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Manual

para la Promoción y
Acompañamiento de las
Cáritas Parroquiales
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Indice

Presentación a la Edición 7

Orientaciones Generales 11

Marco Doctrinal y Orientaciones Pastorales de la iglesia 13

PRIMERA SESIÓN, Introducción 14


1. Al Alba del Tercer Milenio 14
2. Al servicio de la verdad de la vida plena del hombre 15
3. Bajo el signo de la solidaridad del respeto y del amor 16

SEGUNDA SESIÓN, Doctrina Social: Una luz para la misión


de la Iglesia en el mundo 18
1. Fecundar y fermentar la sociedad con el Evangelio 19
2. Evangelización y promoción humana 19
3. Hacia una nueva sociedad reconciliada en la justicia y en el amor 20
Manual 4. Opción preferencial por los pobres y excluidos 20
para la Promoción y Acompañamiento 5. Visión del desarrollo humano integral 21
de las Cáritas Parroquiales 6. Designio del Amor de Dios para la humanidad. Acción liberadora
de Dios que salva en la Historia de Israel 22
Diseño y Diagramación: 7. Jesucristo, cumplimiento del designio del Amor de Dios 24
Impactum Creativos 8. La Iglesia, Morada de la Caridad 25
9. Tarea evangelizadora y Doctrina Social de la Iglesia 26

Impresión: TERCERA SESIÓN, La Persona humana en el designio de Dios 29


XXXXXXXXXXXXXXXXXXX 1. Dimensiones de la persona humana 30
2. La unidad de la persona 30
3. La apertura de la persona a la trascendencia 31
Primera Edición: Agosto 2011
4. La Libertad de la persona 32
Tiraje: 2,000 ejemplares 5. Igual dignidad de todas las personas 33
Hecho el depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú No......................... 6. Sociabilidad humana 34
Impreso en Perú 7. Los derechos humanos 34
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

CUARTA SESIÓN, La familia, “Célula Vital de la Sociedad” 36


1. La familia, Santuario de la vida 36
2. La familia y la persona humana 38
3. La familia y la sociedad 38
4. La familia y el Estado 39
5. El matrimonio, fundamento de la familia 39

QUINTA SESIÓN, Vida Económica 41


1. El trabajo humano 41
2. El hombre, la pobreza y la riqueza 42
3. La economía y la globalización 43
4. Economía y empresa 45
5. La Comunidad Política - El Señorío de Dios y el Reinado de Cristo 46
6. Comunidad política, persona humana y pueblo 47
7. Justicia y caridad 48
8. Los cristianos en la vida pública 49
9. La Comunidad Internacional y la cooperación internacional para el
desarrollo 50

SEXTA SESIÓN, El Cuidado del Medio Ambiente 54

REFLEXIÓN FINAL: Hacia una “Civilización del Amor” 59


1. La inculturación del Evangelio o la evangelización de la cultura 59
2. Recomenzar desde Cristo 59
3. Con una esperanza sólida 60
4. Para construir la “civilización del amor” 60

Orientación hacia la organización concreta de las


Cáritas Parroquiales 60

La Cáritas Parroquial 65
La Cáritas ParroquialVida y Relaciones 65
La Cáritas Parroquial la construcción de un proceso formativo 66
La construcción de la Cáritas Parroquial 70
El estatuto de la Cáritas Parroquial 74
La Cáritas Parroquial y la pastoral de conjunto 80
La Cáritas Parroquial y la Cáritas Diocesana 83
Los animadores de la Cáritas Parroquial 86

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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Presentación a la Edición
Siento mucha alegría al presentar este Compendio sobre el ser y quehacer de las
Cáritas parroquiales. Tengo la esperanza de que esta iniciativa que hoy nos
presenta la Oficina de Asesoría Pastoral de Cáritas del Perú, acompañada por
Mons. Hugo Garaycoa, Obispo Emérito de Tacna y Moquegua y asesor pastoral de
Cáritas del Perú, pueda seguir animando, alentando y fortaleciendo la caridad de
Jesucristo vivida en el corazón de la comunidad parroquial.

Han pasado muchos años desde que comenzamos a dar vida y aliento a esta
iniciativa pastoral. Se han realizado un sinnúmero de encuentros, jornadas,
talleres y retiros, tanto con agentes pastorales, como con seminaristas,
religiosos y presbíteros de muchas jurisdicciones eclesiales a nivel nacional,
donde se ha reflexionando, organizando y buscando concretizar ”el rostro y las
manos” de la misericordia y providencia de Dios en la atención a los mas
necesitados. La comunidad de creyentes, organizada en torno a la caridad, desde
las Cáritas parroquiales, promueven mayores y mejores compromisos para que el
Don de la vida y la dignidad de toda persona, sobre todo de los más pobres,
pueda desarrollarse plena e integralmente.

SS Benedicto XVI en su encíclica Cáritas in Veritate nos afirma que: “todos los
hombres perciben el impulso interior de amar de manera auténtica; amor y
verdad nunca los abandonan completamente, porque son la vocación que Dios
ha puesto en el corazón y en la mente de cada ser humano. Jesucristo purifica y
libera de nuestras limitaciones humanas la búsqueda del amor y la verdad, y nos
desvela plenamente la iniciativa de amor y el proyecto de vida verdadera que Dios
ha preparado para nosotros” (CV n.1). Queremos que las cáritas parroquiales
puedan inflamar y sostener este impulso interior de toda persona por hacer el
bien y servir a sus hermanos. Esta vocación, a salir de uno mismo, a donarse al
otro, a dar la vida por amor, como Jesucristo nos ha enseñado, es la base y el
fundamento para organizar la caridad, las Cáritas parroquiales.

Los hombres, destinatarios del amor de Dios, se convierten en sujetos de caridad,


llamados a hacerse ellos mismos “instrumentos de la gracia para difundir la
caridad de Dios y para tejer redes de caridad” (CIV n.5). Todo ser humano está
llamado al amor, al servicio, al encuentro fraterno y solidario con el otro, a la
donación de sí mismo, este es su deseo y aspiración mas profunda. Todo ser
humano camina hacia el amor, hacia el encuentro total y definitivo con su
Creador, en la caridad vivida en la verdad, todo hombre se hace imagen y
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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

semejanza de Dios y se realiza plenamente. Las cáritas parroquiales están


llamadas a ser verdaderas escuelas de santidad, solidaridad y comunión que
permita a la comunidad eclesial a vivir el mandamiento del amor, desde una
nueva imaginación de la caridad.

“... la santidad no es otra cosa que la caridad plenamente vivida…ha difundido


ampliamente su amor en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo, que
nos ha sido dado (cfr Rm 5,5); por esto el primer don y el más necesario es la
caridad, con la que amamos a Dios sobre todas las cosas y al prójimo por amor a
Él”, nos decía hace unas semanas el Papa Benedicto XVI. Por lo tanto la Caridad
vivida en comunión eclesial se convierte en confesión y testimonio de nuestra fe,
hace visible el amor que Dios tiene por todos y cada una de las personas. La
actividad caritativa cristiana, más allá de su competencia profesional, debe
basarse en la experiencia de un encuentro personal con Cristo, cuyo amor ha
tocado el corazón del creyente suscitando en él el amor por el prójimo. El
programa del cristiano – el programa del buen Samaritano, el programa de Jesús
– es “un corazón que ve”. Este corazón ve de dónde hay necesidad de amor y
actúa de modo consecuente.

Retomando el mensaje de la encíclica Deus Cáritas est, SS Benedicto XVI nos


confirma que "para la Iglesia, la caridad no es una especie de actividad de
asistencia social que también se podría dejar a otros, sino que pertenece a su
naturaleza y es manifestación irrenunciable de su propia esencia". (n. 25)

Espero que este valioso material, fruto de lo trabajado todos estos años y del rico
magisterio social de nuestra Santa Iglesia Católica pueda ayudarnos a vivir en
santidad nuestro discipulado y misión en favor de a vida. Somos conscientes de
que “toda la Iglesia, en todo su ser y obrar, cuando anuncia, celebra y actúa en la
caridad, tiende a promover el desarrollo integral del hombre” (CIV n.11)

Que Santa María, madre de la Caridad, los acompañe y los guíe en este ministerio
de acoger y servir a los preferidos del Señor, en los cuales su Hijo en persona ha
querido quedarse. María madre del Amor, ruega por nosotros.

Mons. Miguel Irizar Campos


Presidente del Directorio
Cáritas del Perú

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Orientaciones Generales
Iglesia Comunión y las Cáritas Parroquiales
La Oficina de Asesoría Pastoral de Cáritas del Perú, pone a tu disposición, este
documento que puede servir para que las Cáritas diocesanas tengan un material
(primera parte) que les sirva para afianzar la Doctrina Social de la Iglesia y hacer
realidad nuestra “Misión del Plan Estratégico”

Misión del Plan Estratégico


“Nuestra misión es el servicio de la caridad y la solidaridad -que es ley de vida del
Reino de Dios que va madurando aquí y ahora en la historia hacia su plenitud-
animando, acompañando y comprometiéndonos, a la luz del Evangelio y desde la
Doctrina Social de la Iglesia, en el proceso de transformación de la sociedad
peruana en orden al bien común, viviendo como auténticos discípulos misioneros
de Jesucristo; creando conciencia social e impulsando procesos de promoción
integral de los pobres y excluidos para que asuman un liderazgo cristiano al
servicio de sus comunidades; defendiendo el don de la vida desde su concepción
hasta su término natural, la familia y la creación, promoviendo el uso racional de
los recursos naturales en los procesos de desarrollo sostenible.”

Dentro de la estructura de la Diócesis están las Cáritas Parroquiales, como


entidades más vinculadas al quehacer de las parroquias y por lo tanto a la acción
pastoral de las Diócesis, también vinculadas con las Cáritas diocesanas.

Además de la parte doctrinal, la segunda y tercera parte son un servicio directo a


las Cáritas Parroquiales para que sean fruto de una “fe” activa que haga una
realidad la propuesta profética del Beato Juan Pablo II que en la Novo Millenio
Ineunte, nos invita a “Construir una Iglesia Comunión” y ciertamente uno de los
medios son las Cáritas Parroquiales.

Ponemos en tus manos este documento de trabajo y nos encomendamos a


Nuestro Señor y su Santísima Madre, bajo cuya protección ponemos este
modesto trabajo.

Oficina de Asesoría Pastoral


Cáritas del Perú

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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Marco Doctrinal
y Orientaciones Pastorales
de la Iglesia
Este material que aquí te entregamos, es para que, poco a poco, lo reflexiones y
así avances en el conocimiento de la Doctrina Social de la Iglesia.

Cada sesión te da un tema a reflexionar y tiene unas preguntas para profundizar e


ir buscando líneas de acción.

Si bien es cierto, que el material está tomado del Plan Estratégico de la Red
Cáritas en el Perú, de tu reflexión y asimilación, saldrá la estructura y acción de tu
propia Cáritas Parroquial y allí está la riqueza que da pluralidad y al mismo tiempo
la unidad.

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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Marco Doctrinal 2. Al servicio de la verdad de la vida plena del hombre


La Iglesia, pueblo de Dios peregrino en la tierra, se ha adentrado en el Tercer
Milenio de la era cristiana guiada por Cristo, el “gran Pastor” (Heb 13,20).
Nosotros, integrantes de la Cáritas peruana y parte activa de la Iglesia militante,
Primera Sesión confirmamos nuestra fe y nuestra esperanza en el único Salvador y fin de la
historia.
Introducción
“Jesús vino a traer la salvación integral, que abarca al hombre entero y a todos los
Que todos los miembros de la Iglesia, sepamos discernir los signos de los tiempos hombres, abriéndoles a los admirables horizontes de la filiación divina”3. Por ello,
y crezcamos en la fidelidad al Evangelio; que nos preocupemos en compartir en la la Iglesia sigue interpelando hoy a todos los hombres de todos los pueblos, porque
caridad las angustias y las tristezas, las alegrías y las esperanzas de los hombres, sólo en el nombre de Cristo se da al hombre la salvación.
y así les mostremos el camino de la salvación
En relación al desarrollo humano, Benedicto XVI acude al magisterio de la
encíclica Populorum Progressio para señalar que “el anuncio de Cristo es el
1. Al alba del Tercer Milenio
primero y principal factor del desarrollo” que, para ser integral, debe ser un
En los albores del Tercer Milenio de la era cristiana estamos llamados a responder “desarrollo de todo el hombre y de todos los hombres” en el paso de “condiciones
al desafío de transformar la realidad social con la fuerza del Evangelio, dando menos humanas a condiciones más humanas”4. Para que este proceso sea
testimonio como seguidores comprometidos de Jesucristo. pleno, se necesita un encuentro personal con Jesucristo. A partir de él estamos
llamados, por un lado, a superar una visión que reduce el desarrollo de los
Somos conscientes de que el anuncio de su Palabra, “buena nueva” de salvación, pueblos a lo económico, a lo político, al asistencialismo social; y, por otro, a ser
de amor, de justicia y de paz, no encuentra fácil acogida en el mundo de hoy, testigos y misioneros del Señor en un mundo que ha perdido el sentido de la vida,
aquejado aún por tantas miserias e injusticias. Por esto, el hombre de nuestro como nos recuerda la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano y del Caribe
tiempo tiene más que nunca necesidad del Evangelio: de la fe que salva, de la celebrada en Aparecida. La pobreza de nuestro continente radica en el egoísmo
esperanza que ilumina, de la caridad que ama y actúa sin condiciones ni personal y estructural que unas veces no conoce y otras rechaza abiertamente el
retribuciones de tipo material. mandamiento del amor.

Este Evangelio -esta buena noticia- es, sobre todo, un hombre: Jesús de Nazaret, El magisterio social de la Iglesia nos enseña que “la evangelización es promoción
en quien tenemos la gracia de reconocer a Dios que se ha hecho uno de nosotros humana”. Así podemos superar posturas dualistas como: “primero formamos al
para ser “camino, verdad y vida” (Jn 14, 6) para todos. Por lo tanto, no podemos hombre y después al cristiano”, o: “no es suficiente la caridad, se necesita
dejar de mirarlo todo desde Él; y en Él, hacernos “expertos en humanidad”, primero la justicia”. Porque el hombre no está completo si no es cristiano, y el
indicando a cada persona el sentido auténtico de su vida: “el hombre que vive en cristiano es el hombre completo. Del mismo modo, la caridad no puede ser
plenitud su dignidad da gloria a Dios, que se la ha donado”1. injusta, y la justicia no es algo que el hombre pueda darse a sí mismo. “Es
necesario partir de Cristo para que el hombre se encuentre a sí mismo, su rostro
Nuestra misión como Cáritas es trabajar por devolver al hombre su plena dignidad humano, y, por consiguiente, para que pueda vivir una solidaridad con los
personal, y “el amor –«caritas»– es la fuerza extraordinaria que nos ha de mover a demás”5. “La solidaridad es fruto de la comunión que se funda en el misterio de
comprometernos con valentía y generosidad en el campo de la justicia y de la paz. Dios uno y trino, y en el Hijo de Dios encarnado y muerto por todos. Se expresa en
Una «caritas» que debe defender la verdad, proponerla con humildad y convicción, el amor del cristiano que busca el bien de los otros, especialmente de los más
y testimoniarla con la vida”2. necesitados”6.
1
Renato Card. Martino, Presentación del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia 3
Redemptoris missio, 11
2 4
Cf. Caritas in veritate, 1 Cf. Caritas in veritate, 8
5
P. Ángel L. Lorente, “Sin Cristo, no puede haber desarrollo”, en Diario Hoy (04-08-2009), Tarapoto
6
Ecclesia in America, 52

14 15
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Cáritas, en estado permanente de misión, camina junto a toda la humanidad por


3. Bajo el signo de la solidaridad, del respeto y del amor los senderos de la historia, viviendo en el mundo aunque sin ser del mundo (cf. Jn
El amor tiene por delante un amplio trabajo al que la Iglesia quiere contribuir 17,14-16). El Concilio Vaticano II, la voz más autorizada de la Iglesia, ha querido
también con su Doctrina Social, que concierne a todo el hombre y se dirige a todos dar una elocuente demostración de solidaridad, respeto y amor por la familia
los hombres. Existen muchos hermanos necesitados que esperan ayuda, muchos humana instaurando con ella un diálogo acerca de todos estos problemas para
oprimidos que esperan justicia, muchos desocupados que esperan trabajo, “aclarárselos a la luz del Evangelio y poner a disposición del género humano el
muchos pueblos que esperan respeto: “¿Cómo es posible que, en nuestro tiempo, poder salvador que la Iglesia –conducida por el Espíritu Santo– ha recibido de su
haya todavía quien se muere de hambre; quien está condenado al analfabetismo; Fundador. Es la persona del hombre la que hay que salvar. Es la sociedad humana
quien carece de la asistencia médica más elemental; quien no tiene techo donde la que hay que renovar”12. Pero esto implica un gran reto para todos y cada uno de
cobijarse? El panorama de la pobreza puede extenderse indefinidamente si a las nosotros: la decisión de recorrer juntos un itinerario de conversión que nos lleve a
antiguas pobrezas añadimos las nuevas, que afectan a menudo a ambientes y ser discípulos de Jesucristo y testigos de su Amor al hombre, y particularmente al
grupos no carentes de recursos económicos, pero expuestos a la desesperación hombre que sufre: “Porque tuve hambre y ustedes me dieron de comer; tuve sed y
del sin sentido, a la insidia de la droga, al abandono en la edad avanzada o en la me dieron de beber; estaba de paso y me alojaron; desnudo y me vistieron;
enfermedad, a la marginación o a la discriminación social […] ¿Podemos quedar enfermo y me visitaron; preso y me vinieron a ver… Les aseguro que cada vez que
al margen ante las perspectivas de un desequilibrio ecológico que hace lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo” (Mt 25,
inhabitables y enemigas del hombre vastas áreas del planeta? ¿O ante los 35-36.40).
problemas de la paz, amenazada a menudo por las pesadillas de las guerras? ¿O
frente a la violación de los derechos humanos fundamentales de tantas
personas, especialmente de los niños?”7.
Reflexión:
Llegados a este punto, debemos preguntarnos: ¿cómo podemos contribuir como
1. Se habla mucho del desarrollo económico del país, pero sigue
Cáritas a la solución de los urgentes problemas sociales y políticos, y responder al
habiendo pobres:
gran desafío de la pobreza y de la miseria? “Los problemas de América Latina y
del Caribe, así como los del mundo de hoy –nos recuerda Benedicto XVI en ¿Crees tú que es una solución el que Cáritas sea una entidad
Aparecida– son múltiples y complejos y no se pueden afrontar con programas de beneficencia o debe ser una entidad promotora del
generales. Sin embargo, la cuestión fundamental sobre el modo como la Iglesia, desarrollo integral del hombre?
iluminada por la fe en Cristo, deba reaccionar a estos desafíos, nos concierne a Elabora cinco frases que reflejen este último pensamiento.
todos”8.
2. Investiga a tu alrededor e identifica cuáles de estas situaciones se
El mismo Papa, en su encíclica Caritas in veritate, nos propone lineamientos están dando y ponlas en común con tus compañeros.
generales de una acción fecunda y renovadora al hablar de “la caridad como 3. Prioriza la lista y comiencen a trabajar, uno por uno.
expresión auténtica de humanidad y como elemento de importancia
fundamental en las relaciones humanas, también las de carácter público”9;
caridad que es la vía maestra de la doctrina social de la Iglesia10; caridad que se
debe practicar a la luz de la verdad, sin la cual caería en un mero
sentimentalismo11 sin respuestas a estos desafíos.

