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INSTITUCIONES ORATORIAS
DEL CÉLEBRE ESPAÑOL

M. FABIO QUINTILIANO.
~~±----------------
* - *

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-
-
-

--

-
-
-
3/
- INSTITUCIONES ORATORIAS 6.
-
-

DEL CELEBRE ESPANOL E A 3

M. FABIO QUINTILIANO,
Kl 3 º 73
TRADUCIDAS AL CASTELLANo , Y ANoTADAs
8ol 6%
SEGUN LA EDICION DE ROL LIN,

ADOPTADA coMUNMENTE Por LAs UNIvERSIDADES Y sEMINARIos DE LA EURo PA,

EN oRSEQUIo DE Los QUE ExERciTAN LA ELoQUExcIA FoPENSE Y DEL PúLPrro,


Y DE Los QUE ESTAN DE DICADos Á LA INSTRuccioN
DE LA JuvENTUD, -

POR EL P. *** DE LAS ESCUELAs PIAS.

OBRA DEDICADA

AL PRÍNCIPE NUESTRo SEÑOR.

TOMO PRIMERO. —. «,
a -
s º
CON LICENCIA. -- - ..-

EN LA IMPRENTA DE LA ADMINISTRAcIoN DEL REAL AREITRIO DE BENEF ICENCLA.

MADRID 1799.

Se hallará en la Librería de Ranz calle de la Cruz.


No daré la ventaja á Quintiliano sobre Ciceron ; pero tengo
á sus Instituciones Oratorias por obra mas perfecta, y acabada que
los libros retóricos, que éste compuso: como que se propuso for
mar en ellas un orador desde los primeros años, y aun desde
la cuna ; poniendo el mayor esmero en sacarle consumado. Aun
el mismo Ciceron da bastante á entender, no estar satisfecho de
todo quanto compuso sobre la orotoria. Angelo Policiano en la
prefacion á las Instituciones de Quintiliano.
·
… :( - -
· · ·-
------
- r- ----
AL SERENíSIMO
P R fN cIP E DE ASTU RIAs
NUESTRo SEÑOR.
- S,

- y N e. *.

º Las Instituciones Oratorias del célebre


Español M. Fabio Quintiliano, maestro de
los sobrinos del emperador Domiciano , a
creditan tanto d su autor, y d nuestra na
cion , quanto las extrangeras han andado
siempre en la necia pretension, unas de a
propidírsele; otras d lo ménos de quitarnos
la gloria de ser muestro ; suscitando para
este fin maliciosas dudas sobre su patria ; y
oponiéndose, pero sin alegar la menor prue
ba, d la constante tradicion de diez y siete
siglos. No ménos acreditan el mérito de esta
Obra inmortal las varias traducciones, que
se han hecho de ella en otras lenguas; care
ciendo la muestra (sin que sepamos d qué a
tribuirlo) de este bien, á que tiene mas fun
dado derecho que todas. Y aunque un empe
ño de esta naturaleza (que tal es el de in
terpretar d Quintiliano) requeria fuerzas su
periores, con todo mos hemos determinado á
trasladarle á muestra lengua , y presentar
d W. A. mo una traduccion, qual correspon
dia á tan alto Nombre, sino qual fué posible
d quienes deseaban acertar. Conque, SEÑOR,
mo la confianza del desempeño, sino solo la
bondad de V.A. que se grangea la voluntad
de todos , nos ha puesto atrevimiento para
ofrecerle tan pequeño don: con lo que se aña
dirá un nuevo motivo, que aumente el justo
y natural respeto, que nos poney
- - •

SE ÑOR

A los Reales pies de v. A. -

P. Ignacio RodriguezCalasanz.
-
de S. Joseph P. dePedro Sandir
S. Basilio.
III.

PR ÓLO GO.

O hemos de negar la necesidad del estudio de las bue


nas letras, desterrando de la humana sociedad los conocimien
tos, que mas nos adornan; ó es preciso confesar, que á to
do hombre de buen gusto es punto ménos que indispensable
el de las Instituciones Oratorias de M. Fabio Quintiliano. En
todos tiempos los hombres sabios, no como quiera las han
leido, sino que, mirándolas como una mina rica, é inago
table de los conocimientos mas sólidos , que contribuyen á
formar el juicio del hombre, les hiciéron el debido honor de
colocarlas en la clase de aquellos libros, que no bastando
leerlos una sola vez , y de galope, es necesario estudiarlos
con la mas profunda meditacion, y de continuo. Quintilia
no trató con tanto acierto de la oratoria, que su autoridad
en este punto es decisiva, y corre parejas con la del mismo
Ciceron: y con tanta dignidad, y tan ¿ propósito ( en lo
que tal vez le saca alguna ventaja) que de los preceptos,
que prescribe para formar un orador perfecto, claramente se
colige, que el que aspire á serlo, debe estar abastecido del
conocimiento de todas las ciencias. Las Instituciones de Quin
tiliano son como un lienzo, donde con los colores mas vivos
retrata al orador, no como vulgarmente se le concibe , sino
con toda la perfeccion de que es capaz. Desvaneciendo la
idea comun, de que el oficio del orador solo se reduce á ha
blar en público, ayudado de ciertas reglas pueriles, nos le
pinta tan recomendable por su ciencia, y conducta, que no
ménos triunfe del corazon humano por la persuasiva de las
costumbres, que por el nervio de las razones. Miradas por
este lado, hallamos en ellas una cosa , que cierto arrebata
la admiracion de qualquiera ; al ver, que un hombre nacido
en el seno del paganismo, prescriba reglas tan acertadas, que
no ménos quadran al que ha de ocupar dignamente la cá
2
IV. PRóLo Go.
tedra del Espíritu Santo, que al que ha de manejar con loa
la eloqüencia en las causas forenses. Los primeros hallarán
en Quintiliano unos preceptos tan ajustados para el desem
peño de tan alto ministerio, como si para ellos solos se en
derezasen: lo que no tendrá reparo en conceder el que va
ya careando la doctrina de nuestro paisano con la del padre
de la eloqüencia española Fr. Luis de Granada en su retó
rica eclesiástica. Por lo que hace á los abogados, ocioso pa
rece el decirles, que no pueden exercer la oratoria forense
sin la doctrina de tan sabio maestro: puesto caso, que para
ellos principalmente encaminó sus preceptos. ,

Quintiliano, como que tenia bastante práctica en las con


tiendas del foro, hace ver, quánto se distingue el abogado
perfecto del mediano; el que posee una eloqüencia nervio
sa, y varonil, del que va fiado en una retórica pueril, y que
no pasa de la corteza de las palabras; el que defiende al reo
con cierta no mal fundada esperanza de enseñorearse del co
razon del juez , del que fria, y secamente hace su oficio,
¿. su misma ineptitud el desprecio, y la risa; fi
nalmente, el que sabe valerse de las riquezas del arte, para
vencer con una fuerza irresistible la repugnancia de la hu
mana voluntad, del que por falta de caudal no puede sa
cará salvo al reo, si ya no empeora su causa. Y como en
estos choques de los tribunales, es donde mas campa, y luce
la destreza del abogado (tratándose, no ya de un asunto
político, no del mejor acierto en una deliberacion, sino de
los intereses , honor, y vida de un hombre) por tanto
Quintiliano adiestra, y provee, digamos así, de todo géne
ro de armas defensivas, y ofensivas á su orador, no para un
lance solo, sino para quantos son imaginables: y á la ma
nera que un astuto general, desviándose tal vez de la es
peculativa de la táctica militar, ordena su gente segun las
circunstancias, que le rodean , para salir con la victoria, así
nuestro insigne maestro advierte al abogado los lances, en
que con alabanza suya, y utilidad del reo, debe apartarse
de los preceptos del arte , disimular el artificio; y cami
nar con cierta sencillez, que teniendo tanto mas de astucia,
quanto ménos lo aparenta, le conduce al vencimiento por los
-
P Ró Lo Go. V

mismos pasos, que al parecer le apartan del fin principal.


Para esto no solamente se vale de las observaciones , y
práctica de los mas hábiles oradores, y abogados griegos, y
romanos, acomodadas á todos los géneros de eloqüencia, si
no de innumerables lances, y exemplos particulares : hacien
do ver cómo se manejáron, para vencer dificultades insupe
rables ; quándo negaban el hecho sobre que se litigaba ; quán
do lo confesaban llanamente , pero con mayor ventaja ; quán
do convenian con el contrario en ciertas menudencias, para
merecer el crédito del juez en el punto cardinal de la cau
sa; quándo combatian abiertamente al adversarios y quán
do con estratagemas , y medios disimulados ; quándo mani
festaban cierta flaqueza , y falta de fuerzas, para hacer
mas odiosa la prepotencia, y presuncion de la parte con
traria ; y quándo asestaban contra ella toda la artillería
de la oratoria ; finalmente, quando convenia usar de cier
to disimulo con aquella ; y quándo manifestar, que calaban
sus mas secretas intenciones.
Esto se llama eloqüencia: en esto la pone Quintiliano,
y en todo aquello, que en qualquiera asunto, que trate
el orador, contribuye para persuadir sin resistencia ; no en
los preceptillos de escuela, y de las retóricas vulgares, to
lerables solamente en los jovencitos, cuyos estómagos no pue
den llevar tan grueso manjar, ni digerir tan sólida doctrina,
como los robustos, y varoniles. Esto le movió á Quintilia
no á escribir sus Instituciones, fruto de veinte años de en
señanza, y muchos de práctica; el ver, que la eloqüencia,
habiendo degenerado no poco de su antiguo vigor, y brio,
iba tomando un ayre de puerilidad, afeminacion , y loqua
cidad impertinente. Pensaban muchos , que el buen decir
consistia, en ciertos conceptillos, agudezas, retruécanos, ju
guetes de palabras, y flores del lenguage: veian, que se
mejantes pueriles adornos, y pensamientos, que no pasaban
de la corteza, no solo caian en gracia á muchos destituidos
del buen paladar para discernir entre el mucho hablar, y
bien decir, sino que merecian los aplausos en tanto grado,
que ya se tenian por bellezas del arte lo que en tiempó de
Augusto, ni aun en los principiantes hubiera sido tolerable.
VI PR ó Lo G o.
Porque quando llega á corromperse el gusto en una facul
tad (qualquiera que sea) sucede poco ménos, que con los
estómagos estragados, que para nada tienen mas despierto
el apetito, que para lo que les daña. Animó á muchos es
te buen suceso para llevar adelante su corrompido sistema.
Formóse en poco tiempo una como secta de corrompedo
res de la verdadera eloqüencia: mancomunándose , al pare
cer, para destruirla del todo.
Lo hubieran logrado muy á su placer, segun el séqui
to que tenian, y segun esta facultad se hallaba ya debi
litada, y sin fuerzas: pero prevaleció la razon contra el
error, como es justo, que así suceda. Y si bien Séneca es
pañol, fué como quiere Rollin, el corifeo de esta corrompi
da escuela, tenemos la gloria de que otro español (dispu
ten lo que quieran en este punto los extrangeros) mante
niendo los fueros de la gloqüencia, no solo la libró de su
total ruina, sino que resarció muy cumplidamente los da
ños, que habia recibido. Así fué: levantó la cabeza por los
esfuerzos de Quintiliano, respiró, y logró por fin , valién
dose de sus armas naturales, enseñorearse de sus mismos
enemigos. - -

Esta fué la utilidad, que por el pronto resultó á la elo


tiencia romana de las Instituciones Oratorias del español
Quintiliano. Digo por el pronto: porque las que resultáron
en lo sucesivo á las bellas letras de este precioso monumen
to de la antigüedad , no hay para que decirlo ; constando
por el unánime consentimiento detodos los siglos el apre
cio, que de él hiciéron todos los sabios. Solamente digo,
ue aun quando no nos ofreciera mas que unos preceptos
sólidos de la oratoria, eran muy dignos de recomendacion;
pero como para ser perfecto orador se necesitan otros mu
chos agregados de educacion , y conocimientos de , todas fa
cultades , se propuso Quintiliano señalar el camino, para
conseguir todo esto.
Mirados por este lado sus escritos, son el método de es
tudios mas completo que pueden desear los que se ocupan
en enseñar á la juventud; y aun me atrevo á decir, que en
cierran las máximas de la mas christiana educacion de la
PR ó Lo G o. VII

primera edad. En prueba de ello, adviértase que Quintilia


no toma la instruccion de su orador nada ménos, que desde
la cuna. Y para conseguirlo ¿qué medios no practica de los
que conducen al fin deseado? ya tocante al conocimiento de
las ciencias, ya á las buenas costumbres. ¿Qué defecto, ya
natural, ya adquirido, puede impedir el ser orador consuma
do, á que no aplique los remedios mas oportunos? ¿Qué
cosa hay, por menuda que nos parezca, en que no prescriba
las reglas mas acertadas? ¿Qué padre se muestra tan vigi
lante en la educacion de su hijo, como él lo es en la de to
dos ? ¿Qué edad hay tan tierna, que él no preserve de todo
contagio? ¿Por ventura se olvida de ella aun en los juegos
mas inocentes ? Aun en los mismos entretenimientos quiere,
que sin perjuicio del desahogo que es natural, encuentre el
niño instruccion, y pasto del ánimo. Y si no ¿no le aparta
cien leguas de las truhanerías , y dichos pegadizos de los
criados? ¿No le pone al lado un ayo (no de aquellos que
acompañan al niño como la sombra al cuerpo ) sino un ayo
instruido, virtuoso, diligente, é industrioso, para indagar el
ingenio de los años mas tiernos? En el juntarse con sus igua
les ¿no usa de las mayores precauciones ? Ello es evidente,
que en materia de educacion, ni á los padres, ni á los maes
tros les queda mas que desear, si se proponen el método de
Quintiliano. --- ,

Pasemos mas adelante, quando la edad comienza á ser


capaz de mayor instruccion. Aquí es donde Quintiliano se
interesa tanto en el aprovechamiento de unos años tan capa
ces de todo, como él mismo demuestra, que no quiere que
se pierda instante. Porque, si bien dirigida esta edad, es in
decible, quantos conocimientos, útiles puede aprender, por
tener entónces las potencias (digamos así), nuevas, y des
embarazadas de qualquiera otra idea ; así malograda, adquie
re resabios, que duran toda la vida. Por tanto encarga á
los padres, y maestros, que los primeros conocimientos sean
útiles , sólidos, y relativos al fin, adonde aspiran : y para
lograrlo, les dice qué libros han de leer, y con qué órden;
qué distribucion han de hacer de exercicios, y tareas; cómo
los han de acostumbrar desde el principio á una pronuncia
VIII P Ró Lo G o.
cion fina, y delicada, evitando aquellos resabios, que á poca
costa se corrigen; y dexándolos tomar cuerpo, van á decir
no poco para impedir el fin de la oratoria. En todo esto, y en
otras cosas á este tenor Quintiliano es nimio, y prolixo; si
puede haber nimiedad, quando se trata de guiar sin torci
miento , ni vicio estas plantas racionales: las quales, quanto
mas tiernas, tanto mayor delicadeza requieren en los que las
manejan. Por tanto desterrando Quintiliano de la educacion
todo terror, y encogimiento, que los haga apocados, y ras
treros en el modo de pensar, encarga el mayor cuidado en
inspirarlos la emulacion, el honor, el deseo de la verdadera
alabanza, y la hidalguía en los pensamientos.
* Por este camino ameno, y sembrado de conocimientos
, º

útiles va conduciendo, como. por la mano, al niño al estudio


de la gramática, de la geometría, de la música, de la his
toria, de los autores mas clásicos, y de todas las bellas ar
tes. Aquí le dice, cómo ha de entender al poeta; allí, có
mo ha de leer al historiador. Por una parte le muestra las
bellezas, que ofrece la gustosa leccion; por otra los tropie
zos, de que debe apartarle la luz de la crítica. Con esta gus
tosa enseñanza, y útil recreo le pone en estado de poder
ya caminar sin andadores, aunque acompañado del sabio
maestro: quiero decir, capaz de componer por sí alguna
pieza, pero mirando el modelo, que tendrá delante. Aquí en
carga mucho Quintiliano la conducta, que debe observarse
con el discípulo. Como es forzoso que al principio sean mas
los yerros que los aciertos; la prudencia del que le guia, di
ce él, debe disimular mucho, y alabar aquellas primeras
producciones, aunque defectuosas, de sus ingenios tiernecitos,
para animarlos á cosas mayores.
Nunca desampara Quintiliano á su orador por mas ade
lantamientos que haya hecho; ántes esto le mueve á ense
ñarle siempre cosas nuevas: y por mucho camino, que haya
andado, le muestra ser mas lo que queda. Aun quando ya
está exerciendo la oratoria, ó en los razonamientos hechos al
pueblo, ó en los tribunales, le corrige los defectos, ya na
turales, ya adquiridos; le anima quando va derecho; si se
desmandá, le trae suavemente al camino recto ; le inspira
P R ó Lo Go. IX.

pensamientos sublimes, y sentencias, que hagan mella en


los ánimos; le comunica quantos medios hay, para enseñorear
se de la voluntad agena; le reviste de todos los afectos de
la naturaleza con tanta viveza, y propiedad, que pueda á su
arbitrio dispertarlos en el ánimo de los jueces, ú oyentes,
sin que puedan resistirse. Tanta es la fuerza, y valentía de
la eloqüencia para excitarlos. Le comunica sobre lo dicho
energía en el decir, y estilo agraciado para ser oido con
gusto ; le arregla la voz, y se la entona ; le compone el ade
man, y todos los movimientos de cabeza, ojos, manos, pies:
y para decirlo de una vez, no puede imaginarse hombre tan
bronco, y poco favorecido de la naturaleza para la orato
ria, que ayudado de las reglas de Quintiliano no se civili
ce, y corrija.
He aquí una idea muy por encima de las Instituciones de
Quintiliano, y una centésima parte de los infinitos conocimien
tos que nos ofrecen ; de las quales se han tomado todas las
reglas de que estan llenos los innumerables artes de retórica,
y métodos de estudios, que andan impresos. Pero qualquiera
que vaya cotejando estas reglas con la doctrina de este, co
nocerá , que contentándose sus autores con aquellos precep
tos, que miran á dar á la juventud alguna idea del artificio
retórico, escasean lo principal, que son los medios para con
vencer al entendimiento, y mover la voluntad : en lo que
consiste la verdadera eloqüencia de griegos, y romanos. Los
demas artes, tratando por lo comun de tropos, y figuras, que
en sentir de todos, es la parte mas débil de esta facultad,
tocan muy por encima la invencion, que es el alma, y la que
da valor á todo lo demas; haciendo por otra parte poco
caudal de otros requisitos, en que Quintiliano hace tanto
hincapie. -

No permiten los reducidos límites de un prólogo dila


tarnos mas, para declarar lo mucho que ofrecen las Institu
ciones de M. Fabio Quintiliano: pero no podemos ménos de
condolernos con todos los sabios, de que habiendo tenido
nuestra nacion la gloria, que nos envidian, de haber sido este
español el primero, que á expensas del erario enseñó en Roma
la eloqüencia, y despues á los sobrinos de un emperador, ha
$r.
X PRóLo Go.
º sido mas conocido, y apreciado de los extraños, que de
os nuestros. Así es , que habiéndose hecho traduccion de
él en varias lenguas, sola su patria (y con bastante senti
miento de los amantes de las letras) por no sé qué mala
estrella, ha carecido de este bien ; sin atrevernos á determi
nar el motivo de esta omision ; quando apénas hay autor
griego, y latino, que no haya merecido esta honra, no en
una, sino en repetidas traducciones. Quien mas ha dado á
conocer á nuestro español, ha sido M. Rollin en la edicion
que publicó para el uso de la universidad de París, adoptada
por las universidades, y seminarios de Francia, Italia, y Por
tugal; la misma, que nosotros hemos seguido por las razones
que insinuaremos.
Quando este sabio extrangero pensó entablar en aquella
universidad las Instituciones de Quintiliano, advirtió, que en
tre las útiles materias que trata, habia algunas de ninguna
manera adaptables á nuestros tiempos; y que seria imperti
nencia digna de risa el tratarlas; por mas que en tiempo de
Quintiliano traxese alguna ventaja su conocimiento. Porque co
mo entónces se enseñaba la eloqüencia al estilo de escuela,como
ahora la filosofia, se introduxéron (porque así lo pedian las
circunstancias, que entónces reynaban ) no pocas qüestiones
sobre cosas frívolas, que el reproducirlas, al presente, el mé
nos mirado lo graduaria, y no sin razon, de afectada anti
güedad, ó extravagancia. Otras cosas de las que omitió, mi
ran precisamente á la ortografía antigua del idioma latino; y
que no tienen la menor relacion, ó parentesco con un trata
do de eloqüencia. Otras finalmente las escribió Quintiliano,
por acomodarse á la práctica de sus tribunales, de sus leyes,
y jueces. ¿Y qué diremos de aquellas, que miran precisamen
te á la manera, y forma de los panegíricos de los héroes, y
dioses del paganismo, y á otras necedades, que constituian
una gran parte de su teología? Qualquiera se reiría del que
en circunstancias tan contrarias se pusiese á escribir semejan
tes cavilaciones en una obra seria: porque es regla de pru
dencia, el acomodarse al uso presente, como lo haria Quin
tiliano, si ahora escribiese. Todo esto cercenó juiciosamente
Rollin en su edicion, que hemos seguido: de forma, que
º
P R ó L o G o. XI

suprimiendo todo lo que servia para abultar, escogió la nata


de este precioso monumento. Y este mismo pensamiento te
nia proyectado una persona de las mas ilustres , y erudítas
de nuestra nacion , empleada por nuestros católico monarca
en su servicio en una de las repúblicas extrangeras. Con esto
quedó la obra mas cómoda para todos (si es que no nos en
gaña la pasion) sin echarse ménos en ella quanto puede con
tribuir al perfecto, y cabal conocimiento de la verdadera
eloqüencia.

# 2
XII .

M. FABIo QUINTILIANo
AL LIBRERO TRIP HON.

M. andabas importunando todos los dias, para que die


se principio á la publicacion de mis libros sobre la instruc
cion del orador, que habia dirigido á mi amigo Marcelo. Por
lo que á mí toca, no pensaba estar la obra en sazon: habien
do empleado en trabajarla (como eres buen testigo ) poco
mas de dos años, pero embarazado en varias ocupaciones;
tiempo que por la mayor parte he gastado en discurrir so
bre esta materia casi infinita, y en la leccion de innumerables
autores, mas que en escribir. Siguiendo por otra parte el
precepto de Horacio en su arte poética , que aconseja no
apresuremos la publicacion de nuestro trabajo, sino que le
tengamos reservado por el discurso de nueve años; dexaba
descansar la obra , para que, calmando aquel amor, que te
nemos á lo que es parto de nuestro entendimiento, la pu
diese yo exáminar con ménos pasion, leyéndola, como si no
fuese cosa, mia. Pero si es tan deseada su publicacion, como
me aseguras, salga enhorabuena al público, y deseemos, que
tenga buena ventura : púes confio, que por tu cuidado, y
diligencia llegue á sus manos muy enmendada,
XIII

. ÍND I CE
DE Los LIBRos , y CAPÍTULos coNTENIDos EN ESTE ToMo
PRIMERO.

LIB RO PRIMERO.

Paoruro - - e - e º e - º - a - - e º - e - - • º s e - º - b º - º * - º * - º « PAG. I

CAP. I. De la educacion del que ha de ser orador. . . . . . 9


CAP. II. Si es mas útil la instruccion doméstica , que la
pública...... e º a e º e - - er e es e - e - - - - - - e - - - º - º * - - - e - - - º * - - 2C

CAP. III. I. Señales para conocer el talento. II. Cómo se


ha de manejar el ingenio del discípulo. III. De las di
versiones. IV. No se les debe azotar. . . . . . . . . . . . . . . . . 29
CAP. IV. De la gramática.... ...... • • • • • • • • • • - - - - º - - - 33

CAP. V. Qué libros deben leer primeramente los niños , y de


y qué manera. . . . . . . . º e - e a e º e e º e º « º e º º º - º * - º * - • • • • • º • º 39
CAP. VI. De los primeros exercicios de escribir , en que
deberí emplearse el gramático. . . . . . . . . . . . . . ... - - º * - - a 44.

CAP. VII. El niño , ántes de dar principio á la retóri


ca , debe ser instruido en otras artes , si estas son ne—
cesarias para uno que ha de exercitar la eloqiiencia... 46
CAP. VIII. Sobre la música , y sus alabanzas. ... .... ... 49
CAP. IX. De la geometría. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . 55”
CAP. X. I. La pronunciacion se debe aprender de los có
micos. II. El arreglo del ademan de los exercicios de la
palestra. . . . . . . . . . . . . . . • • • • • • • • • • • • • • • • • « a « º « • • a s a « s. 59
CAP. XI. En la primera edad pueden aprenderse muchas co
a e

sas á un tiempo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... 63

LIBRO SEGUND O.

CAP. I. Quíndo ha de estudiar el niño la retórica...... 69


XIV. f N D I c E.
CAP. II. De la conducta , y obligacion del maestro... . ... 73
CAP. III. Si conviene tomar desde el principio el mejor
maestro . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77
CAP, IV. Quáles deben ser los primeros exercicios del que
estudia retórica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8.
CAP. V. Qué oradores, é historiadores se deben leer en las
escuelas de retórica... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9.
CAP. VI. Qué escritores se han de leer primero.......... 96
CAP. VII. Qué asuntos debe el maestro de retórica dar á
sus discípulos para la composicion. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 98
CAP. VIII. Aprendan los niños algunos lugares selectos de
los oradores, é historiadores ; pero raras veces las com
posiciones , que ellos han trabajado... . ........ . . . . . . . . Ioo
CAP. IX. Si en la enseñanza de los discípulos se le debe
llevar á cada qual por lo que su ingenio pide... ...... 1o2
- CAP. X. De la obligacion de los discípulos... ... . . . . . . . ... roó
CAP. XI. Conviene que las declamaciones sean muy semejan. s

tes á las causas del foro... ..... ..... ...... ... ....... 197
CAP. XII. Refiítase á los que dicen, que la eloqiiencia no
necesita de preceptos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . II O”

CAP. XIII. Porqué causa los ménos instruidos suelen comun


mente ser tenidos por mas ingeniosos. . . . . . . . . . . . . . . . ... I 12
CAr. XIV. En las reglas debe haber tasa, y medida.... 116
CAP. XV. Division de toda la obra. ........ ... ... .. ... 12
CAP. XVI. Despues de refutadas las opiniones de otros,
muestra que la retórica es ciencia de bien decir ; y que
su fin es hablar al intento. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 122
CAP. XVII. De la utilidad de la retórica........... ... 126
CAP. XVIII. Si la retórica es arte..... . . . . . . . . . . . . . . . . . I 3 I
CAP. XIX. En qué género de artes se comprehende la re
tórica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 138
CAP. XX. Qué cosa ayuda mas para la eloqiiencia, el arte, -

ó la naturaleza. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14o
CAP. XXI. Si la retórica es virtud. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
f N D 1 c E. XV

CAP. XXII. De la materia de la retórica , que es todo


aquello de que trata. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • º º º e º º - a - º * I44.

LIBRo TERCERO.

CAP. I. I. Avisa que el presente libro no contiene materias tan -


-

gustosas , como los demas que siguen. II. Trata de los re.
tóricos , tanto griegos , como romanos. . . . . . . . . . . . . . . . . . 149
CAP. II. Orígen de la retórica. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 155
CAP.III. Cinco son las partes de la retórica. . . . . . . . . . . . 157
CAP. IV. Tres son los géneros de causas... . . . . . . . . . . . . . 158
CAP. V. I. Tres son los oficios del orador. II. Las qiies
tiones son finitas , ó infinitas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . I 59
CAP. VI. De tres maneras es el estado de la causa. .... 161
CAP. VII. Del género demostrativo... . . . . . . . . . . . . . . . . . . 163
CAP. VIII. Del género deliberativo. . . . . . . . . . . . . . . . ..... 17r
CAP. IX. Del género judicial. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . 187
.. . . - - - -

- • - - - - - - - - º *

PROEMIo... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . a ºe e º e º nº º a es e º a a 19o
CAP. L. Del exórdio. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .... ..... I93
CAP. II. De la narracion. . . . . . . . . . . . . . . . . ... . . . . . . .... 2 I 3
CAP. III. De las digresiones. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .... 242
CAP. IV. De la proposicion.........• • º • • • • • • • • • º e º a s a e 247
CAP. V. De la division. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .......... 249

LIBRO QUINTO.
Provio............... ... 257 -º º º º º º º º e • • • • • º • • º e e e º a º a

CAP.I. De la division de pruebas. ..................... 2 58


CAP. II. De los juicios antecedentes..................... 26o
CAP. III. Del rumor, y de la voz comun.....• 262 - • • • • • • • •

CAP. IV. De los tormentos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . id.


XVI. f N D 1 c E.
- CAP. V. De las escrituras públicas. . . . . . . . . . . . . . . .. .... 263 —
CAP. VI. Del juramento. . . . . . . . . . . . . . . ..... • . . . . . . . . . . 264
CAP. VII. De los testigos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... 266
CAP. VIII. De las pruebas artificiales. . . . . ............. 277
CAP. IX. De los indicios , ó señales.................. ... 28o
CAP. X. De los argumentos , ó pruebas. . . . ... ...... . . . . 282
CAP. XI. De los eremplos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .......... 303
CAP. XII Del uso de los argumentos , y pruebas......... 312
CAP. XIII. De la refutacion. . . . . . . .... . . . . . . . . . . . . . . . . 318
CAP. XIV. I. Qué cosa es epicherema , y enthymema. II. Su
uso debe ser raro. III. Qué adorno conviene á los argu
méfí0s. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • • •• . . . . . . . . . 333

LIBRO SEXTO. .

PRoeMio... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 337
CAP.I. De la peroracion, . . . . . . . . . . . . . . . • • • • • • • • • • • º 343
CAP. II. De los afectos....... e e e º e e e º e e e º e e e • • • • • • • • • • 359
CAP. III. De la risa.............. . . . . . . . . . . . . . e a e e e e 9 37o
CAP. IV. De la altercacion............. ... ... ....... º a s e e 386
CAP. V. Del juicio , y del consejo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 393

*,

-
º. -
-

-- «,
- 3 - mNSTITUCIONES ORATORIAS
DE M. FABIO QUINTILIANO
- , ".
Á MARCO MARCELO VICTORIO.

P R. O EMI O.

I. El motivo de haber escrito estas instituciones oratorias,


y dedicarlas á Marcelo Victorio. II. Pretende en ellas formar
un orador consumado , ya en las costumbres , ya en la ciencia:
haciendo ver que los antiguos no distinguiéron esta de la sa
biduría. III. Division de toda la obra. IV. Estilo que obser
va en estos preceptos ; y a quiénes podrán aprovechar.
-,
- -
- , a

«I. Camerine
que hube el descanso de mis tareas lite
rarias , empleadas por el espacio de veinte años en ins
truir la juventud, pidiéndome algunos amistosamente , que

MARCI FABII QUINTILIANI


ORATORIAE INSTITUTIONES
AD MARCELLUM VICTORIUM.
-”

P RO O E MIU M.

I. Cur bar institutiones oratorias scriprerit, et cur eas Marcello pictorio dedicet.
II. Qualem oratorem informet, perfectum scilicet moribus et doctrina....E. bie pro
ba rapientiam olim ab eloquenria non fuirse disjunctam, III. Partitio totiur operit.
IV. 2uali rrylo scripta rint baec praecepta, et quibus prodes re por sint. -

I. Palera n meis quie- studiis juvenibus impenderam, cum à me qui


tem , quae vigintiannos º erudiendis dam familiariter postularent, ut aliquid
TOM. l.
2 INSTITUCIONEs orAToRIAs

trabajase algo sobre la oratoria , por largo tiempo lo re


husé, por saber que autores de grande reputacion en ám
bas lenguas dexáron á la posteridad mucho trabajado á es
te propósito, y con el mayor esmero. Pero lo que me mo
via á mí mas para desenredarme de este encargo, eso mis
mo los empeñaba á ellos mas en su demanda; y era, que
entre tanta variedad de opiniones de los antiguos, y á ve
ces encontradas unas con otras, era dificil la eleccion porque
(á lo que yo llegué á entender) me pedian, no que escribiese
algo de nuevo, sino que á lo ménos diese mi voto sobre lo
que escribiéron los antiguos. Y aunque no tanto me mo
via la dificultad de la empresa, quanto tenia reparo en ex
cusarme á sus ruegos; descubriendo despues mas campo del
que presentaba la materia , voluntariamente me tomé mas
trabajo del que me encomendaban ya para ganarme mas á
mis amigos con este nuevo, obsequio, ya por no seguir age.
nas huellas en camino trillado. Porque quantos escribiéron
en materia de eloqüencia, tratáron de ella con tanto primor,
como si escribiesen para gente instruida á fondo en todas
las demas ciencias: ya porque despreciaban, como cosa de
poco valor, los primeros estudios del hombre; ya porque
no tenian por obligacion suya tratar de esto, siendo distin
tos, y diversos entre sí, los objetos de las artes; ya fuese
(y esto es lo mas verosimil) porque no esperaban ninguna
reputacion de un trabajo , que aunque necesario, está muy
apartado de la alabanza y¿
; sucediendo aquí lo
-
- - - Y

de ratione dicendi componerem, diu Sunt gandi verecundia, latius se tamen ape
equidem reluctatus: quod auctores utrius riente materia, plus quam imponebatur
que linguae clarissimos non ignoraban oneris, sponte suscepi; simul ut pleniori
multa, quae ad hoc opus pertinerent, dili obsequio demererer amantissimos mei; si
gentissime scripta posteris reliquisse. Sed mul ne vulgarem viam ingressus, alienis
qua ego ex causa faciliorem mihi veniam demum vestigiis insisterem. Nam caeteri
meae deprecationis arbitrabar fore, hac fere, qui artem orandi literis tradide
accendebantur illi magis, quod inter, di runt, ita sunt exorsi, quasi perfectis omni
versas opiniones priorum , et quasdam alio genere doctrinae, summam in elo
etiam inter se contrarias, dificilis esset quentía manum imponerent: sive conte
electio: ut mihi, si non inveniendi nova, mnentes tanquam parva, quae prius disci
at certe judicandi de veteribus injunge mus, studia: sive non ad suum pertinere
relaborem non injuste viderentur. Quam officium opinati , quando divisae pro
vis autem non tam me vinceret prae fessionum vices essent: seu , quod proxi
standi quod exigebatur fiducia, quam me mum vero, nullam ingeniisperantes gra
z.
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. I. 3
que en los edificios, que sepultados los cimientos , única
mente luce lo que descuella sobre la tierra. Mas yo que
ninguna cosa tengo por agena de la oratoria (sin lo que es
preciso confesar que no puede darse orador); y que estoy en
la persuasion de que en ninguna materia puede aspirarse á la
perfeccion, sino pasando por los principios, no me desdeñaré
de descenderá estas menudencias, sin las que no se pueden con.
seguir otras cosas de mayor importancia. Comenzaré pues por
los estudios que deben formar un orador desde la infancia; no de
otra manera que si se me hubiese encomendado su educacion.
El qual trabajo te le dedico, Marcelo Victorio, por juz
garte digno de este don , y prenda de nuestra amistad recí
proca, no solo en atencion á la estrecha que hay entre los
dos, y al encendido amor que tienes á las letras (motivos
que por sí solos bastaban) sino porque estos libros me pare
cen muy del caso para la instruccion de tu hijo, cuyos pri
meros años dan claro indicio de que ha de lucir su ingenio ": á
los quales tenia intencion de dar principio por los primeros
rudimentos de la oratoria , continuando por aquellas artes,
que pueden contribuir algo al que ha de seguir esta carrera
hasta llegar á la perfeccion y complemento de esta obra.
Me he determinado á tomar este trabajo con tanta mas ra
zon, por ver que andaban ya en mi nombre dos libros de retó
rica, los que ni yo diá luz, ni los trabajé con este fin: porque
el primero contenia aquellas instrucciones privadas que di á mis
discípulos en dos dias, que ellos escribiéron; y habiendo copiado
--------- rarº: - r -r------

-E º ma

tiam circa res, etiamsi necessarias, pro gna) dignissimum hoc mutuae internos
cultamen ab ostentatione positas: ut ope caritatis pignore judicabamus , sed
rum fastigia spectantur, latent fundamen quod erudiendo nato, tuo , cujus prima
ta. Ego cum nihil existimem arti orato aetas manifestum iter ad ingenii lu
riae alienum, sine quo fieri non posse ora men, ostendit, non inutiles fore libri vi
torem fatendum est , nec adullius rei debantur; quos ab ipsis dicendi velut
summam, nisi praecedentibus initiis per incunabulis per omnes, quae modo ali
veniri; ad minora illa, sed quae si neg quid oratori futuro conferant, artes, ad
ligas, non sit majoribus locus, demitte summam ejus operis perducere destina
re me non recusabo: nec aliter, quam bamus.
si mihi tradatur educandus orator, stu Atque eo magis, quod duo jam sub no
dia ejus formare ab infantia incipiam. mine meo libriferebantur artis rhetori
Quod opus, Marcelle Victori; tibi di cae, neque editi à me, neque in hoc com
camus: quem cum amicissimum nobis,tum parati. Namque alterum , sermone per
eximio literarum amore flagrantem, non biduum habito, pueri, quibus id praesta
propter haec modo (quanquam sunt ma batur, exceperant: alterum pluribus sane
A 2
4 INSTITUCIONES ORATORIAS r

el segundo en muchos mas á fuerza de cifras º otros jóvenes afi


cionados mios, inconsideradamente les hiciéron el honor de pu
blicarlos. Por donde en estos libros habrá muchas cosas de aque
llos repetidas, otras muchas mudadas, muchísimas añadidas, pe.
ro todas mejoradas, y dispuestas en el mejor órden posible.
II. Formamos en ellos un orador perfecto”, el que no pue.
de serlo , no acompañándole las buenas costumbres : por º

donde no solo quiero que en el decir sea aventajado, sino en


todas las prendas del alma; porque nunca concederé , que
eso de vivir bien y honestamente se ha de dexar, como al
gunos pretenden, para los filósofos ; como sea cosa cierta
que el hombre verdaderamente político, acomodado para el
gobierno público y particular, capaz de gobernar con sus
consejos las ciudades, fundarlas con leyes, y emendarlas
con los juicios, no es otro que el orador.” y. , aunque
confieso que me valdré de algunas sentencias que se encuen
tran en los libros de los filósofos, resueltamente digo , que
estas son obras nuestras, y que pertenecen á la oratoria; por
que ocurriendo muchas veces hablar de la justicia, fortale
za , templanza , y otras virtudes semejantes, y tanto que
apénas habrá causa alguna, en que no se ofrezca alguna qües
tion de estas; debiéndose explicar todo esto en la invencion
y elocucion dudará alguno que los oficios del orador con
sisten en todo aquello , para lo que se requiere la fuerza
del ingenio, y la facundia en el decir? - º
-
.
*
.
-
-
. .
-

- -
A
C. - - - -- - 2-º
= EEE =

-- —- --------------

diebus, quantum notando consequipo: nistrationi accomo datus, qui regere consi
tuerant, interceptum, boni juvenes , sed iiis urbes, fundare legibus, emendare ju
nimium amantes mei temerario editio diciis possit, non alius sit profecto, quam
nis honore vulgaverant. Quare in his orator. Quare tametsi me fateor usurum
quoque libris erunteadem aliqua, mul quibusdam, quae philosophorum libris
ta mutata, plurima adjecta, omniave continentur, tamen ea jure, vereque con
ro compositiora, et, quam nos poteri tenderim esse operis mostri, proprieque ad
mus , elaborata. .. artem oratoriam pertinere. An si frequen
II. Oratorem autem instituimus illum. tissime de justitia , fortitudine, tempe
perfectum , qui esse misi vir bonus non rantia, caeterisque similibus sit disseren
potest ; ideoque non dicendi modo exi. durn, adeo utvix ulla possit causa repe
mia m in eo facultatem , sed omnes animi riri, in qua non aliqua quaestio ex his
virtutes exigimus. Neque enim hoc conces incidat, eaque omnia inventione., at
serim, rationem rectaehonestaeque vitae que elocutione sint explicanda; dubita
(ut quidam putaverunt) ad philosophos bitur , ubicumque vis ingenii et copia
relegandam: cum virille vere civilis, et dicendiº postulatur, ibi partes oratoris
publicarum, privatarumque rerum admi esse praecipuas? , , , , ,
- -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 5
Y así como estas cosas se hallan juntas en la naturale
za, así tambien se hallan en las obligaciones del orador, co
mo lo colige muy claramente Ciceron “: de forma que los
que fuesen tenidos por sabios, igualmente fuesen reputados
por eloqüentes. Dividióse despues esta facultad, haciendo la
pereza que apareciese no una , sino muchas: porque luego
que se hizo comercio del arte de hablar , y se comenzó á
abusar de los bienes de la eloqüencia , los que eran teni
dos por eloqüentes , abandonáron el cuidado de las costum
bres; y abandonado este, fué como presa de los malqin
genios. De aquí resultó, que estos, despreciando él trajo
de bien decir, y aplicándose á formar los corazones, y lar
leyes para vivir, conserváron la mejor parte (si es que sta
facultad admitia division), y se apropiáron un título lle, de
arrogancia ; de forma que ellos solos viniéron á llumarse
amantes de la sabiduría, título que jamas tuviéron la osa
día de atribuirse , ni , los Emperadores mas grandes , ni
los que con el mayor lucimiento se empleáron en la con
sulta de asuntos de la mayor importancia, y en el goberno
de toda la república; pues ántes quisiéron hacer cosas muy -

buenas, que prometerlas. Y vengo bien en que entre los que -


antiguamente hiciéron profesion de sabios, muchos no sola
mente, diéron buenos preceptos , sino que viviéron confor
me á lo que enseñáron ; mas en nuestros dias baxo la capa
de este nombre de sabios se encubriéron vicios muy enor
mes, en la mayor parte de los profesores; porque no pro
-E º a
-,

Fueruntque haec,ut Cicero apertissime (si dividi posset ) retimuerunt; nomen


colligit, quemadmodum juncta natura, tamen sibi insolentissimum arrogaverunt,
sic oficio quoque copulata: utiidem sa ut soli sapientiae studiosivocarentur:quodí
pientes,atque eloquentes haberentur. Scidit neque summi Imperatores , neque in
deinde se studium; atque inertia factum consiliis rerum maximarum, actotius ad
est, ut artes esse plures viderentur. Nam, ministratione reipublicae praeclarissime
ut primum lingua esse coepit in quaestu, versati sibi unquam vindicare sunt ausi.
institutumque eloquentiae bonis male uti, Facere enim optima, quam promittere,
curam morum, qui disserti habebantur,re maluerunt. Ac veterum quidem sapien
liquerunt. Ea vero destituta, infirmiori tiae professorum multos,ethonesta praece
bus ingeniis velut praedae fuit. Inde qui pisse, &, ut praeceperunt, etiam vixisse,
dam, contempto bene dicendi labore, ad facile concesserim : nostris vero tempo
formandos animos, statuendasque vitae ribus , sub hoc nomine maxima in pleris
leges regressi, partem quidem potiorem que vitia latuerunt. Non enim virtute,ac
6 INSTITUCIONES ORATORIAS

curaban ser tenidos por filósofos por la virtud y letras, sino


que con el velo de un semblante tétrico, y vestido diferente
de los demas”, encubrian sus costumbres muy estragadas. "
Mas al presente todos los dias nos ponemos á tra
tar de aquellas materias que son peculiares de la filosofia.
Porque ¿quién, por malo que sea, no habla ahora de lo
bueno y justo? ¿Quién, aun de los hombres del campo, no
disputa sobre las causas naturales? La propiedad y diferen
cia de los términos debe sin duda ser comun á todos los
que cuidan del lenguage ; pero el orador las debe saber y
hablar dón mucha perfeccion; el qual, si en algun tiempo
hubiera sido consumado, nunca se mendigarian de las es
cuelas de los filósofos los preceptos de la virtud. Ahora se
hace preciso recurrir alguna vez á aquellos autores que se
¿ , como llevo dicho, una parte de la oratoria, y
la mejor , que estaba abandonada , y pedirles lo que en
cierto modo es nuestro: esto, no para valernos de lo que
inventáron, sino para hacer ver que se aprovecháron de in
venciones agenas.”
Sea pues tal el orador, que pueda con verdad llamar
rº se sabio; y no solamente consumado en las costumbres (por
que esto no basta, segun mi alcance, aunque hay quien sien
ta lo contrario), sino en la ciencia y facultad de decir: qual
quizá no ha hábido ninguno hasta el dia de hoy. "Mas no
- º - y e

por eso hemos de trabajar ménos por llegar á la perfeccion,


¿omo muchos de los antiguos lo practicáron, los quales, da
=

studiis, ut haberentur philesophi, labora eos aliquando auctores recurrere, qui de


bant; sed vultum, et tristitiam, et dis sertam (ut dixi) partem oratoriae artis,
sentiéntem à caeteris habitum pessimis meliorem praesertim , occupaverunt; et
moribus praetendebant. velut nostrum reposcere: non ut nos illo
Nuncautem quae velut propria philo rum utamur inventis, sed utillos alie
nis usos esse doceamus.
sophiae asseruntur, passim tractamus o -

mnes. Quis enim modo de justo , aequo, Sit igitur orator vir talis, qualis vere
ac sapiens appellari possit: nec moribus mo
Quisbono, non etrusticorum
non etiam vir pessimus
aliqualoquiturº
de cau do perfectus, (nam id mea quidem opi
sis naturalibus quaerit? Nam verborum nione, quanquam sint qui dissentiant, sa
proprietas ac diferentia omnibus, qui ser tis non est) sed etiam scientia, et omni
monem curae habent, debet esse commu facultate dicendi, qualis adhuc fortasse
mis. Sed ea et sciet optime, et eloquetur memo fuerit. Sed non ideo minus nobis ad
orator: qui si fuisset aliquando perfectus, summam tendendum estº: quod fece
monà philosophorum scholis virtutis prae runtplerique veterum ; quia etsi mondum
cepta peterentur. Nunc necesse estad quenquam sapientem repertum putabant,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 7
do caso que creian, no haberse encontrado ningun hombre
perfectamente sabio , no obstante diéron preceptos de sabidu
ría; porque la eloqüencia consumada es ciertamente una cosa
real, á que puede arribar el ingenio del hombre ; y dado
caso que no lo consiga, con todo los que se esfuercen, para
llegará lo sumo , se remontarán mucho mas que aquellos,
que desesperanzados de llegar donde pretenden , no se le
vantan un palmo sobre la tierra. -

III. Por donde con mayor razon se me disimulará , si


no paso en silencio ni aun las cosas mas menudas, pero ne
eesarias á la obra que hemos emprendido. Atento que el pri
mer libro contendrá lo que antecede al oficio del orador. En
el segundo trataremos de los primeros elementos y qüestio
nes de lo substancial de la retórica. Despues emplearemos
cinco libros en la Invencion, á la que sigue la Disposicion:
quatro en la Elocucion, donde entra la Pronunciacion y Me
moria. A estos se añadirá uno, en el que formaremos el ora
dor; tratando, en quanto lo permitan muestras cortas fuer
zas, qué tales han de ser sus costumbres, qué regla debe
guardar en encargarse de las causas , en aprenderlas y de
fenderlas ; qué género de eloqüencia debe seguir; y qué fin
sea el de la oratoria, y quáles sus estudios.
IV. A todo lo dicho se juntará, como lo pidiere la oca
sion, la manera de perorar, que no solamente instruya á los
aficionados en el conocimiento de aquellas cosas , á las que
ínicamente diéron algunos el nombre de arte; é interprete
-
- --- - º

praecepta tamen sapientiae tradiderunt. tioni, nam et huic Dispositio subjungi


Nam est certe aliquid consummata elo— tur: quatuor Elocutioni, in cujus partem.
quentia, neque ad eam pervenire natura Memoria ac Pronuntiatio veniunt, da
humani ingenii prohibet : quod si non buntur, Unus accedet, in quo nobis orator
contingat, altiustamen ibunt qui ad sum ipse informandus est; ut qui mores ejus,
ma mitentur, quam qui praesumpta de quae in suscipiendis, discendis, agendis
speratione quo velint evadendi, protinus causis ratio, quod eloquentiae genus, quis
circa ima substiterint.
agendi debeat esse finis, quae post fi
III. Quo magis impetranda venia erit, nem studia, quantum nostra valebitin
si ne minora quidem illa , verum operi firmitas, disseramus.
quod instituimus necessaria , praeteribo. IV, His omnibus admiscebitur, ut quis
Nam liber primus ea quae sunt ante of que locus postulabit, dicendi ratio, quae
ficium rhetoris continebit. Secundo pri non eorum modo scientia , quibus solis
ma apud, rhetorem elementa, et quae quidam nomen artis dederunt, studiosos
de ipsa rhetoricae substantia quaeruntur, instruat; et, ut sic dixerim , jus ipsum
tractabimus. Quinque deinceps Inven rhetorices interpretetur , sed alere fa
8 INSTITUCIONES oRATORIAS
el derecho." de la retórica (para explicarme en estos tér
minos), sino que asimismo pueda fomentar la facundia, y
aumentar las fuerzas de la oratoria. Porque de ordinario
los Preceptos por sí solos, afectando demasiada sutileza, des
truyen y despedazan quanto hay de mas noble en el dis
curso, se llevan todo el xugo del ingenio, y le dexan en
los huesos los quales, así como debe haberlos , y estar su
ºcon los nervios, así deben estar cubiertos con la carne.
ortanto en estos doce libros no hemos formado un com
pendio ", como han hecho los mas, sino quanto puede ser
vir para instruir al orador, haciendo una breve demostra
cion de todo; porque si hubiéramos de decir quanto se ofre
ce en cada cosa, seria nunca acabar. - -

Pero una cosa se debe afirmar sobre todo, y es, que de


nada aprovecha el arte y los preceptos, quando no ayuda la
naturaleza. ”. Por donde, el que no tiene ingenio, entien
da, que de tanto le aprovechara lo que hemos escrito, quan
to á los campos naturalmente estériles el cultivo y la labran
za. Hay tambien algunas cosas, con que ayuda la naturaleza,
como la voz, el pecho de aguante , robustez, firmeza de
cuerpo, y gracia ; en todo lo qual si la naturaleza nos fué
escasa, la razon lo puede aumentar"; pero la falta de esto
á veces viene á destruir las prendas del ingenio y del es
tudio; así como aun teniendo estas cosas, por sí nada aprove
chan sin un sabio maestro , sin estudio emprendido con te
son, y sin el exercicio continuo de escribir, leer y declamar.
------

EE. sara

-º r- - - +
cundiam , vires augere eloquentiae possit. Illud tamen in primis testandum est,
Nam plerumque nudae illae artes, ni nihil praecepta atque artes valere, nisi
mia subtilitatis afectatione, franguntat adjuvante natura. Quapropter ei cui de
que concidunt quicquid estin oratione erit ingenium , non magis haec scripta
generosius, et omnem succum ingenii bi sunt, quam de agrorum cultu sterilibus
bunt, et ossa detegunt: quae ut esse, et terris. Sunt et alia ingenita quidem adju
adstringinervis suis debent, sic corpo menta, vox, latus patiens laboris, vale
re operienda sunt. Ideoque nos non tudo, constant ia, decor: quae si modica
particulam illam , sicut plerique, sed obtiger unt, possunt ratione ampliari; sed
quicquid , utile ad instituendum orato nonnunquam ita e desunt, utbona etiam.
rern putabamus, in hos duodecim libros ingenii studiiqu corrumpant: sicut et
contulimus, breviter omnia demonstran haec ipsa sine doctore perito , studio
pertinac , scribendi, legendi , dicendi
i
do. Nam si quantum de quaque re di multa et continua exercitatione , per se
ci potest, prosequamur, finis operis non
nihil prosunt. - -

reperietur, -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 9

CAPITULO PRIMERO.
“------,
DE LA EDUCACION DEL QUE HA DE SER ORADOR.
----------- -----
I. A la mayor parte de los niños no les falta ingenio,
sino aplicacion. II. Qué tales deben ser las nodrizas, pa.
dres , ayos y compañeros que han de tener los minos.
III. Se debe comenzar por el estudio de la lengua griega.
IV. Los niños antes de los siete años son capaces de ins
truccion..... Esta no se debe anticipar mucho..... Porqué des
ciende a estas menudencias. V. Del leer y escribir.
T 0 /, A 2 ó a. -

I. Nada ensa el padre las mayores esperanzas


de él; pues así pondrá mayor esmero desde el principio. Por
que es falsa la queja, de que son muy raros los que pue
den aprender lo que se les enseña; y que la mayor parte
por su rudeza pierden tiempo y trabajo; pues hallaremos por
¿ para discurrir y aprender de
el contrario en los mas
memoria, como que estas dos cosas le son al hombre-natu
rales. A la manera que la naturaleza crió para volar á las
aves, á los caballos para la carrera, y para embravecerse á
las fieras, no de otra suerte nos es peculiar á los hombres el
- . - -

* - --.
-= EEE DE-s--

CAP UT P R I MU M.
Cº' . º r --

- a * - DE EDUCATIONE FUTURI ORATORIS,

- I. Pleris que puerir non naturam deesre, red curam. II. Quales debeant erre nutra
cer, parenter, pueri, quibuscum educatur, paedagogi. III. A termone graeco incipien
dum. IV. Ante reptimum annum literis porre institui pueror.... Von tamen instandum
nimis tenerae aetati....Cur tam parva tractet. V. De lectione & criptura.

I. Le, nato filio, pater spem de illo


primum quam optimam capiat. Ita di
ditate ingenii perdere. Nam contra plu
res reperias et faciles in excogitando, et
ligentior à principiis fiet. Falsa enim est ad discendum promptos. Quippe id est ho
qüerela, paucissimis hominibus vim per mini naturale : ac sicut aves ad volatum,
cipiendi quae tradantur esse" concessam; equi ad cursum , ad saevitiam ferae gi
plerosque vero laborem, ac tempora tar gnuntur; ita nobis propria estmentis agi
ToM. I
IO INSTITUCIONES ORATORIAS

exercicio y perspicacia del entendimiento : por donde tene


mos al orígen del alma por celestial. El nacer algunos rudos
é incapaces de enseñanza, tan contra lo natural es, como lo
son los cuerpos gigantescos y monstruosos, que son muy ra
ros. Prueba es, que en los niños asoman esperanzas de mu
chísimas cosas; las que si se apagan con la edad , es claro
que faltó el cuidado, no el ingenio. Vengo bien en que uno
aventage en el ingenio á otro; pero esto será para hacer mas,
ó ménos: mas no se encontrará ni uno solo, en quien no se con.
siga algo á fuerza de estudio. El padre que reflexione esto
muy bien , ya desde el principio aplicará el mayor cuidado
¿? lograr las esperanzas del que se va proporcionando pa.
a la oratoria.
II. Ante todas cosas no sea viciosa la conversacion de las
e) ayas , las que quiere Crysipo que sean sabias, si ser puede;
Pero á lo ménos que se escojan las mejores. En ellas sin duda
alguna debe cuidarse sobre todo de las buenas costumbres, y
de que hablen bien: pues ellas son las primeras á quienes oirán
los niños, y cuyas palabras se esforzarán á expresar por la imi
tacion. Porque naturalmente conservamos lo que aprendimos
en los primeros años, como las vasijas nuevas º el primer
olor del licor que recibiéron, y á la manera que no se pue
de desteñir el primer color de las lanas. Y quanto estos re
sabios son peores, tanto mas fuertemente se nos imprimen.
Lo bueno, fácil cosa es que se mude en vicio, pero el vi
cio ¿quándo lo mudarás en virtud? No se acostumbre pues
-- ----- -

== Es

tatio, atque solertia : unde origo animi, II. Ante omnia, ne sit vitiosus sermo
caelestis creditur. Hebetes vero et indo nutricibus: quas, si fieri posset, sapien
ciles non magis secundum naturan homi tes Chrysippus optavit: certe, quantum
nis eduntur, quam prodigiosa corpora et res pateretur, optimas eligi voluit, Etmo
monstris insignia: sed hi pauci admodum. rum quidem in his, haud dubie prior ra
Fuerit argumentum, quod in pueris elu tio est: recte tamen etiam loquantur. Has
cet spes plurimorum: quae cum emoritur primum audiet puer, harum verba effin
aetate, manifestum est non naturam de gere imitando conabitur. Et natura tena
fecisse , sed curam. Praestattamen inge cissimi sumus eorum, quae rudibus an
nio alius alium, concedo; sed ut plus ef nis percipimus, ut sapor quo nova imbúas,
ficiat aut minus: nemo tamen reperitur, durat; nec lanarum colores, quibus sim
qui sit studio nihil consecutus. Hoc qui plex iile candor mutatus est, elui possunt.
perviderit, protinus ut erit parens factus, Ethaec ipsa magis pertinaciter haerent,
acrem quam maxime curam spei futuri quae deteriora , sunt. Nam bona facile
oratoris impendat. mutanturin pejus : nunc quando in bo
- DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. II

ni aun en la infancia á un lenguage que haya que desen


señarle. - º º « - -

º)Los padres quisiera yo que tuvieran muchísima erudicion,


aunque no trato solamente de ellos. Sabemos que para la elo
qüencia de los Gracos contribuyó no poco su madre Corne
la “, cuya doctísima conversacion llegó á la posteridad por
sus cartas. De la hija de Lelio se dice que imitaba en el
lenguage la eloqüencia del padre; y del razonamiento que
hizo á los triunviros la de Q. Hortensio leemos , que aun
en boca de un hombre le haria honor. "Ni deben tener me
nor empeño en la educacion de los hijos aquellos que no tu
viéron la dicha de aprender, ántes mayor por lo mismo en
todo lo demas. - - * -

. Lo mismo que de las ayas, decimos de los niños, entre


quienes se ha de criar el que está destinado a esté fin. De
%)los ayos con tanta mas razon se debe cuidar que, ósean sa
"bios, en lo que se debe poner el mayor empeño, ó que no
presuman que lo son : pues no hay cosa mas perjudicial que
aquellos, que no habiendo pasado de las primeras letras, es
tan persuadidos que son sabios. Los tales llevan á mal el ce
derá los que lo son, y con un cierto derecho de autoridad
que hace hinchada á esta clase de hombres , por lo comun
imperiosos, y á veces crueles, enseñan á los alumnos sus ne
cedades. Sus errores perjudican no ménos á las costumbres.
De Leonides ayo de Alexandro cuenta Diógenes Babilonio,
-EEEEEEEE asasme

num verteris vitia? Non assuescat ergo, ipsum ad caetera magis diligentes.
ne dum infans quidem est, sermoni qui De pueris inter quos educabitur le
dediscendus sit. huic spei destinatus, idem quod de nutri
In parentibus vero quam plurimum cibus,dictum sit. De paedagogis hoc am
esse eruditionis optaverim. Verum nec de plius, utaut sinteruditi plane, quam pri
patribus tantum loquor. Nam Grachorum mam esse curam velim : aut se non esse
eloquentiae multum contulisse accepimus eruditos sciant. Nihil enim pejus estiis,
Corneliam matrem, cujus doctissimus ser qui paulum aliquid ultra primas literas
mo in posteros quoque est epistolis tradi progressi, falsam sibi scientiae persuasio
tus. Et Laelii filia reddidisse in loquendo nem induerunt. Nam et cedere praecipien
paternam eloquentiam dicitur. Et Quin di peritis indignantur, et velut jure quo
ti Hortensii filiae oratio apud triumviros dam potestatis, quo fere hoc hominum
habita legitur, non tantum in sexus ho genus intumescit, imperiosi , atque in
norem. Nectamen ii, quibus discere ipsis terim saevientes, stultitiam suam per
non contigit, minorem curam docendi docent. Nec minus error eorum nocet
liberos habeant : sed sint propter hoc moribus. Siquidem Leonides Alexandri
B 2
I 2. - INSTITUCIONES ORATORIAS

haberle enseñado ciertos vicios, que le fuéron acompañando


siendo adulto, y hasta el trono, desde la educacion en su
I11Il CZ.

Si á alguno le parece que pido mucho, atienda á que


el formar un orador es ardua empresa ; y que aun quando
nada se omita para esto, es mucho mas y lo mas dificulto
solo que queda por hacer. Porque se necesita de un estu
y dio sin intermision , de maestros los mas excelentes y de mu
chas ciencias. Por donde se ha de enseñar lo mejor, lo qual
si alguno rehusare el hacerlo, el defecto estará en el hom
bre, no en el talento.
Pero si no se lograsen las ayas, ayos, y compañías qua
les yo quiero á lo ménos haya un maestro continuo, que
sea de buena pronunciacion , y corrija al punto lo que en
Presencia del discípulo pronunciáron viciosamente aquellos, no
Permitiendo que haga vicio; pero con tal que se llegue á en
tender que el consejo que primero di , es lo acertado, y
esto un remedio.
III. . . Me inclino mas á que el niño comience por la len
gua griega"; pues la latina, que está mas en uso, la apren
demos aunque no queramos: y tambien porque primeramente
debe ser instruido en las letras y ciencias griegas, de donde
tuvo orígen nuestra lengua. Mas no quiero que en esto se
proceda tan escrupulosamente, que hable y aprenda por mu
cho tiempo sola la lengua griega, como algunos lo practi
can; pues de aquí dimanan muchísimos defectos , ya en la
-Es Esas a

paedagogus , utà Babylonio Diogene tra- dagogos: at unus certe sit assiduus, di
ditur, quibusdam eum vitiis imbuit, quae cendi non impeditus, qui, si qua erunt
robustum quoque et jam maximum regem ab his praesente alumno dicta vitiose, cor
ab illa institutione puerili sunt prosecuta. rigat protinus , nec insidere illi sinat;
Si cui multa videor exigere, cogi dum tamen intelligatur, id quod prius
tet oratorem institui , rem arduam, dixi, bonum esse; hoc, remedium.
etiam cum ei formando nihil defuerit, III. A sermone graeco puerum incipe
praeterea plura, ac difficiliora superesse. re malo: quia latinus, qui pluribus in usu
Nam et studio perpetuo, et praestantis est, vel, nobis nolentibus se praebet: si
simis praeceptoribus, et pluribus discipli mul quia disciplinis quoque graecis prius
nis opus est. Quapropter , praecipienda instituendus est, unde et nostrae fluxe
Sunt optima : quae, si quis gravabitur, runt. Non tamen hoc adeo superstitiose
non rationi defuerit, sed homini. velim fieri, ut diu tantum loquatur grae
Si tamen non continget, quales ma ce, aut discat, sicut plerisque moris est.
xime velim, habere nutrices, pueros, pae Hincenim accidunt et oris plurima ví- .
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. I3
pronunciacion extraña, ya en el lenguage , los quales pe
gándoseles por la larga costumbre del idioma griego, vienen
tambien á endurecerse en un modo de hablar diverso de lgs
demas. Y así á la lengua griega debe seguir la latina, para
aprenderlas á un misiño tiempo. Así sucederá , que conser
vando con igual cuidado el estudio de ámbas , ninguna da
ñará á la otra. cº cº; 22
IV. Pensáron algunos que no debian aprender letras los
niños ántes de siete años, por no ser aquella edad capaz de
instruccion, ni apta para el trabajo: la qual opinion siguió
Hesiodo, segun dicen muchísimos anteriores al gramático Aris
tofanes; pues este fué el primero que negó ser de este poe
ta el libro de los Preceptos, donde esto se encuentra. Pero
otros, y entre ellos Eratóstenes, enseñáron lo mismo. Me
jor fundados van los que quieren que ninguna edad esté ocio-X
sa , , como Crysipo: pues aunque concede tres años para el
cuidado de las ayas, pero para eso dice que estas deben ir
formando el entendimiento del niño con los mejores conoci
mientos. ¿Y por qué no ha de ser capaz de instruccion una
edad, que lo es para irse formando en las costumbres? Bien me
hago cargo que en todo el tiempo de que hablamos apénas
se podrá adelantar tanto, como mas adelante en un solo año;
pero con todo eso me parece que los que así sintiéron, aten.
diéron en esta parte mas á los maestros que á los discípulos.
Por otra parte ¿qué otra cosa mejor podrán hacer luego que
El m

tia in peregrinum sonum corrupti, et ser invenitur, negavit esse hujus poetae. Sed
monis: cui cum graecae figurae assidua alii, quoque auctores , inter quos Era
consuetudine haeserint, in diversa quoquetosthenes, idem praecéperunt. Melius au
loquendi ratione pertinacissime durant. tem, qui nullum tempus vacare cura vo
Non , longe itaque latina subsequi debent,
lunt, ut Chrysippus: nam is, quamvis nu
et cito pariter ire. Ita fiet, ut, cum tricibus triennium dederit, tamen abil
aequali cura linguam utramque tueri coe lis quoque jam informandam, quam opti
perimus, neutra alteri oficiat. mis institutis mentem infantium judicat.
IV. Quidam literis instituendos, qui mi Cur autem non pertineat ad literas aetas,
nores septem annis essent, non putave quae ad mores jam pertinet 2 Nequé
runt, quod illa prima aetas et intelle ignoro, toto illo, de quo loquor, tempo—
ctum disciplinarum capere, et laborem pati revix tantum effici, quantum conferre
non possit. In qua sententia Hesiodum unus postea possitannus, Sed tamen mihi,
esse plurimi tradunt, qui ante grammati qui id senserunt, videntur non tann
cum Aristophanem fuerunt. Nam is pri discentibus in hac parte, quam docenti
mus úa o ánas, in quo libro scriptum hoc bus pepercisse. Quid melius alioqui fa
I4 INSTITUCIONES ORATORIAS

sepan hablar? porque es preciso que en algo se empleen. O


¿porque hemos de despreciar hasta los siete años esto poqui
llo que se puede adelantar ? Pues dado caso que sea poco,
se va á lograr el que aprenda cosas de mayor entidad en aquel
mismo año, en que tendria que aprender estas menudencias.
Esto que se va dilatando todos los años, al fin de la cuenta
va á decir mucho; y todo el tiempo que se ganó en la in
fancia, aprovecha para la juventud. Lo mismo debe enten
derse de los años adelante, para que lo que se ha de apren
der, no se aprenda tarde. No perdamos pues el tiempo al
principio, y con tanta mas razon, quanto los primeros ru.
dimentos dependen de la memoria, la que no solamente se
º
encuentra en los niños, sino que la tienen muy firme.
< Ni estoy tan ignorante de lo que son las edades , que
juzgue que se debe apremiar, y pedir - l en los
-

º, primeros años. De esto debemos guardarnos mucho, para que


º.
no aborrezca el estudio el que aun no puede tenerle aficion,
- y le tenga despues el odio que una vez le llegó á cobrar.
N
ss Esto ha de ser como cosa de juego: ruéguesele al niño, alá
besele, y á las veces alégrese de lo que sabe. Enséñese á
veces á otro, aunque él lo repugne, para que tenga emula
cion ; otras vaya á competencia con él, y hágasele creer las
to mas veces, que él lleva la victoria ; estimúlesele tambien con
aquellos premios que son propios de la edad.”
Menudas son las cosas que enseñas (dirá alguno) habien
* --- - ---
----
-
---

- - mam

cient, ex quo loqui poterunt? Faciantenim jam estin parvis, sed tum etiam tena
aliquid necesse est. Aut curhoc, quantu cissima est.
lumicumque est, usque ad septem annos Nec sum adeo aetatum imprudens, ut
lucrum fastidiamus ? Nam certe quamli instandum teneris protinus acerbe pu
bet parum sit quod contulerit aetas prior, tem, exigendamque plenam operam. Nam.
majora tamen aliqua discet puereo ipso id in primis cavere oportebit, ne stu
anno, quo minora didicisset. Hoc per dia , qui amare mondum potest, oderit:
singulos annos prorogatum, in summam etamaritudinem semel perceptam, etiam
proficit; et, quantum in infantia, prae ultra rudes annos reformidet. Lusus hic
sumptum est temporis, adolescentiae ac sit: et rogetur, et laudetur, et nonnun
quiritur. Idem etiam de sequentibus an quam sciisse se gaudeat. Aliquando ipso no
mis praeceptum sit, ne, quod cuique di lente doceatur alius, cui invideat: con
scendum est, sero discere incipiat. Non er tendat interim , et saepius vincere se
go perdamus primum statim , tempus: at putet: praemiis etiam , quae capit illa
que eo minus, quod initia literafum so aetas, evocetur.
la memoria constant, quae non modo Parva docemus, instituendum orato
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. I5
do prometido formar un orador; pero entienda que aun en las
letras hay su infancia , y á la manera que la formacion de
los cuerpos, que han de ser muy robustos, comienza en la
leche y la cuna, así el que ha de ser con el tiempo un ora
dor eloqüentísimo, hizo, para explicarme en estos términos,
sus pucheritos, fué balbuciente, y hizo garabatos en la for
macion de las letras. Y no, porque no baste el saber una
cosa, diremos que no es necesaria. Y si ninguno reprehende á
un padre que tiene por preciso enseñar esto á su hijo, ¿por
qué se condenará el hacer comun lo que uno practicaria en su
casa? Tanto mas, quanta es la facilidad con que los niños
aprenden las cosas pequeñas; y así como hay ciertos movi
mientos, á los que solo puede hacerse el cuerpo tierno, así
tambien sucede con los ánimos, que endurecidos, se inhabili.
tan para la enseñanza. ¿Hubiera querido por ventura Filipo
que su hijo Alexandro fuese instruido por Aristóteles el fi
lósofo mas consumado de aquellos tiempos; ó este hubiera
tomado este cargo, á no entender que convenia que los prin
cipios los enseñase tambien un maestro el mas diestro ? Ha
gámonos pues cuenta que se nos confia un Alexandro desde
su infancia, para que le enseñemos: empeño que merece tan
to cuidado (aunque para qualquiera padre la enseñanza de
su hijo es de igual aprecio) ¿en este caso me avergonzaria
yo de darle el mas breve camino para instruirle aun en la
cartilla? - -

V. Por lo ménos á mí no me agrada lo que veo prac


- -

rem professi: sed est sua etiam studiis in non possunt, sic animos quoque ad ple
fantia; et, ut corporum mox fortissimo raque duriores robur ipsum facit. An Phi
rum educatio à lacte, cunisque initium lippus Macedonum rex Alexandro filio
ducit, ita futurus eloquentissimus edidit suo prima literarum elementa tradi ab
aliquando vagitum, et loqui primum in Aristotele summo ejus aetatis philosopho
certa voce tentavit, et haesit circa for voluisset, autille suscepisset hoc oficium,
mas literarum. Nec si quid discere sa si non studiorum initia à perfectissimo
tis non est, ideo necesse non est. Quod quoque tractari, pertinere ad summam
si nemo reprehendit patrem, qui haec non credidisset?. Fingamus igitur Alexandrum
negligenda in suo filio putet, cur impro dari nobis, impositum gremio, dignum
betur, si quisea quae domi suae recte fa tanta cura infantem, quanquam suus cui
ceret, in publicum promit? Atque eo ma que dignus est, pudeat ne me in ipsis
gis quod minora etiam facilius minores statim elementis etiam brevia docendi
percipiunt: et, ut corpora ad quosdam monstrare compendia ? -

membrorum flexus formari misi tenera V. Neque enim mihi illud saltem pla
Ió INSTITUCIONES ORATORIAS

ticar con muchísimos, y es el aprender el nombre y órden


de las letras ántes de aprender su figura. Embaraza esto el
conocimiento de ellas, pues siguiendo despues el sonido que
de ellas tienen, no aplican la atencion á su forma. Esta es
la causa de que los maestros, quando pensaban haberlas fi
xado en la memoria de los niños, siguiendo el órden que
tienen en el alfabeto, vuelvan atrás, y ordenándolas de otra
manera, les hagan conocer las letras por su figura, no por
su órden natural. Por tanto se les enseñará á conocer su fi
gura y nombre, como conocen las personas. Pero lo que da
ña en el conocimiento de las letras, no dañará en el de las
silabas. r

Para estimular á la infancia á aprender no desapruebo


aquel método sabido de formar un juego con las figuras de
las letras, hechas de marfil; ó algun otro medio, á que se
aficione mas la edad, y por el qual hallen gusto en ma
nejarlas, mirarlas y señalarlas por su nombre.
Pero quando comience á escribir no será malo grabar las
letras muy bien en una tabla, para que lleve la por ¿
los trazos ó sulcos que hacen. De este modo ni errará, co
mo en la cera (porque por una y otra parte le contendrán
las márgenes), ni podrá salirse de la forma que le ponen;
por otra parte , siguiendo con velocidad y continuacion
huellas fixas, afirmará los dedos , no necesitando de poner
una mano sobre otra, para afianzarla. ”El escribir bien y con
2 ... . . .

cet, quod fieri in plurimis video, utli tum, irritandae ad discendum infantiae
terarum nomina et contextum prius quam gratia, eburneas etiam literarum formas
formas parvuli discant. Obstat hoc agni in lusum offerre: vel si quid aliud , quo
tioni earum, non intendentibus mox ani magis illa aetas gaudeat, inveniripotest,
mum ad ipsos ductus , dum anteceden quod tractare, intueri, nominare jucun.-
tem memoriam sequuntur : quae causa dum sit. .

est praecipientibus, ut etiam, cum satis Cum vero jam ductus sequi coeperit,
afixisse eas pueris recto illo , quo pri non inutile erit eas tabellae quam optime
mum seribi solent, contextu, videntur, re insculpi, ut per illos velut sulcos duca
troagant rursus, et varia permutatione tur stylus. Nam neque errabit, quemad
perturbent, donec literas, qui instituum modum in ceris (continebitur enim utrin
tur, facie norint, non ordine. Quapropter que marginibus ) neque extra praescri
optime, sicut hominum , pariter et ha ptum poterit egredi, et celerius, ac sae
bitus et nomina edocebuntur, Sed quod pius sequendo certa vestigia, firmabitar
in literis obest, in sylabis non nocebit. ticulos : neque egebit adjutorio manum
Non excludo autem id, quod est no suam, manu superimposita, regentis. Non
-
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. I. 17
velocidad es cosa digna de atencion, aunque comunmente olvi
dada de la gente de conveniencias ”: porque siendo el princi º e-º-A ..
pal exercicio en gente de letras º el escribir, con lo qual solo
se consiguen los progresos verdaderos y sólidos; si la pluma -(. , --

anda lerda, sirve de rémora á la imaginacion; y si la letra


es imperfecta y de mala formacion, no se entiende despues;
y de aquí resulta el trabajo de dictarlo, quando se haya de
trasladar. Por lo qual siempre, y en todas partes nos dará
gusto el no habernos olvidado de esto, pero especialmente
quando escribamos una carta de cosas, que no conviene que
otro sepa, ó bien á algun amigo.
En las sílabas no cabe compendio, sino que todas se de
ben aprender, y no se debe dilatar el conocimiento de las
mas dificultosas, como hacen comunmente, para que quan
do las escriban, las puedan distinguir. ”Ademas de lo di
cho, no se ha de fiar mucho de lo que aprendiéron los niños la
primera vez ; ántes será mas útil repetirlo- muchas veces, y
no apresurarlos, para que al principio lean de corrido , sino
solo # ya las letras sin tropezar, sin detenerse,
ni pensarlo mucho; y entónces úniendo las sílabas tomarán
toda la palabra, y despues comenzarán con ellas á formar
oracion ”: porque es increible quanta detencion en el leer
ocasiona este apresuramiento. De aquí nace el titubear, el
- pararse, y repetir los vocablos, quando se atreven á mas de
lo que pueden, desconfiando aun de lo mismo que saben, si
*
s ¿
º. en algo llegáron á errar. Ante todas cosas lean correctamente
N S - s- es , - - - º * -

- - misma

estaliena res, quae fere ab honestis neg in omnibus scribendis deprehendantur,


ligi Solet, cura bene, ac velociter scri Quinimo ne primae quidem memoriae
bendi. Nam cum sit in studiis praeci temere credendum : repetere et inculca
puum , quoque solo verus ille profectus re diu, fuerit utilius; et in lectione quo
et altis radicibus nixus paretur, scribere que non properare ad continuandam eam,
ipsum ; tardior stylus cogitationem mo vel accelerandam , nisi cum inofensa, at
ratur, rudis et confusus intellectu caret: que indubitata literarum inter se con
unde sequitur , alter dictandi , quae ex junctio, suppeditare sine ulla cogitandi
his transferenda sunt, labor. Quare cum saltem mora poterit : tune ipsis syllabis
semper et ubique , tum praecipue in verba complecti , et his sermonem con
epistolis secretis et familiaribus delecta nectere incipiat. Incredibile est, quantum
bit, me hoc quidem neglectum reliquisse. morae lectioni festinatione adjiciatur.
¿ compendium est: per Hincenim accidit dubitatio , intermis
discendae omnes (nec, ut fit plerumque, sio, repetitio, plus quam possunt auden
dificillima quaeque earum diferenda) ut tibus deinde, cum errarunt, etiam iis,
ToM. I.
I8 INSTITUCIONES ORATORIAS

y sin interrupcion; pero por mucho tiempo con despacio, has.


ta que con el exercicio adquieran leer con enmienda y veloci .
dad. Porque el mirar adelante, y echar la vista á la pala
bra que sigue (regla que dan todos los maestros), no sola
mente lo enseña el método, sino la práctica, porque al tiem.
po de mirar lo que sigue, se ha de pronunciar lo primero,
y se ha de dividir la atencion del alma, cosa muy dificulto.
sa, de modo que una cosa hagan los ojos, y otra la voz.
En una cosa no nos ha de pesar el cuidado que ponga
mos, quando el niño comience, como es de costumbre, á
escribir los vocablos: y es, que no pierda el trabajo en aque
llos que son vulgares, y que ocurren todos los dias. Puede
al punto ir aprendiendo, miéntras se ocupa en otra cosa, la
interpretacion de las palabras mas recónditas de la lengua, que
llaman los Griegos glossas , y conseguir en estos primeros
elementos lo que despues les ha de llevar algun tiempo.Y
supuesto que me paro en menudencias; desearia que los ver
sos que se les ponen por muestra de escribir, no contengan
inútiles sentencias, sino algun buen aviso”: porque la me
moria de esto dura hasta la vejez. Y fixándose en un ánimo
desocupado de otras ideas, aprovecha para formar las cos
tumbres. Pueden tambien por este género de diversion aprender
las sentencias de hombres ilustres, y lugares escogidos princi
palmente de los poetas, cosas que agradan á la edad pequeña.
Porque, como diré en su lugar, la memoria es muy conducen
- "

se

quae jam sciunt, diffidentibus. Certa sit graeci y Ató ororas vocant, dum aliud agi
ergo in primis lectio, deinde conjuncta, tur, ediscere, et inter prima elementa
et diu lentior, donec exercitatione con consequi rem postea proprium tempus
tingatemendata velocitas. Nam prospi desideraturam. Et quoniam adhuc circa
cere in dextrum (quod omnes praeci res tenues moramur, ii quoque versus,
piunt) et providere, non rationis modo, qui ad imitationem scribendi proponen
sed usus quoque est: quoniam sequentia tur, mon otiosas velim sententias habeant,
intuenti, priora dicenda sunt 3 et, quod sed homestum aliquid monentes. Prose
dificillimum est, dividenda intentio ani quitur haec memoria in senectutem, et
mi, ut aliud voce, aliud oculis agatur. impressa animo rudi, usque ad mores
Illud non poenitebit curasse, cum proficiet. Etiam dicta clarorum virorum,
scribere nomina puer ( quemadmodum et electos, ex poetis maxime (namgue
moris est) coeperit, ne hanc operam in eorum parvis cognitio gratior est) locos
vocabulis vulgaribus, et forte occurren ediscere inter lusum licet. Nam et ma
tibus, perdat. Protinus enim potest in xime necessaria est oratori (sicut Suo lo
terpretationem linguae secretioris, quas co dicam) memoria: etea praecipue fir
co. ... o a ºs º es
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. I9
te al orador; y esta se cultiva y afirma con el exercicio. Y
en las edades de que vamos hablando , en que el niño no
puede inventar nada, es la única manera de ingenio que pue
de sacar, algún provecho del cuidado del maestro. -

No será inútil, para que logren una pronunciacion clara


y expedíta, el hacerlos repetir palabras dificultosas buscadas
para este intento, y versos compuestos de sílabas ásperas, y
que tropiecen “ entre sí (que los griegos llaman enredosos),
obligándolos á que los pronuncien muy de priesa. Esto es
cosa pequeña á primera vista; pero omitido, cobrarán ma
los resabios en la pronunciacion; vicios que, á no enmendar
los en los primeros años, durarán siempre.

matur, atque alitur exercitatione; et in affectatae difficultatis ex pluribus asper


iis de quibus nunc loquimur aetatibus, rime coeuntibus inter se syllabis catena
quae nihil dum ipsae generare ex se tos, et velut confragosos quam citatissi
queunt, prope sola est, quae juvari cura me volvant, Xaxa º graece vocantur. Res
docentium possit. modica dictu : qua tamen omissa, multa
Non alienumn fuerit exigere ab iis aeta linguae vitia, misi primis eximuntur an
tibus, quo sit absolutius os & expressior nis, inemendabili in posterum pravitate
sermo, ut nomina quaedam , versusque durantur.
2O INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULo II.
ÚTIL LA INSTRUCCION DoMÉsTICA
- QUE LA PÚBLICA.
I. Refuta las objeciones que se ponen contra las escuelas
públicas; y hace ver 1º Que estas nada dañan á las costum
bres... dando al mismo tiempo contra la perniciosa indulgen
eia de los padres. 2? Que no dañan al aprovechamiento en
las letras. II. Alega varias razones de las ventajas de las
º -

escuelas públicas. * ------

Vya metro niño poco á poco creciendo, salga del


regazo de la madre, y comience á aprender con seriedad. Lo
que principalmente debemos tratar en este lugar, es : si es
mas útil tenerle dentro de casa, ó enviarle á la escuela pú.
blica, y encomendar su enseñanza á los maestros : lo que ha
llo haber sido de la aprobacion de los que reformáron las cos
tumbres de las ciudades mas grandes, y de los autores mas
consumados. -

I. Debo decir, que hubo algunos que estuviéron contra la


pública enseñanza : á los que les mueven dos razones. La
primera, el atender mas á las costumbres, evitando el que
A

C A P U T II.

UTRUM PUERI UTILIUS DoML , AN IN ScHolIS ERUDIANTUR.

I. Refellit quae contra publicas cholar objici solent; docetque. I. Eas non obesre
moribus..... et ibi acerrime invebitur in pernicioram parentum indulgentiam. 2. Ear non
obes se studiis. LI. Plurimir argumentir chalarum utilitatem demanrtrat.
Y
-

S. nobis jam paulatim accrescere Quod quidem, cum iis à quibus clarissima
puer, et exire de gremio, ac discere se rum civitatum mores sunt instituti, tum
rio incipiat. Hoc igitur potissimum loco eminentissimis auctoribus video placuisse.
tractanda quaestio est, utiliusne sit do I. Non est tamen dissimulandum, es
mi, atque intra privatos parietes studen se nonnullos, qui ab hoc prope publico
rem continere, an frequentiae scholarum more, privata quadam persuasione dissen
et velut publicis praeceptoribus tradere. tiant. Hi duas praecipue rationes sequi
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. I. 2. El

Se junten los niños con aquella multitud de otros sus igua


les, que son mas propensos al vicio : y oxalá que fuese va
na la queja, de que este fué muchas veces el origen de rui
nes prócedimientos La segunda es, que qualquiera que sea
el maestro, este ha de emplear mas tiempo con uno solo, que
con muchos. La primera razon es mas bien fundada; porque
en el caso de aprovechar las escuelas para el adelantamiento,
y dañará las costumbres, tendria por mejor el vivir bien,
que el salir muy consumado orador. Estas dos cosas, segun
mi juicio, andan unidas , y son inseparables la una de la
otra. Porque ni yo tengo por buen orador al que no sea hom,
bre de buena vida; ni lo aprobaria, aun quando pudiese lo
grarse lo contrario. Tratemos pues primeramente sobre esto.
1º Piensan que las costumbres se vician en las escuelas
públicas, porque algunas veces sucede; pero lo mismo su
cede en sus casas y hay mil exemplares, tanto de haberse
perdido la fama, como de haberse conservado con la mayor
pureza en una y otra enseñanza. Toda la diferencia esta en
la índole de cada uno, y en el cuidado. Dame un niño in
clinado á lo peor, y un padre omiso en inspirar y conservar
la vergüenza en los primeros años, y aunque esté solo ten
drá ocasion de ser malo. Porque no solo puede suceder que
el maestro privado sea vicioso, sino que no es ménos arries.
ado el trato con criados y esclavos malos, que con gente de
noble condicion, pero de poco recato. Pero si es de buena ín

•- as

videntur. Unam , quod moribus magis posset, nolo. De hac re igitur prius.
consulant, fugiendo turbam hominum ejus 1. Corrumpi mores in scholis putanf:
aetatis, quae sit ad vitia maxime prona: nam et corrumpuntur interim , sed do
unde causas turpium factorum saepe ex mi quoque; et sunt multa ejus rei exem
titisse utinam falso jactaretur! Alteramº pla, tam laesae herele, quam conserva
quod quisquis futurus estille praeceptor, tae sanctissime utrobique opinionis. Na
liberalius tempora sua impensurus uni tura cujusque totum, curaque distat. Da
videtur, quam si eadem in plures par mentem ad pejora facilem , da negligen—
tiatur. Prior causa prorsus gravis. Nam, tiam formandi, custodiendique in aeta
si studiis quidem scholas prodesse, mo te prima, pudoris: non minorem flagi
ribus autem nocere constaret, potior mi tiis occasionem secreta praebuerint. Nam.
hi ratio vivendi honeste, quam vel opti et esse potest turpis domestieus ille prae
me dicendi, videretur. Sed mea quidem ceptor; nec tutior inter servos malos,
sententia, juncta ista, atque indiscreta quam ingenuos, parum modestos , con
sunt. Neque enim esse oratorem , nisi versatio est. At si bona ipsius indoles, si
bonum virum judico: et fieri, etiam si non caeca, 3c. Sopita parentum, Socordia
22, - INSTITUCIoNEs oRAToRIAs . .
dole, y el padre es vigilante, y no se duerme en su obliga
cion, se puede elegir para maestro el de mejores costumbres,
(en lo que la prudencia debe poner el mayor empeño), y la
mejor escuela; y poner ademas de lo dicho por ayo del ni
ño un hombre amigo y de gravedad, ó un liberto fiel, cu
ya inseparable compañía haga mejores á los que temiamos se
perdiesen. -

Fácil cosa era el remedio de esto: pero oxalá no cor


rompiéramos nosotros las costumbres de nuestros hijos Desde
el principio hacemos muelle la infancia con regalos. Aquella
educacion afeminada, que llamamos condescendencia , debi
lita el alma y el cuerpo. ¿Qué mal deseo no tendrá quando
grande el que no sabe aun andar, y se ve ya vestido de púrpura?
Aun no comienza á hablar, y ya entiende lo que es gala, y
pide vestido de grana. Les enseñamos el buen gusto del pa
ladarántes de enseñarlos á hablar. Crecen en sillas de ma
nos; y si tocan en tierra, por ámbos lados hay criados, que
los levanten en los brazos. Si prorrumpen en alguna desen
voltura, mostramos contento de ello. Aprobamos con nues
tra risa, y aun besándolos”, varias expresiones, que se les
sueltan, que aun en medio de la licencia de Alexandría se
rian intolerables. "No es extraño : nosotros se las enseñamos,
y á, nosotros nos las oyéron. Resuenan en los convites canta
res obscenos, y se ve lo que no se puede mentar Hácese
costumbre de esto, y despues naturaleza. Aprenden esto los
infelices, ántes de saber que es malo. Así es, que siendo ya
-

est, et praeceptorem eligere sanctissimum pit? Nondum prima verba exprimit, et


quenque, (cujus rel PraecPua pruden jam coccum intelligit, jam conchylium
tibus cura est) et disciplinam, quae ma poscit. Ante palatum eorum , quam os
xime severa fuerit, licet; et nihilomi instituimus. In lecticis crescunt: si ter
nus amicum gravem virum, aut fidelem ram attigerint, è manibus utrinque susti
libertum lateri filii sui adjungere, cujus nentium pendent. Gaudemus si quid li
assiduus comitatus etiam illos meliores centius dixerint. Verba , ne Alexandrinis
faciat, qui timebantur. quidem permittenda deliciis, risu et os
Facile erat hujus metus remedium. culo excipimus. Nec mirum : nos docui
Utinam liberorum nostrorum mores non mus , ex nobis audierunt. Omne convi
ipsi perderemus Infantiam Statim deli vium obscoenis canticis strepit; puden
ciis solvimus. Mollis illa educatio, quam da dictu spectantur. Fit ex his consuetu
indulgentiam vocamus , nervos omnes et do, deinde natura. Discunthaec miseri,
mentis et corporis frangit. Quid non antequam sciant vitia esse. Inde soluti,
adultus concupiscet, qui in purpuris re ac fluentes non accipiunt e Scholis mala
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 23
disolutos y viciosos, no aprenden el vicio en las escuelas, si
no que lo llevan de sus casas, -

29 Pero en el estudio, dicen los contrarios, hará mas un


maestro con un solo discípulo. Ante todas cosas nada impide
ue este niño (sea quien sea) aprenda tambien en la escue
la pública. Pero aun quando ámbas cosas no se pudiesen lo
grar, siempre antepondria la luz de una junta de niños bue
nos y honrados á la obscuridad de una enseñanza clandestina
y doméstica. Porque el maestro, quanto mas excelente , gus
ta de muchos discípulos, y tiene su trabajo por digno de lu
cir en mayor teatro. Si el maestro es limitado, no lleva a mal
emplear su trabajo con un solo discípulo, haciendo oficio de
ayo, porque conoce su insuficiencia. ” Pero demos que al
guno por favor, por amistad, ó porque tiene, Posibles para
ello, tome para maestro peculiar de su hijo al hombre mas
sabio del mundo, ¿por ventura ha de emplear con él todo
el día? ¿ó puede ser tanta la atencion del discípulo, que no
se canse, como sucede con la vista, de mirar á un solo ob
jeto? mucho mas quando el estudio requiere mayor retiro. Y
no siempre que el discípulo aprende de memoria, escribe ó
compone, está presente el preceptor, ántes suele impedir
estas tareas la presencia de otroXY no todas las tareas del
discípulo necesitan de la explicacion y guia del maestro: pues
de este modo ¿quándo lograrian el conocimiento de tantos au
tores? Y así hay ocasiones en que se les echa tarea para to
do el dia, en lo que se gasta poco tiempo: pues lo que se
- -

ista , sed in scholas afferunt. doctissimum, atque incomparabilem ma


2. Verum in studiis magis vacabit gistrum domi habeat: num tamen ille
unus uni. Ante omnia nihil prohibet es totum in uno diem consumpturus est?
se istum, nescio quem, unum etiam cum aut potest esse ulla tam perpetua discen
eo, quiin scholis eruditur. Sed, etiamsi tis intentio, quae mon , ut visus ocu
jungi utrumque non posset, lumen ta lorum obtutu continuo fatigetur? cum
men illud conventus homestissimi, tene
praesertim plus secreti temporis studia
bris , ac solitudini praetulissem. Nam. desiderent. Neque enim ediscenti, scri
optimus quisque praeceptor frequentia benti, et, cogitanti praeceptor assistit,
gaudet , ac. majore se theatro dignum
putat. At vero minores, ex conscientia quorum aliquid agentibus cujuscunque in
suae infirmitatis, haerere singulis, et of terventus impedimento est. Lectio quo
ficio fungi quodammodo paedagogorum que non omnis, nec semper praeeunte,
vel interpretante eget. Quando enim tot
non indignantur, Sed praestet alicui vel auctorum notitia contingeret? Ergo modi
gratia, vel amicitia, vel, pecunia, ut cum tempus est, quo in totum diem ve
=T-=a.

24 INSTITUCIONES ORATORIAS

enseña á cada uno, aprovecha tambien á muchos. La mayor


parte son de tal naturaleza, que todos las aprenden á una
vez. Paso en silencio la distribucion de la materia para las
composiciones, y las declamaciones de los que estudian retó
rica, en las que el fruto que todos sacan es igual, por mu
chos que sean los discípulos. Porque no sucede con la voz del
maestro lo que en un convite, que, quantos mas son los
convidados toca á ménos; sino como con el sol, que sien
do uno solo, á todos alumbra y calienta igualmente. De la
misma manera quando un maestro de gramática haga una di
sertacion sobre la manera de hablar, quando trata una qües
tion, expone un historiador, ó explica algun poeta, apren
derán tantos quantos oigan.
Pero á lo ménos, dirán, el mucho número impedirá cor
regir las composiciones y la explicacion del maestro. Haya en
horabuena en esto algun inconveniente (porque dónde no le
habrá?) pero este daño se recompensa con otras ventajas que
luego diremos: porque no quiero yo que se envie al niño
donde esté abandonado. Ni tampoco el maestro, si quiere cum
plir con su obligacion, se cargará de mas discípulos, que los
que puede enseñar: y lo primero que se deberá cuidar, es el
tener amistad y trato con él, y que no tome la enseñanza
por oficio, sino por aficion. De este modo nunca habrá con
fusion. Ni dexará el maestro, si tiene alguna instruccion, de
fomentar por honor suyo á quien ve que es estudioso y de
talento. Pero así como se han de evitar las escuelas muy nu.
- -

1ut opus ordinetur: ideoque per plures Atenim emendationi praelectionique


ire possunt, etiam quae singulis traden numerus obstat. Sit incommodum, (nam
quid fere undique placetº) mox illud com
da sunt. Pleraque vero hanc conditionem.
habent, ut eadem voce ad omnes simul parabimus
mitti puerumcommodis. Neenegligatur.
volo, ubi ego tamenSed

perferantur. Taceo de partitionibus , et neque praeceptor bonus majore se turba,
declamationibus rhetorum : quibus certe
quantuscunque numerus adhibeatur, ta quam ut, sustinere eam possity onerave
men unusquisque totum feret. Non enim rit: et in primis ea , habenda cura est,
vox illa praeceptoris, ut coena , minus utis omnino fiat nobis familiariterami
cus, nec oficium in docendo spectet, sed
pluribus suficit; sed, ut sol, universis
idem lucis calorisque largitur. Gramma afectum. Ita nunquam erimus in turba.
ticus quoque si de ratione loquendi dis Nec sane quisquam, literis saltem levi"
serat, quaestiones explicet, historias ex ter imbutus, eum in quo studium inge
ponat, poemata enarret: totilla discent, niumque perspexerit,
que gloriam nonfovebit,
peculiariter in suamSedquº.
ut
quot audient. . . ... º
-
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 25
merosas (á lo que no me inclino, si hay razon para que acu
dan tantos á ella), así tampoco prueba esto, que deba huir
se de la enseñanza pública; porque una cosa es huir de ellas,
y otra hacer eleccion de la mejor. -

II. Ya que hemos refutado las opiniones contrarias, pon


gamos la nuestra. Lo primero de todo , el que ha de seguir
la eloqüencia, y ha de vivir en medio de grandes concur
rencias, y á la vista de la república, acostúmbrese desde pe
queñito á no asustarse de ver á los hombres, y á no ser en
cogido con una vida oculta y retirada. Ha de explayar y le
vantar el ánimo, el qual con el retiro, ó se debilita y se
amohece (para decirlo así), ó se hincha y engrie por una fal
sa persuasion. Preciso es que se tenga por muy grande hom
bre el que no se compara con nadie. Ademas de esto , quan
do se ha de manifestar lo que se sabe, se ofusca la vista con
tanta luz, y todo se le hace nuevo; como que aprendió solo
y retirado lo que ha de hacer entre muchos.
Dexo á un lado las amistades, que trabadas como con la
zos de religion, duran hasta la vejez; porque el tener unos
mismos estudios no es ménos estrecho vínculo que profesar
una misma religion.
Pues si se aparta de la sociedad, que es natural no so
lamente á los hombres, sino á las mismas bestias mudas, ¿dón
de ha de aprender aquel conocimiento que se llama comun?”
Juntemos á lo dicho, que en sus casas solo aprenderán
El Es

fugiendae sint magnae scholae, (cuine ni persuasione. Necesse est enim sibi ni
ipse quidem rei assentior, si ad aliquem mium tribuat, qui se nemini comparat.
merito concurritur) non tamen hoc eo Deinde, cum proferenda sunt studia, ca
valet, ut fugiendae sint omnino scholae. ligat in sole, et omnia nova ofendit: ut
Aliud est enim vitare eas, ahiud eligere. qui solus didicerit, quod inter multos fa
II. Et si refutavimus quae contra di ciendum est.
cuntur, jam explicemus quid ipsi sequa Mitto amicitias, quae ad senectutem
mur. Ante omnia, futurus orator, cui in usque firmissime durant, religiosa qua
maxima celebritate, et in media reipu dam necessitudine imbutae. Nec enim
blicae luce vivendum est, assuescat jam est, sanctius sacrisiisdem , quam studiis
à tenero non reformidare homines, ne initiari.
que illa solitaria et velut umbratili vita Sensum ipsum , qui communis dicitur,
pallescere. Excitanda mens, et attollenda ubi discet, cum se à congressu, qui non
semper est, quae in hujusmodi secretis, hominibus solum , sed mutis quoque ani
aut languescit, et quendam velut in opa malibus naturalis est, segregarit?
co situm ducit; aut contra tumescit ina Adde , quod domi ea sola discere
ToM. H.
26 INSTITUCIONES ORATORIAS
º

lo que se les enseñe á ellos; pero en las escuelas lo que á


otros. Todos los dias oirá aprobar unas cosas, y corregir otras.
Aprovechará con ver reprehender la pereza de unos, y ala
bar la aplicacion de otros : con las alabanzas cobrará emula.
cion; tendrá por cosa vergonzosa quedar atras de los iguales,
y por honra excederá los mayores. Todo esto sirve de es
puela á los ánimos, y aunque nunca es buena la ambicion,
ordinariamente es orígen de cosas buenas. Hallo, que mis maes.
tros no en vano observaban una costumbre, quando repartian \
los discípulos en varias clases "; y era el mandar decir á cada
uno por su órden, y segun la graduacion de sus talentos,
declamando cada qual en puesto mas honroso, segun la ven
taja que llevaba á los demas. Se daban sobre esto sus sen
tencias, y cada uno se empeñaba por lograr la palma; pero
el ser la cabeza de una clase era la mayor honra. Ni este
juicio está irrevocable, sino que en el último dia del mes los
vencidos tenian facultad de aspirar al mismo puesto. De este
modo el superior no adoxaba en el cuidado con la victoria,
y el sentimiento estimulaba al vencido á librarse de la afren
ta. Y en quanto yo puedo acordarme, digo que todo esto
nos sirvió de mayor espuela para el estudio de la oratoria,
que las exhortaciones de los maestros, el cuidado de los ayos,
y deseos de los padres. ---

Pero así como la emulacion causa progresos mayores en


el estudio, asi á los principiantes y tiernos les es mas gusto
so, por lo mismo que es mas ¿,
imitar á los condiscipulos

otest, quae ipsi praecipientur: in scho dicia praebebantur: ea nobis ingens pal
etiam quae aliis. Audiet multa quo mae contentio. Ducere vero classem, mul
tidie probari, multa corrigi: proderit ali to pulcherrimum. Nec de hoc semel de
cujus objurgata desidia , proderit laudata cretum erat : tricesimus dies reddebat
industria : excitabitur laude aemulatio: victo certaminis potestatem. Ita, nec su
turpe ducet cedere pari, pulchrum supe perior succesu curam remittebat, et do
rasse majores. Accendunt omnia haec ani lor victum ad depellendam ignominiam
mus, et licetipsa vitium sit ambitio, fre concitabat. lo nobis. acriores ad studia
quenter tamen causa virtutum est. Non dicendi faces subdidisse, quam exhorta
inutilem scio servatum esse à praece tiones docentium , paedagogorum custo
ptoribus meis morem , qui cum pueros in diam , vota parentum , quantum animi
classes distribuerant, ordinem dicendi se mei conjectura colligere possum, con
cundum vires ingenii dabant: et ita su tenderim.
periore loco quisque declamabat, ut prae Sed sicut firmiores ín literis profectus
cedere profectu videbatur. Hujus rei ju alit aemulatio, ita incipientibus, atque
DE. M. FABIo QUINTILIANo. LIB. I. 27
que á los maestros. Pues los que estan en los primeros rudi
mentos apénas tendrán valor para aspirar á una eloqüencia,
que ellos consideran muy superior á sus fuerzas; abrazando
mas fácilmente lo que está cerca de sí, como acaece á las
vides, que enlazándose con las primeras ramas de los árboles,
suben hasta la copa. Lo qual es tan cierto, que aun el mis
mo maestro, si es que prefiere la utilidad á la ambicion, de
be cuidar , quando maneja talentos principiantes , de no
agobiar con tareas la debilidad de los discípulos, sino tener
consideracion á sus fuerzas, y acomodarse á su capacidad.
Porque á la manera que los vasos de boca angosta no reci
ben nada del licor que se les envia de golpe, pero se lle
nan, quando se les echa poco á poco, y gota á gota; así SC
ha de tener cuenta con lo que puede el talento de los niños.
Porque si son cosas que exceden su capacidad, no aprende.
rán nada , como que no alcanzan á tanto. Será útil pues
tener algunos discípulos á quienes los otros imiten al prin
cipio, y despues los excedan. Así se irán poco á poco con
cibiendo esperanzas de cosas mayores.
Añado á lo dicho, que los maestros no pueden hablar con
el mismo espíritu y eficacia, quando oye uno solo, que quan
do les anima la concurrencia de discípulos”: pues la elo
qüencia por la mayor parte consiste en el fuego del ánimo.
Este es preciso se impresione, y conciba las imágenes de las
cosas, y se transforme en cierto modo en la naturaleza de lo

adhuc teneris, condiscipulorum , quam spuunt, sensim autem influentibus , vel


praeceptorum jucundior, hoc ipso quod etiam instillatis complentur : sic animi
facilior, imitatio est. Vix enim se prima puerorum quantum accipere possint, vi
elementa ad spem tollere efingendae, dendum est. Nam majora intellectu, ve
¿ summam putant, eloquentiae au lut parum aptos ad percipiendum ani
ebunt; proxima amplectuntur magis: ut mos, non subibunt. Utile igitur est ha
vites arboribus applicitae, inferiores prius bere quos imitari primum , mox vince
apprehendendo ramos, in cacumina eva re velis. Ita paulatim et superiorum
dunt. Quod adeo verum est, ut ipsius spes erit. -

etiam magistri, si tamen ambitiosis uti His adjicio , praeceptores ipsos non
lia praeferet, hoc opus sit, cum adhuc idem mentis, ac spiritus in dicendo pos
rudia tractabit ingenia, non statim one se concipere , singulis tantum praesen
rare infirmitatem discentium, sed tem tibus, quod illa celebritate audientium
perare vires suas, et ad intellectum au instinctos. Maxima enim pars eloquen
dientis descendere. Nam , ut vascula oris tiae constat animo. Hunc afici, hunc
angusti superfusam humoris copiam re concipere imagines rerum , et transfor
L) 2
28 INSTITUCIONES ORATORIAS

que tratamos. Finalmente , quanto este es mas generoso y


grande, mayores son, digamos así, los órganos” que le
mueven. Por donde crece con la alabanza , se aumenta con
el esfuerzo, y gusta emplearse en cosas grandes; se desdeña
en cierto modo de abaxar el estilo del decir, que tanto le ha
costado el formar, para acomodarse á un solo discípulo; y
por otra parte levantar el estilo familiar le causa rubor. Y
ciertamente, imagínese qualquiera que está viendo á un maes
tro declamar ó perorar delante de un solo discípulo: figúre
se aquella disposicion, la voz, el modo de andar, la pro
nunciacion, y por último aquel ardor y movimiento de cuer
po y alma, y (para no recorrerlo todo) aquel sudar y afa
narse, quando habla, ¿no diriamos que padecia algun ramo de
locura? Si el hombre no tuviera sino otro hombre con quien
comunicar, no habria eloqüencia en el mundo.”

manºs amasas

mari quodammodo ad naturam eorum, modum sermonis attolli. Et sane conci


de quibus loquimur, necesse est. Is por piat quis mente, vel declamantis habitum,
ro , quo generosior celsiorque est , hoc vel orantis vocem, incessum , pronuntia
majoribus velut organis commovetur: id tionem, illum denique animi et corporis
eoque et laude crescit, et impetu auge motum, sudorem, et (ut alia praeteream)
tur, et aliquid magnum agere gaudet. fatigationem, audiente uno : nonne quid
Est quaedam tacita dedignatio, vim di dam pati simile furori videatur ? Non
cendi tantis comparatam laboribus ad esset in rebus humanis eloquentia, si
unum auditorem demittere: pudet supra tantum cum singulis loqueremur.
Dz M. FABIo qUINTILIANo. LIB. 1. 29

CAPÍTULO III.
I.Señales para conocer el talento. II. Cómo se ha de
manejar el ingenio del discípulo. III. De las diversiones.
IV. No se les debe azotar, Y
3

I. E maestro diestro encargado ya del niño, lo primero


de todo tantée sus talentos, é indole. La principal señal de ta.
lento en los niños es la memoria”; la que tiene dos oficios
que son, aprender con facilidad, y, retener fielmente lo que
aprendió. La segunda señal es la habilidad en imitar , por
ser señal de docilidad ; pero de manera que esta imita
cion sea de lo que aprende, y no para remedar el ayre y mo
do de andar de las personas, ó algun otro defecto, que lla
me la atencion. Pues el que así pretende hacer reir, para
mi modo de pensar, no indica buena índole. Sobre todo, el
niño bueno será verdaderamente ingenioso: porque no tengo
por tan malo el ser de poco talento, como el ser de índole
perversa. El niño bueno estará muy distante de ser perezo
so y dexado como otros : oirá sin repugnancia lo que se le
enseñe : hará algunas preguntas : seguirá por donde se le
lleve, pero no se adelantará. ”. Aquella especie de ingenios,
que á manera de frutas se anticipan, nunca llegan á sazon.
-sur-num -ams

C A P U T I I.

I. Quibus rignis dignorci porrint ingenia. II. Quonam modo tractandus sit dircen
rir animus, llI. De lusa puerorum. IV. Caedendos non esse pueros.

I. T radito sibi puero, docendi pe dolis, qui hoc imitandi studio petet, ut
ritus ingenium ejus in primis naturam rideatur. Nam probus quoque in primis
que perspiciat. Ingenii signum in parvis erit ille vere ingeniosus: alioqui non pe
praecipuum memoria est. Ejus duplex jus duxerim tardi esse ingenii, quam ma
virtus; facile percipere, et fideliter con li. Probus autem ab illo segniet jacente
tinere. Proximum imitatio: nam id quo plurimum aberit. Hic meus, quae tra
que est docilis naturae; sic tamen, ut ea dentur, non dificulter aceipiet: quaedam
quae discit, efingat, non habitum forte, etiam interrogabit: sequetur tamen ma
et incessum, et si quid in pejus notabi gis quam praecurret. Illud ingeniorum .
le est. Non dabit mihi spem bonae in velut praecox genus, non temere unquam
3o - INSTITUCIONES. ORATORIAS

Estos hacen con facilidad cosas pequeñas, é impelidos de su


mismo ímpetu, al punto manifiestan lo que pueden en ellas; pe.
ro finalmente no pueden sino lo que no tiene dificultad: hablan
mucho, y sin cortarse; no hacen mucho, sino pronto: quan
to dicen, es cosa sin solidez y muy superficial: son muy se
mejantes á las semillas que quedáron encima de la tierra, que
al punto nacen ; y como la yerba que, echando la espiga,
se agosta ántes de granar. ” Causa gusto, es cierto, el ver
estos adelantamientos en años tan cortos , pero paran des
pues, y cesa la admiracion.
II. Quando esto se note, véase como se han de mane
jar en lo sucesivo los talentos del discípulo. Hay algunos flo
xos, si no los aprietan: algunos enójanse de que los manden.
A unos el miedo los contiene , á otros los hace encogidos.
Hay talentos, que si algo aprovechan, es á fuerza de ma
chacar en algunas cosas ; otros hay que dan el fruto de pron.
to. A mí denme un niño, á quien mueva la alabanza, la
gloria le estimule, y que llore quando es vencido. A este
la emulacion le servirá de fomento, la reprehension le ha
rá mella, el honor le servirá de espuela , y nunca teme
remos que dé en la pereza.
III. Pero á todos se les debe conceder algun desahogo,
no solamente porque no hay cosa ninguna que pueda sufrir
un continuo trabajo (pues aun las mismas cosas insensibles é
inanimadas afloxan alguna vez, para no perder su fuerza) sino

pervenitad frugem. Hi sunt, qui parva sit discentis animus. Sunt quidam , nisi
facile faciunt: et audacia provecti, quic- institeris, remissi; quidam imperia in
quid illic possunt, statim ostendunt. Pos- dignantur: quosdam continet metus, quos
sunt autem id demum , quod in proxi dam debilitat : alios continuatio extun
mo est: verba continuant, haec vultu dit, in aliis plus impetus facit. Mihi ille
interrito, nulla tardati verecundia profe detur puer, quem laus excitet, quem glo
runt: non multum praestant, sed cito: ria juvet, qui victus fleat. Hic erit alen
non subest vera vis, nec penitus immis dus ambitu, hunc mordebit objurgatio,
sis radicibus nititur; ut, quae Summo hunchonor excitabit: in, hoc desidiam
solo sparsa sunt semina, celerius se ef nunquam verebor.
fundunt, etimitatae spicas herbulae inani III. Danda esttamen omnibus aliqua
bus aristis ante messem flavescunt. Pla remissio: non solum quia nulla res-est,
cent haec annis comparata; deinde stat quae perferre possit continuum laborem:
profectus, admiratio decrescit. atque ea quoque, quae sensu, et anima
II. Haec cum animadverterit, perspi carent , ut servare vim suam possint,
ciat deinceps, quonam modo tractandus velut alterna quiete retenduntur : sed
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 3I

porque el deseo de aprender depende de la voluntad, don


de no cabe violencia. Y así vuelven despues á la tarea con
mayor empeño, despues de tomar ánimo con la diversion, y
aun con mas gusto; lo que no sucede en lo que hacemos
por necesidad. No llevo a mal el juego en los niños, por
que esto es tambien señal de viveza; ni puedo esperar que
estando siempre tristes y melancolicos, puedan levantar el es
píritu para el estudio , quando le tiene caido en cosa tan
natural á aquellos años. Haya sin embargo tasa en la diver
sion; de manera, que ni el negarles este desahogo engen
dre en ellos fastidio en el estudio, ni siendo demasiado los ha
bitúe al ocio. Hay tambien algunos juegos, que sirven pa
ra aguzar el ingenio de los niños, poniéndose unos á otros
para emulacion suya algunas dudas sobre qualquiera mate
ria. Descubren tambien ellos sencillamente en el juego sus
inclinaciones, para que sepamos que no hay edad tan tierna
que no aprenda al punto lo que es bueno y malo; y que
entónces se le ha de ir formando, quando no sabiendo fin
gir, muestra docilidad para aprender. Lo que llegó á en
durecerse con algun torcimiento, mas fácil es romperlo, que
enderezarlo. Desde el principio se le ha de enseñar al niño
á no obrar con pasion , con torcimiento ó desenfreno, te
niendo siempre presente aquello de Virgilio. Georg 2.272.
Tanto vale en los niños la costumbre.
IV. El azotar á los discípulos, aunque está recibido por
las costumbres, y Crisipo no lo desaprueba , de ninguna
-

- -

quod studium discendi, voluntate, quae tis invicem cujuscunque generis quae
cogi non potest, constat. Itaque, et vi stiunculis, aemulantur. Mores quoque se
rium plus afferuntad discendum reno— inter ludendum simplicius deteguntº mo
vati , ac recentes, et acriorem animum, do nulla videaturaetas tam infirma, quae
quifere necessitatibus repugnat. Nec me non protinus quid reetum, pravumqúe sir
offenderit lusus in pueris; est et hoc si discat; tum vel maxime formanda, cum
gnum alacritatis; neque illum tristem, simulandinescia est, et praecipientibus
semperque demissum sperare possim ere facillime cedit. Frangas enim citius, quam
ctae circa studia mentis fore, cum in hoc corrigas, quae in pravum induruerunt,
quoque maxime naturali aetatibus illis Protinus ergo nequid cupide , nequid
impetu jaceat, Modus tamen sit remis improbe, nequid impotenter faciat, mo
sionibus, ne autodium studiorum faciant mendus est puer; habendumque in animo
negatae, aut otii consuetudinem nimiae; semper illud Virgilianum : Adeo in tene
sunt etiam nonnulli acuendis puerorum rir consuercere multum est.
ingeniis non inutiles lusus, cum , posi IV. Caedi vero discentes, quanquam
32 - INSTITUCIONES ORATORIAg

manera lo tengo por conveniente. Primeramente porque es


cosa fea y de esclavos, y ciertamente injuriosa si fuera en
otra edad, en lo que convienen todos. En segundo lugar,
porque si hay alguno de tan ruin modo de pensar, que no
se corrija con la reprehension, este tambien hará callo con
los azotes, como los mas infames esclavos. Ultimamente, por
que no se necesitará de este castigo, si hay quien les tome
cuenta estrecha de sus tareas. Mas ahora parece que de
tal suerte se corrigen las faltas de los niños cometidas por
el descuido de sus ayos, que no se les obliga á hacer su
deber, sino que se les castiga por no haberlo hecho. En
conclusion, si á un niño pequeñito se le castiga con azo
tes, ¿qué harás con un jóven, á quien ni se le puede ater
rar de este modo, y tiene que aprender cosas mayores? Aña
damos á esto, que el acto de azotar trae consigo muchas veces
á causa del dolor y miedo cosas feas de decirse, que despues
causan rubor: la qual vergüenza quebranta y abate al alma,
inspirándola hastío y tedio á la misma luz. Ademas de lo di
cho, si se cuida poco de escoger ayos y maestros de bue
nas costumbres, no se puede decir sin vergüenza, para qué
infamias abusan del derecho y facultad de castigar en esta
forma los hombres mal inclinados: quan ocasionado
es á veces á otros este miedo de los miserables discípulos
No me detendré mucho en esto: demasiado es lo que se
dexa entender. Por lo que baste el haber dicho , que á
ninguno se le debe permitir demasiado contra una edad
sus E-M º - -

et receptum sit, et chrysippus non im adhiberi potest hic metus, et majora di


probet, minime velim. Primum , quia scenda sunt? Adde, quod multa vapu
deformé, atque servile est: et certe, quod lantibus dictu deformia , et mox vere
convenit, si aetatem mutes, injuria. Dein cundiae futura, saepe dolore, vel metu
de, quod si cuitam est mensilliberalis, accidunt: qui pudor refringit animum,
ut objurgatione non corrigatur, is etiam et abjicit, atque ipsius lucis fugam , et
ad plagas, ut pessima quaeque mancipia, taedium dictat. Jam , si minor in dili
durabitur. Postremo, quod ne opus erit gendis custodum, et praeceptorum mo
uidem hac castigatione, si assiduus stu ribus fuit cura , pudet dicere in quae
¿ exactor adstiterit. Nunc fere ne probra nefandi homines isto caedendi ju
gligentia paedagogorum sic emendari vi re abutantur; quam detaliis quoque non
detur, ut pueri non facere quae recta nunquam occasionem hic miserorum me
sunt, cogantur, sed cur non fecerint, pu tus. Non morabor in parte hac: nimium,
niantur. Denique cum parvulum verberi est, quod intelligitur. Quare hoc dixisse
hus coegeris, quid juvenifacias, cuinec satis est, in aetatem infirmam, et inJu
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 33

débil, y expuesta á la injuria. Ahora comenzaré á tratar


de las artes, en que se le debe instruir al que se le va forman
do de este modo para la oratoria; y por dónde se debe
comenzar en cada edad. -

A*. ...»
CAP I TU LO IV. y

DE LA GRAMÁTICA.

I. Alabanzas de la gramática. II. Tres propiedades del


lenguage : correccion , claridad y elegancia. III. Para el
lenguage se atiende a la razon, á la autoridad , d la an
tigüedad , y á la costumbre. IV. De la ortografía.

El niño que aprendió ya á leer y escribir, lo prime


ro que debe aprender, es la gramática: bien entendamos la
griega, ó la latina; aunque yo gustaria, que primero se es
tudiase la griega. El mismo método hay para la una, que pa
ra la otra. Reduciéndose pues este estudio á dos cosas tan
solas, que son , saber hablar, y explicar los poetas, mas es
lo que encierra en el fondo, que lo que manifiesta. Porque
el escribir va incluido en el hablar, y la explicacion de los

riae obnoxiam, nemini debere nimium orator, et quae in quaque aetate inchoan
licere. Nunc, quibus instituemdus sit ar da, dicere ingrediar. -

tibus, quisic formabitur, ut fieri possit

C A P U T IV.

DE GRAMMATICA.

I. Grammaticae laus. II. Orationis tres virtutes, utemendata, un dilucida, ue er


nata rit. III. Sermonem constare ratione, vetustate, auctoritate, consuetudine. IV. De
orthographia. -

T.Pinus in eo , qui legendi, scri esse priorem placet. Utrique eadem via
bendique adeptus erit facultatem, gram est. Haec igitur professio cum brevissi
maticis est locus. Nec refert de graeco, me in duas partes dividatur, recte lo
an de latino loquar: quanquam graecum quendi scientiam , et poetarum enarra
TGM.
34 INSTITUCIONES ORATORIAS

poetas supone ya el leer correctamente; en lo qual se inclu


ye la crítica. De ella usáron los gramáticos antiguos con tan
to rigor, que no solamente censuraban los versos y libros de
títulos supuestos, tomándose la licencia de quitarles el nom
bre del autor, que, á su parecer, falsamente llevaban, sino
que á otros autores los reduxéron á ciertas clases, quitando á
otros de este número.” Ni basta el haber leido los poetas. Se
han de revolver todos los escritores, no solamente por las
historias que contienen, sino tambien por las palabras, que
reciben autoridad de aquellos que las usáron. Ni puede ser
uno perfecto gramático sin la música, pues ha de tratar del
metro y rithmo.” Ni podrá entender los poetas sin algun
conocimiento de la esfera celeste; los quales para la expli
cacion de los tiempos (dexando á un lado otras materias)
hacen tanto uso del nacimiento y ocaso de los astros. No de
be tampoco ignorar la filosofia, ya para entender muchísi
mos pasages de los poetas, tomados de lo mas recóndito de
las qüestiones naturales, ya para interpretar á Empedocles
entre los griegos, á Varron y Lucrecio entre los latinos, que
dexáron escrita en verso la filosofia. Se necesita tambien de
mas que mediana eloqüencia, para hablar con propiedad y
afluencia en cada una de las cosas, que llevamos dichas. Por
donde no se puede sufrir á los que neciamente dicen , ser es
ta arte de peco momento , y cosa excusada. En la que si no
echare firmes cimientos el que ha de ser orador , quanto
- E

tionem, plus habet in recessu, quam fron ei de metris, rhythmisque dicendum sit.
te promittit Nam et scribendi ratio con Nec, si rationem siderum ignoret, poe
juncta cum loquendo, est,,et, enarratio tas intelligat, qui (ut alia mittam) to
mem praeceditemendata lectio et m" ties ortu, occasuque signorum in decla
stum his omnibus judicium est. Quo qui randis temporibus utuntur. Nec ignara
dem ita severe sunt usi veteres gram philosophiae , cum propter plurimos in
matici, ut non versus modo censoria qua omnibus fere carminibus locos ex intima
dam virgula notare, et libros, qui falso quaestionum naturalium subtilitate repe
viderentur inscripti, tanquam subdititios titos , tumsvel propter Empedoclem in
summovere familia permiserint sibi: sed graecis, Varronem, ac Lucretium in la
auctores alios in ordinem redegerint, alios tinis; qui praecepta sapientiae versibus
omnino exemerint numero. Nec poetas tradiderunt. Eloquentia quoque non me
legisse satis est. Excutiendum omne scri diocri est opus, ut de unaquaque earum,
ptorum genus: non propter historias mo quas demonstravimus, rerum dicat pro
do, sed verba , quae frequenter jus ab prie, et copiose. Quo minus suntferen
auctoribus Sumunt. Tum nec citra muSl" di, qui hanc artem, uttenuem, ac je
cen grammatice potest esse perfecta, cum junam cavillantur: quae misi oratori fu
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. I. 35
sobre ello edifique, irá en falso. Esta arte neCe

saria á los niños, gustosa á los ancianos, dulce compañera


en la soledad; y ella sola entre todos los estudios tiene mas
de trabajo, que de lucimiento. 2
II. Ahora bien, siendo tres las propiedades del lenguage,
correccion, claridad y elegancia (porque el hablar á propó
sito, que es la principal, los mas la ponen en el ornato),
exáminaremos con las reglas de hablar bien , que es lo mas
esencial de la gramática , otros tantos vicios opuestos á las
virtudes dichas.
III. Hay reglas para hablar, y para escribir. En las pa
labras atendemos á la razon, antigüedad, autoridad y uso.
La razon nace principalmente de la analogía, y á veces de la
etymología. La antigüedad concilia magestad, y (por de
cirlo así Y cierta veneracion á las voces. La autoridad tó
mase de los oradores é historiadores : porque los poetas
se excusan con el metro: sino tal qual vez, en que pu
diendo por razon del metro usar de dos expresiones, usan
mas esta que aquella, como : Imo de stirpe recisum. Aen,
12.2o8. Aeriae, quo congessere palumbes. Eclog 3.69. Sili
ce in nuda. Eclog I. 15., y otros semejantes modos de ha
blar, en los que el juicio de los oradores mas consumados sirve
de regla ; y á veces se tiene por bueno el error, por seguirá
los hombres de grande autoridad. La costumbre es la maes
tra mas segura de hablar; y hemos de usar de las voces co
-

turo fundamenta fideliter jecerit, quic vetustate , auctoritate, consuetudine. Ra


quid superstruxeris, corruet ; necessaria tionem praestat praecipue analogia, non
pueris, jucunda senibus, dulcis secreto nunquam et etymologia. Vetera majestas
rum comes, et quae vel sola omni stu quaedam , et, ut sic dixerim, religio
diorum genere plus habet operis, quam. commendat. Auctoritas ab oratoribus,vel
ostentationis. historicis peti solet. Nam poetas metri
II. Jam cum omnis oratio tres ha necessitas excusatº, nisi si quando, nihil
beat virtutes, utemendata, ut dilucida, impediente in utroque modulatione pe
ut ornata sit; quia dicere apte (quod dum, alterum malunt: qualia sunt; Imo
est praecipuum) plerique ornatui subji de stirpe recirum. Et, Aériae quo conges
ciunt; totidem vitia , quae sunt supra sere palumber. Et, Silice in nuda. Et si
dictis contraria, emendate loquendi re milia : cum summorum in eloquentia vi
gula (quae grammatices prior est pars) rorum judicium pro ratione, et vel er
examinet. ror honestus est magnos duces sequen
III. Est sua loquentibus observatio; tibus. Consuetudo vero certissima lo
Sua Scribentibus, Serme constat ratione, quendi magistra: utendunque plane ser
2.
36 INSTITUCIONES ORATORIAS

mo de la moneda , que solo es corriente la que tiene el


cuño del dia.
. Las palabras antiguas no solamente tienen grandes patro
nos, sino que concilian cierta magestad y gusto á la oracion;
porque por una parte tienen la autoridad de antiguas, y por
otra, habiéndose dexado su uso por algun tiempo, parecen
como nuevas. Pero se necesita de moderacion, de modo que
ni sea freqüente su uso, ni manifiesto; porque no hay cosa
mas odiosa que la afectacion: ni las voces sean tomadas de
tiempo inmemorial y desconocido, como topper, antigerio, ex
antlare, prosapia”, y los versos de los Salios, entendidos
apénas de sus sacerdotes. Pero á estos los mantiene en uso
la religion, y debemos mirarlos como sagrados. Quán vi
ciosa será la oracion, cuya principal virtud es la claridad, si
necesita de intérprete Con que así como entre las palabras
nuevas las mejores serán las mas antiguas, así entre las anti
guas las mas nuevas.
Lo mismo decimos de la autoridad. Porque si puede ha
ber alguna razon para creer, que no falta á ninguna re
gla el que usa de estas voces, que se hallan en autores muy
autorizados; pero importa mucho saber, qué dixéron, y qué
persuadiéron. Porque ninguno podrá sufrir aquellas voces de
tuburcinabundum y lurcabundum , aunque las usa Caton: ni
el decir hos lodices, aunque lo usa Polion ni la voz gla
diola, aunque la usó Mesala ni la de parricidatum, que aun
e-mm

-
.
-”... 3 º º. .. «.
aione, ut, numo, cui, publica -

forma est, -

consecratis utendum est. oratio vero, cu


-

... Verba à vetustate, repetita, non so jus summa virtus est perspicuitas, quam
lum magnos assertores babent, sed etiam sit vitiosa, si egeat interprete Ergo ut
asserunt orationi majestatem aiiquam,non novorum optima erunt maxime vetera, ita
sine delectatione. Nam et auctoritatem veterum maxime nova.
antiquitatis habent et quia intermissa - Similis cirea auctoritatem ratio. Nam.
sunt, gratiam novitati similem parant. si potest videri nihil peccare, qui utitur
Sed opus est modo, ut neque erebra sint his verbis, quae sumfmi auctores tradi
haec, neque manifesta: quia nihil est derunt, multum tamen refert non solum
odiosius afectatione: nec utique ab ulti quid dixerint, sed etiam quid persuase
mis, et jam obliteratis repetita temporir rint. Neque enim tuburcinabundum , et
bus, qualia sunt: topper, et antigerio, lurcabundum jam in nobis quisquam fe
.et erantlare, et, prorapia , et Saliorum rat, lieet Cato sit auctor: hechos lodi
carmina vix sacerdotibus suis satis in cer, quanquam id Pollioni placeat: nec
telecta, sed illa mutari vetat religio, et gladiola, atqui Messala dixit: nec par
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. T. 37
en Celio apénas es tolerable: ni Calvo me persuadirá á decir
collos; palabras que no usarian al presente sus autores. . .
Resta que hablemos de la costumbre; porque seria ridi
culez anteponer el lenguage que se usó ántes, al que ahora
usamos. ¿Pues qué otra cosa es el lenguage antiguo, que la
antigua costumbre de hablar? Aunque para esto se necesita
de discernimiento, y exáminar, qué es lo que entendemos por
costumbre. Porque, si toma el nombre de lo que siguen los
mas, sacarémos una regla muy peligrosa , no digo para la
oracion, sino, lo que es mas, para vivir. ¿Pues de dónde na
ce este tan grande bien, de que nos agrade lo que los mas
tienen por bueno? Porque, así como el arrancarse el bello,
el enrizar el cabello, y el beber con exceso en los baños, no
hará costumbre, por mas que se introduzca en un pais, por
que todo es vituperable, y con todo éso nos bañamos, nos
esquilamos, y banqueteamos por costumbre: así en el hablar
no se ha de tener por uso una cosa, porque la sigan muchos.
Porque, dexando á un lado el lenguage que usa el vulgo
ignorante, vemos que aun los teatros y el circo resuenan con
un lenguage bárbaro. "Segun lo dicho llamaré costumbre y
uso del lenguage al consentimiento de los sabios , á la manera
que llamamos costumbre de vivir al consentimiento de los
buenos. - - - - -

IV. Ya que queda dicho quál es la regla de hablar, di


gamos, qué reglas hay para escribir. Lo que en griego se lla
---

ricidatum, quod in Caelio vix tolerabile ceant? Igitur utvelli, et comam in gra
videtur: nec collos mihi Calvus persua dus frangere, et in balneis perpotáre,
serit: quae nec ipsi jam dicerent. quamlibethaec invaserint civitatem, nomí
Superestigitur consuetudo: nam fuerít erit consuetudo, quia, nihil horum ca
pene , ridiculum, malle sermonern, quo ret reprehensione; at lavamur, et ton
locuti sunt homines, quam quo loquan demur, et convivimus ex consuetudine.
tur. Etsane quid est aliud vetus sermo, Sic in loquendo, non, si quid vitiose mul
quam vetus loquendi consuetudo? Sed tis insederit, pro regula sermonis acci
huicipsi necessarium est judicium, con piendum erit. Nam ut, transeam quem
stituendumque in primis idipsum , quid admodum vulgo imperiti loquuntur, tota
sit, quod consuetudinem vocemus. Quae saepe theatra, et omnnem circi turbam.
si exeo, quod plures faciunt, nomen exclamasse barbare scimus. Ergo consue
accipiat, periculosissimum dabít, prae— tudinem sermonis vocabo consensum erudi
ceptum, non orationi modo, sed ( quod, torum: sicut vivendi, consensum bonorum.
majus est ) vitae. Unde eñim tantum IV. Nunc, quoniam diximus, quae sit
boni, ut pluribus, quae recta sunt, pla loquendi regula, dicendum, quae Scriben
38 INSTITUcioNEs oRAToRIAs
ma ortografia, llamemos nosotros ciencia de escribir bien.
Yo juzgo que se debe escribir cada palabra como suena, si
no lo repugna la costumbre. Porque el oficio de las letras
parece ser este, conservar las voces, y restituir, digamos así,
al que lee lo que se les encomendó : y así deben declarar lo
que nosotros hemos de decir,
Estas son las reglas comunes de hablar, y escribir bien.
Las otras dos, que son el hablar con palabras propias, y ele
gantes, no se las quito á los gramáticos, sino que las guar
do para mejor ocasion , quando hablemos de los oficios del
orador.
Me ocurre ahora, que tendrá alguno por menudencias
quanto habemos dicho, y por embarazo de cosas mayores. Di
go, que no pretendo yo, que se gaste el tiempo en cosas dema
siado mecánicas, y en necías disputas, con las que se arrui
ne y gaste el talento. Pero en la gramática nada daña sino lo
superfluo. ¿Es por ventura menor Ciceron en la oratoria , por
haber sido muy exácto en esta arte , y muy riguroso en
la enseñanza de su hijo, como consta de sus cartas. ¿O dis
minuye un punto el mérito de Cesar el haber escrito de ana.
logía? ¿O fué ménos puro Mesala por haber hecho libros
enteros, no digo de cada una de las palabras, sino de las
letras? Que no embarazan estas artes á los que pasan por
ellas, sino á los que no pasan de ahí,
- - -.

--

tibuscustodienda.Quod graecie zººríº mium , et impedimenta quoque majus


vocant, nos recte scribendi scientiam aliquid agentibus putent. Necipse ad ex
nominemus. Ego,... misiquod consuetudo tremam usque anxietatem, et ineptas ca
obtinuerit, sic scribendum quicque judi villationes descendendum ; atque his in
co, quo modo sonat, Hie enim usus est genia concidi, et, comminui credo, Sed
literarum, ut custodiant voces, et velut nihil ex grammatica nocuerit, misi quod
depositum reddant legentibus., Itaque id supervacuum est. An ideo minor , est
exprimere debent , quod dicturi Su M. Tullius orator, quod idem artis hu
IlliS. jus diligentissimus fuit, et in filio , ut
Hae fere sunt emendate loquendi, in epistolis apparet, recte loquendi asper
quoque exactor ? , Aut vim C., Caesaris
scribendique partes: duas reliquas signi
ficanter , ornateque dicendi, non equi fregerunt editi de analogia libri? Aut
dem grammaticis aufero; sed cum mihi ideo minus Messala mitidus, quia quos
officia rhetoris supersint, majori operi dam totos libellos non de verbis modo
reServ0. singulis , sed etiam literis, dedit? Non
Redit autem illa cogitatio, quosdam obstanthae disciplinae perillas euntibus,
fore, qui haec, quae diximus, Parva ni sed circa illas haerentibus.

º
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 39

CAPÍTULO V.
QUÉ LIBRos DEBEN LEER PRIMERAMENTE Los NIÑos,
Y DE QUÉ MANERA.

Rano, hablar del modo de leer : en lo qual no se


le puede enseñar al niño ménos que con la práctica, donde
ha de suspender el aliento; donde distinguir el verso; don
de hacer sentido, y donde comienza este; quando debe le-,
vantar la voz, quando baxarla; qué tono debe dar á cada
cosa; donde debe leer con pausa , donde con ligereza; qué
pasages se han de leer con vehemencia, y quáles con dulzura,
Una cosa encargaré en esto, y es, que entienda lo que lee, pa.
ra lograr todo esto. Sea ante todas cosas el modo de leer varo
nil, acompañado de suavidad y gravedad; y lo que es verso no
se lea en el mismo tono que la prosa: pues aun los mismos poe-A
tas dicen que cantan. No se ha de entender por esto un canto
material, ni adelgazando la voz, como muchos, afeminadamen
te. ” De este modo de leer, dicen, habló Cesar, siendo aun
niño, quando dixo: Si cantas, cantas mal; si lees, cantas.
Ni quiero que las prosopopeyas se pronuncien, como quie
ren algunos, con ayre cómico; pero háganse sus inflexiones,
para distinguirlas de lo que el poeta dice por sí. .. .
En todo lo demas es necesario advertir muy mucho, que
-m

º e CAP, U T V. , , ,, , , , , , , . . ....,
quos LIBRos PRAELEcI PUERIs opoRTEAT, at quoMoDo. -
Sra. lectio: in qua puerut sciat
ubi suspendere spiritum debeat, quo lo
carmen est, et se poetae canere testan
tur: non tamen in canticum disoluta, nec
co versum distinguere , ubi claudatur plasmate (ut nunc à plerisque fit) effe
sensus, unde incipiat, quando attollenda, minata. De quo genere optime C. Cae
vel submittenda sit vox; quid quo flexu, sarem praetextatum adhuc accepimus di
quid lentius, celerius, concitatius, lenius xisse : Si cantar, male cantas : si legir,
dicendum, demonstrari nisi in opere ipso cantas, Nec prosopopoejas, ut quibusdam
non potest. Unum estigitur, quod in hac placet, ad comicum morem pronuntiari
parte praecipiam : ut omnia ista facere velim esse tamen flexum quendam, quo
possit, intelligat. Sit autem in primis le distinguantur ab iis, in quibus poeta per
ctio virilis , et cum suavitate quadam SOIla Sua utetur.
gravis, etnon quidem prosae similis, quia Caetera admonitione magna egent: ía
•.

4O. - INSTITUCIONES ORATORIAS

los entendimientos tiernos, y que han de llevar adelante los


conocimientos que se les imprimiéron al principio, quando es
taban vacíos de toda idea, no solo aprendan lo que les ins
truye, sino mucho mas lo bueno. Por donde está bien enta
blado, que se comience á leer por Homero y Virgilio; bien
que para entender sus bellezas, era menester mayor discer
nimiento pero para esto tiempo les queda; puesto que no
los han de leer una sola vez. Entretanto vayan levantando el
espíritu con la grandeza del verso heróyco, y ensanchando
el alma con la de las materias, y bebiendo ideas nobles.
Las tragedias son útiles. Los líricos tambien fomentan el
espíritu, si se hace eleccion, no solamente de los autores, si
no tambien de sus partes. Los griegos escribiéron con desen
voltura, y Horacio tiene lugares, que no quisiera explicar
los á los niños. Las elegias amatorias , y los endecasílabos,
que tienen algunos incisos de versos º sotadeos (porque es
tos versos ni mentarlos), destiérrense, si es posible; ó á lo
ménos resérvense para quando los niños sean mayores. En su
lugar diremos, qué uso pueden hacer de la comedia, que con
tribuye mucho para la eloqüencia , por emplearse toda ella en
Personas y afectos: porque esta será la principal leccion, quan
do no se siga daño á las costumbres. Hablo de Menandro, aun
que no excluyo á otros; pues los latinos podrán tambien ser
útiles. Pero los niños deben leer sobre todo lo que les fo
mente el ingenio, y aumente las ideas: Para lo demas»
—- se s-º"

prims, ut tenerae mentes, tracturaeque busdam nolim interpretari. Elegida vero,


altius, quicquid rudibus, et omnium igna utique quae amat, ethendecasyllaba, qui
ris insederif, non modo quae disserta, sed bus suñt commata Sotadeorum ( nam de
vel magis quae honesta sunt, discant. sotadeis me praecipiendum quidem est)
Ideoque optime institutum est, utab Ho amoveantur, si fieri potest: si minus,
º mero , atque Virgilio lectio inciperet: certe ad firmius aetatis robur reserven
quanquam ad intelligendas eorum virtu tur. Comoediae, quae plurimum ad elo
fes, firmiore judicio opus esset. Sed huic quentiam conferre potest, cum per omnes
rei superest tempus: necenim semelle et personas, et affectus eat, quem usuma
gentur. Interim et sublimitate heroici in pueris putem, paulo post suo loco di
carminis animus assurgat, et ex magni cam. Nam cum mores in tuto fuerint, in
tudine rerum spiritum ducat, et optimis ter praecipua legenda erit. De Menandro
imbuatur. loquor, nectamen excluserim alios. Nam.
Utiles tragediae."Alunt et lyrici: si latini quoque auctores afferent utilitatis
tamen in his non auctores modo , sed aliquid. Sed pueris, quae maxime inge
etiam partes operis elegeris. Nam et grae nium alant, atque animum augeant, prae
ci licenter multa , et Horatium in qui legenda : caeteris, quae ad eruditionema
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 4I

que sirve á la erudicion , les queda mucho tiempo.


Los poetas latinos son útiles (aunque en los mas de ellos
mas brilla el ingenio que el arte) por la abundancia de pa
labras, en cuyas tragedias puede encontrarse mucha grave
dad, en las comedias mucha elegancia, y cierto aticismo. La
economía en estos es mas exácta, que en la mayor parte de
los modernos, los que pusiéron única perfeccion de sus
obras en los pensamientos. De estos hemos de aprender la
pureza, y el carácter (por decirlo as) varonil, ya que en el
modo de decir hemos caido en todo género de delicadeza y
vicio. Finalmente creamos á los oradores consumados, los que
se valen de los poetas antiguos, ó para lograr el fin de las cau
sas, ó para adorno de la oratoria. Porque veo que sobre to
dos Ciceron, y con alguna freqüencia Asinio , y los demas
cercanos á nuestros tiempos, citan versos enteros de Enio, Ac.
cio, Pacuvio, Lucilio, Terencio, Cecilio, y otros, no solo
con muchísima gracia y erudicion, sino tambien causando deley
te; recreándose con el deleyte poético los oidos cansados con el
ruido del foro. “Los quales acarrean no poca utilidad, quando
se prueba el asunto con sentencias suyas , como con ciertos
testimonios. Aunque aquello primero toca mas á los niños, y
lo segundo á los adultos; como quiera que deban tener aficion
á la gramática, y á la lectura, no solo miéntras estan en las
escuelas, sino por toda la vida.

¿? pertinent
daba
, longa aetas spatium vel ad ornamentum eloquentiae assu
munt. Nam praecipue, quidem apud Ci
Multum autem veteres etiam latini ceronem, frequentertamen apud Asi
conferunt, quanquam plerique plus inge nium, et caeteros, qui sunt proximi, vi
nio, quam arte valuerint, in primis co dimus, Ennii , Accii , Pacuvii, Lucilii,
piam verborum , quorum in , tragoediis Terentii, Caecilii, et aliorum inseri ver
gravitas, in comoediis elegantia, et qui sus summa non eruditionis modo gra
dam velut, arrunto'º os inveniri potest. tia, sed etiam jucunditatis, cum poeti
Oeconomia quoque in his diligentior, quam cis voluptatibus aures à forensi asperita
in plerisque novorum erit, qui omnium te respirent. Quibus accedit non medio
operum solam virtutem sententias puta cris utilitas, cum sententiis ecrum, velut
verunt. Sanctitas certe, et ut sic dicam, quibusdam testimoniis, quae proposuere,
virilitas ab his petenda , quando nos in confirment. Verum priora illa ad pueros
omnia deliciarum genera, vitiaque, di magis, haec sequentia ad robustiores per
cendi quoque ratione defieximus. Deni tinebunt: cum grammatices amor, et usus
que credamus summis oratoribus, quive lectionis, non scholarum temporibus, sed
terum poemata, vel ad finem causarum, vitae spatio terminentur.
ToM. L.
42 INSTITUCIONES ORATORIAS

En la explicacion de los poetas el maestro de gramática


deberá cuidar, que el discípulo, desenlazando el verso, le dé
cuenta de las partes de la oracion, y de las propiedades de
los pies : cosa muy importante en el verso, de que deben ca
recer las composiciones en prosa. Déle á conocer las pala
bras bárbaras, las impropias, y las palabras compuestas con
tra las leyes del lenguage : todo esto no para vituperar á los
poetas (con los quales se disimula tanto, por razon del metro,
que aun los mismos vicios, que cometen en el verso, se bau
tizan con el nombre de metaplasmo y figuras; dando el nom.
bre de gala á lo que ellos hiciéron por necesidad); sino para
advertirles las licencias poéticas, y exercitarles la memoria.
No dañará enseñarlos en los primeros rudimentos las di
versas significaciones de las voces: y el maestro de esta clase
no cuidará ménos de aquellas, que son ménos usadas. Pero pone
ga todo su esmero en enseñar todos los tropos, que sirven de
especial adorno, no solo en el verso, sino tambien en un dis
curso; las dos maneras de figuras, de palabra, y de senten
cia : cuyo tratado, y el de los tropos, reservo
hable del adorno. .
para
. Y
-
quando
Hágales conocer sobre todo de quánto sirve la economía
de un discurso ; la correspondencia de unas cosas con otras ; lo
que conviene á cada persona; qué se ha de alabar en los pen
samientos, y qué en las palabras; donde cae bien la afluencia,
y donde la concision.
-EEE a

In praelegendo, grammaticus etilla inutile; demonstrare, quot quaeque verba


quidem minora praestare debebit, ut par- modis intelligenda sint. Circa gloss pata
tes orationis reddi sibi soluto versu de- etiam , id est, voces minus usitatas, non
sideret, et pedum proprietates, quae adeo ultima ejus professionis diligentia est.
debent esse notae in carminibus, utetiam Enimvero majore cura jam doceat tro
in oratoria compositione desiderentur: de pos omnes, quibus praecipue non poema
prehendatque, quae barbara, quae im modo, sed etiam oratio ornatur : sche
propria , quae contra legem loquendi mata utraque, id est, figuras, quaeque
composita: non, ut ex his utique impro A fews, quaeque davo, a vocantur. Qno
bentur poetae (quibus, quia plerumque rum ego, sicut troporum , tractatum in
metro servire coguntur, adeo ignoscitur, eum locum difiero, quo mihi de ornatu
ut vitia ipsa aliis in carmine appellatio orationis dicendum erit.
nibus nominentur; metaplasmos enim et Praecipue vero illa infigat animis,
schematismos , et schemata vocamus, et quae in oeconomia virtus, quae in de
laudem virtutis necessitati damus ), sed coro rerum ; quid personae cuique con
ut commoneat artificialium, et memo venerit ; quid in sensibus laudandum,
riam agitet. quid in verbis; ubi copia probabilis, ubi
Id quoque inter prima rudimenta non modus.
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 43

Se ha de juntar á todo esto la explicacion de las historias,


que debe hacerse con esmero; pero no tanto, que se ocupe en
explicar bagatelas. Basta el exponer las que estan recibidas,
ó á lo ménos estan referidas por célebres autores. Porque
el referir lo que dicen los autores mas despreciables, ó es
demasiada pobreza , ó una gloria vana; lo qual detiene y
agovia los ingenios, que se pueden emplear en otra cosa me
jor. El que se pone á exáminar los escritos, que ni aun mere
cen leerse, no tendrá reparo en dar oidos á cuentos de viejas.
De todos tos embarazos estan llenos los comentarios de los
gramáticos, apénas entendidos de sus mismos autores. Sabida
cosa es, lo que sucedió á Didymo, que escribió mas que nadie:
el qual, como no diese crédito á una historia, como fabulosa,
se la mostráron en un libro suyo. Esto acaece principalmente
en las fábulas, en que se cuentan ridiculeces, y aun cosas ver
onzosas. De donde nace, que qualquiera hombre ruin se toma
a licencia de fingir á su antojo en materia de libros y auto
res, quanto le ocurre ; y con tanta mas seguridad, quanto no
se pueden encontrar los que jamas existiéron. Porque en cosas
conocidas es mas fácil descubrir la mentira. Por donde una de
las calidades del buen gramático es el ignorar algunas cosas.

