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EL MÉTODO

Un buen maestro deberá motivar en vez de criticar, sugerir que corregir, proponer que imponer,
adaptarse a la marcha de sus estudiantes en lugar de seguir sus propias reglas.
Para dirigir el desarrollo de la creatividad: libertad de expresión, respeto al punto de vista y
sentimiento propios de cada estudiante; combinación y colaboración entre el trabajo creativo y el de
otras materias: rechazo de toda pedagogía extraña que bajo pretexto de ayudar puede llevar a la
rutina y conducir a la muerte del talento creador.
No se encuentran en los programas oficiales un método para el desarrollo de la creatividad, que
solucione el problema desde el punto de vista metodológico y práctico. Algunas instrucciones se dan:
DISPERSAS: no tienen bien definidos los objetivos.
EQUIVOCADA: se piensa que este tipo de actividades sólo sirve para crear objetos de utilidad.
PARCIALES: no solo se puede utilizar el dibujo, canto, visitas a museos etc. Para motivar al
sentimiento.
TÍMIDAS: Al finalizar la escolaridad obligatoria se pone en duda la efectividad de las actividades
creativas.
La pedagogía activa se concibe como la condición y objetivo del conocimiento inspirado al servicio de
la acción, que conduce a desplazar el interés del educando del objetivo al sujeto y a llevar al niño al
centro de todo el problema de la enseñanza: también permite encaminar la educación hasta la
formación de es dotes creativas despertando en él nuevas aptitudes, promueve la enseñanza
individualizada, de manera que el alumno, en forma tangible y concreta elige él mismo sus
actividades, encuentra y resuelve, con iniciativa, sus propios problemas, todo esto da como resultado
el acuerdo que existe entre él y sus compañeros, sus maestros y todo el medio escolar que lo rodea. Con
todo esto el alumno se vuelve artesano de su educación al mismo tiempo que su sentido social se
desenvuelve.
ACTIVIDADES DIRIGIDAS:
El espíritu de las “actividades dirigidas” conduce a separar de la enseñanza el mecanismo y el
intelecto del individuo, concebir todo conocimiento como la unión de la acción y la organización de la
clase, y no como un auditorio. Como un taller que dará un nuevo sentido a la enseñanza, no pondrá al
profesor como el distribuidor de conocimientos, sino como el organizador de las actividades que realice
el estudiante.
Esta actividad, creadora del conocimiento, motor y regulador del desarrollo del niño, en su
integración progresiva del mundo, supone la posibilidad de la expresión espontánea y de la selección
libre, en donde se da un sentido conforme a las condiciones biológicas del crecimiento. Ella condiciona
la verdadera disciplina concebida como un sistema apremiante de reglas impuestas para hacer posible
la actividad escolar, más bien será el resultado natural de esta actividad.
La disciplina se convierte en el conjunto de conductas y relaciones que se establecen en el interior del
grupo de niños: ella expresa el acuerdo existente entre el alumno y su actividad, entre él y sus
compañeros. La actividad escolar tiene la perspectiva de formar sus reglas de acuerdo al interés del
alumno.
El desarrollo funcional está fundamentalmente condicionado por tres necesidades de naturaleza
afectiva:
Necesidad de seguridad, de afecto, de actividades más o menos favorables, donde busca la satisfacción
dentro del medio bio-psico-social en el que se desenvuelve el niño. Es también necesidad de orden e
integración, se expresa dentro de la propuesta colectiva, el contagio mental, es por esto que en la
edad escolar, el grupo de niños en general y los grupos en particular, realizan una unidad biológica
casi natural. Dan un sentido, un equilibrio provisional a la relación del niño y del mundo exterior bajo
el plan afectivo. Es por esto la imitación, la emulación, el contagio colectivo, que llevan bajo el plan
de acción el empuje biológico con tendencias afectivas, son fuerzas educativas. No hay por que
reprimir estas tendencias, porque sabemos que es un error creer que sólo hay que preparar el
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pensamiento racional que debemos rechazar el afecto y la imaginación. Tampoco hay que dejar la
política de “dejar hacer” y la anarquía con tendencias difusas y ciegas, como ya se ha visto en pésimas
experiencias de la llamada “educación liberal”. El maestro estará atento a las manifestaciones
afectivas individuales y colectivas para canalizarlas a aciertos objetivos, fijándolas hacia objetivos
propios para su integración armoniosa. Esto es precisamente el papel del desarrollo de la creatividad.
El clima afectivo dentro de la clase tiene que ser recíproco, engendrado de la relación maestro-alumno.
Debe ser un clima de actividades constante mantenido por tareas adaptadas e individualizadas
llevando en forma progresiva al niño a la realización de trabajos colectivos, uniendo, fuerzas y deseos
de cada uno de los integrantes. Finalmente el clima de seguridad, resultado de las tareas propuestas
siempre a la medida del niño y del éxito obtenido este debe ser el resultado del esfuerzo positivo y
sostenerlo en acción por el deseo de superar dificultades.
El clima afectivo está ligado a la manera en que le maestro organiza su clase, interviniendo en sus
relaciones con los seres vivos, es factor de formación moral, en las relaciones con las cosas el maestro
conduce a la creación, son dos aspectos con un mismo fin.
El clima afectivo y la disposición de materiales constituyen el medio exterior necesario para el ingenio
creador, esto lo estimula y lo condiciona. Es con la organización del trabajo escolar y la riqueza de la
enseñanza que dan nacimiento a la actividad artística del niño. El secreto es incorporar su creación a
toda actividad escolar, El arte se pondrá al servicio del desarrollo de la creatividad: es el interés que
permite al alumno la búsqueda de conocimientos útiles a su actividad.
El profesor es y será el factor fundamental y positivo en el desarrollo racional del niño. El carácter
positivo, la toma de conciencia y el acuerdo íntimo es lo que llamaremos interés.
El interés del niño al escoger un objeto o una actividad se produce en tres tiempos:
 Es necesario que el niño realice conscientemente el sentido y el objetivo de esta actividad, en
relación a la línea general de su actividad personal.
 Es necesario que pose los instrumentos y elementos técnicos necesarios para la realización de
la actividad.
 Finalmente es necesaria la vigilancia de la actividad.

