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LIC.

EN HERBOLARIA Y FITOTERAPIA

HOMEOPATIA POR APARATOS Y SISTEMAS.

Unidad 3 Actividad 2

Enfermedades Neuroendocrinas
TUTOR: Arturo Silva Moreno

ALUMNA: María Eugenia Ávila.

Matricula al163621

GRUPO 01
Correo-al163621@univim

GUADALAJARA, JALISCO 25 DE ENERO DEL 2020.


INTRODUCCION.

El eje hipotálamo-hipofisario es un sistema cuya función es mantener la regulación y equilibrio


de los niveles hormonales hipofisarios, los cuales a su vez coordinan otras funciones del
organismo tales como el crecimiento somático, la maduración gonadal, cambios de adaptación
al estrés, lactancia, liberación de hormonas tiroideas o la cantidad de agua excretada por el
riñón. El mecanismo por el que se mantiene este equilibrio está definido por la acción
estimulante o inhibidora que ejerce el hipotálamo sobre la hipófisis a través de la liberación de
hormonas.

El hipotálamo es una región del encéfalo que forma parte del diencéfalo y el sistema límbico.
Se encuentra situado debajo del tálamo. Produce diferentes hormonas, entre ellas hormona
antidiurética y prolactina, también secreta factores hipotalámicos que son polipéptidos que
actúan sobre la hipófisis y regulan su producción hormonal.

Otras funciones del hipotálamo son mantener la temperatura corporal, e influir en diferentes
conductas, entre ellas las relacionadas con la alimentación, ingesta de líquidos, apareamiento
y agresión. Es el regulador central de varias funciones viscerales autónomas y endocrinas y
actúa como punto de relevo en la información que partiendo del cerebro alcanza la médula
espinal.

La hipófisis o glándula pituitaria es una glándula endocrina que segrega hormonas encargadas
de regular la homeostasis incluyendo las hormonas trópicas que regulan la función de otras
glándulas del sistema endocrino, dependiendo en parte del hipotálamo, el cual a su vez regula
la secreción de algunas hormonas. Es una glándula compleja que se aloja en un espacio óseo
llamado silla turca del hueso esfenoides, situada en la base del cráneo, en la fosa cerebral
media, que conecta con el hipotálamo a través del tallo pituitario o tallo hipofisario.

Las hormonas son sustancias segregadas por células especializadas, localizadas en glándulas
endocrinas (carentes de conductos), o también por células epiteliales e intersticiales cuyo fin
es el de influir en la función de otras células.

Las glándulas suprarrenales son pequeñas glándulas ubicadas en la parte superior de cada
riñón. Estas producen hormonas imprescindibles para la vida, incluyendo hormonas sexuales
y cortisol. El cortisol ayuda a responder al estrés y tiene muchas otras funciones importantes.
Su función consiste en regular varios componentes del metabolismo, y produce mineral
corticoide y glucocorticoides, que incluyen la aldosterona y cortisol. La corteza suprarrenal
también es un lugar secundario de producción de hormonas sexuales tanto femeninas como
masculinas.

Los trastornos neurológicos son enfermedades del sistema nervioso central y periférico, es
decir, del cerebro, la médula espinal, los nervios craneales y periféricos, las raíces nerviosas,
el sistema nervioso autónomo, la placa neuromuscular, y los músculos. Entre esos trastornos
se cuentan la epilepsia, la enfermedad de Alzheimer y otras demencias, enfermedades
cerebrovasculares tales como los accidentes cerebrovasculares, la migraña y otras cefalalgias,
la esclerosis múltiple, la enfermedad de Parkinson, las infecciones neurológicas, los tumores
cerebrales, las afecciones traumáticas del sistema nervioso tales como los traumatismos
craneoencefálicos, y los trastornos neurológicos causado por la desnutrición.

¿Cómo funciona el eje sistema nervioso-hipotálamo-hipófisis-suprarrenal?