His accedat enarratio historiarum, Nam Didymo, quo nemo plura scripsit,
diligens quidem illa , non tamen usque accidisse compertum est, ut cum histo
ad supervacuum laborem occupata. Nam. riae cuidam, tanquam vanae repugnaret,
receptas, aut certe claris auctoribus me ipsius proferretur liber, qui eam conti
moratas exposuisse , satis est. Persequi nebat. Quod evenit praecipue in fabulo
quidem quod quisque unquam vel con sis usque ad deridicula, quaedam etiam
temptissimorum hominum dixerit, aut pudenda: unde improbissimo cuique ple
nimiae miseriae , aut inanis jactantiae raque fingendi licentia est, adeo ut de
est, et detinet, atque obruit ingenia me libris, totis, et auctoribus , ut succurrit,
lius aliis vacatura. Nam qui omnes etiam mentiantur tuto, quia inveniri, qui nun
indignas lectione schedas excutit, anili quam fuere, non possunt. Nam in no
bus quoque fabulis accomodare operam tioribus frequentissime deprehendunturà
potest. Atqui pleni sunt ejusmodi impe curiosis. Ex quo mihi inter virtutes gram
dimentis grammaticorum commentarii, matici habebitur, aliqua nescire.
vir ipsis, qui composuerunt, satis noti.
F 2
44. INSTITUCIONES ORATORIAS

CAP ITULO VI.

DE Los PRIMEROS EXERCICIOS DE ESCRIBIR, EN QUE DEBERA


EMPLEARSE EL GRAMÁTICo.
Y, hemos concluido las dos partes de la gramática, que
se reducen á enseñar á hablar, y á la explicacion de los auto
res: la primera llaman metódica, la segunda histórica. Con to
do eso añadamos ciertos principios del estilo para nstruccion
de las edades, que aun no son capaces de la retórica. Apren
dan pues primero á explicar en un lenguage puro y sencillo las
fabulitas de Esopo, que suceden á los cuentos de las amas de
leche: en segundo lugar á escribirlas con la misma sencillez de
estilo ; primeramente desatando el verso, y despues traducién
dolo con otras palabras. Despues aprendan á traducirlo con li
bertad parafrástica, por la que se permite ya reducir, ya am
plificar lo que traducimos, conservando el sentido del poeta.
El qual exercicio, que aun para maestros consumados tiene di
ficultad, al que la llegue á hacer contino, le ayudará para
vencer mayores dificultades. Compongan tambien los gramáti
cos sentencias, chrias y etologias, dando las razones de lo que
dicen;de donde toman el nombre estas composiciones. Estas com
posiciones se fundan en una razon comun; pero la forma es di

C A P U T V I.

DE PRIMIS SCRIBENDI EXERCITATIONIBUS APUD GRAMMATICUM.

E, finitae quidem sunt partes duae, sus primo solvere, mox mutatis verbis
quas haec professio pollicetur, id estra interpretari : tum paraphrasi audacius
tio loquendi, et enarratio auctorum : qua vertere, qua et breviare quaedam , et
rum illam methodicen, hanc historicen exornare, salvo modo poetae sensu, per
vocant. Adjiciamus tamen eorum curae mittitur. Quod opus etiam consummatis
quaedam dicendi primordia, quibus aeta professoribus dificile, qui commode tra
tes nondum rhetorem capientes insti ctaverit, cuicunque discendo suficiet Sen
tuant. Igitur Aesopi fabellas , quae fa tentiae quoque et chriae, et etholo
bulis nutricularum proxime succedunt, giae, subjectis dictorum rationibus apud
narrare sermone puro, et nihil se supra grammaticos scribantur, quia initium ex
modum extollente: deinde eandem gra-, ratione ducunt. Quorum omnium similis
cilitatem stylo exigere condiscant: ver estratio, forma diversa : quia sententia
DE.M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 45
versa: porque la sentencia es un dicho universal, la ethologia
consiste en el carácter de las personas. Hay varias especies de
chria. La una es semejante á la sentencia, y consiste en algun
dicho simple: v.g. Diro, ó solia decir, èrc. Otra en la respues
* -- ta: v.g. Habiéndole preguntado, respondió, èrc. La tercera es
algo semejante á esta, y consiste, dicen algunos, no en dicho,
sino en algun hecho: v.g. Habiendo visto Crates un niño igno.
rante, dió un bofeton á su ayo. Y por último otra algo parecida
á la dicha, á la que no dan el mismo nombre, sino que la lla
man chriodes, por exemplo: Milon llevaba a cuestas un toro,
habiéndose acostumbrado á llevarle desde quando era becer
rillo. Todas estas pueden variarse por los mismos casos, ya
sean de algun dicho ó hecho. Las narraciones celebradas de los
poetas, creo que deben tratarse para instruirse, no para adqui
rir la eloqüencia. Los retóricos latinos, dexando todo lo de
mas, que pide mas trabajo é ingenio, lo hiciéron necesario é
indispensable á los gramáticos: pero los griegos conocen mejor
la dificultad y naturaleza de su deber.

universalis est vox , ethologia personis ei, quod tamen eodem nomine appella
continetur. Chriarum plura genera tra re non audent, sed dicuntxeas des;ut
duntur. Unum, simile sententiae, quod Milo, quem vitulum arrueverat ferre, tau
est positum in voce simplici: Dixitille; rum ferebat. In his omnibus et decli
aut, Dicere rolebat. Alterum , quod est natio per eosdem ducitur casus, et tam
in respondendo : Interrogatus ille : vel factorum, quam dictorum ratio est. Nar—
s cum hoc ei dictum esset, respondit. Ter ratiunculas a poetis celebratas, notitiae
tium huic non dissimile, cum quis non causa, non eloquentiae, tractandas puto.
dixisset, sed aliquid fecisset (etiam in Caetera majoris operis, ac spiritus la
ipsis factis esse Chriam putant) ut; Cra tini rhetores relinquendo , necessaria
ter cum indoctum puerum vidir ret, paeda grammaticis fecerunt. Graeci magis ope
gogum ejus percus sit. Et aliud pene par rum Suorum, et onera, et modum norunt
46 INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULO VII.

EL NIRo, ÁNTES DE DAR PRINCIPro Á LA RETóRICA, DEEE


SER INSTRUIDO EN OTRAS ARTES. SI. ESTAS SON NECESARIAS
PARA UNO QUE HA DE EXERCITAR LA ELOQUENCIA.

A esto se reduce lo que me propuse tratar sobre la gra


mática con la mayor brevedad, tocando lo mas necesario, no
quanto habia que decir, porque esto era obra larga: ahora tra
taré, estrechándome, de aquellas artes que deben aprender
los niños ántes de comenzar la retórica, para ir siguiendo
aquella carrera de estudios, que llaman encyclopedia. Porque
en esta primera edad se ha de dar principio al estudio de otras
ciencias: las quales, siendo tambien artes, y no pudiendo ha
ber eloqüencia perfecta sin ellas (aunque por sí solas no bastan
para constituirá uno orador), preguntan algunos, ¿si son ab
solutamente necesarias para el fin que decimos? Porque ¿de
qué aprovecha, dicen los tales, el saber levantar un triángulo
equilátero sobre una línea dada, para defender un pleyto, ó
para declarar los sentimientos de nuestra alma? ¿O porqué de
fenderá mejor á un reo, ó dará un consejo mas acertado quien
sabe distinguir, ya por el tono, ya en el nombre, y tiempos el
sonido de las cuerdas? Y aun quizá podrán citará no pocos

C A P U T V I I.

vARIIs ARTIBUs: INSTITUENDos, PRIUSQUAM RHETORL TRADANTUR, PUEROS. AN ILLAE


ARTEs oRATORr FUTURo NEcESSARIAE SINT.

Hs de grammatica quam bre esse perfecta sine his orandi scientia non
vissime potui, non ut omnia dicerem, potest, nec rursus ad eficiendum ora
sectatus, (quod infinitum erat) sed ut torem satis valent solae, an sint huic
maxime necessaria: nunc de caeteris ar operi necessariae, quaeritur. Nam , quid,
tibus, quibus instituendos, priusquam. inquiunt, ad agendam causam , dicen
tradantur rhetori, pueros existimo, stri damve sententiam pertinet scire, quem
ctim subjungam , utefficiatur orbis ille admodum in data linea constitui trian
doctrinae, quem graeci ynvn Ava aud ég (M/ gula aequis lateribus possint? aut quo
vocant. Nam iisdem fere annis aliarum melius vel defendet reum , vel reget
quoque disciplinarum studia ingredienda consilia , qui citharae somos nominibus,
sunt: quae quia etipsae artes sunt, et et spatiis distinxerit? Enumerent etiam
DE M. FABIO. QUINTILIANO. LIB. I. 47

hábiles oradores, que ni el nombre siquiera de geometría


oyéron jamas, ni tienen de músicos otra cosa, que el que les
deleyta, como á todos sucede. - -

A los quales primeramente respondo, como Ciceron escri


be, hablando con Bruto ”; y se lo repite varias veces, y es,
que el orador, que vamos formando, ni le hay, ni le ha habi.
do jamas: sino que nos hemos propuesto dar un modelo de
orador perfecto, que por ninguna parte tenga tacha. Porque
tambien los que forman á un hombre sabio, de modo que sea
en todo consumado, y (como dicen) un Dios en la tierra, no
solamente pretenden instruirle en todo lo celestial y humano;
sino que le van tambien guiando por ciertas menudencias (si
las miramos en sí mismas): hasta enseñarle ciertos modos de
argüir con falacia la mas disimulada: no porque estos argu
mentos falaces, y que llaman de cocodrilo”, puedan consti
tuir al hombre sabio; sino porque este debe saber hasta las co
sas mas menudas. A este modo la música y geometría, cierto es
que no constituyen al hombre orador (el qual tambien debe
ser sabio), como ni tampoco otras cosas, que añadiremos; pero
le ayudarán para ser consumado. A no ser que nos olvidemos,
que los remedios y medicinas, que curan las dolencias y llagas,
se componen de simples á veces contrarios entre sí; resultando
una composicion, que en nada es semejante á cada una de las
cosas, que entran en ella, sino que de todas juntas toma sus
propiedades. Aun las avejas forman de diversas flores y xugos
- -

-a-
-

fortasse multos quamlibet utiles foro, ipsa demum aestimes, ducunt, sicut ex
uinec geometrem audiverunt, nec mu quisitas interim ambiguitates: non quia
sicos, misi hac communi voluptate au ceratinae, aut crocodilinae possint face
rium intelligant. re sapientem, sed quia illum ne in mini
Quibus ego primum hoc respondeo, mis quidem oporteat falli. Similiter ora
quod et Marcus Cicero scripto ad Bru torem (qui debet esse sapiens) non geo
tum libro frequentius testatur, non eum metres faciet, aut musicus, quaeque his
à nobis iustitui oratorem , qui sit, aut alia subjungam: sed hae que que artes, ut
fuerit: sed imaginem quandam conce sit consummatus, juvabunt. Nisi fortean
pisse nos animo perfecti illius, ex nulla tidotum quidem, atque alia quae morbis,
parte cesSantis. Nam et sapientem for autvulneribus medentur, ex multis, atque
mantes eum , qui sit futurus consumma interim contrariis quoque inter se effecti
tus undique, et (ut dicunt) mortalis qui bus componi videmus, quorum ex diver
dam deus , non modo cognitione coe sis fitilla mistura una, quae nulli earum
lestium, vel mortalium putant instituen similis est, quibus constat, sed proprias
dum , sed per quaedam parva sane , si vires ex omnibus sumit; et muta anima
48 INSTITUCIONES ORATORIAS

aquel sabor de la miel, que no alcanzan todos los entendimien


tos humanos. ¿Y nos maravillaremos nosotros, de que la ora
cion, obra la mas grande de la naturaleza, necesite del cono
cimiento de muchas artes, que, aunque no se descubren en
ella, ni manifiestan su fuerza, influyen secretamente, y no
dexa de traslucirse su influencia? Hubo alguno, que sin nada d

de esto, habló bien; lo confieso: mas yo lo que pretendo es


formar un orador. Asimismo vengo bien en que todo esto no
es de la mayor utilidad, pero ciertamente que no podremos
llamar perfecto á quien falta algo, aunque sea poco ; y lo
muy bueno de nada debe carecer. Aunque lo que pedimos es
cosa árdua, con todo pediremos mucho, para que á lo ménos
abarque el orador lo mas que pueda. Y ¿porqué hemos de
desmayar? La naturaleza á ninguno le impide que sea orador
consumado: y es mala vergüenza perder el ánimo en una co
sa, que se puede conseguir. º -

- y

- º * -- es -º *º * - º *** «-º * ---s -

1ia mellis ilum ínimitabilem humanae ego oratorem volo. Non multum adjiciunt,
rationi saporem, vario fiorum, ac Succ0: sed aeque non erit totum, cuivel parva
rum genere perficiunt: nos mirabimur, si deerunt; et optimum quidem hoc esse
oratio, qua nihil praestantius homini de conveniet: cujus etiam si in arduo spes
dit providentia , pluribus artibus eget, est, nos tamen praecipiamus omnia , ut
quae etiam cum se non ostendunt in di saltem plura fiant. Sed cur deficiat ani
cendo , nec proferunt, vim tamen occul mus? Natura enim perfectum oratorem
tam suggerunt, et tacite quoque sentiun esse non prohibet : turpiterque despera
tur? Fuit aliquis sine his disertus: ast tur, quicquid fieri potest.
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 49

CAPÍTULO VIII.

soBRE LA MúsICA, y sus ALABANZAs.


En esta parte seguramente debia bastarme el dictámen
de los antiguos. Porque ¿quién no sabe, que en los primeros
tiempos la música (para hablar primeramente de ella) se me
reció, no solo tanto aprecio, sino tanta veneracion, que los
músicos, poetas y sabios se tenian por una misma cosa? Entre
los quales (para no hablar de otro) fuéron Orpheo y Lino.
Ambos á dos fuéron tenidos por hijos de los dioses; y del uno
se dice, que llevaba tras sí las fieras, los peñascos y las selvas,
porque con su música admirable ablandaba los ánimos de la
gente ruda y campesina. Timagenes dice tambien , que entre
todos los estudios el mas antiguo fué el de la música. Confír
manlo los poetas de mayor nombre, en los quales vemos, que
en los convites de los reyes las alabanzas de los dioses, y de
los héroes se cantaban al son de la cítara. ¿No vemos en Vir
gilio como Yopas canta el Curso de la luna, y los eclipses del
sol, èrc? Aen. 1.746. Con lo qual claramente da á entender
este autor insigne, que la música, y el conocimiento de las co
sas divinas andaban pareados. Lo qual si se concede, será
tambien necesaria para un orador; siendo cierto, como dixe,
que esta parte, que abandonáron los oradores, y se apropiáron
El

C A PU T VIII.

DE MUSICE , ET EJUs LAUDIBUs.

Ar. ego vel judicio veterum po


teram esse contentus. Nam quis ignorat
est, omnium in literis studiorum anti
quissimam musicen extitisse. Et testimo
musicen (ut de hac primum loquar) tan nio sunt clarissimi poetae, apud quos im
tum jam illis antiquis temporibus non ter regalia convivia laudes heroum, ac
studii modo, verum etiam venerationis deorum ad citharam canebantur. Jopas
habuisse, utiidem musici, et vates, et vero ille Virgilii nonne canit, Errantem
sapientes judicarentur? Mittam alios; Or lunam, solis que labores, &c.? Quibus cer
pheus et Linus : quorum utrumque diis te palam confirmat auctor eminentissi
genitum ; alterum vero, quod rudes quo mus , musicen cum divinarum etiam re
que, atque agrestes animos admiratione rum cognitione esse conjunctam. Quod si
mulceret, non feras modo, sed saxa et datur, erit etiam oratori necessaria : si
iam, sylvasque duxisse posteritatis memo quidem (ut diximus) haec quoque pars
riae traditum est. Et Timagenes auctor quae ab oratoribus relicta, à philosophis
ToM. I.
5o INSTITUCIONES ORATORIAS

los filósofos, fué peculiar nuestra; y sin esta ciencia la orato


ria no puede ser consumada.
Por lo que mira á los filósofos, no cabe duda que la culti
váron, habiendo Pitágoras y sus discípulos publicado una opi
nion, sin duda de tiempo inmemorial; es á saber, que el mun.
do habia sido fabricado al son de la música, el que despues
imitó la lyra. Y no contentos con aquella concordia de cosas
desemejantes, que llaman armonía, viniéron á poner conso
mancia aun en los movimientos del cielo. El Timeo de Platon
(sin contar otras partes de sus obras) no se puede entender sin
perfecto conocimiento de esta ciencia. ¿Pero qué digo los filó
sofos, cuyo corifeo Sócrates en su ancianidad no se avergonza
ba de aprenderá tañer la lyra? Hasta los mayores capitanes,
dice la historia, que tañéron la cítara y la flauta; y que los
exércitos de los lacedemonios cobraban corage para pelear,
oyendo instrumentos músicos. ¿Qué otra cosa hacen en nues
tras legiones las cornetas y trompetas? Cuyo concierto, quan
to mayor es , tanto mayor es la gloria romana en las guer
ras; y no por otra causa Platon tiene por indispensable la mú
sica en el hombre civil, que llaman político. Y los principa
les de esta escuela, que algunos tienen por muy rigurosa, otros
por muy dura, fuéron de opinion, que algunos sabios debian
emplearse en este estudio. Lycurgo, autor de la severa legis
lacion de los lacedemonios, aprobó el estudio de la música.

EEE a

est occupata, nostri operis fuit, ac sine ipse Socrates jam senex institui lyra non
omnium talium scientia non potest esse erubescebat? Duces maximos, et fidibus,
perfecta eloquentia. et tibiis cecinisse traditum , et exercitus
Atque claros nomine sapientiae viros lacedaemoniorum musicis accensos mo
nemo dubitaverit studiosos musices fuis dis. Quid autem aliud in nostris legioni
se, cum Pythagoras , atque eum secuti, bus cornua, ac tubae faciunt? quorum .
acceptam sine dubio antiquitus opinio concentus, quanto est vehementior, tan
nem vulgaverint, mundum ipsum ea ra to romana in bellis gloria caeteris prae
tione esse compositum , quam postea sit stat. Non igitur frustra Plato civili viro,
lyra imitata. Necilla modo contenti dis quem z o A7 in y vocant, necessariam mu
similium concordia,quam vocant a pº, víav, sicen credidit. Et ejus sectae, quae aliis
sonum quoque his moribus dederunt. severissima, aliis asperrima videtur, prin
Nam Plato cum in aliis quibusdam , tum cipes in hac fuere sententia, ut existi
praecipue in Timaeo, ne intelligi quidem, marent sapientum aliquos nonnullam ope
misi ab iis, qui hanc quoque partem di ram his studiis accomodaturos. Lycurgus
sciplinae diligenter perceperint , potest. durissimarum lacedaemoniis legum au
Quid de philosophis loquor, quorum fons ctor, musices disciplinam probavit. Atque
3DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 5r
Y cierto que parece que la naturaleza nos la concedió, como
por regalo, para lenitivo de los trabajos. Pues hasta los reme
ros cobran aliento con el canto : y no solo sucede esto en aque
llas fatigas, en que muchos se animan al trabajo con el dulce
canto de alguno que los guia, sino en el trabajo de cada uno,
entreteniéndole con canciones, aunque sean groseras.
Hasta aquí parece que solamente he ensalzado la música,
pero aun no la he aplicado á la oratoria. Pasemos tambien en
silencío, como en otro tiempo la gramática , y la música andu
viéron unidas: siendo cierto que Architas y Aristogeno la tu
viéron por parte de la gramática; y que unos mismos maestros
enseñasen estas dos artes, no solo lo prueba Sofron, autor de
pantomímos, apreciado de Platon, que dicen , tenía por almo
hada sus libros al tiempo de morir, sino tambien Eupolis, don
de vemos que Prodamo enseñaba la música y las letras. Y Ma
ricas, que es el mismo que Hiperbolo, confiesa no saber de la
música , sino las letras. Arístófanes tambien prueba en varios
lugares, que antíguamente los niños recibian esta instruccion.
Y en el Hypobolimeo de Menandro vemos, que dando un vie
jo la cuenta á un padre de lo que habia gastado con su hijo,
pone una gran suma por los maestros de música y geometría.
Esto prueba la costumbre antigua de pasar la lyra entre los
convidados, despues de la mesa ; la qual, diciendo Themísto
cles, como cuenta Ciceron, que no sabia tocar, le tuvié

- =EEE EE

eam natura ipsa yidetur ad tolerandos scriptor, sed quem Plato adeo probavit,
facilius labores velut muneri nobis dedis ut suppositos capiti libros ejus, cum mo
se. Siquidem et remiges cantus hortatur: reretur, habuisse tradatur: tum Eupo—
nec solum in iis operibus, in quibus plu lis, apud quem Prodamus, et musicen, et
rium conatus praeeunte aliqua jucunda literas docet., Et Maricas, qui est Hy
voce conspirant, sed etíam singulorum perbolus, nihil se ex musice scire, nísi
fatigatio, quamlibet se rudi modulatione literas confitetur. Aristophanes quoque
Solatur. mon uno libro sic institui pueros antiqui
Laudem adhuc dicere artis pulcher tus solitos esse demonstrat. Etapud Me
rimae videor, mondum tamen eam ora nandrum in Hypobolimaeo, senex repo—
tori conjungere. Transeamus igitur id scenti filium patri , velut rationem im
quoque, quod grammatice quondam , ae pendiorum , quae in educationem contu
musice junctae fuerunt. Siquidem Archi lerat, opponens, psaltis se, et geometris
tas, atque Aristoxenus etiam subjectam multa dicit dedisse. Unde etia mille mos,
grammaticen musicae putaverunt, et eos ut in conviviis post coenam circumfer
dem utriusque rei , praeceptores fuisse, retur lyra : cujus cum se imperitum The
cum Sophron ostendit, mimorum quidem mistocles confessus esset , ut verbis Ci
G 2
52 INSTITUCIONES ORATORIAS

ron por hombre sin letras. Aun entre los antiguos romanos se
estilaban en los banquetes instrumentos de cuerdas, y flautas.
Los versos de los Salios tienen tambien su canto. Todo lo
qual habiendo sido instituido por el rey Numa, es prue
ba clara, que aun aquellos primeros hombres ignorantes y
belicosos no se descuidáron de la música, que aquella edad
«-
permitia. Finalmente se hizo proverbio entre los griegos,
que los ignorantes eran enemigos de las musas , y de las
gracias. " -

Pero veamos que utilidad puede traer la música al ora


dor. Dos especies de números tiene la música ; en las vo
ces, y en el movimiento del cuerpo: pues en uno y otro
se busca cierta proporcion. El músico Aristogeno divide la mo
dulacion de la voz en número, y melodía métrica. Lo qual
¿ quién no dirá, que es necesario para la oratoria? Pues lo uno
mira al ademan, lo otro á la colocacion de las palabras , y
lo tercero á la inflexion de la voz: la qual tiene mucho
uso en la pronunciacion. A no ser que imaginemos, que
solo para la poesía y el canto se requiere esta disposicion,
y consonancia de voces, y que es ociosa en el que perora;
ó que este arreglo y sonido de la voz no se necesita en
la oracion, lo mismo que en la música. Porque con diver
sas modulaciones canta con voz levantada las cosas grandes;
con dulzura, si son de gusto; si indican moderacion, con
suavidad ; y toda la habilidad del músico está en expresar
=manº

ceronis utar, habitus est indoctior. Sed xenus musicus dividitin ¿vubv uai uAce
veterum quoque romanorum epulis fides, * º º rºcº, quorum alterum modulatione,
actibias adhibere moris fuit. Versus quo canore alterum, ac sonis constat. Num
que Saliorum habent carmen. Quae, cum igitur, non haec omnia oratori necessa
omnia sint à Numa rege instituta , fa ria 2 quorum umum ad gestum, alterum
ciunt manifestum , ne illis quidem , qui ad collocationem verborum , tertium ad
rudes ac bellicosi videntur, curam musi flexus vocis, qui sunt in agendo quoque
ces, quantam illa recipiebataetas, de plurimi, pertinet. Nisi forte in carmini
fuisse. Denique in proverbium usque bus tantum, et in canticis exigitur stru
graecorum celebratum est, Indoctos d ctura quaedam , et inofensa copulatio
Musis, atque Gratiis aberse. vocum , in agendo supervacua est: aut
Verum quid exea proprie petat futu non compositio , et sonus in oratione
rus orator, disseramus. Numeros musice quoque varie pro rerum modo adhibe
duplices habet, in vocibus, et in corpo tur, sicut in musice. Namque, et voce,
re. Utriusque enim rei aptus quidam mo et modulatione grandia elate , jucunda
dus desideratur. Vocis rationem Aristo dulciter, moderata leniter camit; tota-,
DE M. FAB1o QUINTILIANo. LIB. 1. 53
el afecto de lo que canta. En la oratoria va á decir mu
cho tambien para el movimiento de los afectos del audito
rio el alzar ó baxar la voz, y el que tenga su inflexion: y
así empleamos distinto tono, para mover a los jueces á in
dignacion, del que usamos para implorar su clemencia: pues
vemos, que aun con los instrumentos , con los que no se
puede expresar el lenguage, el ánimo se reviste de varios
movimientos. El arreglo y decente compostura de los mo
vimientos del cuerpo , que se llama aptitud , es tambien
necesaria, pues en ella estriba gran parte de la pronuncia
cion ; y esto solo con la música se puede aprender. Pero
de la pronunciacion hacemos tratado aparte. Pues si el ora
dor debe cuidar de la voz, ¿qué cosa hay tan propia de
la música ? Pero para no anticiparnos á tratar de esta parte
de la retórica, contentémonos por ahora con el exemplo de
Graco, orador el mas consumado de su siglo, á quien es
tando perorando asistia por detras un músico, para apun
tarle los tonos de la voz con una flautilla, que llaman to
marion, ó norma para arreglar los tonos. Este cuidado tuvo
él en medio de las causas muy dificultosas, que defendió,
quando, ó ponia terror á los principales de Roma , ó él
los temia. - -

Quiero baxar, el estilo, para hacer ver á los que mé


nos saben, la utilidad de la música. No me podrán negar
que la leccion de los poetas es indispensable al orador. Y
estos ¿por ventura carecen de la música? Pues si hay alguno
= -

que arte consentit cum eorum, quae di- curam vocis orator, quid tam musices
cuntur, afectibus. Atqui in orando quo proprium? Sed ne haec quidem praesu
que intensio vocis, remissio, flexus, per menda pars est, ut uno interim contenti
tinet ad movendos audientium afectus: simus exemplo C. Gracchi praecipui suo—
aliaque, et collocationis, et vocis (ut eo rum, temporum oratoris, cui, concionanti
demutar verbo) modulatione concitatio consistens post eum musicus, fistula, quam
/
mem judicum , alia misericordiam peti zººººiev vocant, modos quibus deberet
mus 3 cum etiam organis, quibus sermo intendi, ministrabat. Haec ei cura inter
exprimi non potest, afici animos in di turbidissimas actiones, vel terrenti opti
versum habitum sentiamus. Corporis quo mates, vel jam timenti fuit.
que decens, et aptus motus, qui dicitur . Libet propter quosdam imperitiores,
Evguera , est necessarius , nec aliunde etiam crassiore (ut vocant) musa, dubi
peti potest, in quo pars actionis non mi tationem hujus utilitatis eximere. Nam.
nima consistit: qua de re sepositus no poetas certe legendos oratori futuro con
bis est locus. Age, si habebit in primis cesserint. Num igiturhi sine musice? At
5+ INSTITUCIONES ORATORIAS

de talento tan limitado, que lo ponga en duda, no lo podrá


negar por lo que mira á los líricos. Esto seria preciso incul -
¿ muchas veces, si lo que yo digo fuera cosa nueva. Pe
ro siendo esta opinion admitida desde Chiron y Achiles has
ta nuestros dias por todos quantos han mirado las ciencias
sin aversion, no debo ponerla en disputa con el demasiado
empeño en defenderla.
Aunque por los exemplos puestos se puede bastantemen
te conocer, qué género de música nos agrada , y en qué
términos; debemos decir, que no encomendamos aquí aque
lla música teatral y afeminada, que ha arruinado en noso
tros en gran parte el poco vigor varonil, que nos quedaba,
con sus modulaciones torpes y delicadas, sino aquella, con
que se celebraban las alabanzas de hombres esforzados por
otros hombres iguales á ellos; ni tampoco aquellos instru
mentos delicados, que mueven á cosas torpes, de los que
aun las doncellas deben abominar, sino el conocimiento del
modo, que hay para mover, ó calmar las pasiones. Sabemos
que Pitágoras contuvo la desenvoltura de unos jóvenes, que
iban á violentará una familia honesta, solo con mandar á
una cantora arreglase la música al pesado tono de los espon
deos " y aun Crysipo señala tono determinado para quan
do las amas arrullan á los niños. Entre otros asuntos, que se
dan para las declamaciones, suele fingirse una causa de un
flautero, á quien se le hace reo de muerte, porque á uno
al tiempo de sacrificar le echó el tono frigio”, con el qual
=#EEEEEEEEE º

sí quís tam caecus animi est, ut de aliis modis fracta, non ex parte minima , si
dubitet, illos certe qui carmina ad ly quid in nobis virilis roboris manebat, ex
ram composuerunt. Haec diutius forent cidit: sed qua laudes fortium canebantur,
dicenda , si hoc studium velut novum. nec psalteria, et spadices, etiam virgini
praeciperem. Cum vero antiquitus usque bus probis recusanda ; sed cognitionem.
à Chirone atque Achille ad nostra tem rationis, quae ad movendos leniendos
pora apud omnes, qui modo legitimam que affectus plurimum valet. Nam et Py
disciplinam non sint perosi, duraverit, thagoram accepimus, concitatos advim
non est committendum utilla dubia fa pudicae domui afferendam juvenes, jus
ciam defensionis solicitudine. sa mutare in spondeum modos tibicina,
Quamvis autem satis jam ex ipsis, composuisse: et Chrysippus etiam nutri
quibus sum modo usus exemplis, credam cum, quae adhibentur infantibus, alle
esse manifestum, quae mihi, et quatenus ctationi suum quoddarm carmen assignat.
musice placeat: apertius tamen profiten Est etiam non inerudite ad declaman
dum puto, non hanc à me praecipi, quae dum ficta materia, in qua ponitur tibi
nunc in scenis efleminata, et impudicis cen, qui sacriticantipárygium cecinerat,
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. I. 55
se enfureció tanto, que se arrojó por un derrumbadero. Si
semejantes asuntos son propios de la eloqüencia, y por otra
parte no pueden desempeñarse sin la música , ¿cómo no
confesarán aun los mas contrarios ser muy necesaria?
CAPÍTULO IX.
DE LA GEoMETRÍA.

Teo. confiesan, que la geometría no dexa de ser útil


para la edad tierna; pues conceden, que con ella se exercita el
ánimo, se aguza el ingenio, y se adquiere prontitud para dis
currir; pero que aprovecha no como las demas artes, despues
de aprendidas, sino miéntras se aprende. Esta opinion es pro
pia de ignorantes. No sin motivo los hombres mas grandes se
diéron á este estudio: porque constando la geometría de nú
meros, y figuras, el conocimiento de aquellos no solo es ne
cesario al orador, sino á qualquiera, que aprendió las prime
ras letras. Su uso es muy freqüente en las causas, en las que
se tiene por ignorante al orador, no digo quando anda ti
tubeando en las sumas, sino si yerra el cómputo con el mo.
vimiento incierto, y ménos apto de los dedos. El uso de las
lineas y figuras tiene tambien algun uso ; puesto caso que

acto illo in insaniam, et per praecipitia dici, citra scientiam musices potest, quo
delato, accusari, quod causa mortis exti- modo non hanc quoque artem necessariam
terit. Quae si dici debet ab oratore, nec esse operi nostro, vel iniqui consentiant?

CAPUT IX.

ID E. G. E O M ET RIA,

- I, geometria partem fatentur esse mas , numerorum quidem notitia non


utilem teneris aetatibus; agitari namgue oratori modo, sed cuicunque primis sal
animos, et acui ingenia, ac celeritatem tem literis erudito necessaria est. In cau
percipiendi venire inde concedunt: sed sis vero vel frequentissime versari solet,
prodesse eam, non ut caeteras artes, cum in quibus actor, non dico, si circa sum
perceptae sint, sed cum discatur, existi mas trepidat, sed si digitorum saltem
mant. Ea vulgaris opinio est: nec sine incerto, aut indecoro gestu à computatio
causa summi viri etiam impensam huic ne dissentit, judicatur indoctus. Illa vero
scientiae operam dederunt. Nam, cum sit linearis ratio, et ipsa quidem cadit fre
geometria divisa in numeros, atque for quenter in causas: nam de terminis, men
56 INSTITUCIONES ORATORIAS

tambien hay pleytos sobre medidas y límites. Pero tiene union


y parentesco con la oratoria por otra cierta razon.
Primeramente el órden, de que no puede prescindir la geo.
metría ¿no es tambien preciso en la eloqüencia ? La geome
tría asimismo de las premisas va deduciendo sus conseqüen
cias, y sienta los principios conocidos, para probar lo que
no sabemos ¿ pues no hacemos esto mismo, quando peroramos?
¿Qué mas? Aquella conclusion última de diferentes qüestiones
propuestas ¿no consta casi toda ella de silogismos? Motivo por
el qual dicen algunos , que esta arte es mas parecida á la
dialéctica, que á la retórica. Pues el orador no dexa de pro
bar su asunto algunas veces, aunque raras, en la misma for
ma que los dialécticos: pues si el caso lo pide, usa de silo
gismos, y sin duda alguna se vale de enthimemas, que son
unos silogismos oratorios. En conclusion, entre todas las prue
bas las mas convincentes son, las que llamamos demostracio
nes geométricas. ¿Y qué otra cosa mas precisa en el discur
so, que las pruebas? -

Tiene mas la geometría , que por medio de la demos


tracion descubre la falsedad de una verdad aparente : y pun
tualmente lo mismo sucede en los números con las que lla-.
man falacias del cálculo ”, en las que me solia yo divertir
quando niño. Pero hay otras cosas de mayor entidad. ¿Quién
no se tragará la verdad de este teorema? Si las extremida.
des de los lugares tienen una misma medida , ha de ser
tambien igual el espacio, que abarcan sus lineas? Pues es
falso: porque va á decir mucho la figura, que tiene el ám

surisque sunt lites. Sed habet majorem enthymemate, qui rhetoricus est syllo
quandam aliam cum arte oratoria co- gismus. Denique probationum , quae sunt
gnationem. potentissimae, yeau ºtnai & aude fes vul
Jam primum ordo est geometriae ne go dicuntur. Quid autem magis oratio,
cessarius: nonne et eloquentiae? Ex prio quam probationem petit?
ribus geometria probat insequentia , et Falsa quoque verisimilia geometria ra
certis incerta : nonne id in dicendo faci tione deprehendit. Fit hoc et in nu
mus? Quid? illa propositarum quaestio meris per quasdam quas lo vºcypatías
num conclusio, non tota fere constat syl vocant, quibus pueri ludere solebamus.
logismis? Propter quod plures invenias, Sed alia majora sunt. Nan quis mon ita
qui dialecticae similem , quam qui rhe proponenti credat? Quorum locorum exs
toricae fateantur hanc artem. Verum et tremae lineae eandem mensuram colli
orator, etiamsi raro , non tamen nun gunt, eorum spatium quoque quod his
quam probabit dialectice. Nam et syllo lineis continetur , par sit necesse est.
gismis, si res poscet, utetur : et certe At id falsun est. Nam plurimum refert
DE M. FABIO QUINTILIANO., LIB. I. 57.
bito de un lugar ; por donde los geómetras reprehenden á,
los historiadores, que creen bastar el curso de la navegacion
para calcular la grandeza de una isla. Quanto mas perfecta.
es la figura, tanto mayor es su capacidad. Por donde si la
linea exterior es redonda, que es la figura mas perfecta de
las planas, abarcará mas, que siendo quadrada , aunque de
igual extremidad. Asimismo el quadrado abarca mas que el
triángulo; y el triángulo equilátero mas que el escaleno. Ha:
brá por ventura otros exemplos mas dificultosos de resolver,
pero yo pondré uno muy proporcionado aun á los princi
piantes. No hay quien no sepa, que la yugada consta de
doscientos quarenta pies de largo , y la mitad de ancho.
Quanto es lo que boxa, y el campo que ocupa , fácil. CS
de saber. Pero si damos á cada lado ciento y ochenta pies,
quedando una area quadrada, con la misma extremidad ocu
pará mayor espacio." Si alguno nó quiere molestarse en hacer
la operacion, lo entenderá mas breve en números menores. Diez,
pies por cada lado, hacen quarenta en quadro, y dentro cien
to; pero si damos quince á dos de los lados, y cinco á los otros
dos, siendo uno mismo el ámbito, el espacio será una quarta
parte ménos. Pero si los lados distan diez y nueve pies uno de
otro, no tendrán dentro mas pies quadrados, que los que tie
nen de longitud; mas la linea exterior tendrá el mismo ámbito,
que quando tenia dentro cien pies quadrados. Y así quanto se

cujus sit formae ille circuitus: reprehen quantum campi claudat, colligere expe
sique à geometris sunt historici, qui ma ditum. At centeni, et octogeni in quam
gnitudines insularum satis significarina que partem pedes , idem spatium extre
vigationis ambitu crediderunt. Nam ut mitatis, sed multo amplius clausae qua
quaeque forma perfectissima, ita capa tuor lineis areae faciunt. Id si computa
cissima est. Ideoque illa circumcurrens re quem piget, brevioribus numeris idema
linea, si efficiet orbem , quae forma est discat: nam deni in quadrum-pedes, qua
in planis maxime perfecta, amplius spa draginta per oram , intra centum erunt.
tium complectetur , quam si quadratum At si quinideni, per latera , quini in
paribus oris eficiat. Rursus quadrata fronte sint: ex illo quod amplectuntur,
triangulis, triangulalipsa plus aequis la quartam partem deducent eodem cir
teribus, quamiinaequalibus. Sed alia for eumductu. Si vero porrecti utrinque un
sitan obscuriora: nos facillimum etiam. deviceni singulis distent, non plures in
imperitis sequamur experimentum. Ju tus quadratos habebunt, quam per quot
geri mensuram ducentos, et quadragin longitudo ducetur: quae circumibit au
ta longitudinis pedes esse, dimidioque in tem linea , ejusdem spatii erit, cujus ea,
latitudinem patere, non fere quisquam quae centum continet. Ita quicquid for
est qui ignoret: et qui sit circuitus, et mae quadrati detraxeris, amplitudini
TOM. -

*
58 INSTITUCIONES ORATORIAS

vaya quitando á la figura quadrada, otro tanto pierde de ca


pacidad. De aquí resulta, que un lugar con circuito mayor
abarque menor espacio. Esto en las figuras planas. Porque en
montes y valles, aun el mas ciego ve, que el terreno es mayor,
que la parte de cielo que le cabe.
No me paro á decir que la geometría se remonta hasta dar
razon del mundo; pues, enseñándonos con los números la re
gularidad y uniformidad del curso de los astros, nos hace ver,
que nada hay que sea casual, y sin providencia, lo que á las
veces puede ser conducente al, oratoria. Por ventura, quan
do Pericles quitó á los atenienses el miedo, que les causó un
eclipse de sol, haciéndoles ver la causa; quando Sulpicio Ga
lo habló en presencia del exército de L. Paulo de otro eclip
se de la luna, para que no se atemorizasen los soldados, te
niéndole por milagro, ¿no hiciéron oficio de oradores? Lo
que si hubiera entendido Nicias en la Sicilia, seguramente
no hubiera sacrificado la flor del exército de los atenienses,
despavorido con este prodigio; así como no se asustó Dion en
semejante lance , quando vino á destruir al tirano Dionisio.
Sirvan enhorabuena estos exemplos para la milicia; y pasemos
en silencio, que solo la pericia de Archimedes prolongó el
asedio de Zaragoza de Sicilia. Lo que mas hace á nuestro
propósito es, que con aquellas demostraciones de la geome
tría se resuelven no pocas qüestiones, que de otro modo eran
indisolubles, v.g. del modo de hacer la division 3 de la divi

r. --, - º * =ms
º,

quoque peribit. Ergo etiam id fieri po digio divinitus facto, militum animi ter
test, ut majore circuitu minor loci am rerentur, non videtur esse usus oratoris
plitudo claudatur. Hoc in planis. Nam in oficio? Quod si Nicias in Sicilia scisset,
collibus, vallibusque etiam imperito pa non eodem confusus metu pulcherrimum
tet plus soli esse, quam coeli. atheniensium exercitum perdidisset: si
Quid, quod se eadem geometria tol cut. Dion, cum ad destruendam Dionysii
litad rationem usque mundi : in qua tyrannidem venit, non esttali casu de
eum siderum certos, constitutosque cursus territus. Sint exempla licet, usus bellici,
numeris docet, discimus nihil esse inor transeamusque, quod Archimedes unus
dinatum, atque fortuitum , quod ipsum obsidionem Syracusarum in longius tra
nonnunquam pertinere ad oratorem po xit. Illud utique jam proprium , estad
test. Añ vero cum Pericles athenienses efficiendum quod intendimus, plurimas
solis obscuratione territos, redditis ejus quaestiones, quarum dificilior alia ra
rei causis, metu liberavit: aut cum Sul tione explicatio est, ut de ratione divi
pitius ille Gallus in exercitu L. Pauli de dendi, de sectione in infinitum, de ce
lunae defectione disseruit, ne, velut pro leritate augendi, linearibus illis proba .
DE M. FABIG QUINTILIANO. LIB. I. 59
sion infinita ; de la prontitud en aumentar. De forma que ha
biendo el orador de hablar de todas materias, no puede pasar
sin la geometría.
CAPÍTULO X.
I. La pronunciacion se debe aprender de los cómicos.
II. El arreglo del ademan de los exercicios de la palestra.

I. Tatia de los cómicos debe hacerse algun aprecio,


á lo ménos para que el orador aprenda la buena pronunciacion;
pues no pretendo que el niño, que instruimos para este fin,
quiebre la voz afeminadamente, ni tiemble como viejo. Ni
remede en ella al que está embriagado, ni la chocarrería de los
esclavos, ni el afecto que piden las expresiones de amor, de
un avaro, ó del miedo; pues de esto no necesita el orador;
y por otra parte daña al ánimo tierno de los niños, que aun
carecen de instruccion. El remedar de continuo, pára en natu
raleza. Ni debemos tomar de los cómicos todo su ademan y
pronunciacion: pues aunque en uno y otro debe en cierta ma
nera imitarlos, con todo ha de estar muy léjos de su modo
de pronunciar, para no descompasarse en el movimiento del
semblante, de las manos, ni en los paseos. ” Porque la prin
cipal arte en la oratoria , es el que se disimule el arte.”

tionibus solvi solere : ut", si est oratori omnibus rebus dicendum , nullo modo si
(quod proximus demonstrabit liber) de ne geometria esse possit orator.
CAPUT X.

I. Petendam pronuntiationem d comoedir. II. Gertur institutionem a palaestritis.

I. Draun aliquid comoedo quoque, prima teneram adhuc, et rudem inficiunt.


dum eatenus, qua pronuntiandi scientiami Nam frequens imitatio transit in mores.
futurus orator desiderat. Non enim pue Ne gestus quidem omnis acmotus à co
rum, quem in hoc instituimus, aut femi moedis petendus est. Quanquam ením
neae vocis exilitate frangi volo, aut se utrumque eorum ad quemdam modum
militer tremere. Nec vitia ebrietatis ef praestare debet orator: plurimum ta
fingat, nec servili vernilitate imbuatur: men aberit à scenico , nec vultu , nec
nec amoris , avaritiae, metus discat af manu , nec excursionibus nimius Nam
fectum : quae, neque oratori sunt neces si qua in his ars est dicentium, ea pri
Saria , et mentem praecipue in aetate maest, ne ars esse videatus.
H2
º

6o TNSTITUCIoNEs oRAtoRIAs
¿Pues qué debe hacer en esto el maestro? Lo primero
corregir los vicios de la pronunciacion , si los hay , que las
palabras se pronuncien con todas sus letras : pues unas no
las pronunciamos bastantemente; otras demasiado. Unas no
las pronunciamos con el sonido tan lleno , como se debe,
confundiéndolas con otras, que se les parecen, pero que no son
tan llenas. Pues la L muestra corresponde á la letra, que aun
Demóstenes no podia pronunciar; y entre nosotros tiene la
misma fuerza: y los que no pueden pronunciar con toda su
fuerza la C y la T, pronunciarán con debilidad la G y la
D. Ni ha de sufrir el maestro la afectada pronunciacion de la
S; ni que se pronuncie con la garganta; ni achicando la
boca; ni que den sonido mas lleno á la voz , contra lo
que pide el habla natural, ahuecándola, lo que llaman los
griegos catapéplasmenon. Así llamamos al sonido de la flau
ta, quando por estar cerrados los agujeros, que hacen la
voz mas clara, va el ayre por la boca de ella engruesado.
a Cuidará tambien de que el discípulo no se coma las úl
timas sílabas, para que el hablar eea uniforme ; y que quan
do, haya de levantar la voz , trabaje el pulmon, pero sin
menear la cabeza; que acompañe el ademan á la voz, y el
semblante al ademan. Obsérvese tambien, que el que perora
tenga recta la cabeza; que no tuerza los labios ; no abra
la boca mostrando los dientes ; el rostro no mire al cielo;
ni tenga tampoco los ojos clavados en tierra; y que no mue.
- se a --

-, o , , , , , , , —- - , ,, , , , ,
. . . 3" - 3 ---4
- c of r - f: , , , , , ,
Quod estigitur in his doctoris ofi- moni, puro, conveniat, simplicem vocis
cium º In primis vitia, si qua sunt, oris, naturam pleniore quodam sono circum
emendet: ut expressa sint verba, ut suis limire , quod graeci naza a ezra agºyev
quaéque literae sonis enuntientur. Qua dicunt. Sic appellatur cantus tibiarúm,
rumdam enim vel exilitate, vel pingue quae praeclusis, quibus clarescunt fora
dine nimia laboramus: quasdam velut minibus, recto modo exitu graviorem
aeriores parum efficimus, et aliis non spiritum reddunt. t,
¿ se ¿? tioribus per Curabit etiam , me extremae Syllabae
intercidant, ut par sibi sermo sit; ut
mutamus. Quippe literae, qua Demo
sthenes quoque abóravit, a succedit: qua quoties exclamandum erit, laterum co
rum vis esta pud nos quoque. Et cum c, natus sitille, non capitis : ut gestus ad
acsimiliter t, non valuerunting ac d mol vocem, vultus ad gestum accomodetur.
liuntur, Neillas quidem circa literam Observándum erit etiam , ut recta sit
deficias hic magister feret nec yerba facies dicentis, ne labra distorqueantur,
in faucibus¿ , nec oris ina ne immodicus hiatus rictum distendat
nitate resonare: nec, quod minime ser ñe supínus vultus, ne dejecti in terrarn
DE M. FABro quINTILIANo. LIB. I. 6I
vará uno y otro lado la cabeza. En la frente se falta mas. He
visto á no pocos levantar las cejas, quando esforzaban la voz;
á otros que las encogian ; á otros que, levantando hasta lo úl
timo de la frente la una, con la otra casi cubrian el ojo. Y,
como luego diremos, es muchísimo lo que va á decir todo
esto: pues lo que no está bien, tampoco puede agradar.
De los cómicos debemos tambien aprender el ademan pa
ra las narraciones, la autoridad en el persuadir 3 con qué ade
man se expresa la ira, y qué inflexion de voz requiere la
compasion. En lo que logrará el acierto, si escogiere algunos
lugares de las comedias mas aptos para esto, y que tengan
mas proporcion con el ademan. Los quales no solo serán muy
útiles para la pronunciacion, sino aun para la eloqüencia. ”
Esto se enseñará al discípulo, miéntras se hace capaz de ma
y ores cosas. Quando fuese necesario que lea oraciones retó-.
ricas, y fuese ya capaz de entender sus virtudes ; entónces
cuídeme de él un sabio maestro ; y no solo le irá dirigiendo
en el tono de leer, sino que le hará tomar de memoria, y
pronunciar de pie, y claramente algunos lugares escogidos
de ellas, enseñándole como, ha de arreglar la accion , para
que desde luego exercite con la pronunciacion la voz, y la
memoria: or 3 r. co) - o a ,, y -
II. c. Ni reprehendo tampoco á los que, hacen algun estu
dio de la palestra. No hablo de los que emplean toda la
vida en la lucha, y en el viño, sepultando la razon mién

oculi, ne inclinata utrolibet cervix: Nam autem non ad pronuntiandum modo uti
frons pluribus generibus peccat. Vidi lissimi, verum ad augendam quoque elo
multos, quorum supercilia ad singulos vo quentiam maxime accomodati erunt. Et
cis conatus allevarentur, aliorum constri haec, dum infirma aetas majora non ca
cta, aliorum etiam dissidentia , cum al piet. Caeterum cum legere orationes opor
tero inverticem tenderent, altero paene tebit, cum virtutes earum jam sentiet,
oculus ipse premeretur. Infinitum autem, tum mihi diligens aliquis, ac peritus as
ut mox dicemus , in his quoque rebus sistat: neque solum lectione formet, ve
momentum est. Et nihil potest placere, rum etiam ediscere electa ex his cogat,
quod non decet. - et ea dicere stantem clare; et quemad
Debet etiam docere comoedus , quo modum agere oportebit, ut protinus pro
modo narrandum , qua sit auctoritate nuntiatione vocem, et memoriann exer
suadendum , qua concitatione consurgat Ceat.
ira, qui flexus deceat miserationem. Quod II. Neillos quidem reprehendendos
ita optime faciet, si certos ex comoediis putem , qui paulum etiam palaestritis
elegerit locos, et ad hoc maxime ido vacaverint. Non de his, loquor , quibus
neos, id est, actionibus similes. Lidem pars vitae in oleo, pars in vino consu
62 - INSTITUCIONES ORATORIAS

tras exercitan el cuerpo; con los quales no quiero que ten


ga el menor trato el niño, que voy formando. Baxo el nom
bre de palestra entiendo tambien á los que enseñan á refor
mar el ademan: v. gr. quándo han de estar los brazos de
rechos, cómo se han de mover las manos con arte, y no con
cierto ayre rústico, cómo ha de tener el cuerpo la decente
postura, moviendo los pies con destreza , y que el movi
miento de cabeza y ojos no desdiga del de todo el cuerpo.
Pues ninguno habrá que diga ser esto ageno de la pronun
ciacion, y esta de la retórica. Por donde no es cosa agena
de propósito, el aprender lo que debemos hacer en esta par
te ; y mas quando esta ley” del ademan tuvo su orí
gen en el tiempo de los héroes, y entre los griegos mas in
signes mereció la mayor aprobacion; uno de los quales fué
Sócrates y Platon, quien la cuenta entre las virtudes civiles;
y aun Chrysipo en los preceptos sobre la educacion de los
hijos hace de ella mencion. Y los lacedemonios, sabemos que
uno de los exercicios, que tenian por útiles á la guerra, era
la danza. Y que esta no se tuviese entre los antiguos ro
manos por cosa indecorosa, lo prueba aquel bayle de los sa
cerdotes, que hasta hoy dura, como ceremonia y rito de
religion ; y aquello que dice Ciceron en el libro 39 del ora
dor, que este debe mover varonilmente el cuerpo , no como
el cómico, sino como el que juega las armas , y se exercita

- - - - m -

mitur; qui corporis cura mentem obrue orta sit, et à summis graeciae viris, et
runt. Hos enim abesse ab eo, quem insti ab ipso etiam Socrate probata, à Plato
tuimus, quam longissime velim. Sed no ne quoque in parte civilium posita vir
men estidem iis, a quibus gestus, motus tutum , et à Chrysippo in praeceptis de
que formantur: , ut recta sint brachia, liberorum educatione compositis non o
me indoctae, rusticaeve manus , ne status missa. Nam lacedaemonios quidem etiam
indecorus, ne qua in proferendis pedi saltationem quamdam, tanquam ad bel
bus inscitia , ne caput oculique ab alia la quoque utilem , habuisse inter exer
corporis inclinatione dissideant. Nam nec citationes accepimus. Neque id veteribus
hoc esse in parte pronuntiationis nega romanis dedecori fuit: argumentum est,
verit quisquam, nec ipsam pronuntiatio sacerdotum nomine, ac religione durans
nem aboratore secernet. Et certe quod ad hoc tempus saltatio; etilla in tertio
facere oporteat, non indignum est di Ciceronis de oratore libro verba Crassi,
scere, cum praesertim haec chironomia, quibus praecipit, ut orator utatur late
quae est (ut nomine ipso declaratur) lex rum inclinatione forti, ac virili, non d rce
gestus, et ab illis temporibus heroicis na, et bistrionibus, sed ab armis, aut et
63
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I.

en la lucha. El qual precepto hasta el dia de hoy se obser-,


va, sin que ninguno se atreva á tacharlo. En esto se exer
citará el ñiño (si vale mi dicho) únicamente los primeros
años, y no por mas tiempo: porque no pretendo, que el
ademan del orador sea como Jos movimientos de un danza-,
rin, sino que de este exercicio en la niñez nos quede un,
cierto hábito natural, y decente compostura de cuerpo, que,
una vez aprendida, dure en adelante, aun sin querer.

CAPÍTULO XI. , , , , ,
- - «.
En la primera edad pueden aprenderse muchas cosas á
un tiempo. 1º Porque no es incompatible con la naturaleza
del ingenio humano. 2? Porque esta variedad suaviza el tra
bajo del estudio. 3? Porque entónces hay mucho mas tiempo.
Por pereza deran los oradores de aprender muchas, cosas.
,
* 4º º , . . . . .. . . . . . . . . - !

- Sale preguntarse, si (en suposicion de que es preciso


aprender todo esto) es posible el enseñarlo, y aprenderlo.
todo á un mismo tiempo. Algunos lo niegan , alegando que,
es confundir á los niños, y cansarlos con la diversidad de
estudios, para los quales ni hay fuerzas en el cuerpo, ni en
. . .. . v- . -" " -
-- - * -- --

---=== -s.s: -----

iam 2 palaestra: cujus etiam disciplinae componi ad similitudinem saltationis vo


usus in mostram usque áetatem sine re lo, sed subesse aliquido ex-hae exercita
prehensione descendit. A metamen nec tione puerili, unde nos non id, agentes,
ultra pueriles annos retinebitur , nec in furtim decorille discentibus traditus pro
his ipsis diu : necenim gestum oratoris Sequatur.
a
-

- , , , ,, , , -, y -, a - y
-

. . . . . .
1. - ... - - cAPU rx 1. -. -. . . . ..

Piura eodem tempore doceri primam aetatem posse. 1.- Quia baec natura humani in
genii, ut plura simul agat- 2. Quia laborem studiorum facilius tolerant pueri, 3., Quia.
aunc maxime tempus suppetit. Segnitiem obstare, quominus oratores multa dircant.
- - 2

- uaeri solet, an etiamsi discenda sint uidam, quia confundatur animus, ac


- haec, eodem tempore tamen tradi tigetur tot disciplinis in diversum ten
omnia, et percipi possint. Negant, enim. dentibus, ad quas nee mens, nec corpus,
64 INSTITUCIONES ORATORIAS :

el ánimo, ni el tiempo da de sí para tanto y aun dado


que lo pueda sufrir esta edad robusta, no conviene cargar
la tanto. º.

. -

1? No advierten los tales, quánto alcanza la capacidad


del hombre; cuyo ingenio es tan ágil, tan veloz, y para
decirlo así, tan para todo, que no puede detenerse en una
cosa sola, aplicando su fuerza á muchas cosas, no digo en
un mismo dia, pero aun en un mismo momento. Y si no,
el que toca la citara ¿no atiende á un mismo tiempo á la
memoria , al sonido de la voz, á sus diversas inflexiones?
Con la mano derecha hiere las cuerdas, coa la izquierda las
templa, las mantiene en su punto, y las afina. Ni aun los
pies los tiene ociosos, llevando con ellos el compas; y to
do esto á un mismo tiempo. ¿Qué mas ? Nosotros mismos,
quando la necesidad lo pide ¿ no contestamos á un asunto,
y atendemos á otro distinto? Y vemos que para esto se re
quiere discurrir , escoger ciertas expresiones , componer el
semblante, la pronunciacion, el ademan, y movimientos del
cuerpo. Si todo esto lo hacemos con una sola aplicacion del
entendimiento ¿porqué no podremos repartir en diversas ho
ras muchos estudios? Mucho mas, quando la misma variedad.
divierte, y rehace el ánimo, siendo mas dificultoso el apli
carse á una sola cosa. De aquí nace, que el trabajo de es
cribir se alivia eon la leccion; y al contrario quando nos can
samos de leer, tomamos por descanso el escribir. Aun quan
- ----->. - º * - ºr---º * -- y -----.

- -E -

-- cºsa gºr iríº º e "oº ocreº, , , , o as, . . . ...


nec dies ipse suficiat, et si maxime pa- ter omnia. Quid? nos agendi subita ne
tiatur haec aetas robustior, tamen pue- cessitate deprehensi, nonne alia dicimus,
riles annos onerari non oporteat. alia providemus : cum pariter inventio
I. Sed non satis perspiciunt quantum rerum , electio verborum , , compositio
natura humani ingenii valeat: quae ita gestus, pronuntiatio , vultus, motusque
est agilis, et velox , sic in omnem par-., desiderentur? Quae, si velut sub uno co
tem, ut ita dixerim , spectat, ut ne possit natutam diversa parent simul, curnon
quidem aliquid ageretantum unum:in plu pluribus horis diversa partiamur º cum
ra vero, non eodem die modo, sed eodem r,
praesertim reficiat animós, ae reparet va
temporis momento vim suam impendat. An rietas ipsa, contraque sit aliquanto difº
vero citharoedi non simulet memoriae, et ficilius in labore uno perseverare. Ideo
sono vocis, et pluribus flexibus serviunt, et stylus lectione requiescit, et ipsius le
cum interim alios nervos dextra percu ctionis taedium vicibus levatur. Quam
tiunt, alios laeva trahunt, continent, libet multa egerimus , quodam tamen
probant? Nepes quidem otiosus, certam modo recentes sumus ad id quod, incipi
iegem temporura servatº: et haec pari mus. Quis non obtundi possit, si per toº
A
DE M. 65
FABIO QUINTILIANO. LIB. I.

do nos hayamos aplicado á muchas cosas, tenemos en cier


to modo enteras las fuerzas para lo que vamos á aprender.
¿A quién no molerá estar todo un dia oyendo á un maes
tro sobre una misma cosa ? La variedad le servirá de re
creo , como acaece con las viandas , que siendo diversas,
alimentan, pero sin fastidio.
Díganme si no, los tales, ¿qué otra manera y método
hay para aprender? ¿Hemos de atender primeramente á la gra
mática, y despues enseñar la geometría? Pues omitamos por
algun tiempo el estudio de lo que hemos aprendido, y em
pleémonos en la música, y se nos olvidará lo primero. Y no
será bueno, miéntras se estudia la lengua latina, tomar al
gun conocimiento de la griega? Y (para concluir) ¿no nos
hemos de ocupar en otro estudio, que en el que últimamente
hemos emprendido? ¿Porqué no decimos á un labrador, que
no cultive á un tiempo los sembrados, y las viñas, y los oli
vares , y los frutales? ¿que no cuide juntamente de los pas
tOS, derebaño, de huertas y colmenas? ¿Y porqué razon no.
sotros mismos empleamos el dia, parte en el pleyto, parte
con los amigos, parte en los negocios de casa, parte en cui
dar del cuerpo, y parte en el recreo? cada una de las quales
cosas bastaria para cansarnos, si á ella sola nos aplicásemos, y
no á otra. Tanto mas fácil cosa es, hacer muchas cosas á un
tiempo, que una sola por mucho tiempo.
2º. Ni hay tampoco que temer, que esto se haga intole
rable á los niños, pues no hay edad, que ménos se canse: co

.: ,, , , ,, , . -

tum diem cujuscumque artis unum ma et vineta, et oleas, et arbustum cofant;


gistrum ferat? Mutatione recreabitur: si ne pratis, et pecoribus, et hortis, et al.
cut in cibis, quorum diversitate refici vearibus accomodent curam º Curipsi
tur stomachus, et pluribus minore fasti aliquid forensibus negotiis, aliquid desi—
dio alitur...,
deriis amicorum, aliquid rationibus do—
Aut dicantisti mihi, quae sit alia mesticis, aliquid curae corporis, nonni
ratio discendi? Grammatico soli deser hil voluptatibus quotidie damus?quarum
viamus, deinde geometrae tantum? Omit-, nos una res quaelibet nihil intermitten
tamus interim quod didicimus, mox trans tes fatigaret. Adeo facilius est multa fa
eamus ad musicum ; excident priora. Et cere, quam diu.
cum latinis studebimus literis, non re 2. Illud, quidem minime verendum
spiciamus ad graecas? et ut semel finiam, est, ne laborem studiorum pueri difici
nihil faciamus, nisi novissimum? Cur non lius tplerent. Neque enim ulla aetas mi
idem suademus agricolis, ne arva simul, nus fatigatur. Mirum sit forsitan, sed ex
ToM.I.
66 INSTITUCIONES ORATORIAS

sa que parecerá extraña ciertamente, pero lo acredita la ex


periencia. El ingenio entónces tiene mas docilidad, quando no
se ha endurecido. Prueba de esto es, que sin que se les aprie
te á los niños, en dos años, luego que comienzan á pronun
ciar bien, hablan de todo; pero los esclavos recien comprados
¿quántos años gastan, y quánta repugnancia no les cuesta
aprender el latin? Si tomas á tu cargo el enseñará un adulto,
entónces conocerás que aquel sabe bien el arte, á que se de
dicó, que la aprendió desde niño. Los niños son tambien mas
sufridores del trabajo, que los jóvenes. Es la causa sin duda,
porque así como á niños, ni les hacen mella tantas caidas
como dan, ni el andar ágatas, ni el afanarse tanto en el jue
go en tan breve tiempo, ni el no cesar de correr en todo el dia,
Porque no tienen peso en las carnes; así sucede, segun creo,
con sus ánimos, que no se cansan tanto, como los de los adul
tos, porque no toman el estudio con empeño y afan, sino so
lamente reciben la instruccion que les damos. A esto se junta
la mayor facilidad de aprender, que tienen en aquella edad;
siguen á los que los enseñan con cierta simplicidad, y no mi
ran á lo que ya han hecho; porque no pueden discernir lo
que es trabajo. Finalmente, como tengo experimentado, mé
nos sensacion les hace el trabajar con los sentidos, que con el
discurso.
3? Júntase á lo dicho, que en adelante no tendrán mas
tiempo, que en la edad presente; como que todo su apro
vechamiento depende del oido: y quando se dediquen á es

perimentis deprehendas. Nam et docilio continui lusus , et totius diei discursus;


ra sunt ingenia , priusquam obduruerunt. quia pondus illis abest, nec se ipsi gra
Id vel hoc argumento patet, quod intra vant: sic animi quoque, credo, quia mi
biennium quam verba recte formare po nore conatu moventur , nec suo nisustu
tuerunt, quamvis nullo instante, omnia diis insistunt, sed formandos se tantum
fere loquuntur, At novitiis nostris per modo praestant, non similiter fatigan
quot annos sermo latinus repugnat? Ma tur. Praeterea secundum aliam ... aetatis,
gis scias, si quem jam robustum insti illius facilitatem , velut simplicius do—
tuere literis coeperis, non sine causa dici centes sequuntur, nec quae jam egerint,
a audeºaéás eos, qui in sua quidque ar metiuntur. Abestillis etiam adhue labo
te optime faciant. Et patientior est la ris judicium. Porro , ut frequenter ex
boris natura pueris, quam juvenibus. Vi perti sumus, minus afficit sensus fatiga
delicet, ut corpora infantium , nec casus tio, quam cogitatio.
quo in terram toties deferuntur, tam 3. Sed ne temporis quidem unquam
graviter affligit, necilla per manus, et plus erit, quia his aetatibus omnis in
genua reptatio , nee post breve tempus audiendo profectus est. Cum ad stylum
.
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. I. 67
cribir, y componer algo por sí mismos, ó no podrán, ó no
querrán aprender de nuevo estos estudios. Pues no pudien
do, ni aun debiendo emplear un niño todo el dia en la gra
mática (que esto le engendraria fastidio) ¿en qué otra cosa
ha de emplear estos ratos perdidos ? Y no pretendo tam
poco, que se tome esto con demasiado ahinco ; ni que se
emplee con tanta intension á la música, como si hubiera de
ser maestro de capilla; ni que aprenda todas las menudencias
de la geometría. No quiero hacerle un cómico en el ademan,
ni un baylarin en el movimiento del cuerpo ; bien que, aun
quando, pidiese tanto, habia tiempo para todo, porque son
muchos los años, que tienen para aprender, y yo no exijo
esto de ingenios rudos. Por último Platon. ¿porqué fué emi
nente en todo lo que hemos puesto por indispensable para el
que ha de ser orador? Porque no contento con lo que podia
aprender en Atenas, y de los pytagóricos, á los que fué á
buscar á Italia, hizo viage al Egypto, y de sus sacerdotes
aprendió los arcanos de su filosofia.”
Pretéxtase para la imposibilidad de lograr todo esto, la de
sidia natural al hombre : pues ni hay amor al trabajo, ni se
mira la eloqüencia como estudio el mas honesto, y noble de
todos en sí mismo, sino como medio para la torpe ganancia,
haciendo de él un uso vil. Haya enhorabuena algunos que
exerzan en el foro, movidos del interes, el oficio de orador,
sin conocimiento del arte, con tal que se me conceda, que
-L ases

secedet, cum generabit ipse aliquid, at tardis ingeniis loquor. Denique curin his
componet, tum inchoare haec stu omnibus, quae discenda oratori futuro
ia, vel non vacabit, vel non libebit. puto, eminuit Plato? qui non contentus
Ergo cum grammaticus totum diem oc disciplinis, quas praestare poterant Athe
cupare non possit, nec debeat, ne di nae, non pythagoreorum , ad quos in
scentis animum taedio avertat: quibus Italiam navigaverat: Aegypti quoque sa
potius studiis haec temporum velut sub cerdotes adiit, atque eorum arcana per
sidia donabimus? Nam nec ego, consumi didicit.
studentem in his artibus volo: nec mo Difficultatis patrocinia praeteximus
duletur , ut musicis modis cantica exci segnitiae. Neque enim nobis operis amor
piat : nec utique ad minutissima usque est: nec quia sit honesta, atque pulcher
geometriae opera descendat. Non comoe rima rerum eloquentia, petitur ipsa, sed
dum in pronuntiando, nec saltatorem in ad vilem usum , et sordiáum lucrum ac
gestu facio : quae si omnia exigerem, cingimur. Dicant sine his in foro mul
suppeditabat tamen tempus. Longa est ti, et acquirant, dum sit locupletior ali
enim quae discit aetas , et ego non de quis Sordidae mercis negotiator, et plus
I 2
68 INSTITUCIONES ORATORIAS --

qualquiera comercio vil, y aun un pregonero puede sacar


mas ganancia con su oficio. Yo no escribo esto para aquellos,
que atienden á la ganancia, que pueden prometerse de lo que
estudian. El que llegare á concebir una idea de la eloqüencia
tan divina, como es en sí, y se representare delante de la vis
ta esta reyna entre todas las artes, como la llama un poeta
trágico nada vulgar”, y midiere el fruto, que acarrea, no
por este interes y salario, que damos á los abogados, sino por
el gusto y deleyte, que el alma recibe con la contemplación
de lo que sabe (utilidad, que siempre dura, como que no de
pende de la fortuna) este tal se persuadira fácilmente, quán
to mayor deleyte ha de sacar de emplear en la geometría ó.
música el tiempo, que otros gastan en espectáculos, en el
campo, en jugar á los dados, en conversaciones inútiles (por
no decir durmiendo, y en comilonas largas) que el que sa
can estos tales de semejantes diversiones necias...”Porque la
misma naturaleza nos favoreció en inspirarnos mayor amor á
lo que es mas honroso. Pero pongamos fin á esta materia, en
la que me ha hecho alargarme el gusto, que tengo en tratarla;
pues ya hemos hablado bastante de lo que deberá aprender.
el niño, ántes que sea capaz de mayores cosas. El siguiente
libro dará principio como de nuevo, y Pasaremos á los ofi
cios del orador. - -
*
. .. . . . . .
º a º -a-co, i.

- -
-,

voci suae debeat praeco. Ne velim qui ris, otiosis denique sermonibus , ne di
dem lectorem dari mihi, quid, studia re-. cam somno, et conviviorum mora, con
ferant computaturum. Qui vero imagi terunt, geometrae potius, ac musico im-3
nem ipsam eloquentiae divina quadam. pendat, quanto plus delectationis habi
mente conceperit, quique illam (ut ait. turus, quam ex illis ineruditis voluptati
non ignobilis tragicus) reginam rerum , bus? Dedit enim hoc providentia homi
orationem ponet ante oculos, fructumque, nibus munus, ut honesta magis juvarent.
non ex stipe advocationum , sed ex ani Sed nos haec ipsa dulcedo longius duxit.
mo suo , et contemplatione, ac Scientia , Hactenus ergo de studiis, quibus ante
petet, perpetuum illum , nec fortunae, quam majorá capiat, puer instituendus
subjectum, facile , persuadebit, sibi, ut est: proximus liber velut novum sumet
tempora, quae spectaculis, campo, tesser; exordium, et ad rhetoris oficia transibit.
-
. . .
-
- -
- -- ,,

- -
LIBR o SEGUNDO,
CAPÍTULO PRIMERO. * -

QUÁNDo HA DE ESTUDIAR EL NIÑO LA RETóRICA.

Ha prevalecido
la costumbre (y todos los dias va to
mando mas cuerpo) de entregar al niño mas tarde de lo que
era razon á los maestros de la eloqüencia latina; y lo mismo
acaece con los que enseñan º la griega. Dos son las causas de
esto ; conviene á saber, que nuestros retóricos han abandona
do su oficio, y le han tomado los gramáticos, no siendo pro
pio suyo. Porque aquellos tienen por obligacion suya el decla
mar º, y enseñará otros esta facultad, pero limitándose á los
éneros deliberativo y judicial, teniendo lo demas por inferior
á su profesion : y estos no contentos con tomar á su cargo
lo que los otros dexáron (de lo que debemos estarles agradeci
dos), se han entrometido tambien á hacer prosopopeyas , y en
señar lo que mira al género deliberativo; lo que es obra del
mayor empeño en la oratoria. De donde provino, que lo que
era principal en un arte, vino á ser lo último de otra ; y los
que ya debían estudiar ciencias mayores, los vemos sentados
s - º - º -1 - - -? - - -- - -º *

-- o , , , - -- - 2 C. . . ..."

LIB E R SE CUND U.S.


- , cAPUT PRIMUM. . . . . . . . . . .
y * . .. . - * - - .
-
er . *
" a ". QUANDo RHEToRI SIT TRADENDUs PUER. ,, ,. . - * --
y -

-
T enuit consuetudo, quae quotidie
. . . . . . . dicialesque materias; nam caetera ut -

magis invalescit, ut praeceptoribus elo professione sua minora despiciunt: et hi


quentiae latinis quidem semper, sed et non satis credunt excepisse quae relicta
iam graecis interim discipuli serius, erant, (quo nomine gratia quoque his est
quam ratio postulat, traderentur. Ejus habenda) sed ad prosopopoejas usque, et
rei duplex est causa , quod et rhetores ad suasorias, in quibus onus, dicendi vel
utique nostri, suas partes omiserunt, et maximum est, irrumpunt. Hinc ergo ac
grammaticialienas occupaverunt. Nam. cidit, ut quae alterius artis prima erant
et illi declamare modo, et scientiam de opera, facta sint alterius novissima : et
clamandi ac facultatem tradere , oficii aetas altioribus jam disciplinis debita, in
sui ducunt, idque intra deliberativas ju schola minore subsideat , ac rhetoricen
7o INSTITUCIONES ORATORIAS

entre los gramáticos, para aprender retórica. Y así, segun es


to, parece que al niño no se le debe entregar al maestro de
retórica, hasta que sepa declamar, cosa por cierto ridícula.
Demos pues á cada facultad lo que le corresponde. Reco
nozca sus límites la gramática, á la que diéron el nombre de
literatura, los que la traduxéron en latin ; y mucho mas
habiendo traspasado los que tuvo en su primer orígen, remon
tándose á tratar de cosas mayores. Pues siendo al principio
como un arroyuelo pequeño, ha crecido á manera de rio cau
daloso, apropiándose la interpretacion y exposicion de los poe
tas, é historiadores, atribuyéndose por otra parte, ademas de
enseñará hablar bien, y con tal qual afluencia de palabras, el
conocimiento de casi todas las facultades mayores: y la retóri
ca, que toma el nombre de la fuerza en decir, no rehuse
lo que es oficio propio suyo; ni permita que se le usurpe lo
que es de su obligacion pues por rehusar el trabajo, ha veni
do casi á perder lo que era de su jurisdiccion. No negaré, que
algun profesor de gramática pueda llegará adquirir tantos co
nocimientos, que sea capaz de enseñar retórica, Pero siempre
será cierto, que quando esto enseñe, hará oficio de retórico,
no de gramático. , , , , ,
Nuestro intento principal es señalar el tiempo en que es
tará ya en sazon el niño, para aprender la retórica. Para lo qual
no hemos de atenderá la edad que tiene, sino á lo que ha
aprovechado en sus conocimientos. Y para ahorrarnos de pa
--

apud grammaticos exerceat, Ita ; quod rhetorice, cui nomen vis eloquendi de
est maxime ridiculum, non ante ad de dit, oficia sua non detrectet, nec occu
clamandi magistrum mittendus videtur pari gaudeat pertinentem ad se laborem;
puer, quam declamare jam sciat. quae dum operae cedit, jam pene pos
Nos suum cuique professioni modum sessione depulsa est. Nec inficiabor ex
demus. Et grammatice (quam in lati iis aliquem, quigrammaticen profiten
num transferentes , literaturam vocave tur, eousque scientiae progredi posse,
runt) fines suos norit, praesertim tan utad haec quoque tradenda suficiat. Sed
tum ab hac appellationis suae pauperta cum id aget, rhetoris oficio fungetur,
nOn Su0.
te, intra quam primi illi constitere, pro
vecta : ( nam tenuis à fonte, assumptis Nos porro quaerimus, quando iis, quae
tarum, historicorumque viribus, ple rhetorice praecipit , , percipiendis puer
no jam satis alveo fluit ; cum, praeter maturus esse videatur. In quo quidem
rationem recte loquendi, non parum alio non id est aestimandum , cujus quisque
qui copiosam, prope omnium maxima sit aetatis, sed quantun in studiis jam
rum artium scientiam amplexa sit) et effecerit. Et me diutius disseram quando
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. II. 71
labras, digo que entónces estará en sazon, quando pudiere es
tudiarla; aunque esto depende de la qüestion anterior. Porque
si la gramática extiende su enseñanza á aquellas oraciones sua
sorias, que son los rudimentos de la retórica, en este caso se
deberá entregar mas tarde el niño al maestro de eloqüencia.
Si este no rehusa el enseñar los primeros principios de su facul
tad, deberá comenzar desde luego por las narraciones y ora
cioncitas, en que se alaba óvitupera alguna cosa. ¿Por ventu
ra ignoramos que los antiguos, para aumentar la eloqüencia,
se exercitáron en qüestiones , lugares comunes, y otras decla
maciones, en que no entra circunstancia de cosas, ni personas,
en las que se contienen todas las causas de asuntos, ya verda
deros , ya fingidós? De donde se colige, quan contra razon se
abandona aquella parte de la retórica, que fué por mucho
tiempo la principal, y la única. ¿Qué cosa hay de las que di
Xe arriba, que no coincida ya con otras cosas propias de la re
tórica, ya con el género judicial? ¿Por ventura en el foro no
hay sus narraciones? y aun no sé, si en este género estas son
la parte principal. En aquellas contiendas entre el acusador, y
el abogado ¿no se alaba? ¿no se vitupera? ¿no hay sus luga
res oratorios, ya para reprehender los vicios, quales son los que
compuso Ciceron, ya para tratar en comun qualquiera qües
tion, quales son los de Q. Hortensio: como por exemplo, si
se ha de estar á ligeras pruebas, convengan , ó no con el
- - -
- *-- , -,

- - - *
*- -" - -

sit rhetori tradendus , sic optime finiri est, quam turpiter deserateam partem
credo, cum poterit, Sed hoc ipsum ex su rhetorices institutio , quam et primam
periore pendet quaestione. Nam si gram habuit, et diu solam. Quid autem est
matices munus usque ad suasorias (quae iniis, de quibus supra dixi , quod non
sunt apud rhetorem materiae inter ru cum in alia, quae sunt rhetorum pro
dimenta dicendi ) prorogatur ; tardius pria, tum certe in illud judiciale causae
rhetore opus est. Si rhetor prima ope genus incidat? An non in foro narran
ris sui officia non recusat, à narratio dum est? qua in parte nescio, ansit hoc
nibus statim, et laudandi, vituperandi vel plurimum. Non laus, ac vituperatio
que opusculis cura ejus desideratur. An certaminibus illis frequenter inseritur?
ignoramus antiquis hoc fuisse ad augen Non communes loci, sive qui sunt in
dam eloquentiam genus exercitationis, ut vitia directi, quales legimus à Cicerone
theses dicerent, et communes locos, et compositos; seu quibus quaestiones ge
caetera citra complexum rerum perso neraliter tractantur, quales sunt editi à
narumque, quibus verae, fictaeque con Quinto quoque Hortensio ; ut , sitne
troversiae continentur? Ex quo palam parvis argumentis credendum , et pro
72 INSTITUCIONES ORATORIAS

dicho de los testigos? y estos lugares ¿no son el alma del gé


nero judicial? Son como armas dispuestas para usar de ellas,
quando lo pida el caso. El que no crea que esto pertenece
á la oratoria, negará tambien que comenzamos á hacer la es
tatua, quando fundimos el metal. Ni me tache ninguno de
que procedo con tanta apresuracion (como algunos pensarán)
como si quisiera apartar quanto ántes de la gramática al ni
ño, para que comience la retórica: pues tambien para aque
lla se le debe dar el tiempo suficiente, no habiendo ningun
inconveniente, en que aprenda á un mismo tiempo estas dos
facultades. Con esto no se aumentará el trabajo, sino que
se repartirá el que tenía un solo maestro, y con mas uti
lidad, cuidando cada qual de su facultad: práctica, que de
xáron los latinos, y la guardan aun los griegos; bien que
aquellos tienen excusa, porque los maestros de gramática se
han tomado parte de este trabajo.

testibus, et in testes ; in mediis litium protinus à grammaticis putem. Dabun


medullis versantur 2 Arma sunt haec turillis tum quoque tempora sua : ne
quodammodo praeparanda semper, ut que erit verendum, ne binis praecepto
his , cum res poscet, utaris. Quae qui ribus oneretur puer. Non enim crescet,
pertinere ad oratorem, non putabit, is sed dividetur , qui sub uno miscebatur
me statuam quidem inchoari credat, cum labor: et erit sui quisque operis ma
ejus membra fundentur. Neque hanc (ut gister utilior; quod adhue obtinent grae
aliqui putabunt ) festinationem meam éi, et à latinis omissum est: et fieri
sic, quisquam calumnietur, tanquam eum, videtur excusate, quia sunt, qui labori
qui sit. rhetori traditus , abducendum isti SuccesSerunt, -
DE M. FABI9 QUINTILIANo, LIB. II. 73
CAPÍTULO II.
MDE LA CONDUCTA , Y OBLIGACION DEL MAESTRo.

Las que el niño llegue á ser capaz de los conoci


mientos de la retórica, será entregado á los maestros de esta
facultad: cuyas costumbres convendrá exáminar lo primero de
todo. Y la causa de no haber tocado hasta ahora este punto,
no es, porque no se haya de poner igual cuidado en examinar
la conducta de los demas maestros, como dixe en el primer
libro, sino porque la edad del discípulo nos obliga á hablar de
esto. Pues quando entra el niño en poder de estos maestros,
ya es crecidito, y persevera en el mismo estudio ya jóven: y
así debe ponerse mayor esmero, para que la conducta irrepre
hensible del maestro preserye de todo daño á los años tiernos;
y su circunspeccion le contenga, para que no se haga des
envuelto, si es de genio avieso, y bravo. Porque no basta
que el maestro sea muy comedido en todo, sino que debe con
tener á sus discípulos con el rigor de la enseñanza.
Lo primero de todo el maestro revístase de la naturaleza
de Padre, considerando que les sucede en el oficio de los que
-

* - - - •- - *- =

sese

C A P U T II.

pE MoRIBUs, ET oFFICIIs PRAEcEPToRs.

Ee cum ad eas in studiis vires ri ad hos praeceptores transferuntur, et


apud eos juvenes etiam facti perseve
pervenerit puer, ut. quae prima esse
praecepta rhetorum diximus, mente con rant: ideoque major adhibenda tum cura
sequi possit, tradendus ejus artis ma est, ut et teneriores annos ab injuria
gistris erit. Quorum in primis inspici Sanctitas docentis custodiat, et ferocio
mores oportebit. Quod ego non idcirco res à licentia gravitas deterreat. Neque
potissimum in hac parte tractare sum vero satis est, summam praestare absti
aggressus, quia non in caeteris quoque nentiam ,anisi disciplinae severitate con
doctoribus idem hoc examinandum quam. venientium quoque ad se mores ad
diligentissime putem , sicut testatus sum Strinxerit.
libro priore; sed quod magis necessa Sumat igitur ante omnia parentis er
riam ejus rei mentionem facit aetas ga discipulos suos animum , ac succede
ipsa discentium. Nam, et adultifere pue re se in eorum locum, à quibus sibili
ToM. L.
74 INSTITUCIONES ORATORIAS -
le han entregado sus hijos. No tenga vicio ninguno, ni lo con
sienta en sus discípulos. Sea serio, pero no desapacible; afa
ble, sin chocarrería : para que lo primero no le haga odioso,
y lo segundo despreciable. Hable á menudo de la virtud, y
honestidad; pues quantos mas documentos dé, tanto mas ahor
rará el castigo, Ni sea iracundo, ni haga la vista gorda en lo
que pide enmienda: sencillo en el enseñar; sufrido en el tra
bajo; constante en la tarea, pero no desmesurado. Responda
con agrado á las preguntas de los unos ; y á otros pregúntelos
por sí mismo. En alabar los aciertos de los discípulos no sea
escaso, ni prolixo; lo uno engendra hastío al trabajo, lo otro
confianza para no trabajar. Corrija los defectos sin acrimonia,
ni palabras afrentosas. Esto hace, que muchos abandonen el
estudio; el ver que se les reprehende, como si se les aborre
ciese. Década dia á sus discípulos alguno, ó algunos docu
mentos, para que los mediten á sus solas. Pues aunque la lec.
cion de los autores les suministrará abundantes exemplos para
la imitacion, la viva voz, como dicen, mueve mas : princi
Palmente la del maestro, á quien los discípulos bien educados
aman, y veneran. Pues no se puede ponderar, con quanto
mas De
gusto imitamos
ninguna á aquellos,
manera á quienes
debe permitiº estimamos
º los .. ..."
niños la licencia,
que hay en las mas escuelas, de levanase de su puesto, ni
de dar saltos, quando á algunº se le alaba; ántes aun los jó

...

beri traduntur, existñmet. Ipse nec ha erunt, non acerbus, minimeque contu
beat vitia, necferat. Non austeritas ejus meliosus. Nam id quidem multos à pro
tristis, non dissoluta sit comitas: ne in posito studendi fugat, quod quidam sic
de odium, hinc contemptus oriatur. Plu objurgant, quasi oderint. Ipse aliquid,
rimus ei de honesto, ac bono sit sermo. imo multa quotidie dicat , quae secum
Nam quo saepius monuerit, hoc rarius audita referant. Licet enim satis exemi
castigabit. Minime iracundus , necta plorum ad imitandum ex lectione sup
men eorum, quae emendanda erunt, dis peditet, tamen viva illa, ut dicitur, vox
simulator: simplex in docendo, patiens alit
quemplenius, praecipueque praeceptoris,
si modo recte
discipuli, sunt in
laboris, assiduus potius, quam immodi
cus. Interrogantibus libenter respondeat; stituti, et amant, et verentur, Vix au-.
"non interrogantes percontetur ultro. In tem dici potest , quanto libentius imi
laudandis discipulorum dictionibus, nec temur eos, quibus favemus.
malignus , nec effusus : quia res altera Minime vero permittenda pueris, ut
taedium laboris, altera securitatem pa fit apud plerosque, assurgendi, exultan
ºrit. In emendando , quae corrigenda dique in laudando licentia. Quin etiam

- -
DE M, FABro QUINTILIANo. LIB. 1r. 75,
venes, quando oyeren las alabanzas, las aprobarán , pero con
moderacion. De aquí nacerá, que el discípulo estará como
pendiente del juicio del maestro, juzgando que ha obrado bien,
solo quando el maestro diese su aprobacion. Pero la costum-,
bre, que algunos llaman humanidad, de aplaudir á alguno por
qualquiera cosa, es muy reprehensible á la verdad; pues no
solo es agena de la seriedad de una escuela, y propia de los
teatros, sino la mas contraria de los estudios. Porque tendrán
por ocioso el esmerarse en el trabajo, al ver que por qual-,
quiera cosa que hagan, han de ser aplaudidos, Tanto los que,
oyen, como el que declama, deben, mirar al maestro, para
conocer lo que él aprueba, ó, desaprueba; con lo que adqui
rirán facilidad con la composicion , y discernimiento con el
contínuo oir. Mas al presente vemos, que no solamente al fin
de cada cláusula se levantan los discípulos, para aplaudir al
que recita, sino que corren, y dan palmoteos, y voces des
compasadas. Esto lo practican los unos con los otros; y en es
to consiste el buen suceso de la declamacion. De aquí nace el
orgullo, y vana esperanza, que conciben de su saber ; en tal
forma, que empavonados ya con aquella vocería de sus con
discípulos, si las alabanzas del maestro son moderadas, for
man mal juicio de él. Aun quando los mismos maestros de
claman, hagan que, los discípulos, le oigan con atencion, y
modestia; porque la censura de lo que el maestro compo
ne, no la ha de esperar de los discípulos, sino estos del
- ys º --,
y rº, . . . .»
a - . - . .
- - º E - la .

a y
r. , - - - - o , ,

juvenum modicum esse , cum audient, atque improbanda discernent: sic stylo
testimonium debet. Ita fiet, ut ex judi facultas continget, auditione judicium. At
cio praeceptoris discipulus pendeat, at nunc proni, atque succincti ad omnema
que id se dixisse recte, quod ab eo pro clausulam non exurgunt modo , verum
abitur, credat. Illa vero vitiosissima, etiam excurrunt, et cum indecora exul
quae jam humanitas vocatur, invicem tatione conclamant. Id mutuum est, et
qualiacumque laudandi, cum est inde ibi declamationis fortuna. Hinc tumor,
cora , et theatralis, et severe institu et vana de se persuasio, usque adeo, ut
tis scholis aliena, tum studiorum perni illo condiscipulorum tumultu infati, si
ciosissima hostis. Supervacua enim vi parum à praeceptore laudentur, ipsi de
dentur cura, ac labor, parata , quicquid illo male sentiant. Sed se quoque prae
effuderint, laude. Vultum igitur prae ceptores intente, ac modeste audiri ve
ceptoris intueri, tam qui audiunt debent, lint. Non enim judicio discipulorum di
quam ipse, qui dicit. Ita enim probanda, cere debet magister, sed discipuli ma
K 2
76 i NSTITUCIONES-orÁTo RIAS. "
maestro. Si es posible, debe observar con toda atencion qué
cosas alaba cada uno, y cómo las alaba; y alégrese de que lo
bueno merezca la aprobacion, no tanto por respeto suyo,
quanto por ser señal de discernimiento en los que lo alaban
No apruebo que los niños esten sentados entre los jóve
nes. Porque aunque un hombre tal, qual debe ser el maestro
por la suficiencia, y costumbres, pueda tenerá raya á los jó
venes, con todo eso deben los tiernos separarse de los que
son crecidos; y no solo debe evitar qualquiera accion inde
corosa, sino aun la sospecha de -ella. He tenido por conve
miente dar este aviso solo de paso; porque si el maestro, y los
discípulos carecen aun de los menores vicios, ocioso es el ad
vertir esto. Y si alguno, quando toma maestro, no huye de
lo que es manifiestamente vicio, entienda, que quanto vamos
á decir para la utilidad de la juventud, es ocioso sin esto.
*- -
-

- - -
* - - -
- -

gistri. Quin, si fieri potest, intendendus et carendum non solum crimine turpitu
animus in hoc quoque , ut perspiciat, dinis, verum etiam suspicione. Haec no
quae quisque, et quomodo laudet : et tanda breviter existimavi. Nam ut absit
placere, quae bene dicet-, -non suo ma ab ultimis vitiis, ipse praeceptor , ac
gis, quam eorum nomine delectetur, qui schola, ne praecipiendum, quidem credo.
recte judicabunt. Ac si quis est, qui flagitia manifesta in
Pueros adolescentibus sedere permi deligendo filii praeceptore non evitet
jam hinc sciat, caetera quoque, quae ad
stos, non placet mihi. Nam etiamsi vir
talis, quaiem esse oportet studiis, mo utilitatem juventutis componere cona
ribusque praepositum modestam habe: mur, esse sibi, hac parte omissa, su
re potest etiam juventutem , tamen, Vel pervacua,
infirmitas à robustioribus separanda est:
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II, 77

CAPÍTULO III.

SI CONVIENE TOMAR DESDE EL PRINCIPIO EL MEJOR MAESTRO,

N debe pasarse en silencio la opinion de los que di


een, que quando el niño comience la retórica, no se le de
be entregar desde el principio al maestro mas excelente, sino
que por algun tiempo debe estar con alguno mediano ; co
mo quiera que para enseñar las artes, es mejor una medianía
en el preceptor; ya porque se acomoda mas al entendi
miento, é imitacion de los discipulos, ya porque no se des
deña tanto del molesto, y trabajoso exercicio de los rudi
1316 IntoS.

No creo, que debo afanarme mucho para evidenciar, quan


to vale el que las primeras instrucciones sean las mejores, y
quánto trabajo cuesta el quitar los malos resabios, que una \
vez se tomáron ; pues al maestro que despues sigue, se le jun
ta un doble trabajo, no siendo menor el de hacer olvidará
los discípulos lo que aprendiéron mal, que el enseñarlos de
muevo. Por el qual motivo cuentan, que Timoteo , exce

C A P U T I I I,

AN PROTINUS PRAECEPTORE OPTIMO SIT UTENDUM,

N. illorum quidem persuasio si rum molestias minus superba.


lentio transeunda est, quietiam cum ido Qua in re mihi non arbitror diu la
neos rhetori pueros putaverunt, non ta borandum, út ostendam, quanto sit me
men continuo tradendos eminentissimo lius optimis imbui, quantaque in eluen
credunt, sed apud minores aliquandiu dis, quae semel insederint vitiis difi
detiment: tanquam instituendis artibus cultas consequatur, cum geminatum o
magis sit apta mediocritas praeceptoris, nus succedentes premat, et quidem de
eum ad intellectum , atque imitationem docendi gravius, ac prius, quam docen
facilior, tum ad suscipiendas elemento di, Propter quod Timotheum clarum in
7s INSTITUCIONES oRAToRIAs
lente maestro de la flauta, pedia mayor salario por enseñar
al que hubiese sido enseñado por otro, que si le entrega
sen uno, que nada supiese.
Dos errores hay en esta parte: uno de los que juzgan,
que basta un mediano maestro ; los quales se contentan con
un estómago bueno. 'La qual opinion, aunque reprehen
sible, al cabo se podia tolerar, si estos maestros enseñasen
ménos, que otros, y no lo peor. Otro error, (y aun mas
comun que el primero) es pensar , que los que son mas
consumados en la eloqüencia , no se abaxan á enseñar los
rudimentos ; siendo la causa de esto en unos el fastidio de
descenderá estas menudencias , y en otros el no ser para
ello. Yo ciertamente no tengo por maestro al que no quie
re enseñar estos principios: y digo, que el que sea consu
mado, lo podrá hacer seguramente, si no le falta la volun
tad. Primeramente, porque el que ha llegado á aventajará
otros en esta facultad , es creible, que sepa los medios para
conseguirlo. En segundo lugar, porque el alma de la ense
ñanza es el método; y este ninguno lo tendrá mejor, que
el que es mas consumado. Y últimamente, porque nin
guno puede sobresalir en lo mas , faltándole lo que es
ménos. A no ser, que digamos, que habiendo hecho Fi
dias una estatua de Júpiter, alguno otro la adornaria, me
jor , que él; ó que un orador no ha de saber hablar;
ó finalmente, que el médico de muchísima habilidad no
---------- -------- -- -- - - -

--a -

arte tibiarum ferunt, duplices ab iis quos º ro eum, qui nolit, in numero praecí
alius instituisset, solitum exigere merce pientium non habeo: posse autem maxi
des, quam si rudes traderentur. me , si velit, optimum quemque con
Error tamen estin re duplex: unus, tendo. Primum, quod eum , quieloquen
quod interim suficere illos minores exi tia caeteris praestet, illa quoque per
stimant: et bono sane stomacho contenti quae ad eloquentiam pervenitur, dili
sunt. Quae, quanquam et ipsa reprehen gentissime percepisse credibile est. Dein
sione digna securitas , , tamen esset ut de , quia plurimum in praecipiendo va
cunque tolerabilis, si ejusmodi praecep letratio , quae doctissimo cuique pla
tores minus docerent, non pejus. Alter, nissima est. Postremo, quia nemo sic in
ille etiam frequentior , quod eos, qui majoribus eminet, uteum minora defi
ampliorem dicendi facultatem Sunt con ciant. Nisi forte Jovem quidem Phidias
secuti, non putant ad minora descende optime fecit, illa autem , quae in or
re: idque interim fieri , quia fastidiant namentum operis ejus accedunt, alius
praestare hanc inferioribus curam, inte melius elaborasset: autorator loqui ne
rim , quia omnino non possint, Ego por seiet : aut leviores morbos, curare non
DE M. FAB1o QUINTILIANo. LIB 1.1 79
alcanzará á curar las dolencias pequeñas.
Pero dirá alguno ¿no hay cierto grado de eloqüencia
tan remontada, que excede la capacidad de un niño? No lo
niego: pero el maestro que la tenga, es preciso que sea
prudente, y que se achique, y acomode á la capacidad del
discípulo ; á la manera que un grande andarin, si caminase
con un niño, le daria la mano , acortaria el paso , y no
avanzaria mas de lo que pudiese el compañero. ¿Y qué di
remos de que por lo regular, quanto mas hábil sea el ora
dor, su explicacion ha de ser mas perceptible y clara? Pues
la primera virtud de la eloqüencia es la claridad. Vemos
tambien, que quanto mas limitado es cada uno, tanto mas
intenta el empinarse, y ensalzarse así como los de estatu
ra pequeña se ponen de puntillas, y los de ménos fuerzas
echan mas bravatas. Porque tengo por cierto, que los que
dan en hinchazon, los que tienen el gusto estragado, y los
que afectan delicadeza en el lenguage, ó pronunciacion, y
todos los que adolecen de qualquiera vicio de afectacion, no
tanto pecan por falta de esfuerzo, quanto por falta de fuer
zas : así como los cuerpos no se hinchan por la robustez,
sino por falta de ella, y los que perdiéron el camino de
recho, de ordinario se alejan mas de él. "Y así quanto
mas ruin sea el maestro, eante mas ebeeuro será en la ex
plicacion.
No me he olvidado, haber dicho en el libro primero (don
de hice ver, que era mejor la enseñanza pública , que la
- a
--

poterit medicus praestantissimus. quentiae virtus , , perspícuitas; et quo


Quid ergo? non est quaedam elo quisque ingenio minus valet, hoc se ma
quentia major, quam uteam intellectu gis attollere, et dilatare conatur: ut sta
consequi puerilis infirmitas possit? Ego tura breves in digitos eriguntur, et plu
vero confiteor; sed hunc disertum prae ra infirmi minantur. Nam tumidos, et
ceptorem , prudentem quoque , et non corruptos , et tinnulos, et quocunque
ignarum docendi esse oportebit, sum alio cacozeliae genere peccantes, certüm.
mittentem se ad mensuram discentis: ut habeo non virium, sed infirmitatis vitio
velocissimus quisque , si forte iter cum laborare : ut corpora non robore , sed
parvulo faciat, det manum, et gradum valetudine infantur : et recto itinere
suum minuat, nec procedat ultra quam lapsi, plerumque divertunt. Erit ergo
comes possit. Quid , si plerumque acci obscurior etiam quo quisque deterior.
dit, ut faciliora sint ad intelligendum, Non excidit mihi, scripsisse me in
et lucidiora multo , quae à doctissimo libro priore , cum potiorem in scholis
quoque dicuntur? Nam et prima est elo eruditionem esse, quam domi dicerem,
8o. - INSTITUCIONES ORATORIAS

particular) que echam primeros estudios se animan con


en losiento mas
gusto, y aprov los niños á imitar á sus condis
cípulos, como cosa mas fácil. Algunos entenderán, que lo
que aquí decimos contradice á lo que allí dexamos sentado.
Lo que estoy muy ageno de sentir. Porque uno de los prin
cipales motivos por que conviene entregar el niño al mejor
maestro, es porque los discípulos, que estan mas instruidos,
ó dirán cosas, que puedan servir para la imitacion de los de
mas, ó si en algo yerran, podrán ser al punto corregidos.
Pero si el maestro es limitado, aprobará los defectos, y con
su aprobacion hará, que los demas los abracen. Sea pues tan
consumado en la ciencia, como en las costumbres, para en
señará decir, y hacer á exemplo del Fenicio de Homero.

- -
--—- - - - - - -
-

ibentius se prima studia, tenerosque pro- instituti, aut dicent quod mutile non sít
fectus ad imitationem condiscipulorum, imitari; aut, si quid erraverint, statim
quae facilior esset, erigere. Quod à qui- corrigentur. At indoctus ille, et proba
busdam sic accipi potest, tanquam haec, bit fortasse vitiosa, et placere audienti
quam nunc tueor, sententia priori diver- bus judicio suo coget. Sit ergo tam elo
sa sit. Id á me procul aberit. Namgue quentia , quam moribus praestantissimus,
ea, causa, vel maxima est, cur optimo qui ad Phoenicis Homeri exemplum di
cuique praeceptori sit tradendus puer, cere, ac facere doceat, -

quod apud eum discipuli quoque melius -


DE M. FABIO QUINTILIANO., LIB. II. 8I
i r .
CAPÍTUL o Iv.
QUÁLES DEBEN SER Los PRIMERos EXERCICIos DEL QUE ESTUDIA
* - . RETóRICA. .. . .. . . . .
« - lº o ... . . . o 2. , a -

I. Narraciones históricas. (La facundia en los jóvenes


corregir los defectos de sus composiciones
es laudable..... En
no se debe usar de mucho rigor..... Acostúmbrense dí compo
ner con la enmienda posible) II. Confirmacion, y refutacion
de las narraciones. III. Alabanza, y vituperio de las per
sonas. IV. Lugares comunes, y qüestiones, ó causas par
ticulares.....Reprehéndese a los que trabajan en sus casas es
tos lugares comunes , para usar de ellos, quando la oca
sion lo pida. V. Alabanza, y vituperio de las leyes.

I. Aten comenzaremos á. tratar de la principal obliga


cion de un maestro de retórica, dilatando por un breve tiem
po lo que comunmente se piensa ser el constitutivo de esta
arte. Y lo primero de todo me parece , debe comenzar el
niño por aquellos exercicios , que tienen alguna semejanza
con lo que ya aprendió en la gramática. Y supuesto que
hay tres maneras de narraciones, fuera de la que usamos en

CA P U T IV.

QUAE DEBEANT ESSE PRIMAE APUD RHEToREM ExERcrTATIon Es.

I. Historicae narrationes. (Foecunditar laudanda in adolescentibur..... In emendandir


eorum rcriptis ne sit nimia severitas..... Arruercant rcribere quam poterunt accuratissi
me.) II. Confirmatio , et refutatio narrationum. III. Laur, et vituperatio bominum.
IV. Communes loci , et tberes..... Damnat eos , qui communes locos domi scriptor in
promptu habent , utiis data occarione utantur. V. Legum laur, et vituperatio.

I.Has jam quas primas in docendo, tunus maxime videtur íngressus ab eo,
partes rhetorum putem tradere incipiam: cujus aliquid simile apud grammaticos
dilata parumper illa, quae sola vulgo puer didicerit. Et quia narrationum, ex
vocatur, arte rhetorica. Ac mihi oppor- cepta, qua in causis utimur, tres acci
ToM. I.
82 : INSTITUCIONES ORATORIAS

las causas judiciales : á saber, la poética usada en las trage.


dias, y otros poemas , en la que ni hay verdad , ni aun
sombra de verdad; el argumento, que aunque falso, la co
media le hace ser verosimil; y la histórica, que es la ex
posicion de cosa sucedida ; dexando para los gramáticos la
poética, el retórico debe comenzar por la histórica, que es
de tanta fuerza , quanta es la verdad, en que estriba.
Quando tratemos del género judicial, enseñaremos el mo
do que nos parece mejor de formar la narracion. Entretanto
basta advertir, que esta no debe ser seca, y sin xugo. Se
gun esto ¿para qué tantos estudios, si bastara el contar las
cosas sin aliño, ni adorno de palabras? Ni tampoco debe ser
de cosas superfluas, ni llena de descripciones traidas violen
tamente; vicio en que muchos caen, imitando la licencia poéti
ca. De estos dos defectos mas vale que peque la narracion por
abundancia, que por escasez. La razon es, porque á los ni
ños, ni se les debe pedir, ni esperar de ellos nada perfec
to; y así mas vale, que manifiesten un esfuerzo generoso, y
que á veces discurran, y hablen mas de lo que se les pide.
Ni nos debemos ofender de que en los principiantes haya
algo de redundante. “Y aun quisiera, que los maestros, á
la manera de las amas de leche, traten á los entendimien
tos tiernos con algo mas de regalo, digamos así; y no lle
ven á mal el hartarlos de leche de una enseñanza gustosa.
----- - º**** - ------------ -

-r --

pimus species : fabulam , quae versatur tas indicare satis videretur?) nee rursus
in tragoediis, atque carminibus, non à sinuosa, et accersitis descriptionibus, in
veritate modo, sed etiam a forma veri quas plerique imitatione poeticae licen
tatis remotam ; argumentum, quod fal tiae ducuntur, lasciva. Vitium utrum
sum , sed vero simile comoediae fin que: pejus tamen illud, quod ex inopia,
gunt, historiann , in qua est gestae rei quam quod ex copia venit. Nam in pue-.
expositio. Crammaticis autem poeticas ris oratio perfecta, nec exigi, nec spe
dedimus: apud rhetorem initium sit hi , rari potest : melior autem est indoles
storia , tanto robustior, quanto verior, ... laeta, generosique conatus, et vel, plu-,
Sed narrandi quidem, quae nobiso ra justo concipiens interim spiritus. Nec
ptima ratio videatur , demonstrabimus, unquam me in his discentis annis ofen
cum de judiciali parte dicemus. Interim dat, si quid superfuerit. Quin ipsis do
admonere illud satis est, ut sit ea, ne ctoribus hoc esse curae velim , ut tene
que arida prorsus, atoue jejuna : (nam ras adhuc mentes more nutricum mol
quid opus erat tantum studiis laborem lius alant, et satiari veluti quodam ju
impendere, si res nudas, atque inorna cundioris disciplinae lacte patiantur. Erit
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 83
Pues este cuerpo grueso, y lleno, vendrá despues con la
edad á quedar enjuto: y de aquí proviene el vigor. Por el
contrario un niño de miembros delicadamente formados, ya
para adelante pronostica flaqueza, y debilidad. Atrévase á
mucho esta primera edad , invente, y alégrese de lo que
haya inventado ; aunque sean cosas de poco vigor, y subs
tancia. Para la lozanía hay remedio, mas no para la este
rilidad. Pocas esperanzas podremos fundar en un niño, á cu
yo ingenio se anticipa el juicio." La materia, en que se
exercite, ante todas cosas ofrezca mucho campo, y aun mas
de lo justo: pues los años, y la razon quitarán mucho de
lo superfluo, y aun con la misma experiencia lo irán per
diendo, siempre que haya de donde quitar, y desbastar. A
la manera que el buril podrá profundizar, y tendrá donde
cebarse, si la lámina no es delgada en demasía. Nadie extra
ñará lo que dígo, si ha leido lo que dice Ciceron: Quiero
que en los jóvenes se descubra la afluencia. Por donde debe
huirse tanto de un maestro sin palabras , y sin explicacion,
quanto de un terreno seco, y árido para las plantas tiernas.
De aquí resulta, que los discípulos son de ingenios apo
cados, y rastreros, no atreviéndose á levantar el estilo sobre
el lenguage vulgar. Estos la flaqueza la tienen por salud, y
la debilidad por juicio; dando en el vicio , quando piensan
estar agenos de él, pues carecen de lo que es virtud. Yo
no gusto de frutos muy anticipados, ni del mosto, que y
- C. - -ss... º C, 2 . . ) - - -a

--- rez - = * -- = - es ---

illud plenius interim corpus, quod mox tem , si non ab initio tenuem nimium
adulta aetas adstringat. Hinespes robo laminam duxerimús, et quam caelatura
ris. Maciem nam que, et infirmitatem in altior rumpat. Quod me de hís aetatibus
posterum minari solet protinus omnibus sentire nemo mirabitur, qui apud Cice
membris expressus infans. Audeathaec ronem legerit : Volo enim se efferat ine
aetas plura, et inveniat, et inventis gau adolescente roecanditas. Quapropter in pri
deat, sint licetilla non satis interim sic mis evitandus, et in pueris praecipue,
car, et severa. Facile remedium estuber magister afidus, non minus quam tene
tatis: sterilia nullo labore vincuntur, Il risádhüe plantis siecum, et sine humo
la mihi in pueris natura minimum spei re ullo solum. Inde fiunt humiles statim,
dabit, in qua ingenium judicio praesu et velut terram spectantes, qui nihil su
mitur. Materiam esse primum volo, vel pra quotidianum sermonem attollere au
abundantiorem, atque ultra, quam opor deant. Macies illis pro sanitate, et judi
teat fusam. Multum inde decoquent an cii loco infirmitas est: et dum satis pu
ni , multum ratio limabít, aliquid ve tant vitio carere , in idipsum incidunt
lut usu ipso deteretur : sit modo unde vitium, quod virtutibus carent. Quare
excidi possit, et quod exculpi, Erit au mihi ne maturitas quidem ipsa festinet,
L2
84 a INSTITUCIONES ORATORIAS

en el mismo lagar comienza á tomar sabor de vino : todo


esto el tiempo lo ha de ir sazonando.
Cosa es tambien que merece tenerse presente, el que
los niños desmayan, quando nada se les disimula: porque se
desalientan, sienten el estudio, y por último le cobran abor
recimiento, y lo que es peor, temiéndose, de todo, á nada
se atreven. ¿ aun la gente del campo lo sabe : pues á los
arbolitos pequeños no les arriman la podadera, porque en
cierto modo tienen horror al hierro, cuya herida no tienen
fuerzas para, sufrir, Debe pues el maestro exercer su oficio
con agrado, suavizando el trabajo , que por sí mismo es
desagradable : alabe algunas cosas, pase por alto otras, ó en
miéndelas, dando la razon de hacerlo así; y poniendo alguna
cosa de su casa, lústrelos. A veces no dañará, que él mismo
les dicte lo que ha compuesto él, para que el discípulo lo
imite, y lo aprecie, como si fuera parto suyo. Pero si éste hi
ciere una composicion tan mala, que no admite enmienda,
me ha enseñado la experiencia, que es útil el echarles la
misma materia, y asunto ilustrado por el maestro, para que
lo trabajen de nuevo, diciéndoles, que pueden hacer otra
cosa mejor; porque ninguna cosa alienta mas en los estudios,
que la esperanza. A los adultos trátelos de otra manera,
de los que á proporcion de la edad, y fuerzas, exigirá
cosas mayores, y les corregirá sus obras. Quando mis dis-,
cípulos usaban de pensamientos atrevidos, ó de estilo de
masiado brillante, solia decirles, que lo alababa por entón
------ ez-aez- ve-------
l

- , "-" "- a- . . . . 3: v ro . c: no y ori ... ,, , ,, i


nec musta in lacu statim austera sint: sic reddita curid fiat ratione: illuminare, e
et annos ferent, et vetustate proficient. interponendo aliquid sui. Nonnunquam
Ne illud quidem, quod admoneamus hoc quoque erit utile, totas ipsum di-;
indignum est, ingenia puerorum mimia , ctare materias, quas, et imitetur puer, et
interim emendationis severitate deficere., interim tanquam suas amet., At si tam .
Nam et desperant, et dolent, etapoyisºrt negligenseistylus fuerit, utemendatio-b
sime, oderunt: et, quod, maxime nocets, nem non recipiat, expertus, sum prodes- o
dum omnia timent, nihil conantur, Quod. se, quoties eandem materiam rursus à me
etiam rusticis notum est, qui frondibus. tractatam scribere, de integro juberem: ,
teneris non putant adhibendam esse fal-, posse enim eum adhuc melius; quatenus
cem , quia reformidare ferrum viden nullo magis studia, quam spegaudent.
tur, et cicatricem, mondum pati posse. , Aliter autem alia aetas emendanda, est,
Jucundus ergo, tum maxime debet esse , et pro modo virium , exigendum, et cor
praeceptor, ut quae alioqui natura sunt rigendum opus, Solebam ego dicere pue--
aspera , molli manu leniantur : laudare ris aliquid ausis licentius , aut laetius,
aliqua , ferre quaedam , mutare etiam, laudare illud me adhuc; venturum tem
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 85
ces, pero que vendria tiempo, en que no pasaria por ello.
De este modo se alegraban de las producciones de su inge
nio, y no quedaban e de su propio juicio.
Pero para volver al propósito, quiero que las narracio
nes se trabajen con el esmero posible. Porque así como al
principio quando aprenden á hablar, es útil á los niños, para
adquirir facilidad en el lenguage, el referir lo que oyéron,
y obligarlos á repetir la misma relacion, ya retrocediendo
desde el medio hasta el principio, ya continuando hasta el
fin ; pero esto será, miéntras son niños, y van uniendo las pa
labras, y no pueden mas que afirmar la memoria; así quail
do ya supieren bien hablar, el charlar de repente de todo,
el hablar sin reflexion, sin dar lugar á levantarse, solo me
recerá nombre de charlatanería. "De aquí nace el gozo de
los padres necios, é ignorantes; y, en los hijos la aversion al
trabajo , y el descaro, que adquieren juntamente con la
costumbre de hablar mal, el exercitarse en cosas malas, y
por último la arrogancia, con que presumen de sí, y que
por lo comun impide el aprovechar en cosas de importan
cia. Ya vendrá tiempo, en que adquieran facilidad en hablar,
y de esto trataremos muy de yeras. Entretanto baste el que
el discípulo componga con todo cuidado, y esmero, en quan
to lo permite su edad, alguna cosa, que merezca alabanza,
exercitándose en esto hasta adquirir hábito. Por último po
º - c. - a 1.
... --- -
= -sama

** --º º ** - = -- s- = ----- --.

pus, quo idem non permitterem. Ita et tionis accipient, extemporalis garrulitas,
ingepio gaudebant, et judicio non falle nec expectata cogitatio, et vix surgendi
bantur. mora, circulatoriae vere jactationis est.
Sed uteo revertar, unde sum egres Hinc parentum imperitorum iname gau
sus , narrationes stylo componi, quanta dium ; ipsis vero contemptus operis, et
maxima possit, adhibita diligentia, volo. inverecunda frons , et consuetudo pes
Nam ut primo , cum sermo instituitur, sime dicendi, et malorum exercitatio, et
dicere quae audierint utile est pueris ad quae magnos quoque profectus frequen
loquendi, facultatem ; ideoque et retro ter perdidit, arrogans de se persuasio
agere expositionem, et à media in utram innascitur. Erit suum parandae facultati
que partem discurrere sane merito co tempus, neque à nobis negligenter locus
gantur, sed ad praeceptoris gremium, iste transibitur. Interim satis est, si puer
et dum aliud non possunt, et dum res, omni cura, et Summo (quantum aetas
ac verbá connectere incipiunt, ut proti illa capit) labore aliquid probabile scri
nus memoriam firment: ita cum jam pserit: in hocassuescat, hujus rei natu
formam rectae, atque emendatae ora ram sibi faciat, Ille demum in id, quod
86 INSTITUCIONES ORATORIAS

drá de este modo proporcionarse para el fin que intentamos,


cuidando mas de hablar bien, que pronto.
II. No será inútil añadir á las narraciones su comproba
cion, y destruccion, que los ¿
llaman confirmacion, y
refutacion ; y no solamente á las fabulosas, y poéticas, sino
tambien á las que contienen algun hecho histórico. Por exemplo,
servirá de grande materia para discurrir, el proponer la duda
de si es creible, que estando peleando Valerio, se sentó so
bre su cabeza un cuervo, que con las alas hería el rostro,
y los ojos del frances enemigo : del mismo modo sobre la
serpiente, que dicen crió á Escipion; sobre la loba de Ró.
mulo, y la ninfa de Numa Pompilio. Porque los historiado
res griegos fingen casi tanto, como los poetas. Muchas ve
ces se disputa del tiempo, y del lugar, donde acaeció la
cosa ; y aun de las mismas personas, como vemos que T. Li
vio duda de algunas si existiéron ; y otros historiadores dis
cuerdan sobre las circunstancías. -

III. Despues de este exercicio, irá poco á poco pasando


á cosas mayores; como por exemplo: alabar á los hombres
esclarecidos, y afear á los malos, lo que acarrea grande uti
lidad : porque ademas de ofrecer abundante materia para
exercitar el ingenio, se va formando el ánimo, contemplando
la diferencia entre la virtud, y el vicio, y se adquieren mu
chos conocimientos, y acopio de exemplos, que á su tiempo
han de servir de mucho; como que son muy eficaces para mo
ver en todos los géneros de causas. Aquí tambien pertenece
El

uaerimus, aut ei proximum, poterit eva Numae. Nam graecis historiis plerum
¿ , qui ante discet recte dicere, quam. que poeticae similis est licentia. Saepe
cito. ". etiam quaeri solet de tempore, de loco,
II. Narrationibus non ínutiliter sub quo gesta res dicitur. Nonnunquam de
jungitur opus destruendi, confirmandi persona quoque, sicut Livius frequentis
que eas, quod a varon ovu y caraakºv y sime dubitat; et alii ab aliis historici
vocatur. Id porro non tantum in fabulo dissentiunt.
sis, et carmine traditis fieri potest, ve III. Inde paulatim ad majora tendere
rum etiam in ipsis anmalium monimen incipiet, laudare claros viros, et vitu
tis: ut si quaeratur, an sit credibile su perare improbos: quod non simplicis u
per caput Valerií pugnantis sedisse, cor tilitatis opus est. Namque, et ingenium
vum, qui os, oculosque hostis Galli ro exercetur multiplici, variaque materia,
stro, atque alis everberaret, sit in u et animus contemplatione recti, pravi
tramoue partem ingens ad dicendum ma que formatur, et multa inde cognitio re
teria ; ut de serpente quo Scipio tradi rum venit: exemplisque, quae sunt in
tur genitus, et lupa Romuli, et Aegeria omni genere causarum potentissima, jam
DE M. FABIO QUINTILIANo. LIB. II. 87
el comparar unos sugetos con otros: pues aunque esto se
funda en una misma razon, con todo eso ofrece mayor cam
po, y no solo se trata de la naturaleza de las virtudes, y vi
cios, sino del modo. Pero ya á su tiempo trataremos del órden
de estas alabanzas, ó vituperios: pues esto toca á la terce
ra parte de la retórica, - º *

IV. Tambien los lugares comunes (hablo de aquellos,


que sin nombrar sugetos, tienen por objeto afear el vicio,
como declamar contra el adúltero, el tahur, el desvergonza
do) pertenecen á la esencia de las causas judiciales: pues si
recaen sobre persona determinada, son acusaciones perfectas.
Bien es verdad, que á veces solemos descenderá especies de
terminadas, como si se finge un adúltero ciego, un tahur po.
bre, un desvergonzado anciano. A veces á estas acusaciones
se les añade su defensa: pues solemos defender al luxurioso,
y al entregado al amor; y á veces al rufian, y al truan se
le hace su defensa, no defendiendo la persona , sino discul
pando el delito.
s. Las qüestiones tomadas de la comparacion de las cosas;
por exemplo: Si es mejor vivir en la aldea, que en la ciu
dad ; si la profesion del abogado es mejor que la de la mi
licia, dan abundante , y hermoso campo para exercitar el
ingenio, y ayudan mucho para los géneros demostrativo, de
liberativo, y judicial. Así vemos, que Ciceron en la oracion
en defensa de Murena trata muy á la larga del último de

fuminstruitur, cum res poscet, usurus. tractatu ad quasdam deduci species so


Hincilla quoque exercitatio subit com lent, ut si ponatur adulter caecus, alea
parationis, uter melior, uterve deterior, tor pauper, petulans senex. Habent autem
quae, quanquam versatur in ratione simi nonnunquam etiam defensionem. Nam,
li, tamen et duplicat materiam, et vir et pro luxuria, et pro amore dicimus; et
tutum, vitiorumque, non tantum natu leno interim, parasitusque defenditur: sic
ram, sed etiam modum tractat. Verum ut non homini patrocinemur, sed crimini.
de ordine laudis , contraque, quoniam Theses autem, quae sumuntur ex re
tertia haec rhetorices pars est, praeci rum comparatione, ut rusticana vita, an
piemus suo tempore. urbana potior; jurisperiti, an militaris
IV. Et communes loci (de iis loquor, viri laus major, mire suntad exercita
quibus citra personas in ipsa vitia moris tionem dicendi speciosae , atque uberes:
est perorare, ut in adulterum , aleato quae vel ad suadendi oficium , vel et
rem, petulantem) ex mediis sunt judi iam ad judicium , disceptationemque ju
clis: et, si reum adjicias, accusationes. vant plurimum. Nam posterior ex prae
Quanquam hi quoque ab illo generali dictis locus in causa Murenae copiosis
88 ... , , INSTITUCIONES ORATORIAS

estos lugares. Tambien miran al género deliberativo las qües


tiones: de si el hombre debe casarse; y, si deben pretender
se los empleos : y si entra en ellas alguna persona, serán ora
ciones completas del género deliberativo.
Solian mis maestros exercitarnos con no poca utilidad, y
contento nuestro en causas de mera congetura, mandándonos
exáminar, y tratar: v.g. ¿porqué causa los lacedemonios pin
taban armada a Venus ? y ¿qué motivo pudo haber, para
pintar d Cupido en figura de niño alado, con saetas, y tea .
en la mano? y otras qüestiones á este tenor, en las quales
indagábamos la intencion de los inventores : de todo lo qual
se hace freqüente uso en las causas particulares , y puede
llamarse una especie de chria.
Porque aquellos lugares, de si siempre se ha de es
tar al dicho de los testigos; y en las pruebas, si las débiles
tienen, ó no fuerza, es cosa tan llana, que miran á las cau
sas forenses, que algunos abogados de buena nota no solo los
tratáron, y aprendiéron con mucho cuidado, sino que quan
do se les ofrecia una causa de pronto, los engastaban, é in
sertaban enteros en sus discursos. Con lo qual ciertamente
(pues quiero exponer mi sentir) me parece, que daban á
entender su pobreza grande de talento. Porque ¿qué podrán
los tales inventar de nuevo en las causas, donde la una no se
parece á la otra ? ¿cómo podrán responder á las objeciones

-- ser -,

sime à Cicerone tractatur. Sunt et illae Nam locos quidem , quales sunt de
paene totae ad deliberativum pertinen testibus, semperne his credendum ; et de
tes genus, ducendane uxor, petendine argumentis, an habenda etiam parvis fi
magistratus. Namque hae, personis mo des: adeo manifestum est, ad forenses a
do adjectis, suasoriae erunt. ctiones pertinere, ut quidam, mec igno
Solebant praeceptores mei, neque in biles in oficiis civilibus , scriptos eos,
utili, et nobis etiam jucundo genere e memoriaeque diligentissime mandatos,
xercitationis, praeparare nos conjectura in promptu habuerint: ut, quoties esset
libus causis, cum quaerere, atque exe occasio , extemporales eorum dictiones
qui juberent, cur armata apud lacedae his velut emblematis exornarentur. Quo
monios Venus; et, quid ita crederetur Cu den(mec enim ejus rei judicium . dif
pido puer, ac volucer, et sagittis, ac fa erre sustineo) summam videbantur mi
ce armatus, et similia : in quibus scru hi infirmitatem de se confiteri. Nam,
tabamur voluntatem , cujus in controver. quid hi possint in causis, quarum varia,
siis, frequens quaestio est; quod genus ac nova semper est facies, proprium in
chriae videri potest. - venire, quomodo propositis ex parte di
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. II. 89
de los contrarios, ocurrir de pronto á las razones que ale
gan contra nuestra causa, y preguntar á los testigos, quando
en cosas tan trilladas, y que son comunes á todas las causas,
no saben tratar un asunto tan quotidiano, sino llevando de
antemano estudiado el papel? Los tales preciso es, que, ó
fastidien, no ménos que las comidas frias, y estadizas (pues
en causas distintas tendrán que repetir la misma cancion ) ó
que ellos mismos se sonrojen, al ver que los oyentes siem
pre les oyen unas mismas ideas, empleadas en diversos usos,
como hacen los pobres ambiciosos. Fuera de que por mara
villa habrá lugar tan comun, que quadre á todas las causas,
que ocurren, si por otra, parte no tiene parentesco con la
qüestion en que se funda ; sin que se eche de ver, que
es una cosa postiza; ó porque es de distinto paño, que todo
lo demas, ó porque por lo comun no se usa donde convie
ne.” Así vemos, que algunos para aumentar los conceptos
de su oracion, traen como arrastrados varios lugares expli
cados con mucho rodeo de palabras; siendo así, que las sen
tencias deben nacer de las entrañas de la causa; y solamente
quando nacen de ella son útiles, y dan hermosura á la ora
cion. Ademas de esto, la elocucion , quando no se encamina
á triunfar de los oyentes, por mas bellezas que tenga, es
enteramente inútil, y á veces nociva. Pero basta de di
greson.
V. La alabanza, y vituperio de las leyes necesita de ma
".

-
.

versa respondere, altercationibus veloci- vinculo copulatus ; appareatque eum,


ter occurrere, testem rogare, qui etiara non tam , insertum , quam applicitum,
in iis, quae sunt communia, et in pluri vel quod, dissimilis est caeteris , vel
mis causis tractantur, vulgatissimos sen quod plerumque assumi etiam parum
sus verbis, nisitanto ante praeparatis pro apte solet, non quia desideratur, sed
sequi nequeant? Necesse esthis, cum ea quia paratus est: ut quidam sententia
dem judiciis pluribus dicunt, aut fasti rum gratia, verbosissimos locos arcessunt,
dium moveant, velut frigidi, et repositi cum ex locis debeat nasci sententia. Ita
cibi; aut pudorem deprehensa toties au sunt autem speciosa haec, et utilia , si
dientium memoria infelix supellex, quae oriuntur ex causa. Caeterum quamlibet
sicut apud pauperes ambitiosos , pluri pulcra locutio, nisi ad victoriam tendit,
bus, et diversis oficiis conteratur: cum utique supervacua, sed interim etiam con
eo quidem, quod vix ullus est tam com traria est. Verum hactenus evagari satis
munis locus , qui possit cohaerere cum fuerit.
causa, nisi aliquo propriae quaestionis V. Legum laus, et vituperatio jarn
TOM.
N

9o INSTITUCIONES ORATORIAS

yores fuerzas, como que es obra de las mas dificiles.


Los antiguos exercitáron en esto la facultad del decir, pe
ro tomaban de los dialécticos el modo de argumentar: pues
sabemos, que entre los griegos solo en tiempo de Deme
trio Falereo se introduxo proponer diversos asuntos fingi
dos á imitacion de las causas forenses. Pero no tengo bas
tante averiguado, si éste fué el primero que inventó esta
manera de exercicio , como he dicho en otro libro : pues
los que defienden esto con mas empeño, no se fundan en au
toridad de bastante fuerza. Por lo que mira á los latinos,
dice Ciceron, que los primeros maestros de eloqüencia vi
viéron en los últimos tiempos de Craso, y que entre ellos
Plocio rayó mas que ninguno.

majores, ac prope summis operibus suf ab ipso id genus exercitationis sit inven
fecturas vires desiderant... tum (ut alio quoque libro sum confes
His fere veteres facultatem dicendi sus) parum comperi: sed ne ii quidem,
exercuerunt, assumpta tamen à dialecti qui hoc fortissime affirmant, ullo satis
cis argumentandi ratione. Nam fictas ad idoneo auctore nituntur. Latinos vero di
imitationem fori, consiliorumque mate cendi praeceptores extremis L. Crassi
rias apud graecos dicere, circa Deme temporibus coepisse , Cicero auctor est:
trium Phalerea institutum fere constat. An quorum insignis maxime Plotius fuit,

«.
DE M. FABio quINTILIANo. Lib, Ir. 9r

CAPÍTULO V.

QUÉ oRADoREs, É HISTORIADoREs sE DEBEN LEER EN LAs


, ESCUELAS DE RETóRICA.

I. El maestro de retórica instruya á sus discípulos en la


historia , y en la leccion de los oradores. II. Cuide sobre
todo de manifestar sus virtudes , y aun sus vicios. III. A.
guna vez propóngales alguna oracion viciosa. IV. Haga
los freqüentes preguntas. V. Este último exercicio aprove
chará mas que todo.

I. D. las declamaciones hablaremos despues : pero su


puesto que aun no hemos pasado de los primeros rudimentos,
parece debo advertir, quánto aprovechará el maestro á sus
discípulos, si (á la manera que en la gramática se instru
yéron en la traduccion de los poetas) los impone en la
leccion de los historiadores, y mucho mas de los oradores,
como yo lo he practicado con algunos, cuya edad lo exigia,
y cuyos padres lo tenían por conducente. Pero estando ya
en estado de conocer lo mejor, ocurriéron dos cosas, que me
lo disuadiéron: la primera, que la larga costumbre de enseñar
,

CAPU T. V.

DE LECTIONE ORATORUM , ET HISTORICORUM APUD RHETOREM,

I. Rhetor discipulos ruos historiae, et orationum lectione instruat. II. In id prae


Jertim incumbat, ut virtutes demonstret, aliquando etiam vitia. III. Legat iis in
terdum vitiosas orationes. IV. Frequenter eos interroget. V. Ejusmodi exercitationem.
plus omnibus praeceptis prodes re.

I. Sea de ratione declamandi post quoque historiae, atque etiam magis o-,
paulo: interim quia prima rhetorices ru rationum lectione susceptos à se disci
dimenta tractamus , non omittendum vi pulos instruxerit : quod nos in paucis,
detur id quoque , ut moneam, quantum quorum id aetas exigebat , et parentes
sit collaturus ad profectum discentium utile esse crediderant, servavimus. Cae
rhetor, si, quemadmodum à grammaticis terum sentientibus jam tum optima, duae
exigitur poetarum enarratio, ita ipse res impedimento fuerunt: quod, et longº
M 2
92. INSTITUCIONES ORATORIAS

les por distinto método, se hizo ley; y no necesitando es


te trabajo, quando ya eran hombres hechos, seguian mas
los exemplos, que yo les habia puesto delante, que los de
los escritores. "Ni yo tampoco tenia reparo en enseñarles
mis conocimientos, si es que á fuerza de tiempo habia in
ventado algo de nuevo. Y ahora me acuerdo, que aun los
griegos practican lo mismo, pero por medio de los pasan
tes; porque, si en todo quanto lee cada uno de los discí
pulos les hubiera de guiar el maestro por sí mismo, no le al
canzaba el tiempo. -

II. Y ciertamente que la leccion de los autores, que no


tiene otro fin, que el que los discípulos, que acompañan con
la vista al maestro, que los explica, aprendan distintamente,
y con facilidad sus escritos, notando aquellos términos, que
ménos ocurren, es mucho ménos de lo que pide la obliga
cion de un maestro de eloqüencia. Pero es oficio suyo, y pe
culiar de su profesion, el notar las virtudes de los autores,
y aun los vicios, si ocurre alguno: esto tanto mas, quan
to no exijo de ellos el que expliquen precisamente aquellos
libros, que quiere el discipulo, como si éste fuera tan niño,
que tomándole en sus brazos, deba condescender con lo que
uiere. "Porque á mí me parece mas fácil, y mas útil el
método de que, callando todos los discípulos , uno de ellos
(pues deberán ir turnando) lea para todos el autor; y de
este modo se acostumbre á una buena pronunciacion: esto
hecho, y desentrañado el argumento del razonamiento, que

consuetudo aliter docendifecerat legem, rhetoris officium existimanda est. At de


et robustifere juvenes , nec hunc labo monstrare virtutes , vel, si quando ita
rem desiderantes, exemplum mostrum se incidat, vitia , id professionis ejus , at
quebantur. Nectamen, etiam si quid no que promissi, qui Se magistrum elo
vi, vel sero invenissem, praecipere in quentiae pollicetur , maxime proprium
posterum puderet. Nunc vero scio, id fie— est: eo quidem validius, quod non uti
ri apud graecos, sed magis per adjuto que hune laborem docentium postulo, ut
res: quia non videntur tempora sufie ad gremium revocatis, cujus quisque eo
ctura , si legentibus singulis praeire Sem rum velit libri lectioni deserviant. Nam.
per ipsi velint. mihi cum facilius, tum etiam multo ma
I, Ethercle praelectio, quae in hoc gis videtur utile , facto silentio, unum
adhibetur, ut facile, atque distincte pue aliquem (quod ipsum imperari per vices
ri scripta oculis sequantur , etiam illa, optimum est) constituere lectorem , ut pro
quae vin, cujusque verbi, si quod minus tinus pronuntiationi quoque assuescant;
ustatum incidat, docet, multum infra tum exposita causa, in quam Scripta le
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. II. 93
se ha leido (porque de este modo se entenderá mejor la doc
trina del maestro) no se omitirá nada, que no se advierta, ya
perteneciente á la invencion , ya á la elocucion; cómo se con
cilia el orador en el exordio la benevolencia de los jueces;
la claridad, brevedad, y probabilidad de la narracion; qué
intenta en su oracion, y los disimulados medios para conse
guirlo (pues todo el artificio retórico consiste en disimu
larle ); ademas de esto con quánta prudencia, y economía
divide su asunto; la sutileza, y copia de argumentaciones, y
el nervio que tienen ; la suavidad en ganarse los ánimos; la
aspereza en reprehender, y la gracia en los chistes; cómo
triunia de los afectos del auditorio , insinuándose , y mo
viendo en los ánimos de los jueces la pasion , que preten
de. En el estilo qué palabras , y expresiones son propias,
adornadas, y sublimes; quándo es loable la amplificacion, y
qué vicios se le oponen ; la belleza en los tropos; las figu
ras de palabra; la dulzura, rotundidad, y vigor en los pe
riodos. -

III. Alguna vez tambien aprovechará leer en presencia


de los discipulos algunas oraciones defectuosas, y sin arte,
que andan escritas, y tienen muchos patronos de mal gusto:
en ellas se les hará notar su impropiedad, obscuridad, hin
chazon, baxeza de pensamientos, y aun otras cosas feas de
decirse, lascivas, y afeminadas; las quales, no solamente hay
infinitos, que las aprueban, sino que (lo que es aun mucho
msnmem- -

getur oratio , (nam sic clarius quae di mumque judicum similem iis, quae di
centur intelligi poterunt) nihil otio cit, eficiat. Tum in ratione eloquendi
sum pati ; quodque in inventione, quod verbum proprium , ornatum , su
quodque in elocutione annctandum erit; bime 3 ubi amplificatio laudanda, que
quae in prooemio conciliandi judi- / Virtus ei contraria; quid speciose trans
cis ratio , quae narrandi lux, brevi latum ; quae figura verborum; quae le
tas , fides , quod aliquando consilium, nis , et quadrata , virilis tamen com
et quam occulta calliditas (nam que ea positio. -

sola in hoc ars est, quae intelligi misi III. Neid quidem inutile, etiam cor
ab artifice non possit) ; quanta deinceps ruptas aliquando , et vitiosas orationes,
in dividendo prudentia , quan subtilis, quastamen plerique judiciorum pravi
et crebra argumentatio, quibus viribus tºte mirantur, legi palam pueris, osten
inspiret, , qua, jucunditate permulceat, dique in his, quam multa impropria,
quanta in maledictis asperitas , in jocis obscura, tumida, humilia, sordida, la
urbanitas; ut denique dominetur in afe Sciva , efieminata sint: quae non au—.
ctibus, atque in pectora irrumpat, ani dantur modo a plerisque, sed (quod pe-.
94 INSTITUCIONES ORATORIAS
I,

peor) las aprueban por el mismo hecho de ser malas.


Les parece á los tales, que lo que está segun arte , y no
tiene nada de extravagante, no tiene nada de ingenioso;
y nos admiramos , como de cosa exquisita, de lo que va
fuera de lo regular , aunque defectuoso: á la manera que
á algunos les parecen mejor los cuerpos contrahechos , y
notables por su deformidad, que los bien proporcionados: y
tambien hay algunos, que prendados de la apariencia, pien
san, que el arrancarse el vello de las megillas, el atusarse, y
enrizar con el hierro, y fuego el cabello reluciente con el
color artificial, da mas gracia al hombre, que una hermosura
natural
de modas: dando á entender, que la belleza del cuerpo
perniciosas. N nace
IV. El maestro no solamente deberá enseñar todo lo di
cho, sino preguntar á menudo á los discípulos, para calar
su ingenio. De este modo no se fiarán para no atender, ni
lo que se explica, les entrará por un oido, y les saldrá por
otro: con lo que á un mismo tiempo se moverán á inventar
algo por sí mismos, y á entender; que es el fin que preten
demos. Porque ¿qué intentamos con enseñarlos, sino que no
haya que enseñarlos siempre. - -

X. Este cuidado del maestro , me atrevo á decir , que


aprovecha mas, que quantas reglas dan los artes de retórica,
aunque éstas ayudan mucho: pero ¿quién podrá comprehen
der quánto abarcan todos los géneros de causas, que se ori
EEEE

jus est) propter hoc ipsum , quod sunt poris venire videatur ex malis moribus.
prava, laudantur. Nann sermo rectus, et IV. Nec solum haec ipse debebit do
secundum naturam enuntiatus, nihil ha cere praeceptor, sed frequenter interro
bere ex ingenio videtur. Illa yero, quae gare, et judicium discipulorum experi
utcunque deflexa sunt, tanquam exqui ri. Sic audientibus securitas aberit, nec
sitiora miramur: non aliter, quam di quae dicentur, perfluent aures , simul
stortis, et quocunque modo prodigiosis que ad id perducentur , quod ex hoc
corporibus apud quosdam majus est pre quaeritur, ut inveniant, et ipsi intelli
tium, quam iis, quae nihil ex commu gant. Nam quid aliud agimus docendo
nis habitus bonis perdiderunt; atque et eos, quam ne semper docendi sint?
iam, qui specie capiuntur , vulsis , le V. Hoc diligentiae genus ausim di
vigatis, et inustas comas acu comen cere plus collaturum discentibus, quam.
tibus, et non suo colore nitidis , plus omnes omnium artes , quae juvantsine
esse formae putant, quam possit tribue dubio multum : sed latiore quadam com
re incorrupta natura : ut pulcritudo cor prehensione , per omnes quidem species
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. II. 95
ginan casi todos los dias? Por exemplo en la milicia: aunque
tiene sus preceptos generales, con todo eso aprovecha mu
cho mas el saber de qué medios se valiéron los buenos capi
tanes en ciertos lances, ó lugares, porque en todas las cosas
por lo comun mas aprovecha la experiencia, que el arte. ¿Por
ventura, se ha de poner á declamar el maestro para servir de
exemplo á sus discípulos? ¿No les aprovechará mucho mas
la leccion de Ciceron, y Demóstenes ? ¿Si el discípulo yerra
algo en la declamacion, se le ha de corregir delante de to
dos ? ¿No será mejor enmendar toda una " oracion , y
cosa ménos enojosa? porque todos queremos mas, que se
corrijan los vicios agenos, que los nuestros. Mucho mas te
nia que advertir, pero la utilidad de esto es notoria á todos.
Ojalá que, así como no desagradará el saberlo, no haya pe
reza para practicarlo

rerum quotidie paene nascentium ire, qui rint lecti Cicero, ac Demosthenes? Cor—
possunt? Sicut de re militari, quanquam rigetur palam , si quid in declamando
sunt tradita quaedam praecepta commu discipulus erraverit? non potentius erit
nia , magis tamen proderit scire , qua emendare orationem? quin imo etiam
ducum quisque ratione , in quali loco, jucundius. Aliena enim quisque vitia re
tempore sit usus sapienter , aut contra. prehendimavult quam sua. Nec deerant
Nam in omnibus fere minus valent prae Plura, quae dicerem, sed neminem haec
cepta, quam experimenta. An vero de utilitas fugit: atque utinam , tam non
clamabit quidem praeceptor, ut sit exem pigeat facere istud , quam non displi
plo suis auditoribus ? non plus contule cebit!
96 INSTITUCIONES oRATORIAs

CAPÍTUL O V I.
QUÉ EsCRIToREs SE HAN DE LEER PRIMERO,

I. Desde el principio , y siempre han de leer los me


jores autores. II. Se ha de cuidar de que los niños no se
entreguen con demasía a la leccion de los muy antiguos, ó
muy modernos,

I. S se logra lo que llevamos dicho, no habrá dificultad


en determinar, qué suerte de libros deben leer los princi
Piantes. Porque algunos encomendáron los mas llanos, y tri
viales por ser de mas fácil inteligencia : otros, aquellos de es
tilo florido, como mas acomodados á fomentar el ingenio en
la primera edad. Yo soy de opinion, que desde el principio,
y siempre deben leerse los mejores, con tal que sean de la
mayor pureza , y claridad *: y así conviene, que los niños
lean mejor á Livio, que á Salustio; pues su historia es mas
larga ; pero es menester para entenderle, estar ya algo ade
lantado. Ciceron, segun entiendo, es bastante llano, y gus
toso, aun para los principiantes y no solamente pueden
===-s

CAP U T V I,

QUI PRIMI SCRIPTORES LEGENDI.

1. Legendor statim, et semper optimor auctores, II. Cavendum ne pueri , vel an


tiquioribus, vel recentioribus nimium se dedant,

I. uod si potuerit obtineri, non ita per, sed tamen eorum candidissimum
difficilis supererit quaestio, qui quemque, et maxime expositum velim;
legendi sint incipientibus. Nam quidam ut Livium à pueris magis quam Sallu
illos minores, quia facilior eorum intel stium : et hic historiae majoris est au
lectus videbatur, probaverunt: alii flo ctor: ad quem tamen intelligendum jaml
ridius genus , ut ad alenda primarum profectu opus sit. Cicero, ut nihi qui
aetatum ingenia magis accomodatum. dem videtur, et jucundus incipientibus
Ego optimos quidem, et statim , et semi quoque, et apertus est satis; nec pro
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 97
aprovechar, sino aficionarse á él, al paso que (como dice
Livio ) cada qual sea semejante á él.
II. De dos cosas deben guardarse muchísimo los niños,
segun mi juicio. La primera es, no sea que alguno, admirán
dose demasiado de lo antiguo, quiera envejecerse leyendo á
los Gracos, á Caton, y otros semejantes. Con semejante lec
cion, ademas de quedarse en ayunas, se harán toscos en el
lenguage. Porque no serán capaces de entenderlos ; y con
tentándose con aquel estilo, que en aquel tiempo era el me
jor (aunque muy diferente del nuestro) pareceráles, que ya
son semejantes á los hombres grandes. Lo segundo, de que
deben guardarse, aunque opuesto á lo primero, es, no sea
que prendados por un falso deleyte del estilo florido, y re
tozon de los modernos, se aficionen á él, como cosa lison
gera, y conforme á la naturaleza de los niños.
Quando tengan ya mas sentado el ¿
, y ménos ex
puesto á errar, les aconsejaría yo, que leyesen los escritores
antiguos, con cuya leccion se logra fortificar el ingenio; y pu
rificándolos por otra parte de los vicios de aquel tiempo,
brillarán mucho mas los adornos , y flores de nuestro siglo;
y los modernos , que no carecen de bellezas. Ni tene
mos nosotros ménos ingenio, que los antiguos, sino distinta
manera de estilo; en el qual hemos sido con nosotros mas
indulgentes de lo que convenia: y así no tanto nos aventa
járon en el talento, quanto en las materias que tratáron. Por

desse tantum , sed etiam amari potest: jus lasciviae fosculis capti, voluptate
tum (quemadmodum Livius praecipit) ut quadam prava deliniantur, ut praedulce
quisque erit Ciceroni simillimus. illud genus , et puerilibus ingeniis hoc
II. Duo autem genera maxime caven gratius, quo proprius est, adament.
da pueris puto. Unum, ne quis eos anti Firmis autem judiciis, jamque extra
quitatis nimius admirator, in Graccho periculum positis, suaserim, et antiquos
rum , Catonisque, et aliorum similium legere 3 ex quibus si assumatur solida,
lectione dureseere velit. Fient emim hor ac virilis ingenii vis, deterso rudis sect
ridi, atque jejuni. Nam neque vim eo li squalore, tum noster hic cultus cla
rum adhuc intellectu consequentur : et rius enitescet: et novos, quibus, et ipsis
elocutione, quae tum sine dubio erat o multa virtus adest. Nec enim nos tardi
ptima , sed nostris temporibus aliena, tatis natura damnavit, sed dicendi mu
coutenti , quod est pessimum , similes tavimus genus, et ultra nobis, quam o—
sibl magnis viris videbuntur. Alterum, portebat., induisimus : ita non tam in
quod huic diversum est, ne recentis hu genio illi aos superaverunt, quam pro
ToM.I.
98 INSTITUCIONES ORATORIAS

donde convendrá hacer eleccion de muchas cosas de sus es


critos; pero se deberá cuidar, de no mancharlas con otras,
con que andan mezcladas. Bien veo, que hay autores antiguos,
y modernos, á los que conviene imitar en todo; lo que no ten
go dificultad en afirmar : pero no todos pueden determinar
quáles sean estos, y aun es cosa mas segura el errar en la
imitacion de los primeros. Por tanto he dexado para mas ade
lante la leccion de los modernos, para que la imitacion no
preceda al juicio.
CAPÍTULO VII.

QUÉ AsuNTos DEBE EL MAESTRo DE RETóRICA DAR Á sUs


DiscíPULos PARA LA coMPosICION.

En esta parte fuéron tambien distintos los pensamien


tos de los maestros. Unos, no contentos con ordenar, y di
vidir las materias, que daban á sus discípulos, para declamar;
las amplificaban, dándoles mayor extension; llenándolas, no
solaniente de pruebas, sino de afectos. Otros, despues de ti
radas las primeras lineas, trataban lo que sus discípulos ha
bian omitido en sus declamaciones , tocando algunos lugares
con no ménos esmero, que quando ellos mismos se ponían á
perorar. Ambas á dos cosas tienen su utilidad, y así no quie
-ESE. Es EE

posito. Multa ergo oportebit, eligere. Sed derim. Sed hi, qui sint, non cujusque est
curandum erit, ne iis , quibus permista pronuntiare. Tutius circa priores vel er
sunt, inquinentur, Quosdam vero etiam, ratur. Ideoque hanc novorum distuli le
quos totos imitari oporteat, et fuisse nu ctionem, ne imitatio judicium antece
per, et nunc esse quidem, libenternon deret. -

concesserim modo, verum etiam conten


C A P-U T , V I I.

QUALEs MATERLAs DIscIPULIs DARE AD scRIBENDUM RHETOR DEBEAT.

