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Idoneidad y Asignación
Objetivo General:
CONTENIDO TEÓRICO
Para este efecto, el Estado debe valorar la aptitud, capacidad y motivación de los
candidatos para encargarles la responsabilidad de la maternidad y paternidad
adoptiva.
Los elementos anteriores nos indican que para llegar a la idoneidad se requiere de
la intervención de una autoridad que, en el Ecuador recae en la Unidad Técnica de
Adopciones, como ya se ha indicado. Además, la persona sola o pareja dará
información personal y familiar que, normalmente, forma parte del fuero íntimo de
cada persona y corresponde al Estado respetar el derecho a la intimidad personal
y familiar reconocidos en la Constitución del Ecuador, lo cual constituye un límite
en la actuación discrecional del servidor público en dos sentidos:
Sin perjuicio de que las decisiones deban ser notificadas por escrito, se informará
que la Unidad Técnica de Adopciones, normalmente, solicita la concurrencia
personal de los candidatos para la comunicación sobre la idoneidad, que se llevará
a cabo, también, verbalmente, en un diálogo que despeje dudas o tensiones; y, en
caso de negativa, se informe sobre las causas y sus efectos, en caso de que ésta
sea temporal o permanente. De la misma manera, se informará sobre el derecho
de impugnación del acto administrativo que niega la idoneidad.
ESTADO CIVIL:
ASPECTOS ESPECIALES:
CRITERIOS DE NO IDONEIDAD
Todo esto conlleva que, en muchas ocasiones, vivan esta experiencia como poco
gratificante y con la sensación de sentirse juzgados, o que al ser un proceso
impuesto y dirigido a un objetivo, contribuya al disimulo, la ocultación o el
falseamiento de la información. Por este motivo, se debe procurar un ambiente
relajado a lo largo de todo el proceso, mostrar una actitud empática y, crear un
clima de confianza, respeto mutuo, aceptación y comprensión hacia los
solicitantes. Asimismo, tenemos que transmitir que la valoración es positiva para
ellos y, aclarar que no se buscan familias ideales, sino aquéllas que con sus
virtudes y defectos puedan acoger a la niña, niño o adolescente, permitiendo que
su desarrollo personal, familiar y social sean adecuados.
El estudio hogar es uno de los momentos más importantes dentro del proceso de
adopción, consiste en analizar los recursos, capacidades, destrezas y fortalezas
que tienen las y los solicitantes para determinar su idoneidad y poder asignar la
mejor familia para una niña, niño o adolescente.
Si bien es cierto, se debe cumplir con requisitos solicitados por la ley ecuatoriana,
además de estas condiciones básicas, se encuentra el recibir una valoración
positiva o no de idoneidad por parte de un equipo de profesionales que
encontrarán que las personas reúnen las garantías necesarias para ser madres y
padres de una niña, niño o adolescente.
Una vez que se hayan cumplido los requisitos legales y médicos, se procede con
el Estudio de Hogar, este proceso es llevado conjuntamente entre la o el
profesional en psicología y trabajo social. El Estudio de Hogar implica entrevistas
sociales y psicológicas individuales y de pareja, aplicación e interpretación de test
psicológicos y visitas domiciliarias.
No hay que perder de vista que, en el proceso de adopción, todo estudio tiene
como objetivo final que una niña, niño o adolescente tenga una familia acorde a
sus necesidades y condiciones particulares, que pueda garantizar un vínculo
seguro y estable.
Recuerde que no se busca padres perfectos. Más bien, están buscando familias
con la capacidad de satisfacer las necesidades particulares de niños individuales.
La valoración por parte de los profesionales debe ser objetiva, sin embargo, la
objetividad del profesional no tiene que estar contrapuesta a la creación, por parte
de los mismos, de un ambiente de confianza para los solicitantes. El profesional
que proporciona feedback, adoptando una actitud amable y de seriedad a la vez,
proporcionando información útil a las personas evaluadas, fomenta que las
respuestas sean más espontáneas y por ende se puede lograr una valoración
eficaz, de la que se extraen conclusiones que se ajustan más a la realidad.
Entrevistas psicosociales
Es importante que todas las familias sean evaluadas a profundidad para garantizar
que tienen la aptitud y los recursos para brindarle a una niña, niño o adolescente
un hogar seguro.
La evaluación psicológica a solicitantes de adopción
VARIABLE DESCRIPCIÓN
ASIGNACIÓN.
Este subproceso se enlaza con el de apego y vinculación afectiva, una vez que la
persona sola o pareja presente, por escrito, la aceptación de la asignación
realizada. Cabe indicar que la persona sola o pareja puede no aceptar la
asignación realizada por el Comité de Asignación Familiar mediante una carta
explicativa. El Comité de Asignación Familiar analizará que las causas de no
aceptación no sean discriminatorias.
El proceso está orientado a posibilitar que la vinculación afectiva entre la niña, niño
o adolescente y los adoptantes se desarrolle de una forma positiva para ambos.
Por ello, inicia con la preparación de las partes, en la que se brindará información
específica a los adoptantes sobre las rutinas, intereses y actividades cotidianas la
niña, niño o adolescente que se les asignó, y cuya asignación aceptaron; en ella se
considerará la información adicional que la familia desee conocer sobre la niña,
niño o adolescente, así como, el acompañamiento en su dudas, miedos,
expectativas, brindando pautas para el primer encuentro. La Entidad de
Acogimiento, en conjunto con la asesoría de la Unidad Técnica de Adopciones,
también, preparará a la niña, niño o adolescente con la información específica de
la persona sola o pareja adoptante.
¿Qué es la idoneidad?
Aproximaciones al subproceso Estudio de Hogar; y,
Proceso de asignación, apego y vinculación afectiva .
1. ¿Por qué creo que es importante que las personas solicitantes de adopción
sean calificadas idóneas?
2. ¿Cuál es el objetivo del Subproceso de Estudio de Hogar? ¿A qué va
direccionado?
3. ¿Qué consideró que es lo mas importante del Subproceso de Asignación
Familiar?
4. ¿Cómo se desarrolla el Subproceso de apego y vinculación afectiva?
Módulo 2. Reconociendo el camino de la adopción
Objetivo General:
Perspectivas Teóricas.
Para las autoridades a cargo del tema de adopción, es una responsabilidad social
importante que los padres adoptivos estén bien preparados; esto implica el
desarrollo de cursos de excelencia en la formación, estudios de hogar,
técnicamente realizados, y asesoría permanente a través de servicios post-
adoptivos. Los padres adoptivos deben obtener, mediante este proceso, una mejor
comprensión de las necesidades de sus hijos adoptados; deben comprender que
la experiencia de abandono afecta irremediablemente a todos y estará presente en
toda la vida posterior de las niñas, niños o adolescentes.
De manera que, cuando una persona sola o pareja realice la aplicación lo haga de
manera conciente y preparada para afrontar la vida cotidiana en esta nueva
familia, cuyo reto es, estar lista a confrontarse con lo inesperado.
+
Nadie puede saber qué clase de padre/madre será; sólo lo descubrirá cuando ya
esté a su cargo la niña, niño o adolescente; por tanto, es importante que, durante
el proceso de formación, los candidatos hagan el esfuerzo de repensar su niñez;
comprender que los hijos no necesitan padres que no se equivoquen, sino que
cuando lo hagan, tengan el valor de reconocerlo, asumir las responsabilidades de
sus acciones y realizar cambios para mejorar.
Aquí, es donde debe primar el interés superior del niño, lo cual es, a veces, muy
complejo y complicado de determinar.
1
Special parents for special children, Swedish Intercountry Adoptions Authority, Edita Vastra Aros, Agosto 2007,
pag. 16
Son muchos los factores que se deben tomar en cuenta cuando se considera si
una persona sola o una pareja es la más apropiada para un niño.
Si bien debemos reconocer la vulnerabilidad de los niños y, por tanto, que existe la
necesidad de protección especial, debemos, también, reconocerle sus
capacidades, ya que es una persona con recursos individuales y con el derecho a
participar en la toma de decisiones de todas las situaciones que le afecte.
Toda adopción tiene en común los tremendos cambios que conlleva, tanto para la
persona sola o pareja y su entorno más amplio de redes familiares y sociales,
como para la niña, niño o adolescente. A todos los niños les cuesta acostumbrarse
a una nueva vida y aprender a sentirse seguros con sus nuevos padres, el niño
puede vivir esta situación como atemorizante.
Primer Círculo.