7
Novo millenio ineunte, 50.51
8
Benedicto XVI, Discurso inaugural de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y
del Caribe - Aparecida, 4
9
Caritas in veritate, 3
10
Cf. Ibid., 2
11 12
Cf. Ibid., 3 Gaudium et spes, 3

16 17
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Segunda Sesión 1. Fecundar y fermentar la sociedad con el Evangelio


Doctrina social: una luz para la misión de la iglesia en el mundo Con su Doctrina Social, la Iglesia se hace cargo del anuncio que el Señor le ha
confiado: el Evangelio del Reino. En cuanto Evangelio que resuena mediante la
Iglesia en el hoy del hombre17, la Doctrina Social es palabra que ilumina y libera.
Esto significa que posee la eficacia de verdad y de gracia del Espíritu de Dios, que
Introducción penetra los corazones disponiéndolos a cultivar pensamientos y proyectos de
La Doctrina Social de la Iglesia es el esfuerzo de ésta, para hacernos amor, de justicia, de libertad y de paz.
responsables del mundo y de la unidad.
El Concilio Vaticano II nos recuerda que, con su enseñanza social, la Iglesia quiere
La Historia de Israel nos muestra el amor de Dios por su pueblo. Hoy nosotros anunciar y actualizar el Evangelio en la compleja red de las relaciones sociales.
somos el Pueblo de Dios. Y de la lectura, ¿qué descubres como proyecto de Dios Busca fecundar y fermentar la sociedad misma con el Evangelio18. “Para ello es
para nuestra vida, tanto en el plano personal como el proyecto pastoral? importante que en América los agentes de evangelización (obispos, sacerdotes,
profesores, animadores pastorales, etc.) asimilen este tesoro que es la doctrina
social de la Iglesia e, iluminados por ella, se hagan capaces de leer la realidad
La Doctrina Social de la Iglesia es un conjunto de normas y principios referentes a actual y de buscar vías para la acción”19.
la realidad social, política y económica de la humanidad, basada en el Evangelio y
en el Magisterio de la Iglesia Católica. El Compendio de la Doctrina Social de la
Iglesia y el Catecismo de la Iglesia Católica la definen como un “cuerpo doctrinal
2. Evangelización y promoción humana
renovado que se va articulando a medida que la Iglesia, en la plenitud de la
Palabra revelada por Jesucristo y mediante la asistencia del Espíritu Santo, lee los “En este esfuerzo por conocer el mensaje de Cristo y hacerlo guía de la propia vida
hechos según se desenvuelven en el curso de la historia”13. hay que recordar que la evangelización ha ido unida siempre a la promoción
humana y a la auténtica liberación cristiana. «Amor a Dios y amor al prójimo se
“Nada, pues, tiene de extraño que la Iglesia Católica, siguiendo el ejemplo y funden entre sí: en el más humilde encontramos a Jesús mismo y en Jesús
cumpliendo el mandato de Cristo, haya mantenido constantemente en alto la encontramos a Dios»20. Por lo mismo, será también necesaria una catequesis
antorcha de la caridad durante dos milenios, es decir, desde la institución del social y una adecuada formación en la doctrina social de la Iglesia. Es muy útil
antiguo diaconado hasta nuestros días, tanto con la enseñanza de sus preceptos para ello el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia. La vida cristiana no se
como con sus ejemplos innumerables; caridad que, uniendo armoniosamente las expresa solamente en las virtudes personales, sino también en las virtudes
enseñanzas y la práctica del mutuo amor, realiza de modo admirable el mandato sociales y políticas”21.
de ese doble dar que compendia por entero la doctrina y la acción social de la
Iglesia”14. “La Iglesia, con su doctrina social, no sólo no se aleja de la propia misión, sino que
es estrictamente fiel a ella. La redención realizada por Cristo y confiada a la
La Iglesia, partícipe de los gozos y de las esperanzas, de las angustias y de las misión salvífica de la Iglesia es ciertamente de orden sobrenatural. Esta
tristezas de los hombres, es solidaria con cada hombre y con cada mujer de dimensión no es expresión limitativa, sino integral de la salvación”22. “Lo
cualquier lugar y tiempo, y les lleva la alegre noticia del Reino de Dios que con sobrenatural no debe ser concebido como una entidad o un espacio que
Jesucristo ha venido y viene en medio de ellos15. Para la humanidad, la Iglesia es comienza donde termina lo natural, sino como la elevación de éste, de tal manera
–en este mundo– el sacramento del amor de Dios, “el proyecto visible del amor de que nada del orden de la creación y de lo humano es extraño o queda excluido del
Dios hacia la humanidad”16 y, por ello, de la esperanza más grande, que activa y
sostiene todo proyecto y empeño de auténtica liberación y promoción humana. 17
Cf. Juan Pablo II, Homilía de la Misa de Pentecostés - 1er. Centenario de la Rerum novarum, (19-05-91)
18
Cf. Gaudium et spes, 40
19
13
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 104 Ecclesia in America, 54
20
14
Mater et magistra, 6 Deus caritas est, 15
15 21
Cf. Gaudium et spes, 1 Benedicto XVI, Discurso inaugural de Aparecida, 3
16 22
Pablo VI, Discurso del 22 de Junio de 1973 Evangelii nuntiandi, 9

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orden sobrenatural y teologal de la fe y de la gracia, sino más bien es en él “Por esta sola razón, los pobres merecen una atención preferencial, cualquiera
reconocido, asumido y elevado”23. que sea la situación moral o personal en que se encuentren. Hechos a imagen y
semejanza de Dios, para ser sus hijos, esta imagen está ensombrecida y aún
Benedicto XVI, en su encíclica Caritas in veritate, nuevamente recuerda las escarnecida. Por eso Dios toma su defensa y los ama. Es así como los pobres son
palabras de su predecesor Pablo VI, quien reconoció la estrecha relación entre el los primeros destinatarios de la misión, y su evangelización es, por excelencia,
desarrollo y la evangelización. “Entre evangelización y promoción humana señal y prueba de la misión de Jesús”29.
(desarrollo, liberación) existen efectivamente lazos muy fuertes”24. “El testimonio
de la caridad de Cristo mediante obras de justicia, paz y desarrollo forma parte de “Acercándonos al pobre para acompañarlo y servirlo hacemos lo que Cristo nos
la evangelización, porque a Jesucristo le interesa todo el hombre”25. enseñó al hacerse hermano nuestro, pobre como nosotros. Por eso, el servicio a
los pobres es la medida privilegiada, aunque no excluyente, de nuestro
seguimiento a Cristo. El mejor servicio al hermano es la evangelización que lo
3. Hacia una nueva sociedad reconciliada en la justicia y en el amor dispone a realizarse como hijo de Dios, lo libera de las injusticias y lo promueve
Se requiere que las obras de misericordia estén acompañas por la búsqueda de integralmente”30; asimismo lo capacita para trabajar, junto con los miembros de
una verdadera justicia social, que vaya elevando el nivel de vida de los su comunidad, a favor de un auténtico desarrollo humano integral.
ciudadanos, promoviéndolos como sujetos de su propio desarrollo. En su
encíclica Deus caritas est el Papa Benedicto XVI ha tratado con claridad La opción preferencial por los pobres es uno de los rasgos que marca la fisonomía
inspiradora la compleja relación entre justicia y caridad. Ahí nos dice que “el de la Iglesia latinoamericana y caribeña y, por tanto, una condición sine qua non
orden justo de la sociedad y del Estado es una tarea principal de la política”26 y no para la labor de Cáritas en el Perú. Juan Pablo II, dirigiéndose a nuestro
de la Iglesia. Pero la Iglesia “no puede ni debe quedarse al margen en la lucha por continente, sostuvo que “convertirse al Evangelio, para el pueblo cristiano que
la justicia”27. vive en América, significa revisar todos los ambientes y dimensiones de su vida,
especialmente todo lo que pertenece al orden social y a la obtención del bien
común”31.
4. Opción preferencial por los pobres y excluidos
La III Conferencia del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, reunida en Como discípulos misioneros de Jesucristo estamos llamados a descifrar y
Puebla, ya identificó la urgencia de esta opción preferencial de Cristo por los más contemplar en los rostros sufrientes de nuestros hermanos el rostro de Cristo que
pobres y excluidos, que debe concretarse en el compromiso evangélico de la nos llama a servirlo en ellos: “los rostros sufrientes de los pobres son rostros
Iglesia. Este compromiso está fundado en el testimonio mismo de Cristo: un sufrientes de Cristo”32. “Todo lo que tenga que ver con Cristo tiene que ver con los
compromiso con los más necesitados. Se nos recuerda que “la Iglesia debe mirar, pobres, y todo lo relacionado con los pobres reclama a Jesucristo: «Cuanto
por consiguiente, a Cristo cuando se pregunta cuál ha de ser su acción hicieron con uno de estos mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicieron» (Mt
evangelizadora. 25,40). Juan Pablo II destacó que este texto bíblico «ilumina el misterio de
Cristo»33. Porque en Cristo el grande se hizo pequeño, el fuerte se hizo frágil, el rico
El Hijo de Dios demostró la grandeza de ese compromiso al hacerse hombre, pues se hizo pobre”34.
se identificó con los hombres haciéndose uno de ellos, solidario con ellos y
asumiendo la situación en que se encuentran, en su nacimiento, en su vida, y “Sólo la cercanía que nos hace amigos nos permite apreciar profundamente los
–sobre todo– en su pasión y muerte, donde llegó a la máxima expresión de la valores de los pobres de hoy, sus legítimos anhelos y su modo propio de vivir la fe.
pobreza”28. La opción por los pobres debe conducirnos a la amistad con los pobres. Día a día,
los pobres se hacen sujetos de la evangelización y de la promoción humana
23 29
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 64 Ibid., 1142
24 30
Evangelii nuntiandi, 29 Ibid., 1145
25 31
Caritas in veritate, 15 Ecclesia in America, 27
26 32
Deus caritas est, 28 Documento de Santo Domingo, 178
27 33 Novo millenio ineunte, 49
Documento de Aparecida, 385
28 34
Documento de Puebla, 1141 Documento de Aparecida, 393

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integral: educan a sus hijos en la fe, viven una constante solidaridad entre 6. Visión del desarrollo humano integral
parientes y vecinos, buscan constantemente a Dios y dan vida al peregrinar de la “Cada uno encuentra su propio bien asumiendo el proyecto que Dios tiene sobre
Iglesia. A la luz del Evangelio reconocemos su inmensa dignidad y su valor él, para realizarlo plenamente: en efecto, encuentra en dicho proyecto su verdad
sagrado a los ojos de Cristo, pobre como ellos y excluido entre ellos. Desde esta y, aceptando esta verdad, se hace libre (cf. Jn 8,22)”38. Y éste es el proyecto de
experiencia creyente, compartiremos con ellos la defensa de sus derechos”35. Dios: una Historia de Salvación, una Historia que empieza en Israel y que avanza
hasta nuestro momento presente, en el que estamos llamados –como nuevo
Pueblo de Dios, como Cáritas– a ser artífices y protagonistas.
5. Visión del desarrollo humano integral
Con la encíclica Populorum progressio del Papa Pablo VI la reflexión y “Sobre todo el fondo de la experiencia religiosa universal se destaca la Revelación
preocupación sobre el desarrollo humano entra con fuerza en el Magisterio de la que Dios hace progresivamente de Sí mismo al pueblo de Israel. Esta Revelación
Iglesia. Frente a ideologías emergentes que valoraban al hombre sólo por su responde de un modo inesperado y sorprendente a la búsqueda humana de lo
dimensión productiva o económica, Pablo VI señala que el verdadero desarrollo divino, gracias a las acciones históricas en las que se manifiesta el amor de Dios
humano debe considerar a “todos los hombres y a todo el hombre”36. por el hombre”39.

Benedicto XVI, en Caritas in veritate, retomando toda la extensa y profunda Dios crea, por un acto de su amor, al hombre y a la mujer (Cf. Gen 1,26-27) y les da
reflexión sobre este tema, nos señala que “el desarrollo humano integral como la misión de dominar la tierra. Por ello, están llamados a ser instrumento eficaz de
vocación exige también que se respete la verdad. La vocación al progreso impulsa la gratuidad divina en el jardín en el que Dios los ha puesto como cultivadores y
a los hombres a «hacer, conocer y tener más para ser más». Pero la cuestión es: guardianes de la creación. “El libro del Génesis nos propone algunos
¿qué significa «ser más»? A esta pregunta, Pablo VI responde indicando lo que fundamentos de la antropología cristiana: la inalienable dignidad de la persona
comporta esencialmente el «auténtico desarrollo»: «debe ser integral, es decir, humana, que tiene su raíz y su garantía en el designio creador de Dios; la
promover a todos los hombres y a todo el hombre». sociabilidad constitutiva del ser humano, que tiene su prototipo en la relación
originaria entre el hombre y la mujer, cuya unión es la expresión primera 21de la
En la concurrencia entre las diferentes visiones del hombre que, más aún que en comunión de personas humanas; el significado del actuar humano en el mundo
la sociedad que vivió Pablo VI, se proponen también en la de hoy, la visión que está ligado al descubrimiento y al respeto de las leyes de la naturaleza que
cristiana tiene la peculiaridad de afirmar y justificar el valor incondicional de la Dios ha impreso en el universo creado, para que la humanidad lo habite y lo
persona humana y el sentido de su crecimiento. La vocación cristiana al custodie según su proyecto. Esta visión de la persona humana, de la sociedad y de
desarrollo ayuda a buscar la promoción de todos los hombres y de todo el hombre. la historia hunde sus raíces en Dios y está iluminada por la realización de su
Pablo VI escribe: «lo que cuenta para nosotros es el hombre, cada hombre, cada designio de salvación”40.
agrupación de hombres, hasta la humanidad entera». La fe cristiana se ocupa del
desarrollo, no apoyándose en privilegios o posiciones de poder, ni tampoco en los Más tarde el hombre, con su desobediencia, rompe su amistad con Dios (cf. Gen
méritos de los cristianos, que ciertamente se han dado y también hoy se dan, 3,1-24) apartándose de su plan de salvación y anteponiendo su propia voluntad,
junto con sus naturales limitaciones, sino sólo en Cristo, al cual debe remitirse de manera que comienza a entender el dominen la tierra como el apoderarse de
toda vocación auténtica al desarrollo humano integral. El Evangelio es un ella en provecho propio. “Desobedecer a Dios significa apartarse de su mirada de
elemento fundamental del desarrollo porque, en él, Cristo, «en la misma amor y querer administrar por cuenta propia la existencia y el actuar en el mundo.
revelación del misterio del Padre y de su amor, manifiesta plenamente el hombre La ruptura de la relación de comunión con Dios provoca la ruptura de la unidad
al propio hombre»”37. interior de la persona humana, de la relación interior del hombre y la mujer y de la
relación armoniosa entre los hombres y las demás criaturas. De modo que en
esta ruptura originaria debe buscarse la raíz más profunda de todos los males
que atacan las relaciones sociales entre las personas humanas, de todas las
35 38
Ibid., 398 Ibid., 1
36 39
Populorum progressio, 14 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia,
37 40
Caritas in veritate, 18 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 37

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situaciones que en la vida económica y política atentan contra la dignidad de la amor gratuito de Dios por la humanidad se revela, ante todo, como amor que tiene
persona, contra la justicia y contra la solidaridad”41. como origen al Padre, de quien todo proviene; como comunicación gratuita que el
Hijo hace de este amor, volviéndose a entregar al Padre y entregándose a los
Sin embargo, Dios en un acto de misericordia, a través de Abraham, elige un hombres; como fecundidad siempre nueva del amor divino que el Espíritu Santo
pueblo para establecer una Alianza que lleve al ser humano a restablecer la infunde en el corazón de los hombres (cf. Rom 5,5).
unidad perdida. Dios inicia un nuevo proyecto de recreación humana,
manifestándose como Salvador en los acontecimientos de la historia concreta de En este mismo sentido, el Papa, en su encíclica Caritas in veritate, denuncia una
los pueblos. De esta manera, la fe de Israel se expresa como una comprensión e “visión de la existencia que antepone a todo la productividad y la utilidad” e invita
interpretación histórica de la acción de Dios, que está presente, actúa y dirige los a considerar “la sorprendente experiencia del don”, pues “el ser humano está
sucesos42. hecho para el don”. Explica el Santo Padre cómo el desarrollo, si quiere ser
auténticamente humano, necesita dar espacio al principio de gratuidad,
En el libro del Éxodo, cuando el pueblo traiciona nuevamente la Alianza, el Señor señalando la necesidad de personas abiertas al don recíproco43.
dirige a Moisés estas palabras: “Bien vista tengo la aflicción de mi pueblo en
Egipto, y he escuchado su clamor en presencia de sus opresores; pues ya En Jesucristo tiene cumplimiento todo el designio del amor de Dios por el hombre
conozco sus sufrimientos. He bajado para librarle de la mano de los egipcios y cuando Él, asumiendo las consecuencias de nuestros pecados, se ofrece a Sí
para subirle de esta tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana mismo como víctima inocente de expiación con el sacrificio de su vida, cruento y
leche y miel” (Ex 3,7-8). La cercanía gratuita de Dios se manifiesta en la liberación oblativo en la cruz, incruento y propiciatorio en la Eucaristía.
de la esclavitud y en la promesa, que se convierte en acción histórica, de la que se
origina el proceso de identificación colectiva del pueblo del Señor, a través de la Todo cristiano -especialmente nosotros, agentes de la caridad–, para
conquista de la libertad y de la tierra que Dios le otorga. configurarse verdaderamente con el Maestro, “necesita asumir la centralidad del
mandamiento del amor, que Él quiso llamar suyo y nuevo: «Ámense los unos a los
Cuando el Pueblo se aparta igualmente de esta promesa y traiciona esta nueva otros, como yo los he amado» (Jn 15,12). Este amor, con la medida de Jesús, de
Alianza, Dios enviará a los profetas que denunciarán todo aquello que se opone a total don de sí, es distintivo de cada cristiano y característica de la Iglesia,
la realización del Pueblo de Dios, y anunciarán que en el cambio del corazón está comunidad discípula de Cristo, cuyo testimonio de caridad fraterna será el
la salvación. “Les daré un corazón nuevo y pondré en ustedes un espíritu nuevo: primero y principal anuncio: «reconocerán todos que son discípulos míos» (Jn 13,
les arrancaré de su cuerpo el corazón de piedra y les daré un corazón de carne. 35)”44. Es oportuno mencionar aquí a María, primera y ejemplar discípula, figura y
Infundiré mi espíritu en ustedes y haré que sigan mis preceptos, y que observen y modelo de la Iglesia, recordando que, desde los días de la primera evangelización
practiquen mis leyes. Ustedes habitarán en la tierra que yo he dado a sus padres. y en todas partes de nuestro continente americano, “el Evangelio ha sido
Ustedes serán mi Pueblo y yo seré su Dios” (Ez 36,26-28). anunciado presentando a la Virgen María como su realización más alta. Desde los
orígenes –en su advocación de Guadalupe- María constituyó el gran signo, de
Por otra parte, este amor a los pobres y la primacía de la justicia sobre el culto rostro maternal y misericordioso, de la cercanía del Padre y de Cristo, con quienes
encontraron amplio eco en el resto de la Biblia tras esta época profética, sobre ella nos invita a entrar en comunión”45.
todo en el mensaje evangélico (Mt 5,3.23-24; Lc 4,18; 6,20; Stgo 2,5-7).

