Вы находитесь на странице: 1из 43

FASCITIS PLANTAR

PÁGINA WEB: MAYO CLINIC

https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/plantar-fasciitis/symptoms-causes/syc-
20354846

Descripción general

Fascitis plantar
La fascitis plantar es una de las causas más comunes del dolor de talón. Consiste
en la inflamación de una banda gruesa de tejido que se extiende a lo largo de la
parte inferior del pie y que conecta el talón con los dedos del pie (fascia plantar).

La fascitis plantar suele provocar un dolor punzante que generalmente se produce


al dar los primeros pasos del día. Luego de levantarte y comenzar a moverte más,
el dolor suele disminuir, pero puede volver luego de estar parado durante mucho
tiempo o luego de levantarte de tu asiento.

La fascitis plantar es más común en los corredores. Además, las personas con
sobrepeso y aquellas que utilizan calzado que no brinda un apoyo adecuado
corren un mayor riesgo de sufrir fascitis plantar.

Productos y servicios

 Mayo Clinic Sports Medicine

Síntomas

La fascitis plantar suele provocar un dolor punzante en la parte inferior del pie
cerca del talón. Por lo general, el peor nivel de dolor se siente durante los primeros
pasos luego de despertarte, aunque también se lo puede sentir por estar parado
durante mucho tiempo o al levantarte de tu asiento. El dolor suele empeorar luego
del ejercicio, no mientras lo realizas.

Solicite una Consulta en Mayo Clinic

Causas

Bajo circunstancias normales, la fascia plantar actúa como una cuerda


amortiguadora que crea la tensión que mantiene el arco del pie. Si se genera
demasiada tensión y estrés en esta cuerda, se pueden producir desgarros
pequeños en la fascia. El estiramiento y desgarro repetido pueden provocar que la
fascia se irrite o inflame; aunque, en muchos casos de fascitis plantar, la causa no
es clara.

Factores de riesgo

Si bien la fascitis plantar puede producirse sin una causa evidente, algunos de los
factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar fascitis plantar son los
siguientes:

 La edad: la fascitis plantar es más común entre los 40 y 60 años.


 Ciertos tipos de ejercicios: las actividades que producen mucho estrés en
el talón y en los tejidos adheridos (como correr largas distancias, las
actividades con saltos, el ballet y la danza aeróbica) pueden contribuir con la
aparición temprana de la fascitis plantar.

 Anatomía del pie: un pie plano, un arco plantar alto o incluso una forma
anormal de caminar pueden afectar la manera en que el peso se distribuye
cuando estás de pie y pueden sobrecargar estrés en la fascia plantar.

 Obesidad: el exceso de peso produce un estrés adicional en la fascia


plantar.

 Trabajos que requieren que estés de pie: los empleados de fábricas,


docentes y otras personas que permanecen de pie o caminan sobre
superficies duras durante la mayor parte de su jornada laboral pueden sufrir
un daño en la fascia plantar.

Complicaciones

Ignorar la fascitis plantar puede producir un dolor de talón crónico que dificulte tus
actividades normales. Cambiar la forma de caminar para reducir el dolor de la
fascitis plantar puede generar problemas en el pie, la rodilla, la cadera o la
espalda.

Diagnóstico

El diagnóstico se basa en los antecedentes médicos y los exámenes físicos.


Durante el análisis, tu médico controlará si tienes zonas de sensibilidad en el pie.
El lugar donde sientas dolor puede ayudar a determinar la causa.

Estudios de diagnóstico por imágenes

Generalmente, no se necesitan análisis. Tu médico puede sugerir una radiografía


o una resonancia magnética para asegurarse de que la causa del dolor no sea por
otro problema, como una fractura por estrés o una compresión nerviosa.
A veces, una radiografía puede mostrar un espolón que sobresale del hueso del
talón. En el pasado, se creía que estos espolones provocaban el dolor en el talón
y se los extraía quirúrgicamente. Sin embargo, muchas personas con espolones
en los talones no sufren dolor en el talón.

 Radiografía

 Resonancia magnética

Tratamiento

La mayoría de los pacientes con fascitis plantar se recuperan con tratamientos


convencionales, lo que incluye hacer reposo, colocar hielo sobre la zona adolorida
y estirar durante muchos meses.

Medicamentos

Los analgésicos como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, entre otros) y el naproxeno
sódico (Aleve) pueden aliviar el dolor y la inflamación provocados por la fascitis
plantar.

Terapias

Los ejercicios de estiramiento o el uso de dispositivos especializados pueden


aliviar los síntomas. Algunos de ellos son los siguientes:

 Fisioterapia: un fisioterapeuta puede enseñarte una serie de ejercicios para


estirar la fascia plantar y el tendón de Aquiles, y para fortalecer los músculos
de la pantorrilla, que estabilizan el tobillo y el talón. El fisioterapeuta también
te puede enseñar a vendarte con cinta deportiva para un mejor apoyo de la
base del pie.

 Férula nocturna: tu fisioterapeuta o médico puede recomendarte que utilices


una férula que estire la pantorrilla y el arco del pie mientras duermes. Esto
mantiene la fascia plantar y el tendón de Aquiles en una posición extendida
durante la noche, lo que facilita el estiramiento.
 Ortótica: tu médico puede recetarte soportes de arco prefabricados o hechos
a medida (dispositivos ortopédicos) para ayudarte a distribuir la presión que
se ejerce sobre el pie de forma más pareja.

Cirugía u otros procedimientos

Si luego de varios meses los tratamientos más convencionales no funcionan, tu


médico puede recomendarte lo siguiente:

 inyecciones: la inyección de algún tipo de esteroide en el área sensible


puede aliviar el dolor de forma temporal. No se recomiendan múltiples
inyecciones debido a que pueden debilitar tu fascia plantar y, posiblemente,
provocar una ruptura. Más recientemente, comenzó a utilizarse el plasma rico
en plaquetas, con guía ecográfica, para aliviar el dolor con un menor riesgo
de ruptura de tejidos.

 Tratamiento por onda de choque extracorpórea: En este procedimiento,


se dirigen ondas de sonido a la zona del dolor en el talón para estimular la
curación. Se suele utilizar para la fascitis plantar crónica que no ha
respondido a tratamientos más convencionales. Este procedimiento puede
provocar hematomas, hinchazón, dolor, entumecimiento u hormigueo.
Algunos estudios muestran resultados prometedores; sin embargo, no se ha
demostrado una consistencia en su efectividad.

 Procedimiento Tenex: este procedimiento mínimamente invasivo extrae el


tejido cicatricial de la fascitis plantar sin la necesidad de someterse a una
cirugía.

