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La historia del avivamiento demuestra una cosa: con mucha frecuencia el Señor vino
de esa manera, en una hora muy oscura e improbable, a un pueblo remanente que
casi había perdido la esperanza. Este ha sido el plan de rescate del Señor más a
menudo utilizado.
Así que por favor entiende esto. Muchas veces el verdadero pueblo de Dios pensó
que ya había pasado el día del avivamiento. Muchas veces el Señor ha superado a su
pueblo. Muchas veces el Señor ha destrozado y destruido completamente a los
enemigos del Evangelio en un momento en que parecía que todo estaba perdido.
A la luz de esto, debemos tener el cuidado de volver a las Escrituras para encontrar
lo que se revela del corazón, la mente y el propósito de Dios con respecto al
avivamiento. El Señor bien puede venir y hacer en la Iglesia muy pronto grandes y
poderosas obras que nunca hemos conocido o experimentado, y que la mayoría no
ha buscado ni esperado.
Jer. 33:3: "Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que
tú no conoces.".
Isa. 64:3, "Cuando, haciendo cosas terribles cuales nunca esperábamos, descendiste,
fluyeron los montes delante de ti.".
Todos sabemos bien que Joel profetizó acerca de una gran efusión que comenzó en
Jerusalén el día de Pentecostés. La plenitud de esta efusión profetizada en Joel es que
"derramaré mi espíritu sobre toda carne"; eso significa que será internacional en tocar
a cada grupo de personas. Eso nunca sucedió en su totalidad en Pentecostés.
Esta palabra "último" es la palabra eschatos que significa: más lejano, final, fin de,
último, último fin o extremo (Jn.6:39-40, 44, 54, 11:24; 12:48; Hechos 2:17; II Tim.3:1;
Heb.1:2; Jm.5: 3; I Pet.1: 5, 20; II Pet.3:3; I Jn.2:18; Judas 1:18). El avivamiento debe ser
una parte vital de la escatología (la enseñanza teológica de lo que sucede durante los
últimos días). La Biblia claramente predice que estos derrames nunca terminarán
mientras haya una Iglesia en la tierra. El avivamiento es una palabra de la Iglesia. En
otras palabras, nunca se puede pensar en el término avivamiento aparte de la Iglesia
y nunca se debe pensar en la Iglesia sin el potencial del avivamiento. Nunca ha
habido un avivamiento en la historia sin que llegue a una porción de la Iglesia de
Dios.
Hasta el rapto de la Iglesia habrá tales avivamientos. Tanto Joel como Pedro declaran
tres incidentes claros del "último día" que ponen fin a ese período de efusiones
comúnmente llamado avivamientos como el que se ve en el Libro de los Hechos y que
hemos experimentado a lo largo de la Historia de la Iglesia.
1. “... maravillas en el cielo arriba, y señales en la tierra debajo; sangre, fuego y vapor
de humo:
3. "... antes de que ese gran y notable día del Señor venga:" Cuando Cristo se para
sobre el monte de los Olivos y viene en juicio sobre las naciones.
Hasta que estos tres incidentes sucedan, no podemos decir que el día de los
avivamientos nos haya pasado. Pedro recibió su doctrina del avivamiento de las
Escrituras del Antiguo Testamento. Para él, el avivamiento era un tema bíblico
sólido; no es un sentimiento, impresión o incluso una experiencia. El argumento más
fuerte para un avivamiento futuro son las Sagradas Escrituras. La convicción y la
creencia de Pedro con respecto a los futuros derrames del Espíritu, fueron fundadas,
fundamentadas, protegidas y sostenidas en la fe, por la Palabra de Dios.
"... cuando vendrán tiempos de refrigerio de la presencia del Señor;" Esta palabra
"refrescante" significa recuperación del aliento o avivamiento. Pedro dice que habrá
"tiempos" de avivamiento. Esta palabra "tiempos" significa períodos de tiempo
establecidos. Entonces él está diciendo que habrá "ciertos períodos establecidos y
estaciones de avivamiento".
También dice que habrá "tiempos de restitución de todas las cosas, que Dios ha
hablado por boca de todos sus santos profetas desde que comenzó el mundo". Este
término restitución significa restauración; para restaurar de nuevo al orden. Entonces
habrá continuos "tiempos" de avivamiento y tiempos de "restauración" de las cosas
de las que hablaron los profetas del AT y estos continuarán "hasta que" el Padre
"envíe a Jesucristo".
También es claro a partir de esto que estos "tiempos" no son continuos sin descanso.
Entre estos "tiempos" habrá apostasías, tiempos oscuros y tiempos en que el pueblo
del Señor se deprime. Sin embargo, a espaldas de tales tiempos, el Señor revivirá y
restaurará hasta que Cristo regrese. Nadie puede decir bíblicamente que no habrá
avivamientos o restauraciones futuras o posteriores de la Iglesia, a un estado
glorioso, sin apartarse de la Palabra profética de Dios y de las promesas de las
Escrituras.
Hace unos 15 años prediqué un mensaje llamado Los Peros del Avivamiento. Esto fue
en respuesta a escuchar a un número de creyentes muy genuinos que citaban
escrituras para mostrar que antes de que Jesús regresara, sería extremadamente
oscuro en el mundo, sin una cosecha general de almas y sin signos de avivamiento
en la Iglesia. Un día tomé estas diversas Escrituras y las presenté ante el Señor en
oración y estudio. Sorprendentemente, encontré un "Pero" adjunto a cada profecía
oscura y sombría. Cuando ves la oscuridad de los últimos días, es imposible pensar
que la Iglesia sobrevivirá sin un avivamiento espiritual genuino que los haga
valientes. El Señor siempre está enviando avivamiento a su Iglesia en los momentos
más oscuros. Aquí hay una muestra y un resumen de lo que prediqué en ese mensaje
y de cómo será la iglesia del último día.
Mateo 24:13-14, " Pero el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Y este evangelio
del reino será predicado en todo el mundo para dar testimonio a todas las naciones;
y entonces vendrá el fin." También profetizó que, en medio de un momento tan
difícil, habría un pueblo que aguantaría y aguantaría hasta el final. Pero esta gente
perseverante no solo espera poder pasar los días oscuros hasta el final o escapar en
el rapto. Esta gente perseverante está predicando. Están predicando un mensaje puro
del Evangelio en cada nación para ser un "testigo". ¿Qué es un testigo? El único
ejemplo que tenemos es el ejemplo de la Iglesia primitiva en el Libro de los Hechos.
Cuando el Espíritu Santo vino sobre ellos, se convirtieron en un "testigo" como se
muestra en Hechos y salieron a predicar a cada criatura en cada nación. Esto se verá
nuevamente al final de los tiempos.
2º Pero de Avivamiento
Este capítulo es de hecho una oscura profecía sobre el estado de cosas antes del
regreso de Cristo a la tierra. II Tes. 2:11-12: "Y por esta razón, Dios les enviará una
falsa ilusión, para que crean en una mentira: para que todos sean condenados si no
creyeron la verdad, pero se complacieron en la injusticia". Este engaño barrerá
nuestro mundo al final, justo antes de que Cristo regrese. Solo aquellos que creen y
aman la Palabra de Dios serán protegidos y preservados en este terrible "engaño".
Strong explica que esta palabra significa "alejarse de la ortodoxia o la piedad". Young
dice que es "un desvío mental para mantener la opinión equivocada". El engaño es
ser movido y alejado de la sana doctrina de Cristo.
II Tes.13, 15, " Pero estamos obligados a dar siempre gracias a Dios por ustedes,
hermanos amados del Señor, porque Dios desde el principio los ha escogido para
salvación por medio de la santificación del Espíritu y la creencia de la verdad ... Por
lo tanto, hermanos, permanezcan firmes y mantengan las tradiciones que les han
enseñado, ya sea por palabra o por nuestra epístola ". Este "Pero" se da a la luz de tan
terribles desviaciones de la verdad. Pero habrá una verdadera Iglesia en la tierra:
elegida, salvada, creyendo en la verdad, santificada y firme. Mientras muchos se
alejan de la verdad, muchos se mantienen firmes y aún aman y creen el Evangelio
que los apóstoles predicaron y nos transmitieron en las Escrituras.
3 ° Pero de Avivamiento
II Tim.3:12, "Sí, y todo lo que vivirá piadosamente en Cristo Jesús sufrirá persecución.
Pero los hombres malvados y los seductores irán de mal en peor, engañando y siendo
engañados". Mientras que los santos sufren, los pecadores empeoran. Muchos
perciben que los engañadores y el engaño empeorarán mucho en los últimos días y
eso es cierto. Los hombres que usarán artes seductoras para engañar y sacar a los
hombres de la verdad bíblica avanzarán y avanzarán en esta causa, profundizando
en el engaño.
A la luz de esto, Pablo instruye al joven Timoteo en II Tim.3:14-15-16: " Pero continúa
en las cosas que has aprendido y de las que te has asegurado, sabiendo de quién las
has aprendido; y eso de un Hijo, has conocido las Sagradas Escrituras, las cuales te
pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura
es inspirada por Dios, y es provechosa para la doctrina, para la reprensión, para la
corrección, para la instrucción en la justicia. ... " Pablo estaba seguro de que, aunque
tales hombres malvados crecieran en engaño, hombres como Timoteo permanecerían
fieles a las Escrituras que les habían traído la salvación en Cristo Jesús. Habrá un
pueblo que creció en su conocimiento de las Escrituras a lo largo de su caminar con
Dios y por este medio llegará a la madurez y la perfección.
Isa.60:2, "Porque, he aquí, las tinieblas cubrirán la tierra, y las tinieblas la gente ..." En
el capítulo 59 vemos la verdad caída en las calles y la iniquidad abundando. Aquí,
en este versículo, qué terrible y espesa oscuridad cubrió la tierra y la gente.
"... pero el SEÑOR se levantará sobre ti, y su gloria se verá sobre ti". Oscuridad en la
tierra, pero no en el pueblo de Dios. En tal hora, cuando la oscuridad cubra la tierra,
entonces en ese mismo momento el Señor se levantará sobre "ti" y Su gloria se verá
en "ti". Esto es en un momento de terrible oscuridad. El avivamiento es el Señor
mismo surgiendo sobre su pueblo.
Conclusión
Lucas 18:8: "Sin embargo, cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe en la
tierra?"
Esta escritura es bien conocida, bien citada y bien usada por aquellos que creen que
cuando el Señor venga, se encontrará con escasa fe salvadora en la tierra. Creen que
habrá muy pocos con verdadera fe en Cristo al final. Si esto es cierto, difícilmente
podemos esperar un avivamiento en estos días.
Si bien es cierto que Cristo siempre contrastó entre los "pocos" y los "muchos", esto
no es lo que significa esta Escritura. No se trata de salvación o fe salvadora. Entonces,
¿de qué está hablando o qué quiso decir Cristo?
En primer lugar, Cristo no está afirmando un hecho, sino haciendo una pregunta.
También el contexto de este versículo es sobre la oración. Los siete versos anteriores
son sobre la oración. En el versículo 1 dice: "Y les habló una parábola con este fin,
que los hombres siempre deben orar, y no desmayarse ". Entonces, todo el punto de
la parábola que Él relata es acerca de orar y no desmayarse. La parábola es sobre la
viuda persistente que busca venganza del juez injusto. Fue solo por su oración
persistente que él le respondió.
Entonces Cristo dice: "¿Y Dios no se vengará de sus propios elegidos, que claman día
y noche a él, aunque él aguante con ellos? Les digo que los vengará rápidamente".
Que promesa ¡
Luego hace su pregunta: "Sin embargo, cuando venga el Hijo del hombre,
¿encontrará fe en la tierra?" Él pregunta: "Cuando regrese, encontrará este tipo de fe
". Una fe que se apodera de Dios y no la deja ir. Una fe en la oración que clama
venganza día y noche contra el enemigo. Una fe que no se desmayará en la oración.
¿La Iglesia de los últimos días se hundirá en la oscuridad y apenas se abrirá paso o
se levantará y orará? ¿Por qué el Señor nos hace semejante pregunta? Porque hay
mucho que quiere hacer en los últimos días. Hay oraciones que quiere responder.