8. La Iglesia, morada de la caridad


7. Jesucristo, cumplimiento del designio del amor de Dios Cáritas, a imagen de la Iglesia -expresión “…del Dios que tiene un rostro
Cuando llega la plenitud de los tiempos y Dios se revela a Sí mismo en el Hijo, el humano”46- no puede replegarse o vivir encerrada en sí misma, en sus cosas, al
Rostro de Dios, manifestado progresivamente en la historia de Israel, margen de un mundo al que ha de evangelizar y al que tiene que servir. Tres textos
resplandece plenamente en el Rostro de Jesucristo crucificado y resucitado. El
43
Cf. Caritas in veritate, 34
44
Documento de Aparecida, 138
41 45
Ibid., 27 Ecclesia in America, 11
42 46
Cáritas del Perú, Plan Estratégico 2003–2010, 2 Spe salvi, 31

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de Aparecida ilustran bien este tema: (I) “Se trata de confirmar, renovar y comunidades de una misma nación, entre las naciones y entre las diversas partes
revitalizar la novedad del Evangelio arraigado en nuestra historia desde un del Continente. Entre esos pecados se deben recordar el comercio de drogas, el
encuentro personal y comunitario con Jesucristo, que suscite discípulos y lavado de las ganancias ilícitas, la corrupción en cualquier ambiente, el terror de
misioneros. Ello no depende tanto de grandes programas y estructuras, sino de la violencia, el armamentismo, la discriminación racial, las desigualdades entre
hombres y mujeres nuevos que encarnen dicha tradición y novedad, como los grupos sociales, la irrazonable destrucción de la naturaleza. […] La mejor
discípulos de Jesucristo y misioneros de su Reino”47. (II) “A todos nos toca respuesta, desde el Evangelio, a esta dramática situación es la promoción de la
recomenzar desde Cristo, reconociendo que no se comienza a ser cristiano por solidaridad y de la paz, que hagan efectivamente realidad la justicia”53.
una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento,
con una Persona”48. (III) “Aquí está el reto fundamental que afrontamos: mostrar Caritas in veritate nos propone una idea novedosa cuando analiza la situación
la capacidad de la Iglesia para promover y formar discípulos y misioneros que económica actual y su relación con la pobreza: “No se trata sólo de remediar el
respondan a la vocación recibida y comuniquen por doquier el don del encuentro mal funcionamiento con las ayudas. No se debe considerar a los pobres como un
con Jesucristo”49. «fardo», sino como una riqueza incluso desde el punto de vista estrictamente
económico. No obstante, se ha de considerar equivocada la visión de quienes
La encíclica Deus caritas est señala igualmente que el amor necesita piensan que la economía de mercado tiene necesidad estructural de una cuota
organización, lo cual nos lleva al tema de la pastoral social como compromiso de pobreza y de subdesarrollo para funcionar mejor. Al mercado le interesa
organizado. “La Iglesia nunca puede sentirse dispensada del ejercicio de la promover la emancipación, pero no puede lograrlo por sí mismo, porque no puede
caridad como actividad organizada de los creyentes y, por otro lado, nunca habrá producir lo que está fuera de su alcance. Ha de sacar fuerzas morales de otras
situaciones en las que no haga falta la caridad, porque el hombre, más allá de la instancias que sean capaces de generarlas”54.
justicia, tiene y tendrá siempre necesidad de amor”50.
En Aparecida se plantea claramente el tema: “Nuestra opción por los pobres corre
el riesgo de quedarse en un plano teórico o meramente emotivo, sin verdadera
9. Tarea evangelizadora y Doctrina Social de la Iglesia incidencia en nuestros comportamientos y en nuestras decisiones. Es necesaria
En nuestros días, “la doctrina social, que propone una serie de principios para la una actitud permanente que se manifieste en opciones y gestos concretos, y evite
reflexión, criterios para el juicio y directrices para la acción, está enfocada en toda actitud paternalista. Se nos pide dedicar tiempo a los pobres, prestarles una
primer lugar a los miembros de la Iglesia. Es esencial que los fieles interesados en amable atención, escucharlos con interés, acompañarlos en los momentos más
la promoción humana tengan un conocimiento firme de este valioso conjunto de difíciles, eligiéndolos para compartir horas, semanas o años de nuestra vida, y
enseñanzas y lo hagan parte integrante de su misión evangelizadora [...] Los buscando, desde ellos, la transformación de su situación. No podemos olvidar
líderes cristianos en la Iglesia y en la sociedad, y especialmente hombres y que el mismo Jesús lo propuso con su modo de actuar y con sus palabras:
mujeres laicos con responsabilidades en la vida pública, necesitan estar «Cuando des un banquete, invita a los pobres, a los lisiados, a los cojos y a los
correctamente instruidos en esta enseñanza para que puedan inspirar y vivificar ciegos» (Lc 14, 13)”55. Sólo la cercanía que nos hace amigos nos permite apreciar
la sociedad civil y sus estructuras con la levadura del Evangelio”51. profundamente los valores de los pobres de hoy, sus legítimos anhelos y su modo
propio de vivir la fe. La opción por los pobres debe conducirnos a la amistad con
La doctrina social desde su dimensión profética, realiza una tarea de anuncio y los pobres56.
denuncia: anuncio de lo que la Iglesia posee como propio –una visión global del
hombre y de la humanidad–52 y denuncia “de los pecados sociales que claman al
cielo, porque generan violencia, rompen la paz y la armonía entre las

47
Documento de Aparecida, 11
48
Ibid., 12
49 53
Ibid., 14 Ecclesia in America, 56
50 54
Deus caritas est, 29 Caritas in veritate, 35
51
Ecclesia in Asia, 32 55 Documento de Aparecida, 397
52
Populorum progressio, 13 56 Documento de Aparecida, 398

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Tercera Sesión
La persona humana en el designio de Dios

Introducción
Más que nunca hay que tratar de buscar en la humanidad a la “persona”, en
medio de la masificación y de lo negativo que ha traído la globalización
despersonalizante.

“La Iglesia ve en el hombre, en cada hombre, la imagen viva de Dios mismo;


imagen que encuentra y está llamada a descubrir cada vez más profundamente
su plena razón de ser en el misterio de Cristo, imagen perfecta de Dios, revelador
de Dios al hombre y del hombre a sí mismo. A este hombre, que ha recibido de
Dios mismo una incomparable e inalienable dignidad, es a quien la Iglesia se
dirige y le presta el servicio más alto y singular recordándole constantemente su
Reflexión: altísima vocación, para que sea cada vez más consciente y digno de ella. Cristo,
Hijo de Dios, «con su encarnación se ha unido, en cierto modo, con todo
1. Mi trabajo en Cáritas ¿es o refleja la misericordia de Dios para la hombre»57; por ello, la Iglesia reconoce como su tarea principal hacer que esta
humanidad? unión pueda actuarse y renovarse continuamente. En Cristo Señor la Iglesia
señala y desea recorrer ella misma el camino del hombre58, e invita a reconocer en
2. ¿Es nuestra acción caritativa un hacer cosas o dar cosas? O ¿es todos, cercanos o lejanos, conocidos o desconocidos, y sobre todo en el pobre y
la búsqueda para promover a la persona total? en el que sufre, un hermano «por quien murió Cristo» (1Cor 8,11; Rom 14,15)”59.

La persona humana es la protagonista de la vida social. Lejos de ser un objeto y un


elemento puramente pasivo de la vida social, el hombre es y debe permanecer
como su sujeto, su fundamento y su fin60.

El hombre, comprendido en su realidad histórica concreta, representa el alma y el


corazón de la enseñanza social católica61. Toda la doctrina social se desarrolla a
partir del principio que afirma la inviolable dignidad de la persona humana62,
tutelándola frente a todo relativismo reductivo.

El hombre es, por tanto, nuestro primer capital: “Quisiera recordar a todos, en
especial a los gobernantes que se ocupan en dar un aspecto renovado al orden
económico y social del mundo, que el primer capital que se ha de salvaguardar y

57
Gaudium et spes, 22
58
Cf. Redemptor hominis, 14
59 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 105
60 Cf. Pío XII, Radio Mensaje de Navidad (24-12-1944)
61
Cf. Centesimus annus, 11
62
Cf. Mater et magistra, 220

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valorar es el hombre, la persona en su integridad, pues el hombre es el autor, el El origen creado del hombre no es ni mucho menos un tema secundario o
centro y el fin de toda la vida económico-social”63. sobreentendido; por el contrario, va a ser un tema crucial de debate y
determinante en el desarrollo de la Doctrina Social en los años sucesivos. No en
1. Dimensiones de la persona humana vano el Papa dedica todo el sexto capítulo de la encíclica Caritas in veritate a la
problemática del desarrollo de los pueblos y la técnica, centrando la cuestión
La doctrina social de la Iglesia se centra, iluminada desde la revelación bíblica, en prioritaria en la bioética. El Papa afirma: “Este es un ámbito muy delicado y
los aspectos principales e inseparables de la persona humana para captar las decisivo, donde se plantea con toda su fuerza dramática la cuestión
facetas más importantes de su misterio y de su dignidad. No han faltado en el fundamental: si el hombre es un producto de sí mismo o si depende de Dios”72. Fe
pasado, y aún se asoman hoy dramáticamente en nuestra historia, múltiples y razón, inmanencia y trascendencia, cuerpo y espíritu son realidades
concepciones reductivistas, a veces de carácter ideológico, que tienen en común complementarias y nunca excluyentes.
el hecho de ofuscar la imagen del hombre acentuando sólo algunas de sus
características, con perjuicio de todas las demás64. “Sólo con la caridad, iluminada por la luz de la razón y de la fe, es posible
conseguir objetivos de desarrollo con un carácter más humano y humanizador. El
Frente a esto, la doctrina social se hace cargo de todas las dimensiones del compartir los bienes y recursos, de lo que proviene el auténtico desarrollo, no se
misterio del hombre, que exige ser considerado en la plena verdad de su asegura sólo con el progreso técnico y con meras relaciones de conveniencia,
existencia, de su ser personal y, a la vez, de su ser comunitario y social65. sino con la fuerza del amor que vence al mal con el bien (cf. Rom 12,21) y abre la
conciencia del ser humano a relaciones recíprocas de libertad y de
Ya en los años sesenta, Pablo VI había percibido y señalado que “la cuestión responsabilidad”73.
social ha tomado dimensión mundial”66, y “siguiendo esta línea, hoy es preciso
afirmar que la cuestión social se ha convertido radicalmente en una cuestión En este sentido, “razón y fe se ayudan mutuamente. Sólo juntas salvarán al
antropológica”67. hombre. Atraída por el puro quehacer técnico, la razón sin la fe se ve avocada a
perderse en la ilusión de su propia omnipotencia. La fe sin la razón corre el riesgo
En este sentido debemos entender que el auténtico desarrollo del hombre de alejarse de la vida concreta de las personas”74.
concierne de manera unitaria a la totalidad de la persona en todas sus
dimensiones68; y que no podemos confiar “todo el proceso de desarrollo sólo a la En todos nuestros programas sociales ciertamente visualizamos la vida corporal
técnica, porque de ese modo quedaría sin orientación”69. del hombre, su mundo material, sus necesidades, sus requerimientos, pero si
olvidamos su dimensión espiritual y trascendente, falsearíamos la verdadera
“Nuestra fidelidad al Evangelio nos exige proclamar en todos los areópagos caridad que busca el desarrollo integral “de todo el hombre y de todos los
públicos y privados del mundo, y desde todas las instancias de la vida y misión de hombres”75. Es precisamente esta dimensión espiritual la que abre al hombre a la
la Iglesia, la verdad sobre el ser humano y la dignidad de toda persona humana”70. trascendencia y a la realización de su plena vocación.

2. La unidad de la persona
3. La apertura de la persona a la trascendencia
“No hay desarrollo pleno ni un bien común universal sin el bien espiritual y moral
Una sociedad justa solamente puede realizarse en el respeto a la dignidad
de las personas, consideradas en su totalidad de alma y cuerpo”71.
trascendente de la persona humana. Ésta representa el fin último de la sociedad,
63
que está a ella ordenada. En ningún caso la persona humana puede ser
Caritas in veritate, 25
64
Cf. Octogesima adveniens, 26-39 instrumentalizada para fines ajenos a su mismo desarrollo, que puede realizar
65 Cf. Redemptor hominis, 14 plena y definitivamente sólo en Dios y en su proyecto salvífico. El hombre es la
66 Cf. Populorum progressio, 3
67
Caritas in veritate, 75
68 72
Cf. Populorum progressio, 14 Ibid., 74
69 73
Cf. Caritas in veritate, 14 Ibid., 9
70 74 Ibid., 74
Documento de Aparecida, 390
71 75 Populorum progressio, 20
Caritas in veritate, 76

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única criatura que Dios ama por sí misma76. De tal manera que la persona no Pero también “el recto ejercicio de la libertad personal exige unas determinadas
puede estar nunca subordinada a proyectos de carácter económico, social o condiciones de orden económico, social, jurídico, político y cultural que son, con
político, impuestos por autoridad alguna, ni siquiera en nombre del presunto demasiada frecuencia, desconocidas y violadas. Estas situaciones de ceguera y
progreso de la comunidad civil en su conjunto o de otras personas77. Los de injusticia gravan la vida moral y colocan tanto a los fuertes como a los débiles
auténticos ambios sociales son efectivos y duraderos sólo si están fundados en en la tentación de pecar contra la caridad. Al apartarse de la ley moral, el hombre
un cambio decidido de la persona en su totalidad y en su conducta. atenta contra su propia libertad, se encadena a sí mismo, rompe la fraternidad
con sus semejantes y se rebela contra la verdad divina. La liberación de las
“Dios revela el hombre al hombre; la razón y la fe colaboran a la hora de mostrarle injusticias promueve la libertad y la dignidad humana: no obstante, ante todo, hay
el bien, con tal que lo quiera ver; la ley natural, en la que brilla la Razón creadora, que apelar a las capacidades espirituales y morales de la persona y a la exigencia
indica la grandeza del hombre, pero también su miseria cuando desconoce el permanente de la conversión interior si se quieren obtener cambios económicos y
reclamo de la verdad moral”78. sociales que estén verdaderamente al servicio del hombre”83.

“El problema del desarrollo está estrechamente relacionado con el concepto que
tengamos del alma del hombre, ya que nuestro yo se ve reducido muchas veces a 5. Igual dignidad de todas las personas
la psique, y la salud del alma se confunde con el bienestar emotivo. Estas
reducciones tienen su origen en una profunda incomprensión de lo que es la vida “Dios no hace acepción de personas (Hch 10,34; cf. Rom 2,11; Gal 2,6; Ef 6,9),
espiritual y llevan a ignorar que el desarrollo del hombre y de los pueblos depende porque todos los hombres tienen la misma dignidad de criaturas a su imagen y
también de las soluciones que se den a los problemas de carácter espiritual. El semejanza84 La encarnación del Hijo de Dios manifiesta la igualdad de todas las
desarrollo debe abarcar, además de un progreso material, uno espiritual, porque personas en cuanto a su dignidad: Ya no hay judío ni griego; ni esclavo ni libre; ni
el hombre es «uno en cuerpo y alma»79, nacido del amor creador de Dios y hombre ni mujer, ya que todos ustedes son uno en Cristo Jesús (Gal 3,28; cf. Rom
destinado a vivir eternamente. El ser humano se desarrolla cuando crece 10,12; 1Cor 12,13; Col 3,11). Puesto que en el rostro de cada hombre
espiritualmente, cuando su alma se conoce a sí misma y la verdad que Dios ha resplandece algo de la gloria de Dios, la dignidad de todo hombre ante Dios es el
impreso germinalmente en ella, cuando dialoga consigo mismo y con su Creador. fundamento de la dignidad del hombre ante los demás hombres85. Esto es,
Lejos de Dios, el hombre está inquieto y se hace frágil […] Una sociedad del además, el fundamento último de la radical igualdad y fraternidad entre los
bienestar, materialmente desarrollada, pero que oprime el alma, no está en sí hombres, independientemente de su raza, nación, sexo, origen, cultura y clase”86.
misma bien orientada hacia un auténtico desarrollo”80.
Sólo el reconocimiento de esta igualdad en dignidad hace posible el crecimiento
de todos (Cf. St 2,19). Para favorecer tal crecimiento es necesario apoyar a los
4. La libertad de la persona últimos, asegurar efectivamente condiciones de igualdad de oportunidades entre
El hombre es libre porque posee la facultad de determinarse en función de la el hombre y la mujer, garantizar una igualdad objetiva entre las diversas clases
verdad y del bien81. “Conocerán la verdad, y la verdad los hará libres” (Jn 8, 32). sociales ante la ley87.
Estas palabras encierran una exigencia fundamental y al mismo tiempo una
advertencia: la exigencia de una relación honesta con respecto a la verdad, como “La Iglesia en el Continente se siente comprometida a intensificar su
condición de una auténtica libertad; y la advertencia de evitar cualquier libertad preocupación por las mujeres y a defenderlas de modo que la sociedad en
aparente, superficial o unilateral, cualquier libertad que no profundice en toda la América ayude más a la vida familiar fundada en el matrimonio, proteja más la
verdad sobre el hombre y sobre el mundo”82. maternidad y respete más la dignidad de todas las mujeres. Se debe ayudar a las
mujeres americanas a tomar parte activa y responsable en la vida y misión de la
76
Cf. Gaudium et spes, 24
77
Cf. Compendio de la Doctrina social de la Iglesia, 132-133
83
78 Caritas in veritate, 75 Compendio de la Doctrina social de la Iglesia, 137
84
79 Gaudium et spes, 14 Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 1934
80 85 Cf. Gaudium et spes, 29
Caritas in veritate, 76
81 86 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 144
Cf. Pontificio Consejo Justicia y Paz, Agenda Social, 49
82 87
Cf. Redemptor hominis, 12 Cf. Octogesima advenies, 16

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Iglesia, como también se ha de reconocer la necesidad de la sabiduría y obligaciones. Por esta razón, todo atropello a la dignidad del hombre es atropello
cooperación de las mujeres en las tareas directivas de la sociedad americana”88. al mismo Dios, de quien es imagen”94. Cualquier derecho fundamental del
hombre deriva de la ley natural que le da la fuerza moral de obligatoriedad y le
impone a su vez el correlativo deber. Por tanto, quienes al reivindicar sus
6. Sociabilidad humana derechos olvidan por completo sus deberes, se asemejan a los que derriban con
La persona es constitutivamente un ser social89, porque así lo ha querido Dios que una mano lo que con la otra construyen95.
la ha creado90.
La Iglesia Católica, que “en virtud del Evangelio que se le ha confiado, proclama
Es necesario destacar que la vida comunitaria es una característica natural que los derechos del hombre”96, ha visto en la Declaración de los Derechos Humanos,
distingue al hombre del resto de las criaturas terrenas. La actuación social conforme al Magisterio pontificio, un signo de los tiempos, considerándola un
comporta de suyo un signo particular del hombre y de la humanidad, el de una paso importante en el camino hacia la organización jurídico-política de la
persona que obra en una comunidad de personas: este signo determina su comunidad mundial97.
calificación interior y constituye, en cierto sentido, su misma naturaleza. Esta
característica relacional adquiere, a la luz de la fe, un sentido más profundo y
estable. Creada a imagen y semejanza de Dios (cf. Gen 1,26) y constituida en el
universo visible para vivir en sociedad (cf. Gen 2,20.23) y dominar la tierra (cf.
Gen 1,26.28-30), la persona humana está llamada desde el comienzo a la vida Reflexión:
social: “Dios no ha creado al hombre como un «ser solitario», sino que lo ha 1. De la lectura ¿qué conclusiones has sacado? ¿cómo tú y tu grupo
querido como «ser social». La vida social no es, por tanto, exterior al hombre, el se pueden empeñar en lograr esta recuperación de la persona?
cual no puede crecer y realizar su vocación si no es en relación con los otros”91.
2. El haber asumido el reto de ayudar a que cada uno se auto-
valore:
7. Los Derechos Humanos ¿Me ha ayudado personalmente a ser mejor?
Puestos a desarrollar el tema de los derechos del hombre, observamos que éste
tiene un derecho a la existencia, a la integridad corporal, a los medios necesarios
para un decoroso modo de vida, cuales son, principalmente, el alimento, el
vestido, la vivienda, el descanso, la asistencia médica y los servicios
indispensables que a cada uno debe prestar el Estado. De lo cual se sigue que el
hombre posee también el derecho a la seguridad personal en caso de
enfermedad, invalidez, viudedad, vejez, paro y cualquier otra eventualidad que le
prive, sin culpa suya, de los medios necesarios para su sustento92.