 Cirugía: algunas personas necesitan someterse a una cirugía para separar la


fascia plantar del hueso del talón. Suele ser una opción solo cuando el dolor
es intenso y todas las demás alternativas fallan. Los efectos secundarios
incluyen un debilitamiento del arco del pie.
Solicite una Consulta en Mayo Clinic

Estilo de vida y remedios caseros

Para reducir el dolor de la fascitis plantar, intenta seguir los siguientes consejos de
autocuidado:
 mantén un peso saludable: adelgaza si tienes sobrepeso u obesidad para
reducir el estrés en la fascia plantar.

 Elige un calzado con buen apoyo: evita los tacones altos. Compra calzado
que tenga entre un tacón bajo y moderado, que apoye bien el arco del pie y
que posea una buena amortiguación. No camines descalzo, especialmente
en superficies duras.

 No utilices calzado deportivo desgastado: reemplaza tu calzado deportivo


viejo antes de que deje de proporcionarte un buen apoyo y amortiguación. Si
eres corredor, compra calzado nuevo luego de correr aproximadamente entre
400 y 500 millas (entre 640 y 800 kilómetros).

 Cambia de deporte: prueba practicar un deporte de bajo impacto, como la


natación o el ciclismo en vez de caminar o trotar.

 Aplica hielo: coloca una bolsa de hielo cubierta con un paño sobre la zona
donde sientas dolor durante 15 a 20 minutos tres o cuatro veces al día, o
después de realizar actividad física. Otra alternativa es el masaje con hielo.
Congela agua en un vaso descartable y hazlo rodar sobre la zona donde
sientas molestia durante alrededor de cinco a siete minutos. Un masaje con
hielo de forma regular puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación.

 Estira los arcos: algunos ejercicios simples en casa pueden estirar la fascia
plantar, el tendón de Aquiles y los músculos de la pantorrilla.

Cómo prepararte para la consulta

Si bien en un principio puedes consultar con tu médico de cabecera, te puede


derivar con un médico especialista en trastornos del pie o en medicina deportiva.

Lo que puedes hacer

Es una buena idea anotar una lista que incluya lo siguiente:

 tus síntomas y cuándo comenzaron;

 información personal importante, incluye tus antecedentes médicos y los


de tu familia, y las actividades que realizas que podrían haber provocado tus
síntomas;
 todos los medicamentos, vitaminas u otros suplementos que
consumas incluye las dosis;

 preguntas para hacerle al médico.

Estas son algunas de las preguntas básicas que puedes hacerle a tu médico sobre
la fascitis plantar:

 ¿cuál es la causa más probable de mis síntomas?

 Además de la causa más probable, ¿cuáles son las otras posibles causas de
mis síntomas?

 ¿Qué análisis necesito?

 ¿Mi enfermedad es temporal o crónica?

 ¿Cuál es el mejor procedimiento a seguir?

 ¿Cuáles son las alternativas al enfoque primario que sugiere?

 ¿Existen restricciones que tengo que seguir?

 ¿Debería ver a un especialista?

 ¿Tiene folletos u otro material impreso que me pueda llevar? ¿Qué sitios web
me recomienda?

No dudes en hacer otras preguntas.

Qué esperar de tu médico

Es probable que tu médico te haga preguntas como las siguientes:

 ¿tus síntomas suelen manifestarse en algún momento particular del día?

 ¿Qué tipo de calzado utilizas regularmente?

 ¿Eres corredor o practicas algún deporte que involucre correr?

 ¿Tienes un trabajo que requiere un gran esfuerzo físico?

 ¿Has tenido problemas en los pies anteriormente?

 ¿Sientes dolor en alguna otra parte además de los pies?


 ¿Hay algo que parezca mejorar tus síntomas?

 ¿Hay algo que parezca empeorar tus síntomas?

Diagnóstico

El diagnóstico se basa en los antecedentes médicos y los exámenes físicos.


Durante el análisis, tu médico controlará si tienes zonas de sensibilidad en el pie.
El lugar donde sientas dolor puede ayudar a determinar la causa.

Estudios de diagnóstico por imágenes

Generalmente, no se necesitan análisis. Tu médico puede sugerir una radiografía


o una resonancia magnética para asegurarse de que la causa del dolor no sea por
otro problema, como una fractura por estrés o una compresión nerviosa.

A veces, una radiografía puede mostrar un espolón que sobresale del hueso del
talón. En el pasado, se creía que estos espolones provocaban el dolor en el talón
y se los extraía quirúrgicamente. Sin embargo, muchas personas con espolones
en los talones no sufren dolor en el talón.

 Radiografía

 Resonancia magnética

Tratamiento

La mayoría de los pacientes con fascitis plantar se recuperan con tratamientos


convencionales, lo que incluye hacer reposo, colocar hielo sobre la zona adolorida
y estirar durante muchos meses.

Medicamentos

Los analgésicos como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, entre otros) y el naproxeno
sódico (Aleve) pueden aliviar el dolor y la inflamación provocados por la fascitis
plantar.
Terapias

Los ejercicios de estiramiento o el uso de dispositivos especializados pueden


aliviar los síntomas. Algunos de ellos son los siguientes:

 Fisioterapia: un fisioterapeuta puede enseñarte una serie de ejercicios para


estirar la fascia plantar y el tendón de Aquiles, y para fortalecer los músculos
de la pantorrilla, que estabilizan el tobillo y el talón. El fisioterapeuta también
te puede enseñar a vendarte con cinta deportiva para un mejor apoyo de la
base del pie.

 Férula nocturna: tu fisioterapeuta o médico puede recomendarte que utilices


una férula que estire la pantorrilla y el arco del pie mientras duermes. Esto
mantiene la fascia plantar y el tendón de Aquiles en una posición extendida
durante la noche, lo que facilita el estiramiento.

 Ortótica: tu médico puede recetarte soportes de arco prefabricados o hechos


a medida (dispositivos ortopédicos) para ayudarte a distribuir la presión que
se ejerce sobre el pie de forma más pareja.

Cirugía u otros procedimientos

Si luego de varios meses los tratamientos más convencionales no funcionan, tu


médico puede recomendarte lo siguiente:

 inyecciones: la inyección de algún tipo de esteroide en el área sensible


puede aliviar el dolor de forma temporal. No se recomiendan múltiples
inyecciones debido a que pueden debilitar tu fascia plantar y, posiblemente,
provocar una ruptura. Más recientemente, comenzó a utilizarse el plasma rico
en plaquetas, con guía ecográfica, para aliviar el dolor con un menor riesgo
de ruptura de tejidos.

 Tratamiento por onda de choque extracorpórea: En este procedimiento,


se dirigen ondas de sonido a la zona del dolor en el talón para estimular la
curación. Se suele utilizar para la fascitis plantar crónica que no ha
respondido a tratamientos más convencionales. Este procedimiento puede
provocar hematomas, hinchazón, dolor, entumecimiento u hormigueo.
Algunos estudios muestran resultados prometedores; sin embargo, no se ha
demostrado una consistencia en su efectividad.
 Procedimiento Tenex: este procedimiento mínimamente invasivo extrae el
tejido cicatricial de la fascitis plantar sin la necesidad de someterse a una
cirugía.