Creo que una cosa que ha prometido en esta última hora es un último diluvio
genuino de lluvia tardía para traer una última cosecha de almas antes de que se
derrame su juicio sobre las naciones. Pero, ¿dónde están los santos que prevalecerán
contra la oscuridad, el desánimo y la apatía de esta hora para pedirla hasta que
llegue?
De lo que Joel habló fue de un período durante el cual el Espíritu Santo sería
derramado. Pedro decía que este es el comienzo. Estos derramamientos finalizarían
junto con lo que se llama "el día del Señor", que es el día del regreso del Señor. Joel
habla de este evento con frecuencia y es central en todo su mensaje profético (1:15; 2:
1-2, 11, 31; 3:14, 18). Es un día de ira y juicio para los pecadores, pero un día de
salvación y recompensa para los justos.
Es en el contexto de este día y antes de que él hable del derramamiento del Espíritu
que comenzaría a cumplirse en Pentecostés. Joel exhorta al pueblo de Dios al
arrepentimiento, la oración y el ayuno como el camino hacia estos derrames. Lo que
vemos en Pentecostés es una muestra del tipo, la forma y el poder del derramamiento
del Espíritu Santo que se otorgaría al pueblo de Dios a lo largo de la era de la iglesia.
Joel junto con muchos otros profetas del Antiguo Testamento hablaron de tales
derrames. En todo el AT, estos derrames se comparan con la llegada de la lluvia.
Cuando el Señor habla de su venida a su pueblo en avivamiento para que pueda
traerse una gran cosecha de almas, a menudo la tipifica con la lluvia anterior y
posterior (Deut.11: 14; Job 29:23; Prov.16: 15; Jer.3: 3; 5:24; Hos.6:3; Joel 2:23; Zac.10:
1; Jm.5: 7). Esto no puede afirmarse más claramente que Oseas: "... vendrá a nosotros
como la lluvia, como la lluvia tardía y anterior a la tierra".
Cuando los profetas del AT hablaron de que el Señor venía a ellos cuando llueve el
primero y el segundo, estaba lleno de significado. La Iglesia primitiva entiende
completamente el mismo significado de las mismas Escrituras. El tiempo de siembra
y la cosecha dependían de la lluvia. Tanto natural como espiritualmente, la siembra
de semillas y la cosecha de la cosecha necesitaban la lluvia.
Pero Joel parece decir algo extraño. Después de hablar de la primera lluvia, continúa
diciendo que el Señor hará que baje: "la lluvia anterior y la lluvia tardía en el primer
mes ". El primer mes fue Nisan, que es nuestro tiempo de marzo / abril. Esto es al
final del ciclo de lluvia en la víspera de la cosecha. Joel no solo dice que la lluvia
tardía vendrá después de la cosecha, sino que afirma que la lluvia tardía vendrá y
luego la 'lluvia anterior y la tardía' se darán juntas en este momento justo antes de la
cosecha. Joel ciertamente no estaba hablando del ciclo natural. Esta fue una promesa
espiritual. ¿Significa esto que el final de la era de la Iglesia recibirá no solo la lluvia
anterior sino también la lluvia tardía juntas en el mismo mes? ¿Esta profecía nos
muestra que veremos el avivamiento pentecostal del siglo I, así como la lluvia tardía
observada en los últimos siglos, que de repente se unen en un último avivamiento?
Antes del día del Señor, el día del regreso de Cristo, se nos promete lluvia tardía para
traer la última cosecha. Este avivamiento llega en un mes para traer una gran última
cosecha justo antes de que el juicio de Dios caiga sobre el mundo cuando derrame su
ira de una manera incomparable. ¿Le parecería extraño que envíe el mayor
avivamiento justo antes del mayor juicio que el mundo haya conocido?
"Tengan paciencia, hermanos, hasta la venida del Señor. He aquí, el labrador espera
el precioso fruto de la tierra, y tiene mucha paciencia hasta que reciba la lluvia
temprana y tardía “. Santiago 5:7
En la nota anterior declaramos que la lluvia anterior y posterior era una tipología
profética utilizada para significar los derramamientos del Espíritu Santo sobre la
Iglesia en la dispensación del Nuevo Testamento. Para que alguien no piense que
esta es una interpretación reciente incorrecta, veamos cómo se aplicó esto en las
Escrituras del Nuevo Testamento a través de la doctrina apostólica.
Santiago vivió después de Pentecostés en la última parte del primer siglo cuando
había signos de declinación en la iglesia. Santiago profetizó acerca de los días que
"vendrán" (v1) y de los "últimos días" (v3). Continuó hablando de esa parte de los
últimos días que procedió a "la venida del Señor" (v7). En este versículo simple, así
como en este capítulo, no solo expone la tipología, sino también la sana doctrina. Él
muestra que "la lluvia anterior y posterior" están conectadas a cuatro cosas, 1) los
últimos días, 2) la era de la Iglesia, 3) la cosecha espiritual, 4) y la Persona de Cristo
en su ministerio entronizado y su regreso a su Iglesia.
1) Los Últimos Días. Este es todavía el período del que Joel, Pedro y otros han
hablado como un tiempo en el que el Señor enviaría avivamientos. Todavía estamos
en esa era que comenzó en Pentecostés. La "lluvia del día anterior y posterior" está
particularmente relacionada con los "últimos días". Es parte de los últimos días. El
avivamiento ha sido profetizado para los últimos días. Después de Pentecostés,
Pedro ciertamente creía que "los tiempos de refrigerio" continuarían otorgándose "de
la presencia del Señor"; hasta que Cristo regrese (Hechos 3:19-21). Debemos creerlo,
buscarlo, esperarlo y orar por él.
3) La Cosecha Espiritual. Vemos que esta lluvia anterior y posterior trae el "fruto
precioso de la tierra". Sin la lluvia hay una cosecha espiritual que no se cosechará. El
resultado de la lluvia temprana y tardía otorgada a la Iglesia tiene el propósito de
producir una cosecha espiritual. Cada vez que llueve en el Libro de los Hechos,
muchas almas se salvan y se agregan a la iglesia. Desde la primera mención de la
"primera y última" lluvia en la Biblia se otorga con el propósito de permitir que el
pueblo de Dios se junte en la cosecha (Deut.11:14; Jer.5:24; Zac.10:1). En esta última
mención de la lluvia anterior y posterior en la Biblia, se refiere al fruto de la tierra:
no es fruto natural sino fruto espiritual. Es una última gran reunión de hombres y
mujeres en el reino, en salvación antes del fin.
4) Cristo. Estas efusiones estacionales del Espíritu Santo están vitalmente conectadas
con la persona de Cristo. La primera lluvia que cayó en Pentecostés fue el resultado
de que Cristo fue exaltado a la diestra del Padre (Hechos 2:32-33). En esa posición se
derramó el Espíritu como la lluvia anterior. El envío de la lluvia anterior y posterior
es parte de su ministerio entronizado. Mientras Él esté a la diestra del Padre, habrá
efusiones del Espíritu (Apoc. 5:6). Cada avivamiento es parte del ministerio continuo
de Cristo. Una vez más derramará el Espíritu sobre la Iglesia antes de venir.
Esta lluvia anterior y posterior está relacionada con su regreso. Esta lluvia tardía debe
venir en plenitud antes de que venga para la cosecha. Cuando Santiago dice "Sean
pacientes hermanos" con respecto al regreso de Cristo, él da la razón. Cristo tiene
"una larga paciencia" porque está esperando que llegue la plenitud de la cosecha.
Regresará por una Novia completa, una cosecha completa. Al final de las lluvias
estacionales y las lluvias que lo han traído completamente, Él vendrá por él. Y
entonces él exhorta "Sed también pacientes; estableced vuestros corazones: porque la
venida del Señor se acerca" (v8). No solo debemos ver la apostasía, la oscuridad y la
declinación como signos de que Cristo está por venir. Si realmente crees que Cristo
está por venir, entonces debes esperar un resurgimiento de tu vida espiritual y ver a
las almas salvadas.
"Pide a Jehová lluvia en el tiempo de la lluvia tardía "; (Zac.10:1). Amigos, es hora de
preguntar, orar, suplicar e interceder por esta lluvia tardía. Es la época de la lluvia
tardía. Es el fin de la era, el fin del tiempo de cosecha. Jesús está por venir. Debemos
discernir que es el momento de la lluvia o de la lluvia y, por lo tanto, en obediencia
a la Palabra de Dios "pedir". Si no recibimos lluvia ahora, toda una generación irá al
infierno, II Kigs.7:2, "Entonces un señor en cuya mano se inclinó el rey respondió al
hombre de Dios, y dijo: He aquí, si el Señor hiciera ventanas en el cielo, ¿podría ser
esto? Y él dijo: He aquí, tú míralo con tus ojos, pero no comerás de él ".
El día de año nuevo, un buen amigo ministró en estos capítulos que contienen este
versículo. Se relaciona con este tema del próximo avivamiento de la manera más vital
y personal.
En el capítulo 6 se nos dice que el Rey de Siria creó un gran ejército y asedió la ciudad
de Samaria. En el versículo 25 leemos: "Y hubo una gran hambruna en Samaria: y, he
aquí, la sitiaron, hasta que se vendió la cabeza de un asno por cuatro piezas de plata,
y la cuarta parte de una cabina de estiércol de paloma por cinco piezas de plata."
Un asno era un animal inmundo para el judío, pero las cosas son tan malas en esta
hambruna que no solo lo estaban comprando y comiendo, sino que se estaban
comiendo la cabeza. La cabeza era la parte más barata. Y como si eso no fuera lo
suficientemente malo, se vendía por el loco precio de 80 piezas de plata. El estiércol
de Dove se vendía por 5 piezas de plata. Cuando el cristianismo es asediado, en una
hambruna, sin signos de avivamiento, entonces el pueblo de Dios come cualquier
cosa a un precio muy alto. Cuando la paloma que trae y lidera el avivamiento se ha
ido, ¡su estiércol es muy costoso!
En este punto desastroso del asedio mientras el Rey caminaba por los muros
inspeccionando la escena de sus asediados, una mujer le gritó pidiendo ayuda. La
triste historia se desarrolla ante el Rey sobre dos madres con bebés que aceptan
cocinar y comer a sus hijos. La primera madre lo llevó a cabo, pero la segunda no.
Ella escondió a su hijo (v26-29). Cuando no hay avivamiento para el pueblo de Dios,
esta es la tragedia que tiene lugar. ¿No te ha asqueado el estómago por lo que has
visto en las llamadas iglesias entre los creyentes? ¿Por qué es eso? Es porque hay una
hambruna, no ha llovido, el enemigo se ha exaltado al asediar la iglesia.
Cuando el Rey escuchó esto, se sintió tan asqueado que alquiló sus vestimentas reales
y siguió adelante con cilicio y cenizas. La ira llenó su corazón y se volvió contra
Eliseo, que era el profeta de Dios en medio de ellos. El rey jura que ese mismo día
tomaría la cabeza de Eliseo. Cuando el Rey vino a Eliseo culpando al Señor por este
trágico estado de cosas, Eliseo respondió profetizando sobre la próxima liberación.
En 24 horas tendrán más que suficiente. "Así dice el SEÑOR: Mañana por esta época
se venderá una medida de harina fina por un siclo, y dos medidas de cebada por un
siclo, en la puerta de Samaria".
Un señor que estaba al lado del Rey respondió a esta palabra del profeta: "He aquí,
si el Señor hiciera ventanas en el cielo, ¿podría ser esto?" Aquí había una declaración
de absoluta incredulidad. La trágica hambruna había cegado sus ojos ante la
esperanza de un cambio inminente en la ciudad y su corazón se había vuelto tan
incrustado que no podía creer que Dios pudiera o haría eso en 24 horas.
El profeta respondió: "He aquí, lo verás con tus ojos, pero no comerás de eso". Esta
es una advertencia severa para los creyentes que se han desanimado tanto con la
hambruna, el enemigo e incluso el estado del pueblo de Dios que no tienen fe en que
Dios volverá a superarse, revelará el poder de su mano derecha y librará a su pueblo
una vez más por medio de poderosos avivamientos y visitaciones. Es algo terrible
cuando los creyentes olvidan cuán poderoso es Dios y limitan al Santo de Israel en
lo que puede hacer. Habrá aquellos en nuestro medio que solo verán el avivamiento
a lo lejos pero no vivirán lo suficiente como para disfrutarlo.
