congruencia) Sean a, b, y n enteros. Decimos que a es congruente con b


módulo n si n divide a a − b. Se simboliza esto mediante a ≡ b (mod n).

La simbolización de la congruencia y su negación son como sigue:

a ≡ b (mod n) ⇔ n | (a − b)
⇔ (∃c)(a − b = nc).

a 6≡ b (mod n) ⇔ n - (a − b)
⇔ (∀c)(a − b 6= nc).

Ejemplo 3.1.10. 1. Tenemos que 17 ≡ 5 (mod 4) puesto que 17 − 5 = 4 · 3.

2. Tenemos que −15 ≡ 5 (mod 5), puesto que −15 − 5 = 5 · (−4).

3. Tenemos que 17 6≡ 5 (mod 5), puesto que 17 − 5 = 12 y sabemos que 12 no es divisible por 5.

4. Tenemos que 124653 ≡ 28 (mod 25). Para comprobarlo observamos lo siguiente:

124653 − 28 = 124625
= 124600 + 25
= 100 · 1246 + 25
= 25 · 4 · 1246 + 25
= 25 · (4 · 1246 + 1)
= 25 · c,

donde c = 4 · 1246 + 1 es un entero porque resulta de una combinación de sumas y productos


de enteros.
6 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Un teorema es una proposición matemática que es verdadera y que además tiene una demos-
tración. Usualmente, un teorema se expresa como una proposición condicional de la forma “si P ,
entonces Q”. En tal caso la proposición P es llamada la hipótesis del teorema y Q es llamada la
tesis. En ocasiones, la redacción del enunciado del teorema oculta el hecho de que es una proposi-
ción condicional. Por ejemplo:

Teorema. Todos los múltiplos de 4 son pares.

Si lo queremos interpretar en forma condicional lo podemos expresar de la siguiente manera:

Teorema. Si n es un múltiplo de 4, entonces n es par.

Aquí la hipótesis es “n es un múltiplo de 4” y la tesis es “n es par”.

No todos los teoremas son proposiciones condicionales. Algunos son simplemente una proposi-
ción P . Por ejemplo:

Teorema. Existen infinitos números primos.

Teorema. El número π es irracional.

Otras formas comunes de teoremas son las siguientes:


• P ↔ Q.

• (P ∨ Q) → R.

• P → (P ∨ Q).
Hay otras palabras usadas en matemáticas que significan esencialmente lo mismo que teorema.

• Teorema. Proposición significativa o importante que tiene una demostración.

• Proposición. Proposición verdadera con demostración, pero no tan significativa o importante


como para llamarla teorema.

• Lema. Proposición verdadera con demostración, que ayuda en la demostración de un teorema.

• Corolario. Proposición verdadera que es consecuencia inmediata de un teorema o una pro-


posición.

Una demostración es una verificación escrita que muestra de manera irrefutable que un teorema
es verdadero. Usualmente, en una demostración se realiza una serie de deducciones tomando como
premisas las hipótesis del teorema, y valiéndose de las definiciones, así como de otros teoremas
previamente demostrados, y las reglas de la lógica, se concluye la tesis del teorema.
En este sentido, una demostración es como una derivación de un argumento, en el que las
premisas son las hipótesis del teorema y la conclusión es la tesis del teorema. Pero esta vez no
3.2. DEMOSTRACIÓN DIRECTA 7

se trata se proposiciones simbólicas, sino de enunciados con significados precisos. La redacción


apropiada de lo que se quiere expresar juega un papel importante para la demostración.
En las secciones siguiente estudiaremos varios de los métodos más significativos para escribir
demostraciones de teoremas.

3.2. Demostración directa


La demostración directa es un método que se utiliza para demostrar teoremas con forma
condicional P → Q.
Observemos la tabla de verdad del condicional P → Q:

P Q P →Q
V V V
V F F
F V V
F F V

Para justificar que P → Q es verdadera, lo único que debe preocuparnos es justificar que no
puede darse el caso que P sea verdadera y que Q sea falsa. Esto quiere decir que lo que debemos
hacer es justificar que si P es verdadera, entonces Q es verdadera.

Ejemplo 3.2.1. A continuación una pequeña tabla con enteros impares y sus respectivos cuadrados:

n n2
1 1
3 9
5 25
7 49
-1 1
-3 9
-5 25
-7 49

Según esta tabla podemos asegurar que el cuadrado de un número impar es impar. Pero estos pocos
ejemplos no constituyen una demostración en sí. En todo caso, la afirmación es verdadera y haremos
su demostración a continuación.

Teorema 3.2.2. Si n es un entero impar, entonces n2 es impar.

Antes de escribir correctamente la demostración, queremos mostrar los pasos que habría que
seguir si hiciéramos una derivación de un argumento cuya premisa es “n es un entero impar” y cuya
conclusión es “n2 es impar”. Tendríamos los siguientes pasos:
8 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

1. n es un entero impar
2. (∃k)(n = 2k + 1) (definición de impar)
3. n = 2â + 1 (ejemplificación existencial)
4. n2 = (2â + 1)2 (elevando al cuadrado en la línea 2)
5. n2 = 4â2 + 4â + 1 (producto notable)
6. n2 = 2(2â2 + 2â) + 1 (factor común)
7. n2 = 2b̂ + 1 (b̂ = 2â2 + 2â)
8. (∃j)(n2 = 2j + 1) (generalización existencial)
9. n2 es impar (definición de impar)

Cuando se escribe una demostración matemática, se busca un escrito ameno, bien redactado;
hay que valerse de diferentes recursos del lenguaje para expresar de manera clara las ideas de la
demostración. Por supuesto, hay que hacer todo esto respetando las reglas de la lógica. A continua-
ción escribimos correctamente una demostración del Teorema 3.2.2.

Demostración. Supongamos que n es un entero impar. Entonces, por la definición de impar, existe
un entero k tal que n = 2k + 1. Luego tenemos que

n2 = (2k + 1)2
= 4k 2 + 4k + 1
= 2 · (2k 2 + 2k) + 1
= 2j + 1

donde j = 2k 2 + 2k es un entero. En consecuencia n2 es impar. 

Como ejercicio, escribir una demostración del siguiente teorema.

Teorema 3.2.3. Si n es un entero par, entonces n2 es par.

Ahora nuestro siguiente teorema.

Teorema 3.2.4. Si n es un entero impar, entonces n3 es impar.

Daremos dos demostraciones de este teorema, una donde se usa la fórmula para el desarrollo del
cubo de un binomio, y otra donde se utiliza el Teorema 3.2.2.

