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ÁREA DE ARQUEOLOGÍA

ESCUELA DE HISTORIA
UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA

APUNTES
ARQUEOLÓGICOS

SEGUNDA ÉPOCA
No. 8
2019

EDITORES

HORACIO MARTÍNEZ PAIZ


CLAUDIA QUINTANILLA GONZÁLEZ
JORGE CÁCERES TRUJILLO
MIEMBROS DEL CONSEJO DIRECTIVO
DE LA ESCUELA DE HISTORIA

Directora Dra. Artemis Torres Valenzuela


Secretaria Licda. Olga Pérez Molina
Vocales Licda. Lizeth Jiménez Chacón
Dra. Tania Sagastume Paiz
Licda. Sonia Medrano
Est. Jacobo Castañeda
Est. Henry Juárez

MIEMBROS DEL CONSEJO CONSULTIVO


DEL ÁREA DE ARQUEOLOGÍA

Mtro. Horacio Martínez Paiz


Mtra. Claudia Quintanilla González
Est. Mariela Lutín
Est. Gustavo López

Apuntes Arqueológicos se publica anualmente y el contenido de los artículos es


responsabilidad exclusiva de sus autores. Su objetivo es estimular la producción de
estudiantes y profesionales de la Arqueología. A los interesados se les invita a enviar
sus artículos a: Área de Arqueología Escuela de Historia, Edificio S-1 Universidad de
San Carlos de Guatemala, Ciudad Universitaria, zona 12, Guatemala, C. A.

ISSN: 1025-3319 Apuntes Arqueológicos (Guatemala)

Corrección de estilo: Horacio Martínez Paiz, Claudia Quintanilla González y Jorge


Cáceres Trujillo
Foto portada: Altar 1 de Río Amarillo, Linda Schele 1987.
Diseño e impresión: Litografía Mercurio
CONTENIDO

HACIA UN EQUILIBRIO ENTRE LA DOCUMENTACIÓN,


LA INVESTIGACIÓN Y LA GESTIÓN
DEL PATRIMONIO ARTE RUPESTRE EN MÉXICO
María del Pilar Casado López ....................................................................................... 7

EXPLORACIÓN INTERPRETATIVA DE LOS PETROGRABADOS


ABSTRACTOS DEL CARIBE COSTARRICENSE
Luis Hurtado de Mendoza ............................................................................................ 33

LA COMUNICACIÓN EN EL ARTE RUPESTRE:


¿LA LINEALIDAD DEL SIGNO ES POSIBLE EN EL ARTE
RUPESTRE?
Stella Maris Acuña .......................................................................................................... 61

EL TIEMPO Y LOS HOMBRES DEL MAÍZ:


VISIONES SOBRE EL CONCEPTO DEL TIEMPO
PARA LA CIVILIZACIÓN MAYA
Miguel Pimenta-Silva ....................................................................................................85

UNA FECHA PROBLEMÁTICA DEL ALTAR 1


DE RIO AMARILLO COPÁN
David Franco ..................................................................................................................... 111

SEMINARIO PROCESOS DE INDUSTRIALIZACIÓN EN


GUATEMALA, UN ESPACIO DE INTERCAMBIO ACADÉMICO
Byron Francisco Hernández Morales .................................................................... 133

EL PUERTO SANTO TOMÁS


LEGADO DE UNA OBRA REVOLUCIONARIA 1953-1955
Necely Lorena Miguel Coronado ............................................................................. 153
ARTÍCULOS
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

HACIA UN EQUILIBRIO ENTRE LA DOCUMENTACIÓN,


LA INVESTIGACIÓN Y LA GESTIÓN
DEL PATRIMONIO ARTE RUPESTRE EN MÉXICO

María del Pilar Casado López


Escuela Nacional de Antropología e Historia, INAH, México
mpilar.casadol@gmail.com

RESUMEN
El arte rupestre con formas de expresión, intencionalidades y
desarrollos distintos, es un fenómeno ligado al pensamiento y al
proceso mental humano, a la evolución intelectiva, emocional y
social del ser. Su naturaleza, la de ser un elemento muy vulnerable
y constituir el testimonio gráfico que ha llegado desde los grupos
más antiguos establecidos en el territorio mexicano a momentos
históricos, son razones por las que su conservación y preservación
es ineludible. Se transita del registro a la investigación y a la
conservación preventiva. El registro considerado como herramienta
de conocimiento y documentación, mediante el que se preserva el
capital de la información; la investigación como base obligada y
fundamento para cualquier toma de decisiones y, las acciones de
preservación y conservación aplicando elementos de protección
legal a los sitios, proyecto de declaratoria, modelo de gestión, trabajo
social mediante la vinculación e integración de las comunidades
aledañas, acciones todas destinadas a prolongar y salvaguardar la
vida de este bien arqueológico, el arte rupestre.
PALABRAS CLAVE: Arte Rupestre, México, Conservación,
Preservación, Gestión del Patrimonio.

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Escuela de Historia

ABSTRACT
Rock art with all forms expressions, intentionality and its different
developments it represents a phenomenon linked to human thought,
mental processes and the intellectual, emotional and social evolution
of human beings. Rock art is a very vulnerable element and it is also
the graphic testimony that has reached us from the most ancient
groups, as well as historic communities that became established
in Mexico. This makes it worth preserving. Within the analysis
of the processes involved we move from registry to research and
preventive preservation. Registry, through which information capital
is preserved; research, as the basis for any decision making and
preserving actions with legal support and lastly, raising community
awareness. These are some actions designed to prolong and safeguard
the life of rock art as an archeological asset.
KEYWORDS: Rock Art, México, Conservation, Preservation, Rock
Art/Cultural Heritage Management.

INTRODUCCIÓN
El arte rupestre, por su naturaleza, sufre constante deterioro resultado
de numerosos factores, la precariedad del soporte y los materiales
empleados, la constante exposición a un medio ambiente dinámico
de equilibrio variable y, en algunos casos, inestable, y la ubicación
próxima a la actividad humana como detonante del deterioro
antropogénico, por lo que planificar acciones y diseñar métodos para
la preservación, permitirán dar seguimiento a los riesgos de daño,
además de adoptar las medidas oportunas para su conservación o en
dado caso intervención directa sobre la gráfica rupestre.
La tarea prioritaria es evitar la degradación e impedir la pérdida del
bien arqueológico, siendo importante la preservación preventiva que
lleva implícita la idea de integralidad en el tratamiento y la suma

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

de voluntades. El objetivo de estas líneas es la reflexión sobre el


problema de la preservación del patrimonio arte rupestre en México,
acciones y diseño de posibles políticas públicas que ayuden a evitar
el deterioro o destrucción del bien patrimonial no renovable.
En los últimos años, especialmente para cuevas con arte paleolítico
de España y Francia (Altamira, Lascaux y Chauvet-Pont d´Arc) y
con el objeto de preservar el bien rupestre y evitar o desalentar las
visitas masivas para admirar algunas de las pinturas más antiguas
de la humanidad, las autoridades locales e internacionales tomaron
la decisión de su cierre, en algún caso con carácter definitivo que
condujo a la realización de réplicas de galerías y paneles decorados
en la proximidades de las cuevas originales, la necesidad de
conservación obligó a tomar medidas rigurosas, no necesariamente
aplicables para la mayoría de los sitios con arte rupestre de la región,
especialmente para aquellos que ocupan estas líneas.
En los inicios del milenio, el conocimiento del patrimonio cultural y
la necesidad de su preservación y conservación inducen a reflexionar
sobre la posición del hombre en el pasado, en el presente y en el
principio de trascendencia, en la propia existencia como individuo
y como grupo y sobre el equilibrio del género humano en el planeta.
Nos sitúa ante una obligatoriedad impostergable, la de preservar el
patrimonio arqueológico, en este caso el arte rupestre, apoyados en
la instrumentación de mecanismos y desarrollo de herramientas
creativas que erradiquen las prácticas que causan su deterioro,
fomentando las existentes con el fin de prolongar su vida para
generaciones venideras.
El arte rupestre es un fenómeno ligado al pensamiento y al proceso
mental humano, a la evolución intelectiva, emocional y social del
ser, su importancia radica en ser un elemento presente en el camino
de la construcción humana, en lo relativo al desarrollo tecnológico,
al diseño de estrategias para la supervivencia, a la construcción
de procesos de planificación y organización social, al control del

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Escuela de Historia

territorio y recursos naturales, a la representación mental y ritualidad


de los eventos, a la construcción de mitos y relación con el devenir,
con numerosas imágenes pintadas y grabadas que lo ejemplifican.
Es referencia identitaria y patrimonial de los grupos que lo crearon
(Casado 2015).
En México, el fenómeno rupestre tiene presencia en la totalidad del
territorio con contenido y desempeño temporal muy amplio (Figura
1). Hay referencias desde momentos inmediatos al contacto, hechas
por viajeros, naturalistas y religiosos de modo narrativo y anecdótico;
en tiempos modernos y desde finales del siglo XIX, las menciones
comienzan a ver la luz al ser publicadas en revistas científicas, O.H.
Howarth,1894, menciona Las Labradas, en el artículo On the Rock
Inscriptions of Sinaloa, en The Journal of the Royal Anthropological
Institute of Great Britain and Ireland y en 1895, L. Diguet publica
Note sur la pictographie de la Basse-Californie, en la prestigiosa revista
L´Anthropologie de París.

Figura 1. Distribución de sitios con arte rupestre en México (Mapa: M.P. Casado).

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

A lo largo del siglo XX, la profusión y majestuosidad de los vestigios


mesoamericanos y la exuberancia de los materiales arqueológicos
descubiertos, soslayaron el estudio de los sitios con manifestaciones
rupestres, sin embargo, en los años cuarenta y cincuenta se inicia
una labor encomiable de documentación; a finales de la centuria se
generó el Atlas de Pictografías y Petrograbados, en el seno del Atlas
Arqueológico Nacional del Instituto Nacional de Antropología e
Historia, que impulsó los recorridos y llenado de la cédula diseñada
para el proyecto con el fin de atender la fase de registro (Casado
1987). Asimismo, se abren sitios con arte rupestre al público y se
les da cobertura técnica y legal para mejor protección; es también
momento en el que dos áreas con arte rupestre entran a la lista de
Patrimonio de la Humanidad: Pinturas de la Sierra de San Francisco
en Baja California Sur y Cuevas Prehistóricas de Yagul y Mitla en los
Valles Centrales de Oaxaca, Oaxaca. Recientemente en 2018, se incluyó
en la lista del Patrimonio Mundial Mixto La Reserva de la Biosfera de
Tehuacán-Cuicatlán: hábitat originario de Mesoamérica.

PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO ARTE RUPESTRE EN MÉXICO


El interés sobre la protección del patrimonio en México viene
dado desde la época colonial, continúa con las leyes emitidas
por el emperador Maximiliano, en 1897 se expidió la Ley sobre
Monumentos Arqueológicos, la Ley de Bienes Inmuebles Federales
de 1902, la Ley de Conservación de Monumentos, Edificios, Templos
y Objetos Históricos y Artísticos de 1916 y con la creación del INAH
en 1939 (Instituto Nacional de Antropología e Historia), se otorga al
organismo la responsabilidad de custodiar el patrimonio cultural. En
la actualidad, esta tarea queda implícita en las funciones que asigna
la Ley Orgánica al INAH, junto con la Ley Federal sobre Monumentos
y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos de 1972, la que a través
de su articulado regula la investigación, protección, conservación,
restauración, registro y recuperación del patrimonio arqueológico,

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Escuela de Historia

paleontológico, subacuático e histórico, reglamenta el trabajo


sobre la salvaguarda de sitios y vestigios arqueológicos y sobre la
difusión de los mismos; sin embargo, deja en libertad la expresión
de las prioridades y la definición de estrategias para cumplir con las
obligaciones inherentes a la Institución. Otras adhesiones y firmas
de convenios apoyan la preservación y conservación del patrimonio
arqueológico, entre ellas, la Convención para la Protección del
Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de la UNESCO, Francia 1972,
aceptada por México en 1984 o la Declaración de México sobre las
Políticas Culturales de 1982.
En la legislación mencionada se define como monumento
arqueológico a: “los bienes muebles o inmuebles producto de las culturas
anteriores al establecimiento de la hispánica en territorio nacional, así
como los restos de la flora y de la fauna, relacionados con estas culturas
(incluye monumentos paleontológicos y del patrimonio subacuático) y de
Zona de monumentos arqueológicos como el área que comprende varios
monumentos arqueológicos inmuebles, o que se presuma su existencia”.

REGISTRO, INVESTIGACIÓN Y CONSERVACIÓN


En estas líneas se transitará del Registro a la Investigación y a la
Conservación Preventiva; el Registro considerado como herramienta
de conocimiento y documentación de los sitios, mediante el que se
preserva el capital de la información; la Investigación como base
obligada y fundamento para cualquier otra acción, en relación
al análisis y al estudio pormenorizado del sitio; la Preservación
y Conservación aplicando los elementos propios de protección
legal: proyecto de declaratoria, modelo de gestión y acciones de
conservación in situ, todas destinadas a salvaguardar y prolongar
la vida de la gráfica rupestre, acciones a las que se suma el trabajo
social, realizado de forma transversal mediante la vinculación e
integración de las comunidades aledañas al sitio (Figura 2a).

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

El territorio mexicano es pródigo en presencia de arte rupestre, se


halla disperso en una extensión territorial de gran magnitud y con
amplia diversidad geográfico-medioambiental, a la amplitud espacial
se suma la temporal, su presencia abarca desde los primeros grupos
de cazadores-recolectores, agricultores incipientes y sedentarios, a
sociedades y centros hegemónicos mesoamericanos, a momentos
del contacto, alcanzando a comunidades autóctonas vigentes,
muestra de la continuidad en la memoria gráfica de los habitantes
del territorio (Figura 2b).

EL REGISTRO
Registrar los sitios y monumentos arqueológicos (incluidos los que
contienen arte rupestre) es una obligación establecida en la Ley
Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e
Históricos, Capítulo 2°, Del Registro, artículos 21, 22 y 28, con carácter
de obligatoriedad e implicando a los distintos órdenes de gobierno
y a la sociedad para su cumplimiento (Casado 2007). El artículo
señala: “Los Institutos respectivos harán el registro de los monumentos
pertenecientes a la Federación, Estados y Municipios y los organismos
descentralizados, empresas de participación estatal y las personas físicas
o morales privadas, deberán inscribir ante el Registro que corresponda,
los monumentos de su propiedad”. Asimismo, la idea de registro
como paso inicial de estudio y soporte de las tareas de protección y
conservación, se expone de forma precisa en el Programa Nacional
de Conservación del Patrimonio Arqueológico e Histórico de 1984.

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Escuela de Historia

a)

b)

Figura 2. a) Fases de trabajo en la conservación del arte rupestre; b) Densidad de


sitios con arte rupestre por área cultural (Gráfica: M. P. Casado).

Una vez establecido el contacto visual con la gráfica rupestre, el primer


paso, en el estudio del arte rupestre, es el Registro y la Documentación
con carácter multidisciplinar y con un modo de almacenamiento de
datos que tenga disponibilidad a futuro y pueda seguir aportando
información. Todos los elementos que el investigador observa, se
registrarán con definiciones específicas para cada factor sin dejar
huecos, de modo que pueda ser integrado en una base de datos con
nódulos específicos y capacidad de exportar caracteres o poner en
relación sitios y situaciones similares con otros del entorno. Para un
buen registro y generación de una base de datos efectiva, es preciso
establecer definiciones, aquí incluimos el concepto y tipo de sitio,
expuesto de forma más extensa en otros escritos (Casado 2015): Sitio
puntal, la unidad, cueva, abrigo o bloque pétreo, con figuras rupestres;

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

sitio extendido conjunto de unidades consecutivas en su disposición


o profusión de unidades en una misma circunscripción como en
Boca de Potrerillo, Nuevo León (2 km. de extensión, 4000 bloques con
grabados) y sitio nuclear el que estaría en función del contenido
emblemático y de la categoría presencial y visual que ejerce sobre
otros (Figura 3).

Figura 3. Tipos de Sitios (Fotografía: B. Lobjois, J. Balleza, M. P. Casado).

De igual modo, es determinante atender la relación física y simbólica


de la imaginería rupestre y el entorno, distinguiendo el espacio
próximo referido a las figuras en las paredes de la oquedad o cara del
bloque pétreo en el que se sitúa y el espacio lejano, es decir, el sitio y las
figuras en interacción con el entorno, el paisaje natural o el paisaje
cultural construido; la selección del espacio como acto volitivo para
la ubicación de los sitios con arte rupestre, la apropiación de las

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Escuela de Historia

formas orográficas vinculadas al arte rupestre y las representaciones


de biotopos serán considerados en este análisis como elementos
diagnósticos para comprender la interacción del arte rupestre y el
paisaje (Casado 2019).
Los datos obtenidos en la fase de documentación pueden ser sometidos
al Análisis Factorial de Correspondencia, análisis estadístico
multivariable, para establecer una relación de interdependencia
entre variables o de correlación entre dos o más de éstas, mediante
la que obtendrán afinidades entre dos conjuntos o a la Clasificación
Jerárquica Ascendente que tomando como base los elementos
descriptivos, ayudará a construir grupos con características similares,
igualmente utilizando ciertas variables, con lo que se acaba teniendo
un árbol de decisiones con probabilidades. Data importante para
la investigación y el establecimiento de prioridades en la toma de
decisiones para la conservación.
La aplicación de nuevas tecnologías ha cambiado el modo de
registrar, son un aporte de gran alcance que facilita el estudio y
agiliza el trabajo; la utilización de herramientas como la cartografía
digital, fotogrametría, sistema de posicionamiento global, D-Stretch,
microscopia portátil, calcos digitales o formato de definición 3D,
hacen que el registro y la ubicación sean más precisos y el estudio
más objetivo; alejan al investigador de la percepción subjetiva que
pueda distorsionar el fenómeno rupestre y permiten la reproducción
de las figuras con un alto grado de resolución. Tecnología de utilidad
en la réplica de paneles que, junto a los recorridos virtuales, tienden
a minimizar la visita, a veces complicada por el difícil acceso o con el
objetivo de preservar sitios de alto valor patrimonial.
La Investigación: El segundo apartado es el relativo a la Investigación,
como base obligada para cualquier otra acción o toma de decisión
en torno a la conservación e imprescindible para avanzar en
el conocimiento de los grupos generadores del arte rupestre y
la concepción de su universo. La investigación arqueológica en

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

México, está regulada por la autoridad en la materia, basada en


un cuerpo colegiado, el Consejo de Arqueología, como órgano
consultivo que proporciona las medidas para la exploración, hace
las recomendaciones para salvaguardar el patrimonio arqueológico
nacional en beneficio de la investigación presente y futura y, autoriza
los lineamientos para el trabajo arqueológico en México; los proyectos
e informes quedan salvaguardados en el acervo del Archivo Técnico.
Protección: Del registro y la investigación emanarán las medidas
de protección técnica y legal, y las acciones y procedimientos
administrativos de conservación preventiva o directa, además de
los programas de manejo y planes operativos intentando equilibrar
el imperativo de la conservación con el derecho al disfrute de este
patrimonio. La declaratoria de sitio arqueológico, el establecimiento
de la poligonal y la apertura al público son fundamentos que aportan
soporte administrativo, financiero y legal junto con sustento punitivo
que emana de la legislación.
Como parte del Patrimonio Arqueológico de la Nación, los sitios
y las manifestaciones gráficas rupestres, son protegidos por los
diferentes órdenes y niveles de autoridad. La declaratoria de zona
arqueológica establece la poligonal, que delimita espacialmente
el sitio y su área de amortiguamiento, con todo lo que implica de
atención, mantenimiento y apoyo jurídico a la zona (Figura 4). Con
base en estos elementos, a lo largo de los años se han abierto en el país
una decena de sitios con presencia de arte rupestre de contenidos
y asignación temporal diversa: El Vallecito (Baja California); Sierra
de San Francisco (Baja California Sur); Boca de Potrerillos (Nuevo
León); Las Labradas (Sinaloa); La Ferrería (Durango); Arroyo Seco
(Guanajuato); Huapalcalco / Xihuingo-Tepeapulco (Hidalgo); Cuevas
prehistóricas de Yagúl y Mitla (Oaxaca); Loltún (Yucatán), para las
que se cuenta con un diseño específico de visitas en función de la
preservación, en algunos otros sitios la presencia rupestre, no es
significativa, pero participa del conjunto del sitio arqueológico.

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Escuela de Historia

Asimismo, se han dado pautas generales para la conservación del


patrimonio cultural desde organismos internacionales (UNESCO,
ICCROM, ICOMOS) y mediante documentos específicos como la
Carta de Atenas,1931, Carta de Venecia,1964, Normas de Quito,1967,
Ley de Conservación del Patrimonio Mundial,1983, y las de
organizaciones específicas para la conservación del arte rupestre:
Comité International pour l´art Rupestre, Rock Art Working Group,
Comité de Conservación de American Rock Art Research Association,
junto a los mecanismos particulares que se generan en cada uno de
los países.

Figura 4. Polígonos de protección (Mapa: INAH).

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Incluir los sitios con arte rupestre en la Lista de Patrimonio de


la Humanidad de la UNESCO, es garantía de interés y atención
de los organismos nacionales e internacionales implicados en la
declaratoria. México cuenta con tres sitios con algún contenido de
arte rupestre: Pinturas de la Sierra de San Francisco en Baja California
Sur, cuevas con pinturas singulares del estilo Gran Mural, inscrito
en 1993; las Cuevas Prehistóricas de Yagul y Mitla en los Valles Centrales
de Oaxaca, bien patrimonial mixto, con evidencias iniciales de
domesticación de plantas (Zea mexicana), en Guilá Naquitz con
fecha de 6,250 a.C., junto con la calabaza, frijol y chile, de relevancia
simbólica y cultural, sitio inscrito en 2010; la Reserva de la Biosfera
de Tehuacán-Cuicatlán: hábitat originario de Mesoamérica, importante
por su riqueza natural y pródiga en vestigios y cuevas, algunas con
arte rupestre, incluida como Patrimonio Mundial Mixto en 2018. La
UNESCO ejerce observancia y da seguimiento, a través de ciertos
mecanismos, al estado de conservación de sitios patrimoniales y por
supuesto a los que contienen un elemento tan vulnerable como el
arte rupestre (informes periódicos, monitoreo reactivo o seguimiento
reforzado) direccionados a través del Comité de Preservación del
Patrimonio de la Humanidad (Figura 5).

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Escuela de Historia

Figura 5. Sitios con arte rupestre en la Lista Patrimonio de la Humanidad


(Fotografía: INAH-UNESCO).

El arte rupestre es un elemento arqueológico sensible al deterioro


tanto natural como antrópico. El deterioro por afectación natural
es debido a factores climáticos, presencia de huracanes, factores
medioambientales que producen cambios físico-químicos drásticos,
especialmente en las áreas desérticas o semidesérticas asociadas a la
región septentrional del país; por los cambios de humedad (estaciones
de lluvia y seca) o de humedad propia del bosque tropical en el sur
sureste y por el depósito de carbonatos en las paredes de cuevas y
cenotes que llegan a cubrir las figuras, en sitios de la península de
Yucatán (Figura 6).

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Entre las afectaciones antrópicas que vulneran la integridad de


sitios con arte rupestre están las derivadas de la rápida y creciente
actividad industrial en el país, el deterioro más frecuente y agresivo
está asociado a las explotaciones mineras, explotación de canteras,
a la realización de obras de infraestructura (hidráulicas, energías
alternativas, construcción de vías de comunicación), vertidos tóxicos
y de modo muy especial el crecimiento urbano desmedido, que en
algunos puntos el sitio con arte rupestre queda englobado en zonas
urbanizadas (actualmente se contabilizan más de medio centenar de
sitios con arte rupestre inmersos en desarrollos urbanos). También las
derivadas de acciones de vandalismo como los grafitis, impactos de
proyectil o el rayado que denotan desconocimiento del bien cultural
y poca valoración de la riqueza arqueológica. El expolio y saqueo de
bloques con grabados es un mal lento y desapercibido, debido a que
los parajes donde se hallan los sitios o están apartados y distantes de
la presencia humana o, por el contrario, en exposición evidente por
la cercanía a vías de comunicación (Figura 6).
Otros factores de deterioro tienen un origen social y administrativo
como la ausencia de personal de custodia, la información innecesaria
e indiscriminada de la ubicación de los sitios, la supuesta puesta en
valor de los mismos, con una prometida derrama económica para
la población circundante que atrae a un número importante de
visitantes sin control, o la dañina curiosidad de los aficionados poco
cuidadosos.

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Escuela de Historia

Figura 6. Deterioro natural y antrópico (Fotografía: D. Ballerau, G. Ramírez, J.


Mountjoy, R. Rodríguez).

Es atrayente la dinamización económica de la región que contiene


sitios con arte rupestre, pero es preciso mantener y conservar el bien
arqueológico e implementar un desarrollo sostenible que genere
respuestas a la demanda de interés y de ocio cultural de la sociedad.
La participación de las distintas órdenes de gobierno y la población
aledaña pueden ser factores decisivos en la tarea de mitigar el
deterioro.
Todos los factores expuestos detonan un daño irreversible e inexorable
a tan delicado elemento, pero no serán solo las prohibiciones y los
medios coercitivos los que impidan la degradación del arte rupestre,

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

existen paliativos, medidas disuasorias y acciones preventivas que,


ante la imposibilidad de detener los procesos de deterioro natural,
pueden preservarlo para generaciones venideras. Si el deterioro fuese
susceptible de ser revertido, se aplica el Programa de Conservación
de Manifestaciones Gráfico Rupestres, mediante el que se establecen
acciones puntuales para atención e intervención in situ de las pinturas
o grabados que han sufrido alteraciones notables. En la actualidad
hay proyectos en La Pintada (Sonora), Oxtotitlán (Guerrero), El Ocote
(Aguascalientes), entre otros.

SOBRE LA GESTIÓN Y APLICACIÓN DE POLÍTICAS PÚBLICAS EN


SITIOS CON ARTE RUPESTRE
El documento Política Pública de Preservación del Patrimonio Cultural
de 2016, manifiesta que el patrimonio es un legado no renovable,
por lo que su deterioro, destrucción o supresión constituye un
empobrecimiento del patrimonio de México, pero también de
los pueblos del mundo. A través de estas líneas, queda explicito
como los elementos jurídicos y normativos protegen los sitios
con arte rupestre: hay obligatoriedad para el registro, se apoya la
investigación, no siempre con el sustento económico deseado por los
involucrados en el tema y se aplican, en ciertos casos, las medidas de
protección contendidas en la ley. Sin embargo, el deterioro continúa,
la naturaleza y el tiempo ejercen su implacable acción de difícil
demora, pero el factor de deterioro humano puede ser mitigado o
detenido, no solo con los recursos que aplica la norma vigente, sino
generando políticas públicas específicas para cada uno de los sitios
que atiendan su particularismo.
Es dispar el tratamiento dado a los sitios de arte rupestre en el
país, no son muchos los que reciben una atención íntegra en
materia de investigación y conservación, por tanto, para establecer
un diagnóstico, es preciso contar con información suficiente y
sistemática. Hoy se cuenta con la aportada por la Dirección de Registro

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Escuela de Historia

del INAH (data, indicadores, referentes cualitativos) que no siempre


cubre la totalidad de los datos necesarios, ni guarda uniformidad de
contenidos, en especial el relativo al estado de preservación del sitio
y de la imaginería. Ante esta premisa, la generación de acciones y el
diseño de estrategias en relación con la salvaguarda del arte rupestre
supone un esfuerzo complejo.
El diseño de políticas públicas para el cuidado del patrimonio cultural
queda implícito en la Convención sobre la Protección del Patrimonio
Cultural y Natural, UNESCO 1972, bajo este marco los gobiernos de
cada uno de los países miembros deben adherirse a las normativas y
recomendaciones establecidas por dicho organismo. Tomando como
punto de partida este tratado internacional, los países deben de fomentar
la cooperación y establecer el diálogo entre los distintos niveles de
gobierno siguiendo los lineamientos internacionales (Pérez 2012). Es
por ello que establecer el dialogo entre las competencias de gobierno
federales, estatales y locales para generar o mantener programas
será beneficioso, así como aprovechar las instancias de gobernanza
existentes, por ejemplo, el Programa de Empleo Temporal (PET); el
Programa de Apoyo a Comunidades para Restauración de Monumentos
y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (FOREMOBA) o el Programa de
Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMYC).
Desde diversas instancias se podrían diseñar contribuciones de
servicios patrimoniales o pago por servicios prestados, de miembros
de la comunidad al sitio con arte rupestre, de modo que logren en
las poblaciones circundantes la apropiación del patrimonio y la
elevación de los niveles de bienestar. Asimismo, complementar estas
contribuciones con estímulos específicos para la comunidad con el
fin de garantizar la plena cooperación de los habitantes de la zona.
El que la localidad próxima al sitio sea la base de la preservación
mediante el desarrollo y provisión de servicios, es una forma de
impulsar la conservación aplicando la alineación de incentivos entre
los diferentes agentes.