Tan cerca del avivamiento, pero tan lejos. Todo por incredulidad. ¿Cuál fue el medio
por el cual Dios trajo esta sorprendente y repentina liberación? Fue a través de cuatro
leprosos que razonaron "¿Por qué nos sentamos aquí hasta que muramos?" Dios
honró su fe y su voluntad de no morir sin un testimonio. ¿En esta hora de hambre
eres como el señor que murió por incredulidad o como los leprosos que vivieron por
la fe?
La Iglesia No esta lista para un Avivamiento!
Por David Wilkerson
Febr. 20 de 1995
Hoy hay dos tipos de iglesias en el mundo. Primero, está la iglesia muerta, formal,
que tiene forma de piedad, pero sin poder. Sus ministros son asalariados la mayora
inconversos. Dios llama a esta clase de pastores dos veces muertos (Judas 12).
Además, ¡él promete despojar esta clase de iglesias y quemarlas!
He predicado en años pasados, en varios de estos mausoleos sin vida. Los pastores
me invitaban porque habían leído La Cruz y el Puñal. Sin embargo, cada vez que
predicaba en esta clase de iglesias y el Espíritu Santo caía sobre mí, el pastor se ponía
nervioso, hundiéndose en su asiento. La gente lloraba bajo la convicción del Espíritu
Santo. Pero tan pronto como di una invitación, el pastor saltaba rápidamente y
despedía la reunión.
¡O, como eso me incomodaba! Aquellos pastores sentían pavor de la sola idea de que
alguien tuviera una reacción emocional a mi predicación. Todo lo que ellos deseaban,
era que la gente se levantara de sus rodillas y salieran rápidamente antes de que el
Espíritu Santo hiciera algo fuera de control.
Sabemos que Dios no puede bendecir tales iglesias con avivamiento, porque él no
derrama su Espíritu donde él no es bienvenido. Y la iglesia muerta, formal, ha
rechazado abiertamente al Espíritu Santo. Simplemente no quiere ser levantada de
los muertos.
Pero hoy, en el mundo hay otra clase de iglesia. Y esa es una iglesia santa, remanente
de oración, temerosa de Dios, sin compromiso, un cuerpo recto de creyentes. Está
compuesta de gente totalmente entregada a Cristo gente que ora, ayuna y busca el
rostro de Dios regularmente.
El interés primordial de mi mensaje es esta iglesia recta y llena del Espíritu Santo.
Por qué? ¡Es la única iglesia que está en la posición de recibir un gran derramamiento
del Espíritu! Como puede observar, Dios derrama de su Espíritu solamente sobre
aquellos que le piden que venga y se preparan a s mismos para recibirle.
Mas, sin embargo, no creo que la verdadera iglesia está lista para un avivamiento
para el último y más grande derramamiento del Espíritu Santo prometido por Dios.
Vea usted, una iglesia puede estar absorbida en oración por meses, ayunando,
llorando, implorando y suplicando que caiga el Espíritu Santo y aun no estar lista
para el avivamiento.
(Permítame explicar los términos que estoy usando aquí: La palabra avivamiento
literalmente significa la resurrección de aquello que amenaza en convertirse en un
cadáver. As que, si usted reanima a alguien, significa que él ya ha perdido el
conocimiento. Aun mas, yo no creo que la iglesia santa, el remanente de Dios, ha
desfallecido. Y cuando uso el término avivamiento, estoy hablando acerca del
derramamiento del Espíritu de Dios).
Por supuesto, Dios es soberano y puede derramar su Espíritu sobre cualquiera que l
elija. Hay registros del Espíritu Santo cayendo sobre varios pueblos alrededor del
mundo, trayendo vida de resurrección a aquellos que ni lo esperaban ni estuvieron
preparados para esto. Sin embargo, Dios también nos da un modelo bíblico para
mostramos su norma y dirección. Y su dirección es esta: la obra a través de un pueblo
preparado! él cava el terreno barbechado antes de poner las cosas en el orden divino.
Quiero darles tres razones por las cuales yo creo que la iglesia no está lista para un
avivamiento. Pido que mientras consideramos estas razones, entremos en
concordancia con la Palabra de Dios para prepararnos a recibir lo que l ha prometido:
Verdaderamente, en años recientes casi quedo convencido por la terrible cada moral
de América, que Dios no tiene otra opción que el juicio. Por eso he predicado
intensamente sus inminentes juicios, especialmente dentro de los últimos diez años.
Y aun creo ese mensaje con todo mi corazón seguir predicándolo con toda autoridad!
Dios puso este mismo mensaje en el corazón de Jeremías. Envió al profeta a las
puertas del templo con este clamor solemne:
Andad ahora a mi lugar en Silo, donde hice morar mi nombre al principio, y ved lo
que hice por la maldad de mi pueblo Israel. hará también a esta casa sobre la cual es
invocado mi nombre y a este lugar que di a vosotros y a vuestros padres, como hice
a Silo. Tú, pues, no ores por este pueblo, ni levantes por ellos clamor ni oración, ni
me ruegues, porque no te oír. (Jeremías 7:12-16).
Dios dijo a los justos: Pueden parar de orar ahora! Mi paciencia se agota y he
determinado juicio. Voy a tomar mi Espíritu desde la puerta del este y lo levantare
de mi casa completamente. Ser como Silo!
Silo es como un testimonio para todas las generaciones, que el juicio empieza en la
casa de Dios. El pueblo de Dios haba reincidido tanto y echo lo malo, que el Señor
entra con juicios repentinos y terribles. Silo fue donde el Espíritu de Dios se apartó,
e Icabod fue escrito sobre la puerta.
El Señor traspasó toda su gloria, cerro las puertas y salió dejándola en ruinas!
La Palabra del Señor también vino a Ezequiel con la misma clase de aviso:
Cuando veo lo que Dios hizo a la generación de Noé, Sodoma y Jerusalén, no puedo
evitar deducir que América está madura para la destrucción.
A menudo oro, O Dios,--si los destruiste a todos ellos, como puedes pasarnos por
alto a nosotros? Por qu tus juicios violentos sobre América han sido retenidos?
Los expertos dicen que la economía en este año 1995 está prosperando. Nuestro
producto neto nacional está creciendo. Las fábricas de automóviles están
produciendo autos al paso de quebrar todos los records. La inflación esta sostenida.
Efectivamente, todas las cosas se ven bien para el futuro. Sin embargo, por qué todas
estas buenas noticias no traen ningún sentido de seguridad a la gente? A través de
todo el paso, la gente presiente algo en el aire, que algo está por suceder. Incluso los
peores pecadores no se sienten seguros. Por que? Esto es porque, en el fondo, la
nación sabe que merece el juicio! Todos sabemos que estamos viviendo un tiempo
prestado.
Como podemos estar listos para un avivamiento si creemos que toda esperanza se
ha perdido--que hemos pecado hasta perder nuestro da de gracia y nada queda sino
el juicio? Amados, no podemos tener fe para un avivamiento hasta que estemos
convencidos que Dios todavía desea derramar su Espíritu sobre nosotros!
Por qué América no ha sido juzgada? Por que Jesús no viene todavía? Esto es porque
todavía hay una gran cosecha por delante! Y Dios dice: no queriendo que ninguno
perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. (2 Pedro 3:9).
Vemos esta gran misericordia del Señor en un pasaje de Isaías. Dios instruye al
profeta que le diga a Judá:
As dijo Jehová, Que es de la carta de repudio de vuestra madre, con la cual yo la
repudie? 0 quienes son mis acreedores, a quienes yo os he vendido? He aquí que por
vuestras maldades sois vendidos, y por vuestras rebeliones fue repudiada vuestra
madre. Por qué cuando vino, no haba a nadie, y cuando llame nadie respondió?
Acaso se ha acortado mi mano para no redimir? No hay en mi poder para librar?
(Isaías 50:1-2).
Dios ya se había divorciado de Israel, habiéndoles dado ... carta de divorcio (Jeremías
3:8). Pero, ahora su atención fue sobre Judá, un pueblo que le haba defraudado y
dejado. Dios todavía tiene un corazón para Judá y vino a ellos clamando, Dónde está
la carta de repudio... (Isaías 50:1). l les decía: Muéstrenme vuestros papeles de
divorcio. Pruébenme si les he echado fuera. Esto fue porque ustedes, me dejaron.
Nada hice para afligirles o herirles. Yo les ame todo el tiempo. Vine a ustedes, y les
llamé!
Trate de imaginarse esto: Allí estaba el Señor, entrando a las mismas fosas de
prostitución de Judá buscándola, llamando: Vengo detrás de ti! Les dices a todos que
no hay esperanza, que nunca mas puede haber amor entre nosotros. Pero yo vuelvo
detrás de ti!
Amados, esto es exactamente lo que veo que Dios está haciendo con América ahora
mismo. él nos está diciendo: Muéstrenme sus papeles de divorcio. Muéstrenme que
yo les he dejado. Todavía no he quitado mi Espíritu Santo. En cambio, yo todavía
obro sobre toda esta nación todavía sigo galanteando, llamando y viniendo a ustedes.
El Señor está hablando esto por medio la iglesia Times Square y muchos otros
pulpitos a través de esta nación. Y él está hablando por medio de hombres y mujeres
piadosos quienes pasan precioso tiempo buscando a Dios. Él está llamando a
América al arrepentimiento que vuelva a su propio corazón! Pero, cuando l venga,
pregunta Donde están aquellos que responden a mi llamado? Dónde están los que se
volverán a m?
De esto se tratan las recientes semanas de oración en la iglesia Times Square. Todo
tiene que ver con su ultimo llamado.
Muchos que están sentados en nuestra iglesia hoy son una prueba del galanteo del
Señor. En algún momento, él conmovió sus corazones y les hablo acerca de la
apostasía y el compromiso con él. Les dijo en su llamado, Te amo! y ellos
respondieron. Y ahora el mismo Espíritu que les excito a despertar, desea reunirlos
en una gran multitud. Nuestra parte es orar con fe, para que, tal como el Espíritu
atrae a los deslizados, una multitud responda y vuelva.
Tenemos que estar completamente persuadidos que todavía hay tiempo (aunque
corto), todavía hay esperanza, y que mientras oramos, el Espíritu está obrando en
todos los niveles de la sociedad, llamando y atrayendo gente para l.
Yo veo una furia e intensidad en los pecadores de hoy como en ninguna otra
generación. Cuando yo era un niño, la iglesia se refería a frica como el continente
oscuro debido, a su oscuridad espiritual. Pero hoy, una oscuridad espiritual está
cubriendo a América que es casi tangible. América es ahora el continente oscuro!
Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra y oscuridad las naciones; (Isaías 60:2).
Oscuridad significa unas tinieblas que puedes sentir. Y la oscuridad sobre América,
ahora mismo, es intensa, muy esparcida, espesándose a cada momento.
Cuando usted vuela sobre Nueva York, es deslumbrado por todas las brillantes luces
de la ciudad. Una vez que ha aterrizado el avión, toma un auto para Manhattan y
Broadway, e instantáneamente siente la oscuridad. Es pesada, demoniaca, ciega el
corazón y la mente de la gente y esto se pone cada vez peor!
Con todo, la Biblia dice que Dios tiene una parte en esa oscuridad:
Dad gloria a Jehová, Dios vuestro, antes que haga venir tinieblas, antes que vuestros
pies tropiecen en montes de oscuridad, y que esperando vosotros la luz, el os la
vuelva en sombra de muerte y tinieblas. (Jeremías 13:16).
Dios hace la espesa oscuridad! Cuando la gente esta tan apegada a su pecado, que
rechaza al Señor, es conducida a la oscuridad. David dice de los impíos, Sean
oscurecidos sus ojos para que no vean. (Salmo 69:23). El Espíritu de Dios permite a
la oscuridad caer sobre sus corazones y mentes.
La furia e intensidad de esta degradación es mil veces ms oscura que cuando vine
por primera vez a Nueva York hace ya una generación. Hoy miro los ojos de la gente
camino a una conexión de drogas, tropezando de un bar, corriendo en busca de
placer y no hay equivocación, son conducidos!
Cuando empecé este ministerio hace ya 35 años, hablé en iglesias alrededor de
América, avisando sobre la cada moral que venía. Le dije a la gente en Iowa,
Oklahoma y todos los Estados del Sur que las drogas podrán golpear las más
pequeñas aldeas. Traficantes aparecerán en colegios y campos de juegos. Avise de la
homosexualidad vulgar, con desfiles desnudos tomando lugar en nuestras ciudades.
