Nosotros elaboramos una secuencia didáctica en el nivel superior para la cátedra
Historia Argentina I, que se enmarca dentro de la curricula de la Universidad Autónoma de
Entre Ríos, Facultad Humanidades, Artes y Ciencias Sociales, en el segundo año de la Carrera de Historia. Caracterizamos la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER) en la cual se enmarca dentro del Sistema de Educación Superior (SES) en nuestra provincia, siendo una universidad con un sistema burocrático. Desde la etapa fundacional hace 10 años atrás a la actualidad se puede decir que es una universidad en construcción, que inmersa dentro del sistema social tiene un alcance desde la diversidad teórica, disciplinar y metodológica. Además propulsa la autonomía institucional, la libertad de enseñanza, sustentada en el pluralismo ideológico, epistemológico, teórico, disciplinar y metodológico. También es pertinente destacar que uno de los desafíos de esta institución universitaria es garantizar los objetivos sociales, colocando a la educación superior al alcance de todos los sectores sociales. Este desafío exige que la política educativa apoye, oriente oportunidades a los jóvenes y adultos para completar sus estudios superiores, lo que significa tener presente el principio de equidad social, es decir igualdad de oportunidades educativas a la población, esto resume uno de los valores más importante que persigue nuestra universidad (Stubrin) En cuanto al diagnóstico del grupo de alumnos, son los ingresantes del Profesorado en Historia, que se formarán como futuros profesores, intelectuales y transformadores (Giroux). Ahora bien, para justificar nuestra secuencia didáctica que nos propusimos para la cátedra Historia Argentina I, debemos dar cuenta por un lado, del concepto de historia y de la corriente historiográfica que nos posicionamos, por otro lado de la teoría de enseñanza y aprendizaje que adoptamos. Esto nos revela en sí el tipo de profesor y como dice Litwin: “Las estrategias que los docentes promueven identifican modos de razones diferentes que las inspiran y conducen, es decir que los docentes diseñan las estrategias en relación con su propio proceso de construcción del conocimiento” El concepto de Historia que adoptamos es el de Lucièn Febvre que sostiene que la Historia es una ciencia del hombre y de los hechos humanos, todo tiene su historia, y para ello hay que utilizar todo tipo de fuentes. Este historiador se enmarca dentro de Annales y del concepto de Historia Total (universalidad temática) la cual entabla un dialogo con las restantes disciplinas sociales para establecer síntesis. Esto condice con lo que sostiene Carlos Barros acerca del nuevo paradigma global, común y plural que la utilizamos para enseñar Historia hoy, es decir atender a una Historia más narrativa, comprometida, más pensada, interdisciplinar, más global y más reivindicativa.