El hipotálamo es una estructura nerviosa situada en la base del encéfalo y es el centro


receptor de señales procedentes de muchas zonas del encéfalo, así como de órganos internos,
de modo que experiencias emocionales dolorosas o estresantes causan cambios en su
actividad. A su vez, el hipotálamo controla el sistema nervioso autónomo y regula la
temperatura corporal, el hambre, la sed, la conducta sexual y las reacciones defensivas, como
el miedo o la rabia. Además, en él se sintetizan, al menos, nueve hormonas diferentes con la
función de regular la secreción de hormonas de la hipófisis anterior y otros grupos de neuronas
especiales. De modo que el hipotálamo y la hipófisis en conjunto regulan prácticamente todos
los aspectos del crecimiento, el desarrollo, el metabolismo y la homeostasia del organismo.

La hipófisis es una pequeña glándula de menos de 1 cm de diámetro y de 0,5-1 g de peso


que se encuentra dentro de la silla turca del esfenoides. Está unida al hipotálamo por el llamado
tallo de la hipófisis o infundíbulo.

Desde el punto de vista anatómico y fisiológico, la hipófisis se divide en dos porciones: hipófisis
anterior o adenohipófisis: ocupa el 75 % del peso total de la glándula hipófisis posterior o
neurohipófisis: formada por tejido nervioso, ya que contiene axones y terminales axonales

La actividad hormonal del lóbulo anterior de la hipófisis está controlada por el hipotálamo
mediante sustancias que se denominan factores de liberación y por factores de inhibición u
hormonas de inhibición, que son llevados a la hipófisis por el sistema porta
hipotalamohipofisario.

En el lóbulo anterior encontramos la adenohipofisis, esta es la porción más grande de la


hipófisis o glándula pituitaria.

Las glándulas suprarrenales son pequeñas glándulas ubicadas en la parte superior de cada
riñón. Estas producen hormonas imprescindibles para la vida, incluyendo hormonas sexuales
y cortisol. El cortisol ayuda a responder al estrés y tiene muchas otras funciones
importantes.

Su función consiste en regular varios componentes del metabolismo, y produce mineral


corticoide y glucocorticoides, que incluyen la aldosterona y cortisol. La corteza suprarrenal
también es un lugar secundario de producción de hormonas sexuales tanto femeninas como
masculinas.

¿Qué es la carga alostática?

La carga alostática implica la numerosa serie de modificaciones, con parámetros témporo-


espaciales rápidos y a largo plazo, que el organismo implementa frente a situaciones
(estresores) provenientes del medio externo para adaptarlo al cambio, evitando daños en el
organismo y en sus diversas estructuras a todos los niveles de procesamiento (células, tejidos,
órganos y sistemas).

Cuando la respuesta adaptativa es insuficiente para alcanzar la homeostasis o resulta


excesiva, los eventos que debieran llevar al estado normal se estabilizan en cambios plásticos
desfavorables o mal adaptativos, que conforman los diversos estados de la sobrecarga
alostática (distrés) y sus manifestaciones en el sistema nervioso central (ansiedad, depresión),
el sistema inmune y endócrino y el aparato cardiovascular, que conforman los supersistemas
y sus respectivos componentes estructurales y funcionales.

Esto es: Un estado de desequilibrio donde un evento que antes no era considerado estresante,
puede detonar una crisis de estrés con facilidad, debido a la carga pasada y no procesada de
estrés con la que ya carga el organismo, por lo tanto delicado.
¿Qué efectos tiene el estrés en la regulación neuroendocrina?

En la regulación endocrina existe una relación evidente entre el sistema endocrino y el


nervioso, de hecho, se habla de un eje de regulación formado por el sistema nervioso y el
sistema endocrino. Órganos implicados: Hipotálamo, glándula pituitaria (o hipófisis, órgano
neuroendocrino) y glándula endocrina.