Demostración 1. Supongamos que n es un entero impar. Entonces, por la definición de impar, existe
un entero k tal que n = 2k + 1. Luego tenemos que

n3 = (2k + 1)3
= 8k 3 + 12k 2 + 6k + 1
= 2 · (4k 3 + 6k 2 + 3k) + 1
= 2j + 1

donde j = 4k 3 + 6k 2 + 3k es un entero. En consecuencia n3 es impar. .


3.2. DEMOSTRACIÓN DIRECTA 9

Demostración 2. Supongamos que n es un entero impar. Entonces, por la definición de impar, existe
un entero k tal que n = 2k + 1. Además, por el Teorema 3.2.2, n2 es impar, así que por la definición
de impar, existe j tal que n2 = 2j + 1. Luego tenemos que
n3 = n · n2
= (2k + 1) · (2j + 1)
= 4kj + 2k + 2j + 1
= 2 · (2kj + k + j) + 1
= 2m + 1
donde m = 2kj + k + j es un entero. En consecuencia n3 es impar. .

Terminamos esta sección con tres teoremas más y sus respectivas demostraciones.
Teorema 3.2.5. Sea n un número entero. Si 3n − 1 es un entero impar, entonces n es par.
Demostración. Supongamos que 3n − 1 es un entero impar. Entonces, por la definición de impar,
existe un entero k tal que 3n − 1 = 2k + 1. A partir de esto observamos que 3n = 2k + 2. Luego
tenemos que
n = 3n − 2n = 2k + 2 − 2n = 2(k + 1 − n) = 2j
donde j = k + 1 − n es un entero. En consecuencia n es par. 

Teorema 3.2.6. Sean a, b, n y m enteros. Si n | m y a ≡ b (mod m), entonces a ≡ b (mod n).


Demostración. Supongamos que n | m y a ≡ b (mod m). Entonces existen enteros c y d tales que
m = nc y a − b = md. Luego
a − b = md
= (nc)d
= n(cd)
= ne
donde e = cd es entero. Así, a ≡ b (mod n). 

Teorema 3.2.7. Sea n un entero. Si 2 | n y 3 | n, entonces 6 | n.


Demostración. Supongamos que 2 | n y 3 | n. Entonces existen enteros c y d tales que n = 2d y
n = 3d. Luego
n = 3n − 2n
= 3(2c) − 2(3d)
= 6c − 6d
= 6(c − d)
= 6e
donde e = c − d es entero. Así, 6 | n. 
10 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Apéndice: El triángulo de Pascal y el binomio de Newton


El triángulo de Pascal es una configuración triangular infinita de números con ciertas caracte-
rísticas especiales. A continuación mostramos las primeras nueve líneas del triángulo de Pascal.

n=0 1
n=1 1 1
n=2 1 2 1
n=3 1 3 3 1
n=4 1 4 6 4 1
n=5 1 5 10 10 5 1
n=6 1 6 15 20 15 6 1
n=7 1 7 21 35 35 21 7 1
n=8 1 8 28 56 70 56 28 8 1

Para construir el triángulo de Pascal se inicia poniendo un 1 en la línea 0. Luego, en la línea 1


debajo, se pone un 1 a la izquierda y uno a la derecha como se muestra arriba. De ahí en adelante,
siempre se pone un 1 en los extremos de cada línea y los números de en medio se obtienen sumando
los dos números que están inmediatamente por encima.
Los números que componen el triángulo de Pascal se conocen como coeficientes binomiales,
nombre debido a que aparecen en el desarrollo de la potencia del binomio (a + b)n (conocido como
binomio de Newton). Por ejemplo, como es bien sabido,

(a + b)2 = a2 + 2ab + b2 ,

y en esta expresión observamos que los coeficientes de a2 , ab y b2 son, respectivamente, 1, 2 y 1,


precisamente los números en la línea 2 del triángulo de Pascal.
También tenemos que
(a + b)3 = a3 + 3a2 b + 3ab2 + b3 .
Aquí vemos que los coeficientes de a3 , a2 b, ab2 y b3 son, respectivamente, 1, 3, 3 y 1. Estos son los
números en la línea 3 del triángulo de Pascal.
Si queremos escribir el desarrollo de (a + b)4 , utilizamos los números en la línea 4 del triángulo
de Pascal y tenemos así que

(a + b)4 = 1a4 b0 + 4a3 b1 + 6a2 b2 + 4a1 b3 + 1a0 b4 .

Observe que las potencias de a comienzan con a4 y van disminuyendo de a uno hasta llegar a
a0 , mientras las potencias de b comienzan con b0 y van aumentando de a uno hasta llegar a b4 .
Simplificando tenemos
(a + b)4 = a4 + 4a3 b + 6a2 b2 + 4ab3 + b4 .
Usando la línea 5 del triángulo de Pascal podemos escribir directamente el desarrollo de (a + b)5
como sigue:
(a + b)5 = a5 + 5a4 b + 10a3 b2 + 10a2 b3 + 5ab4 + b5 .
Para el desarrollo de (a − b)n los signos van alternado entre + y −. Por ejemplo:
3.2. DEMOSTRACIÓN DIRECTA 11

(a + b)2 = a2 − 2ab + b2 ,
(a + b)3 = a3 − 3a2 b + 3ab2 − b3 ,
(a + b)4 = a4 − 4a3 b + 6a2 b2 − 4ab3 + b4 ,
(a + b)5 = a5 − 5a4 b + 10a3 b2 − 10a2 b3 + 5ab4 − b5 .

Apéndice: Factorización de an − bn y factor racionalizante


La conocida factorización de diferencia de cuadrados es
a2 − b2 = (a − b)(a + b),
y la diferencia de cubos
a3 − b3 = (a − b)(a2 + ab + b2 ).
Estas dos fórmulas no son más que casos particulares de la regla general para factorizar una dife-
rencia de potencias n-ésimas siguiente:
an − bn = (a − b)(an−1 + an−2 b + an−3 b2 + · · · + bn−1 ).
Los puntos suspensivos indican que las potencias de a van disminuyendo de a uno mientras las
potencias de b van aumentando de a uno, hasta que se finaliza con la potencia bn−1 . Por ejemplo,
a4 − b4 = (a − b)(a3 + a2 b + ab2 + b3 ),
a5 − b5 = (a − b)(a4 + a3 b + a2 b2 + ab3 + b4 ),
a6 − b7 = (a − b)(a5 + a4 b + a3 b2 + a2 b3 + ab4 + b5 ).
Ahora, a menudo para resolver √ un √problema, es necesario√racionalizar una expresión √ algebraica.
√ √
Por
√ ejemplo, para racionalizar x − y, se multiplica por x + y; al multiplicar x − y por

x + y, el resultado es x − y:
√ √ √ √
( x − y)( x + y) = x − y.
√ √ √ √
En este caso, el factor x + y es llamado factor racionalizante de x − y. Su objetivo es que
al multiplicarse, desaparezcan en la simplificación
√ las raíces.