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Es fundamental que las autoridades hagan saber a las comunidades


que la conservación de los sitios es una buena opción para el
desarrollo de la sociedad, la respuesta natural de los habitantes
será cooperar para tal preservación a fin de garantizarse un mayor
desarrollo mediante mejores y mayor número de servicios y, por
parte de la autoridad o del gobierno local, la respuesta será la de
facilitar recursos o infraestructura a la población.
El resultado de estas acciones, en términos de estudio económico,
es un equilibrio donde ninguno de los dos agentes tiene acicates
para desviar sus acciones. El sistema de percepción, se derivaría de
actividades aplicables al sitio en función de las acciones que impulse
la comunidad con metas a cumplir y así mantener el compromiso
entre el gobierno o autoridad local y la comunidad. Con apego a la
ley y al cumplimiento de requisitos y protocolos para la investigación
y protección arqueológica, también se puede invitar a organizaciones
no gubernamentales -nacionales o internacionales- en la alianza
para la preservación de este tipo de sitios.
El arte rupestre no exhibe normalmente gran monumentalidad, se
halla en lugares inhóspitos y sin asociación, por lo general, a otro
tipo de resto arqueológico, lo que propicia el desconocimiento de la
valía y significado de lo representado. La creación de un sentimiento
de pertenencia de la comunidad al sitio, apoyado mediante
programas educativos y de difusión, aumentaría la valuación del
mismo en términos afectivos y de orgullo y también de utilidad, por
tanto, afectaría positivamente a su conservación. Las personas y las
comunidades asignan más valor a las cosas propias indispensables
al grupo, las poseen y les pertenecen real y simbólicamente, es el
Endowment Effect denominado por Richard Thaler (2016), Premio
Nobel de Economía, que trata de la conducta de pertenencia y del
arraigo; la inclusión de la comunidad y la creación de un sentimiento
de pertenencia hacia la zona de conservación, se transforma en
conductas que alejan el desinterés y desapego al sitio.

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Escuela de Historia

De igual modo, la generación de estrategias de difusión proyectadas


desde los museos locales o centros de interpretación como
faros de conocimiento y las acciones de sensibilización en la
población general, principalmente escolar, como conductores de la
conservación resaltando la identidad y pertenencia de la comunidad
al sitio, mitigan el deterioro. En este sentido, es conveniente avanzar
en la reproducción de paneles decorados, mediante técnica de 3D
o a través de la realización de visitas virtuales como medios que
favorecen la preservación además de fomentar el conocimiento.
No se puede pensar en proteger o conservar si no se establece una
alianza entre la comunidad académica, la sociedad en general y las
fuerzas sociales locales, otorgando un reconocimiento social a los
habitantes de la zona. La presencia comunitaria y la actuación de
los agentes sociales locales son herramientas indispensables para
afirmar la posesión física y simbólica de su patrimonio, de igual
manera, la integración social es fuente de arraigo e identidad de la
población. El desempeño que hoy tiene el estudio del arte rupestre,
genera progresivamente interés entre las instancias locales y estatales
tomando conciencia de cuidarlo y preservarlo, interés que no siempre
alcanza a todas las instancias ni a toda la población, sobre las que
habrá que incidir con campañas de información y sensibilización
para conseguir el objetivo de combinar la preservación y el disfrute
de este bien arqueológico.

CONSIDERACIONES FINALES
Con respecto al estudio y conservación del arte rupestre en territorio
mexicano, se puede afirmar que los últimos años han sido importantes
en el crecimiento del registro y fundamentales para la investigación,
tanto por la variedad conceptual como por los descubrimientos. Sin
embargo, la conservación no ha conseguido los mismos niveles de
atención.

26
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

La gran extensión territorial sujeto de estudio, la diversidad geográfica


y de enclave de los sitios, el amplio número de yacimientos, el raudo
crecimiento y desarrollo del país acompañado de nuevas formas
de afectación ponen en peligro tan frágil e indefenso patrimonio
arqueológico.
Los pasos mencionados de registro, investigación y medidas de
protección junto con la interacción local y comunitaria sumados al
diseño de políticas públicas direccionadas que comentamos, son hitos
básicos en la conservación de este material arqueológico, valioso en
el aporte de información y deleznable para su conservación.

27
Escuela de Historia

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

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31
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

EXPLORACIÓN INTERPRETATIVA DE LOS PETROGRABADOS


ABSTRACTOS DEL CARIBE COSTARRICENSE

Luis Hurtado de Mendoza


Centro de Información para el Desarrollo (CID)
lhurtado40@yahoo.com
Ana Cecilia Arias Quirós
Universidad de Costa Rica (UCR)
ana.ariasquiros@gmail.com
RESUMEN
Con base en una hipótesis que considera a los petrograbados de la
región Caribe de Costa Rica como constituyentes de un sistema de
registro y comunicación de información, se explora la viabilidad de
su decodificación y eventual interpretación. Se analiza una muestra
de especímenes provenientes del sitio monumental Guayabo con
grabados de la Tradición Abstracta Caribe. Se favorece una estrategia
de estudio por la vía de una serie de pasos: registro, clasificación,
datación, patrones de cambio, función y simbología. La búsqueda
de posibles vías para la interpretación, se concentra en el examen
de los sistemas numéricos de pueblos indígenas en Costa Rica y los
Andes centrales y su relación con el lenguaje y con representaciones
simbólicas de entidades reconocidas en la vida cotidiana, registrada
en etnografías y estudios lingüísticos.
PALABRAS CLAVE: Arqueología, Petrograbados, Interpretación,
Región Caribe Central, Costa Rica.
ABSTRACT
Upon a hypothesis claiming that petroglyphs from the Central
Caribbean region in Costa Rica are constituents of a system

33
Escuela de Historia

for the registration and communication of information, an


analysis is here performed on the viability of their decodification
and eventual interpretation. A sample of specimens from the
Guayabo archaeological site is utilized. These depict carved motifs
corresponding with de Caribbean Abstract Tradition. A step by
step research strategy is applied, including the following proxy
lines: recording, classification, dating, change patterns, function,
and symbolism. The search for potential approachs toward
interpretation emphasize the relationship between the numerical
systems of indigenous peoples in Costa Rica and the Central Andes,
and the symbolic representation of common life entities as recorded
in ethnographic and linguistic studies.
KEYWORDS: Archaeology, Petroglyph, Interpretation, Central
Caribbean Region, Costa Rica.

INTRODUCCIÓN
Los estudios de petrograbados en la cuenca Caribe de Costa
Rica se remontan a la década de los años setenta. La mayoría
se limita al registro y descripción de estos artefactos, pero otros
presentan intentos de avanzar en aspectos más críticos del proceso
investigativo. También se ha intentado establecer la edad relativa
de algunos petrograbados del valle de Turrialba (Snarskis et al.
1975), del Monumento Nacional Guayabo (Fonseca y Acuña 1983) y
de Tucurrique (Acuña 1985). Recientemente, se ha desarrollado un
método para la clasificación y datación relativa de los grabados en
la cuenca del Reventazón (Hurtado de Mendoza 2013; Hurtado de
Mendoza y Naranjo 2018).
En comparación con estos avances, son menos fructíferos los intentos
de explorar y dilucidar aspectos que conciernen a las funciones y
significados de los petrograbados, en el contexto de la vida y cultura
de los pueblos antiguos, autores y usuarios de estos artefactos.

34
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Acuña (1985) aplicó pautas semiológicas y postuló una relación


analógica entre las unidades simbólicas, discernibles en los grabados
y la figura humana. Otros han exaltado el contexto estructural de
los petrograbados para inferir un propósito comunicativo de
información (Fonseca y Acuña 1983). También se ha explorado
la relación con imágenes astronómicas (O’Reilly 1999; Hurtado
de Mendoza 2004), alguna función conmemorativa (Hurtado de
Mendoza 2004) y la identificación y reclamo de lugares con recursos
importantes para la subsistencia (Hurtado de Mendoza et al. 2016).
Paralelamente, una colección de petrograbados del Monumento
Nacional Guayabo, suscitó una hipótesis que asigna a los grabados
la connotación de una práctica religiosa animista (Arias et al. 2012).
En la conjugación de todos estos trabajos de clasificación, datación e
interpretación, reside lo que parece una línea base para incursionar
en el ámbito sutil de la decodificación y eventual lectura de los
mensajes grabados en piedra. En la publicación de Arias et al. (2012)
se formalizó una hipótesis, de tipo escenario, para orientar el estudio
de los petrograbados desde la perspectiva del simbolismo que se
intuye dominante en los especímenes del Monumento Nacional
Guayabo. La hipótesis, susceptible de expandir su aplicación a los
petrograbados de la cuenca central caribeña, predica lo siguiente:
“Los petrograbados investigados en el sitio arqueológico Guayabo
de Turrialba representan un lenguaje abstracto-simbólico, sacro,
sintético y chamánico, relacionado con formas estructurales
existentes en la naturaleza y el cosmos, que conforman una
totalidad material y espiritual capaz de darle sentido a las vidas
individuales y a la vida colectiva, de seres humanos y otros seres
vivos” (Arias et al. 2012:39).
El presente trabajo explora la viabilidad de algunos aspectos de esta
hipótesis, después de haber culminado una clasificación sistemática
de los petrograbados. Ahora también se cuenta con la oportunidad
que ofrece un ordenamiento secuencial de los petrograbados, lo cual

35
Escuela de Historia

permite una percepción diacrónica del proceso de cambio o evolución


de las imágenes. Como se podrá ver, se han definido fases culturales
en un detalle mucho mayor del establecido con base en la evidencia
cerámica.
En trabajos anteriores se identificaron dos tradiciones culturales
principales, una abstracta y otra naturalista (Hurtado de Mendoza
2013; Hurtado de Mendoza y Naranjo 2018). A partir del presente
estudio se vislumbra en los petrograbados abstractos dos corrientes
estilísticas, con orígenes distintos en el tiempo, pero que se
amalgaman en cierta forma con el paso de los siglos. Los cambios en
estilos, dentro de la tradición abstracta, pueden sugerir cambios en
funciones y mensajes. Si bien la contribución gira en torno al trabajo
en piedra de los petrograbados, es claro que estas obras de magnífica
factura son un elemento constitutivo de un contexto mayor.

CONSIDERACIONES TEÓRICAS
Arias et al. (2012) exponen, como premisa, que los petrograbados
de Guayabo fueron elaborados por los habitantes del asentamiento
indígena ubicado en el sitio arqueológico Guayabo. En una reciente
conjugación de palabras, Arias (2017) comenta que en ese lugar
estuvieron “las manos sublimes que grabaron la piedra y el espíritu”;
además, sugiere que, al ser una obra humana, los petrograbados
poseen un carácter dimensional que incluye, pero también excede
cualquier límite de lo material, tocando un ámbito ideológico
intangible. De hecho, según Arias et al. (2012:1), los petrograbados
corresponden a “una dimensión simbólica”, propiedad de una sociedad
humana, “que entendía el mundo material y el mundo espiritual como
una totalidad, capaz de darle sentido a las vidas individuales y a la vida
en común, la de todos los seres vivos identificables con este lugar y con
esta cosmovisión”. Ante esto, se califica a los petrograbados como un
“lenguaje antiguo” y un “arte sacro”.

36
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Estos argumentos ubican a los petrograbados en los estamentos


superiores, gradualmente más intangibles, de la composición de la
cultura: el lenguaje, la religión y la cosmovisión. En estos ámbitos,
el cientificismo común del método arqueológico y su racionalismo
inherente son insuficientes para lograr la meta última de interpretar,
entender y explicar el contenido esencial de los petrograbados. Para
lograr esto no son suficientes las descripciones materiales ni las
ubicaciones cronológicas, sino que es menester incursionar “por la
puerta de lo simbólico, de aquello que cimienta lo aparente, lo que vemos a
partir de nuestros sentidos” (Arias et al. 2012:1). Dicho, en otros términos:
“Esa vida que se nos presenta escrita en piedra es multidimensional,
compleja, contradictoria; su significado tal vez no lo conozcamos
con precisión, pero el hecho de considerar estas producciones
humanas como elementos conformadores de un lenguaje nos pone
en otro camino, en donde la descripción y la categorización de
elementos es solo el inicio; es solo un acercamiento; lo importante
está en traspasar ese nivel y llegar a ese lenguaje antiguo, a ese arte
sacro” (Arias et al. 2012:8).
Entonces, se recomienda la puerta de lo simbólico como la vía
más adecuada para dilucidar el significado de los petrograbados y
“descubrir esa historia escrita en piedra” (Arias et al. 2012:2).
Sin embargo, el estado de la cuestión, en lo concerniente a la aplicación
del método semiótico, presenta también serias dificultades, pues no
se tiene “el código que dio vida a esos símbolos; no sabemos cuál fue su
significado primigenio” (Arias et al. 2012:7). Se intuye que se trata de un
“lenguaje abstracto-simbólico, sacro y sintético… pareciera tener relación
con formas estructurales existentes en el cosmos y en la naturaleza; son
símbolos ancestrales, a los que se confirió significados semejantes en el
nivel universal […], el verdadero espíritu se ha perdido con el tiempo”
(Arias et al. 2012:11).

37
Escuela de Historia

Se trata de un problema crítico que los historiadores del arte y de la


escritura han llamado “principio de la disyuntividad”, p u e s invoca
procesos de cambio cultural, lentos en el tiempo, peroirreductibles,que
alejan a los antiguos autores de sus descendientes en lo concerniente al
propósito y significado de sus señales y comunicaciones. El problema
se agudiza cuando los observadores modernos no conocen el lenguaje
indígena, ni pertenecen a la tradición cultural de los autores antiguos
y sus actuales descendientes.
Así las cosas, destacan al menos tres atributos certeros e inobjetables
que ayudarían a establecer una opción para conducir el estudio
interpretativo de los petrograbados, sin sacrificar los avances logrados
en el campo de la averiguación científica y sin interrumpir el camino
semiótico. Arias et al. (2012) mencionan y discuten tres aspectos
que parecen relevantes para el avance de los estudios del contenido
en los grabados: 1) Un nivel privilegiado de importancia social, de
relevancia vital; 2) La función de comunicación de información; y 3)
El proceso de cambio evolutivo de los petrograbados.
Los petrograbados de Guayabo tuvieron mucha importancia para la
sociedad, en razón de su abundancia y ubicación en el sector central
del sitio, principalmente asociados con las estructuras y calzadas
más imponentes. En lo concerniente a la abundancia, es inobjetable
la concentración numérica de petrograbados en el sitio monumental
de mayor importancia en la cuenca del Reventazón. Si se suman la
Colección Acuña (Gómez et al. 1985), la Colección Castrillo (Arias et al.
2012) y la Colección Castillo (Castillo 2014), se obtiene una muestra
de 82 especímenes. Solo se conocen otros dos sitios en la región que
registran colecciones numerosas, pero se encuentran bastantes a la
saga, respecto de Guayabo. El sitio Lagunas Bonilla (Bustos 2007)
tiene 20 especímenes, pero presenta escasos restos arquitectónicos,
en un área extensa, donde se dispersan varios asentamientos. Por su
parte, en el sitio Playa Hermosa (Vázquez et al. 2002), se registraron
18 petrograbados, relacionados con restos muy perturbados de

38
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

estructuras, cuyas dimensiones no es posible determinar. Sin embargo,


el grado de importancia de estos petrograbados, medido en términos
de cantidad, parece estar relacionado con la dimensión y complejidad
de la monumentalidad.
La función comunicativa de información es una idea bastante admitida
por los diversos investigadores, principalmente aquellos que han
intentado interpretaciones de especímenes individuales (ej. Snarskis et
al. 1975; Acuña 1985; Hurtado de Mendoza 2004). Al respecto, es crítico
el argumento en cuanto a que: “El lenguaje utilizado en los petrograbados…
para comunicar sus ideas, valores, conocimientos, se reconoce como simbólico,
sacro, arcaico, y sintético” (Arias et al. 2012:6).
Finalmente, la consideración de importancia social y la admisión
de un proceso evolutivo y de cambio, sugerido por la distribución
de los petrograbados de Guayabo, es también expuesta, cuando
se especifica que: “ocuparon un espacio primordial dentro del sitio,
razón por la cual consideramos que pretendían comunicar y trascender
mediante un lenguaje por ellos conocido, el cual es de suponer, que iría
evolucionando con el tiempo” (Arias et al. 2012:11).
Aquí se reconoce el aporte de los historiadores del arte, quienes
admiten la noción de un proceso evolutivo que asume tres posibles
rutas: 1) Imágenes reales que evolucionaron a lo abstracto a partir
de la simplificación; 2) Imágenes geométricas que evolucionan a la
abstracción; y 3) Imágenes automáticas en donde las formas pasan
del cerebro a la mano, llegando a la abstracción inconscientemente.

PROCEDIMIENTO
Los esfuerzos anteriores de interpretación se han limitado a
especímenes individuales (Acuña 1985; O´Reilly 1999; Hurtado de
Mendoza 2004); motivos específicos (Snarskis et al. 1975); y su vínculo
con obras hidráulicas (Arce et al. 2014; Peytrequín y Arce 2015).

39
Escuela de Historia

En el presente artículo, se cuenta con la oportunidad de trabajar


con una muestra de un mismo sitio arqueológico, representando un
sistema prehispánico de registro y comunicación de información,
aparentemente desarrollado y utilizado dentro de una misma
tradición cultural. El tratamiento trasciende la individualidad
de las obras y exige trasladar la atención al conjunto, con miras
a establecer su estructura interna y sus patrones de cambio a lo
largo del tiempo. En consecuencia, una vez registrada y descrita
la colección (Arias et al. 2012), el procedimiento indagatorio ha
debido cumplir los siguientes pasos metodológicos: 1) Clasificación
de los especímenes; 2) Especificación de una cronología relativa;
3) Identificación de patrones de cambio; 4) Examen de pautas
simbólicas; 5) Definición de probables funciones; y 6) Búsqueda de
una ruta para la interpretación de las composiciones abstractas.
Lo que sigue es una breve exposición del estado de avance de estas
etapas metodológicas.

TAXONOMÍA Y DATACIÓN RELATIVA


Los petrograbados de la Colección Castrillo del sitio arqueológico
Guayabo (Arias et al. 2012) fueron clasificados y datados según las
pautas técnicas del “Modelo Guayabo” desarrollado para la cuenca
del Caribe Central de Costa Rica. Este modelo aplica algoritmos
de estadística multivariable conocidos como el Análisis de
Conglomerados (Cluster Analysis) y el Análisis de Correspondencias
o de secuenciación. El Modelo Guayabo consta de una estructura de
siete grupos taxonómicos, los cuales están asignados respectivamente
a las fases y períodos de la secuencia cultural prehispánica de la
región mencionada. En términos cronológicos se cubre un lapso
de aproximadamente 3500 años. Los pormenores del desarrollo y
aplicación del Modelo Guayabo han sido expuestos en informes
anteriores (Hurtado de Mendoza 2013, 2015, 2017, 2018; Hurtado de
Mendoza y Naranjo 2018).

40
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

En el caso de los petrograbados de la Colección Castrillo el resultado


de la clasificación indica una estructura de 11 grupos y subgrupos
(Cuadro 1). La mayoría de una muestra de 41 especímenes resultó
asignada a la que reconocemos como la Tradición Abstracta Caribe
(Hurtado de Mendoza et al. 2016). La única excepción (MNG P-7B)
pertenece a una clase primordialmente naturalista (Grupo 7)
aparentemente introducida desde Mesoamérica durante la fase más
tardía de la secuencia caribeña (800-1500 d. C.).

Taxa n Período Constituyentes


Grupo 6 3 Formativo Medio MNG: P7-A, P9, P22
MNG: P2, P4
Grupo 1 3 Formativo Tardío
SPN: 35
Subgrupo 2A 6 MNG: P3, P5, P6, P22, P24, P29
Subgrupo 2B 2 MNG: P30, P34
Subgrupo 2C 4 MNG: P17, P27, P28, P36
No ID Entrada al MNG
Grupo 3 1
(Introducción reciente)

Subgrupo 3A 4 Cacical-I MNG: P3, P10, P21, P32 Lado 1

MNG: P1, P13, P14, P28, P32, P38


Subgrupo 3B 7
SPN: 36
MNG: P16, P18, P23, P26, P29, P32
Subgrupo 3C 9 Lado 2, P34, P40
Acuña: P-15
Grupo 5 1 MNG: P45
Cacical-II MNG: P7-B Tradición Naturalista
Grupo 7 1
(Introducida)
Total 41
Fuente: Base de datos CID 2017.
Cuadro 1. Clasificación y datación de petrograbados de la Colección Castrillo.

41
Escuela de Historia

El Cuadro 2 muestra la estructura básica del “Modelo Guayabo”


estableciendo la relación entre los grupos taxonómicos y la edad
relativa de los petrograbados constituyentes.

Grupos taxonómicos
Períodos y fases Cronología
G-6 G-1 G-4 G-2 G-3 G-5 G-7
Cacical-II 800-1500 DC XX XX
Cacical-I 200 AC-800 DC XX XX
Formativo Tardío 500-200 AC XX XX
Formativo Medio 1500-500 AC XX
Ref. Hurtado de Mendoza y Naranjo 2018

Cuadro 2. Cronología de petrograbados del Caribe Central.

PATRONES DE CAMBIO
Los petrograbados de la Colección Castrillo abarcan el período
Formativo (2000-200 AC.) y el período Cacical (200 a. C.-1500 d. C.). En
la cuenca del Reventazón se cuenta con soporte radio-carbónico para
el periodo 2200 a. C.-1550 d.C. (Snarskis 1978; Vázquez y Ovares 2002;
Chávez 2015; Hurtado de Mendoza 2015; Gutiérrez 2018; Hernández et
al. 2018).
En un sentido regional se ha propuesto la existencia de dos tradiciones
de petrograbados: 1) La Tradición Abstracta Caribe y 2) La Tradición
Naturalista Caribe (Hurtado de Mendoza et al. 2016). La primera
presenta la mayor antigüedad y cubre toda la secuencia. La segunda
muy relacionada con la fase más reciente de la secuencia cultural
(800-1500 d. C.) presenta atributos indíciales foráneas, de aparente
origen o influencia mesoamericana.

42
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Las ilustraciones siguientes (Figura 1 y Figura 2) muestran los cambios


reconocibles en las categorías tipológicas, al paso de dos períodos y
cuatro fases culturales. También se ha tenido en cuenta la variable
dimensional en los medios pétreos que utilizaron los artesanos para
plasmar las composiciones, aparentemente en razón de distinciones
funcionales. Con este propósito se ha dividido la colección en dos
conjuntos, uno de 29 especímenes de tamaño portable y el otro de
8 considerados inmuebles. Las figuras mencionadas muestran los
resultados en términos tipológicos, cronológicos y de cambio a través
del tiempo.
Los petrograbados de tamaño portable (Figura 1), menor de 0.5 m,
acusan filiación estilística en dos líneas evolutivas principales, una
dominada por el motivo “Oquedad” y la segunda por la “Espiral”.
Una tercera línea evolutiva, muy escasa, es naturalista y presenta el
motivo “Cara” humana. El linaje de las oquedades es el más antiguo
y luce pausado con el paso del tiempo. En comparación, el linaje de
las espirales presenta antigüedad algo menor pero su presencia es
prolífica y diversa. La tradición naturalista, pobremente representada
en el sitio Guayabo es de ocurrencia cronológica reciente. Sin
embargo, es más profusa a nivel regional (Hurtado de Mendoza y
Naranjo 2018).

43
Escuela de Historia

Figura 1. Petrograbados de tamaño portable. Tipología, cronología y patrones


evolutivos.

Los petrograbados de tamaño inmueble (Figura 2) tienen dimensiones


de más de 0.75 m y en algunos casos superan 1.0 m. En la Colección
Castrillo se repite el patrón de mayor antigüedad observado en el linaje
de las oquedades, pero en contradicción del caso de los petroglifos de

44
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

tamaño portable, aquí también muestran ventaja numérica, respecto


de los petrograbados del linaje de las espirales. Se intuye que esta
pauta podría tener asidero funcional.

Figura 2. Petrograbados de tamaño inmueble. Tipología, cronología y patrones


evolutivos.

45
Escuela de Historia

SIMBOLOGÍA
El análisis clasificatorio permitió comprobar la ocurrencia
redundante de ciertas “unidades básicas de elaboración”, las cuales
se conjugan entre sí para dar lugar a “motivos compuestos” y
“composiciones”, de variable complejidad. Parece razonable pensar
que estos tres niveles son símbolos de sucesiva complejidad y, por ende,
de contenido y significación agregativos. La analogía más inmediata
y apta es la escritura, cuyos niveles sucesivos de significación son: la
letra, la sílaba, la palabra y la composición literaria.
En el caso de los petrograbados abstractos, se han identificado ocho
“unidades básicas de elaboración” (UBE). Las ocho UBE abstractas
son las siguientes: oquedad, línea con oquedad, círculo, línea corta,
línea larga, línea sinuosa, espiral y polígona (Hurtado de Mendoza y
Naranjo 2018).

FUNCIONES
Los estudios antecedentes de función, en el Monumento Nacional
Guayabo (Fonseca y Acuña 1983; Hurtado de Mendoza 2004) resaltan
diversas funciones, incluyendo registro calendárico, cartografía
celestial, material de construcción, mojón territorial, rotulación,
ritualismo, conmemoración sociopolítica, identificación étnica
y cartografía geográfica. La hipótesis de Arias et al. (2012) coincide
con el planteamiento general de que los petrograbados cumplieron
un propósito comunicativo, pero difieren cuando asignan una sola
función, la ritual religiosa. Esto no se contrapone a la posibilidad
de que ciertos petrograbados cumplieron una función general de
registro y comunicación de información que concierne al ámbito
ritual y místico.

46
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

INTERPRETACIÓN
Al revisar la historia de la decodificación de las escrituras antiguas,
se hace patente que hubo éxito, cuando se contó con registros de un
mismo texto en varios idiomas o cuando el lenguaje en cuestión,
aunque con transformaciones, es hablado en la actualidad. A
su vez, los éxitos paleográficos obtenidos en otros lugares del
continente producen modelos que sugieren fórmulas de solución en
la tarea de decodificación y lectura de los petrograbados del Caribe
costarricense. Hay dos modelos que se vinculan con los sistemas
numéricos indígenas. Uno es el sistema decimal relacionado con
la escritura consonántica Inca (Burns Glynn 2002), inmerso en el
idioma quechua. El otro se insinúa en los sistemas numéricos de los
indígenas de Talamanca, vinculados con los idiomas bribri y cabécar
(Pittier 1904; Stone 1993 y Margery 2004). Lo que sigue es una breve
reseña de estos dos modelos.
El alfabeto inca (quechua) tiene 10 consonantes, las cuales presentan
equivalencia fonética con 13 consonantes del idioma español. Cada
consonante principal del quechua corresponde con los nombres
que designan a los 10 dígitos del sistema numérico. Además, cada
consonante principal está representada en la escritura por un
signo gráfico. El lenguaje hablado incluye vocales, las cuales no se
representan con signos, pero son pronunciadas como parte de las
palabras, debiendo ser deducidas, con base en la costumbre y el
contexto del mensaje. El nexo fundamental entre los números, sus
respectivos nombres, consonantes representativas y los signos o
símbolos gráficos, es la fonética del lenguaje hablado.
En el estudio de la escritura en los países andinos, han surgido
manifestaciones de posibles sistemas de registro de datos y
comunicación, algunas con aparentes visos de escritura, pero no
han ofrecido certezas o no se las ha estudiado con mayor insistencia.
En el caso de las quillcas y los quipus andinos, sí se ha logrado
establecer su desarrollo como formas de escritura. No se trata

47
Escuela de Historia

solamente de registros numéricos y cuentas, como se afirmaba; sino


de “verdaderos instrumentos de almacenamiento de números y palabras,
e información tanto cuantitativa como cualitativa, fueron aplicables a
la totalidad del mundo prehispánico y no sólo a fragmentos parciales de
esa realidad” (Burns Glynn 2002:21). Para efectos del estudio de los
petrograbados, el razonamiento conceptual del código de las quillcas
aplicado al medio textil, podría abrir una puerta para explorar la
viabilidad interpretativa de los petrograbados.
La Figura 3 muestra el código del idioma de los incas (Inca simi). La
base numérica decimal está expresada en nomenclatura quechua.
De cada nombre se extrae un fonema consonántico, distinguible en
el habla quechua. Esta cualidad, con algunas variantes, encuentra
equivalencias en el idioma español. Cada consonante y su respectiva
sonoridad tienen asignado un símbolo gráfico, con el cual se
completa la ruta de comunicación, por el medio visual. El alfabeto de
las quillcas consonánticas no elimina las vocales que forman parte
del lenguaje hablado. La interpretación de los signos y la deducción
de palabras que contienen vocales dependen del conocimiento y uso
habitual del idioma.
La Figura 4 ilustra una aplicación del alfabeto quechua para
construir un texto narrativo, el cual resulta traducible al idioma
español. Se describe al octavo inca, en cuyo atuendo tiene escrita su
reseña personal, en quechua: “Inca gordo como el cerdo, inca podrido,
el que regresó al lugar de donde viniera, procreó al hombre que fue su
sucesor inca”. Se agrega en español: “Viracocha Inca, reinó en Caja,
Ica, Huancayo, Chincha, Yauyos, Jauja, Lati, Surco y Lima”. El dibujo
es del cronista Guamán Poma de Ayala (2005, original 1615) y la
decodificación aplicada es de Burns Glynn (2002).