El estrés se define como una reacción de ajuste que modifica nuestro comportamiento y activa
cambios hormonales para mantener la homeostasis, mejorando nuestra probabilidad de
supervivencia. En esta reacción participan elementos estructurales y neuroendocrinos, con
funciones bien definidas entre las cuales ocupan un lugar central la secreción de CRH y la
activación del locus ceruleus (noradrenérgico), es decir el estrés es un sentimiento de tensión
física o emocional. Puede provenir de cualquier situación o pensamiento que lo haga sentir a
uno frustrado, furioso o nervioso. Pero cuando el estrés dura mucho tiempo, puede dañar la
salud, ya que es una amenaza a la homeostasis, frente a la cual el organismo, para sobrevivir,
reacciona con un gran número de respuestas adaptativas que implican la activación del
sistema nervioso simpáticas y el eje hipotalámico-pituitario-adrenal. La respuesta al estrés
agudo incluye varias regiones cerebrales (ej. Cortex prefrontal, amígdala, hipocampo,
hipotálamo) donde se han evidenciado las diferencias sexuales, tanto en la estructura como
en la función; las regiones límbicas y cerebrales anteriores son extremadamente sensibles a
las hormonas liberadas durante el estrés, especialmente los glucocorticoides.
¿Qué efectos tiene el estrés en el organismo?

El estrés es la vía por la que el cuerpo trata de solucionar un problema, pero cuando la situación
se hace recurrente, este puede provocar enfermedades como la diabetes, depresión,
resistencia a la insulina, hipertensión y otras enfermedades autoinmunes. La respuesta de
nuestro cuerpo al estrés tiene una naturaleza protectora y adaptativa. Por el contrario, la
respuesta al estrés crónico produce un desequilibrio bioquímico que, a su vez, debilita nuestro
sistema inmunológico frente a determinados virus o alteraciones.

Se divide en tres fases de respuesta:

1.-Fase de alerta: En reacción a un estresor, el hipotálamo estimula las suprarrenales (en su


parte medular) para secretar la adrenalina, cuyo objetivo es suministrar la energía en caso de
urgencia. Habrá entonces una serie de respuestas del organismo como un aumento de la
frecuencia cardíaca, una vasodilatación, un aumento de la vigilancia (puesta en juego también
por la noradrenalina [NA]).

2.- Fase defensa (o resistencia): Se activa solamente si el estrés se mantiene. Las


suprarrenales (en la zona fasciculada) van a secretar entonces un segundo tipo de hormona,
el cortisol. Su papel, es esta vez, el de mantener constante el nivel de glucosa sanguínea para
nutrir los músculos, el corazón, el cerebro. Por una parte, la adrenalina suministra la energía
de urgencia; por otra, el cortisol asegura la renovación de las reservas. Es una fase de
resistencia, el organismo debe aguantar.

3.-Fase de agotamiento (o de relajamiento): Se instala si la situación persiste y se acompaña


de una alteración hormonal crónica (con consecuencias orgánicas y psiquiátricas). Si la
situación persiste todavía más, es posible que el organismo se encuentre desbordado,
inclusive agotado. Poco a poco las hormonas secretadas son menos eficaces y comienzan a
acumularse en la circulación. Resultado: el organismo está invadido de hormonas que tendrán
un impacto negativo sobre la salud.

El estrés recurrente o muy intenso es uno de los factores que contribuyen al desarrollo de
somatizaciones, como consecuencia de la falta de capacidad adaptativa a los cambios. Son
muchas las enfermedades psicosomáticas producidas por el estrés o desencadenadas o
agravadas por el mismo.
Cuando el estrés agudo es continuo, en nuestro cuerpo se puede llegar a producir úlceras en
diferentes partes de nuestro sistema digestivo, así como problemas cardiovasculares. Incluso
en personas con factores de riesgo altos puede provocar ataques al corazón o infartos. Todas
estas enfermedades suelen avanzar de manera silenciosa, somatizándose de diversas
maneras y en diferentes áreas del cuerpo de acuerdo a determinadas características de la
persona afectada.

¿Qué remedios homeopáticos podemos emplear para disminuir el estrés?

Si bien es cierto que algunos medicamentos homeopáticos se prescriben más frecuentemente


que otros para ayudar a combatir el estrés, uno de los principios de la homeopatía es la
individualización del tratamiento, buscando el medicamento más adecuado para cada persona.

Ignatia amara es uno de los principales medicamentos empleados para los trastornos de
origen emocional, sobre todo cuando la causa es reciente y la persona manifiesta una acusada
tendencia a suspirar.