Para hallar el factor racionalizante de 3 x − 3 y, lo que hacemos es empezar escribiendo x − y
y expresarlo como sigue: √ √
x − y = ( 3 x)3 − ( 3 y)3
y luego se aplica la factorización de diferencia de cubos:
√ √
x − y = ( 3 x)3 − ( 3 y)3
√ √ √ √ √ √
= ( 3 x − 3 y)(( 3 x)2 + ( 3 x)( 3 y) + ( 3 y)2 ).
√ √ √ 2 √ √ √
Por lo tanto, el factor racionalizante para 3 x − 3 y es ( 3 x)√ + ( 3 x)( 3 y) + ( 3 y)2 .

En forma análoga hallamos el factor racionalizante para 4 x − 4 y, usando la factorización para
diferencia de potencias cuartas:

√ √
x − y = ( 4 x)4 − ( 4 y)4
√ √ √ √ √ √ √ √
= ( 4 x − 4 y)(( 4 x)3 + ( 4 x)2 ( 4 y) + ( 4 x)( 4 y)2 + ( 4 y)3 ),
√ √ √ √ √ √ √ √
así que el factor racionalizante para 4 x − 4 y es ( 4 x)3 + ( 4 x)2 ( 4 y) + ( 4 x)( 4 y)2 + ( 4 y)3 .
12 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

3.3. Demostración por contrarrecíproco


La demostración por contrarrecíproco se utiliza para demostrar teoremas con forma con-
dicional P → Q. Se basa en la equivalencia (P → Q) ⇔ (¬Q → ¬P ); es decir, en en lugar de
demostrar directamente que P implica Q, se demuestra que la negación de Q implica la negación
de P : de la negación del consecuente se llega a la negación del antecedente.
Utilizando el contrarrecíproco hacemos otra demostración del Teorema 3.2.5.
Teorema 3.3.1. Sea n un número entero. Si 3n − 1 es un entero impar, entonces n es par.
Demostración. (Por contrarrecíproco). Supongamos que n no es par. Entonces n es impar y así,
por la definición de impar, existe un entero k tal que n = 2k + 1. Luego tenemos que
3n − 1 = 3(2k + 1) + 1
= 6k + 4
= 2(3k + 2)
= 2j
donde j = 3k + 2 es entero. Así, 3n − 1 es par, o sea que 3n − 1 no es impar. Hemos demostrado el
teorema por contrarrecíproco. 

En ocasiones resulta que una demostración por contrarrecíproco es más fácil que una directa.
Tal es el caso del siguiente teorema.

Teorema 3.3.2. Sea n un entero. Si n2 es par, entonces n es par.


No es fácil encontrar una demostración directa de este teorema. Sin embargo podemos hacer ya
mismo una demostración por contrarrecíproco.

Demostración. (Por contrarrecíproco). Supongamos que n no es par. Entonces n es impar y así,


por la definición de impar, existe un entero k tal que n = 2k + 1. Luego
n2 = (2k + 1)2
= 4k 2 + 4k + 1
= 2 · (2k 2 + 2k) + 1
= 2j + 1
donde j = 2k 2 + 2k es un entero. Vemos así que n2 es impar, es decir, n2 no es par. Esto termina
la demostración. 

Como ejercicio realizar una demostración del siguiente teorema.


Teorema 3.3.3. Sea n un entero. Si n2 es impar, entonces n es impar.
Nota 3.3.4. Debemos notar que siempre que se hace una demostración directa o por contrarre-
cíproco de un teorema condicional P → Q, automáticamente tenemos demostrados dos teoremas
condicionales: uno que tiene la forma P → Q y uno que tiene la forma ¬Q → ¬P . Estos dos
teoremas son equivalentes.
3.4. REDUCCIÓN AL ABSURDO 13

3.4. Reducción al absurdo


Cuando nuestros argumentos son deductivos y en algún momento concluimos algo falso, es
porque alguna de las premisas tiene que ser falsa. En esto se basa el método de reducción al absurdo,
o contradicción. Para demostrar un teorema por reducción al absurdo, se toma como premisa que
lo que afirma el teorema es falso. Si razonamos deductivamente hasta llegar a una conclusión falsa
o contradictoria, concluimos que lo que afirma el teorema en realidad es verdadero.
Veremos varios ejemplos de cómo se usa reducción√ al absurdo para demostrar teoremas. Nuestro
primer ejemplo es la demostración de que el número 2 es un número irracional.
Definición 3.4.1. (Número racional e irracional) Un número real es llamado racional si puede
m
expresarse en la forma donde m y n son números enteros y n 6= 0. Un número real es llamado
n
irracional si no es racional.
Simbolizamos la definición de número racional como sigue:
m
x es racional ⇔ (∃m)(∃n)(x = ∧ n 6= 0)
n

Teorema 3.4.2. El número 2 es irracional.

Demostración. Por reducción al absurdo, supongamos que 2 es racional, es decir, que

2 = m/n (3.4.1)
donde m y n son enteros y n 6= 0. Podemos suponer que la fracción m/n está completamente
simplificada, pues de no ser así, podríamos cancelar todos los factores comunes entre m y n hasta
que la fracción quede simplificada. Ahora, elevando al cuadrado ambos lados de la ecuación (3.4.1)
obtenemos
2 = m2 /n2 ,
de donde
2n2 = m2 . (3.4.2)
2
La ecuación (3.4.2) nos dice que m es par. Luego, aplicando el Teorema 3.3.2, resulta que m es
par. Así, por definición de par, m = 2k para algún entero k. Sustituyendo m = 2k en la ecuación
(3.4.2) obtenemos
2n2 = 4k 2 ,
que al simplificar nos conduce a
n2 = 2k 2 . (3.4.3)
2
Esto quiere decir que n es par, y nuevamente por el Teorema 3.3.2, resulta que n es par. Así, hemos
mostrado que m y n son pares, pero esto significa que a la fracción m/n se le puede simplificar un
2, lo que contradice el hecho de que la fracción m/n ya estaba
√ completamente simplificada. Esta
contradicción termina la demostración y concluimos así que 2 es irracional. 