48
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 3. Relación entre los sistemas numérico, fonético y simbólico en el


idioma Quechua.

Figura 4. Decodificación de un texto en idioma quechua y traducción al


español.
Los sistemas numéricos de los indígenas bribri y cabécar de Costa
Rica presentan bases diferentes. El primero es decimal, con nombres
propios para los 10 primeros números. En contraste, el segundo caso

49
Escuela de Historia

tiene base en el cinco y solamente los primeros cinco números poseen


nombre (Pittier 1904). Sobre esto, Stone (1993) difiere al asegurar que
el sistema cabécar también es decimal. Por su parte, en el diccionario
cabécar-español de Margery (2004) se encuentran nombres de
solamente los cinco primeros números, lo cual es consistente en los
diversos dialectos conocidos de este idioma.
Ahora bien, Pittier y Stone coinciden en la forma peculiar de contar
en ambos casos, pues cuando se realizan operaciones numéricas se
utilizan nomenclaturas diferentes, según se trata de ciertos tipos
generales de entidades. Así, los bribris tienen seis maneras de
contar, según se trate de gente, cosas redondas, animales pequeños,
cosas grandes o largas, plantas y casas. Por su parte, las categorías
en el sistema numérico cabécar también son seis, aunque varían en
algunos casos: humanos, objetos redondos, objetos alargados, objetos
planos y casas, conjuntos y atados, y especies o partes de algo o
productos pesables. También hay variantes de léxico en razón de los
dialectos regionales, pero se mantiene la lista de seis tipos generales
de entidades (Pittier 1904; Margery 2004).
En bribri hay términos para los primeros 10 números y acusan
variantes que identifican el tipo general de entidades. Para cantidades
mayores de 10 emplean combinaciones de los diez primeros términos
relacionándolos con algún verbo, adverbio o conjunción. Hasta cierto
punto, este recurso también se utiliza en algunos idiomas europeos,
como el finlandés. Por ejemplo, al número 16 en bribri se le dice “diez
encima de seis” (dëbop ki tek). Sin embargo, mientras en español el
concepto numérico-matemático puede ser comprendido en forma
abstracta y general, independiente de cualquier entidad específica;
en bribri resulta indispensable la relación del número con el tipo de
entidad a la que se refiera.
El sistema numérico cabécar tiene base en la serie del cinco, con
nombres propios del uno al cinco (Pittier 1904; Margery 2004). El
referente natural reside en los cinco dedos de la mano. Para expresar

50
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

cantidades mayores a cinco, se repiten los nombres vinculándolos


con el prefijo “ki” que se traduce como “encima de”. Así, el seis es
“uno encima de cinco”; nueve es “cuatro encima de cinco” y 10 es
excepcional, pues tiene nombre propio. Los dedos representan a los
cinco primeros números en el orden del meñique al pulgar y el seis
es el pulgar de la mano derecha y el meñique de la mano izquierda.
Los dedos de ambas manos se tocan entre sí para expresar las sumas
que resultan en 6, 7, 8, 9 y 10.
El sistema decimal bribri parece más versátil cuando se trata de
expresar cantidades mayores a diez. Cuando Gabb (1875, 1978) encargó
a un grupo de personas de Talamanca hacer un censo de la población
y que lo registraran en alguna modalidad indígena, el resultado fue
un ramillete de cordeles anudados, los cuales contenían los datos de
cinco distritos, todos con cantidades entre una y seis centenas. Gabb
debió haber interpretado el registro para comunicar los resultados
del censo en una tabla de datos, accesible para sus lectores.
A pesar de su relativa sofisticación, el registro censal de Talamanca,
en cordeles anudados, no es clasificable como un quipu andino.
Sin embargo, las características de los sistemas numéricos bribri y
cabécar reflejan aspectos del razonamiento fundamental que dio
lugar a las formas de escritura en la región andina quechua, tanto
en grafías como en cordeles anudados. El vínculo del razonamiento
simbólico con los sistemas numéricos y con el lenguaje, también
parece ser compartido.
Los bribris no cuentan con una tradición de petrograbados. Tampoco
es conocida una tradición similar entre los cabécares del Valle de la
Estrella (Tayní-Telire) y de Talamanca (Coén). La tradición cultural de
la región Caribe central (Reventazón y Pacuare) es la que cuenta con
petrograbados. Hay, sin embargo, otras comarcas de tradición cabécar,
en la vertiente del Pacífico, China Kichá y Térraba, que sí exponen
petrograbados. Existen distinciones dialectales, relacionadas con esta
dispersión, pero llama la atención que los bribris y cabécares, aun

51
Escuela de Historia

con bases numéricas diferentes, en la aplicación de sus respectivos


sistemas, coincidan en la distinción de seis grupos generales de
entidades susceptibles de conteo.
En el Cuadro 3 se conjugan datos del sistema numérico cabécar con las
diversas formas del léxico utilizadas en los seis grupos de entidades
culturalmente reconocidas. La asignación de los seis grupos generales
a las unidades de elaboración (UBE) de las composiciones en
petroglifos, según se refleja en la columna de la derecha, es intuitiva
y en todo caso preliminar; probablemente no aplique a todos los
petrograbados, pero no se puede descartar que estén representadas
diversas funciones. También, se debe tener en cuenta el lapso de
tres milenios cubierto por la ocurrencia de estos artefactos, durante
los cuales hubo cambios que pudieron transformar símbolos y
significados. Recuérdese que este trabajo es presentado como una
exploración, la cual recién empieza.

52
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Categorías Símbolos
1 2 3 4 5
generales (*)
tkíl
éklá
Humanos ból mañál tkílbö skél Espiral
églá
jkíl
tkíl wö
tkítabö
Objetos
églá wö ból wö mañál wö wö skél wö Círculo
redondos
tkítöbö

Línea
tkítabö
Objetos étaba larga
bótabö mañátabö tkítöbö skétabö
alargados étabö Línea
jkítabö
sinuosa
Polígono
Objetos
tkítkö Oquedad
planos y étka bótkö mañátkö skétkö
jkítkö Línea con
casas
oquedad
mañáyaka tkílyaka skéyökö Línea
Conjuntos y éyaka, mañáyökö
bóyökö tkílyökö
atados éyaga
jkíyökö skéyaka corta

Especies,
partes de algo élga mañálga
bólga tkílga skélga ¿Puntos?
y productos élka mañálka
que se pesan
Ref. Margery
2003; Nota
(*): Propuesta
preliminar de
los autores.

Cuadro 3. El sistema numérico cabécar norte y su posible relación simbólica con


petrograbados.

53
Escuela de Historia

CONCLUSIONES
Se comprueba que existe una estructura taxonómica integrada por
al menos siete clases, aquí llamadas grupos. Dos de estos grupos
presentan subgrupos. Esta estructura es esencial para el estudio
ordenado, sistemático, del fenómeno. La estructura taxonómica tiene
relación con el tiempo. Tres grupos están relacionados con el período
Formativo (1500-200 a. C.). Otros tres grupos pertenecen al período
Cacical (200 a. C.-1500 d. C.). En ambos períodos son distinguibles
los grupos que corresponden a las fases culturales, generalmente
reconocidas, de la secuencia cronológico-cultural de la región Caribe
Central. Un séptimo grupo, asociado a la fase tardía Cacical-II (800-
1500 d. C.), acusa el uso de motivos naturalistas, reflejando una
incorporación de símbolos exógenos, incompatibles con la calidad
abstracta de la tradición regional del Caribe Central.
Se comprueba que, a lo largo de tres milenios, los petroglifos han
experimentado cambios estilísticos, dentro de al menos dos líneas
evolutivas, distinguibles por el uso preferente de ciertos símbolos,
independientes en la mayor antigüedad, amalgamados sucesivamente,
hasta su extinción en tiempos prehispánicos recientes.
Se infieren funciones diferentes en los petroglifos de la colección
examinada, al parecer en razón del tamaño de los bloques pétreos
utilizados, de su ubicación, aislada o relacionada con otros rasgos
arqueológicos y, en algunos casos, por la calidad sui-generis de las
composiciones grabadas. Son plausible las siguientes funciones:
marca étnica; hito territorial; material constructivo; ritualismo.
La información funcional inferida, no ayuda a la interpretación
de los mensajes que, según se postula, estarían comunicando los
petroglifos. Con base en analogías etnográficas, incluyendo los
lenguajes indígenas, los sistemas numéricos y sistemas de símbolos,
se examinó el razonamiento que condujo a la decodificación de
formas de escritura en los Andes centrales y se intentó su aplicación

54
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

al caso del pueblo cabécar. Se propone, en forma aún preliminar, que


existe vinculación entre las seis categorías generales de entidades
naturales, que son objeto de cuantificación del sistema numérico
cabécar y los ocho símbolos gráficos, abstractos, que componen el
sistema simbólico de los petroglifos de la cuenca del Reventazón. Se
considera que esto constituye un paso crítico para avanzar por el
camino de una eventual decodificación de los petroglifos del Caribe
Central de Costa Rica.

55
Escuela de Historia

BIBLIOGRAFÍA
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APUNTES ARQUEOLÓGICOS

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Escuela de Historia

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59
Escuela de Historia

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Editor, Capítulo 14. Convenio ICE-MNCR, San José.

60
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

LA COMUNICACIÓN EN EL ARTE RUPESTRE:


¿LA LINEALIDAD DEL SIGNO ES POSIBLE EN EL ARTE
RUPESTRE?

Stella Maris Acuña


Fundación Internacional Tōzai “Oriente y Occidente
Buenos Aires, República Argentina
acunazocchi@yahoo.com.ar
RESUMEN
El tema que se va a tratar sobre el arte rupestre es la comunicación.
Dentro de ella, rastrear la posibilidad de la lectura de imagen.
El objetivo, en esta oportunidad, es tomar en cuenta los ámbitos
en donde aparece la figura, observar cómo es grabada o pintada.
Tomamos en cuenta si: ¿La imagen aparece sola? ¿Acompañada? ¿Por
dónde comenzamos a realizar la interpretación de las iconografías?
¿Qué tipo de comunicación han pretendido dejarnos?
Para las escrituras antiguas es muy importante poder relacionar
una figura con otra, para ver su accionar de acuerdo con las otras
imágenes que aparezcan a su lado. Se ha considerado este concepto,
pues, de alguna manera, esa interacción dará más datos sobre los
mensajes de quienes las grabaron o pintaron.
La región en donde se está realizando la investigación es en
Salta y algunas zonas del noroeste de la República Argentina,
más específicamente, la zona andina. Los datos fueron recogidos
personalmente en trabajos de investigación de campo in situ.
PALABRAS CLAVE: Arte Rupestre, Petroglifo, Pictografía, Ideograma1,

1
Ideograma: Imagen convencional o símbolo que en la escritura de ciertas lenguas significa una pa-
labra, morfema o frase determinados, sin representar cada una de sus sílabas o fonemas (Tomado del
diccionario de la Real Academia Española).

61
Escuela de Historia

Comunicación, Semiología2, Orden, Estilo, Escritura Representativa,


Relación, Asociación.

ABSTRACT
Communication, and within it, the possibility of reading the image
in rock art, is the theme to be treated in this article.
In this opportunity, the goal is to consider all of the scopes where
the figure appears and observe how they were graven or painted.
We consider the following: does the image appear alone? Does the
image appear together to any other? Where do we have to start the
iconographic interpretation? What type of message have the authors
pretended to communicate?
For ancient writtings, it is very important to establish the relation of
a figure between to another one, so it can be seen their interaction
with other images next to them. This concept has been considered, in
some way, due to that interaction, which provides more data about
the messages the authors stamped.
The geographical región where this research is being conducted
is Salta and some zones at the northeast of Argentina Republic,
specificaly, the andean zone. The data were taken personally from
field seasons and places in situ.

KEYWORDS: Rock Art, Petroglyph, Ideogram, Communication,


Semiology, order, style, representative writting, connection.

. Semiología: 1. Estudio de los signos en la vida social), 2. Teoría general de los signos (Tomado del
2

diccionario de la Real Academia Española).

62
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

1. INTRODUCCIÓN

1. 1. PALABRAS INTRODUCTORIAS
En nuestro trabajo desarrollaremos algunos aspectos de la
comunicación que son transmitidos por el arte rupestre.
Si bien la locución “arte rupestre” es lo que se conoce para identificar
los petroglifos, los pictogramas y los geoglifos, no suena bien a
nuestros oídos para hacer interpretación en la búsqueda de la
comunicación.
Por ese motivo, nos agrada más llamar al arte rupestre como “antiguas
escrituras”. De hecho, para nosotros lo son, pues hemos encontrado
en ellas sustantivos, adjetivos y acciones verbales.
Aunque es difícil explicar que se puede hacer lectura de las imágenes
grabadas o pintadas en las rocas, se hace necesario buscar datos
en las lenguas más arcaicas, para acercarnos a una lectura de estas
antiguas “escrituras”.
En este trabajo de investigación que toma la parte del noroeste de
la República Argentina, más específicamente la zona andina, busca
una posible lectura de algunas iconografías, interpretadas desde la
comunicación y tratadas desde la semiótica.
Es interesante mencionar un comentario de Ignace J. Gelb (1994:25)
en su Historia de la escritura, en él expresa que en el sentido y la
etimología de la palabra “escribir”, en muchos idiomas diferentes,
significaba dibujar, pintar, rayar o grabar. Por ejemplo, la palabra
inglesa to write corresponde al nórdico rita “grabar runas”, y al alemán
moderno reissen, einritzen “rasgar”, “grabar”, entre otras lenguas.

63
Escuela de Historia

1. 2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA


Antes de hablar sobre las imágenes grabadas o pintadas, se tendrá
que mencionar brevemente cómo es nuestro sistema de escritura
actual y qué representamos por medio de él, para poder acercarnos
a una posible lectura de interpretación, en lo que nuestros antiguos
habitantes nos han legado como mensajes.
Si queremos hablar de comunicación, debemos entender primero
nuestro modo de escribir y comunicar, para poder interpretar o
tratar de comprender otras maneras.
Otro dato importante que se debe de adelantar es que, cuando
hagamos referencia a la figura humana, nos detendremos en: si ella
aparece sola o acompañada y si aparece acompañada, cuáles figuras
las acompañan. Si hay otros grabados o pinturas a su lado: ¿Qué tipo
de imágenes son? y, fundamentalmente: ¿Podemos asociar un dibujo
a otro que se encuentre en la misma roca?, ¿Por dónde comenzaron
a grabar o pintar?, ¿Por dónde terminaron de grabar o pintar?, ¿El
orden de las grafías se parece a nuestro sistema de escritura? Estas
son algunas de las preguntas que se han planteado para tratar de
acercarnos a la información, en estado latente aún, en las rocas.
Por otra parte, tendremos que tratar de buscar en las grafías, un
ordenamiento posible y las relaciones probables entre ellas.
Olvidaba mencionar que tendremos que observar también el estilo
de quien graba o pinta, y la posición de trabajo para la ejecución de
la figura.

64
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

2. DESARROLLO

2. 1. MARCO TEÓRICO
Hemos tomado diferentes teorías que se plantean ciertos principios,
las cuales permiten interpretar el corpus a exponer, para comentar la
importancia de la comunicación en el arte rupestre y el orden de los
grabados o pinturas, en donde aparecen grabados o pintados:
Si bien se toma como marco teórico a Ferdinand de Saussure (2004;
1991) y a Charles Sanders Peirce (1986), en este trabajo también se
hará uso de la teoría de la lectura descriptiva o lectura de contenido
como le llaman algunos investigadores.
Ferdinand de Saussure (1857-1913) padre de la lingüística moderna,
crea una ciencia, la semiología, que estudia los signos en el seno de la
sociedad, establece al signo como un sistema binario, un significante
y un significado.
Charles Sanders Peirce (1839-1914) desde el campo de la filosofía
funda la semiótica, que estudia el conjunto de todos los signos y
cómo, éstos representan a la realidad. El signo triádico de Peirce es
más productivo para pensar el paradigma de representación de toda
escritura ideográfica.

ESCRITURA DESCRIPTIVA O DE CONTENIDO


Siguiendo a Gelb (1994), nos interesa manifestar lo que comenta, en la
Historia de la Escritura. Expresa que se conoce a este tipo de escritura
como etapa descriptiva o representativa, es la que comunica el
pensamiento humano, por medio de gráficos, cada uno de los cuales
por si, o su suma total, sugieren el sentido. Menciona que, a esta etapa
de la escritura, en oportunidades ha sido llamada por los alemanes

65
Escuela de Historia

Gedankenschrift “escritura mental”, Vorstellungschrift “escritura


representativa” o Inhaltschrift “escritura de contenido” (1994: 61).

2. 2. ANTIGUAS ESCRITURAS
2. 2. 1. ESTADIO PICTOGRÁFICO PROTO-SUMERIO
Ya se ha descrito sobre este estadio, en otro trabajo, pero debemos
manifestar algunos datos para seguir el hilo de este estudio. Para
una mejor comprensión partiremos con nuestra somera descripción
desde las primeras manifestaciones que se conocen en la historia
de la escritura. Mencionaremos dos estadios: el proto-sumerio y el
pictográfico chino.
Se tiene conocimiento de que el sistema pictográfico proto-sumerio
se lo puede ubicar en el 3100 a. C. La lengua sumeria arcaica se
desarrolló aproximadamente entre el 3100 a. C. a 2500 a C. Después
de este período deja de ser pictográfica para entrar en otro estadio:
el cuneiforme. La mayor parte del contenido de los escritos es de
carácter comercial y administrativo.
Nos interesa comentar el orden que tenía el pueblo sumerio para la
distribución de las pictografías: en un principio se escribía de forma
vertical, de arriba hacia abajo y se comenzaba a leer por la derecha.
Se encontró una tablilla de arcilla (de Kish), en la cual hay escritura
pictográfica. Hasta ahora, la mencionada tablilla es lo más antiguo
que se ha recuperado con esas características (Figura 1 y 2).

66
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 1. Tablilla de piedra grabada con escritura pictográfica procedente de la


ciudad mesopotámica de Kish (Irak), data del 3500 a. C. Probablemente
es el vestigio más antiguo conocido de escritura y consta de
pictogramas que representan cabezas, pies, manos, números y trillos
(Tomado de: https://archivoshistoria.com/tablilla-de-piedra-grabada-
con-escritura-pictografica-procedente-de-la-ciudad-mesopotamica-
de-kish-irak-datada-en-el-3-500-a-c/

Figura 2. Tablilla de arcilla de Kish, hallado en Babilonia (Tomado de: http://


www.proel.org/index.php?pagina=alfabetos/protosum).

67
Escuela de Historia

2. 2. 2. ESTADIO PICTOGRÁFICO CHINO


En sus orígenes, la escritura china era manifestada por medio de
pictogramas. Algunos de ellos fueron encontrados principalmente
en caparazones de tortugas, escápulas de buey, grafías sobre huesos.
El significado de las inscripciones halladas en esas superficies está
relacionado con rituales de adivinación.
El sistema de escritura chino fue tomado por otras lenguas, como
por ejemplo el japonés, el vietnamita, el coreano. El japonés continúa
utilizándolo como parte de su escritura, las otras dos lenguas ya no lo
usan, pues lo han reemplazado por otro tipo de escritura.
A continuación, en el Cuadro No. 1 se pondrá una palabra en japonés
con escritura ideográfica, su traducción al castellano o español y sus
correspondientes fonemas de la pronunciación japonesa.

Castellano Japonés (escritura Fonemas de la


ideográfica) pronunciación japonesa

Lluvia 雨 /ame/

Cuadro No. 1 Escritura castellana, ideográfica y fonema de la pronunciación


japonesa.

Se observa desde el punto de vista etimológico, de donde viene esta


palabra: etimológicamente, la grafía ideográfica del vocablo lluvia
viene de la imagen de una puerta, construida con madera y papel de
arroz, a través de la cual se pueden ver las gotas de lluvia. Nada más
simple y aclaratorio (Figura 3).

68
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

2. 2. 3. ESCRITURA JAPONESA Y LAS RELACIONES DE PALABRAS


Aunque ya se explicó en el Coloquio Guatemalteco de Arte Rupestre
celebrado en el año 2009, se pueden recordar algunos conceptos
fundamentales para este nuevo trabajo, sin hacer un bosquejo sobre
la escritura japonesa, solo se tomarán para ejemplificar la escritura
ideográfica que, como se indicó antes, fue tomada de la escritura
china. Además de la escritura ideográfica, el japonés creó dos
silabarios que utiliza en la escritura. Los mencionados silabarios están
representados por fonemas. A partir de la creación de los silabarios
y hasta ahora, los japoneses utilizan la escritura ideográfica y los
silabarios, juntos.

Figura 3. Puerta/ventana construida con madera y papel de arroz (Tomado de:


https://es.dreamstime.com/foto-de-archivo-el-fondo-japon%C3%A9s-
tradicional-de-las-puertas-del-papel-de-arroz-y-un-cerezo-con-una-
foto-envejecida-miran-image77028470).

69
Escuela de Historia

En este momento resulta interesante abocarnos a la escritura


ideográfica que es la que nos acerca directamente a las manifestaciones
rupestres.
¿Cómo es el orden en que aparecen las grafías, en la escritura
japonesa? De derecha a izquierda, de arriba hacia abajo
¿Por qué se habla del orden? Porque mucho se ha dicho sobre si
podemos hacer interpretación o no en las manifestaciones rupestres.
Sobre cómo es el orden en que aparecen las figuras de los petroglifos
o pictogramas, en la superficie rocosa.
Tal vez, dirigiendo la mirada a una escritura actual que deriva de una
muy antigua (2000 a. C., aproximadamente) nos sugiera de qué otros
modos podemos observar el orden en las figuras rupestres.
¿Además del orden en la escritura de tipo ideográfica no es también
muy importante observar si una imagen se puede o no relacionar
con otra? Cuando escribimos en español: “Walter compró un ramo de
flores”, la oración está ordenada de acuerdo con la normativa de la
lengua española. Cada una de estas palabras se relaciona con la otra,
y además cada una de ellas también lleva un orden correcto, que nos
da la normativa de la lengua que hablamos los hispanohablantes. No
solamente cuando hablamos de un vocablo y su conexión, con uno
anterior o posterior, sino también, cuando escribimos una palabra,
la disposición de los fonemas también se relaciona con uno anterior
y otro posterior.
No comprenderíamos, en español, el término “unal”, aunque si lo
escribiéramos con otro orden: “Luna”, si podemos decir que aquí los
fonemas se relacionan entre sí: /luna/.
Tomemos un ejemplo del kanji o ideograma japonés (Cuadro No. 2):

70
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Ideograma Fonemas de la Significado en español


pronunciación japonesa
木 /ki/ Árbol

Cuadro No. 2 Ideograma y fonema japonés y su significado en español.

El vocablo árbol está escrito individualmente con el tipo de escritura


ideográfica. En japonés, los ideogramas se relacionan unos con otros
para formar otro término. Entonces, vamos a escribir otra palabra
que contenga más ideogramas, el término “árbol” lo escribiremos
tres veces para formar otro significado (Cuadro No. 3):

Ideograma Fonemas de la Significado en español


pronunciación japonesa
森 /mori/ Bosque frondoso

Cuadro No. 3 Combinación de ideogramas.

Los ideogramas, dispuestos en este orden han dejado de tener el


significado mencionado antes (árbol) para pasar a significar: “bosque
frondoso”.

2. 2. 4. ESCRITURA
¿Cómo escribimos los hispanohablantes? Si tomamos en cuenta
nuestra escritura de la lengua española diremos que poseemos un
abecedario o alfabeto, conjunto ordenado de las letras o signos
gráficos de la lengua, que representa los sonidos de ella: “Sol”. Y si
queremos representar el mismo término, con diferente grado de
detalle, en una transcripción fonética3 utilizamos los corchetes.
3
La fonética estudia los sonidos físicos del discurso humano, la producción y percepción de los soni-
dos de una lengua con respecto a sus manifestaciones físicas.

71
Escuela de Historia

2. 2. 5. ORDEN DE LA ESCRITURA
¿Cómo ordenamos las letras y las palabras? Veamos primero qué
representa el signo lingüístico para Ferdinand de Saussure, a efectos
de hacer un acercamiento al orden de los fonemas, en una palabra.

2. 2. 5. 1. SIGNO LINGÜÍSTICO
Ferdinand de Saussure en su texto Lingüística General (1991), expresa
que el signo lingüístico es la combinación de un concepto (significado)
y de una imagen acústica (significante), ambos componen en conjunto
una entidad lingüística de dos caras interdependientes. Es una
construcción social que funciona dentro de un sistema lingüístico.

2. 2. 5. 2. EL SIGNO LINGÜÍSTICO PARA PEIRCE


Es una entidad que posee tres caras: a) el referente, b) el significante
y c) el significado. Expresa que el referente es el objeto real. El
significante es el soporte material o la sustancia (lo que se capta de
acuerdo con los sentidos). El significado es la imagen mental. Peirce
también clasificó los signos en indicios, íconos y símbolos.

2. 2. 5. 3. LINEALIDAD DEL SIGNO


Saussure también menciona que el signo es lineal porque el
significante se aparece sucesivamente en el tiempo. Esto significa
que los fonemas de un signo no pueden ser pronunciados en forma
simultánea, sino uno después del otro, en unidades sucesivas que se
van produciendo linealmente en el tiempo. Por ejemplo: Ll-e-g-u-é-a-
G-u-a-t-e-m-a-l-a. Cuando se trata de analizar las imágenes en el arte
rupestre, nos damos cuenta que los sonidos (el significante) de los
vocablos no nos pueden ayudar para interpretar, ya que, en ese estadio

72
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

de la escritura, ella se manifiesta como una escritura de contenido,


pero, además, en la mayoría de los casos podemos desconocer la
lengua usada por el pueblo que grabó o pintó las figuras.
¿A qué llamamos escritura de contenido? Como se ha mencionado
anteriormente a la escritura descriptiva, a la escritura de imagen.
Para una mejor comprensión debemos encarar esta situación desde
otra concepción de la escritura, que obviamente no es la nuestra.

2. 2. 6. ORDENAMIENTO Y RELACIONES ENTRE PALABRAS


Hay investigadores que sostienen que las representaciones
ideográficas, en los petroglifos o pictogramas, no tienen las
condiciones que debe tener una escritura en cuanto al orden y a la
posición de los vocablos, y que por lo tanto es imposible realizar una
interpretación sobre lo que se desea comunicar.
Ahora bien, nos preguntamos ¿A qué orden se refieren? ¿Al orden que
tiene nuestra lengua, la española? ¿Para qué nos serviría si el arte
rupestre es escritura de imagen y no escritura que nos manifieste su
significante?
Por otra parte, hay muchísimas lenguas, familias lingüísticas,
culturas diferentes, escrituras que difieren entre sí (…).
¿Es que todo tipo de escritura debe conservar el mismo orden
y disposición? Todos sabemos que la lengua española posee un
ordenamiento lineal4, propio de las escrituras alfabéticas. Pero
recordemos que un petroglifo o un pictograma representan una
imagen y no un fonema5, estamos hablando de una escritura de
contenido y no de una escritura alfabética. Además, nuestros escritos
van de izquierda a derecha, en un orden lineal horizontal. Separamos
4
Ordenamiento lineal: Hacemos referencia al orden lineal del signo.
5
Fonema: La fonología describe el modo en que los sonidos funcionan en una lengua, en un nivel
abstracto o mental.