QUERIENDO UNA FAMILIA
El deseo de tener una hija o hijo puede surgir por varios motivos. Para muchos, es
tan solo una parte del curso de la vida. Otros sueñan desde niños con su futura
familia. Tener hijos significa tener a quien dar todo su amor y seguridad, una
manera de recrear todo lo que vivió en su propia familia. Tener un niño también
puede ser una forma de reafirmar su vida de pareja y en familia o, por el contrario,
también puede estar motivada por no haber sentido afinidad con la suya y, para
corregir esto, requieren tener una familia propia. Algunas personas creen que tener
un hijo los vuelve inmortales, capaces de crear algo, de dejar marca. Otros por
influencia de personas cercanas, consideran tener una familia porque es algo que
se espera de ellos.
Para las personas que no puede concebir hay otros caminos a seguir. Otras
formas de tener familia, o finalmente, tomar la decisión de no tener hijos. Al
confrontar estas posibilidades. La pregunta que surge es ¿por qué quiero una hija
o hijo?.
Debe tomarse todo el tiempo necesario para pensarlo y tener elementos para la
decisión.
Para algunas personas es más sencillo superar el hecho de no tener hijos. Otros lo
viven como un proceso emocional complejo. La forma en que la gente lo enfrenta,
nos permite inferir, parcialmente, cómo ellos lidiarían con otras dificultades de la
vida. A veces, es reconfortante saber que tus sentimientos son compartidos por
otros que están en situación similar.
Infertilidad secundaria
Se llama infertilidad secundaria cuando uno o los dos miembros de la pareja han
tenido hijos antes, pero comienzan a presentar dificultades que les impide tener
más hijos juntos; puede ocurrir, también, que tuvieron hijos con sus parejas
anteriores y con la actual pareja no pueden concebir. Puede ser que el objetivo sea
dar un hermana o hermano al hijo biológico; en este caso, es fundamental
identificar bien cuál es la motivación y la opinión de esos hijos biológicos.
El sentimiento que surge por la imposibilidad de tener hijos es tan personal, que
puedes, a veces, sentirte muy solo en tu relación. Los hombres y las mujeres
tienen diferentes estrategias para afrontar la infertilidad. Es común que las mujeres
se entreguen a su pena, mientras que los hombres están más preocupados por los
sentimientos de su pareja y se asumen, solamente como quienes deben consolar.
Esto, a veces, resulta en que el esposo termina no hablando sobre su propio dolor,
lo cual puede ser malinterpretado por la esposa como una falta de interés.
Su vida sexual se puede ver afectada durante el tratamiento médico. Es fácil que
se sientan como unidades de reproducción más que como un hombre y una mujer.
Piénsalo nuevamente:
En otros casos la gente sí sufre por no tener un hijo, sin embargo no está
dispuesta a ser padre o madre del hijo de otra persona. En estos casos la
adopción jamás será una buena opción, aunque se desee mucho un hijo.
Elegir la adopción
Los padres biológicos del niño –sea que se los conozca o que no hayan podido ser
identificados, estén vivos o muertos- siempre serán parte de la vida de la familia
adoptiva. El niño tiene la disposición hereditaria de sus padres. La genética del
niño será visible en su apariencia, en sus talentos, debilidades, predisposición a
ciertas enfermedades, etc. Algunas de estas cuestiones se volverán visibles a
largo plazo.
El hecho de que el niño provenga de otro país puede tener efectos positivos en la
familia. A través del niño, la familia desarrolla una relación especial con otro país,
otra cultura y una esfera social diferente. La familia biológica puede convertirse en
una parte de la familia (Adopción receptiva).
El niño adoptivo debe llegar a una familia que ha tomado una decisión, con todo su
corazón, para adoptarlo. Los intentos de tener hijos por otros métodos deben ser
suspendidos cuando se inicie el proceso para la adopción. La adopción es una
cuestión que se deberá vivir el resto de la vida. Nadie puede saber lo que un
niño/a adoptado enfrentará en la vida, o qué retos están reservados para los
padres adoptivos. Cualquier cosa que suceda, los padres adoptivos deben ser
capaces de responder por la decisión que tomaron frente a sí mismos y al niño
cuando sean confrontados por éste. Es por esto que, se necesita tiempo y espacio
para examinar sus ideas y sentimientos. Una decisión bien fundamentada volverá
más sencillo enfrentar las dificultades en el futuro e incrementará las
oportunidades de que esta adopción sea el punto de inicio de una buena relación
filial. Pocas cosas en la vida son, emocionalmente, tan fuertes como tener un hijo.
Para los padres adoptivos es una cuestión de tomar decisiones concientes, paso a
paso, hasta que llega el día en que se introduce la solicitud definitiva, cuando esto
está en trámite, puede verse en un momento influenciado por la razón y al
siguiente por sus emociones.
Para la gente que no tiene pareja, la reacción de sus allegados es quizás más
importante cuando toman una decisión. Si la gente cercana a ellos demuestra poco
interés o una actitud negativa en relación a la adopción, esto puede hacer surgir
sentimientos y dificultades en el futuro. La pregunta que surge es: ¿estará la gente
cercana dispuesta a ayudarme a mí y a mi hija/o? o ¿me dejarán sola/o para ser
padre/madre?.
El niño adoptivo obtiene familia de una manera especial, también los padres
adoptivos forman una familia de una manera especial. Esto genera demandas
diferentes para todos. Si la razón para adoptar es la imposibilidad de tener hijos, es
fundamental que tus sentimientos por esta realidad pasen a ser una situación triste
con la que logras convivir.
El tiempo para ser padres adoptivos puede convertirse en una espera larga y
dificultosa, pero también puede ser la clase de reto que te ayuda a conocerte más
a tí mismo. En retrospectiva, muchos padres adoptivos han confesado que todos
los aspectos emocionales y dificultades vividas, les dieron una perspectiva y
satisfacción adicional al convertirse en padres adoptivos. Ya que los padres
adoptivos tienen que dar tanto de sí mismos para tener un hijo, cuando la niña o
niño, finalmente, llega a casa, es un acontecimiento y satisfacción muy importante.
Piénsalo nuevamente:
El período de espera del niño y los primeros momentos en el hogar son períodos
de grandes cambios, sean padres biológicos o padres adoptivos. La situación
demanda que ustedes cambien y maduren psicológicamente. Muy a menudo la
gente está más emocional cuando espera un niño. Su estado mental se enfoca,
casi exclusivamente, en el encuentro con ese niño. Es común que sueñen
bastante, es decir, están más en contacto con su subconsciente.
Los niños son una fuente de alegría, pero al mismo tiempo, la paternidad puede
ser una tarea muy dura. Se pueden originar sentimientos encontrados de miedo a
no ser capaces, o no hacer lo suficiente para ser un buen padre/madre, también de
perder la libertad personal que tenían. Es normal que, por un tiempo, el desarrollo
personal enfrente una crisis. Los nuevos retos involucrados se pueden sentir como
agobiantes por momentos. Sino podemos superar estos sentimientos de agobio,
pueden presentarse problemas. Pelear contra esos cambios y los sentimientos que
produce también puede ser desgastante.
Los recuerdos de tu niñez regresan y se hacen más vívidos que antes. No es tan
importante cómo fue tu niñez, pero si es fundamental reconocerla en tus actitudes
en la relación con tus padres y con otras personas cercanas.
A tus padres los ves y reconoces con una nueva mirada cuando estás a punto de
ser padre/madre. Ellos se convertirán en abuelos. Las preguntas que surgirán son
¿qué tan cercanos quieres que ellos estén de ustedes? ¿pueden ser un apoyo y
ayuda? ¿de qué manera contribuirían? o ¿prefieres mantener distancia en ciertos
aspectos para que no estén muy cerca o se adueñen de la situación?.
La llegada de un niño puede hacer más fuertes los lazos entre ustedes como
padres que esperaron juntos por mucho tiempo. Se pueden volver mutuamente
dependientes, y esto genera nuevas estrategias para trabajar juntos como pareja,
para que las cosas cotidianas vayan de manera tranquila.
Las parejas pueden sentir que su relación se dirige hacia roles de género
tradicionales, desarrollando su relación con su pareja como padre/madre,
complementándose; y, al mismo tiempo preservan su relación sexual y su
compañerismo. Esto se convierte en un reto.
Las relaciones con la familia ampliada y las amistades son de enorme importancia
para una persona sola. El hecho de que su niño va a tener tan solo un referente
en la relación filial, convierte al resto de redes sociales como fundamentales. Para
que la identidad de su niño se desarrolle normalmente, es importante que el o ella
tenga, ordinariamente, un contacto diario con adultos como modelo de roles de
ambos sexos. Los padres/madres solos necesitan a alguien, lo suficientemente
cercano, para hablar y para, a veces, poder pedir apoyo y tener alivio o un respiro
con el trajín cotidiano.
Un niño jamás puede ser un sustituto al contacto necesario con otros adultos.