 Cirugía: algunas personas necesitan someterse a una cirugía para separar la


fascia plantar del hueso del talón. Suele ser una opción solo cuando el dolor
es intenso y todas las demás alternativas fallan. Los efectos secundarios
incluyen un debilitamiento del arco del pie.
Solicite una Consulta en Mayo Clinic

Estilo de vida y remedios caseros

Para reducir el dolor de la fascitis plantar, intenta seguir los siguientes consejos de
autocuidado:

 mantén un peso saludable: adelgaza si tienes sobrepeso u obesidad para


reducir el estrés en la fascia plantar.

 Elige un calzado con buen apoyo: evita los tacones altos. Compra calzado
que tenga entre un tacón bajo y moderado, que apoye bien el arco del pie y
que posea una buena amortiguación. No camines descalzo, especialmente
en superficies duras.

 No utilices calzado deportivo desgastado: reemplaza tu calzado deportivo


viejo antes de que deje de proporcionarte un buen apoyo y amortiguación. Si
eres corredor, compra calzado nuevo luego de correr aproximadamente entre
400 y 500 millas (entre 640 y 800 kilómetros).

 Cambia de deporte: prueba practicar un deporte de bajo impacto, como la


natación o el ciclismo en vez de caminar o trotar.

 Aplica hielo: coloca una bolsa de hielo cubierta con un paño sobre la zona
donde sientas dolor durante 15 a 20 minutos tres o cuatro veces al día, o
después de realizar actividad física. Otra alternativa es el masaje con hielo.
Congela agua en un vaso descartable y hazlo rodar sobre la zona donde
sientas molestia durante alrededor de cinco a siete minutos. Un masaje con
hielo de forma regular puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación.

 Estira los arcos: algunos ejercicios simples en casa pueden estirar la fascia
plantar, el tendón de Aquiles y los músculos de la pantorrilla.
Cómo prepararte para la consulta

Si bien en un principio puedes consultar con tu médico de cabecera, te puede


derivar con un médico especialista en trastornos del pie o en medicina deportiva.

Lo que puedes hacer

Es una buena idea anotar una lista que incluya lo siguiente:

 tus síntomas y cuándo comenzaron;

 información personal importante, incluye tus antecedentes médicos y los


de tu familia, y las actividades que realizas que podrían haber provocado tus
síntomas;

 todos los medicamentos, vitaminas u otros suplementos que


consumas incluye las dosis;

 preguntas para hacerle al médico.

Estas son algunas de las preguntas básicas que puedes hacerle a tu médico sobre
la fascitis plantar:

 ¿cuál es la causa más probable de mis síntomas?

 Además de la causa más probable, ¿cuáles son las otras posibles causas de
mis síntomas?

 ¿Qué análisis necesito?

 ¿Mi enfermedad es temporal o crónica?

 ¿Cuál es el mejor procedimiento a seguir?

 ¿Cuáles son las alternativas al enfoque primario que sugiere?

 ¿Existen restricciones que tengo que seguir?

 ¿Debería ver a un especialista?

 ¿Tiene folletos u otro material impreso que me pueda llevar? ¿Qué sitios web
me recomienda?
No dudes en hacer otras preguntas.

Qué esperar de tu médico

Es probable que tu médico te haga preguntas como las siguientes:

 ¿tus síntomas suelen manifestarse en algún momento particular del día?

 ¿Qué tipo de calzado utilizas regularmente?

 ¿Eres corredor o practicas algún deporte que involucre correr?

 ¿Tienes un trabajo que requiere un gran esfuerzo físico?

 ¿Has tenido problemas en los pies anteriormente?

 ¿Sientes dolor en alguna otra parte además de los pies?

 ¿Hay algo que parezca mejorar tus síntomas?

 ¿Hay algo que parezca empeorar tus síntomas?


PÁGINA WEB: CIGNA.COM

https://www.cigna.com/individuals-families/health-wellness/hw-en-espanol/temas-de-
salud/fascitis-plantar-tr5853

Fascitis plantar: Ejercicios para aliviar el dolor


[English]

Saltar a la barra de navegación

Introducción
 El dolor en el talón puede ser causado por la tensión ejercida sobre el ligamento de la
fascia plantar cuando se estira de manera irregular, lo que provoca pequeños desgarros
e inflamación. Los ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento pueden ayudar a que el
ligamento se vuelva más flexible y pueden fortalecer los músculos que sostienen el arco, y
reducir a su vez la tensión sobre el ligamento.
 Cuando se combinan con otras medidas como descansar, evitar actividades que
empeoran el dolor en el talón, usar plantillas, aplicarse hielo o tomar analgésicos
(medicamentos para el dolor), los ejercicios para la fascitis plantar suelen lograr aliviar el
dolor en el talón.
 Los ejercicios para la fascitis plantar podrían ser especialmente útiles para reducir el dolor
en el talón en cuanto se levanta de la cama.
 Si tiene preguntas acerca de cómo hacer estos ejercicios o si el dolor en el talón empeora,
hable con su médico.

Cómo hacer ejercicios para la fascitis plantar


 Hacer precalentamiento y estiramiento antes de los deportes o el ejercicio puede hacer
que la fascia plantar se vuelva más flexible y puede disminuir las probabilidades de
lesiones y de inflamación.
 Quizás desee tomar un analgésico (medicamento para el dolor), como un medicamento
antiinflamatorio no esteroideo (AINE ), incluidos el ibuprofeno o el naproxeno, para aliviar
la inflamación y el dolor. Algunas personas toman AINE al menos 30 minutos antes de
hacer el ejercicio recomendado, para aliviar el dolor y para poder hacer y disfrutar del
ejercicio. Otras personas toman AINE después de hacer ejercicio. Sea prudente con los
medicamentos. Lea y siga todas las instrucciones de la etiqueta.
 Después de hacer ejercicio, aplíquese hielo en el talón para ayudar a aliviar el dolor y la
inflamación.
Ejercicios de estiramiento antes de levantarse de la cama
Muchas personas con fascitis plantar tienen dolores intensos en el talón por la mañana, cuando
dan los primeros pasos después de levantarse de la cama. Este dolor proviene de la tensión de
la fascia plantar que ocurre durante el sueño. Estirar o masajear la fascia plantar antes de
ponerse de pie, a menudo, puede reducir el dolor en el talón.
 Estire el pie flexionándolo hacia arriba y hacia abajo 10 veces antes de ponerse de pie.
 Haga estiramiento de los dedos de los pies para estirar la fascia plantar.
 Utilice una toalla para estirar la planta del pie ( estiramiento con una toalla ).
Otras medidas pueden ayudar a reducir el dolor en el talón cuando da los primeros pasos
después de levantarse de la cama. Usted puede:
 Usar una tablilla (férula) nocturna mientras duerme. Las férulas nocturnas sostienen el
tobillo y el pie en una posición que mantiene el tendón de Aquiles y la fascia plantar
levemente estirados.
 Masajear la planta del pie a través del ancho de la fascia plantar antes de levantarse de la
cama.
 Usar siempre zapatos cuando se levanta de la cama, incluso si es solo para ir al baño. Las
sandalias de buena calidad, el calzado deportivo o cualquier otro calzado cómodo que
tenga un buen soporte de arco servirán.