El hombre tiene por sí mismo derechos y deberes que dimanan inmediatamente


de su propia naturaleza. Estos derechos y deberes son, por ello, universales e
inviolables, y no pueden ser negados por ningún concepto93, pues “de la dignidad
del hombre en cuanto hijo de Dios nacen los derechos humanos y las

88
Ecclesia in América, 45
89
Cf. Gaudium et spes, 12
94
90 Cf. Pio XII, Radiomensaje de Navidad (24-12-42), 6 Ecclesia in America, 57
95
91 Congregación para la Doctrina de la Fe, Libertatis conscientia, 32 Cf. Pacem in terris, 30
92 96 Gaudium et spes, 41
Pacem in terris, 11
93 97 Cf. Pacem in terris, 75
Ibid., 9

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Cuarta Sesión De este modo la familia contribuye de modo eminente al bien social por medio de
la paternidad y maternidad responsables, formas peculiares de la especial
La familia, “celula vital de la sociedad” participación de los cónyuges en la obra creadora de Dios102. Ésta debe llevar a
una generosa acogida de la vida. Las motivaciones que deben guiar a los esposos
en el ejercicio responsable de la paternidad y maternidad derivan del pleno
Introducción reconocimiento de los propios deberes hacia Dios, hacia sí mismos, hacia la
El tema Familia es fundamental, ya que si se le deja de lado y no se le atiende, se familia y hacia la sociedad103.
da el caos social. La Familia es la célula que da vida a todo y vital porque es el
núcleo de la sociedad. En cuanto a los medios relativos a la procreación responsable se han de rechazar
como moralmente ilícitos: el aborto, la esterilización, la contracepción en sus
La familia es considerada, en el designio del Creador, como el lugar primario de la diversas formas, la inseminación artificial, la fecundación in vitro, la eugenesia y
humanización de la persona y de la sociedad y cuna de la vida y del amor98. la clonación, enumeradas entre las técnicas más conocidas, aunque la
enumeración podría alargarse mucho más. Son, además, moralmente
La Iglesia ha considerado siempre la familia como la primera sociedad natural y el condenables, como atentados a la dignidad de las personas y las familias, los
núcleo originario de la sociedad, titular de derechos propios y originarios, y la programas de ayuda económica destinados a financiar campañas de
sitúa en el centro de la vida social. Relegar la familia a un papel secundario y esterilización y anticoncepción o subordinados a la aceptación de dichas
subalterno, excluyéndola del lugar que le corresponde en la sociedad, significaría campañas104.
causar un grave daño al auténtico crecimiento del cuerpo social99.
“En varias partes del mundo persisten prácticas de control demográfico por parte
“Dado que la familia es el valor más querido por nuestros pueblos, creemos que de los gobiernos, que con frecuencia difunden la contracepción y llegan incluso a
debe asumirse la preocupación por ella como uno de los ejes transversales de imponer también el aborto. En los países económicamente más desarrollados,
toda la acción evangelizadora de la Iglesia. En toda diócesis se requiere una las legislaciones contrarias a la vida están muy extendidas y han condicionado ya
pastoral familiar “intensa y vigorosa” para proclamar el evangelio de la familia, las costumbres y la praxis, contribuyendo a difundir una mentalidad antinatalista,
promover la cultura de la vida y trabajar para que los derechos de las familias que muchas veces se trata de transmitir también a otros estados como si fuera un
sean reconocidos y respetados100” progreso cultural”105.

El Santo Padre nos advierte que “algunas organizaciones no gubernamentales,


además, difunden el aborto, promoviendo a veces en los países pobres la
1. La familia, santuario de la vida
adopción de la práctica de la esterilización, incluso en mujeres a quienes no se
“Dios, con la creación del hombre y de la mujer a su imagen y semejanza, corona y pide su consentimiento. Por añadidura, existe la sospecha fundada de que, en
lleva a perfección la obra de sus manos; los llama a una especial participación en ocasiones, las ayudas al desarrollo se condicionan a determinadas políticas
su amor y al mismo tiempo en su poder de Creador y Padre, mediante su sanitarias que implican de hecho la imposición de un fuerte control de la
cooperación libre y responsable en la transmisión del don de la vida humana: Y natalidad. Preocupan también tanto las legislaciones que aceptan la eutanasia
Dios los bendijo diciendo: Sean fecundos, multiplíquense, llenen la tierra y como las presiones de grupos nacionales e internacionales que reivindican su
sométanla (Gen 1,28). Así, el cometido fundamental de la familia es el servicio a reconocimiento jurídico”106.
la vida, el realizar a lo largo de la historia la bendición original del Creador,
transmitiendo en la generación la imagen divina de hombre a hombre. (Cf. Gen Debemos mencionar con firmeza que “la apertura a la vida está en el centro del
5,1-3)”101. verdadero desarrollo. Cuando una sociedad se encamina hacia la negación y la
102
Cf. Gaudium et spes, 50
98 103
Cf. Christifideles laici, 40 Cf. Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 232
99
Cf. Juan Pablo II, Carta a las familias Gratissimam Sane, 17 104 Cf. Ibid., 233-237
100 Documento de Aparecida, 435; Cf. Ecclesia in America, 4 105 Caritas in veritate, 28
101 Familiaris consortio, 28 106
Cf. Ibid.

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supresión de la vida, acaba por no encontrar la motivación y la energía necesarias 4. La familia y el Estado
para esforzarse en el servicio del verdadero bien del hombre. Si se pierde la Ha de afirmarse la prioridad de la familia respecto a la sociedad y al Estado. La
sensibilidad personal y social para acoger una nueva vida, también se marchitan familia, al menos en su función procreativa, es la condición misma de la
otras formas de acogida provechosas para la vida social”107. existencia de aquellos. En las demás funciones en pro de cada uno de sus
miembros, la familia precede, por su importancia y valor, a las funciones que la
sociedad y el Estado deben desempeñar112. La familia, sujeto titular de derechos
2. La familia y la persona humana inviolables, encuentra su legitimación en la naturaleza humana y no en el
La familia tiene una importancia también vital para la persona. En esta cuna de la reconocimiento del Estado. La familia no está, por lo tanto, en función de la
vida y del amor, el hombre nace y crece. Cuando nace un niño, la sociedad recibe sociedad y del Estado, sino que la sociedad y el Estado están en función de la
el regalo de una nueva persona, que está “llamada, desde lo más íntimo de sí, a la familia113.
comunión con los demás y a la entrega a los demás”108. En la familia, por tanto, la
entrega recíproca del hombre y de la mujer, unidos en matrimonio, crea un En contraposición a este principio, la introducción del divorcio en las
ambiente de vida en el cual el niño puede “desarrollar sus potencialidades, legislaciones civiles ha alimentado una visión relativista de la unión conyugal y se
hacerse consciente de su dignidad y prepararse a afrontar su destino único e ha manifestado ampliamente como una «verdadera plaga social»114.
irrepetible”109.
Las familias, lejos de ser sólo objeto de la acción política, pueden y deben ser
sujeto de esta actividad, movilizándose para “procurar que las leyes y las
instituciones del Estado no sólo no ofendan, sino que sostengan y defiendan
3. La familia y la sociedad positivamente los derechos y deberes de la familia. En este sentido, las familias
La familia, comunidad natural en donde se experimenta la sociabilidad humana, deben crecer en la conciencia de ser «protagonistas» de la llamada «política
contribuye en modo único e insustituible al bien de la sociedad. La comunidad familiar» y asumir la responsabilidad de transformar la sociedad”105.
familiar nace de la comunión de las personas: “La «comunión» se refiere a la
relación personal entre el «yo» y el «tú». La «comunidad», en cambio, supera este
esquema apuntando hacia una «sociedad», un «nosotros». La familia, comunidad 5. El matrimonio, fundamento de la familia
de personas, es, por consiguiente, la primera «sociedad» humana”110.
La familia tiene su fundamento en la libre voluntad de los cónyuges de unirse en
matrimonio, respetando el significado y los valores propios de esta institución,
El ser humano ha sido creado para amar y no puede vivir sin amor. El amor,
que no depende del hombre, sino de Dios mismo116. La institución matrimonial,
cuando se manifiesta en el don total de dos personas en su complementariedad,
“fundada por el Creador y en posesión de sus propias leyes: la íntima comunidad
no puede limitarse a emociones o sentimientos, y mucho menos a la mera
expresión sexual. Una sociedad que tiende a relativizar y a banalizar cada vez más conyugal de vida y amor”117, no es un efecto de convenciones humanas o
la experiencia del amor y de la sexualidad exalta los aspectos efímeros de la vida y imposiciones legislativas, sino que debe su estabilidad al ordenamiento divino118.
oscurece los valores fundamentales. Por ello se hace más urgente que nunca
anunciar y testimoniar que la verdad del amor y de la sexualidad conyugal se Ningún poder puede abolir el derecho natural al matrimonio ni modificar sus
encuentra allí donde se realiza la entrega plena y total de las personas con las características ni su finalidad, ya que el matrimonio tiene sus características
características de la unidad y de la fidelidad111. propias originarias y permanentes. Ni la sociedad, ni el Estado, ni aun los propios

112
Cf. Santa Sede, Carta de los derechos de la familia, Preámbulo, 6
113
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 214
107
Cf. Ibid. 114 Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 2385, 1650, 1651
108
Cf. Christifideles laici, 40 115 Cf. Familiaris consortio, 44
116
109 Centesimus annus, 39 Cf. Gaudium et spes, 48
110 Juan Pablo II, Carta a las familias Gratissimam sane, 7. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 2206 117 Ibid.
111
Cf. Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 223 118 Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 1603

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esposos, pueden disponer del vínculo matrimonial con el cual los esposos se Quinta Sesión
prometen fidelidad, asistencia recíproca y apertura a los hijos119.
Vida Económica
El matrimonio tiene como rasgos característicos: la totalidad, en virtud de la cual
se entregan recíprocamente en todos los aspectos de la persona, físicos y
espirituales; la unidad, que los hace “una sola carne” (Gen 2,24); la Introducción
indisolubilidad y la fidelidad, que exigen la donación recíproca y definitiva; y la
Una ubicación en el contexto mundial de la economía y de nuestro entorno, nos
fecundidad, a la que natural, generosa y responsablemente está abierto120.
ayudará a una mejor comprensión de la realidad en que nos movemos
(parroquia, diócesis, etc.)

También debemos ubicarnos en el contexto de nuestra realidad política y


movernos tanto en la política como en la economía a la luz del Evangelio y el
Magisterio Social de la Iglesia.
Reflexión:
1. ¿Cuál es la situación de las familias en tu barrio? 1. El trabajo humano
2. ¿De qué manera como Cáritas Parroquial, podemos ayudar a la El trabajo pertenece a la condición originaria del hombre y precede a su caída; no
consolidación de la familia? es, por ello, ni un castigo ni una maldición. El trabajo debe ser honrado porque es
fuente de riqueza o, al menos, de condiciones para una vida decorosa, e
3. ¿Cuál debe ser el rostro de la familia cristiana? instrumento eficaz contra la pobreza (Cf. Prov 10,4). No debemos caer en la
tentación de idolatrar el trabajo, porque en él no se puede encontrar el sentido
último y definitivo de la vida; el trabajo es esencial, pero es Dios, no el trabajo, la
fuente de la vida y el fin del hombre.

En el trabajo humano resplandece la belleza de la creación. “Jesús, el carpintero


(cf. Mc 6, 3), dignificó el trabajo y al trabajador, y recuerda que el trabajo no es un
mero apéndice de la vida, sino que «constituye una dimensión fundamental de la
existencia del hombre en la tierra»121, por la cual el hombre y la mujer se realizan a
sí mismos como seres humanos122. El trabajo garantiza la dignidad y la libertad del
hombre; es probablemente la clave esencial de toda la cuestión social”123.

El trabajo humano procede de la persona y está esencialmente ordenado y


finalizado a ella. El trabajo debe estar orientado hacia el sujeto que lo realiza,
porque la finalidad del trabajo, de cualquier trabajo, es siempre el hombre.
Gracias a ello es posible la afirmación de que el trabajo es para el hombre y no el
hombre para el trabajo, y que la finalidad del trabajo, de cualquier trabajo
realizado por el hombre, sigue siendo siempre el hombre mismo124.

121
Laborem exercens, 4
122
Cf. Ibid., 9
119
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 216 123 Documento de Aparecida, 120
120
Cf. Familiaris consortio, 13 124 Cf Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 272

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El trabajo es “una obligación, es decir, un deber”125, y es también un derecho ejercitarse en el contexto de las exigencias morales de la justicia y de la
fundamental y un bien para el hombre126. La Iglesia ha enseñado el valor del solidaridad, y de responsabilidades sociales precisas: no se puede olvidar “el
trabajo por su carácter de necesidad. Efectivamente, el trabajo es necesario para deber de la caridad, esto es, el deber de ayudar con lo propio «superfluo» y, a
formar y mantener una familia127, para adquirir el derecho a la propiedad y veces, incluso con lo propio «necesario», para dar al pobre lo indispensable para
contribuir al bien común de la familia humana128. vivir”130.

“El trabajo es un bien de todos, que debe estar disponible para todos aquellos 3. La economía y la globalización
capaces de él. La plena ocupación es, por tanto, un objetivo obligado para todo
ordenamiento económico orientado a la justicia y al bien común. Una sociedad Nuestro tiempo está marcado por el complejo fenómeno de la globalización a
donde el derecho al trabajo sea anulado o sistemáticamente negado y donde las través de un proceso de creciente integración de las economías. Ciertamente la
medidas de política económica no permitan a los trabajadores alcanzar niveles globalización alimenta nuevas esperanzas pero origina también grandes
satisfactorios de ocupación, no puede conseguir su legitimación ética ni la justa interrogantes131.
paz social”.
Puede producir efectos potencialmente beneficiosos para toda la humanidad a
El desempleo, la injusta remuneración del trabajo y el vivir sin querer trabajar son través de la integración, pero puede potenciar también el aumento de las
contrarios al designio de Dios. El discípulo y misionero, respondiendo a este desigualdades.
designio, promueve la dignidad del trabajador y del trabajo, el justo
reconocimiento de sus derechos y de sus deberes, desarrolla la cultura del En este sentido nos advierte Caritas in veritate que “la novedad principal ha sido
trabajo y denuncia toda injusticia129. el estallido de la interdependencia planetaria, ya comúnmente llamada
globalización. Pablo VI lo había previsto parcialmente, pero es sorprendente el
alcance y la impetuosidad de su auge. Surgido en los países económicamente
2. El hombre, la pobreza y la riqueza desarrollados, este proceso ha implicado por su naturaleza a todas las
economías. Ha sido el motor principal para que regiones enteras superaran el
En el Antiguo Testamento se encuentra una doble postura frente a los bienes
subdesarrollo y es, de por sí, una gran oportunidad.
económicos y la riqueza. Por una parte, hay aprecio a la disponibilidad de bienes
materiales considerados necesarios para la vida, vistos como una bendición de
Sin embargo, sin la guía de la caridad en la verdad, este impulso planetario puede
Dios. Por otra parte, los bienes económicos no son condenados en sí mismos sino
contribuir a crear riesgo de daños hasta ahora desconocidos y nuevas divisiones
por su mal uso; así, por ejemplo, la tradición profética denuncia la estafa, la usura,
en la familia humana. Por eso, la caridad y la verdad nos plantean un compromiso
la explotación, las injusticias, la opresión a los pobres, etc. (Cf. Is 58,3 -11; Jer 7,4-
inédito y creativo, ciertamente muy vasto y complejo. Se trata de ensanchar la
7; Os 4,1-2; Am 2,6-7; Miq 2,1-2)
razón y hacerla capaz de conocer y orientar estas nuevas e imponentes
dinámicas, animándolas en la perspectiva de esa «civilización del amor», de la
Jesús asume toda la tradición del Antiguo Testamento sobre los bienes
cual Dios ha puesto la semilla en cada pueblo y en cada cultura”132.
económicos, la riqueza y la pobreza, confiriéndole una definitiva claridad y
plenitud (Cf. Mt 6,24; 13,22; Lc 6,20-24; 12,15-21; Rom 14,6-8; 1Tim 4,4).
El crecimiento del bien común exige aprovechar las nuevas ocasiones de
redistribución de la riqueza entre las diversas áreas del planeta a favor de las más
Los bienes, aun cuando son poseídos legítimamente, conservan siempre un
necesitadas, hasta ahora excluidas o marginadas del proceso social y
destino universal. Toda forma de acumulación indebida es inmoral, precisamente
económico133: “en definitiva, el desafío consiste en asegurar una globalización en
porque se halla en abierta contradicción con el destino universal que Dios
creador asignó a todos los bienes. La utilización del propio poder adquisitivo debe la solidaridad, una globalización sin dejar a nadie al margen”134.
125 130
Laborem exercens, 16 Centesimus annus, 36
126 131
Cf. Gaudium et spes, 26 Cf. Ecclesia in America, 20
127 Cf. Laborem exercens, 10 132 Caritas in veritate, 33
128 Cf. Ibid., 16 133 Cf. Juan Pablo II, Discurso a los miembros de la Fundación Centessimus annus, (9-5-98), 2
129 134
Cf. Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 288 Juan Pablo II, Mensaje Jornada Mundial de la Paz, 1998, 3