Como padre/madre, corre el riesgo de tratar de compensar al padre/madre que
falta y acoger a niño tan fuerte, que soltarse libre a la vida puede ser intimidante
para él/ella más tarde.
Piénselo nuevamente:
Tu red social
Proverbio Africano
Piénselo nuevamente:
¿Cómo puedo hacer sentir a las personas más cercanas a mí, como
parte de este proceso de adopción?
VOLVIÉNDOSE PERSONA
No solo el ambiente del niño afecta su desarrollo, los niños también afectan el
ambiente que les rodea, desde el momento en que nacen. Los estudiosos del
temperamento, están convencidos de que los niños tienen características propias
individuales que les hacen relacionarse con diversos factores de su ambiente. Los
niños/as pueden ser más o menos difíciles de lidiar, dependiendo de sus
temperamentos. Lo que es crucial para el desarrollo de los niños es que, también,
sus padres y otros adultos significativos puedan relacionarse con las
características especiales de cada niño.
La mayor parte del cerebro de un niño se desarrolla después del nacimiento. Esto
es una ventaja porque se puede direccionar este desarrollo cerebral de acuerdo a
lo que le rodea mientras crece. En el útero, y durante su primer año de vida, hay
una sobreproducción de células nerviosas. Las células nerviosas que son más
utilizadas, son las más preservadas y, aquellas que no son utilizadas, son
descartadas. Esto significa que una relación filial deficiente o inexistente después
del nacimiento, puede llevar a los niños a desarrollar vulnerabilidad biológica de
largo plazo. Los humanos tienen varios momentos críticos en períodos del
desarrollo durante sus primeros trece años de vida.
Para cada grupo de edad, hay habilidades del desarrollo central que cada niño, de
manera individual, debe dominar. La forma en que se domina una habilidad del
desarrollo mental constituye el punto de partida para apuntalar y resolver los
siguientes. Estas habilidades del desarrollo también condicionan la capacidad de
los padres para ayudar a su niño a desarrollar sus habilidades, de acuerdo a las
capacidades inherentes del niño.
Piénsalo nuevamente:
¿Cuáles son mis sentimientos al ser padre/madre de un niño con una genética
diferente?
Interacción temprana
Dentro del cuerpo de la madre, el feto comparte todas estas experiencias. Un feto
reacciona al sabor y al dolor desde la semana quince de embarazo, y su escucha
se desarrolla desde la semana 20. Reacciona a estímulos como los sonidos o a la
presión. Al coordinar sus movimientos con las impresiones de afuera, el feto por sí
solo practica la comunicación y se relaciona con el mundo exterior. Los recién
nacidos prefieren los sonidos que estaban acostumbrados a escuchar mientras
estaban en el útero.
Los recién nacidos tienen todos sus sentidos desarrollados y listos para proveer
información sobre el mundo. Ellos pueden coordinar sus impresiones y utilizar su
determinación para guiar sus acciones y comportamientos hacia lo que ellos
perciben como importante. Los infantes se calman al escuchar la voz de su madre
e, incluso, el sonido de los latidos del corazón de ésta. En la primera semana, los
niños pueden distinguir el olor de su madre respecto del olor de otras mujeres. El
sentido de bienestar de un bebé se desarrolla al ser tocado o sostenido en los
brazos, esto lo calma.
APEGO
Durante su primer año de vida, los niños necesitan establecer una relación
emocional y apego a sus padres o cuidadores que toman el lugar de padres. Los
niños necesitan, cada día, cuidados, protección y estimulación para que ellos
utilicen sus habilidades y desarrollarse bien. El apego conforma el punto de partida
para explorar el mundo y un lugar seguro al que retornar cuando se siente
inseguros o amenazados. La sensibilidad y confiabilidad de los padres, que
tengan reacciones predecibles, son elementos cruciales que determinan el tipo de
patrones de apego que construye un niño.
Los patrones de apego del niño son importantes puesto que conforman formas de
interacción social para toda la vida. La interacción con los padres o con otras
figuras moldea la percepción de los niños de quiénes son, si ellos son amables y
qué es lo que pueden esperar de la gente cercana a ellos. Esta percepción afecta
su comportamiento e interacción con el resto del mundo.
Los niños que tienen a sus padres como una base segura, son los mejores
equipados para explorar el mundo y desarrollarse bien; mientras que aquellos que
no, pasan todo el tiempo vigilando el comportamiento y desconfiando de lo que
puede venir de ellos, esto los limita a compartir experiencias y sentimientos con
otras personas. A los niños con apego obsesivo-compulsivo, ambivalente o
desorganizado, les resulta casi imposible confiar en la gente. Esto afecta su
comportamiento y les hace muy difícil construir relaciones basadas en la confianza.
Afortunadamente, esta situación puede modificarse con nuevas y diferentes
experiencias de interacción con otras personas.
Habilidades parentales
Las habilidades parentales siempre están influenciadas por el, la historia individual,
el contexto social, cultural y político en las que se desarrollan. La visión de qué
hace a un buen padre y lo que los niños necesitan cambia a través de los tiempos,
en diferentes generaciones y situaciones.
Los adultos deben poder satisfacer las necesidades de contacto físico y emocional
e interacción de sus hijos, pero también deben permitirles alejarse y estar solos.
Cuando los padres comprenden a sus hijos se generan interacciones y se
construye un patrón de confianza, esto impulsa a los niños a ver a sus padres de
una manera positiva. Esto, también, redunda en los padres porque comienzan a
entender y relacionarse con sus niños de una mejor manera. Todo lo contrario
ocurre cuando se genera un espiral negativo donde se disminuye la confianza,
cuando los padres no son capaces de comprender a sus hijos.
Para que los padres se conviertan en buenos cuidadores, deberían: estar siempre
disponibles emocionalmente para sus hijos, ser sensibles a sus necesidades,
demostrar que pueden entenderles, ayudarles y tener un comportamiento estable
predecible. Los padres no son perfectos y, aunque esta relación tenga altos y
bajos, malos entendidos una y otra vez, es natural y no lastimará a los niños,
siempre que los padres tomen conciencia de lo ocurrido, enfrenten las situaciones
y arreglen las cosas. Cometer errores en la relación, aceptarlo, darse cuenta en
dónde estuvieron los errores y arreglarlos, restaurar la confianza en la relación, lo
cual es importante en el ejercicio de paternidad. La confianza es un aspecto
esencial de cualquier relación humana.
Apego paterno
El nivel de afinidad de los padres con sus hijos, depende fuertemente de sus
propias experiencias infantiles de apego. No es tan importante lo que ocurrió en la
niñez, pero sí la interpretación que el adulto de a sus memorias y desde qué
contexto las visualiza. Se reconoce, de manera general, que los patrones de
relación se pasan de una generación a otra. La investigación demuestra que la
manera en que los adultos describen sus experiencias de la niñez, se convierte en
una guía bastante precisa y razonable de la clase de patrones de apego que
construirán con sus hijos.
Piénsalo nuevamente:
Desarrollo Lingüístico
El desarrollo lingüístico, tal como el desarrollo del niño en general, depende tanto
de la herencia genética como de los factores ambientales. Un recién nacido tienen
la habilidad de aprender el lenguaje y la urgencia de hablar para comunicarse
mientras crece si tiene contacto cercano y continuo con un adulto. Un infante tiene
la habilidad de distinguir e imitar cualquier sonido de cualquier idioma existente.
Los sonidos que un infante no escuche de forma repetida son gradualmente ya no
producidos y más tarde no reconocidos o distinguidos.
La fuerza fundamental en la comunicación es obtener respuesta. El diálogo
significa hacer turnos, para que ambas partes tengan el espacio de expresarse.
Los niños se expresan, con la voz, el lenguaje corporal y el contacto de los ojos. La
respuesta que reciben le da forma a sus habilidades lingüísticas.
Piénsalo nuevamente:
Un bebé; como un pájaro, no tiene lenguaje para dar voz a sus pensamientos
sobre el futuro o el pasado.
Todos los niños adoptados han sufrido separaciones. La relación que los niños
comenzaron a construir se rompió. Si sus cuidadores han cambiado de manera
repetida, implica que deben comenzar cada vez un nuevo intento de interacción.
Los niños que se esfuerzan por forjar relaciones en un contexto, pueden encontrar
que todo su forma de aprender el mundo y, a sí mismos, está en ruinas.
Los niños pueden haber experimentado una serie de eventos traumáticos como
desastres naturales; puede haber sido objeto de abuso físico o psicológico, en sus
familias biológicas o en otros lugares.
El triángulo de la adopción
La familia biológica de un niño es irremplazable: siempre será
su origen, el comienzo de su vida, la fuente de toda su herencia
genética. La familia adoptiva de un niño también es irremplazable:
le brinda un puerto seguro, le da una base desde la que viará hacia
la vida para formar su propia existencia.