Los ejercicios de estiramiento deberían producir una sensación de tirantez. No deberían causar
dolor. Pregúntele a su fisioterapeuta o médico qué ejercicios serán mejores para usted.
Ejercicios para hacer todos los días
Los ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento ayudarán a reducir la fascitis plantar.
Es mejor hacer cada ejercicio 2 o 3 veces al día, pero no es necesario que los haga todos de
una vez. nota1
 Utilice un palo de amasar o una pelota de tenis. Mientras está sentado, haga rodar el palo
de amasar o la pelota con el arco del pie. Si puede, a medida que avance, haga el ejercicio
estando de pie.
o Estiramiento de los dedos de los pies
o Estiramiento con una toalla
o Estiramiento de la pantorrilla
o Estiramiento de la fascia plantar y de la pantorrilla
o Rollos de toalla para fortalecimiento
o Levantar canicas con los dedos de los pies para fortalecimiento
PÁGINA WEB: ORTHOINFO

https://orthoinfo.aaos.org/es/diseases--conditions/fascitis-plantar-y-protuberancias-oseas-
plantar-fasciitis-and-bone-spurs/

Print

Email

Facebook

Twitter
español
DISEASES & CONDITIONS
Fascitis plantar y protuberancias óseas (Plantar Fasciitis and Bone Spurs)
La fascitis plantar es la causa más común de dolor en la base del talón. Cerca de dos
millones de pacientes son tratados por esta condición cada año.
La fascitis plantar ocurre cuando la banda fuerte de tejido que sostiene el arco de su
pie sufre irritación e inflamación.

Anatomía
La fascia plantar es un ligamento largo y delgado que se encuentra directamente
debajo de la piel en la base de su pie. Este ligamento conecta el talón con la parte
frontal de su pie y da soporte al arco de su pie.

Causa
La fascia plantar está diseñada para absorber la gran presión y esfuerzo que le
exigimos a nuestros pies. Pero a veces demasiada presión daña o desgarra los
tejidos. La respuesta natural del cuerpo a la lesión es la inflamación, que resulta en
dolor del talón y rigidez por fascitis plantar.

Factores de riesgo

En la mayoría de los casos, la fascitis plantar se desarrolla sin una razón específica
ni identificable. Hay, sin embargo, muchos factores que a usted lo pueden hacer
más propenso a esta condición:
 Músculos de la pantorrilla tensos que dificultan la flexión de su pie y tiran de
sus dedos acercándolos a la tibia
 Obesidad
 Arco muy pronunciado
 Actividad de impacto repetitivo (correr/deportes)
 Actividad nueva o aumentada

Espolones del talón

Aunque muchas personas con fascitis plantar tienen espolones del talón, estos no
son la causa del dolor que provoca la fascitis plantar. Una de cada 10 personas tiene
espolones del talón, pero solo una de cada 20 personas (5%) con espolones del
talón tiene dolor en el pie afectado. Debido a que el espolón no es la causa de la
fascitis plantar, el dolor puede tratarse sin remover el espolón.

Los espolones del talón no son la causa del dolor en la fascitis plantar.

Síntomas
Los síntomas más comunes de la fascitis plantar incluyen:
 Dolor en la base del pie cerca del talón.
 Dolor al dar los primeros pasos después de levantarse de la cama en la
mañana, o después de un largo período de reposo, como después de un viaje
largo en automóvil. El dolor cede después de caminar unos pocos minutos.
 Mayor dolor después del ejercicio o la actividad (no durante).

Examen médico
Después que usted describe sus síntomas y discute sus inquietudes, su médico le
examinará el pie. Su médico buscará estos signos
 Un arco pronunciado.
 Un área de máximo dolor a la palpación en la base del pie, frente al hueso del
talón.
 Dolor que empeora cuando usted flexiona el pie y el médico hace presión en
la fascia plantar. El dolor mejora cuando usted pone sus dedos rígidos y trata
de moverlos hacia abajo.
 Movimiento "hacia arriba" limitado de su tobillo.

Exámenes
Su médico podría pedir estudios por imágenes para ayudar a confirmar que el dolor
en su talón es causado por fascitis plantar y no por otro problema.

Radiografías (rayos X)

Las radiografías aportan imágenes claras de los huesos. Son útiles para descartar
otras causas de dolor del talón, como fracturas u osteoartritis. Los espolones del
talón pueden verse en una radiografía.

Otros estudios por imágenes

Otros estudios por imágenes, como la imagenología de resonancia magnética


(MRI) y el ultrasonido, no se usan de rutina para diagnosticar la fascitis plantar.
Rara vez se indican. Una MRI podría usarse si el dolor del talón no se alivia con los
métodos de tratamiento iniciales.

Tratamiento
Tratamiento no quirúrgico

Más del 90% de los pacientes con fascitis plantar mejorarán en un plazo de 10
meses de comenzar con métodos de tratamiento simples.

Reposo. Reducir o incluso suspender totalmente las actividades que empeoran el


dolor es el primer paso para reducir el dolor. Usted podría necesitar suspender
actividades atléticas en las que sus pies impactan sobre superficies duras (por
ejemplo, correr o step aerobics).

Hielo. Pasar sus pies sobre una botella de agua fría o hielo durante 20 minutos es
efectivo. Esto puede hacerse 3 a 4 veces por día.

Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos. Los medicamentos como el


ibuprofeno o el naproxeno reducen el dolor y la inflamación. El uso de
medicamentos durante más de un mes debe revisarse con su médico de atención
primaria.
Ejercicio. La fascitis plantar es agravada por músculos tensos en sus pies y
pantorrillas. El estiramiento de sus pantorrillas y fascia plantar es la manera más
efectiva de aliviar el dolor que provoca esta condición.