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Caritas in veritate nos advierte que “se ha de subrayar que no basta progresar 4. Economía y empresa
sólo desde el punto de vista económico y tecnológico. El desarrollo necesita ser, En la encíclica de Benedicto XVI se recogen las últimas novedades sobre la
ante todo, auténtico e integral. El salir del atraso económico, algo en sí mismo gestión empresarial responsable:
positivo, no soluciona la problemática compleja de la promoción del hombre, ni en
los países protagonistas de estos adelantos, ni en los países económicamente ya “Las actuales dinámicas económicas internacionales, caracterizadas por graves
desarrollados, ni en los que todavía son pobres, los cuales pueden sufrir, además distorsiones y disfunciones, requieren también cambios profundos en el modo de
de antiguas formas de explotación, las consecuencias negativas que se derivan entender la empresa. Antiguas modalidades de la vida empresarial van
de un crecimiento marcado por desviaciones y desequilibrios”135. desapareciendo, mientras otras más prometedoras se perfilan en el horizonte.
Uno de los mayores riesgos es, sin duda, que la empresa responda casi
A veces se perciben actitudes fatalistas ante la globalización, como si las exclusivamente a las expectativas de los inversores en detrimento de su
dinámicas que la producen procedieran de fuerzas anónimas e impersonales o dimensión social. Debido a su continuo crecimiento y a la necesidad de mayores
de estructuras independientes de la voluntad humana136. A este respecto, es capitales, cada vez son menos las empresas que dependen de un único
bueno recordar que la globalización ha de entenderse ciertamente como un empresario estable que se sienta responsable a largo plazo, y no sólo por poco
proceso socioeconómico, pero no es ésta su única dimensión. Tras este proceso tiempo, de la vida y los resultados de su empresa, y cada vez son menos las
más visible hay realmente una humanidad cada vez más interrelacionada; hay empresas que dependen de un único territorio.
personas y pueblos para los que el proceso debe ser de utilidad y desarrollo137,
gracias a que tanto los individuos como la colectividad asumen sus respectivas Además, la llamada deslocalización de la actividad productiva puede atenuar en
responsabilidades. La superación de las fronteras no es sólo un hecho material, el empresario el sentido de responsabilidad respecto a los interesados, como los
sino también cultural, en sus causas y en sus efectos. trabajadores, los proveedores, los consumidores, así como al medio ambiente y a
la sociedad más amplia que lo rodea, en favor de los accionistas, que no están
A pesar de algunos aspectos estructurales innegables, pero que no se deben sujetos a un espacio concreto y gozan por tanto de una extraordinaria movilidad.
absolutizar, «la globalización no es, a priori, ni buena ni mala. Será lo que la gente El mercado internacional de los capitales, en efecto, ofrece hoy una gran libertad
haga de ella»138. Debemos ser sus protagonistas, no las víctimas, procediendo de acción. Sin embargo, también es verdad que se está extendiendo la conciencia
razonablemente, guiados por la caridad y la verdad. Oponerse ciegamente a la de la necesidad de una «responsabilidad social» más amplia de la empresa.
globalización sería una actitud errónea que acabaría por ignorar un proceso que Aunque no todos los planteamientos éticos que guían hoy el debate sobre la
tiene también aspectos positivos, arriesgándose a desaprovechar las múltiples responsabilidad social de la empresa son aceptables según la perspectiva de la
oportunidades de desarrollo que ofrece. El proceso de globalización, doctrina social de la Iglesia, es cierto que se va difundiendo cada vez más la
adecuadamente entendido y gestionado, ofrece la posibilidad de una gran convicción según la cual la gestión de la empresa no puede tener en cuenta
redistribución de la riqueza a escala planetaria como nunca se ha visto antes; únicamente el interés de sus propietarios, sino también el de todos los otros
pero, si se gestiona mal, puede incrementar la pobreza y la desigualdad, sujetos que contribuyen a la vida de la empresa: trabajadores, clientes,
contagiando además con una crisis a todo el mundo. Es necesario corregir las proveedores de los diversos elementos de producción, la comunidad de
disfunciones, a veces graves, que causan nuevas divisiones entre los pueblos y referencia.
en su interior, de modo que la redistribución de la riqueza no comporte una
redistribución de la pobreza, e incluso la acentúe, como podría hacernos temer En los últimos años se ha notado el crecimiento de una clase cosmopolita de
también una mala gestión de la situación actual. manager, que a menudo responde sólo a las pretensiones de los nuevos
accionistas de referencia compuestos generalmente por fondos anónimos que
establecen su retribución. Pero también hay muchos managers hoy que, con un
análisis más previsor, se percatan cada vez más de los profundos lazos de su
135
Caritas in veritate, 23
empresa con el territorio o territorios en que desarrolla su actividad.
136
Cf. Congregación para la Doctrina de la Fe, Instr. Libertatis conscientia, sobre la libertad y la liberación
(22-03-87), 74 Pablo VI invitaba a valorar seriamente el daño que la trasferencia de capitales al
137
Cf. Juan Pablo II, Entrevista al periódico “La Croix”, 20 de Agosto de 1997
138
Juan Pablo II, discurso a la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales (27 Abril 2001) extranjero, por puro provecho personal, puede ocasionar a la propia nación. Juan

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Pablo II advertía que invertir tiene siempre un significado moral, además de “El plazo se ha cumplido. El Reino de Dios está llegando. Conviértanse y crean en
económico. Se ha de reiterar que todo esto mantiene su validez en nuestros días a el Evangelio (Mc1,15). La voz del Señor nos sigue llamando como discípulos
pesar de que el mercado de capitales haya sido fuertemente liberalizado y la misioneros y nos interpela a orientar toda nuestra vida desde la realidad
moderna mentalidad tecnológica pueda inducir a pensar que invertir es sólo un transformadora del Reino de Dios que se hace presente en Jesús. Acogemos con
hecho técnico y no humano ni ético”139. mucha alegría esta buena noticia. Dios es amor, es Padre de todos los hombres y
mujeres de todos los pueblos y razas. Jesucristo es el Reino de Dios que procura
desplegar toda su fuerza transformadora en nuestra Iglesia y en nuestras
5. La Comunidad Política - El Señorío de Dios y el Reinado de Cristo sociedades. En Él, Dios nos ha elegido para que seamos sus hijos con el mismo
El pueblo de Israel, en la fase inicial de su historia, no tiene rey como los otros origen y destino, con la misma dignidad, con los mismos derechos y deberes
pueblos, porque reconoce solamente el Señorío de Yahvé. Samuel, a quien el vividos en el mandamiento supremo del amor. El Espíritu ha puesto este germen
pueblo reclama un rey, advierte de las consecuencias de un ejercicio despótico de del Reino en nuestro Bautismo y lo hace crecer mediante la conversión
la realeza (Cf. 1Sam 8,11-18). El poder real, sin embargo, también se puede permanente gracias a la Palabra y a los sacramentos”141.
experimentar como un don de Dios que viene en auxilio de su pueblo (Cf. 1Sam
9,16).
6. Comunidad política, persona humana y pueblo
El prototipo de rey elegido por Yahvé es David, cuya condición humilde es La persona es el fundamento y el fin de la convivencia política142. El hombre es una
subrayada por la narración bíblica (Cf. 1Sam 16,1-13). El fracaso de la realeza en criatura social y política por naturaleza; de ahí que la comunidad política derive de
el plano histórico no llevará a la desaparición del ideal de un rey que, fiel a Dios, la naturaleza misma de las personas. La comunidad política encuentra en la
gobierne con sabiduría y realice la justicia. referencia al pueblo su auténtica dimensión: ella “es, y debe ser en realidad, la
unidad orgánica y organizadora de un verdadero pueblo”143. El pueblo, no
Jesús rechaza el poder opresivo y despótico de los jefes sobre las naciones (Cf.
obstante, no es una multitud amorfa, una masa inerte para manipular e
Mc 10,42) y su pretensión de hacerse llamar benefactores (Cf. Lc 22,25), pero
instrumentalizar, sino un conjunto de personas, cada una de las cuales tiene la
jamás rechaza directamente las autoridades de su tiempo. Jesús, el Mesías
posibilidad de formar su opinión acerca de la cosa pública y la libertad de
prometido, ha combatido y derrotado la tentación de un mesianismo político,
expresar su sensibilidad política y hacerla valer de manera conveniente al bien
caracterizado por el dominio sobre las naciones (Cf. Mt 4,8-11; Lc 4,5-8). Él es el
común144.
que ha venido “a servir y a dar su vida” (Mc 10,45). A los discípulos que discuten
sobre quién es el más grande, el Señor les enseña a hacerse los últimos y a servir
“La comunidad política tiende al bien común cuando actúa a favor de la creación
a todos (Cf. Mc 9,33-35).
de un ambiente humano en el que se ofrezca a los ciudadanos la posibilidad del
ejercicio real de los derechos humanos y del cumplimiento pleno de los
El señorío de Cristo, que es el Reino de Dios, entró en la historia de los hombres
respectivos deberes: De hecho, la experiencia enseña que, cuando falta una
mediante el ocultamiento de Jesucristo, que se despojó de su rango, asumió la
acción apropiada de los poderes públicos en lo económico, lo político o lo
condición de esclavo, pasó por uno de tantos y se rebajó incluso hasta la muerte
cultural, se produce entre los ciudadanos, sobre todo en nuestra época, un mayor
de cruz (Cf. Fil 2,7-8). Jesucristo, como Mesías, ejerce, aún antes de su venida
número de desigualdades en sectores cada vez más amplios, resultando así que
gloriosa, su señorío en el mundo, pero, mientras duran las circunstancias
los derechos y deberes de la persona humana carecen de toda eficacia práctica.
históricas, lo ejerce en el ocultamiento y bajo el signo de la contradicción y de la
La plena realización del bien común requiere que la comunidad política
cruz. Jesucristo ejerce principalmente su soberanía a través de la Iglesia y de los
desarrolle, en el ámbito de los derechos humanos, una doble y complementaria
cristianos en ella, que viven y actúan desde la fe y desde la libertad regia de los
acción, de defensa y de promoción: debe evitar, por un lado, que la preferencia
hijos de Dios, frente a las esclavitudes de una creación sometida a la corrupción
dada a los derechos de algunos particulares o de determinados grupos venga a
del pecado; consiguientemente, trabajan al servicio de los pobres y a favor de la
justicia, en orden a preparar la llegada del Reino de Dios en su plenitud140. 141
Centesimus annus, 36
142
Cf. Ecclesia in America, 20
139
Caritas in veritate, 40 143 Caritas in veritate, 33
140
Cf. Conferencia Episcopal Española. Instruc. Past. Los católicos en la vida pública. Presentación 144 Cf. Juan Pablo II, Discurso a los miembros de la Fundación Centessimus annus, (9-5-98), 2

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ser origen de una posición de privilegio en la nación, y soslayar, por otro, el peligro 8. Los cristianos en la vida pública
de que, por defender los derechos de todos, incurran en la absurda posición de Ante todo hemos de resaltar la total autonomía e independencia de ambas
impedir el pleno desarrollo de los derechos de cada uno”145. entidades. Efectivamente, la Iglesia y la comunidad política, si bien se expresan
ambas con estructuras organizativas visibles, son de naturaleza diferente, tanto
por su configuración como por las finalidades que persiguen. El Concilio Vaticano
7. Justicia y caridad II ha reafirmado solemnemente que “la comunidad política y la Iglesia son
Como ya se ha mencionado, la justicia es el objeto y, por tanto, también la medida independientes y autónomas, cada una en su propio terreno”147. La Iglesia se
intrínseca de toda política. La política es más que una simple técnica para organiza con formas adecuadas para satisfacer las exigencias espirituales de sus
determinar los ordenamientos públicos: su origen y su meta están precisamente fieles, mientras que las diversas comunidades políticas generan relaciones e
en la justicia, y ésta es de naturaleza ética. Así, pues, el Estado se encuentra instituciones al servicio de todo lo que pertenece al bien común temporal. La
inevitablemente de hecho ante la cuestión de cómo realizar la justicia aquí y autonomía e independencia de las dos realidades se muestran claramente, sobre
ahora. todo, en el orden de los fines.

Benedicto XVI resalta también la primacía de la justicia desde su intrínseca unión Pero también considera la mutua colaboración necesaria. La recíproca
con la caridad, y la entiende como esencia del bien común cuando afirma que “el autonomía de la Iglesia y la comunidad política no comporta una separación tal
compromiso por el bien común, cuando está inspirado por la caridad, tiene una que excluya la colaboración: ambas, aunque a título diverso, están al servicio de
valencia superior al compromiso meramente secular y político. Como todo la vocación personal y social de los mismos hombres. “Este servicio lo prestarán
compromiso en favor de la justicia, forma parte de ese testimonio de la caridad con tanta mayor eficacia, para bien de todos, cuanto mejor cultiven ambas entre
divina que, actuando en el tiempo, prepara lo eterno. La acción del hombre sobre sí una sana cooperación, habida cuenta de las circunstancias de lugar y
la tierra, cuando está inspirada y sustentada por la caridad, contribuye a la tiempo”148.
edificación de esa ciudad de Dios universal hacia la cual avanza la historia de la
familia humana. En una sociedad en vías de globalización, el bien común y el “América necesita laicos cristianos que puedan asumir responsabilidades
esfuerzo por él han de abarcar necesariamente a toda la familia humana, es directivas en la sociedad. Es urgente formar hombres y mujeres capaces de
decir, a la comunidad de los pueblos y naciones, dando así forma de unidad y de actuar, según su propia vocación, en la vida pública, orientándola al bien común.
paz a la ciudad del hombre y haciéndola, en cierta medida, una anticipación que En el ejercicio de la política, vista en su sentido más noble y auténtico como
prefigura la ciudad de Dios sin barreras”146. administración del bien común, ellos pueden encontrar también el camino de la
propia santificación”149.
La Iglesia no puede ni debe emprender por cuenta propia la empresa política de
realizar la sociedad más justa posible. No puede ni debe sustituir al Estado. Pero Caritas in veritate nos recuerda igualmente la importancia de que la Iglesia pueda
tampoco puede ni debe quedarse al margen en la lucha por la justicia. Debe contribuir al desarrollo, afirmando que esto será posible “solamente si Dios tiene
insertarse en ella a través de la argumentación racional y debe despertar las un lugar en la esfera pública, con específica referencia a la dimensión cultural,
fuerzas espirituales, sin las cuales la justicia, que siempre exige también social, económica y, en particular, política. La doctrina social de la Iglesia ha
renuncias, no puede afirmarse ni prosperar. La sociedad justa no puede ser obra nacido para reivindicar esa «carta de ciudadanía» de la religión cristiana. La
de la Iglesia, sino de la política. No obstante, le interesa sobremanera trabajar por negación del derecho a profesar públicamente la propia religión y a trabajar para
la justicia esforzándose por abrir la inteligencia y la voluntad a las exigencias del que las verdades de la fe inspiren también la vida pública tiene consecuencias
bien. negativas sobre el verdadero desarrollo. La exclusión de la religión del ámbito
público, así como el fundamentalismo religioso, por otro lado, impiden el
encuentro entre las personas y su colaboración para el progreso de la
humanidad. La vida pública se empobrece de motivaciones y la política adquiere
147
Gaudium et spes, 76
145 148
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 389 Ibid.
146
Caritas in veritate, 7 149 Ecclesia in America, 44

48 49
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un aspecto opresor y agresivo. Se corre el riesgo de que no se respeten los humana; destino universal de los bienes de la tierra; integridad de la noción de
derechos humanos, ya sea porque se les priva de su fundamento trascendente, o desarrollo; centralidad de la persona humana; solidaridad”151.
porque no se reconoce la libertad personal. En el laicismo y en el
fundamentalismo se pierde la posibilidad de un diálogo fecundo y de una La doctrina social induce a formas de cooperación capaces de incentivar el
provechosa colaboración entre la razón y la fe religiosa. La razón necesita acceso al mercado internacional de los países marcados por la pobreza y el
siempre ser purificada por la fe, y esto vale también para la razón política, que no subdesarrollo. Pero al mismo tiempo el espíritu de cooperación internacional
debe creerse omnipotente. A su vez, la religión tiene siempre necesidad de ser requiere que, por encima de la estrecha lógica del mercado, se desarrolle la
purificada por la razón para mostrar su auténtico rostro humano. La ruptura de conciencia del deber de solidaridad, de justicia social y de caridad universal152,
este diálogo comporta un coste muy gravoso para el desarrollo de la porque existe «algo que es debido al hombre porque es hombre, en virtud de su
humanidad”150. eminente dignidad»153.

Uno de los campos esenciales en el ámbito de la cooperación y en el que Cáritas


9. La Comunidad Internacional y la Cooperación Internacional tiene un rol fundamental es la lucha contra la pobreza.
para el Desarrollo
Uno de los puntos más relevantes y necesarios para el funcionamiento de nuestra “Al comienzo del nuevo milenio, la pobreza de miles de millones de hombres y
Red de Cáritas en el Perú, así como la viabilidad de sus proyectos de ayuda al mujeres es la cuestión que, más que cualquier otra, interpela nuestra conciencia
desarrollo a través del financiamiento internacional, es precisamente el tema de humana y cristiana. La pobreza manifiesta un dramático problema de justicia: la
la cooperación internacional para el desarrollo. De aquí que le dediquemos este pobreza, en sus diversas formas y consecuencias, se caracteriza por un
capítulo. crecimiento desigual y no reconoce a cada pueblo el igual derecho a sentarse a la
mesa del banquete común. Esta pobreza hace imposible la realización de aquel
“La solución al problema del desarrollo requiere la cooperación entre las humanismo pleno que la Iglesia auspicia y propone, a fin de que las personas y los
comunidades políticas particulares: las Naciones, al hallarse necesitadas las pueblos puedan ser más y vivir en condiciones más humanas.
unas de ayudas complementarias y las otras de ulteriores perfeccionamientos,
sólo podrán atender a su propia utilidad mirando simultáneamente al provecho La lucha contra la pobreza encuentra una fuerte motivación en la opción o amor
de los demás. Por lo cual es de todo punto preciso que los Estados se entiendan preferencial de la Iglesia por los pobres. En toda su enseñanza social, la Iglesia no
bien y se presten ayuda mutua. El subdesarrollo dejaría de parecer una situación se cansa de confirmar también otros principios fundamentales: primero entre
imposible de eliminar, casi una condena fatal, si se considerara que éste no es todos, el destino universal de los bienes. Con la constante reafirmación del
sólo fruto de decisiones humanas equivocadas, sino también resultado de principio de la solidaridad, la doctrina social insta a pasar a la acción para
mecanismos económicos, financieros y sociales y de estructuras de pecado que, promover el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente
en realidad, lo están provocando. responsables de todos. El principio de solidaridad, también en la lucha contra la
pobreza, debe ir siempre acompañado oportunamente por el de subsidiaridad,
Estas dificultades, sin embargo, deben ser afrontadas con determinación firme y gracias al cual es posible estimular el espíritu de iniciativa, base fundamental de
perseverante, porque el desarrollo no es sólo una aspiración, sino un derecho todo desarrollo socioeconómico, en los mismos países pobres: a los pobres se les
que, como todo derecho, implica una obligación: la cooperación al desarrollo de debe mirar no como un problema, sino como los que pueden llegar a ser sujetos y
todo el hombre y de cada hombre es un deber de todos para con todos y, al mismo protagonistas de un futuro nuevo y más humano para todo el mundo”154.
tiempo, debe ser común a las cuatro partes del mundo: Este y Oeste, Norte y Sur.
En la visión del Magisterio, el derecho al desarrollo se funda en los siguientes La red nacional de Cáritas, gestora de programas de desarrollo sostenible y
principios: unidad de origen y destino común de la familia humana; igualdad entre canalizadora de tantos recursos de cooperación internacional, debe tener muy
todas las personas y entre todas las comunidades, basada en la dignidad
151
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 446
152
Cf. Populorum progressio, 44
153 Centesimus annus, 34
150
Caritas in veritate, 56 154 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 449

