La música contiene tres elementos fundamentales los cuales son: ritmo,
melodía, y armonía, son los que definen un estilo musical y lo diferencian de
otros estilos. A lo largo de la historia de la música, ritmo, melodía y armonía se han combinado, uno con mayor preponderancia que otro. Los elementos de la música se definen: La Melodía En teoría musical, una melodía, también llamada un tono, una voz o una línea, son una serie de eventos lineales sonoros o una sucesión, pero no una simultaneidad como es el caso de los acordes. Esta sucesión debe contener cambios de algún tipo y ser percibida como una sola entidad (posiblemente Gestalt) para ser llamada melodía. Mas específicamente esta incluye patrones de cambios de tonalidades y de duraciones, mientras que de una forma más generalizada, incluye algún patrón de cambios de eventos o de calidad. Ritmo Este es el flujo de movimiento controlado o medido, sonoro o visual, general mente producido par una ordenación de elementos diferentes del medio en cuestión. El ritmo abarca: el compás: subdivisión del tiempo, usando un numerador (que indica la cantidad de pulsos por compás) y un denominador que indica la fracción correspondiente a la división de la figura que ha de servir como unidad básica de pulso, es decir si es negra 1/4, corchea 1/8, … Mientras que el pulso es una constante (K), es decir, no cambia. El pulso es un conjunto de bits cuyo valor no puede cambiar durante la ejecución de un tema. Recibe un valor en el momento de la compilación y este permanece inalterado durante toda la obra. El tiempo es una variable; esto significa que es relativo a depender de otros factores. Una variable de tiempo es una fracción asociada a un compás, que está situado en posiciones contiguas, y su valor puede cambiar durante la ejecución de una obra. El pulso y el tiempo están relacionados entre si y el uno depende del otro. Armonía Es el equilibrio en las proporciones entre las distintas partes de un todo y, en general, connota belleza. En música, la armonía es la disciplina que estudia la percepción del sonido en forma vertical o simultánea en forma de acordes y la relación que se establece can los de su entorno próximo. Otras definiciones: RITMO: es la combinación de sonidos y silencios distribuidos en el tiempo de un modo determinado. MELODÍA: consiste en una sucesión de notas con sentido musical que difieren en altura y duración. ARMONÍA: es la ciencia que enseña a constituir los acordes, y es el arte que sugiere la manera de combinarlos, en forma más agradable y equilibrada.
Elementos de las Canciones Infantiles
Según Bernal y Calvo, (1997). Las canciones infantiles han de estar caracterizadas por:
Texto: Ha de ser claro, corto, con palabras de fácil comprensión y
con pronunciación y en consonancia con el pensamiento infantil. Las canciones con contenido onomatopéyico, o con fonemas repetitivos, suelen gustar a los niños, a la vez que pueden ser muy apropiadas para trabajar determinados aspectos de las emisiones vocálicas y del ritmo.
Ritmo: Las canciones infantiles, formadas por esquemas rítmicos
sencillos, han de poseer un ritmo donde se refleje el sentido de las palabras y los acentos gramaticales han de coincidir con los musicales. Es preferible comenzar por canciones en compás binario, y pasar después al terciario, donde las frases tengan una cuadratura equilibrada, cuatro u ocho compases, en función de las cadencias respiratorias. Melodía: El ámbito melódico en función de la edad, no sobrepasando la extensión de la escala diatónica. La melodía simple y atrayente, de frases cortas, cuyos períodos estén claramente diferenciados para que favorezcan la respiración. Las tonalidades más apropiadas pueden ser: DO Mayor, SOL Mayor, FA Mayor… aunque el niño puede cantar en otras.
Armonía: La característica más significativa es la estabilidad tonal, o
la ausencia de modulaciones. Los acompañamientos en este caso han de mantenerse dentro del ámbito de los acordes básicos: Tónica, Dominante y Subdominante, desechando melodías con alteraciones accidentales.