73
Escuela de Historia

cada una de las palabras dejando un espacio entre cada una de ellas.
Algo muy diferente al japonés, o a las lenguas muy arcaicas, que, por
ser antiguas, la disposición de la escritura se hace sin dejar espacios.
Ya se ha hecho mención en varios Coloquios de Arte Rupestre en
Guatemala que, en la región mesoamericana, las manifestaciones
de posibles escrituras que se han encontrado, algunas de ellas se
escribían en forma de zig-zag.
Ibarra Graso (1991) expresa que, en 1940, visitó Bolivia con su grupo
de investigación. A orillas del lago Titicaca se encontraron con un tipo
de escritura de imagen, que, algunos llaman jeroglífica6. Su equipo
pudo conseguir escritos de este tipo, en papel, cuero, arcilla y roca.
Allí le explicaron que el uso de esos escritos se limitaba a oraciones
católicas, siendo las mujeres, más que los hombres, quienes la
conocían y la usaban. Pudieron saber también, que el ordenamiento
de las imágenes está en forma de zig-zag, comenzando su lectura del
lado derecho, desde abajo (Figura 4).
Según Ibarra Graso dice que es un tipo de escritura que está
representada por medio de fonemas y de ideogramas.

6
Sistema de signos gráficos que se utilizan para escribir.

74
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 4. Disco de Faistos y escritura de Bolivia (Tomado de: http://www.faculty.


ucr.edu/~legneref/biados/jpg/bol35.jpg).

Después de esta brevísima descripción sobre algunos conceptos de


antiguas escrituras, que fueron necesarias para continuar con la
exposición, pasaremos al tema de la comunicación en el arte rupestre.

75
Escuela de Historia

2. 2. 7. ESCRITURA DE CONTENIDO
Para seguir con las imágenes diremos algo expresado por Foucault
(1999), en donde manifiesta que las palabras no solo dicen el ser de la
representación, sino que siempre nombran algo representado.
Tomando en cuenta estos conceptos veamos cómo se representa la
palabra /sol/ en la escritura ideográfica japonesa (Figura 5) que es la
lengua que hemos tomado como referencia:
Consideramos que el círculo con un punto en el medio podría ser
un sol siguiendo una afirmación de Ambrosetti. Mencionamos que
tanto para los chinos como para los japoneses la figura circular con
el punto en el centro, etimológicamente, representa el sol. La grafía
última del recuadro es como se escribe actualmente.

Figura 5. Etimología primera del vocablo “sol” (Tomado de: Torres i Graell s/f).

2. 2. 7. 1. ORDEN PARA LA LECTURA DE IMÁGENES

2. 2. 7. 1. 1. Llamas
Vemos en el petroglifo “Tres llamas atadas” (Figura 6). La expresión
entre comillas es una oración, eso significa que podemos leer el
grabado.

76
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

2. 2. 7. 1. 2. Pastor con llamas


Esta también es una escena, la cual puede ser leída desde la imagen,
como escritura de contenido. Nótese la actitud de movimiento,
tanto de la imagen de persona como la de las llamas. La llamita de
atrás, que es más pequeña, presenta una cierta resistencia a seguir
andando. Esta imagen de movimiento la tomamos como una oración:
“Un hombre llevando dos llamas atadas.” El orden es de derecha a
izquierda (Figura 7).

Figura 6. Representaciones zoomorfas (Llamas) (Fotografía: Stella Maris Acuña.


Salta, Argentina).

77
Escuela de Historia

Figura 7. Pastor con llamas (Fotografía: Stella Maris Acuña. Salta, Argentina).

2. 2. 7. 2. ESTILO

2. 2. 7. 2. 1. Pastorcito llevando llamas


El estilo de quien graba o pinta es muy importante pues si hay otras
imágenes en la roca se puede diferenciar qué figura va con cuál o
simplemente está sola. En esta foto se puede ver claramente que el
estilo corresponde a una sola persona y que su posición para grabar
es frente al grabado (desde la parte de debajo de la roca) (Figura 8).

78
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 8. Pastorcito llevando llamas (Fotografía: Stella Maris Acuña. Salta,


Argentina).

2. 7. 2. 3. ¿POR DÓNDE EMPEZAMOS LA LECTURA?

2. 7. 2. 3. 1. Varias imágenes
En este petroglifo se encuentran varias imágenes que se grabaron
arriba de la roca y también abajo. Hay que decidir bien por dónde
empezar, para tomar de a grupos las imágenes y poder realizar una
lectura coherente (Figura 9).

79
Escuela de Historia

Figura 9. Grupo de imágenes (Fotografía: Stella Maris Acuña. Tucumán,


Argentina).

3. CONCLUSIONES
Hemos podido apreciar durante la exposición de este trabajo que
podemos tomar las figuras de los grabados como signos iconográficos
para poder facilitar la interpretación de un mensaje.
Que el orden que debemos seguir a la hora de hacer un análisis no
es el mismo orden que seguimos en nuestra escritura y en nuestra
sintaxis de la lengua española.
Que las figuras humanas encontradas tanto en los grabados como en
las pinturas rupestres aparecen en escena con su entorno y en una
realidad de su espacio y tiempo, fundamentalmente con elementos de

80
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

la naturaleza, y que las acciones representadas pueden ser tomadas


como acciones verbales.
Que cada vez que aparezca grabada, pintada, como quiera que sea,
tendremos que relacionarla con las demás figuras que aparecen en
torno a ella, si las hubiere.
Que es muy importante considerar el orden de las imágenes; el
trazo, el estilo del dibujante, la orientación del mismo y la asociación
posible con otras figuras.
Que debemos separar las imágenes de acuerdo con lo mencionado
para no mezclar dibujos que no corresponden a la misma época, pues
hay rocas que poseen estampas de diferentes tiempos.
Que es fundamental trabajar con todas las disciplinas posibles.
Tenemos más preguntas que respuestas para poder avanzar y también
cuestionarnos acerca de las muchas maneras de encarar el análisis
del arte rupestre. Un compromiso que debemos asumir todos, no solo
para hacer interpretación de imágenes sino para cuidar y preservar
el preciado legado de nuestros ancestros.

81
Escuela de Historia

BIBLIOGRAFÍA
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s/f Antigüedades de la región andina de la República Argentina
y del desierto de Atacama. San Salvador de Jujuy, Argentina,
Universidad Nacional de Jujuy, traducción al español: Delia
Gómez Rubio.
Calvet, Louis Jean
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1999 Idioma japonés: Su importancia para el estudio de la
dominancia hemisférica cerebral. En las Actas de la Tercera
Jornada de Lengua Japonesa para Hispanohablantes. Instituto
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1986 El lenguaje y el entendimiento. España, Planeta Agostini.
Española, A. d. (22 de agosto de 2019). Diccionario de la Real
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Foucault, Michel
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82
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

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1986 La ciencia de la semiótica. Nueva Visión, Buenos Aires.
Quiroga, Adán
1992 Calchaquí. Editorial TEA, Buenos Aires.
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2004 Escritos de Lingüística General. Editorial Gedisa, Argentina.
1991 Curso de Lingüística General. Ediciones Akal, Argentina.
Torres i Graell, Albert
s/f Kanji: La escritura japonesa. Libros hiperión, Barcelona.

83
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

EL TIEMPO Y LOS HOMBRES DEL MAÍZ:


VISIONES SOBRE EL CONCEPTO DEL TIEMPO
PARA LA CIVILIZACIÓN MAYA

Miguel Pimenta-Silva
Rheinische Friedrich-Wilhelms-Universität Bonn
Centro de História da Universidade de Lisboa
mpsilva@letras.ulisboa.p
RESUMEN
El tiempo es, sin la menor duda, el elemento conceptual más
importante en los procesos de la narrativa histórica. Cada cultura ha
desarrollado formas propias de definir y utilizar el tiempo.
En el 2018 se cumplieron cincuenta años desde de la primera
publicación de la obra de Miguel León-Portilla, Tiempo y Realidad
en el Pensamiento Maya (1968). Desde entonces algunos fueron los
intentos de estudiar el concepto de tiempo. Este artículo es también
una oportunidad de presentar un estado del arte relativo a esos
estudios. Para reflexionar correctamente acerca del concepto y de
su desarrollo conceptual a lo largo de los siglos, es necesario cruzar
fuentes (epigráficas, iconográficas y etnográficas) y disciplinas. Por lo
que es fundamental establecer vías de contacto entre la Arqueología,
la Historia y la Antropología, no olvidando la importancia de la
Filosofía. Solamente desde una perspectiva multidisciplinaria es
posible trazar nuevas cuestiones y obtener nuevas respuestas. El
principal objetivo del presente artículo es reflexionar en torno a la
importancia del uso del tiempo como un instrumento de legitimación
político religiosa. El punto de partida de la presente reflexión es la
fecha mítica de 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku.

85
Escuela de Historia

PALABRAS CLAVE: Civilización Maya, Tiempo y Propaganda,


Calendarios Mayas.

ABSTRACT
Time is without a doubt the most important conceptual element in
the processes of historical narrative. Each culture has developed its
own ways of defining and using time.
In 2018 it was fifty years since the first publication of the work of
Miguel León-Portilla, Time and Reality in Mayan Thought (1968).
Since then some were the attempts to study the concept of time. This
article is also an opportunity to present a state of the art relatively to
those studies. To reflect correctly on the concept and its conceptual
development over the centuries, it is necessary to cross-reference
sources (epigraphic, iconographic and ethnographic) and disciplines.
So it is essential to establish contact channels between Archeology,
History and Anthropology, not forgetting the importance of
Philosophy. Only from a multidisciplinary perspective is it possible
to draw new questions and obtain new answers. The main objective
of this article is to reflect on the importance of the use of time as an
instrument of religious and political legitimation. The starting point
of the present reflection is the mythical date of 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8
K’umku.

KEYWORDS: Maya Civilization, Time and Propaganda, Maya


Calendars.

INTRODUCCIÓN
Es frecuente oír o leer la expresión “El día tiene 24 horas para
toda la gente”. En la realidad el tiempo como medida cuantitativa
de definición concreta de las leyes de la física aplicadas al planeta

86
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Tierra, es común a todos sus habitantes. Sin embargo, la forma como


cada una de las culturas existentes en la tierra entiende el concepto
abstracto del tiempo es distinto. De igual forma cada cultura puede
cambiar su forma de entender el tiempo, ya que este concepto en su
variante abstracta es dinámico, desarrollándose y cambiando tal
como ocurre con la cultura que lo maneja.
Una de las formas de entender la relación entre una civilización
y el tiempo es identificar cómo surgió este. Así las mitologías son
determinantes para que el investigador pueda tener un punto de
partida.
El tiempo tiene entonces su punto de referencia básico en la duración
de un ciclo completo de la órbita del planeta tierra sobre su propio
eje, lo cual es entendido como la duración que el sol tarda hasta
completar un día (24 horas).
En la realidad, hoy tenemos elementos mecánicos para precisar el
tiempo transcurrido a lo largo del día, pero otras culturas en el pasado
no tenían más que herramientas sencillas de medición del tiempo. Sin
embargo, en caso que no se aplique la utilización de una herramienta
de medición del tiempo, lo mismo puede ser dividido en momentos
de transcurso variable. Así, el día y la noche son posibles de ser
compartimentados en pequeños periodos. Durante el día tenemos el
amanecer, cuando aclara antes de salir el sol al horizonte, el aparecer
del sol hasta su punto máximo, desde su punto máximo hasta la puesta
del sol, y el momento que antecede, la llegada total de la noche. Ya con
el caer de la noche, son las estrellas y la luna, en su posicionamiento,
que van a coordinar una idea de transcurso del tiempo.
En la mayor parte de las antiguas civilizaciones el concepto del
Tiempo abarca tanto el mundo de los hombres como el mundo de
los dioses, y de igual forma, el mismo concepto engloba la idea del
tiempo de los vivos y el tiempo de los muertos. Existe sin duda alguna
un patrón cognitivo en la percepción del tiempo, ya que el tiempo

87
Escuela de Historia

de los dioses y el tiempo de los muertos es infinitamente superior al


tiempo de los hombres vivientes.
En la civilización maya del periodo clásico existe sin cualquier tipo de
duda una relación de proximidad entre el mundo de los muertos y el
tiempo. Esa misma idea ha perdurado a través de los siglos y se puede
observar en el Popol Vuh. Ya que en este texto se narran las aventuras
de los héroes gemelos en Xibalbá. Estos personajes van a ser los
futuros astros celestes, a través de los cuales se marca el transcurso
del tiempo. Curiosamente también existe en la misma narrativa una
especie de premonición fantástica, ya que serán también los héroes
gemelos que van a derrotar a Vucub Caquix, personaje que se auto-
proclamaba el sol, y consecuentemente se puede entender como
señor del tiempo, ya que es el sol, la forma más sencilla para marcar
el transcurso del tiempo.
Todo lo anteriormente mencionado significa que el tiempo no fue
entendido por las antiguas culturas, y en particular por las culturas
mesoamericanas, como un elemento singular, más bien era un
elemento plural. Es necesario mencionar que la noción de tiempo es
dinámica, esto significa que la misma va cambiando en función del
valor del tiempo para los procesos socio-culturales.
Miguel León-Portilla fue el primer investigador en intentar un
acercamiento en relación al concepto del tiempo para los antiguos
mayas, desde un punto de partida filosófico. Para el investigador
mexicano, el tiempo es la clave de toda la civilización maya.
“Si otros pueblos alcanzaron forjar para sí diferentes visiones del
mundo, ventanas para asomarse a la comprensión de su universo,
los sabios mayas inventaron una cosmovisión que, por ser historia
medida y predicción de la realidad total, cuya esencia es el tiempo,
con mejor nombre habría que llamar cronovisión” (Léon-Portilla
1968:109).

88
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Una de las conclusiones más relevantes del estudio de Miguel Léon-


Portilla es la reflexión que determina, según el autor, que k´in es la
base de todo el universo maya, así k´in no es solamente el sol, el día,
pero es también el propio tiempo, la realidad absoluta sin cualquier
tipo de limitación.
Es necesario mencionar que las primeras informaciones referentes al
tiempo y a la civilización maya, están expuestos en la obra de Diego
de Landa, que quedó conocida como Relación de las cosas de Yucatán
(Landa 1864; Ayala Falcón 1985:16-17; Coe 1975:99-107). Desde entonces
muchos fueron los intentos de abordar los temas relacionados con el
tiempo.
Una de las perspectivas de análisis del concepto del tiempo es la
lingüística, entre estos estudios se debe destacar los relativos a los
adverbios de tiempo y su contexto (Sanz González 2001:69; Lacadena
García-Gallo 2009:14). Este campo de estudio y sus resultados son
vitales para fortalecer un otro campo del saber, el mundo de los
estudios epigráficos, lo cual también hizo importantes aportes para
que fuera posible profundizar los conocimientos acerca de la noción
del tiempo para los antiguos mayas. En este sentido se destaca las
investigaciones de Dmitri Beliaev relativamente al tiempo mítico
y sus anomalías referentes a la rueda calendárica (Beliaev 2011), ya
anteriormente Nikolai Grube había llamado la atención para una
idea de tiempo antes del tiempo (Grube 2004:127:131).
Otra vía de análisis del concepto del tiempo para los antiguos mayas
fue la propuesta por Erik Velásquez García (2017) quien comprobó
que existe un lenguaje encriptado repleto de intención literaria
en el mundo imagético referente a las nociones del tiempo en el
periodo clásico. Sus investigaciones aportan y solidifican algunas de
las aportaciones anteriormente trabajadas por Beatriz de la Fuente
(2004:.56-60,62-66) en el ámbito de la iconografía e imaginario no
verbal.

89
Escuela de Historia

En el campo de los estudios etno-históricos el principal enfoque


referente al tiempo, fue mayormente centralizado en los textos del
Popol Vuh y Chilam Balam (Caso Barrera 2012; Scandar 2019), con
algunas destacadas excepciones (Voss 2015). Para finalizar este breve
repaso de estudios que abordan la temática del Tiempo, se debe
destacar aún los estudios de carácter etnográfico (Molesky-Poz 2006),
los cuales son aún escasos.
Es también de notar que, en torno al fenómeno de 2012, fueron
publicados algunas obras bastantes interesantes que expusieron
varios aspectos relativos a la visión del tiempo para los antiguos
mayas (Gronemeyer y MacLeod 2010; Stuart 2011).

LOS CALENDARIOS MAYAS Y SU CONTEXTO MESOAMERICANO


Es correcto decir que los calendarios, así como la propia numeración
utilizada por los mayas encuentra en otras culturas mesoamericanas
su origen, esto significa que los modelos calendáricos y numéricos
fueron re-adaptados a una realidad cultural específica. Desde una
perspectiva meramente epigráfica se puede destacar el monumento 1
de La Mojarra, en el cual podemos encontrar referencias calendáricas
(Kaufman y Justeson 2001). Ese contenido es anterior a otros textos
de la región maya, lo que implica significativamente que el uso de los
calendarios ya estaba siendo efectivo en otras partes mesoamericanas,
tal como Cuicuilco (Rice 2007:45).
Pero ¿qué calendarios eran esos que estaban siendo utilizados por
otras culturas mesoamericanas? Se puede decir que los calendarios
que estaban siendo utilizados en ese período de tiempo fueron
los calendarios de 260 días y de 360 días. Acerca del origen de los
calendarios de 260 días es frecuente una asociación con aquello
que es el período de ciclos lunares, pero también con la gestación
humana (Bowditch 1910; Brotherston 1982; Fields 1989:83-84; Tedlock
1985:232). En términos de distribución geográfica este calendario de

90
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

260 días puede ser encontrado desde regiones tan al norte como el
Estado de Hidalgo y México, pero también a sur, más propiamente
en la zona de Honduras (Marcus 1992:11). En la opinión de Prudence
M. Rice el calendario de 260 días es el ejemplar más antiguo de todos
los calendarios mesoamericanos, para el autor, sin duda alguna este
calendario es anterior al calendario de 365 días (Rice 2007:45-47).
Basa su teoría en la observación de que los 20 elementos gráficos
son alusivos a elementos del mundo natural como la tierra, el aire,
los animales y las plantas, mientras que los elementos gráficos
del calendario de 365 días, parecen obedecer a una construcción
totalmente fonética y no simbólica (Rice 2007:46-47), concordando
así con las ideas propuestas por Barbara Tedlock (1992:107).
Otro aspecto gráfico que parece determinante en el momento de
evaluar el calendario de 260 días con un perfil sagrado es el cartucho
que aparece casi en la totalidad de los ejemplos del período clásico
y que envuelve cada uno de los 20 días que corresponden a los 20
nahuales, este aspecto puede ser entendido como una metáfora
para una idea de asentamiento, idea compartida por Rice (2007:34) y
Stephen Houston (1989:35) quien ha sugerido que el cartucho puede
ser el glifo para 20, el cual también está conectado con la luna.
En los años más recientes algunos investigadores asocian el
calendario de 260 días con los ciclos visibles del planeta Venus (Aveni
2001:90-94,184-196; Tedlock 1985:40; Justeson 1989:1978).
Los calendarios de 260 y de 365 días también son comunes a todas
las partes de Mesoamérica. Algunos autores como Miles (1965:272),
sugieren que originalmente existiría un período de 400 días, ya que
era frecuente que en Mesoamérica se contase por veintenas. Así,
partiendo de un periodo de 400 días el hombre mesoamericano
abrevió el ciclo para un periodo de 360 días (Edmonson 1986:8-9).

91
Escuela de Historia

Es notorio también la presencia de la cuenta larga en algunos


espacios mesoamericanos, más propiamente en la región Olmeca.
Sin embargo, las culturas del centro de México parecen no haber
usado este tipo de medición del transcurso del tiempo (Rice 2007:44).
Dentro del contexto mesoamericano parece haber una idea
generalizada de que el sol y su movimiento está intrínsecamente
conectado con el orden cósmico, con el espacio y con las metáforas
de tiempo que pueden ser encontradas por toda Mesoamérica (Earle
1986:156; Gossen 1974; Graulich 1981; Léon-Portilla 1968; Watabane
1983). El sol aparece como elemento singular pero capaz de criar
pluralidad entre los diversos axiomas de la realidad cósmica, entre
los cuales se pueden destacar los puntos cardinales; la diferenciación
entre día y noche; y los ciclos de tiempo que van de solsticio a solsticio
(Rice 2007:33).
La cuenta larga puede ser entendida de alguna forma como un conteo
absoluto de los días transcurridos, de este modo, es el sol la unidad
básica del conteo. La cuenta larga obliga por eso a la existencia de
varios ciclos de tiempo dentro del mismo mecanismo calendárico.

EL TIEMPO COMO ELEMENTO ANIMADO


Para la civilización maya todos los elementos que constituyen el
universo incluso el propio tiempo están animados, esto significa
que de una forma visible o invisible existe una esencia dentro de
los elementos que constituyen la naturaleza de carácter físico o de
carácter metafísico, siendo los animales las plantas, tal como toda la
fauna y toda la flora, pero también las fuerzas de la naturaleza que
incluyen el viento, las tempestades, el agua; todo está animado. El
mundo de los muertos, así como el mundo de los dioses también está
completamente animado.

92
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Debido al distanciamiento temporal entre los días de hoy y del


período clásico maya es necesario recorrer el mundo de la epigrafía
y la iconografía para conseguir identificar elementos que posibiliten
un acercamiento al pensamiento maya referente al tiempo.
La escritura jeroglífica maya contiene en su repertorio gráfico
algunos ejemplos de variantes de cabeza, tanto para logogramas
como para silabas. Curiosamente todos los números de 0 a 19 poseen
una variante de cabeza, con atributos iconográficos que pueden
ser asociados al mundo no humano. De igual forma, los elementos
básicos de la cuenta larga (B´aktun, K´atun, Tun, Winal, K´in), también
ellos poseen variantes de cabeza, con algunos atributos muy bien
definidos. Otros elementos de la cuenta larga, más específicamente
los Piktunes y conjuntos superiores, parecen hasta el momento, no
contener variantes de cabeza.
Teniendo en consideración los atributos y elementos iconográficos
de los números y de los periodos de tiempo, es posible verificar que
algunos de ellos tienen su pasaje por escenas mitológicas, que pueden
ser distinguidas en las cerámicas - como por ejemplo el sapo que
representa el periodo winal - en esos casos esas figuras son participantes
activos de la narrativa, estando animados y contribuyendo para
el desarrollo de las acciones. Así, es plausible considerar que cada
uno de los elementos anteriormente mencionados, pudiera haber
tenido una mitología propia, pero de ella apenas ha sobrevivido su
componente gráfico.
Otro aspecto que merece ser mencionado, es la asociación entre
elementos numéricos y periodos de tiempo. Por norma consideramos
que los números de los periodos, como por ejemplo, 9 B´aktunes, son
solamente una forma de precisar el tiempo, en una perspectiva de
cuenta larga. En parte esta postura de análisis parece ser un poco
incongruente, ya que se considera que otros casos como por ejemplo
en las fechas del Tzolk´in los números contienen una importancia
vital en términos simbólicos, pero también a nivel de espiritualidad,

93
Escuela de Historia

tal como queda referenciado en estudios etnográficos (Molesky-Poz


2006). No se pretende decir con esto que la real importancia del cruce
entre números y periodos de tiempo, está alejada de una función de
registrar el tiempo transcurrido, mucho por lo contrario, la función
primaria y efectiva de la cuenta larga es registrar el transcurso del
tiempo, funcionando como instrumento político, sin embargo,
podría contener otra lectura mítico-simbólica que se ha desvanecido
en el tiempo y que hoy por hoy pertenece al olvido.
Lo anteriormente mencionado conlleva a la realización de una
pregunta: ¿En la fecha de creación mítica 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku,
el número 13 puede contener un simbolismo o no pasa de una mera
cuestión matemática?

EL TIEMPO COMO INSTRUMENTO DEL PODER


El tiempo gana una importancia vital cuando conectado con
una política de narrativa pública, pasando a ser un instrumento
fundamental en la construcción de discursos legitimadores del
poder y del orden. Así, es necesario reflexionar acerca de la forma
como el tiempo fue creado para obedecer a los intereses de los grupos
detentores del poder.
Es necesario observar de forma más detenida la fecha de 13.0.0.0.0
4 Ajaw 8 K´umku para entender en toda la profundidad las
implicaciones del tiempo con el poder. La raíz de esa fecha es su
posición del Tzolk´in 4 Ajaw.
Es necesario tener en atención que existen algunas interesantes
menciones a la fecha 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku provenientes de
varios espacios geográficos dentro de las tierras mayas, siendo las
cerámicas K7750, K2796; y los monumentos, estela 1 de Cobá, estela
C de Quirigua algunos de los ejemplos más famosos de textos que
mencionan esa fecha mítica.

94
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

La fecha del Tzolk´in 4 Ajaw asume un simbolismo profundo cuando


asociado con la cuenta larga, particularmente relevante en lo que
corresponde a la fecha mítica de creación 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku.
En el siguiente listado se presentan algunos aspectos matemáticos
que demuestran las particularidades de 4 Ajaw en relación a otras
fechas del tzolk´in.
0.0.0.13.0 4 Ajaw 3 Mak
0.0.13.0.0 4 Ajaw 3 Muwan
0.0.13.13.0 4 Ajaw 18 Ch´en
0.13.0.0.0 4 Ajaw 3 Mol
0.13.0.13.0 4 Ajaw 18 Wo
0.13.13.0.0 4 Ajaw 18 Sotz´
0.13.13.13.0 4 Ajaw 18 K´ayab´
13.0.0.0.0 4 Ajaw 3 K´ank´in
13.0.0.13.0 4 Ajaw 18 Mul
13.0.13.0.0 4 Ajaw 18 Yax
13.0.13.13.0 4 Ajaw 13 Sek
13.13.0.0.0 4 Ajaw 18 Sip
13.13.0.13.0 4 Ajaw 18 Pax
13.13.13.0.0 4 Ajaw 18 K´umku
13.13.13.13.0 4 Ajaw 13 Mak
0.0.0.1.0 11 Ajaw 3 Pop
0.0.1.0.0 13 Ajaw 3 K´umku

95
Escuela de Historia

0.0.1.1.0 7 Ajaw 3 Wayeb´


0.1.0.0.0 5 Ajaw 3 K´ank´in
0.1.0.0.0 2 Ajaw 8 Mak
0.1.1.0.0 11 Ajaw 3 Mak
0.1.1.1.0 5 Ajaw 3 K´ank´in
1.0.0.0.0 3 Ajaw 13 Ch´en
1.0.0.1.0 10 Ajaw 13 Yax
1.0.1.0.0 12 Ajaw 8 Ch´en
1.0.1.1.0 6 Ajaw 8 Yax
1.1.0.0.0 1 Ajaw 13 Sotz´
1.1.0.1.0 8 Ajaw 13 Sek
1.1.1.0.0 10 Ajaw 8 Sotz´
1.1.1.1.0 4 Ajaw 8 Sek

0.0.0.9.0 2 Ajaw 3 Ch´en


0.0.9.0.0 7 Ajaw 3 Pax
0.0.9.9.0 5 Ajaw 18 Xul
0.9.0.0.0 12 Ajaw 18 Ch´en
0.9.0.9.0 10 Ajaw 18 K´umku
0.9.9.0.0 2 Ajaw 13 Yaxk´in
0.9.9.9.0 13 Ajaw 13 Pax

96
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

9.0.0.0.0 8 Ajaw 13 Kej


9.0.0.9.0 6 Ajaw 8 Sip
9.0.9.0.0 11 Ajaw 8 Yax
9.0.9.9.0 9 Ajaw 3 Pop
9.9.0.0.0 3 Ajaw 3 Sotz´
9.9.0.9.0 1 Ajaw 3 Mak
9.9.9.0.0 6 Ajaw 18 Pop
9.9.9.9.0 4 Ajaw 18 Yax

En el listado de arriba, se presenta de forma parcial una relación


de las fechas de la cuenta larga. Fueron seleccionados tres partes
constituyentes de un listado completo, en lo cual se expone todas las
fechas desde 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku - representada en el listado
en su forma matemática 0.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku (Gronemeyer y
MacLeod 2010:4) - hasta 13.0.0.0.0 4 Ajaw 3 K´ank´in.
Como se puede notar, parece existir un patrón que apenas ocurre
cuando el número 13 ocupa las posiciones de la cuenta larga, desde
que el número en la posición k´in sea 0. Cuando efectuado ese
mismo ejercicio con otros números, que no sean el 13, ese patrón
no ocurre. Por ese mismo motivo parece existir una casualidad
matemática que hace con que el número 13 contenga la capacidad de
distinguirse de los demás. De igual forma es importante notar que el
13 y sus especificidades en otros ámbitos de la cuenta larga, ya fueron
identificadas por Gronemeyer y MacLeod (2010:6). La pregunta que
surge de este patrón es la siguiente: ¿Se trata de una casualidad
matemática, solamente reconocible en nuestros días, o, por lo
contrario, ese patrón matemático fue buscado propositivamente por
los antiguos mayas?

