Ensayo

Salud mental en Colombia

José Julián García Piraquive

Sede-Villavicencio

Universidad Cooperativa de Colombia

2020

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 La salud mental en Colombia

Establecer servicios de salud mental en Colombia es una estrategia de vital

importancia para mejorar la atención ofrecida a las personas que experimentan
problemas de salud mental. La situación a nivel nacional se ha visto de un modo
despreciada por parte de la institucionalidad, dado a que existen planes incompletos
se necesita crear una contribución al bienestar y al desarrollo humano en todas las
etapas del ciclo de vida, con equidad y enfoque diferencial, en los territorios, En ese
sentido la Encuesta Nacional de Salud Mental (2015) definió problema mental como
el malestar y las dificultades en la interacción con los otros, los cuales pueden verse
generados por la vivencia de eventos estresantes. Dada la historia de nuestro país
existe una probabilidad muy amplia de personas que puedan sufrir o llegar a sufrir
cualquier tipo de desequilibrio mental y con esto se pone en riesgo la salud mental
en general.

De acuerdo con el Atlas Mundial de Salud Mental los trastornos mentales más
prevalentes en el mundo son la depresión unipolar, trastorno bipolar, esquizofrenia,
epilepsia, consumo problemático de alcohol y otras sustancias psicoactivas,
Alzheimer y otras demencias, trastornos por estrés postraumático, trastorno
obsesivo compulsivo, trastorno de pánico e insomnio primario. El Manual
Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales define el trastorno mental
como un síndrome caracterizado por una alteración clínicamente significativa del
estado cognitivo, la regulación emocional o el comportamiento del individuo que
refleja una disfunción de los procesos psicológicos, biológicos o del desarrollo que
subyacen en su función mental. Según la OMS (2001) aseguro que muchos países
llegarían a ser objeto de grandes cambios, entre los cuales se destacarían la atención
digna e integral de las personas con problemas mentales y con esto buscar darle un
giro al tratamiento confinado y normalizado por el que pasan la mayoría de estas
personas (p.2)

De otro lado, si bien el hecho de centrar la salud mental en los trastornos mentales
no es en sí mismo algo negativo cuando estas manifestaciones tienen una base

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biológica, si se ha cuestionado el énfasis económico de sus desarrollos, en términos
de inversión y de costos para las personas que usan los servicios, quienes
encuentran barreras de acceso a los beneficios de estos avances de tecnologías en
salud.

Los trastornos mentales y cuyo sistema de salud, de manera explícita, prioriza la

rentabilidad de los servicios privados sobre los servicios públicos de salud, mas no
como un país con avances importantes en la salud mental poblacional. La calidad
de los servicios está presente en los protocolos de atención y en los sistemas de
gestión de calidad de las instituciones de salud, en tanto que el estigma a la
salud mental es evidente en la normatividad, en los servicios de salud y en la
sociedad en general, y afecta tanto a las personas que solicitan los servicios
como a sus familias y al talento humano en salud. Si bien las luchas sociales en
salud, han podido poner en evidencia las grandes falencias del sistema de salud,
en el caso de la salud mental se logró que la Corte Constitucional se refiriera a
esta dimensión de la salud como constitucional , son muchas las barreras de
acceso a servicios de calidad debido a problemas estructurales y socioculturales
que orientan las decisiones administrativas en los servicios de salud, no con
base en los derechos humanos, sino inclusive en contra de ellos y a favor de
beneficios económicos.

Desde esta posición, ven claramente en el funcionamiento del sistema la

presencia contradictoria de directrices: los derechos humanos, la rentabilidad
financiera, la calidad de los servicios y el estigma en la administración de la
salud mental en Colombia y como estas directrices se evidencian en falencias de
tipo estructural, conceptual y sociocultural del SGSSS con respecto a la salud
mental.

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Según los participantes, la forma de concebir la salud mental hace que esta sea
invisible en los niveles primarios de atención, pero es de resaltar que los
expertos cercanos a procesos de atención y rehabilitación también vean fallas
importantes en estos niveles de atención para los diversos problemas de salud
mental: Algunos consideran que a pesar de las dificultades, se están logrando y
se pueden lograr cambios positivos, y otros, menos optimistas, piensan que se
requiere, para poder hacer los cambios necesarios, el empoderamiento de la
sociedad civil, un concepto concertado de salud y de salud mental y un pacto
social por la salud que incluya también a los académicos, de manera que los
conocimientos se complementen y se pongan al servicio del sistema.

Según la encuesta Nacional de salud mental (2015), constituye un hito en salud

mental pública en Colombia, pues traduce un enorme esfuerzo técnico, insumo
clave para la gestión del riesgo colectivo en salud mental y la priorización de
grupos poblacionales para las acciones de detección temprana y atención
oportuna de problemas y trastornos mentales. Siguiendo el principio
mundialmente aceptado de que no hay salud sin salud mental, comprendiendo
desde cualquier punto de vista que todo aquello que sirva de información clara y
asertiva facilitara la tarea de los profesionales encargados todo esto adoptando
políticas de ayuda prioritaria en lugares remotos de nuestro país los cuales han
sido vulnerados a causa de la violencia y el desconocimiento de las palabras
“bienestar social”

Frente al Informe de la Encuesta Nacional de Salud Mental Dentro del Sistema

Nacional de Encuestas y Estudios Poblacionales para Salud de Colombia, y es
un insumo para el Plan Para el grupo de edad de 7 a 11 años la información fue
suministrada por la persona directamente responsable del cuidado; en el grupo
de 12 y más años se interrogo a fin de identificar determinantes sociales para la
salud mental de la población; salud mental en sus dimensiones positivas;

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vicisitudes y recursos para lidiar con la tensión y el Además del acceso a los
servicios de salud mental.

Según la resolución N° 4886 (2018) dice que el Derecho a la salud mental de la

población colombiana debe tener una mayor importancia a los niños, las niñas.
Y adolescentes, La atención integral e integrada en salud mental, la Política de
Atención Integral en Salud-PAIS, adoptada por la Resolución 429 dicha Política
cuenta con un marco estratégico y un marco operacional, este último
Corresponde al Modelo Integral de Atención en Salud-MIAS, que comprende el
conjunto Integralidad, aceptabilidad y calidad en la atención en salud de la
población. Donde cada parte importante del sistema se centrara primeramente
en la atención a las personas esto podría brindar una mejor integración
adaptabilidad y calidad en todo aquello que trate en atención a la población.

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Referencias

Rojas, L. A., Castaño, G. A., & Restrepo, D. P. (2018). Salud mental en

Colombia: Un análisis crítico. Rev CES MEDICINA. Vol 32(2), 129-140.

Hernández, D. M., Sanmartín, C. F. (2018). La paradoja de la salud mental en

Colombia: entre los derechos, la primacía de lo administrativo y el
estigma. Rev Gerencia y políticas de salud. Vol. 17(35), 1-14.

Ley N° 1616 Por medio de la cual se dicta la ley de salud mental y se dictan
otras disposiciones, Colombia, 21 de enero de 2013.

Gaviria, A., Ruiz, F., Dávila, C., Burgos, G., Ospina, M., Osorio, E., &
Ramírez, F. (2015). Encuesta Nacional de Salud Mental. Rev
Colombiana de Psiquiatría. Vol. 45 (S1), 62-122.

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El Plan Decenal de Salud Pública (PDSP) 2013, Bogotá: Ministerio de Salud y
Protección Social.
Resolución N° 0004886 Por la cual se adopta la Política Nacional de
Salud Mental, Colombia, 07 de noviembre de 2018.