 Estiramiento de la pantorrilla
Apóyese hacia adelante contra una pared con una rodilla recta y el talón en el
suelo. Coloque la otra pierna por delante, con su rodilla flexionada. Para
estirar los músculos de la pantorrilla y el ligamento del talón (talón de
Aquiles), empuje sus caderas hacia la pared de una manera controlada.
Mantenga la posición durante 10 segundos y relájese. Repita este ejercicio 20
veces para cada pie. Debería sentir un tirón fuerte en la pantorrilla durante el
estiramiento.
 Estiramiento de la fascia plantar
Este estiramiento se realiza sentado. Cruce su pie afectado sobre la rodilla de
su otra pierna. Tome con sus manos los dedos de su pie adolorido y
lentamente llévelos hacia usted de manera controlada. Si le es difícil llegar al
pie, envuelva una toalla alrededor del dedo gordo de su pie para ayudar a
tirar los dedos de su pie hacia usted. Coloque su otra mano en la línea de la
fascia plantar. La fascia debería sentirse como una banda tensa longitudinal
en la base de su pie cuando se estira. Mantenga el estiramiento durante 10
segundos. Repita 20 veces para cada pie. Este ejercicio se realiza mejor en la
mañana antes de ponerse de pie o de caminar.
Inyecciones de cortisona. La cortisona, un tipo de esteroide, es un medicamento
antiinflamatorio potente. Puede inyectarse en la fascia plantar para reducir la
inflamación y el dolor. Su médico puede limitar sus inyecciones. Múltiples
inyecciones de esteroides pueden causar que la fascia plantar se rompa (se
desgarre), lo que puede llevar a pie plano y dolor crónico.

Zapatos de sostén y elementos ortopédicos. Los zapatos con suelas gruesas y


almohadillado adicional pueden reducir el dolor cuando la persona está de pie y
camina. Cuando usted da pasos y el talón golpea contra el suelo, hay una cantidad
significativa de presión en la fascia, lo que causa microtraumatismos (desgarros
diminutos en el tejido). Un zapato almohadillado o una plantilla reduce esta
tensión y el microtraumatismo que ocurre con cada paso. Las almohadillas para
talón de silicona suave no son caras y trabajan elevando y almohadillando el talón.
También son útiles los elementos ortopédicos (plantillas para zapatos) disponibles
comercialmente o hechos a medida.

Las almohadillas suaves para el talón pueden proveer soporte adicional.


Férulas para la noche. La mayoría de las personas duermen con las puntas de sus
pies hacia abajo. Esto relaja la fascia plantar y es una de las razones de dolor del
talón en la mañana. Una férula para la noche estira la fascia plantar mientras usted
duerme. Aunque puede ser difícil dormir con una férula, esta es muy efectiva y no
hay que usarla después que desaparece el dolor.

Terapia física. Su médico podría sugerir que usted trabaje con un terapeuta físico
en un programa de ejercicios que se concentre en el estiramiento de los músculos
de su pantorrilla y la fascia plantar. Además de ejercicios como los mencionados
arriba, un programa de terapia física podría incluir tratamientos especializados con
hielo, masajes y medicamentos para reducir la inflamación alrededor de la fascia
plantar.

Terapia extracorpórea de impulsos eléctricos (ESWT). Durante este procedimiento,


impulsos eléctricos de alta energía estimulan el proceso de cicatrización en el tejido
dañado de la fascia plantar. La ESWT no ha presentado resultados coherentes y,
por lo tanto, no se realiza comúnmente.

La ESWT no es invasiva (no requiere una incisión quirúrgica). Dado el riesgo


mínimo involucrado, a veces se prueba la ESWT antes de considerar la cirugía.

Tratamiento quirúrgico

La cirugía solo se considera después de 12 meses de tratamiento no quirúrgico


agresivo.

Recesión de los gemelos (gastrocnemio). Este es un alargamiento de los músculos


de la pantorrilla (gemelos o músculo gastrocnemio). Debido a que los músculos
rígidos de la pantorrilla imponen mayor presión en la fascia plantar, este
procedimiento es útil para pacientes que siguen teniendo dificultad para flexionar
sus pies, a pesar de un año de estiramientos de pantorrilla.

En la recesión de los gemelos, uno de los dos músculos que forman la pantorrilla es
alargado para aumentar el movimiento del tobillo. El procedimiento puede
realizarse con una incisión abierta tradicional, o con una incisión más pequeña y un
endoscopio, un instrumento que contiene una cámara pequeña. Su médico
discutirá el procedimiento que se adecue mejor a sus necesidades.

Las tasas de complicación para la recesión de los gemelos son bajas, pero pueden
incluir daños de los nervios.

Liberación de la fascia plantar. Si usted tiene un rango normal de movimiento del


tobillo y dolor continuado en el talón, su médico podría recomendar un
procedimiento de liberación parcial. Durante la cirugía, el ligamento de la fascia
plantar se corta parcialmente para aliviar la tensión en el tejido. Si usted tiene un
espolón óseo grande, este también será removido. Aunque la cirugía puede
realizarse endoscópicamente, es más difícil que con una incisión abierta. Además,
la endoscopia tiene mayor riesgo de dañar los nervios.

Complicaciones. Las complicaciones más comunes de la cirugía de liberación


incluyen alivio incompleto del dolor y daño de los nervios.

Recuperación. La mayoría de los pacientes tienen buenos resultados de la cirugía.


Sin embargo, debido a que la cirugía puede resultar en dolor crónico e
insatisfacción, solo se recomienda después que se hayan agotado todas las medidas
no quirúrgicas
PÁGINA WEB: DAVILA.CL

Fascitis plantar: Causas, síntomas y


tratamiento
La fascitis plantar es la causa más frecuente de molestias en el talón o talagia. La fascia plantar
es una estructura cartilaginosa que amortigua la tensión que se genera en el pie al caminar. Si
no es tratada oportunamente tiende a hacerse crónica.

La fascitis plantar es la inflamación de este tejido y corresponde a una de las causas más
comunes de dolor de talón o talalgia.

Causas de la fascitis plantar

En muchos casos la causa de la fascitis plantar no es clara, aunque suele producirse debido a
que se genera demasiada tensión en esa zona. Si la fascia se tensiona demasiado puede
producir pequeños desgarros en los tejidos que se inflaman y generan dolor.

Algunos factores de riesgo para contraer fascitis plantar son:

 Ejercicios que producen mucho estrés en el talón como correr largas distancias, saltar,
el ballet o movimientos aeróbicos.
 Estar mucho tiempo de pie. Personas que realizan trabajos que requieren largas horas
de estar parados son más propensos a sufrir esta afección.
 Forma anormal del pie. Tanto el pie plano como un arco plantar alto pueden producirla.
 Mala postura y un zapato que no logre amortiguar y distribuir bien el peso en los pies.
 Sobrepeso y sedentarismo.

Trotadores y pacientes con sobrepeso: más propensos a padecer fascitis


plantar

La fascitis plantar suele darse en personas que comienzan a correr. Generalmente no se trata
de corredores profesionales, sino de personas que empiezan una rutina de trote y que
rápidamente empiezan a aumentar la intensidad lo que produce una mayor exigencia en la
fascia plantar.