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presente que los programas de desarrollo, para poder adaptarse a las situaciones Los programas de ayuda han de adaptarse cada vez más a la forma de los
concretas, han de ser flexibles; y que las personas que se beneficien deben programas integrados y compartidos desde la base. En efecto, sigue siendo
implicarse directamente en su planificación y convertirse en protagonistas de su verdad que el recurso humano es lo más valioso de los países en vías de
realización. “Constructores de su propio desarrollo, los pueblos son los primeros desarrollo: éste es el auténtico capital que se ha de potenciar para asegurar a los
responsables de él. Pero no lo realizarán en el aislamiento”155. A nosotros nos países más pobres un futuro verdaderamente autónomo. Conviene recordar
corresponde, como nos recuerda Benedicto XVI, aplicar los criterios de progresión también que, en el campo económico, la ayuda principal que necesitan los países
y acompañamiento, incluyendo el seguimiento de los resultados156. en vías de desarrollo es permitir y favorecer cada vez más el ingreso de sus
productos en los mercados internacionales, posibilitando así su plena
“La cooperación internacional necesita personas que participen en el proceso del participación en la vida económica internacional. En el pasado, las ayudas han
desarrollo económico y humano, mediante la solidaridad de la presencia, el servido con demasiada frecuencia sólo para crear mercados marginales de los
acompañamiento, la formación y el respeto. Desde este punto de vista, los productos de esos países.
propios organismos internacionales deberían preguntarse sobre la eficacia real
de sus aparatos burocráticos y administrativos, frecuentemente demasiado Esto se debe muchas veces a una falta de verdadera demanda de estos
costosos. A veces, el destinatario de las ayudas resulta útil para quien lo ayuda y, productos: por tanto, es necesario ayudar a esos países a mejorar sus productos y
así, los pobres sirven para mantener costosos organismos burocráticos, que a adaptarlos mejor a la demanda. Además, algunos han temido con frecuencia la
destinan a la propia conservación un porcentaje demasiado elevado de esos competencia de las importaciones de productos, normalmente agrícolas,
recursos que deberían ser destinados al desarrollo. A este respecto, cabría provenientes de los países económicamente pobres. Sin embargo, se ha de
desear que los organismos internacionales y las organizaciones no recordar que la posibilidad de comercializar dichos productos significa a menudo
gubernamentales se esforzaran por una transparencia total, informando a los garantizar su supervivencia a corto o largo plazo. Un comercio internacional justo
donantes y a la opinión pública sobre la proporción de los fondos recibidos que se y equilibrado en el campo agrícola puede reportar beneficios a todos, tanto en la
destina a programas de cooperación, sobre el verdadero contenido de dichos oferta como en la demanda. Por este motivo, no sólo es necesario orientar
programas y, en fin, sobre la distribución de los gastos de la institución misma”157. comercialmente esos productos, sino establecer reglas comerciales
internacionales que los sostengan, y reforzar la financiación del desarrollo para
Por todo ello, “el principio de subsidiaridad debe mantenerse íntimamente unido hacer más productivas esas economías”158.
al principio de la solidaridad y viceversa, porque así como la subsidiaridad sin la
solidaridad desemboca en el particularismo social, también es cierto que la
solidaridad sin la subsidiaridad acabaría en el asistencialismo que humilla al
necesitado. Esta regla de carácter general se ha de tener muy en cuenta incluso
cuando se afrontan los temas sobre las ayudas internacionales al desarrollo. Reflexión:
Éstas, por encima de las intenciones de los donantes, pueden mantener a veces a
1. ¿Conocemos cuál es la realidad política y económica en el
un pueblo en un estado de dependencia, e incluso favorecer situaciones de
ambiente de tu parroquia o tu diócesis?
dominio local y de explotación en el país que las recibe.
2. ¿Qué valores y qué contravalores descubro de estas realidades?
Las ayudas económicas, para que lo sean de verdad, no deben perseguir otros
fines. Han de ser concedidas implicando no sólo a los gobiernos de los países 3. ¿Qué estamos haciendo para cambiar los elementos negativos y
interesados, sino también a los agentes económicos locales y a los agentes reforzar los positivos?
culturales de la sociedad civil, incluidas las Iglesias locales.

155
Populorum progressio,77
156
Cf. Caritas in veritate, 4.
157 158
Ibid., 47 Caritas in veritate, 58

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Sexta Sesión Si el hombre interviene sobre la naturaleza sin abusar de ella ni dañarla, se puede
decir que “interviene no para modificar la naturaleza, sino para ayudarla a
Cuidado del medio ambiente desarrollarse en su línea, la de la creación, la querida por Dios. Trabajando en este
campo, sin duda delicado, el investigador se adhiere al designio de Dios. Dios ha
querido que el hombre sea el rey de la creación”162. En el fondo, es Dios mismo
Introducción quien ofrece al hombre el honor de cooperar con todas las fuerzas de su
Hoy vemos las consecuencias de no haber cuidado de nuestro mundo, de haber inteligencia en la obra de la creación.
explotado el ambiente sin medir las consecuencias y aún hoy seguimos
maltratando este nuestro único mundo. “La tendencia a la explotación «inconsiderada» de los recursos de la creación es
el resultado de un largo proceso histórico y cultural: la época moderna ha
experimentado la creciente capacidad de intervención transformadora del
“La relación del hombre con el mundo es un elemento constitutivo de la identidad hombre. El aspecto de conquista y de explotación de los recursos ha llegado a
humana. Se trata de una relación que nace como fruto de la unión, todavía más predominar y a extenderse, y amenaza hoy la misma capacidad de acogida del
profunda, del hombre con Dios.159” medio ambiente: el ambiente como recurso pone en peligro el ambiente como
casa. A causa de los poderosos medios de transformación que brinda la
La responsabilidad ecológica, aunque es un tema que alcanza su auge y civilización tecnológica, a veces parece que el equilibrio hombre – ambiente ha
popularidad en la actualidad con una amplia difusión en los medios, en realidad alcanzado un punto crítico”163.
hunde sus raíces en el mismo origen del hombre, es decir, en la Creación.
“Una correcta concepción del medio ambiente, si por una parte no puede reducir
En los textos bíblicos del Antiguo Testamento ya se ve cómo “la fe de Israel vive en utilitariamente la naturaleza a un mero objeto de manipulación y explotación, por
el tiempo y en el espacio de este mundo, que se percibe no como un ambiente otra parte, tampoco debe absolutizarla y colocarla, en dignidad, por encima de la
hostil o un mal del cual liberarse, sino como el don mismo de Dios, el lugar y el misma persona humana. En este último caso, se llega a divinizar la naturaleza o
proyecto que Él confía a la guía responsable y al trabajo del hombre. La la tierra, como puede fácilmente verse en algunos movimientos ecologistas que
naturaleza, obra de la acción creadora de Dios, no es una peligrosa adversaria. piden se otorgue un reconocimiento institucional internacionalmente
Dios, que ha hecho todas las cosas, de cada una de ellas «vio que estaba bien» garantizado a sus ideas”164.
(Gen 1,4.10.12.18.21.25). En la cumbre de su creación, el Creador colocó al
hombre como algo que «estaba muy bien» (Gen 1,31). Sólo el hombre y la mujer, “La naturaleza está a nuestra disposición no como un «montón de desechos
entre todas las criaturas, han sido queridos por Dios «a imagen suya» (Gen 1,27): esparcidos al azar», sino como un don del Creador que ha diseñado sus
a ellos el Señor confía la responsabilidad de toda la creación, la tarea de tutelar su estructuras intrínsecas para que el hombre descubra las orientaciones que se
armonía y desarrollo (cf. Gen 1,26-30). El vínculo especial con Dios explica la deben seguir para «guardarla y cultivarla» (cf. Gen 2,15). Pero se ha de subrayar
posición privilegiada de la pareja humana en el orden de la creación”160. que es contrario al verdadero desarrollo considerar la naturaleza como más
importante que la persona humana misma”165.
“Los resultados de la ciencia y de la técnica son, en sí mismos, positivos: los
cristianos lejos de pensar que las conquistas logradas por el hombre se oponen al El Magisterio Social también subraya la responsabilidad humana de preservar un
poder de Dios y que la criatura racional pretende rivalizar con el Creador, están, ambiente íntegro y sano para todos166: “La humanidad de hoy, si logra conjugar las
por el contrario persuadidos de que las victorias del hombre son signo de la nuevas capacidades científicas con una fuerte dimensión ética, ciertamente será
grandeza de Dios y consecuencia de su inefable designio”161. capaz de promover el ambiente como casa y como recurso, en favor del hombre y
de todos los hombres; de eliminar los factores de contaminación; y de asegurar
162
Centesimus annus, 36
163
Cf. Ecclesia in America, 20
159
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 452 164 Caritas in veritate, 33
160
Ibid., 451 165 Cf. Juan Pablo II, Discurso a los miembros de la Fundación Centessimus annus, (9-5-98), 2
161 166
Ibid., 457 Juan Pablo II, Mensaje Jornada Mundial de la Paz, 1998, 3

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condiciones de adecuada higiene y salud tanto para pequeños grupos como para “Los graves problemas ecológicos requieren un efectivo cambio de mentalidad
grandes asentamientos humanos. La tecnología que contamina, también puede que lleve a adoptar nuevos estilos de vida, a tenor de los cuales la búsqueda de la
descontaminar; la producción que acumula, también puede distribuir verdad, de la belleza y del bien, así como la comunión con los demás hombres
equitativamente, a condición de que prevalezca la ética del respeto a la vida, a la para un desarrollo común, sean los elementos que determinen las opciones del
dignidad del hombre y a los derechos de las generaciones humanas presentes y consumo, de los ahorros y de las inversiones”173.
futuras”167.
“¡Cuántos abusos y daños ecológicos se dan también en muchas regiones
En este contexto, Juan Pablo II, desde el confín de las Américas, señaló americanas! Basta pensar en la emisión incontrolada de gases nocivos o en el
proféticamente: “Desde el Cono Sur del Continente Americano y frente a los dramático fenómeno de los incendios forestales, provocados a veces
ilimitados espacios de la Antártida, lanzó un llamado a todos los responsables de intencionadamente por personas movidas por intereses egoístas. Estas
nuestro planeta para proteger y conservar la naturaleza creada por Dios: no devastaciones pueden conducir a una verdadera desertización de no pocas
permitamos que nuestro mundo sea una tierra cada vez más degradada y zonas de América, con las inevitables secuelas de hambre y miseria. El problema
degradante”168. se plantea, con especial intensidad, en la selva amazónica, inmenso territorio que
abarca varias naciones: del Brasil a la Guayana, a Surinam, Venezuela, Colombia,
La tutela del medio ambiente constituye un desafío para la entera humanidad: se Ecuador, Perú y Bolivia. Es uno de los espacios naturales más apreciados en el
trata del deber, común y universal, de respetar un bien colectivo169, destinado a mundo por su diversidad biológica, siendo vital para el equilibrio ambiental de
todos, impidiendo que se puedan “utilizar impunemente las diversas categorías todo el planeta”174.
de seres, vivos o inanimados –animales, plantas, elementos naturales–, como
mejor apetezca, según las propias exigencias170”. Es una responsabilidad que Ante esta situación, Aparecida nos deja “algunas propuestas y orientaciones:
debe crecer, teniendo en cuenta la globalidad de la actual crisis ecológica y la
consiguiente necesidad de afrontarla globalmente, ya que todos los seres a) Evangelizar a nuestros pueblos para descubrir el don de la
dependen unos de otros en el orden universal establecido por el Creador: creación, sabiéndola contemplar y cuidar como casa de todos los
“Conviene tener en cuenta la naturaleza de cada ser y su mutua conexión en un seres vivos y matriz de la vida del planeta, a fin de ejercitar
sistema ordenado, que es precisamente el cosmos”171. responsablemente el señorío humano sobre la tierra y los
recursos, para que pueda rendir todos sus frutos en su
“La responsabilidad de salvaguardar el medio ambiente, patrimonio común del destinación universal, educando para un estilo de vida de
género humano, se extiende no sólo a las exigencias del presente, sino también a sobriedad y austeridad solidarias.
las del futuro: Herederos de generaciones pasadas y beneficiándonos del trabajo b) Profundizar la presencia pastoral en las poblaciones más frágiles
de nuestros contemporáneos, estamos obligados para con todos y no podemos y amenazadas por el desarrollo depredatorio, y apoyarlas en sus
desinteresarnos de los que vendrán a aumentar todavía más el círculo de la esfuerzos para lograr una equitativa distribución de la tierra, del
familia humana. La solidaridad universal, que es un hecho y un beneficio para agua y de los espacios urbanos.
todos, es también un deber. Se trata de una responsabilidad que las c) Buscar un modelo de desarrollo alternativo, integral y solidario,
generaciones presentes tienen respecto a las futuras, una responsabilidad que basado en una ética que incluya la responsabilidad por una
incumbe también a cada Estado y a la Comunidad internacional”172. auténtica ecología natural y humana, que se fundamenta en el
evangelio de la justicia, la solidaridad y el destino universal de los
bienes, y que supere la lógica utilitarista e individualista, que no
somete a criterios éticos los poderes económicos y tecnológicos.
167
Juan Pablo II, Discurso a los participantes en Congreso Internacional sobre Ambiente y salud (24-3-97), 5 Por tanto, alentar a nuestros campesinos a que se organicen de
168
Juan Pablo II, Homilía en la Celebración de la Palabra para los fieles de Zona Austral de Chile 7; Punta Arenas, tal manera que puedan lograr su justo reclamo.
4 de Abril de 1987
169
Cf. Centesimus annus, 40
170
Sollicitudo rei socialis, 34
171
Ibid. 173
Cf. Centesimus annus, 36
172
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 46 174
Ecclesia in America, 25

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d) Empeñar nuestros esfuerzos en la promulgación de políticas Reflexión Final


públicas y participaciones ciudadanas que garanticen la
protección, conservación y restauración de la naturaleza. Hacia una “Civilización del Amor”
e) Determinar medidas de monitoreo y control social sobre la
aplicación en los países de los estándares ambientales
internacionales”175. 1. La inculturación del Evangelio o la evangelización de la cultura
Consciente de la fuerza renovadora del cristianismo, también en sus relaciones
con la cultura y la realidad social176, la Iglesia ofrece la contribución de su
enseñanza para la construcción de la comunidad de los hombres, mostrando el
significado social del Evangelio177. La Iglesia, con su doctrina social, ofrece sobre
todo una visión integral y una plena comprensión del hombre, en su dimensión
personal y social.
Reflexión:
1. ¿Qué acciones concretas podemos tomar para proteger el medio “La antropología cristiana anima y sostiene la obra pastoral de la inculturación de
ambiente en que nos movemos? la fe, dirigida a renovar desde dentro, con la fuerza del Evangelio, los criterios de
juicio, los valores determinantes, las líneas de pensamiento y los modelos de vida
2. ¿Qué campañas, desde tu Cáritas Parroquial se puede realizar del hombre contemporáneo: con la inculturación, la Iglesia se hace signo más
para sensibilizar en torno al problema ecológico? comprensible de lo que es, e instrumento más apto para su misión. La Iglesia es
consciente de que debe dar un gran paso adelante en su evangelización; debe
entrar en una nueva etapa histórica de su dinamismo misionero. En esta
perspectiva pastoral se sitúa la enseñanza social: la nueva evangelización, de la
que el mundo moderno tiene urgente necesidad... debe incluir entre sus
elementos esenciales el anuncio de la doctrina social de la Iglesia”178.

2. Recomenzar desde Cristo


También en lo que respecta a la cuestión social se debe evitar “la ingenua
convicción de que haya una fórmula mágica para los grandes desafíos de nuestro
tiempo. No, no será una fórmula lo que nos salve, pero sí una Persona y la certeza
que ella nos infunde: ¡Yo estoy con ustedes! No se trata, pues, de inventar un
nuevo programa. El programa ya existe. Es el de siempre, recogido por el
Evangelio y la Tradición viva. Se centra, en definitiva, en Cristo mismo, al que hay
que conocer, amar e imitar, para vivir en él la vida trinitaria y transformar con él la
historia hasta su perfeccionamiento en la Jerusalén celeste”179.

176
Cf. Congregación para el Clero, Directorio general de catequesis, 18
177
Cf. Redemptoris missio, 11
178 Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 523
175
Documento de Aparecida, 474 179 Novo millenio ineunte, 29

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3. Con una esperanza sólida haciéndolo la norma constante y suprema de la acción. Si la justicia “es de por sí
La Iglesia enseña al hombre que Dios le ofrece la posibilidad real de superar el apta para servir de árbitro entre los hombres en la recíproca repartición de los
mal y de alcanzar el bien. El Señor ha redimido al hombre, lo ha rescatado a caro bienes objetivos según una medida adecuada, el amor, en cambio, y solamente el
precio (cf. Cor.6, 20). El sentido y el fundamento del compromiso cristiano en el amor (también ese amor benigno que llamamos misericordia) es capaz de
mundo derivan de esta certeza, capaz de encender la esperanza, a pesar del restituir el hombre a sí mismo”183.
pecado que marca profundamente la historia humana: la promesa divina
garantiza que el mundo no permanece encerrado en sí mismo, sino abierto al
Reino de Dios. La Iglesia conoce los efectos del misterio de la impiedad (2 Tes.2,
7), pero sabe también que “hay en la persona humana suficientes cualidades y Por ello, sólo la caridad puede cambiar completamente al hombre184.
energías, y hay una bondad fundamental (cf. Gen.1,31), porque es imagen de su
Creador, puesta bajo el influjo redentor de Cristo, cercano a todo hombre, y
porque la acción eficaz del Espíritu Santo llena la tierra (Sab 1,7)”180.

De este modo, la esperanza cristiana confiere una fuerte determinación al


compromiso en el campo social, infundiendo confianza en la posibilidad de
construir un mundo mejor, sabiendo bien que no puede existir un “paraíso
Reflexión:
perdurable aquí en la tierra”181.
1. ¿Estoy dispuesto a ser en mi trabajo de Cáritas o en mi Parroquia
un signo de unidad, servicio constructor de una Iglesia
4. Para construir la “civilización del amor” Comunión?
“La finalidad inmediata de la doctrina social es la de proponer los principios y
valores que pueden afianzar una sociedad digna del hombre. Entre estos
principios, el de la solidaridad en cierta medida comprende todos los demás: éste
constituye uno de los principios básicos de la concepción cristiana de la
organización social y política.

Este principio está iluminado por el primado de la caridad que es signo distintivo
de los discípulos de Cristo (cf. Jn. 13, 35). Jesús nos enseña que la ley
fundamental de la perfección humana, y, por tanto, de la transformación del
mundo, es el mandamiento nuevo del amor (cf. Mt. 22, 40; Jn. 15, 12; Col. 3, 14;
Stgo. 2, 8). El comportamiento de la persona es plenamente humano cuando
nace del amor, manifiesta el amor y está ordenado al amor. Esta verdad vale
también en el ámbito social: es necesario que los cristianos sean testigos
profundamente convencidos y sepan mostrar, con sus vidas, que el amor es la
única fuerza (cf. 1Cor. 12,31-14,1) que puede conducir a la perfección personal y
social y mover la historia hacia el bien”182.

Para plasmar una sociedad más humana, más digna de la persona, es necesario
revalorizar el amor en la vida social –a nivel político, económico, cultural–,
180
Sollicitudo rei socialis 47
181 183
Mater et magistra, 211 Dives in misericordia, 14
182 184
Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia; 580 Cf. Novo milenio Ineunte, 49-50

60 61
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Orientación hacia
la organización concreta
de las Cáritas Parroquiales
“Al ser un don recibido por todos, la Caridad en verdad es una fuerza que funda la
comunidad, unifica a los hombres de manera que no haya barreras o confines. La
comunidad humana puede ser organizada por nosotros mismos, pero nunca
podrá ser sólo con sus propias fuerzas una comunidad plenamente fraterna ni
aspirar a superar las fronteras, o convertirse en una comunidad universal. La
unidad del género humano, la comunión fraterna más allá de toda división, nace
de la Palabra de Dios-Amor que nos convoca. Al afrontar esta cuestión decisiva,
hemos de precisar, por un lado, que la lógica del don no excluye la justicia ni la
yuxtapone a ella como un añadido externo en un segundo momento, y por otro,
que el desarrollo económico, social y político necesita, si quiere ser
auténticamente humano, dar espacio al principio de gratuidad como expresión
de fraternidad” (CiV Nº.34)

63
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

La Cáritas Parroquial
Vida y Relaciones
Introducción
Es necesario que comprendamos muy bien la identidad de la Cáritas Parroquial
para su constitución dentro de una comunidad parroquial.