97
Escuela de Historia

Como fue mencionado anteriormente parece ser el Tzolk´in la raíz


de la cuenta larga, de este modo es plausible que la selección de una
fecha mítica pudiera tener su faro, en un día del Tzolk´in. Es entonces
acá que se manifiesta el papel simbólico de 4 Ajaw.
El lector quiera tomar en consideración, que son numerosos los
casos en que el logograma AJAW aparece en su variante de cabeza,
y no en su forma abstracta, esto puede ser un indicio, de la función
simbólica del día Ajaw, ya que el significado etimológico de Ajaw es
señor, entiéndase señor como un determinado rol político y social.
Curiosamente el número que acompaña este elemento en la fecha
mítica de la creación es el número 4 y no otro cualquiera. Es entonces
determinante para el correcto análisis de este aspecto buscar la
importancia simbólica de este elemento matemático.
El número 4 dentro de las fuentes etnohistóricas está mayormente
conectado con elementos de creación y de sostenido cósmico. La obra
Relación de las cosas de Yucatán está repleta de menciones a detalles
de la cultura maya relacionados con el número 4. Existen cuatro
chaacs, cuatro direcciones, cuatro elementos de la naturaleza, cuatro
intentos de creación. Estos elementos no parecen estar alejados entre
sí, por lo contrario existe una continuidad simbólica entre ellos. La
cuestión que se debe efectuar es la siguiente: Es esta continuidad
simbólica, posterior a la selección de la fecha 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8
K´umku o al contrario es la mencionada fecha un resultado de una
forma ancestral?
Es necesario tener en cuenta, que parece ya existir una concepción
simbólica del número 4, visiblemente anterior, quizá al aparecimiento
de la cuenta larga. En caso sea considerada la observación del sistema
de escritura epi-olmeca y maya desde su aspecto de motivación
gráfica. Podemos agrupar los glifos en grupos relacionados con los
cuatro elementos naturales (agua, fuego, aire, tierra). El número
cuatro apunta aún para los cuatro miembros del cuerpo humano
- curiosamente el número 13 también está asociado con el cuerpo

98
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

humano, tal como el número 20, según los mayas contemporáneos


(Molesky-Poz 2006:134) - y también de los cuatro colores del maíz.
Por otro lado, también parece interesante verificar que las sílabas
chi, ke, k´o, ye contienen variantes de manos en posiciones distintas,
siendo que entre esas variantes es posible verificar que parecen
apuntar tanto para arriba, abajo, para la derecha y para la izquierda.
La variante de cabeza del número 4 está aún relacionada con el dios
solar, cargando un infijo de K´IN. Este elemento epigráfico, refuerza
la idea inicial de Léon-Portilla, cuando este investigador apunta k´in
como la base de todo el concepto temporal para los mayas (Léon-
Portilla 1968). De este modo cada vez más el número 4 aparece como
una metáfora de creación por sí misma, fortalecida como se de una
hipérbole se tratara, asociada con el día Ajaw, lo cual aún hoy por hoy
es considerado un día de creación (Molesky-Poz 2006:131-132).
En una perspectiva biográfica-social es posible interpretar el número
4 como un elemento simbólico de tiempo absoluto, caso se considere
el mismo desde un punto de vista del tiempo centralizado en el yo.
Así, se puede entender que el yo se ubica, entre sus hijos, sus padres,
y sus abuelos.
Abuelos pasado lejano
Padres pasado reciente
Yo presente
hijos futuro
Hay entonces un simbolismo de tiempo, en las relaciones directas
de ascendencia y descendencia familiar, ya que el transcurso de lo
mismo es medible a través de evidencias físicas. Erik Velásquez García
llama la atención para la idea de tiempo transcurrido enfocado en
el individuo a través del arte, más propiamente recorriendo a la
secuencia in praesentia (Velásquez García 2017:377-380), este recurso

99
Escuela de Historia

artístico posibilita ver al individuo en varias etapas de su vida biológica


(Coe 1975:24; Reents-Budet 1994:150-332). La utilización de ese recurso
artístico revela la necesidad de expresar el transcurrir del tiempo,
como una necesidad social y artística. Curiosamente este modelo
de comprobación física del transcurso del tiempo, parece también
estar referido en la propia escritura jeroglífica, particularmente en el
logograma TUN.
Se debe recordar que el tun es una forma de medir el tiempo pasado.
Más específicamente cada tun corresponde a un periodo de 360 días
transcurridos. Así la asociación de la motivación gráfica del glifo
obedece a una idea de tiempo. La confirmación aparece a través del
logograma WITZ, donde es visible la presencia de elementos gráficos,
que representan muy posiblemente las estalactitas de los interiores
de las cuevas, que muchas veces se localizan en el interior de los
cerros, existiendo también una asociación gráfica con TUN (Stone
y Zender 2011:139). Esas estalactitas son formadas por las gotas que
van siendo cristalizadas con el pasar del tiempo. En esta medida pasa
a hacer sentido el lenguaje metafórico de la representación gráfica
de TUN en su significado como ciclo de tiempo, pues es necesario el
transcurso de varios tunes para la transformación del interior de las
cuevas. Quizá por ese motivo el logograma TUN solamente aparece en
periodos de tiempo superiores al proprio tun, ya que para representar
este periodo de tiempo el logograma HAB´ es el elegido por los escribas
mayas. Por otro lado, es también el logograma TUN en su significado
de piedra (Stone y Zender 2011:189), un elemento asociado al tiempo,
ya que este es uno de los soportes más utilizados para plasmar las
cronografías mayas, pero también en las edificaciones.
La civilización maya ha comprendido que solamente por el recurso
de la matemática es posible medir cuantitativamente el tiempo. Esta
comprensión no es exclusiva de los mayas y ya era manifestada
anteriormente en Mesoamérica, sin embargo, los mayas han creado

100
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

una forma original de vincular ese conocimiento ancestral con una


concepción político-religiosa.
Cuando los antiguos mayas eligen la fecha 4 Ajaw están creando una
metáfora de legitimación, que solamente sirve a una única figura, el
propio Ajaw. Así dentro de un lenguaje simbólico existe un discurso
encriptado que promueve el Ajaw como centro del universo, y
como el centro del proprio tiempo. El Ajaw no domina solamente la
estructura física del mundo (puntos cardinales, elementos naturales),
él también domina el tiempo (ya que pasa a ser la referencia temporal
de toda la literatura pública). Tal discurso simbólico jamás podría
ser puesto en práctica sin el auxilio de la matemática, esto significa
que sería necesario trasladar este discurso y transformarlo en
un discurso blindado, sin ninguna hipótesis de crítica social. Aquí
nuevamente entra en escena un vínculo, entre matemática, tiempo,
poder y religión.
El mensaje de 13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku corresponde a una ruptura
de tiempo, entre el tiempo de los dioses y el tiempo de los hombres.
Metafóricamente puede ser entendido como la comprensión por
parte de los dioses que ahora existe alguien (el Ajaw) que es capaz
de supervisar el orden cósmico (Rice 2007:202), y que pasa a ser
mediador entre los intereses de los hombres y de los dioses. Todo
esta compleja relación parte de un esfuerzo de estructurar el tiempo
(Rice 2007:190) y al mismo tiempo de definir un modelo sostenible de
ciclos de tiempo y de jefaturas (Rice 2007:196-201).
Pasa entonces a ser necesaria la utilización del tiempo de los dioses
en las narrativas del tiempo de los hombres, como mecanismo
legitimador, recordando así el origen sagrado de tal contrato social.
La utilización de esta técnica, crea tensiones entre los varios señores,
los cuales, pasan a encontrar en el tiempo un nuevo aliado. Ahora
ya no importa solamente mencionar el tiempo de los dioses en sus
narrativas, es necesario controlar la inmensidad del tiempo, pasado
y futuro. Es en este contexto que los artes visuales, pasan a tener

101
Escuela de Historia

un papel significativo, elocuente y eficaz como artes del tiempo


(Velásquez García 2017).
Así, mencionar hechos míticos muy atrás en el tiempo, o agendar
acciones en eventos que solo se cumplirán en un futuro lejano,
adiciona poder y reconocimiento, tanto al Ajaw, como al pueblo
que comanda, ya que demuestra que su poder, como el poder de sus
ancestros, y tal como el poder de sus descendientes es para perdurar,
pues mientras exista tiempo, existirá el cumplimiento de ese contrato
social.
Otro aspecto determinante para comprender el tiempo como
instrumento legitimador, es la arquitectura monumental y la
ubicación de la memoria pública. La construcción de nuevos edificios,
arriba de viejos edificios es también una metáfora de poder y tiempo,
pues es como un ciclo que contiene otros ciclos en una continuidad
ordenada. Así, en momentos de rupturas o de cambios significativos
se buscan nuevos espacios para levantar un nuevo edificio. Una gran
parte de las estructuras de las urbes mayas, producen un detallado
juego de comunicación arquitectónica, donde los monumentos, los
altares y las estelas, juntamente con los espectadores y los actores
de las performances político-religiosas, son los jugadores, sobre la
observación permanente del detentor de las reglas, el propio Ajaw.
La planificación de una ciudad en sus elementos arquitectónicos es
una decisión que incorpora el entendimiento del tiempo, pasado,
presente y futuro, que solamente podrá ser entendido como la
utilización del tiempo para una narrativa histórica a través de la
arquitectura.
Con el colapso maya, parece existir un abandono gradual de la cuenta
larga, ese fenómeno parece demostrar que la cuenta larga estaba
estrictamente vinculada con el modelo político del periodo clásico
en tierras mayas, sobre todo en lo que se dice respecto a periodos
de largo de tiempo como B´aktunes, Piktunes y Kalabtunes. Siendo

102
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

ahora el énfasis colocado en periodos de tiempo más cortos, como es


el caso del K´atun, que se torna más manejable desde una perspectiva
más inmediata.
Curiosamente también parece disminuir la mención al tiempo mítico
de forma constante, como instrumento legitimador de las decisiones
tomadas en el presente. No existe un abandono del tiempo, como
elemento diferenciador en el proceso de memorias identitarias, pero
ocurre un gradual recorte en los ciclos de tiempos contabilizados,
buscándose cada vez más la conservación del elemento más valioso
del tiempo, que parece ser el Tzolk´in. Claro que se debe tener en
consideración todos los cambios político-territoriales que fueron
existiendo al largo de los siglos desde el clásico maya, pasando por
el posclásico y el periodo colonial. De alguna forma, generación
tras generación parece existir un mayor abandono en relación a la
importancia de medir el tiempo, como forma de registro de memoria.
Tal hecho puede ser observado en los memoriales de Sololá donde
se puede observar que con la llegada de un poder extranjero (los
españoles) gradualmente el autor o los autores del documento van
abandonando un estilo prehispánico de medir del tiempo, para
proceder a la adopción de otro modelo.
En un trabajo de campo, en el ámbito etnográfico el autor del
presente artículo, cuestionó acerca de las formas de medir el tiempo.
Uno de sus informantes Don Ramón Cun, originario de San Miguel
Tucurú destacó lo siguiente: “muchas personas no saben la edad que
tienen, pues para ellas no les importa, no llevan la cuenta de sus
años. Sus únicos puntos de referencia son las fiestas patronales” (Cun
comentario personal 17 mayo de 2019).
Don Ramón Cun se refiere a la gente de a pie, a la gente campesina.
El tiempo para ellos es medido de forma básica, día/noche, lluvias,
siembra/cosecha. Sin embargo, dentro de estas mismas comunidades
rurales existen conocedores de los ciclos del tiempo, guardianes del
conocimiento, como elemento sobrenatural y asociado al poder.

103
Escuela de Historia

En la realidad existe una continuidad de la relación entre poder y


tiempo, pero tal como pasaba en el clásico maya, el tiempo es un
conocimiento poderoso, solamente estuvo accesible a un grupo
restricto de elegidos. Por eso, muy posiblemente hoy los campesinos
deben saber tanto de los ciclos del tiempo como los campesinos del
clásico. El tiempo como instrumento político-religioso es un símbolo
de orden, de elitismo y de conexión profunda con el poder. Y en caso
no exista un interés de las elites para utilizar este instrumento como
legitimador, el tiempo pasa a ser meramente un concepto concreto,
abandonando su perfil abstracto-simbólico.
Podrá entonces ser esta una respuesta para la inexistencia de una
definición concreta de tiempo en los idiomas mayas, existiendo
solamente definiciones para determinados astros, y ciclos de tiempo
(calendarios), pero la ausencia de una conceptualización del tiempo,
que culmine en una sola palabra para definir tiempo, no existe debido
a su complejidad político-simbólica.

CONSIDERACIONES FINALES
El concepto de tiempo para la civilización maya es dinámico, esto
significa que el mismo se adecua a las circunstancias, político-
religiosas a través de los siglos. Es posible trazar una división en
términos de su desarrollo y utilización, sin embargo, antes de hacerlo
es necesario hacer notar que la génesis de los calendarios mayas es
de carácter mesoamericano, o sea que comparte un pasado común
con otras culturas mesoamericanas, aunque la civilización maya
tenga adoptado estos calendarios para su propio contexto. De igual
forma al ocurrir este proceso de adaptación sucede una nueva forma
de entender el tiempo, ya que el concepto de tiempo es moldeado
por la cultura que lo aplica. En tiempos del clásico el tiempo es un
instrumento de poder, que permite legitimar el presente, a través de
menciones al pasado y al futuro.

104
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Los mayas del periodo clásico lograron establecer una fecha mítica
(13.0.0.0.0 4 Ajaw 8 K´umku) que permite, manejar y separar el
tiempo de los hombres y el tiempo de los dioses, sin que para eso
fuese necesario utilizar números negativos.
Durante el posclásico el tiempo no es más un instrumento de
legitimación política, pasando a ser un instrumento simbólico
funcional, donde su principal objetivo es medir ciclos. Se puede
entender este cambio debido al colapso del sistema político del
periodo clásico y consecuentemente al gradual desaparecimiento
de la figura del K´uhul Ajaw, como elemento centralizador del orden
cósmico. Así, un señalamiento del tiempo a larga escala deja de hacer
sentido, siendo ahora omitida una gran parte de los calendarios,
optando por una forma más abreviada.
Con el periodo colonial, existe un gradual abandono de los sistemas
calendáricos, siendo ese conocimiento apenas conservado por
algunos pocos mayas. Este abandono colectivo ocurre debido a
un cambio de sistema político-religioso-social, que ahora aleja de
la sociedad las grandes festividades religiosas prehispánicas, eso
conlleva a un olvido de los marcadores del tiempo. Desde entonces
hasta hoy el concepto de Tiempo retornó a su forma más sencilla, la
cual es la cuenta de los días por medio del movimiento del sol.
Contar ciclos de tiempo además de aquellos importantes para la siembra
y para la cosecha, parece no hacer más sentido. Así, parece claro que
la utilización del tiempo en el periodo clásico sirve como herramienta
para crear una cronografía, una forma propia de escribir historia como
una necesidad sociocultural de producir una memoria grupal.
Quizá las nuevas investigaciones arqueológicas sean capaces de
traer a la luz más informaciones acerca de la utilización del tiempo
por parte de los mayas en tiempos prehispánicos. De igual forma es
necesario la realización de más estudios etnográficos referentes al
concepto del tiempo para los distintos grupos étnicos mayas.

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2015 La noción del tiempo en la cultura maya prehispánica. Liminar:
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1983 In the World of the Sun: A Cognitive Model of Mayan
Cosmology. Man 18 (4):710-728.

110
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

UNA FECHA PROBLEMÁTICA DEL ALTAR 1


DE RIO AMARILLO COPÁN

David Franco
Universidad Católica de Honduras (UNICAH)
balamnehn83@gmail.com

RESUMEN
Localizado a 18 kilómetros al noroeste de la Acrópolis de Copán y 14
km al sur de la Municipalidad de El Paraíso, en el oeste de Honduras,
existen los restos de un pequeño sitio llamado Rio Amarillo.
Este sitio cuenta con evidencia del rol político, social y administrativo
de Copán durante el período Clásico Terminal, en donde un posible
sistema de poder centralizado en la figura del gobernante, se degrada
a una forma de gobierno descentralizado de las élites locales durante
los últimos días de la dinastía de K’inich Yax K’uk Mo’.
Basado en modernos métodos de desciframiento epigráfico, este
trabajo busca ofrecer un escenario más amplio del papel que jugó
este pequeño sitio en el sureste de la periferia del mundo Maya,
específicamente, en el área adyacente a la Acropolis de Copan; así
como la búsqueda de evidencia plausible sobre la fecha dedicatoria
del Altar 1 de Rio Amarillo, utilizando datos y estilos artísticos
representados en este monumento.
PALABRAS CLAVE: Copán, Rio Amarillo, Yax Pasaj Chan Yopaat,
Clásico Terminal.

111
Escuela de Historia

ABSTRACT
Located 18 km northwest of the Acropolis of Copán and 14 km south of
the municipality of El Paraíso in western Honduras, are the remains
of a small site known as “Río Amarillo”.
This site could offer new evidence about the political, social and
administrative role of Copán during the classic terminal period,
where a possible centralized power system in the figure of the ruler,
degrades a form of decentralized government of the local elites
during the last days of the K’inich Yax K’uk Mo ‘dynasty.
Based on modern methods of epigraphic deciphering, this work seeks
to offer a broader picture of the role played by this small settlement
in the southeastern periphery of the Mayan world, specifically in
the area adjacent to the Acropolis of Copan, as well as to the We are
looking for more plausible evidence about the dedication date of
Altar 1 of Río Amarillo, using the data and artistic styles expressed in
the monument.
KEYWORDS: Copán, Rio Amarillo, Yax Pasaj Chan Yopaat, Terminal
Classic.

INVESTIGACIONES EN EL SITIO
El sitio arqueológico Río Amarillo se localiza en la periferia sureste del
Área Maya, aproximadamente a 18 km al noreste del Grupo Principal
de Copán en el occidente de Honduras (Burgos et al. 2015). Dicho sitio
se constituyó como un centro secundario durante el período Clásico
Tardío (600-900 d.C.), siendo este reportado por vez primera en el año
1917 por Sylvanus Morley (1920), para luego pasar desapercibido en el
ámbito de la exploración arqueológica por más de medio siglo, hasta
que en el año de 1975 Gary Pahl (1977) efectuó los primeros trabajos
de investigación, que se limitaron al Área Central.

112
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Posteriormente, desde los años 90 se han venido realizando otras


investigaciones con distintos enfoques, en su mayoría orientados
al mapeo, excavación de espacios relacionados con arquitectura
monumental, escultura, así como algunas actividades de
consolidación y restauración (Canuto 1996; Saturno 2000). Dichos
estudios han generado resultados bastante interesantes acerca de este
pequeño asentamiento, los cuales podrían ofrecer nuevas evidencias
acerca del rol político y cultural de Copán y su periferia durante el
periodo Clásico Tardío, donde un sistema de poder aparentemente
centralizado en la figura del gobernante, se degrada a una estructura
de gobierno descentralizada, dominada por las elites locales durante
los últimos días de la dinastía de K’inich Yax K’uk Mo’.
Este trabajo también busca proporcionar evidencias más plausibles
acerca de la fecha de dedicación del Altar 1 de Rio Amarillo, tomando
como base los modernos métodos del desciframiento epigráfico y
otras herramientas auxiliares.

ANTECEDENTES DE LOS ALTARES 1 Y 2 DE RIO AMARILLO


A principios del siglo XX, Sylvanus Morley (1920) reporta la
presencia de dos pequeños altares con inscripciones en el sitio de
Rio Amarillo. Morley dibujó los cuatro lados del Altar 1 (Figura 1) y el
lado sobreviviente de otro altar muy deteriorado, el cual denominó
Altar 2 (Figura 2). Luego a finales de la década de los años 70, Gary
Pahl ofrece una de las primeras interpretaciones acerca de las
inscripciones de dichos altares, sugiriendo la presencia de los glifos
emblema de Copán y Rio Amarillo, proponiendo además la existencia
de una estrecha relación entre ambos sitios (Pahl 1977).

113
Escuela de Historia

Figura 1. Dibujo del Altar 1 de Rio Amarillo (Tomado de: Sylvanus Morley 1920).

114
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 2. Dibujo del Altar 2 de Rio Amarillo (Tomado de: Sylvanus Morley 1920).

Años más tarde, Linda Schele (1987) redibuja (Figura 3) y reinterpreta


el Altar 1, los cuales ya presentaban un alto grado de erosión en
el museo de Copán. Dentro de sus interpretaciones, concluye la
ausencia del glifo emblema de Rio Amarillo en el Altar 1, al mismo
tiempo que sugiere la genealogía histórica de un señor local, quien
dice ser descendiente de un señor de 3 katunes (40-60 años de
edad), que ostenta el glifo de sagrado señor de Copán. También hace
hincapié sobre el patrón de fecha de rueda calendárica 4 KIB’ 15
K’AYAB registrado en el altar, notando que el coeficiente de mes de
Haab excede en una unidad al registro congruente con el ciclo de la
rueda calendárica, o sea 4 KIB’ 14 K’AYAB.
Siguiendo a la misma autora, la fecha propuesta para el Altar 1 de Rio
Amarillo es 9.10.10.02.16 4 KIB 14 K’AYAB y corresponde al 31 de enero
del año 643 d.C., Schele relaciona esta fecha con un “glifo eventual de
final de periodo” que aparece en el bloque V2 y que precede al día 1
Ajaw en X1, el cual posiblemente ocurrió al final del Katun 10 y que
también está registrado en la Estela 10 de Copán donde se relaciona
con el final del katún 11, ubicando así la fecha de comisión del altar
dentro de un rango de tiempo que abarca al reinado del décimo
segundo gobernante de Copán K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil.

115
Escuela de Historia

Figura 3. Dibujo del Altar 1 de Rio Amarillo (Tomado de: Linda Schele 1987).

116
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Por otra parte, Berthold Riese (1988) propone para el Altar 1 la fecha
9.18.8.5.16 4 KIB’ 14 K’AYAB’ correspondiente al 20 de enero del año
798 d.C., en pleno reinado del décimo sexto gobernante de Copán Yax
Pasaj Chan Yopaat. Riese observa un patrón diferente de fechas en el
altar, al no registrarse el mismo con el sistema tradicional de cuenta
larga observado en la mayoría de monumentos de Copán, además,
sugiere la presencia del nombre de un gobernante local de Rio
Amarillo, relacionado con la figura de un gobernante no identificado
de Copán, y que por razones cronológicas podría tratarse de Yax
Pasaj Chan Yopaat.
William Saturno (2000), bajo la supervisión de David Stuart, propone
como posibles fechas de dedicación para el Altar 1, los registros
de cuenta larga 9.18.8.5.16 o 10.1.1.0.16 correspondientes al 22 de
diciembre de 798 d.C. y al 5 de diciembre de 850 d.C. respectivamente,
donde la primera fecha apunta hacia el final de la dinastía copaneca
y la segunda de manera intrigante a un registro posterior al colapso
político de Copán. Saturno sugiere que el Altar 1 puede verse
claramente como una declaración de autoridad local, donde el
protagonista que dedica dicho monumento se llama a sí mismo como
un joven varón, descendiente de un señor de sesenta años de edad.
Contrariamente a las interpretaciones expuestas anteriormente,
Saturno no hace referencia a la política contemporánea de Copán, ni
tampoco hace mención alguna de glifos emblema en la inscripción
del altar.
El segundo monumento con inscripciones de Río Amarillo fue
nombrado por Morley (1920) como Altar 2. Sólo se esculpieron tres
glifos en la fracción preservada del monumento y hacen referencia a
la muerte de un gobernante de Copán cuya identidad según Saturno
(2000) podría corresponderse con la del duodécimo gobernante de
Copán K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil . Además, Saturno menciona que por
el tamaño y la forma de la porción preservada del monumento, es
muy poco probable que se trate de un altar, sugiriendo la posibilidad

117
Escuela de Historia

de que dicha piedra sea en realidad los restos de una escalera o banca
jeroglífica, posiblemente de una construcción anterior.

ALGUNAS CONSIDERACIONES ACERCA DE LA INSCRIPCIÓN


DEL ALTAR 1 DE RIO AMARILLO
Con relación a la fecha sugerida por Linda Schele para el Altar
1, 9.10.10.02.16 4 KIB 14 K’AYAB correspondiente al 31 de enero del
año 643 d.C., conviene subrayar algunos apuntes. Si bien, la forma
y ejecución del altar parecen corresponderse con los monumentos
contemporáneos del gobernante 12 de Copán, características mismas
que contribuyeron a Schele a proponer su fecha; no obstante,
estilísticamente la inscripción parece más bien tardía.
David Stuart por ejemplo (Saturno 2000), observa que el Dios N
registrado en B2, posee similitud con algunos ejemplos provenientes
de Tonina, Chichén Itzá y un panel robado, todos fechados a
principios del Baktun 10. Asimismo, el patrón de fecha de rueda
calendárica registrado en el altar, no parece ser congruente con el
registro de fechas en patrón de cuenta larga, característico de los
altares comisionados durante el reinado del gobernante 12 de Copán
K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil, un detalle que también fue observado por
Berthold Riese.
La inscripción registra en el segmento jeroglífico C1-F2, la talla o
grabado de un objeto de piedra, quizás el altar mismo, por parte
de un joven señor posiblemente local, quien no ostenta un glifo
emblema que identifique su procedencia o linaje. Resulta intrigante,
la comisión del altar por parte de un sujeto ajeno a la figura de
un gobernante de la dinastía copaneca, dado que los ejemplos de
comisión de monumentos por personas distintas al k’uhul ajaw en
Copán, únicamente se dan una vez durante el reinado del gobernante
12, concretamente en el altar K de 688 d.C y donde el patrón de fecha
registrado se corresponde con el sistema de cuenta larga y no con el

118
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

patrón de rueda calendárica observado en el Altar 1, que si es muy


común en los monumentos comisionados por el ultimo gobernante
de Copán Yax Pasaj Chan Yopaat, y en cuyo reinado personajes ajenos
al gobernante comisionan estelas y bancas, tales como la Estela 1 de
Los Higos y las bancas jeroglíficas 9M-146 y 9N-82 de Las Sepulturas,
además de la banca jeroglífica 10K-15, que fue comisionada por un
joven señor cuyo título pareciera asemejarse al registrado en el
bloque E2 del Altar 1 de Rio Amarillo y que hace parte de la frase
nominal del joven señor local.
El segmento G1-I1 registra el vínculo del joven gobernante de Rio
Amarillo como hijo de un señor de tres katunes, el cual según Linda
Schele (1987) porta lo que podría ser un glifo emblema, cuya parte
principal es la cabeza de un murciélago, asemejándose mucho al
glifo emblema utilizado por la dinastía de Copán. Si se asume la fecha
propuesta por Linda Schele para el Altar 1 correspondiente al año
643 d.C., la identidad de este posible gobernante copaneco debería
relacionarse con la del gobernante 12, K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil, sin
embargo, al analizar su edad, tomando como referencia la fecha más
temprana sugerida para su nacimiento, la cual fue propuesta por
David Stuart (2007) para 9.8.11.6.19 9 Kawak 7 Mak, correspondiente
al 11 de noviembre de 604 d.C., este debería estar iniciando su tercer
katún en 9.10.11.6.19 5 Kawak 7 Sip o sea el 16 de abril del año 644
d.C., observándose aquí una contradicción, dado que al gobernante
12 de Copán le restarían aun 440 días aproximadamente para ser
el señor de tres katunes mencionado en el Altar 1 de Rio Amarillo.
Conviene subrayar, que si bien el título de señor tres katunes, podría
corresponderse con el número de katunes como gobernante por
parte de K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil, este fue entronizado según las
inscripciones de Copán en la fecha 9.9.14.17.5 6 Chikchan 18 K’ayab
correspondiente al 5 de febrero de 628 d.C., debiendo iniciar su tercer
katun como gobernante en 9.11.14.17.5 2 Chikchan 18 Yaxk’in o 11 de
julio de 667 d.C., un dato que sobrepasa en 24 años aproximadamente
a la fecha propuesta por Schele para el Altar 1.