Aquellas personas que tienen sobrepeso o algún grado de obesidad y que no acostumbran a
hacer actividad física, suelen sufrir esta dolencia debido a que poseen tejido poco flexible que
no está acostumbrado a realizar tanto esfuerzo.

Síntomas de la fascitis plantar

La fascitis plantar produce un dolor punzante en el talón, aunque este dolor también puede
presentarse en la planta del pie, incluso en la parte interna del tobillo.

Generalmente el dolor se presenta en las mañanas cuando el paciente se levanta y suele


disminuir con el correr de las horas. Sin embargo, en personas que realizan actividades que
requieren largos períodos de estar parados, el dolor puede aparecer intermitentemente durante
todo el día.

La duración de esta afección es variable: puede presentarse durante unas horas y no todos los
días, pero hay pacientes que pueden estar hasta ocho meses con dolor, por eso lo más
importante es recurrir a un especialista si la molestia es continua en el tiempo.

Complicaciones de la fascitis plantar

Si el dolor es persistente y no es tratado a tiempo, la fascitis plantar puede volverse crónica


inhabilitando a quien la sufre de realizar actividades con normalidad.

Personas que cambian su forma de caminar para evitar el dolor que produce la fascitis plantar
pueden gatillar problemas en sus rodillas, caderas y columna.

Tratamiento de la fascitis plantar

A pesar de lo que muchos pacientes creen la fascitis plantar no requiere cirugía. “No es una
patología de manejo quirúrgico. Muchos pacientes que consultan piensan que tienen que
operarse, sin embargo, se recupera con kinesiología y órtesis (plantillas), de manera de elongar,
estirar este ligamento que está lesionado”, afirma el traumatólogo especialista en pie y
tobillo, Pablo Besser.

La fisioterapia, los masajes y el uso de hielo en la parte adolorida también está recomendado
para quienes sufren esta dolencia.

Fascitis plantar y espolón calcáneo

Tanto la fascitis plantar y el espolón calcáneo son patologías de los pies relacionadas con las
talalgias (dolores en el talón).

Muchos pacientes suelen creer que el dolor de talón es resultado del espolón calcáneo que es
una calcificación en el hueso del talón. Sin embargo, se ha demostrado que en muchos casos
el espolón calcáneo se presenta como una callosidad normal debido a los años y no se relaciona
con la fascitis plantar.
PÁGINA WEB: NHS.UK

https://www.nhs.uk/conditions/plantar-fasciitis/

Plantar fasciitis is where you have pain on the bottom of your foot, around your heel
and arch. You can usually ease the pain yourself, but see a GP if the pain does not
improve within 2 weeks.

Check if you have plantar fasciitis


The main symptom of plantar fasciitis is pain on the bottom of your foot, around your heel
and arch.
It's more likely to be plantar fasciitis if:

 the pain is much worse when you start walking after sleeping or resting
 the pain feels better during exercise, but returns after resting
 it's difficult to raise your toes off the floor
How to ease plantar fasciitis yourself
If you see a GP, they'll usually suggest you try these things:
Do

 rest and raise your foot on a stool when you can


 put an ice pack (or bag of frozen peas) in a towel on the painful area for up to 20
minutes every 2 to 3 hours
 wear wide comfortable shoes with a low heel and soft sole
 use soft insoles or heel pads in your shoes
 regular gentle stretching exercises
 exercises that do not put pressure on your feet, such as swimming
 take paracetamol
Don't

 do not take ibuprofen for the first 48 hours


 do not walk or stand for long periods
 do not wear high heels or tight pointy shoes
 do not wear flip-flops or backless slippers
 try not to walk barefoot on hard surfaces
You can ask a pharmacist about:

 the best painkiller to take


 insoles and pads for your shoes
 if you need to see a GP
Find a pharmacy
Non-urgent advice:See a GP if:

 the pain is severe or stopping you doing normal activities


 the pain is getting worse or keeps coming back
 the pain has not improved after treating it yourself for 2 weeks
 you have any tingling or loss of feeling in your foot
 you have diabetes – foot problems can be more serious if you have diabetes
What we mean by severe pain

Treatment for plantar fasciitis from a foot specialist


A GP might refer you to a physiotherapist for exercises or to see a foot specialist
(podiatrist), who can recommend things like insoles and the right shoes to wear.
Physiotherapy and podiatry may not be available for free on the NHS everywhere and
waiting times can be long.

You can also pay to see a podiatrist or physiotherapist privately.

Find a registered podiatrist


Find a registered physiotherapist
Common causes of plantar fasciitis
Plantar fasciitis is caused by straining the part of your foot that connects your heel bone to
your toes (plantar fascia).

It's not always clear why this happens.

You may be more likely to get plantar fasciitis if you:

 recently started exercising on hard surfaces


 exercise with a tight calf or heel
 overstretch the sole of your foot during exercise
 recently started doing a lot more walking, running or standing up
 wear shoes with poor cushioning or support
 are very overweight
PÁGINA WEB: HEALTHLINKBC.CA

https://www.healthlinkbc.ca/health-topics/hw114458

Topic Overview

What is plantar fasciitis?


Plantar fasciitis (say "PLAN-ter fash-ee-EYE-tus") is the most common cause of heel pain. The plantar
fascia is the flat band of tissue (ligament) that connects your heel bone to your toes. It supports the
arch of your foot. If you strain your plantar fascia, it gets weak, swollen, and irritated (inflamed). Then
your heel or the bottom of your foot hurts when you stand or walk.
Plantar fasciitis is common in middle-aged people. It also occurs in younger people who are on their
feet a lot, like athletes or soldiers. It can happen in one foot or both feet.

What causes plantar fasciitis?


Plantar fasciitis is caused by straining the ligament that supports your arch. Repeated strain can cause
tiny tears in the ligament. These can lead to pain and swelling. This is more likely to happen if:

 Your feet roll inward too much when you walk (excessive pronation).
 You have high arches or flat feet.
 You walk, stand, or run for long periods of time, especially on hard surfaces.
 You are overweight.
 You wear shoes that don't fit well or are worn out.
 You have tight Achilles tendons or calf muscles.

What are the symptoms?


Most people with plantar fasciitis have pain when they take their first steps after they get out of bed or
sit for a long time. You may have less stiffness and pain after you take a few steps. But your foot may
hurt more as the day goes on. It may hurt the most when you climb stairs or after you stand for a long
time.

If you have foot pain at night, you may have a different problem, such as arthritis, or a nerve problem
such as tarsal tunnel syndrome.
How is plantar fasciitis diagnosed?
Your doctor will check your feet and watch you stand and walk. He or she will also ask questions about:

 Your past health, including what illnesses or injuries you have had.
 Your symptoms, such as where the pain is and what time of day your foot hurts most.
 How active you are and what types of physical activity you do.
Your doctor may take an X-ray of your foot if he or she suspects a problem with the bones of your foot,
such as a stress fracture.