También profetice que la desnudez y los actos sexuales saldrán al aire en la hora pico
en la TV.
La mayora de gente que me escucho, pensó que venía de Marte. Pastores me rieron.
Algunos cristianos sinceros vinieron después diciendo, De ninguna manera! Dios no
permitirá que esto suceda a América. Hoy, algunas de esas gentes que me
ridiculizaron, son abuelos. Ellos se sientan ante sus televisores, viendo películas
calificadas R-, pervertidas de las cuales profetice. Y sus hijos y nietos son adictos a
las drogas y alcohol. La oscuridad de la que avise ahora ha entrado a sus propias
almas!
Puede imaginarse cuan oscuros va a ser 10 años mas tarde y si el Señor no viene
antes?
Aun ms, le pregunto: Tal como ve la oscuridad espesándose y creciendo por todos
lados, cree que exceder la luz del evangelio? Siente temor que la oscuridad lo
aplastara, sofocara y dejara como pasado de moda?
No Nunca! El pueblo de Dios no puede ser intimidado por las tinieblas y la furia del
enemigo en estos u1timos días. No importa cuán oscuro se vuelva el mundo. La
Biblia dice que Jesús se va a levantar y brillar en las tinieblas!
Yo, yo soy vuestro consolador. Quien eres t para que tengas temor del
hombre, que es mortal, y del hijo de hombre, que es como heno? Ya te has
olvidado de Jehová, tu Hacedor, que extendí los cielos y fundo la tierra? Todo
el da, sin cesar, has temido el furor del que aflige, cuando se dispone a
destruir. Pero dónde está el furor del que aflige? (Isaías 51:12-13)
Aun las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el da; lo
mismo te son las tinieblas que la luz! (Salmo 139:12).
l revela lo profundo y lo escondido, conoce lo que está en tinieblas y con l
mora la luz (Daniel 2:22).
El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; a los que moraban en tierra
de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos. (Isaías 9:2)
Vivimos en un tiempo de muerte y tinieblas extendidas. Pero Dios dice que en tales
tiempos el hará resplandecer su luz con ms brillantez:
Guiar a los ciegos por un camino que no conozcan; los hará andar por sendas que no
habían conocido. Delante de ellos cambiar las tinieblas en luz y lo escabroso en
llanura. Estas cosas les hará y no los desamparar. (Isaías 42:16).
Ninguna oscuridad puede detener la luz de Dios! As que quite sus ojos de las
tinieblas, del pecado, de la violencia furiosa de la gente. Y crea al Señor por la fuerza
irresistible de su resplandor, esparciendo luz!
Judá haba perdido toda esperanza, pensando: Hemos ido demasiado lejos - y ahora
ya no podemos regresar. Hemos dejado al Señor, nos hemos burlado de él, abusado
de él, lo hemos echado a un lado. Estamos tan metidos en nuestros pecados, que ya
no hay esperanza. Ni siquiera Dios puede traernos de regreso!
Amados, después de todos mis años en el ministerio, todavía tengo que lidiar con
esta clase de pensamientos. Usted puede sentirse de la misma manera. Su esposo
puede ser un ateo, despreciable e impío. Y usted, se ha, convencido a s mismo, La
gente alrededor de mí está siendo salvada. Pero mi esposo es diferente. Él es tan
duro!
El Señor le dijo a Judá: Acaso se ha acortado mi mano para no redimir? (Isaías 50:2).
Santos queridos, cuándo perdió Dios su poder para salvar a los pecadores ms viles
de la tierra? Cuándo perdió Dios su buena voluntad para libertar a los drogadictos,
borrachos y prostitutas, aun cuando, nadie estuvo orando por ellos?
Entonces, querrá Dios de algún modo no salvar a los miembros de su familia, por
quienes usted ha ayunado y orado intensamente? Absolutamente, no! Debemos
clamar a l en fe; O, Señor, tu puedes salvar a Wall Street. Puedes liberar a los peores
homosexuales en Nueva York. Puedes redimir cualquier musulmán, en cualquier
tierra extranjera. Y puedes salvar a cualquier miembro de mi familia. Tu brazo no es
demasiado corto. Tu puedes salvar a cualquiera!
Nunca estaremos listos para un avivamiento, hasta que dejemos de limitar a Dios.
No crea que, su brazo ha sido cortado; en cambio, créale por lo imposible! Obtenga
una visión de su misericordia y amor - de su poderoso brazo extendido,
todopoderoso para, salvar!
Sin embargo, Dios está pidiendo a su iglesia remanente, que empiece con su propia
familia, una persona a la vez: Convertíos hijos rebeldes, dice Jehová, porque yo soy
vuestro esposo, y os tomare uno de cada ciudad, y dos cada familia, y os introducir
en Sin. (Jeremías 3:14).
Debemos orar y ser pacientes y l alcanzara a nuestros seres queridos, uno a la vez!
Aquí en la Iglesia Times Square, estamos orando que Dios introduzca a muchos
dentro de su reino por medio del derramamiento de su Espíritu. Pero el Señor
también desea que nos concentremos en nuestras familias. Debemos tener una
urgencia en nosotros para orar, Señor, envía convicción a mi familia! Salva a mi hijo,
mi hija, mi esposa...
Hace varios años hubo una canción popular Raindrops Keep Falling on my Head
(Gotas de lluvia siguen cayendo sobre mi cabeza). Creo que esa canción nos dice la
manera como debemos orar para que Dios literalmente haga llover su Espíritu Santo!
Las Escrituras prometen que en los últimos das, el Espíritu Santo caer como lluvia. Y
usted puede orar que gotas del Espíritu Santo caigan sobre las cabezas de nuestros
seres queridos:
Pedid a Jehová lluvia en la estación tarda. Jehová hará relámpagos, y os dar lluvia
abundante y hierba verde en el campo a cada uno. (Zacarías 10:1).
Dios está esperando con ansias por derramar su Espíritu Santo. Esta listo para orar
que venga su lluvia? Debemos orar no porque venga el juicio de fuego, sino por
lluvia!
Si, el juicio de Dios viene; está a la puerta aun ahora. Pero mientras todavía tenemos
tiempo, debemos creer que Dios puede derramar su Espíritu. As, que eche manos de
sus divinas promesas y vera el avivamiento del Espíritu Santo derramándose a todo
su alrededor. Aleluya!
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Usado con permiso por World Challenge, P. O. Box 260, Lindale, TX 75771, USA.
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EDITORIAL.
Estimado lector:
Es más bien la permanencia en la presencia de Dios, que hace que uno sea
transformado. Lo terrenal se desvanece y Jesús y su Reino Celestial se hacen visibles.
Dios se convierte en una realidad y sus palabras y advertencias cobran un peso como
nunca antes. Las almas son vistas con el valor que tienen para Dios y su perdición
como algo cierto. La insensibilidad e indiferencia por el pecado y sus consecuencias
se pierden y una genuina aflicción invade el alma del que ora.
Simplemente observemos estas realidades. El ambiente espiritual está cada vez más
frío y más denso. La verdad es ignorada y el pecado es puesto en lugares prominentes
aún por aquellos que profesan cristianismo. La generación en la que vivimos y las
que vienen no son capaces de discernir entre lo bueno y lo malo. Las religiones y las
modas espirituales han usurpado el lugar de Dios. ¡Jesús no es conocido ni en México
ni en el mundo!
¿Quién entiende hoy día lo que causa en el corazón de Dios las malas obras de una
nación pecadora y cargada de maldad? Es más… ¿A quién le importa realmente? ¿En
qué iglesia o Instituto Bíblico se está enseñando la aflicción y el dolor por el pecado
que nos asedia? Antes vemos mucho "gozo" para tiempos demasiado tristes. Los
avivamientos registrados por la Biblia y la historia siempre han sido precedidos por
tiempos de humillación y aflicción.
En los días de Noé: "Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la
tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo
solamente el mal… y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le
dolió en el corazón" (Génesis 6:5-6).
La palabra hebrea aquí usada significa afligir. Significa herir, causar dolor. La
maldad del hombre estaba hiriendo a Dios profundamente, causando gran dolor en
su corazón.
Los Siervos del Nuevo y Antiguo Testamento compartieron este Dolor por el
Pecado.
David fue un hombre de Dios que descubrió la gloria de gozarse en Jehová, pero este
gozo nació de un gran dolor por las transgresiones entre el pueblo de Dios. Él dijo:
"Veía a los prevaricadores, y me disgustaba… porque no guardaban tus palabras…"
(Salmo 119:158). "¿No odio, oh Jehová, a los que te aborrecen… y me enardezco
contra tus enemigos?" (Salmo 139:21). David odió lo que Dios odiaba; él se dolió de
las cosas que le dolían a Dios y detestaba lo que Dios detestaba.
El profeta Amós clamó contra "aquellos que reposan en Sión… y no se afligen por el
quebrantamiento de José…" (Amós 6). El compartió la aflicción de Dios por la
apostasía de un pueblo que reposaba en comodidad y prosperidad, sin importarles
la inminente hora de juicio, mientras se recostaban en camas de marfil
(materialismo), cantando su música, bebiendo vino -aún sin sentir dolor por la ruina
que estaba alrededor de ellos- (Ver Amós 6:1-6).
La palabra que Amós usó es enfermar. En realidad, él estaba diciendo: "El pecado y
la ruina entre el pueblo de Dios no te enferma. No te repugna porque has llegado a
cegarte por el pecado y la buena vida que ahora disfrutas".
Nehemías se dio cuenta de la maldad que estaba siendo apoyada por un sacerdocio
indiferente al pecado, "Y vine a Jerusalén; y entonces supe del mal que había hecho
Eliasib por consideración a Tobías, haciendo para él una cámara en los atrios de la
casa de Dios. Y me dolió en gran manera; y arrojé todos los muebles de la casa de
Tobías fuera de la cámara, y dije que limpiasen las cámaras, e hice volver allí los
utensilios de la casa de Dios, las ofrendas y el incienso" (Nehemías 13:7-9).
El Ministerio de Aflicción
Samuel fue un hombre joven quien fue llamado "al ministerio de aflicción". No era
su propia aflicción, ni la aflicción de la humanidad, -¡sino la profunda e insondable
aflicción de Dios!-. Dios estaba profundamente dolido por la condición apóstata de
su propio pueblo, y no había nadie con quien compartir su dolor. Dios estaba por
quitar Su gloria de su casa en Silo, y el ministerio que permanecía en ese entonces
ante su altar no lo sabía. Qué triste estar tan sordo, mudo y ciego justamente a la hora
del juicio.
Sus hijos Ofni y Finees representan el actual ministerio de tradición. Estos dos
jóvenes sacerdotes nunca tuvieron un encuentro con Dios. Ellos no sabían nada de
"escuchar algo celestial". No sabían nada de tener hambre de Dios, de una pasión
ardiente de experimentar la gloria y la presencia del Señor -nada de la aflicción de
Dios-. Esta clase de ministros no ayunaban, ni oraban. Ellos buscaban las mejores
posiciones ministeriales, con los más altos beneficios y las mejores oportunidades de
ser promovidos. Sus corazones nunca habían sido quebrantados por la humanidad
perdida; sabían muy poco del sufrimiento. Ellos son un producto de ritualismo frío
y muerto. ¡No están llenos de la presencia de Dios! Hablan lo correcto, lo nuevo, y se
oyen y actúan profesionalmente. Pero no hay un ungimiento, no hay santa unción;
ellos no tienen temor y pavor de un Dios Santo.
Así es que, los hijos de Elí, llegaron a ser sensuales, mundanos y egoístas. Los hijos
de Elí llegaron a ser tan corruptos, que Dios los llamó "los hijos de Belial" (hijos de
Satanás). Se dice de ellos: "Que no conocían a Dios". "Se engordaban de lo principal
de todas las ofrendas del pueblo de Israel" (I Samuel 2:29). Por esta razón multitudes
de jóvenes evangélicos están creciendo tan fríos y sensuales, convirtiéndose en
fanáticos del rock and roll, tomando cerveza, comprometiéndose con el sexo ilícito,
aburridos e inquietos. Algunos de los pastores que ministran jóvenes los están
condenando con su propio ejemplo deficiente y su falta de discernimiento del
Espíritu Santo. Si los líderes que ministran jóvenes no conocen al Señor, ¿cómo
pueden alcanzar a los jóvenes para Dios? Ahora enfrentamos la tragedia de una
generación entera que va extraviada porque tiene muy pocos pastores que les
muestren como escapar de las trampas satánicas de esta era. Ha habido demasiada
provisión hacia los deseos sensuales de la juventud.