119
Escuela de Historia

Si bien, David Stuart y William Saturno (Saturno 2000) descartan


al glifo situado en I1 como el glifo emblema de Copán, por carecer
este del superfijo ajaw y el infijo ku, el mismo guarda mucha
similitud con algunos glifos emblema “murciélago-ajaw de banda”
correspondientes a la época del gobernante 16 de Copán, tales
como el texto de la banca del templo 11 (figura 4a) y una vasija de
alabastro proveniente del sitio de El Abra, El Florido, Copán (figura
4b), el cual también carece del superfijo ajaw, además del prefijo
k’uhul, conservando eso sí el complemento fonético wa, al igual que
el observado en el bloque I1 del Altar 1 de Rio Amarillo, sugiriendo
así una lectura compuesta del glifo emblema de Copán por medio
de la cabeza del murciélago y el logograma de ajaw en la variante de
banda.

Figura 4. a) Variante de glifo


emblema de Copan “murciélago-ajaw
de banda” proveniente de la banca
del templo 11 de Copan (Dibujo: Linda
Schele); b) Variante de glifo emblema
de Copan “murciélago-ajaw de banda”
proveniente de una vasija de alabastro,
encontrada en El Abra, El Florido,
Copan (Dibujo: Linda Schele).

120
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Continuando con la lectura del altar en el segmento I2-L2, David


Stuart (Saturno 2000) observa que la inscripción se ralentiza en esta
sección relegando cada glifo a un bloque individual, posiblemente
como un método para resaltar esta parte importante de la inscripción.
Igualmente, Stuart no percibe ninguna ruptura visible en este punto
de la inscripción que indicase un cambio de tema, tal como Linda
Schele (1987) lo sugiere en su interpretación.
Conviene subrayar que este tipo de ralentizaciones en bloques glíficos
individuales, suelen observarse en breves porciones en algunos
objetos y monumentos tardíos correspondientes al reinado del
gobernante 16 de Copán Yax Pasaj Chan Yopaat, tales como la vasija
de alabastro proveniente del sitio de El Abra en El Florido, Copán
y en las inscripciones del templo 11 de la acrópolis copaneca. Por
consiguiente, es probable que el segmento I2-L2 forme parte de los
títulos del posible gobernante copaneco de tres katunes mencionado
en el segmento H1-I1.
Con respecto al segmento M1-P2, este presenta un alto grado de
erosión lo que imposibilita hacer una lectura e interpretación del
altar en esta sección, no obstante, el segmento Q1-R2 pareciera
hacer referencia a algunos títulos ostentados regularmente por el
primer gobernante de Copán K’inich Yax K’uk’ Mo’, tales como el
glifo dinástico Wi Te’ Naah en Q2 y el título Kaloomte’ del oeste en
R2. Conviene subrayar la forma en que fue registrado el glifo para el
punto cardinal oeste en este bloque, al utilizar el escriba la palabra
chik’in de clara influencia yucateca y no el típico glifo de ochk’in del
ch’olti’ clasico visto en otros monumentos de Copán.
No menos intrigante es el glifo localizado en Q1, el cual posiblemente
haga alusión a la figura de Siyaj K’ahk’ también conocido como
Rana Humeante, quien fuera un “capitán de guerra” teotihuacano,
responsable de entronizar a Yax Nuun Ayiin I como rey de Tikal en
el año 379 (Martin y Grube 2000) y que según la Estela 31 de Tikal y

121
Escuela de Historia

otros monumentos tempranos de la periferia de este sitio también


porta el título de Kaloomte’ del oeste.
Haciendo hincapié acerca de las posibles referencias teotihuacanas del
segmento Q1-R2 del Altar 1 de Rio Amarillo, conviene subrayar un dato
no menos interesante y es que el patrón de fecha de rueda calendárica
4 KIB’ 15 K’AYAB registrado en el altar, cuyo coeficiente de mes de Haab
excede en una unidad al registro esperado, parece tener una especie
de vínculo con personajes relacionados con Teotihuacán (Tokovinine
2010). Dicho patrón es registrado en algunos de los monumentos
tempranos de Copán tales como el marcador de motmot y la Estela 63
y donde cuyos protagonistas tanto el gobernante 1 de Copán K’inich
Yax K’uk Mo’, como su hijo el gobernante 2 K’inich Popol Hol, poseen
marcadas influencias teotihuacanas (Tokovinine 2010).
Este raro patrón de rueda calendárica, también es observado en
algunos de los monumentos del gobernante 12 de Copán tales como
las estelas 2 y 3, si bien dichos monumentos no parecen guardar
relación iconográfica y escrita con Teotihuacán, se sabe que dicho
gobernante se retrata a si mismo con parafernalia y simbología
teotihuacana en la Estela 6 que se localiza en las afueras del grupo
principal de Copán. Igualmente se observan ejemplos de este
mismo patrón en las inscripciones correspondientes al periodo del
gobernante 16 de Copán Yax Pasaj Chan Yopaat, tales como el Altar
Q cuya inscripción menciona los títulos y vínculos teotihuacanos
del gobernante 1 (Stuart 1992), así como también una fina vasija de
alabastro proveniente del templo 18 de Copán (Whittington 2001)
donde se observa a Yax Pasaj Chan Yopaat vistiendo parafernalia con
iconografía teotihuacana.
Alexandre Tokovinine (2010) observa también otros ejemplos de este
extraño patrón de rueda calendárica en algunos monumentos ajenos
a la periferia sudeste maya, tales como una inscripción pintada
proveniente del palacio de La Sufricaya en Petén, Guatemala, y que
curiosamente describe el arribo de Siyaj K’ahk’ a Tikal, el mismo

122
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

capitán de guerra teotihuacano mencionado posiblemente como


ochk’in kaloomte en el segmento Q1-R2 del Altar 1 de Rio Amarillo.
Un título que, según el mismo autor, está posiblemente asociado
con los gobernantes teotihuacanos y sus deidades y que por lo
general se interpreta como una indicación del lugar de origen en
un sentido estricto de la palabra, pero que también puede indicar
una clasificación más amplia en asignación a la parte occidental
del mundo, el lugar del sol poniente. No obstante, Tokovinine
también señala que dicho patrón extraño de rueda calendárica no
necesariamente refleja el préstamo de un sistema teotihuacano de
registro de fechas, aclarando eso sí, que las narrativas mayas del
periodo clásico ubican constantemente a Teotihuacán en el oeste.
Analizando la última parte de la inscripción del Altar 1 de Rio
Amarillo, concretamente el segmento S2-T2, Hugo García Capistran
(comunicación personal 2018) sugiere que el glifo en T2 es AK’, y
que el -hi que lo acompaña podría ser parte de un clítico con una
supresión de la sílaba -ya, leyéndose entonces como a[h]k’hi[iy] o
“desde que había bailado”. Igualmente, García Capistran sugiere, que
dado que este ejemplo no presenta la típica formula AK’-ta-ja, cabría
la posibilidad de que en Rio Amarillo estarían verbalizando con -ji/
hi, eludiendo así la sílaba -ta y la silaba -ja , para dejar solo parte del
clítico AK’-ji/AK’-hi, sugiriendo además que durante la época en que
fue comisionado el Altar 1, cualquiera hubiese entendido que se estaba
escribiendo la forma verbalizada únicamente con el -hi/ji marcando
el clítico, traduciéndose entonces el segmento S2-T2 como “desde
que había bailado”. Por último, García Capistran apunta que dicha
expresión podría ser tardía, dada la evidencia que muestra la pérdida
de distinción entre /j/ y /h/, una característica bastante común en
las inscripciones correspondientes al periodo del gobernante 16 de
Copán Yax Pasaj Chan Yopaat (Garay 2017).
Por último, los segmentos finales de la inscripción del Altar 1 de Rio
Amarillo no parecen ser muy claros y son algo difíciles de interpretar,

123
Escuela de Historia

el glifo localizado V2 es el que Linda Schele utilizó para sugerir la fecha


de 643 d.C. para el altar, basándose en la presencia de este glifo en la
Estela 10 de Copán, mismo que hasta la fecha, solo se ha registrado
dos veces en el cuerpo de inscripciones de Copán. No obstante, David
Stuart (Saturno 2000) no observa ninguna razón por la cual el uso de
este jeroglífico debería estar tan restringido en el tiempo, como para
fechar los acontecimientos del Altar 1 de Rio Amarillo y la Estela 10
de Copán como contemporáneos.

EL ALTAR 1 DE RIO AMARILLO ¿UNA INSCRIPCIÓN DEL BAKTUN


10?
Vista la contradicción de las inscripciones del Altar 1 de Rio Amarillo
con respecto a la fecha propuesta por Linda Schele 9.10.10.02.16 4
KIB 14 K’AYAB correspondiente al 31 de enero del año 643 d.C., como
ser la cuenta de katunes del gobernante 12 de Copán K’ahk’ Uti’ Witz’
K’awiil, quien no habría alcanzado todavía su tercer katún de edad,
ni de reinado en el año 643 d.C. siendo este dato incongruente con el
título de señor de tres katunes y posible gobernante copaneco que
aparece en H1, quien además sería el progenitor del joven señor de
Rio Amarillo. Convendría analizar entonces la otra posible fecha de
dedicación del Altar 1 de Rio Amarillo propuesta por William Saturno
y David Stuart para 9.18.8.5.16 4 KIB 14 K’AYAB o 22 de diciembre de
798 d.C., en pleno reinado del gobernante 16 de Copán Yax Pasaj Chan
Yopaat.
Las inscripciones del Altar 1 de Rio Amarillo, parecen ofrecer algunos
detalles característicos de las inscripciones de los monumentos
contemporáneos a este gobernante, tales como el registro de fechas
en patrón de rueda calendárica, omitiendo el sistema tradicional de
la cuenta larga de sus antecesores, además del posible uso de un glifo
emblema “murciélago-ajaw de banda” similar al del texto de la banca
del templo 11 y la vasija de alabastro proveniente del sitio de El Abra
en El Florido, Copán, y la pérdida de distinción entre /j/ y /h/, que

124
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

también se percibe en algunas de las inscripciones de Yax Pasaj Chan


Yopaat. La fecha 9.18.8.5.16 4 KIB 14 K’AYAB del 22 de diciembre de
798 d.C. parece igualmente presentar alguna que otra contradicción.
Yax Pasaj Chan Yopaat fue el décimo sexto gobernante de la dinastía
de Copán siendo coronado en junio de 763 d.C. Un rey niño que pudo
haber tenido nueve años de edad en su ascensión (Martin y Grube 2000).
Asumiendo que su nacimiento ocurrió en 754 d.C, dicho gobernante
estaría iniciando su tercer katún de edad aproximadamente en 794
d.C., un registro que cabría dentro del rango de la posible fecha de
comisión del Altar 1 de Rio Amarillo de 9.18.8.5.16 4 KIB 14 K’AYAB o
22 de diciembre de 798 d.C. donde se sospecha que Yax Pasaj Chan
Yopaat sería el señor de tres katunes mencionado en dicho altar.
No obstante, Linda Schele (1989) propuso que el número de los
katunes observado en los títulos del gobernante 16 de Copán Yax
Pasaj Chan Yopaat, hacía referencia al número de años de su reinado
y no a los de su edad. Schele fundamenta su propuesta, basándose
en algunos ejemplos documentados en Palenque, concretamente en
las inscripciones del Palacio, tales como el banco del corredor sur
del subterráneo y el Tablero de Palacio y donde cada uno de estos
monumentos registra las fechas de nacimiento y muerte de Pakal.
En todos estos textos, el número de katunes observado en sus
títulos queda muy por debajo del número esperado si estos fueran
registrados como katunes de edad. No obstante, dicho número de
katunes no parece presentar contradicción alguna con el número
de katunes de su reinado. Por lo que Schele concluye, que dado los
cálculos realizados en el número de katunes de los títulos de Yax
Pasaj Chan Yopaat y puesto que el mismo se afirma como hijo de una
noble señora de Palenque, este adoptaría el patrón de contabilización
visto en Palenque, en este caso, registrando el número de katunes de
su reinado.

125
Escuela de Historia

Ahora bien, se sabe que la fecha de ascensión del décimo sexto


gobernante de Copán ocurrió en 9.16.12.5.17 6 Kaban 10 Mol 28 de junio
de 763 d.C. por lo que estaría iniciando su tercer katún de reinado en
9.18.12.5.17 2 Kaban 15 Pax 2 de diciembre de 802 d.C., o sea casi 1441
días después de la fecha del 22 de diciembre de 798 d.C. propuesta por
Saturno y Stuart para el Altar 1 de Rio Amarillo, y donde se sospecha
que Yax Pasaj Chan Yopaat sería el señor de tres katunes mencionado
en sus inscripciones, haciendo entonces compleja la posibilidad de
que la fecha 9.18.8.5.16 4 KIB 14 K’AYAB 22 de diciembre de 798 d.C.
sea la registrada en dicho altar, dada la escasa evidencia acerca de la
fecha de nacimiento del gobernante 16 y por los cálculos hechos por
Linda Schele correspondientes al número de katunes observado en
sus títulos.
Con respecto a la otra fecha propuesta por Saturno y Stuart para
10.1.1.0.16 4 KIB 14 K’AYAB correspondiente al 5 de diciembre de 850
d.C. conviene subrayar algunos apuntes, la misma ocurre durante
el periodo Clásico Terminal, casi 28 años después de la última fecha
registrada en los monumentos de Copan, concretamente en el Altar
L comisionado en febrero de 822 d.C., donde el ultimo gobernante de
Copán Ukit Took’, se muestra cara a cara con su predecesor Yax Pasaj
Chan Yopaat (Martin y Grube 2000).
Se sabe que, durante las últimas décadas del Clásico Tardío, las Tierras
Bajas del área central muestran un incremento distintivo en la erección
de monumentos en sitios menores y donde sus gobernantes asumen
los antiguos títulos reales y sus tradiciones. Además, alrededor del
850 d.C. un cierto número de estos sitios supervivientes comenzó a
mostrar un incremento en sus características extranjeras (Martin y
Grube 2000). Así pues, dicha influencia extranjera al igual que en las
Tierras Bajas del área central, parece tener ya algún tipo de presencia
en la periferia sudeste maya durante el mismo periodo, al observarse
en las inscripciones del sitio menor de Rio Amarillo, concretamente
en el bloque R2, la palabra chik’in (oeste) de marcado origen yucateco

126
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

y no la palabra ochk’in del ch’olti’ clásico, vista anteriormente con


regularidad en los textos de Copán y que fue registrada por última
vez en el Altar Q de 776 d.C., siendo este comisionado por Yax Pasaj
Chan Yopaat, llegándose a sospechar entonces, que el Altar 1 de Rio
Amarillo fue comisionado en una época posterior al reinado de este
gobernante, posiblemente en la fecha 10.1.1.0.16 4 KIB 14 K’AYAB del
5 de diciembre de 850 d.C. propuesta por William Saturno y David
Stuart.

CONCLUSIONES
En síntesis, se observan contradicciones en el texto del Altar 1 de
Rio Amarillo con respecto a la fecha propuesta por Linda Schele
9.10.10.02.16 4 KIB 14 K’AYAB correspondiente al 31 de enero del año
643 d.C., tales como la cuenta del número de katunes reflejado en los
títulos del gobernante 12 de Copán K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil, quien no
habría alcanzado todavía su tercer katún de edad, ni de reinado en
dicho año.
Además, dada la escasa evidencia acerca de la fecha de nacimiento
de Yax Pasaj Chan Yopaat y por los cálculos hechos por Linda Schele
correspondientes al número de katunes observado en sus títulos,
posiblemente de su reinado, resulta complejo asumir la fecha
9.18.8.5.16 4 KIB 14 K’AYAB 22 de diciembre de 798 d.C. como la fecha
correcta del Altar 1 de Rio Amarillo.
No obstante, las inscripciones del Altar 1 de Rio Amarillo, parecen
ofrecer algunos detalles característicos de las inscripciones de los
monumentos contemporáneos de Yax Pasaj Chan Yopaat, tales como
el registro de fechas en patrón de rueda calendárica, omitiendo el
sistema tradicional de la cuenta larga de sus antecesores, además del
posible uso de un glifo emblema “murciélago-ajaw de banda” similar al
del texto de la banca del templo 11 y la vasija de alabastro proveniente
del sitio de El Abra en El Florido, Copán, así como también la pérdida

127
Escuela de Historia

de distinción entre /j/ y /h/, que también se percibe en algunas de las


inscripciones de Yax Pasaj Chan Yopaat.
Dichos detalles pudieron haber sobrevivido más allá de su reinado,
concretamente hasta el Clásico Terminal, agregando además la posible
influencia yucateca vista en el bloque R2 del Altar 1 de Rio Amarillo,
donde fue escrita la palabra chik’in (oeste) en vez de la palabra
ochk’in proveniente del ch’olti’ clásico, observada anteriormente con
regularidad en los textos de Copán y que fue registrada por última vez
en el Altar Q de 776 d.C., durante el reinado de Yax Pasaj Chan Yopaat,
cabiendo así la sospecha de que el Altar 1 de Rio Amarillo, fuese
comisionado en una época posterior a su reinado, posiblemente en
la fecha 10.1.1.0.16 4 KIB 14 K’AYAB correspondiente al 5 de diciembre
de 850 d.C. propuesta por William Saturno y David Stuart.
Sin embargo, conviene subrayar que la identidad del señor de tres
katunes, padre del joven señor local de Rio Amarillo mencionado
en el Altar 1, continua siendo una incógnita, si bien podría tratarse
hipotéticamente del gobernante 16 de Copán Yax Pasaj Chan Yopaat,
la intrigante formula en que fueron escritos los títulos del señor
de tres katunes en dicho altar, además de omitir extrañamente su
nombre antes del glifo emblema de Copán de “murciélago-ajaw de
banda”, detalle muy típico de las inscripciones del periodo clásico.
Esto genera más incógnitas que respuestas.
Igualmente, vale la pena mencionar el debilitamiento del arte y
escritura clásicos en el Altar 1, al no observarse las finas formas
vistas por ejemplo en los monumentos del mismo gobernante 12 de
Copan, K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil K’ahk’ Uti’ Witz’ K’awiil, ni tampoco
de los monumentos comisionados por los súbditos de Yax Pasaj Chan
Yopaat, tales como las bancas jeroglíficas de las estructuras 9N-82 y
10K-15.
Dado que la comisión de monumentos por parte de personajes ajenos
a la figura del gobernante, se da más durante los últimos años de la

128
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

dinastía copaneca, siendo el Altar 1 de Rio Amarillo comisionado por


un joven señor local y, dadas las referencias teotihuacanas registradas
en el mismo, además de la abundante iconografía teotihuacana
encontrada en la estructura 5 del grupo principal de Rio Amarillo,
la cual Saturno (2000) fecha como contemporánea del Templo 16 de
Copan. Por lo tanto, tal como lo propusieron anteriormente William
Saturno y David Stuart. No se descartaría entonces que dicho joven
señor local, perteneciera a un linaje que pretendía reclamar la gran
historia de Copan, tratando de vincularse a la dinastía copaneca,
por medio de la reivindicación de los antiguos títulos de origen
teotihuacano utilizados por sus gobernantes, los cuales servirían
como fuente de prestigio para su gobierno local en Rio Amarillo.
En una época para la cual, posiblemente el valle de Copán había
dejado ya de ser gobernado por los sagrados señores que alguna vez
habitaron el Grupo Principal de Copan.

AGRADECIMIENTOS
Agradecimiento y dedicatoria especial de este trabajo a la madre del
autor, Daisy Rodas Franco, por todo el apoyo y paciencia brindados en
los seis años de investigación que ha tomado preparar este artículo.

129
Escuela de Historia

BIBLIOGRAFÍA
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and Hudson. London.

131
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

SEMINARIO PROCESOS DE INDUSTRIALIZACIÓN EN


GUATEMALA, UN ESPACIO DE INTERCAMBIO ACADEMICO

Byron Francisco Hernández Morales


Seminario Procesos de Industrialización en Guatemala
byfher79@gmail.com

RESUMEN
La Arqueología guatemalteca se ha enfocado principalmente en
investigaciones prehispánicas y en menor cantidad al período
colonial. No obstante, ha ido avanzando y ha generado nuevas
líneas de estudio, entre las que podemos mencionar a la Arqueología
Industrial; sin embargo, la ausencia de temáticas especificas dentro de
los recintos de formación académica en las universidades nacionales
es sensible.
Por tal motivo, guiados por intereses comunes, un grupo de diferentes
investigadores de las ciencias sociales, en específico, historiadores y
arqueólogos de la Escuela de Historia de la Universidad de San Carlos
de Guatemala, se han dado a la tarea de generar un nuevo espacio de
discusión y aprendizaje de manera horizontal.
Cabe hacer mención de la importancia que ha tenido la constante
comunicación con académicos de diferentes países, para el surgimiento
de este cuerpo colegiado en el cual ha jugado un rol determinante la
interrelación mantenida con estudiosos mexicanos, quienes desde 2011
dieron inicio en su país a un espacio como este, del que se extienden
una red de seminarios en diferentes regiones, contando hasta la fecha
con tres en total, Ciudad de México, Ciudad de Monterrey, Nuevo
León, y el más reciente, Ciudad de Guatemala, poniendo en evidencia
el interés y compromiso de profesionales y estudiantes de diferentes

133
Escuela de Historia

disciplinas, interesados en el estudio no solo del Patrimonio como tal,


sino también de los Procesos de Industrialización presentes alrededor
del acervo cultural material e inmaterial.

PALABRAS CLAVE: Industrialización, Patrimonio, Academia,


Conocimiento, Estudiantes.

ABSTRACT
Guatemalan Archaeology has mainly focused on prehispanic
investigations, and in a fewer number of cases, on the Colonial time.
Nonetheless, investigations have moved forward and generated new
lines of study such as the Industrial Archaeology. The investigations
in this new field have been hindered by the appropiation of public
archaeological sites, and by the lack of specific training in the
academic entities of the national universities.
For this reason, and guided by common interests, a group of
different investigators of the Social Sciences (mostly historians and
archaeologists of the History Faculty of San Carlos de Guatemala
University) have made an effort to create a discussion environment
and a horizontal type of learning.
It is worth to point out the importance of the constant communication
within scientists from different places around the globe to form this
academic group. Specially, mexican investigators have collaborated
since 2011, by providing this type of practices through a great deal
of seminars carried out in different regions, such as Mexico, and
recently in Guatemala City. This shows the interest and commitment
of graduates and undergraduates (from different carees), who seek to
study not only the heritage, but also industrialization processes that
are involved in the concrete and abstract cultural legacy.

134
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

KEYWORDS: Industrialization, Cultural Heritage, Academia,


Knowledge, Students.

BREVE CONTEXTO DE LA ARQUEOLOGÍA INDUSTRIAL


GUATEMALTECA
Los siglos XVIII y XIX marcaron un hito en la historia de la humanidad,
considerando que para este lapso se produjeron diferentes cambios
tecnológicos que propiciaron un reacomodo de los modos y medios
de producción en Europa. Estos procesos han sido difundidos en
muchas partes del mundo y Guatemala no escapó a ello, que si bien
es cierto han sido una base fundamental, deben considerarse algunos
aspectos específicos de cada locación del globo terráqueo.
Al momento, el referente que se ha considerado como autoridad en
el estudio del Patrimonio Industrial y que se ha utilizado como base
para estudios de Arqueología Industrial es la carta de Nizhny Tagil
sobre el Patrimonio Industrial, suscrita el 19 de julio de 2003 en la
ciudad de Moscú, donde se especifican diferentes aspectos de los
cuales se acota en particular, lo especificado en el preámbulo:
“Desde la Edad Media, las innovaciones en lo referente al uso de
energía y al comercio que tuvieron lugar en Europa condujeron,
a finales del siglo XVIII, hacia un cambio tan profundo como el
que tuvo lugar entre el Neolítico y la Edad de Bronce, con avances
suficientemente rápidos e importantes en las circunstancias
sociales, técnicas y económicas de la fabricación como para que
se le llamara revolución. La Revolución Industrial fue el comienzo
de un fenómeno histórico que ha afectado a una parte cada vez
mayor de la población humana, así como también a otras formas
de vida del planeta y lo sigue haciendo al día de hoy” (TICCIH
2003).

135
Escuela de Historia

También se quiere destacar lo expuesto en la misma carta como


parte de la definición de Arqueología Industrial, descrita en su punto
número 1:
“El período histórico de principal interés se extiende desde el
principio de la Revolución Industrial, la segunda mitad del siglo
XVIII, hasta la actualidad, incluida. Si bien también se estudian
sus raíces preindustriales y protoindustriales anteriores. Además,
se recurre al estudio del trabajo y las técnicas laborales rodeadas
de historia y tecnología”.
Se describe en el primer párrafo citado, lo enfático de un límite
inferior en la temporalidad de estos estudios, aunque en el segundo
momento (párrafo anterior) se lee que también puede dirigirse el
interés a las raíces de esta Revolución Industrial, es decir, la Pre y
Protoindustrialización, y el trabajo y técnicas laborales rodeadas
de historia y tecnología; esto puede verse como una definición muy
ambigua, puesto que en ninguna parte de esta carta se establecen los
límites temporales de las categorías referidas por los autores.
También es necesario acotar que, al referirse a técnicas laborales,
historia y tecnología, se sigue dejando en imprecisión un parámetro
específico de lo que es industria o no, puesto que, técnicas laborales,
historia y tecnología, son propios de cada momento per se de las
sociedades en el mundo. Por tanto, a partir de estos conceptos,
puede proponerse que el mismo TICCIH es el ente que propone la
conservación del Patrimonio Cultural Prehispánico guatemalteco,
porque se entiende que caben en sus preceptos las categorías de
Industria Lítica, Industria Cerámica, Industria de la Jarcia, por
mencionar algunas. Aunque posiblemente a esto es a lo que la
referida Carta haga mencion como Preindustrial y Protoindustrial,
en la esencia de sus definiciones no se comprende así, más bien, es
contradictorio.

136
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Podría decirse que en tal caso, el TICCIH pretende decir que el Patrimonio
Industrial y la Arqueología Industrial se han de enfocar al estudio de
procesos productivos mecanizados, por medio de artefactos que en su
mayoría han de ser máquinas y herramientas constituidas por metal.
Esto último se infiere a partir de las investigaciones observadas en los
informes de esta institución difundidos en su pagina web.
Para el caso guatemalteco, y continuando con el contexto del
encasillamiento en fechas específicas y conceptos eurocentristas,
pueden mencionarse las definiciones encontradas en la tesis de grado
de Rubén Larios (2007), quien retoma y define la Revolución Industrial
a partir de una referencia al Gran Diccionario Enciclopédico Visual
“B” 2001. Tomo X: 2996:
Como tal se entiende, al conjunto de transformaciones o cambios
económicos y sociales que caracterizaron el proceso de industrialización
en Gran Bretaña entre los años de 1760 a 1820 (Larios 2007).
Puede analizarse a partir de lo anterior y dado que en el resto del
documento citado no se encuentra una propuesta diferente a la
referida, que la idea de la industria es a partir del momento histórico
mencionado. Otra cita de importancia lo es un artículo publicado
en el 2010 por Larios y Mendoza, quienes en sus inicios también se
enfocan al mismo contexto que se discute, haciendo referencia a
que: desde que inició la Revolución Industrial en Europa, ha existido una
constante importación de maquinaria destinada a la transformación de
los recursos naturales de los países latinoamericanos (Larios y Mendoza
2010:127).
Esto identifica nuevamente la concepción de los autores en cuanto
al punto de refencia del estudio del Patrimonio Indusrial o de la
industria abordada desde la Arqueología, manteniendo una posición
eurocentrista, aunada a la misma propuesta de Mendoza (2006), en
donde menciona que:

137
Escuela de Historia

Las máquinas como objeto de estudio, son parte de la investigación


arqueológica, del cual puede clasificarse, fotografiarse, medirse,
dibujarse, hacer alguna tipología, etc (Mendoza 2006: 268).
Este argumento ya había sido planteada por dicho autor en un artículo
publicado en 1988, en donde no está claro si es una idea específica
del citado académico o fue tomada de conocedores europeos, ya
que no se encuentran citas o referencias en la publicación, pues ya
habían transcurrido más de treinta años en donde diferentes autores
enfatizaban sus propuestas de investigación directamente a los
objetos, como bien refiere en seguida:
Eso explica que en la definición y formación de Arqueología Industrial
con autores como M. Rix, A. Buchanan, R. R. Green, K, Hudson, o J.
P.M. Panell, esta hace que se interese más por las cosas que por los
hombres (Casado Galván 2009).
Debe hacerse mención que con el correr del tiempo se han generado
nuevas investigaciones sobre Patrimonio y Arqueología Indutrial en
Guatemala, como el Laboratorio de Investigaciones de Campo de la
Escuela de Historia (LAICA-EH) dirigido por Rafael Castillo (2009),
la tesis sobre machetes de quien escribe (Byron Hernández 2014),
otra sobre la Hidroeléctrica de Santa María por Juan Echeverría
(2017), y numerosas presentaciones en espacios académicos como el
Encuentro Sobre Patrimonio Industrial Guatemalteco con ediciones
bianuales por parte de Arqueólogos Industriales de Guatemala
(ARQUINDUGUA), han sido circunstancias esporádicas que no han
demostrado una constancia en las investigaciones sobre la temática,
sin olvidar el sesgo de las escuelas positivistas europeas que se ha
observado.
Todo lo anterior plasma de manera muy resumida, la tendencia de los
intereses investigativos de personas individuales o agrupaciones, que
no han dado un seguimiento constante a los hechos contextualizados
dentro de la historia de la industria en el país.