Los hijos adoptivos y sus familias biológicas se han perdido unos a otros. Si su
motivación para la adopción fueron los problemas de fertilidad, los padres
adoptivos también han sufrido una pérdida. Cuando se logra aceptar la pena y el
dolor, y les damos un lugar en nuestra vida, se vuelve más fácil disfrutar de las
cosas que tenemos. Si esa pena no encuentra formas de expresión, puede darse
que los sentimientos no procesados harán sombra a todas las relaciones que
tengamos.
El niño/a
Como niños crecen y desarrollan, ellos ven las cosas con una mayor perspectiva, y
sus preguntas cambian. Las preguntas más comunes sobre su familia biológica
son:
¿Cómo son?
¿Qué clase de vida tienen?
¿Por qué me entregaron en adopción?
¿Los conoceré algún día?
Saber esto puede ayudar a los padres adoptivos a estar preparados para cuando
su hijo/a adoptivo/a quiera conocer aspectos sobre su familia de origen. Es
importante dejar que el/la niña dirija las cosas; cuando el quiera tratar el tema y
cuánto hablar sobre aquello.
Cuando hables con tu hija o hijo sobre su familia biológica, deberás recordar que el
nivel de comprensión del niño depende de la fase que haya alcanzado en su
desarrollo. Tomar en cuenta cómo piensa y aprende el niño, como atrapa los
significados y mira el contexto. Pero el punto esencial es tomarse todo el tiempo
del mundo para escucharle y dejar que la conversación se oriente con las
preguntas y reflexiones propias de ellos.
Padres biológicos
Un padre
De: ¿Quién soy yo, qué quiero ser? Margret
Henningsson
La mayoría de padres que entregan a sus hijos para adopción, esperan continuar
teniendo un lugar especial en la vida de ellos. Los padres biológicos no olvidan a
sus hijos, y sus pensamientos continúan afectando sus sentimientos y decisiones.
Sentimientos de pesar, vulnerabilidad y culpa los pueden acompañar por el resto
de sus vidas. Cualquier cosa que asocien con el embarazo puede despertar
recuerdos de sus niños. A menudo se preguntan cómo serán físicamente y cómo
se han criado. Las madres biológicas que han entregado sus hijos justo después
del parto, muy raramente tienen recuerdos de su bebé. Puede que no hayan
podido verlo – o pueden haber sido impedidas de verlo. Es usual que el sonido del
llanto de un bebé al nacer, sea el sonido que las atormente el resto de sus vidas.
Muchas madres biológicas tienen el deseo de tomar contacto otra vez con su hijo.
Pero también hay muchas que no desean ningún tipo de contacto.
Padres adoptivos
Una tarea especial de los padres adoptivos, es dar a sus hijos la libertad para
examinar sus sentimientos y pensamientos sobre sus padres biológicos. Los
padres adoptivos, a su vez, deben clarificar qué es lo que sienten por estos padres
biológicos. Los niños adoptivos generalmente están influenciados por lo que
piensan y sienten sus padres adoptivos sobre los padres biológicos, aunque éstos
no lo manifiesten en voz alta.
Cualquier charla sobre padres biológicos debe ser en los términos propuestos por
los chicos. Es una cuestión de psicología más que de buena educación. Los
padres adoptivos deben ser sensibles a los momentos de sus hijos cuando éstos
estén listos y quieran hablar sobre sus orígenes. Sólo entonces, es el momento
para dar información. Una manera de demostrar interés y aceptación, es tener una
caja en un lugar donde se guarda todo aquello que tiene relación con el origen del
hijo adoptivo. Estar a disposición para que puedan mirarlo cuando así lo deseen.
Muchos padres adoptivos describen que, de alguna forma, tienen una relación con
los padres biológicos de sus hijos adoptivos, incluso los miran como parte de su
familia extendida, aunque nunca los hayan visto o los vayan a ver.
En las familias en donde los padres adoptivos demuestran esta apertura e interés
en el origen de sus hijos adoptivos, estimulan un mejor sentido de auto estima.
Esto los reafirma de una manera positiva y minimiza su experiencia de ser
diferentes.
Piénsalo nuevamente:
En la mayor parte de los países del mundo las razones para la adopción de las
niñas, niños o adolescentes son las mismas, tanto para adopción nacional, como
para adopción internacional.
La habilidad de los padres para cuidar de sus hijos depende de la red social y de
seguridad que posean. En cada país esta red social obedecerá a la cantidad y
calidad de los servicios tanto públicos como privados que la compongan además
de las redes individuales, familiares, parientes y amigos, y el apoyo del Estado En
muchos países el apoyo del Estado es muy limitado o casi inexistente. Tener una
familia ampliada y mantener una buena relación con ellos es esencial para la
supervivencia de las familias nucleares.
Los miembros de la familia, quienes viven de acuerdo a los valores familiares
tradicionales, reciben apoyo para lograr desarrollar su vida. Si ellos rompen las
relaciones o pautas familiares, pueden ser expulsados del círculo familiar. Por
ejemplo una relación extramarital puede constituir una violación que vaya contra
los valores tradicionales familiares. Un bebé que nace de una pareja que no se ha
casado, podría ser una vergüenza para toda la familia y, a una madre soltera,
puede resultarle más difícil conseguir una pareja estable. Estas madres son las
que a veces deciden dar a sus bebés en adopción, para brindarles un mejor futuro
y lograr ellas mismas sobrevivir. Los abortos son ilegales, y las creencias religiosas
no permiten que se lo realice, aunque sea producto de incesto o violación.
También existen mujeres divorciadas o viudas que dan sus hijos para mantenerse
con las posibilidades de volver a casarse. El consumo de alcohol o drogas expulsa
miembros de la familia; muchas niñas y niños huyen de sus casas a causa de
maltrato o abuso sexual, tornándose en posibles padres de niñas y niños que
podrían ser abandonados. Muchas niñas y niños que nacen con problemas de
salud o discapacidad, suelen ser abandonados, los costos de manutención y las
dificultades pueden ser la causa.
Los niños de otras etnias no siempre son aceptados con facilidad por las familias
interesadas en adoptar. También se encuentran los niños con enfermedades
graves, crónicas o con discapacidades permanentes, quienes en ocasiones
permanecen por el resto de sus vidas en las instituciones de acogida. Muchos
niños son colocados en adopción por ser producto de un incesto o de una
violación.
Matt, de 1 mes
Su madre tenía 14 años de edad y, debido a que sus padres amenazaron con echarla de
la casa, ella decidió dar a su hijo en adopción.
Su madre murió hace dos años. Su padre se fue a vivir con otra mujer que no quería a los
niños. Ellos fueron enviados a un orfanatorio y nunca les visitó. Su padre fue preguntado
si quería dar a los niños en adopción y respondió que no. Pero al hacer la investigación se
determinó que era adicto y se le suspendió la patria potestad hasta que se rehabilite.
Después de 10 meses las autoridades trataron de volver a tener contacto con él, pero
había desaparecido. Fue imposible encontrarlo, a pesar de las publicaciones en la prensa;
eventualmente los niños fueron declarados en abandono y colocados en adopción.
Encontrada en las escaleras del hospital. Ella era muy bonita y estaba bien alimentada y
cuidada. No se logró ubicar jamás a sus padres o familia ampliada.
Su madre era una trabajadora doméstica. Se sospechaba que el padre era su empleador.
Ella dio a luz en una maternidad pública y decidió darlo en adopción.
Su madre era una estudiante de 20 años de edad. Sus padres ignoraban que ella hubiera
tenido un bebé – es una familia muy conservadora y ellos la habrían echado de casa si
supieran. Ella les dijo que consiguió un empleo en un pueblo cercano pero fue admitida en
un hogar para adolescentes embarazadas. Ella ya había intentado realizarse un aborto en
el tercer mes de embarazo. Inés nació prematura, con una pequeña desfiguración
probablemente debido al intento de aborto. A ella le faltaban tres dedos en un pie.
Cuando a los padres adoptivos les ha sido asignado un niño, se les entrega cierta
información sobre él/ella – una referencia. Esta referencia. a menudo. contiene un
reporte social, médico y fotográfico del niño. Tiene información sobre el lugar de
nacimiento del niño, el orfanatorio/s, las familias acogientes en donde ha estado,
los nombres de los padres biológicos, etc. La cantidad de información varía de
expediente a expediente.
El reporte médico
Es imposible tener un panorama completo del estatus médico del niño con los
informes que se incluyen. Por esto, es importante que la familia tenga previsto el
pediatra que se ocupará de su nuevo hijo o hija. Este chequeo completo debería
hacerse en las dos primeras semanas en que tengan a la niña o niño en casa.