How is it treated?
No single treatment works best for everyone with plantar fasciitis. But there are many things you can
try to help your foot get better:

 Give your feet a rest. Cut back on activities that make your foot hurt. Try not to walk or run on
hard surfaces.
 To reduce pain and swelling, try putting ice on your heel. Or take an over-the-counter pain
reliever like ibuprofen (such as Advil or Motrin) or naproxen (such as Aleve).
 Do toe stretches, calf stretches and towel stretches several times a day, especially when you
first get up in the morning. (For towel stretches, you pull on both ends of a rolled towel that you
place under the ball of your foot.)
 Get a new pair of shoes. Pick shoes with good arch support and a cushioned sole. Or try heel
cups or shoe inserts (orthotics). Use them in both shoes, even if only one foot hurts.
If these treatments do not help, your doctor may recommend splints that you wear at night, shots of
medicine (such as a steroid) in your heel, or other treatments. You probably will not need surgery.
Doctors only suggest it for people who still have pain after trying other treatments for 6 to 12 months.

How long will it take for the pain to go away?


Plantar fasciitis most often occurs because of injuries that have happened over time. With treatment,
you will have less pain within a few weeks. But it may take time for the pain to go away completely. It
may take a few months to a year.

Stay with your treatment. If you don't, you may have constant pain when you stand or walk. The
sooner you start treatment, the sooner your feet will stop hurting.
PÁGINA WEB: HEALTHLINE.COM

https://www.healthline.com/health/plantar-fasciitis

What is plantar fasciitis?


Plantar fasciitis causes pain in the bottom of the heel. The plantar fascia
is a thick, weblike ligament that connects your heel to the front of your
foot. It acts as a shock absorber and supports the arch of your foot,
helping you walk.

Plantar fasciitis is one of the most common orthopedic complaints. Your


plantar fascia ligaments experience a lot of wear and tear in your daily
life. Too much pressure on your feet can damage or tear the ligaments.
The plantar fascia becomes inflamed, and the inflammation causes heel
pain and stiffness.

The cause of plantar fasciitis discomfort is still unclear. A 2003


study suggested that the condition may involve degenerationTrusted
Source rather than inflammation of the plantar fascia. Because fasciitis
means “inflammation of a fascia,” a better name may be plantar fasciosis.

Plantar fasciitis symptoms


The major complaint of those with plantar fasciitis is pain at the bottom of
the heel or sometimes at the bottom mid-foot area. It usually affects just
one foot, but it can affect both feet.

Pain from plantar fasciitis develops gradually over time. The pain can be
dull or sharp. Some people feel a burning or ache on the bottom of the
foot extending outward from the heel.
The pain is usually worse in the morning when you take your first steps
out of bed, or if you’ve been sitting or lying down for a while. Climbing
stairs can be very difficult due to heel stiffness.

After prolonged activity, the pain can flare up due to increased irritation or
inflammation. People with plantar fasciitis don’t usually feel pain during
the activity, but rather just after stopping.

Causes of plantar fasciitis


Active men and women between the ages of 40 and 70 are at the highest
risk for developing plantar fasciitis. It’s also slightly more common in
women than men. Women who are pregnant often experience bouts of
plantar fasciitis, particularly during late pregnancy.

You’re at a greater risk of developing plantar fasciitis if you’re overweight


or obese. This is due to the increased pressure on your plantar fascia
ligaments, especially if you have sudden weight gain.

If you’re a long-distance runner, you may be more likely to develop


plantar fascia problems. You’re also at risk if you have a very active job
that involves being on your feet often, such as working in a factory or
being a restaurant server.

If you have structural foot problems, such as very high arches or very flat
feet, you may develop plantar fasciitis. Tight Achilles tendons, which are
the tendons attaching your calf muscles to your heels, may also result in
plantar fascia pain. Simply wearing shoes with soft soles and poor arch
support can also result in plantar fasciitis.
Plantar fasciitis isn’t typically the result of heel spurs. Doctors used to
believe that heel spurs caused pain in people with plantar fasciitis, but
this isn’t the case.

Plantar fasciitis testing and


diagnosis
Your doctor will perform a physical exam to check for tenderness in your
foot and the exact location of the pain. This is to make sure that the pain
isn’t the result of a different foot problem.

During the evaluation, they may ask you to flex your foot while they push
on the plantar fascia to see if the pain gets worse as you flex and better
as you point your toe. They’ll also note if you have mild redness or
swelling.

Your doctor will evaluate the strength of your muscles and the health of
your nerves by checking your:

 reflexes
 muscle tone
 sense of touch and sight
 coordination
 balance

An X-ray or an MRI scan may be necessary to check that nothing else is


causing your heel pain, such as a bone fracture.
Plantar fasciitis treatment
Home treatments like rest, icing, and using braces and anti-inflammatory
drugs are often the first ways to treat plantar fasciitis. If those don’t ease
the pain, an injection of a corticosteroid directly into the damaged section
of the ligament can help. Your doctor can do this in their office.

Your doctor may use an ultrasound device to help determine the best
place for the injection. They can also apply corticosteroids to the skin of
your heel or the arch of your foot, and then apply a painless electrical
current to let the steroid pass through your skin and into the muscle.

Physical therapy is a key part of treatment for plantar fasciitis. It can help
stretch your plantar fascia and Achilles tendons. A physical therapist can
show you exercises to strengthen your lower leg muscles, helping to
stabilize your walk and lessen the workload on your plantar fascia.

If pain continues and other methods aren’t working, your doctor may
recommend extracorporeal shock wave therapy. In this therapy, sound
waves bombard your heel to stimulate healing within the ligament. Side
effects of this treatment can include:

 bruises
 swelling
 pain
 numbness

Extracorporeal shock wave therapy hasn’t been proven to be consistently


effective in relieving symptoms. If home and medical treatments don’t
take care of your plantar fasciitis, the next option to consider is surgery.
Plantar fasciitis surgery
Surgery is the most dramatic therapy. This is done only in cases in which
pain is severe or lasts more than 6 to 12 months.

In a plantar fascia release, your surgeon partially detaches the plantar


fascia from the heel bone. This reduces tension, but weakens the arch of
the foot, and full function may be lost.

If you have a hard time flexing your feet even after consistent stretching,
your doctor may recommend gastrocnemius recession. This surgery
involves lengthening the calf muscle to increase ankle motion and release
stress on the plantar fascia.

Surgery can result in chronic pain and nerve damage, so it should be


considered only after trying other treatment options.

Plantar fasciitis exercises


Gentle stretches can help relieve and even prevent plantar fasciitis.
Stretching your calves and the plantar fascia itself helps loosen your
muscles and reduce heel pain.