138
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Si bien es cierto que puede sonar contradictoria la afirmacion anterior,


tomando en cuenta que el espacio mantenido por ARQUINDUGUA
es una actividad que se ha mantenido constante desde 2008, debe
destacarse que los trabajos presentados por diferentes investigadores,
son asuntos casuales o de otra índole, en cuanto que se exhiben en una
disertación que coincidentemente termina a la mano, sin embargo,
no son constantes en las temáticas. Por lo anterior se enfatiza que a
partir de 2008, no se han observado investigaciones en proceso.
A pesar de lo anterior, debe destacarse la importancia que este evento
representa para el país, ya que se constituye como un parteaguas en
los espacios de socialización de las investigaciones arqueológicas
como bien refiere Castillo (2014) al indicar que los estudios sobre
Patrimonio Industrial en Guatemala, están marginados por la
Arqueología oficial. Para verificar lo antes dicho, basta con revisar la
serie de publicaciones del Simposio de Investigaciones Arqueológicas
en Guatemala, que desde 1987 se realiza en el país, en donde se
encuentran tan solo un artículo relacionado al tema industrial.
Se tuvo que crear un evento específico en 2008 para socializar los
resultados de investigación en dicha materia.

EL SEMINARIO Y SU ORIGEN
La discusión del apartado anterior pretende poner de manifiesto
la dinámica y comportamiento de los estudiosos del Patrimonio
Industrial en Guatemala, características que comparten algunos
autores que han abordado esta temática hasta la fecha. Justamente
puede apreciarse la discontinuidad en la disciplina de estudio
histórico de la industria en el país, esto considerando que se tomaron
en cuenta únicamente algunos arqueólogos que en algún momento
abordaron el tema.
Esta característica no es propia de Guatemala, a partir de la
experiencia y el acercamiento a otras realidades por parte del autor de

139
Escuela de Historia

este texto, se ha podido observar un marcado interés sobre el estudio


de los objetos procedentes del acontecimiento mencionado como
Revolución Industrial. Si bien es cierto que también se menciona
la inclusión del patrimonio intangible, se conoce poco sobre esto, se
deja de lado muchas veces la memoria de las personas que aún viven
y son fieles testigos de los acontecimientos ocurridos en la historia
reciente, como lo puede ser el Patrimonio Industrial, según menciona
la ya referida Carta de Nizny Tahyl:
El período histórico de principal interés se extiende desde el principio
de la Revolución Industrial, la segunda mitad del siglo XVIII, hasta la
actualidad, incluida (TICCIH 2003).
Aunque no se pretende en este artículo discutir el límite superior de
la temporalidad de esta propuesta, si se quiere dejar en claro que en
la actualidad es un término subjetivo en cuanto a la ambigüedad de
la definición dentro del contexto de la carta del TICCIH, pues esto
es lo que en cálculo se estudia como el límite que tiende al infinito.
Por lo que se podría dar cabida dentro del concepto de Patrimonio
Industrial Intangible a las ideas que en este momento -porque
es actualidad- puede tener el ingeniero sobre la máquina que está
concibiendo en su mente para tenerla materializada en un año,
o bien a un arma de fuego que en este momento se percuta en un
campo de combate, o este mismo artículo, ya que se produce con
medios tecnológicos modernos, considerando que la actualidad del
autor no necesariamente es la del lector.
Razones como las anteriores y muchas más, fueron lo que dieron paso
a que, en la ciudad de México, se propusiera por parte del historiador
Gustavo Becerril, la creación de un espacio académico de intercambio
intelectual sobre la historia de la industria, sobre Patrimonio
Industrial, técnicas, métodos, enfoques, entre otros. Sin embargo,
encasillar todo bajo la idea de Patrimonio era algo restrictivo, por
cuanto se tiende a la visión positivista del estudio de la historia, al
considerar que no es ciencia un estudio social. Por esto, se pensó

140
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

y consideró en que esta nueva esfera constituida por investigadores


de diferentes disciplinas como Arquitectura, Economía, Historia,
Arqueología, Historia del Arte, entre otras, debería ser menos
restrictiva.
Por las razones ya discutidas en el espacio anterior, no se consideraron
límites que enclaustren el conocimiento, ya que la historia se
construye por cambios de diferentes intensidades que generan
transformaciones que no son iguales en todos los puntos del planeta.
Este paso dado por estudiosos mexicanos, ha propiciado la apertura
de un espacio académico de interés que deviene de la incorporación
de diferentes perspectivas de investigación sobre el mismo objeto
muchas veces, como nuevas propuestas, que no necesariamente
deben encuadrarse en categorías restrictivas. En el estudio de los
procesos de industrialización, se puede dar una visión amplia sobre
una evolución y los diferentes contextos sociales que resultan de
los movimientos tecnológicos en cada momento de la historia de la
humanidad.
Derivado de la incorporación de más investigadores, tanto mexicanos
como de otros países, se planteó la ampliación de la red de investigación
sobre la temática y nombre del seminario. Fue entonces durante
el segundo Coloquio sobre Procesos de Industrialización realizado
en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, México, en noviembre de
2016, que se lograron consolidar las ideas de una extensión en dicha
metrópoli, dando inicio formalmente en 2017 a cargo del arquitecto
regiomontano Gustavo Vásquez. Parte del trabajo de este equipo ha
sido la reciente colaboración en la organización del Primer Congreso
Internacional sobre Patrimonio Industrial en donde se ventilaron
temáticas diversas enfocadas al devenir del mismo.
Durante el evento referido en el párrafo anterior, participaron
como conferencistas dos guatemaltecos (Belén Méndez y Byron
Hernández) que han demostrado interés y continuidad en estos

141
Escuela de Historia

espacios y en la investigación en sí sobre la temática. Esto se convirtió


en un momento propicio para la propuesta por parte del Doctor
Becerril sobre la creación de un espacio internacional vinculado al
existente en México, pero esta vez, con sede en Guatemala. En este
impase se quedaron detenidas las propuestas, las ideas, la intención
de la ampliación de la red. No por ello se perdieron los contactos y
comunicación.
Por motivos diversos, con el correr del tiempo se generaron las
condiciones para que, en una nueva visita por parte del autor a la
ciudad de México en junio de 2018, se propiciara un espacio de diálogo
dentro de la reunión mensual de los miembros del Seminario de
Ciudad de México y se retomara la idea de la extensión en Guatemala.
Aunque no se diera en ese momento un acuerdo como tal, sería un
mes después cuando se estableciera una propuesta formal por parte
del referido historiador -Gustavo Becerril- al arqueólogo Byron
Hernández, para que se impulsase el nuevo espacio de la creciente
red investigativa.
Esta vez era algo de la misma importancia que el espacio de
Monterrey, pero con carácter internacional. Cinco meses de logística
y organización se necesitaron para arrancar con el Seminario
Procesos de Industrialización en Guatemala. Algo que en al momento
no se había generado: un nuevo espacio en donde se pudiera hablar,
construir, generar, coadyuvar en las investigaciones enfocadas a la
industrialización, con el fin de propiciar un ambiente de aprendizaje
y formación desde la colaboración mutua, en donde constantemente
se pudiera retroalimentar el conocimiento que cada uno de los
miembros e invitados pudieran aportar.
Cabe mencionar que el Seminario tiene la característica de no ser un
ambiente en el cual exista un especialista, un profesor específico que
dicte una cátedra para dirigir desde su perspectiva a los estudiantes
en las líneas de investigación deseadas por un interés particular.
Si bien se menciona que existe una figura de coordinación, esto no

142
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

implica que dicha persona sea la autoridad máxima en cuanto al


dominio de la temática. El individuo en cuestión es quien coordina
las actividades diversas que mensualmente se dan y se propician
para la constancia en el proceso de aprendizaje de cada integrante
y asistente, se trata de una dinámica conocida en administración
como horizontal; en este contexto del Seminario, todas las personas
son aprendices y profesores a la vez, nadie es superior a nadie, sin
expertos, sin especialistas.
Para finalizar este apartado narrativo y breve de la historia del
Seminario Internacional de Procesos de Industrialización, se quiere
citar a Hobsbawn como una forma muy simple de entender por
qué estudiar los procesos de industrialización y no solo un objeto
etiquetado únicamente como patrimonio:
El capitalismo tuvo su origen mucho antes de 1760, y alcanzó su desarrollo
pleno mucho después de 1830, es decir que, durante esos años, se produjo
al menos una evolución acelerada pero ningún cambio imprevisto, ni de
nación (Hobsbawn 2011).
La cita anterior se propone, dado que puede entenderse esa evolución
como un proceso hacia lo que se ha llamado industrialización, por
tanto, sí es de importancia capital contextualizarlo como proceso y no
encasillarlo de tajo. En tal sentido podemos referirnos nuevamente a
Mendoza, en cuanto escribe:
El proceso de industrialización es una etapa determinante para el
desarrollo del capitalismo en América Latina (Mendoza 1988).
Como bien se ha mencionado, el citado autor se enfoca en el estudio
de las máquinas y no en los procesos de industrialización; sí los
menciona como parte de su interés, pero el seminario los considera
de manera principal para comprender los contextos anteriores y
posteriores a cada uno de esos procesos, no solo como formativos
del capitalismo, sino como deformación del mismo y por ende

143
Escuela de Historia

de sociedades implícitas, no puede dejarse de lado bajo ninguna


circunstancia el factor humano en estos abordajes.
Debe aclarase que, al referirse como sociedades implícitas, se hace
referencia a los diferentes grupos sociales vinculados al contexto
industrial estudiado, por ejemplo, cuadrilleros de fincas cafetaleras
o cañeras, obreros en general, patrones, hombres, mujeres y niños,
que, sin duda, y en particular en Guatemala, participan en gran
medida en actividades productivas de la agro industria nacional,
entre otras.

PERSPECTIVAS DEL SEMINARIO


El seminario surge de la necesidad de generar un espacio académico
enfocado a la discusión y socialización de problemáticas dedicadas a
la temática industrial, tomando en cuenta que existe un sinnúmero
de elementos tangibles e intangibles que deben ser investigados desde
distintas disciplinas, con el objetivo de documentarlos, registrarlos
y promover su conservación con el fin de conocer y entender
los distintos procesos del desarrollo industrial y tecnológico en
Guatemala, como parte fundamental de la historia del país.
Una parte importante de estos elementos lo conforman la
infraestructura y la  arquitectura productiva, que en muchos casos
se encuentra abandonada, transformada, aislada o destruida,
perdiéndose de esta manera importantes testimonios constructivos,
archivos empresariales, maquinaria y herramientas. Es fundamental
el rescate de estos objetos, testimonios y espacios que conformaron
la historia constructiva y productiva del país y algunos de los cuales
siguen en pie o funcionando en sus actividades originales.
Sin embargo, se debe precisar que este rescate debe estar sustentado
en trabajos de investigación rigurosa, fruto del trabajo con fuentes de
primera mano como archivos documentales, fotográficos, entrevistas

144
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

y observación. Por tanto, se considera necesaria la formación del


Seminario Permanente Procesos de Industrialización en Guatemala.
De manera general se consideran diferentes perspectivas centrales
como objetivos a perseguir con la finalidad de mantener un rumbo
claro que permita la constancia de las actividades propuestas según
se enumeran seguidamente:
• Consolidar un espacio de discusión e intercambio científico
para proyectos de investigación básica relacionados con el
tema general: “la historia, patrimonio industrial, memoria y
tecnologías fabriles.”
• Generar un cuerpo sólido de investigaciones históricas, con
perspectiva social, para respaldar el trabajo de conservación
del Patrimonio Industrial guatemalteco, tangible e intangible.
• Asegurar un grupo profesional de honestidad, confianza y
calidad académica para avanzar y fortalecer la investigación
histórica básica encaminada a las siguientes vertientes: la
primera en respeto a lo establecido en la Ley del Patrimonio
Cultural y Natural de Guatemala; la segunda en apoyo a
proyectos de investigación de los miembros del seminario,
estudiantes y profesionales de diferentes disciplinas; y la
tercera, en la publicación de documentos científicos para la
difusión de los conocimientos generados.
• Propiciar el diálogo e intercambio académicos a nivel interno
y externo entre el Seminario e instituciones estatales y
privadas, así como con universidades e institutos nacionales
y extranjeros de investigación y educación superiores
relacionados con el tema general del Seminario, tomando en
cuenta a propietarios y trabajadores de los diferentes procesos
industriales abordados.

145
Escuela de Historia

• Facilitar un espacio enfocado a estudiantes de distintas


áreas del conocimiento, pues se debe dejar en claro que por
lo general, los ambientes de difusión se realizan en círculos
bastante cerrados de profesionales, dejando de lado el interés
y capacidades de los educandos.

LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN Y PERÍODO DE ESTUDIO


Las líneas de investigación se insertan en la esfera de la historia
industrial de Guatemala. La intención es dar cuenta de los
establecimientos fabriles o industriales a través de su historia,
así como de los fenómenos políticos, económicos y sociales que
determinaron la existencia de las fábricas en diferentes momentos
y regiones del país.
Se deben considerar aquellas industrias que conserven documentos,
imágenes o vestigios industriales. En este sentido, se entiende por
establecimiento fabril al sistema de manufactura no necesariamente
monumental, que se caracteriza por el empleo de máquinas movidas
por fuerza mecánica, animal o humana cobijadas bajo un techo,
sea la infraestructura de la industria misma, colecciones privadas
o elementos aislados. Estos son establecimientos como parte
integrante de un contexto geográfico y temporal. Desde este punto,
las industrias que se estudiarán estarán ubicadas en zonas urbanas
o rurales, inmersas en el devenir histórico que transiten durante
su existencia, por lo tanto, se verán afectadas o favorecidas por los
fenómenos económicos, políticos y sociales de los períodos históricos
ya conocidos.
Para dar cabida en este seminario a un amplio sector de estudios de
caso sobre establecimientos fabriles e industriales, se consideran dos
coordenadas fundamentales para la investigación: tiempo y temática.
En primer lugar, la temporalidad puede extenderse desde momentos
posteriores al contacto con los europeos, considerando que a partir

146
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

de este momento histórico se reconfiguran diferentes procesos


productivos de las sociedades primigenias y se imponen nuevas
dinámicas fabriles. Sin embargo, no tenemos por qué excluir contextos
anteriores a este margen, siempre que se justifique su continuidad
con los casos estudiados y fortalezca el origen de la industrialización
en Guatemala, hasta nuestra historia contemporánea.

AVANCES DEL SEMINARIO


Desde su fundación el 10 de diciembre de 2018 y la primera reunión
formal de trabajo a la fecha, se han generado discusiones sobre
diferentes bibliografías enfocadas a la temática industrial en
Guatemala. Esto ha fortalecido el conocimiento de cada uno de los
miembros y ha generado nuevas perspectivas tanto en el enfoque
que cada uno tiene de sus investigaciones, como en la apertura de
nuevas ideas y posibilidades de investigación para los compañeros
estudiantes que han sido parte activa hasta el momento.
Se han conocido y fortalecido avances de investigación de dos
miembros fundadores, Lorena Miguel, haciendo abordajes históricos
y gráficos de diferentes contextos industriales anclados a las
dinámicas portuarias del Atlántico guatemalteco. A partir de estos
datos, se ha podido entender diferentes dinámicas socioeconómicas
y socioculturales en torno a procesos de electrificación, comercio,
urbanismo, entre otros.
Desde la arqueología, Byron Hernández ha mostrado una nueva
propuesta para la documentación de sitios arqueológicos industriales
y elementos aislados en diferentes latitudes del país, que se espera
poder compartir en futuras publicaciones. Al momento, se cuenta
con un avance importante si se consideran las dificultades de
diferentes índoles para acceder a estos espacios, que en su mayoría
son propiedad privada. Cabe mencionar que este proyecto forma
parte esencial de las mismas actividades del seminario.

147
Escuela de Historia

Ligado a esta investigación, se generó un espacio específico de apoyo


al estudiante de Arqueología Iván Hernández, quien contribuyó
de manera sustancial al acercamiento de datos específicos de dos
diferentes sitios arqueológicos industriales por medio de la realización
de prácticas de campo, requisito por parte del pensum de la carrera
en que se forma. Con esto, se deja de manifiesto la proyección hacia el
estudiante que el Seminario tiene de forma fundamental, no solo en
las cuestiones teóricas y de discusión que se realizan mensualmente,
sino también en espacios de campo.
Otras actividades al exterior han consistido en visitas a diferentes
locaciones en las cuales se encuentran vestigios arqueológicos
industriales o bien, talleres actualmente en funcionamiento. Ambos
contextos son de importancia capital dado el enfoque de este espacio,
a los procesos de industrialización. A esto también hay que agregar
que este tipo de dinámicas permiten establecer una forma de análisis
diferente desde la observación arqueológica, pues generalmente la
Arqueología se enfoca al estudio específico del pasado, sin considerar
que en el correr del tiempo muchas de esas prácticas permanecen
vivas en sociedades contemporáneas. En contextos industriales no
puede obviarse esta parte, ya que aún se cuenta con la presencia de
diferentes personas que han sido parte de la historia de la industria
guatemalteca, por lo tanto, entender desde el presente estas
dinámicas productivas, espacios, máquinas y herramientas, genera
una forma de fortalecer la interpretación de registros arqueológicos,
considerando lo referido por Binford:
La íntima articulación de localidades, instalaciones y herramientas con
tareas específicas realizadas por segmentos sociales da como resultado
un conjunto estructurado de relaciones espacio-formales en el registro
arqueológico (Binford 1964).
Esto también viene a formar parte de las perspectivas descritas
en cuanto al aprendizaje de las sociedades actuales y su rol en los
procesos de industrialización del país.

148
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Por otra parte, en junio de 2019, se participó en el Congreso


Internacional de Patrimonio Industrial, en la ciudad de Monterrey.
Esta es la primera intervención internacional como seminario en un
congreso.
De igual forma, se han iniciado espacios de intercambio académico
con investigadores internacionales, para ser específico, con la
diseñadora industrial colombiana Astrid Ríos. Este primer encuentro
por videoconferencia, se realizó con la finalidad de incorporar a los
practicantes de arqueología del Proyecto de Revitalización del Museo
de la Casa de la Cultura de Occidente, en la ciudad de Quetzaltenango.
Es importante mencionar en este punto la colaboración incondicional
de dicho proyecto.

COMENTARIOS FINALES
A casi un año de existencia, el Seminario Permanente Procesos de
Industrialización en Guatemala, ha dado frutos bastante productivos,
lo que pone de manifiesto la buena coordinación y compromiso de
los integrantes, estudiantes y profesionales.
Formar parte de una red internacional de investigadores de temáticas
industriales, es un compromiso serio que requiere de una constancia
rigurosa, ya que la retroalimentación y el intercambio académico
son factores determinantes para la construcción, deconstrucción y
discusión con la finalidad de generar e intercambiar conocimiento
de diferentes latitudes de la región hasta el momento involucrada, en
cuanto a los Seminarios Permanentes compete.
Los avances obtenidos hasta el momento son un buen ejemplo
de la importancia y necesidad de estos espacios de constante
retroalimentación respecto a las temáticas industriales, que, si
bien es cierto, al momento el grupo se integra por arqueólogos, e
historiadores, se están generando las condiciones para contar con

149
Escuela de Historia

conocedores de otras disciplinas. Aunque cabe hacer mención que


algunos de los integrantes actuales cuentan con formación de otras
áreas que también complementan las perspectivas de investigación,
por ejemplo, la Antropología, Matemática e Ingeniería.
Se espera que, en un futuro cercano, según la planificación con que
se cuenta, se pueda seguir participando en espacios de intercambio
académico y de conocimiento, generar diferentes actividades que
permitan crecer en formación y conocimiento enfocándose hacia
lo externo del Seminario, ya que se considera que no puede haber
avances en la ciencia y el conocimiento en general, si estos no son
socializados.

150
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

BIBLIOGRAFÍA
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1964 A Consideration of Archaeological Research Design. American
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2009 Un ejemplo de Arqueología Industrial en Guatemala: El estudio
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151
Escuela de Historia

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152
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

EL PUERTO SANTO TOMÁS


LEGADO DE UNA OBRA REVOLUCIONARIA 1953-1955

Necely Lorena Miguel Coronado


Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
Universidad de San Carlos de Guatemala
Necelylorenamiguel@gmail.com

RESUMEN
El proceso de “industrialización” en Guatemala se realizó de una
manera muy particular a finales del siglo XIX en manos particulares.
A mediados del siglo XX se impulsó desde el Estado de Guatemala,
un ambicioso plan de gobierno para lograr un desarrollo del país
que incluía: construcción de una hidroeléctrica, un amplio plan
de carreteras y la construcción del Puerto Nacional Santo Tomás.
Además de la firme convicción de modernizar el agro guatemalteco
mediante la implementación de una reforma agraria. Estos proyectos
en su conjunto proporcionan la visión de país que se pretendía lograr.
El añorado sueño de establecer un puerto sobre el océano Atlántico
se había mantenido desde la Época Colonial como una necesidad
que se debía suplir. Se mantuvo en los primeros años de la vida
independiente y se retoma a finales del siglo XIX desde las esferas
estatales. Esto llevó a la fundación de Puerto Barrios concesionado a
intereses empresariales extranjeros.
Dentro del Seminario de los Procesos Industriales Guatemala es una
de las prioridades comprender la manera en que se realizó. Debido
a ello este artículo se constituye en un primer acercamiento al
análisis de la necesidad de establecer un puerto nacional. Esto llevó
al gobierno de Jacobo Arbenz a la planificación y construcción del

153
Escuela de Historia

Puerto Santo Tomás entre los años 1953-1955 que se convirtió en la


parte final de la carretera al Atlántico. Analiza las vicisitudes que se
enfrentaron en su realización, quedando inconcluso en el momento
del golpe de Estado que puso fin al gobierno de Arbenz en 1954.

PALABRAS CLAVE: Puertos, Monopolio, Financiamiento, Desarrollo,


Economía.

ABSTRACT
The process of “industrialization” in Guatemala was carried out in a
very particular way at the end of the 19th century in private hands.
In the mid-twentieth century an ambitious government plan was
promoted from the State of Guatemala to achieve a development
of the country that included: construction of a hydroelectric power
plant, a broad road plan and the construction of the Santo Tomás
National Port. In addition to the firm conviction to modernize
Guatemalan agriculture through the implementation of an agrarian
reform. These projects as a whole provide the vision of the country
that was intended to be achieved.
The long-awaited dream of establishing a port on the Atlantic Ocean
had been maintained since the Colonial Era as a need that had to
be replaced. It remained in the early years of independent life and
was taken up at the end of the 19th century from the state spheres.
This led to the foundation of Puerto Barrios being granted to foreign
business interests.
Within the Seminar on Industrial Processes, Guatemala is one of
the priorities to understand the way it was carried out. Due to this,
this article constitutes a first approach to the analysis of the need
to establish a national port. This led to the government of Jacobo
Arbenz to the planning and construction of Puerto Santo Tomás

154
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

between the years 1953-1955 that became the final part of the road
to the Atlantic. Analyze the vicissitudes that faced its realization
remaining unfinished at the time of the coup d’état that put an end
to the government of Arbenz in 1954.

KEYWORDS: Ports, Monopoly, Financing, Development, Economy.

INTRODUCCIÓN
El presente artículo analiza los distintos desafíos que represento para
el Estado de Guatemala la planificación y ejecución del Puerto Santo
Tomás. El hoy puerto Santo Tomás de Castilla tuvo sus orígenes en la
época colonial. En este tiempo mantuvo un espacio pequeño sobre
el océano Atlántico. En la primera mitad del siglo XIX se realizaron
intentos de colonización que fueron otorgadas por parte del Estado
a empresas extrajeras inglesa y luego a otra de origen belga. Ellas
vieron en la región un potencial para ser aprovechado por sus
materias primas tan necesarias en sus países para el impulso de su
desarrollo capitalista. Estos intentos fracasaron.
Fue a finales del siglo XIX cuando el Estado Liberal decidió la
construcción de la ciudad de Puerto Barrios con capital extranjero.
El muelle y la construcción de la línea férrea hacia el Norte del
país fueron concesionados a las empresas United Fuit Company y
Ferrocarriles de Centro América respectivamente. Permitiendo la
consolidación de los monopolios más dañinos para la economía y la
sociedad guatemalteca.
En 1951 con el segundo gobierno revolucionario se llevó a la
práctica un ambicioso plan de gobierno que tuvo como fin lograr
el desarrollo económico social del país. En él se contempló romper
con los monopolios establecidos y para lograrlo se puso en marcha
el proyecto de construcción de la carretera al Atlántico y su lógico

155
Escuela de Historia

final la construcción del Puerto Nacional Santo Tomás. Se analizan


los desafíos que se enfrentaron en la planeación y construcción de
la obra, los avances que se realizaron hasta junio de 1954 y los costos
hasta su inauguración en septiembre de 1955.

PUERTOS
Debido a la naturaleza del artículo se considera necesario puntualizar
en algunos términos para ilustración o ampliación de los lectores, los
cuales se describen a continuación:
Puertos marítimos se definen como “el conjunto de obras e
instalaciones y servicios, construidos en aguas tranquilas, necesarios
para el parador seguro de buques, mientras ejecutan las labores de
embarque y desembarque de pasajeros y mercancías” (Ecured 2019).
Según el diccionario de la Real Academia Española los puertos son el
“Lugar en la costa o en las orillas de un río que, por sus características,
naturales o artificiales, sirve para que las embarcaciones realicen
operaciones de carga y descarga, embarque y desembarque”
(Española 2019).
Dársena se constituye en la parte que resguarda a los barcos de las
corrientes y los introduce a aguas que son navegables que garantizan
su seguridad y facilitan las actividades de carga y descarga de las
mercaderías y pasajeros.
Ecured define a los muelles “una obra piedra, hierro, o madera
construida en dirección conveniente en la orilla del mar o rio navegable,
y que sirve para facilitar el embarque y desembarque de objetos o
personas.”. Mientras que el atracadero es el espacio a donde llegan a
desembarcar unidades pequeñas. Siendo estas las partes más básicas
de un puerto.

156
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

GENERALIDADES SOBRE LOS PUERTOS


Tomando como base las ideas anteriores los puertos cumplen una
función fundamental en la economía de los países, permitiendo las
actividades de importación y exportación de mercancías, además
de otros servicios importantes que allí se realizan. Por tales razones
la construcción, mantenimiento y operaciones debe ser una de las
actividades prioritarias de los Estados.
En los puertos se realizan distintas operaciones importantes como:
•• Embarque y desembarque de mercancías y de pasajeros.
•• Almacenamientos de mercancías en bodegas y luego su
traslado hacia el interior de los países con el objetivo de
proveer de productos el mercado.
•• Traslado de productos de los países hacia la exportación.

FUNCIONES DE LOS PUERTOS


a. Se debe “garantizar la seguridad de los buques en el arribo”(Center
2019). Los puertos proporcionan espacios en sus instalaciones
y los equipos que se necesitan en el fondeo, llegada, carga y
descarga de los barcos. Además del servicio para abordaje y
llegada de pasajeros.
b. Desde el puerto se proporciona espacios para la reparación y
el mantenimiento de las embarcaciones y ahora de furgones
donde se almacenan y trasladan las mercancías.