E uit etiam in hoc diversum prae etiam affectibus. Alii , cum primas mo
cipientium propositum , quod eorum qui do lineas duxissent, post declamationes,
dam materias, quas discipulis ad dicen quod omisisset quisque, tractabant: quos
dum dabant, non contenti divisione di dam vero locos non minore cura , quam.
rigere , latius dicendo prosequebantur: cum ad dicendum ipsi surgerent, exco
nec solum probationibus implebant, sed lebant. Utile utrumque: et ideo neutrum ab
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 99
ro separar la una de la otra. Pero en caso de haber de hacer
solamente una de las dos, tengo por mas útil el manifestar
les desde luego el camino verdadero, que apartarlos del tor
cido que tomaren. Primeramente porque en la correccion so
lo hacen uso del oido ; pero en la traza , que les da el
maestro, se exercita el discurso, y el estilo. Lo segundo,
porque toman con mas gusto la enseñanza, que la correccion;
y si hay algunos de mas viva penetracion , y especialmente
segun estan las costumbres del dia, se enojan de que se les
amoneste, y lo toman á regaña dientes. Bien que no por esto
se han de corregir los vicios con ménos libertad porque
se ha de tener respeto á aquellos, que aprueban, y dan por
bueno quanto se escapó de la correccion del maestro. Así
que ámbas á dos cosas se deben unir, y tratarlas segun el
caso lo pida. Porque á los principiantes se les ha de dar la
cosa trazada, segun las fuerzas de cada uno. Pero quando se
viere, que imitan ya los modelos, que se les dió, entón
ces se les mostrarán como ciertas huellas, que deberán se
guir sin ayuda del maestro. Convendrá á las veces el dexar
los solos, no sea que, habituados siempre á seguir huellas
agenas, no trabajen, ni discurran nada por sí solos. Quando se
viere que proceden, y discurren con tal qual acierto, el maes
tro ya nada tiene que hacer. Si en algo yerran, deberá po
nerles quien los guie. A la manera que las aves dan de co
mer á sus polluelos con los picos, desmenuzándoles la comi

7 -EE -

altero separo. Sed si facere tantum alte tractanda, utres ipsae postulabunt. Nam
rum necesse sit : plus proderit demon que incipientibus danda erit velut prae
strasse rectam protinus viam , quam re formata materia secundum cujusque vi
vocare ab errore jam lapsos. Primum, res. At cum satis composuisse se ad e—
quia emendationem auribus modo, acci--c. xemplum videbuntur, brevia quaedam
piunt: divisionem vero ad cogitationem. demonstranda vestigia , quae persecuti
etiam, et stylum perferunt. Deinde, quod jam suis viribus, sine adminiculo progre
libentius praecipientem audiunt, quam. di possint. Nonnunquam credi sibi eos
reprehendentem. Si qui vero paulo sunt oportebit : nemala consuetudine semper
vivaciores , in his praesertim moribus, alienum laborem sequendi, nihil perse
etiam irascuntur admonitioni, et taciti conari, et quaerere sciant. Quod si satis
repugnant. Nec ideo tamen minus vitia prudenter dicenda viderint, jam prope
aperte coarguenda sunt. Habenda enim. consummata fuerit praecipientis opera,
ratio caeterorum, qui recta esse, quae Si quid erraverint adhuc, eruntad du
praeceptor non emendaverit, credent. cem reducendi. Cui rei simile quiddam
Utraque autem ratio miscenda est, et ita facientes aves cernimus, quae teneris, in
N2
ICO INSTITUCIONES ORATORIAS

da ; y quando estan creciditos, les dexan salir del nido, ense


ñándoles á volar al rededor de él, yendo las madres delante,
hasta que viéndolos robustos, y sin miedo, les permiten sa
lir por el ayre libre.
CAPÍTULo v III.
APRENDAN LOS NIÑOS ALGUNOS LUGARES SELECTOS DE LOS
ORADORES , É HISTORIADORES ; PERO RARAS VECES LAS
COMPOSICIONES , QUE ELLOS HAN TRABAJADO.

En este punto soy de opinion, que debe mudarse la


costumbre de que los niños aprendan de memoria todo lo
que ellos han compuesto, para decirlo, segun es estilo, en
dia señalado. Esto quien mas, lo exije son los padres, per
suadidos, que entónces estudian sus hijos , quando tienen
freqüentes declamaciones: siendo así, que el aprovechamien
to depende del cuidado. Así como quiero que los niños com
pongan, y que se exerciten muchísimo en esto, así aconsejo
mucho mas, que aprendan de memoria algunos trozos de los
oradores, historiadores, y otros escritos dignos de aprecio. Con
esto exercitarán la memoria, aprendiendo ántes lo ageno, que
lo suyo; y los que se exercitaren en este género de trabajo
esse E. sauma

firmisque fbetibus cibos ore suo colatos dem irlam praecedentes ipsae docent:
partiuntur : at cum visi sunt adulti, pau tum expertas vires, libero coelo, suae-,
lulum egredi nidis, et circumvolare se- que ipsorum fiduciae permittunt.

cA P U r v III.
EDISCANT PUERI SELEcros Ex oRATIoNIBUs , vEL HIsToRIIs Locos : RARo AUTEM
- QUAE IPSI scRIPSERINT. , •
... - *

- Ima ex consuetudine mutandum praecipue diligentia constet. Nam, ut scri


prorsus existimo in his, de quibus nunc bere pueros , plurimum que esse in hoc
disserimus, aetatibus , ne omnia , quae opere plane velim ; sic ediscere electos
scripserint, ediscant, et certa, ut moris ex orationibus, vel historiis, aliove quo.
est, die dicant. Quod quidem maxime genere dignorum ea cura voluminum lo
patres exigunt, atque ita demum stude cos, multo magis suadeam. Nam , et
re liberos suos, si quam frequentissime exercebitur acrius memoria , aliena com
declamaverint, credunt : cum profectus plectendo, quam sua : et quierunt in
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. IO I

dificultoso, aprenderán despues con mas facilidad lo que ellos


mismos compusieren, se acostumbrarán á lo mejor, y siem
pre tendrán buenos modelos, que imitar; y ademas de esto
beberán sin sentir el estilo de lo que hayan aprendido. Ten
drán abundancia de expresiones las mas bellas; su estilo, y
figuras serán naturales; no arrastradas, y violentas, sino que
voluntariamente se les ofrecerán, habiendo hecho acopio de
ellas. A esto se junta el que citarán con gusto en las con
versaciones lo bueno que otros han dicho: cosa útil en las
causas. Porque siempre da mayor autoridad todo aquello, que
se alega, quando no parece mendigado para probar la causa
presente ; y los testimonios agenos merecen mas alabanza,
que los nuestros.
A veces convendrá tambien permitirles á los discípulos
el recitar lo que ellos compusiéron, para que logren el fru
to de su trabajo, viendo que se les alaba. Pero convendrá
hacer esto, quando hubieren trabajado alguna cosa curiosa, y
perfecta, para que consigan este premio de sus afanes, ale
grándose de haber merecido el recitarlo en público.
--

difficiliore hujus generis labore versati, tilis. Nam , et plus auctoritatis afferunt
sine molestia , quae ipsi composuerint, ea, quae non praesentis gratia litis sunt
jam familiarius animo suo afrigent; et comparata et laudem saepe majorem,
assuescent optimis, semperque habebunt quam si nostra sint, conciliant.
intra se , quod imitentur : etiam. non Aliquando tamen permittendum, quae
sentientes, formam orationis illam, quam ipsi scripserint, dicere, ut laboris sui
mente penitus acceperint, expriment. fructum etiam exilla, quae maxime pe—
Abundabunt autem copia verborum opti titur, laude plurimum capiant. Verum id
morum, et compositione, ac figuris jam quoque tum fieri oportebit, cum aliquid
mon quaesitis, sed sponte, et ex reposi commodius elimaverint : ut eo velut
to velut thesauro se offerentibus. Acce praemio studii, sui donentur, ac se me
• dithis, et jucunda in sermone bene à ruisse, ut dicerent, gaudeant.
quoque dictorum relatio, et in causis u
IO 2 INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTUL o IX.
sI EN LA ENSEÑANZA DE Los DIscíPULos sE LE DEBE LLEVAR
Á cADA QUAL PoR Lo QUE SU INGENIo PIDE.

de
Teen , y no sin razon, por una de las qualidades
un maestro, el inquirir con todo, cuidado el ingenio de
sus discípulos, y el saber, por donde le llama á cada uno
su naturaleza." En lo que hay tanta variedad, que no son
los semblantes mas diversos, que lo son los ingeniosº Esto aun
en los oradores lo podemos ver; de los quales ninguno se con
forma con otro en el estilo, por mas que la mayor parte
de ellos se haya propuesto imitar á los que mereciéron su
aprobacion. Por tantoá lopareció
cada uno conforme útil suá los
que pide mas, ayudándole
ingenio, el enseñaréá
aquello mismo, á donde principalmente le llama, la natura
leza. Así como, si un hombre muy práctico en la , Palestrº
entrase en la escuela, en que hay un gran número de niños,
hecha experiencia de sus fuerzas corpórales, y de su Valor,
conocería á qué género de exercicio se le debia aplicar á
cada uno; á esta manera, quando el maestro de retórica hu
biere empleado su sagacidad en discernir el talento de cada

CAPUT IX.

AN sEcUNDUM SUI QUISQUE INGENII DocENDUSSIT NATURAM,

Virtus praeceptoris haberi solet,


nec immerito, diligenter in iis, quos e-
rint. Utile deinde plerisque visum est,
ita quemquº instituere, ut propria natu
rudiendos susceperit, notare discrimina rae bona doctrina foverent, et in id
ingeniorum, et quo quemque natura ma- potissimum ingenia quo tenderent, ad
xime erat, scire. Nam estin hoc incre- juvarentur; Utsi quis palaestrae peritus,
dibilis quaedam varietas, nec pauciores cum in aliquod plenum pueris gymna
animorum paene, quam corporum for— sium venerit, expertus eoruº omni mo
mae. Quod intelligi etiam ex ipsis ora- do, corpus, animum que discernat cui
toribus potest : qui tantum inter se di— quisque certamini sit praeparandus: ita
stant genere dicendi, utiemo sit alteri praeceptorem eloquentiae; cºmº sagaci
similis, quamvis plurimi se ad eorum, ter fuerit intuitus , cujus ingenium pres
quos probabant, imitationem composue" sº, limatoque genere dicendi, cujusacri,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. Io 3
discípulo , viendo quien gusta de un estilo conciso, y li
mado, y quien del vehemente, grave, dulce, áspero, flo
rido, y agraciado ; se acomodará tanto al genio de cada uno,
que les vaya llevando por donde cada qual sobresale. Pues
la naturaleza ayudada del cuidado, puede mas; y el que es
guiado contra su inclinacion, no podrá lograr lo que no
frisa con su ingenio, y perderá sus fuerzas por abandonar
aquello, para lo que parecia haber nacido. -

Todo lo qual lo tengo por cierto en parte ; pues si


guiendo la razon natural , libremente defiendo mi opinion
contra las ya admitidas por algunos "Porque ello es, que de
bemos indagar la naturaleza de los talentos; y nadie ne
gará, que aun se debe hacer eleccion de los estudios el
que deben emplearse.º. Unos habrá acomodados para escribir
historias; otros para la poesía; otros para la jurisprudencia;
y quizá habrá algunos , que no sean mas, que para cabar
viñas. Lo mismo pues hará el maestro de retorica, que hizo
el de la palestra, que va destinando, á quien á la carrera, á
quien al pugilato, á quien á la lucha, á quien á otra ma
nera de contienda de los juegos sagrados º: bien entendi
do, que el que se aplicare al estudio de la jurisprudencia,
no ha de trabajar en una sola cosa de las que miran á este
exercicio, sino en todas universalmente, aunque sienta algu
na repugnancia. Porque, si solo bastase la naturaleza, ociosa por
cierto era la enseñanza. -

. Por ventura (dirá alguno) si cae en nuestras manos un


*- -
=-
r rt.,
- - .
gravi, dulci, aspero, nitido, urbano ma- dissuaserit. Namgue erit alius historiae
xime gaudeat, ita se commodaturum magis idoneus, alius compositus ad car—
singulis, utin eo, quo quisque eminet, men, alius utilis studio juris , et non
provehatur: quod, et adjuta cura natu nullirus fortasse mittendi. Sic discernet
ra magis evalescat ; et, qui in diversa haec dicendimagister, quomodo palae
ducatur, nec in iis, quibus minus aptus stricus, ille cursorem faciet, autpugi
est satis possit efficere, et ea , in quae lem, aut luctatorem , aliudve quid ex
natus videtur , deserendo faciat infir iis , quae a sunt sacrorum certaminum.
miora. Verum ei, qui foro destinabitur, non in
Quod mihi (libera enim , vel contra unam partem aliquam , sed in omnia,
receptas persuasiones rationem sequenti quae sunt ejus operis, etiam si qua dif
sententia est) in parte verum videtur. ficiliora videbuntur , elaborandum est.
Nam proprietates ingeniorum dispicere Nam, et omnino supervacua erat doctri
prorsus necessarium est. In his quoque na, si natura suficeret.
certum studiorum facere delectum, nemo An si quis ingenio corruptus, ac tu
IO4. INSTITUCIONES ORATORIAS.

niño de gusto estragado, y de estilo hinchado, como son los


mas, ¿ hemos de consentir pase adelante? Y si hay algun in
genio árido, é infecundo, ¿no le fecundaremos, y le adorna
remos con ideas ? Porque si es necesario á veces cercenar al
gunos vicios, porqué no se ha de conceder el añadir á al
guno lo que le falta? Respondo, que yo no voy contra la
naturaleza en esto: pues no pretendo el quitar, y desarray
gar lo bueno, que ella tiene, sino aumentarlo, y ayudarla
en lo que le falta. Aquel insigne maestro Isócrates, cuyos
libros no acreditan mas su oratoria , que sus discípulos su
buena enseñanza, quañdo decia, que Ephoro necesitaba de
freno, y Theopompo de espuela, ¿por ventura no creyó, que
con sus preceptos debia espolear la pereza del uno, y conte
ner la viveza ( digamos así) desbocada del otro, pensando
que debia atemperar el genio de aquél con el de éste?
Debe acomodarse de tal suerte á los ingenios limitados,
que los guie únicamente por donde los llama la naturaleza:
pues así harán mejor aquello, que solo pueden. Pero si hubiere
alguno de ingenio mas despejado, del que podamos concebir
grandes esperanzas en la oratoria, no se deberá omitir con él
ninguna de las bellezas del arte. Pues dado caso, que tenga
mas inclinacion á una cosa que á otra, como es forzoso, pe
ro no se mostrará repugnante á lo demas : y su mismo
dado hará, que no sobresalga ménos en uno, que, en otro.cuiA
la manera que aquel otro maestro de la palestra en el exem
plo propuesto, no enseñará solamente á su discípulo á que ye
- =-
midus (ut, plerique sunt) inciderit, in praecipiti concitationem adjuvandam, do
hoc eum ire patiemur? aridum , atque cendo existimavit, cum alterum alterius
Jejunum non alemus, et quasi vestie natura miscendum , arbitraretur? .
mus? Nam si quaedam detrahere neces Imbecillistamen ingeniis sane sic ob
sarium est, cur non sit adjicere conces sequendum sit, ut tantum in id., quo vo"
sum? Neque ego contra naturam pugno. cat natura, ducantur. Ita enim, quod so
Non enim deserendum id bonum, si quod
lum possunt, melius eficient. Si vero li
ingenitum est, existimo: sed augendum, beralior natura contigerit, et in qua me "
addendumque quod cessat. Annon cla rito ad spem oratoris simus aggressi,
rissimusille praeceptor Isocrates, quern, nulla dicendi virtus omittenda est, Nam.
non magis libri beme dixisse , quam di— licet sit aliquam in partem pronior, ut
scipuli bene docuisse testantur, cum de necesse est, caeteristamen non repugna
Ephoro , atque Theopompo sic judi bit, atque ea cura paria facietiis, in qui
caret, ut alteri fraenis , alteri cal bus eminebat. Sicut ille (ne abeodem
caribus opus esse , diceret 3 aut in illo exemplo recedamus) exercendi corpora
lentiore tarditatem , aut in hoc paene peritus, non si docendúm pancratiasten
DE M. FAB1o QUINTILIANo. LIB. II. 1o 5
ra al contrario con el puño, ó con el pie; ni solamente le
enseñará á doblar, y hurtar el cuerpo de una manera, sino
de todos los modos posibles.
Si hay alguno, que no tiene ingenio para todo, aplíquese
á aquello que puede. Dos cosas se han de tener presentes
en esto : la primera, el no ponerse á aquello, que no puede
lograrse; la segunda , que no se le aparte á ninguno de
aquello, en que puede ser sobresaliente, para aplicarle á
otra cosa, á que no se siente inclinado. Pero si el discípulo
fuere como otro Nicostrato", á quien yo siendo jóven cono
ci de edad ya avanzada, empleará con él todas las fuerzas de
la enseñanza; y hará que en todo sea sobresaliente , así co
mo aquel otro era invencible en la lucha, y en el pugila
to, pues en ámbas cosas consiguió á un mismo tiempo la
corona. Y ¿con quánto mayor empeño deberá practicar esto
un maestro con quien ha de ser orador? Porque no basta el
que el estilo sea conciso, agudo, ó vehemente ; así como para
ser maestro excelente de música, no es suficiente el sobresa
lir solo en la voz de tiple, de tenor, de baxo, ó en qual
quiera parte de estos tonos. En la perfeccion del razona
miento sucede lo que con la cítara, la que en todas sus
cuerdas, desde la primera hasta el bordon, debe estar bien
templada.
--- º ***

susceperit, pugno ferire, vel calce tan cendi partibus similiter utetur : eficiet
- tum, aut nexus modo, atque in his cer
tos aliquos docebit, sed omnia , quae
que illum , qualis hic fuit, luctando,
pugnandoque (quorum utroque certami
sunt ejus certaminis. ne iisdem diebus coronabatur) invictum.
Erit, qui ex his aliqua non possit: in Et quanto id magis oratoris futuri ma
id maxime , quod poterit , incumbet. gistro providendum erit? Non enim sa
Nam sunt haec duo vitanda prorsus: u tis est dicere presse tanturm , aut subti
num , ne tentes, quod efici non possit; liter, aut aspere : non magis, quam pho
alterum , me abeo, quod quis optime masco acutis tantum , aut mediis , aut
facit, in aliud , cui minus est idoneus, gravibus sonis, aut horum etiam particu
transferas. At si fuerit, qui docebitur, lis excellere. Nam sicut cithara, ita oratio
ille , quem adolescentes senem vidi perfecta non est, misi ab imo ad summunn
mus , Nicostratus, omnibus in eo do omnibus intenta nervis consentiant,

ToM. L. O
Eoó INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULO X.
DE LA oBLIGACION DE Los DISCíPULos.
—-r
Entre los
muchos avisos, que hemos dado al maestro,
quiero dar uno tan solo á los discípulos; y es, que no ten-,
gan á sus maestros ménos amor, que al estudio; persuadién
dose, que son padres, no corporales, sino espirituales. Va á
decir mucho este amor para las letras. De este modo oi
rán con gusto sus preceptos, les darán crédito, y desearán
asemejarse á ellos; y finalmente concurrirán al aula gusto
sos , y con gana de saber. Si los corrige , no se enojarán;
si los alaba, gozaránse con la alabanza; y con la aplicacion
merecerán su amor. Porque así como la obligacion de los
unos es el enseñar, así la de los otros es mostrarse dóciles
á la enseñanza; y lo uno sin lo otro nada vale. Así como el
nacer el hombre depende del padre, y de la madre; y en ,

vano se siembra la semilla , si no se recibe dentro de una


tierra blanda, y esponjada, así la eloqüencia no puede lle
gará colmo, si no van á una la doctrina del maestro, y la
docilidad del discípulo. - . . . . . . . .
s -

El

----- c. A p y re- x. -----


y* IDE OFFICIO DISCIPULORUM, 5 y er ecz -
-

. . . .

º P, •

de officiis docentium locutus,


discipulos id unum interim moneo, ut
scentur, laudati gaudebunt: ut sint ca
rissimi, studio merebuntur. Nam util
praeceptores, suos non, mimus, quam 1psa lorum oficium est docere, sic horum
studia ament: et parentes esse, mon qui praebere se dociles, Alioqui neutrum si
dem corporum , sed mentium credant. me altero suficiet. , Et sicut hominis or
Multum haec pietas confert studio. Nam tus ex utroque gigmentium confertur; et
ita, et libenter audient, et dictis cre frustra sparseris semina , misi illa prae
dent, et esse similes concupiscent: in mollitus foverit sulcus : ita eloquentia
ipsos demique coetus scholarum laeti, et coalescere nequit, misi sociata traden
alacres convenient. Emendati non ira tis, accipientisque concordia. -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. Io7

CAPÍTUL o XI.
CONVIENE QUE LAS DECLAMACIONES SEAN MUY SEMEJANTES
Á LAs CAUSAs DEL FoRo.

Las que el discípulo se halle bien instruido, y


práctico en aquellos exercicios de la retórica, que no son
cosa en sí pequeña, sino ántes bien son como parte de otras
mayores , deberá exercitarse en algunas oraciones del gé
nero deliberativo, y en algunos asuntos del foro : pero án
tes de mostrar el camino para esto, diré quatro cosas so
bre el estilo declamatorio ; pues así como este género de
exercicio es el mas moderno en su invencion , así es noto
ria la ventaja que trae. El solo abraza en sí quanto habe
mos dicho, y es el mas conforme á la verdad. Por donde ha
merecido tantas alabanzas, que los mas han creido bastar
él solo para formar un orador: pues no hay virtud alguna
en un razonamiento seguido, que no convenga á las decla
maciones. Bien es verdad, que por culpa de los maestros
viniéron á tenerse la licencia, y ignorancia de los declama
dores por las dos causas principales de la corrupcion de la
eloqüencia. Pero podemos hacer buen uso de lo que por na
turaleza es bueno. Los asuntos, aunque fingidos, sean muy

C A P U T X I.

DECLAMATIONES FORENSIBUs cAUSIS, QUAM sIMILLIMAS ESSE oPoRTERE.

I, his primis operibus , quae non reddit. Ideoque ita est, celebrata , ut
ipsa parva sunt, sed majorum quasi plerisque videretur ad formandam elo
membra , atque partes , bene instituto, quentiam, vel sola sufficere. Neque enim
ac satis exercitato, jam fere tempus ap virtus ulla perpetuae duntaxat orationis
petet aggrediendi suasorias , judiciales reperiri potest, quae non sit cum hac
que materias ; quarum antequam viam dicendi meditatione communis. Eo qui
ingrediar, pauca mihi de ipsa decla dem resista culpa docentium recidit, ut
mandi ratione dicenda, sunt: quae qui inter praecipuas, quae corrumperente
4 - dem, ut ex omnibus novissime inventa, loquentiam causas, licentia , atque in
ita multo est utilissima. Nam et cuncta scitia declamantium fuerit. Sed eo quod
illa , de quibus diximus, in se fere con natura bonum est , bene uti licet. Sint
tinet , et veritati proximam imaginem ergo, et ipsae materiae, quae fingentur
2
Io8 INSTITUCIONES ORATORIAS

conformes á la verdad; y las declamaciones sean de aquellos


asuntos forenses, para cuyo exercicio se inventáron. Porque
en vano buscaremos en las apuestas ”, y entredichos º del
foro aquellas qüestiones de encantadores, pestes, respuestas
de los oráculos, madrastras mas rigurosas , que las que
introducen los trgicos en sus dramas , y otras cosas aun
mas fabulosas..." --

¿Pues qué, no permitiremos alguna vez á los jóvenes,


que traten estos asuntos, aunque increibles , y fabulosos,
para exercitar el ingenio, y tener materiales para formar
sus composiciones ? Será muy bueno: pero los asuntos sean
grandes, no hinchados, ni llenos de necedades, y que ha
gan reir á quien tenga una vista delgada. Y si hemos de ser
algo indulgentes en esto, llénese de especies enhorabuena el
declamador; pero advierta, que á la manera, que quando las
bestias se llenáron de mucho pasto en los prados, se curan
con la sangría, y tomando aquel alimento preciso para man
tener las fuerzas; así qualquiera, que tiene ya mucha gro
sura, y está lleno de malos humores , debe echarlos fuera,
si quiere conservar la salud robusta. De otra manera se le
notará aquella vana hinchazon , quando emprenda alguna
obra seria.
Los que pretenden, que las declamaciones son diversas
de las causas forenses, no alcanzan la razon, porqué se inven
tó semejante exercicio. Porque si no sirven de ensayo para

quam simillimae veritati : et declama pleat se declamator aliquando , dum


tio in quantum maxime potest, imite sciat; ut quadrupedes cum viridi pabulo
tur eas actiones , in quarum exercita distentae sunt, sanguinis detractione cu
tionem reperta est. Nam magos, et pe rantur, et sic ad cibos viribus conser
stilentiam , et responsa, et saeviores tra vandisidoneos redeunt ; ita sibi quoque
gicis novercas, aliaque magis adhuc fa tenuandos adipes , et quicquid humo
bulosa, frustra inter sponsiones , et in ris corrupti contraxerit, emittendum , si
terdicta quaeremus. esse sanus , ac robustus volet. Alioqui
Quid ergo 2 Nunquam haec supra fi tumor ille inanis primo , cujusque veri
dem, et poetica (utvere dixerim) the operis conatu deprehendetur.
mata juvenibus pertractare permittemus, Totum autem declamandi opus, qui
ut expatientur, et gaudeant materia, et diversum omnino à forensibus causis
quasi in corpus eant? Erit optimum. Sed existimant, ii profecto ne rationem qui
certe sint grandia, et tumida, non stul dem, qua ista exercitatio inventa sit, per
ta etiam , et acrioribus oculis intuenti vident. Nam, si foro non praeparat, aut
ridicula: ae, si jam cedendum est, im scenicae ostentationi, aut furiosae voci
- -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. Io9
el foro, concluiremos, que no es otra cosa , que una os
tentacion de farsa, ó una vocería propia de locos. Porque,
¿á qué fin preparar el ánimo del juez, si no hay ninguno?
¿contar una cosa, que todos saben ser fabulosa? ¿alegar las
pruebas de una causa , que nadie ha de sentenciar? Esto por
lo ménos es ocioso. Pues el revertirse de afectos, y llorar,
para mover á compasion, ¿no seria cosa de burla, si no pre
tendiéramos ensayarnos con estas armas , y peleas aparen
tes, para pelear despues de veras? -

Con que ¿no habrá diferencia alguna entre el estilo fo


rense, y declamatorio? Si atendemos á la utilidad, ninguna.
Y oxalá que fuese costumbre el nombrar personas, y se
introduxesen algunas qüestiones mas enredosas, y donde se
litigase mas, y no temiésemos tanto usar de los términos
caseros, y quotidianos! Oxalá se permitiera tambien mezclar
algunas chanzas: lo que hace que seamos muy visoños para
das causas del foro, aunque en las declamaciones de la es
cuela tengamos alguna práctica. Mas si la declamacion es una
mera ostentacion, debemos ciertamente deleytará los oyen
tes. Porque en aquellas causas, que se fundan en la verdad,
pero tienen tambien por objeto el deleytar al pueblo, co
mo los panegíricos, y en ¿ las oraciones del género de
mostrativo se permite algun mayor adorno; y no solamen
te confesar, sino aun hacer alarde delante del auditorio del
artificio, el qual en las causas judiciales por lo comun se
-mº
-
-, , , , -- -
• - . -
-

ferationi simillimum est, Quid enim at- troversiae fingerentur; et verba in usu
tinet judicem praeparare, qui nullus est? quotidiano posita minus timeremus; et
narrare, quod omnes sciant falsum? pro jocos inserere moris esset : quae nos,
bationes adhibere causae , de qua nemo quamlibet per alia in scholis exercitatí
sit pronuntiaturus? Ethaec quidem otio sumus, tirones in foro inveniunt. Si ve
sa tantum. Afici vero, et ita, vel luctu ro in ostentationem comparetur decla
permovere, cujus est ludibrii, nisi qui matio, sane paululum aliquid inclina
busdam pugnae simulacris ad verum re ad voluptatem audientium debemus.
discrimen , aciemque justam consue Nam et iis actionibus, quae in aliqua
scimus ? sine dubio veritate versantur, sed sunt
Nihil ergo inter forense genus dicen ad popularem aptatae delectationem,
di, atque hoc declamatorium intererit? quales legimus panegyricos, totumque
-- \ Si profectus gratia dicimus, nihil. Uti hoc demonstrativum genus, permittitur
namque adjici ad consuetudinem posset, adhibere plus cultus; omnemque artem,
utnominibus uteremur, et perplexae ma quae latere plerumque in judiciis debet,
gis, et longioris aliquando actus con non confiteri modo, sed ostentare etiana
I Io , INSTITUCIONES ORATORIAS

disimula , y oculta. Por donde la declamacion , º que es un


remedo de los tribunales, y causas forenses, debe contener
un asunto verosimil; y supuesto que tiene algo de ostenta
cion, usar de algunas galas , y adorno. Puntualmente lo
mismo hacen los cómicos, que mi bien hablan como el vul
go sin arte alguna, ni se apartan tanto del lenguage natu
ral, que se destruya la imitacion; sino que adornan este
nuestro lenguage comun con ciertas bellezas del teatro.

CAPÍTULO XII.
REFúTASE Á Los QUE DICEN , QUE LA ELoQUENCIA
No NECESITA DE PRECEPTos.
Y,hemos llegado á aquella parte de la retórica, por
donde dan principio los que omiten lo que llevamos dicho
hasta aquí. Aunque veo, que aun al principio del camino
me saldrán al encuentro para oponérseme los que dicen, que
la oratoria no necesita de reglas ; quienes contentándose con
lo que enseña la naturaleza, y con el exercicio comun de
las escuelas, se burlarán de mi trabajo, á exemplo de algu
nos yprofesores
O
de .reputacion
.. . . .
; á. uno
.-
de los quales, habién . * ,

- -
--
-
.

hominibus ín hoc advocatís. Quare de ci: qui nec ita prorsus, ut, nos vulgo
clamatio, quoniam est judiciorum, con--- loquimur, pronuntiant, quod esset sine
siliorumque imago , similis esse debet arte ; nec procul tamen à natura rece
veritati: quoniam autem aliquid in se dunt, quo vitio periret imitatio : sed
habetzruden rincv, non nihil sibi mitoris morem communis hujus sermonis de
assumere. Quod faciunt auctores comi
-
-
core quodam scenico exornant.

-/
C A P U T X II.
,

REFELLUNTUR , QUI NIHLL EGERE PRAECEPTIs ELoQUENTIAM PUTANT.

Jam hinc ergo nobis inchoanda est


ea pars artis, ex qua capere initium so
di praeceptis eloquentiam putent , sed
natura sua , et vulgari modo, et scho
lent, qui priora omiserunt. Quanquam larum exercitatione contenti , rideant
video, quosdam in ipso statim limine ob etiam diligentiam nostram : exemplo
staturos mihi, qui nihil egere hujusmo magni quoque nominis professorum, quo
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. II. III

dole preguntado, qué cosa era figura, y sentencia , res


pondió, que no lo sabia, pero que si importaba el saberlo,
lo encontrarian en sus declamaciones. Otro , preguntándole O

si era discípulo de Theodoro, ó de Apolodoro º, yo, di


xo, soy gladiador de pequeño broquel. En lo qual cierta
mente no pudo ocultar su ignorancia de otra manera mas
graciosa. A estos han seguido muchísimos en la incuria, pero
pocos en la naturaleza; porque fuéron hombres consuma
dos en el talento, y compusiéron declamaciones dignas de
memoria.
Se glorían pues los tales de que en la oratoria solo se
valen del ímpetu , y fuerzas naturales ; diciendo, que en
los asuntos fingidos no son necesarias, ni las pruebas, ni la
disposicion; sino sentencias retumbantes, que es lo que atrae
á los oyentes, y quanto mas atrevidas , son ( ¿? tal11 tO
mejores. Ademas de esto, no guardando ninguna reg a para
pensar, se estan mirando dias enteros á las vigas, aguardan
do, que voluntariamente les ocurra alguna buena idea ; ó
enardecidos con el incierto murmullo del auditorio , como
con los clarines, que se tocan al entrar en una batalla, aco
modan el movimiento violento del cuerpo, no solo á la pro
nunciacion , sino á la invencion de las expresiones. -

c. Algunos llevan ya discurridos ciertos preámbulos, que


les dexen lugar para discurrir algun pensamiento acendrado;
pero volteando por mucbo tiempo estas ideas, y desconfian
do de poder discurrir otras nuevas , recurren por último á
- --- - -, º s - º ** - s - -

- -

2. - - rº - ,
rum aliquis, ut opinor, interrogatus, sed, cujus rei gratia plenum sit audito
quid esset o Xjº a y vómº a nescire se qui rium, sententiis grandibus, quarum op
-
dem, sed si ad rem pertineret, esse in tima quaeque à periculo petatur. Quin
sua declamatione , respondit. Alius per etiam in cogitando nulla ratione adhibi
contanti, Theodoreus, an Apollodoreus ta, aut tectum intuentes, magnum ali
esset; ego , inquit, parmularius rum. quid quod ultro se offerat, pluribus sae
Nec sane potuit urbanius ex confessione pe diebus expectant ; aut murmure in
inscitiae suae elabi. Porro hi, quia, et certo velut classico instincti , concitatis
beneficio ingenii praestantes sunt habiti, simum corporis motum non enuntiandis,
et multa etiam memoria digna exclama sed quaerendis verbis accomodant.
verunt, plurimos habent similes negli Nonnulli certa sibi initia, priusquam
gentiae Suae, paucissimos naturae. sensum invenerint, destinant, quibus ali
Igitur impetu dicere se , et viribus quid diserti subjungendum sit; eaque diu
uti gloriantur. Nec enim opus esse pro secum ipsi clareque meditati, desperata
batione, aut dispositione in rebus fictis: connectendi facultate, deserunt, et ad alia
II2 INSTITUCIONES ORATORIAS
2
aquellas, que no solo son trilladas, sino sabidas de todos.
Los que entre estos tales parece tener mas discurso, le
aplican, no á meditar el asunto, sino á los lugares comu
nes: en lo que no atienden á que la oracion forme un cuer
po, sino que profieren lo que les viene á la imaginacion,
aunque no tenga enlace lo uno con lo otro. De que resulta
una oracion, que constando de ideas desunidas , no llega á
formar un todo uniforme en sí; ántes es muy parecida á
aquellas apuntaciones de los niños, donde van reproducien
do lo que oyéron alabar en las declamaciones de otros. No
obstante, no dexan de caérseles algunas sentencias, y pen
samientos buenos, como ellos se glorían, pero esto aun los
bárbaros, y esclavos lo hacen; y si esto bastára, ociosas eran
las reglas de la oratoria.
- -"
-

- * -

CAPÍTU L o XIII.
PoRQUÉ cAUSA Los MÉNos INSTRUIDos sUELEN coMUNMENTE
SER TENIDOS POR MAS INGENIOSOS. - - .

N, negaré tampoco una cosa, que se deduce de lo


dicho; y es, que los ménos instruidos declaman, al parecer,
con mas vehemencia. Dimana este error de pensar algunos,
- - * -- - - - - - -
- -- º * - )

ss. Es
-a-re-s- - ---- - - --

deinceps, atque inde alia non minus com diversis congesta oratio cohaerere non
munia, atque nota divertunt. possit, similisque commentariis puero
Qui plurimum videntur habere ra rum sit , in quos ea quae aliis decla
tionis , non in causas tamen laborem mantibus laudata sunt , regerunt. Ma
suum, sod in locos intendunt : atogue in gnas tamen sententias, & res bonas (ita
his non corpori ¿
, sed abrupta enim gloriari solent ) elidunt: nam , et
quaedam , ut forte ad manum venere, barbari, et servi: et, si hoc satest, mul
jaculantur. Unde fit, ut dissoluta, et ex la est ratio dicendi. - -

C A P U T XIII.

QUARE INERUDITI INGENIosIORES vULGo HABEANTUR.

N. hoc quidem negaverim , sequi dicere videantur indocti. Primum , vitio


plerumque hanc opinionem , ut fortius male judicantium ; qui majorem habere
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. Ir. II3
que lo que se hace sin reglas del arte , tiene mas fuerza;
así como son menester (dicen ellos) mayores para descer
rajar una puerta, que para abrirla; para romper el nudo,
que para desatarle; para llevará uno arrastrando, que para
guiarle. Los tales tienen por mas valeroso al gladiador, que
entra á pelear sin saber manejar las armas; y al luchador,
que emplea todo el cuerpo en vencer al contrario ; siendo
así, que á éste sus mismas fuerzas le postran en tierra, y
todo el ímpetu del otro queda burlado por su competidor,
con solo hurtar el cuerpo.”
La aparente razon, que á los necios engaña en esta par
te, se funda en que la division del asunto, que es de tan
to momento en los discursos, disminuye á primera vista las
fuerzas; y en que una cosa tosca abulta mas , que des
pues de pulida, y acepillada; y lo que está esparcido, mas
que lo que está ordenado.
Hay ademas de esto ciertos vicios , que se equivocan
con las virtudes : al maldiciente se le gradua de libre; al
temerario de esforzado; al charlatan de afluente. Y ningu
no habla mal de todos mas abiertamente, ni mas veces, que
el necio, aunque sea con daño de la parte, que defiende,
y áveces con riesgo suyo. Semejantes cosas grangean opinion,
porque los hombres oyen con gusto aquello mismo , que
ellos no hubieran querido decir.
A esto se junta, que el necio es mas atrevido en la
elocucion , punto muy delicado en la eloqüencia ; no des
*== -

vim creduntea, quae non habent artem: speciem virium minuit: et rudia politis
ut effringere, quam aperire ; rumpere, majora , et sparsa compositis numerosia
quam solvere; trahere, quam ducere ra creduntur.
putant robustius. Nam, et gladiator, qui Est praeterea quaedam virtutum, vi
armorum inscius in pugnam ruit, et lu tiorumque vicinia, qua maledicus pro
ctator, qui totius corporis nixu in id quod libero, temerarius pro forti, effusus pro
semel invasit, incumbit, fortior ab his copioso accipitur. Maledicitautem ineru
vocatur; cum interim, et hic frequenter ditus apertius, et saepius, vel cum pe
suis viribus ipse prosternitur, et illum riculo suscepti litigatoris, frequenter e
vehementis impetus excipit adversarii tiam suo. Affert et ista res opinionem,
mollis articulus. quia libeñtissime homines audiunt ea,
sunt in hac parte , quae impe quae dicere ipsi noluissent. -

ritos etiam naturaliter fallant. Nam et Illud quoque alterum, quod est in
divisio cum plurimum Valeat in causis, elocutione ipsa periculum , minus vitat,
ToM. L.
114 INSTITUCIONES ORATORIAS
echa ninguna expresion, ántes se atreve á todo. De donde
nace, que como siempre aspira á lo extravagante, y raro,
suele decir alguna cosa grande. Pero esto, que raras veces
sucede, no recompensa los demas vicios.
Esta es la causa porque los necios, que no tienen reparo
en decir qualquier cosa, son tenidos por mas afluentes: mién
tras que los sabios son mas recatados en lo que dicen. -

Y Ademas de esto huyen, quanto pueden , de probar su


asunto ; y así evitan el meterse en argumentos, y qüestio
nes, que entre los jueces estragados son tenidas por frialda
des; y solo atienden á lisongear torpemente los oidos del
auditorio. - - - -

Las sentencias, que son muy de su aprobacion, brillan


en ellos mucho mas que en otros; porque lo demas de la
oracion, donde estan engastadas, es cosa humilde, y baxa;
á la manera (dice Ciceron ) que una antorcha resplandece
mucho mas en las tinieblas, que en la sombra. Por tanto,
téngaseles enhorabuena por ingeniosos, si así agrada, á tal
empero, que entendamos, que semejante oratoria es vitupe
rable, é ignominiosa. - - a - - y.

. . No obstante, hemos de confesar , que el arte roba, y


cercena algo, como lo hace la lima con lo que pule; la pie
dra de amolar con los instrumentos embotados, y sin filo; y
como el tiempo con el vino; es cierto, pero quita los vicios;
y todo aquello, que se limó con las letras, es de tanto mé
nos bulto, quanto está mas acendrado. ,, , , >

ronaturque perdite. Inde evenit nonuñ Sententiae quoque ipsae, quas, solas
quam , ut aliquid grande inveniat, qui petunt, magis eminent, cum omnia cir
semper quaerit, quod nimium est. Verum ca illas sordida, et abjecta sint: ut lu
etraro evenit, et caetera vitia non pensat. mina non inter umbras (quemadmodum
Propter hoc quoque interdum viden Cicero dicit.) sed plane in tenebris clario
tur indocti copiam habere majorem, quod ra sunt. Itaque ingeniosi vocentur, utli
dicunt omnia: doctis est, et electio, et bet, dum tamen constet, contumeliose
modus. sic laudari disertum.
- His accedit, quod à cura docendi, Nihilominus confitendum est etiam.
quod intenderint, recedunt. Itaque illud detrahere doctrinam aliquid, utlimam
quaestionum , et argumentorum apud rudibus, et cotes hebetibus, et vino ve
corrupta judicia frigus evitant: nihilque tustatem; sed vitia detrahit : atque eo
aliud , quam quo, vel pravis voluptatibus solo minus est, quod literae perpolierunt,
aures assistentium permulceant, quaerunt. quo melius. -
- M. a º ... - M
-

DE M. FABIO QUINTILIANO. LT3. II. II 5


. En lo que mas pretenden los tales fama de óradores, es
en la pronunciacion. Porque ellos en todas las partes de sus
discursos hablan levantando mucho la voz, alzando las ma
nos, moviéndose de una parte á otra, muy sofocados, con
mucha agitacion, y con unos ademanes, y movimientos, que
ni un loco. ”. Pues el palmotear, el dar patadas , el gol
pear los muslos, el pecho, y la frente, va á decir no poco
para ganar reputacion de un auditorio de plaza ": quando
vemos, que el buen orador , así como á veces baxa el es:
tilo, y le da diversa disposicion, y figura, así en la pronun
ciacion acomoda el ademan á la sentencia de las palabras y
sobre todo siempre quiere parecer, y ser modesto, que es
lo mas digno de observacion en la oratoria.
Pero los ménos instruidos tienen por espíritu, y valen
tía, lo que mas propiamente debe llamarse violencia : ha
biendo no solamente muchos declamadores, sino aun maes
trOS ( cosa por cierto vergonzosa ) que por tener algun
exercicio en el decir, sin seguir regla alguna, hablan mo
vidos del ímpetu , que neciamente los agita; graduando
de inútiles, insulsos, aturdidos, y cobardes en el decir (se
gun les vienen á la imaginacion los nombres mas vergonzo
sos) á los que diéron mas honor á las letras. Demos el pa
rabien á aquellos, que sin razon alguna pasan plaza de elo
qüentes, sin haber trabajado, ni estudiado. Y supuesto, que
hace ya tiempo, que dexé el cargo de la enseñanza, y no
--- - -

-- ,, a se •

Verum hi pronuntiatione quoque fa At illi hanc vim appellant, quae est


mam dicendi fortius quaerunt. Nam et potius violentia: cum interim non acto—
clamant ubique , et omnia levata (ut res modo aliquos invenias , sed (quod
ipsi vocant) manu emugiunt, multo di est turpius ) praeceptores etiam , qui
scursu, anhelitu, jactatione, gestu, mo brevem dicendi exercitationem consecu
tu capitis furentes, Jam collidere ma ti, omnia ratione, uttulit impetus, pas
nus, terrae pedem incutere, femur, pe sim tumultuentur: eosque, qui plus ho
ctus, frontem caedere : mire ad pulla noris literis tribuerunt, et ineptos, etjeju
tum circulum facit ; cum ille eruditus, nos, et trepidos, et infirmos, ut quodque
ut in oratione multa summittere , va verbum contumeliosissimum occurrit, ap
riare, disponere , ita etiam in pronun pellent. Verum illis quidem gratulemur,
tiando suum cuique eorum , quae dicet, sine labore, sine ratione, sine disciplina
colori accomodare actum sciat: et, si disertis: nos, quando, et praecipiendi mu
quid sit perpetua observatione dignum, nus etiam pridem deprecati sumus, et
modestus et esse, et videri malit. in foro quoque dicendi , quia homestis
P2
116 INSTITUCIONES ORATORIAS

me veo en la precision de exercer la honrosa carrera del fo


ro, divertiré esta mi ociosidad escribiendo, y discurriendo
lo que me parece ha de aprovechar á los jóvenes de buena
intencion; lo que á mí me sirve de deleyte, y entretenimiento.

CAPÍTULO XIV.
EN LAs REGLAs DEBE HABER TASA, Y MEDIDA.

1. El orador no ha de seguir las reglas del arte, co


mo ley inviolable. II. Atienda á lo que piden las cir
runstancias.

I. inguno aguarde de mí, que dé á los aficionados


de la eloqüencia aquellos preceptos, que la mayor parte de
los que tratáron esta materia , miráron como leyes inviola
bles : poniendo el exórdio, y las virtudes, que debe tener;
despues la narracion , y sus leyes; luego la proposicion , ó
como otros quieren la digresion ; y últimamente cierto órden
de qüestiones, y todo lo demas, que algunos autores siguen
al pie de la letra, y con tanta esclavitud, como si el tras

a-smansas. Esan nºsº- -

simum finem putabamus, desinere dum quae futúra usui bonae mentis juveni
desideraremur; inquirendo , scribendo- bus arbitramur , nobis certe sunt vors
que talia, consolemur otium nostrum, luptati.
c A P UT x1 v.
QUIs MoDUs SIT IN ARTE.
I. Va orator praecepta rbetoricae tanquam leges immutabiles requatur. II. Jºpe
cture debet quid deceat, quid conveniat.

I. Nm. autem à me exigat id


praeceptorum genus, quod està pleris
utique prooemium, et id quale; proxi
mahuic narratio, quae lex deinde nar
que scriptoribus artium traditum , ut randi: propositio post hanc, vel, ut qui
quasi quasdam leges immutabili neces busdam placuit, excursio : tum certus
sitate conscriptas studiosis dicendiferan: ordo quaestionum , caeteraque : quae
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. a 17
pasarlo fuera delito. Cosa muy fácil por cierto era la orato
ria, si estuviera ceñida á unas reglas tan breves, y preci
sas. Pero sucede , que el asunto, las circunstancias, y la ne
cesidad hacen variar, y mudar estas reglas. Por donde la
principal regla es el tino, y juicio del orador, el que le di
rá cómo, y quándo debe mudarlas.
Si uno mandase á un general , quando ordena su gente
en batalla, que la lleve de frente al enemigo, que adelante
las alas, y las cubra con la caballería, ¿qué diriamos? Es
te órden será bueno, quando buenamente se pueda guardar;
pero no se observará, quando lo impide la naturaleza del
terreno, los montes , selvas, rios, ó collados, y asperezas,
que tiene delante. Esta disposicion la mudará la naturaleza
de los enemigos, y de la batalla, que se ha de dar : puesto
caso, que unas veces peleará de frente, ya poniendo el exér
cito en forma de cuña, ya con las tropas auxiliares, ya con
toda la gente : y ocurrirá lance , en que convendrá hacer
huida af Del mismo modo, si es, ó no necesario el exor
dio; si ha de ser breve, ó largo ; si toda la oracion se
ha de dirigir á los jueces, ó solo alguna vez medio de
alguna figura ; si la narracion ha de ser corta , ó larga;
continuada , ó interrumpida; si se ha de hacer en la for
ma regular, ó si se ha de mudar esta disposicion : todo
esto lo ha de decir el asunto de que se trata. Lo mismo digo
sobre el órden de las qüestiones; pues en una misma causa

velut si aliter facere fas non sit, qui mons occurret, si flumen obstabit, si
dam tanquam jussi sequuntur. Erat enim collibus, sylvis, asperitateve aliqua pro
rhetorice res prorsus facilis , ac parva, hibebitur. Mutabit hostium genus , mu
si uno, et brevi praescripto continere tabit praesentis conditio discríminis nunc
tur. Sed mutanturpleraque causis, tem acie directa, nunc cuneis, nunc aux
poribus, occasione, necessitate. Atque liis, nurºe legione pugnabitur: nonnun
ideo resin oratore praecipua consilium quam terga etiam dedisse, simulata fu
est, quia varie, et ad rerum momenta ga, proderit. Ita prooemium necessarium,
convertitur. an, supervacuum, breve, an longius; ad
Quid enim , si praecipias imperatori, judicem omni sermone directo, análi
quoties aciem instruet, ut dirigat fron quando verso per aliquam figúram di
tem, cornua utrinque promoveat, equi cendum sit; constricta , an latius fusa
tes pro cornibus locet? Erithaec qui narratio; continua, an divisa; recta, an
dem , rectissima fortasse ratio, quoties ordine permutato, causae docebunt. Itém
licebit : sed mutabitur natura loci , si que de quaestionum ordine , cum recte
“II8 INSTITUCIONEs oRAToRIA s -r
conviene no pocas veces anteponer unas á otras. Porque no se
guardan inviolablemente estas reglas; como si fuera una ley,
ó decreto del pueblo, sino que todo esto, qualquiera que
sea, lo dicta la utilidad. No niego, que la observancia de
estas reglas es útil por lo comun; pues de otra manera no
las daria ; pero digo , que si la utilidad pide, que las que
brantemos, debe ella ser mas atendida, que todos los maes
tros del mundo. - - y

II. Una cosa sí diré como regla fixa , y no dexaré de


inculcarla, que el orador debe en todas las causas mirar, co
mo á norte, á lo que conviene, y está bien segun las cir
cunstancias. Conviene pues, á veces mudar aquel órden na
tural de las partes de un discurso, que prescribe la retóri
ca; así como vemos que en las pinturas, y estatuas no se
guarda siempre la misma disposicion del trage, postura, y
ayre del cuerpo. Un cuerpo recto tiene poca hermosura , y
mas si tiene el semblante vuelto á quien mira la figura, si
estan los brazos caidos, y juntos los pies, y todo él está
derecho como una estaca. Aquella inflexion de miembros , ó
movimiento, digamos así, es el que da aptitud, y alma á la
estatua. Por eso á las manos no les damos la misma postura;
y variamos los semblantes de mil maneras. Hay estatuas, que
estan en ademan de echará correr, y acometer; otras senta
das, ó recostadas ; unas desnudas, y otras con ropage; y
algunas de las dos maneras. ¿Qué cosa mas torcida, pero
mas bien executada, que la estatua que hizo Myron en ade
- - - -- - º* - --- -

in eadem controversia aliud ... alii parti utin statuis, atque picturis videmus
prius quaeri frequenter expediat. Neque variari habitus, vultus, status. Nam re
enim rogationibus, plebisve scitis sancta cti quidem corporis vel minima gratia
suntista praecepta : , sed hoc quicquid est. Neque enim adversa sit facies, et
est, utilitas excogitavit. Non negabo au demissa brachia , et juncti pedes, et à
tem, sic utile esse plerumque, alioqui nec summis ad, ima rigens opus. Flexus ille,
scriberem : verum si eademilla nobis et ut sic dixerim , motus , dat actumi
aliud suadebit utilitas, hanc, relictis ma quemdam effictis. Ideo nec ad unum
gistrorum auctoritatibus, sequemur, . modum formatae manus , et in vultu
II. Equidem id maxime praecipiam, mille species. Cursum habent quaedam,
ac repetens iterumque, iterumque monebo: et impetum ; sedent alia , vel incum
res duas in omni actu spectet orator; bunt; nuda haec, illa velata sunt; quae
quid deceat, quid expediat. Expedit au dam mista ex utroque. Quid tam distor
tem saepe mutare exillo constituto, tra tum , et elaboratum, quam estille. di
ditoque ordine aliqua, et interim decet: scobolos Myronis? Si quis tamen ut pa
pE g. FABro QUINTILIANo. LIB. II. I 19
man de arrojar el disco? Si alguno tachase en ella el no es
tar el cuerpo recto, y derecho, ¿no descubriria su ignoran
cia en el arte? puesto caso, que lo que mas tiene de ma
ravilloso es aquella nueva, y dificultosa postura. Puntualmen
te el mismo deleyte causan las figuras, ya de sententia, ya de
palabras ; que es mudar el lenguage vulgar, y quotidiano,
sacándole del tono regular, y usado. -

Es gala de la pintura, que se descubra todo el rostro;


con todo eso Apeles pintó á Antigono de perfil, para
ocultar la falta de un ojo, ¿Y no tenemos lo mismo en la
oracion? Cosas hay, que deben ocultarse, ó á lo ménos no
deben ponerse á la vista, porque es imposible pintarlas al
vivo con toda su valentía. Así lo practicó Timantes de
Cithna en aquella pintura, en la que aventajó á Colotes de Teo.
Pues habiendo pintado en el sacrificio de Ifigenia á Calcas triste,
y mas triste aun á Ulyses, apuró toda su habilidad en pintar la
tristeza de Menelao, tio de aquella princesa. Apurados ya
los secretos del arte, y no encontrando ya modo de expre
sar el sentimiento, qual correspondia, en el semblante del
padre, le cubrió con un velo, dexando á la consideracion de
los que lo mirasen , el ponderar en su imaginacion el dolor
paternal.” Ahora bien ¿ no tenemos en Salustio un rasgo
semejante? quando dice: De Cartago mejor es decir nada,
que decir poco. In Jugurt.
Por lo qual yo siempre he tenido por costumbre el no
------- º * a se ºrº º es --- - -

-- . .. . . . . . , , , , , , º -

rum rectum improbet opus , nonne ab gnitate non possunt? ut fecit Timantes
intellectu artis abfuerit, in qua vel prae utopinor; Cithnius in ea tabula, qua
cipue laudabilis estilla ipsa novitas, ac Coloten Teium vicit. Nam cum in íphi
dificultas? Quam quidem gratiam , et geniae immolatione pinxisset tristem
delectationem afferunt figurae, quaeque Calchantem, tristiorem Ulyssem, addidis.
in sensibus, quaeque in verbis sunt. Mu Set Menelao quem summum poterat ars
tantenim aliquid à recto, atque hanc efficere moerorem : consumptis affecti
prae se virtutem ferunt, quod a consue bus, non reperiens, quo digne modo pa
tudine vulgari recesserunt. tris vultum posset exprimere; velavit
Habet in pictura speciem tota facies, ejus caput, et suo cuique animo dedit
Apelles tamen imaginem Antigoni late aestimandum. Nonne huic simile estil
re tantum altero ostendit, ut amissi ocu lud Sallustianum? AVam de Carthagine ta
lideformitas lateret. Quid? non, inora ºéreatiu puto, quam parun dicere..., ,
tione operienda sunt quaedam , sive o Propter quae mihi semper moris fuit,
Stendi non debent, sive exprimi pro di quam minime alligare me ad praecepta
20 rzNST ITUCIONES ORATORIAS . r

atenerme á semejantes reglas generales, y perpetuas; pues


rara vez se encontrarán tales reglas, que la necesidad no
obligue á mudarlas, y aun quebrantarlas del todo. Pero de
esto hablaré á su tiempo. Entretanto no quisiera, que los
jóvenes se tengan por suficientemente instruidos en la retóri
ca, por haber decorado estos artes, que corren comunmente
con este nombre, teniéndolos por decretos inviolables. La
eloqüencia es obra de mucho trabajo, de mucho estudio,
exercicio, experiencia continua, mucho ingenio, y de un
tino singular. Es cierto, que sirven de mucho las reglas; pero
quando guian por camino derecho: el que no siempre debe ser
uno, ni estrecho; y el que piense que el apartarse de él, es
sacrilegio, caminará en la oratoria con tanto tiento, como el
que anda por una maroma. Por tanto muchas veces aban
donamos el camino real, para buscar el atajo; y quando al
gun torrente ha roto los puentes, y ¿ la senda recta,
tenemos que ir por el rodeo: y quando la puerta está ocu
pada de las llamas, no hay otro recurso que saltar por las
paredes. Esta obra ofrece campo muy ancho, vario, y que
presenta cosas siempre nuevas; como que no se puede ago
tar la materia de que trata. Comenzaré pues á tratar,
quál es lo mejor de quanto se ha escrito ; quándo conven
drá mudarlo, añadir algo de nuevo, ó quitar algunas cosas.

quae naloa nº vocant , id est ( ut non unam orbitam mostrent: à qua de


dicamus quomodo possumus ) universa clinare qui crediderit nefas, patiafur ne
lia, vel perpetualia. Raro enim reperitur cesse estillam per funes ingredientium
"hoc genus, ut non labefactar parte ali tarditatem. Itaque, et stratum , militari
qua , aut subrui possit. Sed de his ple labore iter saepe deserimus, compendio
nius suo quicque loco tractabimus. In dueti; et , si rectum limitem rupti tor
terim noló, se juvenes satis instructos, rentibus pontes inciderint, circumire co
si quem ex his, qui breves plerumque gemur; et, si janua tenebitur incendio,
circumferuntur , artis libellum edidice per parietem exibimus. Late fusum opus
rint, et velut decretis technicorum, tu est, et multiplex, et prope quotidie no
tos putent. Multo labore , assiduo studio, vum , et de quo munquam dicta erunt
varia exercitatione, plurimis experimen omnia. Quae sint tamien tradita ; quid
tis, altissima prudentia, praesentissimo ex his optimum, et si quid mutari, ad
consilio constatars dicendi. Sed adjuva jici , detrahi melius videbitur, dicere
turhis quoque , si tamen rectam viam, experiar,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 2 I

CAPÍTULO XV.
DIVISION DE TODA LA OBRA.

La mejor division, que podemos hacer de la retórica,


es, tratar de sus reglas, del artífice, y de la obra que de
ahí resulta. El arte, ó reglas se aprenden con la enseñanza,
y se define : Ciencia de bien decir. El artífice es el que usa
de estas reglas: esto es, el orador, cuya perfeccion consiste
en hablar al intento. La obra, que resulta, es un razona
miento acabado. Estas tres cosas se subdividen en sus espe
cies : de ellas trataremos en su lugar: ahora comenzaremos
por lo que mira á la primera parte. ,

º-º-MEDEEEEmmam-s

CAPU T XV.

MDIVISIO TOTIUS OPERIS.

Rºsas sic, ut opinor, optime bene dicere. Opus, quod efficitur ab ar


tifice, id est bona oratio. Haec omnia
dividetur, ut de arte, de artifice, de
epere dicamus. Ars erit, quae discipli rursus diducuntur in species. Sed illa se
na percipi debet : ea est bene dicendi quentia suo loco: nunc, quae de prima
scientia. Artifex est, qui percipit hanc parte tractanda sunt , ordiar,
artem, id est orator, cujus est Summa,

ToM. I
I 22 INSTITUCIONES ORATORIAs

CAP ÍTULO XVI.

DESPUES DE REFUTADAs LAS OPINIONES DE OTROS, MUESTRA


QUE LA RETóRICA. Es CIENCIA DE BIEN DECIR ; Y QUE SU FIN
- ES HA BLAR AL INTENTO,

Vane, ante todas cosas, qué es retórica, la que de


finen con variedad: pero dos son las cosas, de que se puede
disputar. Porque, ó consideramos la qualidad, y esencia de
la cosa; ó su definicion. La primera , y principal diferencia
entre las opiniones consiste, en que algunos pretenden, que
aun los hombres malos pueden llegará ser oradores: otros
Por el contrario (á cuya opinion me arrimo) dicen, que el
arte, de que tratamos, no puede convenir sino á los buenos.
Los que quitan á la eloqüencia aquella principal alabanza
de la vida, que es la virtud, hacen consistir esta arte en la
persuasion, ó en decir, y hablar á propósito para persuadir:
lo qual, dicen, lo puede lograr el hombre, aunque no sea
virtuoso. El fin de la retórica es el persuadir ; opinion que
fundó Isócrates, si es suyo un arte , que corre con su
nombre. El que siguiendo distinto modo de pensar , que
aquellos, que desacreditan el oficio de orador, define, pero

*
C A P U T X V I.

REFUTATIs ALIORUM SENTENTIIs, DocET RHETORICAM ESSE SCIENTIAM BENE DICENDI;


EJUS FINEM, EENE DICERE.

A. omnia , quid sit rhetorice: jore , ac magis expetenda vitae laude


quae finitur quidem varie , sed quae secernunt... . ... hifere, aut in persuaden
stionem habet duplicem : aut enim de do, aut in dicendo apposite ad persua
qualitate ipsius rei, aut de comprehen dendum , positum orandi munus sunt ar
sione verborum dissensio est. Prima, ac bitrati. Id enim fieri potestab eo quoque,
praecipua, opinionum circa hoc differen quivir bonus non sit. Est igitur frequen
tia , quod alii malos quoque viros posse tissimus finis rhetorices vis persuadendi.
oratores dici putant: alii (quorum nos Haec opinio originem ab ISocrate (si ta
sententiae accedimus) nomen hoc, artem men re vera ars, quae circumfertur, ejus
que de qua loquimur, bonis demum tri-, est) duxit. Qui cum longe sit à volunta
bui volunt. te infamantium oficia oratoris, finem ar
Qui autem dicendi facultatem à ma tis temere comprehendit, dicens esse rhe
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 123
mal, la retórica, diciendo, que es obradora de la persuasion.
Lo mismo, poco mas ó ménos, dice el Gorgias de Platon,
pero este la pone por opinion de aquel, no suya. “Cice
ron dice en varios lugares”, que la obligacion de un ora
dor, es únicamente decir, y hablar de una manera capaz
de persuadir. En los retóricos pone ” por fin de la retórica
el persuadir ; libros que él no aprueba.
Lo cierto es, que á veces persuade el dinero, el vali
miento, la autoridad, y dignidad de la persona, y aun su
presencia sola sin hablar palabra; moviéndonos á dar la sen
tencia por la memoria de los méritos del sugeto, por verle
miserable, y aun por prendarnos de su hermosura. Porque
quando M. Antonio, defendiendo á M. Aquilio ” rasgó su
túnica, para mostrar al pueblo las cicatrices de las heridas
recibidas por la patria en el pecho, seguramente no confió en
su oracion, sino que de este modo hizo violencia á los ojos
de los Romanos, con cuyo espectáculo, se moviéron á absol
verle, como se creyó. Y ademas de otros monumentos tenemos
la oracion de Caton, donde se prueba, haberse libertado Ser
gio Galba” con la compasion, que causó, no solo presentan
do á sus hijos pequeñitos á la vista del pueblo, sino llevan
do en sus manos al hijo de Sulpicio Galo. Créese tambien
comunmente, que si se libró Phrynes, no fué por la admi
rable defensa, que de ella hizo Hiperides, sino porque ella,
desabrochando la túnica, descubrió parte de su cuerpo, her

º-EE asmº--s

toricen persuadendi opificem , id est, scissa veste cicatrices, quas is pro patria
arass duºseyev. Apud Platonem quoque pectore adverso suscepisset, ostendit; non
Gorgias in libro, qui nomine ejus inscri orationis habuit fiduciam , sed oculis po—
ptus est, idem fere dicit: sed hanc Pla puli romani vim attulit: quem illo ipso
to illius opinionem vult accipi, non suam. aspectu maxime motum in hoc, ut absol
Cicero pluribus locis scripsit, oratoris of veret reum, creditum est. Sergium qui
ficium esse, dicere apposite ad persua dem Galbam miseratione sola, qua non
dendum. In rhetoricis etiam, quos sine du suos modo liberos parvulos in concionem.
bio ipse non probat,finem facit persuadere. produxerat, sed Galli etiam Sulpitii fi
Verum et pecunia persuadet, et gra lium suis ipse manibus circumtulerat, e
tia , et auctoritas dicentis, et dignitas, lapsum esse, cum aliorum monumentis,
et postremo aspectus etiam ipse sine vo tum Catonis oratione testatum est. Et
ce, quo vel recordatio meritorum cujus Phrynen, non Hyperidis actione, quan
ue, vel facies aliqua miserabilis , vel quam admirabili, sed aspectu corporis,
ormae pulcritudo sententiam dictat. Nam. quod illa speciosissimum alioqui, didu
et M. Aquilium defendens Antonius, cum cta nudaverat tunica, putant periculo li
Q2
I24 INSTITUCIONES ORATORIAS

mosísimo á la verdad. Con que si semejantes cosas mueven,


no es la persuasion el fin de la retórica.
Por donde los que la definiéron, á su parecer, con mas
exáctitud, aunque sentian lo mismo de la retórica, dixé
ron, que era una fuerza del persuadir por medio de las
palabras. Lo mismo dice Gorgias en el lugar citado, como
obligado de Sócrates. La misma opinion sigue Teodectes, si
es suyo el libro de retórica , que anda con su nombre, y
no de Aristóteles , como se tiene comunmente: donde se
dice, que el fin de la retórica es mover con razones al hom
bre a lo que uno quiere. Pero ni aun esto satisface lo bastante:
Pues aun los que no son retóricos, mueven á lo que quieren,
como las rameras, los aduladores, y seductores. Por el con
trario, el orador no siempre persuade : para que entendamos,
que este no es fin peculiar suyo, sino comun á otros, que
no siguen esta profesion.
Algunos sin mirar al fin, dixéron, que la retórica con
siste en inventar razones acomodadas para persuadir, como
dice Aristóteles, lib. z. de la retórica. Pero esta definicion
da en el vicio, que pusimos arriba; y no contiene otra co
sa que la invencion, á la que si le falta la elocucion, no hay
oracion retórica. Por lo que dice Gorgias en Platon, se cono
ce, que no tiene á la retórica por arte mala; y que no pue
de haber retórico verdadero, si al mismo tiempo no es de
arregladas costumbres. Y aun prueba mas claro en el Phe
dro, que no se da retórica perfecta, sin una justicia con
-EEEEEE a

beratam. Quae si omnia persuadent, mon latores, corruptores. At contra non per
est hic, de quo locuti sumus, idoneus finis. suadet semper orator: ut interim non sit
Ideoque diligentiores visi sunt sibi, qui proprius hic finis ejus , interim sit com
cum de rhetorice idem sentirent, existi munis cum iis, qui ab oratore procul
maverunteam , vim dicendo persuaden absunt.
di. Quem finem Gorgias in eodem, de quo Quidam recesseruntab eventu, sicut
supra diximus, libro, velut coactus à So Aristoteles, qui dicit: Rhetorice est vis
crate, facit. A quo non dissentit Theo inveniendi omnia in oratione persuaribilia.
dectes, sive ipsius id opus est, quod de Qui finis, et illud vitium, de quo supra
rhetorice nomine ejus inscribitur, sive, diximus, habet; et insuper, quod nihil
ut creditum est, Aristotelis : in quo est, misi inventionem complectitur, quae sine
finem esse rhetorices, ducere homines di elocutione non est oratio. Apparet ex Gor
cendo in id, quod actor velit. Sed ne hic gia Platonis non rhetoricen videri malam,
quidem satis est comprehensum. Persua sed eam veram , nisi justo, ac bono non
dentenim dicendo, vel ducunt in id quod contingere. Adhuc autem in Phaedro ma
volunt, alii quoque, ut meretrices, adu nifestius facit, hancartem consummari ci
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. II. I25
sumada; y á esta opinion nos arrimamos. De otra manera,
¿cómo hubiera escrito la defensa, y alabanza de Sócrates, y
otros, que muriéron por la patria? lo que es obra, que toca
á los oradores. Y así dió contra aquellos, que abusáron de la
oratoria. Por lo qual Sócrates tuvo por indecorosa á su persona
la oracion, que Lysias le compuso”, para defender su ino
cencia: porque entónces era estilo , que á los litigantes les
escribiesen otros la defensa, que debian hacer de sí mismos,
eludiendo de este modo la ley , que prohibia abogar por
nadie. Y á semejantes maestros de eloqüencia, que separaban
esta arte de la justicia , anteponiendo lo verosimil á lo ver
dadero, los reprueba Platon. Así lo dice en el Phedro.
Estos son los fines, que se señalan comunmente á la re
tórica, y sobre los que se disputa; porque referir todo lo
que dicen los demas autores, ni es del caso, ni me es posi
ble; habiéndose propuesto los escritores de las artes, á lo -

que entiendo, el no acomodarse en sus definiciones á nada de


quanto dixéron los demas : de la qual ambicion estoy muy
léjos. Porque no diré cosas inventadas por mí, sino lo que
me quadre; como por exemplo, que la retórica es arte de
bien hablar; siendo cierto, que el que habiendo encontrado
con lo mejor, busca otra cosa , seguramente quiere lo peor.
Sentada por buena esta definicion, ya se dexa conocer, quál

tra justitiae quoque scientiam non posse, separarent , , et veris credibilia praefer
cui opinioni nos quoque accedimus. An rent. Nam id quoque dicit in Phaedro.
alíter defensionem Socratis, et eorum, Hi sunt fere fines maxime illustres,
qui pro patria ceciderant , laudem scri et de quibus praecipue disputatur. Nam.
psisset? quae certe sunt oratoris opera. omnes quidem persequi, nec attinet, nec
Sed in illud hominum genus, quod facul possum , cum pravum quoddam (utar
tate dicendi male utebatur, invectus est. bitror) studium circa scriptores artium
Nam et Socrates inhonestam sibi credidit extiterit, nihil eisdem verbis quae prior
orationem, quam ei Lysias reo composue aliquis occupasset, finiendi: quae ambi
rat : et tum maxime scribere litigatori tio proculaberit à me. Dicam enim non
bus, quae illi pro se ipsi dicerent, erat utique quae invenero, sed quae placebunt.
moris; atque ita juri , quo non licebat Sicut hoc, rhetoricen esse bene dicendi
pro altero agere, fraus adhibebatur. Do scientiam : cum reperto, quod est opti
ctores quoque ejus artis parum idonei Pla mum , qui quaerit aliud , pejus velit. His
toni videbantur, qui rhetoricen à justitia approbatis, simul manifestum est illud
126 INSTITUCIONES ORATORIAS

es el fin de la retórica, ó quál es aquella cosa última, y


principal, adonde se encamina toda arte, que los griegos
llaman término. Porque si es arte de bien decir, su fin, y
último término es esto mismo.

CAPÍTULO XVII.
DE LA UTILIDAD DE LA RETóRICA.

I. Refuta quanto se alega contra la retórica, II. Pone


una excelente alabanza de la eloqüencia.

I. Sales la qüestion de si es útil, ó no la retórica; pues


algunos suelen dar contra ella, y (lo que es peor que todo)
para desacreditar la oracion retórica, se valen de las mismas
armas, que ella suministra. La eloqüencia , dicen, libra á
los malos del castigo , y condena a veces d los buenos , y
hace que desechando los consejos acertados, se eche mano
de los que no lo son. Ella no solo enciende alborotos, y sedi
ciones, sino guerras implacables : y entónces se usa mas de
la eloqüencia , quando se combate la verdad, para que la
mentira triunfe. Dan en cara los cómicos º á Sócrates, di
=E = *.

quoque, quem finem, vel quid summum, si est ipsa bene dicendi scientia , finis
et ultimum habeat rhetorice, quod zºº ejus, et Summum est, bene dicere.
dicitur, ad quod omnis ars tendit. Nam.

CAP UT XVII.

AN UTILIS SIT RHETORICEs

I. Refellít , quae contra rhetoricam dicuntur. II. Affert egregiam laudem elo
quentiae.

I. Sauia, quaestío , an utilis rhe


torice. Nam quidam vehementer in eam
tur interim boni, consilia ducantur in pe
jus: nec seditiones modo, turbaeque po
invehi solent: et, quod sitindignissimum, pulares, sed bella etiam inexpiabilia ex
in accusationem orationis utuntur oran citentur: cujus denique tum maxime sit
di viribus. Eloquentiam esse quae poe usus, cum pro falsis contra veritatem
nis eripiat scelestos, cujus fraude damnen valet, Nam, et Socrati objiciunt comici,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 127
ciéndole , que enseñaba el modo de hacer buena la causa,
que en sí era mala; y Platon dice contra Tisias, y Gorgias,
33
que ellos prometian lo mismo. Alegan sobre lo dicho
exemplos de griegos, y romanos, que usando de la perni
ciosa retórica, no solo alteráron la paz de las ciudades, sino
que las arruináron. Motivo por el qual fué desterrada de La
cedemonia; y aun en Athenas, donde se prohibió á los abo
gados mover los afectos, se quitó en cierto modo la facultad
de arengar.
Segun esto ni los capitanes son útiles, ni los magistrados,
ni la medicina, ni aun la ciencia: pues entre aquellos se en
cuentra un Flaminio; entre los magistrados un Saturnino, un
Graco, y un Glaucia ; y en la medicina varios venenos; no
faltando tampoco hombres los mas corrompidos entre los que
tomáron el nombre de filósofos. No comamos, porque la co
mida es causa de varias dolencias. Salgámonos de las casas,
porque estas sepultáron á sus moradores. No haya espadas
para la guerra, pues se valen de ellas los ladrones. Y ¿quién
no sabe, que el agua, el fuego , sin lo que no se puede vi
vir, y (subiendo á los cielos) el sol, y la luna, los dos as
tros mas principales, dañáron muchas veces ?
II. ¿Negará alguno, que el ciego Apio deshizo con su
eloqüencia aquella ignominiosa paz de Pyrro? La divina elo
qüencia de Ciceron contra las leyes agrarias, ¿no fué pro-N
vechosa al pueblo? ¿no quebrantó el atrevimiento de Catili
= EE. Esta

docere eum, quomodo pejorem causam na; et in iis, qui philosophorum nomi
meliorem faciat : et contra Tisiam, et ne male utuntur , gravissima nonnun
Gorgiam similia dicit polliceri Plato. Et quam flagitia deprehensa sunt. Cibos a
his adjiciumt exempla graecorum, roma spernemur; attulerunt saepe valetudinis
norumque, et enumerant, qui pernicio causas. Nunquam tecta subeamus ; su—
sa non singulis tantum, sed rebus etiam per habitantes aliquando procumbunt.
publicis usi eloquentia , turbaverint civi Non fabricetur militigladius; potest uti
tatum status, vel everterint : eoque, et eodem ferro latro. Quis nescit, ignes,
lacedaemoniorum civitate expulsam , et aquas, sine quibus nulla sit vita, et (né
Athenis quoque, ubi actor movere affe terrenis immorer) solem, lunamque prae—
ctus vetabatur, velut recisam orandi po cipua siderum, aliquando etiam nocere?
teStatem. II., Num igitur negabitur deformem
Quo quidem modo, mec duces erunt Pyrrhi pacem caecus ille Appius dicen
utiles , nec magistratus , nec medicina, di viribus diremisse? Aut non divina M.
nec ipsa denique sapientia. Nam , et dux, Tullii eloquentia, et contra leges agra
Flaminius; et Gracchi, Saturnini, Glau rias popularis fuit? et Catilinae fregit
ciae magistratus; et in medicis, vene audaciam? et supplicationes, qui maxi
I 28 INSTITUCIONES ORATORIAS

na? ¿ no mereció, aunque no era soldado, la pública accion de


gracias á los dioses, que era el mayor honor, con que se pre
miaba á los capitanes vencedores? El orador ¿no quita el
miedo, y cobardía de los ánimos de los soldados , persua
diéndoles al tiempo de entrar en las mayores batallas, que
la honra es mejor, que la vida? La autoridad de los lacede
monios, y atenienses no me mueve mas, que la de los ro
manos , que hiciéron el mayor aprecio de los oradores. Y
creo, que los fundadores de las ciudades lográron el reducir
á los hombres, que andaban por los campos, á una vida
sociable, persuadiéndoles con la eloqüencia ; y que los le
gisladores no moviéron á los mismos á vivir baxo de ley, si
no valiéndose del mismo medio. Aun los preceptos para la
vida humana, buenos de suyo, reciben nueva fuerza, quan
do con los discursos de la retórica se manifiesta mas su utili
dad. Y así dado caso, que la oratoria sirva para lo bueno,
y lo malo, no debemos condenar una cosa, de que podemos
hacer buen uso.
Pero esto solo lo pondrán en disputa aquellos, que hi
ciéron consistir toda la retórica en el persuadir. Pero supo
niendo, como supongo, que es arte de bien hablar, se ha
de confesar, que ella contribuye, para que el orador sea
hombre bueno. Y cierto que aquel Dios, primera causa de
todas las cosas, y autor de todo el mundo, por ninguna otra

mus honor victoribus bello ducibus da praecepta, etiamsi natura sunt honesta,
tur, in toga meruit? Non perterritos mi plus tamen ad formandas mentes valent,
litum animos frequenter à metu revocat quoties pulcritudinem rerum claritas ora
orator? et tot pugnandi pericula ineunti tionis illuminat. Quare, etiamsi in utram
bus, laudem vita potiorem esse persua que partem valent arma facundiae, non
det? Neque vero me lacedaemonii, aut tamen est aequum, id haberi malum, quo
athenienses magis moverint, quam po bene utilicet.
pulus romanus, apud quem summa sem Verum haec apud eos fortasse quaeran
per oratoribus dignitas fuit, Equidem, nec tur, qui summam rhetorices ad persua
urrbium conditores reor aliter efecturos dendivim retulerunt. Si vero est bene
fuisse, ut vaga illa multitudo coiret in dicendi scientia, quem nos finem sequi
populos, misi doctavoce commota: nec mur, ut sit orator in primis vir bonus,
legum repertores sine summa vi orandi utilem certe eam esse, confitendum est.
consecutos, ut se ipsi homines ad servi Et hercle Deus ille princeps parens re
tutem juris astringerent. Quin ipsa vitae rum , fabricatorque mundi, nullo ma
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. I29
cosa distinguió mas al hombre de los irracionales, y mortales
brutos, que por la facultad de decir: pues vemos, que nos
exceden en la grandeza de sus cuerpos , en las fuerzas,
en la robustez, en el sufrimiento, y en la velocidad; y que
ellos ménos que nosotros necesitan de ayuda agena. Porque
la velocidad en andar, el alimentarse, y el nadar, lo apren
diéron de la naturaleza sin otro maestro. La mayor parte de
ellos se defienden del frió con su misma piel, tienen sus
armas naturales, y el alimento á la mano: quando al hom
bre todo esto le cuesta mucho trabajo. Pero á nosotros ella
nos dotó de razon, como cosa la mas principal, por la que
quiso , que nos pareciesemos á los dioses inmortales. Pero
aun esta misma razon no nos aprovecharia tanto, ni se ma
nifestaria tanto en nosotros , si no pudiésemos declarar por
las palabras nuestros sentimientos interiores; de lo que ca
recen los irracionales enmedio de algun conocimiento que tie
nen. Porque en la fábrica de las habitaciones, en texer, y
formar sus nidos, en sacar sus polluelos, y criarlos, y ( lo
que es mas) en saber guardar para el invierno , no pode
mos llegar á su habilidad: y semejante á esto es el labrar
la cera, y la miel, lo que parece ser obra, que pide algun
conocimiento, pero por carecer ellos de lenguage , los lla
mamos mudos, é irracionales. Aun á los hombres, á quienes
la naturaleza hizo mudos, ¿quán, poco les aprovecha el en
tendimiento?
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, . . . . - o, a rº , - - --- . . .. . . . . .»
y"
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gis hominem separavità caeteris, quae que tam nos juvaret, neque tam esset
quidem mortalia essent , animalibus, in nobis manifesta, nisi , quae concepis
quam dicendi facultate. Nam corpora Semus mente, promere etiam loquendo
quidem magnitudine, viribus, firmita posSemus : quod magis deesse caeteris
te, patientia , velocitate praestantiora animalibus, quam intellectum , et co
in illis mutis videmus ; eadem minus gitationem, quandam videmus. Nam , et
egere acquisitae extrinsecus opis. Nam, moliri cubilia, et nidos texere, et edu
et ingredi citius , et pasci , et tranare care foetus, et excludere, quin etiam re
aquas citra docentem natura ipsa sciunt. poñere in hiemem alimenta, opera quae
Et pleraque contra frigus ex suo corpo dam nobis inimitabilia , qualia sunt ce
re vestiuntur , et arma his ingenita rarum , et mellis , eficere, non nullius
quaedam , et ex obvio fere victus : cir fortasse rationis est: sed quia carent ser
ca quae omnia multus hominibus labor mone, quae id faciunt, muta, atque ir
est. Rationem igitur nobis praecipuam rationabilia vocantur. Denique homines,
dedit, ejusque nos socios esse cum diis quibus negata vox est, quantulum adju
immortalibus voluit, Sed ipsa ratio, ne Vat animus ille coelestis?
ToM. L.
I3o INSTITUCIONES ORATORIAS

Pues si no nos concediéron los dioses cosa mas noble que


el habla, ¿qué cosa puede haber mas digna de nuestro tra
bajo, y diligencia? ¿Y en qué otra cosa procuraremos aven
tajar los unos á los otros mas que en aquello, por lo que
somos superiores á las bestias ? Esto tanto mas , quanto no
hay cosa alguna, en que mas se luzca nuestro trabajo. Esto se
podrá mejor entender del mucho auge, á que la eloqüen
cia ha llegado, y del aumento, de que aun es susceptible.
Pues para pasar en silencio, quán ítil es defender á los
amigos, dirigir las determinaciones del senado, persuadirá
un pueblo, y á un exército lo que quiere un hombre ajus
tado, ¿no es grande alabanza la que se consigue con el en
tendimiento, y con las palabras comunes á todos? de manera
que no solo parezca, que hablas, sino que despides truenos,
y rayos, como le sucedió á Pericles.
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Quare si nihil à diis oratione melius omittam, defendere amicos, regere con
siliis senatum , populum , exercitum in
accepimus, quid tam dignum cultu, , ae quae velit ducere, quam sit utile, con
labore ducamus?
praestare aut quam
hominibus, quo.malimus
in quo Pº ho veniatque bono viro; nonne pulcrum,
mines caeteris animalibus praestantº Eo vel hoc ipsum est, ex communi intelle
quidem magis, quod nulla in parte ple ctu , verbisque quibus utuntur omnes,
nius labor gratiam refert, Idadeo mani tantum assequilaudis, et gloriae, utnon
unde, et loqui, et orare, sed, quod Pericli con
festum
quousque jam siprovecta
erit, cogitaverimus,
sit orandi facul tigit, fulgurare, actonare videaris?
ías, et adhuc augeri potest. Nam, ut
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. Ir. :I3 r
Q.

CAPÍTULO XVIII.

sI LA RETóRICA. Es ARTE.

Despues de refutadas las-razones en contrario, sienta,


que la retórica es arte.

S. hubiera de dexar correr la pluma en este punto,


quanto quiero , seria nunca acabar. Pasemos pues, á tra
tar ahora de si la retórica es arte ; cosa tan sentada para
los que han tratado de eloqüencia , que aun los libros,
que sobre esto escribiéron, los intituláron: del arte retórica;
y del mismo modo Ciceron da el nombre de eloqüencia ar
tificial á la que otros llaman retórica. Lo que no solo se
apropiáron los oradores, para dará entender, que con sus
estudios habian adelantado algo, sino que aun la mayor par
te de los estoicos, y peripatéticos convienen en lo mismo.
Por lo que á mí toca, he estado dudando, si trataria esta
qüestion : porque ¿quién habrá tan ignorante, y tan apar
tado de los conocimientos comunes al hombre, que, habien
do arte para fabricar; para texer , y aun para trabajar el
barro, juzgue puede hacerse sin arte la obra de la eloqüen
= -s

CAPUT XVIII.

AN RHETQRIcE sIT ARs.

Refutatis, quae contra dicuntur, statuit rhetoricen es se artem.

- Fue non erit, si expatiari parte tores tantum vindicaverunt, ut studiis


in hac , et indulgere voluptati velim. -aliquid suis praestitisse videantur: sed
Transeamus igitur ad eam quaestionem, cum his philosophi, et stoici, et peripa
quae sequitur, an rhetorice ars slt. Quod tetici plerique consentiunt. Ac me dubi
quidem adeo exiis, qui praecepta dicen tasse confiteor, an hanc partem quaestio
di tradiderunt, nemo dubitavit, ut etiam nistractandam putarem. Nam quis est
ipsis librorum titulis testatum sit, scri adeo non ab eruditione modo, sed à sen
ptos eos de arte rhetorica : Cicero vero su remotus hominis, ut fabricandi qui
etiam quae rhetorice vocetur, esse arti dem, et texendi, et è luto vasa ducen
ficiosam eloquentiam dicat. Quod non ora di artem putet; . rhetoricen autem , ma
2
-

132 º INSTITUCIONES ORATORIAS T.

cia, que es la mas grande , la mas hermosa, y la mas remon


tada, como llevo dicho? Yo ciertamente juzgo, que los que
contra esto disputáron, no tanto fué, porque así lo sintiesen,
quanto por exercitar el ingenio , defendiendo una cosa de
tanta dificultad; así como Polycrates alabó al tirano Busiris,
y á Clytemnestra; y del mismo tenemos una oracion, que,
segun cuentan, se dixo contra Sócrates. y
Algunos son de opinion, que la retórica es natural, pero
que es ayudada con el exercicio, como dice Antonio en los
libros de Ciceron sobre el orador, afirmando, que es cierta
observacion , no arte. Lo qual no se dixo como opinion, que
deba seguirse , sino como dicho en boca de Antonio, quien
siempre disimuló el artificio retórico. La opinion parece ser
de Lysias, fundado en que quando hablan en su defensa los
ignorantes, los bárbaros, y aun los esclavos, en sus discur
sos hay algo, que tiene semejanza con el exórdio , narracion,
confirmacion, y refutacion; poniendo al fin su deprecacion,
que hace veces de epílogo. Añaden despues la cavilacion de
decir, que no pudo existir ántes del arte, lo que segun arte
se hace; que los hombres siempre habláron con arte, ya en
defensa suya, ya contra otros; y que los primeros inventores
de la oratoria viviéron ácia los tiempos de Tisias, y Corax.
Luego síguese, que la retórica no es arte, Pues hubo ántes
oraciones, y discursos. No me afano en averiguar la época
..-----º" --
- -

- y
ximum, ac pulcherrimum (ut supra, di- tum: sed ut Antonii persona serve
ximus) opus, in tam sublime fastigium tur, qui dissimulator, artis fuit, Hanc
existimet sine arte venisse? Equidem illos, autem opinionem habuisse Lysias vi
qui contra disputarunt, non tamid sen detur : cujus sententiae talis defensio
sisse, quod dicerent , quam exercere in est, quod indocti, et barbari ,, et ser
genia materiae dificultate credo voluisse: vi pro se cum loquuntur, aliquiddicant
sicut Polycratem cum Busirim laudaret, simile principio , narrent, probent, re
et Clytemnestram : quanquam is, qudd futent, et (quod vim habeat epilogi) de
his dissimile non esset, composuisse ora precentur. Deinde adjiciuntillas verbo
-tionem quae est habita contra Socratem, rum cavillationes : nihil quod ex arte
- dicitur. fiat, ante artem fuisse : atqui dixisse ho
Quidam naturalem esse rhetoricen mines pro se , et in alios semper : do
volunt, ettamen adjuvari exercitatione ctores artis sero, et circa Tisiam, et Co
non diffitentur : utin libris Ciceronis de raca primum repertos: orationem igitur
oratore dicit Antonius : observationem. ante artem fuisse, eoque artem non esse.
quandam esse , non artem. Quod non Nos porro, quando coeperit hujus rei do
-ideo, ut provero accipiamus, est posi -ctrina, non laboramus exquirere : quanº
-
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. II. I33
de su enseñanza, aunque en Homero, y en el preceptor
Phenicio ya se encuentran muchos oradores , y todo género
de oraciones, y varias competencias entre los jóvenes sobre
la eloqüencia. ¿Qué mas? aun entre las obras cinceladas, que
contenia el escudo de Aquiles, hay pleytos, y litigantes.
Basta el advertir , que todo lo que se perfecciona con
el arte, tomó principio de la naturaleza; ó neguemos ser
arte la medicina , cuya invencion se debió á la observacion
de lo que era saludable, y nocivo; y como quieren algunos,
toda ella se compone de experimentos. Pues ya ántes de
haber esta arte, hubo quien ataba las heridas; y curó la ca
lentura con la quietud, y dieta ; no porque tuviese para
ello razon alguna, sino porque la misma disposicion del cuer
po le obligaba á hacerlo así. Digamos que no hay arte de edi
ficar, porque los primeros hombres hiciéron sin ella sus ca
bañas. Digamos que no hay música, porque en todas las na
ciones hay su canto, y danza. De este modo, si qualquiera
modo de hablar se llama retórica, confesaré que ya la hubo
ántes de ser arte. Pero si no todo hombre, que habla , es
orador; y si al principio no hablaban los hombres como ora
dores; se ha de confesar , que el arte constituye al ora
dor, y que no hubo alguno, ántes que hubiese arte.
Con lo qual se desvanece la objecion que hacen , di
ciendo, que no es efecto del arte aquello, que puede uno
hacer, sin haberle aprendido; y que aun los que no apren
- * ---- -

s- =sessmemana

º ,
quam apud Homerum, et praeceptorem tia: non quia rationem videbat, sed quia
Phoenicem, tum agendi, tum etiam lo id valetudo ipsa coegerat, mitigavit.
quendi, et oratores plures, et omne in tri Nec fabrica sit ars: casas enim primi
bus ducibus orationis genus, et certami illi sine arte fecerunt. Nec musica: can.
na quoque proposita eloquentiae inter ju tatur, ac saltatur per omnes gentes ali
venes invenimus: quin in caelatura cly quo modo. Ita si rhetorice vocari debet
pei Achilis, et lites sunt, et actores. sermo quicumque, fuisse eam antequam.
Illud admonere satis est, omnia quae esset ars, confitebor. Si vero, non quis
ars consummarit, à natura initia duxis quis loquitur, orator est, et tum non
se : aut tollatur medicina, quae ex ob tanquam oratores loquebantur; necesse
servatione salubrium, atque his contra est oratorem factum arte, nec ante ar
riorum reperta est; et, ut quibusdam tem fuisse, fateantur.
placet, tota constat experimentis. Nam, Quo illud quoque excluditur, quod
et vulnus deligavit aliquis antequam haec dicunt: non esse artis id quod faciat, qui
ars esset: et febrem quiete, et abstinen non didieerit; dicere autem homines,
I34 INSTITUcroNEs ORATORIAS

diéron la retórica hablan con ella. En prueba de esto ale


gan, que el remero Demades”, y el farsante Eschines º
llegáron á ser oradores. Mala razon; porque no puede dar
se orador sin haber aprendido el arte, ni puede negarse, que
ellos lo aprendiéron, aunque tarde. Por lo que mira á Es
chines, desde el principio se exercitó en las letras, que su
padre enseñaba. Ni tampoco es cierto, que Demades no
aprendiese nada; pues llegó á ser lo que fué, en fuerza del
continuo exercicio de perorar, que es el mejor maestro.
Y si hubiera aprendido mejor, hubiera llegado á ser mas
consumado. Pues nunca, él se atrevió á escribir oraciones, por
las que creamos , que llegó árayar mucho en la oratoria.
Otra calumnia levantan á la retórica, arguyendo así.
Ningun arte, que se funda en preceptos verdaderos, da
asenso d opiniones falsas. Con que no puede ser arte la re
tórica , quando esta da asenso a la falsedad. Confieso, que
á veces la retórica dice lo falso por lo verdadero, pero no
por eso sigue opiniones falsas; porque no es lo mismo creer
uno una false dad, que hacérsela tragará otro. Porque á ve
ces tambien los generales usan de engaños contra el enemi
go, como Anibal, que hallándose cercado por Fabio, ató va
rios haces de sarmientos á las hastas de una manada de bue
yes, y pegándoles fuego, los echó á los montes, para ha
cerle creer, que huia ; en lo qual él no se engañaba, sino

et qui non didicerunt. Ad cujus rei con Altera est calumnia , nullam artem.
firmationem afferunt Demadem remigem, falsis assentiri opinionibus, quia consti
et AEschinem hypocriten oratores fuisse. tui sine praeceptione non possit, quae
Falso: nam neque orator esse , qui non semper vera sit: rhetoricen assentiri fal
didicit, potest: et hos sero potius, quam. sis: non esse igitur artem, Ego rhetori
nunquam didicisse, quis dixerit, Quan cen nonnunquam dicere falsa pro veris
quam AEschines ab initio sit versatus in confitebor, sed non ideo in falsa quoque
literis, quas pater ejus etiam docebat: esse opinione concedam : quia longe di
Demadem , neque non didicisse, certum. versum est, sibi ipsi quid videri, et
sit: et continua dicendi exercitatio po ut alii videatur, eficere. Nam, et im
tuerit tantum , quantuscunque postea fuit, perator falsis utitur saepe : ut Annibal,
fecisse. Nam id potentissimum discendi cum inclusus à Fabio, sarmentis circum
genus est. Sed, et praestantiorem, si di cornua boum deligatis, incensisque, per
dicisset, futurum fuisse dicere licet. Ne noctem in adversos montes agens armen
que enim orationes scribere est ausus, ut ta, speciem hosti abeuntis exercitus de
eum multum valuisse in dicendo Sciamus. dit; sed illum fefellit; ipse, quid verum
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 135
que engañó al enemigo. Ni tampoco tenia falsa opinion de
si mismo Teopompo lacedemonio, quando tomando el vesti
do de su muger, se salió de la carcel, sino que engañó á la
guardia. A este modo el orador, quando usa de lo falso en
lugar de lo verdadero, ya sabe que es falso, y que se va
le de ello en lugar de la verdad; y así aunque engaña á
otro, él no tiene opinion falsa. Ni tampoco se hallaba ofus
cado el ánimo de Ciceron, quando se gloriaba de haber lle
nado de tinieblas á los jueces en la causa de Cluencio. Asi
mismo quando el pintor en fuerza del arte pinta en el lien
zo varias prominencias, y otros bultos á lo léjos, no dexa
de conocer, que todo aquello es llano. *

Dicen tambien los contrarios: todas las artes tienen un


fin particular, adonde se encaminan; y la retórica unas ve
ces no se propone fin ninguno, otras no le logra. Es falso.
Ya hemos dicho, que la retórica tiene su fin, y qual sea este;
y siempre el orador cumplirá con él, porque siempre habla
rá á propósito. Si esta objecion tiene alguna fuerza, será
contra los que sostienen, que el persuadir es el fin en la
oratoria. Pero ni esta, segun la hemos definido, ni el oficio
del orador depende del suceso. Procura sí, triunfar el orador,
y persuadir, pero una vez, que hable á propósito, aunque
no persuada, ya cumplió con lo que promete la retórica.
Tambien el piloto pretende conducir la nave salva al puer
to, pero si una tempestad la arrebató, no por eso será mé
º

El
-

esset, non ignoravit. Nec vero Teopom dant: hunc modo nullum esse in rheto
pus lacedaemonius , cum permutato rice, modo non praestari eum, qui pro
cum uxore habitu è custodia ut mulier mittatur. Mentiuntur. Nos enim esse fi
evasit, falsam de se opinionem habuit, nem jam ostendimus, et quis esset, dixi
sed custodibus praebuit. Item orator, cum mus. Praestabit hunc semper orator: sem
falso utitur pro vero , scit esse falsum, per enim bene dicet. Firmum autem hoc,
eoque se pro vero uti; non ergo falsam quod opponitur, adversus eos fortasse sit.
habet ipse opinionem , sed fallit alium. qui persuadere finem puta verunt. Noster
Nec Cicero, cum se tenebras offudisse ju orator, arsque a nobis finita, non sunt
dicibus in causa Cluentii gloriatus est, posita in eventu. Tendit quidem ad vi
nihil ipse vidit. Et pictor cum vi artis ctoriam, qui dicit: sed, cum bene dixit,
suae effecit, ut quaedam eminere in ope etiamsi non vincat, id quod arte conti
re, quaedam recessisse credamus , ipse metur, effecit. Nam , et gubernator vult
ea plana esse, non nescit. salva nave in portum pervenire : si ta
Ajunt etiam : omnes artes habere fi men tempestate fuerit abreptus , non ideo
mem aliquem propositum, ad quem sten minus erit gubernator, dicetque notum
136 INSTITUCIONES ORATORIAS

nos hábil, y podrá decir aquello: Con tal que yo, dirija bien
mi nave, crc. El médico igualmente pretende la cura del
enfermo, pero si no logra el fin, ó porque prevaleció la
enfermedad, ó por culpa del enfermo, ó por otro acciden
te, como él no haya omitido quanto prescribe el arte, ya
cumplió con el fin de la medicina. Del mismo modo el fin de
la oratoria, es hablar á propósito para persuadir: pues co
mo luego demostraremos mas claramente, esta arte no con
siste en el efecto, sino en el acto. De este modo se desva
nece aquella otra objecion, que hacen , de que todas las ar
tes saben, quando lográron el fin, lo que no tenemos (dicen)
en la retórica; pues todos presumen hablar bien,
, Acusan tambien á la retórica, de que se vale de los vi
cios, lo que en ninguna arte sucede; pues ella alega cosas
falsas, y mueve las pasiones. Nada de esto es indecoroso;
pues nace de buen fin ; y así nada tiene de vicioso, y repre
hensible. Porque el decir una mentira , aun al sabio se le
concede alguna vez ; y el mover las pasiones, se hace pre
ciso, quando no hay otro medio de traer al juez á la ra
zon; pues muchas veces hacen este oficio hombres ignoran
tes, á quienes es preciso engañarlos, para que hagan lo jus-,
to. Porque si se suponen sabios á los jueces, sabio al audi
torio, donde no tenga entrada la envidia, el favor, la pre
ocupacion, y los testigos falsos , poco tendrá que hacer la
retórica, la que solo servirá para deleitar. Pero si los ánimos

i11ud : Dumº carum rectum teneam, Et me sum dicat, et affectus moveat. Quorum
dicus sanitatem aegri petit : si tamen neutrum est turpe, cum ex bona ratione
aut valetudinis vi , aut intemperantia proficiscitur: ideoque nec vitium. Nam,
aegri, aliove quo casu summa non con et mendacium dicere, etiam sapienti ali
tingit, dum ipse omnia secundum ratio quando concessum est: et afectus, si ali
nem fecerit, medicinae fine non exci ter ad aequitatem perduci judex non po
dit. Ita oratori bene dixisse finis est. terit, necessario movebit orator. Imperi
Nam estars ea, ut post paulum clarius ti enim judicant, et qui frequenter in
ostendemus , in actu posita, non in efe hoc ipsum faliendi sunt, ne errent. Nam,
ctu. Ita falsum erit illud quoque, quod si mihi sapientes judices dentur, sapien
dicitur : artes scire, quando sint finem tum conciones, atque omne concilium:
consecutae, rhetoricen nescire. Nam, se nihil invidia valeat, nihil gratia, nihil
quisque bene dicere intelligit. opinio praesumpta , falsique testes : per
Uti etiam vitiis rhetoricen, quod ars quam fit exiguus eloquentiae locus, et
nulla faciat, criminantur : quia, et fal prope in sola delectatione ponatur. Sin,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 137

de los oyentes son inconstantes, y es combatida con mil ca


lumnias la verdad, entónces se ha de pelear con todas las
fuerzas del arte, y echar mano de todas las máquinas. Porque
al que va descaminado, no se le podrá traer á camino dere
cho sino por el torcido.
A esto se reduce quanto se alega contra la retórica. Ha
cen otras objeciones menores, pero se reducen á lo dicho.
Probemos ahora brevemente, qué es arte. Si el arte, como
dice Cleantes, es cierta facultad, que sirve de camino, y po
ne órden en las cosas, ninguno negará, que en el bien de
cir hay cierto camino, y órden. Si, atendiendo al fin, que
todos admiten, decimos que el arte consta de reglas, y
preceptos, que conspiran, y se ponen en práctica para lo
grar un fin útil para la vida, ya hemos hecho ver, que to
do esto se verifica en la retórica. Y ¿qué diré de que tam
bien consta de especulativa, y práctica, como las demas ar
tes ? Y si la dialéctica es arte, lo ha de ser igualmente la
retórica, siendo distinta de aquella º", no en el género, sino
en la especie. Ni se ha de pasar en silencio, que es arte lo
que uno hace por reglas, y otro sin ellas: y que el primero
aventaja al segundo. En la retórica no solamente aventaja el
que está instruido en sus reglas, al que no lo está ; sino
que el mas impuesto excede al que lo está ménos: pues de
otro modo no habria tanta variedad de reglas, ni serian tan

et audientium mobiles animi, et totma sentientibus, et coexercitatis ad finem


lis obnoxia veritas , arte pugnandum vitae utilem , jam ostendimus nihil nom
est, et adhibenda quae prosunt. Nec horum in . rhetorice inesse. Quid quod,
enim, qui recta via depulsus est, redu et inspectione, et exercitatione, ut artes
ci ad eam, nisi alio flexu potest. caeterae, constat? Nec potest ars non es
Haec sunt praecipua, quae contra rhe se, si ars est dialectice, quod fere con
toricen dicantur : alia, et minora, et stat; cum abea specie magis, quam ge
tamen ex his fontibus derivata. Confir mere differat. Sed necilla omittenda
matur autem eam esse artem breviter. sunt, qua in re alius se inartificialiter,
Nam sive (ut Cleanthes voluit) ars est alius artificialiter gerat, in ea esse ar
potestas , viam , ac ordinem efficiens, tem : et in eo quod, qui didicerit, me
esse certam viam, atque ordinem in bene lius faciat, quam quinon didicerit, es
dicendo memo dubitaverit : sive ille ab se artem. Atqui non solum doctus indo
omnibus fere probatus finis observatur, ctum , sed etiam doctior doctum in rhe
artem constare ex praeceptionibus con torices opere superabit : neque essent
ToM. I.
138 INSTITUCIONES ORATORIAS

consumados los que han enseñado esta facultad. Verdad, que


la deben confesar todos, y yo principalmente, que no separo
el oficio del orador de la bondad moral,

CAPÍTULO XIX.
EN QUÉ GÉNERo DE ARTEs sE coMPREHENDE
. LA RETóRICA.

H, algunas facultades, que consisten en la especula


cion, y conocimiento de las cosas, y que sin operacion al
guna, solo descansan en la averiguacion de su objeto; lla
madas por eso teóricas, qual es la astrología. Otras al contra
rio en la obra, y execucion de la cosa, que llaman practi
cas, como el arte de danzar. Otras finalmente en la imita
cion de todo lo que se presenta á la vista , tomando su
fin de la perfeccion de la obra, á las que llaman de imi
tacion, como la pintura. Segun esto debemos decir, que
la retórica es arte práctica; pues ella perfecciona la obra
en que se emplea; lo que ninguno ha negado hasta ahora.

ejus aliter tam multa praecepta, tam- praecipue, qui rationem dicendi à bono
que magni, qui docerent. Id quod cum , viro non separamus.
omnibus cónfitendum est, tum nobis

C A P U T X I X.

Ex Quo GENERE ARTIUM SIT RHEToRICE.

Con sintautem artium aliae po operis relinquit, quae ºrfanzini dicitur,


sitae in inspectione , id est cognitione, qualis est saltatio : aliae in effectu, quae
et aestimatione rerum, qualis est astro operis, quod oculis subjicitur, consum
logia , nullum exigens actum , sed ipso matione finem accipiunt, quam acturnºv
rei cujus studium habet, intelleetu con appellamus , qualis est pictura : fereju
tenta, quae de ºpin y vocatur: aliae in dicandum est rhetoricen in actu consis
agendo, quarum in hoc finis est, et i tere. Hoc enim quod est oficii sui per
pso actu perficitur, nihilque post actum ficit: atque ita ab omnibus dictum est.
-
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. II. I39
Aunque yo soy de parecer, que toma mucho de las de
mas artes: pues á veces se contenta únicamente con la es
peculacion, y así habrá retórica en el orador , aunque no
hable una palabra; porque, aunque dexe el exercicio de
la oratoria, ó porque quiera, ó porque se lo impida qual
quiera otro motivo, no dexará de ser tan orador, como mé
dico el que dexa de curar. Aun los estudios , que no se
manifiestan por la obra, tienen su utilidad, y fruto, y aun
no sé si es el principal; que es aquel deleyte, que el hom
bre percibe allá á sus solas en la contemplacion de la ver
dad , aunque no se emplee en obra alguna exterior. Este
mismo fruto se conseguirá en el efecto, escribiendo oracio
nes, ó historias, las que no tengo por cosa muy agena de
la oratoria. - -

Pero si hemos de reducir la retórica á una de las es


pecies dichas, llamémosla práctica, ó administrativa, pues
todo es uno : porque la obra, y execucion es donde prin
cipalmente se emplea, y donde tiene mas uso.

Mihi autem videtur, etiam ex ilís rum, cum ab actu, id est opere recesse
caeteris artibus multum assumere. Nam, runt , et contemplatione sui fruuntur.
et potest aliquando ipsa res per se in Sed effective quoque aliquid simile, scri
spectione esse contenta. Erit enim rhe ptis orationibus, vel historiis, quod ip
torice in oratore etiam tacente: et si de sum opus in parte oratoria merito po
sierit agere, vel proposito, vel aliquo ca nimus, consequetur.
su impeditus, non magis desinet esse Si tamen una ex tribus artibus ha
orator, quam medicus, qui curandi fe benda sit, quia maximus ejus usus actu
cerit finem. Nam est aliquis, ac nescio, continetur, atque est in eo frequentissi
an maximus, etiam ex secretis studiis ma, dicatur activa, vel administrativa.
fructus; actum pura voluptas litera Nam, et hoc ejusdem rei nomen est.

S2
I4O INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTUL o XX.
QUÉ cosA AYUDA MAS PARA LA ELoQUENCIA., EL ARTE, -

ó LA NATURALEZA. -

N, ignoro, que se suele preguntar, si la naturaleza


contribuye mas para la eloqüencia , que el arte. Lo que
ciertamente nada hace á nuestro intento, aunque sin uno y
otro no puede darse orador consumado. No obstante juzgo
por muy del caso entender el estado de la presente qües
tion. Porque si separamos las dos cosas, la naturaleza cier
tamente podrá mucho aun sin el arte , y este sin aquella
de nada servirá. Pero si ámbas cosas se juntan, aunque en
mediano grado, siempre diré, que la naturaleza es la que
mas contribuye. Mas si el orador es consumado , esto lo
debe ántes al arte, é instruccion, que á la naturaleza: á la
manera, que á la tierra de suyo esteril nada aprovecha el
cultivo, pero si es fecunda por naturaleza , podremos es
perar algun fruto , aun quando falte la labranza ; mas si
ademas de ser fecunda, se le junta el cultivo, este servirá
de mucho mas, que su natural fecundidad. Y si Praxiteles
hubiera de hacer una estatua de una piedra de molino, mas
escogeria yo un mármol de la isla de Paros, aunque tosco;

CA P U T XX.

UTRUM PLUs con FERAT ELoQUENTIAE ARs, AN NATURA.

Si, quaeri etiam , naturáne plus mediocribus quidem utrisque majus ad


ad eloquentiam conferat, an doctrina. huc naturae credam esse , momentum;
Quod ad propositum quidem nostri ope consummatos autem plus doctrinae de
ris nihil pertinet: mec enim consumma bere quam naturae putabo : sicut terrae
tus orator misi ex utraque fieri potest. nullam fertilitatem habenti nihil opti
Plurimum tamen referre arbitror, quam mus agricola profuerit : è terra uberi
esse quaestionem in hoc loco velimus. utile aliquid, etiam nullo colente, nasce
Nam si parti utrilibet omnino alteram tur; at in solo foecundo plus cultor,
detrahas , natura etiam sine doctrina quam ipsa per se bonitas soli efficiet.
multum valebit, doctrina nulla esse si Et, si Praxiteles signum aliquod ex mo
me natura poterit. Sin ex paricoeant, in lari lapide conatus esSet exculpere , Pa
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. I4 I
pero si pretendiese, hacerla de esta misma, recibiria mayor
precio de la mano del artífice, que de la materia. Finalmen
te, la materia la da la naturaleza, y el arte le da la doctrina.
Este hace la obra, aquella la recibe. El arte sin materia nada
vale: esta sin aquella no dexa de tener su valor. El arte
excelente vale mas, que la materia mas Preciosa
-
---

CAPÍTULO XXI.
sI LA RETóRICA Es vIRTUD.

Aun es mas célebre la qüestion, de si la retórica es


de aquellas artes, que por su naturaleza ni son malas, ni
buenas, sino indiferentes, segun el uso que de ellas se hace;
ó si realmente es en sí cosa laudable. Yo ciertamente en mu
chos, que exercitáron la oratoria, y aun al presente la exer
citan, ó no encuentro arte alguna, lo que se llama atechnia,
ó si hay alguna, es perjudicial, que decimos cacotechnia : pues
veo que la exerciéron, sin tener ingenio, ni instruccion, y mo
vidos de su descaro, ó del hambre, abusáron de ella para
ruina de los hombres. Hay tambien ciertas habilidades ocio
sas, é inútiles, que llaman mataiotechnia, y no teniendo na
-

rium marmor mallem rude : at si illud fingit, illa fingitur. Nihil ars sine ma
idem artifex expolisset; plus in manibus teria: materiae, etiam sine arte pre
fuisset, quam in marmore. Denique na tium est. Ars summa materia optima
tura materiae, ars doctrinae est. Haec melior.
y.

CAP U T XXI. -

AN VIRTUS SIT RHETORICE,

- In, quaestio est major, an ex me minatur, puto, (multos enim video si


diis artibus, quae neque laudari per se, ne ratione , sine literis, qua vel impu
neque vituperari possunt, sed utiles, aut dentia, vel fames duxit, ruentes) autma
secus secundum mores utentium fiunt, lam quasi artem, quam º anorºxvíav di
habenda sit rhetorice: an sit, ut complu cimus: nam, et fuisse multos , et esse
ribus etiam philosophorum placet, virtus. nonnullos existimo , qui facultatem di
Equidem illud quod in studiis dicen cendi ad hominum perniciem converte
diplerique exercuerunt, et exercent,
aut nullam artem , quae 87%via no
rint. Mazatºzºxvi a quoque est quae
dam, id est supervacua artis imitatio
142 INSTITUCIONES ORATORIAS
da de bueno, ni de malo, solo se reducen á un vano traba
jo; qual era la habilidad de aquel, que á cierta distancia iba
ensartando sin errar varios garbanzos en una aguja; visto lo
qual por Alexandro, mandó premiarle con un celemin de
ellos: premio á la verdad muy digno de tal trabajo. A esta habi.
lidad comparo yo el trabajo de aquellos, que gastan toda su
vida en declamaciones sobre asuntos agenos enteramente de la
verdad. Pero el arte, que pretendemos formar, y cuyo mo
delo tenemos en nuestra alma, tal qual conviene al hombre
bueno, y que es la verdadera retórica, seguramente es virtud.
Esto lo evidencian los filósofos con muchos, y sutiles
argumentos; pero á mí me parece cosa clara por la razon
manifiesta, que hemos dado. Arguyen ellos de este modo. Si
es virtud el guardar consonancia en lo que hacemos, ó de
aramos de hacer, parte de lo qual es la prudencia , lo mis
mo sucederá en las cosas, que se deben decir, ó callar. Y
asimismo; si son virtudes aquellas , de las que la misma
naturaleza , sin el arte , nos dió ciertas semillas, y princi
pios , como se ve en la justicia, de la que aun en los bár
baros se ve cierta imagen; ciertamente se concluye, que no
sotros de tal suerte hemos sido formados por la naturaleza,
que aunque no con toda perfeccion , a lo ménos podemos ha
blar en nuestro favor con solos los principios, que ella nos
comunicó de esta facultad. Lo que no sucede con aquellas
- -

- =-- -

- .

quae nihil sane, nec boni, nec mali ha acutis conclusionibus colligunt; mihive
beat, sed vanum laborem : qualis illius planiore,
ro etiam ac proprie nostra pro
fuit, qui grana ciceris ex spatio distan batione videtur esse perspicuum. Ab il
te missa , in acum continue , et sine lis haec dicuntur : si consonare sibi in
frustratione inserebat: quem cum spectas faciendis, ac non faciendis, virtutis est,
set Alexander, donasse eum dicitur ejus quae pars ejus prudentia vocatur, ea
dem leguminis modio. Quod quidem prae dem in dicendis, ac non dicendis erit.
mium fuit illo opere dignissimum. His Et: si virtutes sunt, ad quas nobis et
ego comparandos existimo, qui in decla iam antequam doceremur, initia quae
mationibus, quas esse veritati dissimilli dam, ac semina sunt concessa natura;
mas volunt, aetatem multo studio, ac utad justitiam , cujus rusticis quoque,
labore consumunt. Verum haec, quam in ac barbaris apparet aliqua imago; nos
stituere conamur, et cujus imaginem certe sic esse ab initio formatos, ut pos
animo concepimus, quae bono viro con semus orare pro nobis, etiamsi non per
venit, quaeque est vera rhetorice, vir fecte, tamen ut inessent quaedam (ut
tus erit. dixi) semina ejus facultatis, manifestum
est. Non eadem autem his natura arti
Quod philosophiquidem multis, et
IDE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. II. I43
artes, que estan apartadas de la virtud. Por donde siendo
el lenguage de dos maneras; el uno continuado, que llamamos
eloqüencia; el otro conciso, y breve, que llaman dialéctica
(las quales ámbas á dos las hizo una misma Zenon, quan
do comparó la primera á la mano extendida, y la segunda
á la mano cerrada ) esta última, que disputa de las cosas,
será tambien virtud; y por lo mismo no se dudará de que
lo es aquella primera manera de hablar con hermosura, y
abundancia de palabras.
Pero quiero dará entender mas esto por la misma obra
de la retorica. Porque ¿qué logrará un orador con sus ala
banzas, si no sabe hacer distincion entre la virtud, y el vi
cio? ¿ que logrará con el aconsejar , si no se propone , y co
noce la utilidad de la cosa? ¿ y qué en las causas judiciales,
si ignora el derecho? ¿Qué mas ? ¿no necesita tambien de
fortaleza, para hablar, como muchas veces acaece, contra la
amenaza de un pueblo amotinado, contra los resentimien
ctos peligrosos de gente poderosa; y á veces (como en las
causas de Milon ) entre las armas de los soldados, que le
rodean ? De forma, que si no es virtud, la oracion no puede
SG1, perfecta.
Y si aun en los animales hay su virtud, por la que aven
tajan unos á otros, como la fuerza en el leon, la ligereza en
el caballo; siendo tambien cierto, que á todos los aventaja
el hombre en la razonl, y en el lenguage, ¿porqué no lla
- º *-- r

ms Rº -

- -, º -
---, -, -
A -

bus est, quae à virtute sunt remotae. perspecta : aut in judiciis, si justitiae sit
Itaque cum duo sint genera orationis, ignarus? Quid ? non fortitudinem postu
altera perpetua , quae rhetorice dicitur; lat reseadem, cum saepe contra turbu
altera concisa, quae dialectice, quas qui
lentas populiminas, saepe cum pericu—
“dem Zenon adeo conjunxit, ut hanc -losa potentium ofensa, nonnunquam, ut
compressae in pugnum manus, illam ex in judicio Miloniano , inter circunfusa
plicitae diceret similem ; etiam disputa militum arma dicendum sit? ut, si vir
trix virtus erit: adeo de hac, quae spe tus non est, me perfecta quidem esse
ciosior, atque apertior est, nihil dubi possit oratio.
tabitur. .
Quod si ea in quoque animalium est
Sed plenius hoc idem , atque aper virtus, qua praestat caetera , vel plera
tius intueri ex ipsis operibus volo. Nam que, ut in leone impetus , in equo ve
quid orator in laudando faciet, nisi ho locitas; hominem porro ratione, atque
nestorum , ac turpium peritus : aut in oratione excellere caeteris, certum est:
Suadendo , nisi utilitate proposita , et cur non tam in eloquentia, quam in ra
I44. INSTITUCIONES oRATORIAS

maremos virtud á la eloqüencia, igualmente , que á la ra


zon? Y así la define muy bien Craso, introducido por Cice
ron: la eloqiiencia , dice , es una de las principales virtu
des. Y aun Ciceron, hablando por sí mismo, la llama virtud,
ya en las cartas á Bruto, ya en otros lugares.
Me dirán : tambien el hombre malo compone un exór
dio, una narracion, y entabla sus argumentos tan diestramen
te, que no hay mas que pedir. Y por lo que mira á la for
taleza, aun el ladron pelea con valentía; y un mal esclavo
sufrirá los tormentos sin dar siquiera un gemido; cuyo sufri
miento no carecerá de alabanza. Respondo, que se hacen mu
chas cosas, que son semejantes, pero de distinto modo. Bas
te lo dicho; pues de la utilidad ya hablamos arriba.

CAPÍTULO XXII.
DE LA MATERIA DE LA RETóRICA, QuE Es ToDo AQUELLo
DE QUE TRATA.

Y, sigo la opinion de muchos autores, de que la ma


teria de la retórica es todo aquello de que se puede ha
blar. Sócrates, á quien introduce Platon hablando con Gor

tione virtutem ejus esse credamus? Re nem dicit malus homo, et argumenta,
cteque hoc apud Ciceronem disserit Cras sic, ut nihil sitin his requirendum. Nam,
sus : Est enim eloquentia una quaedam et latro pugnabit acriter, virtus tamen
de summis virtutibus. Et ipse Cicero, in erit fortitudo : et tormenta sine gemitu
sua persona, cum ad Brutum in episto feret malus servus , tolerantia tamen
lis, tum aliis etiam locis virtutem eam doloris laude sua non carebit. Multa fiunt
appellat. eadem, sed aliter. Sufficiant igitur haec,
Atprooemium aliquando, et narratio quia de utilitate supra tractavimus.

C A P U T XXII.

MATERLA RHIETORICAE RES OMNES, QUAE EL AD DICENDUM SuBJECTAE ERUNT.

Es, (neque id sine auctoribus) ma


teriam esse rhetorices judico omnes res,
quaecunque ei ad dicendum subjectae e
runt, Nam Socrates apud Platonem di
DE M, FABIO QUINTILIANO. LIB. II. - 145
gias, parece decir, que la materia de la retórica no está en
las palabras, sino en las cosas. Y en el Fedro abiertamente
dice , que ella no se muestra solamente en los juicios, y
tribunales, sino aun en los asuntos caseros, y quotidianos;
opinion, que se conoce ser de Platon. Ciceron en un lugar
dice, que la materia de la oratoria es todo quanto á ella se
sujeta; aunque dice, que solo son algunas cosas. Mas en otra
parte dice, que el orador de todo debe hablar, por las palabras
siguientes : Aunque atendida la esencia del orador, y su pro
fesion, parece exigir, y prometer el hablar con adorno , y
afluencia de palabras de quanto se le ofrezca la ocasion...”
Y aun dice mas: el orador debe averiguar, oir, leer, dis
putar, tratar , y ventilar quanto ocurre , en la vida huma
na, pues acerca de ella se versa la profesion de la orato
ria , y es materia suya. ”
Esta que nosotros llamamos materia, esto es, lo que se
sujeta á la oratoria, unos dicen, que es infinita; otros, que
no es, peculiar de la retórica: y llámanla arte vaga, por
que ella habla de todas materias. Pero sobre esto no peleos
pues ellos confiesan, que habla de todo, pero que no tie
ne materia fixa, por ser muy vasta. Pero no porque sea
así, ha de ser infinita ; pues tambien es vasta la materia
de otras menores artes, como la arquitectura; pues se ver
sa en todo lo que es útil para edificar : y el arte de gra

ccre Gorgiae videtur, non in verbis es minum vita (quandoquidem in ea versatur


se materiam , sed in rebus. Et in Phae orator, atque ea est ei subjecta materia)
dro palam , non in judíciis modo, et con omnia quaesita, audita, lecta, disputata,
cionibus, sed in rebus etiam privatis, tractata , agitata es se debent.
ac domesticis rhetoricen esse demon Hancautem , quam nos materiam vo
strat. Quo manifestum est, hanc opinio camus, id estres subjectas, quidam mo
nem ipsius Platonis fuisse. Et Cicero quo do infinitam, modo non propriam rhe
dam loco materiam rhetorices vocatres, torices esse dixerunt: eamque artem cr
quae subjectae sunt ei, sed certas demum cumcurrentem vocaverunt, quod in o
putat esse-subjectas. Alio vero de omni mni materia diceret. Cum quibus mihi
bus rebus oratori dicendum, arbitratur minima pugna est. Nam de omni mate
his quidem verbis : Quanquam vis orato ria dicere eam fatentur : propriam ha
ris , professioque ipsa bene dicendi hoc bere materiam , quia multiplicem ha
rurcipere, ac polliceri videatur , ut omni beat , negant. Sed neque infinita est,
de re, quaecunque sit proposita , ornate etiamsi est multiplex: et aliae quoque
ab. eo, copioseque dicatur. Atque adhucali artes minores habent multiplicem mate
bi Perum enim oratori, quae runt in bo riam, velut architectonice: nam ea in
ToM. L.
146 * - INSTITUCIONES ORATORIAS

bar, pues trabaja ya en oro, ya en plata, ya en bronce, ya


en hierro. La escultura, ademas de lo dicho, abarca tambien
la madera, el marfil, mármol, vidrio, y piedras preciosas. Ni
dexa de tener su materia la retórica, porque lo sea tambien
de otra arte. Porque si pregunto, quál es la materia del es
tatuario , dirán que el bronce ; si la de un fundidor de
vasos , dirán lo mismo, que el bronce; y son cosa muy dis
tinta las estatuas de los vasos. Ni la medicina dexa de ser ar-.
te, porque en las unturas, y exercicio corporal conviene con
la de los luchadores, y aun con los artes de cocina en la qua
lidad de los manjares.
Ni tampoco tiene fuerza aquella otra réplica, de que la
filosofia trata, como oficio suyo, de lo bueno, útil, y justo:
pues quien dice filósofo, ya entiende hombre de bien. ¿Pues
quién extrañará, que trate tambien de esta materia el orador,á
quien no distingo del hombre de bien ? y mas, quando ya ten
go demostrado, que esta parte de la filosofia, que dexáron
los oradores, se la apropiáron los filósofos, siendo peculiar de
aquellos. De manera, que ellos han venido á meter, la hoz.
en mies agena. En conclusion, siendo materia de la dialéctica.
el disputar de lo que á ella se sujeta; y siendo por otra parte
un discurso conciso, ¿porqué la oratoria, que es de estilo
difuso, no tendrá la misma materia ?
- Suelen algunos decir: luego de todas las artes debe en
mmam

emnibus, quae suntaedificio utilia, ver Quod vero de bono, utili, justo dis
satur; et caelatura, quae auro, argento, serere , philosophiae officium esse di
aere, ferro opera efficit. Nam sculptu cunt, non obstat. Nam cum philosophum
ra etiam lignum, ebur , marmor, vi dicunt, hoc accipi volunt , º virum bo
trum, gemmas, praeter ea, quae supra num. Cur igitur oratorem , quem à bo
dixi, complectitur. Neque protinus non no viro non separo, in eadem materia
est materia rhetorices, si ineadem ver versari mirer? Cum praesertim primo
satur et alius. Nam si quaeram, quae. libro jam ostenderim , philosophos omis
sit materia statuarii, dicetur aes : si sam hanc ab oratoribus partem occupas
quaeram, quae sit excusoris , id est e se, quae rhetorices propria semper fuis
jus fabricae, quam graeci xºan ºva invº set, utilli potius in nostra materia ver
vocant, similiter aes esse respondeant. sentur. Denique cum sit dialectices ma
Atqui plurimum statuis diferunt vasa. teria de rebus subjectis disputare, sit au
Nec medicina ideo non erit ars, quia tem dialectices oratio concisa ; cur non
unctio , et exercitatio cum palaestrica, eadem perpetuae quoque materia vi
ciborum vero qualitas etiam cum co deatur?
quorum ei sit arte communis. Solet à quibusdam , et illud poni:
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. II. 147
tender el orador, si ha de hablar de todas. Pudiera respon
derles con las palabras de Ciceron, quien dice: A mi parecer,
ninguno puede llamarse orador acabado , y perfecto , si no
tuviere el conocimiento de todas las artes , y ciencias. Pero
yo me contento con que no ignore absolutamente aquello de
lo que tiene que hablar, ya que no puede saberlo todo; y
por otra parte debe ponerse en disposicion de poder hablar
de todas las causas, y asuntos. Y ¿ de qué asuntos podrá ha
blar?, de aquellos, en que se hubiere impuesto de antemano.
Asimismo aprenderá aquellas artes, de que puede ocurrir el
hablar; y solo hablará de las que hubiere aprendido.
Pues qué ¿no hablará por ventura un albañil de la fá
brica de una casa; ó un músico de la música mejor que un
orador, que no entiende la materia, que trata? Sin duda
hablará mejor: porque un hombre del campo sin letras ha
blará mejor en causa propia, que un orador, que ignora la
naturaleza del pleyto. Pero si este se informa del músico, del
albañil, y del pleyteante, entónces hablará mejor que ellos.
Pero quando el albañil trate de la fábrica de casa , y el
músico de su arte, si necesita probar algo, no será orador,
pero hablará como si lo fuera : á la manera, que quando uno,
que no sabe medicina, ata una herida; el qual seguramente
no será médico, pero obrará como tal.
Semejantes cosas ¿por ventura no ocurren en el género
demostrativo, en el deliberativo, ó en el judicial? Segun es
to, quando se trató de la construccion del puerto de Ostia, º
º
Estºs sema -,

omnium igitur artium peritus erit ora orator, quid sit de quo quaeratur? pla
tor, si de omnibus ei dicendum est. ne melius. Nam , et litigator rusticus,
Possem hic Ciceronis respondere verbis: illiteratusque de causa sua melius, quam.
apud quem hocinvenio: Mea quidem sen orator, quinesciets quid in lite sit, di N
tentia nemo este poterit omni laude cumu cet. Sed accepta à musico , à fabro, si
latus orator, ni si erit omnium rerum ma cut à litigatore, melius orator, quam.
gnarum , atque artium scientiam consecutur. ipse, qui docuerit. Verum, et faber cum
Sed mihi satis est, ejus esse oratorem de fabrica, et musicus cum de musica,
rei, de qua dicit, non inscium. Neque si quid confirmationemºs desideraverit,
enim omnes causas novit; et debet pos dicet; non erit quidem orator, sed fa
se de omnibus dicere. De quibus ergo ciet illud quasi orator : sicut, cum vul
dicet? de quibus didicit. Similiter de ar nus imperitus deligabit, non erit medi
tibus quoque, de quibus dicendum erit, cus, sed faciet ut medicus.
interim discet, et de quibus didicerit, dicet. An hujusmodi res, nec in laudem,
. Quid ergo? aut faber de fabrica me nec in deliberationem, nec in judicium
lius, aut de musice musicus , si nesciat veniunt? Ergo cum de faciendo portu
T2
148 INSTITUCIONES ORATORIAS

ningun orador debió dar su parecer, porque era obra de ar


quitectura. ¿No vemos que trata el orador de si los cardenales,
y tumores del cuerpo son indicio de indigestion, ó de veneno?
Pues esto pertenece á la medicina. ¿Y no tratará tambien de
números, y medidas, aunque sea esto peculiar de la geome
tría? Creo que no hay arte alguna, de que no se le ofrezca
tratar al orador; y si nunca ocurriere, nunca será materia su
ya. Por esto dixe , y no sin fundamento, que la materia
de la retórica es todo aquello, de que trata; como lo prueba
el lenguage , comun. Pues quando nos hemos encargado de
un asunto, decimos freqüentemente en el exórdio, haber pro
puesto la materia.
No falta quien ha preguntado, quáles son los instrumen
tos de la retórica. Llamo instrumentos á aquellas cosas, sin
las que ni puede formarse la materia, ni llevarse la obra á
debido efecto: pero de esto no necesita el arte, sino el ar
tífice. Porque la ciencia para ser perfectamente tal, no ne
cesita de instrumentos; pues lo será, aunque no haga ninguna
obra. Pero necesita el artífice de ellos; como el grabador del
buril, y del pincel el pintor. Y así dexemos esto para quan
do se trate del orador.
/

Hostiensi deliberatum est , non debuit dicamus accepimus, positam nobis esse
dicere sententiam orator 2 atqui opus materiam frequenter etiam praefatione
teSta mur,
erat ratione
tumores architectorum.
in corpore, Livores,
cruditatis, et
aº Vene Quaesitum à paucissimis etiam de in
ni signa sit, non tractat oratorº º eSt strumento est. Hnstrumentum voco , si
id ex ratione medicinae. Circa mºººº" ne quo formari materia, et in id, quod
ras, et numeros non versabitur? Dica velimus, effici opus mon possit. Verum
mus has geometriae esse partes ºqui hoc ego non artem credo egere, sed ar
dem omnia ere posse credo casualiquo tificem. Neque enim scientia desiderat
venire in officium oratoris. quod si non instrumentum , quae potest esse consum
accidet, non erunt ei subjecta. ta sie mata, etiam si nihil faciat: sed ilke e
quoque recte diximus materiam rhetori pifex, ut caelator caelum, et pictor pe
cesesse omnes res ad dicendum ei subje nicilla. Itaque haec in eum locum , quo
ctas : quod quidem probat etiam sermo de oratore dicturi sumus, diferamus.
communis. Nam cum aliquid, de quo

- º -
- I49
LIBRO TERCERO,
CAPÍTULO PRIMERO.

I. Avisa, que el presente libro no contiene materias tan


gustosas, como los demas, que siguen. II. Trata de los re
tóricos, tanto griegos , como romanos.

I. Sra. hemos ya tratado de la esencia, y fin de la


retórica; y hemos hecho ver, segun nuestras fuerzas, la uti
lidad, y ventajas de esta arte; señalando por materia suya
todo aquello, de que puede tratar, hablaremos ahora de su
origen, de las partes, que la componen, de la invencion de
las cosas, y del modo de tratarlas; lo que estuviéron tan lé
jos de tratar los autores, que escribiéron de retórica, que
Apolodoro solo se ciñó á las causas judiciales.
No ignoro, que los aficionados á la oratoria aguardan,
que trate de la diversidad de opiniones en esta materia: obra
tan dificultosa , como desagradable á los lectores, segun me
temo. Porque esta es una materia, donde no se trata mas, que

L IBER TERT IU S.

CAPUT. PRIMUM.

I. Monet, bune librum minus jucunditatis, quam caeteros babiturum. II. Agir de
seriptoribus artis rhetoricae cum graecir, tum romunir.

I. Qaun in libro secundo quae


situm est, quid esset rheto
rique scriptores artium constiterunt ,
deo ut ºdorus a
contemtus solis judi
rice, et quis finis ejus : artem quoque cialibus fuerit.
eam esse, et utilem , et virtutem , ut Nec sum, ignarus, hoc à me praeci
vires nostrae tulerunt, ostendimus ; ma pue» quod hic liber inchoat, opus, stu
teriamque ei res omnes de quibus dice diosos ejus desiderasse, utinquisitione
re oporteret, subjecimus: jam hinc unde opinionum, quae diversissimae fuerunt,
coeperit, quibus constet, quo quaeque longe difficillimum, ita nescio, an mi
inea modo invenienda, atque tractanda nime legentibus futurum voluptati: quip
sint, exequar. Intra quem modum ple pe quod prope mudam praeceptorum tra
I5o INSTITUCIONES ORATORIAS

de preceptos, y reglas. En los demas libros he procurado


mezclar alguna cosa, que diese brillo á la obra, y esto no
por hacer alarde de mi ingenio , (pues para esto hubiera es
cogido materia de mas campo) sino para aficionar mas por
este medio á los jóvenes al conocimiento de lo que pienso in
teresarles para su estudio ; pues engolosinados, y movidos
de lo sabroso de la leccion, aprenderían con mas gusto aque
llas cosas, las que tratadas fria, y secamente me temia, que
fastidiarian sus ánimos, y oidos delicados. Razon, que movió
á Lucrecio á tratar en verso de la filosofia; valiéndose de es
ta semejanza, á todos notoria:
l
Qual madre cariñosa,
Quando al infante agenjos dar intenta, y.

Si la lombriz dañosa .
Le roe el intestino siempre hambrienta.
Para que ménos sienta -

De la fatal bebida la amargura,


Unta el borde del vaso de dulzura &rc. Lib. 4. II.

Pero lo que yo me temo, es, que este libro tenga poco de


miel, y mucho de agenjos para el paladar de algunos; aun
que será mas útil para el estudio, que sabroso al paladar.
Tambien me temo, que dé ménos gusto, porque la ma
yor parte de lo que trata, no son cosas inventadas por mí,
sino enseñadas ya por otros; y porque contiene opiniones de
muchos, que sienten entre sí muy distintamente; puesto ca
massussassºm.

ditionem desideret. In caeteris enim ad Nam veluti pueris abrinthia tetra medenter,
miscere tentavimus aliquid nitoris, non
jactandi ingenii gratia , (namque in id Cum dare conantur, prius oras pocula circum
eligi materia poterit, uberior) sedut hoc Contingunt mellis dulci, flavoque liquore.
ipso alliceremus magis juventutem ad co
gnitionem eorum , quae necessaria stu Et quae sequuntur. Sed nunc veremur,
diis arbitrabamur, si ducti jucunditate ne parum hic liber mellis, et absinthii
aliqua lectionis, libentius discerent ea, multum habere videatur, sitque salu
quorum me jejuna, atque arida traditio brior studiis, quam dulcior.
averteret animos , et aures (praesertim Quin etiam hoc timeo, ne exeo mi
tam delicatas) raderet, verebamur. Qua norem gratiam ineat , quod pleraque
ratione se Lucretius dicit praecepta phi non inventa per me, sed ab aliis tradi
losophiae carmine esse complexum. Nam ta continebit : habeat etiam quosdam
que hac, ut estnotum, similitudine utitur: qui contra sentiant, et adversentur, pro
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 15 r
so que muchísimos autores, aunque caminen al mismo fin,
siguiéron caminos distintos, por donde quisiéron llevar á
otros. Ellos aprueban el camino que siguiéron , qualquiera
que sea; y no es fácil en los niños hacerles mudar de rum
bo, y desimpresionarlos de las opiniones, en que los imbuyé
ron: porque no hay ninguno, que quiera ántes olvidar lo
que aprendió, que aprender de nuevo. Andan muy encon
trados los autores , como manifestaré en el discurso de este
libro; primeramente, porque los escritores quisiéron añadir
algo de suyo á aquellos primeros principios imperfectos, y
toscos; y despues mudar aun lo bueno, porque pareciese que
ponían algo de su casa.
II. El primero, que despues de aquellos, de que hiciéron
mencion los poetas, trató algo de retórica, fué Empedocles, se
gun dicen. Los mas antiguos escritores de sus preceptos fuéron
Corax, y Tisias, sicilianos; á quienes siguió Gorgias Leontino,
tambien siciliano, quien dicen fué discípulo de Empedocles. Este
por beneficio de la larga edad de ciento y nueve años que vivió,
floreció con otros muchos; fué émulo de los que arriba nom
bré, y vivió mas que Sócrates. Juntamente floreciéron Thra
symaco decCalcedonia, Prodico de Chio, Protágoras de Ab
dera, quien dicen que enseñó á Evathlo por diez mil dena
rios el arte, que dió á luz, Hipias de Elide, y Alcidamas
Eleates, llamado por Platon Palamedes. Antiphon fué el que

pterea quod plurimi auctores, quam rhetoricen Empedocles dicitur. Artium


vis eodem tenderent , diversas tamen autem scriptores antiquissimi Corax, et
vias munierunt, atque in suam quisque Tisias Siculi, quos insecutus est vir e
induxit sequentes. Illi autem probant, jusdem insulae Gorgias Leontinus, Em
qualecunque ingressi sunt, iter: nec fa pedoclis (ut traditur) discipulus. Is bene
cile inculcatas pueris persuasiones mu ficio longissimae aetatis (nam centum,
taveris : quia memo non didicisse ma et novem vixit annos) cum multis si
vult, quam discere. Est autem, ut pro mul floruit : ideoque ..., et illorum , de
cedente libro patebit, infinita dissensio quibus supra dixi, fuitaemulus, et ul
auctorum ; primo adea quae rudia, at tra Socratem, usque duravit. Trhasyma
que imperfecta adhue erant, adjicien chus Chalcedonius cum hoc, et Prodi
tibus, quod invenissent, scriptoribus: mox, cus Chius, et Abderites Protagoras, à
ut aliquid sui viderentur afferre, etiam. quo decem millibus denariorum didicis
recta mutantibus. A se artem , quam edidit, Evathlus dici
II. Nam primus posteos, quos poe tur; et Hippias Eleus , et quem, Pala
tae tradiderunt, moviSSe aliqua circa meda Plato appellat, Alcidamas Eleates.
I52 INSTITUCIONES ORATORIAS

comenzó á escribir oraciones retóricas, y escribió tambien un


arte: de quien se dice, que peroró muy bien en defensa de
su persona. Júntase á estos Policrates, el que compuso, co
mo dixe, una oracion contra Sócrates ; y Theodoro Byzantino,
uno de aquellos á quienes Platon llama Logodaidalous. “
Los primeros que comenzáron á tratar de los lugares orato
rios, fuéron Protagoras, Gorgias, Prodico y Trasymaco. Ci
ceron en el Bruto dice, que ántes de Pericles no se compuso
ninguna oracion retórica ; y que en nombre suyo andaban al
gunas composiciones. Mas yo no encuentro cosa, que corres
ponda á la fama de tan grande orador. Por donde no me ad
miro, digan algunos, que no escribió una letra, y que esas
obras fuéron compuestas por otros.
A estos sucediéron otros; pero el mas insigne fué Isócra
tes discípulo de Gorgias , aunque no concuerdan en esto
los autores; pero yo creo á Aristóteles. Aquí comenzáron en
cierto modo diversas sectas. Porque los discípulos de Isócrates
se distinguiéron en todo género de estudios; pero habiendo
este envejecido (pues llegó á noventa, y nueve años) co
menzó Aristóteles á enseñar retórica por las tardes, repitien
do freqüentemente aquel verso del Philocteta de Sofocles:
El que Isócrates hable, y nos callemos,
Cosa es , si bien se mira , vergonzosa. ”

massEmman

Antiphon quoque, et primus omnium ora His successere multi, sed clarissimus
tionem scripsit, etnihilominus artem ipse Gorgiae auditor Isocrates; quanquam de
composuit, et pro se dixisse optime est praeceptore ejus inter auctores non con
creditus. Etiam Polycrates, à quo seri venit. Nos autem Aristoteli credimus.
ptam in Socratem diximus orationem, Et Hinc velut diversae secari coeperunt viae.
Theodorus Byzantius, ex is , et ipse Nam, et Isocratis praestantissimi disci
quos Plato appellat Ayoda láAvs. Ho puli fuerunt in omni studiorum, genere,
eoque jam seniore (octavum enim , et
rum primi communes locos tractasse di nonagessimum implevit annum) pomeri
cuntur Protagoras, Gorgias , Prodicus, dianis Scholis Aristoteles praecipere ar
et Thrasymachus. Cicero in Bruto negat tem oratoriam coepit, noto quidemillo
ante Periclem scriptum quicquam, quod (ut traditur) versu ex Philotecta frequen
ornatum oratorium habeat: ejus aliqua ter uSuS:
ferri. Equidem non reperio quicquam tan
tae eloquentiae fama , dignum. Ideoque
minus miror esse , qui nihil abeo scri Aurxpáv rurgv,9 Iron párov igir ayur.
ptum putent: haec autem quae ferun
tur, ab aliis esse composita. Turpe es se tacere, et Isocratem pati diocre,
- DE M. - FABIO QUINTILIANO. LIB. III. I 53
Uno y otro escribiéron su arte, pero Aristóteles lo compre
hendió en mas libros, Floreció en el mismo tiempo "Theo
dectes, de quien hablamos arriba. Theophrasto discípulo de
Aristóteles escribió de retórica con bastante esmero. Y des
pues tratáron la materia los filósofos con mas cuidado que
los retóricos; principalmente los corifeos de los Peripatéticos, y
Estoicos. Despues Hermagoras tomó distinto rumbo, que si
guiéron muchísimos ; de quien parece que Atheneo fué ému
lo, y aun le igualó. Escribiéron en adelante á la larga Apo
lonio Molon, Areo, Cecilio, y Dionisio de Halicarnaso.
Entre todos se llevó la atencion Apolodoro de Pérgamo, que
enseñó á Augusto en Eriso; Theodoro Gadareo, que quiso ser
tenido por natural de Rhodas, de quien aprendió, segun dicen,
Tiberio Cesar, quando fué á aquella isla. Estos siguiéron opi
niones diversas, de donde dimanáron las sectas de Apolodoria
nos, y Theodorianos al modo de las de los filósofos. Pero los
Preceptos de Apolodoro se conocen por sus discípulos, de los
que los mejores fuéron C. Valgio, que enseñó en latin, y
Atico, que enseñó en griego: del qual se conoce ser el arte,
que escribió, y dirigió á Macio; porque en la carta á Do
micio no reconoce los demas que le atribuyéron. Mucho mas
escribió Theodoro, á cuyo discípulo Hermagoras conociéron
algunos, que hoy viven. -

El primero de los romanos, que yo sepa, que sobre esta -


º
* --,
-
A

“-s
- vº s- -º * º * - - - --

Ars est utriusque, sed pluribus eam li fuit: et, Theodorus Gadareus, qui se di
bris Aristoteles complexus est. Eodem cimaluit Rhodiurn : quem studiose au
tempore Theodectes fuit, de cujus opere disse, cum in eam insulam secessisset, di
supra dictum est. Theophrastus quoque citur Tiberius Caesar. Hi diversas opi
Aristotelis discipulus de rhetorice diii niones tradiderunt : appellatique inde
genter scripsit, atque hinc vel studio Apollodorei, et Theodorei , ad morema
sius philosophi, quam rhetores, praeci certas in philosophia sectas sequendi.
pueque Stoicorum , ac Peripateticorum Sed Apollodori praecepta magis ex disci
principes. Fecit deinde velut proprian pulis cognoscas: quorum diligentissimus
Hermagoras viam, quam plurimi sunt in tradendo latine fuit C. valgius, grae
Secuti; cui maxime par, atque aemulus ce Atticus. Nam ipsius sola videtur ars
videtur Athenaeus fuisse. Multa post A edita ad Matium , quia caeteras missa ad
pollonius Molon , multa Areus, multa Domitium epistola non agnoscit. Plura
Caecilius, et Halicarnasseus Dionysius. Scripsit Theodorus , cujus auditorem Her
Praecipue tamen in se converterunt magoram sunt, qui viderint.
studia Apollodorus Pergamenus , qui Romanorum primus (quantum ego
praeceptor Apolloniae Caesaris Augusti quidem sciam )-condidit aliqua in hanc
ToM. L.
I54 - INSTITUCIONES ORATORIAS

materia compuso alguna cosa, fué M. Caton el Censor, des


pues del qual comenzó M. Antonio. Esta es la única obra,
que nos quedó de él, y está truncada. Siguiéronse otros, pe
ro de ménos nombre, de los que hablaremos, quando ocur
ra. Pero el principal en dar lustre á la eloqüencia, ya con
sus preceptos, ya con las oraciones retóricas que compuso,
fué M. Tulio Ciceron, singular maestro en la oratoria; des
pues del qual ninguno deberia tener la arrogancia de escri
bir, á no confesar el mismo, que sus libros retóricos los com
puso de mozo; y si no hubiera omitido de intento, como di
ce, en los del orador estas menudencias, que echa ménos la
mayor parte de los aficionados. De lo mismo escribió á la
larga Cornificio, algunas cosas Estertinio, y Galion el padre:
pero con mas cuidado que todos Celso, y Lenas, anteriores
á Galion, y en nuestros dias Virginio, Plinio, y Rutilio.
Hay tambien hoy en dia excelentes maestros de retórica; los
que, si no hubieran omitido nada, me hubieran ahorrado el
trabajo. Pero no hago mencion de los que viven al presente;
tiempo vendrá, que los alabe; pues la posteridad los apre
ciará, y no tendrá envidia de su mérito.
No me avergonzaré yo de dar mi voto despues de tantos,
yguir
tansupersticiosamente
consumados autores. Porque
ninguna sectano me he propuesto
y quise el se
dexar á cada
qual la libertad de seguir lo que mas les acomode. Pues yo
solamente he cuidado de juntar en º lo que muchos discur
-..." -- a ---- º *

º 3 . A
materiam M. cato ille Censorius; post nonnihil pater Gallio : accuratius vero
M. Amonius inchoavit. Nam hoc, solum priores Gallione Celsus , et Lenas, et
opus usatque id ipsum imperfectum, aetatis nostrae Virginius, Plinius, Ruti
manet secuti minus celebres, quorum lius. Sunt, et hodie clari ejusdem operis
memoriam , si quo loco res poscet, non auctores; qui, si omnia complexi forent,
omittam. Praecipuum vero lumen, sicut consuluissent labori meo. Sed parco no
eloquentiae , ita praeceptis quoque ejus minibus viventium : venieteorum laudi
dedit unicum apud nos specimen orandi, suum tempus, ad posteros enim virtus
docendique oratorias artes , M. Tullius: durabit, non perveniet invidia.
post quem tacere modestissimum foret, Non tamen post tot, ac tantos aucto
5 misi, et rhetoricos suos ipse adolescenti res pigebit, meam quibusdam locis posuis
sibi elapsos diceret, et in oratoriis haec se sententiam. Neque enim me cujus
- minora, quae plerique desiderant, sciens quam sectae, velut quadam superstitio
omisisset. Scripsit de eadem materia non ne imbutus, addixi: et electuris, quae
Pauca Cornificius , aliqua Stertinius, volent, facienda, copia fuit. Sicuti
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. III. I 55
riéron; ya que no hubiere lugar de poner algo de mi cose
cha, me contentaré con merecer la alabanza de este trabajo.