Riegos de salud
Existen algunos riesgos de salud que a veces son importantes para los niños
adoptados y del que deben estar conscientes los padres adoptivos. Hemos
incluido algunas descripciones cortas de algunos riesgos de la salud. Para
profundizar el conocimiento sobre esto se debería contactar a los especialistas o
pediatras clínicos.
Desnutrición
Cuando algunos niños adoptados arriban a su nuevo hogar, son más pequeños en
estatura y peso que el promedio general. Los hijos/as adoptivos usualmente se
equiparan rápidamente una vez bien alimentados y cuidados en su nueva familia.
El aspecto negativo de los niños, niñas mayores, después de haber tenido un
crecimiento acelerado, corren el riesgo de ser afectados por la pubertad precoz
(pubertad temprana). La pubertad temprana lleva a estos niños a no poder
alcanzar su tamaño genético potencial.
Hepatitis
La hepatitis B causa inflamación del hígado. El virus está presente en todos los
fluidos del cuerpo, especialmente en la sangre. Los niños, niñas que se han
infectado a temprana edad corren el riesgo de presentar un contagio crónico.
Muchos niños y madres son vacunados contra la hepatitis B.
Los niños, niñas que portan el virus de la hepatitis B pueden llevar una vida
completa sin manifestar síntomas, pero existen reglas especiales para gente que
está contagiada, y los padres tienen una responsabilidad especial asegurándose
que éstas se cumplan. Los niños menores a seis años deberán asistir a centros
educativos cuyos grupos sean pequeños, los otros niños, niñas y maestros deben
ser vacunados contra esta enfermedad. Después de los seis años los riesgos de
infección son mucho menores, y los niños, niñas ya no tienen problema en ser
colocados en aulas con mayor número de niños. El personal que tenga contacto
con estos niños deberá ser informado, para que ellos puedan actuar
inteligentemente en caso de una lastimadura o sangrado. Cualquier información
que se dé al personal será con el consentimiento de los padres.
VIH-SIDA
Los niños, niñas que nacen con madres infectadas con VIH tienen siempre
resultados positivos cuando se hace el primer examen de VIH, porque los
anticuerpos de la madre se transfieren al bebé a través de la placenta durante el
nacimiento. Para estar seguros si un bebé ha sido o no infectado, debe haber
transcurrido al menos tres meses después del posible contagio. En algunos países
se realizan hasta dos exámenes, si el bebé nació de una madre VIH- positiva. Un
examen es para anticuerpos, y el otro, un test genético, prueba si el bebé está o
no portando el virus. Para una atención temprana y mejor calidad de vida de los
niños, niñas se debe requerir un examen de VIH-SIDA e incluirlo en el informe
médico.
Por una gran variedad de razones, hay niños, niñas en los orfanatorios para
quienes ha sido muy difícil encontrar padres adoptivos, sea porque son niños
mayores, con alguna enfermedad o discapacidad. En un gran número de casos,
estas condiciones son tratables, siempre que se cuente con los recursos médicos.
Si los candidatos a adoptantes pueden adoptar un niño con discapacidad o
necesidades especiales, pueden mencionar esto en su solicitud.
Las niñas o niños pueden sufrir de una serie de discapacidades, tales como, el
desorden de atención de Déficit/Hiperactividad, labio leporino, quijada o paladar
hendido, enfermedades coronarias, problemas auditivos, pie plano, polidactilia,
entre otros.
Trastorno de déficit de atención con o sin hiperactividad
Entre el tres y el cinco por ciento de niños de nueve a diecisiete años sufren de
estos trastornos; además hay una incidencia entre dos y tres veces más entre los
niños que las niñas. Los síntomas principales de este desorden son el déficit en la
atención, impulsividad e hiperactividad. Los niños con este desorden tienen
problemas para controlar sus sentimientos y cambios de ánimo. El comportamiento
de ellos es impredecible. La mayoría tiene dificultades para planificar y organizar
su vida diaria. Una mayoría significativa de niños con este desorden tienen
problemas para interactuar con otros. Pueden tener mucha dificultad en encontrar
actividades recreativas que les agraden. Los niños y jóvenes con este desorden
son a menudo ansiosos, inciertos y tienen baja autoestima. Los fracasos continuos
pueden conducir a la resignación, a la rebeldía y depresión.
Las madres cuyo abuso del alcohol ha sido sustancial durante el embarazo, es
posible que cerca de la mitad den a luz a niños con síntomas pronunciados de
síndrome de alcoholismo fetal; y, que la mayoría restante de niños seguramente
tendrá síntomas en diversos grados. El alcohol es una de las drogas más dañinas
para el feto. Existe una conexión clara entre la cantidad de alcohol y el grado y
rango de defectos que presentará el recién nacido.
Beber alcohol durante el embarazo puede dañar al feto de formas muy variadas,
ocasionando defectos en los órganos internos y externos, pero lo más peligroso de
todo, en daño del cerebro. Muchos de los síntomas se parecen a otros desórdenes
como el desorden de atención. Cerca del 80 % de niños, niñas con problemas
relacionados con el alcohol tienen problemas de visión.
La vida con una niña o niño con síndrome de alcoholismo fetal es demandante
para los padres. Las condiciones de la niña o niño implican cuidados especiales,
servicios médicos, servicios sociales se necesita de que todos estos actores se
involucren de manera activa.
Piénsalo nuevamente:
Cuando se hace una solicitud de adopción, debemos estar claros que en Ecuador
no se puede escoger el niño o niña, sí se puede manifestar la preferencia por el
género, la edad o la posibilidad de aceptar niños con algún problema e salud o
discapacidad pero para esto la declaratoria de idoneidad puede incluir las
habilidades, capacidades y fortalezas que la familia tiene para adoptar niños con
discapacidades o necesidades especiales. El factor decisivo siempre será, ¿qué
familia necesita el niño? Y son las autoridades competentes que representan a
ese niño quienes escogen una familia para ese niño, basados en el interés
superior del niño.
Al mismo tiempo, los deseos de los candidatos a padres adoptivos influye en qué
niños, niñas son adoptados. La mayoría de niños, niñas abandonados en el
mundo son de más de tres años de edad, enfermos o con discapacidades.
Encontrar padres adoptivos para estos niños puede ser muy difícil, y a menudo
significa que permanecerán indefinidamente en los orfanatorios.
Adoptando hermanitos
A los hermanitos, casi siempre, se los adopta juntos. Una ventaja es que ellos se
apoyan mutuamente y pueden conservar mejor sus recuerdos familiares para dar
vida a su historia.
Al mismo tiempo, el esfuerzo para los padres adoptivos es mayor. Cuando dos o
más hermanos son adoptados juntos, los niños, usualmente, se encuentran en
diferentes edades; los padres tienen que ser capaces de llenar las necesidades del
hermano mayor y también del menor al mismo tiempo. Cada niño/a necesita
atención individual y construye su relación personal con sus padres. Además, es
crucial que los padres pongan atención a las situaciones personales de sus hijos y
comprendan lo que cada niño/a necesita y desea.
Piénsalo nuevamente:
Los niños en adopción nunca son recién nacidos. Parte de la vida de tu hijo/a no
la has podido compartir. Todo aquello que ocurrió antes de la adopción habrá
tenido una profunda influencia en su futuro también.
Pocos niños/as, de más de tres años, son a menudo preparados para la adopción
de una manera diferente a los más pequeños. Puede que les hayan entregado
fotografías de sus posibles padres, le pueden haber dado juguetes que ustedes
enviaron. Un niño más grande puede necesitar ser tratado como si tuviera
diferentes edades al mismo tiempo. Por un lado un niño/a más grande puede
necesitar estar a solas con su nueva familia por un tiempo prolongado y que se le
permita sentirse un niño/a pequeñito/a. Por otro lado un niño/a más grande
necesita el estímulo de un grupo de pares y ser incluido en diferentes actividades
apropiadas para ese grupo de edad.
Piénsalo nuevamente:
Adoptando niños relacionados con la familia o por matrimonio
¿Qué implicaciones tiene la edad del niño en la adopción?