¡Elí había pedido todo su discernimiento espiritual! Ana, una mujer santa, estaba
llorando amargamente en la casa de Dios en Silo. Ella estaba suplicándole al Señor
que le diera un hijo y estaba en profunda intercesión. Ella es un tipo del remanente
santo que intercede, que suspira y clama a Dios por una palabra fresca de El. "Pero
Ana hablaba en su corazón, y solamente se movían sus labios, y su voz no se oía; y
Elí la tuvo por ebria" (I Samuel 1:13).
¿Cómo puede un ministro de Dios ser tan ciego? Ella estaba en el Espíritu,
conversando con Dios, bajo una unción divina y pronto llegaría a ser un canal de
renovación en Israel -y el hombre de Dios no pudo discernir la verdad-. El perdió
totalmente el significado de lo que estaba sucediendo en el altar. ¿Qué es lo que le ha
sucedido a este sacerdote del Dios Altísimo, que debería estar permaneciendo en el
umbral de un profundo movimiento nuevo de Dios que afectaría el futuro de Israel
-y está tan fuera de un contacto con Dios que lo confundió con la carne-?
¿Cómo va Dios a penetrar a este pueblo apóstata, y corrupto de Israel? ¡Dios está
afligido! Él está queriendo sacudir las cosas. ¡Él está a punto de moverse prontamente
en ira y vomitarlo de su boca! ¡Pero Elí no lo sabe! Elí ha llegado a ser tan indulgente,
tan cómodo, tan empapado en su fría tradición -que no tiene ni la más mínima
insinuación de lo que Dios está diciendo o está a punto de hacer-. Sus hijos van a ser
echados fuera -literalmente cortados de las cosas de Dios-. Pero están tan
contaminados con la lujuria, tan acostumbrados a los mejores cortes de la carne, tan
endurecidos por el pecado -que se han convertido en agentes de Satanás-, ciegos al
juicio inminente. ¡Dios tiene que salir fuera de la estructura religiosa establecida para
encontrar a alguien lo suficientemente abierto o quebrantado para compartir su
aflicción!
La Compañía de Samuel
El Señor siempre atrae a un pueblo como Samuel para que escuche su voz< en un
tiempo de decadencia espiritual. Esta compañía está compuesta de hombres y
mujeres que no le dan ninguna importancia a la tradición, ni cómo se promueven, ni
tienen límites denominacionales. Ellos representan pastores y gente dispuesta que
tiene oídos para escuchar. Ellos se encierran con Dios.
Dios envió un profeta no nombrado a Elí con una advertencia. Fue un flechazo
directo hacia el corazón de un sistema religioso que se había convertido en una
"mafia" donde se guardaban unos a otros. Elí había encubierto a sus hijos
descarriados. Dios le dijo proféticamente: "¿Por qué… has honrado a tus hijos más
que a mí, engordándoos de lo principal de todas las ofrendas de mi pueblo Israel?"
(l Samuel 2:.29).
Cuando Elí escuchó como sus hijos hicieron gala de sus fornicaciones justamente a
las puertas de la congregación, todo lo que él dijo fue: "No, hijos míos, porque no es
buena fama la que yo oigo; pues hacéis pecar al pueblo de Jehová" (l Samuel 2:24).
Posteriormente Dios le dijo a Samuel que El juzgaría la casa de Elí porque él conocía
su iniquidad y no hizo nada al respecto. "Y le mostraré que yo juzgaré su casa para
siempre, por la iniquidad que él sabe; porque sus hijos han blasfemado a Dios, y él
no los ha estorbado" (l Samuel 3:13).
Hay un día de juicio señalado aquí en la tierra para los ministros del evangelio que
conocen el pecado en la congregación o en su familia -y rehúsan tratar con él-. Ellos
pueden recriminar a los adúlteros, a los borrachos, a los fornicarios -¡pero no tienen
un mensaje penetrante de reprobación!-. Temen disciplinar a sus hijos espirituales.
A la hora del juicio el Señor preguntará, "¿Por qué no le enseñaste a la gente la
diferencia entre lo santo y lo profano?"
¿Por qué fue Elí tan suave con el pecado de sus hijos? Porque ellos estaban robándose
el filete mignon antes de cocinarlo en la olla, y estaban trayéndose a su casa esta carne
fresca y roja y Elí se había acostumbrado a ella. Él hubiera sufrido si él los regañaba
muy duro -tendría que volver a comer carne hervida-. Él había aprendido a no querer
percatarse de todas las cosas malas que estaban sucediendo en la casa de Dios -y en
su propia familia-.
Por esto creo que algunos predicadores son suaves con el pecado. ¡Han llegado a
vivir tan cómodamente que se han conformado con la buena vida! ¡Disfrutan la
comodidad y el prestigio de gran cantidad de personas, de edificios más grandes!
Que sutil es esto -mientras que ellos saben que deben decirle la verdad a la gente,
simplemente pronuncian un suave, " ¡No deberían hacer estas cosas malas!" No hay
una denuncia santa. No hay aflicción por el pecado y el conformismo. No hay la
visión del apóstol Pablo acerca del exceso de la maldad del pecado. No hay
advertencias de un castigo divino y juicio. La gente se ofendería -dejaría de venir,
dejaría de pagar las cuentas-. El crecimiento podría ser impedido.
¿En dónde están los Samueles que han escuchado la voz de Dios, que han sido
despertados por el Espíritu Santo, que han recibido una revelación de los próximos
juicios hacia la casa de Dios apóstata? ¿Por qué no todos los predicadores del
evangelio se afligen por la condición de pecado de la iglesia? ¿Por qué no todos los
pastores y evangelistas claman como vigilantes en el muro?
Se dice de Samuel: "Y Samuel se lo manifestó todo (a Elí), sin encubrirle nada…" (l
Samuel 3:18). Te pregunto, pastor: ¿Les estás diciendo todo? ¿Estás resistiéndote,
escondiendo la verdad, temeroso de ofender?
Dios iba a retirar su presencia de Silo e iba a hacer una cosa nueva y gloriosa en Israel.
Dios dijo: "Y yo me suscitaré un sacerdote fiel, que haga conforme a mi corazón y a
mi alma; y yo le edificaré casa firme, y andará delante de mi ungido todos los días"
(l Samuel 2:35). Esto habla de la Compañía de creyentes de Samuel y de los ministros
que comparten el mismo corazón de Dios. Ellos conocen la mente del Señor, ellos
conocen su voluntad; y caminan en temor y santidad delante de El. ¡La Compañía de
Samuel es un pueblo de oración! Y, ¡porque están en contacto con Dios, se les da a
conocer y comparten su aflicción! Mientras Samuel estaba en oración, Dios le reveló
unas cosas terribles que venían hacia el pueblo de Dios. "Y Jehová dijo a Samuel: he
aquí haré una cosa en Israel, que a quien la oyere, le retiñirán ambos oídos" (l Samuel
3:11).
¡Puedo decirte a quien le está hablando Dios en estos días! Está hablando a aquellos
que están entregados a Él, -que palpitan por El, como el ciervo palpita por el agua-,
aquellos que han muerto a cada ambición egoísta, ¡qué no tienen otra meta en la vida
sino la de traer placer, gloria y gozo al corazón de Dios!
Lo digo resueltamente -¡No va a ser una denominación la que lleve la Palabra de Dios
a esta generación que ha sido maldecida! No será un comité el que escuche la Palabra
de verdad y encienda las reuniones del remanente de los últimos tiempos-. Mientras
que los ángeles del Apocalipsis vienen para herir la tierra, denominaciones y líderes
religiosos estarán trabajando duro protegiendo sus intereses y fortaleciendo su
autoridad, extendiendo reglamentos y resoluciones.
¡La aflicción de Dios en la Compañía de Samuel debe producir una protesta en contra
de todo pecado y apostasía! "Ahora, pues, oye su voz; mas protesta solemnemente
contra ellos… y muéstrales cómo les tratará el rey que reinará sobre ellos…" (l Samuel
8:9).
¡Por dondequiera que voltees ahora, el pueblo de Dios en número creciente está
rechazado el señorío de Cristo! Hay un clamor: "ser como las naciones ". ¡Esto es
mezcla! Está siendo justamente como el mundo. Está diciendo: "¡Queremos a Dios y
al mundo!"
¡Gracias a Dios por la Compañía de Samuel que protesta! Ellos han escuchado de
Dios y saben hacia donde te va a llevar este conformismo. Ellos ven los espantosos
resultados que vienen a causa de la apostasía, y como Pablo, ellos sollozan ese
profundo lamento de un corazón hecho pedazos por la aflicción.
A los que gimen por causa del pecado de la Iglesia los llaman pronosticadores de
destrucción y portadores de tristeza. Muchos creyentes han dicho: "No quiero estar
cerca de ellos. Son tan negativos y hoscos, y parecen tan tristes" ¡Esto es simplemente
porque no los conocen! Ellos no saben que aquellos que comparten la aflicción de
Dios por el pecado, también son partícipes de la más grande medida de gozo.
¡Aquellos que verdaderamente sienten la aflicción junto con Dios, se les ha dado un
corazón que salta de gozo en Jehová! "Aunque la higuera no dé su fruto; ni haya
ninguna provisión en las vides; el producto del olivo falte; los sembrados no
produzcan subsistencia; las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los
corrales. Con todo yo brincaré de gozo en Jehová. Yo me gloriaré en el Dios de mi
salvación. Jehová el Señor es mi fortaleza" (Habacuc 3:17-19 Spurrel Original
Hebreo).
Este gozo viene a saber que Dios siempre tendrá un ministerio puro, un cuerpo santo
y separado -aún en los peores días-. Ellos saben que Dios los honrará con su presencia
constante, aunque todos los demás se aparten de ellos con temor. Ellos están llenos
de gozo porque sacan fuerzas creyendo en la majestad y el poder de Dios, cuyos
juicios son siempre justos. Con Habacuc, ellos pueden decir: "Aunque todos fallen,
¡mi corazón se regocijará en Dios únicamente!" Aún cuando parezca que todo falla
alrededor y haya muy poca evidencia de resultados, la aflicción nos lleva a un gozo
permanente a causa de la cercanía al corazón de Dios. Con Pablo, el remanente
afligido puede decir: "Como moribundos, más he aquí vivimos; como castigados,
mas no muertos; como entristecidos, mas siempre gozosos…" (2ª Corintios 6:9-10).
Artículo que narra la historia del Avivamiento hoy entre los Zulúes tomando de la
publicación "Herald of his Coming" (Mayo 1992).
Cuando Dios rasga los cielos y desciende esto es un ¡AVIVAMIENTO! Con el sonido
de un viento recio Dios rasgó los cielos y descendió a un pequeño grupo de
misioneros y cristianos de la tribu zulú que estaban reunidos en un antiguo establo
color blanco en Natal, África del Sur. Fue a principios de 1967 que este pequeño
grupo de penitentes que buscaban a Dios fueron sosegados al silencio mediante una
manifestación maravillosa de la presencia de Dios en medio de ellos. Dios puso en
movimiento de salvación, liberación y sanidad y desde ese tiempo ha continuado
durante estos 25 años y aún hoy se está incrementando.
En los terrenos donde la obra ahora está centrada, Kwa Sizabantu, hay un edificio
con capacidad para 10,000 personas. 120 obreros llenos del Espíritu ministran
diariamente alrededor de 1000 personas que buscan ayuda. Los obreros también
viajan en equipos a otras localidades para ministrar en y fuera de Sudáfrica. Decenas
de miles han escuchado el Evangelio puro proclamado y han recibido a Cristo como
el salvador. Aunque no se llevan a cabo reuniones especiales de sanidad y liberación,
Dios por su gracia ha sanado y liberado a muchos cientos, dejando libres a brujos y
médicos brujos, satanistas y a otros, atados por el pecado y malos hábitos, y algunos
literalmente han sido sanados en sus lechos de muerte.