Usando reducción al absurdo y el Teorema 3.4.2 recién demostrado podemos demostrar el si-
guiente teorema. Es necesario que recordemos que la suma o resta de dos números racionales da un
número racional, el producto de dos números racionales da un número racional, y el cociente de dos
números racionales da un número racional, siempre que el denominador sea diferente de cero.
14 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN
√ √
Teorema 3.4.3. El número 2+ 3 es irracional.
√ √
Demostración. Por reducción al absurdo, supongamos que 2 + 3 es racional. Observemos que
√ √ √ √
( 2 + 3)( 2 − 3) = 2 − 3 = −1,
así que

√ −1
3= √
2− √ ,
2+ 3
√ √
lo que quiere decir que 2 − 3 es racional, pues lo estamos expresando como el cociente de dos
números que se supone
√ son√ racionales.
√ √ √ √ √
Luego la suma ( 2 + 3) + ( 2 + 3) = 2 2 es racional y por lo tanto 2 = (2 2)/2 también
es racional, pero esto √
contradice
√ el Teorema 3.4.2. Esta contradicción termina la demostración y
podemos concluir que 2 + 3 es irracional. 

Cuando queremos demostrar un teorema condicional de la forma P → Q, tomamos como premisa


la hipótesis del teorema, y por reducción al absurdo asumimos (tomamos como otra premisa) que
la tesis es falsa. Razonamos entonces hasta llegar a una contradicción.
A continuación, hacemos una demostración de un teorema que ya probamos antes, pero esta vez
utilizando reducción al absurdo.
Teorema 3.4.4. Sea n un entero. Si n2 es par, entonces n es par.
Demostración. Supongamos que n2 es par. Por reducción al absurdo, supongamos que n no es par,
o sea, n es impar. Por la definición de impar existe k tal que n = 2k + 1. Luego
n2 = (2k + 1)2
= 4k 2 + 4k + 1
= 2 · (2k 2 + 2k) + 1
= 2j + 1
donde j = 2k 2 + 2k es un entero. Tenemos en consecuencia que n2 impar. Hemos llegado a una
contradicción. Esto termina la demostración y por tanto el teorema está demostrado. 

Se suele usar reducción al absurdo cuando la tesis del teorema involucra una negación, como se
ve en el siguiente teorema.
Teorema 3.4.5. Sea n un entero. Si n es par, entonces n2 6≡ 1 (mod 4).
Demostración. Supongamos que n es par. Por reducción al absurdo, supongamos que n2 ≡ 1 (mod 4),
es decir, n2 −1 = 4k para algún entero k. Como n es par, n = 2j para algún entero j. Luego tenemos
n2 − 1 = 4k
(2j)2 − 1 = 4k
4j 2 − 1 = 4k
4j 2 − 4k = 1
4(j 2 − k) = 1
4m = 1
3.5. DEMOSTRACIÓN DE BICONDICIONALES 15

donde m = j 2 − k es entero. Esto demuestra que 4 divide a 1, lo que es una contradicción. Esta
contradicción termina la demostración y concluimos que el teorema es verdadero. 

3.5. Demostración de bicondicionales


Cuando se quiere demostrar un teorema con forma bicondicional P ↔ Q utilizamos la equiva-
lencia siguiente:
P ↔ Q ⇔ (P → Q) ∧ (Q → P ).
Así, lo que hacemos es, en realidad, demostrar dos teoremas condicionales: P → Q y su recíproco
Q → P . Para cada uno de estos dos teoremas condicionales podemos usar método directo, contra-
rrecíproco o reducción al absurdo, el que mejor convenga. Una flecha ⇒ se usa para indicar que se
demuestra el condicional P → Q, y ⇐ se usa para indicar que se demuestra el recíproco Q → P .
Vemos todo esto aplicado en el siguiente teorema.
Teorema 3.5.1. Un entero n es impar si y sólo si n2 es impar.
Demostración. (⇒) Supongamos que n es impar. Entonces n = 2k + 1 para algún entero k. Luego
n2 = (2k + 1)2
= 4k 2 + 4k + 1
= 2(2k 2 + 2k) + 1
= 2j + 1
donde j = 2k 2 + 2k es entero. Por tanto n2 es impar.
(⇐) (Por contrarrecíproco). Supongamos que n no es impar. Entonces n es par. Luego existe un
entero k tal que n = 2k. Tenemos así que
n2 = (2k)2
= 4k 2
= 2(2k 2 )
= 2j
donde j = 2k 2 es entero. Así, n2 es par. En consecuencia, n2 no es impar. 

3.6. Demostración por casos


La demostración por casos se utiliza cuando el antecedente se compone de una disyunción
de más de una proposición. Por ejemplo, cuando se quiere demostrar un teorema de la forma
(P ∨ Q) → R, usamos la equivalencia siguiente:
(P ∨ Q) → R ⇔ (P → R) ∧ (Q → R),
por lo que es necesario demostrar dos teoremas condicionales: P → R y Q → R. Ilustramos esto en
el siguiente teorema.
16 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Teorema 3.6.1. Sea n un entero. Si n ≡ 1 (mod 4) o n ≡ 3 (mod 4), entonces n2 ≡ 1 (mod 8).
Demostración. La demostración es por casos.
Caso 1. Supongamos que n ≡ 1 (mod 4). Entonces existe un entero k tal que n − 1 = 4k. Así
n = 4k + 1 y luego tenemos
n2 − 1 = (4k + 1)2 − 1
= 16k 2 + 8k + 1 − 1
= 16k 2 + 8k
= 8(2k 2 + k)
= 8j
donde j = 2k 2 + k es un entero. Así, n2 ≡ 1 (mod 8).
Caso 2. Supongamos que n ≡ 3 (mod 4). Entonces n − 3 = 4k para algún entero k. Así,
n = 4k + 3 y tenemos luego
n2 − 1 = (4k + 3)2 − 1
= 16k 2 + 24k + 9 − 1
= 16k 2 + 24k + 8
= 8(2k 2 + 3k + 1)
= 8j
donde j = 2k 2 + 3k + 1 es un entero. Así, n2 ≡ 1 (mod 8).
En cualquiera de los casos se tiene que n2 ≡ 1 (mod 8). Esto termina la demostración. 