CAPÍTULO II.
-- - oRíGEN DE LA RETóRICA.

El principio del decir se debe a la naturaleza. El arte


dí la observacion,

N, me detendre mucho en descubrir el orígen de la


retórica: porque ¿quién duda, que el decir, que es el prin
cipio de ella, se lo inspiró al hombre la naturaleza? ¿que
la utilidad fué causa de su estudio, y aumento ? ¿que el in
genio, y exercicio le diéron su complemento ? Ni hallo ra
zon, para que digan algunos, que el hallarse los hombres
en peligro de la vida, hizo que procurasen hablar con mas es
mero, para defenderse. Porque dado, que este fué un mo
tivo razonable, mas no es el primero; mucho mas quando la
acusacion precede á la defensa; á no decir, que las espadas

-E -

pse plurium in unum confero inven- curae testimonium promeruisse COn


ta, ubicunque ingenio non erit locus, tentus.
- - º* -----, º - º* - - - =- * --

c A PU T II.

QUAE SIT RHETORICEs oRIco.


-- , º «

Initium dicendi dedit natura: initium artir, observatio.

Nºs diu nos moretur quaestio, quae deo, quare curam dicendi putent qui
rhetorices origo sit. Nam cui dubium est, dam inde coepisse, quod ii , qui in di
quin sermonem ab ipsa rerum natura scrimen aliquod vocabantur , accuratius
geniti protinus homines acceperint, quod loqui defendendi sui gratia, instituerint.
certe principium est ejus rei; huic stu Haec enim , ut honestior causa , ita non
dium, et incrementum dederit utilitas; utique prior est, cum praesertim accusa
summam ratio, et exercitatio? Nec vi tio praecedat defensionem ; misi quis di
V2
-
156 INSTITUcioNEs oRAToRIAs
fuéron inventadas primero por los que se defendiéron de los
insultos de otros, y no por los que invadiéron á los demas."
El principio del decir se debe á la naturaleza, y los pre
ceptos á la observacion. Porque á la manera, que los hóm
bres, observando, que unas cosas eran provechosas á la sa
lud, otras no, formáron la medicina; así viendo, que habia
ciertas expresiones, y maneras de decir útiles, y otras al con
trario, notáron las útiles, y desecháron las demas; añadien
do otras despues, que halláron por su ingenio. Estas se con
tinuáron con el uso, y cada qual enseñó lo que sabia. Ciceron
atribuye el principio de perorar á los fundadores de las ciu
dades, y á sus legisladores, los que es preciso , que tuviesen
energía en el decir: pero no sé, porqué causa señala este
orígen á la retórica; pues al presente hay naciones, que ni
tienen domicilio fixo, ni leyes, y con todo eso los que na
ciéron de este modo, no solo tienen sus embaxadores, sino
sus acusadores, y abogados, y finalmente disciernen, quién
aventaja á otro en explicar sus pensamientos,

- - - - - -,

cit etiam gladium, fabricatum ab eo haec confirmata sunt usu tum quae
prius, qui ferrum in tutelam sui, quam sciebat quisque, docuit., Cicero, quidem
qui in perniciem alterius comparavit. initiumorandi conditoribus urbium , ac
Initium ergo dicendi dedit natura: legum latoribus dedit, in quibus fuisse
initium artis observatio. Homines enim, vim dicendi necesse est: curtamen hane
sicut in medicina, cum viderent alia sa primam originem putet, non video, ClIIn
lubria, alia insalubria, ex observatione sint adhue quaedam vagae, et sine ur
eorum effecerunt artem ; ita , cum in bibus, ac"sine legibus gentes: ettamen
dicendo alia utilia , alia inutilia depre qui sunt in his nati, et legationibus fun
henderent, notarunt ea ad imitandum gantur, et accusent aliqua , ac defen
vitandumque, et quaedam secundum ra dant, et denique alium alio melius lo
tionem eorum adjeceruntipsi quoque: qui, credant.
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. I57

CAPÍTULO III.
crNco soN LAs PARTES DE LA RETóRICA.

Ta, la oratoria, como dicen muchísimos de los auto


res mas insignes, se reduce á cinco partes: invencion, dispo
sicion, elocucion, memoria, y pronunciacion, ó ademan; pues
tiene estos dos nombres. Todo discurso, que explica lo que
sentimos, consta por necesidad de dos cosas, de materia, y
palabras. Y si es breve, y reducido á una sola oracion, no ne
cesita de mas : pero quando el razonamiento es largo, ha de
tener mucho mas; pues no solamente importa saber expresar
los pensamientos, y el modo de proponerlos , sino las circuns
tancias del lugar. Así es, que necesitamos de la disposicion.
Pero no podemos decir quanto pide el asunto, ni á su tiem
po, sino ayudados de la memoria. Por lo que esta constitu
ye la quarta parte. Y como todo esto lo echa á perder una
pronunciacion desarreglada por la voz, y por el ademan; se
sigue que ella debe entrar en quinto lugar.
s-, -
«s º - -- - - º * --

a EEEEEN
• - -

C A P U. T III.

QUINQUE ESSE PARTES RHETORICAE.

One. autem orandi ratio , ut refert, quid, et quomodo dicamus, sed


plurimi, maximique auctores tradiderunt, etiam quo loco. Opus ergo est disposi—
quinque partibus constat , inventione, tione. Sed neque omnia, quae res pOStu
dispositione, elocutione, memoria, pro lat, dicere : neque suo quaeque loco po
nuntiatione, sive actione: utroque enim terimus , misi adjuvante memoria. Qua
modo dicitur. Omnis vero sermo , quo propter ea quoque pars quarta erit. Ve
quidem voluntas aliqua enuntiatur, ha rum haec cuncta corrumpit, ac pro
beat necesse est, et rem , et verba. Ac pemodum perdit indecora, vel voce,
si est brevis, et una conclusione finitus, vel gestu pronuntiatio. Huic quoque
nihil fortasse ultra desideret : at oratio igitur necessario tribuendus est quintus
longior plura exigit. Non enim tantum locus,
- - y
158 INSTITUCIONES oRATORIAs

CAPÍTULO IV.
TREs soN Los GÉNERos DE CAUsAs.

Ddan algunos si son tres, ó mas los géneros de cau


sas. Casi todos los antiguos de mayor nombre, siguiendo á
Aristóteles , se contentáron con esta division , sin mas dife
rencia, que llamar concionatorio al deliberativo. Yo tengo
por mas seguro (porque así lo dicta la razon) el seguirá
los mas. El género, que abraza la alabanza, óvituperio de
alguna cosa, es uno mismo; aunque por la parte, que ala
ba, le llaman laudativo, y otros demostrativo. El segundo
es el deliberativo, y el tercero el judicial. Los demas gé
neros se reducen á los dichos; y entre ellos no hay alguno,
por el que no alabemos, ó vituperemos; aconsejemos, ó di
suadamos; abracemos, ó desechemos alguna cosa.
Ni sigo á los que dicen, que lo honesto es materia del
laudativo, lo útil del deliberativo, y del judicial las qüestio
nes sobre lo justo; haciendo una division mas pronta, y re
donda, que verdadera : Pues todos los géneros mutuamente

- se

cA P U T 1 v.

TRIA ESSE GENERA CAUSARUM,

Ta, an plura sint genera causa


rum, ambigitur. Nec dubie prope omnes,
Alterum est deliberativum. Tertium, ju
diciale. Caeterae species in haec tria
utique summae apud antiquos auctorita incidunt genera : nec invenitur ex his
tis scriptores Aristotelem secuti, quino ulla, in qua non laudare, autvitupera
mine tantum alio concionalem pro deli re, suadere, aut dissuadere, intendere,
berativa appellat, hac partitione conten quid, vel depellere debeamus.
ti fuerunt. Nobis autem , et tutissimum Ne his quidem accesserim, qui lau
est auctores plures sequi, et ita videtur , dativam materiann honestorum , delibe
ratio dictare. Est igitur unum genus, rativam utilium , judicialem justorum
quo laus, ac vituperatio continetur, sed quaestione contineri putant, celeri ma
est appellatum à parte meliore laudati gis, ac rotunda usi distributione, quam.
vum : idem alii demonstrativuma Vocant, vera. Stant enim quodammodo mutuis
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB, III. I 59
se ayudan los unos á los otros. Porque en las alabanzas se tra
ta tambien de la justicia, y utilidad; en las deliberaciones
de lo honesto ; y por maravilla hallaremos alguna causa ju
dicial, en la que, ó en parte, ó en todo no tenga lugar lo
que arriba diximos. -

CAPÍTULO V.

I. Tres son los oficios del orador. II. Las qüestiones


307 finitas , ó infinitas.
-

I. Cara toda oracion de dos cosas; unas que son sig


-

nificadas, otras que significan: esto es de pensamientos, y de


palabras. La perfeccion de la oratoria depende de la natura
leza, arte, y exercicio. Añaden algunos la imitacion, pero,
nosotros la reducimos al arte. Tres cosas debe hacer el ora
dor, enseñar, dar gusto, y mover : aunque no todas tres se
verifican en todas las materias, que trata. Hay asuntos , en
que los afectos no tienen lugar: pero así como estos no siem
pre tienen entrada, así donde tengan cabida, son el todo en
la oratoria.
II. Las qüestiones “ó son infinitas, ó finitas, en lo que
todos convienen. Infinitas son las que no se ciñen á ninguna

N,

auxiliis omnia, Nam, et in laude justi- ris causam, in cujus non parte aliqua
-tia, utilitasque tractantur; et in consiliis eorum quid, quae supra diximus, repe
honestas 3 et raro judicialem invene- riatur.

C A P UT. V. -

I. Tria erre oficia oratoris. II. Quaestiones esse, vel infinitar, vel finitar.

O.m. autem oratio constat, aut veat, delectet. Non semper autem o—
ex his, quae significantur , aut ex his mnia ineam, quae tractabitur materiam,
quae significant, id estrebus, et ver— cadent. Eruntenim quaedam remotae ab
bis. Facultas orandi consummatur natu- efectibus: qui utnon ubique habent lo
ra , arte,, exercitatione: cui quartam cum, ita quocumque irruperint, pluri
Partem adjiciunt, quidam imitationis, mum valent.
quam nos arti subjicinus. Tria sunt, quae II. Convenit, quaestiones esse, aut infi
Praestare debet orator, ut doceat, mo- nitas, aut finitas. Infinitae sunt , quae
I6o INSTITUcroNEs or AToRIAs
circunstancia de lugar , tiempo, ó persona; lo que llaman
los griegos thesis, y Ciceron pregunta particular. Finitas son
aquellas, donde interviene alguna de las circunstancias di
chas ; llamadas en griego hypothesis , y en latin causas.
En todas ellas parece se trata determinadamente de cosas, ó
de personas. La infinita siempre se extiende á mas, y la fi
nita á cosas ménos universales. Por exemplo, infinita será es
ta qüestion: si el hombre debe casarse ; y será finita, quan
do se duda : si conviene, que Caton se case. -

En toda qüestion finita va incluida la general, como


que es primera. Lo que no sé determinar es, si será gene
ral tambien qualquier qualidad de las que entran en la
qüestion particular. Milon (por exemplo) mató a Clodio;
y le mató justamente , porque conspiraba contra él. No dire
mos que aquí tácitamente se duda ¿ si es lícito matar al
agresor?
¿Qué mas? . Aunque en las causas, que miran á una per
sona, no basta el tratar la cosa en comun, es cierto, que no
podemos llegar á la qüestion particular, sino ventilando pri
mero la general. Porque ¿cómo Caton deliberará, si le con
viene tomar muger, á no saber primero, que el hombre debe
casarse? Y ¿cómo se formará la qüestion de si debe casar
se con Marcia, si primero no se da Por sentado, que Caton
debe tomar muger º

-a-ramas EEEEEsº

- remotis personis, et
temporibus, et lo- an in causis quoque quicquid in quae
cis, caeterisque similibus, in utramoue stionem venit qualitatis, generale sit.
partem tractantur : quod graeci o «guv Milo Clodium occidit: jure occidit insi
dicunt, Cicero propositum. Finitae au diatorem. Nonne hoc quaeritur, an hoc
tem sunt ex complexu rerum , persona sit jus insidiatorem occidendi?
rum, temporum , caeterorumque. Hae Quin etiam in his, quae ad perso
varo ºrgais à graecisdicuntur, causae a nam referuntur, ut non est satis genera
nostris. In his omnibus quaestio vide lem tractasse quaestionem, ita perveni
tur circa res, personasque consistere. Am riad speciem , nisi illa prius excussa,
plior est semper infinita : inde enim fi non potest. Nam quomodo, an sibi uxor
mita , descendit. Quod ut exemplo pateat, ducenda sit, deliberabit Cato, misi con
infinita est, an uxor ducenda: finita, an stiterit uxores esse ducendas ? Et quo
Catoni ducenda. modo an ducere Martiam debeat quae
In onini autem speciali utique inest retur, misi Catoni ducenda uxor est?
generalis, ut quae sit Prior. Ac nescio,
/
DE M. FABIO QUINTILIANo. , LIB. IIr. I61
-

- y. , o a ... - -

C- - CAPITULO VI.
-
- *
-

DE TREs MANERAS ES EL ESTADo DE LA CAUSA.


A y : o «, - -

Eas, de la causa llamamos aquello , que principal.


mente intenta el orador, y de lo que, como punto cardinal,
el juez debe informarse; pues en esto consiste la causa.
Muchísimos sientan tres estados de causa general: de con
getura, de definicion , y de qualidad. De estos se vale Cice
ron en su orador, y dice que á ellos se reduce todo quanto
se pone en qüestion 3 v. gr. Si existe la cosa; qué es la cosas
y cómo es la cosa. -

Yo confieso ser ahora de opinion algo diferente de la que


ántes seguia. Y quizá era lo mas seguro en uno que busca
gloria, el mantener aquella opinion, en que habia estado
muchos años, y que yo tenia por la mejor. Pero no me pa.
rece cordura seguir mi propio juicio, lisongeando mi opinion,
y mas en una materia, en que se interesa el aprovecha
miento de la juventud. Pues me parece, que aquel célebre
médico " Hypócrates obró con mucha hidalguía , quando,
para que otros no errasen, él mismo confesó haber come
tido algunos errores. Aun el mismo Ciceron no tuvo reparo

=mºsº

CA PU T. V. I.

TRIPLICEMI ESSE STATUM,

Sa. causae estid, quod, et ora Et fortasse tutissimum erat famae mo


tor praecipue sibi obtinendum, et judex do studenti, nihil ex eo mutare, quod
spectandum maxime intelligit : in hoc multis annis non sensissem modo, ve—
enim causa consistit. rum etiam approbassem. Sed non susti
A plurimis tres sunt, facti generales neo esse conscius mihi dissimulanti, in
status, conjecturae , finitionis, qualita eo praesertim opere , quod ad bonorum
tis: quibus et Cicero in oratore utitur, juvenum aliquam utilitatem eomponimus,
et omnia, quae aut in controversiam, in ulla parte judicii mei. Nam , et Hip
aut in contentionem veniant, contineri, pocrates clarus arte medicinae, videtur
putat ; sitne , quid sit, quale sit. honestissime fecisse, qui quosdam erro
Ipse me paulum in alia, quam prius res suos , ne posteri errarent, confessus
habuerim , opinione nunc esse confiteor. est. Et M. Tullius non dubitabit aliquos
ToM. I
162 - INSTITUCIONES ORATORIAS

en escribir algunos libros , para corregir otros, que ántes


habia publicado, condenando él mismo sus errores. Tales son
el Catulo , y el Lúculo, y aun aquellos mismos, de que
acabo de hablar, que tratan de retórica. Pues en vano era
afanarnos en estudiar, si no pudieramos adelantar nada sobre
nuestros primeros conocimientos. Ni tampoco fué ocioso nada
de lo que entónces enseñé, pues quanto ahora dixere en la ma
teria, será en substancia repetir lo que entónces dixe. De
este modo á nadie le pese el haberlo aprendido. Solo pre
tendo recoger, y coordinar con mas claridad aquello mis
mo. Y quiero que todos entiendan para satisfaccion suya, que
al punto que he conocido mi error, he procurado manifes
tarlo á los demas, enseñando la verdad; de que yo mismo.
estoy persuadido. s -

Hemos de estar pues al dicho de aquellos, á quienes si


guió Cicerón, diciendo, que á tres cosas tan solas se redu-,
ce quanto entra en disputa: si es la cosa ; qué es ; y có
mo es ; lo que aun la misma naturaleza nos enseña. Pues
ante todas cosas debe haber sugeto de la qüestion; porque
no podemos ver lo que es, ni como es, si primero no exis
te. Y así esta es la primera qüestion. Mas supuesto que no
sabemos lo que es la cosa, aunque estemos ciertos de su
existencia; por tanto todavía resta el indagar sus qualidades;
pero apurada eStal qüestion , ya no queda mas que averiguar.
Sigamos ahora el órden, que hemos sentado de los tres
géneros de causas.

suos jam editos libros aliis postea scriptis Credendum estigituriis, quorum au
ipse damnare, sicut Catulum, atque Lu ctoritatem secutus est Cicero, tria esse,
cullum , et hos ipsos, de quibus modo quae in omni disputatione quaerantur,
sum, locutus, artis rhetorices. Etenim Su an sit, quid sit, quale sit. Quod ipsa
pervacuus foret in studiis longior labor, nobis etiam natura praescribit. Nam pri
si nihil liceret melius invenire praeteri mum oportet subesse aliquid , de quo
tis. Neque tamen exhis quicquam , quae ambigatur: quod quid sit, et quale sit,
tum praecepi , supervacuum fuit: ad certe non potest existimari , nisi prius
easdem enim particulas haec quoque, esse constiterit. Ideoque ea prima quae
quae nunc praecipiam , revertentur: Ita stio. Sed non statim quod esse manife
neminem didicisse poeniteat. Colligere stum est, etian quid sit apparet. Hoc
tantum eadem, ac disponere paulo signi quoque constituto, novissima qualitas su
ficantius conor. Omnibus autem patefa perest : mechis exploratis aliud est ultra.
ctum volo, non me haec serius demon Nunc, quia in tria genera causas divi
strare aliis, quam mihi ipse persuaserim. si, ordinem sequar. -

\.
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. III, 163

- CAPITULO VII.

DEL GÉNERo DEMosTRATIvo. a


-

I. pertenecen á este género los negocios.


Entre los latinos
II. Alabanza de los dioses. III. Alabanza, y vituperio de
los hombres. Importa mucho para las alabanzas considerar
el lugar donde se alaba. IV. Alabanza de regiones, y ciu
dades. - - 4

| ) ,

I. De principio por el género, que consiste en alabar,


y Vituperar. El qual parece que Aristóteles excluyó de aquel
género, que los griegos llaman de negocios, sino que todo
le reduxo á recrear á los oyentes; cuya opinion siguió Theo
Phrasto. Este género ciertamente toma su nombre de la os
tentacion, y pompa ": pero segun la costumbre de los ro
manos, tiene tambien lugar en los negocios; porque las ora
ciones fúnebres dependen ordinariamente de los cargos, que
alguno tuvo en la república; y el senado es el que los con
fiere á los magistrados. Alabar, ó vituperará un testigo va
á decir no poco para los asuntos forenses; y aun es permi
--. - ** - - ---- cº - - º *- ... - -

- EE.

-----º --es º -- º * - --

C A PU T V I I.

IDE GENERE DEMONSTRATIVO, º


* - •

I. Apud romanor genus hoc quoque cadit in negotia. II. Laur deorum. III. Laur
hominum , eorumque vituperatio. Interest autem ubi quisque laudetur IV. Laus ur
bium , et locorum. - b º r< . . . . ..
•, - º - -- r : .. . . . . . . .
- A N se --- " - - - -

I. c potissimum incipiam ab ea, ducitur, proprium est. Sed mos roma


quae constatlaude , et vituperatione. nus etiam negotiis hoc munus inseruit.
Quod genus videtur Aristoteles , atque Nam , et funebres laudationes pendent
eum secutus Theophrastus à parte nego- frequenter ex publico aliquo officio, at
tiali , hoc est a payº arin removisse, que ex senatusconsulto magistratibus sae
totamque ad solos auditores relegasse: et pe mandantur : et, laudare testem º vel
id ejus nominis, quod ab ostentatione contra, pertina ad momentum judicio
2
164 INSTITUCIONES ORATORIAS

tido señalar á los reos sus panegiristas. Por otra parte los li
bros publicados contra los competidores en las pretensiones,
v.g. contra L. Pison, Clodio, y Curion, contienen el vitu
perio de ellos, y en el senado se tuviéron como sentencias.
No niego, que hay oraciones en este género, que no tienen
otro fin que la pompa: quales son las alabanzas de los dioses,
y héroes de la antigüedad.
Pero así como en los discursos sobre negocios de impor
tancia la alabanza requiere sus pruebas; así las que solo sir
ven para hacer alarde del ingenio, tienen á veces alguna
manera de confirmacion. Así, el que quiera tratar de que
Rómulo fué hijo de Marte , y criado por una loba, alegará
en prueba de que su nacimiento fué celestial, que echado en
un rio , no murió ; y que en todo quanto hizo, acreditó ser
hijo del dios, que preside á las guerras: y por último; que
los hombres de su tiempo no tuviéron la menor duda en
que fué admitido en el cielo. Algunas de estas alabanzas
hay, donde entra algun género de defensa, como si el ora
dor tratando de Hércules le excusa de haber trocado de tra
ge con la reyna de la Lydia ; y de haberse puesto como una
muger á hilar, como cuenta la fábula.
Pero es propio de las alabanzas el adornar, y amplifi
car, cuya materia son los dioses, y héroes, aunque tambien
los irracionales, é insensibles:
IL. En los dioses generalmen te hablando, veneraremos la
ºr" º r --
---------rr

- massassma
..l U º a

rum: etipsis etiam reis dare laudato- in profuentem non potuerit extingui, quod
res licet et editi in competitores , in omnia sic egerit 2ut genitum praeside
¿ponem, inclodium, et Curionem bellorum deo incredibile non esset, quod
libri, vituperationem continent, et ta- A ipsum quoque coelo, receptum temporis
menin senatu loco sunt habiti sententiae, a ejus homines non dubitaverint Quaedam
Neque inficias eo, esse quasdam ex hoc vero etiam in defensionis speciem cadent:
genere materias ad solam compositas o— ut si in laude Herculis permutatum cum
stentationem, ut laudes deorum , viro— regina Lydiae habitum, et imperata (ut
rumque, quos priora tempora tulerunt. traditur) pensa orator excuset. -

Ut desiderat autem laus, quae nego- sed proprium laudis est, res amplifi
probationem : sie etiam deos, Quae
care, etinornare. PºeclPue
materiacadit
illa adhibetur,
tiis quae ostentationi, componitur, ha- quidem et homimºs : est

bet interim aliquam speciem probationis: tamen, et aliorunº animalium, etca


ut, qui Romulum Martis filium, educa- rentium animº: , , , , , , , , , , ,-

tum que à lupa dicat, in argumentum II. Verum in deis generaliter primum
coelestis ortusutaturhis, quod abjectus majestaten ipsiuseorum naturae vene
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 165
magestad de su naturaleza; y su virtud propia de cada uno, por
la que inventáron cosas útiles al género humano. En Júpiter la
virtud con que gobierna el mundo; en Marte el poder. en la
guerra; en Neptuno el imperio del mar. La invencion de
las artes en Minerva; de las letras en Mercurio; de la me
dicina en Apolo; de cultivar las mieses en Ceres ; y del vi
no en Baco º: trayendo tambien á la memoria las acciones
ilustres, que de ellos cuenta la antigüedad. Añaden honra á
los dioses los padres, de que tuviéron principio; como ser uno
hijo de Júpiter. La antigüedad; como el haber tenido prin
cipio del chaos. Los hijos; como Diana , y Apolo, que
fuéron hijos de Latona. En algunos debe alabarse el ha
ber nacido inmortales; en otros el haber conseguido la in
mortalidad á fuerza de brazo, como la consiguió la piedad
de nuestro Príncipe, honra del siglo presente."
III. Mucho mas varias son las alabanzas de los hom
bres; porque se dividen en los tiempos, que les precediéron,
y en los que viviéron. En los que muriéron, atendemos al
tiempo, que siguió á su muerte. Antes de la existencia del
hombre consideraremos su patria, padres, y antepasados; y
esto de dos maneras. Porque, ó manifestaremos, que corres
pondiéron á la nobleza heredada; ó que habiendo nacido en
las malvas, se la ganáron por sus puños. Al tiempo ántes de
su existencia pertenecen los pronósticos ”, y oráculos, que
-

º.

rabimur : deinde propriam vimº cujus immortalitatem virtute sunt consecuti:


que, et inventa, quae utile aliquid ho quod pietas Principis nostri , praesen
minibus attulerunt. Vis ostenditur, ut tium quoque temporum decus, fecit.
in Jove , regundorum hominum : in III. Magis est varia laus hominum.
Marte, belli: in Neptuno , maris. In Nam primum dividitur in tempora,
venta, ut artium, in Minerva : Mercu quodque ante eos fuit, quodque ipsi vi.
rio, literarum : medicinae , Apolline: xerunt. Iniis autem, qui fato sunt fun
Cerere, frugum : Libero, vini. Tum si cti, etiam quod est insecutum. Ante ho
qua ab his acta vetustas tradidit, com minem, patria , ac parentes, majores
memoranda. Addunt etiam diis honorem que erunt: quorum duplex tractatus est.
parentes, ut si quis sit filius Jovis. Ad Autenim respondisse nobilitati, pulchrum
ditantiquitas, utiis, qui sunt ex Chao. erit: aut humilius genus illustrasse fa
Progenies quoque, ut Apollo , ac Diana ctis. Illa quoque interim ex eo, quod
Latonae. Laudandum in quibusdam, quod ante ipsum fuit, tempore trahentur, quae
genitiimmortales: in quibusdam , quod responsis, vel auguriis futuram elarita
I66 INSTITUCIONES ORATORIAS

anunciáron su fama venidera. Así dixéron estos, que el hijo


de Thetis seria mayor que su padre.
Al hombre se le debe alabar por los bienes del alma,
del cuerpo, y por los que estan fuera de él. Los corporales,
y de fortuna son de ménos monta ”, y no se han de alabar
de una misma manera. La hermosura, y fuerzas corporales
las alabamos tambien, como hace Homero con Agamemnon,
y Aquiles. Y sucede á veces, que las pocas fuerzas corpo
rales contribuyen no poco á la admiracion; como quando el
mismo pinta pequeño de cuerpo á Tideo, pero guerrero.
Los bienes de fortuna unas veces dan lustre á las personas,
como si son reyes, ó príncipes (materia la mas abundante
para manifestar la virtud ); otras, quanto ménos hubo de
estos socorros, tanto mayor gloria reciben las obras de be
neficencia. Pero es de advertir, que los bienes de fortuna,
que da á los hombres la casualidad, no acarrean gloria á
estos, sino el buen uso de ellos; pues como las rique
zas, valor, y valimiento ayudan para lo bueno , y lo malo,
su uso es la regla mas segura del mérito, ó demérito del
sugeto; siendo cierto, que por este uso somos mejores, ó
peores.
Los bienes del alma siempre son laudables; aunque esta
alabanza no se forma de un mismo modo. "Ocasiones hay,
en que es mejor, seguir las edades del hombre, y el órden
de sus hechos; de forma, que en la primera alabemos la bue

tem promiserint: uteum, qui ex Theti- uberior) tum quo minores , opes fuerunt,
de natus esset, majorem patre suo futu eo majorem benefactis gloriam parit. Sed
rum cecinisse dicuntur oracula. omnia, quae extra nos bona sunt, quae
Ipsius vero laus hominis ex, animo, que hominibus forte obtigerunt, non ideo
et corpore , et extra positis peti debet. laudantur, quod habuerit quis ea , sed
Et corporis quidem, fortuitorumque cum quod his honeste sit usus. Nam divitiae,
levior, tum non uno modo tractanda et potentia , et gratia, cum plurimum
est. Nam , et pulchritudinem interim, virium dent in utramque partem , cer
roburque prosequimur honore verborum, tissimum faciunt morum experimentum:
ut Homerus in Agamemnone , atque aut enim meliores propter haec, aut pe
Achille. Interim confert admirationi mul jores sumus.
tum etiam infirmitas , ut cum idem Ty Animi semper vero laus. Sed non
dea parvum , sed bellatorem dicit fuis una per hoc opus via ducitur. Namgue
se. Fortuna vero, cum dignitatem affert, alias aetatis gradus, gestarumque rerum
ut in regibus, principibusque, (namque ordinem sequi speciosius fuit: ut in pri
est haec materia ostendendae virtutis mis annis laudaretur indoles, tum disei
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 167
na índole, despues la enseñanza, y educacion, y luego la
serie de acciones, y palabras. Otras dividir el panegírico en
varias virtudes, fortaleza, justicia, templanza, y las demas,
comprobándolas con hechos particulares. Qual de estos dos
métodos sea mejor, la materia del panegírico lo ha de decir;
sabiendo, que aquello da mas gusto al auditorio, que uno
hizo solo, ó primero que otros, ó con pocos; y mas si es
cosa, que no se esperaba; principalmente quando esto se hizo
mas por el interes ageno, que por el propio.
No siempre ocurre el tratar del tiempo, que sigue á la
muerte del hombre; no solamente porque á veces los pane
gíricos son de los que aun viven , sino porque rara vez
hay honores divinos, y decretos del senado sobre ereccion
de estatuas, que poder contar. Aquí se reducen los monu
mentos del ingenio, que mereciéron aprobacion por muchos
siglos. Pues á algunos mas honor, y justicia hizo la posteri
dad, que los de su tiempo, como á Menandro.
Los hijos buenos contribuyen á la alabanza de los padres;
las ciudades á la de sus fundadores, y legisladores; las artes á
la de sus inventores; y qualquier establecimiento á la de su
autor; como escriben que Numa Pompilio instituyó el culto
de los dioses "; y que Publícola fué el primero que comenzó
á rendir las insignias consulares al pueblo.
Para vituperar sé observará el mismo órden, pero por
la parte contraria. Porque el baxo linage á muchos les sirvió
=E -

plinae, posthoc operum, id est facto- mus, sed quod rara haec occasio est, ut
rurn , dictorumque contextus : alias in referri possint divini honores, et decre
species virtutum dividere laudem , for ta, ut publice statuae constitutae. Inter
titudinis, justitiae , continentiae, caete quae enumeraverim ingeniorum monu
rarumque, ac singulis assignare, quae se menta, quae seculis probarentur. Nam
cundum quamque earum gesta erunt. quidam, sicut Menander, justiora poste
Utra sit autem harum via utilior, cum rorum , quam suae aetatis judicia sunt
materia deliberabimus : dum sciamus, consecuti.
gratiora esse audientibus , quae solus Afterunt laudem liberi parentibus,
quis, aut primus , aut certe cum pau urbes conditoribus, leges latoribus, ar
cis fecisse dicetur; si quid praeterea su tes inventoribus, nec non instituta quo
pra spem , aut expectationem, praeci que auctoribus , ut à Numa traditum.
pue quod aliena potius causa, quam sua. deos colere, et à Publicola fasces popu
Tempus, quod finem hominis insequi lo submittere.
tur, non semper tractare contingit: non Qui omnis etiam in vituperatione or
solun quod viventes aliquando lauda do constabit, tamen in diversum, Nam,
I68 INSTITUCIONES ORATORIAS

para infamarlos ; á otros su claro nacimiento les hizo mas


visibles por sus vicios, y mas odiosos; y á veces fué causa
de la ruina de algunos, como dicen de Páris. A unos acar
reáron desprecio los defectos corporales, y la fealdad, como
á Thersites; quando á otros les hiciéron odiosos las prendas
del cuerpo afeadas con los vicios : así los poetas nos pintan
afeminado á Nireo, y á Plistenes deshonesto. Los vicios del
ánimo son tantos, como las dotes; y se alaban, ó vituperan
así como los del cuerpo. Algunos hombres fuéron deshonra
dos despues de la muerte, como Melio, cuya casa fué arra
sada; y como Marco Manlio, cuyo apellido se borró para
siempre de toda su familia. Los padres de los malos son
odiosos. Tambien resulta infamia á los fundadores de las ciu
dades, de haberlo sido de alguna nacion perniciosa á las de
mas; como sucede con el primer autor de la supersticion
judayca ”; y con los Gracos, cuyas leyes son odiosas. Pero
en los que viven al presente es argumento de sus costum
bres el juicio de los demas hombres; y el honor, ó ignomi
nia es el fundamento para alabarlos, ó vituperarlos.
Importa mucho , dice Aristóteles, el lugar donde uno
es alabado , ó vituperado “: pues va á decir muchísimo
saber las costumbres, y modo de pensar del auditorio, pa
ra persuadirlos, que el sugeto, á quien alabamos , tuvo lo
mismo que aprueba 3 ó que estuvo muy distante de lo mis
mo que aborrece. Y así no se les hará cosa dura el juicio,
*=-MEDºssma

et turpitudo generis opprobrio multis ptum est. Et parentes malorum odimus.


fuit: et quosdam , claritas ipsa notiores Et est conditoribus urbium infamiae,
circa vitia, et invisos magis fecit, et in contraxisse aliquam perniciosam caeteris
quibusdam, ut in Paride traditum est, gentem, qualis est primus judaicae su
praedicta permicies: et corporis, et for perstitionis auctor, et Gracchorum leges
mae quibusdam mala contemptum , ut invisae. Sed in viventibus quoque judi
Thersitae : at vero quibusdam boma vi cia hominum, velut argumenta sunt mo
tiis corrupta, odium attulerunt, ut Ni rum , et honos, aut ignominia veram es
rea imbellem, Plistenem impudicum, a se laudem, vel vituperationem probat.
Interesse tamen Aristoteles putat ubi
poetis accepimus. Et animi totidem vi
tia, quot virtutes sunt: mec minus quam quisque laudetur, aut vituperetur. Nam.
in laudibus, duplici ratione tractantur. plurimum refert, qui sint audientium
Et post mortem adjecta quibusdam igno mores, quae publice recepta persuasio:
minia est, ut Melio , cujus domus so utilla maxime, quae probent, esse in eo
lo aequata : Marcoque Manlio, cujus qui laudabitur, credant: autin eo, con
praenomen, e familia in posterum exem tra quem dicemus, ea quae oderunt, Ita
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. I66
que ya ellos tenian ántes de oir al orador. Por lo qual siem
pre se ha de mezclar alguna alabanza de los oyentes; por
que esto los hace benévolos; y así, permitiéndolo la mate,
ria de que se trata, no se ha de omitir. Caminemos en el
supuesto de que en Lacedemonia merecerán ménos aprecio
las letras, que en Athenas ; aunque mucho mas el sufri
miento, y valor. Pueblos hay, donde se vive de lo que ro
ban; otros, donde se guardan las leyes. Tratar de frugalidad
entre los Sybaritas, no seria bien admitido; quando entre los
primeros romanos el luxo era pecado capital. La misma dife
rencia hay en todo lo demas. El juez, que oye lo que frisa
con su modo de pensar, nunca es contrario.
Enseña el mismo Aristóteles (en lo que se propasó despues
Cornelio Celso ) que, habiendo entre las virtudes, y vicios
cierta semejanza, que los equivoca, el orador debe valerse
de esta equívoca inteligencia de las voces; de modo que lla
me esforzado al temerario, manirroto al pródigo, frugal al
avariento; pero este argumento tambien puede volverse al
reves. De esto nunca se valdrá el buen orador, sino quando
le mueva á ello el bien comun.
IV. Las ciudades son tambien materia de alabanza, como
las personas: porque á los fundadores se les reconoce por pa
dres; á los quales la antigüedad les concilia honor, como á
aquellos, que se dice haber nacido de la tierra. " En las ha
zañas hay sus virtudes, y vicios; consideracion, que convie
a ENE

non erit dubium judicium, quod oratio- dum invasit, quia sit quaedam virtuti
nem praecesserit. Ipsorum autem per bus, ac vitiis vicinitas, utendum proxi
miscenda laus semper. Nam id benevo ma derivatione verborum ., ut prote
los facit : quoties autem fieri poterit, merario fortem , pro prodigo liberalem,
cum materiae utilitate jungenda. Minus pro avaro parcum vocemus: quae eadem
Lacedaemone Studia literarum , quam etiam contra valent. Quod quidem ora
Athenis, honoris merebuntur: plus pa tor, id est vir bonus , nunquam faciet,
tientia, fortitudo. Rapto vivere quibus nisi forte communi utilitate ducatur.
dam honestum; aliis cura legum. Fruga IV. , Laudantur antem urbes similiter,
litas apud Sybaritas forsitan odio foret; atque homines. Nam pro parente est con
veteribus romanis summum luxuria cri ditor: et multum auctoritatis aftert ve
men. Eadern in singulis differentia. Ma tustas, utiis, qui terra dicuntur orti: et
xime favet judex, qui sibi dicentem as virtutes, ac vitia circa res gestas ; ea
"sentiri putat. demue in singulis. Illa propria, quae
Idem praecipit illud quoque, quod ex loci, positione , aut munitione sunt.
mox Cornelius Celsus prope supra mo Cives illis, ut hominibus liberi, decori.
ToM. L.
17o INSTITUCIONES ORATORIAS

ne á todas las ciudades. Contribuye á la alabanza particular


de los pueblos la situacion, y murallas, que los hacen fuertes;
los ciudadanos, que les dan tanto lustre, como los hijos á sus
padres. Tambien se alaban los edificios, en los que se atiende
al decoro, utilidad, hermosura, y al artífice. Al decoro, co
mo en los templos ; á la utilidad, como si son murallas;
en todos ellos á la hermosura, y artífice. Tambien alabamos
á los lugares, como Ciceron alaba á Sicilia ; en los que aten
demos tambien á la hermosura, y utilidad. A la hermosura,
como si son llanos, costas de mar, y amenos; y á la utilidad,
si son saludables, y abundantes en frutos. Los dichos, y hechos
buenos tambien se alaban en comun; y por último qualquiera
cosa. Hay algunas oraciones en alabanza del sueño, y de la
muerte; y algunos médicos alabáron ciertas comidas. º Y
así como no convengo en que solo se atienda á lo honesto en
el género laudativo , así creo, que en lo que mas se versa,
es en la qualidad. Bien es verdad, que pueden entrar los tres
estados, que diximos, como notó Ciceron en la invectiva de
Cesar contra Caton. Considerado todo él, tiene algo de se
mejante á los discursos del deliberativo: pues por lo comun
lo mismo que en este aconsejamos, alabamos en el primero.

Est aus et operum , in quibus honor,


utilitas, pulchritudo, auctor spectari SO
di. Nam, et somni, et mortis scriptae
laudes, et quorumdam à medicis cibo
let. Honor, ut in templis : utilitas , ut rum. Itaque ut non consensi hoc laudati
in muris; pulchritudo, vel auctor utro vum genus circa solam versari honesti
bique est. Est et locorum , qualis, Sici quaestionem, sic qualitate maxime con -
liae apud Ciceronem : in quibus simili tineri puto : quanquam omnes tres sta
ter speciem , et utilitatem intuemur: spe tus cadere in hoc opus possint, hisque
ciem , maritimis, planis, amoenis: uti usum C. Caesarem in vituperando Catone,
itatem , salubribus , fertilibus. Erit et notaverit Cicero. Totum autem habet
iam dictorum honestorum , factorumque aliquid simile suasoriis: quia plerumque
laus generalis. Erit et rerum omnis mo eadem illic suaderi, hic laudari solent,
DE M., FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 171

CAPÍTULO VIII. . .. .

DEL GÉNERO DELIBERATIvo.

I. Este género no atiende precisamente á lo útil. II. Del


erórdio, y narracion propia de este género. III. Tres cosas
deben atenderse en el aconsejar. 1? La cosa, de que se de
libera. Sus partes son tres , lo honesto, útil, y posible : lo
necesario no tiene cabida. 2? Las personas , que deliberan.
Dícese el modo de aconsejar lo bueno á los malos ; y a los
buenos lo que tiene visos de malo. 3? Quien es el que
aconseja. IV. De las prosopopeyas , ó declamaciones del
género deliberativo. V. Del estilo en este género.

I. e admiro de que algunos pretendan, que el delibe


rativo solo tiene por fin la utilidad. Si en esto hubiera de
seguirse una sola cosa , abrazaria mejor el dictamen de Ci
ceron , que le hace consistir en la bondad : pues aun
los que siguen la primera opinion , creo , que (si quie
ren acertar) no tendran por útil, sino lo bueno. Razon la
mas segura, si suponemos, que se habla en presencia de hom
º

CAPU T. V. III.

DE GENERE DELIEERATIvo.
\

I. Von rolam in eo quaeri utilitatem. II. De ejus prooemio , et narratione.


III. Tria in suadendo spectanda. I. Quid sit de quo deliberetur. Parter autem rua
dendi sunt hones tum, utile, porribile : main rejicit necessariun. 2. Qui sint, qui de
liberent. Et bic docet, quomodo et turpibus bonera, et bonis parum decora suaderi pos
sint. 3. Quis sit, qui ruadeat. IV. De proropopoeiis , reu declamationibus in genere
deliberativo. V. Quale debeat es se dicenai genus in suaroriis.

I. Danzana. quoque miror à me contineri putat. Nec dubito, quin hi


quibusdam sola utilitate finitas. Ac si qui sunt in illa priore sententia , secun
quid in his unum sequi oporteret, po- dum opinionem pulcherrimam, ne utile
tior fuisset apud me Ciceronis sententia, quidem , nisi quod honestum esset,
qui hoc materiae genus dignitate maxi- existimarint, Et est haec ratio verissi
Y 2
172 INSTITUCIONES ORATORIAS

bres buenos, y sabios. Pero entre los ignorantes, que es don


de ocurre mas veces el hablar, y principalmente delante del
pueblo, que por la mayor parte se compone de gente sin
letras, es menester hacer diferencia, y hablar segun las ideas
comunes. Porque hay muchos, que no porque una cosa sea
buena, la tienen por bastante útil; y á veces aprueban, movi
dos de una aparente utilidad, lo que tienen por malo positiva.
mente, como la alianza numantina, y las horcas caudinas, º
II. El género deliberativo, que llaman suasorio, se redu
ce á persuadir, ó disuadir alguna cosa. No necesita de exór
dio, como el judicial ; pues quien persuade, ya se supone tiene
ganada la voluntad de aquel á quien aconseja : bien que la
oracion debe tener su entrada semejante al éxórdio : porque
no debe comenzar repentinamente, ni por donde se le antoje al
orador, habiendo naturalmente en todos los asuntos unas co
sas que anteceden á otras. -

En el senado, y quando se habla al pueblo, se ha de cuidar


ganarse la benevolencia de los oyentes , como si fuera delante
de los jueces. Ni esto es cosa extraña; puesto caso que se ha
ce lo mismo en los panegíricos, que no tienen mas utilidad,
que el alabar á un sugeto. Aristóteles juzga, y no sin ra
zon, que el exórdio de semejantes oraciones debe tomarse por
lo comun de la persona del orador; y de los contrarios; va
liéndonos en esta parte de las reglas de las causas judicia
-

ases a aman
... Y

ma, si consilium contingat semper bo quia conciliatus est ei quisque , quem


norum , atque sapientum. Verum apud consulit. Initium tamen quodcunque de
imperitos, apud quos frequenter dicen bet habere aliquam prooemii speciem:
da sententia est, populumque praecipue, nec enim abrupte, nec unde libuit, in
qui ex pluribus. constat indoctis, discer cipiendum ; quia estaliquid in omni ma
nenda sunt haec, et secundum commu teria naturaliter primum.
nes magis intellectus loquendum. Sunt In senatu, et utique in concionibus,
enim multi, qui etiam quae credunt ho eadem ratio, quae apud judices, adqui
nesta , non tamen satis utilia , quoque rendae sibi plerumque eorum apud quos
existiment: quae turpia esse dubitare non dicendum sit, benevolentiae. Nec mi
possunt, utilitatis specie ducti , probent: rum , cum etiam in panegyricis petatur
ut foedus numantinum, jugumque cau audientium favor, ubi emolumentum non
dinum. in utilitate aliqua, sed in sola laude con
II. Pars deliberativa (quae eadem sistit. Aristoteles quidem, nec sine cau
suasoria dicitur) officiis constat duobus, sa, putat, et à nostra , et ab ejus qui
suadendi, et dissuadendi. Prooemio, qua dissentiet, persona duci frequenter in
le est in judicialibus , mon utique eget, consiliis exordium , quasi mutuantibus
*

DE M. FABIo QUINTILIANO. L IB. III. I73

les: y á veces para exagerar , ó disminuir la importancia de


la cosa. En los exórdios del demonstrativo da mas ensanche,
y libertad; pudiéndose tomar, ya de cosa muy remota de la
materia, como Isócrates en la alabanza de Helena; ya de lo
que tenga con ella algun parentesco, como él mismo lo hi
zo en el panegírico, quando se queja , de que se aprecian
mas las prendas del cuerpo, que las del alma; y Gorgias en
el olimpico, quando alaba á los primeros inventores de se
mejantes juntas. Siguiendo á los quales Salustio , comenzó
sus historias de la guerra catilinaria, y jugurtina por una
idea muy distinta de semejante asunto. Pero volvamos á las
oraciones del deliberativo, en las que pondremos un exórdio,
y entrada pequeña, que sirva como de cabeza, y Principio.
Y supuesto que la deliberacion sea de cosa particular, en
que suponemos instruidos á los oyentes, es superflua la nar
racion; aunque podrán contarse algunas otras, que digan re
lacion con ella. Es necesaria en los razonamientos al pueblo,
siempre que contribuye á poner en claro la serie del asunto; y
deberá ir muy acompañada de afectos. Muchas veces habrá que
excitar, ó calmar la indignacion; mover el miedo , deseo,
odio, y aplacar el encono. Algunas veces, convendrá mover
la compasion; como quando se trate de socorrer á los sitia
dos, ó de sentir la destruccion de alguna ciudad amiga.
En las oraciones deliberativas vale mucho la autoridad;
N

hoc nobis à judiciali genere : , nonnun tio debebimus esSe contenti.


quam etiam , ut minor res, majorve vi Narrationem vero nunquam exiget
deatur. In demonstrativis vero prooemia privata deliberatio , ejus duntaxat rei,
esse maxime libera existimat. Nam , et de qua dicenda sententia est: quia nemó
longe à materia duci haec, utin Hele ignorat, id, de quo consulit. Extrinsecus
nes laude Isocrates fecerit: et ex aliqua possunt pertinentia ad deliberationem
rei vicinia, utidem in panegyrico, cum multa narrari. In concionibus saepe est
quaeritur, plus honoris corporum , quam etiam illa quae ordinem rei docet, ne
animorum virtutibus dari: et Gorgias in cessaria ; et afectus, ut quae maxime,
olympico laudans eos , qui primi tales postulabit. Nam, et concitanda , et le
instituerunt conventus. Quos secutus vi nienda frequenter estira , et ad metum,
delicet Crispus Sallustius in bello jugur-- cupiditatem, odium , conciliationem im -.
thino, et catilinario, nihil ad historiam pellendi animi. Nonnunquam etiam mo
pertinentibus principiis orSus est. Sed venda miseratio est, sive, ut auxilium
nunc ad suasoriam , in qua etiam cum obsessis feratur, suadere oportebit, sive
prooemio utemur , breviore tamen , et sociae civitatis eversionem deflebimus.
velut quodam capite tantum , et ini Valet autem in consiliis auctoritas
I74 INSTITUCIONES ORATORIAS

porque el que quiera que defieran á su dicho en lo útil, y


bueno, es preciso sea tenido por muy sensato, y de conocida
bondad. Porque en los asuntos judiciales se permite y
concede algo á la pasion ; pero en los consejos ninguno
niega , que estos deben ser arreglados á las buenas cos
tumbres.
Muchos de los griegos pensáron , que todo este género
tiene uso únicamente en las juntas del pueblo, y en el go
bierno de la república; y aun Ciceron de esto solo trata por
lo comun. Por tanto dice , que los que traten de la paz,
de la guerra, de las tropas , riquezas, y tributos, tengan
sobre todo presentes dos cosas , que son las fuerzas, y las
costumbres de una ciudad; para que todas las razones para
persuadir, vayan fundadas en la naturaleza de estas mismas
cosas, y de los oyentes. Pero yo admito mas variedad de asun
tos; pues el género deliberativo abarca mucho mas.
III. Por tanto para persuadir, ó disuadir, deben tenerse
presentes tres cosas. La cosa de que se delibera. Quiénes de
liberan, Quién es el que persuade la tal cosa.
1º Lo que se delibera, ó es ciertamente posible, ó no.
Si es dudosa su posibilidad, esta será la qüestion única, ó la
principal. Porque ocurrirá muchas veces el tratar, que no de
be hacerse, aunque sea posible; y despues que es impracti
cable. Semejantes asuntos se llaman de conjetura ; v. g. si un
isthmo se puede cortar ; agotar la laguna Pontina ; fabri
-EEEEEEEEEE-a

plurimum. Nam, et prudentissimus esse, suadendi duceretur. Nobis major in re


haberique , et optimus is debet, qui videtur varietas. Nam, et consuitantium,
sententiae suae de utilibus, ataue ho et consiliorum plurima sunt genera.
nestis credere omnes velit. In judiciis e III. Quare in suadendo, et dissuaden
mim vulgo fas habetur indulgere aliquid do tria primum spectanda erunt, quid
studio suo: consilia memo est, qui neget sit de quo deliberetur, qui sint qui deli
secundum mores dari. berent, qui sit, qui suadeat.
Graecorum quidem plurimi omne hoc I. Rem de qua deliberatur, aut cer
oficium concionale esse judicaverunt, et tum est posse fieri, aut incertum. Si in
in sola reipublicae administratione po certum, haec erit quaestio sola , aut po
suerunt. Quin, et Cicero in hac maxime tentissima. Saepe enim accidet, ut prius
parte versatur. Ideoque suasuris de pa dicamus, ne si possit quidem fieri, esse -
ce, bello, copiis, opibus , vectigalibus, faciendum : deinde fieri non posse. Cum
haec duo praecipue nota esse voluit, vi autem de hoc quaeritur, conjectura est;
res civitatis, et mores: ut ex natura cum an isthmos intercidi , an siccari palus
ipsarum rerum , tum audientium ratio Pontina, an portus fieri Hostiae possit,
DE M. FARIO QUINTILIANO. LIB. III. I75
car el puerto de Ostia; si Alexandro podrá descubrir tierras
mas allá del océano. Aun en las cosas , que son posibles,
cabe á veces la conjetura, v. g. si llegara a suceder que los
romanos venzan a los cartagineses ; si Anibal de raraí la
Italia , conduciendo su exército Escipion contra Cartago; si
los samnites guardarán fidelidad, caso que los romanos de
a en las armas. Algunas otras cosas hay, que es creible, que
puedan suceder, y que sucederán, pero en otras circunstancias.
Quando no haya lugar de conjetura, considérense otras
cosas. Primeramente, ó se deliberará por causa de la misma
cosa, que se ventila, ó por otras exteriores que intervienen.
Atendida la misma cosa v.g. deliberan los senadores, si se les
ha de dar el prest a los soldados. Esta qüestion será simple.
A esto se juntan las causas que hay, ó para hacer la cosa,
como quando deliberan los padres ; si han de ser entrega
dos los Fabios á la Francia , que amenaza con guerra ; ó
para omitirla, como quando el Cesar delibera; si ha de lle
var adelante su pensamiento de ir a la Alemania, en vis
ta de que los soldados hacen testamento todos los dias. Estas
causas suasorias son de dos modos; pues en la primera el prin
cipal motivo de dudar, es el estar amenazando con guerra
los franceses ; y ademas puede dudarse, si debian ser entre
gados los Fabios, aunque no amenazase ningun peligro; por
que enviados por embaxadores hiciéron hostilidades, y dego
lláron al rey á quien iban, contra el derecho de gentes. En

an Alexander terras ultra oceanum sit


deliberant Patres Conscripti, an stipen
inventurus. Sed in iis quoque, quae con dium militi constituant. Haec materia
stabit posse fieri , conjectura erit ali simplex erit. Accedunt causae, aut fa
quando: ut si quaeratur, an utique fu ciendi, ut deliberant P. C. an Fabios de
turum sit, ut Carthaginem superent ro dant gallis bellum minitantibus: aut non
mani; ut redeat Annibal, si Scipio exer faciendi , ut deliberat C. Caesar, an per
citum in Africam transtulerit; ut servent Severet in Germaniam ire, cum milites
fidem samnites, si romani arma depo passim testamenta facerent. Hae suaso—
suerint. Quaedam , et fieri posse, et fu riae duplices sunt. Nam , et illic causa
tura esse credibile est : sed aut alio deliberandi est, quod bellum galli mi
tempore, aut alio loco, aut alio modo. nitentur : esse tamen quaestio potest,
Ubi conjecturae non erit locus, alia dedendine fuerint etiam citra hanc de
sunt intuenda. Et primum , aut propter nuntiationem , qui contra fas, cum le—
psam rem , de qua sententiae rogantur, gati missi essent, praelium inierint, re
consultabitur: aut propter alias interve gemque ,ad quem mandata acceperant,
nientes extrinsecus causas. Propter ipsam trucidarint. Ethic nihil Caesar sine du
-
176 INSTITUCIONES ORATORIAS

el otro caso no tiene el Cesar mas motivo de dudar, que la


perturbacion de la tropa; aunque se podria dudar tambien,
si debia hacer semejante expedicion fuera de este caso. Pero
siempre conviene tratar primeramente del primer motivo de
la consulta, y duda.
Algunos juzgan, que el fin del género deliberativo es lo
honesto, útil, y necesario; yo no hallo motivo para poner
lo último. Pues por mas que nos resistamos , hay algunas
cosas que tenemos que pasar por ellas, sin quedarnos liber
tad de hacer lo contrario; y el deliberativo trata de si se ha
de hacer una cosa. Y si llaman necesario á lo que el hom
bre abraza por el miedo de otro mayor mal, entónces la
qüestion ya es de la utilidad. Porque así como (tratándose de
entregarse al enemigo una ciudad cercada, que no puede re
sistir, y está falta de víveres) dicen ser forzosa la entrega,
ó morir sin remedio; así se infiere de esto mismo, que no
es cosa forzosa el rendirse , porque podemos morir honro
samente. Por último tenemos el exemplo de los sagunti
nos, y el de los de Oderzo ”, que sitiados en una nave
no se entregáron. Luego en causas semejantes, ó se deli
bera sobre lo útil, ó la duda estará entre lo útil, y ho
nesto. Pero dirán : si el hombre quiere tener sucesion, for
zosamente ha de tomar muger. ¿Quién lo duda ¿ Con que
no dudando el que quiere tener hijos , que debe casarse,
me parece, que ni aun es materia de consulta aquella, en

bio deliberet, misi propter hanc mili- aqua, ciboque defecti , de facienda ad
tum perturbationem est tamen locus hostem deditione deliberent, et dicatur,
quaerendi, an citra hune quoque casum necesse est: , nempe sequitur ut hoc sub
penetrandum in Germanian fuerit. Sem jiciatur , alioqui pereundum est : ita
per auten de eo prius loquemur, de propter id ipsum non est necesse , quia
quo deliberari etiam detractis sequenti perire potius licet. Denique non fece
bus posset. runt Saguntini, nec, in rate opitergina
Partes suadendi quidam putaverunt circumventi. Igitur in his quoque cau
homestum, utile , necessarium. Ego non sis, aut de sola ambigetur utilitate, aut
invenio huic tertiae locum. Quantalibet quaestio inter utile , atque honestum
enim vis ingruat, aliquid fortasse pati consistet. Atenim si quis liberos pro
necesse sit, nihil facere. De faciendo creare volet, necesse habeat uxorem du
autem deliberatur. Quod si hanc vocant cere. Quis dubitat? sed ei, qui pater vult
necessitatem, in quam homines gravio fieri, liqueat necesse est, uxoren esse
rum metu coguntur, utilitatis erit quaes ducendam. Itaque mihi ne consilium
tio. Utenim si obsessi, et impares, et quidem videtur, ubi necessitas est, non
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 177
la que nos consta no puede pasarse por otro medio; por
que toda consulta es sobre cosa dudosa. Mas conformes van
á razon los que admitiéron por fin tercero lo que los grie
gos llaman dinaton, y nosotros posible : interpretacion, que
parecerá dura, pero no hay otra.
No necesito demostrar, por ser cosa clara, que no siem
pre entran todos estos fines en las causas del género deli
berativo. Algunos ponen mas fines; subdividiéndolos en nue
vas especies inútiles. Porque lo lícito , lo justo , lo pia
doso, lo equitativo, lo humano ( que así interpretan la voz
emeron ) y otros que aun pudiéramos juntar, se reducen á lo
honesto. Si la cosa es grande, fácil, gustosa, y libre de
peligro , pertenece á la qüestion de la utilidad: pues estos
lugares nacen de la contradiccion; esto es, la cosa es útil,
pero dificil, pequeña, de poca importancia, desagradable,
peligrosa. - -

Con todo piensan algunos, que algunas veces se delibe


ra de cosas de mero gusto, como de construir un teatro ; de
celebrar los juegos. Pero á ninguno le tengo por tan entre
gado al luxo, que no atienda en las consultas sino al deley
te. Siempre ha de intervenir forzosamente alguna otra mira;
en los ¿ el honrar á los dioses; en el construir el tea
tro el desahogo útil de las fatigas, ó el atajar por este me
dio los alborotos de la plebe. No obstante podemos hacer

magis, quam ubi constat, quid fieri o cile, magnum, jucundum, sine pericu
mnino non posse. Omnis enim delibe lo, ad º quaestionem pertinet utilitatis:
ratio de dubiis est. Melius igitur , qui qui loci oriuntur ex contradictione. Est
tertiam partem dixerunt duva rev , quod quidem utile , sed dificile, parvum, in
mostri possibile nominant: quae, ut dura jucundum, periculosum.
videatur appellatio, tamen sola est. Tamen quibusdam videtur esse non
Quas partes non omnes in omnem ca nunquam de jucunditate sola consulta
dere suasoriam , manifestius est, quam tio: ut si de aedificando theatro , in
ut docendum sit. Tamen apud plerosque stituendis ludis deliberetur. Sed nemi
earum numerus augetur , ā quibus po nem adeo solutum luxu puto , ut nihil
nuntur ut partes, quae species sunt par in causa suadendi sequatur praeter vo
tium. Nam fas, justum , pium , aequum, luptatem. Praecedat enim semper ali
mansuetum quoque (sic enim sunt inter quid necesse est, ut in ludis honor deo
pretatiro ºpov ) et si qua adhue ad rum , in theatro non inutilis laborum
jicere, quis ejusdem generis velit, sub remissio, deformis, et incommoda tur
jici possunthonestati. An sit autem fa bae, si id non sit, conflictatio: etni
ToM. L.
178 INSTITUCIONES ORATORIAS

entrar aquí la religion, llamando al teatro como un templo,


donde se celebra aquella sagrada solemnidad. -

Muchas veces decimos, que debemos despreciar la utili


dad por atender á lo honesto ; como quando aconsejamos á
los de Oderzo, que mueran ántes , que rendirse al enemi
go. Tambien se prefiere la utilidad á lo honesto, como per
suadir, que se armen los esclavos en la guerra cartaginesa;
aunque no podemos decir abiertamente, que esto en si es co
sa mala. Porque puede decirse, que todos naciéron libres,
que constan de los mismos principios, y aun quizá de lina
ge antiguo, y noble. Y donde amenaza un riesgo evidente,
como á los de Oderzo, conviene oponer otros : v.g., per
suadirles, que si se entregaban al enemigo, quizá padecerian
muerte mas cruel, ó que el Cesar saldria con la victoria,
lo que era mas verosimil. -

Estas dificultades, que chocan entre sí, por lo comun se


eluden con jugar los términos. Pues aun la misma utilidad
es combatida de los que dicen, que no solo es mejor lo ho
nesto, que lo útil, pero que no se concibe ser útil, no sien
do honesto. Al contrario lo que llamamos nosotros honesto,
lo llaman ellos cosa vana , ambiciosa, necia, y buena mas
en el nombre, que en la realidad. Ni solamente compara
mos las cosas útiles con las inútiles, sino estas cosas entre
sí; como si de dos cosas útiles escogemos la que es mas; y de

= EE.

hilominus eademilla religio, cum thea lius etiam perituros affirmemus , si se


trum veluti quoddam illius sacri tem dediderint , sive hostis non servaverit
plum vocabimus. - fidem, sive Caesar vicerit, quod estve
Saepe vero, et utilitatem despicien ro similius.
dam esse dicimus, ut honesta faciamus: Haec autem , quae tantum inter se
ut cum illis Opiterginis damus consi pugnant, plerumque nominibus deflecti
lium , ne se hostibus dedant, quanguam solent. Nam, et utilitas ipsa expugna
perituri sint, nisi fecerint. Et utilia ho tur ab iis, qui dicunt non solum potio
nestis praeferimus, ut dum suademus, ut ra esse honesta , quam utilia , sed ne
beilo punico servi armentur. Sed tamen utilia quidem esse , quae non sunt ho
neque hic plane concedendum est, esse nesta: et contra , quod nos honestum,
id inhonestum. Liberos enim natura o illi vanum , ambitiosum , stolidum, ver
mnes, et eisdem constare elementis, et bis quam re probabilius vocant. Nectan
fortasse antiquis etiam nobilibus ortos, tum inutilibus comparantur utilia , sed
dici potest. Et illic ubi manifestum pe inter se quoque ipsa : ut si è duobus
riculum est, opponenda alia: ut crude eligamus, in altero quid sit magis, in
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 179
dos inútiles la ménos mala. Pasa aun mas adelante. Porque
á veces se nos presentan tres extremos ; como quando Pom
peyo consultaba, si se acogeria á los Partos, al Africa, ó á
Egipto. Y así no solo se averigua, si una cosa es mejor que
otra, sino quál es la mejor ; ó al reves. ” -

Pero nunca ocurrirá deliberar sobre una cosa, que nos


sea provechosa. Porque donde no hay contradiccion, ¿qué
motivo hay de consultar ? Así es que semejantes oraciones
suasorias no son mas que una comparacion. Tambien se ha de
considerar la ventaja, que hemos de conseguir, y porqué medio;
para que podamos decidir, donde es la ventaja mayor; ó
si son mayores los inconvenientes por el medio que lo pre
tendemos. Hay qüestiones de la utilidad , y del tiempo.
v.g. Conviene la cosa , mas no al presente. Del lugar. No
aquí. De la persona. No para nosotros; no contra estos. En
la manera de obrar. No por este camino. Y últimamente en
el modo. No en tantogrado.
2? Pero muchas veces consideramos la persona que per
suade lo bueno , y á quien. Por donde , aunque sir
ven de mucho los exemplos, en semejantes causas , por
que el hombre se mueve muy fácilmente por la experien
cía , para abrazar alguna cosa , importa mucho el saber
la autoridad de quien nos lo aconseja , y á quienes aconse
jamos. Porque es diversa la disposicion de los ánimos, y de
dos especies los que deliberan. Porque ó son muchos, ó es
uno solo; y en uno, y otro cabe mucha diferencia. Si son
ass -

altero quid sit minús. Crescit hoc adhuc. di. Est utilitatis, et in tempore quae
Nam interim triplices etiam suasoriae in stio; expedit, sed non nunc. Et in loco:
cidunt: ut cum Pompejus deliberavit, Par non hic. Et in persona; non nobis, non
thos, an Africam, an AEgyptum peteret. contra hos. Et in genere agendi; non sic.
Ita non tantum, utrum sit melius, sed Et in modo; non in tantum.
quid sit optimum, quaeritur. Item contra. 2. Sed personam saepius decoris cau
Nec unquam incidet in hoc genere sa intuemur, quae, et in nobis, et in
materiae dubitatio rei, quae undique se iis qui deliberant, spectanda est. Itaque
cundum nos sit. Nam ubi contradictio quamvis exempla plurimum in consiliis
ni locus non est, quae potest esse cau possunt, quia facillime ad consentien
sa dubitandi 2 Ita fere omnis suasoria dum homines ducuntur experimentis, re
nihil est aliud, quam comparatio. Vi fert tamen quorum auctoritas, et quibus
dendumque, quid consecuturi simus, et adhibeatur. Diversi sunt enim delibe
per quid; ut aestimari possit, plus in rantium animi, duplex conditio. Naml
eo quod petimus, sit commodi: an ve consultant, aut plures, aut singuli; sed
ro in eo per quod petimus, incommo in utrisque difierentia; quia, et in plu
2

N,

I8o - INSTITUCIONES ORATORIAS

muchos, va á decir no poco el saber, si es el senado, ó el


pueblo; si son romanos, ó de Fidenas; griegos, ó bárbaros.
Si es uno solo, importa el conocer, si persuadimos la pre
tension de los honores á Caton, ó á Mario. Si delibera sobre
la guerra, y modo de hacerla Escipion primero que Fabio.
Por tanto debemos atender al sexo, á la edad, y dignidad
de la persona.
Y no es la menor diferencia la de las costumbres; por.
que persuadir á los buenos lo honesto, es muy fácil; pero
si lo persuadimos á los malos, debe cuidarse no parezca, les
damos en cara con el vicio. Al que delibera no le hemos de
mover con la naturaleza de lo bueno, que él no tiene por
tal, sino con la alabanza, con las opiniones del vulgo; y
quando no baste, esta razon vana, con el bien que de la
cosa dimana , ó, lo que es mejor, con el temor del mal, que
de no hacerla, resulta. Porque ademas de que estas razones
hacen mucha mella en gente inconstante, no sé si á la ma
yor parte de los hombres naturalmente les mueve mas el
miedo del mal ”, que la esperanza del bien; así como los
tales conocen mas fácilmente lo malo, que lo bueno.
Algunas veces se persuaden tambien á los buenos cosas
poco honestas, y aconsejamos á los que no son muy bue
nos, atendiendo en esto únicamente al interes de los que con
sultan. Bien sé, que el que esto lea, podrá decir: ¿Con que esto
me mandas , y tienes esto por licito ?. Podia disculparme
con lo que escribe Ciceron á Bruto, hablando de muchas
F

ribus multum interest, senatus sit, an nitas , secutura ex his utilitate : ali
populus romani , an fidenates : grae quanto vero magis objiciendo aliquos,
ci, an barbari: et in singulis , Catoni si diversa fecerit, metus. Nam praeter
petendos honores suadeamus , an C. Ma id quod his levissimi cujusque animus
rio: de ratione belli Scipio prior, an Fa facillime terretur, nescio an etiam na
bius deliberet. Proinde intuenda, sexus, turaliter a pud plurimos plus valeat ma
dignitas , aetas. lorum timor, quam spes bonorum: si
Sed mores praecipue discrimen dabunt. cut facilior eisdem turpium, quam ho
Et honesta quidem honestis suadere nestorum intellectus est.
faciliimum est: si vero apud turpes re Aliquando bonis quoque suadenturpa
cta obtinere conabimur , ne videamur rum decora , dantur parum bonis con
exprobrare diversam vitae sectam , ca silia , in quibus ipsorum qui consulunt,
vendum est. Et animus deliberantis, non spectátur utilitas. Nec me fallit, quae
ipsa honesti natura, quam ille non re statim cogitatio subire possit legentem.
spicit, permovendus; sed laude , vulgi Hoc ergo praecipis? et hoc fas putas? Po
opinione: et si parum proficiet haec va terat me liberare M. Cicero, qui ita
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. I8 r
cosas, que se le podian proponer á Cesar como buenas. ¿Se
ria, dice, hombre de bien, si yo aconsejara semejantes co
sas ? No 5 porque el fin del que aconseja , es la utilidad
del que pide consejo. Pero son cosas buenas, me dirás. ¿Quién
te lo niega ? pero no siempre se debe aconsejar lo bueno. Pe
ro como esto pertenece á otra qüestion mas elevada, y no
tan solo á las suasorias, lo hemos reservado para el libro duo
décimo, que será el último. Ni yo pretendo, que se acon
seje cosa mala, pero algunos piensan que esto conviene á
veces para el exercicio de la escuela; puesto que es nece
sario conocer lo malo, para hacer mejor lo bueno.
Pero el que aconseje semejantes cosas no buenas en sí,
tenga presente, que no se aconsejan como tales ; como al
gunos declamadores que persuadian á Sexto Pompeyo se
echase á pirata, solo porque era cosa mala, y cruel. Se les
ha de dar un buen aspecto, aun quando las aconsejemos á
los malos; porque no hay hombre tan malvado, que quiera
parecerlo. A este modo Catilina en Salustio hace ver á los
suyos, que no emprendia como cosa mala en sí la conjura
cion, sino que le habian movido á ello sentimientos muy
justos. Así Vario hace decir á Atreo:

Injusticias cometo
Atroces, sí; pero ya primero
Contra mí las cometen sin respeto.

-s EE.

scribitad Brutum, propositis plurimis, Interim si quis bono inhonesta sua


quae honeste suaderi Caesari possent: debit, meminerit, non suadere tanquam.
5imne bonus vir, si baec suadeam ? Mini inhonesta, ut quidam declamatores Sex—
me. Suasoris enim est finir utilitas ejus, tum Pompejum ad piraticam, propter
cui quisque tuadet. At recta runt. Quis ne hoc ipsum , quod turpis , ac crudelis
gat? red non est semper rectir in suadendo sit, impellunt. Sed dandus illis deformi
locus. Sed quia est altior quaestio, nec bus color, idoue etiam apud malos. Nec
tantum ad suasorias pertinet, destina enim est quisquam tam malus, ut ma
tus est mihi hic locus duodecimo , qui lus viderivelit. Sic Catilina apud Sal
summus futurus est, libro. Necego quid lustium loquitur, ut rem sceleratissimam
quam fieri turpiter velim : verum inte non malitia , sed indignatione videatur
rim haec, vel ad scholarum exercitatio audere. Sic Atreus apud Varium:
-N
nes pertinere credantur : nam et ini
quorum ratio noscenda est, ut melius 3am fero (inquit) infandissima, jam fa
aequa tueamur. , cere cogor,
I82 INSTITUCIONES ORATORIAS

¿Y quánto mas deberán paliar el mal con color de algun


bien , los que quieren mirar por su reputacion? De este
modo si aconsejamos á Ciceron, que se baxe á pedir perdon
á Antonio, ó que queme las oraciones, que contra él dixo,
porque con sola esta condicion le perdona la vida, será ocio
so que le digamos, que esta es apetecible, (pues si esto le
ha de mover, no es necesario, que nosotros se lo proponga
mos) sino le exhortaremos, á que se conserve para bien de
la república; porque esta es la única razon, que le quite
la vergüenza de humillarse á Antonio. Y si aconsejamos al
Cesar, que se alze con el reyno, alegaremos, que la repú
blica no puede conservarse ya, sino con una sola cabeza. Por
que el que delibera sobre una cosa mala, pretende hacerla
por el medio ménos malo. -

3? Contribuye tambien mucho la calidad de quien per


suade; porque la vida pasada, si ha sido buena, el linage,
la edad, y el estado hace esperar cosas grandes. Pero cui
dese, que las palabras no desdigan de la persona. Lo con
trario pide un tono, y estilo mas humilde. º Porque lo que
en unos es libertad, en otros se llama licencia. Algunos hay,
en quienes habla la autoridad; otros aun con la razon, apé
nas logran persuadir,
IV. Por este motivo tengo por muy dificultosas las
prosopopeyas; pues al trabajo, que pide la persuasion, se
junta la dificultad de conservar el carácter de la persona: "
pues no aconseja de la misma manera Cesar, que Caton, y «.
EE º

Quanto magis eis quibus cura famae fuit, 3. Multum refert etiam , quae sit
conservandus est hic, vel ambitus? Qua persona suadentis, quia anteacta vita, si
re, et cum Ciceroni dabimus consilium illustris fuit, aut clarius genus , aut
ut Antonium roget, vel etiam ut Phi aetas, aut fortuna, affert expectatio
lippicas, ita vitam pollicente eo, exu nem. Providendum est, ne quae dicun
rat, non cupiditatem lucis allegabimus; tur, ab eo qui dicit, dissentiant. Athis
(haec enim si valet in animo ejus, ta contraria summissiorem quendam mo
centibus quoque nobis valet) sed ut se dum postulant. Nam quae in aliis liber
reipublicae servet, hortabimur. Hac illi tas est, in aliis licentia vocatur., Et qui
opus est occasione, ne eum talium pre busdam suficit auctoritas, quosdam ra
cum pudeat. Et C. Caesari suadentes re tio ipsa aegre tuetur.
gnum, affirmabimus stare jam rempu IV. Ideoque longe mihi díficillima e
blicam, misi uno regente, non posse. Nam. videntur prosopopejae, in quibus ad re
qui de re nefaria deliberat, id solum liquum suasoriae laborem , accedit et
quaerit, quomodo quam minimum pec iam personae dificultas. Namque idem
care videatur. illud aliter Caesar , aliter Cicero, ali
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. III. 183
que Ciceron. Este exercicio es muy útil, ya por el nuevo
trabajo que pide, ya porque aprovecha para la poesía , y
para escribir historias; aunque es necesario á los oradores; por
que los griegos, y latinos escribiéron muchas oraciones, para
que otros las dixesen, acomodándolas á su condicion.
¿Guardaba Ciceron el mismo estilo, quando ” compo
nia alguna oracion á Pompeyo, que quando á Apio, ó á
los demas? ¿No conservaba su naturaleza, su dignidad, su con
dicion, sus hazañas, y aun todos los demas caractéres, dán
doles alma con la voz, ya para que hablasen mejor, ya pa
ra que se conociese, que lo que decian era suyo? No es
ménos viciosa la oracion, que desdice de la persona, que ha
bla, que la que no conviene con el asunto, que tratamos. Y
así parece que Lysias conservó admirablemente el carácter
de la naturaleza en las oraciones, que compuso para gente
rústica.
Lo cierto es, que los declamadores deben guardar sobre
todo el carácter de las personas; pues son pocas las oracio
nes, que dicen como abogados, y por lo comun "hablan
en boca de un hijo, de un padre, de un rico, de un viejo
mal acondicionado, ó indulgente, de un avaro ; y por último
hacen el papel de un supersticioso, de un cobarde, de un
bufon. De forma, que apénas habla en una comedia mas
papeles, que los que ellos hacen. Semejantes declamaciones
son, al parecer, otras tantas prosopopeyas ; las que yo he
- -

ter Cato suadere debebit. Utilissima ve- quidem, sed tamen ipsi dicere videren
ro haec exercitatio , vel quod duplicis tur? Neque enim minus vitiosa est ora
est operae, vel quod poetis quoque, aut tio , si ab homine, quam si à re, cui
historiarum futuris scriptoribus pluri accommodari debuit, dissidet. Ideoque
mum confert: verum, et oratoribus ne Lysias optime videtur in iis, quae scri
cessaria. Nam sunt multae a graecis, la bebat indoctis, servasse veritatis fidem.
tinisque compositae orationes , quibus Enimvero praecipue declamatoribus
alii uterentur , ad quorum conditionem, considerandum est, quid cuique perso
vitamque aptanda , quae dicebantur, nae conveniat: qui paucissimas contro
fuerunt. versias ita dicunt ut advocati: plerum
An eodem modo cogitavit, autean que filii , patres, divites, senes asperi,
dem personam induit Cicero, cum scri lenes, avari, denique superstitiosi, ti
beret Cn. Pompejo , et cum C. Appio, midi, derisores fiunt : ut vix comoe
caeterisve? Ac non uniuscujusque eorum diarum actoribus plures habitus in pro
fortunam , dignitatem , res gestas in nuntiando concipiendi sint, quam in his
tuitus , omnium quibus vocem dabat, in dicendo. Quae omnia videri possunt
etiam imaginem expressit ut melius prosopopoejae, quas ego suasoriis subje
184 INSTITUCIONES ORATORIAS

juntado con las suasorias, porque en nada se distinguen de


ellas, sino en las personas.
V. La mayor parte de los declamadores no erráron so
lamente en dar á las causas del género deliberativo un es
tilo diverso, y enteramente contrario al judicial. Ellos afec
táron exórdios impetuosos, un estilo arrebatado, y un aliño
(como ellos quieren) de expresiones redundantes; juzgan
do tambien , que semejantes razonamientos deben ser mas
cortos , que en materias judiciales.
Yo así como no encuentro motivo de exórdios, y preám
bulos largos en el deliberativo, como arriba dixe, así tam
poco le encuentro para comenzar de relámpago, é implo
rar á voces el favor de los caballeros romanos un hombre
de sano juicio en una consulta, en que le piden su dictá
men; sino que procurará lograr el asenso del que delibera
con una entrada comedida, afable, y cortés.
Y ¿porqué el estilo de semejantes oraciones ha de ser
precipitado, é igualmente impetuoso , quando las consultas
requieren mas miramiento, sosiego, y moderacion? No niego
que muchas veces tambien en el judicial calma el ímpetu de
decir en el exórdio, narracion, y confirmacion; el qual qui
tado, tenemos el estilo, que quadra al género deliberativo.
Aunque aquí ha de ser mas igual, no arrebatado, ni turbu
lento.
Los que hablan en el género deliberativo, no han de

-a- EE--

ci, quia nullo alio ab his, quam persona proposita consultatione rogatus senten
distant. tiam , si modo est sanus , non quiritet,
v. Non simplex autem circa suaso sed quam maxime potest civili, et hu
rias error in plerisque declamatoribus mano ingressu mereri assensum delibe
fuit, qui dicendi genus in his diversum, rantis velit.
atque in totum illi judiciali contrarium Cur autem torrens, et utique aequa
esse existimaverunt. Nam , et principia liter concitata sit in ea dicentis oratio,
abrupta , et concitatam semper oratio cum vel praecipue moderationem, ratio
nem , et in verbis efusiorem (ut ipsi nemque consilia desiderent? Neque ego
vocant) cultum affectaverunt, et earum negaverim saepius subsidere in contro
breviores utique commentarios, quam versiis impetum dicendi prooemio, nar—
judicialis materiae facere elaboraverunt. ratione, argumentis: quem si detrahas,
Ego porro utprooemio video non uti id fere supererit, quo suasoriae constant.
que opus esse suasoriis, propter quas di Verum id quoque aequalius erit , non
xi supra causas: ita cur, initio furioso tumultuosius, atque turbidius.
sit exclamandum , non intelligo : cum Verborum autem magnificentia non
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. III. 185
afectar con mucho cuidado la magnificencia del estilo; porque
esta depende de la materia, Pues á los que fingen las perso
nas, les agrada mas por lo comun las de reyes, príncipes,
pueblos, y senados, y los asuntos rumbones; porque, de
biendo corresponder el estilo á la materia, se lucen mas quan
do esta es brillante. De otro modo sucede exn las verdade
ras consultas. Por tanto quiere Theophrasto, que el estilo
en el deliberativo esté muy distante de toda afectacion; si
guiendo la autoridad de su maestro ; aunque á veces no te
me apartarse de él. Porque Aristóteles tenia al demostra
tivo por el mas acomodado para escribir, y despues al judi
cial; por consistir el primero en la pompa , y ostentacion,
y necesitar el segundo de mucha arte, aun para engañar,
quando lo pide la necesidad , consistiendo el deliberativo en
la buena fe, y prudencia. En lo que dice del demostrativo,
convengo con él; pues lo mismo dicen otros escritores. Pero
tocante á los otros dos, digo, que el estilo debe conformarse con
la materia; porque hallo, que en las filípicas de Demóstenes bri
lla el mismo estilo, que en las oraciones del judicial. Y en las
oraciones, en que Ciceron manifiesta su parecer al senado, no
resplandece ménos la eloqüencia, que en aquellas, en que acu
sa, ó defiende; y lo mismo observa en los discursos que hizo al
pueblo. El mismo Ciceron, hablando de las suasorias, dice:
Toda la oracion sea sencilla, grave, y tenga mas adorno
de pensamientos, que de palabras. En ninguna otra tienen
-EEE a una

validius estaffectanda suasorias decla velad fallendum, si ita poposcisset uti


mantibus, sed contingit magis. Nam, et litas: consilia fide, prudentiaque consta
personae fere magnae fingentibus pla rent. Quibus in demonstrativa consentio.
cent, regum, principum , populi , sena Nam , et omnes alii scriptores idem tra
tus : et res ampliores. Ita , cum verba diderunt. In judiciis autem , consiliis
rebus aptentur, ipso materiae nitore cla que secundum conditionem ipsius, quae
rescunt, Alia veris consiliis ratio est. tractabitur, rei, accommodandan dicen
Ideoque Theophrastus, quam maxime re di credo rationem. Nam, et philippicas
motum ab omni affectatione in delibera Demosthenis eisdem, quibus habitas in
tivo genere voluit esse sermonem : secu judiciis orationes, video eminere virtu
tus inhoe auctoritatem praeceptoris sui, tibus. Et Ciceronis sententiae, et con
quanquam dissentire ab eo non timide so ciones, non minus clarum , quam est
let. Namque Aristoteles idoneam maxi in accusationibus, ac defensionibus elo
me adscribendum demonstrativam, pro quentiae lumen ostendunt. Dicit tamen
rimamque ab ea judicialem putavit, vi de suasoria idem hoc modo : Tota au
delicet quoniam prior illa tota esset o tem oratio simplex, et gravis , et senten
stentationis, haec secunda egeret artis, tiis debet ornatior esse, quam verbis. Usum
ToM. I. Aa
186 INSTITUCIONES ORATORIAS

mas cabida los exemplos; en lo que todos convienen; porque


parece; que lo por venir debe corresponder á lo que pasó,
y que la experiencia es un testimonio de la razon.
La concision, ó afluencia de estilo, no depende de la es
pecie de causa, sino del modo de tratarla. Porque así como
en las deliberaciones la qüestion por lo comun es mas sencilla
por el estilo, así en el género judicial es este mas conciso.
Todo lo qual entenderá ser cierto aquel, que en lugar
de envejecerse en los preceptos de los retóricos, leyere no
solamente las oraciones, sino las historias, en las que tienen
cabida semejantes discursos para aconsejar , y disuadir. Ha
llará pues, que el principio no es arrebatado, quando se acon
seja ; que quando se acrimina, el estilo es algo mas conciso;
y que las palabras en una, y otra ocasion corresponden á la
materia; finalmente que alguna vez, es el modo de decir mas
breve, quando se agrava la causa de alguno, que quando se
da el dictamen sobre alguna cosa. -

Ni encontrará aquí aquellos vicios, de que adolecen los


declamadores, de injuriar sin ningun respeto, y prorumpir
en dicterios contra los que siguen opinion distinta, manifes
tando por lo comun, que la suya es opuesta á los que de
liberan, por donde mas parece reprehender, que aconsejar
Aquellos escritos deben aprender los jóvenes, y no quieran
exercitarse de distinto modo, que con el que han de perorar
en adelante, ni detenerse en cosas, que tengan despues que
olvidar. Por lo demas, quando comenzaren los amigos á lla

exemplorum nulli materiae magis con nescere. Inveniet enim , nec in consiliis
venire merito, fere omnes consentiunt, abrupta initia, et concitatius saepe in ju
eum plerunque videantur respondere fu diciis dictum, et verba aptata rebus in
tura praeteritis , habeaturque experi utroque genere, et breviores aliquando
mentum, velut quoddam rationis testi causarum orationes quam sententiarum.
monium. Neilla quidem in his vitia depre
Brevitas quoque, aut copia non ge hendet, quibus quidam declamatores la
nere materiae, sed modo constat. Nam borant, quod, et contra sentientibus in
utin consiiiis plerunque simplicior quae humane convitiantur, et ita plerunque
stio est, ita saepe in causis minor. dicunt, tanquam ab iis, qui deliberant,
Quae omnia vera esse sciet, si quis utique dissentiant : itaque objurgantibus
non orationes modo, sed historias etiam similiores sunt, quam suadentibus. Haec
(namque in his conciones, atque senten adolescentes sibi scripta sciant, ne ali
tiae plerunque suadendi, ac dissuaden ter, quam dicturi sint, exerceri velint,
di funguntur officio ) legere maluerit, et in de Suescendis morentur. Caeterurn
quam in commentariis rhetorum conse cum advocari coeperint in consilia ami
DE M. FABro QUINTILIANo. LIB. III. 187
marlos á consulta, quando hayan de exponer su dictamen en
el senado, ó aconsejar á un príncipe, entónces lo que no
alcancen con los preceptos, la experiencia se lo enseñará.
-

CAPÍTULO IX.
DEL GÉNERo JUDICIAL.

I. Las oraciones de este género tienen cinco partes : exór.


dio, narracion , confirmacion, refutacion , y epílogo. II. Aun
que es firo el órden de estas partes , no lo es el de los
pensamtentos.

I. Vamos tratar del género judicial, que aunque es de


mucha extension, y variedad, consta siempre de acusacion,
y defensa. Sus partes admitidas por todos los autores se re
ducen á cinco : exórdio, narracion, confirmacion, refutacion,
y peroracion. Algunos añadiéron la division, proposicion, y
digresion : de las quales las dos primeras se comprehenden
en la confirmacion. La digresion, ó está fuera de la causa,
y entónces no debe pertenecer á ella; ó está dentro de ella,

corum , dicere sententiam in senatu, sua- praeceptis fortasse non credunt, usu do
dere, si quid consulet princeps , quod cebuntur.

CAPU TIX.

D. E. G.E NE RE JU D I CIAL I,

I. Quinque sunt in eo partes orationis. Prooemium, narratio, probatio, refutatio,


peroratio. II. In bis non ut quidque primum dicendum, ita primum cogitandum est.

I. Nuns de judiciali genere, quod ratio, probatio, refutatio, peroratio. His


est praecipue multiplex, sed officiis con- adjecerunt quidam partitionem, propo—
stat duobus, intentionis, ac depulsionis. sitionem , excessum : quarum priores
Cujus. partes, ut plurimis auctoribus duae probationi succedunt. Egressio ve
Placuit, quinque sunt, prooemium, nar- ro, vel (quod usitatius esse coepit) ex
Aa 2
188 INSTITUCIONEs oRA ToRIAs
y en este caso es una como ayuda, y adorno de la parte, á que
toca. Porque si todo lo que hay en la causa, se llama par
te de ella, ¿porqué no llamaremos partes á las argumenta
ciones, comparaciones, á los lugares oratorios, á los afectos,
y exemplos? Ni convengo con los que quitan la refutacion,
reduciéndola á la confirmacion , como lo hace Aristóteles.
Porque la una edifica; la otra destruye. Tambien admite la
novedad de poner la proposicion despues del exórdio, y no
la narracion.
II. Pero así como hay este órden en las partes, no hay
el mismo en el modo de discurrirlas. Lo primero de todo de
bemos pensar, qué género de causa es ; qué se pretende en
ella; qué es lo que nos favorece, ó al contrario: en segundo,
lugar , qué pretendemos probar, y qué refutar : en tercero,
cómo se ha de hacer la narracion (porque esta es la prepa
racion para la confirmacion; y no será útil, si no promete ya
lo que hemos de probar) ; y lo último que hemos de con
siderar, es el modo de conciliarnos al juez, Porque solo despues
de consideradas todas las partes, podemos conocer el afecto,
ó pasion que conviene mover en el que oye: si el rigor, ó
mansedumbre; si excitar la ira, ó calmarla; si hacerle propi-.
cio, ó contrario al reo. - - -

, Niapruebo lo que algunos dicen, que el exórdio es lo último,

cessus, sive est extra causam, non po-. ante omnia intueri oportet, quod sit ge
"test esse pars causae: sive est in causa, nus causae, quid in ea quaeratur, quid
adjutorium , vel ornamentum partium prosit, quid noceat: deinde, quid con
earum est, ex quibus egreditur. Nafm si firmandum sit, ac refellendum : tum
quicquid in causa est, pars causae voca quomodo narrandum : (expositio enim
bitur, cur non argumentum, similitudo, probationum est praeparatio: necesse
locus communis, affectus, exempla, par utilis potest, nisi prius constiterit, quid
tes vocentur? Tamen nec iis assentior, debeat de probatione promittere) postre
qui detrahunt refutationem , tanquam mo intuendum, quemadmodum judex sit
probationi subjectam, ut Aristoteles. Haec conciliandus. Neque emim, misi totis cau
enim est, quae constituat, illa quae de sae partibus diligenter inspectis , scire
struat. Hoc quoque idem aliquatenus no possumus, qualem nobis cognoscentis ani
vat, quod prooemio non narrationem sub mun faceré expediat, severum, an mi
jungit, sed propositionem. tem, concitatum, an remissum, adver
lí. Verum ex his, quas constitui par sum gratiae, an obnoxium.
tibus, non, ut quidque primum dicen Nec ideo tamen eos probaverim, qui
dum, ita primum cogitandum est: sed seribendum quoque prooemium novissi
s *

a
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. III. 189
que debe escribirse. Porque así como es útil mirar con un
golpe de vista todo el asunto, y ver como se ha de disponer,
ántes de comenzará hablar, ó á escribirle, así lo es el dar prin
cipio por lo primero; ya porque una pintura, ó estatua no se
comienza por los pies, ya porque ninguna arte acaba por don
de debe comenzar. Porque, si no hubiere lugar para escribir la
oracion ¿no nos servirá de confusion este órden invertido? Lue
go la materia se ha de exáminar, y meditar con el mismo ór
den, que guardamos para enseñar; y en escribir guardaremos
el órden de decir.

... º

mºm

me putant. Nam ut conferri materiam turibi, ubi ordiendum est. Quid fiet
emnem oportet, et quid quoque loco sit alioqui, si spatium componendi oratio
opus, constare debet, antequam dicere, nem stylo non fuerit? nonne, et nos haec
aut scribere ordiamur , ita incipiendum inversa consuetudo deceperit? Inspicien
ab iis, quae prima Sunt. Nam nec pin da igitur materia est, quo praecipimus
gere quisquam, aut fingere coepità pe ordine: scribenda, quo dicimus.
dibus: nec denique ars ulla consumma
19o
LIBRO QUARTO.

P R. O EMI O.

Es una pura lisonja de Domiciano, que le habia enco


mendado la instruccion de los sobrinos de una hermana. En
seguida pone la materia de los tres libros siguientes.

Aando , Marcelo Victorio , el libro tercero, que te


dediqué, y concluida casi toda la quarta parte de mi trabajo,
se añadió un nuevo motivo para el esmero de la obra, y un de
seo de merecer la aprobacion de los hombres. Hasta ahora so
los los dos conferenciabamos sobre nuestros estudios, y aunque
los demas no los aprobasen, con todo eso no buscabamos otra
recompensa de ellos, que el ir formando un plan, y método
de la instruccion de tu hijo, y el mio. Mas habiéndome enco
mendado Domiciano Augusto la de los sobrinos de su herma
na º, me desentenderia del honor, que me hacian los jui
cios divinos º, si yo no midiese la grandeza, é importancia

L IBE R Q U A R TU S.

P RO O E M IU M.

Blanditur Domitiano, qui sororis suae nepotes educandos ei commiserat. Deinde pro
ponit, quae tribus libris sequentibur tractanda sunt.

Perfecto, Marcelle Victori , operis mostra institutio probaretur à caeteris,


tibi dedicati tertio libro, et jam quarta contenti fore domestico usu videbamur,
fere laboris parte transacta , novae in ut tui, meique filii disciplinam formare
super mihi diligentiae causa , et altior satis putaremus. Cum vero mihi Domi
solicitudo, quale judicium hominum eme tianus Augustus sororis suae nepotum de
rerer, accessit. Adhuc enim velut stu legaverit curam, non satis honorem ju
dia internos conferebamus; et si parum diciorum coelestium intelligam , misi ex
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. I9L
de la comision por la de la honra. Porque ¿cómo no me esme
raré en la enseñanza de tales discípulos , para merecer la
aprobacion de un censor el mas santo ; y para no frustrar las
esperanzas, que tiene fundadas en ellos un príncipe no ménos
consumado en la eloqüencia, que en todo lo demas ? Y si
nadie extraña, que los mas grandes poetas invoquen la asis
tencia de las musas, no solamente al principio de sus obras,
sino en medio de ellas, quando ocure algun pasage dificul
toso, donde de nuevo repiten sus invocaciones; tambien á
mí se me podrá disimular, execute ahora lo que no hice al
principio, invocando la asistencia de todos los dioses, y prin
cipalmente la de aquel mismo, que es el dios mas benigno,
y que mas fomenta las letras ; para que me comunique tan
to ingenio, quantas son las esperanzas, que de mí concibió;
para que me sea propicio, y favorable, y sea yo tal, qual
es el concepto que formó de mí.
Y de este mi temor no es este solo el motivo, aunque
es muy poderoso; añadese otro, y es, que segun la serie
de esta obra, es mayor cosa, y mas ardua la que emprendo,
que la que llevo hasta aquí. Síguese explicar el órden, que
debemos guardar en las causas judiciales, donde cabe mayor
variedad, y extension; cómo debe formarse el exórdio; có
mo la narracion ; cómo convencerán las razones , ya para
probar, ya para refutar; quánto empeño debe ponerse en

N, =

hoc quoque oneris magnitudinem metiar. in primis, quo neque praesentius aliud,
Quis enim mihi, autmores excolendi sit neque studiis magis propitium numen
modus , ut eos non immerito probave est, invocem : ut quantum nobis expe
rit sanctissimus censor 2 aut studia , ne ctationis adjecit, tantum ingenii adspi
fefellisse in his videar principem , ut in ret, dexterque, ac volens adsit, et me,
omnibus, ita in eloquentia quoque emi qualem esse credidit, faciat.
nentissimum? Quod si nemo miratur poe Cujus mihi religionis non haec sola
tas maximos saepe fecisse, ut non solum ratio, quae maxima est, sed alia, qua
initiis operum suorum Inusas invocarent, sic procedit ipsum opus, ut majora prae
sed provecti quoque longius , cum ad teritis, ac magis ardua sint quae ingre
aliquem graviorem venissent locum , re dior. Sequitur enim ut judicialium cau
peterent vota , et velut nova precatione sarum , quae sunt maxime variae, ac
uterentur: mihi quoque profecto poterit multiplices, ordo explicetur: quod prooe
ignosci, si, quod initio , cum primum mii sit officium ; quae ratio narrandi;
hanc materiam inchoavi, non fecerim, quae probationum sit fides , seu propo
nunc omnes in auxilium deos, ipsum que sita confirmamus, seu contra dicta dissol

I92 INSTITUCIONES ORATORIAS

el epílogo, ya recordando quanto hemos dicho á la memo


ria del juez con una recapitulacion, ya moviendo los afectos,
que es lo principal. De cada una de las quales partes algu
nos quisiéron mas tratar separadamente, porque temian la
dificultad de tratar de todas; y así muchísimos escribiéron
libros enteros de cada una de ellas. Todo lo qual, habiéndome
atrevido á abarcarlo, veo ser obra de tanto trabajo, que aun
la memoria de lo que he tomado á mi cargo, me abruma.
Pero ya es fuerza seguir lo comenzado, y que supla el
ánimo lo que no alcanzan las fuerzas. -

vimus; quanta vis in perorando, seu re res de unaquaque earum libros edide
ficiendá brevi repetitione rerum memoria runt: quas ego omnes ausus contexere,
est judicis, sive affectus (quod est lon prope infinitum mihilaborem prospicio,
ge potentissimum) commovendi. De qui et ipsa cogitatione suscepti muneris fa
bus partibus singulis quidam separatim tigor. Sed durandum est, quia coepi
scribere maluerunt, velut onus totius mus: et, si viribus deficiemur , animo
corporis veriti , et sic quoque complu tamen perseverandum.
YDE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 193
A- ... , ( ,

CAPITULO PRIMERO.

- DEL ExóRDIo. -
º I. Los griegos con mas fundamento le llaman proemio. Pó
nese para conciliarse la benevolencia , atencion, y docilidad.
II. La benevolencia conciliase de tres modos. Por las personas,
que son cinco. 1? el defensor de la causa. 2? el contrario.
3? el litigante. 4 º su contrario. 5? el juez. Por la causa ó
por las circunstancias de la causa, ó de las personas. III. De
la atencion. IV. de la docilidad. V. Estas tres cosas se usan
con variedad segun los cinco géneros de causas. VI. Quando
nos valdremos del exórdio de insinuacion, y cómo. VII. Del
modo mas fácil de formar los erórdios. Puede tomarse de la
parte contraria. Conviene, que sea modesto. No se ha de
hacer alarde del artificio retórico ; y se ha de huir de las
expresiones atrevidas. VIII. Qué estilo , modo , y figuras
convienen al erórdio. Sus principales vicios. IX. No siem
pre tiene cabida; pues las demas partes pueden hacer lo
qué el exórdio. X. De la transicion , ó, paso del erórdio aé
la parte que sigue.
- r
-

I. o que llaman los latinos principio, ó exórdio, lla


máron con mas propiedad, á nuestro entender, proemio los
* , , -

C A P UTP R I MU M.
IDE EXORDIO,

I. Meliur id vocari d graecir prooemium. Erordium adhiberi , ut concilietur bene


volentia, attentio, docititas. II. De benevolentia. Eam tripliciter conciliari. Aut d per
sonis, quae sunt quinque. I. Actor caurae. 2. Partis adversae patronur. 3. Litigator.
4. Adversarius. 5. 3fudex. Aut d cauris. Aut ab ii , quae causis, vel personis ad
juncta sunt. III. De attentione. IV. De docilitate. V. Haec, tria varie adhiberi prº
variis quinque generibus causarum. VI. Quandonam, et quomodo adhibenda insinuatio,
quae est altera species exordii. VII. Quomodo perfici facillime possit exordium. Recte
duci ab actione adversae partir. Ei convenire modestiam. Vitandan artis suspicionem,
et verborum audaciam. VIII. Qui stylus, qui modus, quae figurae exordio conveniant.
Quae praecipua ejus vitia. IX. Exordio non temper locur: et exordii vis in aliis par
tibur. X. De transitione ab exordio ad parten requentem.

. uod principium latine, vel quadam ratione graeci videntur xposíu tov.
-
TOM.
fran
l.
dicitur , majore nominasse : quia à nostrisinitium mo
-
I94 INSTITUCIONES ORATORIAS

¿ porque la palabra latina principio es general; pero


a griega da á entender con bastante claridad, que es la
entrada del asunto, que vamos á tratar. Pues ó ya se haya
llamado así, porque oime significa canto, y los citaristas lla
máron proemion á aquello, que cantan de antemano, ántes
de entrar en la contienda sobre el canto formal, para ga
narse el favor de los que oyen, de donde tomáron el nom
bre los oradores, para conciliarse al auditorio en el princi
pio de su oracion; ósea porque oimon significa en griego lo
mismo que camino, lo cierto es, que se llama proemio todo
aquello, que se dice, para prevenir al juez, ántes de entrar
al conocimiento de la causa. -

Porque no hay otro motivo para este principio, sino el


preparar los ánimos de los oyentes para lo restante de la
oracion. Esto se logra haciéndolos atentos, dóciles, y bené
volos, como dice la mayor parte de los autores. No porque no
se haya de cuidar de esto en lo demas del discurso, sino
porque al principio se necesita mas, para insinuarnos en el
ánimo del juez, y seguir adelante.
II, Nos ganamos la benevolencia, ó por medio de las
personas, ó por la causa. Las personas no son solamente, el
litigante, el contrario, y el juez, como los mas pensáron.
1? Porque á veces el exórdio se toma de la persona del
orador, ó defensor de la causa pues aunque debe ser escaso
en hablar de sí mismo, hace mucho al caso, que sea teni
------. : - - es -

mes -

do significatur, illi satis clare partem ut auditorem, quo sit nobisin caeteris
hancesse ante ingressum rei, de qua di partibus accommodatior, praeparemus.
cendum sit , ostendunt. Nam , sive pro Id fieri tribus maxime rebus, inter au
pterea quod diºu cantus est, et citha ctores plurimos constat, si benevolum».
roedi pauca illa, quae antequam legiti attentum, docilem fecerimus: non quia
mum certamen inchoent, emerendi fa ista per totam actionem non sint custo
voris gratia canunt, prooemium voca dienda, sed quia in imitiis maxime ne
verunt; oratores quoque ea , quae, prius cessaria, per quae in animum judicis,
quam causam exordiantur, ad concilian ut procedere ultra possimus, admittimur.
dos sibi judicum animos praeloquuntur, fI. Benevolentiam, autà personis du
cimus, autà causis accipimus. Sed per
eadem appellatione signarunt: sive quod
sonarum non est, ut plerique credide
cí a v iidem graeci viam appellant , id
quod ante ingressum rei ponitur , sic runt, triplex tantum ratio , ex litiga
vocare est institutum ; certe prooemium. tore, adversario, et judice.
est, quod apud judicem dici, priusquam I. Nam exordium duci nonnunquam
causam cognoverit, prosit. etiam ab actore causae solet. Quanquam
Causa principii nulla alia est, quam. enim pauciora de seipso dicit, et par º
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. I95
do por hombre bueno. Con lo qual parecerá, que no habla
como abogado, sino como testigo abonado. Y así debe dar
á entender, que le ha movido á tomar aquella causa la obli
gacion de amistad, ó parentesco, y (si es probable) el bien
de la república, ú otro semejante motivo. Con mucha mas
razon cuidarán de esto los mismos litigantes, haciendo ver,
que les ha movido á la querella, ó defensa algun razonable
motivo, y aun la necesidad.
Pero así como la principal razon para conciliarse autoridad
el orador, es el que esté muy léjos de que se sospeche ha
ber tomado la causa por motivo de interes, odio , ó ambi
cion, así tambien tácitamente hará recomendable su persona,
si dice, que es inferior en el talento, y poder á los con
trarios; en lo que funda Mesala la mayor parte de sus exór
dios. Pues naturalmente favorecemos al caido ; y un juez es
crupuloso oye con gusto al defensor, que confia en su jus
ticia. De aquí nace aquel disimular los antiguos el artificio
retórico, tan distinto de la ostentacion, y arrogancía de nues
tros oradores. * -

Hemos tambien de procurar el que no parezca, que des


honramos, que tenemos mala intencion, y que injuríamos en
nuestro razonamiento á algun hombre, ó clase de personas;
principalmente á los que no podemos ofender, sino ofendien
do tambien á los jueces. Porque el encargar que no se
diga cosa alguna, que ó sea directamente contra la perso
a E

cius; plurimum tamen ad omnía mo qu0que commendatio tacita , si nos in


menti est in hoc positum , si vir bonus firmos, et impares ingeniis contra agen
creditur. Sic enim continget, ut non stu tium dixerimus,, qualia sunt pleraque
dium advocativideatur afferre, sed pae Messalae prooemia. Est enim naturalis
me testis fidem. Quare in primis existi favor pro laborantibus: et judex religio
metur venisse ad agendum ductus ofi sus libentissime patronum audit, quem
cio , vel cognationis, vel amicitiae; ma justitiae suae minime timet. Inde illa ve
ximeque, si fieri poterit, reipublicae, terum circa occultandam eloquentiam si
aut alicujus certe non mediocris exem mulatio, raultum ab hac nostrorum tem
pli. Quod sine dubio multo magis ipsis porum jactatione diversa.
litigatoribus faciendum est, ut ad agen Vitandum etiam , ne contumeliosi,
dum magna, atque honesta ratione, aut maligni, superbi, maledici in quem
etiam necessitate accessisse videantur. quam hominem, ordinemve videamur,
Sed ut praecipua in hoc dicentis au praecipueque eorum , qui la edi, nisia
ctoritas, si omnis in subeundo negotio Versa , judicum voluntate, non possunt.
suspicio sordium, autodiorum, aut am Nam in judicem ne quid dicatur, non
bitionis abfuerit ; ita quaedam in his. "¿ palam, sed quod omnino intelli
2.
196 INSTITUCIONES ORATORIAS

na del juez, ó que tenga asomos de ello, seria insulsez pues


vemos, que todos así practican.
2? El defensor del contrario nos dará á veces materia
para el exórdio; ya honrándole, si hiciésemos sospechosa su
persona á los jueces, fingiendo que nos tememos de su elo
qüencia, y mucho poder; ya con algun género de despre
cio, aunque esto ha de ser muy rara vez. Así vemos , que
Asinio, que defendia el derecho de los herederos de Urbi
nia, pone entre los demas argumentos de la mala causa del
contrario, el tener por abogado á Labieno.
Cornelio Celso niega ser propiamente exórdios los que
no se toman del fondo de la causa. Mas yo, siguiendo la
autoridad de los mas consumados autores, digo, que todo
quanto, pertenece á la persona del que habla , pertenece tam
bien á la causa : pues es cosa natural, que el juez fácilmente
crea á los que oye con gusto. ... º
3? De la persona del litigante se hablará tambien con
variedad. Unas veces se alega su dignidad ; otras se reco
mienda su abatimiento; y algunas se hace relacion de sus
méritos: aunque el que cuenta los suyos propios, lo hará con
mas modestia, que quando los agenos. Mucho va á decir
tambien el alegar las circunstancias del reo, su edad, su con
dicion, si es muger, pupilo, anciano, ó hijo de familia: pues
sola la compasion natural mueve á un juez recto. Estas cir
cunstancias se tocarán en el exórdio, pero sin detenerse mu
cho en ellas.

- EEE - - z- "»

gi possit, stultum erat monere , nisi puto , quicquidad dicentem pertinet:


fieret. cum sit naturale , ut judices iis, quos
2. Etiam partis adversae patronus libentius audiunt, facilius etiam credant.
dabit exordio materiam : interim cum 3. Ipsius autem litigatoris persona
honore, si eloquentiam ejus , ac gratiam tractanda varie est. Nam tum dignitas
nos timere, fingendo, utea suspecta sint ejus allegatur, tum commendatur infir
judici, fecerimus: interim per contume mitas : nonnunquam contingit, relatio
liam , sed hoc perquam raro , ut Asi meritorum , de quibus verecundius di
nius pro Urbiniae haeredibus Labienum cendum erit sua, quam aliena laudanti.
adversarii patronum inter argumenta Multum agit sexus, aetas, conditio; ut
causae malae posuit. in feminis, senibus, pupillis, liberos,
Negat haec esse prooemia Cornelius parentes, conjuges allegantibus. Nam so
Celsus, quae sint extra litem. Sed ego la rectum quoque judicem inclinat mi
cum auctoritate summorum auctorum seratio. Degustanda tamen haec prooe
magis ducor 3 tum pertinere ad causam mio, non consumenda.
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. IV. 197
4? Al contrario le impugnaremos por estos mismos me
dios, pero volviendo el argumento al reves. Porque si es
poderoso, le persigue la envidia ; si está en abatimien
to, el desprecie ; si es infame, y está culpado, el odio:
las quales tres cosas son muy poderosas, para torcer la volun
tad de los jueces. Ni basta el echar mano de aquello, que
ocurre aun á los ignorantes; es necesario ponderarlo, ó dis
minuirlo, como caso lo pidiere. Porque esto último es pro
pio del orador: lo primero lo lleva consigo la causa.
º Nos ganaremos la benevolencia del juez, no solamen
te iii. , lo qual es comun á las dos partes, y debe
hacerse con moderacion , sino juntando esta alabanza con la
utilidad de nuestra causa; esto es alegando su valimiento en
favor de los buenos, su justicia en favor de los caidos, su
misericordia para con los infelices, su severidad para vengar
á los ofendidos, y así de los demas.
Si es posible, conviene tambien conocer la condicion del
juez. Porque segun fuere, ó desabrido, ó apacible; festivo,
ó grave; riguroso, ó indulgente ; así ó nos valdremos de su
índole natural conveniente á nuestra causa, ó procuraremos
mitigarle, si fuere contraria,
Acaece tambien vez, que el juez es contrario á
nosotros, ó amigo de a parte contraria: entónces cada qual
debe aprovecharse de la persona del juez; y no sé si con
particularidad el que le tiene propicio. Pues los malos jueces
-E -
- - º * -º a

4. Adversarii vero persona prope iis ut allegemus pro honestis dignitatem illi
dem omnibus, sed è contrario ductis, suam, pro humilibus justitiam, pro in
impugnari solet. Nam , et potentes se felicibus misericordiam , pro laesis se
quitur invidia , et humiles abjectosque veritatem, et similiter caetera.
contemptus, et turpes, ac nocentes o— Mores quoque, si fieri potest, judi
dium : quae tria sunt ad alienandos ju— cis velim nosse. Nam prout asperi, le
dicum animos potentissima. Neque haec nes, jucundi, graves, duri, remissi e
dicere satis est, quod datur etiam im runt, aut assumere in causam naturas
peritis: pleraque augenda, aut minuen eorum, qua competent, aut mitigare, qua
da, ut expediet. Hoc enim oratoris est, repugnabunt, oportebit.
illud causae. Accidit autem interim hoc quoque,
5. Judicem conciliabimus nobis non ut aut nobis inimicus, aut adversario sit
tantum laudando eum , quod et fieri amicus , qui judicat: quae res utrique
cum modo debet, et est tamen parti utri parti tractanda est, ac nescio, an ei
que commune : sed si laudem ejus ad magis, in quam videtur propensior. Est
utilitatem nostrae causae conjunxerimus, enim nonnunquam pravis hic ambitus,
198. INSTITUcioNEs oRAToRIAs
suelen á veces sentenciará favor de un enemigo, ó contra
algun amigo, cometiendo injusticia con disimulo, para que
no parezca, que otras veces han obrado con ella.
Algunas veces los jueces han sentenciado, tambien en pro
pia causa. En alguna semejante á estas fué juez Ciceron,
como dice Septimio en sus observaciones º; y yo mismo de
fendí una de la reyna Berenice *, siendo ella misma, juez.
Aquí debe observarse lo mismo: porque el contrario blasona
con cierta confianza de su causa, y el abogado que la de
fiende, teme, y tiene contra sí la vergüenza ¿ juez en senten
ciar á su favor.” -

Ademas de lo dicho conviene desimpresionar al juez de la


opinion, que ya traia de su casa, ó confirmarle en ella. A
veces es necesario desvanecer el miedo, como lo hizo Cice
ron en la causa de Milon, para que no creyesen, que Pom
Peyo tenia dispuestas las armas contra él: á veces excitarle,
y ponerle delante, como lo hizo en la de Verres. -
Pero hay un modo comun, y útil de excitar el miedo:
y g, quando se dice, y encarga, que no conciba alguna mala
opinion el pueblo romano; que no se apele á otro tribunal.
Otro modo hay mas fuerte, y ménos usado, como quando
se amenaza á los que han sido sobornados, de acusarlos en
presencia de una concurrencia mas numerosa, como cosa mas
segura; porque esto sirve de freno á los malos, y de consue
lo, y gozo á los buenos. Pero no aconsejaré yo este último
medio, quando hay un solo juez; á no ser que falten otros
auxilios. Y si lo pide el caso, no será ya precepto de la
-------" "- - -s- º -

* A
- V. --> - )

adversus amicos, aut pro his quibuscum iam nonnunquam est amovendus ut
simultates gerant, pronuntiandi, facien Cicero pro Milone, ne arma Pompeji
dique injuste, ne fecisse videantur. contra se disposita putarent, laboravit:
Fuerunt etiam quidam rerum suarum nonnunquam adhibendus , ut idem in
judices. Nam, et in libris observationum Verrem facit.
a Septimio editis, affuisse Ciceronem ta Sed adhibendi modus alter ille fre
li causae invenio: et ego pro regina Be quens est, et favorabilis, ne male sen
renice apud eam, causam dixi. Simi tiat populus romanus, ne judicia tran
lis hic quoque superioribus ratio est. Ad sferantur: , alter autem asper, et rarus,
versarius enim fiduciam partis suae ja quo minatur corruptis accusationem, et
ctat, patronus timet cognoscentis vere id quidem in concilio ampliore., utcun
cundiam. que tutius; nam, et mali inhibentur,
Praeterea detrahenda , vel confir et boni gaudent: apud singulos vero
manda opinio , si quam praecipuedo nunquam suaserim , nisi defecerinto
mo videbitur judex attulisse. Metus et mnia. Quod si necessitas exigit, non erit
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. I99
oratoria, así como la apelacion ; aunque esto muchas veces
tambien es útil, ó tambien el acusarle del soborno, ántes
de comenzar la defensa. Porque el amenazará alguno, ó de
latarle, qualquiera puede hacerlo, sin ser orador.
Quando la causa diese pie para conciliarnos la benevo
lencia del juez, convendrá tomar de ella quanto ofrezca de
favorable para el exórdio. Que cosas sean estas, ocioso es el
decirlo : ya porque entendida la causa, se presentarán por sí
mismas; ya porque el referir quantas pueden ocurrir en tan
ta multitud de pleytos, no tiene guarismo. Pero digo, que
así como el encontrar, y ponderar esto, lo enseñará la causa,
así tambien el refutar, ó disminuir lo que nos daña.
-eº. La misma causa algunas veces dará fundamento para mo
ver la compasion, ó ya nos haya sucedido alguna calamidad,
ó ya la temamos. Ni sigo la opinion que muchos , de que
el exordio se distingue del epílogo, en que en aquel se cuen
tan las cosas pasadas, y en este las venideras; sino mucho
mas en que en aquel se ha de mover la misericordia con mas
tiento, y moderacion , pero en el epílogo se han de excitar
todos los afectos de compasion; aquí introducir hablando á otras
personas; aquí hacer que hablen los mismos muertos; aquí po
ner delante las prendas mas amables del reo º, lo que no qua
dra tan bien en los exórdios. Y no solo no se han de mover en
el exórdio semejantes afectos, sino aun apartarlos del todo.
Pero así como es útil el hacer creer, que nuestra parte se
ms ama

jam ex arte oratoria, non magis quam certe minuere , ex causa est.
appellare, etiamsi id quoque saepe uti Miseratio quoque aliquando ex eadem
le est, aut antequam pronuntiet, reum venit, sive quid passi sumus grave, si
facere. Nam, et minari, et deferre, et ve passuri. Nec enim sum in hac opi
iam non orator potest. nione, qua quidam , uteo distare prooe
- Si causa conciliandi nobis judicis ma mium ab epilogo credam , quod in hoc
teriam dabit, ex hac potissimum aliqua praeterita, in illo futura dicantur : sed
in usum principii , quae maxime favo quod in ingressu parcius, et modestius
rabilia videbuntur , decerpi oportebit. praetentanda est judicis misericordia ; in
Quae sint porro in causis favorabilia, e epilogo vero liceat totos effundere affe
numerare non est necesse : quoniam , et ctus, et fictam orationem induere per
manifesta erunt cognita cujusque con sonis, et defunctos excitare, et pignora
troversiae conditione, et omnia colligi eorum producere: quae minus exordiis
in tanta litium varietate non possunt. sunt usitata. Sed haec, quae supra dixi,
Ut autem hoc invenire, et augere, ita mon movere tantum , verum ex diverso
quod laedit, aut omnino repellere, aut amoliri quoque prooemio opus est, Ut
2OO INSTITUCIONES ORATORIAS. -

ha de ver oprimida de miseria, si el contrario vence; así di.


remos, que nuestro adversario se hará mas orgulloso con la
VICtOrla. - - - -

Suelen tambien tomarse los exórdios de las circunstan


cias de la causa, y de las personas. A las personas pertenecen
no solamente los parientes, como acabamos de decir , sino
las amistades, los paises, las ciudades, y todo quanto puede
contribuir para triunfar en la causa. A la causa pertenece tam
bien extrinsecamente el lugar: como el exórdio en la oracion
en defensa de Deyotaro. El tiempo; como en la de Celio; el
trage; como en la de Milon. La opinion en el exórdio de la
oracion contra Verres: y para no recorrerlo todo, el honor
de los tribunales, y la expectacion del vulgo. Todo esto es
tá fuera de la causa, pero mira á ella. . y

Añade tambien Teophrasto , que se toma el exórdio de


la misma accion, ó defensa de la causa. Así Demóstenes de
fendiendo á Tesiphon pide, que se le permita hablar á su ar
bitrio, y á gusto del reo, que lo pedia, y no segun el método
establecido ántes por el acusador. . -

A veces la misma confianza suele pecar de arrogancia.",


Tambien concilian el favor aquellas cosas comunes á todos,
quales son el manifestar los buenos deseos, el abominar del
contrario el3suplicar , y portarse en todo como solícito de
fensor ; cosas que no deben omitirse, aunque no sea sino
con el fin de que no se aproveche de ellas el contrario. . . .
- -

y En nº - .

autem nostrum miserabilem , si vinca Deinceps , ne omnia enumerentur, fam


mur, exitum: ita adversariorum super judiciorum, expectatio vulgi. Nihilenim.
bum, si vicerint, utile est credi. horum in causa est, ad causam tamen
Sed ex iis quoque, quaemon sunt pertinet.
personarum , nec causarum , verum ad Adjicit Theophrastus ab actione prin
juncta personis, et causis, duci prooe cipium , quale videtur esse Demosthe
mia solent. Personis applicantur non mis pro Ctesiphonte, ut sibi dicere suo
pignora modo , de quibus supra dixi, potius arbitrio liceat rogantis, quami eo
sed propinquitates, amicitiae , interim modo, quem accusator actione prae
regiones etiam, civitatesque, et si quid scripserat. -

aliud ejus, quem defendimus, causa di Fiducia ipsa solet opinione arrogan
ci potest. Ad causam extra pertinet tem tiae laborare. Faciunt favorem , et illa
pus, unde principium pro Caelio. Lo paene communia, montamen omittenda,
cus, unde pro Dejotaro. Habitus, unde vel ideo, ne occupentur: optare, abomi
pro Milone. Opinio , unde in Verrem. nari , rogare, solicitum Rgere.
YCE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 2Qy I

III. Con esto mismo se gana la atencion de los jueces,


haciendo ver, que la causa es nunca vista, de suma impor
tancia, atroz, y que puede servir de exemplar: principal
mente quando el juez se halla movido de la calamidad, ó por
que mira á él, ó á la república; cuyo ánimo es preciso que
el orador se le gane con la esperanza, miedo, avisos, súpli
cas, y aun con vanas alabanzas, si no hay otro medio. Im
porta mucho para conciliar la atencion el que vean no hemos
de ser largos, ni salirnos fuera del asunto. 8

IV. Con tener atentos á los oyentes, los tendremos tam


bien benévolos; así como proponiendo breve, y claramente
lo que vamos á tratar: lo que practican Homero, y Virgilio
al principio de sus poemas. Debe cuidar el orador de hacer
una simple reseña de su asunto, de modo, que mas parezca
proposicion, que exposicion, diciendo no como cada cosa suce.
dió, sino lo que va á tratar. No encuentro exemplo mejor,
que aquel de Ciceron en la defensa de Cluencio : Veo, ó jue
ces, que el contrario dividió su acusacion en dos partes; en
una de las quales me parece que estriba , y funda toda su
confianza el odio envejecido del juicio de Junio : en la otra,
siguiendo la costumbre, tan solamente toca por encima la
qualidad del delito de los hechizos , pero con timidez, y des
confianza; por lo qual esta controversia ya está terminada
por la ley, Lo qual es mas fácil al que responde, que al que

III. Quae plerunque attentum quo suorum principiis faciumt. Nam istius rei
que judicem faciunt, si res agi videtur modus est, ut propositioni similior sit,
nova, magna, atrox, pertinens ad e quam expositioni: nec quomodo quicoue
xemplum : praecipue tamen si judex, sit actum , sed de quibus dicturus sit,
aut sua vice , aut reipublicae commo orator ostendat. Nec video , quod hujus
vetur, cujus animus spe, metu, admo rei possit apud oratores reperiri melius
nitione, precibus , vanitate denique , si exemplum , quam Ciceronis pro Cluen
id profuturum credimus , agitandus est. tio : Animadverti, judices, omnem accu
Sunt, et ista excitandis ad audiendum ratoris orationem in duas divisam es se
non inutilia , si nos , neque diu moratu partes : quarum altera mibi niti , et ma
ros , neque extra causam dicturos exi gnopere confidere videbatur invidia jam in
stiment. veterata judicii 3 uniani; altera tantum
IV. Docilem sine dubio et haec i modo consuetudinis causa timide, et diff
psa praestat attentio : sed et illud, si denter attingere rationem veneficii crimi
, breviter, et dilucide summam rei, de num , qua de re lege est haec quae tio con
qua cognoscere debeat, indicaverimus: stituta. Id tamen totum respondenti fa
quod Homerus, atque Virgilius operum cilius est quam proponenti : quia hic
ToM. I C
2O2. INSTITUCIONES ORATORIAS

propone: en lo primero basta insinuar la cosa, quando en lo


último hay que informar al juez.
Ni soy de parecer (aunque grandes autores digan lo con
trario ) que no siempre conviene llamar la atencion, y do
cilidad del juez; no porque ignoro, que, como ellos dicen,
esto sucede, quando la causa es mala (aunque no sabemos
qual sea esta); sino porque esto acaece , no por descuido del
juez, sino por engaño. Por exemplo. Peroró primero nues
tro contrario, y acaso logró persuadir al juez. En este caso
necesitamos imbuirle en otra opinion distinta; y esto no pue
de hacerse, si no le hicieremos atento, y dócii á lo que va
mos á decir. ¿Pues qué remedio ? Tenemos que disminuir al
gunas cosas, rebaxarlas, y aun despreciarlas, para hacer que
el juez afloxe en la opinion, que favorece al contrario, como
lo practicó Ciceron en la causa de Ligario. Pues ¿qué otra
cosa hacia con aquella entrada irónica, sino que el Cesar no
hiciese mucho alto en una acusacion , que nada tenia de
nueva? Y ¿qué en la oracion en defensa de Celio, sino el
que se tuviese la cosa por menor de lo que se esperaba?
V. Pero de todo quanto he dicho, algunas cosas se omi
ten, segun la naturaleza de la causa. Muchísimos cuentan
cinco géneros de causas, lo honroso, lo despreciable, lo du
doso, lo admirable, y lo obscuro que llaman los griegos
endo ron, ado ron, amphidoiron, parado ron , dysparacolou
theton. Algunos admiten lo indecoroso; pero otros lo redu

-” a * - - - -º -A

admonendus judex, illic docendus est. mittendam intentionem judicis, quam


Nec me quanquam magni auctores adversario praestat; ut fecit pro Liga
in hoc duxerint, ut non semper facere rio Cicero. Quid enim agebat aliud iro
attentum , ac docilem judicem velim: nia illa , quam ut Caesar minus se in
non quia nesciam id, quod ab illis dici rem tanquam non novam intenderet?
tur, esse pro mala causa, qualisea sit, Quid pro Caelio, quam ut res expecta
tione minor videretur?
non intelligi; verum quia istud non ne -

gligentia judicis contingit, sed errore. V. Verum ex iis, quae proposui , a


Dixit enim adversarius, et fortasse per liud in alio genere causae desiderari pa
suasit: nobis opus est ejus diversa , opi lam est. Genera porro causarum pluri
nione; quae mutari non potest, misi il mi quinque fecerunt, honestum, humile,
lum fécerimus adea, quae dicemus, do dubium, vel anceps,admirabile,obscuru In:
cilem, et attentum. Quid ergo? Inmi id estávd. fev, a de fow , a º pl de for,
nuenda quaedam, et elevanda, et qua zrap & de fov, Jvo a aparto Aá Sºzov. Sunt
si contemnenda esse, consentio, ad re quibus recte videatur adjici turpe
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV". 2o3
cen á lo despreciable; y otros á lo admirable. Por admi
rable entienden quanto está fuera de la opinion de los hom
bres. En lo dudoso conviene hacer benévolo al juez; en lo
obscuro, dócil; en lo despreciable, atento. Porque si la cosa
es honrosa-, y buena, ella por sí basta para conciliarse á los
oyentes. En lo extraño, é indecoroso es menester valerse de
auxilios.
VI. De aquí es, que muchos dividen el exórdio en dos
partes; principio, é insinuacion. De forma, que en el prin
cipio captemos la benevolencia, y atencion. Y como esto no
puede hacerse á cara descubierta en los asuntos indecorosos,
es menester que por insinuacion nos ganemos los ánimos:
principalmente quando la causa no presenta buen aspecto,
ó porque de suyo es mala, ó porque no es de la aproba
cion del auditorio; y quando alguna circunstancia daña para
su defensa; como si tenemos presente al contrario, ó defensor
suyo, ó quando yamos contra nuestro mismo padre, contra
un anciano, un ciego, un nino.
Algunos enseñan con un largo rodeo de palabras los mo
dos de salvar este inconveniente, fingiendo diversos casos,
los tratan acomodándose á la costumbre de los tribuna
pero dimanando estos de las mismas causas, que son
innumerables, el referirlos todos , seria cosa infinita. Por
donde considerada bien la causa, ella misma presentará el ca
mino para allanar los inconvenientes, que se nos ofrezcan
en ella,

quod alii humili, alii admirabili subji maxime ubi frons causae non satis ho
ciunt. Admirabile autem vocant, quod nesta est, vel quia res sit improba, vel
est praeter opinionem hominum consti quia hominibus parum probetur: aut si
tutum. In ancipiti maxime benevolum facie quoque ipsa premitur, vel invidia
judicem, in obscuro docilem, in humi consistentis ex diverso patroni, aut patris,
li attentum parare debemus, Nam ho vel miserabilis senis, caeci, infantis.
nestum quidem ad conciliationem satis Et quidam , quibus adversus haec
per se valet: in admirabili, et turpi re modis sit medendum, verbosius tradunt,
mediis opus est. materiasque sibilipsi fingunt, et ad mo
VI. Eteo quidam exordium in duas rem actionum persequuntur: sed haec
dividunt partes , principium, et insi cum oriantur ex causis, quarum spe
nuationem: ut sit in principiis recta be cies consequi omnes non possunt, misi
nevolentiae , et attentionis postulatio; generaliter comprehendantur, in infini
quae, quia esse in turpi genere causae tum sunt extrahenda. Quare singulis con
mon possit, insinuatio surrepat animis, silium ex propria ratione naScetur.
Cc 2
2O4. INSTITUCIONES orAToRIAs
Ahora decimos en comun, que huyendo de lo que nos
¿ , aleguemos lo que nos favorece. Si la causa es
mala, valgámonos de la persona, y al reves. Si no tenemos
nada de donde asirnos, echemos mano de lo que perjudi
ca al contrario. Porque así como deseamos merecer el ma
yor aplauso, así tambien el no merecer tanto odio como el
contrario. Si el hecho no se puede negar, probemos á lo mé
nos, no ser tanto como le pintan ; que se hizo con otra in
tencion; que no pertenece al asunto presente; que si se co
metió algun delito, ya se resarció con el arrepentimiento
esta falta; ó que ya queda borrada, y satisfecha con el cas
tigo. Todo lo qual cae mejor en boca del abogado, que del
reo; porque puede alabar sin sospecha de arrogancia, y á
veces podrá reprehender la accion con utilidad. Entretanto
podrá fingir, que se halla conmovido, como lo hizo Ciceron
defendiendo á Rabirio Posthumo , ya para insinuarse en los
ánimos, ya para dará conocer, que habla de corazon, ya
para que se le crea , quando defienda, ó niegue la mis
Jma COSa.
Se necesita del exórdio de insinuacion, quando el con
trario tuviere al juez preocupado, ó estuvieren los oyentes
cansados de oir. Lo primero se evitará proponiendo las ra
zones, que tenemos en nuestro abono, y eludiendo las de
nuestro adversario; y lo segundo, si prometemos no ser lar
gos, y nos valemos de los medios puestos arriba para ganarse

Illud in universuna praeceptum sit, arrogantiae crimine, et aliquando utili


ut ab iis, quae laedunt, adea, quae pro ter etiam reprehendere potest. Nam se
sunt, refugiamus. Si causa laborabimus, quoque moveri interim finget, ut pro
persona subveniat: si persona, causa si Rabirio Posthumo Cicero, dum aditum
nihil, quod rios adjuvet, erit, quaeramus, sibi ad aures faciat , et auctoritatem
quid adversarium laedat. Nam ut opta induat vera sentientis, quo magis cre
bile est, plus favoris mereri : sic pro datur, vel defendentieadem, vel ne
ximum, odii minus. In iis, quae nega ganti.
ri non poterunt, elaborandum , , ut aut His etiam de causis insinuatione vi
minora, quam dictum sit, aut alia men detur opus esse, si adversarii actio judi
te facta, aut nihil ad praesentem quae cum animos occupaverit, vel si dicen
stionem pertinere, aut emendari posse dum apud fatigatos est quorum alte
poenitentia, aut satis jam punita vi rum promittendo , nostras probationes,
deantur. Ideoque agere advocato, quam et adversas eludendo vitabimus; alterum,
litigatori facilius : quia , et laudat sine et spe brevitatis, et iis, quibus atten
DE M. FABIO QUINTILIANo, LIB. IV. 2o5
la atencion del juez. La cortesanía usada á su tiempo recrea á los
ánimos; y procurando deleytar al juez por todos los medios
posibles, se disminuye el fastidio de oir. No será malo el ade
lantarse á deshacer objeciones, que se nos podrán hacer. Así
dice Ciceron, que algunos extrañarán, que habiendo él em
pleado su vida en la defensa de tantos, sin haber hecho mal
á nadie, venga al presente á acusar á Verres ; pero despues
manifiesta, que el acusarle á este es defender á los aliados. A
lo que llaman ocupacion, y los griegos prolepsis.
VII. Pero como no basta decir á los que quieren saber
esta materia, lo que constituye el exórdio, sino mostrar tam
bien el camino mas llano para formarle ; digo que el orador
debe tener presente estas circunstancias. Qué pretende pro
bar; en presencia de quiénes; á quién defiende; contra quién;
el tiempo, el lugar donde ha de hablar; el estado presente
de las cosas; las opiniones del pueblo; y la que tendrá el
juez ántes de oirnos. Asimismo, qué desearemos, qué supli
caremos; y de este modo la naturaleza de la causa le dirá lo
que debe decir en primer lugar, Mas ahora llaman proemio
á aquello, por donde comienza la oracion ; y exórdio si en
el principio de ella se encuentra alguna sentencia, que lison
gée : pero en él se encuentran muchas cosas, que Ó son pro
pias de otras partes del discurso, óles pueden convenir igual
mente; siendo así, que no hay cosa, que ocupe mejor su
lugar, que lo que dicho en otro, no quadraria tan bien,
EE. Es

tum fieri judicem docuimus. Et urba apud quem, pro quo , contra quem,
mitas opportuna reficit animos , et un quo tempore , quo loco, quo rerum sta
decunque petita judicis voluptas levat tu 3, qua vulgifama dicendum sit; quid
taedium. Non inutilis etiam est ratio judicem sentire credibile sit, antequam
occupandi , quae videntur obstare 3 ut incipiamus ; tum , quid aut desidere
Cicero dicit scire se mirari quosdam, mus, aut deprecemur: ipsa illum na
quod is , qui per tot annos defenderit tura eo ducet, ut sciat, quid primum
multos, laeserit neminem, ad accusan dicendum sit. At nunc omne quod coe
dum Verrem descenderit: deinde osten perint, prooemium putant: et ut quic
dit hanc ipsam sociorum defensionem. que succurrerit, utique si aliqua sen
Quod schema a pian las dicitur. tentia blandiatur, exordium. Multa au
VII. Verum quoniam non est satis tem sine dubio ex aliis partibus sunt,
demonstrare discentibus, quae sint in aut aliis partibus causae communia : ni
ratione prooemii , sed dicendum etiam hil tamen in quoquam melius dicitur, .
quomodo perfici facillime possint : hoc quam quod aeque bene dici alibi non
adjicio, ut dicturus intueatur, quid, possit. y
*,
2o6 NSTITUCIONES ORATORIAS r

Tienen una gracia particular aquellos exórdios, que es


tan tomados de la misma defensa del contrario, por lo mis
mo que no parece cosa estudiada de antemano, sino discur
rida allí mismo, y como nacida allí; y no solo prueba inge
nio, sino que su misma naturalidad, por ser tomados de lo
mismo que acabamos de oir, concilian mayor crédito á lo que
se dice. De manera, que aunque lo restante del discurso sea
cosa ántes limada , y trabajada , el exórdio lo hace parecer
dicho de repente, viéndose, que nada tiene de estudiado.
Lo que mas debe brillar en el exórdio es la modestia
del orador en el semblante, en la voz, en lo que dice, y en
el modo de proponerlo ; de manera, que aunque la justicia
de la causa sea de suyo indubitable, y merezca la aproba
cion de todos, no ha de manifestar confianza de salir con la
victoria. Pues los jueces se ofenden de tanta confianza en
un litigante : y como conocen quáles son sus fueros, quieren,
aunque lo disimulen, que se les trate con respeto.
Y no debe ponerse ménos cuidado en que no se sospe
che de nosotros por ningun lado: y así al principio no debe
hacerse alarde del demasiado artificio, porque el oyente se
imagina, que es para cazarle; ántes el mayor artificio con
siste en disimularle. Este es precepto, que dan todos, y el
mas digno de observarse. Algunas veces las circunstacias obli
gan a alterarle; como ha sucedido en algunas causas capi
tales, en particular defendidas en presencia de los Centum

- -

* - - -

Multum gratiae exordio est, quod ab fiducia se ipsa nimium exercere non de
actione adversae partis materiam tra beat. Odit enim judex fere litigantisse
hit, hoc ipso, quod non compositum do curitatem: cumque jus suum intelligat,
mi, sed ibi, atque è re natum, et fa tacitus reverentiam postulat.
cilitate famam ingenii auget, et facie Nec minus diligenter , ne suspecti
simplicis, sumptique è proximo sermo simus in ulla parte, vitandum : propter
nis fidem quoque adquirit: adeo ut, e quod minime ostentari debet in princi
tiamsi reliqua scripta , atque elaborata piis cura , quia videtur ars omnis di
sint, tamen plerunque videatur tota ex centis contra judicem adhiberi. Sed i
temporalis oratio , cujus initium nihil psum istud evitare, summae artis est.
praeparatum habuisse, manifestum est. Nam id sine dubio ab omnibus, et qui
Frequentissime vero prooemium do dem optime , praeceptum est; verum
cebit, et sententiarum , et compositio aliquatenus temporum conditione muta
nis, et vocis, et vultus modestia: adeo tur, quia jam , quibusdam in judiciis,
ut in genere causae etiam indubitabili, maximeque capitalibus, ut apud Cen
DE M. FAB1o QUINTILIANo. LIB. IV. 2o.7
viros, que los mismos jueces exigian de los abogados cierto
esmero en la accion, imaginándose, que de lo contrario se
hacia poco aprecio de sus personas: pues los tales no quieren
solamente ser instruidos, sino que les lisongeen el oido. Es
dificil el guardar medianía en esto; la que debe ser tal, que
parezca que hablamos con esmero, pero sin segunda intencion.
Nos enseñan los antiguos, que en el principio de la
oracion sobre todo evitemos las palabras arrogantes, las me
táforas atrevidas, las expresiones antiquadas, y poéticas; por
que todavía no nos hemos insinuado en , los ánimos , y en
tónces mas que nunca nos escuchan los oyentes con mas aten
cion. Pero quando ya hemos ganado al auditorio, y le te
nemos mas acalorado, se sufre algo mas esta libertad; espe
cialmente quando ya hubiéremos entrado en los lugares ora
torios: pues su natural afluencia no permite, que entre el
resplandor de la oracion se noten estos defectillos de las
palabras.” -

VIII. El estilo del exórdio no debe parecerse al de la


confirmacion, al de los lugares comunes, ni al de la nar
racion 3 ni siempre limado , y trabajado como á compas; si
no á veces sencillo, y que no parezca cosa estudiada de an
temano. Ni el ayre del decir sea altisonante , prometiendo
mucho las palabras : ántes quando es disimulado, y nada
artificioso, como dicen los griegos, se insinúa mejor en los
ánimos. Pero esto deberá arreglarse á los afectos, que ha
ya que inspirar en el ánimo del juez.
-º ******** - 4 - y - cº-, º - º * -- -

* -- C.

tumviros, ipsi judices exigunt solicitas, mis, et jam calentibus, haec libertas fe-,
et accuratas actiones, contemnique se, retur, maximeque cum in locos fueri
nisi in dicendo etiam diligentia appa mus ingressi, quorum naturalis ubertas
reat, credunt: nec doceri tantum, sed licentiam verbi notari circunfuso nitore
etiam delectari volunt. Et est. dificilis mon patitur.
hujus rei moderatio: quae tamen ita VIII. Nec. argumentis autem , nec
temperari potest, utvideamur accura locis , nee narrationi similis esse in
-te, non cailide dicere. prooemio debet oratio: neque tamen de
Illud ex praeceptis veteribus manet, ducta semper, atque circumlata, sed sae
ne quod insolens verbum , ne audacius pe simplici, ac illaboratae similis, nec
translatum , ne aut ab obsoleta vetusta verbis, vultuque nimia promittens. Dis
te, aut poetica licentia sumptum in prin simulata enim , et, utgraecidicunt,
cipio deprehendatur. Nondum enim re a varia a o actio melius saepe sur
cepti, sumus, et custodit nos recens au repit. Sed haec pro ut formari animos
dientium intentio. Magis conciliatis ani judicum expediet.
2o8 INSTITUCIONES ORATORIAS

Pero entre todas las faltas de un orador la mayor es


faltarle la memoria, y no poder seguir adelante: pues en
este caso el exórdio parecerá interrumpido como un rostro
lleno de cicatrices, y el orador semejante al piloto, que es
trella la nave en el mismo puerto de donde sale.
El exórdio ha de corresponder á todo el asunto de la
oracion. Una causa, y asunto llano pide exórdio corto; y mas
largo si es materia enredosa, sospechosa, y que no mani
fiesta buen aspecto. Pero no merecen aprecio los que redu
xéron á quatro pensamientos tan solos todos los exórdios. Ni
se han de evitar ménos los largos, para que ni la cabeza sea
mayor que el cuerpo, ni abrume á los oyentes, quando pre
tendemos ganarles la atencion. .

Algunos destierran enteramente del exórdio aquellas após


trofes por las que enderezamos el discurso á otras cosas dis
tintas del juez y no les falta razon para ello. La misma ra
zon enseña, que nos dirijamos á aquellos, cuya atencion nos
procuramos ganar. Ademas de esto, como el exórdio debe
contener á veces alguna sentencia, tendrá mas viveza si va
dirigida á alguna persona. Con que quando esto ocurre, ¿por
qué no daremos valor á la sentencia por esta figura ? Porque
si algunos retóricos prohiben esto, no es porque no sea lí
cito, sino porque ellos no lo tienen por útil: con que si lo
pide la necesidad, la misma razón que hay para omitirlo, esa
misma habrá para hacerlo. Demóstenes en uno de sus exór
- --- - - -
4
e-Es
-

-- -- " -- -- -

Turbari memoria , , vel continuandi prooemio summovent, monnulla quidem


verba facultate destitui, musquam tur in hanc persuasionem ratione ducti. Nam
pius : cum vitiosum prooemium possit prorsus esse hoc magis secundum natu
videri, ut cicatricosa facies; et pessimus ram confitendum est, ut eos alloqua
certe gubernator, qui navem, dum por mur potissimum , quos concialiare no
tum egreditur, impegit. bis studemus. Interim tamen est, ethoc
Modus autem principii pro causa. prooemio necessarium , sensus aliquis:
Nam brevius simplices, longius perple et is acrior fit, atque vehementior ad
xae, suspectaeque, et infames deside personam directus alterius. Quod si ac
rant. Ridendi vero, qui velut leges prooe cidat, quo jure, aut qua tanta supersti
miis omnibus dederunt, utintra qua tione prohibemur dare per hane figu
tuor sensus terminarentur. Nec minus e ram sententiae vires? Nec enim istud
vitanda estimmodica ejus longitudo, ne scriptores artium , , quia aon liceat, sed
in caput excrevisse videatur, et quo prae quia non putent utile, vetant, Ita sivin
parare debet, fatiget. cet utilitas, propter eamdem causam fa
Sermonem a persona judicis aversum, cere debebimus , propter quam veta
mur. Et Demosthenes ad AESchinem ora
qui &aru poá dicitur, quidarn in totum a
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 2o6

dios se dirige á Eschines. Ciceron en algunos á otras perso


nas, y en la causa de Ligario á Tuberon ; porque seria muy
lánguido el exórdio, si no fuera por esta apóstrofe. Para
mayor inteligencia, quitemos el ayre, y tono de estas pala
bras que dixo Ciceron: Ya tienes, ó Tuberon , lo que mas
puede apetecer un acusador, crc, y hablemos con la persona
del juez, diciendo: Ya tiene Tuberon una cosa , que es la
que mas puede apetecer el acusador; y quedará la oracion
lánguida, y desmayada; pues del primer modo apretó mas
al contrario, y del segundo solo indicaba la cosa : y lo mismo
sucederá en Demóstenes, si le quitamos aquel ayre de de
cir. Aun el mismo Salustio, quando peroró contra Ciceron
¿no dirigió desde luego contra él el exórdio? Sentiria , y me
ofenderia de tus palabras injuriosas, ó M. Tulio, tre. Lo mis
mo practicó Ciceron contra Catilina. ¿ Hasta quándo , Cati
lina, abusarás de nuestro sufrimiento ?
Y para que ninguno piense, que siempre ha de ser
apóstrofe, el mismo Ciceron, defendiendo á Escauro reo de
soborno, usó de prosopopeya de uno que habla por el reo.
Quando defendió á Rabirio, y otra vez á Escauro acusado de
estafas, se valió de los exemplos. En la causa de Cluencio usó
de particion. Porque no porque pueda hacerse la cosa, se ha
de hacer siempre, sino quando mueve á ello la razon mas que
las reglas. Y á este modo se han de usar los símiles, las me

es EE

tionem in prooemio convertit, et Mar Sallustius directo ad Ciceronem, in quema


cus Tullius cum pro aliis quibusdam , ad ipsum dicebat, usus est principio , et
quos ei visum est, tum pro Ligario ad quidem protinus? Graviter, et iniquo
Tuberonem. Nam erat multo futura lan animo maledicta tua paterer, Marce Tul
guidior , si esset aliter figurata. Quod li. Sicut, et Cicero fecerat in Catilinama:
facilius cognoscet, si quisillam totam Quourque tandem abutere patientia n
partem vehementissimam , cujus haec rtra 2
forma est, habes igitur, Tubero, quod Ac nequis apostrophen miretur, i
ert accusatori maxime optandum, et cae dem Cicero pro Scauro ambitus reo, pro
tera convertat ad judicem ; tum enim sopopoeia loquentis pro reo utitur: pro
vere eversa videatur oratio, et langue Rabirio vero Posthumo, eodemogue Scau
scat vis omnis, dicentibus nobis: habet ro reo repetundarum , etiam exemplis:
igitur Tubero , quod est accusatori maxi pro Cluentio (ut modo ostendi) partitio
me optandum. Illo enim modo pressit, ne. Non tamen haec, quia possunt bene
atque institit , hoc tantum indicasset. aliquando fieri , passim facienda sunt,
Quod idem in Demosthene , si flexum sed quoties praeceptum vicerit ratio: quo
illum mutaveris, accidet, Quid 2 non modo , et similitudine, dum brevi, et
ToM. L.
2. IC INSTITUCIONES ORATORIAS

táforas, y demas tropos; cosas, que aunque algunos retóri


cos muy escrupulosos lo prohiben, las usaremos algunas ve
ces. A no ser que haya algun paladar tan estragado, que no
apruebe aquella tan divina ironía de la causa de Ligario, de
que acabo de hablar.
Otros vicios notáron con mas fundamento los tales en
los exórdios. Aquel que puede indiferentemente acomodarse
á varios asuntos, llaman exórdio vulgar; el qual no favo
rece tanto á la causa, pero alguna vez podremos usarle, co
mo lo hiciéron grandes oradores. El exórdio, de que tambien
pudiera valerse el contrario, se llama comun. Aquel de que
puede valerse el contrario, para hacernos tiro , exórdio con
mutable. El que no quadra al asunto presente, separado.
El que no se toma de la misma causa, trasladado. Ser largo,
y contra los preceptos, es otro vicio del exórdio. Aunque
muchos de estos vicios no solo convienen al exórdio, sino á
otras partes.
IX. Estas son las leyes del exórdio, quando tuviere cabi
da en la oracion, pues no siempre la tiene: porque es ocio
so, quando no se necesita de preparacion, ó ya tenemos pre
venido al juez. Aristóteles no le tiene por necesario, quan
do los jueces son buenos. Algunas veces deberemos omitir
le, como quando el juez esté de prisa , quando es corto
el tiempo, ó quando nos mandan, y obligan á entrar desde
luego en la causa. -

translatione, atque aliis tropis (quae o de trahitur, translatum. Praeterea quod


mnia cauti illi, ac diligentes prohibent) longum, quod contra praecepta est. Quo
utemur interim: nisi cui divina illa pro rum pleraque non principii modo sunt vi
Ligario ironia, de qua paulo ante dixe tia , sed totius orationis.
ram, displicet. IX. Haec de prooemio , quoties erit
Alia exordiorum vitia verius tradide ejus usus. Non semper autem est. Nam,
runt. Quod in plures causas accommo et supervacuum aliquando est,, ut. si
dari potest , vulgare dicitur: id minus sit praeparatus satis etiam sine hoc ju
favorabile, aliquando tamen non inuti dex: aut si res praeparatione non egeat.
liter assumimus, à magnis saepe orato Aristoteles quidem in totum id necessa
ribus non evitatum. Quo , et adversa rium apud bonos judices negat. Aliquan
rius uti potest, commune appellatur. do tamen uti , nec, si velimus, eoli
Quod adversarius in suam utilitatem de cet, cum judex occupatus, cum angusta
flectere potest, commutabile. Quod cau sunt tempora, cum major potestas ab i
sae non cohaeret, separatum. Quodaliun.- psa re cogitincipere.
DE M. FABIO QUINTILIANO. Lº B. Iv. 2 II.

