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FRANCO LO PIPARO
Profesor de Filosofía del Lenguaje.
Universidad de Palermo
L
a figura del político y filósofo sardo An-
tonio Gramsci brilla con luz propia en
el altar de los mártires del comunismo.
El proceso de canonización de Gramsci co-
menzó el día 30 de abril de 1944 gracias a un
artículo publicado por Palmiro Togliatti en el
periódico L’Unità a su vuelta del exilio en la
URSS. Dicho artículo instituye la versión ofi-
cial sobre la vida de Gramsci después de su en-
trada en prisión. Según la vulgata del PCI,
Gramsci fue encarcelado por el régimen fas-
Nadie puede negar a estas alturas que La tesis que el profesor Lo Piparo sostiene
Gramsci fue enviado a la cárcel por el régimen sobre Gramsci queda clara en el elocuente tí-
de Mussolini violando la inmunidad parlamen- tulo de su obra I due carceri di Gramsci. La pri-
taria de la que gozaba como diputado. Como gione fascista e il laberinto comunista (Donzelli,
tampoco puede negarse que sus años en prisión 2012). Obra que mereció el prestigioso premio
no hicieron sino agravar su frágil y quebradiza Viareggio. Aunque no se trata de su único libro
salud. Ahora bien, ¿y si, a partir de aquí, la his- sobre Gramsci, pues le siguieron L’enigma del
toria de su vida y el destino de su obra no se Quaderno. La cacica ai manoscritti dopo la morte
ajustasen al relato de Togliatti? Lo cierto es que di Gramsci (Donzelli, 2013) –que provocó la
a partir de esos datos básicos el mito gramsciano creación de una comisión de investigación en
resiste mal la confrontación con la realidad. la Fondazione Gramsci para verificar posibles
Pues Gramsci no murió en la cárcel, sino en la anomalías en la catalogación de los cuadernos–
exclusiva clínica Quisisana de Roma, en 1937, y Il profesor Gramsci e Wittgenstein. Il linguaggio
disfrutando de libertad condicional desde octu- e il potere (Donzelli, 2014), sí se trata de la obra
bre de 1934. Y los Quaderni estuvieron siempre que mayor visibilidad ha dado a su empeño por
con él, al punto que fueron desarrollados, con- rescatar a Gramsci de la vulgata comunista. Se
tinuados y reescritos fuera de prisión. Eso sí, con trata de un fascinante libro que evita un ejerci-
cada vez menos interés por la cio de historiografía maniquea dibujando unos
política y más, en cambio, por personajes con luces y sombras que tratan de
la gramática. Gramsci vivió sobrevivir a un tiempo histórico marcado por
presó en dos las paradojas y contradicciones de la Europa to-
Uno de los principales res- talitaria de los años treinta. Así, Lo Piparo sos-
ponsables de que conozcamos cárceles, una tiene que Gramsci vivió preso en dos cárceles,
nuevos datos sobre la vida y física, la una física, la fascista, y otra ideológica, la co-
obra de Gramsci es Franco Lo munista. Lo que no es óbice para que afirme,
Piparo, profesor de Filosofía
fascista, y otra no sin escándalo para muchos, que si hoy los
del Lenguaje en la Universi- ideológica, la Quaderni existen es gracias tanto a Benito Mus-
dad de Palermo, quien vive comunista. Los solini como a Palmiro Togliatti.
embarcado en una cruzada
personal para rescatar al pen-
Quaderni La obra de Lo Piparo muestra a un Musso-
sador sardo del mito creado existen gracias lini carcelero que, al mismo tiempo, atiende las
por el mundo comunista. En peticiones de comodidades y materiales de es-
a Mussolini y
un sonado artículo publicado tudio de Antonio Gramsci. No es de extrañar
en mayo de 2016 en las pági- Togliatti que ambos se conociesen de su época socialista
métodos de instrucción e in- Sin Gramsci y la Según usted, ¿cuándo, cómo y por qué se
cluso a la tortura”. La referen- produce esta reescritura?
cia a los tribunales soviéticos sabia utilización ¿Por qué Gramsci siente la necesidad de
que practicaban la confesión que de su obra reescribir los Quaderni ya escritos? Los moti-
forzada como prueba de cargo vos son, al menos, dos. En primer lugar,
del imputado me parece clara.
hizo Togliatti no Gramsci pensaba en sus apuntes como en un
La nota continúa como sigue: habría existido libro a publicar: no se reescribe un diario,
los procedimientos garantistas el PCI como lo cuya función es registrar lo que ocurre o lo
precisan “un reforzamiento de que se piensa en un momento dado. En se-
la tendencia a la división de hemos gundo lugar, reescribir es indicio de repensar
los poderes y la independen- conocido. Y la o de cambiar, por pequeña o grande que sea
cia de la magistratura”. la mutación, un punto de vista.
historia de Italia
Hete aquí el extraordina- habría sido La reescritura de esos pasajes coincide en
rio juego de prestidigitador distinta el tiempo con la crisis documentada en la
de Palmiro Togliatti: estas carta “esópica” del 27 de febrero de 1933, que
declaraciones de inspiración analizo a fondo en I due carceri, y en la que
liberal se encuentran en la Gramsci afirma que toda su vida ha sido “un
Biblia de un autor presentado como comu- gran (grande para mí) error, una equivoca-
nista o incluso, hasta el 1956, como un mar- ción”. Se realizó, casi en su totalidad, fuera
xista-leninista-estalinista. Este hecho ha per- de la cárcel, cuando, encontrándose en las
mitido a muchos comunistas una suerte de clínicas, el control de la censura se convierte
paradójica iniciación a los principios del li- en más laxo o inexistente. El hecho de que
beralismo clásico. En este sentido, la defini- la sustitución de “clase” por “grupo social”
ción de los Quaderni como caballo de Troya ocurra en los Quaderni reescritos en el pe-
del liberalismo quiere representar, de manera riodo de las clínicas, deja sin base fundada la
icástica, esta situación de naturaleza paradó- explicación que ve en la introducción del
jica: los Quaderni son uno de los pilares de la concepto “grupo social” la presencia de la
llamada vía italiana al socialismo. censura. Y nos pone sobre la pista de la evo-
lución, hacia una configuración cada vez
P.- En su libro I due carceri di Gramsci menos marxista, de la filosofía gramsciana.
usted defiende este alejamiento de Gramsci
del comunismo mostrando a los lectores P.- Siguiendo su razonamiento, parece evi-
cómo el filósofo sardo reescribió pasajes im- dente que la evolución del pensamiento de
portantes de los Quaderni. Me refiero a los Gramsci hacia un comunismo de corte libe-
pasajes en los que el concepto “clase” se ral tras el advenimiento del estalinismo se
sustituye por el de “grupo social” o “grupo convirtió en un problema para Togliatti y el
dominante”. Se trata de un hecho intere- mismo PCI. ¿Hasta qué punto puede afir-
sante en tanto que el significado de las pa- marse esta idea?
labras, como sabemos, tiene una importan- R.- Togliatti hizo una operación genial:
cia central en el pensamiento político. siguiendo las indicaciones de Stalin de no