En ocasiones la hipótesis del teorema no especifica los casos que hay que considerar, sino que de
alguna manera uno conoce una formulación equivalente de la hipótesis en casos. Es necesario que
los casos que se propongan agoten todas las posibilidades para que la demostración sea válida.
Teorema 3.6.2. Si n es un entero, entonces n2 + n es par.
Encontrar una demostración directa de este teorema no es tan sencillo. Pero al dividir la de-
mostración en casos, lo que ocurre es que en cada caso hay más hipótesis que se pueden utilizar,
es decir, más información disponible para usar, y eso puede facilitar las cosas, aunque tengan que
hacerse varios casos.
En este teorema, primero suponemos que n es par. Este es el primer caso. Después, en el segundo
caso, suponemos que n es impar.

Demostración. Sea n un entero. Entonces hay dos posibilidades: n es par o n es impar. Hacemos
la demostración en dos casos.
Caso 1. Supongamos que n es par. Entonces n = 2k para algún entero k. Luego
n2 + n = (2k)2 + (2k)
= 4k 2 + 2k
= 2(2k 2 + k)
= 2j
3.7. TEOREMA DE LA FORMA P → (Q ∨ R) 17

donde j = 2k 2 + k es entero. Así, n2 + n es par.


Caso 2. Supongamos que n es impar. Entonces n = 2k + 1 para algún entero k. Luego
n2 + n = (2k + 1)2 + (2k + 1)
= 4k 2 + 4k + 1 + 2k + 1
= 4k 2 + 6k + 2
= 2(2k 2 + 3k + 1)
= 2j
donde j = 2k 2 + 3k + 1 es entero. Así, n2 + n es par.
En ambos casos se demuestra que n2 + n es par. Esto termina la demostración. 

3.7. Teorema de la forma P → (Q ∨ R)


Una estrategia muy común que se usa para probar un teorema de la forma P → (Q ∨ R) se basa
en la equivalencia siguiente:
P → (Q ∨ R) ⇔ (P ∧ ¬Q) → R
Veamos un ejemplo.
Teorema 3.7.1. Sean a y b enteros. Si ab es par, entonces a es par o b es par.
Demostración. Supongamos que ab es par y que a no es par. Entonces a es impar y así, por la
definición de impar, a = 2k + 1 para algún entero k. Además, como ab es par, por definición de par,
ab = 2j para algún entero j. Luego
2j = ab = (2k + 1)b = 2kb + b,
de donde
b = 2j − 2kb = 2(j − kb) = 2l
donde l = j − kb es entero. En consecuencia b es par. 

Puesto que un teorema de la forma P → (Q ∨ R) tiene forma condicional por sí mismo, podemos
usar contrarrecíproco o reducción al absurdo.
Hacemos una prueba del Teorema 3.7.1 usando contrarrecíproco.

Demostración. Supongamos que a no es par y que b no es par. Entonces a es impar y b es impar.


Entonces existen enteros k y j tales que a = 2k + 1 y b = 2j + 1. Luego
ab = (2k + 1)(2j + 1)
= 4kj + 2k + 2j + 1
= 2(kj + k + j) + 1
= 2l + 1
donde l = kj + k + j es entero. Esto muestra que ab es impar, es decir, ab no es par. 
18 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

3.8. Teorema de la forma P → (Q ∧ R)


La equivalencia P → (Q ∧ R) ⇔ (P → Q) ∧ (P → R) nos indica que para demostrar un teorema
de la forma P → (Q ∧ R), tenemos que demostrar dos teoremas condicionales: P → Q y P → R.
Por ejemplo, el siguiente teorema.
Teorema 3.8.1. Si n es impar, entonces 3n + 1 es par y 5n + 2 es impar.
Demostración. Primero demostramos que si n es impar, entonces 3n + 1 es par. En efecto, si n es
impar, n = 2k + 1 para algún entero k. Entonces
3n + 1 = 3(2k + 1) + 1
= 6k + 4
= 2(3k + 2)
= 2j
donde j = 3k + 2 es entero. Así, 3n + 1 es par.
Ahora demostramos que si n es impar, entonces 5n + 2 es impar. En efecto, si n es impar,
n = 2k + 1 para algún entero k. Luego
5n + 3 = 5(2k + 1) + 2
= 10k + 7
= 10k + 6 + 1
= 2(5k + 3) + 1
= 2j + 1
donde j = 5k + 3 es entero. Por lo tanto, 5n + 2 es impar. 

3.9. Teoremas con cuantificadores


3.9.1. Teoremas con un cuantificador universal
Para demostrar un teorema de la forma (∀x)P (x) comenzamos suponiendo que a es un elemento
arbitrario. Luego se demuestra que P (a) es verdadero. Una vez se tiene que P (a) es verdadero,
puesto que a es arbitrario, se concluye (∀x)P (x) (note que esto no es más que una aplicación de la
regla de generalización universal). Veamos un ejemplo.
Teorema 3.9.1. Para todo entero n, (2n − 1)(2n + 1) es impar.
Demostración. Sea a un entero arbitrario. Entonces
(2a − 1)(2a + 1) = 4n2 − 1
= 4a2 − 2 + 1
= 2(2a2 − 1) + 1
= 2k + 1
3.9. TEOREMAS CON CUANTIFICADORES 19

donde k = 2a2 − 1 es entero. Así, (2a − 1)(2a + 1) es impar. Como a era arbitrario, concluimos que
para todo entero n, (2n − 1)(2n + 1) es impar. 

En el siguiente teorema de la forma (∀x)P (x) tenemos que usar la demostración por casos.

Teorema 3.9.2. Para todo entero n, n2 − n es par.

Demostración. Sea a un entero arbitrario. Hay entonces dos casos: a es par o a es impar.
Caso 1. Supongamos que a es par. Entonces existe un entero k tal que a = 2k. Luego

a2 − a = (2k)2 − (2k)
= 4k 2 − 2k
= 2(2k 2 − k)
= 2j

donde j = 2k 2 − k es un entero. Así, a2 − a es par.


Caso 2. Supongamos que a es impar. Entonces existe un entero k tal que a = 2k + 1. Luego

a2 − a = (2k + 1)2 − (2k + 1)


= 4k 2 + 4k + 1 − 2k − 1
= 4k 2 + 2k
= 2(2k 2 + k)
= 2j

donde j = 2k 2 + k es un entero. Así, a2 − a es par.


En ambos casos tenemos que a2 − a es par. Como a era arbitrario, concluimos que para todo
entero n, n2 − n es par. 

3.9.2. Teoremas con un cuantificador existencial


Para probar un teorema de la forma (∃x)P (x) podemos recurrir a una de las siguientes:

• Exhibir un objeto específico de la variable x que satisfaga el predicado P (x).

• Valerse de definiciones o teoremas existenciales ya demostrados para introducir objetos par-


ticulares en la demostración.