Algunas veces la misma narracion hace el oficio del exór


dio, y aun las demas partes; pues en medio de ellas pedi
mos la atencion del juez, y su auxilio: que es, decia Pro
dico, como ¿? ; lo que hizo Ciceron, quando dixo:
Entónces Vareno, aquel que fué muerto por los criados de
Anchario: Parad, ó jueces, por vuestra vida , aquí la
refleríon. Quando tiene varios lances la causa , debemos á
cada parte hacerla su entrada de este modo : Oid cómo pro
sigue la cosa. Pasemos ahora a tratar. ¿Qué mas? aun en
la misma confirmacion hacemos nuestras llamadas , como lo
practicó Ciceron contra los censores, y defendiendo á Cluen
cio; en la de Murena, quando se escusa con Servio. Esto es
tan comun, que no necesitamos poner exemplos,
X. Quando usáremos de exórdio , y pasáremos á la
narracion , ó á la confirmacion , procuremos acabarle con
lo que tenga mas union, y enlace con lo que sigue despues,
Pero es una frialdad, y afectacion pueril, el hacer este
tránsito por medio de alguna sentencia, para ganarse el aplau.
so con esta engañosa apariencia. Ovidio en sus transformacio
nes suele tener esta falta, escusable en él; pues al cabo te
nia que formar un solo cuerpo de miembros tan poco unifor
mes. ¿Pero qué necesidad puede tener un orador de usar
furtivamente de semejante transicion , quando tendrá que
llamar la atencion del juez, para que advierta el órden de

Contraque est interim prooemii vis X. Quoties autem prooemio fuerimus


etiam non in exordio. Nam judices, et usi ; tum sive ad expositionem transi
in narratione nonnunquam, et in argu bimus sive protinus ad probationem,
mentis, ut attendant, et ut faveant, id debebit in principio postremum esse,
rogamus: quo Prodicus, velut dormi cui commodissime jungiinitium sequen
tantes eos excitari putabat ; quale est tium poterit.
Ciceronis: Tum C. Varenus, ir quid fa Illa vero frigida , et puerilis est in
milia Anchariana occirus est : boc, quae scholis affectatio, utipse transitus effi
ro, judices, diligenter attendite. Utique ciat aliquam utique sententiam , et hu
si multiplex causa est , sua quibusque jus, velut praestigiae plausum petat: ut
partibus danda praefatio est: ut, audi Ovidius lascivire in metamorphosi so—
te nunc reliqua. Et, tran reo nunc illuc. let; quem tamen excusare necessitas po
Sed in ipsis etiam probationibus multa test, res diversissimas in speciem unius
funguntur prooemii vice, ut facit Cice corporis colligentem. Oratori vero quid
ro pro Cluentio, dicturus contra censo est necesse surripere hanc transgressio
res: pro Murena, cum Servio se excu nem, et judicem fallere, qui ut ordini
sat. Verum id frequentius est, quam ut rerum animum intendat , etiam corn
exemplis confirmandum sit. momendus est? Peribit enim prima pars
d 2
2I2 INSTITUCIONEs oRAToRIAs
las cosas: Antes si el juez piensa, que no comienza aun la
narracion , perderá lo primero de ella. Por lo que así co
mo no conviene entrarse en ella de relámpago, así tambien
conviene que se sepa, quando damos principio á ella.
Quando la narracion es larga, y enredosa, se le debe pre
parar de antemano al juez , como lo hace freqiientemente
Ciceron , sobre todo quando dice: Tomaré el principio de
algo mas atras, para poner en claro la cosa. Lo que os rue
go, ó jueces, que no lleveis á mal: porque entendido bien el
principio, es mas fácil de entender lo que se sigue. Y casi á
esto se reduce lo que he discurrido sobre el exórdio.

º- amamaamamas

expositionís , si judex narrari nondum sed hoc praecipue loco fecit: Paulo lon
sciet. Quapropter ut non abrupte cadere gius exordium rei demonstrandae petam;
in narrationem, ita non obscure transcen quod quaeso, judices , me moleste patia
dere, est optimum. mini. Principiis enim cognitir, multo fa
Si vero longior sequetur, ac perplexa cilius extrema intelligetis. Haec mihifere
magis expositio, ad eam ipsam praepa sunt de exordio comperta.
randus judex erit, ut Cicero saepius,

-- -- º * -- º * - a º ---- º * -------
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 2I3

CAPÍTULO II.
DE LA NARRACION.

I. No siempre tiene cabida la narracion. O es de la mis


ma causa, ó de cosas, que de ella dependen. II. Algunas
veces no sigue despues del exórdio. III. Qué sea narracion.
Tres son sus especies. 1? Si favorece dí nuestra causa, en
tónces debe ser únicamente breve, clara, y verosimil. Cómo
se conseguirá esto. 2? Si favorece a los contrarios, no la
omitamos , valgámonos de algunos remedios. Qué se ha de
observar en las narraciones falsas. 3?. Se compone de las dos.
IV. Refútase á los que destierran de ella la digresion, após
trofes , prosopopeyas , argumentaciones , y afectos. V. Qué
adorno admite. VI. De la evidencia de la narracion , y au
toridad de quien la hace.

Pas la razon natural (y se practica muy freqüente


mente) que estando preparado el juez en el exórdio, se de
clare la cosa, sobre que va á sentenciar. Esto es narracion.
I. Pensáron algunos, que nunca se puede omitir esta;

cA P U T II.
3D E N A R RA TIO N E,

I. Interdum non erse narrationi locum. Warrationem esse vel causae, vel rerum ad
eauram pertinentium. II. IVon semper exordio subjiciendam. III. Narratio quid rit. Tri
plex ejus species I. Vel est tota pro nobis; et tunc contenti simus ut sit lucida , bre
vir, verisimilis. Quomodo haec singula con requipos simus. 2. Vel tota pro adversariis;
et tunc non quidem omittenda narratio, red utendum quiburdam remediis. Quid in falsis,
exporitionibus observandum. 3. Vel mista ex utrisque. IV. Refelluntur, qui digrersio
nem , aportrophen, proropopoeiam, argumenta , affectus omnino d narratione excludunt.
v. Qualis debeat es se ornatus narrationis. VI. De evidentia narrationis, et de aucto
2ritate narrantir,

Man. naturale est, et fieri


frequentissime solet, ac debet, ut prae-
judice , res de qua pronuntiaturus est,
indicetur. Ea est narratio.
parato per haec, quae supra dicta sunt, I. Plerique semper narrandum putave
2 I4 INSTITUCIONES ORATORIAS

pero son mas los que lo contradicen; pues hay asuntos tan
sencillos, que en ellos mejor cae la proposicion, que la nar
racion.
Lo qual acaece alguna vez á ámbas partes, quando cons
tando el hecho, solo se duda del derecho. v.g. Si delante de
los Centumviros se litiga, si el hijo, ó el hermano debe here
dar al que murió sin testar. O, aunque hubiera lugar á la
narracion, se omite por estar informado el juez, ó porque ya
está referida de antemano.
Algunas veces acaece esto á sola una de las partes, y co
munmente al abogado: ó porque basta hacer una simple in
sinuacion, ó porque conviene así. Basta el decir: Pido la can
tidad dada en préstamo, y que se me debe por esta obliga
cion. Pido lo que se me deró en el testamento. Pero el contrario
necesita de narracion, para hacer ver, que no se deben con
ceder las tales cosas. Asimismo basta que diga el abogado: es
notorio, que Horacio mató á su hermana; ya porque se su
pone enterado el juez por la oracion del acusador; ya porque,
atendido el órden, y serie del hecho, está de parte del con
trario. Por el contrario el reo omite la narracion quando el he
cho no se puede negar, consistiendo la causa en la razon, y
motivo, con que se hizo : como quando á uno, que hurtó di
nero de un lugar sagrado, le acusan de sacrilegio. Aquí mé
nos vergüenza cuesta el confesar el hecho, que el hacer una
narracion. No se niega, dirá, que se robó el dinero , que es
a

runt: quod falsum esse pluribus coar peto ex stipulatione; legatum peto ex
guitur. Suntenim ante omnia quaedam testamento. Diversae partis expositio est;
tam breves causae, ut propositionem po cur ea non debeantur. Et satis estacto
tius habeant, quam narrationem. ri, et magis expedit sic indicare : dico
Id accidit aliquando utrique parti, ab Horatio sororem suam interfectam.
cum vel nulla expositio est, vel de re Namque, et cum propositione judex cri
constat, de jure quaeritur; ut apud Cen men omne cognoscit, et ordo, et cau
tumviros : filius an frater debeat esse sa facti pro adversario magis est. Reus
intestato haeres. Aut cum est quidem contra tunc narrationem subtrahit, cum
narrationi locus , sed aut ante judici no id quod objicitur, nec negari, nec ex
ta sunt omnia , aut priore loco recte cusari potest , sed in sola juris quae
exposita. stione consistit, utin eo, qui cum pecu
Accidit aliquando alteri , et saepius niam privatam ex aede sacra surripuit,
actori causae; vel quia satis est propo sacrilegii reus est : confessio verecun
nere, vel quia sic magis expedit. Satis dior est, quam expositio. Won negamur
est dixisse : certam creditam pecuniam pecuniam de templo es se rublatam, Calu
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 2I 5
taba en el templo. Pero se le calumnia á mi parte, que es reo
de sacrilegio, no siendo el dinero del templo, sino de un par
ticular. Y así debeis sentenciar ahora si esto es sacrilegio.
Pero así como soy de opinion, que en estos lances puede
omitirse la narracion , así no convengo con los que dicen, que
no la hay, quando el reo niega solamente lo que le imputan.
Esto sigue Cornelio Celso, y añade que no hay narracion sino
quando comprehende una suma del delito.
Mas yo siguiendo á otros graves autores juzgo, que en los
pleytos ocurren dos maneras de narracion: una de la causa,
otra de cosas que á ella miran. Si uno no hizo la muerte, no
se necesita narracion ninguna ; en lo que convienen todos.
Pero con todo deberá hacerse otra, y tal vez por extenso, de
los argumentos que hay de ser así; de la vida pasada del reo;
de los motivos que puedan haber influido, para ponerle en tal
aprieto; y de otras causas, y razones, que hacen increible el
atentado. Mas el acusador no solo dice: hizo la muerte, sino
que la narracion es prueba de ello mismo. Como en las trage
dias, donde Teucro no solo acusa á Ulises de haber muerto
á Ayax, sino que dice, que se le vió, junto al cadáver con un
cuchillo en un lugar solitario. Mas Ulises, no solo niega el ho
micidio, sino que dice, que nunca tuvo enemiga, con él; y
que solo fuéron competidores sobre la alabanza: despues ex
pone los motivos, que le lleváron donde estaba el cadáver, y
= -

mniatur tamen accurator actione sacrilegii, minem ; nulla narratio est: convenit.
cum privata fuerit , non racra : vo, au Sed erit aliqua, et interim etiam lon
tem de boc cognoscitir, an racrilegium rit ga circa argumenta ejus criminis, de
admirrum. -

ante acta, vita, de causis, propter quas


Sed uthas aliquando non narrandi innocens in periculum deducatur, aliis
causas puto, sic ab illis dissentio , qui que quibus incredibile id, quod objicitur,
non esse narrationem existiment, cum fiat. Necenim accusator hoc tantum di
reus, quod objicitur, tantum negat. In cit, occidisti; sed quibus id probet, nar
qua est opinione Cornelius Celsus , qui rat: ut in tragoediis, cum Teucer Ulys
1non putat esse narrationem, nisi quae sem reum facit Ajacis occisi, dicens in
summam criminis, de quo judicium est, ventum eum in solitudine juxta exanime
continet. corpus inimici cum gladio cruento ; non
Ego autem , magnos alioqui secutus id modo Ulysses respondet, non esse à
auctores, duas esse in judiciis narratio se id facinus admissum, sed sibi nullas
num species existimo : alteram ipsius cum Ajace inimicitias fuisse , de laude
causae, alteram rerum ad causam per inter ipsos certatum. Deinde subjungit,
tinentium expositionem. Non occidi ho quomodo ineam solitudinem venerit, ja
v,
2 16 INSTITUCIONES ORATORIAS

que le obligáron á sacarle el cuchillo que tenía clavado; á lo


que sigue la confirmacion. Tampoco puede sin narracion de
cir el acusador: te encontráron donde estaba el cada ver de
tu enemigo; ni responder el reo: no estuve allí: pues debe
decir el lugar donde estuvo.
En las causas de sobornos, y estafas podrá del mismo mo
do haber tantas narraciones, quantos sean los delitos, de que
se acusa. Los quales se han de negar, y refutar los argumentos
del contrario por medio de una narracion enteramente contra
ria: unas veces todos juntos; otras cada uno de por sí. ¿Por
ventura el que es acusado de soborno, no podrá contar en abo
no suyo su linage, y nacimiento, su modo de vivir, y su por
te, y los méritos que le moviéron á entablar su pretension?
El que se supone reo de estafas ¿hará mal en poner la relacion
de su vida pasada, de los motivos, porque se ofendiéron los
súbditos en su gobierno, el acusador, y los testigos ? Si esto
no es narracion, ni tampoco lo será aquella primera, que ha
ce Ciceron en la defensa de Cluenció, que comienza : Aulo
Cluencio Habito &rc. en la que sin hacer mencion del veneno,
solo habla de los motivos , que influyéron en el aborreci s - ,

miento, que le tenia su madre.


Semejantes narraciones, aunque no son de la causa, mi
ran á ella: v.g. quando dice Ciceron contra Verres, hablan
do de L. Domicio, que este puso en cruzá un pastor, por
haber confesado, que mató con un venablo á un javalí, que

EEl

centem exanimem sit conspicatus, gla meritis fretus ad petitionem descenderife


dium è vulnere extraxerit. His subte Aut qui repetundarum insimulabitur, num.
xitur argumentatio. Sed ne illud quidem, et anteactam vitam , et quibus de cau
sine narratione est, dicente accusatore; sis , vel provinciam universam. , vel
fuisti in eo loco, in quo tuus inimicus accusatorem, aut testem offenderit, non
occisus est: non fui. Dicendum enim u utiliter exponet ? Quae si narratio non
bi fuerit. - est, ne illa quidem Ciceronis pro Cluen
Quare ambitus quoque causae, et re tio prima, cujus est initium: A. Cluen
petundarum hoc etiam plures ejus modi tiur Habitur. Nihil enim hic de venefi
narrationes habere poterunt, quo plura cio, sed de causis, quibus ei mater ini
crimina. In quibus ipsa quidem neganda mica sit, dicit.
sunt, sed argumentis expositione , con Illae quoque sunt pertinentes ad cau
traria resistendum, et interdum singu sam , sed non ipsius causae narrationes,
lis, interdum universis. An reus ambi vel exempli gratia , ut in Verrem de
tus male narrabit, quos parentes habue L. Domitio , qui pastorem , quod is a
rit, quemadmodum ipse vixerit, quibus prum , quem ipsi muneri obtulerat, ex
DE Mr. FABIo QUINTILIANo. LIB. Iv. 217
ántes le habia regalado. O quando se hacen para rebatir, y
refutar alguna calumnia, como en la defensa de Rabirio Pos
thumo: Pues luego , que llegó al rey Auletes en Alexandría,
ó jueces, el medio que propuso el rey á Rabirio para conser
var el tesoro real, fué que se encargase del cuidado, y ma
yordomía del real palacio. O quando se agraba el delito,
como quando se cuenta el viage de Verres, - -

Alguna vez suele introducirse alguna narracion fingida, ó


para mover á los jueces, como en la defensa de Roscio contra
Chrisógono; ó para mitigarlos con alguna chistosa relacion,
como en la de Cluencio contra los hermanos Cepasios; ó por
mero adorno, y digresion, como la de Proserpina contra Verres:
En estos mismos lugares dicen, que buscó la madre a la hi
ja. “Todo lo qual se endereza á dará entender, que no
dexa de contar el que niega, sino que niega lo mismo que
Cllenta. -

Ni tampoco se ha de entenderá la letra lo que dexamos


dicho, que quando está el juez enterado de la cosa , se ha
de omitir su narracion. Debe entenderse quando no solo sabe
la cosa, sino del modo que nos acomode. Porque no mira úni
camente la narracion á enterar al juez, sino mucho mas á
que sienta como queremos. Y así aunque no haya que infor
marle, sino solo mover en él algun afecto, contaremos la co
sa para prepararle: diciendo, que aunque ya tiene una noti
cia general del caso, no debe llevará mal el saberla por me
=E a

ceptum esse à se venabulo confessus es— se dicitur. Quae omnia eo pertinent, ut


set, in crucem sustulit. Vel excutiendi appareat, non utique non narrare eum,
alicujus extrinsecus criminis, ut pro Ra qui negat: sed illud ipsum narrare quod
birio Posthumo : IVam ut ayentum Alexan negat.
driam estad Auletem , 3°udices , baec una Ne hoc quidem simpliciter accipien
ratio a rege proporita Posthumo est ser dum , quod est à me positum , super
vandae pecuniae, si curationem , et quasi vacuam esse narrationem rei, quam ju
dispensationem regiam ruscepisset. Vel au dex noverit. Quod sic intelligi volo, si
gendi, ut describitur iter Verris. non modo factum quid sit, sciet; sed
Ficta interim narratio introduci so ita factum etiam , ut nobis expedit, o
let, vel ad concitandos judices, ut pro pinabitur. Neque enim narratio in hoc
Roscio contra Chrysogonum ; vel ad reperta est, ut tantum cognoscat judex,
solvendos aliqua urbanitate , ut pro sed aliquanto magis ut consentiat. Qua
Cluentio contra fratres Cepasios: inter re etiamsi non erit docendus, sed ali
dum per digressionem decoris gratia, quo modo aficiendus, narrabimus cum
qualis rursus in Verrem de Proserpina: praeparatione quadam. Seire quidem
In bis quondam locis mater filiam quaesis eum in summa quid actum sit, tamen
ToM. L. Ee
2 I8 - INSTITUCIONES ORATORIAS

nor. Alguna vez fingiremos repetir la narracion, para que


alguna persona, que ha entrado de nuevo á ser juez, quede
enterada : otras veces para que todos conozcan plenamente
la mala intencion del contrario en pintar la cosa. Pero entón
ces es necesario variar con diversas figuras la narracion, para
evitar el fastidio de oir lo que ya se sabe. Ya te acuerdas.
Acaso parecerá ocioso detenernos en esto. Pero ¿ para qué me
detengo en referir lo que ya sabeis ? Qual sea el caso ya lo
sabrás , &rc. Y si fuese siempre ociosa la narracion de lo que
ya sabe el juez, tampoco será necesaria siempre la defensa de
una cosa , cuya justicia conoce.
II... Hay otra qüestion sobre si la narracion debe seguir
inmediatamente al exórdio. Los que dicen que sí, parece no
les falta razon para ello. Porque como el exórdio hace al juez
atento, dócil, y benévolo, y no se puede probar una cosa,
de que aun no tiene noticia , pide el órden natural, que se
le dé un previo conocimiento de ella. -

Pero aun esto se varía segun las diversas causas: á no de


cir, que Ciceron no tuvo motivo en dilatar la narracion, po
niendo primero tres dudas, á las que satisface en la oracion en
defensa de Milon, que publicó, y son estas. O hubiera sido me.
jor el contar el modo, con que Clodio armó asechanzas á Milon,
si no hubiera sido lícito defenderá un reo, que confesaba ha
ber hecho un homicidio; ó si estuviera condenado Milon por
- -an

rationem quoque facti cujusque cogno subjicienda. Quod qui opinantur, non
scere ne gravetur. Interim propter ali possunt videri nulla ratione ducti. Nam.
quem in consilium adhibitum nos repe cum prooemium idcirco comparatum
tere illa simulemus : interim ut rei, sit, ut judex ad rem accipiendam fiat
quae ex adverso proponatur, iniquitatem conciliatior , docilior, et intentior; et
omnes etiam circumstantes intelligant. probatio, nisi causa prius cognita , non
In quo genere plurimis figuris erit va possit adhiberi : protinus notitia rerum
rianda expositio ad effugiendum taedium instruendus videtur.
nota audientis: sicut, meministi. Et, for Sed hoc quoque interdum mutat con
ras re supervacuum fuerit bic commorari. ditio causarum : misi forte Marcus Tul
Jed quid ego diutius, cum tu optime no lius in oratione pulcherrima, quam pro
ris? Illud quale sit, tu rcias. Ethis si Milone scriptam reliquit, male distu
milia. Alioqui si apud judicem , cuI nota lisse narrationem videtur tribus praepo
causa est, narratio semper videtur su sitis quaestionibus: aut profuisset expo
pervacua , potest videri non semper es nere , quomodo insidias Miloni fecisset
se etiam ipsa actio necessaria. Clodius , si reum , qui à se hominem
II. Alterum est de quo frequentius occisum fateretur , defendi omnino fas
quaeritur, an sit utique narratio prooemio non fuisset: aut si jam praejudicatione
DE M. FABIo qUINTILIANo. LrB. Iv. 2.19
el juicio anterior del senado; ó si tuviese por contrario á Pom
peyo, que para ganarse á los jueces, había acordonado la cu
ria con gente armada. Todas estas tres qüestiones hacian de
exórdio, pues en ellas se preparaban los ánimos. De otra ma
nera entabló la narracion despues en la causa de Murena, des
vaneciendo las objeciones del contrario. Este medio será útil
quando no solo hay que refutar, y negar el delito, sino tam
bien acumulársele al contrario; para que defendiéndonos pri
mero de él, haya motivo de imputársele, quando demos prin
cipio á la narracion. Pues en el órden natural primero es de
fenderse, que ofender.
Causas habrá (y no serán pocas) en las que será fácil el
refutar el delito de que se trata, pero por otra parte estarán
complicadas con mil delitos de la vida anterior: los que es
necesario primeramente negar, para preparar el ánimo del
juez, y hacerle propicio en la causa presente. Por exemplo,
si tenemos que defenderá M. Celio, ¿no desvaneceremos pri
mero las calumnias que le levantáron, de que era luxurioso,
desvergonzado, y poco recatado, ántes de entrar en la del ve
neno, á los quales solamente se reduce la defensa de Cice
ron ? ¿no contaremos poco á poco las virtudes, que le ador
naban, ántes de meternos en la defensa de lo que se le
atribuía ? -

III. Veamos ahora las leyes de la narracion; la que no es


otra cosa , que la relacion de una cosa sucedida, ó tenida por

senatus damnatus esset Milo: aut si Cn. ciles ad diluendum , sed et multis an
Pompejus, qui propter aliquam gratiam teactae vitae flagitiis, et gravibus cri
judicium militibus armatis clauserat, minibus oneratae; quae prius amovenda
tanquam adversus existimaretur. Ergo Sunto ut propitius judex defensionem i
hae quoque quaestiones , vim prooemii psius negotii, cujus propria quaestio est,
obtinebunt, cum omnes judicem praepa audiat : ut si defendendus est M. Cae
raverint. Sed aliter pro L. Murena post lius , nonne optime patronus occurrat
ea quoque narravit, cum objecta diluit. prius convitiis luxuriae, petulantiae, im
Quod fiet utiliter , quoties crimen non pudicitiae , quam veneficii, in quibus
repellendum tantum , sed etiam transfe solis omnis Ciceronis versatur oratio? tum
rendum erit, ut prius his defensis, ve narret de bonis paulatim , totamoue deiu
lut initium sit aliud culpandi narratio: explicet causam , quae est ipsius actione
ut in armorum ratione antiquior caven defensa? -

di, quam ictum inferendi cura est. III. Nunc quae sit ratio narrandi,
Erunt quaedam causae (nec id raro) subjungam. Narratio est rei factae, vel
crimen quidem de quo cognitio est, fa ut factae, utilis ad persuadendum ex-.
Ee 2
22 O INSTITUCIONES ORATORIAS

tal, útil para la persuasion. O, como la define Apolodoro,


es una exposicion, que informa á los oyentes de la causa.
La mayor parte de los retóricos, en particular los se
quaces de Isocrates, quieren que sea clara, breve, y verisí
mil ; cuya division me agrada, aunque Aristoteles se burla de
la brevedad, que pone Isocrates, como si el ser la narracion
larga, ó breve, fuese cosa precisa, y no admitiese medio. Los
discípulos de Teodoro solo quieren, que sea verisímil, porque
no siempre conviene ser claro, y corto en las narraciones. Asi uno,
y otro necesita de mas explicacion, para ver lo que conviene.
O la narracion toda ella nos favorece á nosotros, ó á los
contrarios, ó en parte á nosotros, en parte á ellos.
1? Quando nos favorece, contentémonos con aquellas vir
tudes, con las que conseguimos el informar al juez, el re
cordarle la memoria, y el que nos crea lo que decimos. Y na
die extrañe, que hayamos dicho debe ser verisimil la narra
cion, que favorece á nuestra causa, quando esta es verdade
ra. Cosas hay, que siendo verdaderas, se hacen poco creibles;
y otras falsas por todos quatro costados, pero no se hacen in
creibles. Por donde no ménos debemos trabajar, para que el
juez crea lo cierto, que lo que fingimos serlo.
Las virtudes puestas arriba miran tambien á las demas
partes del discurso. En todas debemos evitar la obscuridad, y
prolixidad, cuidando de que sea probable quanto alegamos.
* - - - º - -

-E Eº

positio. vel (ut Apollodorus finit) oratio tota pro adversariis, aut mixta exutrisque.
docens auditorem , quid in controver- I. Si erit tota pro nobis, contenti
sia sit- simus iis tribus partibus, per quas efi
Earn plerique scriptores, maxime qui citur, quo judex facilius intelligat, me
sunt ab ISocrate, volunt esse lucidam, minerit, credat. Nec quisquam repre
brevem, verisimilem. Eadem nobis pla hensione dignum putet, quod proposue
cet divisio: quanquam, et Aristoteles ab rim eam, quae sit tota pro nobis, de
Isocrate parte in una dissenserit, prae bere esse verisimilem , cum vera sit.
ceptum brevitatis irridens, tanquam ne Sunt enim plurima vera quidem , sed
cesse sit longam aut brevem esse expo parum credibilia , sicut falsa quoque fre
sitionem , nec liceat ire per medium. quenter verisimilia. Quare non minus
Theodorei quoque solam relinquunt ul laborandum est, ut judex , quae vera
timam partem , quia nec breviter uti dicimus, quam quae fingimus, credat.
que, nec dilucide semper sit utile ex Sunt quidem hae, quas supra retuli,
ponere. Quo diligentius distinguenda sunt virtutes, aliarum quoque partium. Nam,
singula, ut quid quoque loco prosit, o et per totam actionem vitanda est ob
stendam. scuritas, et modus ubique custodiendus,
Narratio est, aut tota pro nobis, aut et credibilia esse oportet omnia, quae di
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. T. 22 I

De lo que debemos cuidar sobre todo, quando comenzamos á


informar á los jueces: porque si entónces, ó no nos entien
den, o se confunden en la causa, ó no nos creen, lo demas
del discurso será trabajo perdido.
La narracion pues será clara, si constando de palabras pro
pias, y claras, se evitaren las desusadas, indecorosas, y ex
trañas. Si no se confundieren las circunstancias de las cosas,
personas, tiempos, y lugares, y causas : y si todo se dixere
con tanta claridad, que al juez no le quede la menor duda.
Muchos son los que faltan á esta ley; los quales acomo
dándose á los clamores de una multitud, que ellos mismos
juntáron como con reclamo, ó que casualmente se juntó para
oirlos, no pueden sufrir el silencio con que los oyen ; ni les
parece que hablan bien, si todo el auditorio no los aplaude
con palmadas, y desentonadas voces. Les parece, que el ex
plicar la cosa con lisura, y sencillez, es propio de gente vul
gar, y rústica: aunque no distinguirás fácilmente si el des
preciar esto, que ellos tienen por cosa fácil, nace de no que
rer, ó de no poder conseguirlo. Porque de quantas cosas ha
en la retórica, que nos enseña la experiencia ser dificultosas,
no hay otra que lo sea mas, que lo que qualquiera piensa,
que él lo diria tambien, pero despues de haberlo oido; pues
aunque lo tienen por cosa verdadera, reprueban como mala
la narracion. " Pero nunca habla mejor el orador, que quan
do parece hablar con verdad. Mas estos tales, quando entran,
\

-E ES

cuntur. Maximeque haec in ea parte etiam forte circumfusae multitudinis


custodienda sunt, quae prima judicem compositi, non ferunt illud intentionis
docet: in qua si acciderit, ut aut non silentium , nec sibi diserti videntur, ni
intelligat, aut non meminerit, aut non si omnia tumultu, ac vociferatione con
credat, frustra in reliquis laborabimus. cusserint : rem indicare, sermonis quo—
Erit autem a perta narratio , atque tidiani, et in quemcumque etiam indo
dilucida, si fuerit primum exposita ver ctiorum cadentis esse existimant, cum
bis propriis, et significantibus, et non interim , quod tanquam facile conte
sordidis quidem, non tamen exquisitis, mnunt, nescias prestare minus velint, an
et ab usu remotis : tum distincta rebus, possint. Neque enim aiiud in eloquentia
personis, temporibus, locis, causis; i cuncta experti difficilius reperient, quam
psa etiam pronuntiatione in hoc accom id quod se dicturos fuisse omnes pu
modata , ut judex, quae dicuntur, quam tant, postquam auderunt; quia non bo
facilime accipiat. na, judicant esse il a , sed vera. Tum au
Quae quidem virtus negligitur à plu tem optime dicit orator, cum videtur
rimis, qui ad clamorem dispositae, vel vera dicere. At nunc velut campum na
222 INSTITUCIONES ORATORIAS

digamos así, en el campo de la narracion, aquí principalmen


te usan de las modulaciones de la voz, baxan la cabeza, hie
ren el costado con los brazos, y son desmesurados en todo, en
el órden de los pensamientos, de las palabras, y en la com
posicion: y (lo que es una monstruosidad) deleytando con la
pronunciacion, dexan la causa tan obscura, como al principio.
Pero dexemos este punto, por no grangearme mas disfavor,
reprehendiendo vicios, que favor, enseñando lo que conviene.
La narracion será breve, comenzándola desde donde con
viene para informar al juez, y no mas; si no se saliere del
asunto; si carece de toda superfluidad, omitiendo lo que no
importa ni para inteligencia, ni utilidad de la causa. Porque
hay cierta brevedad en las particularidades de la cosa , que
viene á hacer larga toda la narracion. Llegué al puerto , ví
la nave, pregunté quanto era el flete , nos ajustamos en el
precio, me embarqué, levantáronse las áncoras, deramos la
ribera, y nos partimos. Claro está, que ninguna de estas
menudencias se podia decir mas brevemente; pero con decir:
Salí del puerto, bastaba. Quando insinuada una cosa, ya se
entiende lo demas, contentémonos con esto. Si podemos decir:
Tengo un hijo ya jóven, ¿á qué cansar al auditorio, con decir:
Deseoso de tener hijos, me casé; nacióme un hijo, que , ha
biéndole criado , llegó a ser crecido ?
No ménos debe evitarse la obscuridad, que nace de con
tar la cosa muy por encima; pues mas vale pecar por carta

cti expositionis, hic potissimum , et vo tium brevitas, quae longam tamen effi
cem flectunt, et cervicem reponunt, et cit Summam. In portum veni, navim
brachium in latus jactant, totoque , et prosperi, quanti veheret interrogazi, de
rerum , et verborum, et compositionis pretio conveni, con rcendi , subatae runt
genere lasciviunt : deinde (id quod sit anchorae, rolvimus oram , provccti sumur.
monstro simile) placet actio, causa non Nihil horum dici celerius potest ; sed
intelligitur. Verum haec omittamus, ne suficit dicere: e portu navigavi. Et quo
minus gratiae praecipiendo recta, quam ties exitus rei satis ostendit priora, de
offensae reprehendendo prava , me bemus hoc esse contenti , quo reliqua
Teamur. intelliguntur. Quare cum dicere liceat:
Brevis erit narratio ante omnia, si Ert mihi filius juvenir: omnia illa su
inde coeperimus rem exponere, unde ad pervacua: Cupidus ego liberorum uxorem
judicem pertinet; deinde, si nihil ex duri, natum surtuli, filium educavi, in
tra causam dixerimus: tum etiam si re adolescentiam perduxi.
ciderimus omnia , quibus sublatis, nec Non minus autem cavenda erit, quae
cognitioni quicquam , nec utilitati de nimium corripientes omnia sequitur, ob
trahatur. Solet enim quaedam esse par scuritas ; satiusque est aliquid narratio
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. IV. 223
de mas, que el que falte algo á la narracion. Porque si el
ser superfluo, fastidia ; el omitir lo necesario, es peligroso.
Por tanto hemos tambien de evitar aquella concision de Sa
lustio, aunque en él tiene gracia; y aquella manera de de
cir tan cortada, que dado caso que al que lo lee con cuida
do, no se le esconda el sentido, pero al que oye, le dexa
en ayunas: porque el que está oyendo, no aguarda que se
lo repitan. Y esto tanto mas debe observarse, porque el que
lee un escrito, por lo comun es persona instruida ; pero los
jueces muchas veces vienen de sus granjas Ӈ sentenciar los
pleytos ; y solo darán la sentencia de lo que hubiesen enten
dido. De manera, que en toda la oracion, pero especialmen
te en la narracion, debe guardarse esta regla: no decir mas
ni ménos, de lo que conviene.
Y esto no quiero que se entienda precisamente de lo que
baste para insinuar la cosa; porque esta brevedad no debe
ser desaliñada; que entónces seria una rusticidad. A veces en
gaña el gusto con que se oye, y nos parece ménos larga en
tónces la narracion; así como el camino por terreno ameno, y
llano, aunque largo, cansa ménos, que otro mas corto, pero
duro, y áspero. Yo no tanto cuidaria de la brevedad, quan
to de no omitir nada de lo que hace verisimil la narracion.
Porque quando es muy sucinta, y hecha por encima, no tanto
se llama narracion, quanto confusion.
Hay muchas narraciones largas de su naturaleza; y entón
mamm

ni superesse, quam deesse. Nam super Quantum opus est autem , non ita
vacua cum taedio dicuntur, necessaria solum accipi volo, quantum ad indi
cum periculo subtrahuntur. Quare vi candum suficit, quia non inornata de
tanda etiam illa Sallustiana (quanquam bet esse brevitas , alioqui sit, indocta;
in ipso virtutis locum obtinet) brevitas, nam , et fallit voluptas, et minus lon
et abruptum sermonis genus, quod otio ga , quae delectant, videntur; ut amoe
sum fortasse lectorem minus fallit, au num , ac molle iter, etiamsi est spatii
dientem transvolat, nec dum repeta amplioris, minus fatigat, quam durum,
tur expectat: cum praesertim lector non arduumque compendium. Nec enim mi
fere sit nisi eruditus; judicem rura ple hi unquam tanta fuerit, cura brevitatis,
runque in decurias mittant, de eo pro ut non ea, quae credibilem faciunt ex
nuntiaturum, quod intellexerit: ut for positionem, inserivelim. Simplex enim,
taSSe ubique , in narratione tamen prae et undique praecisa , non tam narratio
cipue, media haec tenenda sit via di potest vocari , quam confusio.
cendi, quantum opus est, quantum sa Sunt porro multae conditione ipsa rei
tiS eSt. -

longae narrationes, quibus extrema (ut


1.

224 - INSTITUCIONES ORATORIAS


ces para su inteligencia debe llamarse, como he dicho, la aten
cion de los jueces en la última parte del exórdio, cuidando
lo posible el acortarla, para no fastidiarlos.
La acortaremos, dilatando para otra ocasion lo que po
damos, pero haciendo mencion de ello: v.g. Qué causas le
moviéron al homicidio, de quiénes se valió, cómo le executó,
lo diré en la confirmacion. Algunas veces se omiten algunas
circunstancias de la serie de la cosa : muere en fin Fulcino (di
ce Ciceron: ) porque omitiré algunas menudencias , que no
tienen que ver con la causa. Por Cecina , n. 1 I.
Para disminuir el fastidio, contribuye la division, como:
Diré lo que precedió al contrato, lo que sucedió en él , y lo
que pasó despues. De este modo estas tres narraciones pe
queñas serán mas tolerables, que una larga; y mucho mas si
las distinguimos con una advertencia: Oido ya lo que sucedió
hasta aquí, ved ahora cómo prosigue la cosa. De este modo
se recreará al juez con el fin de lo primero, y se le dispon
drá á oir lo segundo. -

Quando aun con estos remedios se hiciere larga la narra


cion, no será malo hacer una breve amonestacion, lo que usa
Ciceron aun en las cortas : Hasta ahora , ó Cesar , Ligario
está inocente. Salió de su casa, no solo sin intencion de hacer
la guerra , pero ni aun pasandole por el pensamiento, que
pudiera ofrecerse , &rc.
Será verisímil la narracion, sí primero consultamos nuestro
-EE =

praecepi) prooemii parte ad intentionem. ea. Ita tres potius modicae videbuntur
praeparandus est judex : , deinde curan narrationes , quam una longa. Interim
dum , ut omni arte, vel ex spatio ejus expediet expositiones brevi interfatione
detrahamus aliquid, vel ex taedio. distinguere. Audistir quae ante acta sunt;
Ut minus longa sit, eficiemus, quae accipite nunc quae in sequuntur. Reficietur
poterimus differendo , non tamen sine enim judex priorum fine, et se , velut
mentione eorum, quae diferemus: Quar ad novum rursus initium praeparabit.
causas occidendi babuerit, quos arrumpre Si tamen adhibitis quoque his arti
rit conscios , quemadmodum disposuerit in bus in longum exierit ordo rerum , erit
ridias, probationis loco dicam. Quaedam non inutilis in extrema parte corn moni
vero ex ordine praetermittenda , quale tio; quod Cicero etiam in brevi narra
est apud Ciceronem : Moritur Fulcinius. tione facit: Adhuc Caesar Qu. Ligarius
Multa enin, quae sunt in re, quia remo omni culpa caret : domo ert egres rar, non
ta Junt a causa , praetermit tam. modo nullum ad bellum, red me ad mini
At partitio taedium levat. Dicam mam quidem belli suspicionen, et caetera.
quae acta rint ante prum rei contractum, Credibilis autem erit, narratio ante
cticam , quae in re ipta , dicam quae post omnia , si prius consuluerimus nostrum
DE M.2 FABIo QUINTILIANo. LIB. Iv. 22 5
ánimo, para mo decir cosa, que se oponga á la naturaleza: si
insinuáremos de antemano los motivos, que hubo para suceder
las cosas que contamos, no de todas, sino de aquella, que se
pretende averiguar. Si pintamos las personas con aquellas pro
piedades, que hagan creible el hecho : v.g. Al reo del hur
to, codicioso; al adúltero, deshonesto; y temerario al homi
cida:
gar, yótiempo
al reves,
han side defendemos. Las circunstancias
quadrar igualmente. . . del lu •

Hay tambien cierta serie, y enlace de los sucesos, que


los hace creibles, como sucede en las comedias, y mimos. "
Pues hay ciertas cosas, que naturalmente son conseqüencias
unas de otras: como por exemplo, si hubieres contado lo pri
mero con verisimilitud, el juez esperará lo que sigue despues.
Ni será tampoco fuera del caso el hacer alguna reseña de
las pruebas, miéntras se cuenta la cosa, pero sea de manera,
que no se entienda ser confirmacion, sino narracion. Alguna vez
tambien insinuaremos brevemente la razon de lo que dixére
mos; como si se trata de haber dado uno veneno : Quando le
bebió, no tenia novedad, cayó al punto muerto en tierra, y
comenzó a hincharse, y amoratarse. -

Lo mismo hacemos, quando decimos por via de prepara


cion, que el reo era robusto, forzudo, armado , vígilante;
y su contrario indefenso, flaco, y desprevenido. En una pala
bra, tocaremos de paso todas aquellas circunstancias de per
sona, causa, lugar, tiempo, instrumentos, y ocasion, que des
pues hemos de tratar por extenso.

animum , ne quid naturae dicamus ad Ne illud quidem fuerit inutile, se


versum : déinde si causas, ac rationes mina quaedam probationum spargere:
factis praeposuerimus, non omnibus, sed verum sic, ut narrationem esse memi
de quibus quaeritur. Si personas conve nerimus, non probationem. Nonnunquam.
nientes iis, quae facta credi volemus, etiam argumento aliquo confirmabimus,
constituerimus, ut furti reum , cupidum: quod proposuerimus , sed simplici, et
adulterii, libidinosum : homicidii, te brevi : utin veneficiis, sanus bibit, sta
merarium. Vel contra , si defende tim concidit, livor, ac tumor confestim
mus. Praeterea loca, tempora , et si est insecutus.
milia. -

Hoc faciunt, etillae praeparationes,


Est autem quidam etiam ductus rei cum reus dicitur robustus, armatus, so
credibilis, qualis in comoediis, et in licitus , contra infirmos, inermes, se
rnimis. Aliqua enim naturaliter sequun curos. Omnia denique , quae probatione
tur, et cohaerent, ut si bene priora tractaturi sumus , personam , causam,
narraveris, judex ipse , quod postea sis locum , tempus , instrumentum , occa
narraturus, expectet. sionem, narratione delibabimus.
ToM. I.
s
226 INSTITUCIONES ORATORIAS

Si no pudiéremos valernos de las circunstancias, diremos


que la maldad, aunque, cierta, apénas se hace creible, y que
por lo mismo se hace mas enorme: que no sabemos el motivo,
ni el modo cómo se hizo; que aun á nosotros mismos nos pa
rece cosa extraña; pero que la probaremos á su tiempo. -

Las pruebas serán tanto mas convincentes, quanto mas di


simuladas: así Ciceron dice de antemano, y muy á su propó
sito, los motivos, que hay para que se haga mas creible ha
ber armado lazos Clodio á Milon, que Milon á Clodio. Tie
ne mucha fuerza aquella astuta imitacion de sencillez, y na
turalidad, con que dice Ciceron: Habiendo estado aquel mis
mo dia Milon en el senado, miéntras estuvo junto, se retiró
a su casa; mudó calzado, y vestido, y solo se detuvo, como
es regular , lo que bastó para que su muger se vistiese para
salir a la calle. ¡Qué bien pintado está en esta sencilla nar
racion, que Milon no se preparaba, ni andaba apresurado
Esto lo da muy bien á entender aquel diestro orador no so
lamente en la serie de la cosa, sino en la sencillez de los
términos tan caseros, y comunes, y con una arte muy disi
mulada : que si hubiera usado de lenguage mas remontado,
al juez, y aun al mismo defensor del contrario le hubiera
puesto en alerta. Y aunque alguno lo tendrá por una frial
dad, lo cierto es, que con ello embaucó al juez, quando apé".
nas merece la consideracion del que lo lee. ro
Esto es lo que hace probable la narracion: pues el que
necesite, que le digamos, que debe carecer de contradiccio
sus sem

Aliquando, si destituti fuerimus his, comparat, commoratus est., Quam nihil


etiam fatebimur vix esse credibile , sed praeparato, nihil festinato fecisse vide
verum, et hoc majus habendum scelus: tur Milo! Quod non solum rebus ipsis
nescire nos quomodo factum sit, aut vir eloquentissimus , quibus moras, et
quare; mirari: sed probaturos. lentum profectionis ordinem ducit., sed
Optimae vero praeparationes erunt, verbis etiam vulgaribus, et quotidianis,
quae latuerint, ut à Cicerone sunt qui et arte occulta consecutus est, quae si
dem utilissime praedicta omnia , per aliter dicta essent, strepitu ipsum judi
quae Miloni Clodius , non Clodio Milo cem, deinde patronum , excitassent. Fri
insidiatus esse videatur: plurimum ta gida videnturista plerisque: sed hoc i
men facit illa callidissima simplicitatis psum manifestum est, quomodo judicem
imitatio : Milo autem cum in renatu fefellit, quod vix à lectore deprehen
fuisset eo die quoad senatus est dimissus, ditur. -

domum venit; calceor, et vestimenta mu Haec sunt, quae credibilem faciunt


tavit: pauli, per dum te uxor , ut fit, expositionem. Nam ne contraria, aut si
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 227

nes, á este tal inútiles le serán los demas preceptos; aunque


no faltan retóricos, que lo previenen: como si fuera alguna
invencion nueva, y por ellos discurrida. -

Añaden algunos á las virtudes dichas la magnificencia, que


llaman megaloprepeia ; pero ni esta tiene lugar en todas las
causas (¿pues qué pompa de estilo pueden admitir la mayor
parte de los asuntos judiciales, que se reducen á deudas, al
quileres, entredichos, y cosas semejantes?) ni tampoco ven
dría al caso, como en el exemplo puesto de Milon. No nos
olvidemos, que hay muchas causas, en las que conviene ne
¿ confesar, y á veces rebaxar lo mismo que contamos en
o qual no ha lugar semejante magnificencia. Y no convinien
doménos á la narracion el ser compasiva, grave, suave,
cortés , y que haga tiro al contrario, que el ser magnífica
( todo lo qual cae muy bien á veces en las demas partes de
la oracion); no se ha de atribuir mas á esta, que á las otras.
Quiere tambien Theodectes, que no solamente sea mag
nífica la narracion, sino gustosa; virtud que conviene igual
mente á todo lo restante de un discurso. -

Algunos quieren que tenga evidencia, que llaman los grie


gos enargia. Ni quiero engañar á ninguno, ni disimu
lar, que aun Ciceron pone mas virtudes en la narracion;
pues quiere, que ademas de las dichas, que son claridad,
brevedad , y verisimilitud, tenga evidencia, conveniencia con
* - )».
º
”.
EEE as

----, ... - º * ---- º:- º * ---------

bi repugnantia in narratione dicamus, virtus, Quare non, magis proprium nar


si cui praecipiendum est, is reliqua fru rationis, est magnifice dicere, quam mi
stra docetur : etiamsi quidam scripto serabiliter, invidiose, graviter , dulci
res artium hoc quoque tanquam occul ter, urbane, quae cum suo quäeque lo
tum, et à se prudenter erutum, tradunt. co sint laudabilia, non sunt huic parti
His tribus marrandi virtutibus adji proprie assignata, et velut dedita.
ciunt, quidam magnificentiam , quam. Illa quoque ut, narrationi apta , ita
ºya Adare º aratav vocant : quae neque cum caeteris partibus communis est vir
in omnes causas cadit (nam quid in ple tus , , quam Theodectes huic uni proprie
risque judiciis privatis de , re certa cre dedit. Non enim magnificam modo vult
dita, locato, et conducto, interdictis, esse, verum etiam jucundam exposi
tiOnem.
habere loci, potest supra modum se tol
lens oratio?) mec semper est utilis, ut Sunt qui adjicianthis evidentiam,
vel proximo Miloniano exemplo patet. quae tra pyta graece vocatur. Neque e
Et meminerimus multas esse causas, in go quenquam deceperim, ut dissimulem
quibus confitendum , excusandum , sum Ciceroni quoque plures partes placere.
mittendum sit quod exponimus : quibus Nam praeterquam planam , et brevem,
omnibus aliena estilla magnificentiae et credibilem ; vult esse evidentem, mo
f2
228. INSTITUCIONES ORATORIAS

las costumbres, y dignidad. Pero en un discurso todas sus


partes deben corresponder á las costumbres, é ir acom
pañadas de la dignidad , en quanto sea posible. Evidencia
de la narracion, á lo que yo entiendo, consiste no solo en
decir la verdad, sino en hacer ver en cierto modo, que la
cosa es así. Por tanto puede reducirse á la claridad, la que al
gunos tienen por inconveniente en algunos casos, en que con
viene ocultar la verdad: lo que es una ridiculez; porque el
que quiere ocultarla, cuenta cosas falsas por verdaderas; y
el que cuenta una cosa, debe procurar el que parezca muy
evidente. . ... ,

2? Pero ya que por casualidad hemos venido á parar á


la especie mas dificultosa de narracion , digamos algo de
aquella, en donde la cosa es contra nosotros; en cuyo caso
dicen algunos que se omita. Ciertamente, que no hay otro
mejor medio, que dexar la defensa de la causa. Pero puesto uno
en la precision de defenderla. ¿qué habilidad tiene el confe
sar con el silencio, que tenemos mal pleyto?. A no suponer
tan negado al juez, que queramos sentencie á favor de lo mis
mo, que sabe que has callado de intento. No niego que hay
lances, en que así como es preciso negar, añadir , mudar,
así tambien lo es callar algunas cosas: pero solo callaremos
lo que conviniere, y estuviere en nuestra mano. Esto se ha
ce tambien. algunas veces Por brevedad: v.g. Respondió lo
que tuvo por conventenfe,
--- º * - º * --- - º* ---- ---

º- amemºse

: - fº, º .zi "i", er a en


raram, cum dignitate. Sed in oratione mo res contra nos erit : quo loco nonnulli
rata debent esse omnia; cum dignita praetereundam narrationem putaverunt.
te, quae poterunt. Evidentia in narra t sane nihil est facilius , misi prorsus
tione, quantum ego intelligo , est qui totam causam omnino non agere. Sed si
dem magna virtus, cum quid veri non aliqua juxta ratione hujusmodi suscepe
dicendum , sed quodammódo etiam o— ris litem , cujus artis est, malam esse
stendendum est, Sed subjici perspicuita causam silentio confiteri? Nisiforte tam
ti potest, quam quidam etiam comtra hebes futurus est judex, utº secundum
riam interim putaverunt, quia in qui id pronuntietº, quod sciet narrare te
busdam causis obscuranda veritas est: noluisse. Ncque inficias eo, in narratio
quod est ridiculum. Nam, qui obscurare ne, ut aliqua neganda, aliqua adjicien
vult, narrat falsa pro veris: et is, quae da, aliqua mutanda , sic aliqua etiam
narrat, debet laborare , ut videantur tacenda : sed tacenda , quae tacere o
quam evidentissima. portebit, et liberum erit. Quod fit non
2. Sed quatenus etiam forte quadam nunquam brevitatis quoque gratia , qua
pervenimus ad difficilius narrationum le illud est : Respondit quod ei vi
-genus, jam de his loquamur, in quibus Juni eff, , , -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 229
Es preciso distinguir los géneros de causas. Porque quan
do no se trata del delito, sino de la calificacion del hecho,
aunque la cosa no nos favorezca , debemos confesarla. Por
exemplo: Es cierto que robó el dinero del templo, pero era
dinero de un particular, y así no es reo de sacrilegio, Pero
aun en medio de esta confesion llana se puede rebaxar lo que
ponderó la malicia del contrario; así como aun nuestros es
clavos confiesan lo malo que hiciéron, pero disculpándolo en
parte. Otras cosas las disminuiremos, como dexando de con
tarlas: v. g. No le llevó al templo el deseo , é intencion de
robar, ni buscó tiempo , y ocasion para hacer su hecho, como
quiere el contrario ; sino que hallandole mal custodiado, se
deró arrebatar de la codicia del dinero; pues en arca abier
ta aun el justo peca. Pero al cabo ¿qué importa esto ? Co
metió el hurto. No es del caso defender el delito, quando el
reo no reusa que se le castigue. A veces haremos como que
condenamos la accion. - -

Alguna vez conviene preparar los ánimos de los jueces


con alguna proposicion adelantada , que favorezca la causa, y
luego hacer la narracion. Supongamos que todas las circunstan
cias de la causa condenan á tres hijos, que habiendo intentado
el parricidio, entráron por la noche donde dormia su padre,
cada uno de por sí, y no habiendo podido lograr su hecho, se
lo contáron despues que dispertó. Si en este caso el padre, que
despues los dexó herederos, los defendiese del parricidio, º

-au- -

Distinguamus igitur genera causa sentia custodum corruptus, et pecunia


rum. Nanque in quibus non de culpa quae nimium , quam in animis homi
quaeritur, sed de actione; etiamsi e num potest, victus est. Sed qui refert?
runt contra nos themata , confiteri no peccavit, et fur est. Nihil attinet id
bis licebit. Pecuniam de templo sustu defendere, cujus poenam non recusamus.
lit, sed privatam : non ideo sacrilegus Interdum quasi damnemus ipsi.
est. Verum in his quoque confessionibus Nonnunquam propositione praemu
est aliquid, quod ex invidia , quam ex miri potest causa , et deinde exponi.
positio adversarii fecit, detrahi possit, Contraria sunt omnia tribus filiis , qui
cum etiam servi nostri de peccatis suis in mortem patris conjurarant : fortiti
mollius loquantur. Quaedam enim qua nocte singuli per ordinem cum ferro cu
sinon narrantes mitigabimus. Non qui biculum intrarunt patre dormiente: cum
dem (utadversarius dicit) consilium fur occidere eum nemo potuisset, excitato
ti in templum attulit, nec diu captavit omnia indicaverunt. Si tamen pater,
ejus rei tempus : sed occasione, et ab qui divisit patrimonium , et reos parri
23o. INSTITUCIONES ORATORIAS

dixese de esta manera: Para cumplimiento de la ley basta el


que se acusa de parricidio á unos hijos, cuyo padre no solo
vive, sino que los defiende. No hace al caso el contar la serie
de la cosa, porque esto nada importa para la ley: pero si pe
dis de mí la confesion de mi falta, confieso que fuí riguroso
con ellos, y no les permití que manejasen de su patrimonio
ni un quarto, quando ya eran capaces de administrarlo. Y
despues dixera: A este atentado los moviéron otros , que te
nian padres mas indulgentes, pero siempre camináron en el
supuesto, como se ha visto despues , de que nunca podrian
salir con ello. Y si hubieran tenido otra intencion, no era po
sible descubrirlo, ni por medio del juramento , ni de la suer
te; pues cada uno hubiera cuidado muy bien el no descubrir
se. Todo esto último, digo, se oiria con ménos indignacion
hecha ya aquella primera salva. ,, , , ,, ,

Pero quando se trata de si se hizo la cosa, ó de qué ma


nera; si la narracion es toda contra nosotros, ¿cómo queremos
evitarla, sin faltar á lo substancial de la causa? Por exemplo:
hizo ya su narracion el acusador, pero no de modo que de
clarase solamente lo que pasó, sino que hizo la cosa odiosa, y
nos la puso en mal estado; juntáronse á esto las pruebas, y la
peroracion, que dexó llenos de indignacion á los jueces. Es muy
natural que el juez espere nuestra relacion. Si no la hacemos,
forzosamente creerá, que es cierto quanto dixo el contrario, y
en la forma que lo dixo. - . . . . . . .

A.

cidii defendit, sic agat: Quod contra le Omnia haec qualiacunque placidioribus
gem ruffieit , parricidium objicitur juve animis accipientur, illa brevi primae pro
nibur, quorum pater vivit , atque etiam li positionis defensione mollita.
beris ruir adert. Ordinem rei narrare qui At cum quaeritur, an factum sit,
dem nihil necerre est , cum ad legem ni vel quale factum sit, licet omnia con
bil pertineat: red ri confessionem, culpae. tra nos sint, quomodo tamen , evitare
meae exigitis ; ego fui pater durur, et expositionem salva causae ratione pos
patrimonii , quod jam melius ab bir ad sumus? Narravit accusator, nec ita, ut
ministrari poterat, tenax custor. Deinde quae essentacta, tantum indicaret: sed
subjicitur : stimulator ab iir quorum in adjecit invidiam , rem verbis exaspera
dulgentiorer parenter erant , semper ta vit , accesserunt probationes, peroratio
men eum habuirre animum , qui rit even incendit, et plenos irae reliquit. Expe
tu deprehen sus , ut occidere patrem non ctat naturaliter judex quid narretur à
por rent. Nec enim jurejurando opus fuis nobis. Si nihil exponimus , illa esse quae
re, ri alioqui hoc mentis babuirrent, nec adversarius dixit, et talia, qualia dixit,
forte, misi quod se quisque eximi voluerit. credat necesse est. -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 23 I

¿Y qué haremos en este caso? ¿hemos de decir lo mismo


que el contrario ? Si se trata solamente de la qualidad del he
cho, porque convenimos ya en que se hizo, la cosa, entónces
contaremos lo mismo que el contrario, pero de otro modo, ale
gando otros motivos, y razones, que moviéron á hacerla. Asi
mismo disminuiremos algunas cosas en la narracion: disculpa
remos la luxuria con el nombre de genio alegre, la avaricia
con el de parsimonia , y el descuido con el nombre de senci
llez. Nos ganaremos la clemencia del juez con el semblante,
voz, ademan, y modo de decir: pues á veces la misma con
fesion del delito suele moverá ternura á los oyentes.
Ahora pregunto yo: ó han de defender lo que no relatá
ron, ó no. Porque si ni lo defienden, ni lo relatan, perdiéron
ya el pleyto. Pero si lo han de defender, conviene el proponer
primero lo que despues hemos de probar con razones. ¿Y
porqué no apuntaremos tambien lo que se puede refutar ?
pues para conseguir esto, es necesario insinuarlo. Y si no ¿qué
otra diferencia hay entre la confirmacion, y narracion, sino que
esta no es mas, que una continua proposicion de las pruebas,
y la confirmacion una prueba congruente de la narracion?
Consideremos pues si esta narracion conviene que sea algo
difusa, y si debemos extendernos en ella á causa de la prepa
racion, y argumentos: argumentos, digo, no argumentaciones:
pues es muy útil el insinuar, que despues probaremos lo que
entónces contamos solamente; añadiendo, que en la primera

- -

Quid ergo? eadem exponemus? Sí At si defensuri sunt, proponere certe


de qualitate agetur , cujus tum demum plerunque id , quod confirmaturi sumus,
quaestio est, cum de re constat, eadem, oportet. Cur ergo non exponamus quod,
sed non eodem modo: alias causas, a et dilui potest? Ut hoc contingat, uti
liam, atque aliam rationem dabo. Ver que indicandum est. Aut quid inter pro
bis elevare quaedam licebit: luxuria hi bationem, et narrationem interest, nisi
laritatis, avaritia parsimoniae, negli quod narratio est probationis continua
gentia simplicitatis nomine lenietur. Vul propositio , rursus probatio narrationi
tu denique, voce , habitu, vel favoris congruens confirmatio?
aliquid, vel miserationis merebor. Solet Videamus ergo, num expositio haec
nonnunquam movere lacrymas ipsa con longior demum esse debeat , et paulo
fessio. verbosior praeparatione , et quibusdam
AtQue ego libenter interrogem, sint argumentis: argumentis dico , non ar
ne illi defensuri, quae non narraverint, gumentatione, cui tamen plurimum con
necne. Nam si neque defenderint, ne fert frequens affirmatio, efecturos nos
que narraverint, tota causa prodetur, quod dicimus: non posse vim rerum o

',
232 INSTITUCIONES ORATORIAS

exposicion de la cosa no se puede llegar á conocer toda su ver


dad; que esperen un poco de tiempo, y suspendan el juicio
por un breve rato, sin perder las esperanzas. Ultimamente no
se debe omitir nada de aquello, que puede contarse de distinto
modo, que el contrario lo relató. A no decir, que en seme
jantes causas son ociosos los exórdios ¿pues qué otra cosa con
seguimos con ellos, que el preparar el ánimo del juez para
lo que ha de oir? Lo qual nunca tiene mas uso, que quando
los jueces se hallan preocupados contra nuestra causa.
En las de congetura, donde se averigua el hecho solamen
te, la narracion no ha de ser de la cosa, que se busca, sino de
las que son indicio de ella. Lo que no referirá de una misma
manera el acusador, que el reo; pues aquel lo contará ha
ciendo sospechosa la cosa , y este desvaneciendo toda sos
pecha. I
Pero me dirán ”: hay algunas razones, que amontona
das sirven de algo, y por sí solas nada valen. Esta objecion
no se encamina á dudar, si se ha de usar de narracion , sino
de cómo se ha de hacer. Pues ¿qué impide el acumular en la
narracion lo que favorece á la causa? ¿el prometer que lo pro
baremos despues? ¿y aun el dividir la narracion, añadiendo las
Pruebas de lo primero, y pasar luego á lo demas?
Dígolo, porque no me quadra la opinion de que con el
mismo órden, con que sucedió la cosa, con ese mismo se debe
contar; sino del modo que mas acomode: para lo qual hay
- EE

stendi prima expositione : expectent, et nem habent. Quae cum accusator suspi
opiniones suas differant, et bene spe ciose narret, reus levare suspicionem.
rent. Denique narrandum est utique, debeat, aliter ab hoc, atque ab illo ad
quicquid aliter, quam adversarius expo judicem perferri oportet.
suit, narrari potest.; auteo etiam prooe At enim quaedam argumenta turba
mia sunt in his causis supervacua: quae valent: diducta , leviora sunt. Id qui
quid magis agunt, quam ut cognitioni dem non eo pertinet, ut quaeratur an
rerum accommodatiorem judicem fa narrandum , sed quomodo narrandum sit.
ciant? Atqui constat nusquarneorum es Nam , et congerere plura expositione
se majorem usum, quam ubi animus ju quis prohibet, si id utile est causae? et
dicis ab aliqua contra nos insita opinio promittere ; sed, et dividere narratio
ne flectendus est. nem, et probationem subjungere parti
Conjecturales autem causae, in qui bus, atque ita transire ad sequentia?
busde facto quaeritur , non tam saepe Nam me iis quidem accedo, qui Sern
rei, de qua judicium est, quam eorum, per eo putant ordine, quo quid actum
per quae res colligenda est, expositio sit, esse narrandum : sed eo modo, quo
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV, 233
varias figuras. Algunas veces fingimos, que se nos pasó por alto
una cosa, que luego decimos en mejor ocasion otras decimos,
que volveremos á contar parte de lo que hemos dicho, para
que la cosa se ponga mas en claro ; otras por último, habien
do ya contado la cosa, añadimos los motivos, que antecedié
ron á ella. Lo cierto es, que no hay ley, ni precepto que
prescriba el órden, que debe guardarse en la defensa. El mis
mo asunto, y las circunstancias dirán lo que conviene: pues
segun es la herida, así ha de ser su cura; y quando esta de
be dilatarse, basta el atarla. -

Tampoco condeno el repetir una misma cosa muchas ve


ces, como lo hizo Ciceron defendiendo á Cluencio; lo qual
en las causas de estafas, y otras implicadas no solamente se
permite, sino que debe hacerse: pues seria una locura dexar
lo que pide la causa por observar los preceptillos del arte. Es
ya costumbre, que la narracion anteceda, para que no ignore
el juez lo que se trata. ¿Pues porqué no se contará cada cosa
de por sí, quando hemos de probarla, ó refutarla separada
mente? Qualquiera que sea el mérito de mis experiencias, de
mí sé decir, que muchas veces lo he observado en el foro, y
merecí la aprobacion de los inteligentes, y jueces; y no pocas
veces me encomendáron algunos el disponer la defensa, y ór
den, que debían guardar en sus pleytos. Esto no lo digo por
arrogancia; pues vivos estan algunos, que me darian con la
-

expedit. Quod fieri pluribus figuris licet. iam necessarium, ut in causis repetun
Nam , et aliquando excidisse simulamus, darum, omnibusque quae simplices non a
cum quid utiliore loco reducimus: et in sunt. Amentis estenim superstitione prae.
terim nos reducturos reliquum ordinem ceptorurn contra rationem causae trahi.
testamur, quia sic futura sit causa luci Narrationem, ideo ante probationes po
dior. Interim, re exposita , subjungimus nere est institutum , ne judex, qua de
causas, quae antecesserunt. Nec enim est re quaeratur, ignoret. Cur igitur, si
ulla lex defensionis, certumque prae singula probanda, aut refellenda erunt,
scriptum. Pro re, pro tempore, intuer non singula etiam narrentur 2 Me certe,
da quae prosint : atque ut erit vulnus, quantacunque nostris experimentis ha
ita vel curandum protinus; vel, si cu benda estº fides , fecisse hoc in foro,
¿ differri potest, interim deligan
Ll ITl.
quoties ipsa desiderabat utilitas, pro
bantibus, et eruditis, et iis, quí judi
- Ne saepius narrare duxerim nefas, cabant, Scio : et (quod non arroganter
quod Cicero pro Cluentio fecit : estque dixerim , quia sunt plurimi quibuscum
tion concessum modo, sed aliquando et egi, qui me refellere possint, si men
ToM. I , Gg
234 INSTITUCIONES ORATORIAS

mentira en los ojos, si mintiera; porque me acompañáron en


el exercicio del foro. Esto no quita que por lo comun siga
mos el órden natural; porque hay cosas, que el invertirlas, es
un yerro enorme: como si dixéramos primero que parió, y
luego, que antes habia concebido ; que se abrió el testamen
to, y despues , que primero se habia cerrado. En este caso
conviene callar lo segundo. -

Hay algunas narraciones falsas, de las que hay dos espe


cies en las causas forenses. Una fundada en los instrumentos,
como quando dice Clodio confiado en los testigos, que en el
tiempo en que le acusaban haber cometido el incesto en Roma,
estaba él en Ponte Corvo. La otra, que depende de la habili
dad del orador. -

De qualquiera de las dos que nos valgamos, lo que se


finja sea verísmil en primer lugar, y ademas de eso corres
ponda á las circunstancias, y guarde tal órden, que se haga
creible por último, si es posible, tenga trabazon lo que fingi
mos con alguna cosa verdadera, y se pueda probar con alguno
de los argumentos de la causa. Porque si todo lo que deci
mos no tiene ninguna relacion con ella, descubrimos nuestra
Inmentlra. . . . . . .

Sobre todo debe evitarse un vicio harto comun en los que


fingen, y es el que no se les escape alguna contradiccion. Por
que hay ciertas cosas, que oidas en si, lisongean al oido, pe
ro despues no dicen bien con el todo. Ademas de esto no han
- ---- - - º* --

=ma

-
, tiar) fere ponendae à me causae oficium quod est tuendum dicentis ingenio.
exigebatur. Neque ideo tamen non sae Sed utrumcunque erit, prima sit cu
pius facere oportebit, ut rerum ordinem rarum , ut id quod fingimus , fieri pos
sequamur. Quaedam vero etiam turpi sit: deinde, ut, et personae, et loco, et
ter convertuntur: ut si peperISSe narres, tempori congruat, et credibilem ratio
deinde concepisse : apertum testamen nem, et ordinem habeat : si contingat
tum , deinde signatum. In quibus, si id etiam, ut verae alicui rei cohaereat, aut
quod posterius est dixeris, de priore ta argumento, quod sit in causa , confir
cere optimum est. metur. Nam quae tota extra rem peti
Sunt quaedam, et falsae expositiones, ta sunt, mentiendi licentiam produnt.
quarum in foro duplex est genus. Alte: Curandum praecipue (quod fingenti
rum, quod instrumentis adjuvatur; ut bus frequenter accidir) ne qua inter se
Publius Clodius fiducia testium , qua pugneut. Quaedam enim partibus blan
nocte incestum Romae commiserat, in diuntur, sed in summam non consen
teramnae se fuisse dicebat. Alterum, tiunt. Praeterea, ne iis, quae vera es
...”
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 235
de ser repugnantes á lo que conocidamente es verdadero. Debe
tambien el orador no olvidarse en lo restante de la oracion
de lo que ha fingido, porque fácilmente suele borrarse lo que
no se funda en verdad; y es muy verdadero el dicho comun:
que el mentir pide memoria. . . . .
Ya que finjamos, sea cosa que no pueda contradecir algun
testigo: porque hay cosas que podemos fingir á nuestro an
tojo, como que nosotros solos lo sabemos; otras de que solo
tuviéron noticia, ó, pudiéron tenerla los que ya muriéron; y
entónces nadie nos desmentirá; ó uno á quien favorece igual
mente que á nosotros la mentira, el qual no hay miedo que
lo niegue : y aun alguna vez podemos fingir cosa que el con
trario sabe ser falsa, pero sea quando estamos seguros, que
á él no se le ha de dar crédito. Si lo que fingimos tiene visos
de sueños, y supersticion, es cosa muy liviana, para que ten
ga valor. . .. ). . . "

No basta dar buenos coloridos á la cosa en la narracion,


si no los conserva en toda la causa : mucho mas quando la
mayor prueba de una verdad, es que siempre aparezca cons
tantemente la misma. Como aquel truan, que dice ser hijo
suyo un jóven extrañado tres veces, y dado por libre por un
hombre rico ; tendrá algun honroso título, para probarlo, di
ciendo, que la pobreza le movió á exponerle, y el tener su
hijo en casa de aquel, le obligó á mil truhanerías; y que por
lo mismo, que no era padre suyo el rico, le habia extrañado
-------------------, ----
m-Es- =

se constabit, adversa sint. Orator autem psa jam facilitate auctoritatem perdi
meminisse debebit actione tota, quid fin derunt. . ..
xerit, quoniam solent excidere quae fal Non est satis in, narratione uti colo
sa sunt: verumque estillud, quod vul ribus , misi per totam actionem consen
go dicitur, mendacem memorem esse o-. tiant; cum praesertim quorumdam pro
portere. y
batio sola sit in asseveratione, et perse
Fingenda vero meminerimus ea, quae verantia: utille parasitus, qui ter ab
mon cadent in testem. Sunt autem, quae dicatum à divite juvenem, et absolu
nostro dicuntur animo, cujus ipsi tan tum , tanquam suum filium asserit, ha
tum conscii sumus. Item quod à defun bebit quidem colorem , quo dicat, et
ctis: necenim hoc est, qui neget. Item paupertatem sibi causam exponendi fuis
quae ab eo, cui idem expediet: is enim se, et ideo à se parasiti personam esse
mon negabit. Ab adversario quoque: quia susceptam , quia in illa domo filium ha
non est habiturus in negando fidem. beret; et ideo illum innocentem ter ab
Somniorum , et superstitionum colores i dicatum, quia filius abdicantis non esset.
Gg2
236 , INSTITUCIONES ORATORIAS º

sin motivo alguno. Porque si no manifestára en todo un ar


dentisimo amor de padre, el odio de aquel hombre rico, y
el miedo por un hijo, que sabe se halla en tanto peligro, por
estar en una casa, donde tanto le aborrecen; si todo esto, di
go, no lo pinta con vivos colores, caerá en sospecha de que es
un engañador; y que pretende lo que no es suyo.
3? Quando la narracion en parte nos favorece, y en parte
no, entonces la causa dirá, si se ha de dividir, ó no. Porque
quando lo que nos daña es mucho mas, lo que nos favo
rece, quedará confundido, y no hará bulto. En este caso con
vendrá partir la narracion , referir, y ponderar largamente lo
que hace á nuestra causa, y contra lo demas valernos de los
medios dichos. Si lo que nos favorece es mas que lo que nos
daña, haremos seguida la narracion, pero confundiendo lo úl
timo con lo primero, para que tenga ménos fuerza. Pero
esta narracion no ha de ser desnuda, sino que la vestiremos con
algunas razones, que aseguren lo uno, y hagan ménos crei
ble lo otro: pues no haciendo esta distincion, puede temerse,
que lo bueno se eche á perder con lo malo, á que va junto,
IV. Suelen tambien decir, algunos, que no tenga digre
siones la narracion; que apartando el orazonamiento del juez;
no se dirija á otra cosa; que no introduzcamos hablando á otras
personas ; y que no se muevan qüestiones. Otros añaden, que
no conste de afectos. Todo lo qual debe observarse comun
*.. - - - .. . . .. - º

- ------- ---- º s º * x. - º * ---ss


-

Nisitamen omnibus verbis, et amorem pra dictum est. Si plura proderunt, et


patrium, atque hunc quidem ardentissi iam conjungere licebit quae obstant, ut
mum ostenderit; et odium divitis, et in medio, velut auxiliis nostris, posita,
metum pro juvene , quem periculose minus, habeant virium. Quae tamen non
mansurum in illa domo, in quatamin erunt nuda ponenda , sedut , et mostra
visus sit, sciat; suspicione subjecti peti aliqua argumentatione firmemus, et di
toris non earebit. versa, cur credibilia non sint, adjicia
- 3: Quod si pars expositionis pro no mus: quia misi distinxerimus , veren
bis, pars contra nos erit, miscenda sit, dum est, ne bona mostra permistis ma
an separanda narratio, cum ipsa causae lis inquinentur.
conditione deliberandum est. Nam si plu IV. Illa quoque de narratione prae
ra sint quae nocent, quae prosunt ob cipi solent, ne qua ex ea fiat excursio,
ruentur. Itaque tune dividere optimum me avertatur à judice sermo , ne alienae
erit, et iis, quae partem nostram adju personae vocem demus, ne argumente
vabunt, expositis, et confirmatis, ad mur: adjiciunt quidam etiam , ne uta
versus reliqua uti remediis, de quibus su mur afectibus. Quorum pleraque sunt

º
e
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 237
mente; ó por mejor decir, nunca se ha de omitir, si alguna
causa no obliga, para que la narracion quede clara, y breve.
Por lo que hace á la digresion, ninguna cosa puede te
ner ménos entrada que ella: y si hiciéremos alguna, sea muy
breve, y tal, que manifestemos que nos ha obligado á ello
un afecto poderoso. Así Ciceron con las bodas de Sasia:
¡ O maldad increible de muger, y nunca vista, sino en esta
ocasion ! ¡O liviandad desenfrenada, y sin límites! ¡O atre
vimiento sin igual! ¡No haber temido, ya que no el rigor de
los dioses, y lo que diria el mundo, á lo ménos aquella no
che, aquellas teas nupciales, aquel aposento, donde habia de
dormir, el lecho de la hija, y las paredes , que fuéron testi
gos de las bodas antecedentes ! (Pro Cluention. 15) -

Alguna vez el apartar el razonamiento de la persona del


juez, siendo por muy poco tiempo, declara con mas breve
dad la cosa, y sirve para reprehender con mas viveza. Y así
digo lo mismo del exórdio , y de las prosopopeyas : pues
no solamente lo practicó así Servio Sulpicio defendiendo á
Aufidia, quando dice: ¿ Diré que estuviste dormido, ó posei
do de un profundo letargo º sino tambien el mismo Ciceron,
hablando de los capitanes de navío, pues allí hace una expo
sicion de la cosa: Si quieres ver al hijo, has de dar tanto.
En la oracion de Cluencio, aquel coloquio de Estaleno, y Bul
bo ¿no contribuye muchísimo á hacer verisimil la narracion,
y hacer creible la cosa? Y para que se vea , que no lo hi
=M-

frequentissime custodienda , imo nun- rietes denique ipsos ruperiorum terter nu


quam, nisi ratio coegerit, mutanda , ut ptiarum! ,

sit expositio perspicua, et brevis. Sermo aversus à, judice , et brevius


Nihil quidem tam raro poterit habe indicat interim, et coarguit magis. Qua
re rationem , quam excursio: nec, un de re idem, quod de prooemio dixeram,
quam debebit esse misi brevis, et talis, sentio; sicut de prosopopeia quoque: qua
ut vi quadam videamur afectus velut tamen non Servius modo Sulpitius uti
l recto itinere depulsi; qualis est Cicero tur pro Aufidia : somnone te languido,
nis circa nuptias Sassiae : 0 mulieris sce an gravi letbargo, putem oppressum? sed
y lus increaibile, et praeter banc unam , in M. quoque Tullius circa navarchos; nan
omni vita inauditum o libidinem effre ea quoque rei expositio est : Ut aaear,
natam , et indomitan 0 audaciam siugu tantum dabir, et reliqua. Quid? pro Cluen
darem ! IVon timuisse , , si minus anim deo tio, Staleni, Bulbique colloquium? non
rum , bominum que famam , at illam ipsam ne ad credulitatem plurimum , et fidem
noct em, faces que illas nuptiales , non li confert? Quae me fecisse sine observantia
men cubiculi, non cubile filiae, non pa quadam videatur: quanquam bocinillo
238 INSTITUCIoNEs orAToRIAs
zo sin reflexion (aunque esto de Ciceron no es creible) dice
él mismo en las particiones oratorias (núm. 31.32.) que la
narracion tenga dulzura , admiraciones, que ponga en expec-.
tativa, que haya en ella terminaciones, que no se esperaban,
ylosseafectos.
introduzcan personas hablando entre sí, y aun todos
- Y s

Argumentar nunca conviene en la narracion, aunque al


guna vez sí insinuar algun argumento. Así Ciceron en la cau
sa de Ligario dice, que de tal modo gobernó la Africa, que á
él le convenia, hubiese paz. Quando la necesidad obligue á
ello, apuntaremos brevemente la razon, y causa de los he
chos. La narracion no se ha de hacer como quien relata, sino
como quien defiende. La serie de la causa de Ligario es esta:
Q. Ligario marchó al Africa en compañía del consul Cayo Con
sidio, ¿Y cómo lo cuenta Ciceron? Q. Ligario pues se marchó
al Africa en compañía del consul Considio, y en calidad de
lugarteniente , quando no habia la menor sospecha de guerra.
Y en otro lugar: No solamente no llevaba pensamiento de
ir a hacer guerra, pero ni aun sospechando, pudiese haber
la. Bastando el decir, para informar á los Q. Ligario º
no quiso enredarse en ningun negocio, añadió: cuidando tan
solamente de dar vuelta a su casa , y ver a los suyos , érc.
y de este modo hizo mas creible la cosa, y movió los afectos.
Por lo que me admiro tanto mas de los que dicen, que no
se han de mover estos en la narracion. Si dixeran, que no se
-imsmº

credibile non est, in partitionibus prae tus in Africam cum cos. C. Considio pro
cipit, ut, habeat narratio suavitatem, fectus est. Quid ergo M. Tullius? Q. igi
admirationes, expectationer, exitus inopi tur, inquit, Ligariur, cum esset adbuc
nator, colloquia personarum , omnes af nulla belli suspicio, legatus in Africam
fectus. cum cos. C. Considio profectur est. Alibi:
: Argumentabimur in narratione, ut Non modo nullum ad bellum , sed ne ad
dixi, nunquam ; argumentum ponemus minimam quidem suspicionem belli. Et cum
aliquando quod facit pro Ligario Cice esset indicanti satis : Q, Ligarius nullo
ro, cum dicit, sic eum provinciae prae se implicari negotio parrus est : adjecit;
fuisse, utilli pacem esse expediret. In Domum spectans , et ad ruos redire cu
seremus expositioni, et brevem , cum piens. Ita quod exponebat, et ratione
resposcet, defensionem , et rationem fecit credibile , et afeetus quoque im
factorum, Nec enim narrandum 'est tan plevit,
quam testiº, sed tanquam patrono. Rei Quo magis miror eos, qui in narra
ordo per se talis est: Q. Ligarius lega tione non putant esse utendum afectibus,
1bE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 239
han de mover tanto, como en el epílogo, convengo con ellos;
pues en aquella parte no conviene ser molesto, ni pesado.
Por lo demas porqué no he de querer mover al juez, á
quien estoy informando? ¿Porqué no procuraré lograr al prin
cipio de la oracion lo que he de hacer al fin de ella? mu
cho mas quando por medio de las pruebas hallare los áni
mos inclinados á ello , por estar poseidos de ira , ó mi
sericordia. - - --

¿Por ventura el mismo Ciceron no emplea todo el caudal


de los afectos, quando cuenta el castigo de azotes dado á un
ciudadano romano, ya ponderando la circunstancia de la per
sona, ya la del lugar, y del inhumano castigo, y ya últi
mamente la tolerancia, con que los sufrió ? ( 7. Verrina. )
Ciertamente manifiesta la heroicidad del sugeto, que sien
do azotado, ni dió un gemido , ni hizo plegaria alguna,
sino decir á voces, que era ciudadano romano, valiéndose de
sus fueros, y moviendo el aborrecimiento del que le azotaba.
¿No movió la indignacion de los oyentes, ya quando expo
nia la desgracia de Philodamo, ya quando hizo derramar lá
grimas á vista del suplicio? ¿y quando no tanto cuenta, quanto
introduce llorando á un padre por la muerte de un hijo, y al
hijo por la del padre? (2. Verrina. ) ¿Puede haber algun
epílogo de mas ternura ? En este caso aguardariamos tarde á
llamar los afectos en la peroracion, pudiéndolo haber hecho en
la narracion; porque entónces el juez estaba como acalorado,

- -
º a -

Qui si hoc dicunt, non diu, nec ut in enim virum ostendit, qui cum virgis
epilogo ; mecum sentiunt. Efugiendae caederetur, non ingemuerit, non roga
sunt enim morae. Caeterum , cur ego ju verit, sed tantum civem se Romanúm
dicem nolim , cum eum doceo, etiam esse cum invidia caedentis, et fiducia
moveri? Cur, quod in summa parte sum juris clamaverit. Quid? Philodami casum
actionis petiturus, non in primo statim nonne cum per totam expositionem in
rerum ingressu, si fieri potest , conse cendit invidia, tum in supplicio ipso la
quar; curn praesertim etiam in probatio crymis implevit, cum flentes non tam
nibus faciliore sim animo ejus abusurus, narraret, quam ostenderet, patrem de
occupato, vel ira , vel miseratione? morte filii, filium de patris ? Quid ulli
An aon Marcus Tullius circa verbera epilogi possunt habere miserabile magis?
civis romani omnes brevissime movet Serum est enim advocare his rebus af
affectus? non solum conditione ipsius, fectum in peroratione, quas securus nar
loco injuriae, genere verberum , sed a raveris. Assuevitillis judex , jamque eas
nimi quoque commendatione? Summum sine motu mentis accipit, quibus com
24o INSTITUCIONES ORATORIAS r -

y despues ya le cogerá muy frio: y es materia imposible el


sacar al ánimo del estado, en que una vez se halla.
V. Por lo que á mí toca (porque quiero poner mi opi
nion, aunque quanto digo, mas quiero confirmarlo con exem
plos, que con reglas) soy de parecer, que la narracion debe
trabajarse con tanto esmero, y adorno, como qualquiera otra
parte de la oracion aunque debe siempre tenerse presente el
asunto de ella. - º

En los de poca monta, quales son los particulares, el


adorno sea moderado, y como pide la cosa: las palabras, que
en la confirmacion, aunque sean mas valientes, y atrevidas, fá
cilmente se disimulan entre los periodos, y rodeos, aquí de
ben ser muy comedidas, muy claras, y que tengan particu
lar significacion, como quiere Zenon: la composicion gustosa,
no afectada: las figuras ni poéticas, ni huelan al modo de
hablar de los antiguos, apartándose del uso comun. El estilo
debe ser muy puro; que evite el fastidio con la variedad, y
agrade con la diversa manera de decir: de forma, que ni ter
minen todas las cláusulas del mismo modo, ni tengan un mis
mo número de palabras. Pues como la narracion de suyo ca
rece de otros adornos, si le falta esta gracia, que le es pro
pia, estará muy desmayada. En ninguna otra parte de la ora
cion está el juez mas atento, y así no pierde palabra. Fuera
de que no sé, porqué damos mas crédito á lo que con gusto
oimos; y este mismo gusto nos hace la cosa mas verisímil.
= -n
e - º --es º - º * ---s- º * -----

motus
mutare nobis non animi
habitum est : , etsemel.
difficile est
consti
cta esse debebunt: compositio dissimula
ta quidem, sed tamen quam jucundissi
tuttl m. e
ma: figurae non illae poeticae, et con
v Ego vero (neque enim dissimulabo tra rationem loquendi auctoritate vete
judicium meum , quanquam id , quod rum receptae. Nam debet esse , quama
sum dicturus , exemplis magis, quam purissimus sermo, et qui varietate tae
praeceptis ullis continetur) narrationem, dium effugiat, et mutationibus animum
ut siullam partem orationis, omni qua levet: me in eundem casum, similem
potest gratia, et venere exorna ndam pu positionem , pares elocutionum tractus
to: sed plurimum refert, quae sit natu incidamus. Caret enim caeteris lenoci
ra ejus rei, quam exponimus. -
niis expositio, et misi commendetur hac
In parvis crgo, quales suntfere pri venustate , jaceat necesse est. Nec in
vatae, sitille pressus,, et velut applici ulla parte attentior est judex : eoque
tus rei cultus: in verbis summa diligen nihil recte dictum perit. Praeterea, ne
tia, quae in locis impetu feruntur», et scio quomodo etiam credit facilius, quae
circumjectae orationis copia latent; hic audienti jucunda sunt; et voluptate ad
expressa, et, ut vult Zeno, sensu tin ducitur,
DE M. FABIO QUINTILIANo, LIB. IV. 24 I
Quando ocurra asunto de mas entidad, podremos contar
un delito atroz, moviendo la ira contra él, y si es cosa tris
te, la compasion: no de modo, que agotemos todos los afec
tos, sino que echemos ya las lineas de lo que será la cosa. Ni
desapruebo el recrear con alguna sentencia los ánimos cansados,
y mas si es breve. v.g. Los esclavos de Milon hiciéron en es
te lance aquello mismo, que qualquiera quisiera hicieran los
suyos. O con una sentencia que dé golpe, como: Casóse la
suegra con el yerno con ningun agüero bueno, sin que ningu
no hubiese concertado las bodas; en una palabra contra la vo
luntad de todos los dioses. (Pro Cluentio.) Que si esto se per
mitia quando mas se atendia á la utilidad, que á hacer alarde
del talento, y quando el rigor de los tribunales estaba en su
punto ¿ quánto mas deberá hacerse ahora, quando por solo an
tojo se pone una demanda contra la hacienda, y aun contra
la vida de qualquiera? Y ya á su tiempo diré hasta dónde se
debe permitir esta licencia. Entretanto confieso, que debe darse
en esto algun ensanche,
VI. Contribuye mucho para hacer creible la cosa, el po
ner alguna imágen, que la haga presente á los oyentes.
Ni tampoco callaré, quanto contribuye á hacer creible la
narracion, la autoridad de quien cuenta; la que debemos
procurar conciliarnos, ya con la buena conducta, ya tambien
con el mismo modo de decir. Y quanto mas grave y serio,

s-=merammasºn. Es asmºs

Ubi vero major res erit, et atrocia tius, quam ad ostentationem componeba
invidiose, et tristia miserabiliten dicere tur, oratio, et erant adhuc severiora ju
licebit : non ut consumantur afectus, dicia; quanto nunc faciendum magis,
sed ut velut primis lineis designentur; cum insipsa capitis, aut fortunarum pe.
ut plane, qualis futura sit imago rei, ricula irrupit voluptas ? Cui hominum
statim appareat. Ne sententia quidem, desiderio quantum dari debeat, alio lo
velut fatigatum intentione stomachum co dicam. Interim aliquid indulgendum
judicis reficere dissuaserim , maxime esSe confiteor. -

quidem brevi interjecta, qualis estilla: VI. Multum confert adjecta veris cre
Fecerunt servi Milonir , quod suor quis dibilis rerum imago, quae velut in rem
que servos in re tali facere voluirset. In praesentem perducere audientes videtur.
terim paulo liberiore , qualis estilla: Ne illud quidem praeteribo, quan
IVubit genero rocrus, nullis auspiciir, mul
tam afferat fidem expositioni, narrantis
lis auctoribus , funestis ominibus omnium.
auctoritas; quam mereri debemus ante
Quod cum sit factum iis quoque tempo omnia quidem vita, sed, et ipso gene
ribus, quibus omnis ad utilitatem po re orationis : quod quo fuerit gravius,
ToM. L.
242 INSTITUCIONES ORATORIAS

tanto mas peso dará á nuestro razonamiento. Por tanto debe


evitarse en esta parte de la oracion toda malicia, y fingimien
to, porque de ninguna cosa se recelan mas los jueces, que de
esto. Hemos de hacer ver, que la justicia la lleva consigo la
causa, y no que la procuramos con nuestro discurso. Pero so
mos de tal condicion, que nos imaginamos que se malogra
nuestra habilidad, si no hacemos alarde de ella; siendo muy
al contrario, que entónces se malogra el arte, quando se des
cubre. Pendemos únicamente de la alabanza, y no nos pro
ponemos otro fin. De aquí nace, que queriendo adelantar en
la fama , y opinion de los oyentes, perdemos para el concepto
de los jueces.
CAPÍTULO III.
IDE LAS D I G R E SIONE S.

La digresion no siempre es necesaria despues de la mar


racion. Quando tiene cabida en esta. Por lo comun es útil
antes de la confirmacion. Es de varias maneras. Tiene lu
gar en qualquier parte de la oracion.
La narracion segun el órden natural precede á la con
firmacion; pues debemos probar lo que primero hemos con
ass-E EE.
-

sanctius, hoc plus habeat necesse estin fecta credantur. Sed hoc pati non possu
affirmando quoque ponderis. Effigienda mus , et perire artem putamus , nisi
igitur in hac praecipue parte omniscal appareat : cum desinat ars esse , si
liditatis suspicio , (neque enum se u apparet. Pendemus ex laude , atque
squam custodit magis judex; ) nihil vi hanc laboris nostri ducimus summam.
deatur fictum , nihil sollicitum : omnia Ita, quae circunstantibus ostentare vo
potius à causa , quam aboratore pro lumus, judicibus prodimus.
CAPUT III.

ID E E. G. R. ESSIO N Es

Egressio non semper necersaria est post narrationem. Quandonam ibi rit adhiben
da. Frequenter utilis est ante confirmationem. Ea multiplex. Nulli non parti ora
tionis convenit.

Oar. ipso narrationem sequitur propter hoc exposuimus. Sed priusquam


ingrediar hanc partem , pauca mihi de
confirmatio. Probanda sunt enin, quae
DE M. FABIO QUINTILIANo. LIB. IV. 243
tado para este fin. Antes de hablar de esto, quiero decir algo
de la opinion de algunos.
Acostumbran los mas al fin de la narracion tratar algun
lugar brillante, con que conciliarse el aplauso, lo mas que
puedan. Dimanó esta costumbre de la ostentacion de los de
clamadores; y despues se introduxo en el foro, quando co
menzáron á defenderse las causas, mas por lucirse los aboga
dos, que por mirar por el litigante. Hiciéronlo con el fin de
ue, pasando inmediatamente de la sequedad de la narracion
que por lo comun es concisa) al choque, y pelea de los ar
gumentos en la confirmacion , ántes de la qual calmáron por
algun tiempo las bellezas del discurso , no pareciese esta tran
sicion fría, y desapacible.
En lo qual hay de malo, que siempre lo practican así,
sin atenderá los asuntos, y á que sea útil: como si siempre
conviniese, ó fuese necesario. De aquí sucede, que por amon
tonar en esta parte pensamientos sobre pensamientos, los qui
tan de otras, con peligro de volverá repetir despues lo mis
mo, ó de no poder usar de ello, quando conviene, por estar di
cho donde no caía tan bien.
Mi opinion es, que no solamente en la narracion; en qual
quiera otra parte debe explayarse de este modo el orador, si
lo pide la necesidad, y lo permite el asunto. En todo el dis
curso puede usar de esta digresion, pero de modo que pegue
con todo lo demas, y no dexe como desunida la oracion , si
la union es violenta. Y no hay union mas natural, que la que
-mm

quorundam opinione dicenda sunt. hoc, tanquam semper expediat, aut et


Plerisque moris est , prolato rerum iam necesse sit, faciunt: eoque desum
ordine, protinus utique in aliquem lae ptas ex his partibus , quarum alius erat
tum , atque plausibilem locum , quam locus, sententias in hanc congerunt, ut
maxime possint, favorabiliter excurrere. plurima, aut iterum dicenda sint, aut
Quod quidem natum ab ostentatione de quia alieno loco dicta sunt , dici suo
clamatoria, jam in forum venit, post mon possint.
quam agere causas non ad utilitatem li Ego autern confiteor hoc expatiandi
tigatorum , sed ad patronorum jactatio genus non modo narrationi quidem, sed
nem repertum est: ne si pressae illi (qua etiam quaestionibus, vel universis, vel
lis saepius desideratur) narrationis gra interim singulis opportune posse subjun
cilitati conjuncta argumentorum pugºa gi, cum res postulat, aut certe permit
citas fuerit, dilatis diutius dicendi vo tit: atque eo vel maxime illustrari, or
luptatibus, oratio refrigescat. narique orationem, sed si cohaeret, et
In quo vitium illud est, quod sine sequitur, non si per vim, cuneatur, et
discrimine causarum , atque utilitatis, quae natura juncta erant distrahit, Nihil
2.
244 ... INSTITUCIONES ORATORIAS

tiene la confirmacion con la narracion, exceptuando aquellas


digresiones, que son como término de la narracion, y prin
cipio de la confirmacion. Las quales tendrán lugar v.g. quando
acabando de contar un lance demasiado atroz, seguimos con
el mismo acaloramiento, que dé á entender, que nos ha arreba
tado la indignacion. Esto se entiende, quando lo que objetamos
al contrario, no admite duda : fuera de esto, primero es hacer
creible la cosa, que abultarla; porque ántes de probar la culpa,
la justicia está de parte del reo; y quanto mas enorme es, tan
to mas cuesta el probarla.
Lo mismo puede hacerse muy bien, quando, habiendo
contado los beneficios hechos al contrario, se culpa su ingra
titud; ó si despues de hecha relacion de los varios delitos,
que cometió , representamos el peligro, que de ellos amena
za: pero todo esto conviene tocarlo con brevedad, porque el
lo primero, que aguarda despues de la narracion, es oir
as pruebas de lo relatado, y ver las razones de la sentencia,
que va á dar. Pero cuidese sobre todo de que los ánimos can
sados de oir, y distraidos en otra cosa, no se olviden del asun.
to principal.
Y así como no siempre es necesaria esta digresion despues
de la narracion, así tambien convendrá hacerla alguna vez,
para que sirva de preparacion á la qüestion 3 mucho mas quan
do á primera vista no nos favorece la causa , si pretendemos
defender una ley demasiado dura, ó se trata de que se castigue
á alguno. En este caso esta digresion es como un exórdio, que

enirn tam est consequens, quam narra rietatem criminum narratione demon
tioni probatio: nisi excursus ille, vel straveris, quantum ab ea periculum in
quasi finis narrationis, vel quasi imitium tentetur , ostendas. Verum haec breviter
probationis est. Erit ergo illinonnunquam omnia. Judex enim ordine audito festi
locus, ut si expositio circa finem atrox nat ad probationem , et quamprimum
fuerit, persequamur eam , velut, erum certus esse sententiae cupit. Praeterea
pente protinus indignatione. Quod tamen cavendum est , me ipsa expositio vane
ita fieri oportebit, si res dubitationem. scat, aversis in aliud animis, et inani
non habebit: aliequi prius est, quod ob mora fatigatis.
jicias, verum eficere, quam magnum, Sed ut non semper est necessaria post
quia criminis invidia pro reo est, prius narrationem illa procursio, ita frequen
quam probatur. Dificillima estenim ter utilis ante quaestionem praeparatio;
gravissimi cujusque sceleris fides. utique si prima specie minus erit favo
Idem fieri non inutiliter potest, ut rabilis, si legem asperam tuebimur, aut
si merita in adversarium aliqua expo poemarias actiones inferemus, est hic lo
sueris, in ingratum inveharis; aut si va cus, velut sequentis exordium, ad con
v -

DE M. FABIO QUINTILIANo. LIB. IV. 24.5


nos conciliará al juez en las pruebas, que vamos á dar: lo qual
haremos con tanta mas libertad, y empeño, quanto ya el juez
está enterado de la causa. Será como un lenitivo, que suavizará
la dureza de nuestra pretension, para que el juez reciba con me
jores oidos lo que dixéremos, y no se nos manifieste contrario.
Pues quando se oye con repugnancia una cosa, imposible es el
persuadirla. Conviene tambien conocer la condicion del juez,
si es adicto á la ley, ó si es inclinado á la equidad natural; y
segun esta regla será mas, ó ménos necesario el prepararle
de antemano. Por lo demas, la misma digresion despues de
la qüestion tiene lugar de epílogo.
A esta parte llaman los griegos parechasis, y los latinos
digresion. Semejantes digresiones, tienen lugar en las demas
partes de la oracion: tales son las alabanzas de personas, y
lugares; las descripciones de algunos paises; y varias narracio
nes , ya falsas, ya verdaderas. Semejante á estas es aquella ala
banza de la Sicilia, y la narracion del rapto de Proserpina en
las oraciones contra Verres; y en la de L. Cornelio aquella
reseña , que hace de las prendas de Pompeyo, para ganarse
el favor del pueblo. Para contar lo qual, dexó su asunto co
menzado aquel divino orador, como si el nombre de un ge
neral tan consumado como Pompeyo, le detuviera, dice él, la
carrera emprendida. -

Digresion es tambien (á lo que yo entiendo) el tratar ex


traordinariamente de cosa distinta del asunto, pero que tiene
u-sa-es =-

ciliandum probationibus nostris judicem. Sed hae sunt plures, ut dixi, quae per
Quod liberius hic, et vehementius fieri totam causam varios habent excursus:
potest, quia judici jam nota causa est. utlaus hominum, locorumque , ut de
His igitur, velut fomentis, si quid erit scriptio regionum , expositio quarundam
asperum , praemolliemus , quo facilius rerum non solum gestarum , sed etiam fa
aures judicum , quae post dicturi eri bulosarum. Quo ex genere estin orationi
mus , admittant, ne jus mostrum ode bus contra Verrem compositis, Siciliae
rint. Nihil enim facile persuadetur invi laus, Proserpinae raptus; pro L. Corne
tis. Quo loco tamen judicis quoque no lio popularis illa , virtutum Cn. Pompeji
scenda natura est, juri magis, an aequo commemoratio: in quam ille divinus o
sit appositus. Proinde enim magis, aut rator, velut nomine ipso ducis cursus di
minus erit hoc necessarium. Caeterum cendi teneretur, abrupto, quem inchoa
reseadem, et post quaestionem perora verat, sermone, divertit actutum.
tionis vice fungitur. Paºn 8ºats est (ut mea quidem
Hanc partem arapºn 3a oriv graeci vo fert opinio) alienae rei, sed ad utilita
cant, latini egressum, vel egressionem. tem causae pertinentis, extra ordinem
246 INSTITUCIoNES oRAToRIAs
con él alguna relacion. Y así no entiendo, porqué la dan lugar
en la narracion, y no en otra parte: como tampoco sé la cau
sa, porqué se da este nombre de digresion á lo que se trata
de esta manera fuera del asunto, quando hay otros mil modos
de separarse la oracion del principal intento : pues todo
aquello, que se dice fuera de aquellas cinco partes, que pu
simos arriba, es digresion; como el irritarse, compadecerse, el
mover el aborrecimiento del contrario, el echarle algo en cara,
el excusarse, el conciliarse el favor del juez, y el rebatir lo que
imputan. Lo mismo podemos decir de quanto está fuera de
la qüestion, como quando ponderamos, ó disminuimos una co
sa, y el movimiento de afectos : en una palabra, quanto con
duce para adornar la oracion; como el tratar del luxo, de la
avaricia, de la religion, y de las obligaciones del hombre.
Pero como esto tiene union con las pruebas del asunto, no
parece digresion. -

Hay no obstante algunos lugares, que aunque no tengan


union con lo demas, con todo eso se tratan en la oracion, ya
para recrear al juez, ya para amonestarle, aplacarle, suplicar
le, ó alabarle. A este tenor hay mil cosas; unas que llevamos
prevenidas de antemano, otras que allí mismo se ofrece oca
sion, y motivo de decirlas; ya porque interrumpen algunos
nuestro razonamiento; ya porque entró alguna persona; ya
por algun accidente impensado. Aun el mismo Ciceron hizo
por necesidad una digresion en la defensa de Milon, en el
mºmº

procurrens tractatio. Quapropternon vi rationem, de luxuria, de avaritia, de


deo, cur hunc ei potissimum locum , as religione, de officiis : quae cum sintar
signent, qui rerum , ordinem sequitur: gumentis subjecta similium rerum , quia
non magis quam illud , cur hoc ita de cohaerent, egredi non videntur.
mum proprium putent, si aliquid in Sed plurima sunt , quae rebus nihil
digressu sit exponendum, cum tot mo secum cohaerentibus inseruntur, quibus
dis à recto itinere declinet oratio. Nam judex reficitur , admonetur , placatur,
quicquid dicitur praeter illas quinque rogatur, laudatur. Innumerabilia sunt
(quas fecimus) partes, egressio est; in haec, quorum alia, sicut praeparata af
dignatio, miseratio, invidia , convitium, ferimus, quaedam ex occasione, vel ne
excusatio, conciliatio, maledictorum re cessitate dicimus, si quid nobis agenti
futatio : similia his, quae non sunt in bus novi, accidit, interpellatio , inter
quaestione, omnis amplificatio , minu ventus alicujus, tumultus. Unde Cicero
tio, omne afectus genus: atque ea ma ni quoque in prooemio , cum diceret pro
xime jucundam, et ornatam faciunt o Milone, digredi fuit necesse , ut ipsa
DE M. FABYO QUINTILIANO, LIB. IV. 247
exórdio de ella; como lo manifiesta la oracioncita, que dixo. "
A este tenor podrá hacerla qualquiera, quando ántes de la
üestion tiene que hacer alguna advertencia, ó despues de
acabada la confirmacion, quiere recomendar su causa. Pero si
esto sucede enmedio de ella, debe ser muy breve, y volver
luego á su asunto.
CAPÍTULO IV.
ID E LA PROP O SICION.

Deen algunos, que la proposicion, como parte de la


causa judicial, debe seguir á la narracion. A cuya opinion res
pondo, diciendo, que por proposicion entiendo el principio
de toda confirmacion. Esta no solamente se pone ántes de las
pruebas, sino algunas veces al principio de cada una de ellas: "
aunque ahora hablamos de la primera.
No siempre es necesaria, porque sin ella se sabe el punto
principal de la qüestion; como quando esta comienza donde
concluye la narracion. De manera, que á veces á esta narra
cion se le añade una breve suma de ella , y que corresponde
á lo que en las pruebas llamamos recapitulacion: v.g. Pasó
esto, ó jueces , en el modo , que llevo dicho el que ponia , las
asechanzas, fué vencido; y se rechazó la fuerza con la fuer
za; ó por mejor decir, el valor superó al atrevimiento.
- -

eratiuncula, qua usus est, patet. Pote- finitae probationi, velut commendatio
rit autem paulo longius exire, qui prae nem adjicit At qui ex media erumpit,
parat aliquid ante quaestionem, et qui cito ad id redire debet, unde divertit,
C A P U T I V.

DE PRO P OSITION E,

Son qui narrationi propositionem.


subjungant, tanquam partem judicialis
quando enim sine propositione quoque
satis manifestum est, quid in quaestio
materiae; cui opinioni respondimus. Mihi ne versetur: utique si narratio ibi finem
autem propositio videtur omnis confir habet, ubi initium quaestio: adeo ut
mationis initium : quod non modo in aliquando subjungatur expositioni, quae
ostendenda quaestione principali , sed solet in argumentis esse, summa colle
nonnunquam etiam in singulis argumen ctio. Haec sicut exporui, ita gesta Junt,
tis, poni solet. Sed nunc de priore lo judicer : in ridiator superatus , vi victá
quumur.
vir, vel potius opprerra virtute auda
Eanon semper uti necesse est, Ali cia est,
248 INSTITUCIONES ORATORIAS

Algunas veces es muy útil la proposicion, como quando


no pudiéndose defender el delito, solamente se trata del fin,
con que se cometió ; como en la causa de aquel, que robó del
templo el dinero de un particular: Se le hace reo de sacrile
gio : El sacrilegio es , de lo que se trata ; para advertir al
juez, que su único oficio por entónces es sentenciar, si es el
delito tal, como se supone. Asimismo quando la causa es obs
cura, y enredosa.
Hay proposiciones simples, y otras que comprehenden dos,
ó mas puntos. Esto puede suceder de varios modos. O porque
encierra en sí varios delitos; como quando le acusaban á Só
crates de que corrompia á la juventud; y de novedades en
punto de religion. O porque contiene muchas cosas, pero que
la una depende de la otra; como si á Eschines se le acusa
de que desempeñó mal su embarada, de que faltó á la ver
dad, no hizo nada de lo que se le encargó, que se detuvo mas
de lo que debia, y que se deró sobornar. Si cada una de estas
partes se propone separadamente para probarla, claro es que
serán
se otras particion
llamará tantas proposiciones:
, ó division. si, se proponen todas juntas,
I8

Otras veces va disimulada la proposicion, y no suena co


mo tal; como quando hecha la narracion, decimos: De esto
vamos a tratar ; que es como poner alerta al juez , para que
aplique mas la atencion a lo que sigue, y advierta con este
avisó, que ya se terminó la narracion, y que sigue la con
-ssy-Dºº

Sed nonnunquam valde, utilis est, Et singula ex pluribus colliguntur: ut


praecipue ubi res defendendi non potest, cum legatio male gesta objicitur Aeschi
et de fine quaeritur; ut pro eo, qui pe ni, quod , mentitus sit, quod nihil ex
cuniam privatam de templo sustulit: sa mandatisfecerit, quod moratus sit, quod
crilegii agitur: de racrilegio cognorcitis; munera acceperit. Hae si ponantur sin
ut judex intelligat id unum esse officii gulae subjectis probationibus , plures e
sui, quaerere an id, quod objicitur, sa runt propositiones: si conjungantur, in
crilegium sit. Item in causis obscuris, ac partitionem cadunt.
multiplicibus. Habet interim vim propositionis, et
Sunt autem propositiones, et simpli iamsi per se non est propositio: ut cum,
ces , et duplices, vel multiplices. Quod exposito rerum ordine, subjicimus : De
accidit non uno modo. Nam , et plura bis cognoscitir ; ut si haec commonitio
crimina junguntur: ut cum Socrates ac judicis, quo se ad quaestionem aerius in
cusatus est, quod corrumperet juventu tendat, et quodam , velut tactu excita
tem, et novas superstitiones induceret. tus finem esse narrationis, et initium
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 249

firmacion: y para que quando damos principio á esta, comience


á atender como de nuevo. -

- - ar - --

C A P I TU LO V. o
-

DE LA DIVISION.

I. Quándo, y porqué motivos no usaremos de la division.


II. Qué ventajas trae, LII. Sus propiedades.

Dion no es mas, que una enumeracion de las pro


posiciones de nuestro asunto, ó del contrario, ó de ámbos.
I., Opinan algunos, que siempre debe hacerse, porque
queda mas clara la causa, y el juez mas atento, y ménos con
fuso, si decimos lo que tratamos en primero, y segundo lu
gar, &c. Otros lo tienen por cosa arriesgada; ya porque suele
olvidarse el orador de alguno de los puntos propuestos; ya
porque si la division no se hace bien, lo advertirá el juez, ó
el contrario. Pero esto no sucederá sino al que sea muy ler
do, ó enteramente negado; y no lleve meditado de antemano
lo que va á decir. Porque ¿qué cosa da mas claridad á la ora
cion, que una division hecha con juicio ? Esto es seguir el
-

probationis intelligat, etnobis confirma dammodo - novum audiendi sumat e


tionesn ingredientibus, ipse quoque quo xordium.

C A P U T. V.

D E PART ITION E.

I. Quando, et quibus de canusis partitione non rit utendum. II. Quar utilitater ha
beat. III. Quae sint ejus virtutes.

Pan, est mostrarum , aut adver ex causis , quod monnunquam excidere


sarii propositionum , aut utrarumque or soleant quae promisimus, et si qua in
dine collata enumeratio. partiendo praeterierimus, occurrere. Quod
I. Hac quidam utendum semper pu quidem nemini accidit, misi qui plane,
tant, quod, et ea fiat causa lucidior, vel nullo fuerit ingenio, vel ad agen
et judex intentior, ac docilior, si scie dum nihil cogitati, praemeditatique de
rit, et de quo dicimus , et de quo di tulerit. Alioqui, quae tam manifesta, et
cturi postea sumus. Rursus quidam peri lucida est ratio, quam rectae partitio
culosum id oratori arbitrantur, duabus nis? Sequitur enim natura m ducem , adeo
To M. I. Ii
25o INSTITUCIONES ORATORIAS

órden , que la naturaleza nos enseña; y no hay mayor au


xilio de la memoria, que el seguir este órden natural.
Y así no apruebo á los que dicen, que no debe compre
hender mas que tres puntos ”; aunque es verdad, que sien
do muchos, confunden la memoria del juez, y no fixará tan bien
la atencion Pero no se ha de poner término fixo, pues habrá
causas, que requieran mas larga division.
Ocurren tambien motivos para omitirla; quál es el que da
mas gusto la oracion, quando no tiene visos de estudiada de
antemano, sino que parezca se discurre allí mismo lo que se
dice. Por eso son tan lindas aquellas figuras: Ya se me ol
vidaba ; se me habia pasado el decir ; a buen tiempo me avi
sas, erc. Porque sentadas ya las pruebas, todo lo que así se
dice, tiene particular gracia,
Tambien conviene engañar en cierto modo al juez, y sor
prehenderle de varios modos, para que entienda, que se diri
ge lo que decimos á otra cosa muy distinta, de lo que pare
ce. Porque hay algunas proposiciones tan duras de suyo, que
si las oye como son en sí, pondrá tan mal gesto, como el
enfermo, que vió la lanceta ántes de la cura. Y si el orador
coge al juez desprevenido, y sin haber hecho alguna salva,
para ganarle, no logrará que dé crédito á lo que propuso.
Debe tambien evitarse el proponer qiiestiones muy diver
sas, y mucho mas el tratarlas; y quando ocurra, se procu
rará con los afectos distraer la atencion de los oyentes. Por
= EEs=

ut memoriae id maximum sit auxilium, admones. Propositis enim probationibus,


via dicendi non decedere. omnis in reliquum gratia novitatis prae
Quapropter ne illos quidem probave cerpitur.
rim , qui partitionem vetant, ultra tres Interim vero etiam fallendus est ju
propositiones extendere. Quae, sine du dex, et variis artibus subeundus: ut
bio si nimium sit multiplex, fugiet me aliud agi, quam quod petimus, putet.
moriam judicis, et turbabit intentionem. Nam est nonnunquam dura propositio,
Hoc tamen numero , velut lege non est quam judex si providet, non aliter re
alliganda, cum possit causa plures de formidat, quam qui ferrum medici, an
sidera re. tequam curetur , aspexit. At si re non
Alia sunt magis propter quae parti ante proposita, securum, ac nulla de
tione non semper sit utendum. Primum, nuntiatione in se conversum , intrarit
quia pleraque gratiora sunt, si inven oratio, efficiet , quod promittenti non
ta subito, nec domo allata , sed inter crederetur.
dicendum ex re ipsa nata videantur. Un Interim refugienda non modo distin
de illa non injucunda schemata: Paene ctio quaestionum est, sed omnino tra
excidit mibi : et, fugerat me : et, recte ctatio: afectibus perturbandus , et ab
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 25 I
que no tanto se emplea la eloqüencia en enseñar, quanto
en la mocion de afectos. A lo qual perjudica muchísimo la
division demasiado escrupulosa, en muchos puntos, quan
do intentamos, y nos interesa el que no se entienda mucho
la causa.
Fuera de que hay cosas que de por sí son débiles, y fla
cas, pero juntas valen algo : y en este caso hemos de amonto
narlas, y presentarlas á un mismo tiempo, para hacer guerra
al contrario; pero esto no ha de ser muy comun, y solo quan
do lo pida la necesidad: quando la razon nos obliga á ir contra
la razon.
Ademas de esto en toda division hay algun punto muy
interesante; y los demas míranse como superfluos. Y así quan
do hay que oponer, ó refutar varios delitos, será útil, y gus
tosa la division, para que se conozca por el órden lo que he
mos de decir de cada cosa. Mas si defendemos un solo delito
por varios modos, es ociosa: como si hiciéramos esta division;
Diré que en este hombre, á quien defiendo, no se hace crei
ble un homicidio; que no tuvo motivo para ello ; que quando
se hizo la muerte, estaba á la otra parte del mar. Todo lo
que dixeres ántes de probar el último miembro, es ocioso:
pues esto es lo que el juez quiere oir quanto ántes; y si
es sufrido , con su mismo silencio estará diciendo al abo
gado, que lo pruebe, y cumpla lo prometido: quando no
lo pretenda con toda autoridad, si la tiene, y con términos

-EE a

intentione auferendus auditor, Non enim audivit judex, caetera tanquam super
solum oratoris est docere, sed plus elo vacua gravari solet. Itaque si plura, vei
quentia circa movendum valet. Cui rei objicienda sunt, vel diluenda , et utilis,
contraria est maxime tenuis illa, et scru et jucunda partitio est, ut, quid quaque
pulose in partes sectae divisionis diligen de re dicturi , sumus, ordine appareat.
tia, eo tempore , quo coguoscenti judi At si unum crimen varie defenderimus,
cium conamur auferre. supervacua ; ut si ita partia mur : Di
Quid, quod interim quae per se le cam non talem es se hunc, quem tueor, ut
via sunt, et infirma , turba valent? Ideo in eo credibile videri por rit homicidium:
que congerenda sunt potius , et velut dicam occidendi causam huic non fuis re:
eruptione pugnandum ; quod tamen ra dicam bunc. eo tempore, quo occirus est bo
rum esse debet, et ex necessitate de mo , tran r mare fuirse. Omnia y quae
mum , cum ipsum hoc, quod dissimile antequam id, quod ultimum est, exeque
rationi est, coegerit ratio. ris, inania videri necesse est. Festinat
Praeter haec in omni partitione est enim judex ad id, quod potentissimum
utique aliquid potentissimum , quod cum est, et velut obligatum promisso patro
Ii 2
2. 5 2. , INSTITUCIONES ORATORIAS

picantes, ó por ser de natural rústico, ó porque le llaman


otras ocupaciones.
Así es, que no falta quien reprehenda aquella particion de
Ciceron en la causa de Cluencio: Promete hacer ver, que ningun
hombre se vió en tribunal alguno mas cargado de delitos, ni
con testigos mas abonados que Opianico; en segundo lugar:que
los jueces que le condenaron, sentenciaron ya antes otras causas
de él semejantes; y por último: que no intentó Cluencio sobor
mar a los jueces, antes lo intentaron otros contra él. Pues pro
bado esto último, lo demas importa nada. Al contrario nin
guno habrá tan injusto, ni tan negado, que no diga estar bien
hecha aquella de la causa de Murena: No ignoro , jueces, que
son tres las partes de la acusacion: una se reduce á poner
macula en la vida del reo; otra á la altercacion sobre la dig-,
nidad ; y otra al delito del soborno. Porque aclarando la causa,
no contiene ninguna cosa ociosa.
Algunos tampoco aprueban aquel modo de defender : Si le
hubiera muerto, motivo tuve para ello ; pero no le maté. ¿A
qué lo primero, dicen, siendo lo segundo cierto? Esto es per
judicarse á sí mismo, y no merecer el crédito en lo uno, por
querer probar lo otro. No les falta razon: pues el segundo
miembro basta, siendo cierta la cosa. Pero si temiéremos no salir
con lo que importa mas, probaremos lo uno, y lo otro; porque
alguno suele moverse con lo que á otro no le hace mella: y el
que se persuadió que se cometió la muerte, quizá creerá que
-E. Es asº
------------------- ---- - -- º -

num , si est patientior, tacitus appellat; tur optime pro Murena esse partitum:
si vel occupatus, vel in aliqua potesta-, Intelligo , judices , tres totiur accusario
te, vel etiam si moribus incompositus, nir parter fui ste: et earum unam in re
cum convicio, effagitat. , , prehensione vitae, alteram in contentione
Itaque non defuerunt , qui Ciceronis dignitatis, terriam in criminibus ambizur
illam pro Cluentio partitionem improba es se versatam. Nam sic, et ostendit lu
rent, qua se dicturum esse promisit pri cidissime causam , et nihil fecit altero
mum , neminem majoribus criminibus, gra Supervacuum. - - º * -) ,

vioribus testibus in judicium vocatum, - De illo, quoque genere defensionis


quam Cppianicum : deinde , praejudicia plerique dubitant: Si occidi, recte feci:
es se fact a ab bir ipria judicibus , a qui sed non occidi. Quo enim prius pertine
bus conden natus rit: postremo, judicium, re, si sequens firmum sit? haec invicem
fecunia tenfatum non a Cluenzio, red con obstare, et utroque utentibus, in neu
tra Cluentium : quia si probari posset, tro haberi fiderm. Quod sane in parte ve
quod est tertium , nihil necesse fuerit di rum est, etillo sequenti (si modo indu
cere priora. Rursus nemo tam erit, aut bitabile sit) solo utendum. At si quid in
injustus, aut stultus , quin eum fatea eo, quod est fortius, timebimus, utra
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 2 53
está bien hecha; al contrario el que no se persuada hubo ra
zon para hacerla, quizá no la creerá. Así como al tirador, que
es certero, bástale una saeta; pero el que no atina, necesita de
muchas, para ver si con alguna acierta. Excelentemente prueba
Ciceron en primer lugar, que Clodio armó lazos á la vida de
Milon: y despues para mayor abundamiento dice, que, aun
quando no fuera así, le fué lícito quitar la vida á un ciudada
no como este, con mucha gloria del matador.
No por eso condeno el órden, que dixe arriba : pues dado
caso que haya algunas cosas duras de su naturaleza, contribu
yen, para modificar lo que sigue despues. Porque no carece
de fundamento lo que comunmente se dice: Pedir mas de lo
justo, para que nos den lo justo. Mas no por eso se propase nin
guno á mas de lo que pide la razon ; pues como dicen los grie
gos: No debe pretenderse, lo que es imposible, el salir con ello.
Pero advierto , que quando usemos de estas dos maneras
de defensa, se ha de procurar, que creido lo primero, debe ser
vir como de cimiento para fundar lo que decimos despues.
Porque puede parecer, que quien confesó á su salvo una co
sa, no tenia fundamento para mentir, negándola: y quando
sospechemos, que aguarda el juez otra prueba, que la que
alegamos, debemos prom eter el satisfacer quanto ántes á sus
deseos, principalmente en causas, que acarrean algun empacho.
- Pues ocurren algunas, que son de mal aspecto, pero tie
- - - 2C º

•- mº

que probatione nitemur. Alius enim alio ras. Quod tamen nemo sic accipiat, ut
moveri solet, et qui factum putavit, ju omnia credataudenda. Recte enim grae
stunn credere potest: qui tanquam justo ci praecipiunt, no teníanda, quae effici,
non movebitur, factum fortasse non cre omnino non portunt. - - , y
det: ut certa manus uno telo possit esse - Sed quoties hac, de qua loquor, du-,
contenta, incertae plura spargenda sunt, plici defensione utemur, id laborandum
ut sit et fortunae locus. Egregie vero est, utinillam partem sequentem fides
Cicero pro Milone insidiatorem primo - ex, priore ducatur. Potest enim videri,
Clodium ostendit : tum addit ex abun qui tuto etiam confessurus fuit, mentien
danti, etiamsi id non fuisset, talem ta di causam in negando non habere: et
men civern cum summa virtute interfe illud utique faciendum est, ut quoties
ctoris, et gloria necari potuisse. suspicabimur à judice aliam probationem,
Nec illum tamen ordinem , de quo desiderari, quam de qua loquimur, pro-,
prius dixi, damnaverirn : quia quaedam, mittamus nos plene, et statim de eo sa
etiamsi sint dura , in id tamen valent, tis esse facturos: praecipueque si de pu
ut ea molliant, quae sequuntur. Neque dore agitur.
omnino sine ratione estid , quod vulgo Frequenter autem accidit, ut causa
dicitur, iniquum petendum, ut aequum fe parum verecunda, jure tuta sit: de quo
254 INSTITUCIONES ORATORIAS

nen la justicia de su parte: en las que debemos prevenir al


juez, diciendo que dentro de poco oirá las razones de ser la
cosa no solo lícita, sino honrosa; que oygan con paciencia el
órden de la causa y entretanto fingiremos que tenemos, que
advertir algunas cosas, aunque les pese á los mismos, á quienes
defendemos. Así lo practica Ciceron sobre la ley de los tribu
nales. Algunas veces nos pararemos, como si aquellos nos inter
rumpieran. Otras nos convertiremos á los mismos, diciéndoles,
que nos dexen obrar con libertad. De este modo sorprehende
mos el ánimo del juez, y con la expectativa de las pruebas, que
hacen la cosa honrosa, y buena, oirá sin tanta repugnancia lo
que hay en la causa de mas duro : que habiendo dado oidos á
esto, se mostrará mas fácil, y propicio para lo que hace buena
la causa. De este modo lo uno ayuda á lo otro, y el juez aten
derá á nuestra justicia con la esperanza de las pruebas; y sin
perder de vista la ley, se nos manifestará mas propicio.
II. Pero así como la division no siempre es necesaria, ántes
es ociosa alguna vez, así hecha á tiempo da mucha claridad,
y hermosura á la oracion. Porque no solo aclara mas las cosas,
sacándolas de confusion, y presentándolas cada una de por síá
la vista del juez; sino que con sus diversas partes alivia la fa
tiga de los oyentes, no de otra, manera, que al caminante la
demarcacion , y division de las leguas, que va leyendo en las
piedras del camino. Porque sirve de recreo el ver lo que lle
vamos andado; y el saber lo que resta de camino, nos ani
-E

me inviti judices audiant, et adversi, fre mostrum spe modestiae attentior, cir
quentius sunt admonendi, secuturam de ca modestiam juris probatione proclivior.
fensionem probitatis, ac dignitatis; ex II. Sed ut non semper necessaria, ac
pectent paulum , et agi ordine sinant. etiam supervacua partitio est: ita oppor
Quaedam interim nos, et invitis litiga tune adhibita plurimum orationi lucis,
toribus, simulandum est dicere: quod Ci et gratiae confert. Neque enim solum.
cero pro Cluentio facit circa judiciariam. id efficit, ut clariora fiant, quae dicun
legem. Nonnunquam quasi interpellemur. tur, rebus, velut ex turba extractis, et
ab his, subsistere. Saepe avertenda ad in conspectu judicum positis: sed reficit
ipsos oratío: hortandi, ut sinant nos uti, quoque audientem certo singularum par
mostro consilio. Ita surrepetur animo ju tium fine, non aliter, quam facientibus
dicis, et dum sperat probationem pudo iter multum detrahunt fatigntionis no
ris, asperioribus illis minus repugnabit. tata inscriptis lapidibus spatia. Nam, et
exhausti laborís mosse mensuram volu
Quáe cum receperit, etiam verecundae
defensioni facilior erit. Sie utraque res ptati est, et hortatur ad reliqua fortiusº
invicem juvabit, eritque judex circa jus exequenda, sclre quantum supersit, Ni
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. IV. 255
ma á seguir con calor : pues no nos parece largo un cami
no, quando, aunque de léjos, vemos el fin. En esta division
fué muy diestro Q. Hortensio, aunque Ciceron le tacha algun
tanto de que por los dedos llevaba la cuenta de los miembros.
r. Verr. 45. - -

Porque en hacerla, hay su cierto término, debiendo cuidar


que sus puntos no sean tan cortos, que parezca constar de arte
jos, como los miembros del cuerpo humano. Esto, fuera de que
hace pueril al orador, es causa de que los puntos de la particion
no sean ya miembros, sino pedazos; y los que gustan de conse
guir gloria de este modo, dividiendo tan menudamente su pro
posicion, vienen á decir muchas cosas superfluas, y á dividir
lo que en la naturaleza es una sola cosa: ó por mejor decir no
hacen muchas cosas, sino que las achican, y disminuyen. Fue
ra de que con esta division en tan menudas partes, dan en la
misma obscuridad, para cuyo remedio se inventó.
III. La proposicion, ya conste de uno, ó mas miembros,
lo primero de todo debe ser clara (pues ¿qué mayor mons
truosidad, que ser obscura aquella parte, cuyo único fin es dar
luz á lo restante de la oracion ?) y en segundo lugar tan bre
ve, que no contenga ni una palabra ociosa; pues en ella solo
insinuamos lo que despues hemos de decir por extenso. -

Pero cuidese, que no le falte, ni sobre nada. Es re


dundante la proposicion , quando dividimos en sus espe
cies, lo que basta dividirlo por el género: ó quando pues

EEEEEE En

hil enim longum videri necesse est, in mora: deinde cum fecerunt mille parti
quo quid ultimum sit, certum est. Nec culas, ineandem incidunt obscuritatem,
immerito multum ex diligentia partien contra quam partitio inventa est.
di tulit laudis Q. Hortensius : cujusta III. Divisa , ... et simplex propositio
men divisionem in digitos diductam, quoties utiliter adhiberi potest, primum
nonnunquam Cicero leviter eludit. debet esse aperta , atque lucida; (nam
Nam est certus ejus modus , et evi quid sit turpius, quam id esse obscurum
tanda maxime concisa nimium , et ve ipsum , quod in eum solum adhibetur
lut articulosa partitio. Nam , et aucto usum , ne sint caetera obscura? ) tum
ritati plurimum detrahunt minuta illa, brevis, nec ullo supervacuo onerata ver—
nec jam membra, sed frusta: et hujus bo. Non enim quiddicamus, sed de quo
gloriae cupidi, quo subtilius, et copio dicturi simus, ostendimus.
sius divisisse videantur, supervacua as Obtimendum etiam, ne quid in ea de
sumunt, et quae natura singularia sunt, sit, ne quid supersit. Superest autem sic
secant; nectam plura faciunt, quam mi fere, cum aut in species partimur, quod
-

s
256 INSTITSCIONES ORATORIAS

to el género, añadimos la especies : v.g. Hablaré de la vir


tud , de la justicia , y templanza , siendo estas especies de
aquel género. ,

La division propone aquello, en que convenimos , y aque


llo de lo que se duda. En lo que convenimos; esto es, qué
es lo que confiesa el contrario, y qué nosotros. De lo que se
duda ; esto es, lo que tenemos que decir; á qué se reduce
nuestra causa; y á qué la del contrario. Pero entiéndase, que
es un defecto muy feo, no seguir la oracion el mismo órden
de cosas, que propuso.

in genera partiri sit satis; aut genere quod convenit, quid adversarius fatea
posito, subjicitur species : ut dicam de tur, quid nos. Ineo de quo ambigitur,
virtute, justitia , continentia; cum justi quae dicturi simus, quae nostrae propo
tia, atque continentia virtutis sint species. sitiones, quae partis adversae. Turpissi
Partitio proponit, quid sit, de quo con mum vero est, moneo ordine exequi, quo
veniat, quid de quo ambigatur. In eo quicque proposueris.
s- 25
LIBRO QUINTO. 7

P R O EMI O.

Manifiesta quán necesario es al orador alegar sus prue


bas. Primero tratará de las que convienen ué todo género de
causas; y despues de las que son peculiares de cada una.

Hubo retóricos, y de bastante nombre, que dixéron,


que al orador solo tocaba el enseñar. Porque la mocion de
afectos la destierran ellos por dos razones. Primera, porque
toda pasion, dicen, es vicio. Segunda, porque no conviene apar.
tar al juez de la verdad, con el movimiento de la misericor
dia, ira, y otras tales: y el deleytar (añaden los tales) quan
do solo peroramos, para triunfar con la verdad, no solo es ocio
so, sino tal vez indigno del hombre. Pero la mayor parte, dan
do entrada tambien á estos dos oficios, dixéron, que lo que
principalmente debe cuidarse, es confirmar nuestro asunto, y
refutar al contrario. - - - -

Sea como quiera (porque no quiero en este lugar propo

L IBER QUINTU S, a

P RO O E. M. M UT. M.

pocet pernecersariam esse oratoribus probationem, Aget primum de probationibus, quae


ad omnes quaestiones pertinent; deinde de iis, quae in quoque causae genere pro
priae runt. -º- ;

Fran , et clari quidem aucto- tantum gratia diceretur, non modo agen
res, quibus solum videretur oratoris of ti supervacuum , sed vix etiam viro di
ficium docere. Namque, et affectus du gnum arbitrabantur. Plures vero, qui
plici ratione excludendos putabant: pri nec ab illis sine dubio partibus rationem.
mum , quia vitiun esset omnis animi orandi summoverent, hoc tamen pro
perturbatio; deinde, quia judicem à ve prium, atque praecipuum crederent o
ritate depelli misericordia, vel ira , si pus, sua confirmare, et quae ex adverso
¿ , non oporteret et volupta proponerentur, refutare.
tem audientium petere, cum vincendi Utrumcunque est, (necenim hocloco
ToM. L.
258 INSTITUCIoNEs oRAToRIAs
ner mi dictámen ) este libro en opinion de ellos será de sin
gular utilidad; pues en él solo tratamos de las pruebas: lo
qual tambien se da la mano con lo que llevamos dicho de las
causas judiciales. Porque tanto el exordio, como la narracion,
no hacen mas, que preparar el ánimo del juez, para que en
tienda el estado de la causa : que sin este fin fuera ocioso
quanto hemos hasta aquí prevenido. Finalmente, de las cinco
partes, que hemos puesto para las oraciones judiciales, ha
brá ocasion, en que alguna no sea precisa: pero no habrá
pleyto alguno, que pueda pasar sin confirmacion. Nos pare
ce ahora lo mejor, el decir primero lo que sirve para todas
las causas, y despues lo que cada una tiene de particular,
CAPÍTULO PRIMERO.
DE LA DIVISION DE PRUEBAS. , -

Las pruebas unas son tomadas de fuera de la causa; otras


de la misma causa. Primero se trata de las primeras.
- -
- -
-

º - t

- = Anaaa hizo una division de pruebas, comunmente


admitida casi por todos. Es á saber, unas tomadas de fuera

meam interpono sententiam ) hic erit quinque judicialis materiae feci


liber illorum opinione maxime necessa- mus partibus, quaecunque alia potesta
rius, quo toto haec sola tractantur; qui- liquando necessaria causae non esse: lis
bus sane, et ea , quae de judicialibus nulla est, cui probatione opus non sit.
causis jam dicta sunt, serviunt. Nam ne Ejus praecepta sic optime divisuri vide
que prooemii, neque narrationis estalius mur , ut prius in commune , quae ad
usus, quam ut judicem praeparent: et omnes quaestiones pertinent, ostendamus:
status nosse, atque ea , de quibus supra deinde, quae in quoque causae genere
scripsimus, intueri, supervacuum foret, propria sunt, exequamur. -

nisi ad hanc perveniremus. Denique ex


CAPUT PRIMUM. • - -

DE PROBATIoNUM DIvISIoNE.

Probationes vel sunt inartificiales, vel artificiales. Agit primum de inartificialibur.

As prima quidem illa partitio ab mnium meruit, alias esse probationes,


Aristotele tradita , consensum fere o quas extra dicendi rationem acciperet
DE M. FABIe QUINTILIANo. LIB. V. 259
de la causa; otras tomadas de ella misma, y sacadas como del
fondo de la causa. Por donde á las primeras les dan el
nombre de inartificiales , y de artificiales á las segundas. "
A las primeras pertenecen los juicios anteriores, la voz co
mun, tormentos, escrituras públicas, juramento , y testigos,
cá las que por la mayor parte se reducen las pruebas de las
causas forenses. Pero así como semejantes pruebas carecen de
arte, así debe el orador emplear todas sus fuerzas en ponde
rarlas, y en refutarlas. Y así me parece, que se debe desechar
la opinion de los que dicen, que en ellas no tienen ningun
lugar los preceptos : aunque no es mi intencion el abar
car en este lugar las opiniones en pro, y en contra. Por
que no pretendo el tratar por extenso de los lugares orato
rios: que esta seria obra infinita, sino dar alguna idea y noti
cia de ellos. Los quales sabidos, debe cada qual hacer lo posi
ble para manejarlos, y á semejanza de ellos discurrir otras
pruebas, segun lo pida la naturaleza de la causa; porque es
imposible el comprehender todas las que estan ya tratadas, pa
ra no hablar de las que pueden ofrecerse.
.

º-E- mº-s

orator, alias quas ex causa tra heret i Nectamen in animo est, omnia quae aut
pse, et quodammodo gigneret. Ideoque pro his, aut contra dici solent , com
illas a r«xys º , id est inartificiales, has plecti. Non enim communes locos tra
eva ºxys º , id est artificiales vocave dere destinamus, quod esset operis infi
runt. Ex illo priore genere sunt praeju niti: sed viam quandam , atque ratio
dicia , rumores, tormenta, tabulae, jus mern. Quibus demonstratis, non modo in
jurandum , testes; in quibus pars maxi exequendo suas quisque vires debet ad
ma contentionum forensium consistit. Sed hibere , sed etiam inveniendo similia,
ut ipsa per se carent arte, ita summis ut quaeque conditio litium poscet. Ne
eloquentiae viribus ,, et allevanda Sunt que enim de omnibus causis dicere quis
plerunque, et refellenda. Quare mihi quam potest , Saltem praeteritis, utta-:
videntur magnopere damnandi, qui to ceam de futuris. -

tum hoc genus a praeceptis removerunt.

Kk 2
26o INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULO II.
JDE LOS JUICIOS ANTECEDENTES.

Le. juicios antecedentes son de tres maneras. Unos se


fundan en cosa semejante á nuestra causa, y sentenciada ya que
llamaremos mejor exemplo, como sobre un testamento anulado
por un padre, ó confirmado contra los hijos. Otros en los jui
cios pertenecientes á la misma causa, de donde tomáron el nom.
bre : como los que se tuviéron contra Opianico, y los del sena
do contra Milon. Otros se fundan en sentencia dada ya sobre
el mismo asunto; como la causa sobre reos desterrados; ó
aquella, en que se trata por segunda vez sobre la libertad de
alguno; siendo una de ellas por los centumviros divididos en
dos salas. ”
Los juicios antecedentes reciben su fuerza de la autoridad
de los primeros jueces, y de la semejanza que tienen con la
causa. Deséchanse, poniendo tacha en los jueces; aunque
esto no es comun, sino quando abiertamente faltáron á la
justicia. Porque cada uno quiere, que se tenga por válida la
sentencia, que dió su predecesor: y no quiere sentenciar con
tra él, por no hacer exemplar, que otros imiten despues con
tra sí mismo. Luego en semejante lance procurará el orador
hacer ver, que la causa presente no es semejante en un todo
- usada sus ma

cA P U T I I.
D E PR A E J U D I C II S.

Je praejudiciorum vis omnis tri-


bus in generibus versatur: rebus,
tibus centumviralium, quae in duas ha
stas divisae sunt.
quae aliquando ex paribus causis sunt Confirmantur praecipue duobus, au
judicatae, quae exempla rectius dicun ctoritate eorum , qui pronuntiaverunt,
tur; ut de rescissis patrum testamentis, et similitudine rerum, de quibus quaeri
vel contra filios confirmatis : judiciis, tur. Refelluntur autem raro per contu
ad ipsam causam pertinentibus, unde meliam judicum , misi forte manifesta in
etiam nomen ductum est; qualia in Op his culpa erit. Vultenim cognoscentium
pianicum facta dicuntur, et à senatu quisque firmam esse alterius sententiam:
adversus Milonem : aut cum de eadem et ipse pronuntiaturus non libenter e
causa pronuntiatum est, ut in reis de xemplum, quod in se fortasse recidat,
portatis, et assertione secunda, et de Par facit. Confugiendum ergo est in duobus
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB . V. 261
á la antecedente : y mas, quando apénas hay dos pleytos, en
los que concurran unas mismas circunstancias. Si la causa fuere
en todo semejante á la primera, entónces ó culparemos al
abogado, que no supo defenderla; ó el poco valimiento de las
personas, contra quienes se dió la sentencia; ó diremos, que
entónces intervino algun soborno, mala voluntad, ó ignoran
cia ; ó si no decir alguna circunstancia, ó nuevo motivo, que
obligue á no seguir la primera sentencia. Si no podemos asirnos
de nada de esto, diremos en general, que concurren varias cau
sas, para dar alguna injusta sentencia; alegando la condenacion
de Rutilio º, y la absolucion de Clodio, y Catilina. “Se ha
de suplicar á los jueces, que exáminen la cosa , y no defie
ran al dictámen ageno en un asunto, en que les obliga el jura
mento.” Contra las sentencias dadas por el senado, ó por los
príncipes, y magistrados no hay efugio ninguno, sino el asir
nos de alguna diferencia, que haya en nuestra causa, aun
que pequeña; ó de algun decreto posterior de alguna perso
na, que tenga igual, ó mayor autoridad, y poder, y que
anule la primera sentencia ; y si esto falta, no hay por don
de pleytear. - 2

superioribus, si res feret, ad aliquam nuntiandum valere: ideoque damnatum


dissimilitudinem causae. Vix autem ulla Rutilium , absolutos Clodium , atque Ca
est per omnia alteri similis. Si id non tilinam. Rogandi etiam judices, ut rem
continget , ac eadem causa erit : aut potius intueantur ipsam , quam juriju
de actorum incusanda negligentia., aut rando alieno Suum donent. Adversus con
de infirmitate personarum querendum, sulta autem senatus, et decreta princi
contra quas erit judicatum: aut de gra pum , vel magistratuum , remedium nufi
tia , quae testes corruperit, aut de in lum est, nisi aut inventa quamtulacun
vidia, aut de ignorantia : aut invenien que causae diferentia , aut aliqua, vel
dum, quid causae postea accesserit. Quo eorumdem, vel ejusdem potestatis homi
rum si nihil erit , licet tamen dicere num posterior constitutio, quae sit priori
multas judiciorum causas ad inique pro-U contraria : quae si deerunt, lis non erit.
3. N º 3
262 - INSTITUCIONES ORATORIAS
º
-

) - —,, , , , , ,
CAPÍTULO III. -
ta, ,
/ -

DEL RUMoR, y DE LA voz coMUN. -,

S nos valemos de la voz comun, diremos ser esta el


consentimiento de la ciudad, y como un público testimonio.
Si la queremos refutar, diremos, que la fama es una voz va
ga, sin autor fixo que la apoye ; que nace de la malicia, y to
ma cuerpo con la credulidad; que de sus tiros ni el mas ino
cente se ve libre: pues los enemigos ( sin los que ninguno vi
ve ) siempre extienden, y publican estos falsos rumores. Para
uno, y otro ocurrirán exemplos á millares.
CAP ÍTULO IV.
DE LOS TORMENTOS. - º

Con la prueba de los tormentos, que es muy comun,


sucede lo mismo: pues unas veces diremos, que es el único
medio para saber la verdad; otras que sirve muchas veces pa
ra decir lo que no hay. Porque si el reo tiene sufrimiento para
aguantar el tormento, fácil le será llevar la mentira adelante;
-E EEB

C A P U T III.

ro E R U MI o R E , E. T. F AM A.

E amam , atque rumorem pars al- mentum credulitas; quod nulli non et--
tera consensum civitatis, et velut publi- iam innocentissimo possit accidere frau
cum testimonium vocat: altera sermo- de inimicorum falsa vulgantium. Exem
nem sine ullo certo auctore dispersum, pla utrinque non deerunt.
cui malignitas initium dederit, incre- - --

CAP U-T IV, .. . .... , , ,

DE TOR M E NTIS,

San in tormentis quoque, qui est


locus frequentissimus, cum pars altera,
vocet: altera saepe etiam causam falsa
dicendi, quod aliis patientia facile men
quaestionem, vera fatendi necessitatem dacium faciat, aliis infirmitas necessa
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 263
si no le tiene, esto mismo le obligará á confesar lo que no
hizo. Pero ¿ para qué mas? Llenas estan de esta materia las
oraciones de antiguos, y modernos; aunque segun las diferen
tes causas, que ocurran, podremos hacer uso de esta prueba.
Porque si se trata de poner á uno á qüestion de tormento, im
portará el saber, quién pide, ó de quién se busca este género
de prueba, á quién, y porqué motivo. Si se dió ya el tor
mento, interesa el saber, quién le dió, cómo, y á quién: si
lo que dixo en él, se hace creible; si siempre dixo lo mismo,
ó si en fuerza del dolor varió el atormentado en su relacion;
si esto fué al principio del tormento, ó en lo mas recio de
él. Circunstancias que son tan innumerables por una, y otra
parte, quanta es la variedad de las cosas.
... y 4 - . ,

CAPÍTULO V.

DE LAs EsCRITURAs PúBLICAs.


-

--. -

o Le públicas escrituras, no solo se han desechado mu


chas veces, sino que las podemos desechar: pues hay exempla
res, de haberlas no solamente refutado, sino delatado, y ta
chado. Quando la escritura arguye culpa, ó ignorancia del
notario que la hizo, es mucho mejor, y mas fácil delatarla,
-E -
- -
* -- - - -

rium. Quid attinet plura de his? Plenae quis, et quomodo sit tortus, an credi
sunt orationes veterum , ac - novorum. bilia dixerit, an inter se constantia:
Quaedam tamen in hac parte erunt pro perseveraverit in eo quod coeperat, an
pria cujusque litis. Nam sive de haben aliquid dolore mutaverit: prima par—
da quaestione agetur, plurimum inter te quaestionis, an procedente crucia
erit, quis, et quem postulet, aut offe tu. Quae utrinque tam infinita sunt,
rat, et. in quem , et ex qua causa; si quam ipsa rerum varietas,
ve jam erit habita, quis ei praefuerit,

C A, PU T ". V,

DE TABULLS.

Ca tabulas quoque saepe di


ctum , saepe dicendum est, cum eas non
aut scelus signatorum , aut ignorantia,
tutius, ac facilius, id quod secundo lo
solum refelli, sed etiam accusari, scia co diximus , tractatur, quod scilicet
mus esse usitatum. Cum sitautem in his, pauciores rei fiunt. Sed hoc ipsum ar
264 INSTITUCIONES ORATORIAS

porque son ménos los que se hacen reos. Pero en este case
el argumento, y prueba nace del fondo de la causa, si se
hace increible el hecho, que dice la escritura, ó (lo que es
mas comun) se puede refutar con otras pruebas, y razones
naturales, sin acudir á lo escrito ; como si se hace ver que le
falta alguna circunstancia; ó que el notario, de quien se supone,
habia muerto, quando se otorgó 3 ó que aquel, contra quien
reza dicha escritura, no vivia por entónces. Si los tiempos,
y fechas no concuerdan ; si en ellas no confronta lo primero con
lo segundo: pues muchas veces en registrándolas bien, se des
cubre la falsedad.

