Вы находитесь на странице: 1из 4

Alucinación

Definición: La definición clásica de la alucinación es la de Benjamín Ball (1833-1893) para


él la alucinación es una percepción sin objeto a percibir, aunque no siempre las
alucinaciones tienen las características de las percepciones. Para German Berrios la
alucinación es una declaración perceptual, de grado variable de convicción, en la ausencia
de un estímulo externo relevante.

Alucinación autoscópica
Es una alucinación visual en la que el enfermo se ve así mismo como si se mirase a un
espejo.

Alucinaciones congruentes o no con el estado de ánimo


De acuerdo con la clasificación de la Asociación Psiquiátrica Americana (DSM-IV-TR), las
alucinaciones auditivas que pueden aparecer en las depresiones psicóticas y en las fases
maníacas pueden ser congruentes o no con el estado de ánimo. Existe congruencia cuando
hay una pertinencia entre el estado de ánimo y el contenido de la alucinación, así en las
depresiones psicóticas los contenidos congruentes deben de estar relacionados con la
culpa, la enfermedad, el castigo, la ruina, la muerte, la vergüenza y en la manía con el
poder propio, los conocimientos, la riqueza. Los restantes contenidos alucinatorios
(persecución, celos, transformación, nihilistas, etc.) no serían congruentes con los estados
de ánimo depresivo o maníaco.

Alucinación funcional
Hablamos de alucinación funcional cuando la alucinación aparece acompañada se una
percepción real. Se llama funcional porque está en función de los estímulos externos,
apareciendo y desapareciendo con ellos. Por ejemplo, el paciente oye un ruido de un
autobús pasando por su calle y al mismo tiempo escucha las voces que se dirigen a él. Para
O. Bumke, sin embargo, las alucinaciones visuales auditivas funcionales son aquellas
alucinaciones visuales que desaparecen cuando se cierran los ojos o aquellas alucinaciones
auditivas que desaparecen cuando se tapan los oídos.

Alucinaciones gustativas
Las alucinaciones gustativas suelen asociarse a las olfativas. Muchas veces es difícil de
diferenciar si nos encontramos ante una alucinación gustativa o ante una ilusión. A causa
de estas alucinaciones los enfermos pueden pensar que están siendo envenenados a través
de los alimentos.

Alucinación negativa
En la alucinación negativa el sujeto excluye de su mundo a determinadas personas u
objetos y dice no verlos a pesar de ver al resto de las personas u objetos que le rodean. Sin
embargo, aunque dice que no percibe el objeto o persona, no se comporta como si su
ausencia fuese real, no percibe a una persona pero la esquiva cuando pasa al lado de ella.
Este tipo de alucinación visual puede verse, aunque raramente, en las histerias de
disociación, y con más frecuencia pueden ser provocadas durante la hipnosis
(contrasugestión).
Alucinaciones táctiles
Sinónimos: alucinaciones hápticas (Desoir). En la esquizofrenia siguen en frecuencia
a las alucinaciones auditivas. Se ha distinguido entre alucinaciones táctiles activas, en
la que el sujeto cree haber tocado objetos inexistentes y la pasiva, más frecuente, en la
que el paciente cree haber sido tocado. Puede tener un carácter terrorífico, los
pacientes pueden sentir que les pinchan, les queman, les golpean; en otras ocasiones
pueden tener un carácter sexual, entonces los pacientes sienten que le producen
erecciones o que se introducen animales en su vagina. Son interpretadas como
productos de la influencia externa. Además de presentarse en las esquizofrenias
pueden también aparecer en las intoxicaciones por cocaína, belladona, anfetamina,
en el delirium tremens y en la insuficiencia renal crónica. En el delirio dermatozoico
de Ekbon aparecen alucinaciones táctiles, a veces acompañadas de alucinaciones
visuales o ilusiones y que son interpretadas como producto de una infestación por
parásitos. Este delirio parasitario puede ser secundario a enfermedades somáticas
como el cáncer o la diabetes. Cuando el paciente tiene la sensación como si su piel
fuera recorrida por hormigas esta alucinación táctil recibe el nombre de formicacion.

Alucinaciones de viudedad
En personas sanas y en situaciones de duelo pueden aparecer este tipo de
alucinación, visual o auditiva. Por ejemplo una viuda puede oír a su marido fallecido
recientemente.

Cogniciones corpóreas
Fenómeno descrito por Karl Jaspers. En ellos el paciente siente que alguien camina
siempre a su lado o detrás de él. En este caso, de acuerdo con F. Alonso Fernández,
no se trataría de una alucinación sino de una inspiración delirante.

Heautoscopia
Entendemos por heautoscopia el doble corpóreo propio. Este desdoblamiento puede
ser físico o psíquico. De acuerdo con J.J. López Ibor y F. Alonso Fernández podemos
distinguir tres tipos de dobles corpóreos: 1) El doble corpóreo que se manifiesta
como una mera impresión, acompañada de una sensación de extrañeza sobre el
propio cuerpo. De acuerdo con J.J. López Ibor se trataría de una variante de la
despersonalización. 2) El doble corpóreo percibido visualmente. Se trataría de una
alucinación de acuerdo con H. Hécaen y J. Ajurriaguerra. 3) El doble corpóreo del
que se tiene la certidumbre de su existencia pero al que no se le ha visto. Se trataría,
de acuerdo con F. Alonso Fernández, de una inspiración delirante.
Ideas deliroides
Sinónimo: ideas secundarias. Karl Jaspers distinguió dos tipos de ideas delirantes: las
autenticas ideas delirantes, que tienen como fuente una vivencia patológica primaria
o exigen como condición previa una transformación de la personalidad, y las ideas
deliroides, que surgen de otros procesos psíquicos, son motivadas, comprensibles,
como las que surgen a partir de afectos, vivencias traumatizantes o trastornos de
conciencia. Para F. Alonso Fernández, de acuerdo con Kurt Schneider, la motivación,
el carácter comprensible o no, no es valido para distinguir lo deliroide de lo delirante.
Las ideas delirantes se muestran comprensibles a partir del humor delirante. Lo
incomprensible de las ideas delirantes es el dasein (estar ahí), ya que existe en ellas
una ruptura de la continuidad histórica significativa del sujeto y la aparición de
nuevos modos de vivenciar. Las ideas deliroides no sólo están motivadas por otras
vivencias como un estado de ánimo, sino que ellas no se aprecia este desgarramiento
o ruptura de la continuidad histórica significativa del sujeto y no aparece en ellas
nuevos modos de vivenciar. Las auténticas ideas delirantes son propias de la
esquizofrenia, mientras que las ideas deliroides pueden aparecer en todas las
enfermedades psiquiátricas. F. Alonso Fernández distingue varios tipos de ideas
deliroides: 1) Ideas explicativas o derivadas. Son derivadas de otros síntomas, por
ejemplo las que surgen en el enfermo esquizofrénico para dar explicación a sus
alucinaciones auditivas.2) Ideas reactivas. Son ideas que surgen ante situaciones
paranoidizantes (cárceles, persecución, aislamiento).3) Ideas interpretativas, falsas
interpretaciones o interpretaciones delirantes. Surgen como consecuencia de un
trastorno afectivo o una deficiencia intelectual. De esta manera se formarían las ideas
deliroides que surgen de las ideas sobrevaloradas.4) Ideas residuales. Consisten en la
creencia en la realidad de un fenómeno psicopatológico (delirio o alucinación)
pasado. Constituiría lo que se ha llamado recuerdos delirantes.

Вам также может понравиться