EL PUERTO SANTO TOMÁS


Hoy Santo Tomás de Castilla se ubica en el Departamento de Izabal
en el municipio de Puerto Barrios, sobre la Bahía de Amatique, que

157
Escuela de Historia

pertenece al Golfo de Honduras. Está situado a una distancia de


300 kilómetros de la ciudad de Guatemala. Cuenta con un canal de
acceso de “90 metros y una longitud de 10,700 metros con 11 metros de
profundidad y un área de dársena de 677,640 m2” (Guatemala 2019). Su
muelle es considerado de tipo marginal, tiene una longitud de 914.52
metros que se divide en 6 atracaderos de 152.45 metros cada uno.
Según su especialización se dividen de la siguiente forma:
a. El primer atracadero pose un diseño para productos líquidos a
granel y carga en general.
b. Existen cuatro atracaderos que se utilizan para la carga sólida
y líquida y otros productos generales.
c. Hay uno que es utilizado por los cruceros y contenedores y
carga en general.
Esta situación dista en gran manera de sus orígenes desde la época
colonial.

ORÍGENES
El Puerto de Santo Tomás tiene sus orígenes durante la época
colonial, sus reportes se remontan en el siglo XVII, y se creó ante la
necesidad de la corona española de desarrollar y mantener relaciones
comerciales con sus colonias de una manera centralizada.
En 1604 trascribió lo escrito por Fray Antonio de Remesal, citado por
Gall (1980) “se descubrió el Puerto que llaman Santo Tomás, por haberse
descubierto el día de Santo Tomás de Aquino”. De allí en adelante se le
dio esa denominación. Según describe Remesal “Este camino era por
las montañas que salen para Esquipulas y Chiquimula y salió fragoso
de muchas montañas, en que aqueste presidente don Alonso Criado y
de Castilla gasto mucha hacienda real y se malogró todo. Según Gall la

158
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

ubicación actual del puerto dista mucho de la original que se infiere


que pudo haber sido establecida en la Bahía la Graciosa.
Otro reporte de Antonio de Fuentes y Guzmán que data de 1607 dice:
“la fortificación del Puerto Sacto Thomás, obra pública, por causa de la
defensa a que debían acudir” (Guzmán 2013). Estos reportes dejan al
descubierto el interés que se tenía para abrirse paso por el Atlántico,
pero debido a la situación geográfica y la crecida de los ríos, el proyecto
no fue rentable para las autoridades debido a ello, no prosperó como
se esperaba.
Con los cambios administrativos implementados con las Reformas
Borbónicas a finales de la colonia, la corona española emitió e
impulsó el denominado “régimen de Navíos Sueltos” (Solórzano 1993).
En el año de 1781 los puertos de la capitanía -Omoa, Trujillo y Santo
Tomás- tenían la libertad de comercializar directamente con la capital
del reino. Convirtiéndose también en una de las puertas donde se
introducía parte del contrabando inglés conjuntamente con el fuerte
de San Felipe y el área de Belice que muy tempranamente pasó a ser
controlada por Inglaterra.
Con la independencia se introdujeron algunos cambios, en especial
durante el gobierno de Mariano Gálvez, que como buen liberal era
firme creyente de la libertad de comercio y este se fomentó desde
las esferas estatales. Esta situación se concretó en 1836 con el “arribo
de colonizadores británicos a Izabal” (Woodward 2011). Con ello se
perseguía la modernización de las técnicas agrícolas a costa de
concesiones de tierras y exoneraciones de impuestos, situación que
generó el descontento de la población y finalmente fue una de las
causas de la caída del gobierno de Gálvez.
Otro intento europeo de colonizar el territorio de Izabal que
comprendía las Verapaces también se registró en 1842, cuando la
“compañía Belga de colonización adquirió los derechos de la compañía
inglesa “Comercial y Agrícola de las Costas Orientales” (Soto Acosta

159
Escuela de Historia

2015). Esta región despertaba mucho interés en las esferas económicas


europeas, debido a la riqueza en materias primas, el recurso marítimo
de las futuras vías comerciales sobre el Atlántico y que ofrecía las
facilidades que el Estado había prometido para el establecimiento de
las mismas.
Los belgas se establecieron en Santo Tomás debido al interés que
había generado en el presidente Rafael Carrera la construcción del
Puerto Santo Tomás y además un camino que lo comunicara con la
ciudad de Guatemala. Según Acosta, para los belgas, el proyecto de
Santo Tomás significaba “el punto ideal para extender la influencia belga
en el interior de Centroamérica y como inicio de un canal interoceánico”.
Este proyecto no llego a verse concretado debido a la topografía del
lugar y las distintas dificultades a las que se enfrentaron y para 1860
fue abandonado por parte de los belgas y el gobierno de Guatemala
(Figuras 1 y 2).
Para la segunda mitad del siglo XIX los puertos sobre el Pacífico
adquirieron más importancia debido a los cambios generados con la
producción y exportación de grana conjuntamente con los primeros
experimentos con el café. Esta situación generó la necesidad de
ubicar los puertos de una manera más cercana a los centro de
producción. “Izabal fue destruido por un incendio en 1868, pero para ese
entonces dicho puerto, que había sido el principal punto de trasbordo para
llevar los productos de Guatemala, El Salvador y Belice, ya no merecía
mayor atención” (Lindo 1993). Desde los primeros experimentos con el
café por parte del gobierno conservador se llegó a la determinación
de habilitar el muelle de San José el 18 de julio de 1868 (Rubio Sánchez
1994). Con esto se buscó facilitar las actividades de comercio sobre
el Pacifico y de esta manera conectar a Guatemala con los mercados
internacionales.

160
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

1)

2)

Figura 1 y 2. Colonia belga establecida en Santo Tomás de Castilla (Izabal),


Guatemala durante la década de 1840-1850 (Tomado de: Sandoval, José,
publicado el 2 de junio 2019).

161
Escuela de Historia

El sueño de construir un puerto Nacional sobre el océano Atlántico,


que se tenía contemplado desde la época colonial no fue sino hasta
finales del siglo XIX, en la época liberal, cuando este proyecto se
retoma por medio del Decreto Gubernativo No. 513, en donde se
estableció la creación de la ciudad Portuaria de Puerto Barrios en
honor a Justo Rufino Barrios, el primer dictador liberal guatemalteco.

CONTEXTO POLÍTICO Y SOCIAL DE GUATEMALA


A finales del siglo XIX e inicios del siglo XX en Guatemala se
establecieron una serie de 3 dictaduras cafetaleras de corte liberal
entre 1871-1944, pretendiendo una “modernización del Estado”
por medio de la implementación de políticas liberales. Para llevar
a la marcha el proyecto, los dictadores echaron mano de diversos
mecanismos legales. Entre ellos se encuentra el Reglamento de
Jornaleros. Este obligaba a los campesinos a trabajar de manera
temporal o permanente como a los trabajadores en las fincas
cafetaleras. Las unidades productivas denominadas fincas
conformaron por medio de la redefinición del Censo enfitéutico
(Decreto Gubernativo 1877). Este fue utilizado para tener acceso a
las tierras de manera directa por medio de subasta pública.
Esta situación permitió el ensanchamiento de la propiedad de la
tierra en pocas manos de terratenientes de la oligarquía tradicional
y los recién llegados extranjeros. Esto por mencionar algunas de las
opciones. Esto durante la dictadura de Justo Rufino Barrios 1873-1885.
Con el fin de establecer de manera definitiva la producción de café
y con ello la demanda de la construcción de infraestructura física
que requería este producto. El Estado liberal hecho mano del trabajo
forzado para “modernizarse” y concesiono los servicios más básicos.
Se establecieron tres monopolios fundamentales en Guatemala al
cobijo de las dictaduras:

162
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

•• Empresa Eléctrica de Guatemala S.A. “subsidiaria de la empresa


norteamericana Electric Bon and Share Company” (Bauer 1956).
Este traspaso se realizó en 1919 durante la dictadura de Manuel
Estrada Cabrera. Se reafirmó en 1922 bajo el gobierno de José
María Orellana.
•• United Fruit Company que inició a operar desde finales del
siglo XIX en el país y que se dedicó al cultivo del banano pero
que le fueron concesionada grandes extensiones de tierras
en Izabal, Zacapa y Escuintla. Estableciendo lo que se le ha
denominado economía de enclave. Empresa que además tomó
el control del muelle de Puerto Barrios.
•• Además el trasporte marítimo por medio de la denominada La
Gran Flota Blanca. Esta empresa se encargaba de trasporte de
pasajeros y de mercancías. De este puerto “dependía más del
60 % del comercio exterior del país” (Gleijeses 2005). Además
de monopolizar los puertos sobre el Pacífico Champerico y
San José.
Esta empresa operaba en los países bajo subsidiarias, en varios
lugares como el caso de Tiquisate se denominaba Compañía
Agrícola de Guatemala y en 1924 obtuvo una concesión
que le permitió extender sus plantaciones de banano y las
líneas del ferrocarril, además de telégrafos, como también la
construcción de un puerto sobre la Bahía de Amatique que
incumplió totalmente. Esta situación es significativa por la
naturaleza de este estudio.
Esta empresa mantenía una fuerte influencia en el Estado de
Guatemala, se le exoneraban impuestos y las condiciones de
trabajo en sus plantaciones eran sumamente deplorables.
•• International Railways of Central America (IRCA) bajo
la denominación Ferrocarriles de Centro América que

163
Escuela de Historia

monopolizaba el trasporte ferroviario hacia el Norte del país.


Además era subsidiaria de la United Fruit Company, es decir
una concentración total de monopolios norteamericanos en
el país.
Los ramales ferroviarios se iniciaron a construir en el país a
manos de particulares entre ellos Guillermo Nanne (Bauer
1956). Entre 1877 y 1901, el señor Nanne tenía como socio
a Daniel Butterfield quienes vendieron sus derechos a la
Compañía Centroamericana del Ferrocarril del Pacífico; a
su vez esta empresa vendió sus derechos a la Compañía de
Ferrocarril Central. Entre 1904 y 1923 el Estado de Guatemala
celebró contrato con esta empresa cediendo territorio,
exoneración de impuestos y otorgamiento de mano de obra
para realización de los trabajos. Además de costos onerosos
en el traslado de los productos y pasajeros y manteniendo el
monopolio como único medio de trasporte sobre el Atlántico.
En el plano social con la dictadura de Jorge Ubico, estos monopolios
se ensancharon y se experimentó cierre de espacios políticos de
participación. Se mantuvo una férrea vigilancia en contra de la
sociedad.
Esto se fue rompiendo en 1944 cuando un movimiento encabezado
por maestros y estudiantes en un primer momento desarrollaron
resistencia en contra de la dictadura. Esto fue el inicio de la Revolución
que el 25 de junio del mismo año registró una de sus manifestaciones
más fuertes donde falleció la maestra María Chinchilla. Finalmente
el dictador Ubico renunció el 1º. de julio de 1944.
Los movimientos continuaron para derrotar al sucesor de Ubico,
Federico Ponce Vaídes, quien finalmente es derrotado el 20 de octubre.
A eso se le denominó el inicio de la época revolucionaria. Con la
Junta revolucionaria en el poder se realizaron cambios significativos
los cuales se echaron andar con el gobierno del Dr. Juan José Arévalo.

164
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

El camino estaba abierto para la sucesión y lograr los cambios de


fondo que el país necesitaba, por lo tanto estos fueron los objetivos
del segundo gobierno revolucionario, encabezado por el coronel
Jacobo Arbenz.

LOS PROYECTOS DEL SEGUNDO GOBIERNO REVOLUCIONARIO


Con el objetivo de cambiar de raíz la realidad guatemalteca, Arbenz
y su equipo de gobierno realizaron estudios profundos para buscar
estrategias para lograrlo. Esta actitud trajo como resultado el
planteamiento de un claro plan de gobierno con tres puntos centrales:
a. Convertir al país de una economía dependiente hacia una
independencia económica.
b. Llevar a Guatemala hacia un desarrollo capitalista superando
la “economía semifeudal” (Poitevin 2004). De esta manera se
pretendía la modernización en varios sentidos.
c. Elevar el nivel de vida de la mayoría de los guatemaltecos.
Desarrollo social integral.
Este plan se puso en marcha mediante la implementación de los
siguientes proyectos:
1. La reforma agraria como eje central de gobierno aprobado el
17 de junio de 1952 que pretendió redistribuir la tierra ociosa
que estaba en manos de los grandes propietarios. Mediante
ella se pretendía modernizar el agro guatemalteco brindando
créditos por medio del Banco Agracio Nacional. Que para el
6 de enero de 1954 registraba “770,586 manzanas de tierras
incultivadas habían sido repartidas entre campesinos pagándoles
Q3,710,608.00 indemnización a los propietarios” (Adelante 1954).
Como complemento para lograr los objetivos principales,
estaban importantes obras de infraestructura física.

165
Escuela de Historia

2. Planificación y construcción de la hidroeléctrica Jurún


utilizando el río Marinalá y el lago de Amatitlán como
embalse principal. De esta manera iba a ser posible llevar la
energía eléctrica a la parte sur de la Ciudad de Guatemala que
se perfilo como la vía industrial sobre el camino viejo hacia
Petapa, en las afueras de la ciudad de ese entonces.
3. Diseño e implementación del proyecto de carretera al Atlántico,
el cual debió superar varios obstáculos para echarlo a andar
debido al cierre de las carteras crediticias y comerciales hacia
Guatemala, problema al que se enfrentó el gobierno de Arbenz.
4. Construcción del Puerto Nacional Santo Tomás sobre el
Atlántico, como coronamiento de la carretera al Atlántico.
Como un remate lógico y necesario para el país. A este plan se
le denomino cuadrilinial desde las esferas estatales.
5. Plan vial que incluía la carretera al Pacífico, carretera Roosevelt
y San Juan.
Con la implementación de estos proyectos pretendió lograr el
desarrollo económico capitalista de Guatemala de una manera
equilibrada.

FINANCIAMIENTO DE LAS OBRAS


Debido al contexto político al que se enfrentó el gobierno del
presidente Arbenz, por las acusaciones de injerencias comunistas en
sus esferas, desencadenó la invasión a Guatemala, organizada por el
Departamento de Estado de Estados Unidos, dándose en colaboración
de diversos sectores de la sociedad guatemalteca, trayendo como
resultado la renuncia del presidente el 27 de junio de 1954. Desde el
momento de asumir la presidencia se enfrentó a diversos problemas
dentro de los que se destacan:

166
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

•• Aislamiento internacional que propicio el cierre de las carteras


crediticias en el extranjero para Guatemala.
•• Embargo comercial como se manifiesta en palabras del
entonces Superintendente General de obras del Atlántico
Carlos Paz Tejada en enero 1952 y febrero 1953 “no se podía
hacer nada, no se tenía equipo porque los gringos no le vendían ni
una pala al gobierno” (Figueroa 2004).
Para suplir esas necesidades Arbenz y su equipo implementaron
medidas y de esta manera agenciarse de fondos. Para tal situación
se emitieron bonos del tesoro a un valor de 5% por la suma de
veinte millones de quetzales, según entrevista que dio el Ministro de
Economía Roberto Fanjul (Fanjul 1953). En esas transacciones el Banco
de Guatemala actuó como agente financiero de las emisiones, las que
fueron parciales según se necesitaron en el trascurso del avance de
las obras materiales. Con ello se orilló a que las obras se construyeran
con capital nacional sin comprometer económicamente al país.
Los fondos para el desarrollo de los proyectos procedían del
presupuesto General de la nación de 1953 que ascendió a”
Q.72,729,055.00 de esa totalidad fue asignada una partida de
Q.24,076,061.00” (Miguel 2015) fueron asignados para Ministerio de
Comunicaciones y la Dirección General de obras Públicas.

ESTADO DE LOS PUERTOS EN GUATEMALA HACIA 1950


Para principios de la década de 1950 los puertos nacionales con los
que contaba Guatemala sobre el océano Pacífico eran San José y
Champerico. El Puerto San José está ubicado a una distancia de 105
kilómetros de la capital y se llegaba a él por medio de automóvil o
el ferrocarril: “el ferrocarril de la IRCA es de tipo muy antiguo, lento e
ineficiente para las necesidades actuales” (Larrea 1955). Manifiesta la
precariedad del puerto ya que el muelle según manifiesta el informe

167
Escuela de Historia

estaba construido sobre pilotes de acero y los barcos no podían


atracar en él.
El puerto de Champerico según lo evidencia el informe se
encontraba en peores condiciones que el de San José y no había
registrado movimiento comercial para 1955, debido a que solamente
contaba con un lanchón de 30 toneladas que se encontraba dañado
por el mal tiempo. Este puerto estaba comunicado por medio del
ferrocarril de la IRCA que llegaba hasta el muelle. Durante muchos
años se tuvieron proyectos de reactivar este puerto, pero fue hasta
1959 cuando se inició un “proyecto de ampliación del muelle, oficinas y
otras obras del puerto”, según reportes periodísticos (América, Diario
de Centro 1959).
Puerto Barrios era el único habilitado sobre el Atlántico para 1955.
según el informe de las Naciones Unidas su muelle era administrado
por la United Fruit Company, empresa que también lo tenía
concesionado desde principios de siglo XX. Permitía el atraque de 3
barcos de manera simultánea. Contaba con dos almacenes que eran
insuficientes para el movimiento de carga que se registraba para ese
momento. Carecía de grúas, debido a eso cada barco debía solucionar
esa necesidad a título individual. Como lo menciona Larrea (1955)
“en cambio una moderna instalación para el embarque de frutas, más
particularmente el banano”.
La carga del muelle solamente se realizaba por medio de la
International Railroad of Central America (IRCA), la que también
monopolizaba los almacenes del puerto y del muelle. Para este
momento aún la única forma de trasportarse de la capital al puerto
era por línea férrea. Situación que permitió la consolidación del
monopolio (puerto-trasporte) y el cobro de precios onerosos.

168
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Tenía las siguientes carencias:


a. Boyas y cualquier otro tipo de amarras flotantes.
b. Servicio de pilotaje, sin embargo el cobro se realizaba en un
50%.
c. Medidas de salvamento.
d. Espacios para reparaciones de barcos.
e. Alumbrado ineficiente.
f. Servicio de primeros auxilios antiguo e ineficiente en caso de
emergencia no se podían suplir esas necesidades básicas.
g. Lentitud en el sistema burocrático administrativo aduanero.
Esta situación adversa esperaban solucionarla con la construcción
del Puerto Nacional Santo Tomás que se construyó entre 1953-1955 en
la misma bahía de Amatique.

EL PROYECTO DEL PUERTO NACIONAL SANTO TOMÁS


La puesta en marcha del proyecto del Santo Tomás fue una respuesta
a la necesidad de contar con un puerto propio para facilitar el
intercambio comercial de Guatemala con otros países por la vía
marítima. Ya que hasta ese momento únicamente se podía realizar
por Puerto Barrios, donde se debían pagar precios demasiado
onerosos para el ingreso y egreso de productos en el movimiento
portuario debido al monopolio establecido por la compañía frutera.
El 30 de junio de 1953 se firmó el contrato de construcción del
Puerto Santo Tomás entre el gobierno representado por el Ministro
de Comunicaciones Carlos Aldana Sandoval con la compañía
estadounidense Morrison Knudsen y Co. de Centro América. Luego

169
Escuela de Historia

de superar una serie de problemas de financiamiento de cierre


de créditos internacionales. Los términos del contrato fueron los
siguientes:
1. Construcción del canal y dársena que incluye el muelle
principal para los lanchones y que incluía la instalación de las
señales principales que permitirían la navegación.
2. Construir el muelle principal y muelle de lanchones.
3. Construcción de un almacén de tránsito, edificios propios del
puerto para facilitar los servicios que debía prestar.
4. Construcción de la ciudad portuaria y proveeduría de los
servicios básicos: agua potable, sistema de drenajes, calles,
instalación de teléfonos y servicio eléctrico.” El costo del
contrato fue de Q. 4, 800,000.00” (Anzueto 1954) y fueron pagados
conforme se ejecutaran las obras. El proyecto estaba destinado
a realizarse en dos años, tal y como se refleja en los avances del
mismo para el mes de noviembre de 1953 (Figuras 3 y 4).

Medidas del conjunto de la obra Puerto Santo Tomás 1954

Obras Medidas
Canal 9,700 pies de largo 300 de ancho
Dársena
Profundidad 300 mareas canal y dársena
Muelle marginal sobre pilotes de 1500º. Por 300º. De ancho y 45º. Sobre el nivel
concreto del mar 7.5º.
Pilotes 65 a 70 toneladas de peso.

Fuente: Elaboración propia con base al informe presentado a la sociedad


guatemalteca 16 de junio de 1954.

170
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

3)

4)

Figura 3 y 4. Proceso de dragado del Puerto Nacional Santo Tomás, noviembre 1953
(Tomado de: Diario de Centro América 13 de junio 1954).

171
Escuela de Historia

Para la ejecución de los trabajos la compañía norteamericana


Morrison Knudsen subcontrato a Estándar Dredgins Co. que se hizo
cargo de los trabajos de dragado. Para la construcción del muelle
principal de lanchones fue la empresa Raymond Concrete Pile Co. La
Figura 5 se constituye en una vista panorámica de los avances de la
construcción del puerto hasta junio de 1954, mientras que la Figura 6
evidencia los trabajos realizados hasta febrero de 1955.

Figura 5. Vista panorámica de la Bahía de Santo Tomás donde se realizaban los


trabajos de construcción del mencionado puerto (Tomado de: Diario
de Centro América 13 de junio 1954 página 4).

172
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Figura 6. Proceso de Construcción del muelle y bodegas del Puerto Nacional


Santo Tomás (Tomado de: Diario de Centro América 17 de febrero de
1955 página 1).

Se estableció que se cobraría una multa de Q. 200.00 diarios por


atraso en la construcción de la obra. El coronel Anselmo Gtella
fue designado por el gobierno para encabezar la delegación que
supervisaría la obra. La asesoría técnica estuvo a cargo de los
ingenieros Raúl Valdez y Jorge Sobral. Mientras que para supervisar
la forma de financiamiento por el Tribunal de Cuentas estuvieron los
señores Aparicio Alfonso y Humberto Figueroa.
Detalles de las medidas técnicas que se utilizaron para la construcción
del puerto que lo hacían ser uno de los más modernos para 1955. La
capacidad de desembarque del puerto se planifico para que atracaran
simultáneamente 3 barcos en el muelle, los que podían descargar y
almacenar 10,600 toneladas de mercancías de manera simultánea.
Se estableció que el movimiento anual fuera de 600,000 toneladas.
Esto según los datos obtenidos de los informes hecho públicos por
medio del Diario de Centro América el 16 de junio de 1954. El progreso
de construcción fue sistemático, como lo muestra la tabla con el
cumplimiento de las fechas que se habían establecido hasta el mes
de junio de 1954, un poco antes del golpe de Estado en contra del
presidente Arbenz.

173
Escuela de Historia

Estado de las obras de construcción


del Puerto Santo Tomás 1954-1955

Inicio Obra Conclusión

29 de julio 1953 Puerto total 28 de julio 1954

Julio 1953 Trabajos preliminares y construcciones Noviembre 1953

1º. De Dragado 22 de mayo 1954


diciembre 1953

Conclusión del muelle Noviembre 1954.

Octubre 1954 Construcción de almacén Febrero 1955

Febrero 1955 Instalación de equipo de carca y Julio 1955


conclusión de la ciudad portuaria

Fuente: Elaboración propia en base a los informes regulares que publicaba el


gobierno en las páginas del Diario de Centro América el 16 de junio de
1954.

El cuadro nos muestra los avances realizados en los trabajos de la


planificación y puesta en marcha del Puerto Santo Tomás. Los plazos
que se tenía establecidos para su construcción se cumplieron a
cabalidad hasta junio de 1954. Cuando se registró el golpe de Estado
en contra del presidente Jacobo Arbenz.
La entrega de la obra se retrasó dos meses, se inauguró “el 13 de
septiembre de 1955” (Diario de Centro América 17 de febrero de 1955) ya
en pleno periodo contrarrevolucionario. Dejando en evidencia que el
trabajo más fuerte quedó realizado desde el periodo anterior.

174
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Estadística de labores en el Puerto Santo Tomás


Junio 1953 Mayo 1954

Obras Valor entregado


Valor entregado a Morrison Knudsen 21 marzo 1954 Q.1,074,326.82
Inversiones de la compañía construcción canal y dársena al Q. 358,404.33
31 de marzo 1954
Construcción del muelle hasta el 31 de marzo 1954 Q. 23,691,62
Desarrollo de la ciudad portuaria al 31 de marzo 1954 Q. 42,279.74
Otras construcciones al 31 de marzo 1954 Q. 1,55,295.49
Total Q.3,049,998.00

Fuente: Elaboración propia en base a los datos obtenidos del Diario de Centro
América 15 de junio 1954.

La tabla muestra los pagos que el Ministerio de Comunicaciones


había realizado a la compañía constructora hasta el momento en que
se produce el golpe de Estado en junio de 1954.
A manera de socializar los avances en los trabajos de construcción
de la obra desde el Ministerio de comunicaciones se ofrecían
giras dedicadas a periodistas para que ellos las dieran a conocer
en sus respectivos periódicos. Conjuntamente muchos artistas
comprometidos con el proyecto revolucionario realizaban grabados
que reflejaban el pensamiento de la época (Figura 7).

175
Escuela de Historia

Figura 7. Grabado en referencia a la construcción del Puerto Santo Tomás de


José López Maldonado (Tomado de: Diario de Centro América 16 de
junio de 1954).

El costo final de la obra fue de Q.4,823,029.03 que se dividió entre


muelle, bodegas, pilotes, grúas, dragado de canal, desagües y dársena,
servicio eléctrico, 10 casas modelo y edificio de gobierno del puerto.

176
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

Los reportes periodísticos de febrero de 1955 registran que el proceso


de construcción iba bastante avanzado y los contratos sustraídos con
la empresa constructora estaban a punto de finalizar.
Para el momento en que se inauguró el Puerto Santo Tomás en
septiembre de 1955, la única forma de conectarlo con la capital de
la república fue por medio del ferrocarril, ya que la carretera al
Atlántico aún no estaba culminada. Debido a ello se tomó la decisión
por parte del gobierno de construir un ramal de ferrocarril y de esta
manera conectarla con Puerto Barrios.
Finalmente, el Puerto fue inaugurado el 13 septiembre de 1955 en un
acto donde estuvieron invitados autoridades de gobierno, el embajador
norteamericano y la prensa nacional y extranjera (Diario de Centro
América 17 de febrero de 1955). La Figura 8 presenta el Puerto Santo
Tomás en pleno funcionamiento en 1959 y la Figura 9 en la actualidad.

Figura 8. Puerto de Santo Tomás de Castilla ya en funcionamiento (Tomado de:


Diario de Centro América 21 de enero de 1959 página 1).

177
Escuela de Historia

Figura 9. Puerto Santo Tomás de Castilla mayo 2019 (Fotografía: N. Miguel


Coronado).

CONSIDERACIONES FINALES
•• El proyecto de construcción del Puerto Santo Tomás no puede
entenderse de manera aislada, sino que obedecía al plan del
gobierno de Jacobo Arbenz de impulsar el desarrollo económico
del país desde las esferas estatales. Por ello era importante
la construcción de obras de infraestructura física como la
carretera al Atlántico y su remate el Puerto Santo Tomás. Con
ello se hacía frente a un problema central que obstaculizaba el
comercio y su traslado a los centros de consumo.
•• El cierre de las carteras crediticias para Guatemala en el
periodo 1951-1954, obligo a Arbenz y su equipo de trabajo a
solucionar la problemática mediante la emisión de los bonos
del Estado. Esto trajo como consecuencia que los proyectos que
se estaban desarrollando se realizaran con capital nacional.

178
APUNTES ARQUEOLÓGICOS

•• Los resultados obtenidos no son concluyentes debido a que


este se constituye un primer acercamiento a la problemática.
Analizando todo el plan de gobierno en su conjunto se puede
tener una visión general del país que se deseaba configurar
durante el periodo 1951-1957, pero como consecuencia del
golpe de Estado en junio de 1954 se vio interrumpido. Aunque
los proyectos de la carretera al Atlántico, la Hidroeléctrica
Jurún Marinalá y el Puerto de Santo Tomás se concluyeron
con modificaciones posteriormente.

179
Escuela de Historia

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182
Este libro se terminó de imprimir en los
talleres gráficos de Litografía Mercurio
(502+2251-3245) en septiembre de 2019.

Consta de 500 ejemplares.

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