Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Aquél agricultor tenía varias esposas. Un día un adivino vino al pueblo de Isokun y
predijo para el agricultor: “Si continúas matando monos, tus esposas no podrán
tener hijos. Los monos son sabios y poderosos, ellos tienen la facultad de enviar un
Àbíkú (nacidos para morir prematuramente) a los vientres de tus esposas. Cesa de
matar monos. Permite que los monos vengan y coman en tu tierra.
Pero como los gemelos eran Àbíkús, al poco tiempo murieron. Y los monos
retornaron al “lugar de los no nacidos”. De nuevo, una de las esposas del agricultor
quedó embarazada, y cuando parió, nacieron otros gemelos. Pero como eran
monos, al poco tiempo de vida, murieron. Así pasó con todas las esposas. El
agricultor desesperado, porque no podía tener herederos, viajó a un lejano lugar
para consultar a Òrúnmìlà. Ifá le dijo: Tus problemas son provocados por los
monos. Ellos están enviando Àbíkús a los vientres de tus esposas. Tú le has
provocado a ellos un gran sufrimiento, y en venganza ellos te hacen Juju (brujería).
Permite que ellos coman en tus cultivos, a lo mejor así se apaciguan.
Ifá también dijo: Debes hacer cualquier cosa que los haga felices en este mundo. Lo
que ellos quieran, dáselo. Hazle ofrendas al Òrìsà Ìbejì. Ya que los gemelos fueron
enviados al mundo por los monos. Los monos son sagrados para el Òrìsà Ìbejì. Ni
los gemelos ni sus padres pueden matar monos ni comer carne de mono.
Desde este día, los gemelos son llamados: Adanjunkale (con ojos brillantes en la
casa). El primero que nace es llamado: Taiwo (To—aiye—wo: El que viene a probar
la vida). El segundo que nace es llamado Kehinde (Ko—ehin—de: El que viene
detrás de otro), y es el mayor de los dos. El pueblo Yorubá dice que Kehinde
siempre envía a Taiwo adelante para descubrir si la vida vale la pena.
Los Ìbejì son la deificación del nacimiento de dos o más niños al mismo tiempo. Se
considera que tienen ciertos poderes especiales e incluso que habrían sido
mandados al mundo por el propio Sàngó. Pueden ser un varón y una hembra; dos
varones o dos hembras. En el culto a los Òrisà, también hay Ìbejì que pueden
proceder de otros linajes que no sean el de Sàngó; como por ejemplo de Yemoja o
de Obàtálá. Pero dada la gran influencia de Sàngó, es muy raro que se cultúen a
Ibejis que no pertenezcan a su familia y tratándose de los que vienen de Yemoja se
los asocia a la unión entre ésta y Sàngó. Por otro lado los Ìbejìs que pertenecen a
Obàtálá serían hijos también de Sàngó, pero que por haber nacido albinos habrían
sido entregados al culto del Òrìsà funfun, pasando a ser los Ìbejìs que se les entrega
a los hijos de Obàtálá.
Los Ìbejì protegen a los niños en general y además también se utilizan para la
unión de las personas. Al Òrìsà Ìbejì se lo asienta en dos muñecos de madera (con
carga interna), en dos okutás por cada Ìbejì que se asienta y además en sus armas y
herramientas. Cuando vienen por parte de Yemoja con Sàngó al macho se le viste
de rojo y blanco y a la hembra de celeste y blanco; siendo también sus collares de
los mismos colores. Cuando vienen por Òsun con Sàngó a los dos se los viste con
los colores rojo, amarillo y blanco . Pero hay además otra filiación y es cuando
vienen por Oya con Sàngó, siendo que en este caso se les ponen 9 colores brillantes.
Se les saluda diciendo "¡Beji oro!" (espíritu que nació doble)
Oríkì Ìbejì
(Alabando al espíritu de los Gemelos)
B’eji b’eji’re.
Dar nacimiento a los gemelos trae buena fortuna.
Asé.