CAPÍTULO VI.
D EL J U R A MENT O.
y -
- -

O los litigantes se ofrecen á jurar; ó no admiten el ju


ramento, aunque el contrario se ofrezca á hacerle 3 ó piden
al mismo, que jure ; ó rehusa el hacerle aquel, á quien se lo
piden. y
Ofrecerse uno mismo á jurar sin la condicion, de que tam
bien jure el contrario, nunca es bueno. Pero el que lo hiciere,
ó asegure su conducta, de modo, que no se haga creible, que

- ...rº -

gumenta ex causa trahit, si forte , aut tum est, aut aliquis signator dicitur ab
incredibile estid actum esse , quod ta- fuisse, vel prius esse defunctus: si tem
bulae continent: aut (ut frequentius eve- pora non congruunt: si vel antecedentia,
nit) aliis probationibus aeque inartificia- vel insequentia tabulis repugnant. Inspe
libus solvitur : si autis, in quem signa- ctio ipsa etiam saepe falsun deprehendit.
- : 3 º

c A PUT v I.”
DE Ju R E JU RAND 0.

Jusjurandum litigatores, autoffe-


runt suum , aut non recipiunt
Offerre suum sine ulla conditione, ut
vel adversarius juret , fere improbum
oblatum : aut ab adversario exigunt, est. Qui tamen id faciet, aut vita se
aut recusant cum ab ipsis exigatur. tuebitur , uteum non sit credibile pe
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB.V. 265
jura en falso; ó con la fuerza, y virtud del juramento: el qual
entónces tendrá mayor valor, si ni manifiesta deseo de que se le
tomen, ni lo rehusa, si el juez así lo quiere; ó si el interes, so
bre que se litiga, fuese de tan poca monta, que no haya la mas
mínima sospecha de que alguno se aventure á jurar en falso por
cosa tan leve ; ó si para mayor abundamiento, y prueba de su
justicia, no tiene reparo en añadir el juramento.
El que no admita el juramento, que su contrario ofrece, ale
gará dos razones para ello: primera, que parece cosa ¿ du
ra, que la vida del reo dependa del dicho juramentado de
otro º; segunda, que á veces se encuentran hombres, que no
temen ¿? fe del juramento, siguiendo la impia opi
nion de los que niegan, que los dioses cuidan de las cosas hu
manas. Dirá que quien se obliga á jurar, sin que le precisen
á ello, pretende en cierto modo sentenciar en causa propia, y
que con esto mismo manifiesta la debilidad de su causa.
El que exige el juramento de su contrario, da á entender
en cierto modo, que obra con comedimiento; pues le consti
tuye por juez de la causa, exónerando de este cargo molesto
á aquel, á quien incumbe; el qual querrá seguramente defe
rir al juramento de otro, ántes que á su propio dictámen.
Por lo qual es mas dificultoso el rehusar hacer el juramento,
quando el contrario lo pide , á no ser tal la cosa, que crean
los demas, que no la sabe de cierto el mismo contrario. Si no
podemos valernos de esta excusa, no queda otro medio, que
el decir, que sus pretensiones se dirigen á hacer odiosa nues
-------- º * es ser - ----
-

E, EE-a

jeraturum ; aut ipsa vi religionis: in ratus, et ipsum velle de causa sua pro
qua plus fidei consequetur, si idegerit, nuntiare, et, quamostendere.
ac facile credat, id quod offert, leve e
ut non cupide ad hoc descendere, sed ne
hoc quidem recusare videatur : aut si At is, qui defert, agere modeste vi
causa modo patietur litis, propter quam detur, cum litis adversarium judicem
devoturus se ipse non fuerit: aut si prae faciat, et eum , cujus cognitio est, one
ter alia causae instrumenta , adjicit ex reliberet, qui profecto alieno jureju
abundanti hanc quoque conscientiae suae rando stari , quam suo malit. - --

fiduciam. -

Quo dificilior recusatio est, nisi for


Qui non recipit, et iniquam condi te res estea, quam credibile sit notam
tionem , et à multis contemni jurisju ipsi non esse. Quae excusatio, si deerit,
randi metum dicet: cum , et philosophi hoc unum relinquetur , ut invidiam, si
quidam siat reperti, qui deos habere bi ab adversario quaeri dicat, atque id
rerum humanarum curam negarent: eum agi, utinea causa , in qua vincere non
vero, qui nullo deferente jurare sit pa
"TOM.
ºr queri possit. Itaque hominema
266 s. InsTItucioNEs orAToRIAs
tra causa; y que ya que no puede salir con su pleyto, quiere
á lo ménos buscar motivo de queja. Que solamente quien ten
ga mal pleyto, acudirá á este remedio: pero que nosotros que
remos mas bien probar lo que decimos, que el que los demas
queden con algun escozor de si habremos jurado en falso.

CAPÍT UL o v II.
- DE Los TESTIGos.

- Le, testigos son la cosa, en que mas tiene que trabajar,


la habilidad de un abogado. El testimonio de estos, ó se da
por escrito, ó estando ellos presentes en juicio.
Si el testimonio se dió por escrito, hay ménos que vencer;
porque quando se da delante de pocas personas, que firman la
deposicion, no hay tanto empacho de decir qualquier cosa,
como en público; y por otra parte el hecho de no compa
recer el testigo, quita la verdad á lo que dice, ó da á enten
der, que no se asegura en lo que afirma. En este caso, si el tes-.
tigo es de toda excepcion, podremos á lo ménos desacre
ditar á los notarios. Ademas de esto semejantes testimonios
se pueden disimuladamente desechar, diciendo, que no es co
mun el dar semejante testimonio por escrito, sino quando uno,
- o - - - 2 sº,

----- - º * - º se sº- - s- º *-----

quidem malum occupaturum hanc con- , quae affirmet, quam dubium cuiquam
ditionem furisse, se autem probare malle relinquere, an pejerarit.
º - - - - - - * y
, , a . . . ...-
cAPUr vII. a
ID E TES TI B US,

Minº patronis circa testimo-. mitur absentia. Si reprehensionem non


nia sudor est. Ea dicuntur, aut per ta- capit ipsa persona, infamare signatores
bulas, autà praesentibus. " licet. Tacita praeterea quadam signifi
Simplicior contra tabulas pugna. Nam, catione refragatur his omnibus , quod
et minus obstitisse videtur pudor inter nemo per tabulas dat testimonium, ni
paucos signatores, et pro diffidentia pre- si sua voluntate: quo ipso non esse ami
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 267.
quiere atestiguar contra aquel, á quien tiene mala voluntad:
puesto caso, que nadie le obliga á ello. No obstante el orador
dirá, que no hay impedimento en que se encuentre la verdad,
quando uno depone á favor de su amigo, ó contra su enemigo,
si por otra parte es hombre de crédito. Pero esta es una razon
comun, que puede valer en pro, y en contra.
Quando estan presentes los testigos, entónces es quando
mas trabaja el orador; hallándose como en dos batallas á un
tiempo, rebatiendo á los unos, y defendiendo á los otros: esto es
preguntando á los suyos, y refutando lo que dicen los del con
trario. Porque en la defensa de un pleyto lo primero de todo
solemos hablar en general, ya contra los testigos, ya en faº
vor de ellos. Este lugar es comun, diciendo los unos, que la
mayor prueba de qualquiera cosa es la que estriba en lo que
dicen los hombres; y los contrarios alegan, para debilitar la
fuerza de semejantes pruebas, los motivos que suelen inter
venir para atestiguar una cosa falsa. Hay otro modo de hacer
esto; como quando el abogado desecha algun testimonio par
ticular, aunque los testigos sean muchos. Exemplos, tene
mos de oradores, que rebatiéron el testimonio de toda una
nacion, solo porque eran testigos. auriculares: en cuyo ca
so no eran testigos de la cosa, sino solamente decian lo que
afirmáron otros sin juramento. Asimismo sucede en las causas
de malversacion de caudales; en las quales los que afirman,
aunque sea con juramento, que ellos mismos diéron el dinero
al reo, no se reputan por testigos, sino por otros tantos li

- º * -x º e-2 - º * --- s- = * -
= -sa

-, , r º r se ,
cum ei se, contra quem dicit, fatetur. quae sit hominum scientia nixa : altera
Nectamen protinus cesserit orator, quo ad detrahendam illis fidem , omnia per
minus, et amicus pro amico, et inimi quae fieri soleant falsa testimonia, enu
cus contra inimicum possit verum (si in merat. Sequens ratio est, cum specia
tegra sit ei fides) dicere. Sed late locus. liter quidem, sed tamen multos pariter
uterque tractatur. invadere patroni solent. Nam , et gen
Cum praesentibus vero ingens dimi tium simul universarum elevata testi
catio est : ideoque velut duplici contra monia ab oratoribus scimus, et tota ge
eos, prope his, acie confligitur, actio nera testimoniorum, ut de auditionibus:
num, et interrogationum. In actionibus mon enim ipsos esse testes, sed injura
primum generaliter protestibus, atque torum afferre voces: utque in causis re
in testes dici solet. Est hic communis petundarum, qui se reo numerasse pe
locus, cum pars altera nullam firmio cunias jurant, litigatorum , non testium
rem probationem esse contendit, quam. habendos loco. Interim adversus singu
l 2
268 INSTITUCIONES ORATORIAS

tigantes. Otras veces se dirige la oracion contra cada uno


de los testigos. La qual manera de invectiva, unas veces se
halla en algunas oraciones unida con la defensa; otras veces se
encuentra separada, como la oracion contra el testigo Vatinio.
Exáminemos mas este punto, supuesto que nos hemos
propuesto el dar una instruccion universal: aunque por otra
parte bastaban los dos libros, que sobre esta materia com
puso Domicio Afro, á quien siendo ya viejo traté mu
cho en mi juventud. Y no solo me leyó él mismo la mayor
parte de lo que trata, sino que lo aprendí de su misma boca.
Este pues encarga (y con razon) que ante todas cosas el
orador aprenda á tratar, y defender la causa de un modo
comun, y familiar: lo que sin duda es comun á todas. Cómo
se haya de hacer esto lo diremos, quando toque hablar de
este punto. " Esto le suministrará materia para hacer sus pre
ntas en el discurso, y le pondrá, digamos así, en la mano
as armas, con que ha de herir al contrario. Esto le dirá, para
qué cosas principalmente ha de preparar en su discurso el
ánimo de los jueces: porque se debe en discurso seguido, ó
afianzar, ó disminuir el crédito alguna vez á los testigos : y
al paso que uno está dispuesto para creer, ó no creer alguna
cosa, se moverá con lo que oye.
... Pero supuesto que hay dos clases de testigos, unos volun
tarios, y otros que son obligados por el juez á comparecer en
juicio; de los quales los unos sirven para las dos partes, y los
otros se le conceden al acusador, es necesario tratar separada
------- = * *:ºra º es

los dirigitur actio. Quod insectationis ge ad destinatum huic parti locum veneri
nus, et permixtum defensioni legimus in mus. Ea res suggeret materiam interro
orationibus plurimis, et separatim edi gationi,, et. veluti tela ad manum sub
tum , sicut in Vatinium testem. ministrabit. Eadem docebit, ad quae ju
Totum igitur excutiamus locum, quan dicis animus actione sit praeparandus,
º do universam institutionem aggressi su Debet enim , vel fieri, vel, detrahi te
mus. Suficiebant alioqui libri duo à Do stibus fides oratione perpetua : quia sie
mitio Afro in hane rem compositi , quem dictis quisque movetur, ut. estad cre
adolescentulus senem colui : ut non lecta dendum , vel non credendum ante for
mihi tantum ea, sed pleraque ex ipso InatuS. -

sint cognita. Is verissime praecipit, pri Et quoniam duo genera sunt testium,
mum esse in hac parte oficium orato aut voluntariorum, auteorum quibus ju
ris, ut totam causam familiariter norit: dex in publicis judiciis lege denuntiare
quod sine dubio ad omnia pertinet. Id solet : quorum altero utraque pars uti
quomodo contingat, explicabimus, cum tur, alterum accusatoribus tantum con
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 269
mente del que presenta los testigos, y del que los desecha, y
refuta su testimonio. - -

El que presenta en juicio á un testigo voluntario , COmO


que puede saber de antemano lo que ha de decir, puede mas
fácilmente hacerle sus preguntas. Aunque tambien para esto
se necesita maña, y destreza: y se debe industriar de antema
no al testigo , para que no titubée, ni responda con miedo,
ó diga lo que no conviene. Porque suelen turbarse, y aun ser
engañados por los abogados de la parte contraria : y así ca
zados una vez, es mayor el daño que ocasionan, que el pro
vecho que causarian, manteniéndose firmes. Por tanto es nece
sario ensayarlos en casa, y amaestrarlos en todas las pregun
tas, que despues suele hacerles el contrario. Así se manten
drán firmes en una misma cosa, ó si en algo titubearen, los
podrá, digamos así, enderezar con alguna oportuna pregunta
el mismo, que los presenta en el tribunal.
Io Aun quando los testigos se ratifican en lo que dicen, hay
que temer alguna zalagarda : pues no es cosa nueva el citarlos
tambien el abogado contrario; y habiendo prometido primero
responder lo que nos acomoda, salir despues con cosa distinta:
en cuyo caso en lugar de negar la cosa, la confiesan de plano.
Por lo qual se han de exáminar los motivos, que tienen para
atestiguar contra el adversario (pues no basta el que hayan sido
enemigos) sino si se hiciéron ya amigos, y si quieren recon
ciliarse con ellos ; si han sido sobornados ; y si se arrepen
tirán despues de lo mismo que ahora dicen. Lo que sí se ha
- aa \

an . .. . - ºs - : , , , , ºr
cessum est : separemus officium dantis fit, ut aut constent sibi, aut, si quid
testes, et refellentis. titubaverint , opportuna rursus ejus, a
Qui voluntarium producit, scire quid quo producti sunt, interrogatione, ve
is dicturus sit, potest : , ideoque facilio lutin gradum reponantur.
rem videtur in rogando habere rationem. In his quoque adhuc, qui constite
Sedhaec quoque pars acumen, et vi rint sibi, vitandae sunt insidiae : nam
gilantiam poscit: providendumque, ne frequenter subjici ab adversario solent,
timidus, ne inconstans, ne imprudens sit et omnia, profutura , polliciti, diversa
testis. Turbantur enim, et à patronis di respondent, et auctoritatem habent non
versae partis inducuntur in laqueum. arguentium illa , sed confitentium. Ex
Sed, et plus deprehensi nocent, quam plorandum igitur, quas causas laedendi
firmi, et interriti profuissent. Multum adversarium afierant : ne id satis est,
igitur domi ante versandi , ac variis inimicos fuisse, sed an desierint , an
percontationibus, quales haberi ab ad per hoc ipsum reconciliari velint, ne
versario possunt, explorandi sunt. Sic corrupti sint, ne poenitentia propositum.
-

27o y , INSTITUCIONES QRATORIAS

de cuidar con aquellos, que saben de cierto lo que dan á en


tender que depondrán despues, mucho mas con los que pro
meten deponer lo que es manifiestamente falso. * En estos es
mas de temer el que se arrepientan ; y se hace sospechoso lo
que nos prometen: y dado caso, que se mantengan firmes, es
mas fácil reprehenderlos - , , , , , ,, , ,
De los testigos que son citados, unos quieren deponer contra
el reo, otros no. Esto unas veces es notorio al acusador,otras no.
Supongamos, que el acusador sabe la intencion de los
testigos: pues en uno, y otro caso se necesita de mucha ha
bilidad para preguntarlos. Si el testigo quiere deponer con
tra el reo, debe disimular quanto pueda el acusador, que no
se conozca la intencion, con que el otro viene ; y no pregun
tarle derechamente lo que se pretende averiguar, sino usar de
algunos rodeos, que den á entender se le sacó como por fuer
za al testigo lo que él mismo tenia deseos de decir; ni tampo
co hacerle muchas preguntas, para que no se descubra el
fin que trae, si satisface á todas ; sino que preguntándoleto
que mas nos interesa, preguntaremos á otros los demas puntos.
Pero quando el testigo ha de decir la verdad, aunque con
tra su voluntad, la victoria consiste en hacerle confesar lo
que no quiere. El mejor modo para lograrlo, es preguntarle
la cosa una, y muchas veces Porque él responderá, sin ad
vertirlo, lo que perjudica al reo; y con estos antecedentes se le
pondrá én precision de no poder negar, lo que no quiere con e

ms. Estem
-- -- - * -- " a -º

mutaverint. Quod cum in iis quoque, hoc ipsum , ne cupiditas ejus appareat:
qui ea quae dicturi videntur, re vera nec statim de eo quod in judicium ve
sciunt, necessarium est praecavere, tum nit, rogare, sed aliquo circuitu ad id
multo magis iniis, qui se dicturos, quae pervenire, utilli, quod maxime dicere
falsa sunt, pollicentur. Nam, et fre voluit, videatur expressum: nec nimium
quentior eorum poenitentia est, et pro instare interrogationi, ne ad omnia re
missum suspectius: et si perseveraverint, spondendo, testis fidem, suam minuat,
reprehensio facilior. -
sed in tantum evocare eum , quantum.
Eorum vero quibus denuntiatur, pars sumere ex uno satis est.
testium est, quae reum laedere velit, At in eo, qui verum invitus dictu
pars quae nolit. Idque interim scit ac rus est, prima felicitas interrogantis est
cusator, interim nescit. extorquere quod is noluerit. Hoc non
Fingamus in praesentia scire, In u alio modo fieri potest, quam longius in
troque enim genere summis artibus in terrogatione repetita. Respondebit enim,
terrogantis opus est. Nam si habet te quae nocere causae non arbitrabitur: ex
stem cupidum laedendi , cavere, debet pluribus deinde, quae confessus erit, eo
DE Mr. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 271
fesar. Pues á la manera, que en la serie del discurso vamos
recogiendo varias circunstancias, y menudencias, que por sí
solas no perjudican, al parecer, al reo; pero todas juntas le
¿. su delito: á esta manera á un testigo de esta
naturaleza le preguntaremos varias cosas sobre lo que ante
cedió al delito, ó siguió despues; ya del tiempo, ya del lu
gar, y persona, y cosas semejantes, para que dando, sin pensar,
alguna respuesta, venga á caer en lo que no queria, óle
podamos arguir de contradiccion. Si ni aun esto puede lograrse,
no hay mas remedio, que el decir, que no quiere descubrir lo
que sabe; y así, ó se omitirá el preguntarle hasta otra oca
sion, ó se le procurará cazar en otra cosa, aunque distinta de
la causa. En fin, se le ha de tener sujeto por mucho tiempo
con semejantes preguntas, para que diciendo favor del reo en
tal vez mas de lo que conviene, se haga sospechoso en lo que
dice: concontrario.
nifestase lo qual seguramente dañará
- , al reo mas, que si se ma
s º

Pero si el acusador, como dixe en segundo lugar, no pe


netra la intencion, con que el testigo viene, entónces procura
rá indagarla, preguntándole poco á poco, y con tiento (como
dicen) hasta que venga como por grados á dar la respuesta º
que se pretende. Mas como á veces los testigos suelen usar de
la maña de responder águsto de quien los pregunta , para
despues manifestarse contrarios sin ninguna sospecha , debe
valerse de sus respuestas el acusador, quando---
le favorecen,
"... - v.
y
no preguntarle mas. . . . ...- es - º

* -- º º º * -----

perducetur, ut quod dicere non vult, prehendatur. Tenendus etiam diutius, ut


negare non possit. Nam ut in oratione omnia,ae plura,quam res desiderat, pro reo
sparsa plerunque colligimus argumenta, dicendo, suspectus judici fiat: quo non mi
quae per se nihil reum aggravare vi nus nocebit, quam sivera in reum dixisset.
deantur, congregatione deinde eorum fa At si (quod secundo loco diximus)
ctum convincimus: ita hujusmodi testis nesciet actor, quid propositi testis attu
multa de anteactis, multa de insecutis, lerit, paulatim , et, ut dicitur, pede
loco, tempore, persona, caeterisque est tentim interrogando experietur animum
interrogandus, ut in aliquod responsum ejus, et ad id responsum, quod elicien
incidat, post quod illi, vel fateri, quae dum erit, per gradus ducet. Sed quia
volumus necesse sit, vel iis, quae jam nonnunquam sunt hae quoque testium
dixerat, repugnare. Id si non contingit, artes, ut primo ad voluntatem respon
reliquum erit, uteum nolle dicere ma deant , quo majori fide diversa postea
nifestum sit: protrahendusque, ut in dicant, est accusatoris suspectum testem,
aliquo , quod vel extra causam sit, de dum prodest, dimittere, ". *
272 .-r ENSTITUCIONES oRATORIAS
Estas preguntas en parte son mas fáciles, y en parte mas
dificultosas al abogado contrario del acusador. Es la razon por
que raras veces podrá saber de antemano lo que el testigo
dirá despues ; y entónces le será dificultoso el preguntar con
acierto; pero si sabe lo que ántes dixo, le será mas fácil. Por
tanto quando no se sabe la intencion de los testigos, es nece
sario indagar con todo cuidado, quién de ellos es contrario al
reo; qué sugeto es ; qué motivos ha tenido para declararse
contra él: y todas estas circunstancias se han de ponderar en
el discurso ; ya queramos dará entender, que les movió el
odio, la envidia, el favor de alguno, ó que fuéron sobornados.
Si los testigos son ménos en numero que los de muestra parte,
se deberá alegar esto mismo en nuestro abono; pero si son mas,
se dirá que es conspiracion. Si son personas de poco valor, se da.
rá en cara al contrario con su vilezasi son personas de cuenta, se
dirá, que se han valido del poder, y valimiento, Será muy del
caso exponer los motivos, que tienen para declararse contra el
reo ; los quales varian segun la calidad de los pleyteantes, y
de las causas. Porque aun contra lo que, acabamos de decir en
los casos propuestos, se suele responder con lugares comunes,
diciendo, que el reo puede gloriarse de la llaneza, y simpli-,
cidad de los testigos, pocos en número, y gente humilde; con
tentándose con buscar los que pudieran saber la cosa con cer
teza, y no muchos, ni ¿ , que añadiesen alguna reco
mendacion á su pleyto. -- -

Algunas veces se suele elogiar, y desacreditar á cadas

---

Patronorum in parte expeditior; in spirationem.: si humiles producet, vii


parte dificilior interrogatio est. Difici tatem : si potentes, gratiam oportebit in
lior, hoc, quod raro unquain possunt an cessere. Plustamen proderit causas, pro
te judicium scire quid testis dicturus sit pter quas reum. laedant, exponere: quae y
Expeditior, quod cum interrogandus est, sunt variae, et pro conditione cujusque
Nam, contra illa,
sciunt quid dixerit. Itaque in eo, quod litis, aut litigatoris. simili
incertum est, cura, et inquisitione opus quae supra diximus, ratione re
est, quis reum premat, quas, et quibus sponderilocis atque communibus solet, quia,
ex causis inimicitias habeat: eaque in et in paucis, humilibus accusato r
oratione praedicenda , atque amolienda simplicitate gloriari potest, quod nemi
sunt, sive odio conflatos testes, sive in nem, praeter eos , quos putarit scire,
vidia, sive gratia , , sive pecunia videri quaesierit; et multos, atque honestos
volumus. Et si deficietur numero pars commendare aliquando estfacilius.
diversa, paucitatem : si abundabit, con- º Verum interim , et singulos, utex
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 273
uno de los testigos en el discurso de la oracion , ya mandán
dolos comparecer, ya nombrándolos en ella. Esto era mas fre
qüente, y aun mas fácil de hacerse, quando hecha la de
fensa del reo , se citaban los testigos. Solamente de las
personas de estos se puede tomar lo que hemos de decir
contra cada uno de ellos. Todo lo demas pertenece á las pre
guntas, que se le han de hacer. Para lo qual primeramente
es necesario conocer la persona del testigo, y su carácter. Por
que al cobarde se le puede intimidar, al ignorante engañar,
al iracundo irritarle. Si es ambicioso, se le puede cazar con pro
mesas; pero si es prudente, constante, y firme en lo que di
ce, es menester dexarle, como contrario á nuestra causa ; ó
se le refutará no preguntándole, sino por medio de un breve
diálogo entre él, y el abogado. Y si puede ser, se le mote
jará con algun chiste, y chanza moderada, y aguda; ó si se
puede poner alguna tacha en su conducta, la mejor refuta
cion será notarle de calumniador. Nunca conviene rebatir con
aspereza, y descomedimiento á los testigos vergonzosos, y de
vida conocidamente buena ; pues su misma modestia prevalece
contra quien los insulta de este modo, - -

Las preguntas, ó miran á la misma causa, ó á otra cosa


fuera de ella.
Si miran á la causa , el abogado, del mismo modo, que
diximos hablando del acusador, preguntará con disimulo, y
de una manera, que no sospeche el testigo lo que pretende
mos sacar en limpio. De este modo, añadiendo preguntas á
=

ornare, ita destruere contingit, aut re troni refutandus est; aut aliquo , si con
citatis in actione, aut nominatis testi tinget, urbano dicto refrigerandus; aut
bus. Quod iis temporibus, quibus testis, si quid in ejus vitam dici poterit, infa
non misi post finitas actiones rogabatur, mia criminum destruendus. Probos quos.
et facilius, et frequentius fuit. Quid au dam , et verecundos non aspere incesse
tem in quemque testium dicendum sit, re profuit: nam saepe, qui adversus in
sumi misi ab ipsorum personis non po sectantem pugnaSSent , modestia miti
teSt. -
gantur.
Reliquae interrogandi sunt partes, Omnis autem interrogatio , aut in
Qua in re primum est, nosse testem. causa est, aut extra causam.
Nam timidus terreri, stultus decipi, ira In causa, sicut accusatori praecepi
cundus concitari, ambitiosus inflari, lon mus, patronus quoque altius , et unde
gus protrahi potest : prudens vero, et nihil suspecti sit, repetita percontatio
constans , vel tanquam inimicus, et per ne , priora sequentibus applicando , eo
vicax, dimittendus statim ; vel non in saepe perducit homines , ut ab invitis,
terrogatione, sed brevi interlocutione pa quod prosit, extorqueat. Ejus reisine
ToM. L. Mm
274 INSTITUCIONES ORATORIAS

preguntas, y combinando las primeras respuestas con las se


gundas, le obligará á confesar la verdad, aunque no quiera.”
Esta manera de sonsacar la verdad, no se aprende con ningu
nas reglas de la escuela; y mas que con el arte, se ha de
aprender con el ingenio, ó con la experiencia del orador. Y si
hay algun exemplo para hacer la cosa demostrable, no hallo
otro mas acomodado, que aquel dialogismo, que usaban los
discípulos de Sócrates, ó por mejor decir Platon: en el qual
las preguntas se hacen con tanta habilidad, que respondiendo
bien á las primeras, venimos á obligar, á que nos confiesen lo
que pretendemos. Con esto se consigue alguna vez, que el
testigo sea cogido en alguna contradiccion; ó que la relacion de
uno se oponga á la del otro. Y una pregunta hecha con suti
leza, hace que lo que casualmente responden los testigos, sirva
como de razon, y prueba de nuestro intento. -

Suelen tambien hacerse algunas preguntas que aprove


chen, fuera de la causa, como quando se pregunta á los testi
gos sobre su conducta, y de los demas testigos; si estan infama
dos; si son de baxa condicion; si son amigos del acusador, ó ene
migos del reo: todo esto con el fin de que digan alguna cosa fa
vorable á nuestro intento, ó de que se les coja en alguna menti
ra, ó descubran su intencion dañada de perseguir al reo. En estas
preguntas se requiere mucho tiento; porque á veces suelen los
testigos salir con alguna respuesta, que es contra el mismo
abogado, y suele merecer el crédito de los que lo oyen: debe
usarse de términos muy comunes, y vulgares , correspon
msnm -ams
-

dubio nec disciplina ulla in scholis, nec terrogatio, ad hoc quod casu fieri solet,
exercitatio traditur : et naturali magis etiam ratione perducet.
acumine, aut usu contingit haec virtus. Extra causam quoque multa , quae
Si quod tamen exemplum ad imitatio prosint, rogari solent , de vita testium
mem demonstrandum sit, solum est quod aliorum , de sua quisque , si turpitudo,
ex dialogis socraticorum , , maximeque si humilitas, si amicitia accusatoris, si
Platonis, duci potest: in quibus adeo sci inimicitiae cum reo, in quibus , aut di
tae sunt interrogationes, ut cum pleris cant aliquid quod prosit, aut in menda
que bene respondeatur, restamen ad id cio, vel cupiditate laedendi deprehen
quod volunt eficere, perveniat, Illud dantur. Sed in primis interrogatio debet
fortuna interim praestat, ut aliquid, quod esse circumspecta , quia multa contra
inter se parum consentiat, à teste dica patronos venuste testis saepe respondet,
tur: interim (quod saepius evenit) utte eique praecipue vulgo favetur : tum ver
stis testi diversa dicat. Acuta autem in bis quam maxime ex medio sumptis,
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. V. 275
dientes á las personas á quien preguntamos (que por un co
mun son rudas) para que no puedan alegar, que no entienden
la pregunta: cosa que en el que la hace, seria una frialdad.
Nunca el abogado se valga del arte pésima de hacer sen
tar al testigo sobornado por su parte al lado del contrario, pa
ra que estimulado de esta misma cercanía, dañe mas al reo, jun
to á quien está sentado, ó diciendo algo contra él; ó con
movimientos, y ademanes descompuestos hechos de industria,
pareciéndole, que con esto adelanta mucho. Porque con esto no
solo no será creido en lo que dixo primero, sino que será
ménos atendido el dicho de los demas, que favoreciéron á
su causa. Hago mencion de estas malas mañas, para que se
eviten. . º
s. Muchas veces suele contradecir lo escrito al dicho de los
testigos: de donde nace un lugar comun en pro, y en con
tra; porque la una de las partes se defiende, y apoya en el
juramento de los testigos; y la otra en el testimonio de lo es
crito. Y muchas causas ha habido sobre quién merece mas
crédito. Por los testigos se alega su ciencia, y religion ; ha
ciendo ver, que las pruebas no son sino obra del ingenio. El
contrario puede decir, que la mala voluntad, la enemiga,
el dinero, el miedo, el valimiento, la ambicion, ó la amis
tad es la que hace á un testigo; pero que los argumentos son
pruebas naturales, donde no cabe maca que en estas el juez
se cree á sí mismo; pero en los testigos da crédito á otros. Se
mejantes lugares son comunes á diferentes causas, y se han tra
- --- e- - a y - s- º * -------- --- --

ut qui rogatur (is autem est, et saepius ctoritatem. Quorum mentionem habui,
imperitus) intelligat, aut ne intelligere non ut fierent, sed ut vitarentur.
se neget: quod interrogantis non leve fri Saepe inter se collidi solent, inde te
gus est. statio, hine testes: locus utrinque. Haec
Illae vero pessimae artes testem sub enim se pars jurejurando, illa consensur
ornatum in subsellia adversarii mittere, signantium tuetur. Saepe inter testes, et
ut inde excitatus plus noceat, vel di argumenta quaesitum est : inde scien
cendo contra reum , cum quo sederit; tiam in testibus, et religionem , inge
vel cum adjuvasse testimonio videbitur, nia esse in argumentis dicitur; hine te
faciendo ex industria multa immodeste stem gratia, metu, pecunia, ira, odio,
atque intemperanter, per quae non à se amicitia, ambitu fieri: argumenta ex na
tantum dictis detrahat fidem, sed cae tura duci, in his judicem sibi, in illis
teris quoque, qui profuerant, auferat au alii credere. Communia haee pluribus cauº
2
276 INSTITUCIONES ORATORIAS "

tado varias veces, y se tratarán en adelante. Otras veces hay


testigos por una, y otra parte ; y aquí se ofrece la duda de
quiénes merecen mas crédito; quiénes se arrimáron mas á la
verdad: y quién de los litigantes tenia mas valimiento.
Si alguno quiere añadir en este lugar los testimonios, que
llaman divinos, como oráculos, respuestas celestiales, agüe
ros, &c. entienda que todo esto puede manejarse de dos mo
dos. El uno general; como la interminable disputa entre estoi
cos, y epicúreos sobre si el mundo se gobierna con providen
cia. El otro particular contra qualquiera especie de divinacion,
segun que cae baxo de qüestion. Porque no de un mismo mo
do se confirma, ó refuta un oráculo, y un agüero; sea del vue.
lo de las aves, sea de las entrañas de las víctimas, y el dicho
de los adivinos, ó el pronóstico de los astrólogos; como que en
estas cosas es diversa, y muy distinta la naturaleza.
Para apoyar, ó destruir este género de pruebas, tiene
mucho que trabajar el razonamiento; si fuéron voces, y dichos
de un embriagado, de un loco, ú oidas entre sueños ; ó si
fuéron pronunciadas por niños inocentes; diciendo una parte,
que en ellos no cabe ficcion; y la otra, que los que esto di
xéron, no sabian lo que se decian.
No solamente (y concluyamos) suele usarse del siguien
te lugar oratorio, sino que, si falta, se echa ménos. v. g. Me
diste dinero: ¿quién lo contó? ¿en dónde ? ¿ de dónde se tomó?
Dices que dí veneno: ¿dónde lo compré ? ¿de quién ? ¿ en quán
... - ... 4.
-

—-

sis, multumque jactata sunt, semper gurum , conjectorum , et mathema


que jactabuntur. Aliquando utrinque sunt ticorum fides confirmari , aut refel
testes, et quaestio sequitur, ex his utri li potest, cum sit rerum earum diver
meliores viri : ex causis, utri magis cre Sa ratio.
dibilia dixerint : ex litigatoribus , utri Circa ejusmodi quoque instrumenta
gratia magis valuerint. firmanda , vel destruenda, multum ha
Hie adjicere si quis volet ea, quae bet operis oratio, si quae sint voces per
divina testimonia vocantur, ea respon vinum , somnium , dementiam emissae,
sis oraculis , ominibus, duplicem sciat vel excepta parvulorum indicia , , quos
eorum esse, tractatum : generalem alte pars altera nihil fingere, altera nihil ju
rum , in quo inter stoicos, et Epicuri dicare dictura est.
sectam secutos pugna perpetua est, re Nectantum praestarihoc genus pot
gaturne providentia mundus; specialem est, sed etiam ubi non est, desiderari
alterum, contra partes divinationis, ut solet. Pecuniam dedisti : quis numera
quaeque in, quaestionem cadit. Aliter e vit? ubi 2 unde? Venenum arguis: ubi
uim oraculorum , aliter aruspicum, au emi? à quo? quanti? per quem dedi? quo.
DE M. FABIo QUINTILIANO. LIB. V. 277
to? ¿de quién me valí, para darle ? ¿ quién es testigo de ello?
Que es de lo que exámina Ciceron en la causa de Cluencio,
acusado de haber dado veneno. De las pruebas inartificiales, ó
extrínsecas hemos hablado con la brevedad posible.

CAPÍTULO VIII.
ps LAS PRUEBAS artiriciars.
- Son de tres especies : indicios, argumentos , eremplos.
Reprehende a los que olvidandose de las pruebas , que
son como los nervios de la causa, se extienden en los lu
gares comunes. Añadese una general division de pruebas.
.

L. otra especie de pruebas, que llamamos artificia


les, y consiste en todo aquello, que sirve para confirmar el
asunto, ó es enteramente despreciada por muchos, ó la tocan
muy por encima : los quales, huyendo de la escabrosidad, y
aridez (como ellos piensan) de los argumentos, tan solamen
te se dilatan en la amenidad de los lugares oratorios; y no de
otra manera que los que gustan la yerba del pais de los Lo
tophagos, que nos dicen los poetas, ó los que se dexan en
Es es

conscio? Quae fere omnia pro Cluentio de inartificialibus , quam brevissime


Cicero in crimine veneficii excutit. Haec potui.
- ,
-
".
. .

cA P U T v 11 1. . . .
DE PROBATIONE ARTIFICIALI.

- Ejus tres sunt species: signa, argumenta, exempla. Quordam reprehendit, qui pre
2is probationibus , quibus veluti nervir causae continentur, in locos communes excur
rumt. Subjicit generalem omnium probationum divisionem.
s

P. altera probationum, quae est rida, et confragosa vitantes, amoenio


tota in arte, constatque rebus ad facien ribus locis desident: neque aliter, quam
dam fidem appositis, plerunque, auto hi, qui traduntur à poetis gustu cujusdam
mnino negligitur, aut levissime attin apud Lotophagos graminis, et Sirenum
gitur ab iis, qui argumenta, veluthor cantu delimiti, voluptatem saluti prae
278 INSTITUCIONES ORATORIAS -

cantar de las Syrenas, así estos tales, anteponiendo el agradar


al auditorio á la utilidad, miéntras únicamente pretenden el
oropel de vanas alabanzas, vienen á perder el pleyto, que
defienden. y

Esto no quita que para ayuda, y ornato de los argumen


tos tratemos aquellos lugares, donde el razonamiento suele ex
tenderse : y vistamos (para decirlo as) aquellos nervios, que
mantienen , y dan toda su fuerza al discurso con la hermosura
de estos adornos : como si ocurre el decir, que alguno ha
obrado movido de la ira, del odio, ó del miedo, podremos am
plificar este lugar con algun mayor adorno, y extension, se
gun lo permite la naturaleza de la pasion. De los mismos lu
gares nos valemos tambien para alabar, acusar, ponderar , ó
rebaxar una cosa; para describirla, para quejarnos, para in-.
timidar, animar, y consolar á alguna persona. Pero todo esto
sirve en las cosas, que ó son ciertas, ó hablamos de ellas
como tales. Ni tampoco niego, que consigue algo el orador
con deleytar, y mucho mas con la mocion de afectos. Pero estas
cosas entónces aprovechan mas, quando el juez está ya bien
informado: lo que no se consigue sino con las argumentacio
nes, y lo demas, que sirve para probar la cosa.
Antes de hacer esta division de pruebas, me parece debo ad.
vertir, que en todas ellas hay algunas cosas, que son comunes.
Porque no hay qüestion alguna, que no sea, ó de cosa, ó de
persona: ni los lugares de las pruebas pueden encontrarse fuera
de las circunstancias de cosas, ó de personas. Las pruebas, ó se
- --- -

- - ms-m , ,- r
- º* - - y

tulisse , dum laudis falsa m imaginem aut, certis, aut de quibus tanquam cer
sequuntur, ipsa, propter quam dicitur vi tis loquimur, potest. Nec abnuerim esse
ctoria cadunt. aliquid in delectatione , multum vero
Atqui caetera, quae continuo oratio in commovendis affectibus. Sed haec ipsa
nis tractu magis decurrunt, in auxilium, plus valent, cum se didicisse judex pu
atque ornamentum argumentorum com tat: quod consequi nisiº argumentatio
parantur, nervisque illis, quibus causa ne, aliaque omni fide rerum non pos
SllIIlll S. • -.
continetur, adjiciunt superinducti corpo
ris speciem: ut si forte quid factum iri, Quorum priusquam partiar species,
vel metu, vel cupiditate dicatur, latius indicandum reor, esse quaedam in o
quae cujusque affectus natura sit, per mni probationum genere communia. Nam
sequamur. Iisdem laudamus, incusamus, nec ulla quaestio est, quae non sit, autº
augemus, minuimus , describimus , de in re, aut in persona. Nec esse argu
terremus, querimur, consolamur, hor mentorum loci possunt, nisi in iis, quae
tamur. Sed horum esse opera in rebus, rebus, aut personis accidunt. Eaque, aut
DE M. "FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 279
consideran en sí mismas, ó con relacion á otras cosas: y se fun
dan, ó en los antecedentes, ó en los consiguientes, ó en los
repugnantes; y entónces, ó se toman del tiempo pasado, ó del
tiempo en que sucedió la cosa, ó del que se siguió. Ademas
de esto, probándose las cosas, unas con otras, estas necesaria
mente han de ser, ó menores, ó mayores, ó iguales entre sí.
- Las pruebas se sacan, ó de la misma qüestion separada
de las circunstancias de cosas, y personas; ó de la misma cau
sa, quando no conviene en nada con las demas causas, sino
que es única en su género. , , ,

- Estas pruebas, unas son necesarias, otras creibles, otras


no tienen mas , que el no presentar ninguna contradiccion.
Hay ademas de esto otras quatro especies de pruebas, co
mo : I? Eríste una cosa, luego se destruye la otra ; v.g. Es
de dia, luego no es de noche. 2° Existe esto, luego tambien
aquello ; v.g. Está el sol sobre la tierra, luego es de dia.
3? No existe esto, luego sí lo otro ; v.g. No es de noche,
luego es de dia. 4? No existe esto, luego ni lo otro; v. g. No
es animal racional, luego no es hombre. Dicho esto en comun,
hablaremos ahora de cada especie de pruebas en particular.
. - ... e -

C. a .. . . . . - =

per se inspici solent, aut ad aliud re- quo cognoscitur , proprium.


ferri. Neculla confirmatio , nisi, aut ex ..., Probationum praeterea omnium aliae
antecedentibus , aut ex consequentibus, sunt necessariae, aliae credibiles, aliae
aut ex pugnantibus: et haec necesse est, non repugnantes. Adhuc omnium" pro
aut ex praeterito tempore, aut ex con- bationun quadruplex ratio est : utvel
juncto, aut ex sequenti petere. Nec ulla "quia aliquid est, aliud non sit; u quia
res probari, misi ex alia potest, eaque dies est, nox, non est: vel quia estal
sit oportet, aut major, aut par, autminor. quid, et aliud sit; utquia sol est super
Argumenta vero reperiuntur, aut in terram, dies est: vel quia aliquid non
quaestionibus , quae etiam separatae à est, aliud sit: ut quia nox non est, dies
complexu rerum, personarumque specta- est: vel quia aliquid non est, necaiud
ri per se possint ; aut in ipsa causa, sit;ut quia non est rationale, nec homo
cum invenitur aliquid inea non ex com- est Hisin universum praedictis, partes
muni ratione ductum, sed ejus judicii, de subjiciam. -

- , .
28o ... INSTITUCIONES ORATORIAS
- - º *- º *

- * .
*.

CAPÍTULO IX.
DE Los INDICIos ó sENALEs. s

- T. las pruebas artificiales se reducen á los indicios,


argumentos, y exemplos. Y aunque los mas dicen, que los in
dicios son parte de los argumentos, tengo muchas razones
para separarlos. La primera, que en cierto modo pertenecen
á las pruebas extrínsecas; porque el vestido ensangrentado,
las voces, que se oyéron, los cardenales, y otras señales á es
te tenor, son otros tantos instrumentos como las escrituras, la
voz comun, y los testigos; pues no son pruebas, que dis
curre el orador, sino que se las presenta la misma causa. La se
gunda razon es, que los indicios, aunque sean ciertos, no se
consideran en la clase de argumentos; porque donde ellos se
encuentran, no hay motivo de duda ; pero para los argumen
tos solo hay lugar donde hay qüestion ; y si los indicios no
son ciertos, tan léjos de probar, ellos necesitan de otras nue
vas pruebas. - - º - - ,

Divídense pues estas señales en necesarias, y no nece


sarias: llamadas por los griegos tecmeria, y semeia.
Las primeras son las que no pueden faltar, y por lo mismo
me parece, que no debe hablarse de ellas. Porque quando
-
, º

• es aban Bass

- - º . c AP U T IX,
DE SIGNIs.

Onal, igitur probatio artificialis menta: quia ubi illa sunt, quaestio non
constat, aut signis , aut argumentis, est; argumento autem, misi in re con
aut exemplis. Nec ignoro pierisque vi troversa , locus esse non potest : sive
deri signa partem argumentorum, quae dubia, non sunt argumenta, sed ipsa
mihi separandi ratio haec fuit prima, argumentis egent.
quod sunt paene ex illis inartificialibus. Dividuntur autem in has primas duas
Cruenta enim vestis, et clamor, et li species, quod eorum alia sunt (ut dixi)
vor, et talia, sunt instrumenta, qua quae necessaria sunt, quae graeci vo
lia tabulae, rumores, testes: nec inve cant renº úpta : alia non necessaria,
niuntur ab oratore, sed ad eum cum i quae orquea.
psa causa deferuntur, Altera , quod si Priora illa sunt, quae aliter habere
gna sive indubitata sint, non sunt argu se non possunt: quae mihi vix pertine
DE Mr. FAB1o QUINTILIANo. LIB. v. 28 r
el indicio es evidente, no hay pleyto alguno. Esto sucede quan
do en vista de los indicios forzosamente, ó sucede la cosa, ó
ha sucedido; ó por el contrario ni puede ser, ni haberse he
cho : y entónces no hay otra qüestion sino del hecho.
Otras señales hay dudosas, ó probables. Y dado caso, que
por sí solas no hacen argumento, juntas á lo demas confir
man la cosa. º N
A la señal llaman algunos indicio, otros la llaman rastro,
ó huella; así como por el rastro de la sangre sacamos el homici.
dio. Pero como esta pudo salir de las narices, y manchar el
vestido, ó haber salpicado de una víctima, no es indicio ma
nifiesto de homicidio; á no ser que concurran otras circuns
tancias, como de enemistad, de amenazas hechas á la persona
muerta, ó de haberse hallado donde se hizo la muerte. En
tónces este indicio quita la duda de lo que no sabiamos con
certeza. Hay otros indicios, que pueden serlo de cosas muy
distintas, como el color amoratado, y la hinchazon, que pueden
indicar veneno, ó crudeza. La herida del pecho puede ser
igualmente indicio de muerte, que uno se dió, ó recibió de
otro. Estas cosas en tanto prueban, en quanto son ayudadas
de otras circunstancias.
-
- - -

, ,, , , , , , ,
- , , , , , si - , , , s; - - , , - º * -- - * - -
-
- * ,
3.- -=mºm s- º --- - ---

N
re ad praecepta artis videntur. Nam ubi des. At quía sanguís , vel è hostia re
est signum insolubile, ibi ne lis, quidem spersisse vestem potest , vel ex naribus
est. Id autem accidit, cum quid aut ne profluisse; non utique, qui vestem cruen
cesse est fieri, factumve esse, aut cer tam habuerit, homicidium fecerit. Sed
te omnino non potest fieri , vel esse fa ut per se non sufficit, ita caeteris ad
ctum : quo in causis posito , lis non est junctum , testimonii loco ducitur, si
nisi facti. inimicus, si ante minatus, si eodem lo
Alia sunt signa non necessaria , quae co fuit. Quibus signum cum accesit, ef
«tº ºria graeci vocant : quae etiamsi r: ficit, ute quae suspecta erant, certa vi
ad tollendam dubitationem sola non suf deantur. Alioqui sunt quaedam signa u
ficiunt, tamen adjuncta caeteris, pluri trique parti communia, ut livores, tu
mum valent. mores. Nam videri possunt, et venefi
Signum vocant ( ut dixi ) o vueiev cii, et cruditatis, Et vulnus in pectore,
quanquam id quidam indicium, quidam sua manu, et aliena perisse dicentibus,
vestigium nominaverunt, per quod alia in aequo est. Haec perinde firma ha
res, intelligitur a ut per sanguinem cae bentur, atque extrinsecus
y -
adjuvantur.
. y º

ºs, - zas . -- - -

ToM. L. Nn
v.

282 INSTITUCIoNES oRAToRIAs

CAPÍTULO X. . . . .»
, , ,,, ,,
DE Los ARGUMENTos, ó PRUEBAs.

I. Qué es argumento. II. Se pueden tomar de las per


sonas, ó de las cosas. 1º Los que miran a las personas se
tocan brevemente. 2º. Por cosas entendemos causas, luga
res, tiempo, facultades, ó instrumentos , y el modo. Aná-,
dense la definicion , género , especie , diferencia, propieda
des de la cosa, negacion, de lo que es , semejanza, contra
rios, repugnantes , derivados , y comparacion, III. La na
turaleza de las cosas no permite recorrer todas las especies
de argumentos, Considérese lo que pretendemos probar. Pó
mese eremplo de una causa de esta naturaleza. IV. Qué jui-.
S
cio debemos hacer de estos lugares , y qué uso,
Y es o
( . . . . . . . . . ... o 3
I. V amos á los argumentos, baxo, cuyo nombre entienden
los griegos los enthymemas, epicheremas, y demostraciones:o
aunque entre estos admiten alguna diferencia, pero el fin casi es
uno mismo. Siendo el argumento una manera de probar la cosa,
deduciendo unas de otras-; -como quando probamos lo dudoso
«, ..., 3 y cí º " , º ..-9ºs º º , , , , : , , , , , se-.
s x º -, a . . . . . , -c.. a, º b . . . ...»

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-º s , , , , , , º si is º C. A. PU T X. ...
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, , , , , , , , , , , "D El A R G U M E N Trs. 9 : esa º sºººº
• , 2 a º A ... , , , , , ,, , , , , , ,- , y 3,3 r. º:
I. Quid sit argumentum. II. De locis argumentorum: quae vet à perronis , ve a º
rebus ducuntur."I. Quae personas spectant breviter percurrit. 2. Ad res pertinent º
causae, locur, tempur, facultutes, seu instrumenta, modus. Praeterea, definitio, ge
nus, species , diferentia, propria, remotio, similia, dissimilia, contraria, pugnantia, 2
consequentia, conjugata , comparatio. III. Singulas argumentorum species exequi non ,
patitur natura rerum. Pidendum in primis, quid probari opus sit, E. remplumejutno- ,
di causae. IV. Quid rentiendum de bis argumentorum locis, et quomodo eis utendum.

Nue
de argumentis. Hoc enim “qua horum nominum diferentia , et
nomine complectimur omnia quae graeci iamsi vis eodem fere tendit. cum sitar
ivdvº áuara, zuxeº y úºara, a zo de Xas gumentum ratio probationem praestans,
vocant, quanquam apud illos est ali- qua colligitur aliud per aliud , et quae
n, º " ”
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB.v. 283
por lo cierto, es forzoso, que en la causa haya algo que no
admita duda. Porque si no hay ninguna cosa cierta, ó por
donde hacer evidente lo dudoso, no hay medio para probar.
Cosas ciertas llamamos primeramente las que se sujetan
á los sentidos, como lo que vemos, ú. oimos; y semejantes á
estas son las señales. En segundo lugar las que admite el co
mun consentimiento de todos , v.g. que hay Dios; que los
padres deben ser amados. En tercero lugar lo que está esta
blecido por las leyes ; y lo que está recibido por la opinion
comun del pais, donde se trata la causa, ó por la costum
bre. Así vemos, que muchas de la cosas del derecho, se
fundan en la costumbre, no en las leyes. Ultimamente todo
aquello que está ya ántes probado; aquello, en que convienen
las partes; y lo que el contrarios no niega. Así, argumentare
mos de este modo Porque hay providencia, que gobierne el
mundo, debe haber gobierno en una república. Así como debe
ra haber gobierno en una república, siendo el mundo gober
nado con providencia. . . . . . . . *

El que ha de manejar los argumentos, debe tener bien co


nocida la naturaleza de las cosas, para saber lo que da de sí
cada una de ellas. De donde nacen los argumentos llamados
verisímiles. De estos hay tres especies. La primera , que es
la mas fuerte, es de lo que comunmente acaece. v.g.: El amar
los padres
...
á sus hijos ; porque esto es lo que comunmente
. . . C - - - • - - º * - ) • -

ár, 2- es - e a º

* -- - º si rº ...»- º * ----------

quod est dubium , per id, quod dubiumr que in jure non legibus, sed moribus
non est, confirmat, necesse est esse ali constant. Si quid inter utra mque partem.
quid in causa, quod probatione non egeat. convenit, si quid probatum est, deni
Alioqui º nihil erit, quo probemus , nisiº que cuicunque adversarius non contradi
fuerit quod aut sit verum, autvideatur, l cit. Sic enim fiet argumentum : cum pro
ex quo dubiis fides fiat. - videntia mundus regatur, administran
Pro certis autemr habemus, primumr da est respublica; ut administranda res
quae sensibus percipiuntur, ut quae vi publica sit, si liquebit mundum provi
demus, audimus : qualia suntº signa. dentia regi. - -

Deinde ea in quae communi opinione , Debent etiam nota esse recte argu
consensum est: deos esse; praestandam menta tractaturo, vis, et natura omnium
pietatem parentibus. Praeterea quae le rerum, et quid quaeque earum plerun
gibus cauta sunt, quae persuasione, et
iamsi, non omnium hominum , ejusta
¿? Hincenim sunt quae aniza
icuntur. Credibillum autem genera sunt
men civitatis, autgentis, inquares agi tria. "Unum firmissimum, quod fere ac-,
tur, in mores recepta sunt : ut plera cidit, ut liberos à parentibus amari. Al
Nn 2
284 y INSTITUCIONES ORATORIAS -

yemos. En segundo lugar, atendido el órden regular; v.g. Que


llegue a mañana, el que hoy está sano, y bueno. En tercer lu
gar; porque no es cosa repugnante 3 v, g Que el hurto, que
se hizo en una casa , le cometiese quien estuvo en ella.
Por eso Aristóteles en el libro segundo de la retórica recor
re muy por menor lo que á cada cosa, y á cada hombre sue
le acontecer de ordinario: qué cosas, ó qué suerte de perso
mas tienen entre sí naturalmente antipatía, ó simpatía : quié
nes codician las riquezas, y honras; y quiénes dan en supers
ticion qué cosas aprueban los buenos; qué pretensiones tie-,
nen los malos; quáles son las pasiones de un soldado; y quá
les las de un campesino y los medios para evitar, ó conse
guir qualquiera cosa. - f.

, Pero yo omito todo esto; porque ademas de ser obra lar


ga, é imposible, ó por mejor decir infinita, es cosa que de
pende del entendimiento cómun á todos. Si alguno entendiere
serle esto de provecho, ya le he mostrado adonde debe acu
dir. Todas las cosas probablemente ciertas, de donde suelen
tomarse la mayor parte de los argumentos, nacen de las si
guientes fuentes : Si es probable, que un hijo haya muerto á
su mismo padre: que este haya cometido incesto con su propia
hija. Al contrario Que nada tiene , de nuevo el dar venenor
una madrasta ; y el cometer adulterio un luaurioso. Y de estas
otras: Si la maldad se cometió públicamente; si diro una men
tira por una corta cantidad de dinero. Porque cada una de
estas personas tiene sus costumbres, conforme á las quales obra
------- º * ---

- -

- - r, • - - "

terum, velut propensius: eum qui recte , Verum hoc exequi mitto. Non enim
valeat, in crastinum perventurum. Ter-2 longum tantum , sed etiam, impossibile,
tium tantum non repugnans: in dome o ac potius infinitum est: praeterea posi
furtum factum ab eo, qui domi fuit, tum in, communi omnium intellectu. Si
Ideoque Aristoteles in secundo de arte , quis tamen desideraverit, à quo pete- a
rhetorica libro diligentissime est execu- ret, ostendi. Omnia autem credibilia,
tus, quid cuique rei, et quid cuique ho- ; in quibus pars maxima consistit argu
mini soleat accidere: et quas res, quos- mentationis, ex hujusmodifontibusfluunt.
que homines, quibus rebus, authomi- An credibile sit a filio patrem occisum,
nibus, vel conciliasset, vel alienasset i-n incestum cum filia commissum et con
psa natura : ut divitias qui sequatur, tra, veneficium innoverca , adulterium
aut ambitum , aut superstitiohem quid, in luxurioso. Illa quoque: an scelus pa
boni probent, quid mali petant, quid º lam factum, an falsum dixerit propter
milites, quid rustici: quo quaeque mo- exiguam summam. Quia, suos quisque
do res vitari, vel appeti soleat. horum , velutmores habet, plerunque
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 285
ordinariamente, pero no siempre. De otra manera serian prue
bas indubitables, no argumentos. s -

II. Exáminemos ahora los lugares de donde se sacan los ar


gumentos : aunque algunos tienen por tales á los que pusi
mos arriba. Por lugares entiendo , no aquellos, que co
munmente entendemos, como quando tratamos largamente
contra la luxuria, y adulterio, y otros semejantes; sino aque
llos como manantiales, de donde debemos sacar las ¿
Pues á la manera, que no en qualquiera tierra se crian todas
las cosas; y no es fácil encontrar una ave, ó fiera, si ignoramos
el pais que las produce, y donde moran: y así como entre los
peces unos gustan de lugares llanos, otros de escabrosos, en
distintas regiones, y playas: y en vano buscarás en nuestro mar
el pez elope, ó scaro: á este modo no qualquiera argumento se
toma de qualquiera cosa : y así no se deben buscar indiferente
mente en todo. Por otra parte el sacar los argumentos, si no se
sabe donde se ha de acudir, está expuesto á muchos errores; y
si no aplicamos la meditacion para discurrirlos, despues de mu
chas fatigas no daremos con ellos, sino por una rara casualidad.
Pero al contrario el que sepa las fuentes de cada argumento,
quando se le presente dicho lugar, al punto... le ocurrirá la
2
prueba. - -

«, 1? Primeramente los argumentos se han de tomar de las


personas: pues, como ya diximos, la primera division, que
hacemos, es de personas, y de cosas. De forma, que la cau
sa, tiempo, lugar, ocasion, instrumentos, y modos vienen
... - -2 - º "? .-.
º- sumas
-

*... º a 3- º * - º * -----

tamen, non semper: alioqui indubitata


essent; non argumenta. ... ". r
nostro mari, aut scarum ducas: ita non
omne argumenturn undique venit, ideo
II. Excutiamus nunc argumentorumy que non passim quaerendum est. Multus
locos : quanquam quibusdam ii quoque, alioqui error est, et exhausto labore,
de quibus supra dixi , videntur. Locos quod non ratione scrutabimur, non po
appello, non ut vulgo, nunc intelligun terimus, invenire nisi casu. At si scieri
tur, in luxuriam, et adulterium, etsi mus ubi quicque mascatur, cum ad lo
milia : sed sedes argumentorum , in qui cum ventum erit, facile quod in eo erit,
bus latent, ex quibus sunt petenda. Nam pervidebimus.
ut in terra non omni generantur omnia, 1. In primis igitur argumenta saepe à
mec avenn - autferam reperias, ubi quae persona ducenda sunt : cum sit, ut di-.
que masci, aut morari soleat, ignarus: et xi, divisio, ut ommia in haec duo par
piscium quoque genera alia planis gau tiamur, res, atque personas; ut causa,
dent, alia saxosis, regionibus etiam, lit tempus, locus, occasio : instrumentum,
toribusque discreta sunt ; nec helopema modus, et caetera, rerum sint acciden
286 INSTITUCIONES ORATORIAS

á ser como accidentes de las cosas. Me parece no debo tratar,


como muchos lo hiciéron, de todos los accidentes de las per
sonas, sino de aquellos de donde tomaremos los argumentos.
Y es como se sigue. - ,

La primera circunstancia de persona de donde sacaremos


las pruebas, es el linage: ", porque comunmente los hijos
suelen ser parecidos á quienes los engendráron ; y aun de aquí
suelen tomar, digamos así, las semillas primeras, ó para la
virtud, ó para el vicio. . . , , , , , , ... . . s
. . .
ce La nacion ": porque cada nacion tiene sus costumbres
peculiares; y no son unas mismas en un romano, en un grie
go, y en un bárbaro. . .. . . . . . . . . . . sº
-
a La patria ": porque de la misma suerte los estilos, y
costumbres varian segun loso pueblos; y aun las opiniones, -
El seró º; v.g. un latrocinio mas creible se hace en el
hombre; y en la muger el dar veneno... o
La edad"; porque una cosa conviene mas á unos años,
que á otros. - ... . . . . . . . .. - 2

... La educacion, y enseñanza ": pues importa mucho el


saber los maestros, y la crianza, que uno ha tenido. - nº
La forma del cuerpo, y complexion º: por quanto de la
hermosura se saca argumento de liviandad, y de la robustez,
y firmeza de desvergüenza del sugeto; ó se funda argumento
en contrario de la complexion contraria. :
La fortuna ": siendo cierto, que una cosa no se hace igual.
mente probable en el rico, que en el pobre en uno que tiene
amigos, parientes, y deudos; y en quien nada de esto tiene.
----------- º * ? - sesº- - - - - --

=
- - tr o . , - : 3 ty2 ro *
tia. Personis autem non quicquid accidit, Sexus. Ut latrocinium facilius in viro,
exequendum mihi est, ut plerique fece- veneficium in femina credas. ..., º
runt, sed unde argumenta sumi possunt. Aetas. Quia aliud aliis annis, magis
Ea porro suntgemus. Nam similes convenit- * - 2
- cio
parentibus, ac majoribus suis filii ple Edueatio, et disciplina. Quoniam re
runque creduntur : et nonnunquam ad fert à quibus, et quo quisque modo sit
honeste, turpiterque vivendum, inde cau institutus.
sae fluunt. Habitus corporis-Ducitur enim frequen
Natio. Nam et gentibus proprii mo ter in argumentum species libidinis;robur
res sunt: nec idemr in barbaro, roma petulantiae. His contraria in diversum.
no, graeco probabile est. Fortuna. Nec enim idem credibileº
Patria. Quia similiter etiam civita est in divite, ac paupere : propinquis,
tum leges, instituta , opiniones habent amicis, clientibus abundante, ethis" o
differentiam. mnibus destituto. . º
DE M. FABIO QUINTILIANO. 287 LIB. V.
La condicion , y estado ": habiendo mucha diferencia en
tre el noble, y plebeyo; entre uno que tiene empleo público,
y entre el particular. Y va á decir mucho, que uno sea padre
de familias, ciudadano, libre, casado, y tenga hijos; ó hijo
de familia, extrangero, esclavo, soltero , y sin hijo al
guno. Y

... La índole ”: porque el ser avaro, iracundo, misericor


sdioso, cruel, y riguroso por lo comun, ó prueban, ó hacen in
creible la cosa. Asimismo el trato en comer , y vestir”: co
mo si es frugal, parco, ó rústico. .

a Los estudios, y profesiones”: pues vemos, que son dis


tintas las pasiones, y modo de pensar del labrador, comer.
ciante, abogado, soldado, navegante, médico, &c. c
. ... Debe tambien tenerse muy presente el pie de que cada
uno coxea; si aparenta ser rico, y poderoso ; si presume de
erudíto; si afecta el ser justo, y llevar las cosas por sus caba
les. Asimismo sus procedimientos, y dichos de la vida pasada.
Porque de lo pasado sacamos argumento para lo presente.
Algunos ponen tambien por lugar retórico de persona la
etimología del nombre que le cupo ”: pero rara vez podrá
sacarse de ahí argumento; y entónces será muy débil, á no
concurrir otras causas, que acrediten que lo que le atribuimos,
quadra bien al nombre que tiene ; como el de sabio, grande,
prudente, sencillo. Así vemos, que en Lentulo º el nombre
de Cornelio parecia aciago; y que le hacia sospechoso de la
conjuracion pues segun rezaban los pronósticos de las sibi
las, y las respuestas de los agoreros, la dominacion de Roma
- º*** - - -

—, a - ,,, , , , , , ; ... = - - a s. v. ; nor, e


- Conditionis etiam distantia est. Nam dicus, aliud, atque aliud eficiunt. , , ,
clarus, an obscurus, magistratus, an pri- Intuendum etiam quid affectet quis
vatus, pater, an filius, civis, an peregri que, locuples videri, an disertus, justus,
nus, liber, an servus , maritus, an coe an potens. Spectamtur anteacta, dicta
lebs, parens liberorum, an orbus sit, plu que. Expraeteritis enim aestimari solent
rimum distat. praesentia. * , - ,*
Animi natura. Etenim avaritia, ira Ponunt in persona, et nomen, quod
cundia, mísericórdia, crudelitas, seve quidem ei aceidere necesse , est, sed in
ritas, áliaque his similia afferunt fre argumentum raro cadit: nisicum autex
quenter fidem, aut detrahunt: sicut vi causa datum est, ¿ut sapiens , magnus,
ctus, luxuriosus, an frugi, an sordidus, planus: aut., et ipsum alicujus cogitan
quaeritur. - º tionis attulit causa m , ut Lentulo con
. Studia quoque: nam rusticus, foren jurationis, quodlibris sibyllinis, aru
sis, negotiator, miles, navigator, me-. spicumque responsis dominatio dari tri
288 - INSTITUCIONES ORATORIAS

había de recaer sobre tres de la raza de los Cornelios; y él


creia ser el tercero despues de Syla, y Cina, porque él tam
bien era Cornelio. Tambien hallamos en Eurípides , que el
hermano de Polynices se valió contra él de la etimología del
nombre ”, como de argumento, pero frívolo, de sus malas
costumbres. Pero donde este tiene mas freqüente uso, es en
las chanzas, como lo usó Ciceron repetidas veces contra Verres.
De este, ó semejante modo son los argumentos, que se
sacan de las personas. Porque es imposible el recorrer todo
quanto se ofrece que decir en esta, y otras materias; y nos
contentamos con apuntar, y mostrar el camino á los que
quieran saber la cosa mas á fondo.
2? Vamos ahora á los adjuntos de las cosas, que por ir
unidas con las personas, son ¿ primeras, que debemos tener
presentes. En qualquiera cosa pues lo primero, que se conside
ra, es: porqué se hizo ; dónde ; en qué tiempo; de qué modos
ó por qué medio ; esto es por quiénes.
Los argumentos primeramente Pueden tomarse de las
causas de un hecho sucedido ya , ó de una cosa, que puede
suceder”, cuya materia, que unos llaman ylen, otros dyna
min , , comprehende dos géneros, y cada uno quatro especies.
Porque comunmente el motivo de hacer alguna cosa, ó es por
conseguir algun bien, ó por aumentarle, ó por conservarle,
ó para hacer uso de él: ó por huir algun mal, ó vernos li-,
bres de él, ó por aminorarle, ó trocarle por otro menor. ”
Las quales quatro cosas importa mucho el saberlas, quando
mREEEsmas
--- - º ***

bus Corneliis dicebatur, seque eum ter mus, ideoque prima tractanda. In omni
tium esse credebat post Syllam, Cinnam bus porro, quae fiunt, quaeriti r aut qua
que, quia, et ipse Cornelius erat. Nam, re, aut ubi, aut quando, aut quomodo,
et illud exstatapud Euripidem , frigi aut per quae facta sunt.
dum sane, quod nomen Polynicis ut ar Ducuntur igitur argumenta ex causis
gumentum morum frater incessit. Joco factorum, vel futurorum : quorum ma
rum tamen exeo frequens materia, qua teriam , quam vaur alli duraºuy alii
Cicero in Verrem non semel usus est. nominaverunt, in duo genera, sed qua
Haecfere circa personas sunt , aut ternas utriusque dividunt species. Namu
his similia. Nee enim complecti omnia, fere versatur ratio faciendi circa bono
vel in hae parte, vel in caeteris possu rum adeptionem, incrementum , conser
mus, contenti rationem plura quaesitu vationem, usum ; aut malorum evitatio
ris ostendere, nem, liberationem, imminutionem, con
2. Nunc ad res transeo , in quibus versionem : namque haec in deliberan
maxime sunt personis juncta, quae agi do plurimum valent. Sed has causas ha
DE M. FABIO QUINTILIANO. Lr B. V. 289
se delibera. Estos son los motivos de hacer alguna cosa bue
na; porque las malas comunmente nacen de opiniones erró-.
neas: siendo el principio, que nos mueve una cosa, que sien
do perjudicial, la tenemos por buena. De aquí dimanan las
opiniones falsas, y las pasiones del hombre; entre las quales
las mas ordinarias son: ira, odio, envidia, codicia, esperanza,
ambicion, atrevimiento, miedo, y otras á este tenor. Júntanse
á veces á lo dicho otras cosas casuales como : ignorancia, y em
briaguez. Las quales como quiera que á veces excusan la cul
pa, pero otras sirven para confirmarla, como si uno mató á
Antonio, pretendiendo matar á Juan. - -

Otras veces se sacan los argumentos del lugar.” Porque


para probar alguna cosa, va á decir mucho que sea llano, ó
montuoso; que sea marítimo, ó tierra adentro; erial, ó sem
brado; poblado, ó desierto; cercano, ó apartado; ventajoso
para lo que se pretende, ó al contrario. Del qual argumento
vemos, que Ciceron hace mucho uso en la causa de Milon.
Este, y otros argumentos semejantes sirven para las del género
deliberativo; pero alguna vez para el judicial: como si el lu
gar es sagrado, ó profano ; público, ó Secreto; nuestro, ó ex
traño. En las personas ; si es persona pública, ó un mero par
ticular; padre de familias, extrangero, &c. Porque de aquí
nacen los pleytos, y causas forenses. v.g. El que hurta de un
templo, como tú lo hiciste, no cometió simple hurto, sino sa
crilegio. El lugar se reduce freqüentemente á la qualidad: por
-

º y r, -

-
*
- -
-

bent recta: prava contra ex falsis opi desertus , propinquus, an remotus , op


nionibus veniunt. Nam esthis initium ex - portunus consiliis, an adversus. Quam par
iis, quae creduntur bona, aut mala: in tem videmus vehementissime pro Milo
de errores existunt, et pessimi afectus; ne tractasse Ciceronem. Ethaec quidem,
in quibus sunt ira, odium, invidia, cu et similia ad conjecturam frequentius per
piditas, spes, ambitus, audacia, me tinent: sed interim ad jus quoque, pri
tus, caeteraque ejusdem generis. Acce vatus, an publicus, sacer, an profanus,
dunt aliquando fortuita , ebrietas, igno noster, an alienus : ut in persona , ma
rantia. Quae interim ad veniam valent, gistratus, pater, peregrinus. Hinc enim.
interim ad probationem criminis: ut si quaestiones oriuntur. Privatam pecuniam
quis, dum alii insidiatur, alium dicetur sustulisti : verum quia de templo , non
interemisse. furtum, sed sacrilegium est. Ad quali
Ducuntur argumenta, et ex loco. Spe tatem quoque frequenter pertinet locus.
ctatur enim ad fidem probationis, mon Neque enim idem, ubique, aut licet, aut
tanus, an planus, maritimus, an mediter decorum est. Quin etiam in qua quicque
raneus, consitus, an incultus, frequens, an civitate quaeratur, interest: moribus e
ToM. L. Oo
29o INSTITUcioNEs oRAToRIAs
que una misma cosa no está bien, ni es lícita en qualquiera par.
te. ¿Qué mas? debemos tener presente el pueblo donde se tra
ta la causa; pues es notable la diferencia de leyes, y costum.
bres de cada pais. Sirve esto tambien para recomendar, ó vi
tuperar la cosa. Así Ayax (Ovid. Metam. lib. 13. v. 6.)
Delante de las naves pleyteamos,
YUlyses conmigo se compara.
Y Milon oyó, que uno de los cargos que le hacian, era el
haber muerto á Clodio en el mismo lugar, donde estaban en
terrados sus mayores. Por Milon. 17. 78.
Tambien contribuyen estas mismas circunstancias para per
suadir alguna verdad como la del tiempo ”, á la que atende
mos tanto en el género deliberativo, como en el demostrativo:
aunque tiene mas freqüente uso en el judicial. Porque no so
lamente por ella se averigua la justicia, y derecho, sino que
hace variar la cosa, y aun contribuye, para poderla conjetu
rar ; como que á veces no dexa rastro de duda : v.g. si, se
gun lo que diximos arriba, hacemos ver que el escribano, que
dicen autorizó la escritura, falleció ántes de su fecha : ó que
quando se supone haber uno cometido el delito, ó era aun muy
niño, ó no habia aun nacido. Fuera de lo dicho se sacan los
argumentos, ó de lo que antecedió á la cosa, ó de lo que fué
á un mismo tiempo, ó de lo que siguió á ella. De los ante
cedentes, como: tú le habias amenazado quitarle la vida; sa
liste de noche; y le tomaste la delantera, quando iba por su
camino. Por los adjuntos : v.g. Se oyó ruido; comenzáron á
- - =mº

mim, et legibus distant. Ad commenda jecturam plurimum confert: ut cum in


tionem quoque, et invidiam valet. Nam, terim probationes inexpugnabiles afferat,
et Ajax apud Ovidium, ante rates, in quales sunt, si dicatur (ut supra posui)
- quit, asimus causam, et mecum confer signator, qui ante diem tabularum de
zur Ulysses. Et Miloni inter caetera ob— cessit: aut commisisse aliquid, vel cum
jectum est, quod Clodius in monumen infans esset, vel cum omnino natus non
tis ab eo majorum suorum esset occisus. esset. Praeter id, quod omnia facile ar
Ad suadendi momenta idem valet, gumenta, aut ex iis, quae ante rem fa
sicut tempus, cujus ratio , et in consi cta sunt, aut ex conjunctis rei, aut con
liis quidem , et in illo demonstrativo ge sequentibus ducuntur. Ex antecedentibus,
mere versatur: sed in judiciis frequentis mortem minatus es , noctu existi, pro
sima est. Nam , et juris quaestiones fa ficiscentem antecessisti. Ex adjunctis, so
cit, et qualitatem distinguit, et ad con nus auditus est; elamor sublatus est. Ex
.." -
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 29r
gritar. De los consiguientes, como: hecha la muerte te ocul
taste, huiste, y apareciéron señales, y cardenales en el cadáver.
Se ha de tener cuenta tambien con el poder, fuerzas, y
facultades ”, principalmente quando tratamos de la averigua
cion del autor del delito. Porque se hace mas probable, que
los mas hayan muerto á los ménos; los fuertes á los cobardes;
los que velaban á los que dormian; y los armados á los des
prevenidos; y del mismo modo se sacan los argumentos en
contrario. Lo mismo tendremos presente en el género delibe
rativo: pero en el judicial se reduce todo lo dicho á dos pre
guntas: si tuvo intencion de hacer la cosa; y si podia: en don
de la esperanza de salir con el hecho, es indicio de que tam
bien tendria deseo. Así conjetura Ciceron: Clodio es quien ar
mó celadas á Milon, y no Milon á Clodio. Este iba acompa
fiado de esclavos forzudos; aquel de mugeres. Este á caba
llo ; aquel en coche. Este desembarazado ; aquel embaraza
do con el capote. Los instrumentos se cuentan entre las facul
tades; porque aumentan el poder para alguna cosa. Pero de
los instrumentos á veces quedan señales, como la punta del pu
ñal en la herida. - -- º

- Juntase despues el modo º con que se hizo la cosa; el


qual mira á la qualidad del hecho, ó á las qüestiones, que de
penden de los escritos : como quando negamos, que el adúl
tero no dió veneno, porque podia, ó le convenia mas el qui
tarle la vida á cuchillo : ó á la conjetura, como el decir, que
hizo la cosa con buena intencion, y por lo tanto no se guar
- - == EEE ..., º - -

insequentibus suntila: latuisti, profu mitatu: ille in equo, hic in rheda : iIle
gisti, livores, et tumores apparuerunt. expeditus, hic penula irretitus. Faculta
Intuendae sunt, praecipueque in con ti autem licet instrumentum conjungere.
jecturis, et facultates. Credibilius este Sunt enim in parte facultatis, et copiae.
nim occisos à pluribus pauciores, à fir Sed ex instrumento aliquando etiam si
mioribus imbecilliores , à vigilantibus gna nascuntur, ut spiculum in corpore
- º
dormientes, à praeparatis inopinantes. inventum.
Quorum contraria in diversum valent. His adjicitur modus, quem reír y
Haec in deliberando intuemur, et in ju dicunt : quo quaeritur, quemadmódum
diciis ad duas res selemus referre, an quid sit factum. ld quod tum ad quali
voluerit quis, an potuerit: nam, et vo tatem , scriptum que pertinet; ut si me
luntatem spes facit. Hincilla apud Ci gemus adulterum veneno occidisse, cum
ceronem conjectura : insidiatus est Clo ferro licuisset occidere, sed vel oppor
dius Miloni, non Milo Clodio. Ille cum tuisset: tum ad conjecturas quoque ut
servis robustis, hic cum mulierum co si dicam bona mente factum , ideoque
Oo 2
292. ..., INSTITUcIoNEs oRATORIAs --
dó; ó con fin malo, y siniestro, y que por lo mismo la hizo
de noche, y en lugar solitario, donde no le viesen.
Quando se trata de la naturaleza de la misma cosa , des
nuda de toda circunstancia, consideramos: Si existe ; qué es;
y cómo es. Pero como hay lugares oratorios comunes á estos
argumentos, no haremos mas divisiones; y así los reducire.
mos al lugar donde pertenezcan. a

Tambien se sacan los argumentos de la definicion de la


cosa.” Esto es de dos maneras: porque ó inquirimos llana
mente : Si esto es virtud; ó supuesta esta nocion, solo pre
guntamos: Qué cosa es virtud. Esto, ó explicando la cosa en
comun, como: La retórica es arte de bien hablar; ó desme
nuzándola en sus partes: La retórica es arte de disponer, in
asentar, y hablar de memoria, y con unafina pronunciacion.
Demas de esto definimos la cosa, explicando su naturaleza,
como en los exemplos puestos; ó por su etimología, como
assiduus de asse dando ; locuples de locorum copia ; pecu
niosus de pe corum copia.
Muy semejantes á la definicion son el género, especie, di
ferencia, y propiedad: de todo lo qual se sacan tambien las
pruebas.
Género ”: contribuye muy poco para probar las espe
cies, que estan baxo de él; y para negarlas muchísimo : v. . 8.
No porque sea arbol, ha de ser plátano 3 pero si no es árbol,
mº se su amasas-a-Dº-º

palam; mala, ideoque ex insidiis, no aut antecedente finitione, quid sit vir
ctu, in solitudine. tus. Id aut in universum verbis com
in rebus autem omnibus de quarum plectimur , ut, rhetorice est bene di
vi, aut natura quaeritur, quasque etiam cendi scientia: aut per partes, ut, rhe
citra complexum personarum, caetero torice estrecte inveniendi, et disponen
rumque, ex quibus fit causa, per se in di, et eloquendi cum firma memoria,
tueri possumus, tria sine dubio rursus et cum dignitate actionis, scientia. Prae
spectanda sunt, an sit, quid sit, quale terea finimus, aut vi, sicut superiora:
sit. Sed quia sunt quidam loci argumen autºrvº. Aºyía, ut assiduum ab asse
torum his omnibus communes, dividi in dando, et locupletem à locorum , pecu
haectria genera non possunt: ideoque lo niosum à pecorum copia.
cis potius, utin quosque incurrent, sub Finitioni subjecta maxime videntur
jicienda sunt. genus , species, diferens , proprium.
Ducuntur igitur argumenta ex fini Ex his omnibus argumenta ducuntur,
tione, seu fine: nam utroque modo tra Genus ad probandam speciem mini
ditur. Ejus duplex ratio est: autenim mum valet, plurimum ad refellendam.
simpliciter quaeritur, Sitne hoc virtus: Itaque non quia est arbor, platanus est:
y
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB, V, 293

mucho ménos será plátano. Lo que no es virtud, muy lejos


está de ser justicia. Por lo qual para probar la cosa hemos
de descender á la última especie; y así no diremos: El hom
bre es animal; porque animal es género. Ni: Es mortal; por
que dado que sea especie, conviene á otras cosas tambien es
ta difinicion. Pero diciendo: Es racional, no hay mas que pe
dir, para demostrar lo que queremos. . . ... , ,, , , ,
Al contrario la especie ” sirve para probar el género, y
sirve muy poco para negarle. Porque lo que es justicia, se
guramente es virtud: pero lo que no es justicia, puede tam
bien ser virtud, como la templanza, constancia, fortaleza: pues
nunca el género se niega de la especie, sino negando todas
las especies, que se encierran dentro de un género, así : Lo que
ni es inmortal , ni mortal, no es animal. -

A lo dicho se suelen añadir las propiedades , y diferen


sias de la cosa.” Con las propiedades se confirma la defini
cion, que la explica; y con las diferencias se destruye. Pro
piedad llamamos lo que conviene solamente á la cosa, como
la conversacion, y risa al hombre: ó quando le conviene una
cosa, aunque conviene tambien á otro, como el calentar al
fuego. A este tenor hay diferentes propiedades, como en el
mismo fuego el lucir, y dar calor. Por donde qualquiera pro
piedad que falte, hará defectuosa la definicion; y no porque
tenga, é incluya algunas, será perfecta. Es muy comun el in
quirir las propiedades de una cosa : por lo que si fundados en

*- Rºma-r

at quod non est arbor, utique platanus nus, nisi omnes species, quae sunt ge
Inon est. Nec quod non est virtus , uti neri subjectae, removeantur : hoc mo
que potest esse justitia. Itaque à genere do: quod neque immortale est, neque
perveniendum est ad ultimam speciem: mortale, animal non est.
ut, homo est animal, mon est satis, id His adjiciunt propria, et differentia.
enim genus est : mortale, etiamsi spe Propriis confirmatur finitio , diferenti
cies est, cum aliis tamen communis fi bus solvitur. Proprium autem est, aut
nitio: rationale, nihil supererit ad de quod soli accidit, ut hornini sermo, ri
imonstrandum id quod velis. sus : aut quod utique accidit, sed non
Contra species firmam probationem soli, utigni calefacere. Et sunt ejusdem
habet generis, infirmam refutationem. rei plura propria, utipsius ignis luce
Mam quod justitia est, utique virtus est: re, calere. Itaque quodcunque proprium
quod non est justitia , potest esse virtus, deerit, solvet finitionem : non utique
utest fortitudo, continentia, constantia. quodcunque erit, confirmabit. Saepis
Nunquam itaque tolletur à specie ge sime autem, quid sit proprium cujus
294 INSTITUCIONES ORATORIAS

la etimología, dixéramos, que es propio del tiranicida quitar


la vida al tirano, diriamos ser defectuosa esta definicion. Por
que no podremos llamar tiranicida al verdugo, que siendo
mandado, le mata ; ni al que inadvertidamente, y sin volun
tad lo hiciese. Luego si la cosa no le conviene propiamente,
tendrá una diferencia accidental; así como no es lo mismo ser
esclavo, que servir, que es la qüestion de los que por las le.
yes sirven á otro , hasta pagarle la deuda. El esclavo, si su
amo le da libertad, queda hecho liberto; pero no sucede lo
a 2"
mismo con el segundo. ºro
* Otras veces suele sacarse el argumento de la negacion de
algunas cosas, por la qual unas veces se falsifica todo; otras
queda por verdadera sola una cosa. Se falsifica todo de esta
manera: ¿ Dices que prestaste este dinero?. O lo tenias tú, ó
lo recibiste de alguno, ólo encontraste, ó lo hurtaste. Ni lo
tenias, ni te lo diéron, ni lo hallaste, ni tampoco fué hur
tado. Luego no lo prestaste. Sacamos una sola cosa verdade
ra, arguyendo así: El esclavo , que dices ser tuyo, ó nas
ció en tu casa , ó le compraste, ó te le diéron , ó le here
daste, ó le cautivaste en guerra, ó es ageno. No le adquiris
te por ninguno de estos medios. Luego es ageno. - - -

Es necesario comprehender, y coger todos los cabos en


este argumento, porque uno solo que quede , nos le nega
rán, y se reirán de nosotros. Por eso Ciceron se ató bien el
dedo, quando en la causa de Cécina (n. 37) pregunta: Si

- r

que, quaeritur: ut si per truº Aytar di credidisse dicis? authabuisti ipse, aut
catur, tyrannicidae proprium est, ty ab aliquo accepisti , aut invenisti , aut
rannum occidere, negemus. Non enim si surripuisti. Si neque domi habuisti, ne
traditum sibi eum carnifex occiderit, ty que ab alio accepisti, nec caetera, non
rannicida dicatur; nec si imprudens, vel credidisti. Reliquum fit verum sic : hic
invitus. Quod autem proprium non erit, servus, quem tibi vendicas, aut verna
differens erit: ut aliud est servum esse, tuus est, aut emptus, aut donatus, aut
aliud servire : qualis esse in addictis testamento relictus, aut ex hoste captus,
quaestio solet. Quiservus est, si manu aut alienus. Deinde remotis prioribus,
mittatur, fit libertinus, non itidem ad supererit alienus. - * .

dictus. -
Periculosum, et cum cura intuendum
Est argumentorum genus ex remo genus: quia si in proponendo unum quod
tione, quo modo eficitur totum falsum, libet omiserimus, cum risu quoque tota
modo id, quod relinquitur, verum. To res solvitur. Tutius quod Cicero pro Ce
tum falsum est, hoc modo: pecuniam te cinna facit, cum interrogat, si haeca
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 295
esta no fué accion ¿ quál lo será ? Pues así negaba ya todo lo
demas. O debemos poner dos cosas, la una contraria de la otra,
bastándonos, que la una sea cierta. Así Ciceron: (Pro Cluentio.)
Habiendo sido sobornado aquel tribunal, ninguno será tan con
trario de Cluencio , que no me conceda , que le sobornó Habito,
ó Opiánico. Si digo , que Hábito no, sacamos, que Opianico
le sobornó. Si digo, que Opianico le sobornó, excuso á Adabito.
Otro lugar de los argumentos es la semejanza”. v. g.
Si la continencia es virtud , tambien la abstinencia. Si el tu
for debe dar caucion, tambien el procurador. Y la desemejan
za”: v.g. No porque la alegría sea cosa buena , lo será
el deleyte. Si esto está bien en una muger, no lo estará tam
bien en el pupilo. Los contrarios ”: v.g. La parsimonia es
virtud; porque es vicio el luro. La guerra es causa de mil
males; luego nos libraremos de ellos con la paz. Si merece per
don el que dañó inadvertidamente, el que aprovechó del mismo
modo, no merece premio. Repugnantes. º El que es necio, no
puede ser sabio. Consiguientes,” ó adjuntos : La justicia es
virtud ; luego se debe sentenciar segun ella. La deslealtad, y
felonía son vicios; luego no debemos usar de mala fe. O vol
viendo la proposicion al contrario. - -

Tendria por cosa ridícula añadir á los dichos lugares los deri
vados,á no haberse valido de ellos Ciceron ”; v.g. El que hace
una cosa justa, obra con justicia. Lo que sirve para el pasto
comun de todos, debe apacentar el ganado de todos ; lo qual no
necesita de prueba. - * --- .

Ar -EEEsm

ctio non sit, quae sit? Simul enim re idem pupillo. Ex contrariis : frugalitas
moventur omnia. Vel cum duo ponen bonum , luxuria enim malum. Si malo
tur inter se contraria, quorum tenuisse rum causa bellum est, erit emendatio
utrumlibet, suficiat; quale Ciceronis est; pax. Si veniam meretur, qui imprudens
unum quidem certe , nemo erit tam ini nocuit, non meretur praemium , qui im
quus Cluentio, qui mihi mon concedat , rá prudens profuit. Ex repugnantibus: qui
constet corruptum illud es se judicium, aut est stultus, sapiens non est. Ex conse
ab Habito, aut ab Oppianico er se corru quentibus, sive adjunctis: si justitia ést
ptum. Si doceo non ab Habito , vinco ab bonum, recte judicandum. Si malum per
0ppianico. Si ostendo ab Oppianico, purgo fidia, non est fallendum. Idem retro.
Habitum. His illud adjicere ridiculum puta
Est argumentorum locus ex similibus: rem, nisi eo Cicero uteretur, quod con
si continentia virtus, utique et absti jugatum vocant: ut, eos, quirem Ju
nentia. Si fidem debet tutor; et procu stam faciant, juste facere. Quod certe
rator. Ex dissimilibus : non si laetitia non eget probatione. Quod compascuum.
bonum, et voluptas. Non quod mulieri, est, compascere licere.
296 ..", "INSTITUCIONES ORATORIAS
-
*
-

Comparacion ” llamamos, quando probamos las cosas ma


yores por las menores, las menores por las mayores, y las
iguales por sus iguales.
En causas congeturales probaremos una cosa menor por
la mayor, diciendo : El que comete un sacrilegio, tam
bien cometera un hurto. Por la menor : El que no repara en
mentir abiertamente, no tendrá inconveniente en jurar falso.
Por la igualdad (que llaman a pari): El que se dera so
bornar, para dar la sentencia, tambien dirá un falso tes
timonio por interes... . . . . . . . ... .
Por los mismos lugares se prueba el derecho : por la ma
yor; v.g. Es lícito matar al adúltero ; luego tambien azo
tarle. Por la menor: Si es permitido quitar la vida al la
dron nocturno, ¿qué diremos del ladron de camino ? Por la
igualdad; La pena que establecen las leyes contra el parrici
da, esa misma merecerá quien mata a su madre. Los qua
les argumentos se tratan por medio de los silogismos. ..

Estos otros pertenecen mejor á la definicion, y qualidad


de la cosa : Si la robustez no es buena para el cuerpo, ménos
será la salud. Si el hurto es delito, mucho mas lo será el sa
crilegio. Si la abstinencia es virtud, tambien lo será la con
tinencia. Si el mundo se rige con providencia , debe gobernar
se la república. Si en la fabrica de una casa deben observar
se sus reglas, ¿qué esmero deberemos poner en la de una ar
mada naval, y sus perfrechos. -
Finalmente, para hacer una suma de lo dicho; los argu

Apposita , vel comparativa dicun- Ex pari: quae poena adversus interfecto


tur, quae majora ex minoribus , mino rem patris justa est, eadem adversus ma
ra ex majoribus, paria ex paribus pro tris. Quorum omnium tractatus versatur
bant. - -
in Syllogismis. - º
Confirmatur conjectura ex majore: Illa magis finitionibus, aut qualita
si quis sacrilegium facit, faciet, et fur tibus prosunt: si robur corporibus bo
tum. Ex minore: qui facile, ac palam num mon est, minus sanitas. Si furtum.
mentitur, pejerabit. Ex pari: qui ob rem scelus, magis sacrilegium. Si abstinen
judicandam pecuniam accepit, et ob di tia virtus, et continentia. Si mundus
cendum faisum testimonium accipiet. providentia regitur, administranda est
Juris confirmatio est hujusmodi; ex respublica. Si domus aedificari sine ra
majore: si adulterum occidere licet, et tione non potest, quid agendum in na
loris caedere. Ex minore: si furem no valium cura, et armorum?
cturuum occidere licet, quid latronema? Ergo, utbreviter contraham summam,
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. v. 297
mentos se sacan de las personas, causas, lugares , tiempo,
facultades (á las que hemos reducido los instrumentos) del
modo, con que la cosa se hizo ; de la definicion, género, espe
cie, diferencia, propiedades , negacion de lo que no le eonvie
ne a la cosa , semejanza , desemejanza , contrarios , repug
nantes, consiguientes, derivados , y comparacion , la que se
divide en varias especies.
III. Estos son por lo comun los lugares, de donde se to
man las pruebas: los quales ni basta tratarlos en comun, pu
diéndose sacar de cada qual de ellos innumerables argumen
tos, ni tampoco podemos recorrer todas sus especies. Pues los
que intentáron hacerlo, diéron en el inconveniente de que ha
biendo dicho demasiado, no pudiéron apurar la materia.
De donde provino, que alguºs, enredándose en lo en
marañado de los lugares oratorios, por no quebrantar sus le
yes, que ellos tenian por inviolables, no solamente arruináron
su ingenio, sino que, por seguir las reglas de sus maestros,
viniéron á desamparar el camino, que á todos les inspira las
naturaleza. Porque así como no basta el saber, que todas las
pruebas se sacan de las personas , y de las cosas, pues tanto
lo uno, como lo otro admite muchas especies; así al que sepa,
que los antecedentes, circunstancias, y consiguientes de la
causa, que trata, bien considerados le pueden suministrar abun
dantemente pruebas, y razones, no le faltarán argumen
tos , con que apoyar su asunto. Tanto mas , quanto hay

- EEEE
y

ducuntur argumenta à personis, causis, commoda, ut, et nimium . dicerent, nec


locis , tempore, facultatibus (quibus in tamen totum.
strumentum subjecimus) modo, id est Unde plurimie, cum in hos inexplica
ut quicque sit factum , finitione , gene biles laqueos inciderunt, omnem etiam,
re, specie, diferentibus, propriis, re quem ex ingenio suo potuerant habere
motione, similibus , dissimilibus, cou conatum , velut adstricti certis legum
trariis , , pugnantibus , consequentibus, vinculis perdiderunt, et magistrum re
jugatis, comparatione , quae in plures spicientes, naturam ducem sequi desie
diducitur species. runt. Nam ut per se non suficit scire,
III. Has fere sedes accepimus proba omnes probationes, aut à personis, aut
tionum in universum : quas nec genera à rebus peti, quia utrumque in plura di
tim tradere sat est, cum ex qualibet ea viditur: ita ex antecedentibus , et jun
rum innumerabilis argumentorum copia ctis, et insequentibus trahenda esse ar
oriatur , neque per singulas species exe gumenta, qui acceperit, protinus in hoc
ui patitur natura rerum. Quod qui sunt sit instructus, ut quid in quaque causa
acere conati , duo pariter subierunt in dicendum, sit, ex his sciat : praesertima
TOM.
Pp
298 INSTITUCIONES ORATORIAS

innumerables pruebas, que las ofrece de suyo la naturaleza de


la causa; y que no tienen que ver con otra. Pues no solo
son estas las mas poderosas; sino que los preceptos comunes
nos deben servir para discurrir las razones propias del asun
to, que manejamos. Este género de argumentos diremos, que
está tomado de las circunstancias, que acompañan, y rodean
á la causa, como dicen los griegos: ó de lo que propiamente
le conviene, sin ser comun á otras.
Y no debe ponerse ménos cuidado en proponer el asunto,
que en saber probarlo. Para esto se requiere la invencion, la
que si no es la principal, es á lo ménos la primera. Porque
así como son inútiles las flechas al que no tiene blanco fixo,
así son superfluos los argumentos, quando no se considera de
antemano, para lo que sirven: y esto es lo que no puede apren
derse con reglas. De donde se sigue, que los que aprendiéron
Por unos mismos preceptos, usarán de los mismos argumentos;
pero los que inventan, discurrirán , qual mas, qual ménos.
Propongamos un asunto, que nada tenga de comun con
otros. Quando Alexandro arrasó á Tebas, se encontró escri
tura de un préstamo de cien talentos hecho por los Tébanos
á los de Tesalia. Esta escritura se la dió graciosamente Ale
xandro á los Tesalos, porque se habia tambien servido de al
guna gente suya en la guerra. Despues restituida Tebas por
Casandro, los Tébanos repiten contra los Tesalos. La causa se
defiende en el tribunal de los Amphiccyones. “Dicha deuda

-E EE

cum plurimae probationes in ipso cau ta, nisi praevideris, cui rei adhibenda
sarum complexu reperiantur, ita ut sint sint. Hoc est, quod comprehendi arte
cum alia lite nulla communes ; eaeque non possit. Ideoque, cum plureseadem di
sint, et potentissimae , et minime ob dicerint, generibus quidem argumento
viae , quia communibus ex praeceptis rum similibus utentur: alius tamen alio
propria invenienda sunt. Hoc genus ar plura, quibus utatur, inveniet.
gumentorum sane dicamus ex circun Sit exempli gratia proposita contro
stantia, quia arp q aguv dicerealiter non versia , quae minime communes cum
possumus: vel ex iis , quae cujusque aliis quaestiones habet. Cum Thebas ever
causae propria sunt. tisset Alexander, invenit tabulas, qui
Nec minus in hoc curae debet adhi bus centum talenta mutuo Thessalis de
beri, quid proponendum , quam quomo disse Thebanos continebatur. Has, quia
do sit, quod proposueris, probandum. erat usus commilitio Thessalorum , do
Hic omnimo vis inventionis, si non ma navithis ultro. Postea restituti à Cas
jor, certe prior. Nam uttela supervacua sandro , reposcunt Thebani Thessalos.
sunt nescienti, quid petat; sic argumen Apud Amphictyones agitur. Centum ta
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. v. 299
de cien talentos consta por escritura; y no hay alguna, que
pruebe la satisfaccion de la deuda. Todo el pleyto consiste en
que diciendo Alexandro, que hizo donacion de dicha escritura
á los Tesalos, no les dió á los Tébanos su dinero. Pregúntase
pues, si es lo mismo haberles hecho donacion de la escritura,
que haberles dado dinero. En dicha causa ¿de qué sirven los
lugares oratorios, si primero no veo, que de nada sirvió el
hacerles donacion de dicha escritura ? ¿que no pudo darla? ¿que
no se la dió?
La pretension de los Tébanos, á primera vista, no puede
ser mas justa, pues piden lo que les quitáron violentamente:
pero por otra parte se nos presenta la dificultad no pequeña
del derecho de la guerra, alegando los de Tesalia, que este
es la pauta, y regla de todos los pueblos, ciudades, y mo
narquías del mundo. Luego hemos de buscar alguna razon,
que distinga esta causa de las demas, y por donde se haga
ver, que esto es una cosa, que no está en poder del vencedor.
Aquí no está tanto la dificultad en probar el asunto , quanto
en saber proponer el caso. Diremos lo primero, que el derecho
de la guerra nada tiene que ver con lo que puede ponerse en
¿ y que no hay otro fuero para mantener lo tomado por
as armas, que las armas. Así donde entran las armas, cesan
los jueces; y donde estos entienden, el fuero de las armas fe
nece. Se deben discurrir razones, que prueben esta verdad:
v.g. Los cautivos , que vuelven a su patria , por tanto son
libres, por quanto por el mismo medio, que perdiéron la
ases

lenta, et credidisse eos constat, et non bus Thessalis, hoc regna , populos, fi
recepisse. Lis omnis ex eo , quod Ale-. nes gentium , atque urbium contineri.
xander ea Thessalis donasse dicitur pen Inveniendum contra est, quo distet haec
det. Constat illud quoque, non esse his causa à caeteris, quae in potestatem vi
ab Alexandro pecuniam datam. Quaeri ctoris venirent: nec circa probationem.
tur ergo, an perinde sit, quod datum. res haeret, sed circa propositionem. Di
est, ac, si pecuniam dederit. Quid pro camus primum in eo, quod in judicium
derunt argumentorum loci , misi haec deduci potest, nihil valere jus belli: nec
prius videro , nihil eum egisse , do armis erepta , nisi armis posse retine
nando, non potuisse donare, non do ri. Itaque ubi illa valeant, non esse ju
uasse 2 dicem : ubi judex sit , illa nihil vale
Et prima quidem actio facilis, ac fa re. Hoc inveniendum est , ut adhiberi
vorabilis, repetentium jure, quod visit possit argumentum. Ideo captivos si in
ablatum: sed hinc aspera, et vehemens patriam suam redierint , liberos esse,
quaestio exoritu Ade jure belli, dicenti ¿ bello parta non nisi eadem vi pos
p 2
3oo INSTITUCIONES ORATORIAS

libertad, la recobráron. Hay tambien otra cosa propia de la


causa presente; y son los jueces, que la sentencian. Porque
un mismo pleyto de distinta manera se ventila delante de los
Cien Jueces, que de un juez particular.
Diremos lo segundo, que el vencedor nunca pudo dar el
derecho: como que este es de quien está en posesion de la co-.
sa; y que él no tiene derecho sino sobre lo que hace suyo en -
guerra, que son cosas corporales; pero el derecho, y perte
nencia de la escritura es cosa, que no puede caer en manos
del vencedor: y este es un medio mas dificultoso de encon
trarle, que apoyarle con razones: fundándose en que es muy
distinta la condicion de poseedor, y heredero, que del ven
cedor; al primero pasa el derecho; al segundo la cosa. Encuen
tro tambien de particular en esta causá, que el derecho de
una cantidad prestada por el comun, no puede pasar al ven
cedor, porque á aquella tienen derecho todos, y cada uno
de los particulares : de forma, que con un solo particular, que
quede, en él reside el derecho del emprestito , que hizo la
comunidad; y los Tébanos no todos viniéron en poder de Ale
xandro. Esto no se prueba con razones tomadas de fuera de la
causa, que esto quiere decir argumento, sino que nace de las
mismas entrañas de la cosa. -

En tercer lugar diremos (y esta es una razon comun) que


el derecho no consiste en la escritura: y esto se puede defen
der con muchas razones. Debe tambien ponerse en duda la
intencion de Alexandro, si fué de honrarlos, ó de engañarlos.
Podemos tambien alegar (y esta razon será propia de la cau
meses su
- - - -
- º*

sideantur. Proprium est,, et illud cau- diti transire ad victorem non potuisse,
sae, quod Amphictyones judicant: ut a quia quod populus crediderit , omnibus
lia apud Centumviros, alia apud priva debeatur: et quandiu quilibet unus su
tum judicem in iisdem quaestionibus ra perfuerit, esse eum totius summae cre
tio sit. ditorem : Thebanos autem non omnes in
"Turn secundo gradu non potuisse do Alexandri manu fuisse. Hoc non extrin
nari à victore jus, quia id demum sit secus probatur, quae vis est argumenti,
ejus, quod ipse teneat. Jus, quod sit in sed ipsum per se valet.
corporale, apprehendi manu non posse. Tertii loci pars prior magis vulgaris,
Hoc reperire dificilius, quam cum in non in tabulis esse jus : itaque multis
veneris, argumentis adjuvare : ut alia argumentis defendi potest. Mens quoque
sit conditio haeredis, alia victoris: quia” Alexandri duci debet in dubium , hono
ad illum jus, ad hune res transeat. Pro rarit eos , an deceperit. Illud jam rur
prium deinde materiae, jus publici cre sus materiae proprium , et velut novae
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3o I

sa presente) que dado caso, que los Tébanos perdiéron el


derecho, ya le recobráron, quando fuéron restituidos en la
posesion de su ciudad y aquí se exáminará la intencion de
Casandro su libertador. Pero lo que principalmente se tendrá
á la vista, es el tribunal, donde el pleyto se defiende, el
qual diremos, que solo mira á la justicia. -

IV. No he puesto este exemplo, para que se tenga por


inútil aquella doctrina de los lugares oratorios, pues si esto
fuera así, la hubiéramos omitido: sino para que ninguno se
tenga por consumado orador porque los tenga bien sabidos,
olvidándose de lo demas; y para que se entienda, que sin
lo que vamos despues á tratar, será muda toda aquella cien.
cia. Pues los artes, que se han escrito de retórica, no se en
derezan, á que discurramos las pruebas de nuestro asunto, sino
que ántes que ellos saliesen á luz, ya otros las habian discurrido,
y despues se reduxéron á arte estas observaciones. Prueba
de ello es, que sus recopiladores, sin inventar nada de nue
vo, no hacen mas, que valerse de los exemplos de los ora
dores antiguos; los quales únicamente fuéron los inventores.
Esto no quita el que apreciemos el trabajo de los que los
fuéron reduciendo á reglas, y preceptos, con lo qual nos alla
náron el camino : porque ya no tenemos que fatigarnos en
inventar lo que los antiguos supiéron hallar en fuerea de su
ingenio. Pero todo esto no basta ; así como no bastaria el
saber los exercicios de la palestra aquel, que no adiestrase,
y amaestrase su cuerpo con la abstinencia, y parsimonia en
- -

controversiae, quod restitutione recepis factum est, ut argumenta inveniremus:


se jus, etiamsi , quod amiserint, The sed dicta sunt omnia, antequam praeci
bani videntur. Hic, et quid Cassander perentur, mox ea scriptores observata,
velit, quaeritur. Sed vel potentissima et collecta ediderunt. Cujus rei probatio
apud Amphictyones aequi tractatio est. est, quod exemplis eorum veteribus u
IV. Haec non idcirco dico, quod in tuntur, et ab oratoribus illa repetunt: i
utilem horum locorum , ex quibus argu psi nullum novum, et quod dictum non
menta ducuntur, cognitionem putem, a sit, inveniunt. Artifices ergo illi , qui
lioqui nec tradidissem : sed ne, si qui dixerunt: sed habenda iis quoque gratia
cognoverintista , si caetera negligant, est, per quos labor nobis detractus est.
perfectos se protinus, atque consumma Nam, quae priores beneficio ingenii sin
tos putent ; et nisi in caeteris , quae gula invenerunt, nobis, etnon sunt re
mox praecipienda sunt , elaboraverint, quirenda, et nota omnia. Sed non ma
mutam quandam scientiam se consecu gis hoc sat est, quam palaestram didi
tos, intelligant. Nec enim artibus editis cisse, misi corpus exercitatione , conti
3O2 INSTITUCIONES ORATORIAS

el comer, y mucho mas si no le ayudase su misma natura


leza: y al contrario todo esto sin arte, y reglas no aprove
charia mucho. -

Ni imaginen los aficionados á la eloqüencia, que todo


quanto aquí tratamos, es comun á todas las causas. Ni les
parezca que, quando se les ofrece algun asunto de que hablar,
deben ir exáminando, y como llamando de puerta en puerta
por todos los lugares oratorios, para proveerse de razones, pa
ra probar lo que intentan; principalmente quando todavía
estan aprendiendo, y carecen de la práctica, y exercicio. Por
que seria obra de muchísimo trabajo, y tiempo el ir tocando
por aquí, y allí, hasta encontrar lo que quadre á nuestro in
tento: y aun no sé si esto perjudicaría mucho, á no tener una
viveza de ingenio , y prontitud natural amaestrada con el
mucho estudio, que nos lleve como de la mano á lo que qua
dra mas con nuestro asunto. Pues así como una buena voz,
acompañada de la consonancia de las cuerdas, deleyta mu
cho; pero si la mano está pesada, y duda quando ha de acom
pañar con el movimiento de las cuerdas á las diferentes modu
laciones de la voz, nos contentamos con lo que puede hacer
la voz natural; así á estos preceptos, que hemos dado, debe
acompañar, como cítara acorde, la instruccion , y diligente
estudio? Esto se consigue con el continuo exercicio. Porque á
la manera, que la mano del diestro músico en fuerza de la
costumbre, hace todas las diferencias de sonidos, ya el gra
masa EEE

nentia, cibis, ante omnia natura juve- pedimento futura sint, nisi, et animí
tur: sicut contra, ne illa quidem satis quaedam ingenita natura, et studio exer
sine arte profuerint. citata velocitas, recta nos ad ea, quae
IIlud quoque studiosi eloquentiae co conveniunt causae, ferant. Nam ut can
gitent, neque omnibus in causis ea, quae tus vocis plurimum juvat sociata nervo
demonstravimus, cuncta posse reperiri; rum concordia ; si tamten tardior manus,
neque, cum proposita fuerit materia di nisi inspectis, dimensisque singulis, qui
cendi, scrutanda singula, et velut ostia bus quaeque vox fidibus jungenda sit, du
tim pulsanda , ut sciant, an ad proban bitet, potius fuerit esse contentum eo,
dum id., quod intendimus, forte respon quod simplex canendi natura turlerit: ita
deant, nisi cum discunt, et adhue usu hujusmodi praeceptis debet quidem apta
carent. Infinitam enim faciet ipsa res esse , et citharae modo intenta ratio do
dicendi tarditatem , si semper necesse ctrinae. Sed hoc exercitatione multa con
sit, ut tentantes unumquodque eorum, sequendum : et , quemadmodum illorum
quod sit aptum , atque conveniens, ex artificum , etiamsi alio spectent, manus
periendo noscamus: nescio an etiam im tamen ipsa consuetudine ad graves, acu
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 303

ve, ya el agudo, y los que median entre los dos , aunque


esté divertido en otra cosa; así tan léjos de embarazarse la
buena imaginativa del orador con esta variedad de lugares, y
argumentos, cada uno de ellos se le presentará voluntariamen
te sin mucho trabajo : y así como las letras, y sílabas no pi
den reflexion en el que escribe, así las razones suceden unas
á otras sin dificultad.

CAPÍTULO XI.
DE LOS EX E M P L O S.

- El tercer género de pruebas extrínsecas, es el que lla


mamos eremplo, y los griegos paradigma; y es traer un hecho
sucedido, ó como sucedió, útil para probar lo que queremos.
Se ha de considerar si el hecho, que traemos, es en todo se
mejante á lo que tratamos, ú en parte: ó para valernos de todo
él, ó tomar solo lo que favorece á nuestro intento. Será seme
jante este: Justamente se quitó la vida a Saturnino , como
a los Gracos. Y desemejante : Bruto mató a sus hijos, que
conspiraban contra la república ; Manlio castigó con la
muerte el valor de un hijo suyo. Contrario: Marcelo á los
Siracusanos nuestros enemigos les restituyó el ormato de su
ciudad , y templos ; Verres á los mismos , siendo aliados
as

tos, mediosque horum sonos fertur; sie rae, syllabaeque scribentium cogitatio
oratoris cogitationem nihil moretur haec nem non exigunt, sic rationes spon
varietas argumentorum , et copia , sed te quadam Sequantur.
quasi offerat se, et occurrat: et, ut lite

CAPUT XI,

DE E X E. M. P L IS,

Tar. est genas ex iis, quae ex omnia ex eo sumamus , aut quae utilia
trinsecus adducuntur in causam , graeci erunt. Simile est: jure occisus est Satur
vocant rapá de yº a : nostri exemplum. minus, sicut Gracchi. Dissimile : Brutus
Est autem id rei gestae, aut ut gestae, occidit liberos proditionem molientes;
utilis ad persuadendum id, quod intende Manlius virtutem filii morte multavit.
ris, commemoratio. Intuendum igitur, Contrarium : Marcellus ornamenta Syra
totum simile sit , an ex parte : ut aut cusanis hostibus restituit, Verres eadem
3O4 INSTITUCIONES ORATORIAS

nuestros, se los quitó. El exemplo tiene los mismos grados, ya


en el género demostrativo, ya en el judicial. * Aun en el
deliberativo, que mira á cosas futuras, conviene el exemplo de
cosas semejantes. Así para probar, que la pretension de Dio
nysio de tener guardias de su persona, se dirige á hacerse
tirano por medio de las armas, diremos, que por los mis
mos medios la consiguió Pisistrato.
Pero así como hay exemplos, que quadran en un todo,
qual es el que hemos puesto, así á veces se toman de me
11Or á mayor; y al contrario : v. gr Si por la violacion del
matrimonio se arrasáron ciudades enteras, ¿qué pena me
recerá un adúltero ? A los flauteros , que se retiraron de
Roma , los hiciéron venir por órden del senado (T. Liv. lib. 9.
c. 3o), ¿quánta mas razon hay, para levantar el destier
ro a unos hombres del primer órden, que por ceder dé la en
vidia , se saliéron de la ciudad? Los exemplos de cosas des
iguales, donde mas fuerza tienen, es en las exhortaciones: el
valor es digno de mayor admiracion en la muger, que en un
hombre : y así para animar á la fortaleza, no tanto nos val.
dremos del exemplo de los Horacios, y Torquatos, quanto
del de aquella hembra, que mató á Pyrro por su mano : y
para exhortar á sufrir la muerte valerosamente, no tanto ale.
garemos el hecho de Caton, y Escipion, como de Lucre
cia; que son de menor á mayor.
Pongamos exemplos de Ciceron de las tres especies; ¿pues
* --,

e E =

-
-

sociis abstulit, Et probandorum, et cul- discessissent, publice revocatí sunt: quan


pandorum ex his confirmatio eosdem gra to magis principes civitatis viri, et be
dus habet. Etiam in iis, quae futura di ne de republica meriti , cum invidiae
cemus, utilis similium admonitio est: ut cesserint, ab exilio reducendi? Ad ex
si quis dicens Dionysium idcirco petere hortationem vero praecipue valent im
custodes salutis suae, uteorum adjutus paria. Admirabilior in femina , quam in
armis, tyrannidem occupet, hoc referat viro virtus. Quare si ad fortiter facien
exemplum , eadem ratione Pisistratum ad dum accendaturaliquis, non tantum af
dominationem pervenisse. ferent momenti Horatius, et Torquatus,
Sed, ut sunt exempla interim tota si quantum illa mulier, cujus manu Pyrrhus
est interfectus : et ad moriendum non
milia, ut hoc proximum : sic interim ex
majoribus ad minora , ex minoribus ad tam Cato, et Scipio , quam Lucretia.
majora ducuntur. Si propter matrimonia Quod ipsum est ex minoribus ad majora.
violata urbes eversae sunt, quió fieria Singula igitur horum generum ex
dultero par est? Tibicines cun ab urbe Cicerone ( nam unde potius?) exempla
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3o 5
de quién mejor? De semejantes: Porque a mí mismo me su
cedió, que pretendiendo el consulado juntamente con dos pa
tricios , el uno muy atrevido, y malvado ; el otro muy com
puesto , y bueno a carta cabal : con todo me alcé con el em
pleo , venciendo á Catilina por mis méritos, á Galba por
el favor, (Por Murena n. 17.) De mayor á menor: Dicen,
que no merece vivir, quien confiesa haber quitado d otro la
vida, ¿En qué ciudad mueven esta disputa estos hombres ig
norantísimos ? Por cierto en aquella , que el primer juicio,
que celebró, fué sobre la vida del esforzadísimo M. Hora.
cio ; y aunque todavía por entónces no gozaba de los fueros
de libertad, con todo eso el pueblo congregado absolvió al
reo , aunque confesaba haber muerto á su hermana por su
misma mano. (Por Milon n. 7.) De menor á mayor: Quité,
quité la vida, no á Espurio Melio, que por barar el trigo
con menoscabo, y pérdida de su hacienda, se hizo sospecho
so de que queria coronarse por rey , no mas de porque se
creía , que tenia demasiado amor al pueblo, érc. sino a aquel
(y no tendria él mismo reparo en decirlo, habiendo con peli
gro de su vida librado a la patria), cuyo nefando adulterio
cometido en el mismo lecho , &c. con todo lo que se sigue.
(Por Milon n.72.)
El exemplo de cosa desemejante puede consistir en varias
causas, como en el género, en el modo, en el tiempo, en el
lugar, y otras circunstancias, de las que se vale Ciceron pa
ra destruir, y echar por tierra todas las sentencias, que ante
riormente parecia haberse dado contra Cluencio. ( Por Cluen

ponamus. Simile est hoc pro Murena: beratus ert, cum rua manurororem es rein
Etenim mibi ipsi accidit, ut cum duobur terfectam fateretur. Minus majoris : Occidi,
patriciis, altero improbirrimo, at que auda occidi non Spurium Melium , qui annona le
cirrimo, altero modertissimo, at que opti vanda, jacturaque rei familiaris, quia nimir
mo viro peterem: fuperavitamen dignita amplecti plebem putabatur, in suspicionem.
te Catiliuam, gratia Galbum. Majus mi incidir regni appetendi, &c. Deinde, sed eum.
noris , pro Milone : Vegant intueri lu (auderet enim dicere, cum patriam periculo
cem fas es se ei, quid se bominem occisum suo liberas ret) cujus nefarium adulterium in
erre, fateatur. In qua tandem urbe hoc bo pulvinaribus. Ettotus in Clodiurn locus.
mines stultirrimi disputant? mempe in ea, Dissimile plures causas habet. Fit e
quae primum judicium de capite vidit M. nim genere, modo, tempore, loco, cae
Horatii fortissimi viri, qui nondum libera terisque : per quae fere omnia Cicero
civitate, tamen populi romani comitiis li praejudicia, quae de Cluentio videbau
ToM. L. Qq
3o6 INSTITUCIONES ORATORIAS

cio n. 79. 134) Y con el exemplo de cosa contraria destru


ye todo el pretendido rigor de los censores , alabando á Esci
pion el Africano, el qual no quiso castigará un caballero roma
no, de quien habia dicho públicamente, que habia jurado en
falso; y aun convidaba á que alguno le acusase, diciendo, que
procederia contra el reo en virtud de dicha acusacion: pero no
saliendo nadie, le permitió continuase en los privilegios de ca
ballero. El qual hecho, por ser largo, no hice mas que apun
tarle. En Virgilio tenemos un exemplo breve de cosa en
contrario. (Eneid. 2. 54 o. )
Pues no fué tan cruel conmigo Achiles,
De quien te llamas hijo falsamente.
Algunas veces convendrá el referir todo el hecho de lo
que alegamos para exemplo: v.g. Queriendo hacer violencia
un tribuno militar del exército de C. Mario, y pariente suyo,
a la homestidad de un soldado raso, este le quitó la vida:
queriendo ántes este honesto jóven cometer un hecho como este
con peligro de su vida , que amancillar la castidad. º Al
qual aquel consumado general le dió por libre. (Por Milon
en la refutacion.) Otras veces bastará apuntarle, como lo hi
zo Ciceron en la misma oracion. Porque yo no podria ménos
de tener por malo, y culpable a Ahala Servilio, a P. Nasi
ca, a L. Opimio, y aun al senado, si se prohibiese quitar
la vida a los hombres malvados. Lo qual se dirá, quando el

tur facta , subvertit. Contrario vero sunt, tota narrabimus; ut Cicero pro Mi
exemplo censoriam notam , laudando cen lone: Pudicitiam cum eriperet militi tri
sorerri Africanum , quieum , quem peje bunus militaris in exercutu Caii Marii,
rasse conceptis verbis palam dixisset, te propinquus ejus imperatoris, ab eo inter
stimonium etiam pollicitus, si quis con Jectus est, cui arinn afferebat. Facere enim.
tra diceret, nullo accusante, traducere e probus adolescen r periculo.re, quam perpe
quum passus est. Quae, quia erant. lon ti turpiter maluit. Atque huncille rummur
giora, non suis verbis exposui Breve vir scelere solutum periculo liberavit. Quae
auten apud Virgilium contrarii exem dam significare satis erit, utidem , ac
plum est: pro eodem: Neque enim porret, aut Aba
la ille Servilius, aut P. A asica , aut L.
At non ille, satum quo te mcntirir, Achilles opimius, aut me consule renatus non ne
Talis in hoste fuit Priamo. farius haberi, si sceleratos interfici nefas
Quaedam autem ex iis, quae gesta es ret. Haee ita dicentur, prout nota e
DE M. FABIO QUINTILIANo. LI8. V. 3o7
hecho es ya sabido, ó quando el interes de la causa lo pi
diere.
Lo mismo sucede quando traemos para exemplo alguna
de las fábulas de los poetas ; con la diferencia, que á estas
no les damos tanto asenso. De las quales el mismo Ciceron nos
enseña , que debemos hacer uso ; pues en la misma parte
(núm. 8.) trae por exemplo lo siguiente: Y no sin motivo,
ó jueces, hombres muy sabios deráron escrita aquella fábula
de uno que habia muerto á su misma madre, para vengar
la de su padre. Pues aunque eran varios los pareceres de los
hombres , no obstante se le dió por libre por sentencia de estos,
y por el sabio, y acertado juicio de la diosa.
Suelen tambien mover, y no poco, especialmente á gen
te rústica, aquellas fabulitas, que tomáron el nombre de Eso
po, aunque parece, que su primer inventor fué Hesiodo:
porque oyen con gusto estas cosas inventadas con tanta sen
cillez; y por lo mismo, que les halaga el oido, dan asenso
á lo que proponen. Pues aun Menenio Agripa dicen º”, que
para reconciliar á la plebe con el senado, se valió de aquella
tan celebrada fábula de la discordia de los miembros huma
nos, por la que todos conspiráron contra el vientre. (Livio
lib. 2. n. 32.) ¿Qué mas? El mismo Horacio no tuvo por age
nas de un poema estas fabulitas, pues dice:

Qual allá en otro tiempo


La zorra astuta al leon enfermo, èrc. Lib. I, ep. 1. v.73.

runt, vel utilitas causae, aut decor po ab Aesopo originem non acceperunt (nam
stulabit. videtur earum primus auctor Hesiodus)
Eadem ratio esteorum, quae ex poe nomine tamen Aesopi maxime celebran
ticis fabulis ducuntur, misi quod his mi tur, ducere animos solent , praecipue
nus afirmationis adhibetur : cujus usus rusticorum , et imperitorum : qui, et
qualis esse deberet, idem optimus au simplicius, quae ficta sunt, audiunt, et
ctor, ac magister eloquentiae ostendit. capti voluptate, facile iis, quibus dele
Nam hujus quoque generis eadem in ora ctantur, consentiunt. Siquidem , et Me
tione reperietur exemplum. Itaque hoc, menius Agrippa plebem cum patribus in
judices, non rine causa etiam fictis fabu gratiam traditur reduxisse nota illa de
lis doctis simi homines memoriae prodide membris humanis adversus ventrem dis
*unt, eum, qui patris ulciscendi causa ma cordantibus fabula. Et Horatius , ne in
trem necavisset, variatis hominum ren poemate quidem humilem hujus generis
dentiir, non solum humana, red etiam ra usuma putavit, his versibus:
pientirrimae de ae sententia liberatum,
Illae quoque fabulae , quae etiamsi Olim, quod vulpes aegroto cauta leoni, &c.,
Qq 2
3oS INSTITUCIONES ORATORIAS

Para enseñar, y persuadir son muy parecidos á los exem


plos los símiles, principalmente los que sin traslaciones, ni
metáforas, estan tomados de cosas muy semejantes al asunto,
que manejamos. “v.g. Porque a la manera, que los que
estan hechos a que los unten la mano para dar el voto en las
elecciones, y empleos , miran con ceno á aquellos pretendien
tes, que creen no les han de dar nada ; así estos juec es “U6
nian ya con mal corazon , y con intencion contraria a la cau
sa del reo. (Por Cluencio n.75.) Porque quando la compa
racion es traida de algo mas léjos, se llama parábola. Esta
unas veces se toma de las acciones humanas ; así Ciceron
por Murena (núm. 4.)”Y si los que toman puerto despues
» de su navegacion, advierten á los que de nuevo se hacen á
» la vela, los escollos, tempestades, y piratas, encargándo
» les muy de veras, que vayan sobre aviso para precaverse,
» porque la misma naturaleza nos mueve á favorecer á los que
” entran en los mismos peligros, en que nos hemos visto: yo
» que despues de tantas borrascas estoy, digamos así, para
» saltar á tierra, ¿qué deberé deseará uno, que se ha de ver
» en los mismos peligros?” Otras veces se toman de los irra
cionales, y aun de los insensibles. Así diremos, que el ánimo
debe cultivarse con la ciencia, valiéndonos de la semejanza
de la tierra, que cultivándola produce fruto, y abandonándola,
no lleva sino espinas, y maleza. Si queremos exhortar á mi
rar por la república, diremos que hasta las abejas, y hormi
gas, aunque animalejos mudos, trabajan por el bien comun.
- -

Proximas exempli vires habet simili tum rationem, et praedonum , et locorum:


tudo , praecipueque illa , quae ducitur quod natura fert, ut iis faveamus, quf
citra ullam translationum mixturam ex re eadem pericula, quibus nos perfuncti ru
bus paene paribus. Ut qui accipere in cam mus, ingrediantur: quo me tandem animo
po con Jueverunt , iis candidati , quorum este oportet, prope jam ex magna jacta
nummor supprerros es se putant, inimicis tione terram videntem, in hunc, cuivi
simi rolent es re: ric bujusmoai judices in deo maximas tempestates erre subeunda rº
jfesti tum reo venerant. Nann a apa. Boa y Sed, et à mutis, atque etiam inanimis
quam Cicero collationem vocat, longius interim hujusmodi ducitur : , ut, si ani
res, quae comparantur, repetere solet. mum dicas excolendum, similitudine uta
Necho minum modo inter se opera simi ris terrae, quae neglecta sentes, atque
lia spectantur, ut Cicero pro Murena dumos, exculta fructus creat: aut si ad
facit: Quod si e port u rol rentibur, qui curam reipublicae horteris, ostendas apes
jam in portum ex alto invehunt ur, prae etiam, formicasque non modo muta, sed
dicare summo studio volent, et tempesta etiam parva animalia, in commune ta
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3C 9
A esta semejanza dice Ciceron: A la manera, que nuestro
cuerpo no puede pasar sin alma, así una ciudad sin leyes no
puede hacer uso de las partes, que la componen , que son
sus miembros , nervios, y sangre. (Por Cluencio núm. 146.)
En la oracion en defensa de Cornelio pone una comparacion
de los caballos: y aun á los mismos peñascos los trae por via
de comparacion en la de Archias. (n. 19.) Estas, como dixe,
son mas comunes: Así como los remeros sin piloto son nada,
así los soldados sin caudillo.
A veces suelen engañar los símiles; y así es menester ti
no para usarlos. Porque no sucede, por exemplo, con las amis
tades lo que con las naves, que las nuevas son mejores, que
las viejas: ni es digna de alabanza la muger, que hace par
ticipantes á todos de su hermosura, así como la que comunica,
y reparte á todos su dinero. Si atendemos á lo que suenan las
palabras, encontraremos semejanza entre la garbosidad, y la
hermosura; pero hay una muy notable diferencia entre el di
nero, y la honestidad. Y así atenderemos á la semejanza en
la conseqüencia que deducimos. Del mismo modo quando se
nos obliga á responder á muchas preguntas, nos miraremos
bien en las premisas, que vamos concediendo. Así es que As
pasia respondió mal en aquel diálogo de Eschines, que pone
Ciceron por estas palabras ; ( Lib. z. de la Invencion cap. r.
num. 53)”Dime por tu vida, muger de Xenophonte, ¿si una
» vecina tuya tuviese oro de mas quilates, que el tuyo, quál
» querrias mas aquel, ó este? por cierto que aquel, respon

"º-EE mans

men laborare. Ex hoc genere dictum est laudanda, quae pecuniam suam pluribus
illud Ciceronis : Ut corpora nos tra sine largitur, ita quae formam. Verba sunt
amente, ita civitar rine lege, suis parti in his similia, largitionis, et vetustatis:
bus ut nervir , ac ranguine, et membrir vis quidem longe diversa , pecuniae, et
uti non potest. Sed uthac corporis hu pudicitiae. Itaque in hoc genere maxi
mani pro Cluentio: ita pro Cornelio, e me quaeritur, an simile sit, quod infer
quorum : pro Archia , saxorum quoque tur. Etiam in illis interrogationibus So
est usus similitudine. Illa (ut dixi) pro cratis, cavendum , ne incaute respondeas:
piora; ut remiges rine gubernatore , ita ut apud Aeschinem Socraticum male re
milites rine imperatore nihil valere. spondit Aspasiae Xenophontis uxor. Quod
Solent tamen fallere similitudinum Cicero his verbis transfert. Dic mibi,
species, ideoque adhibendum est his ju quaeso, Xenophontis uxor, si vicina tua
dicium. Neque enim ut navis utilior no meliur habeat aurum, quam tu habes , u
va, quam vetus , sic amicitia : vel ut trum illius, an tuum malivº Illiur, inquit.
3 Io INSTITUCIONES ORATORIAS

» dió. ¿Y si la misma tuviese un corte de vestido, ó un ade


» rezo de los vuestros mas vistoso, que el tuyo, quál escoge
» rías ? el suyo, dixo. Ahora bien, dime, si ella tiene marido
» mejor que el que tú tienes ¿quál tomarias ántes? Aquí la
» muger se sonroseó.” Con razon ¿ pues quién la metia á ella
en decir, que se prendaba mas de lo ageno, no siendo lícito
codiciarlo? Dixera que querria, que su oro fuese tan aquila
tado, como el de la vecina, y entónces sin rubor podia res
ponder, que desearia fuese tal su marido, que nadie se las
apostase en el mundo.
Pruébase tambien una cosa extrínsecamente por medio
de autoridades. No entiendo por autoridades aquellos juicios
anteriores, por los que se sentenció ya otra causa semejante á
la nuestra; porque esto se reduce á los exemplos, sino las
opiniones, y comun consentimiento de naciones, pueblos, sa
bios, poetas, y hombres ilustres.
¿Qué mas? Aun de las opiniones comunes, y costumbres ya
recibidas podemos hacer uso. Pues por lo mismo, que no són
testimonios, que se buscáron, ó inventáron para nuestra cau
sa, sino dichos, y sentencias de gente desapasionada, carecen
de toda sospecha, y convencen mas: como que son dichos, ó
hechos, que miran á lo mejor, y mas conforme á la verdad.
Por exemplo, si hubiera yo de tratar de lo míserable, que
es esta vida ¿porqué no me valdré de la costumbre de aque

Quid si vestem, et caeterum ornatum mu tiones vocant, non de quibus ex causa


liebrem pretii majoris habeat , quam tu dicta sententia est (nam ea quidem in
habes, tuum , an illius mais? Illius vero,
exemplorum locum cedunt) sed si quid
respondit. Age, inquit, si virum illa me ita visum gentibus, populis, sapientibus
liorem habeat, quam tu haber , virumne . viris, claris civibus, illustribus poetis,
zuum , an illius malis? Hic mulier eru referri potest.
buit. Merito; male enim responderat, se Ne haee quidem vulgo dicta, et re
malle alienum aurum , quam suum: nam cepta persuasione populari, sine usu fue
estid improbum. At si respondisset: mal rint testimonia. Sunt enim quodammo
le se aurum suum tale esse, quale illud do, vel potentiora etiam, quod non cau
esset, potuisset punice respondere, mal sis accom nodata , sed liberis odio , et
le se virum suum talem esse, qualis me gratia mentibus, ideo tantum dicta, fa
lior esset. ctaque, quia , authonestissima, autve
Adhibetur extrinsecus in causam , et rissima videbantur.
auctoritas. Haec secuti graecos, a quibus An vero me de incommodis vitae dis
º fºtºs dicuntur , judicia , aut judica serentem non adjuvabit earum persuasio
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3 II

los pueblos " , que lloraban el nacimiento de alguno, y ce


lebraban con festines á los que salian del mundo? Si quiero
recomendar, y realzar la misericordia delante de un juez, quién
tachará, que alegue la muy derecha opinion de los Atenienses,
que la tenian, no por pasion, sino por dios ?
Y sino ¿ los dichos de aquellos siete sabios no pasan por
leyes para bien vivir ? Si se ventila en juicio el aborto pro
curado por una muger adúltera ¿no sentenciará contra ella el
dicho de Caton, de que no hay ninguna adúltera , que no sea
tambien hechicera ?
Que si hablamos de las autoridades de poetas, sembra
das estan de ellas las oraciones de los oradores, y libros de los
filósofos. Los quales, aunque tienen por inferiores á sus sen
tencias, y doctrinas, las opiniones de los demas, con todo no
hiciéron asco de apoyar sus dichos con los versos de los poe
tas. Y no es exemplo despreciable el de los de Megara, á los
quales persuadiéron los atenienses, á que juntasen sus naves con
su armada, andando en competencias sobre tomar á Salamina
con un solo verso de Homero (Iliad. lib. 2. v. .557.) que di
ce, que tambien Ayax juntó las suyas con las atenienses; el
qual verso no se encuentra en todas las ediciones.
Aun las opiniones del vulgo, y sus dichos, por lo mismo
que no tienen autor fixo, pasan por autoridades de todo el
mundo. "Tales son: Donde hay amigos, allí hay riquezas.
La conciencia supone por mil testigos. Y en Ciceron: ( De

--

nationum , quae fletibus natos , laetitia etiam philosophorum : qui quanquam im


defunctos prosequuntur? aut si miseri feriora omnia praeceptis suis, ac literis
cordiam commendabo judici, nihil pro credunt, repetere tamen auctoritatem à
derit, quod prudentissima civitas Athe plurimis versibus non fastidierunt. Ne
miensium non eam pro afectu, sed pro que est ignobile exemplum, megareos ab
numine accepit? atheniensibus , cum de Salamine conten
Nam illa septem praecepta sa derent, victos Homeri versu, quitamen
pientum , nonne quasdam vitae leges ipse non in omni editione reperitur, si
existimamus ? Si causam veneficii di gnificans Ajacem naves suas atheniensi
dicat adultera , non Marci Catonis ju bus junxisse.
dicio damnata videatur , qui nuliam Ea quoque, quae vulgo recepta sunt,
adulteram non eamdem esse veneficam hoc ipso, quod incertum auctorem ha
lixitº bent , velut omnium fiunt, quaie est:
Jam sententiis quidem poetarum non Ubi amici, ibi opes. Et; conscientia mille
orationes modo sunt refertae , sed libri testes. Et apud Ciceronen 3 pares autcm,
312 INSTITUCIONES orAToRIAs
sen. lib. 7.) Cada oveja , dice el refran antiguo , con su
areja. Porque á no tenerse por verdades, ya el tiempo los
hubiera abolido.

C A P ÍTULO XII.
4.

DEL USO DE LOS ARGUMENTOS , Y PRUEBAS.

Las pruebas deben ser evidentes , y no admitir duda:


aunque algunas veces las evidenciaremos mas. Quando las
pruebas son muy poderosas, se pondrá cada qual de por sí,
para instar al contrario ; si son débiles, y flacas , se insi
nuarán, y se pondrán juntas. No basta el insinuar las prue
bas: se han de apoyar con algunas reflexiones. De las pruebas,
que se sacan de los afectos. Qué lugar deben ocupar las prue
bas mas poderosas. Reprehéndose la eloqüencia afeminada.

Lo que he dicho hasta aquí, pertenece á la doctrina de


las pruebas, que yo he podido aprender de otros, y de la
misma experiencia. Ni estoy tan confiado de mí mismo, que
piense basta esto solo : ántes exhorto á todos á discurrir otros
nuevos argumentos, pues los hay: aunque todo quanto puede

(uf ert in vetere proverbio) cum paribus fa- senthaec in aeternum, nisi vera omni
cillime congregantur. Neque enim duras- bus viderentur.

CAPUT XII.

DE USU ARGUMIENTORUM.

Argumentum debet plerunque es se confessum : interdum tamen probandum erf. Fir


mirsimir argumentorum , singulis instandum , infirmiora congreganda sunt. Argumen
ta ponere satis non est: adjuvanda sunt. De probationibus, quae ducuntur er afecti
bur. Quo loco potentissima argumenta ponenda sint. Contra effeminatam eloquentiana.

Hes fere de probatione, vel ab utea sola esse contendam : quin imo
aliis tradita, vel usu percepta in hoc hortor ad quaerendum, et inveniri pos
tempus sciebam. Nec mihi fiducia est, se fateor: quae tamen adjecta fuerint,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3I3
añadirse á lo dicho, no será cosa muy distinta. Digamos ahora
cómo usaremos de estas pruebas. - . -

Es doctrina comun, que las pruebas no han de admitir


duda ninguna; porque ¿cómo probaremos una cosa dudosa
con otra, que lo es tambien? Aunque alguna vez ocurre el
probar la misma prueba. v. g. Mataste á tu marido, porque
eras adúltera. Aquí lo primero, que deberemos evidenciar,
es el adulterio, para que probado, sirva de prueba del homi
cidio. Asimismo : Encontróse tu mismo puñal clavado en el
cada ser. Niega el reo ser suyo. Para que aquella pueda
servir de prueba, es necesario probarla. Pero debo advertir,
que no hay prueba mas poderosa, que quando lo que estaba
en duda, se hace evidente. Exemplo. Tú eres el autor de es
ta muerte ; pues tenias el vestido ensangrentado. Si de esto
se le convence al reo, es argumento mas grande, que si él
mismo lo
diera nacerconfesase.
de muchasPorque en caso, que él lo confesara, pu
causas la sangre del vestido. Si lo nie
ga, el probarlo es el punto cardinal de la causa ; porque evi
denciado esto, lo demas de suyo quedará probado ; pues no
se hace creible, que mintiese para negarlo, sino desconfiase
de poderlo defender, si lo confesaba.
Si las pruebas son poderosas, debe el orador instar, y
apretar al contrario con cada una de por sí; pero si son débi
les, debe amontonarlas todas. Porque no conviene el confun-,
dir las que son por sí fuertes con las que de suyo son débiles,
-

-EH -

-
- ----
* -

non multum ab iis abhorrebunt. Nunc cta sunt certa. Caedes à te commissa est;
breviter, quemadmodum situtendum his, cruentam enim vestem habuisti. Non
subjungam. est tam , grave argumentum si fatetur,
Traditum fere est , argumentum o quam si convincitur. Nam si fatetur,
portere esse confessum. Dubiis enim pro multis ex causis potuit cruenta esse ve
bari dubia, qui possunt? Quaedam ta stis. Si negat, , hic causae cardinem po
men, quae in alterius rei probationem. nit: in quo si victus fuerit, etiam in
ducimus, ipsa probanda sunt. Occidisti sequentibus ruit. Noa enim videtur in
virum, eras enim adultera. Prius de adul negando mentiturus fuisse , nisi de
terio convincendum est: ut cum id coe sperasset id posse defendi, si confite
perit esse pro certo , fiat incerti argu retur.
mentum. Spiculum tuum in corpore oc Firmissimis argumentorum, singulis
cisi inventum est: negat suum. Ut pro instandum, infirmiora congreganda sunt:
bationi prosit, probandum est. Illud hoc quia illa ¿¿ fortia non oportet cir-,
loco monere inter necessaria est, nulla cumstantibus obscurare , ut qualia sunt
esse firmiora, quam quae ex dubiis fa appareant; haec imbecilia natura , mu
ToM. I.
3 I4 - INSTITUCIONES ORATORIAS

y flacas: y al contrario estas unidas, podrán ayudarse mu


tuamente; y ya que no sirvan por su solidez, servirán por el
número; porque todas se enderezan á probar lo mismo. Si
decimos, que alguno hizo la muerte para heredar, pondre
mos juntas estas razones; "Esperabas la herencia, y una he
» rencia pingüe : eras pobre, y entonces te hallabas acosado
» de los acreedores : habias ofendido á aquel, de quien espe
» rabas heredar; y Sabias, que queria revocar el testamen
» to” Cada una de estas cosas por sí vale poco, pero juntas
sirven de mucho: y , ya que no ofendan como un rayo, mo
lestan como el granizo, º -
Pero hay algunas pruebas, que no basta el alegarlas, es
necesario darlas nuevo vigor : como si por codicia se cometió
alguna maldad, diremos quánto puede esta pasion ; si la ira,
explicaremos quánta sea su fuerza, quando llega á enseño
rearse del corazon humano. Entónces moverán mas estas ra
zones, y tendrán mas gracia, si ponemos la cosa no des
carnada, y desnuda, sino revestida de sus circunstancias. Del
mismo modo si nos valemos del odio para probar un delito,
va á decir mucho, si el odio nace de envidia, de alguna inju
ria recibida, ó de ambicion; si es añejo, y antiguo, ó de muy
poco tiempo ; si es contra un superior, igual, ó inferior; con
tra un extraño, ó contra un pariente. Segun sea la pasion,
así la trataremos , acomodándola á la utilidad de nuestra
causa. º , - - - - - -

Ni tampoco conviene agoviar el ánimo del juez con todas


- - - - - º * -- "- - -- -

ss EEEEEE- -
---
- - - - - -

* -

tuo auxilio sustinentur. Itaque si non pos sa sceleris fuit , quae sit vis ejus: ira,
sunt valere,quia magna non sunt, valebunt quantum efficiat in animis hominum ta
quia multa sunt, quae ad ejusdem rei pro lis afectio. Ita, et firmiora erunt ipsa,
bationem omnia spectant; ut si quis hae et plus habebunt decoris, si non nudos,
reditatis gratia hominem occidisse dicatur: et velut carne spoliatos artus ostenderint.
Haerediia em sperabar, et magnam haere Multum etiam refert, si argumento ni
ditatcm : et pauper era r , et tum maxime temur odii, utrum hoc ex invidia sit,
a creditoribus appellabaris : et offenderas an ex injuria, an ex ambitu : vetus, an
eum cujus baeres eras : et mutaturum ta novum: adversus inferiorem, paren, an
bulas ciebas. Singula levia sunt, et com superiorem: alienum , an propinquum:
munia: universa vero nocent, etiamsi non Suos habent omnia ista traetatus, et ad
ut fulmine, tamen ut grandine. utilitatem partis ejus, quam tuernur, re
uaedam argumenta ponere satis non ferenda sunt.
est, adjuvanda sunt: ut si cupiditas cau Nectamen omnibus semper, quaein
--
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3I 5
las pruebas, que nos ocurran; ya porque esto fastidia, ya
tambien porque el probar demasiado la cosa, viene á hacerla
sospechosa. Pues no puede persuadirse el juez, que son con
vincentes las primeras, quando parece que desconfiamos de
ellas, añadiendo otras pruebas. En cosas por sí evidentes, el
probarlas, es lo mismo, que sacar una luz á la calle en el
medio dia.º -

Añaden algunos en este lugar aquellas pruebas, que lla


man morales, tomadas de los afectos, y costumbres de un
sugeto. Y ciertamente Aristóteles tiene por muy poderosa
prueba, el dicho del hombre bueno; á la que sigue el de quien
es tenido por tal. Como en aquella famosa defensa de Escau
ro º: Quinto Vario Sucronense dice, que Emilio Escauro
hizo traicion á la república del pueblo romano : Emilio Es
cauro lo niega. Semejante á esto es aquello de Iphicrates, el
qual siendo acusado por Aristophonte de semejante delito, le
preguntó, dime, ¿siátí te dieran dinero, para que vendieses
tu patria, lo harias? No: respondió. Entónces dixo él: ¿Y yo
habia de haber hecho lo que tú no hicieras ?
... Preguntan tambien algunos, si se ha de comenzar por las
pruebas mas fuertes, para llamar mas la atencion: si se han de
poner al fin , para que se impriman mas en los ánimos; ó si
siguiendo el exemplo de Nestor, como dice Homero , con
sus tropas, divideremos los argumentos mas poderosos, y los
mas débiles los colocaremos en medio; ó si comenzaremos por
**** a as, º - º * - º * -- sess. ----º

venerimus, argumentis onerandus est ju- fensio : Quintur Varius $ueronen rir ait
dex : quia et taedium aferunt, et fidem —Aemilium caurum rempublican populi ro
detrahunt. Neque enim judex potest cre mani prodidisre; Aemilius caurus negat.
dere satis esse ea potentia, quae non pu Cui simile, quiddam fecisse, Iphicrates
tamus ipsi suficere, qui dicimus. In re dicitur, qui cum Aristophontem , quo
bus vero apertis argumentari, tann, sit accusante similis criminis reus erat, in
stultum, quam in clariSSimum selem mor terrogasset, an is accepta pecunia rem
tale lumen inferre. . . . . . . . publicam proditurus esset, isque id ne
His quidan probationes adjiciunt, quas gasset: Quod igitur, inquit, tu non fe
zrab y rar a s vocant, ductas ex affecti cisses , ego feci?
bus. Atue Aristoteles quidem potentis Quaesitum etiam , potentissima ar
simun putant ex eo, qui dixit, si sit gumenta primone ponenda sint loco, ut
vir optimus: quod ut optimum est, ita occupent animos : an sum mo, ut inde
longe quidem, sed sequitur tamen, vi dimittant: an partita primo, summoque,
deri. Inde enim illa nobilis Scauri de ut. Homerica dispositione in medio sint
Rr 2
316 INSTITUCIONES ORATORIAS

los mas débiles, colocando los demas como por grados. En


lo qual cada uno comenzará por donde venga mejor para el
asunto, pero con la diferencia, que nunca comience la oracion
por las mejores razones, y termine en las mas débiles.
Por lo que mira á los lugares, de donde hemos de sacar
las pruebas, ya me parece haber insinuado los principales,
aunque no todos. En lo qual procedimos con tanto mas cuidado,
porque aquellas declamaciones, que eran como unos ensayos,
en que nos amaestrabamos, quando jóvenes, para las con
tiendas del foro, perdiéron ya todo el nervio antiguo, y so
lo conservan la pompa, y ostentacion para deleytar al au
ditorio.
Por lo qual (para decir mi sentir) aunque semejante elo
qüencia mereció los aplausos de los auditorios, por no sé qué
deleyte liviano, que en ella halláron, no la tengo en ningun
aprecio, por no echarse de ver en ella algun vigor, y fuer
za varonil ; mucho ménos la gravedad propia de un hombre
ajustado. Es bueno, que los estatuarios, y pintores, quan
do nos quieren pintar un lienzo, ó hacer una estatua de un
hombre con toda la propiedad, y gallardía que cabe, nunca
diéron en el error de tomar por modelo un Bagoas”, ó un
Megabizo, sino un Doryphoro”, tan diestro en la guerra,
como en la palestra, ú otro jóven atleta, y belicoso de gallar
da presencia; y nosotros, que pretendemos dar una idea cabal

infirma : an à minimis crescant. Quae sentio enim , dicam) libidinosam resu


prout ratio cujusque postulabit, ordi pina voluptate auditoria probent, nul
nabuntur, uno (ut ego, censeo) excepto, lam esse existimabo, quae ne minimum
ne à potentissimis ad levissima decre quidem in se indicium masculini , et
Scat oratio. incorrupti , ne dican gravis, et sancti
Ipsas argumentorum , velut sedes, viri, ostendet. An vero statuarum arti
non me quidem omnes ostendisse confi fices, pictoresque clarissimi , cum cor
do, plurimas tamen. Quod eo diligen pora, quam speciosissima fingendo, pin
tius faciendum fuit, quia declamationes, gendove effingere cuperent, nunquam
quibus ad pugnam forensem, velut prae tamen in hunc inciderunt errorem , ut
pilatis exerceri solebamus, olim jam ab Bagoam , aut Megabyzum aliquem in
illa vera imagine orandi recesserunt, at exemplum operis assumerent sibi , sed
que ad solam compositae voluptatem ner Doryphoron illum, aptum militiae, vel
vis carent. palaestrae, aliorum quoque juvenum bel
Quapropter eloquentiam licet hanc (ut licosorum, et athletarum corpora deco
-
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 317
de la eloqüencia : hemos de enseñar, no la fuerza, y nervio
de ella, sino el sonsonete de las palabras?
El jóven pues, á quien dirigimos las presentes reglas, pro
cure muy desde los principios imitar lo natural, y lo verda
dero; y supuesto, que ha de entrar despues en las contiendas
del foro, aspire ya desde la escuela á la victoria, y á herir
al contrario de manera, que tocándole en lo vivo, se pueda
defender de sus tajos, y reveses. Esto ha de enseñar sobre
todo el maestro, y esto ha de alabar en los discípulos, si es
que tienen buena invencion para ello. Porque así como ellos
desean la alabanza, buscándola aun en lo peor, así gustan
de que los alaben lo bueno, que discurriéron. Pero por des
gracia en las escuelas se pasa por alto, lo que es mas ne
cesario para la oratoria, y ya no se tiene por prenda del ora
dor el atender á lo que la causa pide. Mas habiendo ” tra
tado ya de esto en otra obra, y repitiéndolo en esta mu
chas veces, volvamos á nuestro propósito,

a-mm- ausas amdam

ra vere existimaverunt: nos, qui orato tum praeeipue probet. Nam ut ad pe


rem studemus effingere, non arma, sed jora juvenes laude ducuntur, ita lau
tympana eloquentiae demus? -
dari in bonis gaudent. Nunc illud ma
Igitur etille, quem instituimus, ado li est, quod necessaria silentio plerunque
lescens, quam maxime potest, compo transeunt, nee in dicendo videtur inter
nat se ad imitationem veritatis, initu bona utilitas. Sed haec, et in alio nobis
rusque frequenter forensium certaminum tractata sunt opere, et in hoc saepe re
pugnam , jam in schola victoriam spe petenda. Nunc ad ordinem inceptum re
ctet, et ferire vitalia, ac tueri sciat: et Verta mur,
praeceptor id maxime exigat, et inven
3 18 INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULO XIII.
DE LA RE FUTACIO N.