Aquí juega un papel importante la regla de generalización existencial. Veamos algunos ejemplos.

Teorema 3.9.3. Existe un entero n tal que 2n + 4 = 0.

Para demostrar este teorema, exhibimos un valor específico de la variable n que satisface
2n + 4 = 0.
20 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Demostración. Sea n = −2. Entonces

2n + 4 = 2(−2) + 4
= −4 + 4
= 0.

Así, concluimos que existe un entero n tal que 2n + 4 = 0. 

Teorema 3.9.4. Existe un entero n tal que 3n − n2 = 2.


Demostración. Sea n = 2. Entonces

3n − n2 = 3(2) − 22
=6−4
= 2.

Concluimos que existe un entero n tal que 3n − n2 = 2. 

En el siguiente ejemplo, la introducción de un elemento particular en la demostración viene


justificada por la definición de congruencia. Es una demostración de existencia donde no se muestra
el objeto específico que satisface al predicado; aún así, se sabe que existe.
Teorema 3.9.5. Sea n un entero. Si n ≡ 3 (mod 4), entonces existe un entero j tal que n3 = 8j +n.
Demostración. Supongamos que n ≡ 3 (mod 4). Entonces n − 3 = 4k para algún entero k. Luego
n = 4k + 3. Entonces tenemos lo siguiente:

n3 = (4k + 3)3
= 64k 3 + 48k 2 + 12k + 27
= (64k 3 + 48k 2 + 8k + 24) + (4k + 3)
= 8(8k 3 + 6k 2 + k + 3) + n
= 8j + n,

donde j = 8k 3 + 6k 2 + k + 3 es entero. Esto muestra que existe un entero j tal que n3 = 8j + n. 

3.9.3. Teoremas con varios cuantificadores


Consideremos la siguiente proposición: “para todo entero n existe un entero m tal que n+m = 1”,
que simbólicamente es
(∀n)(∃m)(n + m = 1).
Al escribir una demostración para esta proposición debemos empezar escribiendo que n es un entero
arbitrario. Luego debemos exhibir un entero específico m, que puede depender de n, que satisfaga
al predicado. Por supuesto, para que el predicado se satisfaga, el valor de m que debemos tomar es
m = 1 − n.
3.10. DEMOSTRACIÓN DE UNICIDAD 21

Teorema 3.9.6. Para todo número entero n, existe un entero m tal que n + m = 1

Demostración. Supongamos que n es un entero arbitrario. Sea m = 1−n. Luego n+m = n+(1−n) =
1. Esto termina la demostración. 

Teorema 3.9.7. Existe un entero n tal que para todo entero m, n + m = m.

Demostración. Sea n = 0. Supongamos que m es un entero arbitrario. Entonces n+m = 0+m = m.


Esto termina la demostración. 

Teorema 3.9.8. Para todo par de números enteros distintos a y b, existe un racional c tal que
a(c − 1) = b(c + 1).

Demostración. Sean a y b enteros arbitrarios tales que a 6= b. Sea c = (a + b)/(a − b). Esta expresión
tiene sentido puesto que a 6= b, lo que garantiza que a − b 6= 0. Además, es claro que c es un número
racional. Luego

a+b
c= ,
a−b
c(a − b) = a + b,
ca − cb = a + b,
ca − a = cb + b,
a(c − 1) = b(c + 1).

Esto termina la prueba. 

Nota 3.9.9. En una demostración de un teorema con varios cuantificadores, cada elemento particu-
lar que entre en la demostración puede depender de todas las variables que hayan aparecido ya en la
demostración. Por ejemplo, en un teorema que tenga la forma (∃x)(∀y)(∀z)(∃w)(∀t)P (x, y, z, w, t),
al iniciar la demostración hay que dar un valor específico de x (o bien usar una definición o teorema
existencial ya demostrado). Luego se introducen y y z arbitrarios. Luego hay que exhibir un valor de
la variable w, y esta w puede depender de x, y y z que ya han sido introducidas en la demostración.
Finalmente, se introduce t arbitrario.

3.10. Demostración de unicidad


Consideremos la siguiente proposición: “existe un entero n tal que 3n − n2 = 2”. Esta proposición
es verdadera porque podemos exhibir un ejemplo de n que satisface la ecuación 3n − n2 = 2. En
efecto, si n = 2, entonces 3n − n2 = 6 − 4 = 2. Pero n = 2 no es la única solución posible, pues
también podemos tomar n = 1 y tener entonces 3n − n2 = 3 − 1 = 2. En este caso, no hay un único
valor de n que satisfaga 3n − n2 = 2.
22 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

En ocasiones es importante saber si hay un único valor de una variable x que satisface una
propiedad P (x). Para probar que existe un único valor de la variable x que satisface P (x), empe-
zaos suponiendo que hay dos valores de la variable que satisfacen el predicado, y razonamos para
demostrar que los dos valores, en realidad, son iguales. En símbolos, para demostrar unicidad, se
debe demostrar la siguiente proposición condicional:
(P (a1 ) ∧ P (a2 ))→ a1 = a2 .
Veamos un par de ejemplos.
Teorema 3.10.1. Si n es un entero impar, entonces existe un único entero j tal que n = 2j − 1.
Demostración. Existencia. Supongamos que n es un entero impar. Entonces por definición de impar,
existe un entero k tal que n = 2k + 1. Luego tenemos
n = 2k + 1
= 2k + 2 − 1
= 2(k + 1) − 1
= 2j − 1
donde j = k + 1 es entero. Así, existe un entero j tal que n = 2j − 1.

Unicidad. Supongamos que n = 2j1 − 1 y n = 2j2 − 1 donde j1 y j2 son enteros. Entonces


2j1 − 1 = 2j2 − 1,
2j1 = 2j2 ,
j1 = j2 .
Esto termina la demostración de unicidad.
Hemos probado que si n es un entero impar, entonces existe un único entero j tal que n = 2j − 1.


Teorema 3.10.2. Para todo número racional x, si x 6= 0, entonces existe un único número racional
2
y tal que x = 1+3y .

Demostración. Existencia. Sea a un número racional arbitrario tal que a 6= 0. Sea y = 2−a 3a
.
Esta división tiene sentido porque, por hipótesis, a 6= 0; además, y es racional porque involucra
operaciones de suma, resta, multiplicación y división de números racionales. Ahora tenemos
2−a
y=
3a
3ay = 2 − a
3ay + a = 2
a(3y + 1) = 2
2
a= .
3y + 1
3.11. CONJETURAS Y CONTRAEJEMPLOS 23

Esto termina la demostración de existencia. Como a era arbitrario, concluimos que para todo ra-
2
cional x existe un racional y tal que x = 3y+1 .