Vidas transformadas que han permanecido fieles a través de los años atestiguan que
ésta es una obra de Dios bendecida en forma maravillosa y genuina.
Sudáfrica hoy día atraviesa tiempos difíciles. Desde el desmantelamiento oficial del
"apartheid", varios grupos de raza de color están luchando por el liderazgo. Como
resultado hay intimidaciones, revueltas y homicidios 22,000 perdieron su vida
durante el año pasado. Los cristianos que no desean unirse en la violencia, son
maltratados y enfrentados con violencia algunas veces.
Este avivamiento ha surgido en medio de la crisis presente del país, y aunque no
tienen ayuda terrenal, proveen instrucción y ánimo a los cristianos, ayudándoles a
"Pararse por Dios" y su Palabra.
Gente joven que enfrentaba la violencia en las escuelas, buscó ayuda en Kwa
Sizabantu. El resultado ha sido la formación de una organización, "CRISTIANOS
POR LA VERDAD" ahora con 23,000 adherentes quienes toman la posición bíblica,
fortaleciéndose unos a otros, y ganando respeto a través de la Nación.
Los Comienzos
El primero en el que Dios comenzó a obrar fue Erlo Stegen. Erlo fue salvo siendo
adolescente a través del ministerio de su pastor luterano alemán en Sudáfrica, donde
la familia de Stegen vivía. Después de su conversión, la Palabra de Dios se volvió
muy dulce para él. Nada en el mundo se comparaba a eso, y para él, el amor a Cristo
sobrepasaba todo lo demás en la tierra.
Cuando Dios lo llamó para predicar el Evangelio, el deseaba predicar las verdades
como Jesús lo hizo. Él estudió cuidadosamente en los Evangelios como enseño Jesús.
Su oración era: "¡Concédeme que predique como Tú lo hiciste!" Después de
entrenarse, Erlo adquirió una carpa y por 12 años predicó el Evangelio a LA GENTE
DE Zulú. Las multitudes que asistían a las reuniones y el número de aquellos que
respondían, era mayor que los que otros evangelistas experimentaban en aquel
tiempo. Pero Erlo se sentía continuamente y cada vez más desanimado y abatido.
Vez tras vez era "sacudido hasta el fondo de su corazón" cuando regresaba a las áreas
donde había tenido reuniones anteriores, y encontraba que la mayoría de los que
habían sido aconsejados estaban viviendo vidas que difícilmente eran mejores de lo
que eran antes de su "conversión". De nuevo los reunía, ministraba y animaba en el
camino correcto; pero una visita posterior revelaba un retroceso a la misma condición
y la ministración tenía que ser repetida. Erlo creía y predicaba la Biblia, pero lo que
veía que sucedía en su ministerio no era lo que él creía que la Biblia proclamaba. No
era lo que suponía seguía a la predicación del Evangelio. Ni lo que sucedió en la
iglesia primitiva. Combatiendo el desánimo, oraba y trabajaba más duro. Además de
la Biblia estudiaba sobre el avivamiento.
En una ocasión fue abordado por una viuda que tenía una hija desequilibrada
mentalmente que era el terror donde se encontraba. Alguien había dirigido a la viuda
a Erlo después de oírle predicar. "¿Es verdad?" la viuda preguntó, "¿Está vivo
Jesucristo? ¿Puedes tú hablar con él? ¡Por favor pídele que sane a mi hija", rogaba ella
en su desesperación. Ella le dijo que había vendido todas sus posesiones para pagar
a los médicos brujos para que la ayudaran, pero sin resultados. Erlo aceptó el reto.
Trajo a la niña a un lugar de oración, y él y tres colegas oraron literalmente día y
noche por tres semanas hasta que se sintió sin fuerzas y totalmente quebrantado.
Todavía la niña estaba tan violenta, destructiva y mentalmente desordenada como
siempre. La tuvo que llevar a su hogar, derrotado.
Concluyó que quizás necesitaba estudiar y predicar más sobre la fe. En otra ocasión
después de predicar "Cree solamente" (Marcos 5:36) fue alcanzado para orar por
sanidad. La petición la hizo una mujer con su esposo ciego. "Ven mañana y oraremos
por él", respondió Erlo.
De nuevo después de orar fervientemente, Erlo tuvo que ceder ante la derrota. Se
decía a sí mismo: "Quizás no es la voluntad de Dios ", pero su corazón no estaba
satisfecho con eso. Casi sucumbía a las dudas y se cuestionaba si la iglesia de hoy
podría experimentar lo que la iglesia primitiva experimentó. Sus oraciones por el
avivamiento decayeron.
Pero aún tenía que enfrentar a aquellos zulúes quienes decían; "El cristianismo es la
religión del hombre blanco".
"Oh, Dios", oraba, "ayúdame a convencer a esta gente que Jesús es el Salvador de
toda la humanidad, y de los zulúes también". Y entonces comenzó a orar de nuevo
por el avivamiento. En 1966 se reunió con una pequeña congregación de 20 a 30
zulúes, y comenzaron un estudio bíblico para ver cómo estaban sus vidas
comparadas con la Biblia. Leyeron en Juan 7:37 y 38 las palabras de Jesús: "Si alguno
tiene sed venga a mí y beba. El que cree en mí como dice la Escritura, de su interior
correrán ríos de agua viva". ¡Ríos de agua viva! Esto es lo que ellos deseaban. Se
sentían secos y sin fruto. ¡Ríos de agua viva! No solo una corriente y no solo un río.
Jesús dijo: "El que cree en mí, como dice la Escritura". ¿Qué dice la Escritura que ellos
deberían creer? Estuvieron de acuerdo en estudiar la Biblia para enterarse si ellos
creían de acuerdo a la Escritura. Aceptaron la Biblia como una Palabra inspirada por
Dios. No tratarían de justificarse a ellos mismos con explicaciones más allá de la
Biblia. Tomaron la Palabra aún por encima de todo lo que fueron enseñados por el
pasado. Dejaron que la Palabra les hablara y les juzgara.
Y así, de esta manera, comenzaron a reunirse diariamente de 7:00 a.m a 5:00 p.m para
orar y estudiar la Biblia. Escogieron el libro de los Hechos para estudiar. Dios
comenzó a escudriñar sus corazones mediante la Palabra y mediante su Espíritu.
Comenzaron a descubrirse pecados en sus vidas tales como orgullo y el preocuparse
más por la opinión de la gente que por la opinión de Dios. Conforme las semanas
pasaron, sus tiempos de oración y estudio se convirtieron en tiempos de clamor a
Dios pidiendo misericordia para ellos de sus pecados.
Erlo llegó a ver a través de esto que la razón de que los últimos resultados de sus
predicaciones entre, los zulúes fueran tan deficientes, yacía no en su debilidad o en
algunas otras razones que estaba acostumbrado a dar, sino que el problema estaba
en él mismo.
Dios Desciende
Entonces un día mientras buscaban a Dios, llegó un sonido como viento y una gran
conciencia de pecado, pero además sabían que Dios estaba en medio de ellos. Estaban
quietos ante Su Maravillosa y santa presencia. Esto era la prueba del amanecer de un
nuevo día en sus vidas y ministerio.
Después de cuatro años, el Señor les dio una propiedad para la misión de Kwa
Sizabantu, y la obra ha continuado allí. Los edificios fueron creciendo en tamaño
conforme la misión ha crecido. Hay un hospital en sus terrenos, no tienen personal
médico, pero tienen obreros que aconsejan y oran por las personas. Es
completamente una obra de fe, no se cobra, pero Dios provee las necesidades y muy
a menudo en una forma notable conforme se ora y se ejercita la fe, se enfrentan
muchas pruebas de fe. Muchas clases de milagros se han efectuado en los terrenos
de la misión y en las áreas alrededor y distantes de la misión; pero siempre el énfasis
está en que la persona se aparte y confiese sus pecados, arrepintiéndose y
obedeciendo a Dios. Probablemente cada milagro ocurrido en el libro de los Hechos
se ha visto en el avivamiento entre los zulúes. Ha habido manifestaciones poderosas
de guianza del Espíritu entre ellos. La historia es por demás notable. "¡A Dios sea la
gloria!"
Algunos miembros del personal del diario "Herald of His coming" que oyeron hablar
recientemente aquí en nuestra área a Erlo Stegen acerca del avivamiento, pudieron
comprobar que no había sensacionalismo en sus palabras sino una sobriedad
ferviente. El enfatiza la necesidad de "Velar y orar" tal como Jesús nos dice que
hagamos. Cuando Dios obra, el diablo también obra. Debe haber constante vigilancia
contra el error y cualquier cosa en que el diablo pudiera intervenir, o cualquier cosa
que pudiera ser de la carne en vez del Espíritu Santo.
En éste avivamiento la Palabra de Dios es proclamada en una forma clara y sencilla,
y está siendo celosamente adherida a la vida de muchos para ser fielmente obedecida
y vivida diariamente.
Amor, gozo y unidad están como evidencia entre las personas de razas y trasfondos
denominacionales diferentes congregados en Kwa Sizabantu. Los obreros ministran
en equipos. Sus dones complementan unos a otros. Los acontecimientos, visiones y
sueños, son constantemente revisados y confrontados con la Escritura.
Manteniéndose todos en una actitud humilde y quebrantada, en una profunda
pobreza de espíritu, practicando la obediencia a la guianza de Dios, de esta manera
la obra continúa hacia delante muy bendecida.
Erlo Stegen dice: "Si Dios puede enviar un avivamiento entre los zulúes, Él lo puede
hacer en cualquier parte del mundo. ¡Dios está dispuesto! ¿Dónde está la gente de fe
que está dispuesta a buscar hasta que Dios rasgue los cielos y descienda?" Se ha
reportado que solamente un 30% (uno de cada tres) de quienes comienzan a buscar
un avivamiento lo experimentan actualmente.
Hay un precio que pagar. Dios ayuda a muchos de nosotros a reunir sus requisitos y
prepara el camino para sus obras maravillosas para la humanidad, ¡obra que
contarán para la eternidad!
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El Último Avivamiento
Por David Wilkerson
28 de enero de 2008
¿Qué hay por delante de la iglesia de Jesucristo? Esta es una pregunta de gran
preocupación para creyentes mundialmente. Mientras eventos catastróficos toman
lugar por todo el globo, muchos están preguntándose; “¿El Espíritu Santo reanimara
la iglesia antes del regreso de Jesús? ¿El cuerpo de Cristo dejara el mundo con un
quejido o con un grito de victoria?”
¿Qué hay por delante de la iglesia de Jesucristo? Esta es una pregunta de gran
preocupación para creyentes mundialmente. Mientras eventos catastróficos toman
lugar por todo el globo, muchos están preguntándose; “¿El Espíritu Santo reanimara
la iglesia antes del regreso de Jesús? ¿El cuerpo de Cristo dejara el mundo con un
quejido o con un grito de victoria?”
Jesús profetizo estas mismas cosas. Y sus advertencias eran para desafiar nuestra fe.
Mientras la iniquidad abruma e inunda la tierra, él pregunta: “Pero cuando venga el
Hijo del hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8).
Piénsalo: Cristo sabía todo lo que íbamos a enfrentar hoy, desde horrorizantes
tiroteos escolares, al alza de homosexualidad militante, a actos terroristas tomando
lugar por todo el mundo. En medio de estas cosas, él nos pregunta, ¿Seguirás
creyendo, aunque las cosas empeoren? ¿Desmayaras en tu confianza cuando las
cosas no sucedan como tú pensaste? O, ¿seguirás confiando en mí?”
Ves, a pesar del aumento en iniquidad y grandes calamidades, Jesús sabía que habría
un gran avivamiento en los últimos días. El Espíritu Santo inspiro las profecías de
Isaías, y él sabía muy bien acerca de la predicción de un avivamiento mientras el fin
se acercaba.
Yo creo con un número de estudios Bíblicos que la profecía de Isaías tiene una doble
aplicación. No habla tan solo acerca del Israel natural después de su cautiverio en
Babilonia, sino que también acerca del Israel espiritual que estaba por venir: el
cuerpo de Jesucristo, la iglesia de la Nueva Jerusalén. Pablo cita de Isaías 54 cuando
hace referencia a la “Pero la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros,
es libre, “(Gálatas 4:26). Pablo vio la profecía de Isaías como dirigida “a los hijos de
promesa,” aquellos en Cristo por fe.