It’s important to take time off from certain exercises, like running, to give
the plantar fascia time to heal. Swimming and other low-impact activities
can let you exercise without worsening your heel pain. When you start
running again, be sure to begin slowly.

Stop and stretch while exercising to keep the pain from returning.
Remember to stretch before beginning your workouts, too.
Stretches for plantar fasciitis are easy to do. You’ll only need a few
common props, like a chair and a foam roller or even just a frozen water
bottle. Learn the right stretches to help heal and prevent plantar fasciitis.

Home remedies for plantar


fasciitis
Reducing pain and irritation or inflammation in the plantar fascia ligament
is an important part of treatment, but this doesn’t address the underlying
damage to the ligament.

Home treatments

Initial home treatment includes staying off your feet and applying ice for
15 to 20 minutes, three or four times per day to reduce swelling.

You can also try reducing or changing your exercise activities. Using arch
supports in your shoes, replacing worn-out athletic footwear, and doing
stretching exercises may also help to relieve pain.

Nonsteroidal anti-inflammatory drugs (NSAIDs), such as ibuprofen (Motrin


or Advil) and naproxen (Aleve), may soothe pain in the ligament.

Braces and supports

Night splints are another treatment that can help stretch your calf and the
arch of your foot. Night splints are a type of brace that holds your foot in a
flexed position and lengthens the plantar fascia and Achilles tendon
overnight. This can prevent morning pain and stiffness.
Buy a night splint here.

Special orthotics, or arch supports, for your shoes may help alleviate
some of the pain by distributing pressure, and they can prevent further
damage to the plantar fascia.

A boot cast may immobilize your foot and reduce strain while the plantar
fascia heals. You can remove the boot cast, which looks like a ski boot,
for bathing.

Find arch supports or a boot cast.

Carefully following recommendations for home treatment is often enough


to heal plantar fasciitis without help from your doctor. Find out more tips
for caring for plantar fasciitis at home.

Essential oils for plantar


fasciitis
There’s little research on treating plantar fasciitis with essential oils. Still,
some studies suggest that using essential oils may reduce pain and
inflammation for certain conditions. These oils include:

 lavender essential oil


 lemongrass essential oil
 eucalyptus oil
 rose essential oil
Make sure to dilute your essential oil with a carrier oil, like coconut oil,
before using it for massage. You can also inhale the steam from the
essential oil mixed with hot water.

Since it’s unclear whether plantar fasciitis involves irritation or


inflammation, using these essential oils may not be much help. However,
if you use the essential oils correctly, there’s generally no harm in trying
them to seeing if you get a result.

Plantar fasciitis prevention


Making a few lifestyle changes may help you avoid plantar fasciitis.

Wear supportive shoes with good arch support, and replace your athletic
footwear regularly. If you’re a runner, around 400 to 500 miles is the limit
for each pair of shoes before you should buy new ones.

Incorporate low-impact exercises into your routine, like swimming or


bicycling. Avoid overworking your plantar fascia with very frequent
running. Before exercising, be sure to stretch your calves, Achilles
tendon, and plantar fascia.

Do your best to stay at a healthy weight. If you’re overweight, try to lose


weight to reduce pressure on your plantar fascia.

Recovering from plantar


fasciitis
For most people, plantar fasciitis improves within a few months of home
treatments. These include resting, icing, and stretching.
You can also help your plantar fascia recover by stabilizing your foot with
tape. This limits the amount that the ligament can move. A 2015
reviewTrusted Source of several studies suggested that taping your foot
also offers temporary pain relief.

You can use zinc oxide tape or kinesiology tape. It may take some
practice, but you can tape your foot yourself and aid the recovery
process. Learn how to tape your foot to help relieve plantar fasciitis.

Plantar fasciitis vs. heel spurs


A heel spur is a hook of bone that can form on the heel bone,
or calcaneus, of the foot. Like plantar fasciitis, it can develop from long-
term stress on your feet. An orthopedic surgeon or a podiatrist can
diagnose a heel spur with an X-ray.

People often assume that foot pain is caused by a heel spur, but this
usually isn’t true. Heel spurs often cause no symptoms.

According to the American Association of Orthopaedic Surgeons (AAOS),


1 in 10 people has a heel spur, but only 1 in 20 people with heel spurs
experiences pain.

Conversely, the Cleveland Clinic reports that 50 percent of people who


have heel spurs feel pain because of the heel spur.

Heel spurs share similar causes with plantar fasciitis. Some of these
include:

 unsupportive or worn-out shoes


 being overweight
 arthritis
 walking with an incorrect or unnatural gait

Having plantar fasciitis also increases your likelihood of forming heel


spurs. Although heel spurs won’t heal without surgery, they typically don’t
cause any pain or other symptoms. As a result, surgery usually isn’t
needed.

You can treat heel spurs close to the same way you would treat plantar
fasciitis. Rest and use ice, pain medications, and shoe inserts to reduce
any symptoms. Learn more about treating heel spurs at home.

Plantar fasciitis in children


Children, like adults, may develop plantar fasciitis from overuse of the
ligament or from wearing old or unsupportive shoes. Because the
condition can worsen over time, it’s important to see a doctor to properly
diagnose and treat it.

Ice your child’s heel to reduce any irritation or inflammation. Massaging


the area can also help it heal. Make sure your child rests and avoids
running, jumping, and standing for long periods to help their foot heal.

When your child returns to their normal activities, remind them to do


warmup exercises and stretches to keep the problem from returning. You
should also check that they’re wearing properly fitting, supportive shoes.

Your child’s heel pain could also be another condition, like Achilles
tendinitis or a fracture. Find out more about heel pain in kids.
Plantar fasciitis diet
More research is needed on using nutrition to improve or prevent plantar
fasciitis. However, taking these supplements may help with tissue repair
and healing:

 vitamin C
 zinc
 glucosamine
 bromelain
 fish oil

It’s better to get nutrients from eating a balanced diet than from
supplements. If you do decide to take supplements, always check with
your doctor first.

If weight gain caused your plantar fasciitis, eating a healthy diet can help
you lose weight and relieve your heel pain. Here are 20 foods that can
help you lose weight.

Plantar fasciitis complications


You can develop chronic heel pain if you ignore the condition. This can
change the way you walk and cause injury to your:

 legs
 knees
 hips
 back
Steroid injections and some other treatments can weaken the plantar
fascia ligament and cause potential rupture of the ligament.

Surgery carries the risks of bleeding, infection, and reactions


to anesthesia. Plantar fascia detachment can also cause changes in your
foot and nerve damage. Gastrocnemius recession surgery can also cause
nerve damage.

Outlook
Most people don’t need surgery to relieve pain from plantar fasciitis.
Instead, their condition improves through physical therapy, home
treatments, and medical treatments. However, treatment can take several
months to 2 years to improve your symptoms.
PÁGINA WEB:

Вам также может понравиться