I. Mas dificultoso es defender, que acusar. II. Si lo que el contra


rio alega contra muestra causa es cosa, que pertenece á ella, ó se ne
gará, ó se defenderá, ó diremos, que no se observa la debida formali
dad. Si no mira á la causa presente, se refutará por encima. III. Si
conviene refutar muchas cosas juntas, ó cada una de por sí. Si lo que
dice es falso, se negará redondamente. Se procurará hacer ver, que
lo que se alega es ageno de la caura, ó diverso, ó increible, ó su
perfluo, ó que favorece á nuestro intento. IV. Lugares oratorios de
congetura, de definicion, y qualidad. A veces conviene despreciar lo
que dice el contrario. Contra los semejantes nos valdremos de alguna
cosa desemejante. V. Quándo convendrá referir las mismas palabras
del contrario; y quándo substituir otras en su lugar: quándo contar
todo entero el delito ; y quándo por partes. VI. De las pruebas, que
llaman comunes. De las contradictorias. De las argumentaciones vi
ciosas. VII. Cómo refutaremos las contradicciones , que nos saca el
contrario ; y quándo daremos contra el mismo abogado. Aconseja á los
declamadores, que no saquen contradicciones, que tengan fácil res
puesta. VIII. El orador no debe manifestarse muy solícito en la causa.
Ambas partes cuiden del punto cardinal de la causa.

D. dos maneras podemos entender el nombre de refu


E = E

CAPU T XIII.

DE RE FUT A Tr I 0 N E, -

r. Difficilius erf defendere, quam accr rare. II. Quod prorulit contra nor adorey
sarius, si proprium est judicii , aut negundum , aut defendenaum, aut transferendum.
si accer ritum, refutandum leviter. III.- Utrume plura simul aggredienda sint, an amo
lienda singula. Palam falta negare ratis ert. Efficiendum ut quid, aut contrarium er
se, aut a causa diversum, aut incredibile, aut supervacuum, aut nortrae potius cau
sae videatur este conjunctum. IV. Loc; communes d conjectura , finitione , qualitate.
Quaedam nonnunquam bene contennuntur. In rimilibur quaerendum aliquid dis simile.
V. Quando verba ipsa adversarii referri oporteat, quando alia substitui, Quando e.ºr
ponendum crimen totum , quando per parter. VI. De argumentis, quae dicuntur com
munia. De iis, quae inter se pugnant. De nonnullis vitiosis argumentationibur. VII. Quo
modo contradictioner nobis oppo ritae refutandae sint: et quando personam ipsius patro
ni invadere liceat. Monet declamatores, ne contradictioner ear ponant, quibus facillime
responderi possit. VIII. In defendendo, ne it orator mimir rolicitus. Pidendum utrique
parti, ubi sit rei summa.
",

Rrau, dupliciter accipi potest. Nam , et pars defensoris tota posita est
DE M, FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 3 19
tacion. En primer lugar, la defensa en parte, no es otra cosa
que refutar. Y en segundo lugar desvanecemos las razones
que pone el contrario, refutándolas ; y á esta parte da
mos propiamente el quarto lugar en las causas forenses : ”
aunque tanto para uno, como para otro se observan las mis
mas reglas: porque tanto en la confirmacion, como en la re
futacion, son siempre unos mismos los lugares oratorios, y
unas mismas las figuras, las sentencias, y el estilo ; con la di
ferencia, que en la refutacion es menor el movimiento de
afectos. - -

I. Aunque no sin motivo se tuvo siempre por mas dificil


(como Ciceron lo confirma en muchos lugares) el defender,
que el acusar. Primeramente, porque el acusar es cosa mas
simple; porque la acusacion se hace de un solo modo; pero
la defensa pide mas composicion, y variedad: al acusador le
basta por lo comun, que sea cierto el delito, de que acusa,
pero el que defiende ha de negar el hecho, justificarlo, probar
que está mal puesta la demanda, excusar la accion , suplicar,
suavizar, mitigar el delito, rebatirle , valerse del desprecio,
y de la burla. Por lo qual tiene por lo comun que hacer la
defensa indirectamente, y (para decirlo así ) con estrépito, y
ruido : para lo qual se necesitan mil tretas, y rodeos. A esto
se junta, que el acusador ya trae de su casa medio pensado
todo quanto tendrá que decir ; pero el abogado tiene que res
ponder de repente: el acusador presenta testigos; el aboga
do tiene que refutar lo que estos digan al acusador el mis

=m-

in refutatione; et quae dicta sunt ex mum, quod estres illa simplicior. Pro
diverso , debent utrinque dissolvi : et ponitur enim uno modo: varie dissolvi
haec est proprie, cui in causis quartus tur, cum accusatori Satis sit plerunque
assignatur locus : sedutriusque similis verum esSe id , quod objecerit: patro
conditio est. Neque vero ex aliis locis Ilus meget, defendat, transferat, exeu
ratio argumentorum in hac parte peti set, deprecetur, molliat, minuat, aver
potest, quam in confirmatione: nec lo tat, despiciat, derideat. Quare indire
corum, aut sententiarum , aut verbo cta fere, atque, ut sic dixerim, clamo
rum , et figurarum alia conditio est. sa est actio. Hinc mille flexus, et artes
Afectus plerunque haec pars mitiores desiderantur. Tum accusator praemedi
habet. tata pleraque domo afiert: patronus et
I. Non sine causa tamen dificilius iam inopinatis frequenter occurrit. Ac
semper est creditum (quod Cicero saepe cusator dat testem : patronus ex re ipsa
testatur) defendere, quam accusare. Pri refellit. Accusator criminum invidia, et
32 o INSTITUCIONES ORATORIAS

mo delito feo por sí mismo, aun quando sea falso, le da ma


teria de hablar, ya sea parricidio, ya sacrilegio, ya de lesa
magestad; pero , el abogado solo puede negarle. Y así para
acusador qualquiera basta, por mediano que sea ; pero para
ser abogado, se requiere una eloqüencia consumada. Y para ex
plicarme de una vez , tanto mayor habilidad necesita el abo
gado, que el acusador; quánto mas se requiere para sanar la
herida, que para hacerla.
II. Hace mucho al caso saber lo que dice el contrario, y
cómo lo dice. Y así lo primero de todo debemos considerar,
lo que hemos, de responder; si lo que se nos opone mira á
la causa presente, ó á cosa muy distinta.
Si es cosa que mira á la causa, ó se negará, ó se defen
derá, ó se dirá, que no se observa la debida formalidad:
Porque á estas tres cosas miran las causas del foro. Las plega
rias para disculpar al reo, quando no defendemos el delito,
tienen poco uso ; y solamente delante de aquellos jueces, que
no estan obligados á sentenciar contra el reo, por atenderá
la justicia de otro tercero: aunque aquellas que vemos en las
defensas hechas delante del César, y los Triunviros en favor
de algunos, en medio de ser plegarias, no dexan de tener
algunos visos de defensa. A no decir, que Ciceron no defen
dia con el mayor empeño á Ligario, quando dixo: ¿Qué otra
cosa pretendiamos todos, ó Tuberon , sino el quedar vencedo
res, como quedó el César ? Y si alguna vez tuviéremos que
hablar, ó delante de algun príncipe, ó de algun otro juez

si falsa sit, materiam dicendi trahit, de aut defendendum , aut transferendum:


parricidio, sacrilegio, majestate , quae extra haec in judiciis fere nihil est. De
patrono tantum neganda sunt. Ideoque precatio quidem, quae est sine ulla spe
accusationibus etiam mediocres in dicen cie defensionis, rara admodum , et a
do suffecerunt: bonus defensor nemo, ni pud eos solos judices , qui nulla certa
si qui eloquentissimus , fuit. Nam ut, pronuntiandi forma tenentur: quanquam.
quod sentio semel finiam, tanto estac- . illae quoque apud C. Caesarem , , et
cusare, quam defendere, quanto facere, Triumviros, pro diversarum partium ho
quam sanare vulnera facilius. minibus actiones, etiamsi precibus utun
II. Plurimum autem refert, et quid tur, adhibent tamen patrocinia. Nisi hoc
protulerit adversarius, et quomodo. Pri non fortissime defendentis est dicere:
mum igitur intuendum est, id cui re Quid aliud egimur, Tubero, miri ut, quod
sponsuri sumus, proprium sit ejus judicii, bic potert, mos porsemus ? Quod si quan
an ad causam extra accersitum. do aqud principem, aliumve, cui utrum
Nam si est proprium, aut negandum, velit liceat, dicendum erit; dignum qui
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. e- 32I
que puede lícitamente perdonar al reo, diremos, que era dig
no de muerte, pero que atendidos los méritos de la persona,
conviene que haga su oficio la clemencia. Aquí no hablare
mos con el acusador, sino con el juez; y mas trataremos la
causa, como pide el género deliberativo, que en forma ju
dicial: persuadiendo al juez, que quiera mas alzarse con el re
nombre de clemente, y piadoso, que con el de justiciero.
Dígolo, porque usar de semejantes razones delante de un
juez, que por necesidad tiene que hacer su oficio, seria una
ridiculez. Pero quando lo que nos oponen, es innegable, y
no puede alegarse falta de formalidad, forzosamente hay que
defenderlo, sea como sea, ó perder el pleyto.
Dos maneras hay de negar una cosa : ó diciendo que no
se cometió el delito; ó que no es como dice el contrario. Pe
ro lo que ni puede defenderse, ni disimularse, redondamen
te lo negaremos: y esto no solamente quando la cosa está á
nuestro favor, sino quando no tenemos otro recurso, que la
simple negativa. v.g. ¿Hay testigos ? podemos ponerles mil
tachas. ¿ Hay contra nosotros alguna escritura? puede poner
se en duda su autenticidad. Sobre todo no hay peor cosa, que
confesar de plano.
. Si la cosa, ni puede negarse, ni admite defensa, diremos
á lo ménos por último recurso, que no hay la debida for
malidad. -

Si lo que se nos opone, es fuera de la causa, aunque


tenga algun parentesco con ella, diria yo, que de aquello
-

dem morte eum, pro quo loquemur, cle mam: aut non esse factum: aut non hoc
mentia tamen servandum esse vel ta esse, quod factum sit. Quae neque de
lem : primum omnium non erit nobis res fendi, , neque transferri possunt, utique
cum adversario, sed cum judice: dein neganda: , nec solum si finitio potest es
de forma deliberativae magis materiae, se pro nobis, sed etiamsi nuda inticia
quam judicialis utemur. Suadebimus e tio superest. Testes erunt : multa in eos
nim, ut laudem humanitatis potius, quam dicere licet. Chirographum: de similitu
voluptatem ultionis concupiscat. Apud ju dine literarurh disserendum. Utique ni
dices quidem secundum leges dicturos sen hil erit pejus, quam confessio.
tentiam , de confessis praecipere ridicu Ultima est actiouis controversia, curn
lum est. Ergo quae neque negari, ne defendendi, negandive non estiocus,
que transferri possunt, utique defenden translatio. -

da sunt, qualiacunque sint : aut causa At si extra causam sitadductura , et


cadendum. -

tamen conjunctum, malim quídem dice


Negandi duplicem ostendimus for re, nihil id ad quaestionem, nee esse
ToM. I. S - -
322 INSTITUCIoNEs oRAToRIAs
no se trata al presente, ni nos toca el refutarlo; y aunque
sea verdad, no es tanto como pondera el contrario : y no cul
paré yo á ninguno, que finja habérsele pasado por alto; porque
el buen abogado no debe ofenderse, de que le tachen en esta
parte de descuidado, si contribuye para salvar al reo.
III. Veamos ahora, si conviene refutar muchas cosas á un
tiempo, ó cada una de por sí. Solamente lo haremos, quan
do podemos de un golpe destruirlo todo : ó quando son co
sas tan odiosas en sí, que no conviene refutarlas una por una.
Entónces conviene combatirlas todas juntas con todo empeño,
y pelear, digamos así, de frente. Asimismo si es mas dificul
toso el ir desmenuzando en sus partes todo lo que el con-.
trario amontonó, confrontaremos nuestras pruebas con las su-.
yas, si tenemos confianza de que parecerán mas poderosas,
que las que él alegó.
Quando las pruebas solo pueden por el número, procu
raremos dividirlas , como dixe arriba : Eras su heredero;
eras pobre 3 estabas agoviado de deudas ; le tenias ofen
dido, y sabias , que queria revocar el testamento. Todo es.
to unido, tiene alguna fuerza, pero separado, perderá todo
su valor; como la llama , que se hace menor , dividida la
materia , que le sirve de pábulo: ó como los rios , que
quando los dividimos en muchos brazos, pueden vadearse por
todas partes.
Por eso dispondremos la proposicion con arreglo á esto:
(. - a

- - -
-- --- - -,

in his morandum, et minus esse, quam adversariorum argumentis conferemus,


adversarius dicit: tamen, velut huic si si modo, haecut valentiora videantur,
mulationi oblivionis ignoscam. Debet e effici poterit.
nim bonus advocatus pro rei salute bre Quae vero turba valebunt, diducen
vem negligentiae reprehensionem non da erunt, ut quod paulo ante dixi: Eras ,
pertimescere. baeres , et pauper, et magna pecunia ap
III. Videndum etiam simul nobis plu pelabaris d creditoribus, et offenderas, et
ra aggredienda sint, an amolienda sin mutaturum tabulas testamenti rciebar. Ur
gula. Plura simul invadimus, si auttam gent universa. At si singula quaeque dis
infirma sunt, ut pariter impelli possint: solveris, jam illa flamma, quae magna
aut tam molesta, ut pedem conferre cum congerie convaluerat, diductis quibus
singulis non expediat. Tum enim toto alebatur, concidet: ut sivel maxima flu
corpore enitendum , et, ut sic dixerim, mina in rivos diducantur, qualibet tran
directa fronte pugnandum est. Interim situm praebent.
si resolvere ex parte diversa dicta dif Itaque propositio quoque secundum
ficilius erit, nostra argumenta , cum hanc utilitatem accommodabitur, utea,
e º
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 323
ya manifestando cada cosa separadamente, ó ya muchas co
sas de monton. Porque unas veces convendrá, que lo que el
contrario dividió en muchas partes , lo juntemos nosotros.
v.g. Si dice, y alega los varios motivos, que el reo tenia
para cometer el delito, no deberemos hacer enumeracion de
todas ellas; sino que diremos, que no porque uno tenga al
un motivo para una cosa, se sigue que la haya hecho. Por
comun al acusador trae cuenta, el amontonar las pruebas,
pero al reo refutarlas cada una de por sí,
Importa tambien ver el modo, con que refutaremos lo
que se dice contra nosotros. Si es falso, basta negarlo. Como
lo hace Ciceron en la causa de Cluencio (núm. 168.) pues
diciendo el acusador, que el que tomó el veneno, murió al
punto que lo bebió, niega él que muriese aquel mismo dia.
El ponerse á reprehender lo que es manifiestamente contrario
ó superfluo, ó es una necedad conocida, tiene poca habili
dad: y así para refutarlo, no traeremos 1azon, ni exemplo
alguno. Lo que se dice, sin haber testigo, ni indicio alguno
de ello, por sí mismo se destruye. Basta el que no lo prue
be el contrario. Lo mismo digo de lo que no mira á la causa. -
Debe tambien el abogado probar, que lo que oponen los
contrarios es cosa contraria, ó diversa de la causa, increible,
superflua , ó que favorece á nuestro asunto. Por exemplo,
acusaban á Opio de que á los soldados les cercenaba el prest,

- - • - - - - -

trunc singula ostendamus , nunc com culo concidisse, negat eodem die mor
ectamur universa. Nam interim , quod tuum, Palam etiam contraria, et super
# collegit adversarius , satis est vacua, et stulta reprehendere nullius est
semel proponere; ut si multas causas fa artis. Ideoque, necrationes eorum, nec
ciendi, quod arguit, reo dicet accusa exempla tradere necesse est. Id quoque
tor fuisse: nos non enumeratis singulis, (obscurum vocant) quod secreto , et si
semel hoc intuendum negemus , quia ne teste, aut argumento dicitur factum,
non quisquis causam faciendi sceleris ha satis natura sua infirmum est. Sufficit
buit, et fecerit. Saepius tamen accusa enim, quod adversarius non probat. Item
tori congerere argumenta, reo dissolve si ad causam non pertinet.
re expediet. Est tamen interim oratoris efficere,
Id autem , quod ab adversario di ut quid, aut contrarium esse , aut à
ctum , quomodo refutari debeat intuen causa diversum , aut incredibile , aut
dum est. Nam si erit palam falsum, neg supervacuum, aut nostrae potius causae
are satis est: ut pro Cluentio Cicero. videatur esse conjunctum. Objicitur Op
Eum , quem dixerat accusator epoto po pio, quod de militum cibariis detraxe
Ss 2
324 y INSTITUcioNES oRATORIAs

y la racion. Mal pleyto es este por cierto: pero Ciceron saca


una contradiccion, diciendo que los mismos contrarios le ha
bian acusado de que pretendia sobornar con dinero al exército.
Decia el acusador de Cornelio, que presentaria testigos, de
como él leyó el código en calidad de Tribuno; y repone Ci
ceron , que esto es superfluo, pues el mismo Cornelio lo
confiesa. Pedia Q. Cecilio, que le dexasen acusar á Verres,
pues habia sido su tesorero; y Ciceron hace ver, como por
esto mismo le pertenecia á él la acusacion. ( z. cont. Ver.
59. 65. -

IV. Todo lo demas sobre este punto, ya tiene sus lu


gares comunes. O se exámina la verdad de la cosa por conje
turas; ó si son propias de la causa, por la definicion 3 ó por
la qualidad de la misma cosa, si es buena, ó mala, ó injus
ta, ó inhumana; y todo lo demas, que pertenece á este
genero. - s

Bien que alguna vez se suele despreciar lo que nos opo


nen, ó porque es una bagatela, ó porque nada hace á mues
tro asunto; como lo practicó Ciceron en muchas ocasiones.
Aunque alguna vez por medio de este disimulo solemos de
cir que despreciamos, como cosa fastidiosa, y frívola, lo que
no encontramos razones para refutarlo. , , -

Y supuesto, que la mayor parte de estas cosas depende


de la semejanza, es necesario exáminar con cuidado en todas
ellas; si hay alguna desemejanza. Esto en el derecho ya se co
noce fácilmente: porque como las leyes son de materias tan
----------

- -
º

rit; asperum crímen : , sed contrarium honesta, iniqua, improba , inhumana,


osténdit Cicero, quia iidem accusatores crudelia , et caetera , quae ei generi
objecerunt Oppio, quod is voluerit lar accidunt.
giéndo, corrumpere exercitum. Testes in Nonnunquam tamen quaedam bene
Cornelium accusator lecti à Tribuno co contemnuntur, vel tanquam levia, vel
dicis pollicetur : facit hoc Cicero super tanquam ad causam nihil pertinentia.
vacuum , quia idem fateatur ipse. Pe Multis hoc locis facit Cicero. Sed haec
tit accusationem in Verrem Quintus Cae simulatio interim hucusque procedit, ut,
cilius, quod fuerat quaestor ejus : l quae dicendo refutare non possumus, qua
psum Cicero, ut pro se videretur , ef si fastidiendo calcemus.
fecit. Quoniam vero naxima pars eorum
IV. Caetera, quae proponuntur, com similibus constat, rimandum erit dili
munes locos habent. Aut enim conjectu gentissime, quid sit in quoque, quod as
ra excutiuntur, an vera sint: aut fini sumitur, dissimile. Id in jure facile de
tione, an propria: aut qualitate, an in prehenditur. Estenim scriptum de rebus
DE MFAB1o QUINTILIANo. LIB. v. 325
diversas, es mas clara la diferencia. Las semejanzas tomadas
de los irracionales, é insensibles, cuesea poco el darlas por el
pie. Por lo que hace á los exemplos de las cosas, se maneja
rán con variedad, si es que pueden dañar. Quando son du
dosos, los llamaremos fabulosos; si son verdaderos, diremos
que hay muchísima desemejanza; porque no es posible, que
dos convengan en un todo. Así si se defiende á Nasica por ha
ber muerto á Graco, con el exemplo de Ahala, que quitó la
vida á Melio; diremos que Melio pretendia hacerse rey, y
que Graco solo dió leyes segun el paladar de la plebe; que
Ahala fué coronel de caballeria; y que Nasica es un mero parti.
cular. Quando no tenemos razon ninguna, exáminaremos, si
se encuentra algun aparente motivo, que desapruebe el hecho.
o mismo que decimos de los exemplos , entiéndase de los
juicios, ó sentencias anteriores. ” -
V. Quando dixe, que debemos mirar el modo, con que
el contrario dixo la cosa, se dirige á que, si la propuso con
poca eficacia, y nervio, repitamos sus mismas expresiones;
pero si el modo de decir fué acompañado de fuego, y vehe
mencia, quando repitamos lo que dixo; lo hagamos con pa
labras, que disminuyan la atrocidad de la cosa. Así Ciceron
en la defensa de Cornelio ; tocó el código; y poco despues
expone la cosa, como defendiéndola. Así si se defiende á un
luxurioso, diremos: opone el contrario, que era algo libre la
vida de este. A esta semejanza diremos parco en lugar de
- -

º- - v. - as -----

utique diversis, tantoque magis ipsa re- catur. Si defecerint omnía , tum viden
rurn differentia potest esse manifesta. Il- dum erit , an obtineri possit, ne illud
las vero similitudines, quae ducuntur ex quidem recte factum. Quod de exemplis,
mutis animalibus, aut imanimis, fa idem etiam de judicatis observandum.
cile est eludere. Exempla rerunn varie V. Quod autem posui , referre , quo
tractanda sunt, si nocebunt. Quae si du quieque accusator modo dixerit, hue
bia erunt, fabulosa, dicere licebit : sin pertinet, ut si est minus efficacitér lo
vera, maxíme quidem dissimilia. Ne cutus, ipsa ejus verba pomantur: si acri,
que enim fieri potest ut paria sint omnia; et vehementi usus fuerit oratione, eam
ut si Nasica post occisum Gracchum de dem rem nostris verbis mitioribus profe
fendatur exemplo Ahalae, a quo Melius ramus, ut Cicero pro Cornelio : Codicem
est interfectus : Melium regni affectato attigit. Et protinus cum quadam defen
rem fuisse; à Graccho leges modo latas sione: ut si pro luxurioso dicendum sit;
esse populares: Ahalam magistrum equi objecta ert paulo liberalior vita. Sic, et
tum fuisse , Nasicam privatum esse di pro Sordido parcum , et pro maledico
326 INSTITUCIONEs oRAToRIAs
mezquino; y que uno no tiene pelos en la lengua , por no de,
cir maldiciente. Finalmente nunca tomaremos en boca las mis
mas pruebas del contrario, ni repetiremos sus mismas expre
siones, ayudándole con alguna amplificacion, sino para refu
tarlas. Así Ciceron (por Murena núm. 2 r.) ”Haber estado
» tú, dice, en el exército; no haber entrado el pie en el fo
s» ro ; haber estado ausente tanto tiempo; ¿ y despues de tan
» larga ausencia, ponerte á disputar sobre la preeminencia,
s» con los que se criáron en el mismo foro?”
Quando se contradice al contrario, unas veces se expone
el delito todo entero. Así lo practicó Ciceron defendiendo á
Escauro contra Bostar, donde parece , que habla en boca de
la parte contraria. Otras acinando muchas proposiciones, como
en la causa de Vareno: ”Caminando Vareno en compañía de
» Populeno por campos solitarios, dicen que se encontráron
» con la familia de Anchario; y que, Populeno fué muerto:
» que despues atáron, y aseguráron á. Vareno, hasta que es
» te dixese lo que se habia de hacer con él.”
Esto se ha de hacer , quando es increible la serie de la
cosa; y se ha de tener por inverisímil, si se cuenta con todos
los pelos, y señales. A veces se refuta el delito por partes:
porque todo entero podria dañar : y esto es lo mas seguro,
Otras, una sola proposicion de su naturaleza encierra contra
dicciones: lo que no necesita de exemplos. .

VI. De aquellos argumentos, que son comunes, nos po


demos aprovechar muy bien; no tanto porque aprovechan
- - es e * ---- - -

liberurn dicere licebit. Utique nunquam reno: Cum iter per agros , et loca rotu
committendum est, ut adversariorum faceret cum Populeno, in familiam Ancha
dicta cum sua confirmatione refera mus, rianam incidirse dixerunt : deinde Popule
aut etiam loci alicujus executione adju num occirum es re: illico Varenum vinctuan
vemus, misi cum eludenda : Apud exer adservatum , dum bic ostenderet , quid de
citum mihi fuerir, inquit : tot annis fo eo fierà vellet.
rum non attigerir: abfueris tandiu : et Quod est utique faciendum , si erit
cum tam longo intervallo venerir, cum iis, incredibilis rei ordo, et ipsa expositio
qui in foro babitarunt, de dignitate con ne fidem perditurus. Interim per partes
tendas? dissolvitur, quod contextu nocet: et ple
Praeterea in contradictionibus interim runque id est tutius. Quaedam contradi
totum crimen exponitur : ut Cicero pro ctiones natura sunt singulae. Id exem
Scauro contra Bostarem facit, velut ora plis non eget.
tionem diversae partis imitatus. Aut plu VI. Communia bene apprehenduntur,
ribus propositionibus junctis; ut pro Va mon tantum quia utriusque sunt partis
r
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V.
-

327
á las dos partes, quanto porque sirven aun mas al que res
ponde. Y no tendré reparo en repetir lo que he advertido
muchas veces, y es : que el que primero echa mano de un
argumento comun, de comun le hace contrario. Contrario
llamo á lo que puede servir á nuestro enemigo. v.g. Dirán
que no es creible, que un hombre como M. Cota haya conce
bido tamaña maldad. ¿Y qué , lo es el que Opio la haya
intentado? (Cic. pro Opio.) -

Al orador le toca coger las contradicciones del contrario,


ó lo que parezca tal: aunque ellas mismas muchas veces sal
fall ¿ ojos, como en la causa de Celio: Clodia dice, que

prestó dinero a Celio , lo que prueba haber tenido con él


grande amistad; y que la queria dar veneno , lo que es in
dicio de un odio descomunal. (n. 31: ) Se queja Tuberon de
que Ligario estuvo en el Africa ; y se queja al mismo tiem
po de que le prohibió á él la entrada en ella. (Por Li
gario núm. 9.) - -

Da á veces ocasion á estas contradicciones el poco tino, y


reflexion del contrario en lo que dice: y es muy comun esta
dolencia en los que gustan de lucirse con sentencias, porque
arrebatados de este deseo , miéntras fixan la atencion en lo
¿ dicen, y no en la causa, vienen á perder la cuenta de
o que ántes dixéron. ¿Qué cosa mas contra Cluencio, que
la nota, y castigo de un Censor ? ¿y qué cosa mas contra
ria al mismo, que haber Egnacio desheredado á su hijo por
haberse dexado sobornar en el juicio , en que Opiánico
-
- - -

sed quia plus prosunt respondenti. Ne bi paratum, quod summi odii argumen
que enim pigebit, quod saepe monui, tum est: Tubero Ligarium accusat, quod
referre: commune, qui prior dicit, con is in Africa fuerit: et queritur , quod
trarium facit. Est enim contrarium , quo ab eo ipse in Africam non sit admissus.
adversarius bene uti potest. At enim mon Aliquando vero praebet ejus rei occa
rerisimile est, tantum scelus M. Cottam sionem minus considerata ex adverso di
es se commentum. Quid? boc verisimile est, centis oratio; quod accidit praecipue cu
tantum rcelus Oppium es re conatum? pidis sententiarum , ut ducti occasione
Artificis autem est invenire in actio dicendi, non respiciant quid dixerint,
ne adversarii, quae inter semetipsa pu dum locum praesentem, non totam cau
gnent, aut pugnare videantur; quae ali sam intuentur. Quid tam videri postest
quando ex rebus ipsis manifesta sunt: contra Cluentium , quam censoria nota?
ut in causa Caeliana, Clodia aurum se, Quid tam contra eundem , quam filium
Caelio commodasse dicit, quod signum ab Egnatio corrupti judicii, quo Cluen
imagmae familiaritatis estº: venenum si tius óppianicum circumvenisset, crimi
328 INSTITUCIONES oRAToRIAs -
fué condenado ? Pues Ciceron hace ver como estas dos cosas
se contradicen: "Pero creo, ó Accio, que reflexionarás, qué
» juicio querrás tú, que tenga autoridad, y peso; el juicio
» de los censores, ó el de Egnacio. Si el de Egnacio, tiene
» poca fuerza el que los censores formáron de los demas: pues
» estos mismos degradáron á Egnacio, á quien tú, tienes por
» hombre de peso. Pero si el de los censores; sabemos que
» los mismos le conserváron en la dignidad senatoria, y de
º gradáron á su padre, que le habia desheredado.” ( Por
Cluencio n, r35.) r- 9. - º
Quando se alegan pruebas dudosas, como si fueran con
vincentes; lo que está en disputa, como si fuera cosa decidi
da; lo comun á las dos partes, como si á una sola favorecie
se ; las pruebas vulgares, y superfluas, é increibles; ó aun
que sean verdaderas, se alegan fuera de sazon; esto está
tan mal traido, que no es menester mucha habilidad para
refutarlo. Lo que suelen hacer algunos con poca cautela para
mas agravar, lo que aun no está probado : como disputar
del hecho, quando se busca el autor: empeñarse en probar
un imposible, y dexar como si estuviera suficientemente pro
bado, lo que apénas ha comenzado á probarse: el hablar
de las personas en lugar de la causa: atribuir á las cosas, á
empleos los vicios de un particular; como poner tacha en el
oficio de los Decemviros, en vez de acusar á Apio: contradecir
á la verdad manifiesta : proferir cosas, que pueden tomarse
en distinto sentido: no fixar la atencion en el punto cardinal
- mensnm

ne exhaeredatum? At haec Cicero pu pro confesso: commune pluribus, pre


gnare invicem ostendit. Sed tu, Acci, proprio: vulgare, supervacuum , serius
con riderer, censeo, diligenter, utrum cen constitutum , contra fidem, Nam, etil
rorium judicium grave velis erre , an E la accidunt parum cautis, ut crimen au
gnatii. Si Egnatii; leve ert, quod, censo geant , quod probandum est: de facto
res de caeteris subrcripserunt. Iprum enim disputent, cum de auctore quaeratur: im
Gn. Egnatium , quem tu gravem errc vis, possibilia aggrediantur: pro, efectis re
ex fCnatu ejecerunt. Sin autem censorium; linquant vix dum inchoata: , de homine
hunc ipsum Egnatium , quem pater cenro dicere, quam de causa malint : homi
ºria subscriptione exhaeredavit, censores in num vitam rebus assignent ; ut si quis
senatu , cum patrem ejicerent , reti decemviratum accusset, non Appium:
elleruni. -
manifestis repugnent: dicant, quod ali
Illa magis vitiose dicuntur, quam ter accipi possit : summam quaestionis
acute reprehenduntur : argumentum du non intueantur; non ad proposita re
bium , pro necessario: controversum, spondeant; quod unum aliquando recipi
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. V. 329
de la causa, ni responder al intento; lo que únicamente pue
de disimularse, quando se defiende una mala causa con qua
lesquiera razones, aunque traidas de fuera: como quando Ver
res se defiende valerosamente, y con maña de la acusacion, de
que habia robado el dinero público, diciendo que echó mano
de él, para apartar á los piratas de la Sicilia (7. Verr. n. z. 4.)
VII. Lo mismo debe entenderse de las contradicciones,
que nos pretende sacar el contrario. Con tanta mayor razon,
porque muchos faltan en este punto por dos extremos. Unos
omitiendo esto aun en el foro, como cosa molesta, se conten
tan con lo que traen discurrido de su casa, no contando con
las réplicas, que despues pueden hacerles. Otros, pasándose
ya de escrupulosos, llevan hecha su provision de respuestas
para las réplicas mas menudas: lo que no solamente es obra
de infinito trabajo, sino superflua ; porque no se reprehen
de la causa, sino quien la defiende. Pido yo en el aboga
do tal destreza, que si dice algo que favorezca á la causa,
se atribuya á su buena maña, no á aquella; y si en algo
falta, se atribuya á la mala causa, no á culpa suya. Y así
las reprehensiones, ó ya de la obscuridad, como en la ora
cion contra Rulo; ó de impericia en el decir, como contra
Pison ; ó de ignorancia de las cosas, y aun de los térmi
nos, y á veces de la frialdad , como contra M. Antonio,
contribuyen para las invectivas contra los que justamente abor
recemos, y sirven para conciliar el odio contra los que que
remos que se les aborrezca.
- EE

potest , cum mala causa adhibitis ex putant, quod est, et infinitum , et su


trinsecus remediis tuenda est: ut cum pervacuum. Non enim causa reprehen
peculatus reus Verres fortiter , et indu ditur, sed actor: quem ego semper vi
strie tutatus contra piratas Siciliam di deri malim, sic disertum, ut., si dixe
citur. rit, quod rei prosit, ingenii credatur
VII. Eadem adversus contradictiones laus esse, non causae : si quando forte
nobis oppositas praecepta sunt. Hoc ta laedat, causae, non ingenii culpa. Ita
men amplius, quod circa eas multi duo que illae reprehensiones, aut obscurita
bus vitiis diversis laborant. Nam qui tis, qualis in Rullum est: aut infantiae
dam etiam in foro, tanquam molestam in dicendo, qtalis in Pisonem: aut in
rem , et odiosam praetereunt : et iis scitiae rerum, verborumque, et insulsi
plerunque, quae composita domo attu tatis etiam , qualis in Antonium est,
lerunt, contenti , sine adversario di accommodantur justis odiis, suntque uti
cunt. Alii diligentia lapsi, verbis etiam, les ad conciliandum iis, quos invisos fa
vel sententiolis omnibus respondendum cere volueris, odium.
ToM. L. Tt
33 o INSTITUCIONES oRAToRIAs
Otra manera hay de responder á los abogados , en los
quales no solamente se suele tachar el lenguage, sino su con
ducta, semblante, el modo de andar, y aun el mismo trage:
así Ciceron no solamente reprehende en Quincio (oracion
por Cluencio núm. 3) todo esto, sino la pretexta caida hasta
los talones; porque Quincio habia perseguido á Cluencio, y
dado contra él en varios razonamientos. Otras veces eludimos
con una chanza lo que el contrario dixo con aspereza , pa
ra hacerle mas odioso ; como lo hace Ciceron con Triario.
Habiendo dicho este , que las columnas de Scauro fuéron
conducidas en carros por medio de la ciudad con mucho coste,
dixo: Pues yo que las tengo del monte Albano , las trare en
angarillas. Esto se permite mas contra los acusadores , á
quienes la ley de la defensa muchas veces nos obliga á zaherir.
Está tambien recibido, y no es crueldad, el quejarse en
general de todos ; como el decir, que calláron, disminuyé
ron, obscureciéron, y dilatáron con malicia alguna cosa.
Sobre todo parece que se debe dar un aviso á nuestros de
clamadores ; y es, que ni hagan objeciones, que tengan
fácil salida, ni se imaginen muy bobo, y lerdo al contrario.
Esto lo hacemos, porque se nos presentan lugares comunes,
que dan abundante materia de hablar, y pensamientos aco
modados al paladar del vulgo, haciendo entrar en el dis
curso lo que nos agrada: de modo, que no es inútil aquel
V CISO : -

No es mala la respuesta,
- - - - -

Alia respondendi patronis ratio : et magis hoc in accusatores concessum est,


aliquando non. eorum oratio modo, sed quibus convitiari aliquando patrocinii fi
vita etiam , vultus denique -, incessus, des cogit. Illa vero adversus omnes, et
habitus recte incusari solet: ut adversus recepta, et non inhumana conquestio, si
Quintium Cicero , non haec solum , sed callide quid tacuisse, breviasse, obscu
ipsam etiam praetextam demissam ad ta rasse , distulisse dicuntur. -

los insectatus est. Presserat enim turbu Declamatores vero. in primis suntad
lentis concionibus Cluentium Quintius. monendi, ne contradictiones eas ponant,
Nonnunquam elevandae invidiae gratia, quibus facillime responderi possit: neu si
quae asperius dicta sunt, eluduntur: ut bi stultum adversarium fingant. Facimus
à Cicerone Triarius. Nam cum Scauri co autem, quod maxime uberes loci, popula
lumnas per urbem plaustris vectas esse resque nascuntur sententiae materiam di
dixit: Ego porro, inquit, qui Albanas ha cendi nobis, quo volumus, ducentibus 3 ut
beo columnas, clitellis eas apportavi. Et non sit inutilis ille versus : IVon male re
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 33 I
-

Supuesto que fué mala la pregunta. *

Esta costumbre nos engañará en el foro, donde no nos responde


mos a nosotros, sino al contrario. Preguntándole á Accio, por
qué no defendia pleytos, quando era tan grande su habili
dad en componer tragedias, respondió: Porque en estas ha
go hablar á las personas lo que yo quiero ; pero en el foro
el contrario diria lo que no me acomodase de ningun modo.
Por donde es cosa ridicula en semejantes declamaciones, que
sirven como de ensayo para el foro, el meditar lo que respon
deremos, y no pensar las réplicas , que nos podrán hacer.
El buen maestro no ménos debe alabar al discípulo, que
discurre bien por parte del contrario, que al que se defiende
a S1 In 1SmO. -

VIII. Otro vicio es el mostrarse tan solícito el abogado,


que se agarre aun de las mas frívolas menudencias. Esto ha
ce ya sospechosa la causa al juez: y lo que dicho de pronto,
quitaria toda duda, diferido, la misma preparacion, y preám
bulos hacen, que no se le dé crédito despues, dando á en
tender el mismo abogado, que necesita de otros apoyos. El
orador manifieste siempre confianza , y en su modo de decir
dé á entender, que la causa le ofrece buenas esperanzas. En
esto, como en todo, fué aventajado Ciceron. Porque aquel
sumo cuidado en manifestar, confianza , es , semejante á
la seguridad; y da tanta autoridad á lo que decimos, que es

spondit, male enim prior ille rogarat. Fallet sua parte acrius excogitarit.
haec nos in foro consuetudo, ubi adversa VIII. Est et illud vitium , nimium
rio, non ipsi nobis respondebimus. Ajunt soliciti , et circa omnia momenta luctan
Accium interrogatum, curcausas non age tis. Suspectam enim facit judici causam,
ret, cum apud eum in tragoediistanta vis et frequenter, quae statim dicta omnem
esset, hanc reddidisse rationem: Quod illic dubitationem sustulissent, dilata , ipsis
ea dicerentur, quae ipre vellet, in foro di praeparationibus fidem perdunt, quia ,
cturi adversarii es sent, quae minime vel patronus et aliis crediderit opus fuisse.
let. Ridiculum est ergo in exercitationi Fiduciam igitur orator prae se ferat,
bus, quae foro praeparantur, prius co semperque ita dicat, tanquam de causa
gitare, quid responderi , quam quid ex optime sentiat. Quod (sicut omnia) in Ci
diverso dici possit. Et bonus praeceptor cerone praecipuum est. Nam illa summa
non minus discipulum laudare debet, si cura securitati est similis, tanta que in
quid pro diversa , quam si quid pro oratione auctoritas, ut probationis lo
Tt 2
332 INSTITUCIONES ORATORIAS

como una nueva prueba, el no dudar , que saldremos con


nuestro pleyto.
Finalmente, el que conociere, quanto hay de poderoso, y
fuerte, tanto en la causa del contrario, comó en la suya, es
te tal sabrá, quándo le ha de salir al encuentro, y quándo
le ha de apretar. Por lo que mira al órden, ninguna cosa dis
minuye mas el trabajo. Si defendemos, primero probaremos
nuestra causa, y despues desharemos las objeciones. Si res
pondemos, lo primero de todo será refutar al contrario. Pero
siempre atenderemos en lo uno, y en lo otro, donde está
el punto principal: porque sucede, que en qualquiera causa
se dicen muchas cosas, pero se juzga de pocas. -

Este es el modo de probar y refutar ; pero ha de acom


pañar la energía, y el adorno: porque aunque hay cosas aco
modadas para manifestar lo que pretendemos, con todo, per
derán toda su fuerza, si no las acompaña el nervio, y fuerza
en el decir.

a sºnas

cum obtineat, dubitare nobis non au dendum praecipue utrique parti , ubi
dentibus. sit rei summa. Nam fere accidit, ut in
Porro, qui scierit, quid pars adversa, causis multa dicantur , , de paucis ju
quid nostra habeat valentissimum, fa dicetur. -

cile judicabit, quibus maxime rebus, vel In his probandi , refutandique ratio
occurrendum sit, vel instandum. Ordo est: sed adjuvanda viribus dicentis, et
quidem in parte nulla minus afert la adornanda. Quamlibet enim sintad do
boris. Nam si agimus, nostra confirman cendum, quod volumus accommodata,
da sunt primum : tum quae nostris op tamen erunt infirma , nisi majore quo
ponuntur, refutanda. Si respondemus, dam oratoris spiritu impleantur.
prius incipiendum està refutatione. Vi


DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. v. 333
CAPÍTULO XIV.

I. Qué cosa es epicherema , y enthymema II. Su uso de


be ser raro. III. Qué adorno conviene á los argumentos.
I. E epicherema tiene tres partes, proposicion mayor,
menor, y conclusion. " Tomemos el exemplo de Ciceron:
Mejor se gobierna lo que se hace con consejo, que lo que sin
él se hace. Ninguna cosa hay mejor gobernada que el mundo.
Luego el mundo se gobierna con consejo. (Lib. r. de la In
vencion n. 57.73.) En estas tres partes no se guarda siempre
el mismo órden. Por último el epicherema en nada se distin
gue del silogismo, sino en que este comprehende muchas es
pecies, y por él se deduce una verdad de otra; pero el epi
cherema comunmente sirve para cosas probables.
Al enthymema unos le confunden con el silogismo ora
torio; otros le tienen por parte de él: porque el silogismo
consta de proposicion, y conclusion”, y en todas sus partes
va deduciendo lo que propuso ; pero en el enthymema va
solamente comprehendida la conseqüencia. Silogismo es el si
guiente: Sola la virtud es verdadero bien : porque aquel es
bien verdadero, de que no podemos abusar. Ninguno puede
abusar de la virtud. Luego es verdadero bien. Enthymema -

-a= masme

C A P U T XIV.

-
I. Quid sit epicherema: quid entbymema. II. Orator debet iis uti rarius. III. Qua
- -

lis ornatus argumenti conveniat.

I. Earner- sunt partes:


prima intentio, secunda assumptio, ter
cherematis frequentior circa credibilia
USuS.
tia connexio. Sumamus ex Cicerone exem Enthymema ab aliis oratorius syllo
plum : Melius gubernantur ea , quae con gismus, ab aliis pars dicitur syllogismi,
silio reguntur , quam quae sine contilio ad propterea, quod Syllogismus utique con
ministrantur. IVibil autem omnium rerum clusionem, et propositionem habet, et
melius , quam omnis mundus administra per omnes partes eficit, quod proposuit:
tur. Consilio igitur mundus administratur. enthymema , tantum intentum intelligi
In tribus autem , quas fecimus parti contenturn sit. Syllogismus talis : solumn
bus non est forma semper eadem. Por— bonum virtus : nam id demum bonum
ro epicherema nullo differt à syllogi est, quo nemo male uti potest: virtute
smis , nisi quod illi, et plures habent memo male uti potest: bonum est ergo
SPecies, et vera colligunt veris: epi virtus. Enthymema ex consequentibus:
334. INSTITUCIONES ORATORIAS

de conseqüencia : La virtud, de que ninguno puede abusar,


es bien. Y al contrario : El dinero no es bien : porque no pue
de serlo aquello, de que puede alguno abusar. Del dinero
puede alguno hacer mal uso. Luego no es bien. Enthymema
por los repugnantes: ¿Por ventura es bien el dinero, del que
qualquiera puede abusar?
Il. Me parece haber descubierto los arcanos de los maes
tros del arte: pero queda lugar al discernimiento: porque
así como no prohibo usar alguna vez del sylogismo, así tampoco
quiero, que toda la oracion conste, ó esté llena de epiche
remas, silogismos, y enthymemas. De lo contrario nues
tros razonamientos serían muy semejantes á los diálogos, y
disputas de los dialécticos; siendo tan distintas estas dos cosas.
Como los filósofos son doctos, é indagan la verdad entre gen
te intruida, todo lo exáminan menuda, y escrupulosamente,
hasta evidenciar la cosa, señalando dos caminos, para encon
trarla, y hacer juicio de ella. Al primero llaman tópico, y crí
tico al segundo. Pero nosotros tenemos, que ajustar nuestros
discursos al juicio de los oyentes; puesto que no pocas veces
son gente ignorante, y sin letras. Y si no los ganamos con el
deleyte, si no los traemos con las fuerzas de la oratoria á lo que
intentamos, y no excitamos variedad de pasiones en sus ánimos,
no podremos salir con la verdad, y con la justicia.
La eloqüencia es de suyo rica, y d pero nada
de esto tendrá , quando toda la oracion vaya encadenada
-EEE s

Bonum estvirtus, qua nemo male uti differunt. Namque illi homines docti,
potest. Et contra : Non est bonum pecu et inter doctos verum quaerentes, mi
nia: non enim bonum , quo quiSquam nutius, et scrupulosius scrutantur omnia,
male uti potest: pecunia potest quis male et ad liquidum, confessumque perducunt:
uti: non igitur bonum est pecunia. En ut qui sibi, et inveniendi, et judicandi
thymema expugnantibus: An bonum est vindicentpartes, quarum alteram rozrin uv,
pecunia, qua quísque potest male uti? alteram ºtrº y v vocant. Nobis ad alio
II. Peregisse mihi videor sacra tra rum judicia componenda est oratio, et
dentium artes: sed consilio locus super saepius apud omnino imperitos , atque
est. Namgue ego utin oratione Syllogis aliarum certe ignaros literarum loquen
mo quidem aliquando uti nefas non du dum est: quos nisi, et delectatione alli
co, ita constare totam, aut certe con cimus, et viribus trahimus, et nonnun
fertam esse aggressionum , et enthyme quam turbamus afectibus, ipsa , quae
matum stipatione minime velim. Dialo justa , ac vera sunt, tenere non pos
SU In uS.
gis enim , et dialecticis disputationibus
erit similior, quam nostri operis actio Locuples , et speciosa vult esse elo
nibus: quae quidem inter se plurimum. quentia : quorum nihil consequetur, si
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V. 335
de silogismos, epicheremas , y enthymemas dispuestos de
una misma forma, y terminacion. Si el estilo es humilde, me
rece desprecio; si con esclavitud, odio; si es muy pompo
so, y redundante, empalaga ; y tan afluente puede ser, que
cause fastidio. Corra pues por campo espacioso, y no vaya
reducida á sendas estrechas ; y no sea como las fuentes aca
naladas por caños reducidos, sino como los rios, que exten
diéndose por llanuras, ellos mismos se abren camino, si no
le encuentran. -

Porque ¿dónde hay mayor esclavitud que la de aquellos,


que se parecen á los niños, que van siguiendo, sin apartarse
un ápice, las letras mismas, que les formó su maestro; y que
como dicen los griegos, guardan con mucho cuidado el primer
vestido, que su madre les puso ? Quiero decir, la propo
sicion, y conclusion sacada de los consiguientes, y repugnan
tes ¿no deberá ir animada , variándose, y amplificándose de
mil modos; de forma que parezca una cosa natural, sino que
seguiremos servilmente las reglas del arte en la formacion del
enthymema?”
Porque ¿ quién de los oradores habló jamas en forma si
logística ? En Demóstenes lo vemos alguna vez, pero muy
rara. Solamente lo vemos practicado en los griegos modernos
(porque en esto solo son inferiores á nosotros) los que van
encadenando semejantes argumentaciones de un modo inex
plicable, deduciendo las verdades, y probando sus conclusio
nes. Y aunque les parece, que en esto imitan á los antiguos,

m

conclusionibus certis, et crebris, et in dientium ? Propositio , ac conclusio ex


unam prope formam cadentibus conci consequentibus, et repugnantibus, non
sa: et contemptum ex humilitate , et inspiret, non augeat, nón rrille figuris
odium ex quadam servitute , et ex co variet, ac verset : utea nasci, et ipsa
pia satietatem , et ex amplitudine fasti provenire natura, non manufacta, et ar
dium tulerit. Feratur igitur non semitis, te suscepta magistrum fateri ubique vi
sed campis : non , uti fontes angustis deantur?
fistulis colliguntur, sed ut latissimi am Quis unquam sic dixit orator? Nonne
nes, totis vallibus fluat, ac sibi viam, apud ipsum Demosthenem paucissima
si quando non acceperit, faciat. hujusmodi reperiuntur? Quae apprehen
Nam quid miserius illa lege, velut sa graeci, magis (nam hoc solum nobis
praeformatas infantibus literas perse pejus faciunt) in catenas ligant , et in
quentium, et, ut graeci dicere solent, explicabili serie connectunt, et indubi
quem mater amictum dedit, solicite custo tata colligunt, et probant confessa , et
-
336 INSTITUCIONES ORATORIAS

si les preguntamos, á quiénes siguen, no nos sabrán respon


der. Pero de las figuras hablaremos en otro lugar.
III. Debo añadir aquí, que no convengo con la opinion
de los que dicen, que los argumentos deben ponerse en sus
términos claros, y precisos, y no difusamente, y con adorno.
Confieso, que deben ser distintos y claros; y si las cosas son
de poca importancia, basta que el lenguage sea muy propio,
y usado: pero quando ocurra alguna cosa de mayor entidad,
juzgo que ningun adorno se debe desechar, con tal que no
cause obscuridad. Y quanto mas desagradable de suyo sea
la materia, otro tanto mas conviene sazonarla con el de
leyte; y quando la argumentacion sea sospechosa, disimular
con el adorno su artificio: puesto que lo que con gusto se oye,
lo abraza mejor el ánimo. A no ser que digamos, que no dixo
bien Ciceron, valiéndose de esta misma argumentacion: Que
entre las armas enmudecen las leyes ; y que a veces las leyes
mos ponen la espada en las manos. Pero de los adornos usemos
con tal moderacion, que hermoseen, y no agovien el razo
IlaIIll CIltO.

-s DE EE.

se antiquis per hoc similes vocant. Dein- materia, nullum ornatum his, qui mo
de interrogati, nunquam respondebunt, do non obscuret, subtrahendum puto.
quem imitentur. Sed de figuris alio loco. Quoque quid natura magis asperum, hoc
III. Nunc illud adjiciendum , ne iis pluribus condiendum est voluptatibus; et
quidem consentire me , qui semper ar nimis suspecta argumentatio , dissimu
gumenta sermone puro, et dilucido, et latione: et multum ad fidem adjuvatau
distincto, caeterum minime lato, orna dientis voluptas. Nisi forte existimamus
toque putant esse dicenda. Namque ea Ciceronem male in hac ipsa argumen
distincta quidem , ac perspicua debere tatione dixisse rilere leges inter arma, et
esse confiteor: in rebus vero minoribus gladium nobir interim ab ipsis porrigile
etiam sermone, ac verbis, quam maxi gibus. Histamen habendus modus, ut sint
me propriis, et ex usu. At si major erit ornamento , non impedimento.

-
- 337

s LIBRO SEXT O.

P R O EMI O.
QUÉIASE DE su MALA FoRTUNA. PoR LA PÉRDIDA DE sUs HIJos,
y MUGER.
* * ,

To, fuéron, ó Marcelo Victorio, las razones, que me


moviéron á emprender esta obra. La primera por darte gusto;
la segunda el conocer que podria de ella resultar algun fruto
á la juventud; y la tercera el cargo, que se me ha encomen
dado ": procurando yo desempeñarle con todo cuidado. Fue
ra de estos tres motivos, no dexaba tambien de atender en
ella á la educacion de un hijo mio, cuyo agigantado talento
requeria una cuidadosa instruccion: para que, si llegaba el fin
de mis dias (como era preciso, y yo deseaba) pudiese él dis
frutar de los preceptos de su padre, que le dexaba como
en herencia, Pero quando yo dia, y noche me apresuraba á
concluir este trabajo, agitado de los miedos de la mortalidad,
la fortuna me dió un tan repentino, y recio golpe, que á
ninguno otro podia ya resultar ménos fruto de estas mis
\

-L I B E R S EXT U. S.

P RO O E. M. IU M.

DE FoRTUNA suA OB AMISSos LIBERos, ET coNJUGEM QUERITUR-.

Hes , Marcelle Victori , ex tua rentis diligentiam merebatur, hanc o


voluntate maxime ingressus, tum si qua ptimam partem relicturus haereditatis
ex nobis ad juvenes bonos pervenire pos videbar: ut si me , quod aequum , et
set utilitas, novissime paene, et neces optabile fuit, fata intercepissent, prae
sitate quadam oficii delegati mihi, se ceptore tamen patre uteretur. At me for
dulo laborabam: respiciens tamen illam tuna id agentem diebus, ac noctibus; fe
curam meae voluptatis, qui filio, cujus stinantemque metu meae mortalitatis, ita
eminens ingenium solicitam quoque pa subito prostravit, ut laboris mei fructus
ToM. L. VV.
*.
338 INSTITUCIONES ORATORIAS

fatigas, que á mí mismo. Porque experimentado segun


da vez el duro golpe de la orfandad, me vi privado del
hijo que me quedaba ”, de quien no solamente habia con
cebido las mayores esperanzas, sino que él era la única de mi
vejez.
¿Qué haré en tal situacion? ¿O de qué puedo yo servir
en este mundo, teniendo á los dioses contrarios? Y mas quan
do la fortuna quiso probarme con un golpe de esta naturale
za, quando emprendí el libro de las causas de la corrupcion
de la eloqüencia, que dí á luz. Entónces me pareció lo mas
acertado en medio de una muerte tan temprana, el arrojar
esta obra tan aciaga, y todas mis infelices tareas, si algo va
len, sobre la pira de su funeral, para que consumiese tam
bien mis entrañas; y no fatigar mas con nuevos cuidados esta
malvada; y larga vida. ¿Pues quién, que tenga entrañas de
padre, disculpará mi desatino, si continúo en el cebo de las
letras; y no detestará ántes esta mi naturaleza de bronce, si
empleo mi voz en otra cosa, que no sea culpar á los dio
ses, porque quisiéron que yo sobreviviese á todos los mios ?
¿ó en dar voces por todo el mundo, diciendo que no hay
providencia que le gobierne?”. Y ya que no sea motivo de
tan justo dolor mi desgraciada vida (en la que no cabe otra
reprehension, que el que dura tanto) á lo ménos lo será el
ver, que muriéron tan temprano, sin merecerlo. Antes de
su muerte habia yo quedado privado de su madre, que sin
haber cumplido aun los diez y nueve años, y despues de

ad neminem minus, quam ad me per mea flammis injicere, neque hanc im


tineret. Illum enim, de quo summa con piam vivacitatem novis insuper curis fa
ceperam, et in quo spem unicam sene tigare. Quis enim bonus parens mihi i
ctutis reponebam, repetito vulnere orbi gnoscat, si studere amplius possum ? ac
tatis, a misi. non oderit hanc animi mei firmitatem,
Quid nunc agam? aut quem ultra es si quis in me est alius usus vocis, quam
se usum mei, diis reprobantibus, credam? ut incusem deos, superstes omnium meo
Nam ita forte accidit, uteum quoque rum? nullam terras despicere providen
librum , quem de causis corruptae elo tiam tester? si non meo casu, cui ta
quentiae emisi, jam scribere aggressus, men nihil objici, nisi quod vivam, po
srmili ictu ferirer. Tunc igitur optimum test; at illorum certe, quos utique im
fuit, infaustum opus , et quicquid hoc meritos mors acerba damnavit : erepta
est in me infelicium literarum , super mihi prius eorumdem matre, quae non
immaturum funus consumpturis viscera dum expleto aetatis undevicesimo anilo,
DE M. FABIO QUINTILIANO. LI8. VI. 339
haber dado á luz dos hijos, murió dichosamente, aunque ar
rebatada de los crueles hados. Este único golpe era muy bas
tante, para que nunca pudiese yo ser dichoso. Porque no so
lamente causó en mí esta mortal herida, por hallarse adorna
da de todas aquellas buenas partes , que caben en una mu
ger; sino que siendo tan niña, y mas con respecto á la edad
que yo tenia, su muerte fué para mí, como haber perdi
do un hijo. Pero al cabo me quedaba el consuelo de los
hijos, y el que muriendo ella una muerte temprana, se li
bertó de los dolores de la muerte de sus hijos; que nome
recia otra cosa. Aunque fué cruel, en querer morir, dexán
dome á mí con vida.
Despues de este golpe, para que no me faltasen motivos
de infelicidad , el hijo pequeñito, al cumplir los cinco años,
con su muerte me privó de uno de mis ojos. No gusto de
aumentar mis males, ni redoblar los motivos de mi sentimien
to: y ojalá me fuese lícito el disminuirlos Pero cómo po
dré yo disimular lo agraciado de su cara, la gracia en el ha
blar, la viveza de su ingenio , lo excelente de aquella alma
cándida, dotada de un entendimiento tan elevado, qual no me
persuado pueda darse en la naturaleza? Niño de semejantes
prendas, aunque fuera extraño, arrebataria mi amor. Y para
Ot
mas atormentarme despues la fortuna, que ya con las gra
cias del niño me armaba alguna traicion, quiso que él con sus
halagüeñas niñerías me antepusiese en el amor á su madre
de leche, á la abuela, que le cuidaba, y en fin á todos quan

duos enixa filios, quamvis acerbissimis rum ex duobus eruit 1umen. Non sum
rapta fatis, felix decessit. Ego, vel hoc ambitiosus in malis, nec augere lacry
uno malo sic eram afiiictus, ut me jam marum causas volo : utinamgue esset
nulla fortuna posset efficere felicem. Nam. ratio minuendi Sed dissimulare , qui
cum omni virtute, quae in feminas ca possum, quid illi gratiae in vultu, quid
dit, functa , insanabilem attulit mari jucunditatis in sermone , quos ingenii
to dolorem : tum aetate ea puellari, prae igniculos, quam praestantiam placidae,
sertim meae comparata , potest et ipsa et (quod scio vix posse credi tantum) al
numerari inter vulnera orbitatis. Liberis tae mentis ostenderit? qualis amorem
tamen superstitibus oblectabar : et quod quicunque alienus infans mereretur. Illud
nefas erat, saeva , sed optabat ipsa, me vero insidiantis, quo me validius cru
salvo maximos cruciatus praecipiti via ciaret, fortunae fuit, utille mihi blan
efugit. dissimus, me suis nutricibus , me aviae
Mihi filius minor quintum egressus educanti, me omnibus, qui solicitare
annum, utin malis agerem, prior alte solentillas aetates, anteferret. QuaPro
VV 2
34o TNSTITUCIONES ORATORIAS

tos solicitan los cariños de semejante edad. Por lo qual doy


por bien empleado el sentimiento, que pocos meses ántes me
costó la muerte de su madre, superior á toda alabanza: pues
mucho menor es el dolor, que por mi parte ahora siento, que
el que se me acrecentaria de verla á ella, y á mí padecer.
. . Ya no me quedaba mas arrimo, que la esperanza y vida
de mi Quintiliano : y aun era bastante para mi consuelo.
No eran solamente flores las que su ingenio manifestaba, co
mo en el primero, sino que apuntaban ya los frutos con se
ñales de que serian seguros. Juro por mi desgracia, por el
doloroso testimonio de mi conciencia, y por aquella muerte
causadora de mi sentimiento , que descubria yo en él tales
muestras de ingenio, no digo para las ciencias (pues para esto
no ví cosa mayor, en lo que hice no pocas experiencias, y
en cosas, donde no forzaba yo su talento, como lo saben sus
maestros ) sino de bondad, amor á su padre, afabilidad, y
cortesanía ahidalgada, que de semejantes ingenios seguramen
te se puede ya pronosticar algun recio golpe de muerte tem
prana; por enseñarnos la repetida experiencia, que unos fru
tos tan anticipados nunca llegan á colmo. Y no sé qué envi
dia secreta corta el hilo de nuestras esperanzas en semejante
caso ; sin duda para que el hombre no remonte el vuelo de
sus deseos sobre los términos, que le fixó naturaleza. *
Concurrian en él todas las prendas, que da la fortuna: dul
zura, y claridad en la voz, suavidad en la pronunciacion, la
que era tan fina, y propia en ámbas lenguas, como si qual

pter illi dolori, quem ex matre optima, percipiendas disciplinas, quo nihil prae
atque laudem omnem supergressa, pau stantius cognovi, plurima expertus, stu
cos ante menses ceperam , gratulor. Mi diique jam tum non coacti , (sciunt prae
nus enim est, quod flendum meo no ceptores) sed probitatis, pietatis, huma
mine , quam quod illius gaudendum nitatis , liberalitatis: ut prorsus possit
est? hinc esse tanti fulminis metus: quod ob
Una post haec Quintiliani mei spe, servatum fere est, celerius occidere fe
ac voluptate nitebar: et poterat suffice stinatam maturitatem ; et esse nescio,
re solatio. Non enim flosculos , sicut quam, quae spes tantas decerpat, in
prior, sed jam decimum aetatis ingres vidiam , ne videlicet ultra , quam ho
sus annum , certos, atque deformatos mini datum est, nostra provehantur.
fructus ostenderat. Juro per mala mea, Etiam illa fortuita aderant omnia, vo
per infelicem conscientiam , per illos ma cis jucunditas, claritasque, oris suavi
nes, numina doloris mei; has me in illo tas, et in utracunque lingua, tanquarn
vidisse virtutes ingenii, non modo ad ad eam demum natus esset , expressa
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 34 I
uiera de ellas le fuera natural. Pero de todo esto no habia
¿ sino la esperanza : sobre todo, lo grande en él, era la
circunspeccion, constancia, y fortaleza para resistir á los mie
dos, y dolores. Con quánta firmeza de ánimo, con quánto
pasmo de los médicos sufrió las incomodidades de una enfer
medad de ocho meses ! ¡Cómo me consoló á mí en su último
aliento! ¡Y cómo en medio de sus delirios solo en las letras
no deliraba !
¿Cómo tuve valor para ver yo mismo tus ojos, quando se
iban apagando, ó vana esperanza mia”, y quando tu espí
ritu desamparaba al cuerpo? ¿Cómo pude yo vivir despues
de haber abrazado tus miembros frios, y sin vida, y despues
de haber recibido tu último aliento? Bien merecidos tengo
los tormentos, y pensamientos que dia, y noche me asaltan.
¿Con que te he venido á perder, quando adoptado por un
consul, y destinado para ser yerno de un pretor, tio tuyo,
fundabas las esperanzas de un padre, no ménos con la de
tus honores venideros, que con las muestras de que aspira.
bas á la gloria de la eloqüencia ática, trocándose todo esto
en daño mio ? Tome pues venganza de un padre, que pudo
vivir despues de perdido un hijo; ya que no el deseo de la
vida, á lo ménos el sufrimiento , é infelicidad con que la pa
so. Que no hemos de echar toda la culpa á la fortuna.
Y si alguno es miserable por mucho tiempo, en él está. Pero
vivo; y al cabo se hará preciso , buscar algun medio para
alargar la vida: pues hemos de dar crédito á los hombres
-m- mam

proprietas omnium literarum. Sed haec dignus his cruciatibus, quos fero , di
spes adhuc: illa majora, constantia, gra gnus his cogitationibus? Tene consula
vitas, contra dolores etiam , ac metus ri nuper adoptione ad omnium spes ho
robur. Nam quo ille animo, qua medi norum patris admotum , te avunculo
corum admiratione, mensium octo va praetori generum destinatum , te o
letudinem tulit! ut me in supremis con mnium spe atticae eloquentiae candida
solatus est! quam etiam deficiens, quam tum , superstes parens tantum ad poe
que non tunc ipsum illum alienatae men nas, amisi? Et si non cupido lucis, cer
tis errorem circa solas literas habuit! te patientia vindicet te reliqua mea ae
Tuosue ego, ô meae spes inanes, la tate. Nam frustra mala omnia ad cri
bentes oculos, tuurn fugientem spiritum men fortunae relegamus. Nemo misi sua
vidi? Tuum corpus frigidum , exangue culpa diu dolet. Sed vivimus, et aliqua
complexus, animam recipere, auram vivendi ratio quaerenda est: credendum
que communem haurire amplius potui? que doctissimis hominibus, qui uni
342 INSTITUCIONES ORATORIAS

mas sabios, que dixéron, no haber otro consuelo contra las mi


serias de la vida, que las letras.
Y si alguna vez llega á calmar la fuerza de mi dolor de
tal modo, que algun otro pensamiento ponga fin á mi llanto,
con justa razon pediré se me disculpe esta digresion º en
la obra emprendida. ¿Quién pues se admirará, de que haya
yo interrumpido el curso de mi estudio, teniendo mas justa
razon de admirarse, si así no lo hubiera practicado ? Ademas
de esto, si en lo restante de mi obra, alguna cosa no corres
pondiere á lo primero en la pulidez, atribúyase á mi igno
rancia , ó á mi mala fortuna : pues ya que no se haya
apagado del todo aquel primer fuego , con que comen
cé ¿quién duda, que á lo ménos se habrá algun tanto amor
tiguado? Alentémonos pues mas por esta misma razon; porque
así como se me hace dificil llevar este golpe, y vida mise
rable, es fácil por lo mismo el despreciarla. Y por lo mismo,
que ya me hizo infeliz, me puso en la seguridad cierta de
no gustar otra vez este trago tan amargo. Si por algun mo
tivo puedo tener por bueno este mi trabajo, es porque ya
no puedo emplearme en otra cosa, que pueda servirme de
utilidad: que si en esta obra hay alguna, á otros tocará, no
á mí. Y así me vendrá á suceder con este mi trabajo pun
tualmente lo mismo, que con los bienes de mi patrimonio,
que habiéndolos destinado para unos, entrarán otros á dis
frutarlos.

- El

cum adversorum solatium literas pu cius erigamus , quod illam, ut perferre


ta Verunt. nobis dificile est, ita facile contemne
si quando tamen ita resederit prae re. Nihil enim sibi adversus me reliquit,
sens impetus, ut aliqua tot luctibus alia et infelicem quidem , sed certissimam
cogitatio inseri possit, non injuste petie tamen attulit mihi ex his malis securi
rim morae veniam. Quis enim dilata tatem. Boni aútem consulere nostrum la —
studia miretur, quae potius non abrupta borem , vel, propter hoc certum est, quod
esse mirandum est? Tum si qua minus in nullum jam proprium usum perseve
fuerint efecta iis, quae levius adhucaf ramus: sed omnis haec cura ad alienos,
ficti coeperamus, imperitiae, aut for ut alienis utilis (si modo quid utile scri
tunae remittantur: quae si quid medio bimus) spectat. Nos miseri, sicut facul
crium alioqui in mostro ingenio virium tates patrimonii nostri, ita hoc opus
fuit, ut non extinxerit, debilitavitta aliis praeparamus, aliis relinquemus.
men. Sed, vel propter hoc nos contuma
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 343

CAPÍTULO PRIMERO.
DE LA PERORACION.

Tiene dos partes, recapitulacion, y afectos. I. Aquella sea


breve, y variada por guras. De este único modo entendiéron
el epílogo los atenienses, y filósofos. Puede usarse tambien de
ella en otras partes de la oracion. II. Del movimiento de afec
tos : 1º de parte del acusador. Excitando el odio, aborreci
miento, y la ira. Pintando el delito de que acusa, como el mas
atroz, ó como la cosa mas miserable. Debe apartar al juez de
la misericordia , que implorará el reo. 29 de parte del que de
fiende. Qué cosas suelen recomendar, y favorecer al que se ha
lla en peligro. La compasion se mueve pintando los males, que
el reo ha padecido, ó padece actualmente, ó los que le aguar
dan, si es condenado. Entónces vienen bien las prosopopeyas.
Nunca debe implorarsepor mucho tiempo la compasion. IlI. Er
cítase, ya con hechos , ya con palabras. Si con hechos, ó ade
manes , conviene revestirse del carácter miserable del reo.
IV. Ninguno se empeñe en mover las lagrimas, si no tiene pa.
ra ello mucha destreza. Cómo se desvanecerá la compasion. De
los epílogos mas sosegados. En toda la oracion se han de mo
ver los afectos.
A todo lo dicho se sigue la peroracion, que unos lla

CAPUT PRIMUM.

ID E PER 0 R A TIO N Es

Ejus duae parter: recapitulatio, affectus. I. Recapitulatio breviter fat, et varie


tur figurir. Id unum epilogi genus visum est atticis, et philosophis. In caeteris quo—
que partibus adhiberi potest. II. Affectus. I. ex parte accusatoris. Excitando invidiam,
odium , iram. Efficiendo ut id., quod objicit, aut quam a trocirrimum , aut quam maxime
miserabile es se videatur. Debet etiam avertere judicem d miseratione, qua reus rit uru
rus. 2. ex parte defensoris. Quaenam periclitantem commendare roleant. Miseratio maxi
me petitur ex iir, quae passus est reus, aut quae patitur , aut quae eum damnatum.
manent. Tunc praecipue utiles runt prosopopoejae. IVunquam debet erre longa miseratio.
III. Factis quibusdam, non solum verbir, miseratio excitatur. Tunc multum refert quo
modo se dicenti, qui ad id adhibetur, accomodet. IV. Nemo misi summis ingenii viribus,
lacrymar movere aggrediatur. Quomodo miseratio discutiatur. Leniores epilogi. Affectur
per totam orationem pargendi. -

Parae sequebatur, quam cumu- 1um quidam , conclusionem alii vocant.


344. INSTITUCIONES ORATORIAS

man complemento de la oracion, y otros conclusion. Sus par


tes son recapitulacion, y movimiento de afectos.
I. La recapitulacion, y repeticion de todo lo que ántes
hemos dicho, que los griegos llaman anacephaleosis , y al
gunos de los latinos enumeracion, no solamente refresca la
memoria del juez, poniéndole baxo un golpe de vista todo
el discurso, sino que si ántes no se moviéron los oyentes con
cada cosa de por sí, se moverán con todas ellas juntas. Pero
lo que aquí se repita, ha de ser muy por encima : porque
de lo contrario seria otro nuevo discurso. Debe cuidarse de
dar nuevo peso á lo que decimos, variándolo con sentencias,
y figuras acomodadas: porque no hay cosa mas odiosa, que
la repeticion, que se hace en los mismos términos, como si
desconfiáramos de la memoria del juez. Hay varios modos
de hacerla: y es muy lindo aquel de Ciceron contra Verres:
(7. n. z35) Si el padre mismo de Verres fuera el juez,
¿qué diria , viendo estas pruebas?, y de ahí comienza la
recapitulacion. En la misma oracion da principio por la invo
cacion de los dioses á todos los hurtos, con que despojó sus
templos, siendo pretor. (n. 183. ) -

Esta única manera de epílogo reconociéron algunos de los


atenienses , y filósofos, que escribiéron de eloqüencia. El fun
damento de esta opinion de los atenienses no creo haya sido
otro, que el estar prohibido en su ciudad el que los orado
res moviesen los afectos. " De los filósofos no me admiro tan

Ejus duplex ratio est, posita, aut in re rianda : alioqui nihil est odiosius recta
bus, aut in affectibus. illa repetitione, velut memoriae judi
I. Rerum repetitio , et congregatio, cum difidentis. Sunt auten innumera
quae graece , dicitur º van paa a ºvu, biles; optimeque in Verrem Cicero : Si
à quibusdam latinorum enumeratio, et pater ipse judicaret , quae diceret cume
memoriam judicis reficit, et totam si haec probarentur? et deinde subjecit enu
mul causa m ponit ante oculos, et et merationem. Aut cum idem, et in eun
iamsi per singula minus moverat, tur— dem , per invocationem deorum spo
ba valet. In hac, quae repetemus, quam liata à praetore templa dinumerat.
brevissime dicenda sunt, et, quod grae ld unum epilogi genus visum estple
co verbo patet, decurrendum per capita. risque atticorum , et philosophis fere
Nam si morabimur, non jarri enumera omnibus, qui de arte oratoria scriptum.
tio, sed altera quasi fiet oratio. Quae aliquid reliquerunt. Id sensisse atticos
autem enumeranda videntur, cum pou credo, quia Athenis afectus movere et
dere aliquo dicenda sunt, et aptis exci iam per praeconem prohibebatur orator.
tanda sententiis, et figuris utique va Philosophos minus miror , apud quos
DE M. FAEIO QUINTILIANO. LIB. VI. 34.5
to, porque ellos tienen por mengua del hombre el apasio
narse "; y el valerse de los afectos , para apartar al juez
de la justicia, lo tienen por ageno de qualquier hombre de
bien. Aunque si no hay otro medio que los afectos para sa
lir con la razon que nos asiste, y conseguir el bien comun,
vendrán por último á admitirlos.
En lo que convienen todos , es en que quando la causa
es varia, y contiene muchos argumentos, y pruebas, tiene en
trada la recapitulacion en todas sus partes : así como ninguno
duda, que en los asuntos sencillos, y cortos no es necesaria.
Esta parte conviene tanto al acusador, como al abogado.
II. Ambos á dos usan comunmente de unos mismos afec
tos; aunque el acusador ménos veces que el abogado : porque
este debe mover al juez, el otro calmar la pasion, que en él
se haya movido. Aunque alguna vez el acusador llora por com
pasion del mismo reo, contra quien se dirige; y este explica
sus quejas á veces en fuerza de la atroz calumnia, y conspiracion
contra él levantada. Es muy útil separar estos oficios, en los
que por lo comun se observarán, como he dicho, las leyes de
un exórdio; aunque aquí con mas libertad, y vehemencia.
En el exórdio nos pretendemos ganar, á los jueces con mas
moderacion, como que faltando aun toda la oracion, nos con
tentamos con insinuarnos en su gracia. Pero en el epílogo se
trata de excitar en el juez aquella pasion, de que nos con
viene esté revestido para sentenciar: porque como es la úl

mismºs. Es

vitii est loco, afici : nec boni mores II. Affectibus quoque eisdem fere utun
videntur, sic à vero judicem averti; mec tur: sed rarius hic, ille saepius, ac-ma
convenire bono viro vitiis uti. Necessa gis. Nam huic concitare judices, illi
rio tamen afectus fatebuntur, si aliter flectere convenit. Verum, et accusator
obtineri vera, et justa, et in commune habet interim lacrymas ex miseratione
profutura non possint. ejus rei, quem ulciscitur: et reus de in
Caeterum illud constitit inter omnes, dignitate calumniae conspirationis vehe
etiam in aliis partibus actionis, si mul mentius interim queritur. Dividere igi
tiplex causa sit, et pluribus argumentis tur haec officia commodissimum , quae
defensa, utiliter avanspanaríaouv fieri plerunque sunt, ut dixi, prooemio simi
Solere: sicut nemo dubitaverit multas lia, sed liberiora, plenioraque. Inclina
esse causas, in quibus nullo loco sit ne tio enim judicum ad nos , petitur initio
cessaria, si breves, et simplices fuerint. parcius, cum admitti satis est, et oratio
Haec pars perorationis accusatori, patro tota superest. In epilogo vero est, qua
noque aeque communis est, lem animum judex in consilium ferat,
ToM. L. Xx
346 INSTITUCIONES ORATORIAS

tima parte, ya no nos queda otro momento, para inclinar su


ánimo ácia nosotros. Por donde es comun á ámbas partes el
conciliarse al juez, apartarle del contrario, mover los afectos,
y calmarlos. Una cosa debo aquí advertir brevemente, tanto
al acusador, como al abogado del reo, y es, que pongan á
la vista en esta parte todas las fuerzas del discurso; y entre
mil cosas, y expresiones, que puedan contribuir para con
ciliarle la misericordia, ó el desprecio, el favor, ó la indig
nacion de los jueces, eche mano tan solamente de aquellas,
que á él mismo le moverian, si estuviese en su lugar. Pero
mejor es tratar cada cosa de por sí. - -

1º. Ya hablamos arriba, quando señalamos las leyes del


exórdio, de lo que sirve para que el acusador se concilie el
favor de los jueces. Pero hay ciertas cosas, que bastando el
insinuarlas en el exórdio, es necesario esforzarlas en la pero
racion como si la acusacion es contra algun poderoso, abor
recido de todos, y malquisto, ó perjudicial al comun; y si
de condenarle resulta gran loa á los jueces, ó ignominia de
absolverle. Así Calvo dixo muy bien á los jueces contra Va
tinio”: Todos sabeis, que ha cometido soborno, y todo el mun
do sabe, que estais persuadidos de ello. (2. Verrina 43. &c.).
Ciceron dice tambien contra Verres, que se puede reparar
la ignominia de los juicios anteriores, condenando al reo; que
es uno de los modos sobredichos. Si alguna vez conviene re
convenir á los jueces con el temor de lo por venir , como
él mismo lo practica, nunca mejor que en el epilogo debe
*= * º a - -

-EE -sa

et jam nihil amplius dicturi sumus, nec satorem, in praeceptis exordii jam dixi
restat, quo servemus. Estigitur utrisque mus. Quaedam tamen, quae illic osten
commune , conciliare sibi , avertere ab dere satis est, in peroratione implenda
adversario judicem ; concitare affectus, sunt magis: si contra impotentern, in
et componere. Et brevissimum quidem visum , perniciosum suscepta causa est:
hoc praeceptum dari utrique parti po si judicibus ipsis , aut gloriae damnatio
test, uttotas causae vires orator ante rei, aut de formitati futura absolutio. Nam.
oculos ponat : et cum viderit, quid in egregie in Vatinium Calvus: Factum, in
vidiosum, favorabile, invisum , misera quit, ambitum scitis omnes, et boc vos sci
bile, aut sit in rebus , aut videri pos re omnes sciunt. Cicero quidem in Verrem
sit, ea dicat, quibus, si judex esset i etiam emendari posse infamiam judicio
pse, maxime moveretur. Sed certius est rum damnato reo dicit, quod estunum
ire per singula. ex supradictis. Metus etiam , si est ad
1. Et quae conciliant quidem accu-, hibendus, ut facit idem, hunc habeat
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 347
hacerse. Ya dixe en otro lugar, quál era mi opinion sobre
este punto.
En esta parte suele tambien moverse la ira, la envidia, y
el odio con mas libertad que en ninguna otra. Moveremos la
envidia contra el reo , ganándonos el ánimo, y gracia del
juez; el odio con la infamia del mismo reo; y la ira del juez,
si hacemos ver, que se halla ofendido por aquel, especial
mente si es obstinado, arrogante, y se cuenta por seguro de
la sentencia contraria. Los jueces no solamente suelen mo
verse por algun dicho, ó hecho, sino con el gesto, trage, y
ademan. Me acuerdo, que siendo yo mozo, dixo, y no muy
mal, un acusador de Cosuciano Capiton , esta sentencia en
griego, que vuelta en latin quiere decir: Aun de temer al
César se avergüenza. - -

El mejor modo de mover los afectos un acusador, será


si hace ver, que el delito, de que acusa al contrario, no sola
mente es el mas atroz, sino ( si es posible ) el mas digno
de compasion. - - -

La atrocidad nace de las circunstancias: quál es el delito,


quién le cometió, contra quién, con qué intencion, en qué
lugar, y tiempo, y de qué manera. Todas las quales tienen
mil vueltas, y revueltas. v.g. ¿ Nos quejamos de que algu
no haya puesto la mano á otro? Primeramente se considerará
el delito en sí: en segundo lugar la circunstancia de la per
sona, si era anciano; niño , magistrado, hombre de bien , y
benemérito del público. Ademas de esto, si el delinqüente
era persona vil, y despreciable, ó por el contrario demasiados
- -a

locum fortiorem, quam in prooemio. Qua cusatori in hoc est, utid, quod obji
de re quid sentirem,alio jam libro exposui. cit, aut quam atrocissimum, aut etiam,
Concitare quoque invidiam , odium, si fieri potest, quam maxime miserabile
iram, liberius in peroratione contingit: esse videatur.
quorum invidiam gratia, odium turpi Atrocitas crescit ex his: quid factum
tudo, iram offensio judicis facit, si con— sit, à quo, in quem, quo animo, quo tem
tumax, arrogans , securus sit; qui non pore, quo loco, quo modo ; quae omnia
ex facto modo, dictove aliquo, sed vul infinitos anfractus habent. Pulsatum que
tu, habitu, aspectu, moveri solet. Egre rimur 2 de re primum ipsa dicendum;
gieque nobis adolescentibus dixisse accil tum si senex, si puer, si magistratus, si
sator Cossutiani Capitonis videbatur: probus, si bene de republica meritus. Et
graece quidem , sed in hunc sensum iam si percussus sità vili aliquo con
Erubercit Caesarem timere. temptoque, vel ex contrario à potente
Summa tamen concitandi affectus ac nimium, vel ab eo, à quo minime opor
Xx 2 -
348 INSTITUCIONES ORATORIAS

poderoso ; si este desacato le cometió quien ménos convenia;


si fué en dia festivo, ó quando en el tribunal se ventilaba
alguna causa de esta naturaleza, ó en tiempo, que afligia
alguna calamidad al estado: si en el teatro, si en el templo,
ó en alguna pública concurrencia. Auméntase el aborrecimien
to, si esto lo hizo de pensado, y no por equivocacion, ó
movido de un arrebato de ira; ó si fué movido de la ira, por
haber sido injusta; como por exemplo por haber el agraviado
defendido á su padre, por haber respondido, ó porque pre
tendia los mismos honores que el #
Finalmente, si,
pretendió pasar aun mas adelante de lo que hizo. Contribuye
tambien no poco para aumentar la atrocidad del hecho, el pro
ponerle con gravedad, y revestirle de cierto ayre de igno
minia. Así Demóstenes excita el aborrecimiento contra Midias,
señalando la parte del cuerpo donde hizo la herida, y pintan
do el mismo rostro, y trage del agresor. Si se trata de alguna
muerte, consideraremos si fué con puñal, con fuego, ó vene
no: si con una puñalada, ó con muchas ; si fué repentina, ó.
á fuerza de tormentos; pues, estas cosas agravan el delito.
. Tambien el acusador suele valerse de la pasion de la mi
sericordia, ó quejándose, y lamentándose de la situacion del
mismo enemigo; ó del abandono, y desamparo, en que que
dan sus padres, ó hjos. ”. Tambien se vale , para mover al
juez á la justicia, de los males que resultarán en lo por ve
nir, si se disimula el delito. Es á saber, que habrá que des
amparar las ciudades, y los bienes, so pena de sufrir quan * -- º,
tos insultos se les antoje á nuestros enemigos. a
-ma-ma-ma-ma--

tuit, et si die forte solenni, autiis tem-, est : utrum ferro, an igne, an veneno,
poribus, cum judicia hujus rei maxime uno vulnere , an pluribus , subito, an
exercerentur , aut in solicito civitatis expectatione tortus, ad hanc partem ma
statu : item in theatro , in templo, in xime pertinet. -

concione. Crescit invidia , et si non er Utitur frequenter accusator, et mise


rore, nec ira ; vel etiam si forte ira, ratione, cum, aut ejus casum , quem ul
sed iniqua , quod patri affuisset, quod ciscitur, aut liberorum , autº parentum
respondisset, quod honores contra pete solitudinem conqueritur. Etiam futuri
ret: et si plus etiam videri potest vo temporis imagine judices movet, qui .
luisse, quan fecit. Plurimum tamen af maneanteos casus, qui de vi, et inju
fert atrocitatis modus , si graviter, si ria questi sunt, nisi vindicentur : fu
contumeliose : ut Demosthenes ex parte giendum de civitate, cedendum bonis,
percussi corporis, ex vultu ferientis, ex aut omnia quaecunque inimicus fecerit,
habitu invidiam Midiae quaerit. Occisus perferenda.
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. VI. 349

Pero lo comun es el apartar el acusador al juez de la


conmiseracion, adonde el reo quiere acogerse, animándole á
hacer el oficio de la justicia, sin atenderá respetos humanos.
Y para esto se anticipará á desvanecer todo lo que el reo po
drá decir, ó hacer despues. Esto no solamente pone mas en
alerta al juez, para no dexarse doblegar , faltando á su obli
gacion; sino que cierra la puerta á las plegarias del reo: no
pareciendo ya cosa nueva lo que se diga en su favor, por
haberse anticipado á deshacerlo el acusador. ¿Qué mas? á ve
ces se le advierte al juez la respuesta, que podrá dar á las
sí plicas del reo, que es una especie de recapitulacion.
2? Por el contrario para recomendacion de la persona
que está en riesgo, se alegará la dignidad del sugeto, sus
buenos deseos , é intenciones, las heridas recibidas por la
patria , la nobleza, y servicios de sus abuelos. De uno , y
otro se valiéron, como á competencia, Ciceron, y Asinio:
el primero defendiendo al hijo, el segundo al padre. Sirve
tambien la causa de verse en peligro; como el haberse mal
quistado por alguna accion loable, virtuosa, humana, y mi
sericordiosa. En este caso con cierta justicia, exigimos del juez
los mismos buenos oficios, que al reo le hiciéron reo y en
tónces añadiremos, que esto redunda en bien del público, en
gloria del mismo juez, sirviendo para exemplo, y memoria
de la posteridad. -
,

Sobre todo aprovecha el excitar la conmiseracion ; la que


no solo mueve á los jueces, sino que los obliga á manifestar
-

- E

Sed saepius id est accusatoris, aver bello cicatrices, et nobilitas, et merita


tere judicem à miseratione , qua reus majorum. Hoc, quod proxime dixi, Ci
sit usurus, atque ad fortiter judicandum cero, atoue Asinius certatim sunt usi:
concitare. Cujus loci estetiam occupare, pro Scauro patre hic, ille pro filie. Com
quae dicturum, facturumve adversarium mendat, et causa periculi, si suscepisse
putes. Nam, et cautiores ad custodiam inimicitias ob aliquod factum honestum
suae religionis judices facit, et gratiam videtur: praecipue bonitas, humanitas,
responsuris aufert, cum ea, quae prae misericordia. Juste enim , tunc petere
dicta suntab accusatore, jam si pro reo ea quisque videtur à judice , quae alii
petentur, non sint nova. Docendi inte ipse praestiterit. Referenda haec pars
rim quoque judices, quid rogantibus re quoque ad utilitatem reipublicae , ad
spondere debeant, quod estunum repe judicum gloriam, ad exemplum , ad me
titionis genus. moriam posteritatis.
2. Periclitantem vero commendat di Plurimum tamen valet miseratio, quae
gnitas, et studia fortia , et susceptae judicem flecti non tantum cogit, sed mo
35o INSTITUcIoNEs oRAToRIAs
con las lágrimas el movimiento interior. Esto se logra , pin
tando los males, que ha sufrido el reo, los que actualmen
te padece, ó los que le aguardan, si se le condena: los qua
les en cierto modo se aumentan, cotejando el estado, de que
cayó, con el que le espera. Para lo que va mucho á decir la
edad, sexó, y sus prendas amadas; digo los hijos , padres, y
parientes: todo lo qual se tratará con variedad. A veces el
mismo abogado se reviste de la persona de los tales: ; Infeliz,
y desgraciado de mí! (Cicer. en la de Milon. ) Pudiste tú,
ó Milon, traerme por medio de estos a la patria ; ¿y no he de
poder yo conservarte en ella por medio de los mismos? Y mu.
cho mas, quando la súplica no está bien en boca del reo, co
mo entónces sucedió. Porque ¿ quién hubiera permitido á Mi
lon suplicar en su favor, siendo homicida de un hombre
noble, quando él mismo confesaba, que justamente le habia
quitado la vida? Y así el abogado con aquella su resolucion
se ganó la benevolencia, y hizo el oficio del reo con sus lá
grimas. - -

Aquí es, donde quadran muy bien las prosopopeyas, ó


razonamientos en boca de otras personas ; quales son las que
convienen al acusador, y abogado. Contribuye tambien para
mover, el introducir hablando á las cosas inanimadas, ó el
hablar con ellas. Asimismo mueve los afectos el hablar en bo
ca de los mismos, que interesan en la causa. De este modo pa
rece, que el juez está oyendo los quejidos, y lamentos de
º -EE -
- - - º * -º * -- - - - -

tum quoque anini sui lacrymis confite non convenient ei, qui accusatur, pre
ri. Haec petentur, aut ex iis, quae pas ces. Nam quis ferret Milonem pró capi
sus estreus, aut ex iis, quae tum ma te suo supplicantem , qui à se virum no
xime patitur, aut ex iis, quae damna bilem interfectum , quia id fieri opor
tum manent: quae, et ipsa duplicantur, tuisset, fateretur? Ergo , et ille capta
cum dicimus ex qua illi fortuna, et in vit ex illa praestantia animi favorem,
quam recidendum sit. Affert in his mo et in locum lacrymarum ejus ipse suc
mentum, et aetas, et sexus, et pigno cessit.
ra, liberi dico, et parentes, et propin His praecipue locis utiles sunt proso
qui. Quae omnia tractari varie solent. popoejae, id est fictae alienarum perso
Nonnunquam etiam , et ipse patronus narum orationes, quales litigatorem de
has partes subit; ut Cicero pro Milone: cent, vel patronum. Mutae tamen res
O me miserum, o me infelicem! Revocare movent, aut cum ipsis loquimur, aut
me tu in patriam, Milo, potuirti per bor, cum ipsas loqui fingimus. Ex personis
ego te in patriam per eos dem retinere non quoque trahitur afectus. Non enim au
potero? Maximeque si (ut tunc accidit) dire judex videtur aliena mala defen
DE M. FABIO QUINTILIANo. LIB. VI. 35 I
los miserables, cuya vista le enterneceria, aun quando no ha
blasen palabra : y así como le harian compadecerse mas, si
estos lamentos, y quejas saliesen de su boca, así son mas
eficaces para mover, quando el abogado se lamenta en persona
de ellos mismos : como vemos en las tablas, que la voz, y
pronunciacion de los representantes bien remedada, y acom
pañada con la máscara de quien representan, contribuye á
mover los afectos. Por donde, aunque Ciceron no introduce
suplicando á Milon, ántes recomienda su causa por medio de
aquella su vehemencia , con todo en persona del mismo da
aquellas quejas, y lamentos, que no desdicen de un hombre
esforzado. ¡ O afanes, y trabajos mios, dice , tomados en va
no! ¡O engañosas esperanzas ! ¡O vanos pensamientos mios!
Pero no deben durar por mucho tiempo semejantes que
jas; porque no en vano se dixo, que ninguna cosa se enjuga
mas pronto, que las lagrimas. (Cic. lib. I. de la invencion.)
Porque si los sentimientos, aun quando verdaderos, tienen
fin, mucho ménos durarán los que el orador finge : en los que
si se detiene mucho, se cansa al auditorio con las lágrimas, se
aquieta, y perdiendo aquel primer ímpetu, luego se pone
en razon. No demos pues lugar á que se resfrie aquel pri
mer afecto , y avivado ya lo bastante, suspendámosle:
pues no debemos pretender, que los males agenos se lloren
por mucho tiempo. Y si en alguna cosa debe ir en aumento
la oracion, en esta es 3 Puesto caso , que quando á lo que

tes, sed sensum , ac vocem auribus ac ces ! O cogitationes inamer meae !


cipere miserorum , quorum etiam mu Nunquam tamen debet esse longa
tus aspectus lacrymas movet; quanto miseratio : nec sine causa dictum est,
que essent miserabiliora, si ea dicerent nibil facilius , quam lacrymar inarescere.
ipsi, tanto sunt quadam portione ad ef Nam cum etiam veros dolores mitiget
ficiendum potentiora, cum , velut ipso tempus, citius evanescat necesse estilla,
rurn ore dicuntur: ut scenicis actoribus quam dicendo efinximus, imago: in qua
eadem vox , eadem pronuntiatio plus ad si moramur, lacrymis fatigatur auditor,
movendos affectus sub persona valet. Ita et requiescit, et ab illo , quem ceperat
que idem Cicero, quanquam preces non impetu, ad rationem redit. Non patia
dat Miloni, eumque potius animi prae mur igitur frigescere hoc opus, et afte
stantia commendat, accommodavit eita ctum , cum ad summum perduxerimus,
men, et verba, et convenientes, etiam relinquamus: necsperemus fore, ut alie
fortiviro conquestiones. O frustra, in na quisquam diu ploret. Ideoque cum
quit, mei suscepti labores ! O spes falla in aliis, tum maxime in hac parte de
352 - INSTITUCIONES ORATORIAS

primero se dixo, no se puede dar nuevo aumento, quanto se


le añada, sirve para disminuirlo; y los afectos, quando van á
ménos, fácil cosa es que desmayen, y se agoten. -

III. No solo se hace llorar con palabras, sino con el ade


man: y así está puesto en costumbre el poner á la vista en
trage miserable á los que estan en peligro, á sus hijos, y pa
dres ; y vemos todos los dias presentar el acusador el puñal
ensangrentado, los huesos sacados de las heridas, los vestidos
salpicados de sangre, las heridas desatadas, y el cuerpo lleno
de cardenales. Todo esto tiene mucha fuerza, como que po
ne la cosa á la vista. La pretexta de Julio César arrojada en
la curia, llenó de furor al pueblo romano: y aunque sabia
que se habia cometido este asesinato, como que allí mismo se
puso el cadáver en una camilla, con todo el vestido salpica
do de sangre representó tan al vivo el hecho, que no pare
cia ser cosa pasada, sino que entónces le estaban asesi
nando. -

No por eso apruebo lo que leo haberse practicado, y


aun yo mismo he visto; que es poner un lienzo, en que es
taba pintado el reo, sobre la estatua de Júpiter ", para mo
ver á los jueces. ¿Qué orador habrá tan principiante , que
piense, que semejante pintura podrá hablar con mas energía,
que su mismo razonamiento? -

Pero sé que el hacer una viva pintura de la miseria, é

º-Es au

bet crescere oratio : quia quicquid non ta, Caji Caesaris prolata in foro cruenta.
adjicit prioribus, etiam detra here vide Sciebatur interfectum eum, corpus de
tur; et facile deficit affectus, qui de nique ipsum impositum lecto erat: ve
scendit. stis tamen illa sanguine ma dens ita re
III. Non solum autem dicendo, sed praesentavit imaginem sceleris, ut non
etiam faciendo quaedam, lacrymas mo occisus esse Caesar, sed tum maxime oc
vemus: unde, et producere ipsos , qui cidivideretur.
periclitentur, squalidos, atque deformes, Sed non ideo probaverim , quod fa
et liberos, eorum , ac parentes , institu ctum , et lego, et ipse aliquando vidi,
tum, et ab accusatoribus ostendi cruen depictam tabulam supra Jovem in ima
tum gladium , et lecta è vulneribus os ginem rei , cujus atrocitate judex erat
sa, et vestes sanguine perfusas videmus, commovendus. Quae enim est actoris
et vulnera resolvi, ac verberata corpo infantia, qui mutam illam effigiem ma
ra nudari. Quarum rerum ingens ple gis, quam orationem pro se putet locu
runque vis est, velut in rem praesentem turam?
animos homimum ducentium. Et popu At sordes, et squalores , et propin
lum romanum egitin furorem praetex quorum quoque similem habitum Scio
DE M. FABIO QUINTILIANo. LIB. VI. 353
infeliz situacion, y aun del trage mismo de los parientes del
reo contribuyó mucho á veces para salvarle. Y así el supli
car á los jueces por las prendas mas amadas del reo, si es
que tiene muger, é hijos, ó padres, es cosa útil. Tambien el
invocar á los dioses puede parecer nacido de que la concien
cia de nada remuerde: asimismo el arrodillarse, y abrazar las
rodillas del juez, á no impedirlo la demasiada dignidad de la
persona, ó la indignidad del reo, ó su mala vida pasada. Hay
cosas, que piden representarse con la misma viveza, que su
cediéron. Pero de tal suerte ha de confiar el orador en su
buena causa, que su misma seguridad no le dañe.
Enmedio de todo lo dicho, lo que sirvió mas para sacar
libre á L. Murena de la acusacion de los hombres mas respe
tables de Roma, fué el persuadir. Ciceron á los jueces, que
no habia cosa mejor, ni mas útil, conforme el estado, que
entónces tenia la república, que comenzar el consulado el dia
ántes de las calendas de Enero. ( Por Murena n. 79.) Pero
ya todo esto casi está abolido; pues como todo el gobierno
recae sobre el cuidado, y proteccion de uno solo, no puede
ninguno hallarse en peligro por semejantes disputas.
- , He juntado los oficios del reo, y acusador, porque en los
peligros es donde mas triunfan, y tienen lugar los afectos;
pero sépase, que toda causa admite estos dos géneros de perora
cion: esto es la que depende de la recapitulacion de prue
bas, y esta, de los afectos, si el litigante está en peligro de
-- 2. - - - - º -
mas sºn
* x =- ---- º

profuisse, et magnum ad salutem mo Cicero, accusantibus clarissimis viris, eri


mentum preces attulisse. Quare, et ob puisse praecipue videtur. Persuasit enima
secratio illa judicum per carissima pi nihil esse ad praesentem rerum statum
gnora, utique si, et reo sint liberi, con utilius, quam pridie calend. Januarias
jux, parentes , utilis erit: et deorum ingredi consulatum. Quod genus nostris
etiam invocatio, velut ex bona conscien temporibus totum paene sublatum est,
tia profecta videri solet: stratum deni cum omnia curae, tutelaeque unius in
que jacere, et genua complecti; misi ta mixa, periclitari nullo judicii exitu pos
men persona nos , et ante acta vita, et sint.
rei conditio prohibebit. Quaedam enim De accusatoribus, et reis sum locu
tam fortiter tuenda , quam facta sunt. . tus, quia in periculis maxirne versatur
Verum sic est habenda auctoritatis ratio, affectus. Sed privatae quoque causae
me sit invisa securitas. utrumque habent perorationis genus : et
Fuit quondam inter haec omnia po illud, quod est ex enumeratione proba
tentissimum id., quo Lucium Murenam tionum , et hoc quod ex lacrymis : si
ToM.I. Yy
354 INSTITUCIONES ORATORIAS. -

perder su estado, ó reputacion. Porque el querer usar de se


mejantes epílogos afectuosos en pleytos de poca monta, es
lo mismo, que ponerle á un niño la máscara, y calzado de
un gigante. - - • V. - -

- Me parece digno de advertirse, que la mayor dificul


tad del epílogo, segun mi juicio, consiste en el modo de con
formarse el semblante del reo con lo que va diciendo el
orador. Porque algunas veces la ignorancia, rusticidad, rigi
dez, y deformidad del litigante suele acarrear frialdad: y de
esto debe guardarse mucho el orador. He visto alguna vez á
los litigantes, que manifestaban displicencia de lo que el ora
dor decia ; que estaban muy serenos, y aun los he visto reir
muy fuera de sazon, y causar tambien risa al auditorio con
algun ademan ridículo: especialmente quando hacian ciertos
movimientos, como si fueran cómicos. -

Alguna vez he visto, que el mismo abogado de la causa


pasó á los asientos de enfrente una niña, hermana , segun se
decia, del contrario, que no queria reconocerla, como para
ponerla en los brazos de su hermano: pero este por aviso
mio se apartó á un lado. Entónces el abogado, sin embargo
que era hombre eloqüente, , á vista de una cosa tan no espera
da, enmudeció, y con mucha frialdad se volvió con la niña.
Otro pensaba, que hacia un gran favor á una muger rea,
presentando allí la imágen de su marido difunto : pero hizo
mucho reir con esta pasmarota. Porque como aquellos, que
se la habian de alargará su tiempo, no sabian el principio
---- - -a- .

aut statu periclitari , autopinione liti vultu risum moventes saepe etiam vi
gator videtur. Nam in parvis quidem li di: praecipue vero cum aliqua , velut
ibus has tragoedias movere, tale, est, scenice fiunt.
quale si personam Herculis, etcothur Transtulit patronus aliquando puel
nos aptare infantibus velis. lam, quae soror esse adversarii diceba
Illud me indignum quidem admoni tur (nam de hoc lis erat) in adversa sub
tione, ingens in epilogis meo judicio ver: sellia , tanquam in gremio fratris re
ti discrimen, quomodo se dicenti, qui licturus : atis à nobis praemonitus de
excitatur, accommodet. Nam, et im cesserat. Tum ille alioqui vir facundus,
peritia, et rusticitas, et rigor, et de inopinatae rei casu obmutuit, et infan
formitas afterunt interim frigus; dili tem suam frigidissime reportavit.
genterque haec sunt actori providenda. Alius imaginem mariti pro rea pro
Equidem repugnantes eos patrono, et ferre magni putavit: atea saepius ri
nihil vultu commotos, et intempestive sum fecit. Nam et ii, quorum oficii erat
ridentes , - et facto aliquo , vel ipso ut traderenteam, iguari, qui esset epi
DE M. FABIO QUINTILIANO, LIB. VI, 355
del epílogo , siempre que el orador se volvia ácia donde es
taban ellos, se la alargaban á vista de todos ; hasta que úl
timamente mostrándola al auditorio, la misma figura horrible
de la imágen ( qué estaba sacada del cadáver de aquel hom
bre ya anciano) hizo que perdiese el orador todo el fruto de
su oracion. , ,,

o Bien sabido es el pasage de Glicon Espiridion. Pregun


tando este á un niño, que él mismo llevó al tribunal, por
qué lloraba: Porque el , ayo, respondió, me tira pelliz
cos. Pero para conocer el inconveniente que hay en semejan
tes epílogos, no hay cosa mejor, que aquel cuento de Cice
ron contra los Cepasios. ...
o Todo esto podia pasar, porque al cabo puede remediarse,
variando el ademan. Pero los que no saben salir del carril, y
estilo ya usado, ó callan en semejantes lances, ó vienen á de
cir mil impropiedades. Quales son : Postrado está dé vuestros
pies, para suplicaros. Y, El miserable está abrazado con
sus hijos. Y, Mirad cómo me llama. Aunque el reo no haga
nada de lo que el abogado dice. Lo mismo digo de aquellos
defectos, y alharacas, que se aprendiéron en la escuela, en
donde libremente, y sin peligro de que nos reprehendan, se
finge qualquiera cosa, porque allí se considera, como hecho
sucedido, lo que se nos antoja. Pero semejantes ficciones no
quadran despues con la práctica del foro. Y así Casio respon
dió con mucha gracia á un abogado principiante, que decia:
¿Porqué, ó Severo, me miras con ese mal ceño ? No hacia
* - -- - ---

-- -- •

co: , , , , , , , s . . . . . . ..., º , , ,, , , ,, ,
-

logus, quoties respexisset patronus, of bus actionem mutare facile est., At qui
ferebantº palam , et prolata, novissime, à stylo non recedunt, aut conticescunt
deformitate ipsa, (narr senis cadaveri ad hos casus , aut frequentissime falsa
infusa) praeteritam quoque orationis gra dicunt. Inde est enim , tenait ad vestra
tiam perdidit. º - genua rupplicer manur. Et, haeret in com
º Nec ignotum quid Gliconi, cui Spi plexu liberorum mircr. Et, revocat ecce me.
ridion fuit cognomen , aceiderit. Huic Etsi nihil horum is, de quo dicitur, fa
puer, quem in jus productus, quid fle ciat. Et è scholis haec vitia, in quibus
ret interrogabat, ex puedagogo revellica omnia libere fingimus, et impune, quía
ri respondit. Sed nihil illa contra Cepa pro facto est quicquid volumus. Non ad
sios Ciceronis fabula efficacius ad peri -mittit hoc idem veritas fori. Egregieque
cula epilogorum. Cassius dicenti adolescentulo : Quid me
Omnia tamen haec tolerabilia, qui torvo vultu intuerir, Severe? IVon me
Yy 2
35ó - INSTITUcioNEs oRAToRIAs r
yo tal cosa, por vida mia , (respondió el otro) sino que así
lo traias escrito en el papel: pero mira. Y entónces le echó•
una terrible mirada.
IV. Advierto sobre todo, que ninguno que no tenga
habilidad para ello, intente mover á lágrimas Porque así co
mo este es el afecto mas fuerte de todos, así sino se logra
excitar, se resfria, y vale mas el no procurarle, quando no
se puede lograr, contentándose con el movimiento interior
de los jueces: porque en semejantes lances la mudanza del
semblante, la voz lastimera, y el aspecto del reo conmovido,
para por lo comun en risa de los que no pudimos mover, Mi
da pues con cuidado el abogado, hasta dónde puede rayar
en estos afectos; y advierta, qué obra tan grande es la que
emprende; bien entendido que, si no mueve á lágrimas, m
verá á risa, porque no hay medio. - , º,
y

... No solamente es oficio del epílogo el mover la compa


sion, sino el desvanecerla, ya en la serie de lo mismo , que
dice el orador, ya con algunas chanzas, y dichos graciosos, para
contener, y atajar los afectos, que en los jueces puedan haber
movido las lágrimas de los contrarios, y hacerlos cumplir con
lo que pide la justicia. Como si decimos: Dadle pan al niño,
para que no llore. Asimismo dixo un abogado á su contrario,
que era bastante membrudo, defendiendo la causa de un ni
ño, que él mismo arrimó junto á los jueces: ¿Qué haré ? yo
no puedo llevarte en hombros. . . . . . . ) º vo

Pero debe cuidarse, que en esto no se remede á los có


\, mas en EE

- -a-- se e--- er ... rº. -- es --------

hercule, inquit, faciebam, sed sic scri- tum onus subiturus sit, intelligat, Nihil
sisti ecce Et quam potuit truculentis- habetista res medium, sed autlacry
sime eum aspexit. - mas meretur, aut risum. se . ..
IV, Illud praecipue momendum, ne NOIl autem Commovere, tantum In Seº
quis nisi summis ingenii viribus ad mo- rationem, sed etiam discutere, epilogi
vendas lacrymas aggredi audeat. Nam est proprium , cum oratione, continua,
utest longe vehementissimus hic cum quae motos lacrymis judices ad justitiam
.invaluit afectus, ita si nihil eficit, te reducat, tum etiam quibusdam urbane
-pet, quem melius infirmus actor taci dictis; quale est: Date puero panem, º
tis judicum cogitationibus reliquisset. plorer. Et corpulento litigatori, cujus ad
Nam, et vultus, et vox , et ipsa illa versarius item puer circa judices erat ab
excitati rei facies, ludibrio etiam ple -advocato latus: Quid faciamº Ego te ba
runque sunt, hominibus, quos non. per julare non porrum. •

moverunt. Quare metiatur, ac diligen Sed haectamen non debent esse mi


ter aestimet vires, Suas actor 3 et, quan —mica, Ita neque illum probaverim , qu
A -
-
DE - M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 357
micos: y así no apruebo á aquel , que fué el mas señalado
entre los oradores de su tiempo, el qual habiendo en el epí
logo sacado enmedio unos niños, comenzáron á coger unos
dados, que él mismo habia arrojado en tierra: porque esta
ignorancia del riesgo, en que su causa se hallaba, pudo ser
digna de compasion. Ni tampoco apruebo á aquel otro, el
qual viendo que el contrario sacó una espada desenvaynada,
con que decia haberse hecho la muerte, echó á huir, cu
briéndose la cabeza; y acercándose á uno de la concurrencia,
preguntóle como asustado, si se habia ido el de la espada.
Pues aunque hizo reir, pero fué con una ridiculez, Seme
jantes espantajos los debe desvanecer el orador en su discurso.
Ciceron con mucha gracia habló contra el que mostró la
imágen de Saturnino en la defensa de Rabirio; y en la de
Vareno contra aquel jóven, que desataba la herida en el
tribunal.
Hay otros epílogos no tan turbulentos; en los quales
satisfacemos á los contrarios, si son personas de respeto: ó
les hacemos amigablemente alguna exhortacion para la paz,
y concordia. Así lo hizo con admirable destreza Pasieno en
cierto pleyto sobre intereses, que tenia Domicia con su her
mano Enobarbo. Despues de haber hablado largamente del
parentesco, y bienes que tenian de sobra, añadió: De nin
guna cosa teneis ménos falta, que de lo que es el motivo d
vuestro pleyto. - -

- -ESE. En

inter clarissimos sui temporis oratores contra juvenem , cujus subinde vulnus
fuit, qui pueris in epilogum productis, in judicio resolvebatur, pro Vareno mul
talos projecit in medium , quos illi di ta dixit urbane.
ripere coeperunt. Namque haec ipsa di Sunt, et illi leníores epilogi , quibus
scriminis sui ignorantia potuit esse mise adversario satisfacimus, si forte sit ejus
rabilis. Neque illum , qui , cum esset persona talis, ut illi debeatur reveren
cruentus gladius ejus ab accusatore pro tia; aut cum amice aliquid commone
latus, quo is hominem probabat occi mus, et ad concordiam hortamur. Quod
sum, subito ex subselliis ut territus, fu est genus egregie tractatum à Passieno,
git, et capite ea parte velato , cum ad cum , Domitiae uxoris suae pecuniarum
agentem ex turba prospexisset, interro litem adversus fratrem ejus Aemobar—
gavit, an jam ille cum gladio recessis bum ageret. Nam cum de necessitudine
set. Fecit enim risum, sed ridiculus fuit. multa dixisset, de fortuna quoque, qua
Discutiendae tamen oratione hujusmodi uterque abundabat, adjecit: AVihil vo
scenae. Egregieque Cicero, et contra ima bis minus deest , quam de quo conten
ginem Saturnini pro Rabirio graviter, et ditir,
358 INSTITUCIONES ORATORIAS

Aunque el lugar propio de los afectos es el exórdio, y


epílogo , ( en donde ciertamente se usan con mas freqüen
cia ) con todo no caen mal en qualquiera parte de la ora
cion; pero deben ser mas moderados, especialmente quando
su mayor fuerza debe reservarse para el fin. Pero en el epí
logo conviene emplear todas las riquezas del arte: porque
con esto triunfamos de los ánimos, si en lo demas de la ora
cion hicimos nuestro deber. Despues de haber salvado todas
las asperezas, y dificultades de la oracion , debemos en él ex
tender las velas: y consistiendo la principal amplificacion del
epílogo en las expresiones, y sentencias, podemos aquí echar
mano, y emplear todos los adornos. Entónces conviene mo
ver el teatro, quando hemos llegado, digamos así, al plau
dite. Pero en lo demas de la oracion se manejarán los afec
tos, como lo pida la ocasion : porque ninguna cosa atroz, ó
miserable debe contarse sin afectos. En causas sobre la qua
lidad de una accion , se añadirán despues de cada prueba.
Quando tratamos una causa, que puede dividirse en muchas
partes, usaremos de varios epílogos: como lo hace Ciceron
contra Verres; pues llora, y se compadece de los tormentos
de Philodamo, de los capitanes de navío, de los ciudadanos
romanos, y de otros muchísimos.

... º

- - -

= -sa

Omnes autem hos affectus, etiamsí tum est ad ipsum illud , quo veteres
quibusdam videntur in prooemio , at tragoediae , comoediaeque clauduntur:
que in epilogo sedem habere, in quibus Plaudite. In aliis autem partibus tra
sane sunt frequentissimi, tamen aliae ctandas affectus erit, ut quisque nasce
quoque partes recipiunt: , sed breviores, tur. Nam meque exponi sine hoc res
ut cum ex his plurima sint reservanda. atroces, et miserabiles debent. Cum de
At hic, si usquam , totos eloquentiae qualitate alicujus rei quaestio est, pro
aperire fontes licet. Nam ex his, si be bationibus uniuscujusque rei recte sub
ne diximus reliqua, possidemus jam ju jungitur. Ubi conjunctam ex pluribus
dicum animnos: et confragosis, atque as causam agimus, etiam necesse erit uti
peris evecti, tota pandere possumus ve pluribus quasi epilogis : ut in Verrem
la, et cum sit maxima pars epilogi am Cicero fecit, Nam , et Philodamo, et
plificatio, verbis, atque sententiis uti Navarchis, et cruciatis civibus romanis,
licet magnificis, atque ornatis. Tunc et aliis plurimis suas lacrymas dedit,
est commovendum theatrum, cum ven
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 359

CAPÍTULO II.
DE LOS A FECTO S.

I. En los afectos es donde mas resalta la eloqiiencia.


II. Qué son pasiones , y costumbres. III. El orador, para
mover, debe estar primero movido. Cómo se consigue esto.

I. Aunque esta parte de las causas judiciales sea la prin


cipal, donde tienen lugar los afectos, y de ellos he hablado
ya por necesidad alguna cosa, no he podido hablar quanto
hay que decir en la materia. Por lo que falta aun mucho (y
es lo principal) ya para salir con nuestro intento, ya para
mover los ánimos de los jueces á lo que queremos ; que es
lo mas dificultoso en la eloqüencia. Y es tanto lo que se
ofrece que decir, que quanto he dicho, solo sirve para hacer
una reseña de lo que faltaba : mostrando ántes, qué era lo
que debe practicarse, que el modo de conseguirlo. Ahora pues
conviene tomar el principio de mas arriba. a º

No solamente tienen lugar los afectos en qualquier part


de la oracion, como llevo dicho; sino que estos no son de
una sola naturaleza, ni se han de mover pasageramente; co
- 1 - . . .
C A P U T II.

DE A F F ECT I B U S,
* e o

I. Dominari praesertim in affectibus eloquentiam. II. Quid sit zra 3ros, quid y 0 o c.
III. Ut orator in aliis moveat affectus , neces se est ut prior ipse moveatur. Quomodo
id possit assequi.

Qarse autem pars haec ju


dicialium causarum sit sumrna,
volumus habitum formandi , et velut
transfigurandi. Qua de re pauca, quae
praecipueque constet afectibus, et aliqua postulabat haec materia, sic attigi, ut
de his necessario dixerim , non tamen magis quid oporteret fieri, quain quo id
potui, ac me debui quidern , locum i modo consequi possimus , ostenderemn.
stum in unam speciern concludere. Qua Nunc altius omnis rei repetenda ra
re adhuc opus superest cum ad obtinen tio est. -

da, quae volumus, potentissimum, tum Nam , et per totam (ut diximus) cau
supradictis multo dificilius , movendi sam locus est afectibus : eteorum non
judicum animos, atque in eum , quem simplex natura, nec in transitu tractan
36o - INSTITUCIONES ORATORIAS

mo que son los que dan mayor fuerza al discurso. Porque pa


ra inventar todo lo demas, y valerse de ello con utilidad,
quizá bastará qualquiera ingenio, por mediano que sea; y
mas si le acompaña la instruccion, y el exercicio. Hay, y
siempre ha habido muchos que discurriéron con bastante acier
to las pruebas de la oracion: y estoy tan léjos de despre
ciarlos, que los tengo por dignos de alabanza, como que se dis.
tinguiéron en informar plenamente á los jueces. Y, si he de
decir mi sentir, en punto de bien hablados pueden poner cá
tedra. Pero no son tantos los que saben mover, y manejar
á su antojo los ánimos de los jueces; y las expresiones pro
pias de compasion, y de ira.
Esto es lo que mas cuesta en las causas forenses: esto es
lo que sostiene la eloqüencia. Porque pruebas, y razones,
la misma causa por lo comun nos las ofrece; las que siem
pre abundan en la que es mejor. De manela, que el que tie.
ne un buen pleyto, ó razones que le asistan, solo podrá de
cir, que no le faltará abogado: pero hacer, digamos así, vio
lencia al ánimo del juez, y apartarle de lo mismo que cono
ce, esto ha de ser obra del orador. Esto ni se puede lograr
con el informe del litigante, ni se aprende en los libros. Las
razones consiguen que los jueces conozcan, que la justicia
está de nuestra parte; los afectos, que nos la quieran hacer.
Quando quieren hacerla, ya se persuaden , que hay razon
para ello.
Quando un juez comienza á enojarse, favorecer, aborre
E

da, quo nihil majus afferre vis orandi Atque hoc est, quod dominatur in
potest. Nam caetera forsitan tenuis quo judiciis: haec eloquentiam regunt. Nam
que, et angusta ingenii vena, si modo, que argumenta plerunque mascuntur ex
vel doctrina, vel usu sit adjuta , gene causa , et pro meliore parte plura sunt
rare, atque ad frugem aliquam perdu semper: ut qui per haec vicit, tantuma
cere queat. Certe sunt, semperque fue non defuisse sibi advocatum sciat. Ubi
runt non parum multi , qui satis perite, vero animis judicum vis afferenda est,
quae essent probationibus utilia, repe et ab ipsa veri contemplatione abducen
rirent : quos equidem non contemno, da mens, ibi proprium oratoris opus est.
sed hactenus utiles credo, ne quid per Hoc non docet litigator: hoc libellis non
eos judici sit ignoturn, atque (ut dicam, continetur. Probationes enim eficiunt
quod sentio) dignos, à quibus causas di sane, ut causam nostram meliorem es
serti docerentur. Qui vero judicem ra se judices putent: affectus praestant, ut
pere, et in quem vellet habitum animi etiam velint. Sed id quia volunt, cre
posset perducere, quo dieto dendum , et dunt quoque.
irascendum esset, rarius fuit. Nam cum irasci, favere, odisse, mi
º
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 36r
cer, y compadecerse, tiene ya por causa suya la muestra: y
así como los amantes no pueden ser jueces de la hermosura
que aman, porque el amor sirve de velo á los ojos, así al
juez le anublan los afectos , para que no conozca la ver
dad; dexándose arrebatar de su corriente, sin poder otra
cosa. La sentencia del juez manifiesta lo que lográron las ra
zones, y los testigos: pero quando está movido por el ora
dor, sin acabar de oir, y aun ántes de levantarse de su pues
to, confiesa lo que pasa allá en su interior. Y si no ¿ quando
conseguimos excitarle á lágrimas con los afectos del epílogo,
no es aquello dar ya la sentencia ? Pues á esto deben enca
minarse los esfuerzos del orador, y en esto ha de trabajar;
y sin ello lo demas es una insulsez, y sequedad desapacible.
Tan cierto es, que los afectos son el alma de la oracion.
II. En estos hay dos especies, como hallo en los anti
uos filósofos : á la una llaman los griegos"¿ , que á
a letra podemos traducir pasion ; la segunda ethos, que
aunque no tiene nombre correspondiente al griego , podemos
llamarla costumbre, de donde tomó el nombre la filosofia
moral. Pero si exáminamos bien la cosa, la llamaremos mejor
cierta ¿ de las costumbres: pues á ella se reducen
todos los hábitos del alma. Los autores mas circunspectos
ántes quisiéron explicar la significacion de estos nombres, que
interpretarlos á la letra. Entre estas dos especies de afectos,
unos son fuertes, y vehementes; los otros apacibles: por
ms EE

sereri coeperint, agi jam rem suam exi que animus est in affectibus,
stimant; et sicut amantes de forma ju II. Horum autem , , sicut antiquitus
dicare non possunt, quia sensum ocu traditum accepimus, duae sunt species:
lorum premit amor , ita omnem inqui alteram graecia a 8ºs vocant, quam nos
rendae veritatis rationem judex amittit recte vertentes, ac proprie affectum di
occupatus affectibus: aestu fertur, et ve cimus: alteram º bos, cujus nomine, ut
lut rapido flumini obsequitur. Ita argu ego quidem sentio, caret sermo roma
menta, ac testes quid egerint, pronun nus; mores appellantur: atque inde pars
tiatio ostendit: commotus autem abora quoque illa philosophiae y 9 tº y, moralis
tore judex, quid sentiat, sedens adhuc, est dicta. Sed ipsam rei naturam spe
atque audiens confitetur. An cum ille, ctanti mihi, non tam mores significari
qui plerisque perorationibus petitur, fle videntur, quam morum quaedain pro
tus erumpit, non palam dicta sententia prietas. Nam ipsis quidem omnes habi
est? Hue igitur incumbat orator, hoc o tus mentis continentur. Cautiores volun.-
pus ejus, hic labor est: sine quo caetera tatem complecti , quam nomina inter
nuda, jejuna, infirma, ingrata sunt. Ad pretari maluerunt. Affectus igitur hos
eo , velut spiritus operis hujus , at concitatos, illos mites, atque composi
ToM. L. Zz
362 INSTITUCIONES ORATORIAS

aquellos el hombre se mueve arrebatadamente ; por estos


con mansedumbre: los unos dominan; los otros persuaden al
hombre : los unos sirven para excitar los movimientos del
ánimo; los otros para ganarse la benevolencia. -

Expliquemos algo mas la naturaleza de las costumbres,


que por el nombre no se da bastante á conocer. Segun mi
corto entender, costumbres (que es lo que mas encargo á
los oradores) consisten en un carácter, que se haga distin
guir entre todo por la bondad, no solamente dulce, y apa
cible, sino agradable, y humano. Para lo qual debe expre
sar las cosas, como pide la naturaleza de cada una de ellas,
para que se descubra en el mismo modo de decir la índole
del orador. Este carácter tiene lugar entre personas muy
unidas ; como quando sufrimos, perdonamos , satisfacemos,
y aconsejamos sin ira, ni desabrimiento. Con todo eso de dis
tinta manera trata un padre á un hijo, un tutor á su pupi
lo, un marido á su consorte porque estos siempre mues
tran amor á los mismos que les hacen alguna sinrazon ; y
si hacen odiosos á los tales, es mostrando que los aman. De
distinta manera se pinta la naturaleza, y costumbres, quando
un anciano sufre la injuria de un jóven ; ó un hombre conde
corado es injuriado de palabra por otro inferior en condicion.
Al segundo debemos pintarle fuertemente indignado, al pri
mero solo resentido. - -º *

Contribuye tambien para excitar el odio contra nuestro


Es

tos esse dixerunt: in altero vehementer ex oratione pelluceant, et quodam mo


commotos, in altero lenes; denique hos im do agnoscantur; quod est sine dubio in
perare, illos persuadere: hos ad perturba ter conjunctas maxime personas , quo
tionem, illos ad benevolentiam praevalere. ties perferimus, ignoscimus , satisfaci
Propria tamen mihi hujus nominis mus, monemus, procul ab ira , procul
exprimenda natura est, quatenus apel ab odio. Sed tamen alia patris adversus
latione ipsa non satis significari videtur. filium , tutoris adversus pupillum, ma
y dos quod intelligimus, quodque à di riti adversus uxorem moderatio est. Hi
centibus desideramus, id erit, quod an enim prae se ferunt eorum, à quibus lae
te omnia bonitate commendabitur: non duntur, caritatem; neque alio modo in
solum mite , ac placidum , sed plerun visos eos faciunt, quam quod amare i
que blandum , et humanum, et audien psividentur. Alia, cum senex adolescen
tibus amabile, atque jucundum : in quo tis, alia cum convitium honestus inferio
exprimendo summa virtus ea est , ut ris fert, Hie enim tantum concitari, il
fluere omnia ex natura rerum , homi lic etiam affici debet.
numque videantur, quo mores dicentis Hic etiam ille major ad concitandum
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 363
contrario el ceder, y rendirnos á su prepotencia; que es dar
le en cara tácitamente con su desenfrenado poder. “Pues
en el hecho de rendirnos, damos á entender, que su poder
es excesivo. Los que desean maldecir, y los que afectan ser
libres en hablar, no saben que puede mas la envidia, y odio,
que una injuria de palabra : porque aquella hace odioso al
contrario, esta á nosotros mismos que la decimos. -

Todo lo que llevamos dicho pide que el orador sea afa


ble, y humano. Las quales virtudes debiéndolas aprobar el
orador (si puede ser ) en el litigante, mucho mas debe él
mismo poseerlas, ó manifestar que las tiene. De este modo .
servirá de mucho á su causa; pues su misma bondad hará
creer, que es buena la que él defiende: porque el que es
tenido por malo, quando defiende, seguramente hace mal su
oficio; pues no parece defender una causa justa : de lo con
trario tendria el carácter de bondad. Por lo qual debe usar
de un modo de decir suave, y apacible, y desechar toda
hinchazon, y arrogancia. Basta que hable con propiedad, y
que dé gusto ; usando de un lenguage natural, y del estilo
mediano, que es el que mas quadra para esto. .
Muy distinto de este es el lenguage patético , que yo
llamo afectuoso. Para mejor distinguir estos dos modos de de
cir, digo que el primero es semejante á las cómedias, y el
segundo á las tragedias. Este último se versa acerca de la ira,
odio, miedo, envidia, y compasion. Ya diximos, hablando

ms-EE -
N

• odium masci affectus solet , cum hoc i cit , malus videtur; utique male di
pso, quod nos adversariis submittimus, cit. Non enim videtur justa dicere : a
intelligitur tacita impotentiae exprobra lioqui º dos videretur. Quare, et ipsum
tio. Namque eos graves, et intolerabi etiam dicendi genus in hoc placidum de
les id ipsum demonstrat, quod cedimus; bet esse, ac mite, nihil superbum, ni
et ignorant cupidi maledicendi, aut af hil elatum saltem , ac sublíme deside
fectatores libertatis, plus invidiam, quam ret. Proprie, jucunde, credibiliter dice
convitium posse: nam invidia adversa re, sat est. Ideoque, et medius ille ora
rios, convitium nos invisos facit. tionis modus maxime conven it.
Denique hoc omne , bonum, et co Diversum est huic , quod a a dos dici
mem virum poscit. ¿ virtutes cum tur, quodque nos affectum proprie vo
etiam in litigatore debeat orator, si fie camus: et, ut proxime utriusque dife
ri potest, approbare, utique ipse, aut rentiam signem , illud comoediae, hoc
habeat, aut habere credatur. Sic prode tragoediae simile. Haec pars circa iram,
rit plurimum causis, quibus ex, sua bo odium , metum, invidiam , miseratio
uitate faciet fidem, Nam, qui dum di nem, fere tota versatur. Quae quibus ex
Zz 2
364. INSTITUcIoNES oRAToRIAs .
del exórdio, y epílogo, y cada qual por sí mismo sabe, cómo
se han de mover estas pasiones. -

El miedo es de dos maneras; el que tenemos nosotros, y


el que infundimos á los demas : y del mismo modo se en
tiende el aborrecimiento; el uno constituye al envidioso, ó
al que le tiene ; el otro al envidiado, ó aborrecido. Este le
padecemos nosotros; aquel otro debemos excitarle contra el
reo: que es en lo que mas trabaja el discurso. Hay cosas, que
de suyo son graves, como el parricidio, la muerte, y el dar
veneno: otras, donde el orador debe trabajar para que lo
parezcan. Esto sucede, quando manifestamos, que nuestro
mal excede, y sobrepuja á otros, aunque graves; como An-.
dromache en Virgilio: Eneid. 3. 32 z.
O tú de Priamo hija afortunada,
Quando á la vista de los patrios muros,
De Aquiles en el túmulo acabaste,
Dichosa mas que todas , érc.

Donde se ve, quán lastimosa era la desgracia de Androma


che, quando en su comparacion fué dichosa la muerte de
Polixena. O quando ponderamos tanto nuestro mal, que aun
que sea ligero, le pintamos como intolerable. v. g. Si le hu
bieras solo puesto la mano , no merecias disculpa; ¿qué di
remos habiéndole herido? Pero de esto trataremos mas á la
larga en la amplificacion.
Baste por ahora decir, que los afectos no solamente pin
= - - - "Y -

locis ducenda sint, et manifestum omni Ofelix una ante aliar Priameia virgo,
bus, et à nobis in ratione prooemii, at-, Hostilem ad tumulum Trojae sub moeni
que epilogi dictum est. bus altis,
Et metum tamen duplicem intelligi 9ursa mori !
volo; quem patimur, et quem facimus:
et invidiam ; namgue altera invidum, al Quam miser enim casus Andromachae,
tera invidiosum facit. Hoc autem homi si comparata ei felix Polyxena? aut cum.
nis, illud rei est, in quo, et plus habet ita exaggeramus injuriam mostram , ut
operis oratio. Nam quaedam videntur gra etiam , quae multo minora sunt intole
via per se parricidium, caedes, venefi randa dicamus. Si pulsasses, defendi non
cium : quaedam eficienda sunt. Id au poteras : vulnerasti. Sed haec diligen
tem contingit, cum magnis alioqui ma tius , cum ad amplificationem veneri
lis gravius esse id , quod passi sumus, mus, dicemus.
ostenditur; quale estapud virgilium, Interim notasse contentus sum, non
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 365
tan la compasion, y la gravedad que en sí tiene la cosa, si
no que hacen parecer intolerable mal, lo que suele ser pe
queño: como quando decimos, que una injuria de palabra
es mayor que una de obra; que es mas sensible el castigo
de infamia, que la muerte. La fuerza de la eloqüencia con
siste, no precisamente en causar en el juez los afectos, que le
causaria la misma naturaleza de la cosa, sino en excitar los
que no tiene, ó si los tiene, avivarlos mas. De aquí nace la
gravedad de un discurso, de añadir nuevos colores á la indig
nidad, dificultad, y vileza de las cosas; en lo que Demóste
nes aventajó á todos. - -- -- -

III. Si no hubiéramos de decir mas de lo que otros en


señáron , lo dicho bastaba: pues de quanto ó hemos leido, ó
aprendido, nada hemos omitido, que nos haya parecido bue
no. Pero yo pretendo penetrar hasta lo mas recóndito de
la materia ; y tratar aquí lo que no ví en otros , sino que
me lo ha enseñado la misma experiencia, y mi cuidado. ”
El principal precepto para mover los afectos, á lo que yo
entiendo, es que primero estemos movidos nosotros. Seria por
cierto una ridiculez el aparentar llanto, ira, é indignacion
en el semblante, y que no pasase esto de botones adentro.
¿Qué otro motivo hay, para que uno que padece una cala
midad, que le acaba de suceder , prorrumpa en exclama
ciones las mas expresivas; y para que otro, aunque sea hom
bre sin letras, hable con eloqüencia quando está enojado,
= E =
--- º -- a 2 --
id solum agere affectus, ut quae sunt, ti, nihil eorum, quae legi, vel didici,
ostendantur acerba, ac luctuosa 3 sed et quod modo probabile fuit, omittendo.
iam ut, quae toleranda haberi solent, Sed mihi in animo est, quae latent pe
gravia videamtur: ut cum in maledicto nitus, ipsa hujus loci aperire penetralia:
plus injuriae, quam in manu; in infa quae quidem non aliquo tradente , sed
mia plus poenae dicimus, quam in mor experimento meo, ac natura ipsa duce
te. Namque in, hoc eloquentiae vis est, accepi. Summa enim (quantum ego qui
ut judicem non ad id tantum impellat, dem sentio) circa movendos afectus in
in quod ipse à rei natura duceretur: sed hoc posita est, ut moveamur ipsi. Nam,
aut, qui non est, aut majorem , quam et luctus, et irae, et indignationis ali
est, faciat affectum. Haec estilla , quae quando ridicula fuerit imitatio, si ver
dívaas vocatur , rebus indignis , a ba, vultumque tantum, non etíam ani
speris , invidiosis addens vim oratio: mum accommodaverimus. Quid enim
qua virtute praeter alios plurimum De aliud est causae, ut lugentes utique in
mosthenes valuit. -

recenti dolore disertissime quaedam ex


III. Quod si tradita mihi sequi prae clamare videantur; et ira nonnunquam
cepta suficeret, satisfeceram huic par indoctis quoque eloquentiam faciat, quam.
N
366 INSTITUCIONES ORATORIAS

sino el que en los tales habla la fuerza del alma, y los afec
tos verdaderos?
Por donde si queremos hablar con verisimilitud, hemos
de parecernos en los afectos á los que sienten de veras : y
que hablemos con aquella viveza de sentimientos, de que
queremos que se revista el juez. ¿ Cómo se dolerá este, si
ve que yo no me duelo ? ¿Cómo se irritará, sino se irrita el
orador, que pretende excitar en él esta pasion? O ¿cómo
llorará, si le ve á aquel muy sereno? No puede ser porque
ninguno se abrasa, sino con el fuego; ni se ablanda, sino
con las lágrimas; ni alguno puede dar el color, que no tie
ne. Primeramente pues nos debemos mover nosotros, y sen
tir compasion, si queremos que se mueva el juez.
¿Y cómo nos moveremos nosotros ? (porque no estan los
afectos en nuestra mano.) Procuraré satisfacer á esta duda. Lo
que los griegos llaman fantasía , entre nosotros se llama
imaginativa ; y por ella se nos representan con tanta vive
za las cosas ausentes, que parece tenerlas á la vista. Digo
pues, que el que pueda concebir semejantes imágenes, ese
tiene muchísimo adelantado , para revestirse de los afectos.
De aquí es, que al que se representa con viveza, y como
son en sí, las cosas, las voces, y las acciones de las personas,
le llamamos hombre de buena fantasía , ó imaginativa : lo
que lograremos, si queremos.
Porque estas representaciones, de que hablamos de tal

quod illis inest visº mentis, et veritas i volumus, afficiamurque antequam affi
psa morum? Cere COnemur.
Quare in iis, quae verisimilia esse At quomodo fiet ut afficiamur? Ne
volemus, simus ipsi similes eorum, qui que enim sunt motus in nostra potesta
vere patiuntur, affectibus; et à taliani te. Tentabo etiam de hoc dicere. Quas
mo proficiscatur oratio , qualem facere favºra a las graeci vocant, nos sane vi
judicem volet. Anille dolebit, qui, au siones appellemus ; per quas imagines
diet me, cum hoc dicam, non dolentem? rerum absentium ita repraesentantur ani
irascetur, si nihilipse, qui in iram con mo , ut eas cernere oculis, ac praesen
citat, idque exigit, simile patieturº Sic tes habere videamur: has quisquis bene
cis agenti oculis lacrymas dabit? fieri conceperit, iserit in afectibus potentissi
non potest. Nec incenditnisi ignis, nec mus. Hunc quidam dicunt vava aortº riº
madescimus nisi humore , nec resulla qui sibi res, voces, actus , secundum
dat alteri colorem, quem ipsa non ha verum optime finget : quod quidem no
bet. Primum est igitur, ut apud nos bis volentibus facile continget.
valeantea, quae valere apud judicen Nam ut inter otia animorum , et
DE M. FABIo QUINTILIANo. LIB. v1. 367
suerte nos siguen en el reposo del alma (como si fueran
ciertas esperanzas vanas, y, para decirlo así, sueños, que te
nemos despiertos) que nos parece á veces, que vamos de
viage, que estamos en una batalla, que navegamos, y que
arengamos al pueblo ; y aun alguna vez, que disponemos de
los bienes que no tenemos; todo esto tan vivamente, que no
parece pasar por la imaginacion, sino que realmente lo hace
mos. ¿Pues porqué no sacaremos utilidad de este defecto de
nuestra imaginacion? Para lamentarme de un homicidio, ¿no
me pondré á la vista quanto es verisímil que sucediese, quan
do se cometió ? ¿no pintaré al agresor acometiendo violenta
mente? ¿no me imaginaré al que fué muerto, poseido de
temor, dando voces, haciendo mil plegarias, y huyendo ? ¿no
me representaré al agresor levantando el puñal, y al otro
cayendo en tierra? ¿no me imaginaré con viveza el correr de la
sangre, la palidez, los gemidos, y las últimas boqueadas?
A todo lo dicho deberá acompañar lo que llama Ciceron
ilustracion, y evidencia; por la que no tanto parece que re
ferimos, quanto que representamos las cosas á los ojos: á lo
que siguen los mismos afectos, que si las estuviésemos vien
do. Aquí pertenecen aquellas imágenes de Virgilio :
La madre recibió la triste nueva,
Y al punto el natural calor la dera,
JV ella la tela , y la labor que tiene
Entre manos , con otros instrumentos
De terrer, ère, Eneida lib. 9.476.
Y aquella otra del lib. II. 4o.

spes imanes, et velut somnia quaedam giet? non ferientem , non concidentem
vigilantium , ita nos hae de quibus lo videbo? non animo sanguis, et pallor, et
quimur, imagines prosequuntur, ut pe gemitus , extremus denique expirantis
regrinari, navigare, praeliari, populos hiatus insidet? -

alloqui, divitiarum, quas non habemus, Insequetur va ºye a , quae à Cice


usum videamur disponere ; nec cogita rone illustratio, et evidentia nominatur;
re, sed facere: hoc animi vitium ad u
tilitatem non transferemus ? Ut homi
quae, non tam dicere videtur, quam o
stendere: et aftectus non aliter, quam
nem occisum querar, non omnia, quae si rebus ipsis intersimus, sequentur. An
in re praesenti accidisse credibile est, non ex his visionibus illa sunt: .
in oculis habebo? non percussorille su
bitus erumpet? non expavescet circum Excurri manibus radii , revolutaque
ventus? exclamabit, vel rogabit, vel fu pensa ? et; - -
368 INSTITUCIONES ORATORIAS

En aquel blando pecho vió la herida


Abierta.

La del caballo de Palante en su funeral:

Su brioso caballo allí seguia


El funeral, de adorno despojado,
De su señor la pérdida llorando. II. 9o.
El mismo poeta ¿no pintó con los mas vivos colores la
muerte dolorosa de Anthor?

................ El qual muriendo,


Renueva de Argos la memoria dulce, 1o. 782. .-

Quando sea preciso mover la compasion, persuadámonos


que pasa por nosotros la desgracia, de que nos lamentamos,
poniéndonos en el mismo lance. En una palabra, pongámo
nos en lugar de aquellos, á quienes ha sucedido la calamidad,
de que nos quejamos: no tratando la cosa, como que pasa
por otro, sino revistiéndonos por un instante de aquel dolor.
De este modo hablaremos, como si nos hallásemos en alguna
calamidad. Yo mismo he visto representantes, y cómicos, que
despues de algun paso tierno, quitada la máscara, salian
llorando. Y si sola la pronunciacion de lo que otro escribió,
puede tanto para los afectos ¿qué haremos nosotros , que de
l y . . . . - vº º.

Levique patens in pectore vulnus. - bisea, de quibus querimur, accidisse creº


s
damus, atque id animo nostro persua
Et equus ille in funere Pallantis, po deamus. Nos illi simas , quos gravia,
ritis, qui insignibus indigna , tristia passos queramur. Nec
agamus rem quasi alienam , sed assuma
It lacryman r, gutti rque humectat gran mus parumper illum dolorem. Ita di
dibur ora. cemus, quae in simili nostro casu di
cturi essemus. Vidi ego saepe histriones,
Quid º non idem poeta penitus ulti atque comoedos, cum ex aliquo gravio
mi fati cepit imaginem, ut diceret: re actu personam deposuissent , flentes
adhuc egredi. Quod si in alienis scriptis
Et dulces moriens reminiscitur Argos? sola pronuntiatio ita, falsis accedit affe
Ubi vero miseratione opus erit, no ctibus, quid nos faciemus, qui illa co
DE M. FABro QUINTILIANo. LIB. vr. 369
bemos imaginarnos la misma cosa, para que parezca nos ha
llamos movidos por la misma calamidad del que se ve en
peligro ?
Aun en la misma escuela conviene que nos impresione
mos de estos afectos, representándonos la cosa , como suce
dió: tanto mas, porque allí hacemos mas de litigantes, que
de abogados. Nos ponemos, digo, en el lugar del huérfano,
del naufragante, y del que se ve en peligro: ¿y cómo nos
revestiremos de estas personas, si nos olvidamos de sus pa
siones? No debia omitir estas reflexiones, las quales (qual
quiera que sea, ó haya sido mi habilidad; pues creo, que no
¿?
me han tenido por lerdo ) me aprovecháron tanto para mo
verme á mí mismo, que no solamente me sacáron lágrimas
de los ojos, sino que hiciéron salir al rostro la palidez, y
sentimiento con harta verisimilitud. -

assemesas samsnm-a

gitare debemus, utmoveri periclitantium attinet, nisi affectus assumimus ? Haec


vice possimus? dissimulanda mihi non fuerunt, quibus
Sed in schola rebus quoque ipsis af- ipse, quantuscumque sum, aut fui, (nam
fici convenit, easque veras sibi fingere: pervenisse me ad aliquod nomen inge
hoe magis, quod illicut litigatores lo- nii credo) frequenter motus sum, ut me
quimur frequeitius, quam ut advocati. non lacrymae solum deprehenderint, sed
Orbum agimus, et naufragum , et peri-, pallor, et vero similis dolor.
clitantem: quorum induere personas, quid

ToM. I. Aaa
37o INSTITUCIONES ORATORIAS

º CAPÍTULO III.
DE LA RISA,

I. Quánta dificultad hay en mover la risa. Sobre De


móstenes , y Ciceron. II. Quanto puede la risa. III. De
pende de la naturaleza , y de la ocasion. IV. Nombres va
rios con que explicamos lo ridículo. V. Cómo se excita la
risa. Qué se ha de evitar en ella ; y qué moderacion se ha
de guardar. VI. Fundamentos de que nos valdremos para
moverla. Lo ridículo , ó se manifiesta , ó se cuenta , ó se
moteja con algun dicho. VII. No todas las chanzas caen
tien en el orador. Las de palabra son una frialdad.
VIII. Eremplos de algunas agudezas. -

H, otra virtud contraria al dolor , y conmiseracion,


y consiste en mover al juez á risa, para desvanecer los afec
tos tristes, y apartarle de la atencion demasiada en una co
sa. Alguna vez contribuye para recrear, y quitar el fastidio
de los ánimos ya cansados de oir.
I. Quánta sea la dificultad para excitar la risa, nos lo
dan á entender las dos lumbreras de la eloqüencia griega, y

c A PUT III.
JDE RISU,

I. Quanta rit ejus rei difficultas. De Demosthene, et Cicerone. FI. Quanta rit vir
rirus. III. Pendet a natura, et occasione. IV. Ridiculi varia nomina. V. Quomodo
risur excitetur. Quae in eo vitanda : et qui modus rit servandur. VI. Unde petatur ri
sur. Ridicula, aut , ostenduntur, aut narrantur, aut dicto notantur. VII. AVon omneº
jocos oratori convenire. Frigidos es se jocos in verbis positos. VIII. Exempla alre
dictorum.
r

Has diversa virtus, quae risum


judicis movendo , et illos tristes solvit
iam reficit, et à satietate, vel à fati
gatione renovat. -

añectus, et animum ab intentione re- I. Quanta sit autem in ea difficul


rum frequenter avertit, et aliquando et- tas, vel duo maximi oratores, alter
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. V.I. s 37r
romana, Demóstenes, y Ciceron. De los quales el uno, en
sentir de los mas, no tenia habilidad para ello; y el segundo
no guardó moderacion. Ni podemos atribuirlo en Demoste
nes á falta de voluntad. Sus palabras medidas , y en nada
correspondientes á las demas dotes suyas, manifiestamente dan
á entender, no que le desagradaban las chanzas; sino que
no tenia talento para ello. Ciceron no solamente fuera de las
causas forenses, pero aun en las oraciones afectó con demasía
el hacer reir, como quieren algunos.
Aunque á mí me parece (si mi juicio no me engaña, ó
la demasiada pasion ácia este orador consumado ) que usó
de las chanzas con extraña gracia. Usó de muchas en el es
tilo familiar; en las altercaciones con el contrario, y en exā
minar á los testigos, usó de mas sal, y chiste, que ningu
no : y las que usó contra Verres friamente , las atribuyó á
otros, refiriéndolas como testimonios: de modo, que quan
to mas insulsas son , otro tanto manifiestan, que no eran in
vencion suya, sino que andaban en boca de todos. ¡Ojalá que
Quinto, y su liberto Tiron “, ó quien quiera que fuese el
que publicó tres libros sobre este asunto, no hubiera pues
to tantas ; y hubiera tenido mas acierto en la eleccion de
ellas, que en el número! Entónces no tomarian algunos oca
sion de tacharle : los quales no obstante lo dicho, encontra
rán, que en un ingenio tan fecundo como el de Ciceron, hay
mas cosas que cercenar, que poder añadir.