En cuanto a la actividad creadora, que es un medio de expresión, es considerada dentro de los

métodos activos, es en sí, un método activo, es un método donde se pide al niño actuar ante los
conocimientos adquiridos, es la estimulación ante sus formas de expresión, naturalmente esto lo
llevará y ayudará a enriquecer las otras actividades escolares.
El educador debe en primer lugar, mantener en la clase un clima afectivo; para el niño esto es
importantes. Tendencias, instintos y sentimientos inspiran su comportamiento, el cual expresa sus
reacciones emotivas, aún en las actividades donde el niño parece estar descansado y seguro de sí
mismo. Una de las características de éste método, es la formación de los centros de interés. Moviliza
las actividades alrededor de un tema elegido por el niño.
Es dentro de la motivación, intrínseca o extrínseca, que el profesor debe de buscar. La observación
debe ser más rica y fecunda que le medio. Las asociaciones serán más exactas y solida, aquí en niño
tendrá la ventaja y la posibilidad de multiplicar y variar sus experiencias. Sus formas de expresión
serán cada vez más ricas, tendrá más estímulos para poder expresarse. El equipo material toma
también gran importancia no es mucho lo que se necesita para estimular la actividad creadora.

Bibliografía:
L´art a L ´ Ecole
G. Robert
Collection S U P
Presses Universitaires de Franc
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EL MÉTODO
La metodología para el desarrollo de la creatividad
prueba su calor como método activo, puesto en
marcha bajo el clima de confianza y libertad
dirigidas, en un cuadro material adaptado y
sugestivo para la integración de las actividades
artísticas y creativas en la enseñanza. Ella indica
la búsqueda de la unidad dentro de la enseñanza y
la continuidad de la actividad escolar. La
creatividad depende de estas dos condiciones, en
revancha contribuye a realizarlas cuando lo niños
ilustran un poema, arreglan los patios y jardines
de la escuela, construyen una maqueta, cuando las
niñas forman un grupo de danza, en al elección de
la música, el tema de sus bailes, deben informarse
sobre el folklore y sus elementos corporales,
descubrir pasos y lenguajes de movimientos,
confección de trajes, preparar utilería etc.
La actividad artística (expresión corporal) prepara
y facilita la adquisición del conocimiento y al
mismo tiempo actúa por medio del juego. El
objetivo de la actividad voluntaria es solo
artístico, creativo que aplica los conocimientos en
forma funcional y practica, al mismo tiempo les da
nuevos elementos para la solución y dificultades
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que se le presenten. Toda actividad voluntaria es

fuente de progreso y enriquecimiento.
El niño se distrae rápidamente, pero es capaza de
concentrarse por hora, en tareas que le acaparan.
Para desarrollar su creatividad se necesita tiempo
para tomar conciencia del sentido de su actividad,
tiempo para ponerlo en marcha. El periodo de
tiempo y del trabajo se establece en facetas:
PREPARATORIA; desarrollo máximo,
finalmente desinterés y fatiga. Para algunos el
desarrollo de actividades es lento, por lo que el
niño no logra terminar el trabajo, esto puede
conducirlo a sentirse incapaz de realizar ciertos
trabajos, para superar este problema se pueden
realizar actividades privadas para sostener su
atención.
La adquisición de nuevos conocimientos es el
resultado de las actividades voluntarias, en donde
se manejas 3 aspectos: observación, que detecta el
conocimiento y realiza hipótesis, asociación del
tiempo y espacio que la identifica, la describe y la
explica en relación a lo desconocido, el trabajo
colectivo, le da carácter “social” para conducir el
pensamiento individual al objetivo.
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Se realizan las actividades libres en el orden y

preferencia del alumno, tareas individuales o en
equipos de acuerdo a sus “centros de interés”. Esta
formula flexible, eficaz puede dar lugar a muchas
variantes. Lo esencial es que el niño pueda
trabajar con ritmo propio, a retomar el
interrumpido en determinado momento.