Si el niño adoptado conoce a las personas que lo adoptan con antelación por su
parentesco, el proceso de asimilación y adaptación puede ser más fácil que en
otros casos. La niña o niño puede mantenerse en contacto con su red social y
familiar, lo cual, es una ventaja en relación a conservar su identidad pero, al mismo
tiempo, puede resultar problemátic si no logra adaptarse y desea regresar. Si esta
adopción es el resultado no deseado de una responsabilidad forzada por la familia
o la esposa, esposo los adoptantes puede llevar a consecuencias negativas para
el adoptado. Si la gente que ha cuidado de la niña o niño antes de la adopción,
viven en pobreza, puede conducir a que los adoptantes y el adoptado se sientan
en la obligación de ayudarles financieramente, lo cual también puede traer
complicaciones futuras. Jamás se debe pagar por un niño o niña. A veces los
niños tienen el sentimiento de haber abandonado a su familia; los adoptantes
necesitan comprender esto y ayudarles a enfrentar esta situación. Los adoptantes
a veces tienen un sentido de lealtad hacia su familia y sentirse obligados a criar a
su hijo adoptivo/a de acuerdo a las ideas y tradiciones de la familia biológica del
niño/a. Esto podría también ocasionar dificultades de adaptación y problemas
familiares.
Piénsalo nuevamente:
Como candidato a adoptante, usted puede utilizar este periodo de espera para
prepararse de diferentes maneras. Usted puede leer mucha bibliografía sobre
adopción y las condiciones de los niños, niñas para adopción. Mucha gente busca
a padres y madres adoptivos; también puede contactarse con gente que espera
también por una adopción- vía internet por ejemplo.
Si usted ya tiene hijos, necesita prepararlos muy bien de manera que ellos puedan
sentirse involucrados en la llegada del nuevo miembro de la familia. La
preparación puede consistir en hablar con su hijo/a/s sobre su nuevo/a hermano/a
y de dónde proviene.
Es natural que los niños sientan una mezcla de emociones sobre la idea de tener
un hermano/a. Puesto que será alguien con quien deberá compartir la cosas –
alguien con la misma posición en este a menudo mundo como rompecabezas
manejado por adultos. Pero al mismo tiempo, un hermano/a será un rival para el
amor de los padres. El hecho de que los padres biológicos de este nuevo
hermano/a lo hayan abandonado pueden hacer surgir muchos pensamientos y
preguntas que antes no se hacía.
Evitando el embarazo
Las parejas que han intentando tener un bebé por mucho tiempo antes de
decidirse a adoptar, en ocasiones repentinamente descubren que esperan un
bebé, justo en medio de la adopción. Pero dar a luz a un bebé mientras se adopta
otro niño/a implica una enorme cantidad de presión, estrés y sería una enorme
desventaja para ambos, tanto el hijo biológico, como el adoptivo. Se sugiere evitar
persistir en el intento de quedar embarazada una vez que se ha tomado la decisión
de adoptar. El embarazo podría ser un cambio muy importante que cambiará la
opinión en que se fundamentó la decisión de los servicios de adopción. Debería
informarse inmediatamente sobre esta situación a estos servicios si un embarazo
se presenta.
Piénsalo nuevamente:
Cuidando a tu hijo/a
Ni los niños, ni ustedes padres adoptivos pueden sentirse cómodos. Los niños,
niñas tienen que abandonar su lugar seguro, lo que conocen y a toda la gente con
la que han permanecido. Esta será la última en una serie larga de separaciones y
pérdidas. Si su hijo/a puede hablar, seguramente no se entenderán al comienzo.
También se encontrarán impresionados por la pobreza y por todas esas caritas
tristes que quedarán atrás en la institución.
Ustedes han estado esperando este encuentro por tanto tiempo, deseando poder
hacerse cargo de su niño/a. Para su hijo/a este primer encuentro mas bien puede
ser una sorpresa. Aunque el personal técnico le anticipe al niño/a sobre conocer a
sus nuevos padres, el momento siempre superará la preparación. Ellos deben
haber visto la foto de la familia, de la casa, con anticipación y le habrán ayudado
en la preparación de su llegada. Pero aún con la mejor preparación, para un
niño/a pequeñito/a es muy difícil entender realmente lo que está pasando. No
podemos saber lo que siente cada niño/a. De lo que podemos estar seguros que
aquello que su hijo/a sienta en el momento de conocerlos será importante para
ambas partes en el futuro.
Durante este primer encuentro con los padres adoptivos, los niños pueden tener
diversas reacciones, dependiendo de su edad, pasado y experiencias previas de
padres o cuidadores. Algunos niños/as están activos y alerta; otros son apáticos y
retraídos. Algunos niños/as corren hacia sus padres adoptivos y los abrazan,
usualmente porque así se les dijo que hagan. Otros niños/as mantienen su
distancia al comienzo y parecen calmados. Pero también los niños/as pueden
reaccionar con llanto y rabietas.
Para los niños/as los padres adoptivos son completamente extraños. Los niños/as
tendrán que acostumbrarse a estos nuevos rostros, voces extrañas, olores
diferentes y que se comportan de manera extrañamente cercana. Tendrán que
acostumbrarse a la personalidad del niño/a, a cómo se ve, huele y comporta.
Ya sea que el niño/a es entregado por una madre acogiente, o por el personal de
cuidadores de una entidad de atención ustedes deberán preguntar sobre todos sus
hábitos o rutinas, comida favorita, preferencias y la hora de dormir, gustos o cosas
que no le gustan, hora de baño. Con esta información pueden organizar la vida
cotidiana al principio para mantenerla lo más parecido posible, lo cual facilitará el
proceso de transición hasta que su niño/a se acostumbre. Esta información de su
vida anterior, también le sirve para conocer mejor y comprender a su hijo/a.
Este encuentro con los cuidadores de su hijo/a puede ser una importante
oportunidad para obtener más información sobre su origen. Los informes escritos
sobre los niños/as y su pasado a menudo son escuetos y no siempre muy claros y
con información precisa. A veces se omite información dolorosa. Sin embargo en
el futuro esta información será importante para que su hijo/a si lo desea indague
sobre su origen.
Es natural que los padres adoptivos quieran dar un nombre a su hijo/a, porque es
una manera de darle la bienvenida a la familia. Puede ser que el nombre que tenía
hasta entonces no le guste a la familia adoptiva. El punto es pensar en el otro y
tener consideración. Cambiar el nombre del niño/a puede ser violar su integridad y
tratar de romper su verdadera identidad.
Los niños, niñas adoptados no son recién nacidos, además la niña o niño y
ustedes son desconocidos unos a otros y requieren de paz y silencio para
establecer sus propios patrones de interacción y relacionamiento. Puede tomar
algo de tiempo y paciencia para encontrar las rutinas prácticas más adecuadas, el
ritmo y la velocidad para que las cosas tomen su curso en la vida cotidiana. Si de
alguna manera es posible, trate de cumplir los deseos de su hijo y de dar una
importancia especial a sus necesidades, para que ella o él no tengan que aceptar
de manera pasiva adaptarse a todo lo nuevo.
La adopción implica otra pérdida más para los niños, pérdida de los adultos que los
cuidaban, de quienes ellos pensaban que podían contar de manera incondicional,
para ellos todos desaparecen. Ustedes volverán a su hogar con el/ la niño, niña;
ellos tendrán que dejar todo lo que hasta hace poco era lo único que conocían.
Este viaje altera todo el ambiente, desde la luz, los sonidos, olores y hasta el clima.
Como padres ustedes habrán realizado una decisión activa de adoptar un niño/a;
pero en muchos casos su niño/a no habrá realizado esa misma decisión. Es en el
dar y recibir, una afirmación y respuesta en la que se construyen los vínculos
afectivos, aún cuando todo marche bien, puede llevar tiempo desarrollar estos
afectos y vínculos. Como padres adoptivos, tal vez deberán esperar un tiempo
para obtener una afirmación verdadera de su hijo. Los niños, niñas jamás podrán
ser preparados lo suficientemente bien, para lo que se puede sentir cuando alguien
quiere ser tu padre/madre. Aun cuando los niños, niñas sean los suficientemente
grandes para haber recibido información durante esta preparación, es
prácticamente imposible para ellos imaginar lo que se siente o lo que van a sentir.
Todos los padres necesitan apoyo si van a convertirse en buenos padres. Este
soporte emocional a los padres /madres, puede tomar la forma de apoyo diario,
tener alguien con quien hablar (otro adulto), recibir la retroalimentación adulta de tu
rol como padre/madre. También debería haber una relación muy cercana con el
pediatra, para informarse adecuadamente de muchos aspectos de salud y
cuidados de la niña o niño. Es por esto que, los padres/madres adoptivos son los
llamados a hacer las preguntas correctas y encontrar todos los servicios de apoyo
disponibles en su área, mantener contacto con los profesionales que hicieron su
estudio de hogar y evaluación, o de algún servicio para niñez.
Como padre/ madre nuevos de una niña o niño que han estado deseando tanto, tal
vez usted prefiera evitar pensar sobre el hecho que este niño o niña fue
abandonado por sus padre y madre biológicos. Este hecho es uno de los
prerrequisitos para que el niño haya sido declarado con aptitud legal para ser
adoptado, sin embargo, es una experiencia que el niño/a lleva dentro para el resto
de su vida. Es importante que usted no cierre sus ojos y oídos ante esta situación.