El s.

graecae, alter latinae eloquentiae princi- tercationibus, et interrogandis testibus,


pes, docent. Nam plerique Demostheni plura, quam quisquarn dixit facere: et
facultatem hujus rei defuisse credunt; illa ipsa, quae sunt in Verrem dicta fri
Ciceroni modum. Nec videri potest no gidius , aliis assignavit, et testimonii
luisse Demosthenes : cujus pauca admo loco possit; ut, quo sunt magis vulga
dum dicta, nec sane caeteris ejus vir ria, eo sit credibilius illa ab oratore non
tutibus respondentia , palam ostendunt ficta, sed passim esse jactata. Utinam.
non displicuisse illi jocos, sed non con Quintus, et libertus ejus Tyro, aut a
tigisse. Noster vero , non solum extra lius quisquis fuit, qui tres hac de reli
judicia , sed in ipsis etiam orationibus, bros edidit, parcius dictorum numero
habitus est nimius risus affectator. indulsissent, et plus judicii in eligen
Mihi quidem , sive id recte judico, dis, quam in congerendis studii adhi
sive amore immodico praecipui in elo buissent! Minus objectus calumniantibus
quentia viri laboro, mira quaedam vi foret ; qui tamen nune quoque , ut in
detur in co fuisse urbanitas. Nam , et omni ejus ingenio, facilius, quid rejici,
in sermone quotidiano multa, et in al quam quid adjici possit, invenient.
Aaa 2
372 INSTITUCIONES ORATORIAS

La gran dificultad en saber excitar la risa, nace primera


mente de que las chanzas ordinariamente son una chocarrería;
y baxeza, y de que á veces nos ponemos de intento á reme
dar á otros ; y ademas de esto de que nunca son decorosas
en boca del orador. Júntase á lo dicho la diversidad de opi
niones sobre la naturaleza de la risa; la qual no se funda en
razon cierta, sino en ciertos ademanes, que no es fácil de
explicar: pues aunque muchos intentáron buscar la causa de
la risa, me parece, que no diéron con ella. Porque ésta no
solamente se excita con palabras, y acciones, sino con cier
to ayre del cuerpo. Ni tampoco siempre de una misma ma
nera : porque no solamente nos reimos de lo que se dice
con gracia, y agudeza, sino á veces de una sandez, de una
accion, ó palabra dicha con ira, ó timidez. Y no es la me
nor dificultad, si consideramos, que la irrision se confunde
con la risa. Su origen, dice Ciceron (2. de orat. 136.248.)
es alguna deformidad, y fealdad. Si el objeto de la risa son
los defectos agenos , se llama gracejo, si los nuestros, ne
cedad. -

II. Aunque el hacer reir parezca cosa tan liviana, co


mo que es propio de chocarreros, graciosos, y gente de po
co seso, con todo no sabré decir, si es la cosa , que mas influye
en los afectos, y en la que ménos podemos irnos á la mano.
Ella es una pasion, que se excita á veces en nosotros contra
y
nuestra voluntad, y sin que otro la mueva: y no solamente
nos obliga á manifestar el interior con el semblante, y con

-E m

Affert autem summam rei difficulta ac venuste, sed stulte, iracunde, timi
tem : primum , quod ridiculum dictum de dicta, aut facta ridentur. Ideoquean
plerunque Salsum est, hoc semper hu ceps ejus rei ratio est, quod à derisu non
mile , saepe ex industria depravatum: procul abest risus. Habet enim , ut Ci
praeterea nunquam honorificum : tum cero dicit, sedem in deformitate aliqua,
varia hominum judicia in eo, quia non et turpitudine. Quae cum in aliis demon
ratione aliqua , sed motu quodam , ne strantur, urbanitas: cum in ipsum di
scio , an enarrabili, judicatur. Neque centem recidunt, stultitia vocatur.
hoc abullo satis explicari puto , licet II. Cum videatur autem res levis, et
multi tentaverint. Unde risus quidem mon quae à scurris, mimis, insipientibus de
solum facto aliquo, dictove, sed inter nique saepe moveatur, tamen habet vim
dum quodam , etiam corporis tractu la nescio, an imperiosissimam , et cui re
cessitur. Praeterea non una ratione mo pugnari minime potest. Erumpit enim
veri solet. Neque enim acute tantum, etiam invitis saepe, nec fultus ope: mec
DE M. FAB1o QUINTILIANo. LIB. v1. 373
la voz, sino que á todo el cuerpo le pone en movimiento.
Ella, como he dicho, tiene virtud para mudar las cosas mas
serias, desvaneciendo no pocas veces el odio, y la ira. Sirva
de exemplo el caso de aquellos jóvenes tarentinos, los qua
les habiendo hablado libremente en un convite contra el rey
Pirro; llamándolos á su presencia, y haciéndoles cafgo de
lo que habian hablado; uno de ellos viendo, que ni podían
negarlo, ni admitia excusa su desacato, libró á sí, y á sus
compañeros con una chanza muy oportuna, diciendo : Así
es, ó rey ; y á no habérsenos acabado el vino tan pronto, te
hubiéramos quitado la vida con nuestras murmuraciones. Con
este chiste desvaneció toda la acusacion.
III. Pero sea como quiera, así como no me atrevo á de
cir, que carece de habilidad el excitar árisa, ya porque
para esto se requiere observacion, ya porque los griegos, y
latinos diéron sus reglas para ello; así digo resueltamente, que
depende de la naturaleza , y de la ocasion. No solamente
la naturaleza hace que este sea de mayor agudeza, é inven
cion que aquel, para hacer reir (aunque esto puede aumen
tarse con el arte ) sino que el carácter de algunos , y su
mismo semblante parece mas acomodado para un chiste, que
dicho por otro, no tendria tanta gracia. La ocasion puede
tanto aun en las mismas cosas , que ayudados de ella, no
digo los ignorantes, pero aun la gente del campo, corres
ponde con nueva gracia , y chiste á los chistes de otros:

vultus modo, ac vocis exprimit confes ausim dicere carere omnino arte, quia
sionem, sed totum corpus vi sua con nonnullam observationem habet, suntgue
eutit. Rerum autem saepe (ut dixi) ma ad id pertinentia , et à graecis, et à
ximarum momenta vertit, cum odium, latinis composita praecepta : ita plane
iramque frequentissime frangat. Docu affirmo praecipue positum esse in natu
mento sunt juvenes tarentini, qui mul ra, et occasione. Porro natura non tan
ta de Pyrrho rege securius inter coenam tum in hoc valet, ut acutior quis, at
locuti, cum rationem facti reposceren que habilior sit ad inveniendum ; nam
tur, et neque negari res, neque defen id sane doctrina posset augeri : sed in
di posset, risu sunt, et opportuno joco est proprius quibusdam decor in habitu,
elapsi. Namgue unus ex iis: Imo, in atque vultu, uteademilla minus, dicen
quit, ni si lagena defecisset, occidissemus te alio, videantur urbana esse. Occasioni
te. Eaque urbanitate tota est invidia cri vero, et in rebus est tanta vis, ut sae
minis dissoluta. pe adjuti ea non indocti modo, sed et
III. Verum hoc, quicquid est, ut non iam rustici salse dicant in eum, quisquis
374 INSTITUCIONES ORATORIAS

porque las gracias mejor caen en el que responde, que en


el que provoca.
Nace tambien esta dificultad de que para los chistes ni
hay exercicio, ni maestros. Hay muchos, que son decidores
en las conversaciones, y en los convites; pero esto lo apren
diéron en el trato diario. El ser tan raros los oradores chisto
sos, nace de que en la oratoria no hay reglas , que ense
ñen á usar del chiste; valiéndose para ello de los que usamos
en la conversacion familiar.
IV. Para explicar esta graciosidad en el hablar, usamos
comunmente de muchos términos ; pero cada uno tiene su
fuerza particular.
Llámase primeramente cortesanía , por la que entende
mos una conversacion , en la que, ya por las palabras, ya
por la pronunciacion, ya por la propiedad se echa de ver
el ayre, y gusto de la corte, y cierta erudicion de la gente
culta; á la que se opone lo que llamamos rusticidad.
Hay otro modo de hablar, que llamamos gracia en de
cir, la que se descubre en cierta hermosura, y belleza de
la conversacion.
Ser salado, lo entendemos comunmente de uno que hace
reir; aunque esta palabra no signifique esto de suyo ; por
ue á toda expresion que hace reir, debe acompañar cierta
sal. Y Ciceron dice , que semejantes palabras son propias
de los áticos ; aunque estos no son los mas diestros para

aliquid dixerit prior. Sunt enim longe Nam, et urbanitas dicitur: qua qui
venustiora omnia in respondendo, quam dem significari video sermonem prae se
in provocando. ferentem in verbis, et sono, et usu pro
Accedit difficultati , quod ejus rei prium quemdam gustum urbis, et sum
nulla exercitatio est, nulli praeceptores. ptam ex conversatione doctorum taci
Utique in conviviis, et sermonibus mul tam eruditionem ; denique cui contraria
ti dicaces: sed quia in hoc usu quoti sit rusticitas.
diano proficimus. Oratoria urbanitas ra Venustum esse, quod cum gratia qua
ra, nec ex arte propria , sed ad hanc dam , et venere dicatur, apparet.
consuetudinem accommodata. 5 alsum in consuetudine pro ridiculo
IV. Pluribus autem nominibus in ea tantum accipimus : natura non utique
dem re vulgo utimur : quae tamen si hoc est ; quanquam , et ridicula opor
diducas, suam propriam quandan vim teat esse salsa. Nam , et Cicero , omne,
ostendent. quod salsum sit, ait esse atticorum; non
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 375
moverá risa. Y quando dixo Catulo hablando de una mu
ger corpulenta:
Y en un cuerpo tan grande
Ni aun un grano de sal encontrar puedes. r

no quiso decir , que nada tenia su cuerpo de ridículo. Se


gun esto salado llamaremos lo que carece de insulsez: esto
es lo que tiene cierto saynete , que se dexa percibir del
paladar del juicio, que le excita, para no fastidiarse de la
conversacion. Pues á la manera, que la sal con medida aña
de un nuevo deleyte á la comida ; así los dichos salados
del que habla ponen al alma en cierta sed , y deseo de
oirle. Y

Lo que llamamos donayre, no me parece tampoco, que


se deba entender de lo ridículo : pues no dixera Horacio,
que la poesía de Virgilio por naturaleza tiene un cierto do
nayre ; y, segun mi juicio, quiere decir cierto decoro, y
elegancia. Y Ciceron en sus cartas repite esta locucion de
Bruto: pies donosos, y de ayre gracioso en andar : y vie
ne á ser lo mismo, que lo que dice Horacio de Virgilio. Por
chanza entendemos lo que se opone á lo serio : y á veces
el fingir, el atemorizar, y prometer es una chanza.
Decidor en sí es una palabra genérica de la voz decir;

quia sunt maxime ad risum compositi: Facetum quoque non tantum circa ri
et Catullus cum dicit, dicula opinor consistere. Neque enim di
ceret Horatius facetum carminis genus
IWulla in tam magno est corpore mi natura concessum esse Virgilio. Decoris
ca salir : -
hanc magis, et excultae cujusdam elle
gantiae appellationem puto. Ideoque in
mon hoc dicit, nihil in corpore ejus es epistolis Cicero haec Bruti refert verba:
se ridiculum. Salsum igitur erit, quod IVae illi sunt peder faceti, ac deliciis in
non erit insulsum , velut quoddam sim gredienti moller. Quod convenit cum illo
plex orationis condimentum : quod sen Horatiano.
titur latente judicio, velut palato, exci
tatque, et à taedio defenditº erationem. Molle, atque facetum Virgilio.
Sanetamen, utille in cibis paulo libe
ralius aspersus, si tamen non sit immo 3 ocum vero accipimus, quod est con
dicus, affert aliquid propriae voluptatis: trarium serio. Nam , et fingere, et ter
ita hi quoque in dicendo habent quid rere, et promittere, interim jocus est.
dam , quod nobis faciat audiendi sitim. Dicacias sine dubio à dicendo, quod
376 INSTITUCIONES ORATORIAS

pero la aplicamos á uno, que en su modo de hablar excita


á otros á risa. Por eso se dice , que Demóstenes era bien
hablado, pero no era decidor.
V. Pero lo que al presente tratamos, propiamente es lo
ridículo, y así intitulan los griegos este tratado: lo qual de
la misma manera, que todo lo restante de la oracion , con
siste en cosas, y en palabras. Su uso es muy simple; por. - Aº

que, ó se toma fundamento para mover la risa de otros, ó


de nosotros, ó de cosas , que son como medio entre estas
dos. Si de los defectos agenos, ó los reprehendemos, ó los
refutamos, ó los encarecemos, ó los echamos en cara, ó nos
burlamos de ellos. Muchas veces solemos hallar en nosotros
mismos motivo para excitar la risa , y como dice Ciceron,
decimos, ó hacemos alguna cosa absurda. Porque aquellos
defectos, que llamamos necedades, ó sandeces, si se nos es
capan, sin conocerlo nosotros , son ciertas gracias, y caen
bien, si los fingimos. El tercer género consiste (como dice
el mismo) en salir con una cosa no esperada, en torcer las
expresiones á otro sentido, y en todo lo demas que no mira
á ninguna persona : que llamo por eso género medio.
Ademas de esto hacemos reir, ó con acciones, ó con pa
labras. Con acciones, acompañándolas con alguna seriedad:
como el pretor M. Celio , el qual, habiéndole hecho peda
zos el consul Isaurico la silla curul, al punto armó otra de
correas: con lo qual zahirió al consul, de quien se decia,

est omni generi commune, ducta est: mus. Nostra ridicula indicamus, et, ut
proprie tamen significat sermonem cum verbo Ciceronis utar , dicimus aliqua
risu aliquos incessentem; Ideo Demosthe subabsurda. Namque eadem , quae si
nem urbanum fuisse dicunt, dicacem imprudentibus excidant, stulta sunt; si
negant. simulamus, venusta creduntur. Tertium
V. Proprium autem materiae , de est genus, ut idem dicit, in decipien
qua nunc loquimur, est ridiculum. Id dis expectationibus , dictis aliter acci
eoque haec tota disputatio à graecis piendis, caeterisque, quae neutram per
zrºpi y Avís inscribitur. Ejus prima di sonam contingunt. Ideoque à me media
visio traditur eadem , quae est. omnis dicuntur.
orationis, ut sit positum in rebus, aut Item , ridicula, aut facimus, autdi
in verbis. Usus autem maxime simplex. cimus. Facto risus conciliatur interim ad
Aut eniIn ex aliis risum petimus, aut mista gravitate: ut Marcus Caelius prae
ex nobis, aut ex rebus mediis. Aliena, tor , cum sellam ejus curulem consul
aut reprehendimus, autrefutamus, aut Isauricus fregisset, alteram posuit loris
elevamus, aut repercutimus, aut eludi intentam. Dicebatur autem cos. à patre
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 377
que su padre en otro tiempo le habia azotado. Otras veces
movemos la risa, sin atender á la decencia , como el lance
del vaso de Celio ”: aunque semejantes ehistes , ni caen
bien en el orador, ni en ningun hombre de circunspeccion.
Lo mismo digo quando se excita la risa con gestos, y ade
manes ridículos: los quales tienen mucha gracia, sobre todo
quando se conoce , que no pretendemos con ellos hacer reir:
que entre todos los chistes es el mayor. Contribuye tam
bien muchísimo para esto la seriedad del sugeto; tanto mas
quanto el que suelta algun chiste, está mas serio, que una es
tatua. Da asimismo alguna gracia el semblante, trage, y ayre
gracioso del que habla, pero han de ser con moderacion.
De los chistes, unos hay libres, y alegres, quales eran
por la mayor parte los de Galba; otros picantes, como los
de Junio Baso, que murió poco ha ; otros groseros, como
los de Casio Severo; otros que son graciosos, como los de
Domicio Afro. Va tambien á decir no poco el lugar, donde
los decimos. En los convites, y en las conversaciones los chis
tes lascivos solo caen bien en gente humilde; los alegres en
qualquiera: pero guardémonos siempre de zaherir, y no si
gamos aquello de : mas quise perder un amigo , que quedar
me con la gracia en el buche. En estas peleas del foro me
abstendria yo de las que puedan ofenderá alguno; aunque está
tolerado el zaherir, y ofender al contrario, el acusarle abierta
mente, y tirarle á degüello, si hay razon. Sin embargo de esto,

aliquando caesus flagris. Interim sine scivum, et hilare, qualia Galbae plera
respectu pudoris, utin illa pyxide Cae que 3 aut contumeliosum, qualia nuper
liana. Quod neque oratori , neque ulli Junii , Bassi; aut asperum , qualia Cassii
gravi viro conveniat. Idem autem de vul Severi; aut lene , qualia Domitii Afri.
tu, gestuque ridiculo dictum sit: in qui Refert, his ubi quis utatur. Nam in con
bus est quidem summa gratia , sed ma viviis, et quotidiano sermone lasciva hu
jor cum captare risum non videntur. Ni milibus , hilaria omnibus conveniunt.
hil enim exiis, quae dicuntur salse, di Ludere nunquam velimus, longeque ab
citur salsius. Quanquam autem gratiae sit propositum illud : Potius amicum,
- plurimais dictis severitas affert, fitque quam dictum perdidi. In hac quidem pu
ridiculum id ipsum , quia , qui dicit, gna forensi malim mihi lenibus interdi
non ridet : est tamen interim , et a cere : quanquam , , et contumeliose, et
spectus, et habitus oris, et gestus non aspere dicere in adversarios permissum
inurbanus, cum his modus contingit. est: cum accusare etiam palam, etca
Id porro, quod dicitur, aut est la put alterius juste petere concessum sit.
ToM. L.
378 INSTITUCIONES ORATORIAS

parece una inhumanidad el insultarle en su abatimiento; ó ya


porque está inocente, ó ya porque si está culpado, el que le
zahiere, puede caer en la misma miseria.
Lo primero que se debe tener presente, es quién habla,
de qué asunto, en presencia de quién , contra quién, y qué
es lo que se dice. Al orador no le está bien el hacer gestos,
ni ademanes ridículos; cosa que aun en las tablas suele vitu
Perarse. La chocarrería , y gracias de los cómicos son muy
agenas de su persona. Los chistes lascivos, no digo tomar
los en boca, pero ni aun significarlos con el ademan pues no
porque podamos zaherir al contrario de semejante manera,
lo hemos de hacer en qualquiera lugar. Y así como quiero
que el orador hable con gracia, y cortesanía, así no querria
que la afectase. Por donde no siempre que ocurra algun chis
te, ó agudeza, la ha de soltar: pues mas vale perder el chis
te, que la autoridad. Ni tampoco habrá quien sufra á un
acusador gracioso, y decidor en una causa atroz; ni al aboga
do, que lo es, quando tiene en mal estado la suya.
Júntase á lo dicho, que hay algunos jueces tan serios,
que es imposible el hacerlos reir. Acaece tambien, que lo que
decimos contra el contrario, le conviene al juez, ó á nuestro
litigante: aunque hay algunos, que no se abstienen de de
cir aquellos chistes, que pueden caer sobre ellos mismos.
Puntualmente lo mismo acaeció á Longo Sulpicio, el qual sin
embargo que era muy feo, dixo en una causa, en que se

sed hic quoque tamen inhumana videri plane nolo. Quapropter ne dicet quidem
solet fortunae insectatio : vel quia culpa salse quoties poterit, et dictum potius
caret, vel quia recidere etiam in ipsos, aliquando perdet, quam minuet aucto
qui objecerunt, potest. ritatem. Nec accusatorem autem atroci
Primum itaque considerandum est, in causa , nec patronum in miserabili jo
et quis, et qua causa, et apud quem, cantem feret quisquam.
et in quem, et quid dicat. Oratori mi Sunt etiam judices quidam tristiores,
nime convenit distortus vultus, gestus quam ut risum libenter patiantur. So
que, quae in mimis rideri solent. Dica let interim accidere , ut id, quod in
citas etiam scurrilis, et scenica huic per adversarium dicimus, aut in judicerr con
sonae alienissima est. Obscoenitas vero veniat, aut in nostrum quoque litigato
non à verbis tantum abesse debet, sed rem : quanouam aliqui reperiuntur, qui
etiam à significatione. Nam si quando ne id quidem , quod in ipsos recidere
objici potest , non in omni loco expro possit, evitent; quod fecit Longus Sul
branda est. Oratorem praeterea ut dice pitius, qui cum ipse foedissimus esset,
re urbane volo, ita videri affectare id, eum, contra quem judicio liberaliaderat,
—-

DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 379


trataba de la libertad, que su contrario no tenia cara ahidal
gada. A lo que respondiendo Domicio Afro, dixo: ¿ Hablas,
ó Longo, de veras ? ¿Conque el que tiene mala cara, no es
hombre libre ? -

Cuídese tambien, que en los chistes, y agudezas no se.


descubra algun descaro, ó arrogancia ; y no decir lo que no
caiga bien en aquel lugar, y ocasion; que no parezca, que las
traemos estudiadas. Las chanzas contra los miserables, son, co
mo llevo dicho, una inhumanidad. Y hay personas de tanta
vergüenza, y de un crédito tan bien sentado, que el zaherir
los, se nos atribuiría á descaro. De las que ofenden á los ami
gos ya hemos hablado. - -
Conviene no solamente al orador, sino á todos en comun,
el no zaherir á personas, á quienes es peligroso el ofender;
y el no decir chanzas, de que puedan originarse graves ene
mistades, y de que tengamos que desdecirnos con ignominia.
Nunca es bueno decir chistes, que puedan ofender al comun,
á naciones enteras, á algun cuerpo, ó condicion de perso
nas. Todo quanto diga un orador de buena conducta, ha de
ser sin faltará la dignidad, y decoro, ni á la vergüenza. Son
caras las chanzas, que se dicen á costa de la reputacion.
VI. La mayor dificultad está en decir, de qué nos val
dremos para excitar la risa. Si hubiéramos de recorrer todos
los medios, que hay para ello, no hallariamos el fin, y tra
bajariamos en vano. Excitamos la risa, ridiculizando los de

-samass Estmº-,

ne faciem quidem habere liberi hominis sed ad omnia pertinet, ne lacessat hoc
dixit. Cui respondens Domitius Afer: Et modo, quem. laedere sit periculosum, ne
tu, inquit, ex animi rententia , Longe? autinimicitiae graves insequantur, aut
Qui malam faciem habet, liber non est? turpis satisfactio. Male etiam dicitur,
Vitandum etiami ne petulans, ne su quod in plures convenit , si aut natio
perbum, ne loco, ne tempori alienum, nes totae incessantur, autordines, aut con
ne praeparatum , et domo allatum vi ditio, aut studia multorum. Ea, quae dicit
deatur, quod dicimus. Nam adversus vir bonus, omnia salva dignitate, ac vere
miseros, sicut supra dixeram, inhuma cundia decent. Nimium enim risus pre
nus est jocus. Sed quidam ita sunt re tium est, si probitatis impendio constat.
ceptae auctoritatis, et notae verecun VI. Unde autem concilietur risus, et
diae, utnocitura sit in eos dicendi pe quibus ex locis peti soleat, difficillimum.
tulantia. Nam de amicis jam praece est dicere. Nam si species omnes perse
ptum est. qui velimus , nec modum reperiemus,
Illud non ad orandi fere consilium, et frustra laborabimus. Risus igitur oriun
Bbb 2.
3So INSTITUCIONES ORATORIAS

fectos del cuerpo, ó del ánimo del contrario, esto es, sus di
chos, y acciones; ú otras cosas, que estan fuera del ánimo,
y cuerpo, Quanto, vituperamos, á esto se reduce : y si esto
se hace con gravedad, será una vituperacion seria ; si con gra
cia, se llama ridiculizar. Los defectos, ó se descubren, ó se
cuentan, ó se notan con alguna chanza.
Rara vez sucede, que lo que ridiculizamos, lo hagamos
presente á los ojos, como lo hizo C. Julio. Diciendo este á
Helmio Mancia : Yo te haré ver, á quien te pareces, le im
portunaba, que se lo dixese. Julio entónces señalando con
el dedo, le mostró la imágen de un francés pintado en un
escudo, de los que traxo Mario de la guerra contra los
cimbros, que estaba de muestra sobre una tienda. Entónces se
vió, que Mancia no le quitaba pinta."
Contar algun lance chistoso, tiene mucha gracia, y no
desdice del orador; como lo que cuenta Ciceron de Cepasio,
y Fabricio en la oracion por Cluencio. En lo qual no sola
mente tiene gracia lo que cuenta el orador, sino mucha mas
lo que pone de su casa. Con semejante chiste contó Ciceron
aquella fuga de Fabricio : Y así pensando , que hablaba con
la mayor destreza, y habiendo sacado de lo mas interior del
artificio retórico aquellas gravísimas expresiones : Mirad,
ó Jueces, las fortunas de los hombres; mirad los varios, y
tristes acaecimientos; mirad la vejez de C. Fabricio: habien
do repetido muchas veces, para adornar la oracion, aquella

tur, aut ex corpore ejus, in quem dici simillimus est visus. Taberna autem e
mus: aut ex animo , qui factis ab eo, rat circa forum , ac scutum illud signi
dictisque colligitur: autex iis, quae sunt gratia positum. -

extra posita. Intra haec enim est omnis Narrare, quae salsa sint, in primis
vituperatio: quae si gravius pesita sit, est subtile, et oratorium : ut Cicero pro
seria est; si levius, ridicula. Haec, aut Cluentio narrat de Cepasio , atque Fa
ostenduntur, aut narrantur , aut dicto britio. Sed in his omnibus cum elegans,
n0taItur. et venusta exigitur tota expositio, tum
Rarum est auten, ut oculis subjicere id est festivissimum , quod adjicit ora
contingat, ut fecit C. Julius, qui cum tor... Narn, et à Cicerone sie est Fabritii .
Helmio Manciae saepius obstrepenti sibi fuga illa condita. Itaque cum callidissi
diceret: 3am ostendam, qualis ris; isque me se putaret dicere, et cum illa verba
plane instaret interrogatione, qualem se gravissima ex intimo artificio deprompris
tandem ostensurus esset , digito demon ret : respicite, judices, bominum fortunar,
stravit imaginem Galli in scuto Maria respicite varios, duros que casus, respici
no cimbrico pictam. Cui Mancia , tum te C. Fabririi renectutem: cum hoc resp?-
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 38 I
palabra mirad, Fabricio con su cabeza bara habia desam
parado ya los asientos, Y todo lo demas que añade ; por
que es lugar bien sabido : el qual solo se reduce á que
Fabricio desistió de la demanda.
Ciceron dice, que la sal consiste en contar semejantes co
sas, y el chiste en ridiculizar, y notar los defectos. En esto
fué singular Domicio Afro, cuyas oraciones estan llenas de
semejantes narraciones: de cuyos chistes hay libros enteros.
¿ gracias no se reducen precisamente á estos dichos bre
ves, y chistosos; consiste tambien en cierta accion seguida,
como la que cuenta Ciceron de Casio contra Bruto en el
lib. del orador, y en otros lugares. Porque habiendo mani
festado Bruto por medio de dos lectores en la acusacion de
Cn. Planco, que L. Craso abogado de aquel habia aconseja
do en la oracion sobre la colonia de Narbona todo lo contra
rio, de lo que habia dicho sobre la ley servilia, hizo que se
levantasen tres lectores, dándoles á leer los diálogos del padre
de Bruto de los quales conteniendo el uno una conversacion
que pasó en Piperno, el otro otra tenida en Albano, y el
tercero otra, que pasó en Jivoli, preguntó ¿ dónde existian
aquellas posesiones ? porque las habia vendido Bruto, infa
mado por haber enagenado los bienes paternos.
La misma gracia tienen ciertos apólogos, é historias, que
se cuentan con chiste. Quando á los chistes acompaña la bre
vedad, tienen particular agudeza. Esto puede ser , ó en
==== Esseemº

cite, ornandae orationis causa saepe di libro, et aliis quibusdam locis narrat.
arisset, respexit ipse: at Fabritius d subsel Nam cum Brutus ín accusatione Cn.
diir demis ro capite discerrerat. Et caetera, Planci, ex duobus lectoribus ostendisset
quae adjecit; nam est notus locus: cum contraria L. Crassum patronum ejus in
in re hoe solum esset, Fabritium à ju oratione , quam de colonia narbonensi
dicio recessisse, -
habuerat, suasisse iis, quae de lege
In narrando autem Cicero consistere servilia dixerat; tres excitavit, et"ipse
facetias putat, dicacitatem in jaciendo. lectores, hisque patris ejus dialogos de
Mire fuit in hoc genere venustus Afer dit legendos: quorum cum in Privernati
Domitius, cujus oration bus complures unus, alter ih Albano, tertius in Tibur
hujusmodi narrationes insertae reperiun ti sermoneñn habitum complecteretur,
tur: sed dictorum quoque ab eodem ur requirebat ubi essent ese possessiones.
bane sunt editi libri. - Ommes autem iilas Brutus vendiderat:
Illud quoque genus est positum non et cum paterna manciparet praedia, tur
in hac, veluti jaculatione verborum , et pis habebatur.
inclusa breviter urbanitate, sed in quo Similis in apologis quoque, et qui
dam longiore actu, quod de Crasso con busdam , etiam interim historiis expo
tra Brutum Cicero in secundo de oratore neudis gratia consequi solet. Sed acu

3,
3 82 INSTITUCIONES ORATORIAS

decirlos, ó en responder: aunque en parte hay la misma ra


zon para lo uno, que para lo otro : puesto caso, que no pue.
de decirse ninguna cosa para provocar á uno, de que no pue
da valerse el contrario para rebatirlo. -

VII. Pero siendo muchas las maneras que hay para ridi
culizará alguno, no todas, vuelvo á decir, le estan bien al
orador. La primera es la amphibología : no entendiéndose por
ella aquella obscuridad de las fábulas atelanas "; ni tampo
co aquella ambigüedad de expresiones, que comunmente usa
la baxa plebe para zaherir; ni aun aquellas otras, que se le
escapáron á Ciceron, aunque no en las oraciones. Pues pi
diendo un pretendiente, que se decia ser hijo de un cocine
ro, á uno de los electores, que le favoreciese con el voto,
oyéndolo Ciceron, dixo: Ego quoque jure tibi favebo. “No,
porque hayamos de desechar enteramente las palabras, que
tienen dos sentidos, sino porque rara vez se halla alguna
agudeza en la correspondencia de las dos significaciones.
Y así tengo yo por una chocarrería lo que dixo él mismo
contra Isaurico: Miror, quid sit, quod pater tuus homo con
stantissimus te nobis varium º reliquit, Viene muy á cuen
to aquella amphibología, quando oponiendo á Milon su acu.
sador, en prueba de haber armado lazos á Clodio, que se
habia retirado a Bovila déntes de las seis de la tarde, aguar
dando , que Clodio saliese de su granja ; y preguntándole
-

tior estilla, atque velocior in urbanita bebatur, coram eo suffragium ab alio


te brevitas. Cujus quidem duplex estfor peteret : Ego quoque tibi jure fuvebo. Non
ma, dicendi, ac respondendi: sed ratio quia excludenda sint omnino verba duos
communis in parte ; nihil enim in la sensus significantia, sed quia raro belle
cessendo dici potest, quod non etiam in respondeant, nisi cum prorsus rebus i
repercutiendo. psis adjuvantur.
VII. Cum sint autem loci plures, ex - Quare non hoc modo paene, et ipsum
quibus dicta ridicula ducantur, repeten scurrile Ciceronis est in eundem, de quo
dum estmihi, non omnes eos oratoribus supra dixi, Isauricum : Miror quid sit,
convenire. In primis autem ex amphi quod pater tuur bomo constantissimur te
bolia , neque illa obscura , quae atel nobir varium reliquit : sed illud exeo
lanae more captent; nec qualia vulgo •dem genere praeclarum : cum objiceret
jactantur à vilissimo quoque conversa Miloni accusator in argumentum facta
in maledictum fere ambiguitate. Neilla rum Clodio insidiarum , quod Bovillas
quidem , quae Ciceroni aliquando, sed ante horam nonam divertisset, ut expe
mon in agendo , exciderunt , ut dixi, ctaret dum Clodius à villa sua exiret,
cum is candidatus, qui coqui filius ha et identidem interrogaret, quo tempore

".
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 383
de quando en quando, d qué hora fué muerto Clodio, res
pondió: tarde. Este solo equívoco basta para prueba de que
no debemos desechar del todo este género de burlas. Sole
mos muchas veces usar algunas expresiones, que no signifi
can muchas cosas, sino lo contrario de lo que suenan. AsíNe
ron, hablando de un su esclavo muy malo, dixo: Que de
ninguno se habia él fiado mas ; pues para él no habia en su
palacio cosa oculta , ni cerrada. ”
Las agudezas que consisten en la ficcion de un nombre,
por añadir, quitar, ó trasponer algunas letras, mas que agu
dezas, son frialdades: como llamar Pacisculo á uno en lugar
de Acisculo, porque hizo algun pacto; ó á otro que se llama
Placido, llamarle Acido , porque es de condicion brava; y
Tolio en vez de Tulio, á uno que roba lo que encuentra ; lo
que hallo haber usado algunos. Semejantes agudezas se usan
mejor, quando corresponden á las cosas, que á los nombres.
Así Afro Domicio, hablando de Manlio Sura, el qual en las
defensas que hacia, andaba de una parte á otra, saltaba, y
manoteaba, dexando caer la toga, y levantándola, dixo: Non
agere, sed satagere. Porque en este caso la palabra satagere
tiene mucha gracia, aunque no encierra ninguna amphibolo
gía. Otras consisten en poner, ó quitar la aspiracion, jun
tando dos palabras ; que aunque son frialdades, alguna vez
merecen algun aprecio.
La misma frialdad se nota en aquellas agudezas, que se
derivan de los nombres. De muchas de esta clase usó Cice

Clodius occisus esset , respondit : Fero. eadem genera commodius in rebus, quam
Quod, vel solum suficit, ut hoc genus in nominibus respondent. Afer enim ve
non totum repudietur. Nec plura modo. muste Manlium Suram multum in agen
significari solent, sed etiam diversa: ut do discursantem, salientem, manus ja
Nero de servo pessimo dixit: IVulli apud ctantem, togam dejicientem, et, repo
se plus fidei baberi; nihil ei, neque occlu nentem, non agere, dixit, red satagere.
rum, neque obrignatum es re. Estenim dictum per se urbanum satagere,
Frigida est nominum fictio, adjectis, etiamsi nulla subsit alterius verbi similitu
detractis , mutatis literis: ut Acisculum, do. Fiunt, et detracta, et abjecta aspiratio
quia esset pactus, Pacisculum : et Pla ne, et binis conjunctis verbis similiter sae
cidum nomine , quia is acerbus natura pius frigida, aliquando tamen recipienda.
esset, Acidum : et Tullium , cum fur Eademque conditio est in iis, quae à
esset, Tollium , dictos invenio. Sed haec nominibus trahuntur. Multa ex hoc Ci
384 INSTITUCIONES ORATORIAS

ron contra Verres, pero las trae como dichas ántes por otros.
Unas veces dice, que con solo nombrar á Verres parece que
todo se barre: otras, que Verres dió mas que hacer á Hér
cules , cuyo templo robó, que el jabalí de Erymantho; y
quando llama mal sacerdote al que dexó un verraco tan ma
lo pues Verres fué sucesor de sacerdote. “La buena opor
tunidad para usar de semejantes dichos agudos , contribuye
mucho para que choquen al que los oye. Así Ciceron de
fendiendo á Cecina, dixo del testigo Sexto Clodio Phormion:
que no era mémos negro, y confiado, que el Phormion de
Terencio.
VIII. Pero aun chocan mas, y tienen mas gracia las que
se toman de las entrañas de la cosa. Conduciéndose en el
triunfo de César las imágenes de los pueblos sujetados”, he
chas de marfil; y pocos dias despues las de Fabio Máximo,
que eran de madera, dixo Chrysipo, que las de Máximo po
dían servir de caxas para guardar las de César. Y Augusto
respondió á los de Tarragona, que le lisongeaban con la no
ticia, de que en un altar consagrado á su memoria habia na
cido una palma: Se conoce, que me ofreceis incienso muchas
veces en él. Motejaba Filipo á, Catulo, diciéndole; ¿porqué
ladras ? Porque veo , respondió, al ladron. Otra manera de
agudeza, y de las mas graciosas, es quando salimos con una
cosa no esperada; ó quando usamos una palabra en distinto
sentido. Dicho impensado, que tambien usamos para provo
car, es aquel de Ciceron: ¿Qué otra cosa le falta, sino vir
==Rºma

cero in verrem , sedut ab aliis dicta. tiora, quae trahuntur ex vi rerum. Chry
Modo futurum ut omnia verreret, cum sippus, cum in triumpho Caesaris ebo
diceretur Verres : modo Herculi, quem rea oppida essent translata, et post dies
expilaverat, molestiorem apro eryman.- paucos Fabii Maximi lignea, thecas esse
thio fuisse : modo malum sacerdotem, oppidorum Caesaris dixit. Et Augustus
qui tam nequam verrem reliquisset: nuntiantibus Tarraconensibus palmam in
quia sacerdotiverres successerat. Prae ara ejus enatam: Apparet, inquit, quame
bet tamen aliquando occasionem quae raepe accendatis. Catulus dicenti Philip
dam felicitas hoc quoque genere bene po: Quid latras ? Furem video, inquit.
utendi; ut pro Cecinna Cicero in te Est genus decipiendi opinione, aut di
stem Sex. Clodium Phormionem : , Nec cta aliter intelligendi, quae sunt in o
minus niger, inquit, nec minur confidenr, mni hac materia , vel venustissima. In
quam ille Terentianus est Phormio. opinatum , et à lacessente poni solet;
VIII. Acriora igitur sunt, et elegan quale est, quod refert Cieero : Quid huic
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 385
tud, y hacienda ? Y aquel otro de Domicio : Hombre en tra
tar causas muy bien vestido. ” ...»

Quando semejantes agudezas se fundan en algun punto


de historia, encierran gracia, y erudicion. Diciendo Horten
sio á Ciceron en la causa de Verres, en que preguntaba este
á uno de los testigos : Po no entiendo estos enigmas ; respon
dió: Pues debes entenderlos, teniendo como tienes en tu casa
la Esfinge. Aludiendo á un retrato de ella hecho de bronce,
y de mucho coste, que habia recibido de Verres.
Pero segun mi juicio, aquel se dirá estilo gracioso, y cor
tesano, en el que no se nota ninguna cosa mal sonante, nin
guna rusticidad, ni cosa que ofenda al oido; finalmente ninguna
cosa extraña, ni en el sentido, ni en las palabras, ni en el ges
to, y ademan. De modo, que este estilo agraciado, no tan
to depende de cada palabra de por sí, quanto de todo el con
texto de la oracion: semejante á aquel aticismo de los grie
gos, que sabia á la delicadeza propia de Atenas.

e-masass-B-

abert, misirer, et virtus? Aut illud Afri: Meo quidem judicio, illa est urbani
Homo in agendis causis optime vertitus. tas, in qua nihil absonum, nihil agre
Ex historia etia In ducere urbanita ste, nihil inconditum, nihil peregrinum,
tem, eruditum; ut Cicero fecit, cum ei neque sensu, neque verbis , neque ore,
testem in judicio Verris roganti dixisset gestuve possit deprehendi: ut non tam
Hortensius: IVon intelligo baec aenigma sit in singulis dictis, quam in toto co
ta. Atqui debes, inquit, cum Sphingem. lore dicendi: qualis apud graecos atti
domi bahear, Acceperat autem ille à Verre cismusille redoleas Athenarum propriuu
Sphingem aeneam , magnae pecuniae. Saporem.

ToM. I.
386 INSTITUCIONES ORATORIAS

CAPÍTULO IV.
- JD E LA AL TER CACION.

Porqué trata de ella en este lugar; y de quánto provecho


sea. El que alterca , ha de tener ingenio pronto, y vivo. No
ha de ser iracundo. Tenga presente lo que ventila. No lleve
las cosas á voces. Cómo armará lazos al contrario. Vea
por donde le ha de atacar , y lo que ha de omitir. Erercí
fe se cºn esío.

Peda la razon, que tratásemos de la altercacion des


pues de haber ya dado todos los preceptos, y reglas para un
razonamiento seguido; porque segun órden natural aquella
es lo último de todo. Pero como la altercacion sea obra de la
invencion, en la qual ni cabe disposicion ninguna, ni se echan
ménos en ella los adornos de la elocucion; ni tampoco depen
de de la pronunciacion, y memoria; no me parece ageno de
propósito el tratar de ella ántes de la segunda parte de las
cinco, que tiene la retórica. Y si la omitiéron los demas au
tores, fué sin duda porque creyéron bastaban las reglas de

- -

CAP UT IV.

ID E. AL TER CA TIO N E.

De ea cur nunc agat. Quanti rit momenti. Altercator sit ingenio veloci, ac movili. Ca
reat iracundiae vitio. 3 emper id in oculir habeat, de quo quaeritur. Ne sit clamosur.
Quas truere adversario invidia, possit. Quid urgendum sit, quid omittendum, videat.
Exerceat se ad eam rem. - - - -

Aerea. praecepta poterant re desideret, aut circa memoriam, et


videri tune inchoanda , cum omnia, quae pronuntiationem laboret; prius quam se
ad continuam orationem pertinent, per cundam quinque partium , hanc, quae
egissem: nam est usus ejus ordine ulti tota ex prima pendet, tractaturus non
mus. Sed cunn sit posita in sola inven alieno loco videor: quam scriptores ideo
tione, neque habere dispositionem pos fortasse alii reliquerunt, quia satis caeteris
sit, necelocutionis ornamenta maguope praeceptis in hanc quoque videbatur esse
De M. FAB1o QUINTrLIANo. Lmb. vr, 387
las demas partes para su inteligencia; por consistir la alter
cacion, ó en instar, ó en rebatir al contrario; de todo lo qual
hemos hablado suficientemente; y quanto, es útil en la de
fensa de qualquiera causa, conduce tambien para esta peque
ña parte. Porque en la altercacion no se dicen cosas distintas,
sino de distinta manera; esto es, preguntando, ó respondien
do: para lo qual aprovechan las observaciones, que hemos
puesto, hablando de los testigos. Pero supuesto que me he
resuelto á tratar mas á la larga esta materia; y no puede ha
ber orador perfecto, si esto falta, me extenderé algo mas en
esta parte ; pues en ¿ causas, ó es el todo , ó sirve
mucho para salir triunfante.
Si hay algun lugar de la oracion dificultoso, y donde el
orador tenga que pelear con espada en mano, este es pun
tualmente. Porque ademas de que en ella debemos grabar en
la memoria del juez lo que nuestra causa tiene de firme, y
poderoso, cumpliendo lo que prometimos en la serie de toda
ella, y refutando las razones falsas del contrario; en ninguna otra
parte estan mas atentos los ánimos de los jueces. No sin ra
zon algunos se alzáron con el dictado de abogados hábiles,
porque sobresaliéron en esto, aunque en lo demas nunca pa
sáron de medianos. Otros al contrario, contentándose con ha
ber favorecido á sus litigantes con razonamientos pomposos,
se retiran acompañados de la multitud de los que los alaban,
dexando esta parte, que es el todo de la causa, á abogados

prospectum. Constatenim aut intentione, Asperrima in hac parte dimicatio est,


aut depulsione, de quibus satis traditum nec alibi dixeris magis muerone pugna
est: quia quicquid in actione perpetua circa ri. Nam , et firmissima quaeque memo
probationes utile est, idem in hac bre riae judicis inculcanda sunt, et prae
vi, atque concisa prosit necesse est. standum quicquid in actione promisimus,
Neque alia dicuntur in altercatione, sed et refellenda mendacia. Nusquam est
aliter, aut interrogando, aut responden denique, qui cognoscit, intentior. Nec
do. Cujus rei fere omnis observatio in immerito quidam , quanquam in dicen
illo testium loco nobis excussa est. Ta do mediocres , hac tamen altercandi
men quia latius hoc opus aggressi sumus, praestantia meruerunt nomen patrono
neque perfectus orator sine hac virtute rum. At quidam , litigatoribus suis illum
dici potest, paululum impendamus huic modo ambitiosum declamandi sudorem
quoque peculiaris operae, quae quidem praestitisse contenti, cum turba laudan
in quibusdam causis ad victoriam , vel tium destituunt subsellia, pugnamque il
plurimum valet. lam decretoriam imperitis , ac saepe
Ccc 2
388 - .. ... INSTITUCIONES ORATORIAS -

principiantes, ó tal vez á agentes, y procuradores infelices.


Así verás algunos pleytos, y juicios particulares, en los que
la defensa se encomienda á unos, y las pruebas á otros. Y si
hemos de separar estos dos oficios, este último se lleva la
primacía: pero es una mala vergüenza, que los mas ruines
abogados aprovechen mas á los litigantes. A lo ménos en los
juicios públicos vemos citar á voz de pregonero al que defen
dió la causa entre los demas patronos de ella. ” -

Para la altercacion se necesita primeramente de un ingenio


pronto, vivo, y esforzado, y de presencia de ánimo: pues
como no se da tiempo de pensar, es necesario tener pronta
la respuesta; y apénas el contrario asesta los tiros, estar dis
puesto para rebatirlos. Y aunque el oficio de orador requie
re no solamente conocer muy bien, sino hacerse familiares
todas las causas; en esta parte principalmente debe estar bien
enterado de todas las personas, instrumentos, tiempos, lu
gares, &c.
El que ha de altercar con acierto, debe estar libre de la
ira, no habiendo pasion que anuble mas la razon, y haga
decir mas despropósitos; y no solamente ocasiona el que prorum.
pamos en dichos afrentosos, ó que tengamos que oirlos, sino
que á veces esto mismo mueve á los jueces á indignacion. Lo
contrario se logra con el comedimiento, y tal vez con la pa
ciencia. Los argumentos del contrario no siempre los refutare
mos, sino que los despreciaremos, disminuiremos, ó eludi

pullatae turbae relinquunt. Itaque videas cit, totas non diligenter modo, sed et
alios plerunque judiciis privatis ad actio iam familiariter nosse causas ; tum in
nes vocari, alios ad probationes. Quae altercatione maxime necessarium est,
si dividenda sunt officia , hoc certe ma omnium personarum , instrumentorum,
gis necessarium est.; pudendum que di temporum, locorum habere notitiam.
ctu, si plus litigantibus prosunt minores. Bonus altercator vitio iracundiae ca
In publicis certe judiciis vox illa prae reat. Nullus enim rationi magis obstat
conis, praeter patronos, ipsum , qui e affectus, et fert extra caucam , et ple
gerit, citat. runque deformia convitia facere, acme
Opus estigitur in primisingenio velo reri cogit, et ipsos nonnunquam judices
ci, ac mobili, animo praesenti, etacri. incitat. Melior moderatio , ac nonnun
Non enim cogitandum , sed dicendum quam etiann patientia. Neque enim re
statim est, et prope sub conatu adver futanda tantum , quae è contrario di
sarii manus erigenda. Quare cum in cuntur: sed contemnenda, elevanda , ri
omni parte hujusce oficii plurimun fa denda sunt; nec usquam plus loci repe
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 389
remos por medio de alguna chanza; pues en parte ninguna
mejor que aquí, cae bien la sal, y agudeza. Contra los que se
amotinan, hablaremos con atrevimiento, y haremos frente al
descaro. Porque hay algunos tan desbocados, que interrum
piendo al que les habla, todo lo meten á voces, y gritos.
Así como no hemos de imitar á los tales, así rebatiremos su
mal proceder, suplicando á los jueces que presiden, que no
se lo hable todo el contrario, sino que nos dé lugar para con
testarle porque el dexarle que todo se lo hable el contrario,
es indicio de ánimo vil, y excesivamente respetuoso ; y á
veces engaña lo que se llama bondad, siendo debilidad.
Puede mucho en la altercacion la sutileza de ingenio, la
que no se consigue con reglas ; porque lo que es natural, no
depende del arte, aunque es ayudado por él. Para esto con
viene tener muy presente el punto cardinal de la disputa, y
el fin que pretendemos. Si esto hacemos, no nos enredaremos
en contiendas, ni gastaremos en injurias contra el adversa
rio, el tiempo que debemos emplear en la defensa de la
causa; aunque no nos pesará, de que el contrario proceda
de este modo. El que lleva meditado quanto puede objetar
le el contrario, y cómo le ha de tapar la boca, ese tal va
bien prevenido. Solemos tambien á veces disimular algunas
cosas en la defensa de la causa, para despues combatirlas
fuertemente en la altercacion, quando ménos se piense el con
º

riturbanitas : contra turbantes auden acumen : quod sine dubio ex arte non
dum , et impudentiae fortiter resisten venit. Natura enim non docetur; arte
dum. Sunt enim quidam praeduri in tamen adjuvatur. In qua praecipuum est
hoc oris, ut obstrepant ingenti clamore, semper id in oculis habere, de quo quae
et medios sermones intercipiant, et o ritur, et quod volumus efficere: quia
mnia tumultu confundant : quos ut non propositum tenentes, in rixam mon ibi
imitari, sic acriter propulsare oportebit, mus , nec causae debita tempora convi
et ipsorum improbitas retundenda ; et tiando conteremus , gaudebimusque si
judices, vel praesidentes magistratus ap hoc adversarius facit. Omnia tempora
pellandi frequenter, ut loquendi vices fere parata sunt meditatis diligenter,
serventur. Nam estres animi jacentis, quae aut ex adverso dici, aut responde
et mollis supra modum frontis, fallitoue ri à nobis possint. Nonnunquam tamen
Pierunque, quod probitas vocatur, quae solet hoc quoque esse artis genus , ut
est imbecillitas. quaeda m in actione dissimulata subito in
Valet autem in altercatione plurimum altercando proferantur ; et inopinatis
-

39o . y INSTITUCIONES ORATORIAS

trario, acometiéndole en cierto modo desde emboscadas. Esto


se deberá practicar quando ocurre alguna cosa, á que no po
demos dar pronta respuesta , como lo hariamos si hubiese
tiempo para ello. Pero quando nos ocurra una razon poderosa,
conviene decirla al punto, para que despues podamos incul
carla, y repetirla. -

No parece debemos encargar, que la altercacion no debe


consistir en voces, como lo practica la gente sin letras : por
que aunque esto molesta al contrario, es cosa enfadosa para
el juez. Daña tambien el altercar en lo que no llevamos ra
zon: ántes es necesario ceder, quando no podemos vencer.
Porque ó son muchas las cosas, sobre las que altercamos; y
en este caso el ceder en alguna de ellas, hará que se nos
dé la razon en las demas , si la tenemos; ó una sola es el
punto de la contienda ; y entónces, aunque quedemos ven
cidos, no nos avergonzaremos tanto de nuestra terquedad:
pues querer mantener, y defender un desatino, es incurrir *

CIl OtrO. - . º

Miéntras contendemos con el contrario, es habilidad, y


prudencia el obligarle á que desbarre, y se aparte muy lé
jos del punto de la qüestion, para que confie vanamente de
a victoria ; y por esto conviene disimular por entónces las
razones, con que pudiéramos convencer su error. Pues de este
modo insisten, y se empeñan mas en la contienda, pensando
que nos faltan fuerzas, y quanto mas piden justicia, dan
... - º * ----

eruptionibus, et ex insidiis citissimo fa obtinere non possis. Nam ubi vinci ne


cto simillirnum. Id autem tum facien cesse est, expedit cedere, quia sive plu
dum , cum est aliquid, cui responderi ra sunt, de quibus quaeritur, facilior erit
non statim possit: potuerat autem , si in caeteris fides; sive unum, mitior so
tempus ad disponendum fuisset. Nam, let irrogari poema verecundiae. Nam cul
quod fideliter firmum est, à primis sta pam praesertim deprehensan pertinaci
tim actionibus arripere optimum est, quo ter tueri, culpa altera est.
saepius, dictiusque dicatur. Dum stat acies, multi in re consilii,
Illud vix saltem praecipiendum vide atque artis est, ut errantem adversarium
tur, ne turbidus, etclamosus tantum sit tra has, et ire, quam longissime cogas,
altercator, et quales fere sunt, quili ut vana interim spe exultet. Ideo quae
teras nesciunt. Nam improbitas licet ad dam bene dissimulantur instrumenta.
versario molesta sit, judici invisa est. Instantenim, et saepe diserimen omne
Nocet etiam diu pugnare in iis, quae committunt, quod deesse nobisputant,
DE M., FABIo. QUINTILIANo. LIB. VI. 39 I
mas valor rá nuestras pruebas. A veces convendrá el conce
der algo al contrario, como si le favoreciese, para que insis
tiendo en ello, no se agarre de otra cosa, que nos pudiera
perjudicar: otras proponerle dos cosas por medio de un di
lema, para cazarle en qualquiera que escoja. Y este medio
aprovecha mas en la altercacion , que en el cuerpo de la
causa; porque aquí el orador se responde á sí mismo, quan
do en aquella tenemos confeso al contrario por su misma
respuesta. - - - º º

Sobre todo la sagacidad del orador está en saber, qué es


lo que hace mella en el ánimo del juez, y qué es lo que no
le sienta bien: lo que conocerá muchas veces por el semblan
te, por las señas, ó por algunas palabras. Así como se ha
de instar con lo que nos favorece , así desistiremos luego
al punto, y con disimulo de lo que nos perjudica : á la ma
nera, que el buen médico echa mano de los remedios útiles,
dexando los nocivos. Si no es fácil desenredar la qüestion pro
puesta, moveremos otra, procurando llamar aquí la atencion
del juez. Porque quando no podemos dar fácil solucion á una
cosa ¿qué otro medio hay, que el discurrir otra, á que no
pueda darla el contrario?
Es muy fácil el exercitarse en estar materia: tomando al
gunas causas, ó controversias, ya verdaderas, ya fingi
das, en que se exerciten los que tuviéron los mismos estu
- º *, - - s.

et faciunt probationibus nostris auctori quae non adjuvant, quam mollissime pe


tatem postulando. Expedit etiam dare a dem oportet referre. Faciunthoc medici
liquid adversario , quod pro se putet: quoque, ut remedia perinde perseverent
quod apprehendens, majus aliquid coga adhibere, vel desinant, utilla reci—
tur dimittere. Duas interim res propone pi, vel respui vident. Nonnunquam, si
re, quarum utramlibet male sit electu rem evolvere propositam facile mon
rus: quod in altercatione fit potentius, sit, inferenda est alia quaestio; atque
quam in actione: quia in illa nobis ipsi in eam , si fieri potest, judex avo—
respondemus, inhac adversarium quasi candus. Quid enim cum respondere non
confessum tenemus. possis, agendum est, misi ut aliud in
Est in primis acuti, videre, quo ju— venias, cui adversarius respondere non
dex dicto moveatur, quid respuat: quod possit?
ex vultu saepissime, et aliquando etiam Exercitatio vero hujus rei longe faci
dicto aliquo, factove ejus deprehendi lior. Nam est utilissimum , frequenter
tur, Et instare proficientibus ; et ab iis, cum aliquo, qui sit Studiorum eorum—
392 INSTITUCIONES ORATORIAS º

dios ; y en ellas hacer el papel de una parte, y de otra;


lo que tambien puede practicarse en las qüestiones de gé
nero simple, -

No querria tampoco, que ignorase el abogado, con qué


órden deben colocarse las pruebas, que es el mismo que de
ben guardar los argumentos ; y consiste en que comience,
termine por las mas poderosas. Con lo primero se conci
a el asenso del juez; con lo segundo el prepararle, quando
va á sentenciar.

> 3v º r

dem, sumere materiam, vel verae, vel volo, quo quaeque ordine probatio sit
etiam fictae controversiae, et diversas apud judices proferenda : cujus rei ea
partes altercationis modo tueri: quod i dem in argumentis ratio est, ut poten
dem etiam in simplici genere quaestio tissima prima, et summa ponantur. Il
num fieri potest. la enim ad credendum praeparant judi
Neillud quidem ignorare advocatum cem, haec ad pronuntiandum.
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 393
- - -
CAP I TU L O , V.

DEL JUICIo, Y DEL coNSEJo.


- * -", e, - - - s.

de
De es de quanto llevo tratado, segun mis fuerzas,
buena gana pasaria á tratar de la disposicion, que es la
que sigue por órden natural, si no me recelara, que algunos
imaginasen, haber yo pasado por alto el hablar del juicio, que
segun la opinion de muchos pertenece á la invencion: pero
segun mi corto entender, es, tan inseparable de las demas
partes de esta obra, que ni en las palabras, ni en las senten
cias se distingue de ellas; ni hay tampoco reglas ningunas
para el juicio; como no las hay para el gusto , ni para el
olfato. Y así diré lo que en qualquiera cosa debe seguir
se, y evitarse; de manera que el juicio lo dirija todo. La
principal regla es, que nunca nos empeñemos en cosas, que
no podemos salir con ellas ; que evitemos las razones que son
contra nosotros, y las que igualmente, pueden servir al con
trario; la elocucion viciosa, y obscura. Todo lo qual depen
de del buen juicio del orador, que no se aprende con reglas.
Ni creo que el consejo se diferencia mucho del juicio,
sino en que el juicio lo formamos de cosas, que son manifies
tas, pero el consejo es en cosas ocultas, dudosas, y no ave
•-s-EE en sensameº
-

\
-
C A PU T. V.
-
" , -

DE JUDICIo, ET coNSILIO.

H. pro mostra facultate tractatis, sequendum , cavendumque sit, docebi


non dubitassem transire protinus ad di mus, ut adea judicium dirigatur. Prae
spositionem, quae ordine ipso sequitur; cipuum igitur, ne, quod efici non po—
misi vererer, ne, quoniam fuerunt, qui test, aggrediamur , ut contraria vite
judicium inventioni subjungerent, prae mus, et communia, ne quid in eloquen
terisse hunc, locum quibusdam viderer, do corrupturn , obscurumque sit, refe
qui mea quidem opinione adeo partibus ratur opportet ad sensus , qui non do
operis hujus omnibus connexus, ac mi Centur.
stus est, ut ne à sententiis quidem, aut Nec multum à judicio credo distare
verbis saltem singulis possit separari: consilium , nisi quod illud ostendenti
nec magis arte traditur, quam gustus, bus se rebus adhibetur, hoc latentibus,
aut odor. Ideoque nos quid in quaque re et aut, omnino nondum repertis , aut
ToM. I.
394 - INSTITUCIONES ORATORIAS

riguadas. El juicio por lo comun es una regla cierta, y segu


ra ; pero el consejo es una razon mas remota, por la que
exáminamos, y comparamos varios extremos, é incluye den
tro de sí invencion, y juicio.
Del consejo no pueden darse reglas comunes; porque de
pende de las circunstancias del asunto, y tiene lugar por lo
comun ántes de tratar de él. Así parece que Ciceron con
mucho consejo queria mas el que se acelerase la causa contra
Verres, que el tener que perorar contra él, quando Hortensio
fuese consul. Sirve tambien muchísimo en la defensa de la
causa. El consejo nos dirá lo que debemos decir, y lo que
callar, ó dilatar para otra ocasion: si será mejor negar la cosa,
que defenderla : quándo usaremos de exórdio, y de qué espe
cie: quándo pondremos narracion, y cómo la haremos: si nos
valdremos del rigor del derecho, ó de la equidad : qué órden
guardaremos en toda la oracion, y cómo la variaremos : si
convendrá hablar con aspereza , con blandura, con sumi
sion, &c. Todo esto se ha de entender en quanto lo permi
tan las circunstancias; y lo mismo haremos en todo lo de
mas. No obstante lo dicho, pongamos algunos exemplos para
mayor inteligencia de esta materia , para la que no pueden
darse reglas fixas. - - o
Alabase el acierto de Demóstenes, el qual aconsejando á
los atenienses una guerra, en que habian tenido poca fortu
* -- - - º* º ----- ---
- El

r r o

dubiis: et quod judicium frequentissime dum , quid diferendum sit, exigere,


certum est; consilium vero est ratio consilii est: negare sit satius, an defen
quaedam alte petita, et plerunque plu dere : ubi prooemio utendum, et quali:
ra perpendens, et comparans, habens narrandumne, et quomodo : jure prius
que in se , et inventionem, et judica ugnandum, an aequo: quisitordo uti
tionem. - issimus: tum omnes colores; aspere, an
sed ne haec quidem praecepta in leniter, an etiam summisse loqui expe
universum spectanda sunt. Nam ex re diat. Sed haec quoque , ut quisque pas
sumitur, cui locus ante actionem est fre sus est locus, monuimus : idemque in
quenter. Nam Cicero summo consilio vi reliqua parte faciemus. Pauca tamen ex
detur in Verrem, vel contrahere tem empli gratia ponam , quibus, manife
pora dicendi maluisse, quam in eum stius appareat, quid sit, quod demon
annum , quo erat Q. Hortensius cos. fu strari posse praeceptis non arbitror. -

turus , incidere. Et in ipsis actionibus Laudatur consilium Demosthenis,quod,


primum , ac potentissimum obtinet lo cum suaderet bellum atheniensibus pa
eum. Nam quid dicendum, quid tacen rum id prospere expertis, nihil adhuc
DE M. FABIO QUINTILIANO. LIB. VI. 395
na, les dice, que hasta entónces nada se habia hecho COflº

prudencia ; y que podia enmendarse este descuido pe


ro que, si no hubieran errado, no tendrian al presente espe
ranzas de mejor acierto. r. Philip. El mismo, temiéndose
ofender los ánimos del pueblo, si reprehendia su inaccion en
asegurar la libertad de la república, quiso ántes alabar el ze
lo de los antiguos en esta parte. Olynth. De este modo no so
lamente fué bien oida su oracion, sino que la misma razon
natural movió al pueblo á que, aprobando lo mejor, se arrepin
tiese de lo hecho. - -

Sirva por muchos exemplos la oracion de Ciceron en de


fensa de Cluencio. Porque ¿qué podremos admirar, y alabar
primeramente en ella? ¿Será aquella primera narracion , en la
que quita desde luego todo el crédito á los dichos de una ma
dre, que se valia de la autoridad de tal, para dar contra, un
hijo? ¿Será el que atribuyó probablemente al contrario el deli
to de haber sobornado á los jueces, en vez de negar este he
cho, que constaba, segun dice, por la infamia, que de ello
resultó contra Cluencio? ¿ó porque en asunto tan odioso se
valió por último del beneficio de la ley? con el qual género
de defensa hubiera ofendido al principio los ánimos de los jue
ces, que aun no tenia bastante preparados: ¿ó finalmente el
protestar, que todo esto lo hacia , repugnándolo el mismo
Cluencio ? # qué diré de la defensa de Milon, y del acierto
con que omitió la narracion, hasta que desvaneció la siniestra
opinion, que contra él se tenia? ¿con que acumula á Clodio

factum esse ratione monstrat. Poterat e xime mirer ? primamne expositionem,


nim emendari negligentia. At si nihil qua matri, cujus filium premebat aucto
esset erratum , melioris in posterum spei ritas, abstulit fidem? an quod idem cor
non erat ratio. Idem , cum offensamve rupti judicii crimen transferre in adver
reretur, si objurgaret populi segmitiem sarium maluit, quam negare propter in
in asserenda libertate reipublicae, ma veteratam (utipse dicit) infamiam? an,
jorum laude uti maluit, qui rem fortis quod in re invidiosa legis auxilio novis
sime administrassent. Nam , et faciles sime est usus? quo genere defensionis et
habuit, aures , et natura sequebatur, iam offendissetnondum praemollitas ju
ut meliora probantes , pejorum poeni dicum mentes: an quod seipsum invito
teret.
Cluentio facere testatus est? Quid pro
Ciceronis quidem, vel una pro Cluen Milone? quod non ante narravit, quam.
tio quamlibet multis exemplis sufficeret praejudiciis omnibus reum liberaret? quod
oratio. Nam quod in eo consilium ma insidiarum invidiam in Clodium vertit;
Ddd 2
396 INSTITUCIONES ORATORIAS

de que fué el primero en armar asechanzas contra Milon; aun


que en la realidad fué casual, y repentina la pelea de los dos?
¿con que, en medio de que dice, que justísimamente habia
muerto á Clodio, hace ver, que el homicidio no fué volun
tario? ¿con que suplica á los jueces, no en persona de Milon,
sino por sí mismo? - -

Baste decir por remate, que ni en la oratoria, ni en tod


quanto hace el hombre hay cosa mejor, que el acierto y con
sejo : y sin él son inútiles los preceptos de todas las artes; por
que mas aprovecha el buen acierto sin instruccion, que la
instruccion sin acierto. Ya se dexa entender, que el acomodar
quanto dice el orador á las circunstancias del tiempo, del lu
gar, y de las personas, depende de ahí. Aunque, como hay
tanto que discurrir en esta materia, y es parte de la elocucion,
la dilatamos para quando tratemos de las reglas del bien ha
blar. Lib. ra. cap. I. - -

quanquam re vera fuerat pugna- fortui caeteras artes: plusque, vel sine doctri
ta? quod factum , et laudavit, et tamen na prudentiam , quam sine prudentia fa
voluntatem Milonis removit? quod illi cere doctrinam. Apparet etiam oratio
preces non dedit, et inearum locum i nem accommodare locis , temporibus,
pse successit? , r , , personis, esse ejusdem virtutis. Sed hic
Illud dicere satis habeo, nihil esse quia latius fusus est locus , inistusque
non modo in orando, sed in omni vita, cum elocutione, tractabitur, cum prae
prius consilio ; frustraque sine eo tradi cipere de apte dicendo coeperimus. ,
- r - - 2 . er
, , ) -
. .. . . . .
y - r.

-.
----, -

...
397
NOT A S.

L I B Ro PRIMER O.
y en ámbas lenguas Los principales, que escribiéron de retórica án
tes de Quintiliano fuéron: en la latina Ciceron; y en la griega Gor
gias, Corax, Tysias, Aristóteles: pero ninguno mejor que Quintiliano
reduxo á arte las observaciones sobre la eloqüencia , por cuyo método Ro
llin le prefiere al mismo Ciceron.
2 su ingenio : A este propósito dice Ciceron in Bruto; así como es
honra del bombre tener ingenio, así la eloqüencia es donde luce el in
genio.
3 y á fuerza de cifras El que considere, que esto mismo, de que
disimuladamente se queja Quintiliano, acaeció casi á todos los escritos de
los antiguos , no pondrá duda en que muchas de las que tenemos por au
toridades suyas, no lo son , sino lo que pusiéron los copiantes, y nota
rios , que tenian este oficio. A esto se junta, que incorporando en el tex
to varias acotaciones, que encontraban en las márgenes puestas por otros,
nos lo hiciéron admitir, repugnándolo el sentido, como cosa uniforme
con la doctrina , donde hiciéron entrar estos lunares, pequeños en sí, pe
ro muy grandes para obscurecer el sentido genuino de los escritores. No
sé, si la poética de Aristóteles entre otras obras suyas padeció semejan
te alteracion 3 lo cierto es, que como observa Luzan, en algunos lugares
no sabemos lo que quiso decir. ¿Y de dónde provienen algunos modos de
hablar en la lengua latina, contrarios á su analogía, sino tal vez de se
mejantes abreviaturas, y cifras ?. Entre otros tenemos el adverbio im
praesentiarum , al que no encuentran analogía los gramáticos; y sin du
da se diria in praesentia rerum.
4 un orador perfecto : Orador perfecto ni le hay , ni puede haberle
sino ideal; así como no puede haber república perfectamente ordenada,
como la que se ideó Platon. Va Quintiliano á formar, y trazar este perfec.
to orador, para que cada uno procure acercarse lo posible á este modelo;
y quanto mas lo logre, tanto mejores disposiciones tendrá para la elo
quencla.
5 que el orador. Pretende aquí Quintiliano reformar la opinion de mu
chos antiguos , de que al orador solo tocaba tratar, y defender sus causas
con habilidad , y destreza, y no el vivir honesta, y arregladamente. En
vano pretende mover á otro á la virtud, quien no la conoce : Si vis me
flere, dolendum est primum ipsi tibi. Horat. art. poet. .
6 muy claramente Ciceron : Toda esta doctrina de Quintiliano la tra
ta con mucha extension Ciceron : de oratore cap. 56, 62, 71, 73, 1o.7,
uo8, 122, 123.
- 7 de los demas, Llegóse en cierta ocasion á Herodes ateniense,
miembro del areópago, á pedirle una limosna un cierto hombre en trage,
y aspecto venerable, barba larga hasta la cintura, y con capa de filósofo.
¿Quién eres? preguntó Herodes. Mucho extraño, respondió el pobre con
398 NO T A S.

voz grave, y en tono de reprehension, que preguntes lo misma que ves.


Herodes replicó: Lo que veo es la barba , y la capa; pero no veo nada
de filósofo. Aulo Gelio lib. IX. cap. 2.
8 costumbres muy estragadas. Aunque hubo filósofos, que baxo el
nombre, y capa de tales , vivian mas licenciosamente de lo que su profe
sion requeria, con todo eso no sé, si Quintiliano dexó correr la pluma li
sonjeando al emperador Domiciano, que desterró de Roma todos los filó
sofos; entendiéndose sin duda por este nombre en aquellos tiempos los pro
fesores de la christiana religion: pero en defensa de estos mismos no tuvo
reparo en perorar en presencia de Trajano un discípulo de Quintiliano, que
fué Plinio el jóven.
9 de invenciones agenas. Insinúa en este lugar lo mismo, que apun
tó arriba , que la moral, y aun todas las demas facultades se incluian en
lo antiguo en el estudio de la eloqüencia. Este es el mismo pensamiento de
Ciceron : El orador de qualquiera cosa que trate, trata de materia propia
stya. De orator. perf.
Io el dia de hoy. Ya diximos arriba, que no puede haber orador
perfecto, porque hablando con todo rigor, debe abarcar nada ménos, que
la encyclopedia de todas las ciencias , y artes. En el perfecta orador re
halla toda la ciencia de los filósofos. Ciceron en el mismo lugar.
11 é interpréte el derecho Entiende los preceptos necesarios de la re
tórica; aludiendo al estilo de aquellos abogados, que no hacen mas que in
terpretar las leyes fria, y secamente. Rollin.
12 un compendio, Aquella parte de retórica, que solo consiste en re
glas, y preceptillos, que podemos llamar oratoria pueril. s .
13 la naturaleza. Esta observacion tiene lugar en todas las artes tan
to mecánicas, como liberales. En vano se afana , el que va contra la in
clinacion natural en alguna facultad. Horacio dice lo mismo. Art. poet.
vers. 4o8. Y hablando de lo mismo Ciceron, quiere, que en caso de fal
tar una de las dos cosas , es ménos - falta la de los preceptos , que
la del ingenio; aunque si por dicha llegan á juntarse ámbas cosas
en uno , entónces hace prodigios la naturaleza. Pro Archia. núm. 8.
Pero contemos siempre, que á nadie ésta le crió igualmente grande pa
ra todo, ántes dice Salustio, que en medio de tantos caminos para ser
lo, á cada qual muestra el suyo. Cat bell, 2, Naturae sequitur , semina
quisque sua. Prop. Truéquense las carreras, y profesiones de los hombres;
óblíguese á Horacio, y Garcilaso á componer poemas épicos; y á, Virgi
lio, y Ercilla á manejar la lira, y ninguno será nada. Péase la elegia 2.
lib. 3 de Prop. Visus eram, &c. -

14 lo puede aumentar; Habla de aquellos dotes corporales del ade


man, en los que estriva la pronunciacion, y cuyos defectos, aunque sean
sacados de la naturaleza, los puede enmendar el exercicio ayudado de la
razon. Parece tuvo presentes á Demóstenes , y Ciceron; de los quales el
primero tenia, muy poca fuerza del pulmon, débil voz, y tan tartamudo,
que le afeaba toda la pronunciacion; pero llevando una piedrecita en la
boca para gastar, y limar la lengua, afinó la voz; y para darla mas cor
pulencia iba con freqüencia á la playa del mar, donde se estrellaban las
olas en los peñascos, y la esforzaba hasta tanto que se sintiese entre su
ruido, y bramido. Ciceron cuenta de sí mismo, que era tambien algo des
LIBRO PRIMERO. 399
airado en la accion , y de voz lánguida, y afeminada; pero con el trabajo
venció estos defectos naturales.
15 como las vasijas nuevas Es pensamiento de Horacio:
Quo semel est imbuta recens, servabit odorem
Testa diu. Lib. I. epistol.2.

16 madre Cornelia , Véase sobre este punto á Ciceron in Bruto 2 Ir.


17 baria honor. Esta historia la trae Valerio Máximo. Lib. 8. c. 3.
18 lengua griega ; Infiérese de la autoridad de Quintiliano que, sien
do para los romanos, para quienes escribia, la lengua griega lo mismo,
que para nosotros la latina, quando aprenden esta nuestros niños, no de
ben olvidarse de la lengua pátria : ántes enseña la experiencia , que yen
cdo ámbas á dos pareadas, son mas sazonados, y anticipados los conoci
mientos del latin. Por otra parte es una curiosidad impertinente empeñar
se en aprender idiomas extraños, y olvidarse del nuestro.
19 que son propios de la edad. Esta observacion de Quintiliano com
probada con la práctica que él tenia , y con la experiencia de todos los
dias , nos enseña , que el castigo, y rigor del maestro solo sirve para
inspirar horror á las letras en el ánimo de quien todavía no puede co
nocer sus ventajas. Entiendan los ayos, maestros , y preceptores , que su
oficio no es domar potros, ni domesticar tigres, sino formar el corazon,
y el ánimo de una naturaleza racional ; arte, que en sentir de San Juan
Chrisóstomo, es mayor que la de todos los estatuarios.
"2o sobre otra, para afianzarla. Esta regla servia para los antiguos,
que escribian en tablas, y otras materias duras, y con punzones; pero
siempre es muy útil para tomar pronta, y fácilmente qualquiera carácter
de letra. Y adaptándola á nuestra manera de escribir, es lo mismo, que
si diésemos á un niño una muestra de letra gruesa calada, y primera
mente le obligásemos. por algunos dias á seguir por encima de los mis
mos trazos, pero con la pluma seca, y despues que la pasase con tinta
llenando el calado de la letra. Este método, que no es nuevo, haria al ni
ño en pocas semanas tomar qualquiera carácter de letra.
2 gente de conveniencias : Ya es muy antigua la dolencia de que
escriba mal la gente de alta esfera. Esta mala costumbre habia cundido
tanto, que ya se habia tomado por un distintivo nada equívoco de hom
bres acomodados el escribir mal; pero ya en nuestro tiempo se ha lle
gado á conocer, que uno de los principales adornos del hombre instruí
do es la calografia, habiendo innumerables colegios, y escuelas, donde se
enseña con el mejor gusto.
22 ... gente de letras Porque uno de los medios de aprender algo
en medio de tanto como se nos olvida, es leer con la pluma en la mano,
para apuntar lo que sea mas digno de observacion: y si estas apuntacio
nes se hacen en letra confusa, y mal formada, ó no se entienden despues,
ó causa fastidio el leerlas. - -

23 las puedan distinguir. Por este lugar parece, que los antiguos
primeramente aprendianá conocer las letras , y despues á escribirlas.
Aprendidas estas, juntaban las sílabas, y toda la palabra , y luego la
escribian. Rollin.
4oo . N. O TA S.

24 á formar oracion: De esta autoridad se valen algunos para de


cir, que los antiguos no observaban el mismo método que nosotros, pa
ra enseñar á leer, que es tomando cada letra de por sí, ó deletreando,
como decimos comunmente; sino que ellos tomaban toda la sílaba ente—
ra, juntando todas las que forman vocablo en esta forma : con-su-la-do.
Este método seguramente es mas compendioso, y ocupa ménos tiempo,
pero como el oido del niño solo percibe el sonido de la sílaba , v.g.
con , viene á olvidarse del de las letras , como yo mismo he tocado
por la experiencia: como quiera que es muy distinto el sonido de la le
tra del de la sílaba. Así hay muchas cosas, que á primera vista son buenas,
pero tocadas por la experiencia, ofrecen inconvenientes,
25 , sino algun buen aviso: Favorece tanto la experiencia á esta ob
servacion , que algunos á los sesenta años tienen muy presentes aquellas
Primeras sentencias que contenian los modelos, ó muestras con que apren
diéron en la primera edad.
26 y que tropiecen Como aquel verso antiguo: Fraximus , fixa, fe
rox, infesta infunditur ossis. Camerario.
27 y aun besándolos, Póngase el hombre mas sabio del mundo, y de
mejor modo de pensar á formar un plan de christiana educacion , y vea
mos, si puede dar reglas mas adequadas, que este hombre pagano, para
un punto de tanta consideracion. No se ocultó á la observacion de este
hombre tan amante de la niñez, y versado en manejar la tierna edad,
ninguno de aquellos vicios, que, siendo fruto de una crianza libre, y di
soluta , se achacan comunmente al trato con los demas niños ; siendo in
numerables los exemplos, que tenemos, de malograrse la buena doctrina de
las escuelas con los malos exemplos, que sin ningun recato ofrecen muchos
padres á los hijos. -

28 serian intolerables. El regalo, luxo, y desenvoltura de Alexanr


dría, ciudad asentada junto al delicioso Nilo, era tanta , como dice Julio
César (Guerra civil lib. 3 cap. IIo, ) que quedó como en proverbio la
disolucion Alexandrina.
29 porque conoce su insuficiencia. Los mayores patronos de la ense
ñanza privada, y enemigos declarados por comodidad propia de las es
cuelas públicas, son cierta clase de maestros , cuya ciencia , limitándose
por lo comun á saber mal escribir su nombre, ó voltear de siete modos
una oracion gramatical , estan bien hallados en los rincones de una ense
ñanza privada, porque su corta vista no aguanta el resplandor de públicas
concurrencias. Esta secta ya cuenta muchos años de antigüedad en el
mundo.
3o se llama comun. Entiende Quintiliano por conocimiento comun, lo
que por otro nombre llamamos prudencia : y es aquel modo de atinar en
quanto ponemos la mano. Conocimiento, y tino , que aprendiéndose mas
con el trato, que en los libros, en vano le buscaremos en el que, por
mucha especulativa, que tenga, carece de la práctica , que se adquiere
tratando con nuestros semejantes. -
31 en varias clases, No sé si de esta doctrina de Quintiliano ha te
nido principio aquella distribucion de clases, y puestos , que observan
muchos maestros zelosos en sus escuelas. Lo cierto es , que este gé
nero de honorcillo, y premio proporcionado á la edad de los niños , y
LIBRo PRIMERo. 4O I
á la natural inclinacion del hombre de sobresalir entre otros, estimula
mas para el estudio, que los castigos inconsiderados, é inhumanos, que
ha dictado aquel dicho antiguo , y bárbaro: la letra con sangre entra.
32 concurrencia de discípulos: Por esta razon dice Tulio en la ora
cion en defensa de Deyotaro, que dixo en casa de César: Hablo dentro
de una casa particular, y fuera de aquella concurrencia , y número de
oyentes, en que suele apoyarse el empeño de un orador.
33 los órganos, Metafóricamente dicho, y tomado de las artes me
cánicas; donde quanto mayor es el peso, necesita de mayores fuerzas pa
ra moverle , y entónces con mas dificultad. Rollin.
34 en el mundo. Concluye Quintiliano este excelente capítulo, segun
su costumbre, con una fuerte, y expresiva sentencia, dexando como pun
zados los ánimos. Rollin.
35 es la memoria 3 No pretende, que la memoria sea señal de tener
el hombre entendimiento, u otras disposiciones, é ingenios para otras
artes; sino que el niño, que tenga memoria , tiene mucho adelantado pa
ra aprender lo que pide su edad; pues por la mayor parte depende de esta
potencia.
36 Pero no se adelantará. La mejor señal de ser un niño de talento,
es aprender prontamente, y sin repugnancia lo que se le enseña; ir con
la penetracion acompañando, y siguiendo, digamos así, los pasos de
º doctrina del maestro ; pero no es bueno, que se adelante en ciertas
ocurrencias, preguntas , y reflexion sobre su edad: porque aunque esto
prueba mucho talento , pero al cabo es fuera de tiempo, y como dice
despues, no suele llegará sazon. -

37 ántes de granar. Semejantes talentos muy adelantados dan todo


el fruto en la niñez; pero al tiempo en que debian ser mas útiles, é ir
como en aumento, paran del todo , ó dan en fatuidad. Y la misma ex
periencia acredita, que los que así se adelantan en los primeros años, vi
ven muy poco. Comparables á aquellas vides, que si dan el fruto dos
meses ántes, que otras á fuerza de riegos violentos , se inutilizan para
siempre.
38 de este número. Habla sin duda de la crítica con que fuéron redu
ciendo los autores á las edades de la lengua latina; dexando para la de
hierro , y barro á los de peor nota.
39 del metro, y rithmo. Metro se dice de la medida , y cadencia
del verso; rithmo de la concinidad, armonía, y número oratorio , pa
ra el qual el oido, y delicada pronunciacion de los antiguos admitia su
diferencia de pies.
4o prosapia, Y en castellano ca; cata aquí; mesturgo, mesturgar;
caloña; emparanza; atorcimiento; favilla ; y otras innumerables vo
ces, que el que las usase , haria reir: aunque se necesita de mucho tino
para discernir, por quánto tiempo debe desusarse una voz, para tenerla
por antiquada; y si los que no la usan son hombres inteligentes en la
Rengua, ó solo el vulgo. En este caso mas vale errar con los sabios , que
acertar con los ignorantes.
41 con un lenguage bárbaro. Muestra como el vulgo literario no es
lo mismo, que el vulgo civil. Si á este le constituye, ó el nacimien
to, ó la falta de haberes , y á aquel otro la ignorancia, y mal gusto en
ToM.I. Eee
4C 2 NOT A S.

la literatura , es preciso conceder á Quintiliano , que son mucho mas


anchos los términos del primero ; y que á él pertenecen muchos , por
otra parte visibles por la seda, y púrpura. Pero el exterior hace errar
en la graduacion de las personas. -

42 afeminadamente. Vocem eliquat, et tenero supplantat verba palato.


Perf.
43 versos sotadeos Versos sotadeos eran entre los antiguos un géne
ro de poema, cuyo asunto era de cosas amorosas, y obscenas. Su com
posicion era de cinco pies: los dos primeros jónicos grandes; y los tres
múltimos trocheos.
44 ruido del foro. Por estas palabras lo dice el mismo Ciceron en la
oracion pro Archia. núm. 6.
45 hablando con Bruto; Atque ego in summo oratore fingendo, talem
informabo, quales fortasse nemo fuit. Non enim quaero, quis fuerit, sed
quid sitillud, quo nihil possit esse praestantius. Orator. c. 2.
46 de crocodilo. Este nombre tomó fundamento de la fábula. Fingen los
poetas, que una madre pedia á un crocodilo un hijo, que le habia lleva
do. Aquel con intencion de no volverle , dixo: te le daré como digas ver
dad en lo que te quiero preguntar. ¿Te volveré tu hijo, ó no? Qualquiera
respuesta , que diese, serviria de fundamento para no dársele. La madre,
conociendo la intencion del crocodilo , dixo: digo, que no me lo darás.
Pues ya no te lo puedo dar, dixo, porque dándotele, saldrias embust
ra. Ceratinae , argumentacion de la misma fuerza. Viene , de la vóz
aspas , ros el cuerno. v. g. Uno tiene lo que no ha , perdido ; tú no
has perdido los cuernos: luego los tienes. De aquí proviene, que estos y
semejantes modos de raciocinar llaman los lógicos argumentos de trampa.
47 y de las gracias. Llamados en griego amousoi, acharites; hombres
sin gusto á la poesía, y música. -

48 de los espondeos : Contribuye tanto la diferencia de pies para mo


ver al alma, que aunque no queramos, sentimos diversa sensacion segun
la concurrencia mayor, ó menor de los pies ligeros, ó pesados. Un ver
so, donde todos son dáctilos, pone en movimiento al ánimo 3, y al con
trario por agitado, que esté, calma, y se tranquiliza, oyendo un verso
compuesto de espondeos : v.g. Monstrum borrendum , informe , in
gens, cui lumen ademptum caminando siempre nuestro ánimo al com
pás, y movimiento, que tiene el verso.
4ó tono frigio , Tono, ó canto frigio. Era vehemente, arrebatado,
y ponia como furiosos, y locos á los que lo oian, tanto, que sin po
derse contener, se ponian en movimiento desenfrenado todos los miembros
del cuerpo. Ov. in Ibin.
5o falacias del cálculo, La voz griega propiamente significa falsa
descripcion, y hemos traducido falacias , ó sea sofismas del cálculo ; es
to es, demostracion aparente. Tanto en la aritmética como en la geome
tría suelen traerse varias de estas falacias. Por exemplo : si un todo se
divide en dos partes, estas dos en quatro, y una de ellas en dos , pa"
rece , que calculando habian de sumar ocho : pues no salen mas que
cinco. A la prueba. Tírese una linea: divídase en dos trozos , y estos dos
en quatro; y por último uno de los quatro dos , y se verá, que no saleº
mas que cinco trozos.
LIBRO PRIMERO. 4O3
51 ocupará mayor espacio. Por omitir prolixidad no hacemos aquí
demostracion, poniendo exemplos; pero qualquiera podrá hacer la opera
cion en números, ó en lineas.
52 ni en los paseos. Para entender este lugar, debe saberse, que
los antiguos abogados defendian las causas en un lugar espacioso , y no
reducido, como nuestros púlpitos, como se colige del mismo Ciceron. En
él daba sus paseos el orador, quando le parecia; se paraba, y aun se
sentaba, para descansar. De aquí es, que Cornelio Tácito en el diálogo
de los oradores se queja , que á la eloqüencia se le quitó mucho de su
nervio , por haber estrechado el lugar, en que se peroraba en su tiempo,
quedando el orador sin el campo suficiente para explayarse.
53 el arte. Este es uno de los mas esenciales preceptos de la ora
toria , que no se haga alarde del artificio de la retórica , sino que sin
faltar nada del adorno , y compostura del razonamiento, se eche de ver
en él cierta sencillez natural: pues de lo contrario no hay cosa peor pa
ra persuadir, que el que el auditorio advierta , que le arman lazos para
cazarle.
54 para la eloqiiencia. No hay duda, que el orador puede aprender
del cómico mucho del ademan. A lo ménos es innegable, que el mismo Ci
ceron se exercitaba con su amigo Roscio, el representante mas insigne,
que hubo en Roma, en expresar una misma cosa; aquél con distintos
ademanes, y éste con diversas sentencias; y tal vez era con el fin de
observar mas de cerca los movimientos de aquel gran maestro del ademan.
En prueba de la mano, que se dan ámbas á dos cosas , el mismo Roscio
hizo una obra, que no ha llegado á nuestros dias, y quizá leeria Quinti
liano, haciendo un parangon , y paralelo entre la accion del teatro, y
el ademan de la eloqüencia. -

55 esta ley Quintiliano pone chironomía, que propiamente significa


ley, ó regla del movimiento de las manos. Hemos traducido ademan, por
que las principales reglas de este se reducen al manejo de aquellas.
56 de su filosofia. La suma curiosidad , y deseo de saber le obligó
á Platon á informarse de la religion , leyes, y ritos del pueblo hebreo; y
sus mismos libros prueban, que no solamente inquirió sus costumbres , y
leyó sus escritos, sino que á muchos les han movido á creer, y aun de
fender, que siguió , y creyó su moral. Pero no tienen otro fundamento á
mi ver, que los preceptos de la mas subida filosofía, que se encuentran en
sus obras, y ciertas ideas sublimes no ménos que obscuras.
57 nada vulgar, Eurípides en la Hecuba vers. 816.
Suadelam vero inter homines solam reginam. Rollin.

58 diversiones necias. Parece tenía presente lo que dice Ciceron de


sí mismo: Quis mibi succenset jure, si quantum caeteris...... ad festos
dies ludorum celebrandos, quantum ad alias voluptates conceditur tem—
poris....... quantum alii tribuunt intempestivis conviviis, quantum denique
aleae , quantum pilae, tantum mibi egomet ad haec studia recolenda sum
psero? Pro Archia. 6.

Eee 2. sº
404. NO T A S.

L I B R. O SEGUND O.

1 declamar , Declamar es exercitarse en algunos razonamientos,


y arengas pertenecientes á los tres géneros de causas, que abraza la re
tórica; pero breves, y proporcionados á la capacidad de los niños , y de
sus ideas. v.g. Si es útil el estudio de la retórica: si aprovecha el leer
los escritos de los antiguos: que el estudio de las letras sirve para
la virtud: si se debe castigar á un reo, que hizo la muerte estando loco,
una exhortacion de un general á los soldados , &c. Sin este exercicio de
retórica valen tan poco todos los preceptos , como saber los nombres de
todas las ciudades del mundo, y no poder decir donde caen.
2 han de ser aplaudidos. Habla de aquellos aplausos, que eran como
de costumbre en los dias de las composiciones ; y que siendo comunes á
los que hiciéron mucho, y á los que nada trabajáron, á los unos los aco
barda, y á los otros los hace confiados ; confundiendo á los de mérito con
los perezosos. Solian tambien , como despues dice, y reprueba , que aun
quando el maestro declamaba, solian aplaudirle con semejante estrépito.
3 con un estómago bueno. Es una metáfora tomada de los manjares.
Porque á la manera , que el que tiene estómago muy robusto, hace á todo,
sin distinguir de comidas; y al contrario solos los que le tienen débil,
buscan las de fácil digestion, así, dice Quintiliano, hay padres, que con
fiados en el talento superior de sus hijos, no se ponen á hacer eleccion de
los mejores maestros. Turnebo. Aun en castellano decimos, que uno tiene
buen estómago, quando pasa por todo, en nada escrupuliza, y se cree to
do lo que le dicen , sin ponerse á discernir la verdad , ó fundamento
de ello.
4 se alejan mas de él. Lugar viciado, y que ha dado ocasion á di
versas conjeturas , é interpretaciones.
5 del Fenicio Maestro de Achiles, de quien hace mencion Homero.
Lib. 9. Iliada.
6 algo de redundante. Parece, que Quintiliano sigue la opinion, que
despues han abrazado otros maestros de eloqüencia fundados, en el testimo
nio de Ciceron, de que en los jóvenes no es reprehensible el estilo asiáti
co, y pomposo, aunque desdice mucho de los que estan en edad madura.
Pues aunque semejante estilo tiene por lo comun mas de ojarasca de pala
bras , que de solidez de pensamientos , con todo debe disimularse este de
fecto en una edad, que está escasa, y pobre de conceptos, y sentencias,
hasta que adquiriendo con el tiempo mayores luces, é ideas, vayan lle
mando en su oracion estas el lugar, que ocupaba aquel follage de palabras
nacido de la lozanía del ingenio, ó pobreza de pensamientos. -

se anticipa el juicio. Alude á lo que dice en el lib. 1. cap. 3. de


no ser buena señal el que en los niños se ¿ cierta madurez en el jui
cio , no ménos intempestiva, que anunciadora de su corta duracion.
8 de charlatanería. Hay ciertas ocurrencias en los niños, ciertas agu
dezas, y gracias , que hacen concebir grandes esperanzas de ingenio agi
gantado á los padres ignorantes de los verdaderos caractéres del talento;
pero seguramente no hay señales mas equívocas , ó por mejor decir mas -
LIBRo SEGUNDo. 4o 5
evidentes de un ingenio muy somero; y en otra parte Quintiliano com
para esta viveza anticipada á aquellas yerbas, ó espiguillas, que el campo
produce voluntariamente, pero sin esperanza de fruto. -

9 donde conviene. Vicio, que reprueba Horacio, quando dice:


Purpureus, late qui splendeat, unus, et alter
Assuitur pannus ; cum lucus , et ara Dianae , &c.
Sed nunc non erat his locus , &c.
Je a

1o de los escritores. No se sujetaban á leer los historiadores , y ora


dores, de donde podian tomar buenos, y exquisitos modelos para escribir,
sino que querian mejor seguir, é imitar los exemplares, que yo habia com
puesto para su imitacion. Rollin.
11 lo que quiere. Habla, como dice Rollin, de la costumbre, que
sin duda habia en tiempo de Quintiliano de algunos maestros, que iban
enseñando la retórica de casa en casa, como nuestros leccionistas; los qua
les en el método de enseñar se acomodaban al gusto de los discípulos , ó
de sus padres. ¿Qué progresos harian estos tales
12 de ser malas. A este modo entre nosotros no se perderia el tienn
3, po en una escuela de retórica, leyendo á los discípulos uno de los muchos
A razonamientos, que andan impresos en nuestra lengua: cuyos defectos (de
que habrá bastante cosecha) bien notados, les darian una no mala idea de
la eloqüencia, que deben huir.
13 toda una oracion , Porque ya dixo poco ántes, que debia leer
se alguna oracion defectuosa, para que los discípulos se adiestren , corri
giéndola. -

14 y claridad: Yo no sé, porqué no se practíca este precepto de Quin


tiliano con nuestros niños desde que comienzan á leer. Si en lugar de los
doce Pares de Francia, Devoto peregrino, Cueva de San Patricio , y
otros libros en que se exercitan , para soltarse en la lectura, no ménos
noveleros, que corrompidos en el lenguage, manejasen la Guia de peca
dores, ó la Oracion, y Meditacion de Granada , las Cartas del Pulgar,
los Diálogos de Pero Mexía, el Gracian, el Mendoza en su Guerra de
Granada, y otros, insensiblemente irian bebiendo la pureza del lenguage
castellano, y se fecundaria su memoria, que es el único ingenio, que tie—
nen entónces, de innumerables términos, y voces, que les servirian de no
poca utilidad para el pleno conocimiento de la lengua : se proveerian de
no pocas sentencias , de que podrian valerse con fruto en lo sucesivo.
15 juegos sagrados: Quatro eran los juegos sagrados entre los grie
gos , en que competian en honra de los dioses. AVemeos, olímpicos , āsth
mios, y pithios ; en los que habia varias suertes de contienda, que fuéron
asunto de las odas de Píndaro.
16 Nicostrato, Con este Nicostrato, que como dice Pausanias, era
igualmente diestro, é invencible en la lucha, y en el pugilato, compara
muy bien Quintiliano al que pretende ser orador consumado : pues como
los oficios de este son diversos, así como lo eran los exercicios de la pa
lestra, debe desempeñarlos todos con igual habilidad , si quiere triunfar
de los corazones de los jueces, y auditorio. -

17 en las apuestas , Apuestas entre los litigantes: pues como dice


-
406 N O Tº A S.

Caper. estos se obligaban á pagar cierta cantidad, si no probaban su acu


sacion , ó demanda. Esto estipulado, el que quedaba vencido en este jui
cio , ó accion, que Quintiliano llama sponsio, pagaba la multa.
18 entredichos Estos , dice el traductor italiano, y Turnebo , eran
los edictos del pretor en que mandaba, ó prohibia algo.
19 fabulosas. Asuntos, ó sugetos de las declamaciones escolásticas.
2o de Teodoro, ó de Apolodoro, Estos dos fuéron profesores de retórica
consumados (de los que se trata lib. 3. cap. 1.) y de ellos tuvo principio la
secta, ó escuela de su mismo nombre. El retórico que dió esta respuesta,
se chanceó en esta ocasion: y para huir la dificultad , y mantener su
buena opinion, la echó por otro lado, llamándose parmularius 3 pues
este nombre, ó el de Tracio se daba á aquellos gladiadores, que pelea
ban con un escudo corto llamado parmula. Turnebo. Mas claro. Con este
chiste no esperado queria dar á entender, que no seguia á ninguno de los
retóricos, que habian escrito, sino la naturaleza, y exercicio.
2I sino sabidas de todos. Este vicio es bastante comun. Exàmine
mos con atencion los razonamientos de muchos , y hallaremos que unos
tienen un acopio, ó provision de exórdios, que acomodan á asuntos dis
tintos , ó tal vez encontrados. Otros hay , cuyos razonamientos en vez de
estar quaxados de pensamientos siempre nuevos, solo abultan por la re
peticion enfadosa de una misma idea , que llena no poco tiempo. Vemos
en semejantes oradores, que la misma proposicion , que ántes nos dixé
ron , la repiten despues, volteándola de mil maneras, pero siempre apa
rece la misma: lo que llenando la oracion de términos, y voces, abru
ma, y desalienta la curiosidad del auditorio, que siempre quiere oir
ideas nuevas.
22 con solo hurtar el cuerpo. La comparacion de que se vale para
hacer ver, que la oratoria mas consiste en cierta maña, y arte para
vencer la dureza del corazon humano, que en esfuerzos inútiles, no pue
de ser mas natural , y sensible. En uno , y otro juego vemos , que vence
la astucia, y habilidad mas que el brazo; pues con un simple ladear el
cuerpo, quedan burlados los ímpetus, y esfuerzos del contrario: los qua
des quanto mayores son , mas cansan al que los hace, si dan el golpe en
vago Quántos, quando hablan en publico, se agitan, vocean, sudan, pal
motean, y se fatigan! Y al cabo de la jornada el auditorio se sale tan
frio como entró , riéndose á costa del orador.
23 que ni un loco, Por este lugar de Quintiliano se prueba, que el
vulgo antiguo adoleció del mismo mal, que el nuestro, en graduar los ora
dores. Parece que no podia pintar mas al vivo lo que pasa en nuestro
tiempo en la mayor parte de los que asisten á los sermones de ciertos
predicadores , cuya única habilidad consiste en ciertos arrebatos, pal
moteos , y voces desaforadas, que en medio de que aterran , y meten
en un puño al auditorio, no tienen otro objeto , que deslumbrar á los ig
norantes, y ocultar aquella insuficiencia , que en medio de tantos rebo
zos, no dexa de descubrir la vista delgada de los instruidos. Pero sin em
bargo de lo mucho, que se ha escrito para desengañar al vulgo de que la
palabra de Dios no se introduce en el corazon por medios tan violentos,
aquel permanece en su error,
24 auditorio de plaza: Alude, como dice Turnebo, al vestido negro
LIBRO SEGUNDO. 4o.7
de que usaba la plebe romana, segun Tranquilo en la vida de Augusto;
y segun esta opinion traduciremos el pullatum..... circulum del original
populacho, auditorio de plaza.
25 el dolor paternal. Agamenon, rey de Mycenas, conducida por
los vientos su armada donde iban otros principales á Aulide , mató in
advertidamente una cierva de Diana , por el qual atentado esta diosa,
trocando los vientos , para que no volviesen á Troade, consultáron al
oráculo; el que dixo lograrian la vuelta , si ofrecian á su hija Ifigenia en
sacrificio á la diosa. Estaba ya esta á punto de ser sacrificada por el
mismo Calcas, sacerdote de la tripulacion griega , en presencia de Uly
ses, de Menelao , tio de Ifigenia , y de Agamenon su padre , quando la
diosa compadecida, substituyó una cierva para el sacrificio. Este fué el
asunto de la pintura de Timantes ; rasgo tan admirable de la antigüe
dad, que con razon le han tenido todos por el milagro del arte; el que ha
servido á muchos pintores modernos de imitacion en asuntos de la mis
ma naturaleza, sobre el que no han podido adelantar ni una sola pince
lada. Son innumerables los autores, que ademas de Plinio, y Valerio Má
ximo hacen mencion de esta pintura. De igual mérito, y primor fué en
la antigüedad aquella obra del estatuario Myron, de que habla Quinti
liano poco ántes, representando con tal valentía la accion, esfuerzo , y
conato de uno, que en los juegos antiguos arrojaba una gran mole de plo
mo, que solo podia reconocer ventaja, si es que habia alguna, al original.
26 no suya. Esta diferencia de opiniones , que se nota ya en las
primeras definiciones de la retórica , depende de que unos piensan,
que el oficio de un buen orador de tal manera consiste en la per
suasion, que si no logra este fin, no quieren se le tenga por orador
perfecto. Otros al contrario no quieren llevar la cosa con tanto rigor; y
dicen con Ciceron, que no está el orador obligado á mas , que á poner
los medios aptos para persuadir, aunque no lo consiga; pues la dureza
del corazon humano, y su obstinacion tiene otros motivos independien
tes de la destreza, ó ineptitud del orador.
27 en varios lugares, Del orador, lib. 1.26o.
28 En los retóricos pone De la invencion, lib. 1. 6.
29 defendiendo á M. Aquilio Véase este pasage en Ciceron, del ora
dor, lib. 2. 195. ó en la séptima oracion contra Verres. 31.32.
3o Sergio Galba Trae este pasage Ciceron en el primer libro del
orador. 227. 228. -

31 Lysias le compuso, Habiendo el areopago de Atenas condenado


injustamente á Sócrates, Lysias orador consumado, ó porque conocia su
inocencia, ó porque, como dice Quintiliano , entónces era estilo el com
poner los oradores la defensa de los reos , para que estos la díxesen en
su abono, le presentó la defensa de su causa , para que la dixese delan
te de los jueces. Pero Sócrates , cuya constancia, y fortaleza no podia
sufrir , que se defiriese mas á las razones tal vez aparentes de la retóri
ca, que á la inocencia, quiso ántes morir, que defenderse.
32. Dan en cara los cómicos Aristófanes en la comedia las Nubes.
33 prometian lo mismo. Es innegable, que en virtud de la eloqüen
cia todos los dias se dan los mejores visos de acciones loables, y buenas
á las que son unas manifiestas injusticias, y violencias; pero no pudien
408 - NO T A S.

do ser sólidas semejantes pruebas, el defecto está en quien no las exà


mina bien, no en el arte.
34 el remero Demades , Demades, orador Ateniense, fué hijo - de
un marinero, á quien su padre tan léjos de hacerle estudiar retórica, le
destinó al remo. Turnebo. -

35 y el farsante Eschines Eschines , hijo de Atromero , maestro


de escuela, primeramente se empleó en el oficio de representante , des
pues fué notario, ó escribano, y ultimamente retórico. Turnebo.
36 siendo distinta de aquella, En prueba de ello trae Ciceron una
muy excelente comparacion tomada de Zenon; diciendo que la retórica,
respecto de la dialéctica, es lo que la mano abierta , y extendida res
pecto de la misma cerrada.
37 ofrezca la ocasion. Del orador lib. 1. cap. 21.
38 y es materia suya. En el mismo lib. 3.cap. 54. -

39 del puerto de Ostia, El puerto de Ostia le comenzó Julio Cé


sar, y le acabó el emperador Claudio.

L IB RO TERCERO.

1 Platon llama Logodañialous. Voz griega, que significa : el que


Jima la oracion con demasiado esmero. Rollin.
2 vergonzosa. El verso de Sophocles dice á la letra:
A”to xpèv atunev, Bºp Bápºs dºs ávayev.
Pero Aristóteles, émulo de la gloria de Isócrates, como de su maestro
Platon, substituyó á la palabra bárbaros la de Isócrates , no sin injuria
de este orador, cuyo mérito quiso abatir. Qué orador de nombre hubo
ántes de Isócrates, ni despues de él entre sus oyentes , y discípulos?
Veleyo Paterc. lib. 1. cap. 16. n. 5.
de su mérito. Por aquellos tiempos ántes, y despues viviéron los
españoles C. Julio Hygino, liberto de Augusto, Porcio Ladron, gran re
tórico , Turanio Gracula, hombre erudíto, Cornelio , y Clodio, orado
res, de quienes habla Séneca.
4 Las qüestiones . Se define la qüestion: duda, ó disputa, que re
sulta de dos opiniones contrarias sobre una misma cosa, v.g. Si convie
ne, que se estudie el derecho natural. Nace esta duda de que unos tie
nen dicho estudio por útil, y otros por muy perjudicial. Entra despues
el orador , ponderando sus daños, ó ventajas , para persuadirle, ó di
suadirle.
5 y cómo es la cosa. Estado conjetural es quando se conjetura, ó se
trata de si la cosa se hizo, v.g. Si Celio quiso dar veneno á Clodia.
Cic. pro Coelio. Estado de qualidad, qual sea la cosa , si buena, ó ma
la , v. g. Si IMilon mató justamente á Clodo. Pro Milone. Definitivo,
quando se trata qué cosa es la sucedida, v.g. Si el dinero que dió Plan
cio, fué soborno. Pro Plancio. Rollin.
6 aquel célebre médico Pondremos á la letra esta confesion traducida
del Cornelio Celso, para que ninguno tenga por mengua el confesar su
LIBRO TERCERO. 409
error. El engaño de Hipócrates fue en dar puntos á une , que recibió
una pedrada en la parte anterior de la cabeza. Sobre el dar puntos
(dice Celso ) confesó Hipócrates, que se habia engañado ; siguiendo la
costumbre de los hombres grandes , y que tienen mucha experiencia.
Porque los ingenios limitados, como nada tienen, nada ceden de su opi
nion. Pero á los ingenios grandes les está bien, sin menoscabo de su
grandeza, esta ingenua confesion del error; pero principalmente en co
sas, que paran en utilidad de los venideros ; para que no caigan en el
error, que otros cayéron. Lib. 8. cap. 4.
7 el Cátulo, Véanse en las cartas á Atico la-12 , y 13 del lib. 13.
8 ostentacion, y pompa: Si miramos, dice Quintiliano, á la eti
mología de la palabra demostrativo, solo significa aquel género , en que
se demuestran las virtudes, ó vicios de una cosa; pero segun el uso tiene
tambien lugar en las consultas de los negocios, porque en el manejo de es
tos ocurre el alabar, ó vituperar á las personas. Lo mismo sucede en las
causas forenses. Si texemos las alabanzas de los testigos, es con el fin de
que se les tenga por hombres de verdad en lo que dicen, &c. Del mismo
modo si defendemos al reo , ha de ser alabándole. -

9 y del vino en Baco: Para que ninguno dude, que semejantes pre
ceptos envueltos en las necedades gentílicas, pueden acomodarse á nuestra
oratoria , advertimos, que nuestros panegíricos observan las mismas re
glas , que aquí prescribe Quintiliano. Primeramente texemos las alabanzas
de nuestro soberano Dios por la independencia, y magestad de su divino
sér; por los atributos de su inmensidad, y grandeza; porque, no nece
sitando de ninguno, movido de su bondad dió sér al mundo, crió al hom
bre , superior á todo lo criado, le remedió en su caida, y le ayuda efi
cacísimamente con los auxilios de la gracia, para ser siempre bienaventu
rado, &c. A la Vírgen María alabamos por la excelencia , y prerogativa
de ser madre de Dios; por su admirable nacimiento; por los singularísi
mos dotes de la gracia, y de la gloria; por sus imponderables virtudes per
sonales, &c. A los espíritus celestiales por la nobleza de su naturaleza,
por su obediencia , y obsequios, que tributan incesantemente á la divina
magestad; por el ministerio, que con los hombres exercen; y así en lo de
mas. En los panegíricos de los santos ordinariamente consideramos dos co
sas; una comun, en la que todos ellos conviniéron en el triunfo de este
mundo, en la victoria de las pasiones, y en el desprecio de sí mismos, &c.
otra , el camino particular por donde Dios llevó á cada uno. Quien
por la soledad, y retiro; quien en medio del mundo, y en los palacios;
quien usando de beneficencia con los demas ; quien desposeyéndose de to
do, para vivir de lo que voluntariamente les diese la caridad agena. Unos
por el martirio , otros por la abstinencia , y moderacion ; unos buscando
el trato, y comunicacion de los hombres, para santificarlos; otros huyendo
del mundo, por no arriesgar la virtud, é inocencia; y todos manifestan
do, que Dios es admirable en los santos. A este tenor se van formando
nuestros panegíricos en la oratoria christiana. Síguense los discursos mora
les, que tienen por objeto ensalzar la virtud , y pintar los horrores del vi
cio. Y aquí es principalmente donde debe predicar la bondad de vida , que
la eloqüencia de las razones. -

ro siglo presente. Impía adulacion : siguiendo la corriente de su si


glo , y de su religion. Los emperadores romanos, ó ellos mismos, se inti
TOM.
4 LO N O T A S.

tulaban, y hacian llamarse dioses, como este Domiciano, aunque era un


monstruo de todos los vicios mas contrarios al hombre 3 ó los lisonjeaban
en vida con estos nombres de santo, sagrado, celestial, y dios, hacién
doles despues de muertos la apotheosis, y dándoles asiento en el cielo.
1 I los pronósticos , Aun en nuestros panegíricos forman una no pe
queña parte de las alabanzas de los santos, aquellos pronósticos, indicios,
y señales celestiales de la futura, y extraordinaria santidad de los sugetos.
12 de ménos monta , Son de poca monta consideradas en sí mismas:
porque como cosas naturales, no aumentan el mérito de la persona , pe
ro deben ponderarse, quando se sigue el menosprecio de todos estos do
tes naturales en el sugeto, por seguir la virtud. Pues en este caso quanto
fuéron mayores los bienes de cuerpo, y de fortuna, tanto mas ceden en
alabanza del hombre.
13 de un mismo modo. Dos maneras hay de formar los panegíricos.
La primera, valiéndonos del método analítico, y recorriendo la vida del
sugeto, sus virtudes, acciones, hazañas, y aun sus mismos dichos. Lo
que en substancia es una historia seguida de su vida. Tal es el panegírico
de Plinio, recorriendo la vida de Trajano desde su adopcion en adelante.
La otra es, valiéndonos del syntético; por el que proponiéndonos un te
ma, ó idea general , la comprobamos con las virtudes , acciones, y di
chos del sugeto, pero sin el órden, que el primero. Así el célebre Ma
mertino en su panegírico á Maximiano Herculeo se propuso el probar:
quando Diocleciano le llamó para reparar la república, bizo un beneficio
¿
mas grande, que el que recibió. De esta clase son por lo comun los pa
negíricos de los santos.
14 los dioses; Habla del culto, que diéron los romanos á sus dioses,
no en general del culto de la idolatría; pues no podia ignorar, que este
tenia una época poco ménos antigua, que el mundo.
15 supersticion judaica ; Los gentiles tenian por ignominia, como
dice san Pablo, la religion christiana, como la mas repugnante á sus ne
cias fábulas ; y daban este nombre de supersticion al christianismo, al que
reconocian conmo una rama de la profesion judaica. El sabio Minucio Felix
hizo en su obra una gloriosa defensa de lo que aquí impugna Quintiliano.
16 ó vituperado: Porque quando el auditorio, ó los jueces estan pre
ocupados contra la persona, que alabamos, es casi imposible sacarlos del
error, y primer concepto , que tienen formado; y entónces es quando el
orador necesita echar mano de todas las riquezas del arte, aplicar sus
fuerzas , y apurar toda su habilidad , para que muden de opinion : por
que es tal la naturaleza del entendimiento humano, que admite muy de
mala gana lo que contradice á las primeras ideas, que hiciéron asiento en
él; y lo mismo sucede con la voluntad. Las oraciones de Ciceron en de
fensa de Ligario, y Deyotaro nos presentan la política mas fina para in
sinuarse en un ánimo opuesto á nuestra causa.
17 de la tierra. Esto es , no haber sido oriundos, ú originarios de
otros pueblos, sino haber nacido en el pais; de lo que se gloriáron algu
nas naciones, llamando á sus fundadores indigenas.
18 cicrtas comidas. ¿Qué diremos de las alabanzas, que se escribiéron
de las cosas mas viles? Luciano alabó la gota , y la mosca; Synesio la
calva; Dion Chrisost. el destierro ; Mayoragio el lodo ; Burmano la
pereza; otros otras cosas, que no pueden tomarse en boca. Ni aun fal
LIBRO TERCERO. 4. II
táron á la calentura, y al asno sus apologistas. Digo, que si hacemos
anatomía de semejantes laudatorias, hallaremos un texido de paradoxas,
y sofismas ridículos, que mas que para hacer alarde del ingenio, sirven
para engendrar en la razon torcimiento, y malos resabios. Semejantes ora
ciones no caen bien en ningun hombre de seso.
19 horcas caudinas. Se vió tan apretado el exército romano en la ba
talla contra los samnites, que una de las infames condiciones, que estos pu
siéron al consul Spurio Postumio , que pedia la paz, fué pasar por debaxo
del yugo, u horca todos los soldados en Arpaya, ántes Caudium ; de don
de quedó en proverbio furcae caudinae no ménos comun, que la batalla
de Canas. Tito Livio lib. 9.cap. 8.
2o los de Oderzo , En la guerra civil entre César, y Pompeyo los
opiderzianos, que seguian á aquél, yendo embarcados , fuéron cercados
por los de Pompeyo ; y por no entregarse al enemigo, mutuamente se
matáron en la misma nave. Floro, epítome. lib. I Io. Rollin.
2 1 ó al reves. Esto es , suponiendo que amenazan tres males, deli
berar, qual escogeremos como menor.
22 del mal, Es el pensamiento de Horacio, que dice: Oderunt pec.
care boni virtutis amore. Oderunt peccare mali formidine poemae.
. Al bueno la virtud por sí le place;
Quando al malo la pena mejor le hace.
23 mas humilde Si la persona del orador no es de autoridad , si este
es jóven , si no le acompañan las qualidades del linage , de suma reputa
cion , la misma naturaleza enseña, que ademas del mayor nervio de las
razones, debe usar de cierto ayre, y tono mas humilde , que aquel, en
quien concurren aquellas prendas: pues todos los dias vemos , que una
misma razon dicha por uno, persuade, y dicha por otro, se desprecia. Su
pla pues la modestia lo que falta por otra parte.
24 la persona : Entiende por prosopopeya aquellos razonamientos, en
que hablamos en boca de otro , como quando introducimos para mas vi
veza á los parientes del reo, implorando la clemencia del juez; á aquel
contra quien se cometió el delito , clamando por la justicia. Aquí debe
el orador esconder su persona, su estilo, y naturaleza, y revestirse de la
condicion de los tales, como hace el poeta con las personas de un drama.
Esta es la nueva dificultad, que dice Quintiliano.
25 quando De aquí se infiere, como dice Turnebo, que Ciceron com
ponia algunas oraciones á algunos nobles romanos, para que aprendiéndo
las, hablasen al senado , ó al pueblo. Semejante estilo habia entre los
griegos , como ya queda dicho.
26 y por lo comun Habla Quintiliano de aquellos asuntos, que sirven
para materia de las declamaciones escolásticas para exercicio de los jóve
nes. Por exemplo, un razonamiento de un padre á un hijo; de un hijo á
un padre; de un anciano á un jóven: donde es necesario , que el decla
mador guarde el carácter, no ménos que el cómico. Por eso dice, que las
prosopopeyas se distinguen de las suasorias , solo en las personas.
LIBRO QUARTO.
1 de su hermana, Domitila, hermana de Domiciano, tuvo una hi
ff2
4 I2 N OT A S.

ja llamada Flavia Domitila. Esta casó con Flavio Clemente , primo de


Domiciano, cuyos dos hijos los encomendó Domiciano á Quintiliano pa
ra que los instruyese. Rollin. /

2 los juicios divinos, El honor del concepto , que de mí hizo Dio


cleciano dios. Adulacion impía. Llama no solamente censor santísimo,
sino dios, á quien por sus liviandades era el blanco del aborrecimiento
general. Rollin.
3 en sus observaciones; Semejantes casos tenemos en las oraciones
en defensa de Marcelo, de Ligario, y Deyotaro, siendo juez el mismo
César, contra cuya vida se habian conspirado. Turnebo.
4 la reyna Berenice , Berenice, muger de Ptolemeo rey de Egyp
to, hija de Herodes, rey de Judea, y hermana de Agripa, á quien ama
ba Tito hermano de Domiciano, Turnebo.
5 á su favor, Esto mismo es lo que pondera Ciceron en la defensa de
Deyotaro, y en lo que mas se esfuerza. ,, Tambien me altera una cosa,
», ó César; aunque considerando tu condicion , se me desvanece el miedo.
», Una cosa, que mirada en sí, es contra razon, pero tu sabiduría la hace
», muy justa. Porque refrescar la memoria del delito delante del mismo,
, contra quien uno es convencido haberle intentado , si bien se mira , es
, cosa dura. Pues hablando comunmente no hay juez ninguno, que en
, causa propia no incline mas ácia sí , que ácia el reo la balamza de la
», sentencia. Pero tu generosa condicion me disminuye este miedo; pues
,, no tanto temo la sentencia , que vas á dar á Deyotaro, quanto estoy
, viendo el concepto, que quieres formen los demas de tu clemencia.“ En
el exórdio. De semejante medio se vale en la confirmacion de la oracion
de Ligario. Mira , ó César, quan sin miedo estoy. Considera quánta luz
de tu liberalidad, y sabiduría me ilumina para hablar en tu presencia.
Esforzaré la voz, quanto pueda , para que lo oiga esto el pueblo romano.
Tomé las armas contra té, lo confieso. Pero 3 delante de quién digo esto? ¿3c.
6 amables del reo , A esta semejanza Ciceron en el epílogo de la ora
cion de Ligario no solamente le hace al César una viva pintura de la
infelicidad del reo, de la esperanza que tenian sus amigos, sino que le
presenta delante toda la parentela de Ligario, aguardando la sentencia
de la boca del César 3 ó para vivir siempre confiados en su clemencia, si
usaba de misericordia; ó para morir en el abatimiento, y desventura, si
le condenaba á muerte. Todos estós afectos los avivaba mueho mas que
la imaginativa, y pincel de orador, la presencia de los amigos, intere
sados, y parientes, que permitian las leyes romanas asistiesen vestidos
de luto al tribudal para este fin.
7 de arrogancia. La invencion de estas ideas con lo que acaba de decir ha
ce sospechará Rollin, y con fundamento, que este lugar está muy defectuoso.
8 fuera del asunto. ¿Quién detendrá á un auditorio , aun el mas
devoto , cansado ya tal vez de esperar al predicador , si este divide su
razonamiento en tres , quatro, ó cinco puntos ?
9 de las palabras. Sin menoscabar ni un punto el precepto de Quin
tiliano, que no tiene tacha , advertimos que él nos da á conocer, que
en su tiempo habia decaido algun tanto la eloqüencia , ya que no en lo
demas, en el estilo ; pues estos defectos en ninguna parte de la oracion
merecen disimulo. Esto no quita , que el exórdio debe limarse con mas
esmero, que las demas partes. Esto quiere decir Quintiliano,
LIBRO QUARTO. 413
1o á la hija. Pudiera Quintiliano haber insinuado aquella otra di
gresion breve, y con gracia, que hace Ciceron en la oracion en que de
fiende la ley Manilia, para contar el modo con que Medea, huyendo de
su padre, le detuvo con el horroroso espectáculo de los miembros de su
hermano, que sembraba por el camino.
11 la narracion. Quando la narracion se hace clara, y sencillamen
te, aunque la tienen por verisímil, juzgan , que no es perfecta, porque
carece de los adornos, y atractivos de figuras. Rollin.
12 de sus granjas Muchos de los jueces estaban en sus casas de cam
po, por ser labradores; y sclo venian á Roma á sentenciar los pleytos:
por esta razon estaban distribuidos en varios turnos. Rollin. A estos tur
nos los llama decurias Quintiliano; y ahora pudiéramos traducir, dicien
do: sala 1.º, sala 2.º, &c. -

13 y mimos. Los latinos llamaban planipedi á estas composiciones, en


las que remedaban á las personas viles.
14 del parricidio, En el caso puesto debe suponerse, que los demas
parientes reclamarian el testamento á favor de los hijos; pues la ley pro
hibia entrar en parte ninguna de la herencia á los que hubiesen cometido
el parricidio. Turnebo.
15 Pero me dirán : Esta objeciones de los que dicen, que quando to
da la causa es contra nosotros, debe omitirse la narracion. Pues entónces,
dicen, no debe contarse la cosa, sino acinando las razones, que apoyen,
y prueben una causa por sí mala. Pero siendo continua la narracion, nece.
sariamente los argumentos, y razones, que juntos tendrian alguna fuerza,
separados, é interpuestos en toda ella, no tendrán ninguna. Rollin.
16 que dixo. La oracion que dixo en esta ocasion era mas reducida,
que la que despues publicó.
17 una de ellas: La proposicion es de dos maneras. Una general, y
que brevemente apunta lo que comprehende toda la causa. La segunda es
particular, que suele ponerse al principio de cada prueba. Turnebo.
18 division. Sirva de exemplo la que pone Ciceron en la defensa de
la ley Maniliana: Primero hablaré de la calidad de la guerra: luego de su
importancia : últimamente de la eleccion , y nombramiento de general.
Pero nótese, que hasta aquí se le permite dividir al orador su razona
miento; y el poner mas puntos es confundirle, y abrumar la atencion del
auditorio. Quanto mas simple sea, mucho mejor.
19 tres puntos : No podia ignorar Quintiliano, que esta fué siempre la
práctica comun de los oradores griegos , y latinos; y aunque da algun en
sanche,
esto
puede ocurrir alguna causa extraordinaria, ya confiesa que
seriaporque
confusion.
LIBRO QUINTO.
I á las segundas. Que otros llaman lugares intrínsecos, y extrínsecor.
2 en dos salas. El original dice in duas hastas divisae; y hemos tra
ducido divididos en dos salas, porque como dice Caper., donde se juntaban,
clavaban una lanza en el suelo , en señal de autoridad , y jurisdiccion.
3 de Rutilio , , A Rutilio, que gobernó la Asia con la mayor justicia,
le tomáron ojeriza los caballeros romanos, no mas de porque no permitia
las injusticias de los recaudadores, y asentistas; y por esto le desterrá
ron. Floro lib. 3 cap. 17.
4. I4. N O T A S.

4 y Catilina. Restítuido Ciceron al senado, Clodio cometió mi vio


lencias contra él; de lo que fué acusado por Milon tribuno del pueblo.
Pero se dilató la causa por el buen manejo de Clodio, y sus amigos, has
ta que nombrado edil, no podia ser ya citado á juicio. Rollin.
5 el juramento. Catilina gobernó el Africa en calidad de pretor. Des
pues le acusáron de estafador; pero habiéndose ganado el favor de la no
bleza, le absolviéron. Turnebo.
6 de otro; Este precepto de Quintiliano tenia freqüentemente lugar
entre los paganos; pero entre nosotros seria intolerable descaro echar eu
cara á alguno semejante irreligion, á no haber evidencia de haber si
do alguna vez perjuro.
7 de este punto. Quintiliano trata este punto por menor en el lib. 12.c. 9.
8 manifiestamente falso. Aunque parece dar á entender Quintiliano,
que podriamos valernos del testimonio de uno , que depone falsamente, lo
qual no seria propio de un hombre de conciencia; ya despues dice , que
no pone este caso , para que se haga uso de semejantes malas artes, sino
para que se puedan precaver. Rollin. -

9 aunque no quiera. Este modo de sonsacar, y hacer confesar la ver


dad al testigo, aunque no quiera , tiene mucha semejanza con el artificio
de la que llamamos forma silogística. En esta, haciéndole al contrario, que
nos conceda varias premisas (sopena de negar las verdades mas eviden
tes) le vamos conduciendo por sus pasos contados á la red de la con
seqüencia última, que pretendemos deducir. A esta manera el diestro abo
gado nunca debe preguntar al testigo derechamente lo que no quiere
confesar; sino que alejándose mucho al parecer de ella , le exáminará
sobre ciertas circunstancias, que parezca no se encaminan al punto prin
cipal ; y si el testigo sabe la cosa , y es persona simple, vendrá á soltar
alguna respuesta, que muestre claramente lo que queremos. Esta será una
prueba , y por ventura la mayor, de que maliciosamente calla , y niega
lo que sabe; y no será menester otro argumento para triunfar en el pleyto.
ro es el linage: Para que de cada uno de estos lugares pueda cada
qual deducir los argumentos en semejante asunto, pondremos, siguiendo
las observaciones de Rollin , el lugar de las oraciones , donde Ciceron se
vale de semejantes pruebas. Linage. Sept oracion contra Verres núm. 3o.
y 139. Pro Sext. núm. 6. -

1 y 12 Nacion, y Patria. 7. Verr., núm. 166. Por Archias núm. 4.


hablando de los testigos asiáticos. Por Flaco núm. 919.
13 Sexó. Por Sextio núm. 48.
14. Edad. Por Roscio Amerino núm. 39. Por la ley Man. núm. 6r.
15 Educacion, y enseñanza. Por Quincio num. 55. Philip. 2. núm. 18.
16 Forma del cuerpo, y complexíon. Por Roscio Amerino núm. 135.
Por Roscio el cómico núm. 2o. Contra Pison núm. 1.
17 La fortuna. Por Quincio n. 93. Por Roscio Amerino n. 133. 134.
18 Condicion, y estado. Allí mismo.
19 Indole. Ley Manil. n. 66. Contra Pison n. 41. Por Celio n. 12.
2o y 2 1 Trato en comer, y vestir; Estudios , y profesiones. Por
Roscio Amerino núm. 75. Por Murena núm. 61. 66. Por Celio num. 45.49.
22 Etimología. Por Roscio Amerino sobre la del nombre Chrysógono.
Que los antiguos, cuya religion no tenia mas estribos, ni fundamentos,
que un encadenamiento de supersticiones , y vanas observancias , hiciese
LIBRO QUINTO, 4I 5
mucho hincapie en la etimología para probar, que uno era bueno, ó ma
lo; sencillo, ó solapado, &c. ya parece era tolerable , y aun preciso para
ir consiguientes á sus principios. Segun este argumento no era muy dificil
acumular qualquier robo á /Verres, pues que su mismo nombre requeria,
que barriese, y limpiase quanto encontraba á la mano. Pero en el dia de
hoy seria , ó puerilidad , ó supersticion necia el pretender probar, que
ano tiene buen corazon, porque se llama Benigno ; y que no cabe ningu
na ruindad en los Bonifacios , ni inconsideracion en los Prudencios : y al
contrario, que todo ha de ser robos, trampas, y zancadillas en los que tie
nen el apellido de Ladrones , y Zorrillas. Solamente entre los poetas , y
no siempre, es tolerable este juguete de los nombres. -

23 en Léntulo Véase lo que observa Salustio en la historia de esta


conjuracion cap. 3.
24 del nombre La fuerza, y etimología de la palabra polinices es,
el que siempre vence, y sale con la suya.
25 puede suceder, La causa es de quatro modos: Material. Candele
ro de Jupiter. Oracion 6. contra Verres num. 64. Formal. Por una , y
otra pondera Ciceron los hurtos de Verres. Oracion 6. núm. 4.72. 74.
124. Por la naturaleza del alma , que es la forma del cuerpo huma
no , prueba él mismo , que no es temible la muerte. Por Sextio nú
mer. 47. Asimismo, que atendida la excelencia del alma , debemos evi
tar los deleytes corporales. Oficios 1. núm. 1o5. 1o6. Eficiente. El de
leyte corporal es causa eficiente de muchos males. Libro de la vejez,
núm. 39.41. La opulencia de Capua lo fué de su arrogancia. 2. de
la ley Agraria núm. 94. Y Verres fué la causa de las maldades, que
cometiéron sus camaradas. Oracion 4. contra Verres núm. 26. Final.
El fin de la guerra es la paz. Philip. 7. núm. 19. y el huir la escla
vitud. Philip. 8. núm. 12. Ciceron tambien aprieta á Tuberon con el fin,
3 que tuvo en tomar las armas contra César. Por Ligario núm. 9. Rollin.
26 por otro menor. Como el conmutar la muerte en destierro , ó en
cárcel perpetua; el destierro de un lugar incómodo, y penoso á otro no
tan trabajoso; la cárcel en pena pecuniaria, &c.
27 del lugar. Oracion 2. de la ley Agraria núm. 94. Por Milon nú
mer. 53. Philip. 2. núm. 63. Io4. 1o.5.
28 del tiempo, Por la ley Manil. núm. 35. Por Celio núm. 2. Por
Milon núm. 49.53.
29 y facultades , Por Milon núm. 54. 55. Por Roscio Amerino nú
mer. 74. 92. 93.
3o el modo Por Milon núm. 33.54. Por su casa núm. 53.
31 de la cosa. Definicion de la libertad, paradox. 5. De los verda
deros bienes, parad. I. Del rico, parad. 6. De una ciudad, parad. 4.
Pel destierro, por su casa núm. 72. Del suplicio, cont. Pison núm. 43. 4.
De un bombre popular, 2. Agrar. núm. 9. 1o. Del pueblo romano, por su
casa núm. 89.9o. Del consul , cont. Pison núm. 23. De la historia lib. 2.
Del orador núm. 36. Definicion por afirmacion , de la curia; por Mil.
núm. 9o. Por negacion, de los nobles. Por Sexto núm. 9. Por una y otra
3. Verrin. núm. 8.
32 Género: Las prendas de un capitan, en general por la ley Ma
nil. 64. 67. Alaba los estudios de las let. human. Por Archia. núm. 12.
núm. ao. De la gravedad del parricidio. Roscio Amerino 62.72. De los
416 N OT A S.

testigos griegos. Por Flaco 9, 29. De los estoicos, Murena 61. 67.
33 la especie Alábase la templanza de Pompeyo por sus principales
especies, por negacion. Ley Manil. num. 4o. Pondéranse las maldades de
Pison por las especies de crueldad, avaricia, deslealtad, impiedad. Cont.
Pison 88. 94. -

34 de la cosa. Se reducen á la definicion.


35 semejanza: Para probar la cosa, la usa Ciceron. Por Cluencio
núm. 67. Por Murena num. 4. Por Sextio num. 24.25. Para adornar, y
amplificar. Por la ley Manil. n. 22. Philip. 2. n. 115. Philip. 8. n. 15.
36 desemejanza: Por Murena num. 19. 22. Por Planco num. 68.
37 contrarios. Por Celio num. 31. Por Cluencio num. 135.
38 Repugnantes Por Celio num. 45. Philip. 2. num. 3o. 31.
39 Consiguientes Por Milon n. 61. Por Flaco n. 99. Catilin. 4. n. 11.12.
4o Ciceron Por Marcelo num. 12. -

41 Comparacion De mayor á menor. Por Milon núm. 16. Por Ros


cio Amerino num. 131. De menor á mayor. Por la ley Man. num. 11. Por
Planco. n. 26. Por la cosa igual. Catil. 1. n. 17. Por Silla n. 3 5. Rollin.
42 Amphicciones. Amphicciones eran jueces, en cuyo tribunal, que re
sidia en Termópilas, se sentenciaban los negocios interesantes á qualquiera
pueblo de toda la Grecia. Allí concurrian de todas partes, para que les
administrasen justicia. Turnebo.
43 en el judicial. Quiere decir , que ya entren los exemplos en el
género demostrativo, ya en el judicial, se sacan de la semejanza; dese
mejanza, y contrario, lugares puestos arriba.
44 la castidad. La fuerza de este exemplo de menor á mayor consis
te en que no es ménos permitido, que uno rechace la fuerza de quien hace
violencia á su vida, como lo hizo Milon con Clodio, que de quien pre
tende hacerla á la castidad, como lo prueba el exemplo de aquel soldado.
45 dicen, He aquí lo que les dixo: quando los miembros del cuerpo
no miraban á un mismo fin, como ahora, sino que tirando por distinto
camino, cada qual tenia su lenguage particular; formáron queja las de
mas partes, de que afanándose todas para dar de comer al vientre, este
estaba muy quieto , y sosegado en medio del cuerpo, disfrutando los re
galos, que todas le procuraban. De aquí sucedió, que mancomunándose
todas , se conviniéron: la mano para no llevar el manjar á la boca; esta
para no recibirle, aun quando lo tuviese en los labios; los dientes para no
mascar. Miéntras así conjurados quieren domar al vientre , cada uno de
los miembros, y el cuerpo todo viniéron á su última destruccion. Entónces
conociéron, que el vientre no estaba ocioso; y que no ménos alimentaba él
á los demas miembros, que ellos á él; pues repartia con el cocimiento
del manjar, á todos los miembros, y venas esta sangre, que nos da la vida.
46 que manejamos. Es muy conocida la utilidad de los símiles para
hacer mas sensibles las cosas. Por exemplo, queremos dará entender la in
gratitud de los que subiendo á grande altura por los escalones del influxo
de otros , despues los derriban ¿pues qué cosa mas expresiva , que el comº
pararlos á la yedra, que trepando á lo alto de un edificio, abrazándose
con sus mismas piedras, é introduciéndose por sus mismas junturas, no
bien subió á la cumbre, quando le desmorona, y echa á tierra? O bien
los compararemos, con no ménos propiedad, á las nubes del cielo, las que
subiendo de la tierra á grande altura con el único auxilio del sol, luegº
LIBRO QUINTO. 417
que se ven encumbradas, obscurecen al mismo que las elevó. Asimismo
explicaremos la diferencia del sabio comedido en hablar, con el ignorante
palabrero, y loquaz, si los comparamos con los rios: los quales, quando
llevan mas caudal, se dan ménos á conocer, pareciendo, que su corrien
te no se mueve; pero los de poca agua, y ménos fondo meten mas ruido
con el guijarro, que llevan. - * -- ---.
47 de aquellos pueblos, Esta costumbre la cuenta de los trausos, pue
blos comarcanos de Tracia , Herodoto lib. 5. núm. 4. Turnebo.
48 el mundo. Con razon dice Quintiliano, que los adagios , y re
franes son como autoridades comunes 3 pues son como unas breves senten
cias de moralidad comprobadas con la misma experiencia de todos los si
glos; y verdades comunes admitidas ya por el comun consentimiento de
todos. Y miradas por ámbos lados sirven todavía de argumento mas fuerte,
que el dicho de una persona, aunque de carácter, y autoridad: segun lo de
Ciceron ni uno pudo engañar á todos ; ni todos á uno, Bien traidos estos
adagios, no son indignos, ni aun de la eloqüencia del pulpito, como lo
practicáron oradores consumados, y aun el mismo San Pablo.
49 en el medio dia. Véase quanta es la fuerza, y luz de la verdad ma
nifiesta , y de una cosa puesta á la vista de todos , y hallaremos , que el
ponerse á probarla, es obscurecerla mas. -

5o de Escauro : Este pasage lo trae Valerio Máximo l. 3. c. 7. n. 8.


5r un Bagoas, Son nombres, que comunmente se daban á los eunu
cos, como Geta, y Davo á los esclavos.
52 de un Doryphoro, Nombre, que los griegos daban á los soldados
de la guardia del general, así como los romanos los llamaban pretorianos;
y como comunmente son de singular gallardía, y gentileza , los acomoda
muy bien Quintiliano para modelo de una estatua, que representase la per
fecta forma del hombre; así como para formar ahora la de un soldado, to
mariamos un granadero.
53. Mas babiendo En el libro, que escribió Quintiliano sobre las cau
sas de la corrupcion de la eloqüencia, y se ha perdido. Rollin.
54 causas forenses : Porque las oraciones de este género constan de
exórdio, narracion, confirmacion, refutacion , y epílogo.
55 rentenciar anteriores. Esto es de las sentencias, que se diéron en
causas semejantes á la nuestra; porque si el contrario pretende valerse de
ellas, debe manifestar, que hay alguna desemejanza entre el caso, que
alega , y el presente.
56 y conclusion. Quintiliano parece, que confunde con el silogismo ar
epicherema : y aunque en substancia no es mas que un silogismo, pero regu
larmente segun la doctrina comun va embebido en una proposicion sola dicha
por via de interrogacion: v.g. ¿Temer Alexandro? ¿Corregirse Catilina?
57 y conclusion, En este lugar se explica Quintiliano con la misma obs
curidad; y para aclarar mas su doctrina, decimos, que qualquiera silo
gismo se reduce á enthymema, quitando una de sus proposiciones , siendo
evidente: v.g. Donde no hay órden, no puede haber gobierno. Una re
pública sin leyes no tiene órden. Luego en una república sin leyes no
%ºy gobierno. Quítese qualquiera de las dos primeras, y quedará reducido
á enthymema. Estos dos raciocinios así puestos, son puramente dialécticos;
Pero añadiendo á cada proposicion su prueba , ó razon, explicadas con ex
tension , serán oratorios. -

ToM. I. º Ggg
418 NOT A S.

58 enthymema. Quintiliano se explica aquí con alguna confusion.


Es el sentido de este precepto, que los silogismos, y enthymemas dia
lécticos deben usarse muy rara vez en la oratoria: y que si Demóstenes
los usó alguna vez, fué con mucha moderacion; en lo qual no debe imitarse.
LIBRO SEXTo. -
-

1 se me ha encomendado: Habla de la educacion de los sobrinos de una


hermana de Domiciano, que este príncipe, le encomendó, como dixo en
otro lugar.
2 me quedaba , Primeramente se le habia muerto otro de cinco años,
y ahora este, que tenia ya doce. Turnebo.
3 le gobierne? Los oidos christianos perdonarán , que hayamos tras
ladado una sentencia tan impía, pero digna de un gentil, que no exten
dia sus miras, ni sentimientos sino á los de la carne, y sangre. Así se
explica la naturaleza de un padre, que sin estar alumbrado de los conoci
mientos de la verdadera inmortalidad, ni reconoce otra vida, , cuya espe
ranza puede endulzar la amargura de una muerte temprana; ni que esta es
un señalado beneficio, quando Dios prevee, que se ha de abusar de ella.
4 naturaleza. Es una observacion bastante comun, que los niños de
un talento extraordinario, y anticipado, ó de una prudencia, y seso muy
temprano, y fuera de lo que conviene á la primera edad, ó no viven por
mucho tiempo, ó vienen despues á perder aquellos primeros brillos del in
genio. La naturaleza nos enseña esta importantísima leccion en los frutos,
que por anticiparse mucho, no suelen lograrse.
5, esperanza mia, Por esta noble pintura, que hace Quintiliano de su
carácter , se trasluce bastante, que era de un corazon sensible sobre ma
nera á la pasion del amor. r

6 esta digresion Digresion; pero hecha con mucha gracia, y que no


ménos deleyta al lector en el discurso de este inmortal tratado, que á un
caminante la vista de un espectáculo agradable, que se le ofreció en el ca
mino. No tuvo reparo en imitar á Quintiliano Melchor Cano con otra,
aunque no tan larga digresion, causada de un accidente semejante , con
la que dió principio al libro 1 1. de los lugares teológicos. -

7 los afectos. Alude á la costumbre del areópago, en donde por me


dio del pregonero se le intimaba á qualquiera orador, que solamente pro
pusiese con sencillez el asunto de su comision , y las razones , que habia.
discurrido, pero sin mezclar ni en el medio , ni en el fin movimiento de
afectos, para que los jueces sin pasion atendiesen en la sentencia al hecho
de la verdad , y no mas.
8 el apasionarse; Debe solamente entenderse de los estoicos, los qua
les hacian profesion de la apathia ; esto es de mantenerse firmes, sin dar
entrada en el ánimo á ninguna pasion. Pero esto era solo en el nombre:
pues en llegando la ocasion , manifestaban ser hombres como todos.
9 Zatinio: Fué tan aborrecido de los romanos, que quedó en prover"
bio el odio vatiniano. Cátulo epig. lib. Aº

1o ó hijos. El usar en este caso de compasion, no es para inclinar a


ella al juez , sino para agrabar mas el delito, ó para manifestar el acusa".
dor, que procedió á la querella sin intencion siniestra: pues entónces emº"
peña mas al juez á que haga su deber. -

A
LIBRo sExro. 4I 9
l. rr de 3úpiter, Estaba puesta en el foro de Roma, para que los jue
ces con su vista se moviesen á administrar justicia. Rollin.
12 poder. Este precepto de Quintiliano tiene mucha alma. Natural
mente nos inclinamos al caido, y particularmente quando se ve oprimido
de quien confia mucho en su poder: y esto se funda en que en fuerza del
amor propio no queremos, que el poder ageno crezca demasiado. De aquí
es , que al menor asomo de justicia , que tenga el oprimido, como él sepa
hacer bien su papel, todos se interesarán en su causa , y sentenciarán con
tra la presumida arrogancia del contrario. " " --. - - - - - - - -

13 y mi cuidado. No permite la modestia de Quintiliano, como dice


Rollin, que le culpemos de arrogancia, sino que atribuyamos á olvido na
tural, lo que dice, que ninguno ántes de él enseñó este precepto de mo
verse primero el orador, que quiere mover á otros; como que él solo fué
el inventor de dicho pensamiento. A la letra le encontramos, como todos
saben, en Horacio arte poética: Si quieres, que yo llore, debes prime
ro tú mostrarte afligido. El mismo precepto da Ciceron difusamente en
el 2. lib. del orador núm. 189. 197. . - - -

14 Tiron, Dicen, que dió á luz tres libros , donde juntó todos los
chistes, y sales de Ciceron: aunque otros, dice Turnebo , piensan ha
berlos compuesto el mismo Ciceron. .. -- - . . . . .
15 de Celio: Ciceron en la oracion pro Coelio cap. 25 , &c. -

16 quitaba pinta. Debe suponerse , aunque no lo dice Quintiliano,


que el frances pintado en el escudo tenia la lengua fuera. De este modo fué
mayor la burla de Mancia. Véase Ciceron lib. 2. del orador. -

17 atelanas. Fábulas atelanas eran ciertos intermedios , ó saynetes


muy libres, que para hacer reir se mezclaban en el drama. Derívase la
voz de la palabra Atella pueblo antiguo de los oscos, hoy San Arpino.
18 favebo. Donde jugó los términos quoque, que en el sonido no se
distingue del vocativo de coquus , el cocinero, y de jure, que significa el
caldo , demas de la significacion , que tiene , esto es : con razon,
19 Varium tiene dos sentidos, inconstante; y el que tiene la cara
llena de manchas , ú hoyos de las viruelas. -

2 o , ni cerrada. Aludiendo á que no habia cosa segura de sus manos, que


todo lo arrasaban.
2 Sacerdote Así se llamaba el antecesor de Verres en el gobierno. Jue
ga los términos Sacerdos, y lZerres, que tienen dos significaciones.
22 sujetados, Entre los demas aparatos de los emperadores, que entra
ban en Roma en triunfo conducian varias figuras, ó imágenes de bulto,
que representaban las ciudades, ó naciones, que habian sojuzgado. Estas
eran, como dice Veleyo Patérculo, y otros, de cedro, acanto, testudo, mar
fil, plata, oro, &c. Véase á Ovidio en la descripcion del triunfo de Cé
sar Germánico. Lib. 2. de Ponto eleg. 1.
23 vestido. En lugar de decir muy versado, como era regular.
24 patronos de ella. En los juicios públicos, hecha la defensa por una
y otra parte, solia llamarse á voz de pregonero á los abogados, y patro
nos de la causa para la altercacion; y aunque estos eran muchos, se citaba
por su nombre al que hizo la defensa. En cuyo caso el no admitir el tal
la altercacion , cedia en descrédito de su habilidad. Turnebo.
veRum in opere longo fas est obrepere SOMNUM. rORlAnr.

Página. Columita. Linea. I)ice. Corríase.


- 2. • • • - - - - - I• • • • • I• • • diu sunt...... diu sum.
56. ... - - - - 2. • 8... Wowhypæ#uat. - - vkvdoypææuæ*
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9• • • • prcstare · · · · · · praestare.
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234 • • • • 1.. penúlt. interamnae.... Interamnae.
237. • • • I• • I 2. • • siularem...... singularem.
282. ... I• • 3. • • • azrahxsit • • • • • •
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297. . . . 18... las naturaleza.. Ia naturaleza.
31 5.*. . • • • • • I. • - I 2. • • putant.. • • • • • • putat.
2• • I I. . . . postest. . . . . . . potest.
327. • • * •
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• • • • • 1 5... intruida...... * instruida.
334: .. -

sacerdote. . • Sacerdote.
334: ....... 6... . -

Ibid........ i..... 7• • • sacerdoti..... Sacerdoti.


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