Si Isaías dirigió su profecía solo al Israel natural, significaría que sus promesas aún
no se han cumplido. En resumen, no se ha cumplido que “Porque te extenderás a la
mano derecha y a la mano izquierda; tu descendencia heredará [Gentiles en ingles]
naciones” (Isaías 54:3). Sin embargo, esa palabra fue claramente cumplida en Cristo,
en la cruz y en Pentecostés. Piénsalo: cuando Isaías dirigió este mensaje, algunos
42,000 israelitas habían salido del cautiverio Babilónico. Para el tiempo de Jesús, su
número había aumentado solo cerca de tres millones.
Isaías se refiere a su profecía como una promesa de parte de Dios, una palabra jurada
desde el cielo. Vemos los juramentos del Señor cerca de las montañas y hasta
refiriéndose a su pacto con Noé. Él dice, en esencia, “Tan seguro como no permitiré
otro diluvio sobre la tierra, te digo que habrá un despertar de mi iglesia en los últimos
días.”
“Se levantarán los reyes de la tierra, y príncipes conspirarán contra Jehová y contra
su ungido, diciendo: ‘Rompamos sus ligaduras y echemos de nosotros sus cuerdas’”
(Salmo 2:2-3). En resumen, “echemos todo estorbo moral, todas señales morales del
pasado.”
“y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. (Mateo 16:18). Nada de las
entrañas del infierno puede esperar destruir la iglesia de Cristo. Su ojo siempre está
sobre su pueblo, y a través de todo el advierte a Satanás y sus huestes, “No toques la
niña de mi ojo.” “Si alguno conspirare contra ti, lo hará sin mí; el que contra ti
conspirare, delante de ti caerá.” (Isaías 54:15). ¿Puedes ver lo que Dios está diciendo
aquí? “El diablo va a venir contra tuya. Enemigos salidos del infierno se unirán
contra tuya. Pero Satanás no tendrá éxito.”
Deja que el diablo haga lo que le plazca. Deja que el infierno abra sus entrañas y
derramen cada cosa vil. No tendrá impacto alguno sobre el plan de últimos días de
Dios para su pueblo. ¡Gloria al Señor, su iglesia no puede ser destruida!
La iglesia de Cristo se extenderá más allá que las limitaciones anteriores para llevar
las buenas nuevas. “Ensancha el sitio de tu tienda y las cortinas de tus habitaciones
sean extendidas; no seas apocada; alarga tus cuerdas y refuerza tus estacas. Porque
te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; tu descendencia heredará
naciones y habitará las ciudades asoladas.” (Isaías 54:2-3). Sencillamente, la iglesia
aumentara sus fuerzas y levantara multitudes en Cristo.
Pero solo unos versículos más abajo, leemos esta advertencia a la iglesia de los
últimos días: “¡Pobrecita, fatigada con tempestad, sin consuelo! He aquí que yo
cimentaré tus piedras sobre carbunclo y sobre zafiros te fundaré.” (Isaías 54:11). Nos
dice que seremos afligidos, lanzados de lado a otro por tempestad. Pero nos promete
un fundamento de zafiros. ¿Qué significa esto, exactamente?
Como creyentes, podemos estar bajo pacto con Dios, llevando en nuestros corazones
sus preciosas promesas de no temer, ninguna vergüenza, ninguna confusión, ningún
reproche. Sin embargo, aún es posible que seamos lanzados de acá para allá por
tormentas personales, experimentar soledad, y no tener quien nos consuele. En
resumen, se permite que Satanás nos zarandee.
En el versículo 16, Isaías nos ofrece una imagen de cómo obra nuestro adversario.
Dios dice, “Yo hice al herrero que sopla las ascuas en el fuego y saca la herramienta
para su obra; y también yo he creado al destructor para que destruya.” (54:16). Aquí
tenemos una imagen de un herrero, bombeando los bramidos en su fuego para hacer
un calor blanco. Entonces él usa ese calor para martillar armas de guerra en su
yunque. El herrero representa a Satanás, quien constantemente idea nuevas armas
contra la iglesia y creyentes.
Que increíble imagen. Es como si Dios dijera, “Mira, el diablo está ventilando su
fuego, haciendo armas que el usa para tratar de destruir a mi pueblo. Yo cree a este
herrero, creándolo como un ángel. Él una vez tuvo poder y autoridad, pero fue
echado por su rebelión. Yo lo cree, y yo puedo encadenarlo. Él puede ir tan lejos
como yo se lo permita.”
¿Dónde vemos esta separación hoy entre la iglesia y Dios? Lo veo más obviamente
en las iglesias comprometidas principales. Pero también lo veo en el evangelio de
pedal suave de las iglesias post modernas. Es evidente que hay una separación de la
presencia manifiesta de Dios. Ciertamente, ha sucedido justo como Jesús y Pablo
profetizaron: muchos se han convertido en amantes de placeres más que amantes de
Dios…teniendo una forma de religión sin poder…despreciando el evangelio de sus
padres…echando abajo las antiguas señales morales…cambiando la Palabra infalible
de Dios para moldearla a los tiempos.
No estoy condenando a la iglesia moderna de hoy en día. Pero que el Señor nos ayude
si no tenemos su presencia manifiesta en estos últimos días. Y a causa del
compromiso de tales iglesias, él tuvo que esconder su presencia de ellos por un
tiempo. Sin embargo, Dios no se ha divorciado de la iglesia comprometida. Isaías
dice que él la llama a que regrese a él.
“Así dijo Jehová: ‘¿Qué es de la carta de repudio de vuestra madre, con la cual yo la
repudié? ¿O quiénes son mis acreedores, a quienes yo os he vendido?’” (Isaías 50:1).
En esencia, Dios está diciendo, “Tú te alejaste de mí. Tú amaste al mundo y las cosas
del mundo, y me dejaste por ellos. Yo no te deje a ti, tú me dejaste a mí. ¡Muéstrame
los papeles de divorcio! Muéstrame donde yo te vendí a otro.”
“Porque así dice Jehová: ‘De balde fuisteis vendidos; por tanto, sin dinero seréis
rescatados.” (52:3). El continua: “Te digo, este matrimonio no ha terminado. No creas
que no haya esperanzas. Aun te amo, a pesar de que te prostituiste. Te cansaste de
mí, pero a pesar de todo, te amo. Quiero que vuelvas a mi.”
“Porque como a una mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, como a
la esposa de la juventud que es repudiada, dice el Dios tuyo. "Por un breve momento
te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias. Con un poco de ira escondí
mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de
ti", dice Jehová, tu Redentor.” (54:6-8)
Aquí tenemos una promesa jurada de Dios para traer a si a su esposa prostituta. En
resumen, el último avivamiento será uno de solo misericordia. El Señor le está
diciendo a su iglesia, “Cuando regreses a mí, no te condenare ni te reprobare. En
lugar de eso, te ungiré con mi Espíritu. Te daré poder donde antes no tenías.”
Los clavos que perforaron las manos y pies de Jesús fueron moldeados en el yunque
del diablo. La espada que perforo su lado fue forjada en la tienda del herrero infernal.
Pero la sangre que salió de su cuerpo nunca perdió su poder. Isaías nos está diciendo:
“Dios ha jurado que la sangre de su Hijo será rociada sobre los transgresores en cada
nación en la tierra. Tiene poder en cada nación árabe, en Israel, en África, en Europa.
El verá su simiente esparcida a muchas multitudes, de todas las tribus y lenguas.”
Un gran despertar continuara en los últimos tiempos.
Puede ser desalentador ver cómo crecen las religiones falsas en gran número
mientras la iglesia de Cristo parece tan poca en número. Pero Isaías dice, “Es tiempo
de cantar, oh esposa estéril. Ensancha las habitaciones de adoración, alarga y
fortalece tu visión. Vas a ver adelantos en la izquierda y derecha.” “¡Regocíjate,
estéril, la que no daba a luz! ¡Eleva una canción y da voces de júbilo, la que nunca
estuvo de parto!, porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada,
ha dicho Jehová.
¿Cómo va a suceder este último avivamiento? Requiere algo poderoso, algo que
sacuda al mundo para precipitarlo. Isaías nos dice que este sacudir sucederá en un
día. En el capítulo 47, él dice que el espíritu de Babilonia debe ser tratado. A través
de las Escrituras, Babilonia siempre ha representado un espíritu de prosperidad,
comodidad y placer. Y el espíritu babilónico es el mismo en cada edad.
En resumen, Isaías dice que no puede haber ningún esparcimiento de avivamiento
en los últimos días hasta que el espíritu de avaricia y falsa seguridad se echado abajo.
Podemos orar por avivamiento, podemos clamar a Dios que derrame su Espíritu,
pero es imposible a menos que el Señor primero sacuda todas las cosas: “Oye, pues,
ahora esto, mujer voluptuosa, tú que estás sentada confiadamente, tú que dices en tu
corazón: ‘Yo soy y fuera de mí no hay otra… Vendrá, pues, sobre ti un mal cuyo
origen no conocerás; caerá sobre ti un quebrantamiento que no podrás evitar. Una
destrucción que no podías suponer vendrá de repente sobre ti.’” (Isaías 47:8, 11; énfasis
propio).
Dios no va a dejar pasar el pecado, sino que fulminara las fortalezas del diablo. Él va
a sonar un llamado de despertar a su iglesia con “una desolación repentina.”
Ciertamente, este será un gran acto de amor de parte del Señor. El ama tanto a su
iglesia que se niega a permitir que la comodidad, placer y apostasía cieguen y
arruinen el objeto de su amor.
“Se mostrará piedad al malvado, pero no aprenderá justicia, sino que en tierra de
rectitud hará iniquidad y no mirará a la majestad de Jehová.” (26:10). Aquí tienen la
prueba que un avivamiento es imposible en tiempo de comodidad y prosperidad.
Isaías dice en términos claros, “En tiempos de bendición, el pueblo no se volverá.”
Nada va a suceder hasta que la cartera sea afectada. Solo “… porque luego que hay
juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia. “(26:9).
Isaías ofrece una última prueba que un último avivamiento vendrá después de una
sacudida:
“… como para vindicación, como para retribuir con ira a sus enemigos y dar el pago
a sus adversarios. … Y temerán desde el occidente el nombre de Jehová, y desde el
nacimiento del sol, su gloria, porque él vendrá como un río encajonado, impelido por
el soplo de Jehová. Vendrá el Redentor a Sión y a los que se vuelven de la iniquidad
en Jacob dice Jehová.
“Y este será mi pacto con ellos, dice Jehová: ‘Mi espíritu que está sobre ti y mis
palabras que puse en tu boca, no faltarán jamás de tu boca ni de la boca de tus hijos
ni de la boca de los hijos de tus hijos.’ Jehová lo ha dicho, desde ahora y para
siempre.” (Isaías 59:18-21)
Uno de los hombres de seguridad de nuestra iglesia fue una vez el sumo sacerdote
tercero en rango en la adoración diabólica de Santería. El territorio de él era el Bronx,
y su apartamento estaba lleno de huesos humanos. Él se había vendido alma y cuerpo
a Satanás. Pero el corazón de este hombre fue conmovido por el Espíritu Santo. Se
puso inquieto, y una noche desafió a Jesús, “Si tú eres más poderoso que el diablo al
que yo sirvo, muéstramelo en sueños esta noche.”
El salió de esta experiencia encendido por Jesús, saco cada indicio de maldad de su
apartamento, y entrego su vida al Señor. Hoy, él es un dulce y devoto hombre de
Dios y está activo en nuestra iglesia. Lo detuve recientemente y le dijo, “Veo a Jesús
en ti.” Él contestó, “Hermano David, usted no sabe lo que esas palabras significan
para mi después de veinte años de servirle al diablo.” Su nueva vida milagrosa salió.
de ese sueño dado por Dios.
Querido santo, el día viene cuando el mundo entero vera a Jesús. El apóstol Juan vio,
“Después de esto miré, y vi una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas
las naciones, tribus, pueblos y lenguas. Estaban delante del trono y en la presencia
del Cordero, vestidos de ropas blancas y con palmas en sus manos. Clamaban a gran
voz, diciendo: ‘¡La salvación pertenece a nuestro Dios, que está sentado en el trono,
y al Cordero!’” (Apocalipsis 7:9-10).