2 2
Unicidad. Supongamos que x = 1+3y1
yx= 1+3y2
donde y1 y y2 son racionales. Entonces

2 2
=
1 + 3y1 1 + 3y2
2(1 + 3y2 ) = 2(1 + 3y1 )
1 + 3y2 = 1 + 3y1
3y2 = 3y1
y2 = y1 .

Esto termina la demostración de unicidad.




3.11. Conjeturas y contraejemplos


En matemáticas distinguimos entre tres categorías de proposiciones:

Teoremas. Son proposiciones matemáticas verdaderas que poseen una demostración. Algunos
teoremas incluso tienen nombre propio, como el teorema de Pitágoras o el teorema fundamental
del álgebra.

Conjeturas. Son proposiciones matemáticas para las que hay mucha evidencia de que son
ciertas, pero aún no se ha encontrado una demostración. También, hay algunas conjeturas
con nombre propio, como la conjetura de Goldbach, la conjetura de los primos gemelos, o la
hipótesis de Riemann.

Proposiciones falsas. Cuando deseamos probar que una proposición matemática P es falsa,
lo que hacemos es demostrar que su negación ¬P es verdadera.

3.11.1. Conjeturas
En la actividad científica se formulan muchas conjeturas. De hecho, cuando hay suficiente evi-
dencia, uno se atreve a afirmar que determinado fenómeno es verdadero porque la evidencia así lo
respalda. Pero en matemáticas, hasta que no se tenga una demostración rigurosa, no puede aceptarse
nada como absolutamente verdadero.
Algunas conjeturas se convierten en teoremas cuando se les encuentra una demostración; en
cambió, hay conjeturas que terminan siendo falsas por que en algún momento se les encuentra un
caso que las contradice.
Para poder formular conjeturas es importante tener a la mano muchos ejemplos. Cuando tenemos
varios ejemplos sobre un tema o concepto que queremos entender y estudiar, mediante observación
podemos descubrir patrones que se repiten o características similares en dichos ejemplos, y esto
24 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

nos lleva a poder formular las conjeturas. Luego, intentamos probar nuestras conjeturas usando las
técnicas de demostración que conocemos.
Ejemplo 3.11.1. Consideremos el polinomio n2 − n + 11, donde n representa un entero positivo.
En la tabla siguiente observamos los valores que toma este polinomio al dar a n valores del 1 al 10.

n n2 − n + 11
1 11
2 13
3 17
4 23
5 31
6 41
7 53
8 67
9 83
10 101

Observamos en esta tabla que los valores que toma el polinomio n2 − n + 11 son impares. Así,
formulamos nuestra primera conjetura:

Conjetura 1. Para todo entero positivo n, n2 − n + 11 es impar.

Si se continúa dando valores a n mayores que 10, se observará que el resultado siempre dará
impar. Esto da suficiente evidencia para creer que la conjetura es verdadera. Pero necesitamos una
demostración para que sea matemáticamente verdadera. Por fortuna, a continuación mostramos
una demostración:

Demostración. Sea a un entero positivo arbitrario. Tenemos dos casos:


Caso 1. a es par. Entonces a = 2k para algún entero k. Luego

a2 − a + 11 = (2k)2 − (2k) + 11
= 4k 2 − 2k + 10 + 1
= 2(2k 2 − k + 5) + 1
= 2j + 1

donde j = 2k 2 − k + 5 es entero. Así, a2 − a + 11 es impar.


Caso 2. a es impar. Entonces a = 2k + 1 para algún entero k. Luego

a2 − a + 11 = (2k + 1)2 − (2k + 1) + 11


= 4k 2 + 4k + 1 − 2k − 1 + 11
= 4k 2 + 2k + 11
= 2(2k 2 + k + 5) + 1
= 2j + 1
3.11. CONJETURAS Y CONTRAEJEMPLOS 25

donde j = 2k 2 + k + 5 es entero. Así, a2 − a + 11 es impar.


En cualquier caso tenemos que a2 − a + 11 es impar. Como a era arbitrario, concluimos que para
todo entero positivo n, n2 − n + 11 es impar. 

Ahora que hemos encontrado una demostración a nuestra conjetura, en realidad se convierte en
un teorema y podemos escribirlo como sigue.

Teorema 3.11.2. Para todo entero positivo n, n2 − n + 11 es impar.

Ejemplo 3.11.3. Nuevamente consideremos el polinomio n2 − n + 11 y la tabla

n n2 − n + 11
1 11
2 13
3 17
4 23
5 31
6 41
7 53
8 67
9 83
10 101

Ya conjeturamos y demostramos en el ejemplo anterior que los valores que toma el polinomio son
todos impares. Una observación más fuerte a partir de esta tabla es que todos los valores que toma
el polinomio son números primos. Así tenemos nuestra segunda conjetura:

Conjetura 2. Para todo entero positivo n, n2 − n + 11 es primo.

Desafortunadamente esta conjetura es falsa. De hecho, si n = 11, entonces n2 − n + 11 =


112 − 11 + 11 = 11 · 11. Claramente este número no es primo.

Ejemplo 3.11.4. La siguiente tabla muestra los valores que toma la expresión 4n − 1 donde n
representa un entero positivo del 1 al 5.

n 4n − 1
1 3
2 15
3 63
4 255
5 1023

Nuestra primera conjetura a partir de esta tabla es la siguiente:

Conjetura 3. Para todo entero positivo n, 4n − 1 es impar.


26 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Demostrar esto es relativamente fácil.

Demostración. Sea a un entero positivo arbitrario. Entonces


4a − 1 = (22 )a − 1
= 22a − 1
= 2 · 22a−1 − 1
= 2 · 22a−1 − 2 + 1
= 2 22a−1 − 1 + 1


= 2k + 1
donde k = 22a−1 − 1 es entero. Así, 4a − 1 es impar. Como a era arbitrario, concluimos que para
todo entero positivo n, 4n − 1 es impar. 

La siguiente conjetura no es tan obvia como la anterior.

Cojetura 4. Para todo n, 3 | (4n − 1).

Esta conjetura también es verdadera. Para demostrarla, haremos uso de la factorización de una
diferencia de potencias n-ésimas. Recordemos que
an − bn = (a − b)(an−1 + an−2 b + an−3 b2 + · · · + bn−1 ).
Si reemplazamos a = 4 y b = 1, teniendo en cuenta que 1n = 1, resulta
4n − 1 = (4 − 1)(4n−1 + 4n−2 + 4n−3 + · · · + 1).
Ahora demostremos que nuestra conjetura es cierta.

Demostración. Sea a un entero positivo arbitrario. Entonces


4a − 1 = (4 − 1)(4a−1 + 4a−2 + 4a−3 + · · · + 1)
= 3(4a−1 + 4a−2 + 4a−3 + · · · + 1)
= 3k
donde k = 4a−1 + 4a−2 + 4a−3 + · · · + 1 es entero. Así, 3 | (4a − 1). Como a era arbitrario, hemos
demostrado que para todo entero positivo n, 3 | (4n − 1). 

Ejemplo 3.11.5. En la siguiente tabla hacemos una comparación entre 2n y (n+3)2 para n variando
desde 1 hasta 5:
n 2n (n + 3)2
1 2 16
2 4 25
3 8 36
4 16 49
5 32 64
3.11. CONJETURAS Y CONTRAEJEMPLOS 27

De los resultados que muestra esta tabla podemos conjeturar lo siguiente:

Conjetura 5. Para todo entero positivo 2n < (n + 3)2 .

Esta conjetura es falsa. Por ejemplo, al seguir reemplazando valores de n, encontramos que para
n = 7, 27 = 128 y (7 + 3)2 = 100, y 128 no es menor que 100.
Nota 3.11.6. En realidad, para que una conjetura sea razonablemente creíble, será conveniente
verificarla para una gran cantidad de valores. Los programas de computadora son indispensables
hoy en día para esta tarea. Pero aun cuando una computadora logre verificar millones de millones
de casos, no dejará de ser conjetura hasta no encontrarse una demostración matemática.
Hará falta ganar experiencia, conocer muchas técnicas, teorías y en cierta forma tener “olfato”
y hasta suerte para descubrir patrones que puedan considerarse como conjeturas interesantes.
Ejemplo 3.11.7. Consideremos la siguiente tabla en donde se muestran los valores de una “fórmula
desconocida” f (n) para n variando desde 1 hasta 10:
n f (n)
1 1
2 1
3 2
4 3
5 5
6 8
7 13
8 21
9 34
10 55
Una observación que no es muy difícil de notar es que desde el tercer valor en adelante, cada uno
es la suma de los dos valores inmediatamente anteriores. Esto se expresa mediante la fórmula
f (n) = f (n − 1) + f (n − 2)
siempre que n ≥ 3.
Una observación que no es para nada obvia, es que los números en la segunda columna de esta
tabla obedecen a la fórmula siguiente:
√ !n √ !n
1+ 5 1− 5

2 2
f (n) = √
5

3.11.2. Demostrar o refutar. Contraejemplos


Muchas veces nos enfrentamos a una proposición y deseamos determinar si es verdadera o es
falsa. Para justificar que la proposición es verdadera debemos hacer una demostración. En caso de
ser falsa lo que hacemos es refutarla, es decir, demostrar que su negación es verdadera. Veamos
algunos ejemplos.
28 CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE DEMOSTRACIÓN

Ejemplo 3.11.8. Demuestre o refute la siguiente proposición:

existe un entero n tal que 6 | (n2 − 1).

Para verificar que esta proposición es verdadera, solo tenemos que encontrar un valor de n de
tal manera que n2 − 1 sea divisible por 6. Después de algunos intentos encontramos que con n = 5
tenemos n2 − 1 = 25 − 1 = 24 es divisible por 6. Así, la proposición es verdadera.

Ejemplo 3.11.9. Demuestre o refute la siguiente proposición:

existe un entero n tal que n2 − 5n es impar.

Análogamente al ejemplo anterior, para verificar que esta proposición es verdadera tenemos que
encontrar un valor de n tal que n2 − 5n sea impar. En la siguiente tabla mostramos varios intentos
con algunos valores enteros de n:

n n2 − 5n
0 0
1 -4
2 -6
3 -6
4 -4
5 0
6 6
-1 6
-2 14
-3 24
-4 36

Ahora, los resultados de esta tabla sugieren que tal vez la proposición considerada sea falsa, pues
en todos los ejemplos mostrados en la tabla, el resultado da par. Afirmamos entonces que dicha
proposición es falsa e intentamos probar su negación:

para todo entero n, n2 − 5n es par.

Demostración. Sea a un entero arbitrario. Tenemos dos casos:


Caso 1. a es par. Entonces a = 2k para algún entero k. Luego

a2 − 5a = (2k)2 − 5(2k)
= 4k 2 − 10k
= 2(2k 2 − 5k)
= 2j

donde j = 2k 2 − 5k es entero. Así, a2 − 5a es par.


3.11. CONJETURAS Y CONTRAEJEMPLOS 29

Caso 2. a es impar. Entonces a = 2k + 1 para algún entero k. Luego

a2 − 5a = (2k + 1)2 − 5(2k + 1)


= 4k 2 + 4k + 1 − 10k − 5
= 4k 2 − 6k − 4
= 2(2k 2 − 3k − 2)
= 2j

donde j = 2k 2 − 3k − 2 es entero. Así, a2 − 5a es par.


En cualquier caso a2 − 5a es par. Como a era arbitrario, hemos demostrado que para todo entero
n, n2 − 5n es par. 

Ejemplo 3.11.10. Demuestre o refute la siguiente proposición:

para todo entero positivo n, n2 − n + 11 es primo.

Como ya vimos antes, esta proposición es falsa porque en realidad existe un valor de n tal que
n2 − n + 11 no es primo. En efecto, con n = 11 resulta n2 − n + 11 = 112 − 11 + 11 = 121 que no
es primo.

Cuando una proposición universal de la forma (∀x)P (x) es falsa, el valor específico de la variable
x que la refuta es llamada un contraejemplo. Así, el número n = 11 es un contraejemplo para la
proposición “n2 − n + 11 es primo, para todo entero positivo n”.

Ejemplo 3.11.11. Demuestre o refute la siguiente proposición:

para todo entero a y todo entero b, a2 − b2 es par.

Por supuesto que esta proposición es falsa. Un contraejemplo se obtiene tomando a = 1 y b = 0


(por supuesto hay muchos más contraejemplos para esta proposición, pero con uno solo basta).

Ejemplo 3.11.12. Demuestre o refute la siguiente proposición:

para todo entero positivo n existe un entero positivo k tal que n + k = 10.

Esta proposición es falsa. Un contraejemplo es n = 10, pues no existe ningún entero positivo k tal
que 10 + k = 10.

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