Passiflora incarnata es especialmente útil para reducir la tensión o ansiedad que se asocia a
alteraciones del sueño.

La Chamomilla es eficiente cuando la ansiedad se expresa con rabia y posteriormente


adviene algo de depresión

Argentum nitricum encajará más en el tipo de personas siempre estresadas y apresuradas,


especialmente antes de acontecimientos importantes y con tendencia a tener fuertes
palpitaciones.

Calcarea carbonica es usada cuando hay gran ansiedad acerca del futuro e hipocondría.

Phosphorus en la homeopatía es utilizado cuando la persona padece mucho miedo a que


puedan pasar cosas graves. También siente hipocondría y palpitaciones.

El tratamiento de fondo no solo pretende ayudarte a encontrar los recursos que tu organismo
precisa para volver a la normalidad, sino también recuperar la capacidad de mantenerte en
equilibrio, lo que te permitirá también prevenir recaídas en un futuro.

Arsenicum álbum, para la ansiedad nerviosa


Es un medicamento homeopático que podremos usar para la ansiedad nerviosa que presenta
agitación, más común en personas hipocondriacas que temen sufrir enfermedades y a la vez
son muy perfeccionistas.

Gelsemium sempervirens, si te paraliza la ansiedad Es ideal para los pacientes que sufren
ansiedad por anticipación que puede llegar a paralizarles. Exámenes, viajes, pruebas
deportivas, es un medicamento que suelo recomendar mucho a los deportistas en los días
previos a la competición

Aconitum napellus, contra los ataques de pánico, de gran utilidad cuando los pacientes sufren
una situación de pánico, de miedo súbito y presentan palpitaciones y enrojecimiento facial.

CONCLUSION:

Los medicamentos o remedios homeopáticos son elaborados mediante sucesivas diluciones


en agua o alcohol, de manera que la sustancia original que produce los efectos de la
enfermedad quede reducida a una cantidad infinitesimal. Los productos que se utilizan para
elaborar estos remedios pueden ser de origen animal, vegetal o químicos, trabaja con plantas
relajantes del sistema nervioso (mineral u orgánico).

La homeopatía como auxiliar para disminuir los niveles de estrés, en mi experiencia el empleo
de los medicamentos homeopáticos Kalium phosphoricum y Acidum phosphoricum resultan
muy eficaces para ayudar a los estudiantes también, para situaciones de estrés emocional con
astenia física y psíquica. De hecho en mi misma persona los aplico, ya que sufro de estrés
elevado, con varias consecuencias orgánicas. (Kali Phosphorica en sales), me mantiene al
punto.

El tratamiento homeopático de la ansiedad, depresión y nervioso en su totalidad se


repertorizar para darle una solución integral al paciente y partir de un estudio de la persona
en su totalidad, permite, en muchas ocasiones, disminuir la intensidad de los síntomas e
incluso reducir la medicación ansiolítica o antidepresiva.

Además utilizo los auxiliares de la misma rama homeopatica, como Nosodes, organoterapicos,
vitaminas, sales de Schüssler, y flores de Bach como complemento.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS.

Aranda Ruth, (2018), Aprendiendo el método de repertorización de clemens von (Recuperado


el 25 de Enero del 2020) https://www.uniluisgpaez.edu.co/wp-content/uploads/

Dorantes, A. Y. (2016). Endocrinología clínica (5. ª ed.). México: Manual Moderno. S/d. (2018).
Medicamento homeopático para el estrés y la
ansiedadhttps://www.esneca.com/blog/medicamento-homeopatico-estres-ansiedad

Eizayaga Francisco Xavier (1979), El Moderno Repertorio de Kent

López, R., Ortegón Piñero, A., & Cortés Castell, E. (2014). Cortisol salival como indicador de
estrés fisiológico en niños y adultos: revisión sistemática. (Recuperado el 25 de Enero del
2020)http://www.scielo.org.co/pdf/iat/v18n4/v18n4a06.pdf

Valdés, M., & De Flores, T. (1985). Psicobiología del estrés. Barcelona: Martínez Roca.
(Recuperado el 26 de Enero del 2020)https://lamenteesmaravillosa.com/cortisol-la-hormona-
del-estres

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