La Cáritas Parroquial insiste en la necesidad de fundarse en la fe, viviendo una


espiritualidad de comunión y buscando siempre la esencia de sus acciones
caritativas en el amor de Dios.

Existe un ministerio personal o individual de la caridad que todo cristiano debe


ejercer al ser fiel a la fe en Dios que profesa, en Dios que es amor, y también existe
un ministerio comunitario de la caridad que la comunidad cristiana debe ejercer.
Por medio de Cáritas y de otras instituciones de tipo caritativo, se tiene que
concretar el sentido y contenido de la Iglesia en cuanto comunidad de caridad.

La acción caritativa y social de la Iglesia debe estar animada por una opción, llena
de amor y solidaridad, que hace toda la comunidad por los más pobres y
marginados. El mundo de hoy no entiende, aunque los valore, los gestos
individuales. Uno de los elementos más útiles para la fe es la mediación eclesial,
de ahí que el amor a los últimos, como signo de la gratuidad del amor de Dios y
del amor igualmente gratuito de los cristianos, tiene que hacerse visible y creíble
desde nuestra comunidad en cuanto tal, desde la Iglesia en cuanto tal,
concretada en sus diferentes niveles comunitarios.

Esta es la razón fundamental para que exista Cáritas Parroquial. Cáritas, como la
comunidad cristiana, además de escuchar y proclamar la Palabra, celebrar la fe,
rezar y testificar con su vida el Evangelio, se solidariza con los pobres con un amor
real por ellos, ya que sabe, por la fe y la Revelación, que son “sacramento de
Cristo”.

65
Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

2. La claridad de los límites, de nuestras responsabilidades como personas y


La cáritas Parroquial como iglesia, para evitar sentirse abrumados por la magnitud de los
la construcción de un proceso problemas y las solicitudes de las personas, llegando a abandonar el
formativo proyecto por desesperación.

El desarrollo del proceso formativo está acompañado de una progresiva


experiencia en la caridad, que propicia sobre todo las relaciones con las
Introducción personas, de tal forma que el conocimiento y la puesta en práctica van a la
Se sugiere comenzar un proceso de formación en el testimonio de la caridad par.
desde la propia realidad de la comunidad.

En muchas de nuestras organizaciones, tanto eclesiales como civiles, se tiene la Objetivo


idea de que el compromiso del voluntario se basa en la “buena voluntad”, con la Descubrir la necesidad de un adecuado proceso formativo congruente con la
intención de reunir una mayor cantidad de colaboradores, más que con la de realidad de la comunidad en el aspecto social, que sea gradual y desemboque en
hacer conciencia de la responsabilidad que se asume. Si agregamos a esto que una práctica de la verdadera caridad.
algunas personas esperan que toda la obra sea realizada por el Espíritu Santo sin
ninguna cooperación por parte de ellos, la necesidad de un proceso de formación
no encuentra espacio en esas comunidades.
1. Ver
Por este motivo es necesario cambiar nuestra forma de actuar y pensar al Partir de la realidad
respecto, sin llegar al extremo de querer agotar toda la información sobre el tema
antes de animarnos a actuar, propiciar experiencias, obtener respuestas, ¿En tu parroquia se han dado cursos relacionados con la acción social de
aprender de ellas y hacer propuestas. Todo es parte de un camino de formación. la Iglesia?
¿A quién han sido dirigidos esos cursos? ¿Quiénes asisten? ¿muchas o
El animador o el voluntario no pueden ser conformistas con nuestra realidad de pocas personas?
opresión e injusticia. Aquí hablamos de perfiles adecuados y necesarios para Los cursos, ¿en qué han beneficiado a tu comunidad?, o la falta de ellos,
realizar el servicio como voluntario y no de las capacidades estrictamente ¿en qué la han perjudicado?
profesionales que se pide a los que desempeñan un servicio específico con una ¿Qué temas consideras que hace falta tratar en tu comunidad?
responsabilidad institucional. ¿Hace falta, en tu parroquia, un curso sobre la pastoral de la Caridad? ¿Sí,
no, por qué?
Junto al conocimiento que se irá adquiriendo, deben prepararse procesos de
¿Quiénes asistirían?
formación en el espíritu de Cáritas, es decir, en la dimensión eclesial del servicio
¿Qué resultados se esperarían al terminar el curso?
caritativo. Caminos de carácter espiritual que encuentren en la Eucaristía
dominical y en la Palabra la fuente y culmen de su obrar.
2. Juzgar - Iluminar
Los dos criterios que es necesario respetar en la preparación de un proceso de
formación son: Descubrir las razones, fundarse en las motivaciones

1. El conocimiento del lugar y de las personas, evitando pretender llegar a De la Palabra de Dios:
proyectos perfectos o muy generales y posteriormente irrealizables, que
conduzcan al abandono por desánimo; es mejor dar pasos pequeños, “Todo poder se me ha dado en el cielo y en la tierra. Por eso, vayan y hagan
concretos, y cambiar el curso si el caso lo requiere: despacio se llega lejos. que todos los pueblos sean mis discípulos. Bautícenlos en el nombre del
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Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñelos a cumplir todo lo que yo b) Entablar contacto con personas capacitadas en estos temas, grupos ya
les he encomendado. Yo estoy con ustedes todos los días hasta que se sean de la parroquia o de otras instituciones, con la Cáritas Diocesana,
termine este mundo” (Mt. 28, 19-20). para que acompañen el camino formativo de los diversos agentes
comprometidos en el ámbito del testimonio de la caridad.
“Acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la convivencia, a
la fracción del pan y a las oraciones” (Hch 2,42).
c) Crear espacios adecuados de evaluación de este proceso comunitario.

Del Magisterio:

“Nuestra misión pastoral es esencialmente un servicio de inspiración y


educación de las conciencias de los creyentes, para ayudarles a percibir
las responsabilidades de su fe, de su persona y de su vida social”. (II
Conferencia General del Episcopado Latinoamericano Medellín,
Conclusiones, Justicia III, 6).

3. Actuar
Identificar procesos, elaborar proyectos, fijarse metas
a) Enumera según su urgencia los siguientes temas e indica si crees que
existen otros también importantes:
( ) Atención de los adultos mayores
( ) Madres adolescentes
( ) La salud de nuestra comunidad
( ) El cuidado del agua
( ) Sanas relaciones intrafamiliares
( ) Violencia intrafamiliar
( ) Derechos de los niños y jóvenes
( ) Visita a enfermos
( ) Responsabilidad y compromiso ciudadano
( ) Drogas, alcohol,
( ) Soledad
( ) Otros:

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c) Otro riesgo, sobre todo para los agentes de pastoral y para los sacerdotes
La construcción de es realizar la pastoral de la caridad y solidaridad sin adecuada
la Cáritas Parroquial planificación.

Hay que

organizar la forma, el espacio, el horario de atención a las


Introducción personas,
Son muchas las dificultades para formar las Cáritas Parroquiales. Enumerar formarse para elegir junto con ellos la manera más conveniente
algunos de los factores que obstaculizan su realización puede ser útil para dar un de ayudarles,
nombre a los problemas y buscar juntos una solución. proponer diferentes soluciones integrando a quienes solicitan la
ayuda,
a) La constitución de las Cáritas encuentra la dificultad de hacer y descargando del sacerdote toda la acción socio-caritativa de la
comprender a fondo su identidad. Cuando se dice que la Cáritas comunidad, ayudando a solucionar las demandas de una manera
Parroquial tiene ante todo una tarea pedagógica, surgen las primeras que lleve a la promoción de la persona.
objeciones, como si la caridad tuviera como única finalidad traducirse en ayudarles a que sean gestores de su propio desarrollo 'ayúdate
algo que deba hacerse en la comunidad o en beneficio de personas que yo te ayudaré'.
externas a la misma (como dar dinero a mendigos). La Cáritas Parroquial
insiste en la necesidad de fundarse en la fe; es decir, que el servicio a los d) Educar significa ayudar a entender que la caridad va más allá del regalo de
otros no sólo sea el resultado de la buena voluntad y del buen ánimo de cosas o la solución inmediata de los problemas; es entender que por
los creyentes, sino el fruto maduro del compromiso con su fe. medio de la escucha, del tiempo ofrecido, de la participación en los
sufrimientos, del acompañamientos de las personas, se puede asistir a
Formarse en la caridad significa buscar el fundamento de las acciones los pobres para que asuman la responsabilidad de su propia existencia y
caritativas y encontrar respuestas en la Palabra de Dios, la catequesis, la eviten la de la asistencia social.
liturgia y, de modo particular, la Eucaristía.
Existen diversas razones teológicas, espirituales y prácticas para descubrir a
Cáritas como la respuesta organizada de nuestra Iglesia en su empeño de vivir la
b) La tarea educativa exige además otra conversión, centrada en la caridad. Es necesario entender que la labor de Cáritas Parroquial debe ser
dimensión eclesial de la caridad, que no es sólo el logro o carisma compromiso de toda la comunidad parroquial.
personal de quien es “bueno”, sino el testimonio que la comunidad entera
está llamada a dar, por su fidelidad al Evangelio. Los sacerdotes deberán tener una participación decisiva en esto: su correcta
formación sobre la identidad y las tareas de la Cáritas, su compromiso como
Educar a la comunidad (es decir, a los fieles que frecuentan nuestra formadores de verdaderos cristianos, su tarea pastoral en la comunidad, los
parroquia) significa hacerle comprender que la caridad no es un factor convierte en naturales promotores de la Cáritas Parroquial.
secundario en su vida de cristianos, sino el punto más alto de realización.
Las formas concretas de participación de los fieles podrán ser muy Desarrollo de la reunión
distintas, cuidándose de no caer en estructuras de poder sobre las
personas que formen este grupo; del mismo modo, la fe, la oración y las Objetivo
acciones caritativas no deben ser tribuna para las personas que buscan el
reconocimiento y el aplauso. Provocar la reflexión para iniciar el proceso de constitución de la Cáritas
Parroquial como parte fundamental de la identidad, organización y testimonio
misionero de la Iglesia.

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1. Ver Te das cuenta que el Señor no le da una respuesta directa, la parábola es


la respuesta: analízala.
Partir de la realidad “Ahora les doy mi mandamiento: Ámense unos con otros como yo les amo
a ustedes” (Jn 15,12).
¿En nuestra comunidad está constituido el Consejo Pastoral Parroquial?
¿Existen personas o grupos que trabajen en el ámbito de la pastoral social
o de la caridad, quiénes son, a qué hora se reúnen, qué hacen? Del Magisterio:
Si existen, ¿promueven que toda la comunidad participe en esa labor?
¿Piensas que pueden haber personas dispuestas a constituir la Cáritas El Papa nos dice: “a partir de la comunión intraeclesial, la caridad se abre
Parroquial? por su naturaleza al servicio universal, proyectándose hacia la práctica de
¿Se responde sólo cuando hay emergencias o se intenta planificar las un amor activo y concreto con cada ser humano” (NMI 49).
acciones?
¿Se tiende más a hacer cosas que a educar a la comunidad? 3. Actuar
¿Qué entendemos por solidaridad?
¿Existe o se puede favorecer una mentalidad de solidaridad? Identificar procesos, elaborar proyectos, fijarse metas
¿Cuáles son los modos de pensar, las ideas y las objeciones más
frecuentes que surgen frente a la propuesta de la formación de la Cáritas a) Propiciar momentos para compartir la reflexión en los ambientes
Parroquial? pastorales (por ejemplo, Consejo Pastoral Parroquial, grupos de
catequistas, etc.), a partir de las preguntas y razones antes expuestas.

b) Nombrar algunas personas para que junto con el párroco insistan sobre la
2. Juzgar - Iluminar necesidad de dar vida a la Cáritas Parroquial.
Descubrir las razones, fundarse en las motivaciones
c) Profundizar en la identidad y las tareas de la Cáritas Parroquial.
De la Palabra de Dios:
d) Incluir en su formación a los demás animadores pastorales, como
“Entonces, todo lo que ustedes desearían de los demás, háganlo con catequistas, animadores litúrgicos, jóvenes.
ellos: ahí tienen la Ley y los Profetas” (Mt 7, 12).
Pero el doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta e) Realizar un primer programa de trabajo, por ejemplo:
pregunta: «¿Y quién es mi prójimo?». Jesús volvió a tomar la palabra y le
respondió: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de Determinar la situación de la parroquia en relación con las
unos bandidos, que lo despojaron de todo, lo hirieron y se fueron, necesidades más urgentes de la comunidad.
dejándolo medio muerto. Casualmente bajaba por el mismo camino un Evaluar la prioridad de las necesidades y al mismo tiempo las
sacerdote: lo vio y siguió de largo. También pasó por allí un levita: lo vio y fuerzas, los instrumentos y las posibilidades concretas de
siguió su camino. Pero un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a intervención.
él, lo vio y se conmovió. Entonces se acercó y vendó sus heridas, Sensibilizar a toda la comunidad por medio de la selección de
cubriéndolas con aceite y vino; después lo puso sobre su propia montura, avisos adecuados, como por ejemplo, en la asamblea dominical,
lo condujo a un albergue y se encargó de cuidarlo. Al día siguiente, sacó en el boletín parroquial, etc.
dos denarios y se los dio al dueño del albergue, diciéndole: “Cuídalo, y lo Exhortar a la caridad a todo el Consejo Pastoral, por ejemplo con
que gastes de más, te lo pagaré al volver”. ¿Cuál de los tres te parece que citas de la Encíclica Caritas in veritate.
se portó como prójimo del hombre asaltado por los ladrones?». «El que Vivir, al interior de los grupos parroquiales, la primera experiencia
tuvo compasión de él», le respondió el doctor. Y Jesús le dijo: «Ve, y procede de comunión recíproca, en función de la animación de la
tú de la misma manera». (Lc 10,29-37). comunidad en el testimonio de la caridad.

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Es un instrumento necesario para la vida de un organismo pastoral: es la


El estatuto de línea y garantía de un trabajo en conjunto y ordenado para fines comunes.
la Cáritas Parroquial Es sólo un instrumento: regula el actuar de un organismo vivo y promueve
que se alimente de los valores en los cuales juntamente se cree, pero
sobre todo del Espíritu Santo, que vierte en los corazones la misma
caridad de Dios: “el amor de Dios ha sido derramado en nuestros
corazones por medio del Espíritu Santo que se nos ha dado” (Rm. 5,5).
Introducción Favorece el compromiso: el don de Dios nos fue dado para que se traduzca
La propuesta aquí presentada pretende ser sólo una línea sobre la cual, en caminos concretos, de servicio al prójimo, especialmente a los
posteriormente, cada comunidad parroquial puede elaborar su propio estatuto, necesitados.
adecuado a las exigencias y a las situaciones locales. Promueve la integración de un grupo de personas y de actividades que
están en consonancia con las Cáritas parroquiales de toda una Iglesia
El estatuto de una Cáritas Parroquial no debe entenderse con el mismo criterio de diocesana o nacional.
los estatutos de asociaciones, cooperativas o de otras instituciones, ya que no
puede y no desea tener carácter jurídico. ¿Cómo construir un estatuto de la Cáritas Parroquial?

Lo importante es que el estatuto de la Cáritas Parroquial sea un punto de a) Involucrar de manera particular al Consejo Pastoral Parroquial, a la
referencia claro y objetivo para la atención pastoral. Debe ser fruto no de Asamblea Parroquial, a los diversos grupos comprometidos en la pastoral
opiniones personales, sino de las indicaciones del Magisterio, de nuestros parroquial para compartir, ampliamente, las ideas fundamentales.
pastores. b) Identificados los objetivos y líneas de acción, darse un periodo de tiempo
necesario (tres meses) para experimentar y evaluar si el contenido es
La Cáritas es parroquial no porque el párroco o el director de Cáritas así lo adecuado.
determinen, sino porque se ubica en un territorio que es el lugar del ejercicio de la c) Redactar el texto definitivo por un periodo que corresponda (al
fe y la caridad de la comunidad cristiana. nombramiento del Consejo Pastoral Parroquial) y realizar después una
evaluación de la propuesta.

Desarrollo de la reunión
Borrador del Estatuto de la Cáritas Parroquial
Objetivo
Artículo 1
Elaborar, conocer y trabajar la formación de la Cáritas Parroquial, con la siguiente La Cáritas Parroquial es el organismo pastoral que tiene la tarea de animar,
propuesta de Estatuto. coordinar y promover el testimonio de la caridad en la comunidad con una función
prevalentemente pedagógica.
¿Por qué un estatuto de Cáritas Parroquial?
Artículo 2
Porque: Las funciones de la Cáritas Parroquial son:

No está establecido como un documento legal o burocrático, sino como un 1. Sensibilizar, animar y formar a la comunidad parroquial en el testimonio de
instrumento de dirección, orientación, reflexión, de revisión y de la caridad y en el compromiso por la justicia y la paz, siendo fieles al
perspectivas sobre las cuales periódicamente evaluarse para verificar precepto evangélico de la caridad y respondiendo a los problemas del
cómo se está trabajando. propio ambiente.

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2. Conocer la realidad social, las formas de pobreza, así como las causas y Artículo 6
circunstancias que las originan, a fin de favorecer la toma de conciencia La Cáritas Parroquial nombra un encargado para las siguientes tareas:
de la comunidad parroquial. (Importante: Estas tareas son responsabilidad de todos y cada uno de los
3. Promover la información y sensibilización en relación con los problemas miembros, de manera que la función de los encargados es coordinarla y llevarla a
de la pobreza en la ciudad y en el Perú. cabo junto con la comunidad).
4. Estudiar y proponer diversas formas de cooperación entre los integrantes
de la comunidad: Cáritas Arquidiocesana, otras organizaciones sociales y a) Voluntariado: se encarga de animar y formar el trabajo voluntario de la
esfuerzos gubernamentales. comunidad; debe ser una escuela en donde las personas aprendan a
5. Promover y favorecer el compromiso del voluntariado y asegurarles una poner sus propias capacidades al servicio de los demás.
formación espiritual y humana adecuada.
6. Promover estilos de vida basados en la hospitalidad hacia los pobres y el b) Fondo de los pobres: se crea con formas de participación comunitaria y es
don de sí mismos como testimonio de caridad. destinado a proyectos de la misma Cáritas. Se encarga de animar y
7. Relacionar y coordinar la acción de diversos grupos con la Iglesia organizar en su parroquia las colectas para este fin.
universal.
8. La labor caritativa realizada en la parroquia tiene que ser un trabajo en Para profundizar
equipo: el párroco y las personas comprometidas con diferentes
responsabilidades, sin perder de vista que toda la comunidad tiene un Documentación de Cáritas:
papel muy importante.
9. Actitud profética. La comunidad parroquial tiene que ser el altavoz de los “Algunas funciones de la Cáritas Parroquial se expresan enseguida. No
pobres, devolverles la palabra y defender sus derechos. quiere decir que la relación es exhaustiva: la caridad no tiene límites, ni es
un programa de trabajo. Busca compartir tareas que algunas Cáritas en
Artículo 3 su desarrollo han descubierto como propias a fin de que constituya, para
La Cáritas Parroquial forma parte del Consejo Pastoral y programa su trabajo en la comunidad parroquial, una propuesta para vivir en fidelidad la misión de
colaboración con los responsables de los diversos ámbitos de la vida parroquial: siempre, a través de un instrumento pastoral comunitario de carácter
pastoral profética, litúrgica, de la caridad y pastorales específicas. educativo y promocional.