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Reparador de Portillos,
Restaurador de Caminos para Habitar
Donnie Swaggart
01 de Abril de 2012
Isaías 58:12 - “Y los que serán de ti edificarán los viejos desiertos: levantarás los
cimientos de muchas generaciones; y serás llamado, el reparador de la brecha, el
restaurador de los caminos para habitar. (Los "viejos lugares baldíos" se refieren a lo
que había sido arruinado por el pecado. Un avivamiento del corazón cambiará todo
esto.
"" Levantarás los cimientos de muchas generaciones ", se refiere al hecho de que todas
las grandes promesas de Dios dadas en los últimos años ahora se cumplirán, debido
al presente movimiento de Dios.
“‘El reparador de la brecha, el restaurador de los caminos para habitar ", proclama el
Predicador dirigiendo a las personas a la Biblia.)
El profeta Isaías era un hombre de Dios audaz e intransigente. No buscó el favor del
pueblo ni de los líderes religiosos de Judá; solo buscaba el favor del Señor.
Su ministerio fue para Judá, la Iglesia de ese día. Él profetizó la venida del Mesías.
De Moisés a Cristo fue un lapso de tiempo de aproximadamente 1,500 años. Si uno
midiera desde Moisés en un extremo y Cristo en el otro, se cruzarían en Isaías 53:6
“Todos los que nos gustan las ovejas se han extraviado; hemos convertido a cada uno
a su manera; y el SEÑOR ha puesto sobre él la iniquidad de todos nosotros”. Esto no
es una coincidencia, pero nos muestra que la Cruz debe ser el tema central de la vida,
la vida y el ministerio.
Los mortales "moretones" y "llagas" de Israel eran una analogía espiritual y no podían
ser curados por nada excepto el Señor.
La Iglesia Moderna
Esta es una imagen perfecta de la iglesia moderna de hoy. Tratamos de curar los
problemas del hombre con el psicoanálisis, la terapia, el asesoramiento, las hazañas
religiosas y la necedad. La Biblia ha sido arrojada a un lado. En algunas iglesias hoy
se le dice a la gente que ni siquiera traigan una Biblia a la iglesia ya que el susurro de
las páginas perturba. Y hay los llamados pentecostales o iglesias carismáticas que no
permitirán que nadie hable en lenguas en voz alta o levante la mano, ya que podría
ofender a alguien. Tengo una cosa que decirles a los llamados predicadores y
profetas autoproclamados que mienten y engañan al pueblo de Dios.
“Sus vigilantes son ciegos: todos son ignorantes, todos son perros tontos, no pueden
ladrar; durmiendo, acostada, amando dormir ". Israel se perdió por culpa de los
vigilantes ciegos, es decir, los predicadores. Israel perdió todas las grandes promesas
de Dios debido a los "perros tontos" que "no pueden ladrar", lo que significa que los
predicadores no predican la verdad y advierten al pueblo de la falsa doctrina.
C.H. Spurgeon dijo: "A los predicadores de doctrina falsa no les gusta nada más que
la detección prematura de sus acciones, y cualquiera que se niegue a hablar debe ser
considerado como participante de sus malvados negocios".
Como dice la vieja canción: “Levántate, defiende a Jesús, soldados de la Cruz, levanta
en alto Su estandarte real, no debe sufrir pérdida, de victoria en victoria, Su ejército
liderará, hasta que cada enemigo sea vencido y Cristo es el Señor en verdad ".
"Brecha" en hebreo significa "una ruptura o brecha que ha surgido". Esa violación fue
una falta de fidelidad a la Palabra de Dios. Como hubo una brecha en Judá, hay una
brecha en la iglesia hoy. Hemos hecho a un lado la Biblia y hemos aceptado nuevas
modas y nuevas filosofías.
Esta brecha no es nueva, pero ha durado mucho tiempo, evolucionando lentamente
hasta que la grieta se ha convertido en una ruptura completa. La iglesia debe volver
a la Biblia y a la Cruz.
Note que el Texto no dice que el Señor es quien repararía la brecha, pero el Texto dice
que nosotros somos los que debemos reparar y restaurar. Es nuestro trabajo orar, es
nuestro trabajo buscar el Rostro del Señor, es nuestro trabajo conocer la Palabra y
proclamar la Verdad de la Palabra de Dios.
“Y los que serán de ti edificarán los viejos basureros. Levantarás los cimientos de las
muchas generaciones”. Esto nos dice que los grandes Movimientos de Dios en el
pasado no pueden continuar a menos que esta generación presente tenga su propio
avivamiento.
El Señor ha diseñado que la brecha no puede repararse a menos que se repare con
corazones dispuestos y obedientes. Es nuestro trabajo reparar la brecha.
Los caminos de los que se habla son los caminos de la justicia. Debemos regresar a la
Biblia, regresar a la Cruz, regresar a la Sangre y rehuir cada viento tonto de la
doctrina.
Donnie Swaggart
15 de Junio de 2016
1 Reyes 18:41 - “Y Elías dijo a Acab: Levántate, come y bebe; porque hay un sonido
de abundancia de lluvia ".
Durante tres años y medio, hubo una hambruna en Samaria (otro nombre para
Israel). Esta hambruna, en los efectos físicos sobre la nación, retrata la condición
espiritual de la nación.
Hoy hay una hambruna en la tierra y una hambruna en la iglesia. Es una hambruna
de la Palabra de Dios, una hambruna del movimiento del Espíritu Santo y una
hambruna del Mensaje de la Cruz. Cuando la iglesia abandona la Cruz, lo único que
queda es una falsa doctrina, y "otro Jesús, otro evangelio, otro espíritu".
Así como la iglesia va, la nación también. Nuestra nación está en una forma
lamentable, donde el mal se llama bien, y el bien se llama mal. No podemos culpar a
nuestros líderes políticos; También debemos culpar a los predicadores que ya no
predican el evangelio.
Sin embargo, no debemos perder la esperanza porque el Señor tiene grandes planes
para el futuro. Él nos prometió en Hechos 2: 17-18: “Y sucederá en los últimos días,
dice Dios, derramaré de mi Espíritu sobre toda carne; y tus hijos y tus hijas
profetizarán, y tus jóvenes verá visiones, y tus viejos soñarán sueños. Y sobre Mis
siervos y Mis siervas derramaré en aquellos días de Mi Espíritu; y profetizarán ".
Esto nos dice que se acerca un movimiento de Dios, y les digo: "Levántate, come,
bebe, porque hay un sonido de abundancia de lluvia". El agua es un tipo del Espíritu
Santo y viene la lluvia. Sin embargo, antes de que pueda llover, deben ocurrir ciertas
cosas, y en el capítulo 18 de I Reyes se nos da el camino de Dios para el avivamiento.
Entonces, veamos qué debe hacer la iglesia.
12 PIEDRAS
Elijah tomó 12 piedras para reconstruir el altar. Doce es el número de Dios para el
gobierno y esto nos dice que el fundamento del gobierno de Dios es la Cruz y la Cruz
sola.
LA ZANJA
Elijah luego cavó una trinchera completamente alrededor del altar. La trinchera
representaba la separación, entonces, ¿por qué hizo esto? Estamos en este mundo,
pero no debemos ser parte del mundo; Debe haber separación. La cruz nos separa
del mundo, la carne y el diablo.
MADERA
Creo que el apóstol Pablo se equivocó cuando escribió 1 Corintios 1: 17-18. No hay
gracia salvadora en el bosque, pero es lo que sucedió en esa Cruz de madera:
Jesucristo expiando el pecado del hombre. El Espíritu Santo, al instruir a Elijah en
cuanto a poner la madera en orden, estaba usando eso para señalarnos al futuro
sacrificio de Cristo. Además, mediante el uso del orden de las palabras, nos está
diciendo que Dios tiene un orden divino para todo lo que hace.
EL BULLOCK
Elijah luego tomó un becerro y lo cortó en pedazos y lo puso sobre la madera. El buey
cortado en pedazos tipificaba el sacrificio de Cristo: su cuerpo quebrantado por
nuestros pecados.
CUATRO BARRILES DE AGUA
Luego les dijo: "Llenen cuatro barriles de agua y viertan sobre el sacrificio quemado
y la madera". El agua representaba el lavado de la Palabra de Dios, con el número
cuatro representando todos los rincones de la brújula y lo que Jesús hizo por todas
las personas de todas las naciones.
Tres Veces
Elijah luego les dijo que vierta el agua sobre el altar y los sacrificios no una, ni dos,
sino tres veces. ¿Por qué? Porque el número tres representa la Trinidad: Dios el
Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo.
El texto también dice que el agua llenó la zanja. Para que se llenara la zanja, el altar
tenía que estar saturado por el agua, una vez más diciéndonos que debemos estar
saturados por la Palabra de Dios todos los días.
El Fuego Cayó
El texto decía: "Entonces el fuego del Señor cayó y consumió el sacrificio quemado, y
la madera, y las piedras, y el polvo, y lamió el agua que estaba en la zanja". En otras
palabras, el fuego del El Señor lo consumió todo sin dejar nada.
El fuego era un tipo de juicio de Dios que caería sobre Cristo en el Calvario, lo que
significa que la obra se llevó a cabo, Satanás fue completamente derrotado y todo
pecado expiado: pasado, presente y futuro.
Llegó La Lluvia
La única esperanza para nuestra nación y la iglesia es que llueva. Sin embargo, la
lluvia no vendrá hasta que el "altar sea reparado". La iglesia debe regresar a la Cruz,
y cuando se repare el altar, el Señor no solo nos enviará un chorrito de lluvia, sino
una abundancia de lluvia.
Donnie Swaggart
06 de Septiembre de 2015
Marcos 16:15 - "Y él les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda
criatura".
IR A TODO EL MUNDO
Realmente no sé cómo explicar esto, pero incluso cuando era un niño criado en el
camino, quedándose en sótanos de iglesias, hogares de personas y otros lugares,
sabía que había algo diferente en mi padre. Como se dijo, no sé cómo explicar eso,
pero sabía que él era diferente.
Desde los avivamientos de la iglesia que duraron de cuatro a nueve semanas, desde
la predicación de los campamentos de verano en las Asambleas de Dios, hasta el
lanzamiento en 1969 de The Campmeeting Hour, un programa de radio diario de 15
minutos, me di cuenta de que no era como otros predicadores.
La multitud creció hasta el punto de que las iglesias ya no eran una opción, por lo
que tuvimos que comenzar a ir a los auditorios de la ciudad. Nuestro mundo se
estaba expandiendo a medida que el evangelio alcanzaba corazones y vidas más allá
de nuestras fronteras anteriores de la iglesia.
No solo las multitudes eran más grandes, sino que los llamados al altar también se
volvieron masivos, con personas que dieron sus corazones al Señor y se acercaron
para ser llenos del Espíritu Santo.
NACIONAL A INTERNACIONAL
Luego, nuestro mundo se amplió aún más cuando papá se sintió impulsado a
transmitir la transmisión por televisión en países extranjeros, traducida a sus propios
idiomas. Esto incluía América Central, América del Sur, África, Australia, las Islas
del Mar, Europa y Rusia.
La transmisión tuvo un impacto tan grande en algunos países que las oficinas que
establecimos en las capitales recibían entre 10,000 y 15,000 cartas por semana.
Estos países nunca habían estado expuestos a la predicación como lo veían en sus
televisores todos los domingos. En realidad, llegó al lugar donde en la mayoría de
los países, transmitíamos la transmisión por televisión de tres a cinco veces por
semana. Tal fue la demanda.
Miles de personas acudían en masa a los estadios más grandes de las ciudades
capitales de estos países, y miles respondían a los llamados al altar al final de cada
servicio para entregar sus corazones al Señor.
ENTONCES Y AHORA
Han pasado 60 años para que todo esto suceda, pero han sido los mejores años de mi
vida. Ha sido una vida que no cambiaría por toda la riqueza del mundo. Comprenda
esto: no estamos disminuyendo la velocidad ni pensando en la jubilación o en
nuestros años de ocaso. No, seguimos adelante.
¿Por qué?
Porque la Palabra del Señor dice: “Ahora Josué era viejo y afligido en años; Y el
SEÑOR le dijo: Tú eres viejo y herido en años, y aún queda mucha tierra por poseer”
(Jos. 13:1).