Su hijo/a no podrá solo/a, lidiar con estos sentimientos de pérdida y además más
adelante en la vida, con los pensamientos que puedan surgir de esto.
Al margen de las razones para la adopción, su niño, niña será muy pequeñito/a
para entender las intenciones del adulto. En lo que concierne al niño, todas las
personas que conoció, desaparecen en algún momento y esto él/ella lo siente
como un nuevo abandono. Algunos niños pierden a las personas que se volvieron
verdaderamente importantes para ellos y esto puede dar origen a un conflicto de
lealtades.
A menudo los niños pequeños, creen que son los responsables por lo que les
ocurre; experimentar estos abandonos puede llevar a los niños a creer que ellos no
merecen ser amados. Siendo pequeños y dependientes puede ser insoportable
cuando a una niña y niño no se le ha dado los cuidados y amor necesarios. Los
niños, niñas a veces compensan esta vulnerabilidad, imaginando que pueden
cuidar de sí mismos y hasta pueden negar que tienen las mismas necesidades que
los otros niños pequeños. Esto puede fácilmente confundirse con suficiencia.
Para los niños adoptados puede tomar tiempo aprender a confiar en sus nuevos
padres y comprender que puede ampararse en esta nueva situación y que esto
será permanente. Incluso cuando los niños comienzan a confiar y creer que esta
nueva situación será permanente, al igual que sus nuevos padres, ellos pueden
conservar un temor profundamente arraigado de ser abandonados. Cada
separación –incluso corta- puede disparar este temor de ser abandonado
nuevamente.
Aquí algunos ejemplos de las experiencias de los niños, de cómo las vivencias
anteriores o durante la adopción puede influir en ellos, haciendo que se presente
un comportamiento sintomático que a menudo los padres tienen dificultad en
interpretar.
A veces los niños creen que la estadía con su nueva familia es temporal.
Haber tenido cuidadores cambiados o reemplazados, es algo que ellos
pueden haber vivido una y otra vez. Los padres adoptivos deben construir
una buena y sólida relación, lo más pronto posible; ellos pueden querer
jugar y abrazar a su hijo/a. Pero es importante para los adoptantes dejar a
sus niños decidir el ritmo.
Los niños que han tenido una relación segura con la gente que los cuidó
antes de la adopción, extrañará profundamente a sus cuidadores. Puede
llevar algún tiempo, antes de que se de cuenta de que sus cuidadores no
van a volver a su vida, es entonces que ellos pueden reaccionar con
desesperación y confusión.
Problemas de sueño
Durante sus primeros años de vida, las niñas o niños aprenden cómo comer
y beber y lo que se siente estar satisfecho. La desnutrición o negligencia
pueden significar que no tuvieron forma de aprender esto. Los niños
adoptados pueden querer comer toda la comida que encuentran. Niños que
han tenido siempre porciones de comida escasas, pueden estar
preocupados pensando que tal vez no siempre podrán recibir lo que es
justo, o que tal vez mañana no haya suficiente comida. Un posible
resultado puede ser que comiencen a comer en exceso hasta hartarse.
Estos niños pueden incluso buscar en la basura, pedir comida a los vecinos
o guardar comida.
Que todos se sienten juntos a comer en la mesa, puede ser extraño para los
niños que vienen de los orfanatorios. La comida para ellos en esos lugares,
es una necesidad, no una reunión social. A los niños les puede resultar
extraño estar en los brazos de sus padres mientras toman el biberón,
habiendo estado acostumbrados a tomar solos el biberón en sus cunas.
Comportamiento Indiscriminado
Los niños que tienen un comportamiento excesivamente amistoso
indiscriminado, se acercan a cualquiera con el mismo cariño. Parecen
querer a todos por igual, lo cual puede ser tomado erróneamente como
evidencia de que son sociables y abiertos. No han tenido una experiencia
anterior de tener padres y de relacionarse con ellos, por lo tanto no
entienden que la relación con los padres adoptivos es especial. Esto se
debe a que sus cuidadores han sido cambiados constantemente, ellos han
aprendido a conseguir el cuidado y afecto de cualquier persona.
El reto y la provocación
Mentiras y robos
Los niños quienes han vivido sometidos a reglas muy estrictas en un hogar
acogiente o en una institución, han aprendido a mentir. Las mentiras
pueden ser consecuencia de que los niños tienen miedo de ser castigados.
Pero también mentir puede surgir como consecuencia del miedo a perder el
amor de los adultos significativos para ellos: “Si digo la verdad, ellos estarán
tan enojados que seguramente me alejarán.”
Algunos niños pueden haber sido forzados a robar para sobrevivir. Otros
podrían no haber aprendido la diferencia entre “tuyo” y “mío”, simplemente
porque nadie les ha explicado lo que esto significa. Otra causa para el robo
puede ser que estos niños, niñas nunca tuvieron nada a lo que pudieron
considerar propio. En algunos casos, los niños pueden robar como una
forma de reto a sus padres: ellos necesitan su ayuda para aprender como
dar y recibir dentro de una relación estable y amorosa. Y ellos necesitan su
ayuda para comprender que un “No” no implica que serán devueltos o que
nos los aman.
Comportamiento Sexualizado
2
Adaptación libre del libro del curso de preparación para la adopción utilizado en Holanda
Uno o más de los comportamientos descritos anteriormente, pueden haber sido
experimentados por los niños adoptados. Cuando los niños demuestran señales de
miedo e inseguridad, están ofreciendo a sus padres una oportunidad para
ayudarles a resolver esos asuntos y sentimientos que les están afectando.
Es difícil dar consejos generales sobre cómo hacer sentir a las niñas o niños
seguridad. Los niños son individuos con sus propias necesidades y preferencias.
Tú, como padre/madre, debes probarle que eres digno de confianza, el cómo,
dependerá de la clase de relaciones que tienes con tu niña/o. Esto puede ser
trasmitido de varias maneras: durmiendo en el mismo cuarto que el niño,
sentándote cerca, amarcando al niño. Otras formas son dándole el biberón, estar
pendiente si el niño se siente amenazado al ser mecido o amarcado, o
permitiendo, temporalmente, que utilice pañales otra vez sinedo un niño más
grande.
Piénsalo nuevamente:
Nuestra propia niñez es uno de los marcos de referencia más importantes que
tendremos como padres. Ser padres trae memorias de las cosas buenas y malas
que nuestros padres hicieron con nosotros. Mucha gente cree y siente que el
convertirse en padres, les da la oportunidad de trabajar asuntos de su propia niñez
que quedaron no procesados. Sin embargo, en ocasiones, los padres/madres se
sienten incapaces de enfrentar las experiencias que se reactivan de su propia
niñez.
Ser padres de niños adoptados implica cuidar de niños que han sufrido varias
pérdidas tempranas. Para que ellos puedan ser capaces de vivir con esto,
necesitan un ambiente de seguridad, estabilidad y adultos que permitan a sus
niños expresar sus sentimientos y darles todo el apoyo que necesitan para
enfrentarlos. Algunos pueden necesitar confirmaciones repetidas de sus padres
adoptivos de que nunca los abandonarán durante todo el camino hasta la adultez.
Esto genera demandas adicionales a los padres adoptivos de tener la fortaleza
interna, para manejar sus propias experiencias y problemas de su niñez, que se re-
abren cuando están cuidando de sus hijos.
Algunos padres adoptivos tienen por primera vez que enfrentar y experimentar la
impotencia y vulnerabilidad que ellos tal vez nunca antes habían experimentado.
Los niños cuyo sentimientos son reafirmados se dan cuenta que lo que ellos
sienten es real e importante. Los padres reafirman a sus hijos al ser diestros para
comprender los sentimientos de sus hijos, siendo capaces de soportar esos
sentimientos y al mismo tiempo sentirse optimistas de que “todo estará bien”.
Cuando los padres pueden cumplir con todo esto, ellos le transmiten a sus hijos:
primero, el sentido de que están completos y son individuos valiosos, y segundo,
el sentido de que ellos podrán sobrevivir incluso a los peores sentimientos.
Piénsalo nuevamente:
Cuando no hay parecido físico entre padres e hijos en una familia, es obvio para
casi todos que se trata de una familia adoptiva. La gente puede decir ciertos
comentarios a los miembros de la familia con las mejores intenciones, pero sus
comentarios pueden ser de verdad extraños, ofensivos o dolorosos. Alguna gente
está complacida y quiere saber de dónde vino el niño. Otros son curiosos e
inquisitivos y quieren conocer su historia anterior.