Artículo 4 Concientizar a la comunidad parroquial de su propia realidad:


La Cáritas Parroquial, expresión oficial de la pastoral socio-caritativa de la política, social, económica y cultural a partir de un diagnóstico
parroquia, tiene una estructura flexible que responde a las características participativo.
humanas y territoriales de la comunidad, con el fin de animar cada expresión y Estimular a las familias, a los grupos, a los miembros de la
servicio de la vida parroquial. comunidad parroquial a vivir una vida caracterizada por la
acogida y la solidaridad con quienes viven distintas formas de
Artículo 5 marginación y de necesidad.
El párroco es quien dirige la Cáritas Parroquial. Cultivar una espiritualidad conjunta desde la lectura de la Biblia y
El coordinador es un miembro de la comunidad que participa en el Consejo el magisterio, en la vida litúrgica, desde las implicaciones de las
Pastoral y su función es coordinar, dirigir y animar en estrecha comunicación con bienaventuranzas, en las obras de misericordia, desde la propia
el párroco. cultura, que anime y sostenga el proceso comunitario.
La Cáritas Parroquial se reúne periódicamente (semanal, quincenalmente), tiene Buscar la forma de organización adecuada para enfrentar las
una relación cercana de colaboración y consulta con la Cáritas diocesana, necesidades sociales de la propia comunidad.
participando en los encuentros de formación y programación por ella propuestos. Promover el autosostenimiento y el voluntariado en cada una de
las comunidades para que la parroquia sea responsable de su
propio proceso.

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Acompañar la gestión, ejecución y evaluación de proyectos y Ayudar a toda la comunidad a poner la caridad en el
programas de acción social de manera integral en lo inmediato y a centro del testimonio y de toda la vida cristiana.
largo plazo. Ayudar a superar el asistencialismo como la
Favorecer y crear espacios de solidaridad dentro de la parroquia y indiferencia hacia las demandas humanas, hacia las
con otras parroquias. relaciones humanas, para abrirse a la caridad
Participar en los niveles de reflexión y de decisión de Cáritas evangélica en términos de cercanía y actitud de
diocesana. compartir.
Redescubrir y evangelizar las formas solidarias existentes. Promover procesos educativos que vayan favoreciendo
Establecer mecanismos de comunicación de bienes materiales y el pasar de los gestos opcionales de caridad, a la opción
culturales. de vivir una vida en la que se comparte. De esta manera
Conocer y denunciar a nivel local las causas que generan la crecerá la conciencia del valor evangelizador del
pobreza y las necesidades presentes en el territorio. servicio y de la promoción humana por los pobres.
Estudiar y proponer respuestas frente a las necesidades,
estimulando para que intervengan las instituciones
gubernamentales y la sociedad civil.
Definir en la comunidad local estudios de la realidad nacional y
mundial, así como diversos esfuerzos que se realizan en esos
ámbitos. Hacer de la información una forma de participación.
Participar y animar a nivel local de los esfuerzos conjuntos que
emprenda Cáritas en sus diversos niveles: diocesano, nacional e
internacional.
Mantener comunicación solidaria con las Cáritas parroquiales
vecinas y, particularmente con la Cáritas diocesana.
Ayudar a la Cáritas diocesana a desarrollar su compromiso de
servicio subsidiario hacia las parroquias”.

“La Cáritas Parroquial forma parte del Consejo de Pastoral Parroquial,


debe estar integrada por personas con diferentes capacidades,
sensibilidades, de diversas edades y situaciones.

Cuando no exista un Consejo de Pastoral Parroquial, el párroco


puede escoger entre los fieles algunas personas a las cuales
confiere la tarea específica de la animación, formación y
coordinación del testimonio de la caridad.
En las parroquias más pequeñas, rectorías o capillas, el
sacerdote puede escoger a una o dos personas sensibles y con
disponibilidad para llevar a cabo la animación de la Pastoral de la
Caridad.
El sujeto y agente de la caridad es toda la comunidad parroquial.
Las Cáritas, en la parroquia, tienen la tarea de:

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¿Qué iniciativa pastorales o de conjunto expresan concretamente estas


La Cáritas Parroquial experiencias?: centros de formación para agentes laicos en acciones
y la pastoral de conjunto específicas, puesta en marcha de servicios de escucha y recepción,
intervenciones en situaciones de emergencia, caminos de espiritualidad.
¿Con qué nos enfrentamos al proponer la pastoral de conjunto?

Introducción 2. Juzgar - Iluminar


La propuesta aquí presentada pretende ser sólo una línea sobre la cual, Descubrir las razones, fundarse las motivaciones
posteriormente, cada comunidad parroquial puede elaborar su propio estatuto,
adecuado a las exigencias y a las situaciones locales. De la Palabra de Dios
“Hay diferentes dones, pero el Espíritu es el mismo; hay diversos servicios,
El estatuto de una Cáritas Parroquial no debe entenderse con el mismo criterio de
pero el Señor es el mismo; hay diferentes obras, pero es el mismo Dios
los estatutos de asociaciones, cooperativas o de otras instituciones, ya que no
quien obra todo y en todos” (1 Cor. 12, 4-6).
puede y no desea tener carácter jurídico.
Del Magisterio
Lo importante es que el estatuto de la Cáritas Parroquial sea un punto de
referencia claro y objetivo para la atención pastoral. Debe ser fruto no de “Hace falta promover una espiritualidad de la comunión, proponiéndola
opiniones personales, sino de las indicaciones del Magisterio, de nuestros como principio educativo en todos los lugares donde se forma el hombre y
pastores. el cristiano, donde se educan los ministros del altar, las personas
consagradas y los agentes pastorales, donde se construyen las familias y
La Cáritas es parroquial no porque el párroco o el director de Cáritas así lo las comunidades. Espiritualidad de la comunión significa ante todo una
determinen, sino porque se ubica en un territorio que es el lugar del ejercicio de la mirada del corazón sobre todo hacia el misterio de la Trinidad que habita
fe y la caridad de la comunidad cristiana. en nosotros, y cuya luz ha de ser reconocida también en el rostro de los
hermanos que están a nuestro lado. Espiritualidad de la comunión
significa, además, capacidad de sentir al hermano de fe en la unidad
profunda del Cuerpo místico y, por tanto, como « uno que me pertenece »,
Desarrollo de la reunión
para saber compartir sus alegrías y sus sufrimientos, para intuir sus
deseos y atender a sus necesidades” (Juan Pablo II. Novo Millennio
Objetivo Ineunte 43).
Descubrir a la Cáritas Parroquial como promotora de la pastoral integral o de De la Documentación de Cáritas:
conjunto en nuestras comunidades.
“La pastoral social da credibilidad a toda la misión de la Iglesia. Junto con
1. Ver las distintas expresiones de la pastoral profética y de la pastoral litúrgica,
la pastoral social suscita, acompaña y sostiene al creyente en su proceso
Partir de la realidad de adhesión a la fe y vida apostólica. Se esperaría de la catequesis que
provoque en los catequizandos una vocación de servicio con relación al
Instituciones y organizaciones civiles y de gobierno, que realizan programas en mundo, y de la liturgia, que impulse a los cristianos a vivir más
relación con los más necesitados. responsablemente sus propios compromisos en la vida. En consecuencia,
que la pastoral social se nutra de la proclamación de la Palabra y de la
¿Existen experiencias de pastoral de conjunto, de colaboración continua celebración de la fe”.
entre las parroquias?

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3. Actuar La Cáritas Parroquial


Identificar procesos, elaborar proyectos, fijarse metas y la Cáritas Diocesana
a) Hacer una lista de los servicios sociales o acciones caritativas que tiene
cada parroquia y compartirla con otras parroquias.
b) Hacer un directorio de servicios, civiles y de otras instituciones que
pueden apoyar esta acción. Introducción
c) Organizar momentos de encuentro con párrocos y laicos.
d) Buscar soluciones para superar la costumbre de lamentación y Cáritas, como organismo eclesial, es considerada en todo el mundo como la obra
resignación por la situación actual. mediante la cual, de manera orgánica y organizada, una Iglesia diocesana, en
e) Redescubrir la espiritualidad de la historia, de los signos de los comunión con otras Iglesias diocesanas, promueven la pastoral de la caridad y la
tiempos, de la proyección al servicio del Reino. solidaridad.
f) Respaldar de manera convencida y constante la actuación de los
organismos de comunión parroquiales e interparroquiales como el Insistimos en la naturaleza eclesial de Cáritas: no es “de” la Iglesia, ni está “en” la
Consejo Pastoral, el Consejo para los Asuntos Económicos, los Iglesia: Cáritas es la Iglesia que promueve, organiza, articula, colabora y coopera
encuentros de fraternidad entre sacerdotes, etc. en las acciones socio caritativas que surgen tanto en la comunidad eclesial como
fuera de ella.

Así como la Cáritas nacional tiende a ser cada vez más un servicio para las Cáritas
diocesanas, éstas tienden a ser cada vez más un órgano de servicio para las
Cáritas Parroquiales.

Siendo la Cáritas un organismo eclesial, es necesario, por razones de coherencia,


que se refleje en ella la estructura y la forma de la Iglesia misma. Tomando como
referencia la figura de la Iglesia, y la comunidad diocesana presidida y guiada por
el obispo, la relación entre la Cáritas Parroquial y la Cáritas diocesana no puede
más que responder al criterio de la comunión, de la colaboración y del
intercambio.

A su vez, la Cáritas Parroquial invita a la comunidad a la vivencia de la caridad,


ayuda a introducir en los proyectos pastorales la dimensión caritativa, tiene
abierta la conciencia a las necesidades y a las realidades, tanto diocesanas como
mundiales, y representa y organiza diversas intervenciones concretas apoyando
al voluntariado. Por lo tanto, la diferencia entre las Cáritas Parroquiales y la
Cáritas diocesana es que aquéllas se dirigen a toda la comunidad parroquial, y la
diocesana a toda la diócesis.

Desarrollo de la reunión
Es necesario que para esta reunión se prepare la proyección del video de la
Cáritas diocesana.

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Del magisterio

Objetivo De la documentación de Cáritas:

Conocer la identidad de la Cáritas Parroquial y de la Cáritas diocesana para “Cáritas no actúa en nombre propio sino en nombre de la comunidad
descubrir la relación, cooperación y espacios de comunión que deben existir parroquial y de su pastor. Se integra en la base de la comunidad, no
entre ellas. entrando en competencia con otros grupos, ni dedicándose a realizar la
caridad por otros.
1. Ver
“Las Cáritas diocesanas son, a nivel local, la expresión y el instrumento de
Partir de la realidad la “caridad”. La práctica, a nivel diocesano, nacional e internacional, ha
evidenciado la existencia de una diversidad muy grande entre las Cáritas,
Instituciones y organizaciones civiles y de gobierno, que realizan programas en
sobre todo .entre las Cáritas diocesanas. Sin embargo, a pesar de las
relación con los más necesitados.
diferencias, en esta variedad de modelos existen elementos comunes
¿Qué conoces de la Cáritas diocesana? entre ellas Cáritas es un signo e instrumento para dar vida a las diócesis
El director, la sede, sus programas, proyectos, campañas, ¿qué relación “rehabilitando la caridad”, para vivir el amor preferencial por los pobres”.
tiene con tu parroquia?
¿Conoces o has participado del Taller para la formación y 3. Actuar
acompañamiento de las Cáritas parroquiales que brinda Cáritas
Identificar procesos, elaborar proyectos, fijarse metas
diocesana?
¿Conoces alguna Cáritas Parroquial? ¿en dónde, qué proyectos tienen? La colaboración entre la Cáritas Parroquial y diocesana sólo podrá darse en un
¿Cuáles son las dificultades y los problemas encontrados en la espíritu de voluntad y diálogo, de manera que las acciones sean logro de la Iglesia
constitución de la Cáritas Parroquial? Universal y no patrimonio de un grupo. Para esto es necesario:
¿Se podría decir que colaboran juntos en la función educativa y formativa
de la comunidad entera? a) Revisar el conocimiento que se tiene de la presencia y de la vida de las
¿Cómo colabora la Cáritas diocesana con la Cáritas Parroquial en el Cáritas parroquiales en nuestra diócesis.
conocimiento y apoyo de los pobres?
¿Cómo colabora la Cáritas parroquial en las campañas y proyectos de la Hacer una lista de las acciones formativas, asistenciales, o de
Cáritas diocesana? promoción humana que ha realizado la Cáritas Parroquial y la
Cáritas diocesana en nuestra comunidad.
2. Juzgar - Iluminar
b) Nombrar a una persona del grupo para que participe en el Taller
Descubrir las razones, fundarse en las motivaciones diocesano para la promoción, formación y acompañamiento de las Cáritas
parroquiales.
Del Magisterio
c) Realizar, en colaboración con la Cáritas diocesana, programas que
“El servicio de las instancias diocesanas es vital para fomentar el sentido traduzcan con suficiente claridad la tarea formativa de Cáritas.
de unidad y pertenencia en los diferentes ambientes y sectores. Por tanto,
son las primeras responsables de construir el cimiento de la pastoral de d) Organizar encuentros anuales de evaluación y programación común
conjunto. Los organismos diocesanos y sus responsables no están (congresos, seminarios) entre la Cáritas diocesana y las Cáritas
llamados a ser la piedra que remata el edificio, sino el cimiento que parroquiales.
sostiene y da consistencia a los programas en los que se desarrolla el plan
pastoral diocesano”.

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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

Por otra parte, el animador de la Cáritas Parroquial no debe desconocer sus


Los animadores de la propias limitaciones “pero debe centrar toda su atención en factores positivos”,
Cáritas Parroquial como valorar la disponibilidad de tiempo, energías, personas y medios. Es muy
peligroso, sobre todo espiritualmente, perderse en los límites y exigir a la Cáritas
Parroquial y a sí mismo niveles imposibles de compromiso. Esta consideración
se complementa con el conocimiento de que la Cáritas Parroquial no sustituye la
Introducción obra y los deberes del Estado.

La animación, tarea prioritaria de la Cáritas Parroquial, debe fortalecer y ayudar a Nuestras acciones caritativas como creyentes tienen ante todo un valor teológico,
mejorar las acciones de la pastoral de la caridad en cada comunidad. es decir, manifiestan que el Reino de Dios ha llegado a nosotros. Por esto es
necesario que entre los promotores de Cáritas y las organizaciones sociales se
Toda tarea y compromiso deben tener una adecuada formación, no se pueden, ni establezca, en la medida de lo posible, una colaboración donde cada uno
deben improvisar, en especial la tarea de animar a la comunidad al testimonio de mantenga su propia identidad y sus propias responsabilidades.
la caridad.

Para nosotros, formación en la caridad no sólo significa: Desarrollo de la reunión

acumulación de conocimientos. Objetivo


adiestramiento y organización.
conocimiento del surgimiento y desarrollo de la Cáritas, en cualquiera de Reconocer la importancia del animador de la Cáritas Parroquial como promotor
sus dimensiones. del proceso formativo con la finalidad de que todos respondamos, solidaria y
responsablemente, a las necesidades de la comunidad.
Para Cáritas Parroquial una formación integral es:
1. Ver
Una experiencia de Iglesia que se expresa por medio de una participación
en la vida cotidiana de cada comunidad. Reflexionar en torno a las siguientes preguntas:
No sólo una clase pasiva, sino participación creativa en los momentos de
oración y catequesis que fundamentan nuestra acción caritativa. ¿Quién anima las acciones caritativas en nuestra parroquia?
¿Esta(s) persona(s) participa(n) en el Consejo de Pastoral Parroquial?
La formación en la caridad, en la solidaridad, se manifiesta en una mentalidad ¿Qué relación existe entre los animadores de la caridad, de la liturgia y los
abierta y disponible, lejos de pugnas y de formas de racismo excluyente. catequistas?
El animador de la caridad:
Para ello, requerimos una gran capacidad de diálogo y escucha, así como superar ¿Ayuda a la comunidad a descubrir la dimensión social de la fe?
la idea de que caridad es igual a limosna. De esta manera será fácil ubicar la ¿Cómo se forma y prepara a los demás para el servicio de la
causa y el porqué de las situaciones de pobreza y de sufrimiento que piden caridad?
nuestra intervención. ¿Con qué propuestas procura involucrar a toda la comunidad?
¿Se comprende la necesidad de una formación adecuada para aquellos
La acción de Cáritas no puede jamás estar separada del respeto a la dignidad de que intentan volverse animadores de la caridad en la parroquia? ¿Está
la persona ni olvidar su capacidad para salir adelante. Debe, más bien, conocer y todavía presente en la mentalidad de los parroquianos la idea de que la
promover sus propios dones y cualidades. caridad se identifica con el dar algo, con el dar limosna?

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Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales Manual para la Promoción y Acompañamiento de las Cáritas Parroquiales

2. Juzgar - Iluminar Inclinándose por un estilo de presencia cercana que promueva


Descubrir las razones, fundarse en las motivaciones las relaciones humanas, la compañía, el compromiso, la empatía,
el compartir como traducción de la Encarnación de Jesucristo.
De la Palabra de Dios: Favoreciendo la atención a las relaciones familiares, de amistad,
de buenos vecinos, de pertenencia social y cultural.
“En verdad les digo que cuando lo hicieron con alguno de estos mis Promoviendo participaciones al momento de estudiar y decidir
hermanos más pequeños, lo hicieron conmigo” (Mt 25,40). iniciativas de tipo formativas e informativas de asistencia y
promoción.
“Vayan y cuéntenle a Juan lo que han visto y oído: que los ciegos ven, que
los cojos andan, que los leprosos quedan sanos, que los sordos oyen, que
los muertos resucitan y que se predica el Evangelio a los pobres” (Mt
3. Actuar
11,5). Identificar procesos, elaborar proyectos, fijarse metas

Del Magisterio a) Nombrar un pequeño equipo (dos o tres personas) para que sean los
animadores de la caridad en la parroquia.
“La promoción humana implica actividades que ayudan a despertar la
conciencia del hombre en todas sus dimensiones y a valerse por sí mismo b) Presentar este equipo a la comunidad a través de:
para ser protagonista de su propio desarrollo humano y cristiano. Educa
para la convivencia, da impulso a la organización, fomenta la el Consejo Pastoral
comunicación cristiana de bienes, ayuda de modo eficaz a la comunión y a la formalización de su compromiso en alguna Eucaristía
la participación”. dominical.
el Boletín Parroquial
El trabajo de animación es de sensibilización y procurará favorecer que la la bendición del local de la Cáritas Parroquial.
comunidad practique de alguna manera la comunicación de bienes. Ya
algunas parroquias un domingo al mes organizan la colecta con gestos y c) Realizar una profunda y continua catequesis sobre la caridad, para crear y
signos de participación solidaria para apoyar alguna iniciativa o pequeño motivar la necesidad de hacer surgir animadores de la caridad.
proyecto concreto de servicio a los demás.
d) Manifestar la relación entre la vocación bautismal y el servicio a los
C.E. Puebla pobres, para animar la caridad.
De la Documentación de Cáritas: e) Ofrecer herramientas y el tiempo necesario de formación a las personas
Para favorecer esta Unión Fraterna, la Cáritas Parroquial propone algunos que son sensibles a la animación en el ámbito del testimonio de la
criterio para la responsabilidad comunitaria: caridad.

Favorecer la educación en la comunidad a partir de experiencias f) Relacionarlos con animadores de otras parroquias o vicarías y con la
de participación y corresponsabilidad. Cáritas Arquidiocesana, con el fin de constituir un grupo de trabajo que
Ayudar a la comunidad parroquial a identificarse como ciudadano tenga la tarea común de sostener, acompañar y animar la vida de las
que se vincula en red con los diversos actores de la sociedad civil, Cáritas parroquiales.
hacia la construcción de respuestas a las necesidades
comunitarias.
Ampliar la atención y los intereses de la comunidad y de cada
individuo, más allá de lo inmediato, es decir, hacia los horizontes
del Reino de Dios.
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