Las familias adoptivas tendrán que enfrentar la ignorancia, falta de tino, prejuicios
y, si se empeora la situación; racismo. Los niños pueden ser cargados e incluso
golpeados por sus pares o algunos adultos. Muy a menudo, prefieren no contar a
sus padres sobre lo que les ocurre, en parte porque sienten vergüenza, y en parte
para no entristecerles.
Los padres adoptivos deben estar claros y conscientes de las implicaciones de las
diferencias físicas. De esta manera, estarán preparados para enfrentar las
variadas situaciones que pueden aparecer. La actitud de los padres adoptivos
frente a estas situaciones, será el modelo más importante que los niños tendrán.
Las estrategias que escojan son una cuestión personal. Proteger la integridad de
su hijo y la suya propia, necesita ser su preocupación principal en cualquier
circunstancia o situación. Nadie tiene el derecho de indagar en la historia pasada
de tu hijo por curiosidad o cualquier otra cuestión como esta. Este es un asunto
privado, y es tu hijo quien deberá decidir cuánta información quiere divulgar, y a
quién.
Piénsalo nuevamente:
Adopciones invisibles
Si tu hijo adoptivo tiene una apariencia física parecida a la familia, pueden ocurrir
otras situaciones. Si la otra gente no logra darse cuenta por el aspecto físico de
que se trata de una familia adoptiva, o no ha sido informada, podría ocurrir que
eventualmente se hagan comentarios prejuicioso o insultantes sobre la adopción
delante de tu hijo.
El parecido físico puede ser tentador para los padres adoptivos y animarles a
mantener el secreto sobre el origen del niño. Es importante saber que de las
investigaciones con adultos adoptados y otras investigaciones, se ha concluido
que la verdad sobre la adopción es crucial. Los niños necesitan construir
confianza en sus padres adoptivos y otros adultos, y necesitan conocer y
desarrollar su propia y verdadera identidad.
Piénsalo nuevamente:
Raíces y orígenes
Cuando la familia adoptiva ha estado junta por algún tiempo, se han acostumbrado
unos con otros y se han establecido en la vida cotidiana juntos, ¿se convierten
entonces en una familia común?
Las familias adoptivas, tal como otras familias, tienen el reto de convertirse en una
fuente de alegría y apoyo para sus miembros, a lo largo de la vida cotidiana. Las
familias adoptivas también pasan por el mismo ciclo de vida, viviendo las mismas
alegrías, penas que otras familias. Ellos construyen sus hábitos especiales, sus
propias maneras de vivir, relajarse, discutir, etc. En la vida cotidiana, los miembros
de la familia no pasan continuamente pensando en cómo se conocieron y en lo
que sintieron. Simplemente viven unos con otros, y los cambios en su relación, en
su ánimo, se dan de acuerdo al ciclo de vida y de acuerdo a los patrones
específicos del desarrollo de cada familia.
Al mismo tiempo, hay una dimensión adicional a las experiencias de una familia
adoptiva, simplemente a causa de la adopción misma y de las tareas adicionales
que surgen en sus vidas.
Los investigadores sobre el tema han encontrado que las actitudes de los
adoptados hacia su adopción, varían. Una diferencia fundamental se da entre
quienes sostienen que la adopción no genera diferencias entre una y otras
familias, y los adoptados quienes aceptan que la adopción si genera diferencias en
algunos aspectos. Es cuestión de ser capaces de tratar sobre el tema de una
manera relajada de tal forma que la adopción sea asumida como parte de la
historia familiar.
Los cambios pueden surgir de intenciones propias o por factores imprevistos como
la llegada de hermanos, el divorcio, mudanzas, enfermedades o muertes.
En una nueva situación, las reacciones de otras personas, pueden recordar a las
niñas o niños adoptados el hecho de que son adoptados. Puede ser cuestión de
cambios en la escuela, conocer gente nueva en las vacaciones, una entrevista de
trabajo, un nuevo puesto de trabajo. Incluso en la vida diaria, los adoptados
pueden ser recordados de su condición por un momento de cercanía con alguien,
un programa de televisión o algo que alguien dijo.
Los niños que han sido abandonados por sus padres biológicos,
generalmente, necesitan tiempo para aprender a confiar en sus padres
adoptivos, sobre todo si los pierden de su vista, hasta su regreso a
recogerlos. Su necesidad primaria es de tranquilidad y silencio, mientras se
van vinculando con sus nuevos padres. Los maestros del pre-escolar son a
veces los primeros, en cuidar a los niños adoptados, fuera de su familia.
Esto puede hacer difícil para los niños adoptados comenzar su pre-escolar.
Puede llevarles más tiempo adaptarse; este periodo de adaptación debe ser
planeado de acuerdo a las reacciones individuales de cada niño, por los
cambios que involucra. Algunos niños adoptados necesitan un periodo
inicial más largo en casa para, verdaderamente, vincularse a sus nuevos
padres, esto puede significar que se deba diferir el ingreso al pre-escolar.
Empezando la escuela
Años adolescentes
Los cuerpos adolescentes cambian durante este periodo y, con esto, viene
el comienzo de una sexualidad adulta. Sus primeros amores adolescentes
vehementes y las desilusiones pueden traer a la memoria recuerdos
latentes en sus cuerpos. Una relación romántica puede convertirse en una
experiencia emocional tremendamente ambivalente, que reactive esa
primera separación en la vida. Para algunos adoptados, el riesgo de ser
abandonados o rechazados es tan grande, que nunca se permiten amar
profundamente.
El hecho de que no haya lasos de sangre puede significar tanto para los
padres adoptivos como para los chicos, más difícil para alejarse
emocionalmente unos de otros. Es importante hacer notar que la
emancipación de los adolescentes no es una cuestión de librarse de los
padres como personas. Es una cuestión de crecer sobre la dependencia y
seguridad que sus padres siempre le dieron y representaron.
Convirtiéndose en adulto
Paternidad
Viaje de Regreso
Si son de otras ciudades, podrían sentir al regresar, que por fin están en
casa.
Sabiendo qué dificultades pueden tener los chicos adoptivos y qué retos
especiales podrían encarar, les da a los padres adoptivos un conocimiento
previo que les facilita la comprensión. Tenemos que hacernos a la idea que
todo lo que conocemos de las investigaciones y de la experiencia está
basado en generalizaciones. En este material se ha cubierto algunos temas
de importancia para los adoptados y sus familias. Cómo individualmente
los chicos y las familias reaccionen en cada fase dependerá de quienes son
como personas. Notar y escuchar a su hijo/a es absolutamente crucial.
A veces, los adultos creen que deben proveer de respuestas o soluciones
para todo o para cada problema que tenga el niño. A veces, la mejor ayuda
que se le puede dar como padres es simplemente escucharlo. Las
experiencias, sentimientos y pensamientos que nos guardamos para
nosotros pueden crecer hasta convertirse en problemas serios; “una alegría
compartida es una doble alegría; un problema compartido es un problema a
medias”.
Hablar con un niño demanda tiempo y paciencia. Para los más pequeños
es vital que sus padres adoptivos estén presentes, poder hablar con ellos
cuando así lo quieran. Hasta para los más grandes y los adolescentes este
puede ser un pre-requisito. Si el tema que están tratando es
emocionalmente fuerte, sería importante seguir a tu hijo y permitir pausas o
hacer paradas en la conversación.
Mientras más dificultades queramos enfrentar sin ayuda, más riesgo existe
de no poder resolverlo y ver perjudicados otros aspectos del desarrollo. Es
por esto que, es esencial tratar de remediar las cosas lo más pronto posible.
Existen una amplia bibliografía, desde distintos campos del saber, respecto al
desarrollo evolutivo de las niñas, niños y adolescentes, todas, sin embargo,
hablan de un proceso en el cual el desarrollo de habilidades y destrezas se
despliega en el sujeto progresivamente, y requiere la interacción y contacto con el
ambiente, mientras otras destrezas se desarrollan sin la intervención del adulto, ya
que se trata de funciones genéticamente programadas.
Las teorías del desarrollo psicológico del niño prestan atención a cómo crecen y se
desarrollan éstos a lo largo de la infancia en distintas áreas: social, emocional y
cognitiva.
Psicólogos como Erik Erikson, Jean Piaget o Vygotsky han intentado explicar los
diferentes aspectos a través de sus elaboraciones teóricas. Sus aportes han sido
de gran ayuda para entender cómo crecen, piensan y se comportan los niños.
Por otro lado, Lev Vygotsky propuso una teoría del desarrollo cognitivo de los
niños que ha pasado a ser una de las teorías más influyentes e importantes,
especialmente en el campo de la educación y el aprendizaje. A diferencia de
Piaget propone que el aprendizaje se construye a partir de las interacciones
sociales y del entorno sociocultural y no tanto de las experiencias individuales.
Desarrollo evolutivo/educativo: