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3 / AÑO 2017

OCTUBRE • NOVIEMBRE •DICIEMBRE

Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)2:1-2.

siglantana
PSICOSOMÁTICA
Y PSIQUIATRÍA
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3
AÑO 2017
OCTUBRE NOVIEMBRE DICIEMBRE
ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3
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PSICOSOMÁTICA
Y PSIQUIATRÍA 3 / AÑO 2017
OCTUBRE • NOVIEMBRE •DICIEMBRE

CONSEJO DE DIRECCIÓN
BOARDS OF DIRECTORS

EDITOR JEFE/CHIEF EDITOR


J.Mª. Farré Martí
Hospital Universitario Dexeus (HUD)
Universitat Autònoma. (UAB) Barcelona.

DIRECCIÓN CIENTÍFICA/SCIENTIFIC BOARD


J.J. García Campayo N. Mallorquí J.A. Monreal
Hospital Miguel Servet. Barcelona. HUD. Barcelona Corporació Sanitària Parc Taulí
(HMS) Zaragoza (CSPT). Sabadell

EDITORES ASOCIADOS/ DOCUMENTALISTAS/ Ll. García-Esteve. Barcelona R. Torrubia. Barcelona


ASSOCIATE EDITORS DOCUMENTARY MAKER Ll. García-Sevilla. Barcelona E. Vieta. Barcelona
A. Lobo M. Catalán A. Gil. Molina De Segura
Hospital.Clínico Universitario Hospital Sant Joan de Déu. F. Gutiérrez. Barcelona INTERNATIONAL
Facultad Medicina U.zaragoza Barcelona
C. Larroy. Madrid EDITORIAL BOARD
(HCUZ) Zaragoza
L. Lázaro. Barcelona G. Cardoso. Lisboa
E. Salas
J.J. de la Gándara F. Martínez Pintor. Barcelona D. Clark. Londres
HUD Barcelona
Hospital Universitario Burgos. J. Méndez. Murcia S. Fortes. Río De Janeiro
Burgos
J.J. Mira. Alicante F. Huyse. Amsterdam
CONSEJO ASESOR/ M. Lourenço. Guimâres
E. Echeburúa I. Moreno. Sevilla
Universidad del País Vasco. EDITORIAL ADVISORY K. Lyketsos. Baltimore
A. Moriñigo. Sevilla
S. Sebastián BOARD I. Marks. Londres
J.A. Alda. Barcelona J. Obiols. Barcelona
E. García-Camba E. Oller-Ariño. Barcelona J. Rámirez. México DF
E. Álvarez. Barcelona
Hospital de la Princesa. F. Ortuño. Pamplona M. Rigatelli. Modena
Universidad Autónoma Madrid E. Baillès. Barcelona
J. Osma. Teruel P.M. Salkovskis. Londres
(UAM). Madrid R. Bayés. Barcelona
M. Pamias. Sabadell L. Salvador-Carulla. Sidney
A. Benito De La Iglesia.
F. Labrador Madrid J.M. Peri. Barcelona W. Soëllner. Nuremberg
Universidad Complutense Madrid
L. Pintor. Barcelona D. Souery. Bruxelles
(UCM) Madrid J. Blanch. Barcelona
M. Planes. Girona F. Tremeau. New York
J. Bobes. Oviedo
B. Sandín J. Punti. Sabadell A. Vaz Serra. Coimbra
A. Bulbena. Barcelona
Universidad Nacional R.M. Raich. Barcelona
C. Chiclana. Madrid
de Educación a Distancia
(UNED). Madrid A. Colodrón. Madrid M. Roca. Palma de Mallorca
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M. Valdés R. Sender. Barcelona
J. Deus. Barcelona
Facultad Medicina.Universidad
Barcelona (UB) Barcelona L. Ezpeleta. Barcelona J. Soler. Barcelona
F. Fernández. Barcelona P. A. Soler Insa. Barcelona
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Facultad de Psicología (UNED).
Madrid A. García-Palacios. Castellón A. Tobeña. Barcelona
de la Plana A. Torres. Barcelona

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DE REDACCIÓN/ (CSPT) Sabadell PSICOSOMÁTICA CIENTÍFICAS/
WRITING BOARD INFANTO-JUVENIL SCIENTIFIC SOCIETES
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ADOLESCENT Sociedad Española
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DP Ensenyament Generalitat Consorci Sanitari
de Catalunya (DEGC)
(SEMP)
de L’Anoia. Igualada Asesor
C. Mur de Viu. Presidente
I. Tolosa J. Toro Sociedad Marcé Española
HUD Barcelona REDACCIÓN Facultad De Medicina Universidad De Salud Mental Perinatal
EN ARGENTINA Barcelona (UB) Barcelona (MARES)
Miembros Antonella Paolazzi. G. Lasheras. Presidente
Buenos Aires Coordinación
E. Aubá Corresponsal/Correspondent
Clínica U. Pamplona. Pamplona REDACCIÓN EN BRASIL A. Orobitg
(UHD) (Colab.). Barcelona Academia Internacional de
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(CSPT) Sabadell F. Cabello
REDACCIÓN EN CHILE SECCIÓN DE CONDUCTAS
Presidente
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HUD Barcelona M. Valdebenito. Valparaiso COMPORTAMENTALES/ Sociedad Andaluza de
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S. Jiménez-Murcia
HUD Barcelona Sociedad Española
REDACCIÓN EN MÉXICO Hospital Universitario de Bellvitge.
de Médicos de Atención
(HUB). Barcelona
N. Fort D. Pérez Tobías. Potosí Primaria (SEMERGEN)
(SPMIJ).CSPT. Sabadell
REDACCIÓN SECCIÓN DE V. Gasull
I. Gómez-Reino EN PORTUGAL SEXOLOGÍA Y SALUD
Psiquiatría
Complexo Hospitalario S.C. Morais. Viseu Sociedad Española de
Universitario. Ourense
MENTAL/SEXOLOGY AND
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MENTAL HEALTH (AESEXAME)
V. González
SECCIÓN DE SALUD Asesores A. Luís Montejo
Atención E Investigación
de Socioadicciones (AIS). MENTAL PERINATAL Y F. López. FPU. Salamanca Presidente Comité Científico
Barcelona REPRODUCTIVA/ E. Maideu. H. Comarcal
Secretaría De Redacción
PERINATAL MENTAL del Ripollès. Girona
A. Granero R. Sáez. Barcelona
(CICSM) CSPT. Sabadell AND REPRODUCTIVE
Coordinación N. Sardà. Barcelona
HEALTH
K. Gunnard G. Mestre. HUD. Barcelona
HUD Barcelona Coordinación
G. Lasheras
I. Olivella
HUD Barcelona
(HUD) (Colab.) Barcelona

G. Parramon
Hospital Universitari
Vall D’hebrón. Barcelona

Redacción: I.U. Dexeus C/. Sabino Arana, 5-19- 3ª Planta. Consultas Externas Psiquiatría - 08028 Barcelona
Maquetación pdf y web: Ramon Sánchez Parent. c/ Colon 17 3er, 08640 Olesa de Montserrat, Barcelona

Es una publicación de Editorial Siglantana S.L.


c/ Tetuan, 16, bx. 1ª Sant Cugat del Vallés 08172 Barcelona
© 2017, Editorial Siglantana, S.L.
ISSN 2565-0564
LA REVISTA no se identifica ni se hace responsable de las opiniones de los autores de los trabajos.

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SUMARIO Nº3
CONTENTS

EDITORIAL

De lo molecular a lo simbólico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
From the molecular to the symbolic
J.M. Farré

ARTÍCULOS ORIGINALES/ ORIGINAL ARTICLES

Personalidad y percepción de dolor en fibromialgia: Un estudio piloto de casos y controles . . . . . . . . 7


Personality traits and perception of pain in fibromyalgia: A pilot study of cases and controls
B. Hermoso, A. García-Fontanals, S. García-Blanco, Poca, F. García-Fructuoso, T. Gutiérrez, M. López-Ruiz,
M. Gomà-i-Freixanet, R. Raich, J. Deus

Síndrome de Tako-tsubo: acontecimientos vitales estresantes, dimensiones de personalidad, . . . . . . 18


y estrategias de afrontamiento. Un estudio descriptivo
Tako-tsubo syndrome: stressful life events, personality dimensions, and coping strategies. A descriptive study
O. Varela-Besteiro, L. Santiago-Piñeiro, A. Alcántara-Tadeo, R. Bascompte-Claret, S. González-Sucarrats,
G. Pinillos-Francia

Cuando diagnosticamos al cuidador. Síndrome de Munchausen por poderes . . . . . . . . . . . . . . . . 30


When we diagnosing the caregiver. Münchausen by proxy syndrome
S. Salort Seguí, M. Irigoyen Ontiñano

ARTÍCULO DE REVISIÓN/REVIEW ARTICLES

Rasgos de personalidad y características descriptivas de los ofensores sexuales en base . . . . . . . . 37


a la evidencia científica
Personality characteristics and descriptive characteristics of sexual offenders based on scientific evidence
F. Hurtado Murillo

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3

REVISTA CIENTÍFICA SOLO PARA PROFESIONALES


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ARTÍCULO ESPECIAL/SPECIAL ARTICLES

A Sexualidade no século XVI vista por Amato Lusitano . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41


The sexuality in the 16th Century in the medical work of Amato Lusitano
José Pacheco

¿Por qué? Reflexiones sobre los atentados yihadistas de Barcelona y Cambrils . . . . . . . . . . . . . . 50


Why? Reflections on yihadist terrorist attacks in Barcelona and Cambrils
R. Bayés

NOTÍCIAS/NEWS

NOTICIAS DE SALUD MENTAL PERINATAL . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54


Perinatal Mental Health News
G. Lasheras, B. Farré-Sender, E. Gelabert, P. Navarro, A. Roca, E. Serrano-Drozdowskyj

NOTICIAS DE PSICOSOMÁTICA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 64
Psychosomatic news
Gemma Mestre, Iris Tolosa

NOTÍCIAS SOBRE PSICOSOMÁTICA INFANTO JUVENIL . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 68


Children and youth Psychosomatic news
Anaïs Orobitg, Míriam Sánchez

NOTÍCIAS SOBRE CONDUCTAS ADICTIVAS COMPORTAMENTALES . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 72


Behavioral addiction news
Verónica Ferrer, Vega González, Susana Jiménez-Murcia

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Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3

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EDITORIAL
ARTÍCULO ORIGINAL

DE LO MOLECULAR A LO SIMBÓLICO

FROM THE MOLECULAR TO THE SYMBOLIC

J.M. Farré
Editor Jefe

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:3-6.
3

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Y PSIQUIATRÍA 3 / AÑO 2017
OCTUBRE • NOVIEMBRE •DICIEMBRE

De lo molecular a lo simbólico Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:3-6. J.M. Farré

Nos hemos propuesto destacar en esta Editorial un libro Todo ello ha redundado en la efectividad y la eficiencia
en castellano que desde Chile han coordinado Jorge Calderón de la colaboración interdisciplinar entre psiquiatras, psicólo-
y Matías González, psiquiatras que laboran en la Unidad de gos,especialistas médicos y enfermería, pero también en la
Psiquiatría de Enlace y Medicina Psicosomática de la presti- decisiva investigación en el marco de las Neurociencias, lo
giosa Pontificia Universidad Católica de Chile.A destacar que que suma al proceso a neurólogos, bioquímicos, neurofisio-
cuentan entre los colaboradores con profesionales europeos, logos o biólogos de acuerdo con los parámetros que facilitan
la gran mayoría españoles 1. Una monografía que sigue una el estudio integrado de la actividad cerebral. Esta casa común
tradición marcada por otros textos de prestigio publicados es la MPM, una idea más que una especialidad, pero también
en dicho idioma2-5), amén del ilustre precedente que marcó la MC y la PE, unas especialidades llenas de ideas.
la traducción del monumental “Tratado....” de Levenson6, sin Y de todo ello va el texto que comentamos. Pero no nos
obviar el peso de la obra de Lobo, a la que debemos gran engañemos: no es un libro más que añadir a la larga lista
parte de nuestras inquietudes y conocimientos7,8. de publicaciones especializadas; estamos ante un ejemplo
La Medicina Psicosomática (MPM) está en un proceso diáfano de cómo la sencillez y la profundidad, cuando se
de evolución permanente. Desde la acuñación del término unen en ciencia,dan como respuesta la construcción de unos
por Félix Deutch en 1922 hemos recorrido un largo camino: papeles elegantes, sabios y fundamentalmente útiles.Porque
el modelo corticovisceral de Bykov9 introducido en España Calderón y González apuestan sobretodo por la utilización
por Colodrón10,11,claramente basado en el condicionamiento de los conocimientos vertidos en sus 390 páginas, por el
pavloviano, con experimentos rigurosos que mostraban la uso práctico que los lectores potenciales puedan revertir en
interacción entre cerebro-periferia y ambiente externo, fue su práctica clínica, sin obviar que la exactitud de los datos
esencial para comprender la unidad orgánica con un córtex permitan estimular plausibles investigaciones y proveer de
que analiza y sintetiza; sirvió para empezar a comprender artilugios docentes.
los mecanismos neuroquímicos por los que discurrían los La estructura del libro es de una gran precisión: todos
caminos patológicos, pero también cómo reactivo ante el los capítulos se inician con los puntos clave a debatir y acla-
dualismo qe presuponía el término “psicosomático “.Casi en rar, están dotados de una excelente iconografía y permiten
paralelo, Von Bertalanffy, propuso el constructo de la Teoría conclusiones que ordenan perfectamente la información Así,
General de Sistemas12 en el que definió el organismo como el dedicado a la psicofarmacología define con diligencia la
un sistema abierto, jerarquizado en niveles de complejidad correlación necesaria entre diversos pasos anamnésicos
variable,que intercambia materia, energía e información con que orientan la prescripción farmacológica y las condicio-
el marco ambiental, para transformarse constantemente. El nes - diana para la dosificación y formulación “juiciosas”
mantenimiento del orden sistémico es considerado como Estrategias para el manejo de reacciones adversas, perfiles
dependiente de la información que circula por él para que farmacocinéticos clasificados por fármacos y comentarios
cada elemento sepa a que atenerse en relación con los de- sobre interacciones con modelos de titulación son ejemplares
más y con el conjunto del sistema.Un marco conceptual que en claridad propositiva. El autor-Ricardo Correa,coordinador
ha hecho posible el desarrollo exponencial de la investigación del Servicio de Psiquiatría de la Clínica Santa María De Santia-
biológica en la génesis y desarrollo de las conductas adap- go de Chile- es un sensacional docente y perfila aún más su
tativas.Todo, hasta que Engel y Lipowsky nos regalaron la magnifica aportación con el abordaje de cuatro situaciones
Medicina Conductual (MC) y la Psiquiatría de Enlace (PE). clínicas especiales de especial interés :la suicidalidad,la agi-
Hasta hoy,la MC ha puesto en marcha nuevas aplicaciones tación en pacientes con componente respiratorio,la astenia
cognitivo- conductuales para el tratamiento integrado de las secundaria a enfermedades oncológicas y el dolor crónico .
diversas patologías médicas, basándose en los elementos Nada nos es escatimado: justo está lo que nos secuestran
conductuales que subyacen en cualquier respuesta somá- tantos supuestos manuales prácticos: la titulación fármaco
tica.A su vez, la PE ha multiplicado su actividad asistencial y a fármaco,los más recomendados, los que han demostrado
de investigación, dada la elevada comorbilidad psiquiátrica mayor evidencia y las precauciones que debemos considerar.
de los trastornos médicos y quirúrgicos13 hasta convertirse Con un arranque tan luminoso no se lo pone fácil al ca-
en una auténtica especialidad. pítulo de Psicología de la Salud que, a nuestro modo de

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De lo molecular a lo simbólico Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:3-6. J.M. Farré

ver, adolece de exceso de síntesis y no tiene en cuenta las en los programas de enlace; el capítulo del británico Mitchell
nuevas posibilidades de tercera generación que han demos- responde con brillantez a las expectativa.
trado eficacia, como el mindfulness o las metacognitivas, La perinatalidad, y concretamente la depresión, es abor-
entre otras Las autoras muestran exceso de displicencia al dada por el experimentado equipo del Clínico de Barcelona
limitarse a enumerar las técnicas sin entrar en ningún tipo que lidera Lluïsa García - Esteve, a quién debemos la vali-
de detalles, lo cual no obvia que dan claves para que el,po- dación española del imprescindible EPDS. Excelente y más
tencial lector se estimule en buscar bibliografía ampliatoria. que suficiente revisión, en la que nada sobra, pero con una
Muy bien resuelto el capítulo de riesgo suicida por parte de resolución demasiado rápida de los tratamientos : notamos
Catalán e Inzunza, de la Pontificia, dos mujeres psiquiatras a faltar una tabla de riesgo- beneficio y la opinión sobre otras
que nos guían con lucidez por los diversos pasos del manejo opciones que no sean los ISRS o los triciclicos. Interesante la
y la prevención aportación psicosocial y la apuesta decidida sobre el enfoque
Franco y de Pablo, dos veteranos en el manejo del deli- multidisciplinar en los trastornos gastrointestinales ( Aman-
rium nos proponen desde la Universidad de Tarragona, algo- da Rodríguez), aunque expresamos nuestras dudas sobre
ritmos, mediciones y perspectivas que son proseguidos por el la pretendida eficacia de la terapia psicodinámica .Revision
propio González y su colaboradora Marcela Carrasco, con la intachable y casi excelsa del neuroenlace por parte de este
concreción de medidas en los factores de riesgo en el cuadro, gran “connaisseur” que es Luis Pintor, cordinador de la Unidad
tanto no farmacológicas (fundamentalmente de organización de Psiquiatría de Enlace del Clínico de Barcelona.
conductual), como el conocimiento preciso de los factores Lupus (Calderón y Massardo) y fibromialgia (Weiss) son
de riesgo,incluidos los diversos fármacos. La exactitud de los prolegómenos algo sintéticos de un sensacional capítulo
consejos marca la terapia farmacológica. No por exhaustiva, dedicado a la psicodermatologia que construyen Constan-
que lo es, deja de ser certera la aportación germano- chilena za Canneo y Sofía Ihle, del equipo Pontificio. Está todo pero
(Schröeder y Toro) dedicada a los Trastornos cognitivos que destaca la capacidad de “síntesis exhaustiva” (/permítaseme
podemos diagnosticar con la exactitud necesaria, gracias a el parafraseo) en la exposición de los tratamientos. Gran
las propuestas,tanto neurocognitivas como según sospecha satisfacción con el capítulo dedicado a la EPOC ( un tema
de causa, como de imágen. emergente en PE) en el que Repetto,González y Cortés nos
Lo que viene luego sigue a la perfección la tónica del ofrecen una bienvenida revisión de los diversos factores
libro: depresión, ansiedad, psicosis, los siempre imposibles psicosociales, entre los cuales los imprescindibles autoe-
trastornos somatomorfos a los que Caneo y Accatino disec- ficacia y autogestión. Si de algo adolece este y otros libros
cionan con tanto talento que casi los disgregan en un nicho de factura semejante, es de no abordar con conocimiento y
de facilidad Admirable capítulo donde no faltan incluso las convicción este tipo de modelos que clarifican la situación
perlas para el manejo o la necesaria atención de los cambios y permiten una mejor comprensión y abordaje - combinado
DSM5. Una mayor concreción en los abordajes específicos y o no - terapéutico más específico de unas simbiosis nada
las asociaciones psicofarmacos-TCC se hubiera agradecido simples como las que nos enfrentamos. Algo parecido po-
pero no empañan la bondad del escrito. Correcta aportación demos decir de las dimensiones de la personalidad, con es-
de Marcela Babbul y col. en Adicción, aunque alguna men- casísimas investigaciones en el panorama psicosomático y
ción a otras drogas y a las adicciones comportamentales la enlacista. Y no hablemos ya de correlaciones con constructos
hubiéramos agradecido; suponemos que el espacio con el disposicionales, como el mismo de la auto aceptación, algo
que contaban no se lo ha permitido. prácticamente inexistente.
Los diversos cuadros con los que se establecen progra- Lo dicho no empaña la calidad de este libro - si lo dudára-
mas de Enlace ocupan el resto del manual. Y lo hacen con mos no le hubiéramos dedicado una Editorial- que concluye
concreción plenamente satisfactoria: no faltan los impres- con dos capítulos dedicados al SIDA (Toro y Ceballos), este
cindibles factores psicosocialesy/ o de personalidad en la con una imprescindible tabla de interacciones entre terapias
cardiología (Calderón), aunque hubiéramos agradecido un retro vírales y psicofarmacos; y a la olvidada PE en niños y
apunte sobre la estructura del programa. Todos sabemos adolescentes cada vez más necesaria, por el impacto emo-
que la oncología es la especialidad que mayor atención recibe cional de la hospitalización,pero también por la correlación

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De lo molecular a lo simbólico Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:3-6. J.M. Farré

con patologías psiquiátricas con comorbilidad médica. Su- BIBLIOGRAFÍA


gerente final en el que vuelve a intervenir con acierto Carla 1. Calderón J, González M. (2016) Psiquiatría de Enlace y Medicina Psicoso-
Inzunza. mática. Ed. Mediterráneo. Santiago de Chile.

Gabriela Mistral (1887-1957) la primera Nobel chilena 2. Valdés M. (2000) Psicbiologia de los síntomas psicosomáticos.Ed. Masson.
Barcelona.
decía que la experiencia era un billete de lotería comprado
3. Ruiz Doblado S. Psiquiatría de Enlace: la otra mitad de la medicina Ed. Aran.
después del sorteo, lo que le hacía dudar de ella . No hubiese Barcelona.
sido tan incrédula si hubiese conocido la labor de los com- 4. Gómez Reino I. (2008) Aspectos psiquiátricos y psicológicos de los pacientes
patriotas que han plasmado precisamente una experiencia médico- quirúrgicos. Fundación Cabaleiro Goás. Ourense.
que no se basa en la suerte sino en un trabajo concienzudo 5. Valdés M. (2016) El Estrés. Desde la biología hasta la Clínica. Ed. Siglantana.
Barcelona.
pero también con las dosis de curiosidad y atrevimiento que
6. Levenson JL. (2006) Tratado de Medicina Psicosomática. Ed. Ares Médica.
son propias de cualquier científico. …Una consecuencia es
Barcelona.
este libro que marca un hito en nuestro ámbito porque sus
7. Lobo A, Saz P, Sarasola A, Bulbena A, de Pablo J, Farré JM, et al. Spanish
autores han hecho suyos la combinación de acción y sueños Perspective to enlarge a Small Speciality:The National Research Network for
necesaria para extraer de la experiencia el mayor tesoro de Liaison Psychiatry and Psychosomatics. Psychosomatics 2007;48(1):46-53.
vida, como lo es conseguir descifrar cual es el marco teórico 8. Lobo A, (2017). The contribution of epidemiology to the field of Psychoso-
matic Psychiatry . Spetial Lecture Congreso EAPM . Barcelona.
en el que se mueven los procesos que identifican el sufri-
9. Bykov KM, Kurtsin IT. (1968) Patología Córticovisceral. Ed. Atlante. Madrid.
miento humano a fin de aliviarlo. En ello estamos.
10. Colodrón A. (1966). La Medicina Córticovisceral.Ed Península.Barcelona.
11. Colodrón A, (1969). La acción humana. Ed. Península.Barcelona.
12. Von Bertalanffy L. (1968) La Teoría Generai de Sistemas.Fondo de Cultura
Económica. México.
13. Valdés M, de Pablo J, Campos R,Farré JM, Girón M. et al. El proyecto multi-
nacional europeo y multicéntrico español de mejora de calidad asistencial
en Psiquiatría de Enlace en el Hospital General:el perfil clínico en España.
Medicina Clínica 2000;115(18):690-694.

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ARTÍCULO ORIGINAL
ORIGINAL ARTICLE

Recibido: 22/05/2017. Aceptado: 11/07/2017

PERSONALIDAD Y PERCEPCIÓN
DE DOLOR EN FIBROMIALGIA:
UN ESTUDIO PILOTO DE CASOS Y CONTROLES

PERSONALITY TRAITS AND PERCEPTION


OF PAIN IN FIBROMYALGIA:
A PILOT STUDY OF CASES AND CONTROLS
B. Hermoso1, A. García-Fontanals2, S. García-Blanco3, Poca3, F. García-Fructuoso3, T. Gutiérrez4,
M. López-Ruiz4, M. Gomà-i-Freixanet4, R. Raich4, J. Deus1,4
1
Servicio de Psicología Médica. Centro de Ginecología y Obstetricia, CGO-Psicologia, Mataró, Barcelona. 2Benito Menni Complex Assis-
tencial en Salut Mental, Sant Boi de Llobregat, España. 3Servicio de Reumatología. Instituto Ferran de Reunatología (IFR). 4Departamento
de Psicología Clínica y de la Salud. Facultad de Psicología. Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
Correspondencia: Dr. Joan Deus, Departamento de Psicología Clínica y de la Salud. Facultad de Psicología. Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
Edificio B. 08193 Bellaterra. Barcelona.

Declaración de Conflicto de intereses: Los autores responsables del presente manuscrito, declaran que este artículo ni se ha enviado ni publicado
anteriormente en ninguna otra revista científica ni nacional ni internacional, y que no se objetiva ningún aspecto que pudiese ser conflicto de interés.

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:7-17.

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Personalidad y percepción de dolor en fibromialgia... Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)2:7-17. B. Hermoso y cols.

RESUMEN
Mediante el presente estudio se pretende evaluar la influencia de los rasgos de personalidad en el grado y
tipología de dolor referido. Muestra: 80 participantes, todas ellas mujeres de edades comprendidas entre los 31
y los 63 años de edad, divididas en dos grupos, grupo Fibromialgia (FM) y grupo control. Material y método: Se
administró el Cuestionario de Impacto de la Fibromialgia (FIQ) para evaluar el impacto de la FM, el Inventario
de Temperamento y Carácter - Revisado de Cloninger (TCI-R) para evaluar las dimensiones de la personalidad
y el Cuestionario del Dolor de McGill (MPQ) para la evaluación de la percepción de dolor inducido mecánica-
mente. Resultados: Se observan diferencias entre el grupo FM y el grupo control en la valoración del dolor y en
las dimensiones Búsqueda de novedad (BN), Evitación del daño (ED) y Autodirección (AD). Además, se constata
que las dimensiones de la personalidad ED (p = 0,00) y Cooperación (COOP) (p = 0,12) correlacionan significa-
tivamente con la percepción de dolor en el grupo FM. CONCLUSIONES. Se objetiva que existen diferencias en
los rasgos de personalidad y percepción de dolor inducido entre FM y el grupo control y, aunque no explica el
total de la varianza, se halla que los rasgos de personalidad ED y COOP permiten predecir el nivel y tipología
de dolor referido con una varianza total explicada del 21%.

Palabras clave: Fibromialgia, Rasgos de personalidad, Percepción de dolor, TCI-R, MPQ.

ABSTRACT
Through the present study is intended to evaluate the influence of personality traits on the level and type
of reported. Sample: 80 participants, all women aged between 31 and 63 years old, divided into two groups,
Fibromyalgia group (FM) and control group. Material and method: The Fibromyalgia Questionnaire Impact (FIQ)
was administered to assess the impact of Fibromyalgia, Temperament-Character Inventory Revised (TCI-R)
to assess personality dimensions and McGill Pain Questionnaire (MPQ) for the evaluation for assessment and
perception of mechanically induced pain. Results: Are observed some differences between the FM group and
the control group in the assessment of pain and dimensions Novelty Seeking (NS), Harm Avoidance (HA) and
Self-Direction (SD). In addition, it is found that dimensions HA (p = 0.00) and Cooperation (COOP) (p = 0.12)
correlate significantly with the perception of pain in the FM group. CONCLUSIONS. It is found that there are di-
fferences in personality traits and perception of pain between the FM group and the control group. In the same
way, although does not explain all of the variance, it is found that personality traits HA and COOP predict the level
and type of pain reported with a percentage of explained total variance of a 21%.

Keywords: Fibromyalgia, personality traits, perception of pain, TCI-R, MPQ.

INTRODUCCIÓN de forma continua, en los cuatro cuadrantes corporales. El


La Fibromialgia (FM) es un problema de salud reconocido dolor se intensifica y localiza mediante presión digital, en
como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud al menos, 11 de los 18 puntos sensibles que corresponden
(OMS) desde 1992 (ICD-10: código M79.0). Este síndrome a las regiones corporales con un umbral más bajo al dolor
se caracteriza por la presencia de dolor músculo-esquelé- (Wolfe, Smythe, Yunus, Bennet, Bombardier y Goldenberg,
tico generalizado y diagnosticado a través de unos criterios 1990; Wolfe et al., 2010). Constituye uno de los trastornos de
clínicos establecidos (Wolfe et al., 2010). La FM se define por dolor crónico generalizado más frecuentes en la población,
una historia de dolor difuso de más de 3 meses de evolución, así como uno de los problemas sanitarios más actuales en

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los países en desarrollo. Provoca dolores que pueden llegar manera en la que se percibe el dolor. Se puede entender por
a ser invalidantes y afecta a la esfera biológica y social de los rasgos de personalidad aquellos “patrones de conducta pro-
pacientes (Collado et al., 2002, 2014). El dolor músculo-es- fundamente arraigados, que incluyen el modo de relacionarse,
quelético es el síntoma principal, aunque no es el único y los percibir y pensar sobre el medio ambiente y sobre nosotros
pacientes con FM suelen mostrar otra sintomatología como mismos, que se exhiben en una amplia gama de contextos
alteraciones del sueño, fatiga, cefaleas, parestesias, rigidez, sociales y personales” (American Psychiatric Association).
depresión, ansiedad, quejas subjetivas de déficits atencio- Estos patrones de conducta pertenecerían a la dimensión
nales y problemas de memoria (Lledó, Pastor y López-Roig, cognitivo-evaluativa de la teoría de la compuerta (Melzack
2012; García-Blanco et al., 2013). Los factores psicológicos y Wall, 1965). Según ésta, la dimensión directamente afec-
(Yunus, Ahles, Aldag y Masi, 1991; García-Fontanals et al., tada por los rasgos de personalidad modificaría las otras
2016), actualmente, tienen un papel modulador de la res- dos dimensiones de la experiencia dolorosa: la dimensión
puesta terapéutica y percepción del dolor. sensorial-discriminativa y la motivacional-afectiva. Por ello,
La prevalencia estimada de la FM, en la población general, se podría asegurar que la personalidad parece tener un peso
se sitúa entre el 2 y el 5% (Wolfe et al., 1990; Wolfe, Brähler, importante sobre la conducta. Así, se les puede considerar
Hinz y Häuser, 2013; Sumpton y Moulin, 2014). España se como factores moduladores de la adaptación al dolor de las
encuentra dentro de los porcentajes de prevalencia más altos personas con FM y/o dolor crónico. Autores como Blumer y
de Europa (2-4%) (Mas, Valverde y Ribas, 2008; Rivera et al.; Heilbronn (1981) o Engel (1959), identificaron posibles pa-
2006), frente a Francia e Italia que poseen los porcentajes trones o perfiles de personalidad característicos en perso-
más bajos (1%) (Branco, Bannwarth, Failde, Abelló, Blotman nas con FM o dolor crónico. Éstos proponían unos rasgos
y Spaeth, 2010). Según el sexo se observan grandes diferen- comunes, a los cuales denominaban personalidad propensa
cias, siendo la prevalencia de un 4,2% para el sexo femenino al dolor, caracterizada por metas muy altas, perfeccionismo,
y 0,2% para el sexo masculino (Valverde et al., 2000) y con altruismo, falta de asertividad, alexitimia, frustración, inca-
una relación de 9:1 a favor del sexo femenino (Staud, 2009). pacidad para relajarse y disfrutar de la vida, negación de los
Puede afectar a la población infantil y juvenil, aunque en ellos conflictos emocionales e interpersonales, baja autoestima y
la mayor prevalencia en la población femenina no es tan necesidad excesiva de reconocimiento y aceptación social.
acusada (Reid, Lang y McGrath, 1997). En cuanto a la edad, Pese a estos primeros resultados, no se han encontrado
el pico de prevalencia se sitúa entre los 30-55 años, siendo evidencias que permitan demostrar de manera concluyente
infrecuente antes de los 40 años y en personas que superan la existencia de este “tipo de personalidad” solo en la FM
los 80 años de edad (Sumpton y Moulin, 2014). (Aghari y Nicolas, 1999), considerándose el término de perso-
Su etiología es aún desconocida, si bien se postulan cau- nalidad del dolor crónico (Gustin, 2011). Ante la incapacidad
sas relacionadas con la modulación central y/o periférica del de evidenciar la función causal de los rasgos de personali-
dolor, caracterizadas por un menor umbral en la detección de dad sobre el dolor, surge la hipótesis de que los factores de
estímulos potencialmente dolorosos y un estado de sensibili- personalidad pueden influir sobre la capacidad de ajuste al
zación e hiper-excitabilidad central (Russell, Vaeroy, Javoers y dolor, de manera que las personas que presentan rasgos de
Nyberg, 1992; Deus et al., 2006; MSPSI, 2011), con trastornos personalidad más pesimistas, ansiosos, inestables emocio-
del sueño (Moldofsky, 1989; Sumpton y Moulin, 2014) y alte- nalmente, excesivamente preocupados e introvertidos, pue-
raciones neuroendocrinas (Adler, Kinsley, Hurwitz, Mossey y den percibir como más intenso el dolor que sienten (Esteve
Goldenberg, 1999; Sumpton y Moulin, 2014). Hay un consenso y Ramírez, 2003; Torres et al., 2013; García-Fontanals et al.,
en que las causas neurológicas explican su etiología centrada 2016). Estudios recientes muestran una posible asociación
en tres teorías: hiperactividad de la matriz neural del dolor, fallo de la FM con patrones de comportamientos (Laire, Rodríguez
en el sistema endógeno del dolor y alteración en el procesa- y Rodríguez, 2012), donde los resultados muestran puntua-
miento sensorial central (Deus, 2009; Pujol et al., 2014; Walitt, ciones significativamente altas en 4 de los 16 factores de
Ceko, Garcely y Gracely, 2016; Deus, Soler, Pelayo y Vidal, 2017). personalidad: Dominancia, Sensibilidad, Autosuficiencia y
Diferentes estudios proponen que la personalidad puede Tensión. Finalmente, otros estudios han demostrado un perfil
influir en la manifestación clínica de la FM y también en la de personalidad en FM caracterizado por elevada ansiedad

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y baja impulsividad y autodirección (García-Fontanals et al., TABLA I. Estadísticos descriptivos de las variables so-
2014). Algunos autores hacen alusión, también, a un patrón ciodemográficas.
de conducta Tipo F como un complejo “emoción-acción” FM (n = 42) Control (n = 38)
caracterizado por un estado de generalizada activación en
M DE M DE
un intento de superadaptarse a un entorno carente de retro-
alimentación (Mingote y Arigita, 2000). Edad 47,10 7,98 44,37 6,30
En este contexto, se plantea evaluar la influencia de los Años de estudio 14 4,76 15,05 4,56
rasgos de personalidad en el nivel de dolor referido al ser Nivel de estudios 3,28 0,79 2,84 0,97
inducido mecánicamente. Específicamente, relacionar los Primarios 5 2
niveles de dolor referido con las puntuaciones obtenidas en
Secundarios 10 9
las distintas dimensiones de la personalidad según modelo
Bachillerato 5 5
psicobiológico de Cloninger y establecer la posible capacidad
Formación profesional 8 6
predictiva de los rasgos de personalidad sobre la tipología de
Universitarios 14 16
dolor y su intensidad. Se presupone que la Evitación del daño
M: media; DE: desviación estándar; MPQ: Cuestionario de dolor
(dimensión temperamental) y la Autodirección (dimensión de McGill; PRI: Intensidad de dolor presente; EVA: escala visual
caracterial) pueden predecir la percepción de dolor informa- analógica. p < 0,05.
da.

se pudieran desprender síntomas a nivel orgánico que gene-


MÉTODO raran dolor de manera continuada y ausencia de historia de
alteración neurológica y psicopatológica conocida. Se instó a
PARTICIPANTES todos los participantes a firmar el consentimiento informado
La muestra es de 42 participantes, en su totalidad muje- por escrito, aceptando las condiciones del estudio, el cual fue
res diagnosticadas de FM con edades comprendidas entre aprobado por el comité ético local en concomitancia con la
los 32 y los 63 años de edad (M=47.10; DE=7.98), procedentes Declaración de Helsinki. Como se observa en la tabla I, no hay
del Institut Ferrán de Reumatología (IFR). Con el objetivo de diferencias significativas entre ambos grupos en referencia a
regular la fiabilidad y la validez de la investigación, se esta- la edad (t(78) = -1,685; p = 0,096) o el nivel de escolarización
blecieron como criterios de exclusión posibles causas de FM (t(78) =1.008; p = 0,317).
secundaria o asociada a otras enfermedades reumatológi- En cuanto a las características de la muestra de FM, se
cas, Síndrome de Fatiga Crónica (SFC), historia de trastorno observa que la media de puntos sensibles se establece en
psicótico o abuso de sustancias, diagnóstico de trastorno 15,9 (+ 1,97) y el tiempo medio en meses, desde el diag-
de la personalidad del cluster A o B e historia de dolor neu- nóstico de la enfermedad, es de 85,9 (+55,3). Los síntomas
ropático. El total de la muestra de pacientes diagnosticadas referidos son cansancio al levantarse (88,1%), sueño poco
de FM cumplieron los criterios de inclusión, en tanto que reparador (85,7%), sueño fragmentado (71,4%), fatiga general
cumplían los criterios diagnósticos de la American College of (97,6%), rigidez matutina (88,1%), rigidez post-reposo (69%),
Rheumatology (ACR) tipificados en el manual de Clasificación tumefacción subjetiva (85,7%), parestesias (90,5%), cefaleas
Internacional de Enfermedades (CIE-10) con el código M79.0 (78,6%), síntomas de síndrome de colon irritable (50%), sinto-
y por la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor matología de alteración afectiva subjetiva (71,4%), síntomas
(IASP) clasificada con el código X33.X8a. El grupo control de ansiedad subjetivos (81%), dificultades subjetivas de aten-
se compuso de una muestra de 38 mujeres voluntarias sa- ción y concentración (83,3%) y quejas subjetivas de pérdida
nas, no consanguíneas y usuarias de un centro de salud, con de memoria (88,1%). Durante el protocolo de exploración, el
edades comprendidas entre los 31 y los 62 años (M = 44,37; 85,7% de las participantes con FM recibe tratamiento farma-
DE = 6,30). Como criterios de inclusión se establecieron la cológico, el 76,2% antidepresivos, el 50% ansiolíticos, el 14,3%
ausencia de historia clínica de afección reumatológica, au- hipnóticos, el 23,8% anticomiciales, el 69% antiinflamatorios
sencia de algún tipo de dolencia física o funcional, de la que y el 54,8% antiálgicos (Tabla II).

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TABLA II. Características clínicas de los pacientes con Fibromialgia.

Características clínicas Descriptivo Características clínicas Descriptivo


Puntos sensibles (M+ DE) 15,90 (+1,97) Quejas subjetivas de pérdida de memoria
37 (88,1)
(n, %)
Tiempo transcurrido en meses desde el
85,95 (+55,39) Farmacoterapia actual (n, %) 36 (85,7)
diagnóstico(M+ DE)
Antidepresivos 32 (76,2)
Meses con dolor generalizado(M+ DE) 60,57 (+54,90)
Ansiolíticos 21 (50)
Dolor en lado izquierdo del cuerpo (%) 92,9 Hipnóticos 6 (14,3)
Dolor en lado derecho del cuerpo (%) 95,2 Anticomiciales 10 (23,8)
Dolor por encima de la cintura (%) 95,2 Antiinflamatorios 29 (69)
Dolor por debajo de la cintura (%) 85,7 Antiálgicos
Dolor en el esqueleto axial (%) 95,2 Cuestionario de dolor McGill tras dolor
23 (54,8)
Dolor (EVA) (0-10) de la enfermedad(M+ DE) 7 (+1,5) inducido(M+ DE)
Fatiga (EVA) (0-10) de la enfermedad(M+ DE) 7,6 (+1,5) IVD-T 41,93 (10,01)

Episodios de baja laboral debido a FM(M+ DE) 4,06 (+7,13) IVD-S 25,36 (6,59)

Episodio más largo baja laboral porla FM IVD-A 5,52 (1,86)


22,40 (+44,04)
(meses)(M+ DE) IVD-V 3,52 (0,97)
Número síntomas clínicos acompañantes IVD-M 7,52 (2,45)
11,26 (+2,49)
(0-14)(M+ DE) NAE 15,62 (2,70)
Cansancio al levantarse (n, %) 37 (88,1) EVA 7,11 (1,48)
Sueño poco reparador (n, %) 36 (85,7)
Cuestionario de Impacto de la FM(M+ DE)
Sueño fragmentado (n, %) 30 (71,4)
Fatiga general (n, %) 41 (97,6) FIQ Total 66,50 (16,07)
Rigidez matutinal (n,%) 37 (88,1) Función física 5,06 (1,94)
Rigidez post-reposo (n, %) 26 (69) Días sentido mal 5,5 (1,80)
Tumefacción subjetiva (n, %) 36 (85,7) Ausencia laboral 1 (1,60)
Parestesias (n, %) 38 (90,5) Interferencia dolor en el trabajo 6,59 (2,09)
Cefaleas (n, %) 33 (78,6) Dolor 7,07 (2,05)
Síntomas de síndrome de colón irritable (n, %) 21 (50) Fatiga 7,88 (1,93)
Síntomas de alteración afectiva subjetiva (n, %) 30 (71,4) Cansancio matutino 7,81 (2,23)
Síntoma de ansiedad subjetivos (n, %) 34 (81) Rigidez 7,07 (2,29)
Dificultades de atención y concentración Ansiedad 6,88 (2,13)
35 (83,3)
subjetivas (n, %) Depresión 5,79 (2,85)
Abreviaciones.M: media; DE:desviación estándar; FIQ: Cuestionario de Impacto de la Fibromialgia; MPQ: Cuestionario de
dolor del McGill; IVD-T: Índice de Valoración del Dolor-Total; IVD-S: Índice de Valoración del Dolor-Sensorial; IVD-E: Índice de
Valoración del Dolor-Emocional; IVD-V: Índice de del Dolor-Visceral; IVD-M: Índice de Dolor-Miscelánea; NAE: Números de
adjetivos elegidos; IDP: Intensidad dolor presente; EVA: escala visual analógica.

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INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN informado a cada participante y se aseguró la confidencia-


Se empleó el Cuestionario de Impacto de la Fibromial- lidad de los datos. Tras obtener la autorización, se citó a los
gia (FIQ; Burckhardt, Clark y Bennet, 1991), administrando la participantes en el Servicio de Resonancia Magnética del
adaptación española (Monterde, Salvat, Montull y Fernán- Hospital del Mar-Parc Salut Mar para proceder a la evaluación
dez-Ballart, 2004). Instrumento psicométrico muy empleado con una duración aproximada de 90 minutos, asegurando la
para conocer la repercusión que tienen los síntomas de FM comprensión de las preguntas y la correcta cumplimentación
sobre el paciente y como interfieren en su vida en general. de los instrumentos. El dolor se valoró subjetivamente tras
Conformado por un total de 10 ítems, valorados según una ser inducido mecánicamente mediante presión en la parte
escala tipo Likert (0-10) que evalúan el impacto de la enfer- central de la uña del dedo pulgar de la mano dominante a
medad en la capacidad física del sujeto, la interferencia en su 4 kg/cm2 de peso según el procedimiento descrito en un
trabajo habitual, así como aspectos subjetivos relacionados estudio previo (Deus et al., 2006).
con el cuadro clínico de la FM (rigidez, fatiga y cansancio).
La puntuación total de la prueba se encuentra entre 0-100, ANÁLISIS DE DATOS
donde 0 representa una capacidad funcional y calidad de vida Para el tratamiento de datos, se realizó un análisis de
más elevadas y 100 deterioro máximo. El valor del coeficiente medias para describir la incidencia de cada una de las varia-
de correlación intraclase del S-FIQ total es de 0.81. bles estudiadas. Además, se implementaron distintos análisis
Para evaluar las diferencias en función de los rasgos de con la t-Student para estudiar las diferencias entre grupos
personalidad, se empleó el Inventario de Temperamento y para las dimensiones de personalidad y el nivel referido de
Carácter-Revisado de Cloninger (TCI-R) (Cloninger y cols., dolor, mecánicamente inducido, con el MPQ. Se efectuó un
1994), administrando la versión española (Gutiérrez-Zotes análisis de correlación de Pearson entre las dimensiones del
et al., 2004). Este instrumento está compuesto de 240 ítems, TCI-R y las dimensiones del MPQ, estableciendo un nivel de
valorados en un escala tipo Likert de 5 puntos, de los cuales 5 significación estadística de p < 0,05. Se ha efectuado un aná-
conforman la escala de validez, 35 miden búsqueda de sen- lisis de regresión lineal, entre las dimensiones del TCI-R y la
saciones, 33 ítems proporcionan información relativa a evita- puntuación total del MPQ, para observar el peso predictor de
ción de daño, 30 ítems para dependencia de recompensa, 35 las variables de estudio sobre la percepción subjetiva de dolor
de persistencia, 40 sobre autodirección, 36 cooperación y 26 inducido mecánicamente. Los análisis fueron realizados con
ítems para autotrascendencia. Dichas escalas permiten eva- la versión 23.0 para Windows del paquete estadístico SPSS.
luar cuatro dimensiones temperamentales y tres de carácter.
Tres de las cuatro dimensiones de temperamento permiten
definir 8 perfiles de personalidad. La adaptación española RESULTADOS
del TCI-R muestra una consistencia interna satisfactoria en En el ámbito de percepción de dolor, los participantes
todas las dimensiones (α de Cronbach superior a 0.77). refieren puntuaciones diferentes en función del grupo al que
Para la evaluación de aspectos cuantitativos y cualita- pertenecen. Los participantes con diagnóstico de FM son los
tivos del dolor se administró el Cuestionario del Dolor de que obtienen puntuaciones más altas, lo que indica mayor
McGill (Melzack, 1975) en su adaptación española (Lázaro intensidad de dolor y síntomas asociados (Tabla III).
et al., 2001). Cuestionario autoadministrado que evalúa el Respecto a las dimensiones de personalidad, existen
umbral o intensidad del dolor mediante 64 descriptores de diferencias en las variables Búsqueda de Novedad (BN) (t =
dolor organizados en 19 subclases. La puntuaciones de cada -3,12; p = 0,03), Evitación del daño (ED) (t = - 8.752; p = 0,00)
clase se agrupan, obteniendo puntuaciones en 4 subescalas: y Autodirección (AD) (t = 2,71; p = 0,02). Para estas variables
sensorial, emocional, visceral y miscelánea. La consistencia se obtienen magnitudes de tamaño del efecto grande. Con-
ordinal muestra resultados satisfactorios (rs> 0,9). cretamente, se encuentra que el grupo FM puntúa más alto
en ED frente al grupo control que puntúa más alto en factores
PROCEDIMIENTO como BN y AD (Tabla III).
El presente estudio transversal tiene un diseño corre- No existen relaciones significativas entre las distintas
lacional. Se solicitó a cada participante un consentimiento dimensiones del factor BN y cada una de las dimensiones

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TABLA III. Comparación de medias entre el grupo control y el grupo FM para el MPQ y las dimensiones del TCI-R.
FM Control
M DE M DE t p Cohen δ’
MPQ
PRI total MPQ 47,49 21,73 36,45 18,71 -2,43 0,18 0,59
Nº palabras MPQ-SV 18,70 8,04 14,18 6,417 -2,76 0,24 0,62
Intensidad del dolor MPQ-SV 3,28 0,79 2,84 0,97 -2,22 0,37 0,18
EVA MPQ 7,94 1,35 7,71 1,42 -0,76 0,52 0,16
TCI-R
Búsqueda de novedades 33,98 21,83 50,63 26,08 3,12 0,03 0,69
Evitación del daño 87,12 12,88 43,34 29,81 -8,75 0,00 0,90
Dependencia de la recompensa 53,86 27,91 47,95 24,36 -1,00 0,29
Persistencia 40,23 28,76 52,26 26,34 1,95 0,51
Autodirección 45,23 29,75 62,29 26,33 2,71 0,02 0,60
Cooperación 52,53 28,05 57,76 22,21 0,93 0,15
Autotrascendencia 48,53 29,20 48,82 26,58 0,04 0,45
M: media; DE: desviación estándar; MPQ: Cuestionario de dolor de McGill; PRI: Intensidad de dolor presente; EVA: escala visual
analógica. p < 0,05.

del MPQ para ninguno de los dos grupos (Tabla IV). Refe- (Determinación, Autoeficacia y Autoaceptación) y también
rente a la dimensión EV, ésta correlaciona con las distintas con Hábitos congruentes (Tabla VI).
medidas del MPQ para el grupo de FM, no siendo así para Respecto a la capacidad predictiva de los rasgos de per-
el grupo control. Concretamente, se hallan correlaciones de sonalidad sobre la intensidad de dolor subjetivo percibido
intensidad moderada para la EVA e Índice intensidad del dolor inducido mecánicamente, se constata que del análisis de
inducido mecánicamente. Entre las distintas dimensiones regresión solamente la dimensión de temperamento ED y
de este factor, se observan correlaciones moderadas entre la dimensión de carácter COOP permiten predecir el nivel
Ansiedad anticipatoria y el Índice de intensidad del dolor. y tipología de dolor referido inducido con un porcentaje de
También se encuentra correlación moderada inversa entre varianza total explicada del 21,10% (Tabla VII).
la dimensión Temor a lo incierto y el Índice de intensidad de
dolor. Además, la dimensión Fatigabilidad correlaciona de
manera inversa e intensidad moderada con las variables EVA DISCUSIÓN
e Índice de intensidad del dolor (Tabla V). En el presente estudio se proponía evaluar la influencia de
La dimensión de carácter AD no se correlaciona con nin- los rasgos de personalidad en el nivel de dolor subjetivo per-
guno de los distintos componentes del MPQ para el grupo cibido. Para ello, se evaluó una muestra de 80 participantes,
control. En cambio, en el grupo de FM se observa que el Índice pacientes con FM y grupo control. En la comparación de los
de intensidad del dolor mantiene correlaciones moderadas rasgos de personalidad y las características cuantitativas y
inversas con la AD y con los subrasgos Determinación, Auto- cualitativas del dolor entre ambos grupos de estudio, apa-
eficacia y Autoaceptación. De forma equivalente, la dimensión recen diferencias significativas para los aspectos medidos
Evaluación analógica del dolor mantiene correlaciones mo- por el MPQ. Se observa que los pacientes con FM muestran
deradas significativas a nivel estadístico con estas variables mayores puntuaciones en todas las variables que miden in-

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TABLA IV. Relación entre las distintas dimensiones del rasgo temperamental. Búsqueda de novedades
y el dolor informado e inducido mecánicamente.
Intensidad del dolor en EVA Índice de intensidad del dolor
p r p r
Fibromialgia
Búsqueda de novedad 0,094 0,547 -0,025 0,875
Excitabilidad exploratoria -0,076 0,626 -0,091 0,560
Impulsividad 0,276 0,073 0,126 0,422
Extravagancia -0,120 0,443 -0,146 0,351
Desorden 0,239 0,122 0,117 0,454
Control
Búsqueda de novedad -0,028 0,871 -0,041 0,805
Excitabilidad exploratoria -0,101 0,553 -0,114 0,495
Impulsividad -0,012 0,946 -0,029 0,865
Extravagancia -0,034 0,843 -0,037 0,825
Desorden 0,122 0,471 0,109 0,515
PRI: Intensidad de Dolor Presente; EVA: Escala Visual Analógica. p < 0,05.

TABLA V. Relación entre las distintas dimensiones del rasgo temperamental.


Evitación del daño y el dolor informado.
Intensidad del dolor en EVA Índice de intensidad del dolor
p r p r
Fibromialgia
Evitación del daño 0,392 0,009 0,455 0,002
Ansiedad ant. y pesimismo 0,285 0,064 0,443 0,003
Temor de lo incierto 0,269 0,081 0,391 0,010
Timidez 0,289 0,060 0,123 0,431
Fatigabilidad 0,314 0,040 0,418 0,005
Control
Evitación del daño 0,233 0,165 -0,039 0,814
Ansiedad ant. y pesimismo 0,253 0,131 -0,015 0,931
Temor de lo incierto 0,245 0,144 -0,037 0,826
Timidez 0,022 0,899 -0,099 0,554
Fatigabilidad 0,185 0,273 0,031 0,855
PRI: Intensidad de Dolor Presente; EVA: Escala Visual Analógica. Anti.: Anticipatoria. p < 0,05.

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TABLA VI. Relación entre las distintas dimensiones del raso caracterial de autodirección y el dolor informado.
Intensidad del dolor en EVA Índice de intensidad del dolor
p r p r
Fibromialgia
Autodirección -0,455 0,002 -0,443 0,003
Responsabilidad -0,180 0,247 -0,164 0,294
Determinación -0,546 0,000 -0,463 0,002
Autoeficacia -0,311 0,043 -0,394 0,009
Autoaceptación -0,304 0,048 -0,355 0,020
Hábitos congruentes -0,352 0,021 -0,281 0,068
Control
Autodirección -0,222 0,187 -0,175 0,293
Responsabilidad -0,133 0,434 -0,227 0,171
Determinación -0,165 0,328 -0,199 0,231
Autoeficacia -0,211 0,211 -0,058 0,731
Autoaceptación -0,192 0,256 -0,148 0,377
Hábitos congruentes -0,077 0,649 0,033 0,845
PPRI: Intensidad de Dolor Presente; EVA: Escala Visual Analógica. p < 0,05.

tensidad de dolor. Estos resultados podrían responder a la TABLA VII. Capacidad predictiva de las distintas
etiología causal del mismo que, pese a no existir causas dimensiones de la personalidad sobre la percepción
conocidas justificadas, se postula que podría verse afectada de la intensidad de dolor inducido en pacientes FM.
la percepción del dolor. La afectación de la modulación del Variable B t p
dolor estaría relaciona con un umbral menor en la detec-
Constante -20,64
ción de estímulos potencialmente dolorosos y un estado de
sensibilización e hiper-excitabilidad central (MSPSI, 2011; Evitación del daño 0,564 0,239 0,023
Russell, Vaeroy, Javoers y Nyberg, 1992) que explicaría las Cooperación 0,362 0,110 0,002
diferencias entre ambos grupos. R2 Ajustado = 0,211. PPRI: Intensidad de Dolor Presente; EVA:
Adicionalmente, se ha planteado analizar la correlación Escala Visual Analógica. p < 0,05.
entre las distintas dimensiones de la personalidad y el nivel
de dolor inducido informado, diferenciando entre grupos. En
este caso, se hallan correlaciones significativas entre estas una baja Autodirección, que sugiere baja capacidad de auto-
variables y las características cualitativas y cuantitativas del control. Es sabido que la intensidad del dolor está relacionada
dolor. Así, se observan altas puntuaciones en Evitación del con variables de ansiedad (Lledó, Pastor y López, 2012) y la
daño y bajas en Autodirección en la FM, como ya señalaban teoría de la compuerta. Las emociones provocarían la apertu-
la mayoría de estudios anteriores al respecto (Gencay-Can y ra de una puerta que deja paso al dolor, relacionando la escala
Can, 2011; Lundberg, Anderberg y Gerdle, 2009; García-Fonta- EVA tanto con la percepción de dolor espontáneo e inducido,
nals et al., 2016). De este modo, el perfil de personalidad en el como con la presencia de alteración afectiva, habitualmen-
dolor crónico, entre ellos la FM, vendría definido por una alta te, de tipo distímico. Es decir, emociones como depresión o
Evitación del daño, que sugiere altos niveles de ansiedad, y ansiedad aumentan la percepción del dolor (Alonso, Tirado,

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van der Hofstat, Rodríguez-Marín, 2014). También se obser- (Cooperación) mayor percepción de dolor. Se constata, pues,
va la influencia de rasgos de personalidad de la dimensión que la dimensión que permite predecir el grado de percepción
caracterial Autodirección (Determinación, Autoaceptación y subjetiva de dolor inducido es, principalmente, la Coopera-
Autoeficacia) para el grupo FM, la cual se relaciona con la ción, implicada en el mantenimiento y la exacerbación de la
probabilidad del desarrollo psicopatológico (García-Fonta- enfermedad.
nals et al., 2017). El dolor influye en todas las esferas de la La principal limitación de este estudio es el tamaño
vida (Collado et al., 2002) por tanto es esperable que existan muestral. En este sentido, no se puede hablar en términos
rasgos de la personalidad, que pese a ser estables, se vean de extrapolación de datos a una población en concreto, por lo
afectadas y éste puede ser uno de los signos de la afección, reducida y localizada de la muestra. Además, por lo reducido
repercutiendo de manera negativa sobre los mismos. del tamaño muestral, no se ha considerado la posibilidad de
En relación a la capacidad predictiva de los rasgos de la establecer límites en los niveles de afección de la población
personalidad sobre la intensidad de dolor subjetiva induci- FM que permita excluir a los participantes que presenten
da, los resultados muestran que los mejores predictores de menores síntomas o menor intensidad de dolor. Una muestra
ésta son la Evitación del daño y la Cooperación, los cuales mayor permitiría hacer subgrupos en relación a la percepción
permiten predecir el nivel y tipología de dolor referido con un de dolor. Para líneas futuras de investigación, sería necesario
porcentaje de varianza total explicada de un 21%. La dimen- partir de una muestra más amplia y controlar aspectos como
sión Evitación del Daño obedece, de algún modo, a rasgos la sintomatología asociada, niveles de dolor, auto eficacia
temperamentales (innatos) ansiosos, en tanto que la dimen- percibida y calidad de vida informada.
sión Cooperación mide aspectos del carácter (aprendidos) En conclusión, el presente estudio pretende entender
relacionados con la capacidad de adaptación. Los sujetos este problemas de salud desde otros enfoques (multica-
cooperativos se caracterizan por ser socialmente tolerantes, susales, biopsicosociales, etc.) proporcionando una mejor
útiles, compasivos y empáticos (Mateos y De la Gándara, comprensión de la FM y aportando información de utilidad
2001). Hay que remarcar que un importante porcentaje de clínica, para que desde la psicología se contribuya con un
los pacientes con FM muestran un perfil temperamental del tratamiento más eficaz a la mejora de la calidad de vida de
Cluster C tipo obsesivo-compulsivo, que no llega a ser un pacientes con FM.
trastorno de la personalidad sintomático si la dimensión ca-
rácter, que implica adaptación, es elevada (García-Fontanals
et al., 2017). Ello concuerda con el postulado de Mingote AGRADECIMIENTOS
(2000) que establece el “Patrón de conducta tipo F” para El presente manuscrito ha sido apoyado por el Plan Na-
definir este conjunto de rasgos en los pacientes con FM. cional I+D+I (PSI2014-53524-P) del Ministerio de Educación
Siguiendo estas premisas, se podría hablar de la capacidad y Ciencia de España. El Dr. Joan Deus pertenece al Grupo de
predictiva de estas dimensiones, en tanto que a mayores ni- Investigación SGR2014-1673 de l’Agència de Gestió d’Ajuts
veles de ansiedad (Evitación del Riesgo) y menor adaptación Universitaris i de Recerca de la Generalitat de Catalunya.

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ARTÍCULO ORIGINAL
ORIGINAL ARTICLE

Recibido: 24/05/2017. Aceptado: 13/10/2017

SÍNDROME DE TAKO-TSUBO: ACONTECIMIENTOS VITALES


ESTRESANTES, DIMENSIONES DE PERSONALIDAD,
Y ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO. UN ESTUDIO DESCRIPTIVO

TAKO-TSUBO SYNDROME: STRESSFUL LIFE EVENTS, PERSONALITY


DIMENSIONS, AND COPING STRATEGIES. A DESCRIPTIVE STUDY

O. Varela-Besteiro1, L. Santiago-Piñeiro2, A. Alcántara-Tadeo3, R. Bascompte-Claret4,


S. González-Sucarrats5, G. Pinillos-Francia6
1
Psicóloga Clínica, Hospital Universitario Arnau de Vilanova y Hospital Universitario de Santa Maria, Lleida-Gestió de Serveis Sanitaris
2
Psicólogo Interno Residente, Centro de Rehabilitación Psicosocial Nuestra Señora del Pilar, Zaragoza. 3Psicólogo Clínico, Hospital
Universitario Arnau de Vilanova y Hospital Universitario de Santa Maria-Gestió de Serveis Sanitaris, Lleida. 4Cardiólogo, Hospital
Universitario Arnau de Vilanova, IRBLleida, Lleida. 5Cardióloga, Hospital Universitario Arnau de Vilanova, IRBLleida, Lleida.
6
Médico Interno Residente, especialidad Cardiología, Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza.

Correspondencia: Olalla Varela Besteiro. C/ Ibarrekolanda 25 5C, 48015, Bilbao (Vizcaya). Tlf: 699137448
Correo electrónico: olalla.varela@hotmail.com

Declaración de Conflicto de intereses: Ninguno.

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RESUMEN
Introducción: En el síndrome de Tako-tsubo (STK) se ha descrito la implicación de factores de riesgo de
tipo psicosocial además de los de tipo biológico. En este estudio se describen antecedentes personales y fami-
liares, acontecimientos vitales estresantes, dimensiones de personalidad, y estrategias de afrontamiento ante
situaciones de estrés, en personas con antecedente de STK. Método: Fueron evaluados 15 pacientes adultos
mediante entrevista clínica semiestructurada, Escala de Acontecimientos Vitales de Holmes y Rahe (SRRS),
Cuestionario de Personalidad NEO-FFI de Costa y McCrae, y Cuestionario de Estrategias de Afrontamiento
(COPE). Resultados: Casi la totalidad de la muestra, el 93.3% (n = 14), identificó un suceso generador de estrés
agudo anterior a la aparición del síndrome. Una tercera parte, el 33.4% (n = 5), refirió antecedentes psiquiátricos
personales, y el 26.7% (n = 4) antecedentes psiquiátricos familiares. Más de un tercio, el 40% (n = 6), padeció el
fallecimiento del cónyuge, el 40% (n = 6) el de un hijo, y el 33.3% (n = 5) el de un progenitor antes de alcanzar la
adultez media. La puntuación en la escala SRRS indicó bajos niveles de estrés y bajo riesgo de desarrollar una
enfermedad. Los resultados en el NEO-FFI indicaron puntuaciones elevadas en la dimensión neuroticismo y bajas
en extraversión, además de asociación significativa entre ambas. En el COPE resultó predominante el estilo de
afrontamiento pasivo. Conclusiones: Variables psicosociales como sucesos vitales estresantes, personalidad y
afrontamiento, podrían ser partícipes junto con factores biológicos, en la predisposición y desencadenamiento
del síndrome de Tako-tsubo.

Palabras clave: Síndrome de Tako-tsubo, Acontecimientos vitales estresantes, Personalidad, Estrategias de


afrontamiento.

ABSTRACT
Introduction: In Tako-tsubo syndrome (STK), the involvement of psychosocial risk factors in addition to
those of a biological type has been described. This study describes personal and family history, stressful life
events, personality dimensions, and coping strategies in situations of stress in people with a history of STK. Me-
thod: Fifteen adult patients were evaluated through a semi-structured clinical interview, Holmes and Rahe Vital
Events Scale (SRRS), Costa et McCrae NEO-FFI Personality Questionnaire, and Coping Strategies Questionnaire
(COPE). Results: Almost all of the sample, 93.3% (n = 14), identified an event that generated acute stress prior
to the onset of the syndrome. One third, 33.4% (n = 5), reported a personal psychiatric history, and 26.7% (n = 4)
a family psychiatric history. More than one-third, 40% (n = 6) suffered the death of the spouse, 40% (n = 6) of a
child, and 33.3% (n = 5) of a parent before reaching adulthood. The SRRS score indicated low levels of stress and
low risk of developing a disease. The results in the NEO-FFI indicated high scores in the neuroticism dimension
and low in extraversion, in addition to a significant association between both. In COPE, the passive coping style
predominated. Conclusions: Psychosocial variables such as stressful life events, personality and coping, could
be involved along with biological factors in the predisposition and onset of Tako-tsubo syndrome.

Keywords: Tako-tsubo syndrome, Stressful life events, Personality, Coping strategies.

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INTRODUCCIÓN generador de estrés agudo, físico o psicológico, atribuido como


El síndrome de Tako-tsubo (STK), también conocido como desencadenante del síndrome, sin embargo, no está estable-
miocardiopatía de Takotsubo, miocardiopatía inducida por es- cido como requisito para proceder al diagnóstico (Núñez Gil et
trés, discinesia apical transitoria o apical balloning, fue descrito al., 2015; Prasad et al., 2008; Wittstein et al., 2012).
por primera vez en Sato, Tateishi y Uchida (1990). Se consolidó Existe un elevado número de investigaciones que descri-
como entidad clínica diferenciada con la descripción de 88 ben la influencia de sintomatología psiquiátrica y determina-
casos por Tsuchihasi et al. (2001). Estos autores detallaron das variables psicosociales en la aparición de patología car-
una entidad consistente en la presencia de dolor torácico, diovascular (Costa & McCrae, 1987; Steptoe & Molloy, 2007;
cambios bioquímicos, analíticos y electrocardiográficos, que Valls & Rueda, 2013). Específicamente, la sintomatología
imitan al patrón presentado en un infarto de miocardio (IAM). depresiva y ansiosa, la exposición a situaciones generadoras
La característica diferencial consiste en la ausencia de alte- de estrés crónico y/o agudo, el neuroticismo, y las estrate-
raciones significativas en las arterias coronarias y la práctica gias pasivas de afrontamiento, han sido asociadas a mayor
resolución en días o semanas, tras el tratamiento adecuado riesgo de enfermedad cardiovascular en numerosos trabajos
y la superación de la fase aguda, de los marcados trastornos científicos (Campbell-Sills, Barlow, Brown, & Hofmann, 2006a,
segmentarios ventriculares. Aun siendo habitualmente de 2006b; Emdin et al., 2016; Steptoe & Kivimäki, 2012; Unutzer,
buen pronóstico y las alteraciones por definición reversibles, Patrick, Marmon, Simon, & Katon, 2002; Wassertheil-Smoller
pueden existir en la evolución complicaciones como arritmias, et al., 2004). En relación al STK, la sintomatología ansioso-de-
insuficiencia cardíaca, estenosis subaórtica dinámica, shock presiva ha sido estudiada y descrita ampliamente (Delmas
cardiogénico, accidente cerebrovascular de origen metabólico, et al., 2013; Summers, Lennon, & Prasad, 2010; Ziegelstein,
e incluso, muerte (Dote, Sato, Tateishi, Uchida, & Ishihara, 1991; 2010). Por otro lado, si bien se ha descrito la influencia de
Sato et al., 1990; Tsuchihasi et al., 2001). sucesos generadores de estrés agudo en la precipitación
En lo referente a la epidemiología, se estima que el sín- del síndrome, se requiere más investigación en relación al
drome de Tako-tsubo se encuentra entre el 1% y el 3% de papel de sucesos estresantes experimentados a lo largo de
pacientes sometidos a coronariografía debido a sospecha la vida (Delmas et al., 2013; Kastaun, Schwarz et al., 2014). Lo
de síndrome coronario agudo (Bossone, Citro, Ferrara, & Sa- mismo ocurre para el perfil de personalidad y tipo de afron-
lerno-Uriarte, 2014; Núñez Gil et al., 2015; Pérez & Sánchez, tamiento a situaciones estresantes, a pesar de que se ha
2014). Las revisiones señalan que es una patología infradiag- observado en ciertos estudios la prevalencia de la dimensión
nosticada, entre otros aspectos, debido a que se interpreta neuroticismo, personalidad tipo D, y menor uso de estrategias
como un IAM (Pillere et al., 2006; Retana Puigmartí et al., 2008). de afrontamiento activas en personas con antecedente de
El STK se ha encontrado principalmente en mujeres (en STK, la investigación en estos campos es limitada y no se
aproximadamente el 90% de los casos), habitualmente post- han alcanzado conclusiones consensuadas (Hefner & Csef,
menopáusicas, y entre los 58 y los 75 años de edad (Bossone 2013; Hefner, Michalke, & Csef, 2013; Scantlebury et al., 2016;
et al., 2013; Prasad, Lerman, & Rihal, 2008). Smeijers, Szabó, & Kop, 2016; Wittstein et al., 2012).
Las causas de este síndrome siguen sin esclarecerse en la El propósito de este estudio es realizar un perfil descripti-
actualidad, no obstante, parece que la activación del sistema vo de antecedentes personales y familiares, acontecimientos
nervioso simpático juega un papel importante en la aparición vitales estresantes, dimensiones de personalidad, y estra-
transitoria de la disfunción ventricular (Bossone et al., 2013; tegias de afrontamiento ante situaciones de estrés, en una
Delmas et al., 2013; Wittstein, Proietti, & Compare, 2012). Las muestra de adultos con antecedente de STK.
hipótesis más aceptadas por la comunidad científica, descri-
ben la posible influencia de la descarga masiva de catecola-
minas y la distribución de los receptores beta miocárdicos, la MÉTODO
magnitud del efecto de la descarga de catecolaminas depen-
dería de la densidad local de adrenoceptores en diferentes re- DISEÑO
giones del miocardio. Asimismo, en la literatura se describe un Estudio descriptivo transversal que analiza una mues-
alto porcentaje de casos en los que existe un factor o suceso tra de pacientes adultos diagnosticados de síndrome de

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Tako-tsubo y atendidos en el Servicio de Cardiología del INSTRUMENTOS


Hospital Universitari Arnau de Vilanova de Lleida y en el Ser-
vicio de Cardiología del Hospital Clínico Universitario “Lozano VARIABLES CLÍNICAS
Blesa” de Zaragoza. El diagnóstico de STK fue realizado por el servicio de
cardiología en base al juicio clínico del médico especialista
MUESTRA y acorde a los parámetros clínicos al ingreso, como son los
Para este estudio se evaluaron a 15 pacientes adultos, hallazgos analíticos y pruebas complementarias (electrocar-
ingresados y atendidos por el servicio de cardiología entre diograma, ecocardiograma, y coronariografía). Las variables
enero de 2012 y diciembre de 2014 debido a sintomatología obtenidas por cardiología de la revisión del historial de pa-
de STK. Los intervalos de tiempo desde la fecha de ingreso cientes fueron las siguientes: antecedente de STK, parámetros
hasta el día de la evaluación psicológica, estuvieron com- clínicos al ingreso, tipo de factor atribuido como desencade-
prendidos entre 1 y 27 meses (Media: 14.8; DE: 9.60) (Tabla nante, y antecedentes médicos personales. Para la evaluación
I). Las edades de los participantes estuvieron comprendidas psicológica se elaboró un cuaderno de recogida de datos don-
entre 50 y 85 años (Media: 69.40; DE: 11.01). La totalidad de de se registraron y evaluaron las variables: edad, sexo, etapa
la muestra estuvo conformada por mujeres. Los criterios de reproductiva, índice de masa corporal (IMC), hábitos tóxicos,
inclusión para participar en el estudio fueron: diagnóstico antecedentes tanto personales como familiares, y variables
de síndrome de Tako-tsubo, y consentimiento informado psicosociales referentes a acontecimientos vitales estresan-
por parte del paciente para participar en la investigación. tes, rasgos de personalidad, y estrategias de afrontamiento.
En cuanto a los criterios de exclusión se establecieron los
siguientes: diagnóstico de discapacidad intelectual, enfer- ACONTECIMIENTOS VITALES ESTRESANTES
medad neurológica, trastorno psicótico, trastorno de per- Evaluación y registro, mediante entrevista clínica semies-
sonalidad, trastorno relacionado con sustancias y deterioro tructurada, de fallecimientos de familiares de primer grado
cognitivo en grado de demencia. a lo largo de la vida: fallecimiento de cónyuge, hijo (incluido
De los 26 pacientes que fueron identificados en un aborto espontáneo), y progenitor (anterior a la adultez media).
inicio con diagnóstico de STK, el 19,2% (n = 5) mostró su SRRS: Escala de Acontecimientos Vitales de Holmes y
inconformidad con participar en la investigación, el 7,6% Rahe (Holmes & Rahe, 1967). Cuestionario para medir la
(n = 2) manifestó la imposibilidad de desplazamiento al magnitud de los acontecimientos vitales estresantes que una
lugar de la evaluación, el 7,6% (n = 2) fue excluido por pre- persona ha experimentado durante el último año. Se presenta
sentar diagnóstico de enfermedad neurológica, el 3,84% un listado de 43 sucesos y el sujeto debe marcar los que le
(n = 1) fue excluido por presentar diagnóstico de trastorno hayan sucedido. Cada ítem tiene un valor predeterminado
relacionado con sustancias, y el 3,84% (n = 1) por haber que representa Unidades de Cambio Vital (UCV). Según el
fallecido. modelo de predicción estadística de Holmes y Rahe (1967),
las puntuaciones menores a 150 reflejan bajos niveles de
PROCEDIMIENTO estrés y bajo riesgo de enfermar, puntuaciones entre 150
A la hora de seleccionar la muestra, se procedió en pri- y 299 representan un 50% de riesgo de enfermedad en un
mer lugar a la revisión de forma retrospectiva, por parte de futuro cercano, y puntuaciones superiores a 300, representan
médicos cardiólogos, del registro e historial de pacientes. elevados niveles de estrés y un 80% de riesgo de desarrollar
Las personas que fueron identificadas como aptas para el una enfermedad. Esta escala ha mostrado una correlación
estudio fueron informadas del objetivo de la investigación y positiva de 0,118 entre acontecimientos vitales y enfermedad.
de la necesidad de manifestar su consentimiento de manera Hemos incluido la evaluación del factor o suceso desenca-
escrita para participar. Posteriormente, el psicólogo interno denante del síndrome, midiendo su magnitud mediante la
residente realizó la evaluación correspondiente mediante elección por parte del participante, del suceso vital estresante
una entrevista clínica semiestructurada de 60-75 minutos recogido en el cuestionario, que pudiese ser equivalente en
de duración. Unidades de Cambio Vital al factor precipitante.

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TABLA I. Parámetros clínicos, analíticos, y otras pruebas complementarias realizadas durante


el ingreso hospitalario, y meses transcurridos hasta la evaluación psicológica, correspondientes
a cada uno de los participantes.
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15
CLÍNICA
Desencadenante E E No E E F F F E E E E E E F
Dolor torácico No No Sí Sí Sí Sí No Sí No Sí Sí Sí Sí Sí No
Palpitaciones No No No No No No No No No No No No No No No
Síncope No No No No No No No No No No No No No No Sí
Insuficiencia
Sí No No No No No No Sí No No No No No No No
cardíaca
ANALÍTICA
Cr (mg/dL) 1,02 1,05 0,7 0,54 0,69 0,69 0,49 0,66 0,78 0,81 0,7 0,5 0,6 1,24 0,68
Leucocitos (mm3) 18900 8530 8700 11310 7180 7180 1990 13580 7550 15800 4800 4900 6300 4100 9000
Hemoglobina
14,00 14,00 14,80 13,90 13,00 13,00 13,90 14,20 14,30 11,90 13,50 12,00 11,80 11,20 14,60
(g/dL)
TnI pico (ng/mL) 8,74 7,62 2,15 2,03 0,6 0,6 1,54 1,13 0,53 3,16 21,1 6,5 6,72 4,04 3,61
CK pico (UI/L) 510 329 191 155 150 150 161 243 207 398 798 530 376 206 616
Proteína C
No Sí No No Sí Sí Sí No No Sí - - - - -
reactiva (normal)
Dímero-D
Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí No Sí Sí - - - - -
(normal)
Perfil tiroideo
Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí - - Sí No Sí
(normal)
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
ECG
Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
(Ritmo sinusal)
FEVI 1º ecocar-
30,00 55,00 55,00 39,00 30,00 30,00 39,00 55,00 45,00 65,00 43,00 60,00 48,00 74,00 49,00
diograma (%)
Días recuperación 7,00 8,00 5,00 3,00 4,00 4,00 5,00 13,00 4,00 7,00 4,00 4,00 10,00 8,00 14,00
Coronariografía Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
Meses transcurri-
dos hasta evalua- 1,00 16,00 11,00 3,00 26,00 7,00 2,00 9,00 21,00 26,00 18,00 7,00 22,00 26,00 27,00
ción psicológica
Nota: Cr = Creatinina; TnI = Troponina I; CK = Creatina quinasa; ECG = Electrocardiograma; FEVI = fracción de eyección del ven-
trículo izquierdo.

RASGOS DE PERSONALIDAD con 60 elementos de la Forma S del NEO-PI-R, que ofrece una
NEO-FFI: Cuestionario NEO-FFI de Costa y McCrae (NEO medida rápida y general de los cinco factores de la perso-
Five-Factor Inventory) (Costa & McCrae, 1992). Es una versión nalidad: Neuroticismo (N), Amabilidad (A) y Responsabilidad

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(C), Extraversión (E) y Apertura (O). Se contesta en una escala como desencadenante del síndrome, el 66,7% (n = 10) de
de 5 puntos de tipo Likert que va desde muy en desacuerdo la muestra ha identificado un factor de tipo emocional, el
(0) a muy de acuerdo (4). La consistencia interna (alfa de 26,7% (n = 4) un factor de tipo físico y el 6,7% (n = 1) no ha
Cronbach) para el NEO-FFI fue de 0,86; 0,68; 0,81; 0,77; 0,73; identificado ningún factor desencadenante.
0,68; 0,81 para los dominios N, A, C, E y O. Las puntuaciones
directas obtenidas se convierten a puntuaciones centílicas ANTECEDENTES PERSONALES
según el baremo normativo de la población correspondiente De los 15 participantes, el 93.3% (n = 14) se encontraba
(Costa & McCrae, 1999). en fase de postmenopausia y el 6,7% (n = 1) tenía ciclos
menstruales regulares. En cuanto al IMC, el 66,7% (n = 10) se
ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO situó en el rango de normopeso (18.5-25), el 26.7% (n = 4) en
COPE: Cuestionario COPE (Coping Orientations to Problems sobrepeso (25-30), y el 6,7% (n = 1) en obesidad leve (30-35).
Experienced) (Carver, Scheier, & Weintraub, 1989). Se adminis- Con referencia a los hábitos saludables, el 93,3% (n = 14) no
tró para evaluar las estrategias de afrontamiento la adaptación tenía antecedentes ni era consumidor habitual de alcohol y
española de Crespo y Cruzado (1997), en su versión disposi- el 6,7% (n = 1) refirió consumir menos de cinco UBE (unidad
cional (lo que habitualmente hace un individuo para afrontar de medida estándar) a la semana. El 86,7% (n = 13) no tenía
situaciones estresantes). El COPE consta de sesenta ítems antecedentes de consumo de tabaco, el 6.7% (n = 1) refirió
que los participantes responden en una escala tipo Likert de ser exfumador y el 6,7% (n = 1) refirió ser fumador habitual.
cuatro puntos. Los ítems se clasifican en seis escalas o fac- Respecto a antecedentes médicos, el 53,3% (n = 8) tenían
tores de segundo orden (estilos de afrontamiento), que a su hipertensión arterial, el 20% (n = 3) estaban diagnosticados
vez comprenden un total de quince subescalas o factores de de diabetes mellitus, el 26,7% (n = 4) presentaban dislipemia,
primer orden (estrategias de afrontamiento). Las puntuaciones el 6,7% (n = 1) tenía antecedentes pulmonares, el 13,3% (n =
directas que se obtienen en cada escala oscilan entre 0 y 16 y 2) de cardiopatía isquémica, y el 6,7% (n = 1) de hepatitis C
posteriormente se convierten en porcentajes. Ha demostrado transitoria. No constaban antecedentes en ninguno de los
una consistencia interna (alfa de Cronbach) entre 0,60 y 0,90. participantes de haber padecido neoplasia maligna, insu-
ficiencia renal, enfermedad cerebrovascular o síndrome de
DETERIORO COGNITIVO apnea obstructiva. Por otra parte, en cuanto a antecedentes
MMSE: Mini-Examen del Estado Mental (Mini Mental psiquiátricos, el 66,7% (n = 10) no presentaba antecedentes,
State Examination) Folstein, Folstein, & McHugh, 1975). Ad- el 26,7% (n = 4) tenía antecedentes de trastorno depresivo
ministramos la versión española del MMSE, prueba para el mayor y el 6,7% (n = 1) de trastorno de ansiedad.
cribado de déficits en las funciones cognitivas (Lobo, Ezque-
rra, Gómez-Burgada, Sala, & Seva Díaz, 1979). El intervalo ANTECEDENTES FAMILIARES
de puntuación oscila entre 0 y 30 puntos y el punto de corte El 26,7% (n = 4) de los pacientes presentaba antecedentes
para determinar la presencia de deterioro cognitivo se sitúa familiares de hipertensión arterial, el 20% (n = 3) de diabetes
en 21/22 puntos. Ha mostrado una consistencia interna (alfa mellitus, el 53,3% (n = 8) de neoplasia maligna, el 6,7% (n
de Cronbach) entre 0.82 a 0.84. = 1) de enfermedad neumológica familiar, el 6,7% (n = 1)
de cardiopatía isquémica y el 13,3% (n = 2) de enfermedad
cerebrovascular. Por otra parte, el 73,3% (n = 11) no presen-
RESULTADOS taba antecedentes psiquiátricos familiares, el 13,3% (n = 2)
presentaba antecedentes familiares de trastorno depresivo
PARÁMETROS CLÍNICOS AL INGRESO mayor, el 6,7% (n = 1) de trastorno por uso de sustancias, y
En la tabla I se presentan los datos clínicos, analíticos, y el 6,7% (n = 1) de trastorno bipolar.
otras pruebas complementarias realizadas durante el ingre-
so hospitalario, así como los meses transcurridos hasta la ACONTECIMIENTOS VITALES ESTRESANTES
evaluación psicológica. En cuanto al tipo de factor o suceso Los resultados para la frecuencia de fallecimientos de
generador de estrés agudo, físico o psicológico, atribuido familiares de primer grado a lo largo de la vida, indican que

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TABLA II. Correlaciones r de Spearman entre las dimensiones de personalidad del Cuestionario NEO-FFI.
N E O A C
N -0,714** -0,041 -0,178 -0,238
E -0,714** 0,472 0,407 0,426
O -0,041 0,472 0,354 0,493
A -0,178 0,407 0,354 0,806**
C -0,238 0,426 0,493 0,806**
Nota. N = Neuroticismo; E = Extraversión; O = Apertura; A = Amabilidad; C = Responsabilidad. ** p < 0,01.

el 40% (n = 6) de los participantes padeció el fallecimiento del TABLA III. Medias y desviaciones estándar
cónyuge, el 40% (n = 6) el fallecimiento de un hijo (entre éstos de las subescalas de estrategias de afrontamiento
el 50% a consecuencia de aborto espontáneo), y el 33,3% (n del Cuestionario COPE.
= 5) el fallecimiento de alguno de los progenitores previo a la
Subescalas COPE M (DE)
etapa de adultez media. En la escala SRRS para el último año
anterior al STK la puntuación media fue de 99,67 (DE: 56,58). Afrontamiento Activo 66,67 (11,97)
Planificación 64,58 (14,69)
DIMENSIONES DE PERSONALIDAD Y ESTRATEGIAS Supresión Actividades Distractoras 63,33 (7,42)
DE AFRONTAMIENTO ANTE EL ESTRÉS
Restricción de Conducta 62,50 (14,17)
El perfil de personalidad de los participantes se caracteri-
zó por mayores puntuaciones en la dimensión neuroticismo Búsqueda de Apoyo Social Instrumental 65,00 (13,53)
(Media: 24,33; DE: 8,50; Pc: 85), seguida de las dimensiones Búsqueda de Apoyo Social Emocional 67,08 (11,20)
amabilidad (Media: 33,40; DE: 6,22; Pc: 45), apertura a la ex- Reinterpretación Positiva 57,92 (13,46)
periencia (Media: 24,53; DE: 7.03; Pc: 20), responsabilidad
Aceptación 69,58 (11,78)
(Media: 30,67; DE: 5,43; Pc: 15), y por último de extraversión
(Media: 23,87; DE: 8,75; Pc: 5). Resultó una asociación nega- Negación 42,50 (19,79)
tiva significativa entre la dimensión de personalidad neuro- Religión 74,17 (18,43)
ticismo y la dimensión extraversión (rho = -0,714; p < 0,01) Desahogo Emocional 68,75 (16,70)
(Tabla II). En cuanto a las estrategias de afrontamiento, la
Desvinculación Conductual 50,83 (14,34)
estrategia que más se utilizó fue recurrir a la religión (Media:
74,17; DE: 18,43), y la que menos el consumo de alcohol o Desvinculación Mental 46,67 (14,73)
drogas (Tabla III). Alcohol/Drogas 24,58 (1,61)
Humor 29,17 (9,93)
Nota. M = Media; DE = Desviación estándar; COPE = Cues-
DISCUSIÓN tionario COPE [Coping Orientations to Problems Experienced].
La presente investigación se ha centrado en realizar un
perfil descriptivo de antecedentes personales y familiares,
acontecimientos vitales estresantes, dimensiones de perso- do porcentaje de participantes que se encuentran en fase
nalidad, y estrategias de afrontamiento ante situaciones de de postmenopausia, coincidiendo con los resultados de
estrés, en una muestra de adultos con antecedente de STK. anteriores estudios, donde se describe la participación de
En cuanto al perfil del paciente y parámetros clínicos al esta fase en la fisiopatología del síndrome, mediada por el
ingreso, se observa la posible influencia del factor hormo- sistema nervioso simpático (Delmas et al., 2013; Nguyen et
nal en el síndrome, que se pone de manifiesto en el eleva- al., 2009). En cuanto al factor generador de estrés agudo y

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atribuido como desencadenante del STK, la mayor parte de Cabe señalar en este punto, que los acontecimientos
participantes identifican un factor o suceso de tipo emocio- estresantes sucedidos recurrentemente a lo largo del ciclo
nal, coincidiendo con ciertas investigaciones previas (Núñez vital, o mantenidos en el tiempo, como enfermedad perso-
Gil et al., 2015; Pérez & Sánchez, 2014), aunque no con otras nal o familiar que conlleve dependencia física y/o emocional,
donde predomina la identificación de un factor de tipo físico pueden considerarse factores contribuyentes a experimentar
(Wittstein et al., 2012). estrés crónico (Delmas et al., 2013; Miller, Smith & Rothstein,
Con respecto a antecedentes personales, en los resulta- 1994). Este tipo de estrés ha sido establecido como variable
dos se observa que más de la mitad de la muestra presenta predisponente para la aparición de enfermedades cardíacas
un IMC dentro del rango normal, y la mayoría de pacientes (Holmes & Rahe, 1967). En relación al STK, se requeriría más
manifiesta no haber consumido tabaco ni alcohol de forma profundización sobre el papel del estrés crónico y los sucesos
habitual a lo largo de su vida, en contraposición a lo hallado estresantes a lo largo de la vida, con la finalidad de poder
en ciertas investigaciones (Madeo & Winters, 2015; Summers clarificar la posible asociación con la aparición del síndrome.
et al., 2010). Por otra parte, más de la mitad de la muestra Hasta el momento, las investigaciones apuntan que las ex-
presenta antecedentes de hipertensión arterial, factor de ries- periencias vitales de estrés crónico o recurrente en STK, son
go establecido en enfermedades cardíacas, y que prevalece mayores que en muestras controles o muestras con síndrome
en pacientes con STK (Bossone et al., 2014; Núñez Gil et al., coronario agudo (Delmas et al., 2013; Kastaun, Schwarz et
2015; Pérez & Sánchez, 2014). al., 2014). Con relación a estas experiencias, además de los
Con referencia a antecedentes psiquiátricos, el trastorno antecedentes personales y familiares descritos, en el presente
depresivo mayor es el antecedente psiquiátrico más pre- estudio hemos registrado los fallecimientos de familiares de
valente, representado por más de un cuarto de la muestra, primer grado experimentados a lo largo de la vida, específi-
seguido de trastorno de ansiedad. La literatura describe la camente de cónyuges, hijos (incluyendo aborto espontáneo),
asociación de sintomatología depresiva y ansiosa, con el au- y progenitores, teniendo en cuenta que son sucesos gene-
mento de incidencia de enfermedad coronaria en pacientes radores de elevados niveles de estrés, y que la muerte de un
sin historia de patología cardíaca (Roest, Martens, De Jonge, familiar de primer grado es uno de los principales factores de
& Denollet, 2010; Unutzer et al., 2002; Wassertheil-Smoller et estrés agudo atribuido como desencadenante del STK (Bos-
al., 2004). Por otro lado, se ha comprobado en numerosas sone et al., 2014; Compare et al., 2011; Hefner, Csef, Frantz,
investigaciones la elevada prevalencia de sintomatología an- Glatter, & Warrings, 2015; Pérez & Sánchez, 2014; Summers
sioso-depresiva en STK, y se han hallado diferencias signifi- & Prasad, 2013). En los resultados se observa que más de un
cativas con respecto a síndrome coronario agudo, resultando tercio de los participantes padeció el fallecimiento del cón-
sintomatología de mayor gravedad en la miocardiopatía in- yuge, coincidiendo con lo descrito en diferentes poblaciones
ducida por estrés. Aunque por el momento no quedan claros de adultos mayores sanos (Bratt, Stenström, & Rennemark,
los mecanismos de actuación en esta asociación, parece que 2015; Seematter-Bagnoud, 2010). Asimismo, más de un tercio
la desregulación del sistema nervioso autónomo jugaría un padeció el fallecimiento de un hijo (la mitad a consecuencia de
papel determinante (Delmas et al., 2013; Madeo & Winters, aborto espontáneo), prevalencia superior a la encontrada en
2015; Mudd, Kapur, Champion, Schulman, & Wittstein, 2007; controles sanos (Bratt et al., 2015); y, finalmente, un tercio de
Nguyen et al., 2009; Smeijers et al., 2016; Summers et al., la muestra ha vivido la pérdida de alguno de los progenitores
2010; Wittstein et al., 2012; Ziegelstein, 2010). antes de alcanzar la adultez media, dato de interés para futu-
En la evaluación de antecedentes familiares, más de ros estudios si consideramos que la pérdida de un padre en la
la mitad de la muestra refiere antecedentes de neoplasia infancia, adolescencia o adultez temprana, puede ocasionar
maligna, y más de un cuarto hipertensión arterial, mismo un elevado impacto emocional e incluso incrementar el riesgo
porcentaje que para antecedentes familiares psiquiátricos. de mortalidad en la adultez media o tardía, y de enfermedades
La historia de enfermedad psiquiátrica familiar podría ser cardiovasculares (Galloway, 1990; Hollingshaus & Smith, 2016;
un factor de vulnerabilidad para presentar STK (Summers et Marks, Jun, & Song, 2007; Masuda & Holmes, 1978).
al., 2010; Summers & Prasad, 2013), aunque sería necesaria Con respecto a los sucesos estresantes experimentados
mayor investigación. en el último año anterior al síndrome, la puntuación media

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indica bajos niveles de estrés y bajo riesgo de desarrollar centradas en la emoción en personas con enfermedad car-
una enfermedad según el modelo de predicción estadística diovascular, se asocian con resultados más negativos en
de Holmes y Rahe (1967), hallazgo equiparable a lo descrito términos de malestar psicológico, peor funcionamiento físico,
anteriormente en población adulta mayor sin clínica STK (Re- e incluso mortalidad más elevada (Valls & Rueda, 2013). En
yes, Hincapié, Herrera, & Moyano, 2009; Weber et al., 2013). STK se ha descrito la baja frecuencia en la utilización de
Este resultado podría ir en consonancia con la hipótesis de estrategias activas de afrontamiento en comparación con
Summers et al. (2010), en la que se explica que un evento controles sanos (Hefner & Csef, 2013; Hefner, Michalke et al.,
estresante agudo podría funcionar como desencadenante 2013), sin embargo, este hallazgo no ha sido corroborado en
más que como predisponente del síndrome STK, en contra- otras investigaciones (Kastaun, Gerriets et al., 2014).
posición a cómo podría funcionar el estrés crónico o estrés La presente investigación cuenta con una serie de limi-
agudo recurrente (Delmas et al., 2013; Kastaun, Schwarz et taciones que es preciso señalar, entre ellas el tamaño de la
al., 2014; Pérez & Sánchez, 2014). muestra, y la no inclusión de una muestra control. Asimis-
Los resultados relacionados con el perfil de personalidad, mo, debido a que se ha utilizado un diseño transversal, el
describen puntuaciones elevadas en la dimensión neuroticis- tiempo transcurrido desde la aparición del síndrome hasta
mo y bajas en extraversión, en comparación con lo hallado realizar la evaluación psicológica, puede haber influido en
en población general (Costa & McCrae, 1999). En Lacey et las calificaciones psicométricas, por ejemplo, dándose baja
al. (2014) y Christensen et al. (2016), se han visto resultados precisión en el recuerdo de eventos experimentados en la
significativos en la dimensión neuroticismo en población STK evaluación con la escala SRRS. Además, la diversidad de los
con respecto a controles sanos. Sin embargo, estos resul- eventos medidos por esta escala es limitada, y no se incluye
tados no son acordes a los encontrados en investigaciones la evaluación del impacto subjetivo emocional de cada una de
relacionadas (Scantlebury et al., 2016; Smeijers et al., 2016). las situaciones que evalúa, pudiendo variar el mismo de un
Con referencia a la dimensión extraversión, también sería ne- participante a otro. Por otro lado, aunque en nuestro estudio
cesaria mayor investigación para clarificar la asociación con se describen situaciones de estrés como antecedentes per-
el síndrome (Smeijers et al., 2016; Treder & Sieminski, 2013). sonales, familiares, y fallecimientos experimentados a lo largo
Por otra parte, entre ambas dimensiones se observa una de la vida, sería necesaria una evaluación más exhaustiva y
asociación negativa significativa, conformando un perfil de objetiva del estrés crónico o recurrente, utilizando instrumen-
personalidad tipo D, caracterizado por la inclinación a expe- tos estandarizados, y teniendo en cuenta otros factores que
rimentar emociones negativas e inhibición en la interacción aquí no han sido evaluados (experiencias de abuso o negli-
social (Denollet, Schiffer, & Spek, 2010). Este tipo de perso- gencia emocional, conflictos relacionales, estrés laboral, etc.).
nalidad se ha asociado de manera consistente con un mayor También cabe tener en cuenta las limitaciones inherentes a
riesgo de padecer episodios cardíacos adversos y peor pro- las medidas tipo autoinforme como son el NEO-FFI y el COPE.
nóstico en pacientes cardíacos y con trastornos del estado A pesar de las limitaciones, de los resultados obtenidos
de ánimo (Denollet et al., 2010; Grande, Romppel, & Jürgen, podemos concluir que el riesgo de padecer STK podría ver-
2012). En personas con antecedentes de STK se han descrito se incrementado debido a la influencia de factores de tipo
resultados significativos en personalidad tipo D, en compa- hormonal, historia de hipertensión arterial, antecedentes
ración con muestras control o muestras con antecedente de psiquiátricos, y variables psicosociales, entre las que es-
IAM (Wittstein et al., 2012). Sin embargo, los resultados no taría la exposición a acontecimientos vitales estresantes
son concluyentes, encontrándose estudios donde se descri- -como enfermedad o fallecimiento de un familiar-, un perfil
ben resultados significativos únicamente para la dimensión de personalidad caracterizado por elevado neuroticismo y
inhibición social y no para el complejo de personalidad tipo baja extraversión, y un estilo de afrontamiento al estrés de
D en población con STK (Smeijers et al., 2016). tipo pasivo. La precipitación del síndrome, podría atribuirse
Finalmente, con respecto al afrontamiento al estrés, la a la ocurrencia de un suceso generador de estrés agudo, que
estrategia predominante en la muestra es recurrir a la religión, participaría, junto con los factores biológicos y psicosociales
que se englobaría dentro de las estrategias de tipo pasivo anteriormente descritos, de la estimulación simpática, atur-
según Carver et al., 1989. Las estrategias pasivo-evitativas o dimiento miocárdico y disfunción microvascular.

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Teniendo en cuenta los resultados obtenidos, serían ne- integral, para garantizar un afrontamiento adaptativo a la
cesarias futuras investigaciones para clarificar con mayor patología y a los factores de diversa índole que pueden influir
precisión el papel de variables psicosociales en el desenca- perjudicialmente en su evolución.
denamiento del síndrome de Tako-tsubo, hasta el momento
existe un número reducido de investigaciones en este cam-
po y con resultados poco consistentes. Asimismo, sería de AGRADECIMIENTOS
interés valorar la necesidad de una intervención conjunta y A los Servicios de Cardiología y Psiquiatría del Hospital
multidisciplinar, entre los servicios de cardiología y psiquia- Universitario Arnau de Vilanova de Lleida, en especial al Dr.
tría, con el objetivo de potenciar la prevención del síndrome, Manel Piqué Gilart, y del Hospital Clínico Universitario Lozano
la precisión en el diagnóstico, y una intervención terapéutica Blesa de Zaragoza, en especial al Dr. Valero Pérez Camo.

BIBLIOGRAFÍA
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ARTÍCULO ORIGINAL
ORIGINAL ARTICLE

Recibido: 25/04/2017. Aceptado: 16/07/2017

CUANDO DIAGNOSTICAMOS AL CUIDADOR.


SÍNDROME DE MUNCHAUSEN POR PODERES

WHEN WE DIAGNOSING THE CAREGIVER.


MÜNCHAUSEN BY PROXY SYNDROME

S. Salort Seguí1, M. Irigoyen Ontiñano2


1
Médico Interno Residente del Servicio de Psiquiatría y Salud Mental y Adicciones del Hospital Universitario Santa María de Lérida.
Adjunta de Psiquiatría. Coordinadora de Psiquiatría de Enlace. Consulta de prevención de riesgo suicida. Hospital Universitario Santa María de Lérida
2

Correspondencia: Drasalort@gmail.co

Declaración de Conflicto de intereses: Los autores responsables del manuscrito “C. Clínico: Cuando diagnosticamos al cuidador Síndrome
de Munchausen por poderes”. Enviado y aceptado para publicarse en el próximo número 3 de la revista “Psiquiatría y psicosomática”, declaran
que este artículo ni se ha enviado ni publicado anteriormente en ninguna otra revista científica ni nacional ni internacional,
y que no se objetiva ningún aspecto que pudiese constituir conflicto de interés.

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:30-36.
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3 / AÑO 2017

Cuando diagnosticamos al cuidador... Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:30-36. S. Salor, M. Irigoyen

RESUMEN
El síndrome de Munchausen Por Poderes (SMPP) clasificado en el DSM-5 dentro de la categoría de trastornos por sín-
tomas somáticos y trastornos relacionados1, se conoce como Trastorno facticio aplicado a otro. Como peculiaridad, en esta
entidad, diagnosticamos al cuidador y no al paciente por el que a priori solicitan asistencia médica. Se trata de un cuidador
(generalmente la madre), que causa, de forma intencionada, daño a otra persona (generalmente hijo/a), con el objetivo de recibir
atención positiva, a través de un hijo enfermo. Es importante recalcar que la finalidad no es económica sino la de adoptar el
papel de “cuidador”. Constituye una forma grave de abuso y se asocia a una alta tasa de consultas médicas, hospitalizaciones,
reincidencia, morbilidad y en ocasiones mortalidad2,3. Se trata de una entidad infradiagnosticada como apuntan varios estudios4
y los más de 400 trabajos publicados sobre el tema. Pese a ser un síndrome ampliamente descrito en la literatura pediátrica,
no podemos dejar de considerar a los adultos con alguna minusvalía como potenciales víctimas de un cuidador Munchausen,
como en el caso que nos ocupa. Es importante conocer esta entidad, a fin de incluirla en el diagnóstico diferencial, especial-
mente, en aquellos pacientes en los que se plantee un caso inusual o de evolución tórpida, tal y como se describe en este caso
clínico. En esta entidad, será la sospecha clínica la que llevará a plantear este diagnóstico y su confirmación no está exenta
de dificultades. Un diagnóstico de SMPP, a menudo pasa por coacciones y manipulaciones por parte del abusador hacia el
personal sanitario7,8, las implicaciones ético-legales con las que deberemos trabajar9 y las características del propio sistema
sanitario, en el que el déficit de interconexión, favorece el libre deambular de estos cuidadores. Como todo abuso, el SMPP
previsiblemente tendrá unas secuelas sobre la víctima que los padece5,6 y como más adelante veremos puede llegar a tener
implicaciones intergeneracionales. Nuestra obligación como proveedores de salud reside en detectar el abuso y salvaguardar el
bienestar del paciente. Especialmente en estos casos en los que la víctima está en condición de vulnerabilidad física o psíquica.

Palabras clave: Síndrome de Munchausen por poderes, Trastorno facticio, Trastorno facticio impuesto a otro, Abuso en adultos,
Trastorno Facticio Aplicado a Otro, Trastornos por síntomas somáticos, Trastornos relacionados.

ABSTRACT
Munchausen By Proxy Syndrome (MBPS) is classified in the DSM-V within the category of disorders by somatic symp-
toms and related disorders1, it is known as Factitious disorder applied to another. As a peculiarity, in this entity, we diagnose
the caregiver, not the patient for whom is request medical assistance initially . It is a caregiver (usually the mother) who
intentionally causes harm to another person (usually a child), in order to receive positive attention through a sick child. It is
important to emphasize that the purpose is not economic, they want to adopt the role of “caregiver”. It is a serious form of
abuse and is associated with a high rate of medical visits, hospitalizations, recidivism, morbidity and sometimes mortality2,3.
It is an underdiagnosed entity as several studies 4 and the more than 400 published works on the subject point out. Despite
being a syndrome widely described in the pediatric literature, we can not fail to consider adults with some disability as poten-
tial victims of a caregiver Munchausen, as in the present case. It is important to know this entity, in order to include it in the
differential diagnosis, especially in those patients in whom an unusual case or a torpid course is presented, as described in
this clinical case. In this entity, it will be the clinical suspicion that will lead to consider this diagnosis and confirmation is not
exempt of difficulties. A diagnosis of MBPS often involves coercion and manipulation by the abuser towards carer provider7,8,
the ethical-legal implications that we will find9 and the poor connected medical system, contributes to the free circulation of
these people. Like all abuse, the MBPS is expected to have damages on the victim who suffers5,6 and as we will see later may
have intergenerational implications. Our obligation as health providers is detecting abuse and protects the patient’s well-being.
Especially in these cases when the victim is in condition of physical or psychic vulnerability.

Key words: Münchausen by proxy syndrome, MBPS factitious disorder, Factitious disorder imposed to other, Adult abused,
Factitious disorder applied to the other, Somatic symptoms disorder, Eelated disorders.

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INTRODUCCIÓN forma ambulatoria con Cefixima y Tiorfan. A partir de esta fe-


La profesión médica, tomó prestado el nombre del famo- cha, la paciente siempre acompañada por su madre, acude de
so cuentacuentos Karl Friedrich Hieronymus Von Münchhau- forma reiterada a diferentes servicios de urgencias. En todas
sen, una aristócrata alemán del siglo XVIII reconocido por su las ocasiones refiriendo molestias abdominales cambiantes,
habilidad para contar historias tremendamente exageradas inespecíficas y de evolución errática. Acumulando hasta 14 in-
sobre viajes y aventuras10. gresos hospitalarios durante los cuales, se ensayan múltiples
El síndrome de Munchausen por poderes es descrito por tratamientos. En los internamientos, se objetiva una mejoría
primera vez en 1977 por el pediatra ingles Roy Meadow. Des- en la sintomatología de la paciente hasta la total desaparición
de entonces, este síndrome enmarca al grupo de de cuida- de los síntomas que reaparecen en el domicilio. Finalmente
dores que relatan quejas, de forma tan convincente, que los se orienta como infección por Helicobacter Pylori y enteritis
pacientes a su cuidado, son sometidos a hospitalizaciones por Clostridium Difficile. Pero el cuadro evoluciona de forma
innecesarias, pruebas diagnósticas e incluso cirugías2. tórpida y persisten las demandas de atención médica. La
En el DSM-5 se conoce como Trastorno Facticio impues- madre, insiste en que su hija no se encuentra bien.
to a Otro y está clasificado en la categoría de trastorno por En este contexto se procede al presente ingreso hospita-
síntomas somáticos y trastornos relacionados1. lario, el decimoquinto, en esta ocasión en el servicio de me-
El síndrome de Munchausen por poderes es una entidad dicina interna pero a cargo del servicio de psiquiatría, como
compleja, compuesta por una tríada: paciente ectopizada (debido a la reticencia de la familia a
• El perpetrador, que es quien impone una patología inven- ingresar en salud mental).
tada a otra persona con el fin de recibir atenciones como Antecedentes personales médico-quirúrgicos: Sin aler-
cuidador. gias medicamentosas. Parálisis cerebral infantil (tipo triplejia
• Las víctimas, quienes aprenden a recibir atención materna y retraso cognitivo) que implica ser semidependiente para las
positiva cuando adoptan el papel de enfermos frente a los actividades básicas. Luxación de cadera derecha y retracción
proveedores de atención médica, del tendón de Aquiles bilateral intervenido quirúrgicamente.
• El médico. En estos casos el médico adopta un papel com- Antecedentes de crisis epilépticas que precisaron medicación
plejo, formando parte indispensable de la tríada: abuso físico, lográndose una estabilidad de cinco años, aunque reapare-
maltrato psicológico y iatrogenia11. cieron en octubre de 2016 precisando ingresos en Neurología
Es un síndrome ampliamente descrito en la literatura psi- por crisis parciales que no respondieron al Ácido Valproico
quiátrica y pediátrica, en cambio se han reportado menos (1000mg/día), ante la refractariedad de las mismas, se optó
casos en adultos12 como el que nos ocupa. El conocimiento por Oxcarbazepina (2400 mg/dia).
insuficiente de este síndrome y su rara consideración como Psicobiografía breve: Destaca importante distocia so-
diagnóstico diferencial, dan lugar al hallazgo de casos graves ciofamiliar. Vive con sus padres. Su madre es su cuidadora
y potencialmente letales. principal quien presenta elevada emoción expresada y una
relación fusional con su hija. Su padre trabaja como trans-
portista en horario nocturno evidenciándose importante
CASO CLÍNICO desbordamiento personal para gestionar el estrés relativo a
Identificación del paciente: mujer de 19 años, con pa- la enfermedad de su hija mostrando, en ocasiones, un tono
rálisis cerebral y retraso en el neurodesarrollo. Ingresa en la querulante y reiteradamente amenazas al personal sanita-
planta de medicina interna, a cargo de psiquiatría para estu- rio. Es la menor de 4 hermanos todos ellos independizados.
dio de cuadro digestivo de evolución tórpida, con sospecha La paciente fue escolarizada hasta los 12 años con buena
de psicopatología subyacente. adaptación y posteriormente al instituto con dificultades de
Análisis del motivo de consulta: El origen del presente relación interpersonal. En este contexto abandona el centro
cuadro se sitúa en abril del 2016. La paciente es acompañada y desde entonces permanece en el domicilio potenciando la
por su madre al servicio de urgencias generales, refiriendo relación fusional con su madre.
dolor abdominal, náuseas, fiebre (39ºC) y deposiciones dia- Historia toxicológica: No existe consumo de tóxicos ni
rreicas sin productos patológicos. Se inicia tratamiento de comportamientos adictivo.

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Historia psicopatológica: A nivel psiquiátrico, sin se- EVOLUCIÓN


guimiento por la red de Salud Mental hasta que se inician La orientación diagnóstica fue de Trastorno por Somati-
una escalada de ingresos continuados desde abril de 2016 zación aún sin poder descartarse el Síndrome de Munchau-
hasta marzo de 2017. Sin conducta suicida ni ingresos en sen por poderes.
Unidades de Agudos. Dada la situación de complejidad y de fragilidad para
Análisis y descripción de las conductas problema: Nos tanto madre como hija, se propuso derivación a la unidad de
encontramos ante una paciente con importante dependencia Daño Cerebral para que la paciente pudiera beneficiarse de
física y psíquica, en la que destacan la presencia de síntomas rehabilitación física y cognitiva pero, al ser un centro cerrado,
digestivos y neurológicos, de evolución tórpida, un elevado la familia se opuso.
número de visitas a urgencias y hospitalizaciones, así como Selección del tratamiento más adecuado: Se iniciaron
una familia muy querulante con marcadas dificultades de durante la hospitalización dosis bajas de neuroléptico Ris-
relación y con una dinámica interna compleja. peridona 0.25mg/12h para mejor control conductual pero la
madre no lo administraba en el domicilio, así como tampoco
acudieron a las visitas ambulatorias programadas.
EPISODIO ACTUAL Seguimiento y eficacia del tratamiento: La madre no
Proceso actual: el 22 de enero de 2017, la paciente administró el tratamiento prescrito, tampoco acudieron a las
acompañada por su madre, consultan de nuevo al servicio visitas ambulatorias programadas. A las semanas del alta,
de urgencias del Hospital General. Dados los antecedentes, consultaron de nuevo al servicio de urgencias generales. En
y la negativa de la familia a ser ingresados en Psiquiatría, se esta ocasión la paciente presentaba un evidente estado de
decide proceder a ingreso ectópico, en Medicina Interna pero malnutrición y abandono. Finalmente ante la evolución tórpi-
a cargo del Servicio de Psiquiatría; con el objetivo de clarificar da y la relación interpersonal errática se planteó la posibilidad
las causas de este hospitalismo agudizado en los últimos de notificación a Fiscalía.
meses y las dificultades de manejo en la familia.
Tratamiento previo al ingreso: la paciente estaba en
tratamiento con Oxcarbazepina (2400 mg/día) como anti- DISCUSIÓN
comicial. Este caso ha supuesto un reto en cuanto al manejo clí-
Exploración psicopatológica en planta: las entrevistas nico, precisando realizar un abordaje multidisciplinar tanto
resultaron altamente complejas debidas a la disfuncionali- para la aproximación diagnóstica como en la gestión de las
dad familiar. Se optó por realizar las visitas conjuntas entre múltiples demandas familiares.
Psiquiatría y Psicología. Durante las mismas, resalta la alta Como diagnóstico diferencial, nos planteamos un Tras-
emoción expresada y la fusionalidad madre-hija que ni siquie- torno de Somatización al presentar múltiples síntomas
ra permitía las visitas a solas con la paciente. A nivel conduc- físicos antes de los 30 años, al menos cuatro síntomas
tual, la paciente presentaba episodios de pseudocrisis que en dolorosos, dos síntomas gastrointestinales, un síntoma
ningún momento eran sugestivas de crisis comiciales francas sexual y otro pseudoneurológico. La enfermedad médica
y, más bien, evidenciaban un componente manipulador e ins- no justifica el deterioro en las distintas áreas y los síntomas
trumentalizador del malestar que pretendía recibir atención no son simulados. Otra entidad a considerar atendiendo
y no ser confrontada en ningún momento. Dicho comporta- al carácter sobreprotector y llamativamente demandante
miento era reforzado por la conducta de su madre que, aún que la madre adopta con la discapacidad de su hija, es el
desbordada físicamente, accedía a todas las pretensiones de Síndrome de Munchausen por poderes. Esta entidad se
la paciente, realizando demandas inapropiadas, maximizando caracteriza por un estilo de maltrato de difícil diagnóstico
la sintomatología y promoviendo la hospitalización. promovido por los progenitores (habitualmente la madre)
Pruebas complementarias: se realiza analítica de ingre- y que a menudo pasa desapercibida. Es un diagnóstico
so en la que no se objetivan alteraciones de interés ni en singular, puesto que no diagnosticamos al paciente por el
bioquímica, hemograma, hemostasia, serología ni analíticas que a priori se realiza la demanda de atención, sino a su
de orina. acompañante o “cuidador”.

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En el DMS-5 el síndrome de Munchausen por poderes Pese a ser más conocido entre psiquiatras y pediatras,
está catalogado en la familia de los trastornos por síntomas todos los médicos pueden enfrentarse a este síndrome en su
somáticos y trastornos relacionados. Dentro de ésta catego- práctica clínica. Como en este caso, la condición de víctima
ría pertenece al trastorno facticio impuesto a otro. puede ser adoptada por pacientes adultos con algún tipo
No hay una presentación típica pero sí se han observado de dependencia física o psíquica, cuyo cuidador exagere o
un conjunto de puntos es común. Generalmente los cuida- empeore la sintomatología preexistente o provoque síntomas
dores, describen una historia de signos y síntomas plausi- añadidos18.
bles pero indetectables durante la observación médica y con Se ha observado el fenómeno del “Doctor Shoping”19 que
ello difíciles de refutar13 Rosenberg14 analizó la incidencia de consiste en peregrinar por diferentes hospitales, hasta obte-
síntomas reportados en pacientes con SMPP: 44%hemorra- ner la atención anhelada, como sucedía en este caso, si no
gia, 42%convulsiones, 19% depresión del sistema nervioso obtienen la respuesta esperada, puede producirse una esca-
central, 15% apneas, 11% diarrea, 10% vómitos, 10% fiebre, lada en el daño que infligen a sus víctimas20. Por este motivo,
9% erupciones. Generalmente estas quejas no se constatan es importante incluir esta entidad en los casos de pacientes
durante la explotación15,16. que presenten una constelación de síntomas complejos en
En cuanto al cumplimiento de criterios diagnósticos en ausencia de una etiología unificadora y un cuidador excesi-
el presente caso observamos: vamente involucrado con una posible ganancia psicológica12
• La cuidadora, en este caso la madre, exagera y magnífica a fin de evitar daños mayores.
síntomas preexistentes y relatan síntomas que no se han Las estadísticas son muy variables pero se calcula que
podido constatar pese a la observación intrahospitalaria. el diagnóstico de esta entidad se dilata entre 14 meses y 4
• No hay incentivos externos que justifiquen este comporta- años y medio21,22.
miento. Durante los ingresos, no centraron sus demandas Es un diagnóstico complicado en cuanto a la dificultad en
en ayudas económicas, pese a estar en situación de pre- encontrar una evidencia incriminatoria sobre su existencia
cariedad económica. En este caso la finalidad no era tanto y por las cuestiones éticas que plantea a los cuidadores.
económica sino de mantener el control sobre los cuidados En Reino Unido, se hizo un estudio23 en el que se colo-
de la paciente. Es fundamental que como todo trastorno caron cámaras ocultas en las habitaciones de los pacientes
facticio, el cuidador actúe motivado por el deseo de adoptar
en los que se sospechaba un SMPP, los resultados fueron
el papel de cuidador y no por un beneficio económico secun-
llamativos, un elevado número de casos (aproximadamente
dario (ya que en el caso de obtener un beneficio económico
el 84,6%) en los que se había sospechado SMPP, se confirmó
se trataría de una simulación).
esta entidad mediante las grabaciones. Este mismo método
• El comportamiento no se explica mejor por la presencia de
ha sido replicado en Estados Unidos con resultados similares,
otro trastorno mental. Entorno al 80% de los cuidadores tie-
pero en nuestro medio las implicaciones legales y en cuanto
ne historial de diagnóstico psiquiátrico17 pero éste no debe
explicar la conducta como cuidador. Este punto es más di- a privacidad harían complejo este método24-26 pero en todo
fícil de determinar puesto que no contamos con el historial caso es importante conocer la entidad, para plantear la sos-
médico de la madre y esta no aportó información al respecto pecha y proteger a la víctima. Se ha constatado un aumento
a pesar de que su comportamiento manipulador, impulsi- de la detección de casos si se invierte en la concienciación
vo e histriónico eran sugestivos de rasgos de personalidad del personal sanitario sobre esta entidad27.
clúster B no filiado ni tratado. La mayoría de pacientes mejoran de forma espectacular
• La motivación principal es el de asumir el papel de cuidador tras ser separados de sus progenitores lo que se ha llegado
perpetuando la condición de enfermo de otra persona. a denominar “parentectomía”28 pero esta medida no deja de
En cuanto a este último criterio, es interesante observar ser una solución temporal al problema.
cómo en algunos casos de Síndrome de Munchausen por El pronóstico es mejor en los pacientes que cumplen con
poderes, también la víctima asume de forma inconsciente, el menos criterios, en aquellos que tienen una mayor apoyo so-
papel de enfermo como forma de obtener atención materna cial y alteraciones menos graves de la personalidad29. Se han
positiva. Este fenómeno también se produjo en el caso que nos descrito casos en los que las víctimas perpetran el mismo
ocupa, aumentando más la dificultad en cuanto al diagnóstico. patrón con sus hijos30 convirtiéndose en una patología con

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implicaciones intergeneracionales31-33. Otro dato dramático23, dencia física o retraso mental, pueden ser víctimas adultas
es el hallazgo de un elevado porcentaje de muertes súbitas de un cuidador Munchausen.
infantiles entre los hermanos de los pacientes con cuidadores Este síndrome sigue siendo una fuente de lesiones físicas
con Münchausen. y mentales a largo plazo en sus víctimas34. El manejo de este
síndrome, requiere una exquisita coordinación intrasanitaria,
para evitar llegar a casos de severa iatrogenia11. Los sistemas
CONCLUSIÓN de salud poco comunicados entre sí favorecen que este tipo
El síndrome de Munchausen por poderes, es una entidad de cuadros clínicos puedan vagar por el sistema sanitario
infradiagnosticada y a menudo desconocida. En cambio, su bajo el mínimo control.
consideración como diagnóstico diferencial puede evitar, Como todo maltrato la repercusión en la víctima es de
pruebas diagnósticas innecesarias o incluso invasivas, un difícil cálculo, pero en el caso del síndrome de Munchausen
daño físico y emocional en las víctimas y costosos ingresos. por poderes los médicos tiene el papel fundamental de de-
Es importante considerar que los niños son las víctimas tectar el caso para evitar agravar el cuadro y participar de
más citados en la literatura, pero los pacientes con depen- forma iatrogénica.

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ARTÍCULO DE REVISIÓN
REVIEW ARTICLE

Recibido: 24/03/2017. Aceptado: 30/05/2017

RASGOS DE PERSONALIDAD Y CARACTERÍSTICAS


DESCRIPTIVAS DE LOS OFENSORES SEXUALES
EN BASE A LA EVIDENCIA CIENTÍFICA
PERSONALITY CHARACTERISTICS AND DESCRIPTIVE CHARACTE-
RISTICS OF SEXUAL OFFENDERS BASED ON SCIENTIFIC EVIDENCE

F. Hurtado Murillo
Doctor en Psicología. Especialista en Psicología Clínica y Sexología. Centro de Salud Sexual y Reproductiva “Fuente San Luis” de Valencia.
Departamento de Salud Valencia Doctor Peset. Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valenciana.

Correspondencia: Calle Arabista Ambrosio Huici, 30. 46013-Valencia. Teléfono: 96 1972816


Email: felipehurtadomurillo@gmail.com

Declaración de Conflicto de intereses: El autor Felipe Hurtado Murillo declara que el artículo no ha sido publicado ni enviado a ninguna otra revista
y que además no hay conflictos de intereses de ningún tipo.

LEER

ISSN 2565-0564
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Rasgos de personalidad y características... Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:37-40 F. Hurtado

RESUMEN
Los ofensores sexuales se diferencian del resto de ofensores en rasgos de personalidad, en problemas de
conducta y en características demográficas. Asimismo, según diferentes estudios muestran alta morbilidad
psiquiátrica, siendo los trastornos mentales más comunes: trastornos de ansiedad, del estado de ánimo, abuso
de sustancias, fobia social y trastornos de la personalidad de los tipos: antisocial, límite, histriónico, narcisista,
por evitación, por dependencia y obsesivo-compulsivo.
La identificación de factores de riesgo para el desarrollo de pedofilia, exhibicionismo, violación y trastornos
parafílicos en general, según los resultados de diferentes investigaciones, muestran que un alto porcentaje de
sujetos parafílicos han sufrido abuso emocional y/o sexual en la niñez, han vivido en una familia disfuncional y
han tenido problemas de conducta durante la niñez.
La evaluación es difícil y compleja, siendo preciso evaluar tanto los determinantes sexuales como los no
sexuales, si queremos realizar una planificación terapéutica individualizada y con posibilidades de eficacia.

Palabras clave: Ofensores sexuales, Rasgos de personalidad, Trastornos mentales, Evaluación.

ABSTRACT
Sexual offenders differ from other offenders in personality traits, behavior problems and demographic cha-
racteristics. Also, according to different studies show high psychiatric morbidity, with the most common mental
disorders: anxiety disorders, mood disorders, substance abuse, social phobia and personality disorders of the
types: antisocial, limit, histrionic, narcissistic, by Avoidance, dependence, and obsessive-compulsive disorder.
The identification of risk factors for the development of pedophilia, exhibitionism, rape and paraphilic disorders
in general, according to the results of different investigations, show that a high percentage of paraphilic subjects
have suffered emotional and / or sexual abuse in childhood, have lived In a dysfunctional family and have had
behavioral problems during childhood.
The evaluation is difficult and complex, being necessary to evaluate both the sexual and non-sexual deter-
minants, if we want to carry out an individualized therapeutic planning and with possibilities of effectiveness.

Key words: Sexual offenders, Personality traits, Mental disorders, Evaluation.

ARTÍCULO DE ACTUALIZACIÓN vista clínica estructurada. Estudiaron la presencia de trastor-


Los resultados de investigaciones sobre evaluaciones nos mentales y de la personalidad comparando ofensores
psicológicas con ofensores sexuales, comparados con otro sexuales sin y con parafilia. Encontraron que, a lo largo de la
tipo de ofensores no sexuales, tanto violentos como no vio- vida, la población evaluada de hombres ofensores sexuales,
lentos, han demostrado que los ofensores sexuales se dife- habían manifestado en un alto porcentaje trastornos menta-
rencian del resto de ofensores en rasgos de personalidad, en les: el 84% había tenido trastornos por abuso de sustancias
problemas de conducta y en características demográficas adictivas, el 74% una o más parafilias, el 35% trastornos bipo-
(Van Wijk, Van Horn, Bullens, Bijleveld y Doreleijers, 2005). lar, el 24% trastorno depresivo, el 38% trastornos del control
Hay un incremento de conocimiento de la relación entre de impulsos, el 23% trastornos de ansiedad, el 9% trastornos
violencia sexual, parafilia y enfermedad mental. alimentarios y el 56% trastorno antisocial de la personalidad.
Dunsieth et al (2004) valoraron la salud mental de 113 Los ofensores sexuales con parafilias mostraron significati-
hombres sentenciados por delitos sexuales, mediante entre- vamente mayores tasas de ciertos tipos de enfermedad men-

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tal y de trastornos de personalidad por evitación. Además, existente en el esquema cognitivo de los ofensores sexuales
comenzaron a una edad más temprana a realizar ofensas que les motiva a la realización de sus prácticas sexuales
sexuales y sobre mayor número de víctimas. (Kamphuis, De Ruiter, Janssen y Spiering, 2005).
Estudios similares de prevalencia sobre ofensores sexua- En cuanto a la identificación de factores de riesgo para el
les (Leue, Borchard y Hoyer, 2004), han encontrado resulta- desarrollo de pedofilia, exhibicionismo, violación y trastornos
dos equivalentes de alta morbilidad psiquiátrica, siendo los parafílicos en general, en estudios donde han comparado
trastornos mentales más comunes: trastornos de ansiedad, ofensores sexuales tanto con otros ofensores no sexuales,
del estado de ánimo, abuso de sustancias, fobia social y como con hombres normales de características demográfi-
trastornos de la personalidad de los tipos: antisocial, límite, cas similiares; los resultados han mostrado que un alto por-
histriónico, narcisista, por evitación, por dependencia y ob- centaje de sujetos parafílicos han sufrido abuso emocional
sesivo-compulsivo. y/o sexual en la niñez, han vivido en una familia disfuncional
Estudios de meta-análisis han demostrado que las actitu- y han tenido problemas de conducta durante la niñez. Por
des y la influencia de las conductas del grupo de igual edad, otro lado, el abuso emocional en la niñez y tener una familia
son los mejores predictores de las conductas antisociales disfuncional ha sido encontrado como un consistente factor
en ofensores sexuales. Comparados ofensores sexuales con de riesgo para pedofilia, exhibicionismo, violación o trastor-
ofensores no sexuales en actitudes antisociales, los resulta- nos parafílicos múltiples. En cambio, el abuso sexual durante
dos han mostrado una relación positiva entre las presencia la niñez fue encontrado como un factor de riesgo específico
de actitudes antisociales y la realización de conductas de- para la pedofilia (Cohen et al, 2001; Lee, Jackson, Pattison y
lictivas tanto entre ofensores sexuales como en ofensores Ward, 2002; Agathonos-Georgopoulou, 2004).
no sexuales (Mills, Anderson y Kroner, 2004). La evaluación de una persona con conducta parafílica es
En diversos estudios que han comparado en rasgos de difícil y compleja. Se requiere por un lado, evaluar los determi-
personalidad, a hombres diagnosticados de pedofilia, con nantes no sexuales: personalidad, salud mental, habilidades
hombres normales con características demográficas simi- sociales, relación familiar, relación de pareja si tuviere. Por
lares como grupo control, mediante el pase de instrumentos otro lado, se requiere evaluar los determinantes sexuales:
de personalidad validados como el Inventario Clínico Mul- historial psicosexológico (descripción de posibles problemas
tiaxial-II de Millon (Cohen et al, 2002; Cohen et al, 2002). sexuales actuales, desarrollo psicosexual, primeras expe-
Los resultados han reflejado que los pedófilos manifiestan riencias sexuales y relaciones sexuales actuales), elementos
deterioros en el funcionamiento interpersonal, específica- cognitivos (evaluación del estado mental, fantasías sexuales),
mente, una reducida asertividad, una elevada conducta pa- análisis detallado de la secuencia parafílica, cuestionarios
siva-agresiva, ausencia de empatía y un bajo autoconcepto, sexuales y evaluación psicofisiológica (Cáceres, 2001).
que en conjunto pueden contribuir a la motivación de los No obstante la evaluación psicofisiológica tanto mediante
pedófilos por las preferencias sexuales con menores, dado pletismografía o falometría como mediante instrumentos po-
que la elevada sociopatía, la impulsividad y la presencia de ligráficos, son medidas controvertidas, dada las críticas que
distorsiones cognitivas sirven de base al fracaso inhibitorio han recibido tanto de la comunidad científica como del público
sexual hacia los/as menores. general, puesto que para determinar la culpabilidad o inocen-
Existe una evidencia proporcionada por resultados de cia de un individuo no se consideran éticamente correctas y
investigaciones con ofensores sexuales de menores, sobre además, está en entredicho su fiabilidad (Association for the
la relación entre sexo y poder, como un enlace patológico Treatment of Sexual Abusers, 1993; Krueger y Kaplan, 2002).

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Rasgos de personalidad y características... Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:37-40 F. Hurtado

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ARTÍCULO ESPECIAL
SPECIAL ARTICLE

Recibido: 07/06/2017. Aceptado: 30/07/2017

A SEXUALIDADE NO SÉCULO XVI VISTA


POR AMATO LUSITANO

THE SEXUALITY IN THE 16TH CENTURY IN


THE MEDICAL WORK OF AMATO LUSITANO

José Pacheco
Psicólogo Clínico y Sexólogo. Clinical Psychologist and Sexologist. Psicólogo Clínico e Sexólogo. Jubilado, depois de ter trabalhado, durante mais
de trinta anos, no Serviço de Psicoterapia Comportamental e na Consulta de Sexologia Clínica do Hospital Júlio de Matos em Lisboa. Licenciado em
Psicologia pelo Instituto Superior de Psicologia Aplicada. Mestre em Sociologia pela Faculdade de Ciências Sociais e Humanas da Universidade de
Lisboa. Ex-Presidente da Sociedade Portuguesa de Sexologia Clínica. Autor dos livros O Tempo e o Sexo e o Sexo por Cá.

Correspondencia: Email: jpacheco.psico@gmail.com. Telefone: +315 917 53 09 31.

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ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:41-49.
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RESUMEN
Amato Lusitano fue uno de los más notables hombres de la medicina portuguesa del siclo XVI. Nosotros
hacemos una investigación del modo como entendía la sexualidad, en su obra Centurias.
Su pensamiento se fundamentaba en la visión clásica de Hipócrates y de Galeno, pero ha usado una nueva
forma de describir mejor, con más exactitud, las quejas de los pacientes y ha propuesto nuevos tratamientos
para variadas patologías.
Dos de las relevantes huellas de su trabajo son: la propuesta extraordinaria de tratar una hipospadias por ciru-
gía; la primera y clara descripción de un pseudohermafroditismo por deficiencia de 5-alfa-reductase es asignable.

Palabras clave: Historia de la sexualidad, Reproducción humana, Tratamiento de las enfermedades sexuales,
Intersexualidad.

ABSTRACT
Amato Lusitano was a Portuguese remarkable physician of the 16th century. Reading the most important
published book, As Centúrias, we studied the more relevant factors to understand the sexuality in their epoch.
In one way, some approaches were based in a classical view of Hippocrates and Galen. In other way, he used
a new description, more precise, of human suffering and proposed innovative forms of treatment.
We think that the more relevant was the idea to solve a hypospadias with surgical intervention and perhaps
the first description of a male pseudohermaphroditism with 5-alpha-reductase deficiency.

Key words: History of sexuality, Human reproduction, Intersexuality, Treatment of sexual diseases.

RESUMO
Amato Lusitano foi um notável médico português do século XVI. A partir da sua obra mais relevante, As
Centúrias, investigamos os factores mais significativos para compreender a forma como então era encarada
a sexualidade humana.
Por um lado, ainda se baseava na visão clássica de Hipócrates e de Galeno. Por outro, a descrição mais
precisa do sofrimento humano e a sugestão e aplicação de novas formas de tratamento, tornavam-no inovador
para o seu tempo.
No campo da sexualidade, destacamos a proposta de tratar uma hipospadia através de cirurgia e talvez a
primeira descrição exacta de um caso de pseudohermafroditismo por deficiência de 5-alfa-reductase.

Palavras chave: História da sexualidade, Reprodução humana, Tratamento das doenças sexuais, Intersexualidade.

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INTRODUÇÃO tando a teoria dos humores e o efeito do clima na saúde e


na doença e, no plano filosófico, perfilhava, por um lado os
BIOGRAFIA E OBRA escolásticos e por outro a Nova Ciência, renascentista, que
João Rodrigues de Castelo Branco (1511-1568) for- valorizava uma ciência mais objectiva, empírica e criativa,
mou-se em Medicina em Salamanca e, posteriormente, para onde se admitiam as drogas exóticas e as novas cirurgias.
evitar as perseguições e processos judiciais da Inquisição Durante mais de 2 000 anos (IV a.C.-XIX), a teoria dos
viveu na Holanda, em Antuérpia, onde adoptou o nome de humores foi o eixo organizador do pensamento clínico.
Amato Lusitano, em Itália (Ferrara, Veneza, Ancona, Roma, Provavelmente, a longevidade da teoria derivou do seu uso
Pesaro) e ainda em Dubrovnik e Salónica, então sob o domí- idiossincrático, onde os diversos elementos eram pondera-
nio do império Otomano. Em Ferrara foi professor de Anato- dos de uma forma plástica, pouco rígida e pouco linear. A
mia e em Roma médico do papa Júlio III (1487-1555). Terra era, metaforicamente, associada ao corpo humano2 e
Nas Centúrias1 apresentou 701 casos clínicos («curas»), o único elemento que a Alma não continha. Para além disso,
numa linguagem simples, empírica, prática, com recurso à a doença podia resultar de dois tipos de desequilíbrio (défice
ironia e à analogia. Cada caso era estruturado numa história ou excesso) dos humores e os tratamentos3 visavam a sua
clínica (características, sintomatologia, diagnóstico) e nos normalização. No quadro seguinte apresentamos uma com-
remédios e terapêuticas utilizadas. De um modo geral, os posição da teoria dos humores com base na sua formulação
tratamentos que propunha eram idiossincráticos, originais a partir de Empédocles (492-432 a.C.), Hipócrates (460-377
ou exóticos. As Centúrias são paradigmáticas da sua curio- a.C.) e Aristóteles (384-322 a.C.) (Tabla I).
sidade, avidez de saber e desejo de se aperfeiçoar. A obra foi Na filosofia escolástica, Amato Lusitano aceitava a tese
incluída nos Índices da Inquisição, mas não existe evidência de S. Tomás de Aquino (1225-1274), ainda que baseada em
de ter sido directamente perseguido por motivos religiosos. Galeno, de que as «almas» (vegetativa – fígado; sensitiva
ou animal – coração e racional ou espiritual – coração) iam
CONCEPÇÕES TEÓRICAS MÉDICAS E FILOSÓFICAS «entrando» no feto4. Admitia-se que a alma racional entraria
Por um lado, baseava-se numa concepção tradicional no feto aos 90 dias de concepção. Durante o Renascimento
que ia de Hipócrates (460-377 a.C.) a Galeno (129-201), acei- e até ao século XVIII discutiu-se o processo de “entrada” da

TABLA I.
Elementos Órgãos Humores Temperamento Carácter Idade / Sexo
Fogo Fígado Bílis Amarela Quente / Seco Colérico Bilioso Homem
Ar Coração Sangue Quente / Húmido Sanguíneo Jovem
Água Cérebro Fleuma Frio / Húmido Fleumático Mulher
Terra Baço Bílis Negra Frio / Seco Melancólico Idoso

1
O original foi escrito em Latim, entre 1549-1561e publicado de forma integral pelo editor Rovill, em 1580, em Lyon, França, ainda que já tivesse sido parcialmente publicado em
Florença e Veneza. Posteriormente teve pelo menos 59 traduções, ainda que só tenha sido vertido para português em 1980, sob o título Centúrias de Curas Medicinais, numa
publicação em quatro volumes da Faculdade de Ciências Médicas de Lisboa, da Universidade Nova de Lisboa e que seria republicada em 2010, em dois volumes, pela Ordem dos
Médicos de Portugal. Comentou e anotou em duas obras diferentes, em 1536 (Index Dioscorides, Antuérpia) e 1553 (In Dioscorides de Medica Materia Libro Quinque Enarrations,
Veneza), a obra do célebre fundador da farmacopeia Dioscórides (40-90).
2
«A Terra tem alma vegetativa (…), a sua carne é o solo, os seus ossos são os sucessivos estratos de pedra que compõem as montanhas, as suas cartilagens são os tufos
calcários, e o seu sangue são as veias de água. O lago de sangue que rodeia a Terra é o mar oceano. A respiração é o aumento e a diminuição de sangue nos pulsos, tal como
na Terra é o avançar e o recuar das marés». (citado de Rodrigues, 2007). Nesta analogia, a Terra (macro) era metaforizada através do corpo humano (micro). Esta concepção
continuou a ser aceite pelo menos até Leonardo da Vinci (1452-1519) no Codex de Leicester.
3
Durante muito tempo, uma parte dos tratamentos visava eliminar algum tipo de excesso – como era o caso das sangrias (flebotomias) ou provocar a sudação, o vómito ou a
evacuação.
4
O assunto provavelmente começou a ser discutido no Antigo Egipto, assim como entre os Judeus ou posteriormente por Santo Agostinho (354-430).

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alma no embrião e até a transmissão do pecado original. O Ainda admitia a gravidez sem fecundação, mas de uma
assunto era de tal importância que chegou a admitir-se a forma menos dissociada dos factos, comparativamente ao
hipótese de baptizar os embriões em risco… Em parte, desde vento que, em Virgílio (70-19 a.C.) ou Plínio (23-79), eram
Aristóteles (384-322 a.C.) que se aceitava a ideia da exis- suficientes para provocar uma gravidez. Melhor seria dizer
tência de uma «aura seminal», ou seja, o sémen masculino sem penetração, se considerarmos os exemplos: a mulher
continha um «espírito» que iria animar a mulher com uma banhar-se numa água onde estivesse esperma de homem
nova vida. Esta ideia só seria completamente abandonada ou uma mulher que tivera uma relação lésbica com outra que
após as investigações de Lazzaro Spallanzani (1729-1799), acabara de ter um coito heterossexual e, no contacto entre os
em meados do século XVIII, sobre a fecundação. genitais, a segunda passara os restos de sémen à primeira7.
Na época apesar de Amato Lusitano estar seguro que a
duração da gravidez seria de nove meses, ainda existia a ideia
ESTUDO DA SEXUALIDADE HUMANA de Hipócrates e Aristóteles (dez/onze meses) ou as incerte-
Cerca de 17.2% dos casos clínicos que apresentou nas zas de Galeno quanto à duração da gravidez. Para além disso,
Centúrias referiam-se a questões sexuais sobretudo relacio- Hipócrates considerara que o feto masculino, por ser mais
nados com a gravidez e o parto, assim como relativamente perfeito, quente, activo e rápido, tinha um desenvolvimento
às doenças venéreas da época, a sífilis e a gonorreia. mais precoce que o feminino. E tinha um pressuposto que
Amato perfilhava: um feto que nascesse precocemente (7º
REPRODUÇÃO E GRAVIDEZ mês) sobreviveria, enquanto que no oitavo não sobreviveria.
Ao nível da reprodução, aceitava o modelo das duas se- Amato explicava-o com o argumento de que cada mês da
mentes, que tinha sido proposto por Hipócrates e, mais tarde, gravidez seria influenciado por um astro (Júpiter, Marte, Sol,
especificado por Galeno. De um lado o sémen masculino Vénus, Mercúrio, Lua, etc.) e que o 8º mês era regulado por
(perfeito/quente)5 e do outro a semente feminina (imperfeita/ Saturno que «… em virtude de ser hostil à vida pela sua frigi-
fria) que era constituída pelos fluidos vaginais produzidos dez e secura, é contrário ao feto e não consente que ele tenha
por “testículos” internos6, ainda que só tivessem a funciona- vitalidade». Omitiu apenas os motivos porque os fetos que
lidade de alimentar a semente masculina, que acabavam por só nasciam no 9º mês escapavam a essa influência astral.
se misturar no útero. A consumação da gravidez, segundo Uma outra preocupação antiga era o diagnóstico de gra-
Ambroise Paré (1510-1590), dependia de uma boa mistu- videz e de esterilidade: desde Hipócrates, o teste do alho,
ra das duas sementes e, desse modo, o homem, logo que descascado e envolvido em lã, introduzido durante uma noite
cessava o coito, não devia retirar o pénis, para não entrar ar. no interior da vagina. Se, no dia seguinte, a mulher tivesse um
Depois da retirada, a mulher juntava e levantava as coxas e hálito com cheiro a alho ou sentisse o seu odor, estava grávi-
devia evitar falar, tossir ou espirrar, para as sementes não da. Supunha-se que existia uma ligação directa entre a boca
saírem. Após a junção das sementes o feto desenvolvia-se e a vagina e, no tempo de Amato Lusitano, evoluíra-se para
a partir do seu «aquecimento» mútuo e era alimentado pela o uso de fumigações de resina, com pressupostos e intuitos
menstruação. Este pressuposto deixava implícito que a in- semelhantes. Ou o método, sugerido por Amato, do coalho
fluência masculina seria superior se considerarmos que, de lebre dissolvido em água quente que, se provocasse vó-
genericamente, o homem tinha os atributos quente/activo mitos, indicava que a mulher estava grávida. Na esterilidade,
e a mulher frio/passivo. considerava que a causa tanto podia ser feminina (qualidade

Este modelo continuou a ser aceite pelo menos até ao século XVIII. Amato Lusitano considerava, como Galeno, que o sémen se produzia a partir do sangue e admitia que a
5

mulher também emitia esperma.


6
A base lógica para se situarem no interior do corpo, decorria de, por serem mais frios, terem um desenvolvimento mais lento.
7
Duas mulheres turcas vizinhas, em virtude de muitos actos de coito, íncubos e súcubos, contaminavam-se e poluíam-se. Destas, uma era viúva e a outra tinha marido. Ora,
quando uma vez a viúva, excitada para o coito, provocasse a outra companheira para a acção do coito, e por acaso na altura em que o marido com que esta tivera a prática, saíra
de casa, pôs-se na altura e em atitude súcuba. Neste trabalho do coito e de abraços, depois de muita fricção e de apegos e da ejaculação de sémen, o útero da viúva sorveu,
em virtude da enorme apetência, não só o sémen da mulher íncuba, mas ainda sémen viril deixado antes no útero dela. Em virtude deste sémen ficou prenhe, na afirmação da
própria, após feitos vários juramentos. E devemos dar-lhe crédito, visto ser-lhe menos ignominioso confessar ter concebido de um homem do que de uma mulher, feito desta
forma, Centúrias, VI, Cura XVIII, p.232 (citado de Rodrigues, 2009a).

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do útero, temperamento) como masculina (temperamento), conforme o que visse, incluindo os “monstros”12 de Ambroise
afastando-se da culpabilização e da vergonha, exclusivas Paré mas estes, para Amato, apareciam simplesmente como
da mulher, ou do mero castigo divino ou diabólico e sugeria, mais um caso clínico.
como remédio, que a mulher mascasse aloé, em jejum e ao No decurso da gravidez, a melancolia, decorrente de abor-
deitar (Centúria V, Cura LXXXIII)8. tos13, de infertilidade, de namoros proibidos e da gravidez
No decurso da gravidez, o desejo de saber qual o sexo em si, era um problema frequente que Amato considerava
do feto era uma curiosidade antiga. Hipócrates assegura- ser provocado pela irregularidade14 da “limpeza periódica”,
va que se fosse rapaz este mexia-se mais cedo e no lado leia-se período menstrual.
direito; se fosse rapariga movimentava-se mais tarde e no Amato descreveu os estranhos desejos, que hoje classifi-
lado esquerdo9. Aristóteles tinha descartado a hipótese do caríamos como pica, de algumas grávidas por ingerir carvão,
“calor do útero” (mais quente – rapaz; mais frio – rapariga) lama ou terra e que, na mitologia da época, levaria a criança
ter tanta importância, porque os gémeos não eram sempre a nascer com sinais na cabeça.
do mesmo sexo. Amato considerou que seria o “influxo dos
astros”10 que explicaria que, em Janeiro de 1553, em Ancona, DESENVOLVIMENTO FETAL
só tivessem nascido raparigas e em Dezembro só rapazes, Hipócrates defendera que o feto seria criado e teria
como observara. feições definidas em sete dias e que o homem só poderia,
Amato descartou a hipótese de o sexo do feto depender sem comer e beber, sobreviver sete dias. Amato aceitou este
do estado emocional da grávida (alegre e bem-disposta, pressuposto hipocrático, acrescentando-lhe um argumento
corada, apetite, vigorosa – rapaz; triste, pálida, fastio, fraca, da numerologia – o número 7 era perfeito15 – uma vez que
rabugenta – rapariga), porque considerava que eram sinais acreditava nas propriedades curativas dos números. E ain-
muito incertos” E era muito mais prudente relativamente ao da uma aparente observação prática – nas meretrizes que
uso de sangrias, porque as achava perigosas, nas grávidas abortavam ao 7º dia saía uma carúncula que já apresentava
que tinham um temperamento excessivamente sanguíneo, todos os membros formados.
apesar de se considerar que esse estado poderia provocar Amato erradamente, seguindo Galeno, especificou que
aborto”. o fígado surgiria no 9º dia, o coração e o cérebro no 12º16
Aceitava ainda a teoria das impressões maternas (te- e os restantes órgãos no 18º dia. E, repetindo Hipócrates,
legonia) onde se assegurava que tudo o que afectasse a que aos 45 dias já tinha vida (mexia-se) e que esse seria o
mãe, durante a gravidez, deixaria marcas físicas e psíquicas momento em que a alma racional seria introduzida: “…e já
no filho. Assim a mulher podia gerar outras formas de vida, não se chama embrião mas infante (…) isto é se o feto estiver

8
Na Centúria VI, Cura XCVI afirma que Selim II (1524-1574), filho do sultão otomano Soleimão (1494-1566) o procurou para ser aconselhado a identificar as mulheres que tin-
ham mais hipóteses de engravidar, tendo-lhe indicado, como factores favoráveis, a largura lombar, a amplidão do ventre, a ausência de doenças do útero, ter ciclos menstruais
regulares e ter um temperamento alegre e equilibrado.
Amato na Centúria I, Cura LXX, considerou que este pressuposto era incerto, exemplificando com o caso de uma mulher corada cujo feto se mexia muito e depois nasceu uma menina.
9

Amato seguia aqui as concepções do seu tempo. Considerava-se então que as doenças, as patologias e as epidemias seriam uma má influência das forças, mais ou menos
10

ocultas, astrais. Em simultâneo, as propriedades e as acções positivas dos remédios, como as substâncias animais e as pedras preciosas, dependiam dos astros, incluindo
a fase lunar em que deviam ser ingeridos. Era uma ideia partilhada por autoridades médicas [por exemplo, Michele Savonarola ou António Guaineri (?-1466)] e mesmo quem
não acreditava [por exemplo, Jacques Despars (1380-1458)] mantinha o silêncio para não contrariar colegas e doentes, o que se mostra um claro indicador do poder que estas
convicções tinham na população.
11
No final do século XVI, António Petronio (1581), no De Victum Romanorum, asseguraria que as paixões da alma podiam provocar parto prematuro.
Corpos humanos com cabeça de animal, incluindo o célebre sapo, siameses, crianças sem olhos, braços ou cabeças ou até uma criança com duas cabeças, que eram expli-
12

cados pela junção de excesso de semente.


13
Considerava que seriam provocados pelos temperamentos sanguíneos e biliosos. Ainda que associados sobretudo às gravidezes do 8º mês e ainda mais nos fetos masculinos.
Associada à saúde física e psíquica. Como se pode ver o pressuposto poderia ser verdadeiro para o aborto e para a infertilidade e estes por seu turno implicarem a ocorrência
14

de melancolia.
O 7 era uma espécie de número mágico (sete dias da semana, sete planetas, sete notas musicais, sete graus de perfeição, sete mitologias…) que simbolizava, também, a vida
15

eterna. Na época, por exemplo, Robert Fludd (1574-1637) acreditava no poder dos números e que a Natureza podia ser explicada através da Matemática. Assim, o 5 era o símbolo da
perfeição [cinco sentidos, cinco humanidades de Hesíodo (século VIII a.C.), quinto dia da criação de aves e animais marinhos] ou o 1 que representaria um homem em pé ou um falo.
16
Especificou com dias precisos as etapas de desenvolvimento fetal sugeridas por Galeno.

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formado no quadragésimo quinto dia, começa a mexer-se era activa. Em qualquer dos casos, na lógica hipocrática, os
no nonagésimo e então lhe é introduzida a alma racional rapazes teriam partos mais fáceis. Amato verificou que, nos
(…) triplicado o nonagésimo dia, resulta o nono mês, que é o gémeos verdadeiros, o córion só era expulso com a saída do
tempo costumado do parto” (Centúrias, VI, Cura XCVI, p.157 segundo feto. E que, nos gémeos, se um feto estivesse morto
(citado de Rodrigues, 2009a). Relativamente ao 9º dia, para este seria o primeiro a nascer.
além do nove ser um símbolo da gestação, desde Homero Aceitava que a melhor posição, para o parto, seria a mul-
(século IX a.C.), considerava ainda um argumento mitológico: her deitada na cama, agarrada a uma corda suspensa do
«Demétrio viaja através do mundo em nove dias, à procura tecto. Depois, em função da maior ou menor dificuldade do
da sua filha Persea. Leta sofre as dores do parto durante parto, a aplicação de óleos19 no ventre, propondo o bálsamo
nove dias e nove noites. As nove musas nascem de Zeus do Peru20 e pós21 para provocar espirros e vómitos na mulher
depois de nove noites de amor» (citado de Rodrigues, 2007). e acelerar o parto (Centúria VI, Cura XXI). Admitia também a
No entanto, Amato Lusitano admitiu, erradamente, o que sucussão hipocrática, mas criticava os abanões excessivos
muito depois, Gautier d’Agoty (1717-1785) sugeriu: que o feto, assim como o parto espectáculo, com a grávida rodeada de
na forma de um minúsculo ser humano, entrava, já formado, mulheres, familiares e vizinhas, uma vez que os homens es-
através do esperma, na vagina e, desse modo, valorizaria o tavam proibidos de o observar22. Provavelmente, a sua maior
papel do homem na reprodução. invenção foi o recurso ao «espéculo da matriz», uma espécie
Amato Lusitano defendeu que o feto se alimentava atra- de fórceps obstétrico, para facilitar os partos mais difíceis23.
vés do cordão umbilical17, contrariando a hipótese de Hipó- Relativamente ao pós-parto descreveu um caso de de-
crates e de Galeno de que o feto se alimentava pela boca. E pressão pós-parto (Centúria I, Cura XXXIV – mulher que deu à
que a «urina» saía pelo cordão umbilical e não pela virga. E, a luz e caiu na melancolia), a quem sugeriu que lhe fosse cortado
nível anatómico identificou, com precisão, o saco amniótico, o cabelo e molhar a cabeça com água de ervas e flores, assim
a placenta e o córion ou lóculos. como a aplicação de um cachorro vivo, abeto pela espinha e a
aplicação de sanguessugas no ânus. Desconhecemos o su-
PARTO E PÓS-PARTO cesso destas terapêuticas porque abandonou o caso por terem
Relativamente ao parto, na época, na Europa, este era sido chamados os padres para expulsar os maus espíritos.
considerado uma transição entre a vida e a morte, um com- Aconselhava a mulher que tinha dificuldades em aleitar a repu-
bate imprevisível que levava à invocação de divindades pro- xar os mamilos (Centúria IV, Cura XCII) e nas dores mamilares
tectoras, cristãs ou pagãs, assim como ao estabelecimento a usar um unguento à base de choupo, chumbo e ópio tebaico.
de um horóscopo quando a criança nascia18.
Amato aceitava a hipótese hipocrática de que, no final da ANATOMIA GENITAL E TRATAMENTOS MÉDICOS
gestação, a criança dava uma cambalhota para sair de ca- Ao nível da anatomia dos genitais, apresentava-a de uma
beça, mas omitia se, durante o trabalho de parto, só a criança forma detalhada e com informações inovadoras. Ao contrário

17
É possível que o seu conhecimento, avançado para o seu tempo, sobre a circulação sanguínea e sobre as válvulas ázigos (trabalho feito em colaboração com Giambattista
Canano), possa indirectamente ter contribuído para ter feito esta inferência. Antecipou-se ou contribuiu para que posteriormente William Harvey (1578-1657) descobrisse a
circulação sanguínea.
18
Amato nunca se referiu a estas questões, ainda que acreditasse no papel das configurações astrais.
19
Referia-se a óleos de linhaça, amêndoas doces e lírio.
20
Um óleo espesso, resinoso, viscoso, com sabor forte picante e um odor misto de rosmaninho e almíscar.
21
Feitos a partir de saponária, assa-fétida, heléboro.
22
Apesar disso Amato Lusitano assistiu a alguns partos.
23
É claro que este tipo de instrumento era conhecido na Antiguidade, entre os Egípcios, Persas, Gregos e Romanos. A novidade segundo Rodrigues (2009a) seria que, anteriormente,
só seria utilizado para remover fetos mortos. Para Amato Lusitano essa opção não era universal: «Aloísa, jovem e no nono mês de gestação fetal, estava com um parto difícil.
Chamado para a ver, dei-lhe para beber: croco, cinamomo, súcino branco, trocistas de mirra. Nos intervalos era-lhe dado um caldo de capão ou picado feito de carne dele ou
um ovo de sorver, para lhe aguentar as forças. Para aplicar nas regiões inferiores foram preparadas fomentações de sabina, de poejo, de orégão, de calaminta, ou de néveda, de
lírio-roxo, de dictamo, de artemísia e semelhantes. Ao nariz aplicou-se esternutatórios feitos de heléboro, castóreo, piretro, pimenta e condísio dos árabes. Com estes remédios
conseguiu-se extrair o feto», Centúrias, VI, Cura LI, p.83 (citado de Rodrigues, 2009a).

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do que acontecia na época, usou uma terminologia específica comportamentos sexuais «duvidosos», que incluíam so-
para os órgãos genitais de cada um dos sexos. Não aceitava bretudo a sodomia27.
a hipótese de André Vesálio (1514-1564), apresentada em Descreveu (Centúria I, Caso XXIII) um caso de hipospadia
Fabrica (Basileia, 1543) de que a mulher, anatomicamente peno-escrotal. Tratava-se de uma criança de dois anos, com
seria uma espécie de «homem invertido», com um «pénis a glande não aberta e que tinha, perto dos testículos, um
interno», no plano dos órgãos genitais e, onde, superficial- orifício por onde saía a urina. Amato considerou que “… a
mente, tem sido vista uma hipotética inferioridade feminina. natureza tentara patentear macho e fêmea, sendo do género
Distinguiu o útero da mulher do de alguns animais e re- dos hermafroditas”. Chegou a propor uma correcção cirúr-
tomou a ideia de Herófilo (325 a.C.-280 a.C.) de que o útero gica, inventada por Giambattista Canano (1515-1579), que
só tinha uma cavidade, quando na época se considerava consistia em introduzir uma cânula até á glande para fazer
que tinha várias cavidades. Conhecia bem a posição do úte- um meato urinário artificial, solução que foi recusada pelos
ro, situando-o entre o colo da vesícula urinária e o recto e seus pares e pelos pais da criança. A intervenção cirúrgica
ligando-o à região sacra através de ramificações nervosas para corrigir e definir o sexo da criança, neste tipo de pato-
e musculares. Ao nível da fisiologia seguia as bases de Hi- logia, só viria a ser usada no século XX.
pócrates e Galeno, se exceptuarmos que refutou a ideia do Amato tinha uma noção clara de que, entre o masculino
útero «migratório». No tratamento das inflamações do útero e o feminino, existiam vários matizes. Descreveu ainda o
(Centúria I, Cura XIV) sugeriu que a mulher tomasse banho caso (Centúria II, Cura, XXXIX) de Maria Pacheca que, quan-
com uma decocção de rosas vermelhas, folhas de tancha- do devia ter a primeira menstruação, começou de súbito a
gem e mel e que aplicasse no ventre um cerato feito de cera, desenvolver um pénis. Sem qualquer comentário, Amato
almácegas, incenso, visco de esteva e noz de moscada. Lusitano, considerou que não era hermafrodita e mencio-
No domínio da Urologia, segundo Mendes da Silva (2002), nou que passou a vestir roupa de homem e foi rebaptizada
teria sido pioneiro no tratamento dos apertos da uretra, dila- como Manoel Pacheco. Tratava-se de uma rapariga fidalga,
tando-a com recurso ao uso de velinhas24. Para além disso natural da Esgueira (Coimbra) que depois da transformação
também teria realizado litotomias, uretrotomias externas e partiu para a Índia, onde se tornou famoso e rico, e casou
tratamento de fístulas e de outras patologias dos órgãos mas desconhece-se se teve descendência.
genitais masculinos. Descreveu correctamente o priapismo, Este caso serviu para Ambroise Paré (1510-1590) em
como inchaço do membro genital. No plano da cirurgia, re- Monstros e Prodígios (1573), no capítulo «Histórias memorá-
gista-se que extirpou vários tumores dos órgãos genitais veis sobre mulheres que degeneram em homens», defender
femininos. a tese, perfilhada por André Vesálio (1514-1564), de que as
No que concerne às ambiguidades sexuais25, se excep- mulheres tinham os genitais escondidos no interior do corpo
tuarmos o hermafroditismo, não existia ainda uma termi- como os homens os tinham expostos no exterior, ou seja, a
nologia precisa, popular ou erudita. Amato distinguia as mulher limitava-se a ser um «homem invertido», argumen-
que resultavam de anomalias anatómicas das que eram tando que fora o «calor» que puxara para fora o que estava
de natureza psíquica. Neste último caso descrevia um escondido e que nunca se tinha conhecido qualquer caso
homem efeminado, com genitais masculinos perfeitos, em que um homem se tivesse transformado em mulher. O
com comportamentos femininos e “menstruação he- contrário podia acontecer e o próprio Amato mencionou três
morroidal”26, um fenómeno que estaria relacionado com casos relatados por Plínio (23-79).

24
Em 1552 publicou em Ancona um livro sobre o Tratamento das Estenoses Uretrais.
25
Rodrigues (2005) usa o termo «indefinição sexual».
26
O termo descrevia um homem com hemorróidas em que a sua ruptura ocorria mensalmente. Desconhecemos se seria um mero acaso ou se correspondia ao desejo da oco-
rrência ser percepcionada como um equivalente da menstruação feminina.
Escusaria Rodrigues (2005) de colocar a hipótese de Amato Lusitano ter sido homossexual, com o pobre argumento de que nunca tinha casado e de não se lhe conhecerem
27

amantes femininas. Ou Nabais (2009) de achar que tinha uma homossexualidade latente porque em três casos (Centúria IV, Cura IX; Centúria VI, Cura XCV; Centúria VII, Cura XXXIII)
de rapazes usou termos como musculado, robusto ou que tinha uma bela aparência física. O facto é que Amato usava expressões similares quando se referia ao sexo feminino: por
exemplo na Centúria IV, Cura IV, num caso de alopecia, “hoje sinal certo e indubitável de morbo gálico”, de “uma senhora, por sinal muito formosa, que tivera uma grande febre…”

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Maria Pacheca parece ser um caso de pseudoherma- Do ponto de vista terapêutico estabeleceu novos trata-
froditismo com deficiência de 5-alfa-reductase28, ou seja, mentos34 para a sífilis, como o guaiaco, a raiz da China, a
durante o desenvolvimento fetal, não ocorreu, por não estar salsaparrilha e o buxo europeu, usadas em decoctos, po-
presente esta enzima, a conversão da testosterona em di- madas, unguentos, emplastros e administrados através de
hidrotestosterona. Em consequência o feto com cariótipo aplicação local ou de massagens nas zonas genitais. Admitia
XY nasce com aparência feminina, inclusive o que parece ainda o uso do mercúrio, como tratamento de segunda linha,
ser uma vagina. devido aos seus efeitos secundários, apesar de ser a tera-
O exemplo mais conhecido29 é o de um lugarejo isolado pêutica mais usada no seu tempo (“Uma noite com Vénus,
(Las Salinas, província de Barahona) da República Dominica- uma eternidade com mercúrio”). Ocasionalmente usou as
na, descrito por Imperato-McGinley et al. (1974) onde foram sangrias, preferia o uso de ventosas às sanguessugas, uma
identificados bastantes casos, localmente conhecidos por modalidade terapêutica usada para quase tudo, entre 900-
guevedoce (pénis ou testículos aos doze) ou machihembras 1953 e que, no plano racional, tinha a missão de “evacuar
(primeiro mulheres, depois homens) que são criados como os humores”.
meninas e que, com o desenvolvimento pubertário30 e o con- De uma forma geral, para Amato Lusitano, o desejo e o
sequente aumento dos níveis de testosterona, os testículos prazer sexual eram, para o homem e para a mulher, perfeita-
descem e o pénis desenvolve-se. mente normais. Ocasionalmente até podiam servir de trata-
mento para outras doenças: na Centúria II, Cura XLVII, num
OS TRATAMENTOS DAS DOENÇAS SEXUAIS caso de disenteria, o homem cometeu coito com a mulher
Relativamente às doenças venéreas, Amato Lusitano e ficou são; neste caso regressou a Hipócrates e a Galeno
considerava que a gonorreia estava associada a excesso que consideravam que esta doença se curava com a vida
de coito31 e a ejaculação gotejante, devido a carúnculas que lasciva. Relativamente às disfunções sexuais são escassas
obstruíam a uretra. Consequentemente, desenvolveu uma as referências, sobretudo as masculinas. No caso da impo-
técnica inovadora que consistia em retirá-las usando varetas tência (“homem que não podia praticar o acto sexual”) des-
de chumbo. creveu um caso (Centúria II, Cura XVIII) onde indicou como
Do ponto de vista da etiologia das doenças venéreas, tratamento comer suco de testículos de cão ou de raposo
estabeleceu a noção de contágio32, inclusive sexual, uma cozidos em água ou uma bebida feita a partir de carne de
ideia que só começou a ser aceite, no século XVII, quando lagarto da Líbia (scinco, da família Scincidae) e de amêndoas
se começou a usar o microscópio. No seu tempo conside- doces. Julgava, erradamente, que o excesso de consumo de
rava-se que a sífilis33 e a gonorreia eram causadas pelas sumo de limão poderia tornar o homem impotente. Para as
condições atmosféricas (ar, inundações), pelos astros ou um perturbações da ejaculação (Centúria II, Cura LXXXI; Centúria
mero castigo dos deuses. VI, Cura XCV) sugeriu que o homem bebesse um decocto

28
Rodrigues (2009b) considerou erradamente tratar-se de um transexual. Neste caso seria uma mulher biológica que se sentia interiormente um homem e que até podia desejar
ter um pénis, mas este não lhe aparecia espontaneamente entre as pernas. Também não se trata de um Síndrome de Insensibilidade ao Androgénio porque neste caso, apesar
de terem um cariótipo XY e testículos não descidos, permanecem com uma aparência física de belas mulheres. Na maioria dos casos têm uma vagina mais curta mas não têm
ovários e útero e consequentemente não menstruam nem podem engravidar.
29
Também foram encontrados casos na Papua Nova Guiné (ver Imperato-McGinley et al. (1991).
Nalguns casos, a mudança pode começar mais cedo, entre os cinco e os sete anos. Geralmente apresentam uma próstata mais pequena e menos pilosidade corporal. No caso
30

de Maria Pacheca, Amato Lusitano referiu que nunca teve barba, mas não anotou a idade em que a mudança ocorreu.
31
Ver Centúria I, Cura LV. Sabe-se hoje que a associação provavelmente se faria a um outro excesso: o de parceiras.
32
Sobretudo na Centúria I, Cura XLIX onde identificou uma cadeia de nove pessoas que ficaram contagiadas ao longo de um mês.
33
Na Europa a doença foi identificada pela primeira vez em 1495. Foi Mal de Nápoles para os franceses; Mal Francês para italianos, alemães e ingleses; Mal Polaco para os
russos; Mal Alemão para os polacos; Mal Espanhol / Castelhano para flamengos, holandeses, magrebinos e portugueses; Mal Português para asiáticos, sobretudo os japoneses;
em português tinha também a designação de mal-de-frenga. O termo sífilis passou a ser usado a partir do poema Syphilis, Sive Morbus Gallicus (1530) da autoria do médico
Giralomo Fracastoro (1478-1553) onde o pastor Sífilis fora punido com a doença por ter ofendido o deus Sol.
Guaiaco (Centúria I, Cura LV; Centúria III, Cura XVIII; Centúria VI, Cura LXXX), Raiz da China (Centúria III, Cura XVIII), Salsaparrilha (Centúria III, Cura XVIII). As referências á sífilis
34

aparecem em muitos outros casos: Centúria I, Curas XXVI, XLIX, L, LIV; Centúria III, Cura IV; Centúria IV, Curas XV, LV, LXIX; Centúria V, Curas XXII, XXV, XLIX, LVI, LX; Centúria VI,
Curas XXII, XLIII, XLVIII, LXXXV.

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feito com mel e vários vegetais e a aplicação de um unguento Um problema, comum a ambos os sexos, era a doença de
feito com vegetais e caudas de lagarto da Líbia. amor, que descrevia uma paixão intensa, não correspondida,
Entre os afrodisíacos, supostamente para aliviar a inibição que podia levar à loucura (Centúria III, Cura LVI e LXI) e ao
do desejo sexual ou as dificuldades de excitação sexual, men- suicídio (Centúria V, Cura LXXXIV). Mesmo que considerasse
cionou a raiz da China, as caudas de lagarto da Líbia e a o prognóstico muito reservado e que não tinha tratamento
soagem (Echium sp., da família das Boragíneas). («deixá-los com a sua insensatez é o que há a fazer»), num
Relativamente às mulheres, tratou sobretudo o furor caso (Centúria III, Cura LVI) usou um xarope de heléboro e
uterino ou satiríase35, descritos como um prurido e “calor” um purgante como remédio.
nas regiões pudendas associado a um insuportável desejo
sexual. Ocorria sobretudo em mulheres virgens, castas, sol-
teiras ou viúvas, mas também em casadas com o marido DISCUSSÃO E CONCLUSÕES
ausente ou que não as satisfazia sexualmente, tornando-as Do legado de Amato Lusitano parece-nos importante
faladoras e implicativas. Para as primeiras, o casamento era destacar:
o tratamento, numa versão claramente hipocrática. Como se • A descrição mais exacta da anatomia e da fisiologia dos
pode ver, estes termos não descreviam um excesso de desejo órgãos reprodutores femininos e do feto, em particular que
sexual, mas simplesmente uma condição de privação sexual. se alimentava a partir do cordão umbilical.
Não encontramos referências ao uso do pepino apesar de • A invenção do “espéculo da matriz” para ajudar a resolver
nos Comentários a Dioscórides o ter descrito como «fruto partos difíceis.
obsceno de elevado preço que as mulheres devoram debaixo • A criação de um instrumento para solucionar as obstruções
dos lençóis; raro na Lusitânia, símbolo sexual em Salamanca, da uretra masculina;.
hirsuto, verde, retorcido, do tamanho de um braço» (citado • A proposta de realizar uma correcção cirúrgica para reme-
de Rasteiro, 2006). Descreveu ainda dois casos (Centúria diar uma hipospadia peno-escrotal.
VII, Cura LXI) de excesso sexual (ardor amoroso e desejo • A defesa de que o contágio sexual concorria para a propa-
sexual incontrolável), provocados pela raiva, que para além gação das doenças venéreas.
das convulsões e da hidrofobia, podia perseguir os homens
• A descrição exacta de um pseudohermafroditismo mascu-
em busca de sexo ou então ter trinta orgasmos espontâneos lino, talvez a primeira a ser realizada na Europa.
(sémen sem titilações).

Ver Centúria VI, Cura XCVII. O termo furor uterino decorria de se julgar que a causa se encontraria no útero. Curiosamente o termo satiríase viria, em oposição a ninfomania, a
35

descrever os excessos sexuais masculinos.

BIBLIOGRAFÍA
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dusek DC. “A cluster of male pseudohermaphrodites with 5-alpha-reductase contribuições para uma nova perspectiva das Centúrias de Curas Medicinais,
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2. Imperato-McGinley J, Guerrero L, Gautier L, Peterson RE. Steroid 5-alpha-re- 7. Rodrigues IT. (2007). Influência da astrologia e da numerologia na tera-
ductase deficiency in man: an inherited form of male pseudohermaphrodi- pêutica de Amato Lusitano, Actas do Encontro Internacional ‘A Unicidade
tism, Science,1974;186:1213-5. do Conhecimento’, Centro de Investigação em Educação e Psicologia, Uni-
3. Lusitano A. (1980). Centúrias de Curas Medicinais, Faculdade de Ciências versidade de Évora.
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da Pré-História ao Século XXI, Cadernos de Cultura, XXIII: 53-62. Sexologia, Medicina na Beira Interior, da Pré-História ao Século XXI, Cadernos
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Amato Lusitano, Medicina na Beira Interior, da Pré-História ao Século XXI, 10. Silva MM. História e Desenvolvimento da Urologia – Visão Sintética», Acta
Cadernos de Cultura, XX: 24-40. Urológica Portuguesa. 2002;19(1):25-30.

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ARTÍCULO ESPECIAL
SPECIAL ARTICLE

Recibido: 09/10/2017. Aceptado: 10/11/2017

¿POR QUÉ?
REFLEXIONES SOBRE LOS ATENTADOS YIHADISTAS
DE BARCELONA Y CAMBRILS

WHY? REFLECTIONS ON YIHADIST TERRORIST ATTACKS


IN BARCELONA AND CAMBRILS

R. Bayés

Declaración de Conflicto de intereses: Cabe señalar que el contenido del manuscrito y los datos de este trabajo no han sido publicados
previamente, ni tampoco están siendo considerados en otra revista.

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:50-53.
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Poco tiempo después de los atentados que el 17 de muestra la ignorancia, el rencor, la indiferencia, el no respeto
Agosto de 2017 dejaron 22 muertos – incluidos seis de los hacia el prójimo, los tópicos, las fronteras, el girar la cabeza
presuntos miembros de la célula yihadista – y más de un hacia otro lado, el no saber ponerse en la piel del otro .
centenar de heridos sobre las calles de Barcelona y Cambrils No puedo contener las lágrimas. Mejor dicho, no he dejado de
(Tarragona), la policía consiguió identificar a diez de ellos y llorar desde el primer día y sé que nunca podré dejar de hacerlo.
enviar a prisión a dos de los supervivientes. Estoy destrozada, rota por dentro.
Excepto el imán que los había radicalizado, todos los Sé que estos días la balanza y el apoyo se decanta hacia las
miembros del grupo eran jóvenes marroquíes de 17 a 24 víctimas, hacia los hijos perdidos, las familias destrozadas, la
años que llevaban una vida aparentemente normal (estu- ciudad en duelo.
dios, trabajo, futbol, amigos, diversiones) en Ripoll (Girona), Pero permitidme contaros y enseñaros la otra cara de la mone-
población que cuenta con unos 10.500 habitantes de los que da, la que no sale en los periódicos, la que no llora en público,
700 pertenecen a la comunidad musulmana. la que en silencio contiene las lágrimas porque parece que esté
Lo mismo que ante los atentados de Nueva York, Madrid, mal visto llorar por ellos.
Londres, París, Berlín, Niza... es importante que intentemos “Said, Moha, Moussa, Youssef, Omar... Younes... Y ahora Houssa...
responder a la pregunta: ¿por qué? ¿Cómo puede ser, Younes...? Me tiemblan los dedos, no he visto
En el caso del atentado catalán, no deberíamos olvidar, a nadie tan responsable como tú ...
además, que los miembros de la célula que atropellaron y acu- Solo puedo decir que tengo el corazón roto...”
chillaron indiscriminadamante a las personas desconocidas
que se encontraron a su paso, estaban aparentemente bien Y volvemos a preguntamos: ¿Por qué?. Tenemos, es ne-
integrados en su entorno social, carecían de experiencia en cesario, encontrar respuestas. Pero ¿quién conoce el corazón
lucha armada, estaban o habían estado escolarizados y no de un hombre?
eran adictos a las drogas. Excepto el imán que los reclutó - ¿Cómo es posible que jóvenes formados en nuestras co-
mucho mayor que ellos y cuya actuación en la mezquita de munidades y educados en nuestras escuelas, adquieran en
Ripoll no había levantado hasta aquel momento las sospechas pocos meses una fe ciega que les impulsa a contemplar a
de la policía - se trataba de jóvenes normales cuyas imágenes, los no musulmanes sólo como infieles que hay que destruir?
pocas horas antes de cometer los atentados, habían sido
captadas por las cámaras de vigilancia de un supermercado,
aparentemente distendidos y bromenado entre ellos. LA BANALIDAD DEL MAL
El testimonio de Raquel, una educadora social que trató Un ejemplo extremo de la disociación que puede produ-
desde pequeños a muchos de ellos, es la mejor expresión del cirse en las personas entre su actuación como ciudadanos
desconcierto de quienes los conocían ante los dramáticos afables en contextos familiares, y la práctica de conductas
hechos que acaecieron. En una carta, aparecida en Facebook violentas en entornos diferentes, lo podemos encontrar, de
poco después de conocerse la noticia, reproducida en Verne/ acuerdo con el análisis de Hannah Arendt2, en Adolf Eich-
El País de 22 de Agosto, escribe: mann, teniente coronel de las SS y uno de los responsables
directos de la llamada “solución final” a través del transporte
Quiero explicar cosas que no saldrán en los periódicos ni en la de judíos a los campos exterminio. En un reciente estudio
tele. Necesito gritarlo a los cuatro vientos… realizado en Sabadell sobre el Holocausto13 me ha llamado
Nunca había tenido un sentimiento tan fuerte como éste, por- la atención la frase: “Hiela la sangre ver cómo (los máximos
que no es racional, no viene de algo que vieras que tenía que responsables del horror) podían tener aparentemente vidas
pasar o que forma parte de la vida. Viene de otro sitio que no normales y al mismo tiempo ser los verdugos de millones
soy capaz ni de describir. de personas”.
Estos niños eran como todos los niños. Como mis hijos, eran Esta especie de doble vida no sólo la podemos encontrar
niños de Ripoll. en los dirigentes nazis; también, en cierta medida, en los
Me duelen las chispas que encienden el odio en las redes, en mismos judíos. De hecho, sin la colaboración de muchos
la calle, en el pueblo donde vivo, en los periódicos... Donde se de ellos y la participación de algunos Judenrat (Consejos

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judíos), posiblemente hubieran muerto igualmente una gran mismo modelo: al soldado se le ha preparado para que lo
cantidad de ellos en las cámaras de gas pero, como señala ignore todo sobre su enemigo. El enemigo, el otro, es para
Arendt2 - y esto fue lo que indignó a los líderes sionistas él algo abstracto”.
cuando se publicaron los artículos que dieron lugar al libro15 Y esto es, probablemente, lo que ocurre en el radicalismo
– su número, probablemente, habría sido menor. La película islámico: para los que practican la yihad los no musulmanes
“El Hijo de Saúl”11 constituye, a mi juicio, un ejemplo de las desconocidos son “los otros”; no son personas, sólo infieles
conductas de obediencia adoptadas por muchos prisioneros – no importa su edad, sexo, nacionalidad o valores - que es
en Auschwitz bajo el mando de sus carceleros, tanto nazis preciso que desaparezcan. Si el mensaje de Mahoma, en la
como también ayudantes judíos. David Rousset2, quien es- interpretación radical del Corán que se les suele presentar,
tuvo preso en el campo de concentración de Buchenwald, constituye una verdad absoluta e inamovible, la tolerancia
escribe: “Nada hay más terrible que aquellas procesiones hacia los que practican otras creencias u opiniones carece de
avanzando como muñecos hacia la muerte”. sentido. Señala Aznar Fernández-Montesinos en su ensayo
sobre el radicalismo islámico3:
“La Ley islámica no procede ni está moldeada por la
EL EXPERIMENTO MILGRAM sociedad sino que es expresión de un ideal trascendente
Las personas se desarrollan y adquieren valores a través emanado de la divinidad, Su propósito no es la creación de
de premios, castigos, asociaciones temporales y modelos con un reino de Dios en la tierra sino guiar a la comunidad, la
los que se identifican, en las interacciones con sus padres, Umma, una entidad teleológica, hacía Dios. Encarna pues
familiares, educadores, iguales, líderes y medios de comuni- un ideal cosmopolita, en la medida en que cifra la patria del
cación, a través de los cuales suelen establecer, a lo largo de musulmán como aquel lugar en que se da cumplimiento a las
su biografía, vínculos afectivos y pautas de conducta, entre leyes islámicas, por encima de fragmentaciones territoriales
las que se encuentra la obediencia a aquellos que, a sus ojos, impuestas por convenciones humanas”.
representan mayor conocimiento, experiencia o autoridad. Javier Cercas, en un artículo sencillo y claro4, formula una
El psicólogo norteamericano Stanley Milgram9 llevó a plausible hipótesis para explicar los atentados de Cataluña.
cabo en el pasado siglo unos interesantes experimentos Los jóvenes del grupo que cometió el atentado posiblemente
sobre la obediencia que muestran como muchas personas escondían una profunda herida de desarraigo: Eran españoles
pueden ser inducidas a administrar descargas eléctricas de pero se consideraban también marroquíes; querían mucho a
intensidad creciente a personas desconocidas y se convier- sus familias pero, a veces, se avergonzaban de ellas; se cria-
ten, de hecho, en sus torturadores, si quién les pide obrar ron en Ripoll pero sabían que no eran totalmente de allí. Gra-
de esta manera, aparece, a sus ojos, con el suficiente grado cias a su encuentro con un imán providencial encuentraron
de autoridad. Algunas películas1,7 y programas televisivos14 respuesta a todas sus ansiedades y dudas. Escribe Cercas4:
han mostrado la maleabilidad de la mayoría de miembros “(Y así, estos jóvenes) resuelven las angustiosas contra-
traanquilos y educados de nuestra sociedad occidental, para dicciones que los desgarran, felizmente dejan de pensar y
convertirse - con la afortunada excepción de una minoría de decidir por si mismos, ven la luz... y ebrios de clarividencia e
individuos de espíritu independiente - en obedientes instru- idealismo, comprenden que su destino no es ser secundarios
mentos de aquellos a quienes consideran sus guías, supe- sin futuro sino héroes, santos y mártires, redentores radiantes
riores, líderes o mentores. de su pueblo martirizado por Occidente”.
Todos necesitamos utopías para seguir viviendo como
hombres libres en un mundo injusto que sólo parece aceptar
LA YIHAD EN CATALUÑA la obediencia a los que siguen las normas del capitalismo
Ryszard Kapuściński10, un valorado corresponsal de guerra y salvaje que lo sustenta. Algunos musulmanes jóvenes, pocos,
escritor, testigo presencial de muchas muertes violentas, escribe: tal vez los más puros e idealistas, sintiéndose incapaces de
“En la guerra he aprendido una cosa: cuando se toman resolver su dilema existencial por si mismos, se rebelan y
prisioneros y se interroga a los soldados del bando contra- adoptan una postura que proporciona un sentido trascen-
rio, siempre, siempre, siempre, se repite la misma pauta, el dente a sus vidas: fabrican explosivos, compran cuchillos,

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¿Por qué? Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:50-53. R. Bayés

asesinan infieles y se convierten en mártires6 sin dejar, pa- Como señala John Berger5, uno de los últimos hombres
ralelamente, de ser unas buenas personas en su entorno libres:
familiar y ciudadano. A partir del momento en el que su com- “Soy consciente de que hay algo que necesita ser dicho.
promiso con la yihad se ha hecho explícito ante los iguales Puede ser algo grande sobre el mundo, o algo sobre el as-
de su célula, es muy difícil volver atrás7,12. pecto de una flor en un jarro, por alguna razón o por otra.
La persona, cada persona, es un ser único y diferente, A veces me digo: quizá lo diga otro. Y a veces la respuesta
que quienes detentan en cada momento el poder intentan es no, si no lo dices tú, no será dicho. Y entonces tengo que
homogenizar y fidelizar a sus intereses o creencias. La posi- escribir”.
bilidad de crear un mundo mejor radica, a mi juicio, en nuestra Observar, escuchar, respetar, comprender, escribir, actuar,
capacidad para formar individuos independientes con sentido perdonar, abrazar. Para la vida; no para la muerte.
crítico, cuya misión sea ampliar el entendimiento – no el
enfrentamiento - entre las culturas y los pueblos, y dentro Barcelona, 29 de septiembre de 2017
de los mismos pueblos. En el día de mi 87 aniversario.

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NOTICIAS DE SALUD MENTAL PERINATAL

PERINATAL MENTAL HEALTH NEWS

G. Lasheras1,7, B. Farré-Sender2,7, E. Gelabert3,7, P. Navarro4,7, A. Roca5,7, E. Serrano-Drozdowskyj6,7


Psiquiatra. Hospital Universitario Dexeus (HUD). 2Psicólogo. HUD. 3 Psicóloga. Departament de Psicologia Clinica
1

i de la Salut. UAB. 4Psicóloga. Servei de Psicologia. Regidoria de Polítiques de Gènere. Ajuntament de Terrassa.
5
Psiquiatra. Consorcio Sanitario de Terrassa. Barcelona. 6Psiquiatra. Consulta del Dr. Carlos Chiclana. Madrid.
7
Sección de Salud Mental Perinatal y Reproductiva

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:54-63.
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PROGAMAS DE APOYO PARA PADRES de utilizar el afrontamiento activo, la planificación, el apoyo


Y ESTRATEGIAS DE AFRONTAMIENTO emocional e instrumental, la aceptación y el desahogo. Los
EN PADRES Y MADRES DE LA UCIN padres y madres jóvenes con más frecuencia utilizaban el
desahogo y la negación como estrategia, y aquéllos cuyos
PARENT SUPPORT PROGRAMS AND COPING hijos/as estaban menos tiempo ingresados utilizaban con
MECHANISMS IN NICU PARENTS más frecuencia la autodistracción y preferían grupos de apo-
yo para hablar con otros padres y madres.
E. Huenink, S. Porterfield
Según los autores, sus resultados indican que los padres
Adv Neonatal Care. 2017 Apr;17(2): E10-E18. y madres de las UCIN utilizan diferentes tipos de estrategias
Más de 3 millones de niños nacen en los Estados Unidos de afrontamiento. Algunos estudios previos han relacionado
cada año. Un 11% son prematuros y el 77% de ellos van estrategias de afrontamiento con ansiedad, depresión o estrés
a ingresar en Unidades de Cuidados Intensivos Neotatales postraumático por lo que parecería adecuada la promoción
(UCIN). Los padres y madres de estos niños tienen un mayor del uso de estrategias protectoras que podrían disminuir la
riesgo de depresión y de malestar emocional o distrés. Sus probabilidad de distrés emocional en los padres y madres de
dificultades de afrontamiento y su malestar se han relacio- las UCIN. Los programas de apoyo consistentes en aprender
nado, según la literatura, con consecuencias negativas en los los cuidados de los niños prematuros, podrían reforzar algunas
hijos/as (ej. alteraciones conductuales, peor desarrollo cog- estrategias como el afrontamiento activo y la planificación.
nitivo o dificultades en el vínculo materno-infantil). Si bien las Hablar con otros padres y madres de la UCIN ayudaría a ob-
UCIN se centran en la salud y cuidado del niño/a, la atención tener apoyo de otras personas, lo cual se ha relacionado con
y el cuidado de los padres y madres deberían considerarse. la disminución del distrés emocional. En cualquier caso, se
El primer objetivo de este trabajo fue identificar las estra- concluye que para el desarrollo de los programas de apoyo
tegias de afrontamiento utilizadas por los padres y madres de a los padres y madres del as UCIN deben considerarse las
los niños/as ingresados en la UCIN, así como identificar sus preferencias en el tipo de apoyo recibido, las estrategias de
preferencias en los programas de apoyo recibidos. El segundo afrontamiento utilizadas y los factores sociodemográficos.
objetivo fue determinar si las diferencias sociodemográficas o
la duración de la hospitalización, se asociaban a las estrategias
de afrontamiento utilizadas y/o el tipo de programas preferidos.
Para ello se diseñó un estudio transversal correlacional.
Los datos se recogieron en una muestra de padres y madres SÍNTOMAS DEPRESIVOS PATERNOS
(n=107) de una UCIN (nivel IV) de un hospital pediátrico de los DURANTE EL EMBARAZO Y DESPUÉS
Estados Unidos. Para evaluar las estrategias de afrontamiento DEL PARTO EN LOS PARTICIPANTES
se aplicó a los padres y madres la escala COPE reducida de 28 DEL ESTUDIO GROWING UP
ítems (COPE-28; Carver, 1989), que incluye 14 estrategias de
(NUEVA ZELANDA)
afrontamiento diferentes. Además, se añadieron 6 preguntas
para puntuar la preferencia de diferentes tipos de programas PATERNAL DEPRESSION SYMPTOMS DURING
de apoyo y 6 preguntas sobre datos sociodemográficos. PREGNANCY AND AFTER CHILDBIRTH AMONG
Los resultados obtenidos indican que las estrategias de PARTICIPANTS IN THE GROWING UP IN NEW
afrontamiento más utilizadas (media >4) por los padres y ZEALAND STUDY
madres de la UCIN fueron la aceptación, el apoyo emocional e
L. Underwood, K.E. Waldie, E. Peterson, S. D’Souza,
instrumental, la reinterpretación positiva, la religión y la plani-
M. Verbiest, F. McDaid, S. Morton
ficación. Los tipos de programas preferidos fueron las clases
de apoyo sobre el desarrollo infantil y hablar con otros padres JAMA Psychiatry. 2017 Apr 1;74(4):1-10.
y madres de la UCIN. Se hallaron algunas diferencias entre
el tipo de estrategias utilizadas y algunas variables sociode- La depresión perinatal es una condición frecuente y se
mográficas: Ser caucásico/a incrementaba la probabilidad ha asociado a consecuencias adversas tanto en las mujeres

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que la sufren como en su descendencia. La investigación res adversos en el ámbito social y relacional. Identificar
se ha centrado principalmente en la depresión materna y padres de riesgo, y aplicarles intervenciones específicas
existe poca evidencia sobre los síntomas depresivos en los antenatales o posnatales podría ser beneficioso para ellos
hombres durante el período perinatal. y sus familias.
El objetivo de este trabajo fue estudiar los síntomas de-
presivos durante el embarazo y el posparto de los padres y
sus factores asociados, así como explorar la relación entre
la depresión paterna y materna.
Para ello se analizaron datos de un estudio de cohortes NEUROBIOLOGÍA DE LA DEPRESIÓN
realizado en Nueva Zelanda (Growing Up Study) en muje- Y ANSIEDAD POSTPARTO
res embarazadas con fechas de parto entre el 25 de abril THE NEUROBIOLOGY OF POSTPARTUM ANXIETY
de 2009 y el 25 de marzo de 2010. La muestra analizada AND DEPRESSION
en este trabajo estuvo compuesta por 3523 hombres que
completaron entrevistas durante el embarazo de su pareja J.L. Pawluski, J.S. Lonstein, A.S. Fleming
y 9 meses después del nacimiento de su hijo. Los sínto- Trends Neurosci. 2017 Feb;40(2):106-120.
mas depresivos se midieron usando la Escala de Depresión
Postnatal de Edimburgo (EPDS) y el Cuestionario de Salud Entre el 10-20% de las mujeres en el posparto experimen-
del Paciente (PHQ-9), con puntos de corte para determinar tan ansiedad o trastornos depresivos, que pueden tener efec-
la presencia de síntomas depresivos elevados de EPDS>12 tos perjudiciales para la madre, el niño y la unidad familiar.
y PHQ-9>9 respectivamente. En este artículo se resumen los hallazgos más relevantes,
Los resultados obtenidos mostraron como el 2,3% de acerca de la neurobiología de la ansiedad (APP) y la depresión
los padres obtuvieron puntuaciones EPDS>12 durante el en el postparto (DPP), en base a los estudios de neuroimagen
tercer trimestre del embarazo de sus parejas y el 4,3% PHQ- y de modelos animales realizados hasta la fecha. Se plantean
9>9 a los 9 meses posparto. Los síntomas de depresión además interesantes áreas de investigación para el futuro.
paterna prenatal se asociaron con el estrés percibido (odds Los resultados de los diferentes estudios revisados pa-
ratio [OR]: 1,38; IC95%: 1,30-1,47) y una salud de regular a recen apuntar a que existen similitudes y diferencias en el
mala durante el embarazo de su pareja (OR: 2,06; IC95%: patrón de correlatos cerebrales de APP y DPP en compa-
1,18-3,61). Los síntomas de depresión paterna posnatal se ración con los mismos trastornos en otra época de la vida
asociaron con antecedentes de depresión (OR: 2,84; IC95%: de las mujeres (depresión mayor y trastorno de ansiedad
1,69-4,78), estrés percibido en el embarazo (OR:1,12; IC95%: generalizada).
1,08-1,17), no tener relación con la madre (OR: 6,36; IC95%: Las mujeres con DPP muestran una conectividad signi-
2,28-17,78), desempleo (OR:1,86, IC 95%, 1,11- 3,10) y una ficativamente más débil entre la amígdala (AMG), la corteza
salud de regular a mala (OR: 3,29; IC95%: 2,10-5,16) a los cingulada anterior (CCA), la corteza prefrontal lateral dorsal
9 meses posparto. (CPFDL) y el hipocampo, en comparación con las mujeres
Según los autores, las tasas reportadas por los padres no deprimidas durante el postparto.
fueron inferiores a las de las madres, así como equivalentes a Las áreas del cerebro mencionadas son clave para el
las reportadas por otros estudios en los que se han utilizado buen funcionamiento de las redes neuronales asociadas
las mismas medidas. La tasa de síntomas depresivos en el con la regulación del estrés, la recompensa, la motivación,
posparto fue más elevada que las del embarazo, si bien estos el procesamiento sensorial y el funcionamiento ejecutivo y,
resultados deben tomarse con cautela ya que se utilizaron por lo tanto, influyen en las conductas de maternaje y en la
diferentes medidas de evaluación. respuesta emocional a las señales del bebé.
En conclusión, los futuros padres tienen riesgo de Sabemos que los déficits en la función ejecutiva tienen
presentar síntomas depresivos en el embarazo, especial- un claro impacto en la calidad del comportamiento mater-
mente si perciben un alto estrés o una salud deficitaria. no exhibido durante el primer año posparto. Las madres
Los síntomas depresivos posparto se asocian a facto- deprimidas tienden a ser más intrusivas con el bebé y se

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irritan con más facilidad (aunque otras madres deprimidas ASOCIACIÓN DEL EMPLEO DE
son distantes y retraídas), y responden con menos sensi- ANTIDEPRESIVOS DURANTE LA
bilidad, con menor capacidad de contención y de manera GESTACIÓN CON LA DISCAPACIDAD
más negativa a sus bebés en comparación con madres no
INTELECTUAL EN LA DESCENDENCIA
deprimidas. Las díadas madre-hijo “deprimidas” exhiben
una reducción en la atención mutua, de las comunicaciones ASSOCIATION OF ANTIDEPRESSANT MEDICATION USE
vocales y visuales, de las interacciones conmovedoras y DURING PREGNANCY WITH INTELLECTUAL DISABILITY
de las sonrisas en comparación con las díadas “no depri- IN OFFSPRING
midas”.
En la depresión (DPP) y la ansiedad en el postparto, los
A. Viktorin, R. Uher, A. Kolevzon, A. Reichenberg,
estudios de neuroimagen indican un cambio en la activa-
S.Z. Levine, S. Sandin
ción en respuesta a las señales relacionadas con el bebé o JAMA Psychiatry. 2017 Oct 1;74(10):1031-1038.
no relacionadas (por ejemplo, la activación de la amígdala
aumenta en respuesta a las señales emocionales del bebé, Diversos estudios han asociado el uso de antidepresivos
pero disminuye en respuesta a señales emocionales no durante el embarazo con efectos adversos en la descenden-
relacionadas con el bebé) en comparación con las muje- cia. El presente estudio tiene como objetivo examinar la aso-
res que no presentan este tipo de trastornos. A su vez, los ciación entre el uso de antidepresivos durante el embarazo y
modelos animales de depresión postparto (depresión-like) la presencia de discapacidad intelectual en la descendencia,
muestran alteraciones en la neuroplasticidad del cerebro e investigar la posible influencia de la enfermedad mental
materno y alteraciones en el sistema serotoninérgico y el parental en dicha asociación.
eje hipófiso-hipotálamo-adrenal. Los hallazgos más recien- Se trata de estudio poblacional de 179. 007 niños nacidos
tes indican modificaciones en la plasticidad sináptica, la entre el 1 de enero de 2006 y el 31 de diciembre de 2007,
densidad sináptica y la densidad de las proteínas sináp- con información completa de los padres procedentes de los
ticas, en las áreas prefrontales, el núcleo accumbens, la registros nacionales suecos, que fueron seguidos desde el
amígadala y el hipocampo; todas estas áreas se corres- nacimiento hasta el 2014.
ponden con las que presenta una actividad alterada en los Se calcularon los riesgos relativos (RR) con un interva-
estudios de RMNf en madres con DPP en comparación lo de confianza del 95% (IC95%) de presentar DI en niños
con madres sanas. expuestos durante el embarazo a cualquier antidepresivo o
En la revisión, concluyen que existen pocos estudios específicamente a los antidepresivos inhibidores selectivos
acerca de la neurobiología de DPP y APP, subrayan que las de la recaptación de serotonina (ISRS), todos los demás an-
diferencias en el patrón de correlatos neurales con respec- tidepresivos no ISRS u otros medicamentos psicotrópicos no
to a trastornos ansiosos o depresivos en otros periodos de antidepresivos. Los análisis se ajustaron para los posibles
la vida de la mujer podrían indicar una etiología diferente y factores de confusión. Además de los análisis de la pobla-
sugieren que se debería considerar el uso de tratamientos ción, se empleó una submuestra para comparar a las madres
diferentes. Asimismo, sería importante tener en cuenta las que usaron antidepresivos durante el embarazo con madres
particularidades fisiológicas de este periodo, como los cam- que tenían al menos un diagnóstico de depresión o ansiedad
bios neurohormonales, en la fisiopatología de la DPP y APP antes del parto pero que no tomaron antidepresivos durante
de cara al diseño de nuevos tratamientos. el embarazo.
Se necesitarían más estudios que permitan comprender Los resultados del estudio muestran que de los 179.007
mejor la compleja interacción entre la salud mental materna, niños incluidos en el estudio (edad media [desviación están-
la relación madre-hijo y los mecanismos neurobiológicos que dar] al final del seguimiento, 7,9 [0,6] años, 92.133 [51,5%]
los median. Estos estudios servirían de base para el desarro- varones y 86.874 [48,5%] mujeres), la DI fue diagnosticada
llo de tratamientos más efectivos y seguros y, por lo tanto, en 37 niños (0.9%) expuestos a antidepresivos y en 819 niños
para mejorar la salud y el bienestar de la madre, el bebé y (0.5%) no expuestos a antidepresivos. Tras ajustarlo para los
de la unidad familiar. posibles factores de confusión, el RR de DI después de la

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exposición a antidepresivos se estimó en 1,33 (IC95%, 0,90- un trastorno del estado de ánimo (trastorno depresivo ma-
1,98) para la muestra de población completa y de 1,64 (IC95%, yor o trastorno bipolar, según criterios DSM-IV-TR) tenían
0,95-2,83) en la submuestra de mujeres con depresión sin más signos de SDN que los bebés de un grupo no expuesto,
tratamiento farmacológico. Los resultados de los análisis de evaluados a las 2-4 semanas del nacimiento.
los subgrupos de exposición a antidepresivos ISRS, antide- Método: Se trata de una muestra de dos estudios ob-
presivos no ISRS y psicotrópicos no antidepresivos, y en la servacionales formada por 214 mujeres. Se clasificaron
submuestra clínicamente relevante, no se desviaron de los en 3 grupos según la exposición durante el embarazo: (1)
resultados de la muestra completa. COMPARACIÓN (N = 79): mujeres que no tomaron psicofár-
En conclusión, este estudio de cohortes poblacional ha macos durante el embarazo ni tuvieron trastorno del estado
sido el primero en evaluar directamente el RR de la DI en la de ánimo; (2) IRS (N = 41): mujeres expuestas a ISRS en mo-
descendencia de madres tratadas con antidepresivos durante noterapia durante el embarazo por un trastorno del estado de
el embarazo. Se encontró un mayor RR de DI entre los niños ánimo; y (3) TRASTORNO DEL ÁNIMO (N = 43,9%): mujeres
nacidos de madres tratadas con antidepresivos durante el con Trastorno depresivo mayor o Trastorno bipolar que no
embarazo en comparación con las no tratadas con antidepre- tomaron psicofármacos durante la gestación. La mayoría de
sivos durante el embarazo antes del ajuste por los factores mujeres del grupo ISRS tomaron tratamiento a lo largo de
de confusión. Sin embargo, con el ajuste incremental de los todo el embarazo; los tratamientos fueron sertralina (n = 20),
factores de confusión maternos y paternos, esta asociación fluoxetina (n = 10), escitalopram (n = 4), venlafaxina (n = 3),
se atenuó gradualmente llegando a un RR estadísticamente citalopram (n = 2), fluvoxamina (n = 1) y paroxetina (n = 1).
no significativo. Por lo tanto, la asociación entre la DI de la Se evaluó la presencia de signos de discontinuación con la
descendencia y la exposición a los antidepresivos durante el Escala de Finnegan por evaluadores ciegos a la exposición
embarazo puede explicarse, en gran medida, por la confusión materna, entre las 2-4 primeras semanas de nacimiento.
de las covariables incluidas y ajustadas en los análisis, como, Se consideró presencia de signos las puntuaciones ≥ 2 en
por ejemplo, la edad de los padres y el trastorno psiquiátrico la Escala de Finnegan (se decidió dicotomizar la variable ya
de la madre. que dos tercios de la muestra presentaban puntuaciones
entre 0 y 1).
Resultados: Las tasas de signos de SDN en los tres gru-
pos fueron similares, 30,4% el grupo comparación, 34,1% en
grupo expuesto a antidepresivos y 35.1% en grupo de tras-
SÍNDROME DE DISCONTINUACIÓN torno del ánimo (p = 0,797). En el grupo de expuestos a ISRS,
NEONATAL EN NEONATOS EXPUESTOS las tasas de signos de discontinuación fueron del 20% para
A ANTIDEPRESIVOS SEROTONINÉRGICOS la fluoxetina respecto al 38,7% para los bebés expuestos a
antidepresivos de vida media más corta, sin embargo, la di-
NEONATAL DISCONTINUATION SYNDROME IN
ferencia no fue significativa (p = 0,278).
SEROTONERGIC ANTIDEPRESSANT-EXPOSED NEONATES
Las mujeres del grupo ISRS tuvieron una mayor tasa de
A. Yang, J.D. Ciolino, E. Pinheiro, nacimientos prematuros (24,4%) en comparación con los
L.J. Rasmussen-Torvik, D.K.Y. Sit, K.L. Wisner otros 2 grupos (7,4% y 8,9% en los grupos trastorno del ánimo
y comparación, respectivamente, p = 0,012). Al comprar la
J Clin Psychiatry. 2017 May;78(5):605-611.
presencia de signos de síndrome de discontinuación entre
El Síndrome de discontinuación neonatal (SDN) o de los recién nacidos pretérminos y los recién nacidos a término
pobre adaptación neonatal ha sido asociado a la exposi- se observó que los bebés prematuros tenían más signos que
ción prenatal a antidepresivos. Los signos del SDN incluyen los nacidos a término (54% vs 31%, p = 0,020), existiendo
principalmente tres sistemas: sistema nervioso central, neu- una relación significativa entre los signos de Finnegan y el
romuscular, y gastrointestinal. nacimiento prematuro. Este efecto fue uniforme en los tres
En este estudio evalúan si los bebés expuestos in útero grupos. Cuando se ajustó el análisis de regresión logísti-
a los Inhibidores de la Recaptación de Serotonina (IRS) o a ca multivariante por factores de confusión (prematuridad,

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edad materna y raza), la asociación de los signos de SDN a En los últimos años, varios investigadores han centrado
la exposición (antidepresivos o trastorno del ánimo) no fue la atención en el impacto de la exposición al estrés prenatal
significativa. sobre el sistema límbico y regiones conectadas con éste. Los
Conclusiones: Los autores del estudio concluyeron que principales estudios de RMN sobre el impacto de EPEM en el
la presencia de signos de discontinuación neonatal a las 2-4 desarrollo cerebral se pueden clasificar según el momento
semanas del nacimiento está más asociada con la prema- en que es evaluada la descendencia:
turidad que con la exposición intrauterina a antidepresivos
o al trastorno del estado de ánimo no tratado. Esto se podría ESTUDIOS EN LACTANTES
deber a que algunos signos relacionados con la exposición A partir de un estudio de cohorte prospectivo de una
a antidepresivos se resolvieran antes de las dos semanas, muestra de embarazadas asiáticas, se realizaron cinco es-
mientras que posteriormente persistieran los asociados a tudios en que evaluaron el efecto de la ansiedad y/o la depre-
la prematuridad. sión en el neurodesarrollo de los bebés desde el nacimiento
hasta los 6 meses de vida.
Los hallazgos principales de estos estudios fueron:
• Puntuaciones elevadas en depresión a las 26 semanas de
gestación se asociaron a alteraciones a nivel microestruc-
¿EL ESTRÉS PRENATAL ALTERA EL tural de la amígdala derecha, una región relacionada con la
DESARROLLO DEL “CONECTOMA”? reactividad al estrés y la vulnerabilidad de los trastornos del
estado de ánimo.
DOES PRENATAL STRESS ALTER THE DEVELOPING
• La ansiedad materna prenatal no influyó en el volumen bila-
CONNECTOME?
teral del hipocampo al nacer, pero los hijos de mujeres con
D. Scheinost, R. Sinha, S.N. Cross, S.H. Kwon, mayor ansiedad durante el embarazo mostraron un creci-
miento más lento de los hipocampos entre el nacimiento y
G. Sze, R.T. Constable, L.R. Ment
la edad de 6 meses.
Pediatr Res 2017 Jan;81(1-2):214-226.
• Niveles elevados de ansiedad a las 26 semanas de gestación
El neurodesarrollo humano requiere la organización de se asociaron a alteraciones microestructurales del córtex
prefrontal y de regiones importantes para el procesamien-
elementos neuronales en complejas redes estructurales y
to sensorial (corteza occipital media derecha), y la función
funcionales llamadas conectoma”. Mientras que el desa-
socio-emocional (giro angular derecho, fascículo uncinado,
rrollo del conectoma depende de muchos factores, algu- cingulado posterior y parahipocampo) a los 5 -17 días de
nos autores sugieren que la exposición prenatal al estrés vida.
materno (EPEM) podría jugar un papel fundamental. Los
síntomas relacionados con el estrés son comunes en las
mujeres durante el embarazo, y son factores de riesgo para ESTUDIOS DURANTE LA INFANCIA
trastornos neurocomportamentales como el trastorno del Un estudio prospectivo, realizado en 35 díadas madre-hi-
espectro autista, el trastorno de hiperactividad con déficit jo, evaluó el efecto de la depresión y la ansiedad en el neu-
de atención, las adicciones, e incluso para la depresión rodesarrollo de los niños/as entre los 6 y 10 años de edad.
mayor y la esquizofrenia. Las investigaciones experimen- Los principales hallazgos del estudio fueron:
tales en modelos animales, asocian la EPEM no solo a un • La ansiedad a las 19 semanas de gestación correlaciona-
impacto en las funciones endocrinas maternas y la “repro- ba con reducciones de materia gris en córtex prefrontal,
gramación” del eje HHA fetal, sino también cambios en la corteza premotora, lóbulo temporal medial, corteza tem-
corticogénesis que contribuyen a efectos duraderos sobre poral lateral, giro post-central y a nivel del cerebelo. Sin
el cerebro y el comportamiento. Esta reciente revisión se embargo, la ansiedad materna a las 25 y 31 semanas de
centra en evaluar el impacto del estrés materno en el de- gestación no se asoció a estas reducciones de sustancia
gris, sugiriendo la importancia de la exposición precoz al
sarrollo cerebral fetal mediante técnicas de neuroimagen
estrés materno.
estructural y funcional.

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Notícias de salud mental perinatal Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:54-63 G. Lasheras y cols.

• Elevadas puntuaciones de depresión a las 25 semanas de problemas de comportamiento infantil (PCI). Sin embargo,
gestación se asociaban con cambios morfológicos cere-
la depresión materna sufre variaciones desde el embarazo
brales (disminución del grosor de la corteza) en los niños/
hasta bien avanzado el postparto. El presente estudio inves-
as.
tiga si las asociaciones entre los PCI -que lo miden mediante
• La depresión prenatal materna correlacionó significativa-
el concepto de internalización, caracterizado por estados
mente con las conductas externalizantes de los niños/as,
de ánimo negativos e inhibición del comportamiento, y por
asociación mediada por los cambios estructurales.
externalización, refiriéndose a un estado de desinhibición del
comportamiento-, y la depresión materna, se mantienen en
ESTUDIOS DURANTE LA EDAD ADULTA un diseño longitudinal prospectivo ajustado por confusión
Un estudio retrospectivo valoró la relación entre la EPEM familiar. Los objetivos del estudio fueron tres: investigar
y volúmenes corticales en una muestra de 35 mujeres sanas las asociaciones entre los síntomas de depresión mayor
de 14-40 años. Se realizó una entrevista semiestructurada prenatal, posparto o concurrente, y los problemas de inter-
para evaluar los eventos estresantes durante la gestación a nalización y externalización, respectivamente; aclarar si las
sus madres. Puntuaciones elevadas de EPEM se asociaron asociaciones pueden ser debido a un factor de confusión
a la reducción de volumen de sustancia gris en el lóbulo familiar; e investigar si las asociaciones dependen de la
temporal medial izquierdo y en ambas amígdalas. edad del niño.
Los autores concluyen que la exposición prenatal al es- La muestra incluyó a 11.599 familias, incluyendo 17.830
trés materno se asocia a alteraciones del conectoma de los hermanos del estudio de cohortes madre e hijo en población
bebés expuestos en áreas relacionadas con la regulación de noruega. Las madres fueron evaluadas en las semanas de
la conducta y de las emociones. Se debe tener en cuenta que gestación 17 y 30, así como a los 6 meses, 1.5, 3 y 5 años
la asociación entre la EPEM y las alteraciones del conectoma, después del parto. La depresión de los padres se midió
pueden estar moderadas por el sexo fetal y por el momento en la semana 17 de gestación. En los últimos tres puntos
de exposición, siendo necesarios más estudios para incluir temporales, se evaluaron al mismo tiempo los problemas
y evaluar estos factores. Asimismo, los mecanismos por los de internalización y externalización de la descendencia. Se
cuales el estrés materno puede alterar el conectoma deben realizaron análisis multinivel para tratar el concepto inter-
ser explorados. nalizar y externalizar por separado, utilizando la depresión
parental como predictores. Los análisis se repitieron utilizan-
do un diseño de comparación entre hermanos para ajustar
la confusión familiar.
En los resultados, respecto al primero de los objetivos,
SÍNTOMAS DEPRESIVOS PERINATALES Y todos los puntos temporales en los que se midieron los sín-
CONCURRENTES, Y PROBLEMAS tomas depresivos, se asociaron significativa y positivamente
DE CONDUCTA INFANTIL: UN ESTUDIO con los problemas de internalización y externalización del
DE COMPARACIÓN ENTRE HERMANOS niño. Sin embargo, después de la comparación entre herma-
nos, solo la depresión materna se asoció significativamente
MATERNAL PERINATAL AND CONCURRENT con la internalización [estimación = 2,82 (1,91-3,73, IC 95%)]
DEPRESSIVE SYMPTOMS AND CHILD BEHAVIOR y problemas de externalización [estimación = 2,40 (1,56-
PROBLEMS: A SIBLING COMPARISON STUDY 3,23, IC 95%)]. El efecto de la depresión materna concurrente
sobre los problemas de internalización aumentó con la edad
L.C. Gjerde, E. Moen Eilertsen, T. Reichborn-Kjennerud,
del niño. Los autores concluyen que los hallazgos encon-
T.A. McAdams, H. Daae Zachrisson, I.M. Zambrana,
trados no respaldan la noción de que la depresión materna
E. Røysamb, K.S. Kendler, E. Ystrom
perinatal es particularmente perjudicial para el desarrollo
Journal of Child Psychology and Psychiatry 58:7 (2017), pp 779–786. psicológico de los niños, ya que los efectos más fuertes
Estudios previos han encontrado asociaciones signifi- los encontraron en la depresión materna durante los años
cativas entre la depresión prenatal y posparto materna y los preescolares.

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ASOCIACIÓN DEL AUMENTO DE PESO Según los resultados, entre las personas con psicosis
GESTACIONAL E ÍNDICE DE MASA no afectiva, 184 (6,32%) tenían madres con un APG extre-
CORPORAL MATERNA EN EL EMBARAZO madamente inadecuado (<8 kg para las madres con un IMC
basal normal), en comparación con 23.627 (4,52%) de las
TEMPRANO CON RIESGO DE PSICOSIS NO
personas no afectadas. El APG extremadamente inadecua-
AFECTIVA EN LA DESCENDENCIA do se asoció con un mayor riesgo de psicosis no afectivas
ASSOCIATION OF GESTATIONAL WEIGHT GAIN AND entre la descendencia con los modelos ajustados (HR, 1,32,
MATERNAL BODY MASS INDEX IN EARLY PREGNANCY IC 95%, 1,13-1,54) y con el análisis de emparejamiento con
WITH RISK FOR NONAFFECTIVE PSYCHOSIS los hermanos (CRI, 1,61, IC 95%, 1,02-2,56). También la del-
IN OFFSPRING gadez materna al principio del embarazo se asoció, aunque
de forma débil, con el riesgo de sufrir psicosis no afectiva
E. Mackay, MSc, C. Dalman, MD, PhD, H. Karlsson, en la descendencia (HR para IMC 17.0 y <18.5, 1.21, IC 95%,
PhD, R.M. Gardner, PhD 1.01-1.45), al igual que la delgadez grave paterna (HR para
JAMA Psychiatry. doi:10.1001/jamapsychiatry.2016.4257. IMC <16.0, 2,53; IC del 95%, 1,26 a 5,07) en modelos ajustados
mutuamente. En el análisis de emparejamiento de hermanos,
La exposición prenatal a la mala alimentación está aso- no se observó asociación entre el bajo peso materno (HR,
ciada con un riesgo dos veces mayor de psicosis no afecti- 1.46, IC 95%, 0.90-2.35), sobrepeso (HR, 1.11, IC 95%, 0.73-
vas. Sin embargo, se tiene menos información acerca de si 1.68) u obesidad (HR, 0.56; 95 % CI, 0.23-1.38) y el riesgo de
los estados de nutrición materna durante el embarazo modi- psicosis no afectiva en la descendencia.
fican (o no) el riesgo para la descendencia de sufrir episodios En la discusión, sin embargo, los autores explican que los
de psicosis no afectivas en poblaciones bien alimentadas. resultados de estudios de comparación de familias indican
El objetivo de este estudio fue determinar si el aumento que las asociaciones entre el IMC materno y el riesgo de psi-
de peso gestacional (APG) durante el embarazo y el índice cosis no efectiva en la descendencia están al menos parcial-
de masa corporal (IMC) materno al inicio del embarazo se mente confundidos por factores genéticos u otros factores
puede asociar con el riesgo de sufrir psicosis no afectivas familiares compartidos. El único estudio hasta la fecha que
en la descendencia. considera una correlación potencial entre los determinantes
Este estudio de cohortes utilizó datos de registros suecos genéticos del IMC y el riesgo de esquizofrenia informó una
de salud para realizar el seguimiento de 526 042 individuos asociación inversa. También incluyen la evidencia sobre el
nacidos entre enero de 1982 y diciembre de 1989, hasta el hecho de que las psicosis no afectivas tienen una alta carga
31 de diciembre de 2011. Se excluyeron a aquellos que, antes genética y los antipsicóticos tradicionales pueden llevar a
de los 13 años, habían emigrado o fallecido. Para el análisis un aumento de peso pronunciado, por lo que la causalidad
estadístico se realizaron modelos de regresión de riesgos estaría en entredicho.
proporcionales de Cox ajustados para el estado socioeconó-
mico. Los posibles factores de riesgo fueron controlados para
examinar el riesgo real de desarrollar episodios de psicosis no
afectivas. Así mismo, se usaron diseños de estudios basados
en la familia para probar una mayor causalidad. Se midió el ASOCIACIÓN ENTRE LA DURACIÓN DE
aumento de peso gestacional durante el embarazo, índice de LACTANCIA MATERNA Y DESARROLLO
masa corporal materna en la primera visita prenatal (antes COGNITIVO, RASGOS AUTISTAS Y
de las 12 semanas) y el índice de masa corporal paterna en SÍNTOMAS DE TDAH: ESTUDIO
el momento del reclutamiento en el ejército sueco (a los 18
MULTICÉNTRICO EN ESPAÑA
años de edad). Los 526.042 individuos en la cohorte (48.52%
mujeres y 51.47% hombres, con una media de edad de 26 ASSOCIATION BETWEEN BREASTFEEDING DURATION
años), incluyó 2910 personas (0.55% de la muestra total) con AND COGNITIVE DEVELOPMENT, AUTISTIC TRAITS AND
psicosis no afectivas al final de seguimiento. ADHD SYMPTOMS: A MULTICENTER STUDY IN SPAIN

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O. Boucher, J. Julvez, M. Guxens, E. Arranz, dónde se parió, paridad, madre fumadora) recogidas durante el
J. Ibarluzea, M. Sánchez de Miguel, primer y tercer trimestre del embarazo y cuando la descendencia
A. Fernández-Somoano, A. Tardon, tenía 14 meses y 4 años de edad; y también por el IQ verbal
M. Rebagliato, R. Garcia-Esteban, G. o’Connor, materno (mediante escala de similitudes del WAIS-III) y la psi-
F. Ballester, J. Sunyer copatología materna (SCL-90-R) evaluada cuando la descencia
Pediatric Research 2017. doi:10.1038/pr.2016.238 tenía 4 años. Se utilizaron modelos de regresión logística.
Respecto a los resultados principales, la muestra final
Varios estudios han hallado que cuanto más prolongada estuvo compuesta por 1.346 hijos nacidos a término (≥ 37se-
es la lactancia materna mejor es el rendimiento intelectual en manas) y con una edad media de 4.9 años. Tras ajustar por
los hijos. Por el contrario, pocos estudios han investigado los todas las covariables, la mayor duración de la dieta con lac-
posibles efectos protectores de la lactancia materna en pro- tancia materna, tanto combinada, predominante o exclusiva,
blemas conductuales tales como los síntomas del trastorno estuvo independientemente asociada con mejor desarrollo
por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y menos aún cognitivo (MSCA) y con menos rasgos autistas (CAST) en
en los rasgos de los trastornos del espectro autista. los hijos. Además la mayor duración de la lactancia materna
Este estudio tiene como objetivo examinar la asociación combinada y exclusiva se asociaron con menor tiempo de
entre la duración de la lactancia materna y el desarrollo cog- reacción en las pruebas de K-CPT. Ninguna de las asocia-
nitivo, la atención, los síntomas TDAH y los rasgos autistas. ciones entre la duración de la lactancia materna y los sínto-
Se utilizaron los datos del Proyecto Infancia y Medio Am- mas de TDAH permanecieron significativas en los modelos
biente (INMA), estudio multicéntrico prospectivo de cohortes ajustados finales.
de nacimiento realizado en España. Las cohortes incluidas en En conclusión, este estudio proporciona evidencia adicio-
este estudio procedian de las áreas geográficas de Asturias, nal de que la lactancia materna tiene una asociación positi-
Guipuzcua, Sabadell y Valencia, recogidas entre los años 2003 y va con el funcionamiento cognitivo, que aparte de factores
2008. Los criterios de inclusión fueron las mujeres mayores de socio-ambientales, también sugiere un rol protector de los
16 años, intención de parir en el hospital de referencia, capaci- rasgos autistas. Los resultados están de acuerdo con la reco-
dad para comunicarse en castellano u otras lenguas oficiales mendación de prolongar la lactancia materna para promover
de la región, embarazo único, con parto no instrumentalizado. el desarrollo del bebé.
Las mujeres fueron reclutadas durante la visita prenatal en el
primer trimestre del embarazo y fueron seguidas durante el
embarazo y los hijos desde el parto hasta los 4 años de edad.
Se evaluó la duración y el tipo de alimentación de los hijos
a través de cuestionarios cumplimentados por las madres ESTIMACIÓN DE LA PREVALENCIA
en tres ocasiones: cuando los hijos tenian 6 meses de edad MUNDIAL, NACIONAL Y REGIONAL
(subcohorte de Sabadell y Asturias), a los 14 meses y a los DE USO DE ALCOHOL DURANTE EL
4 años en todas las cohortes. Se consideraron tres tipos de EMBARAZO Y SÍNDROME DE
dieta con leche materna en los hijos: 1) lactancia materna
ALCOHOLISMO FETAL: REVISIÓN
combinada o no con otras dietas; 2) lactancia materna pre-
dominante, permitiendo suplementos líquidos distintos a la
SISTEMÁTICA Y METANÁLISIS
leche (zumos de frutas, rehidratacion con soluciones salinas, ESTIMATION OF NATIONAL, REGIONAL, AND GLOBAL
gotas, jarabes); 3) lactancia materna exclusiva. Los hijos fue- PREVALENCE OF ALCOHOL USE DURING PREGNANCY
ron evaluados mediante las McCarthy Scales of Children’s AND FETAL ALCOHOL SYNDROME: A SYSTEMATIC
Abilities (MSCA), Conners Kiddie Continuous Performamce REVIEW AND META-ANALYSIS
Tests (K-CPT), una lista de síntomas del TDAH según criterios
DSM, y el Chilhood Autism Spectrum Test (CAST). S. Popova, S. Lange, Ch. Probst, G. Gmel, J. Rehm
Los análisis se ajustaron por diferentes variables confusoras Lancet Glob Health 2017. http://dx.doi.org/10.1016/S2214-
(nivel educativo de los padres, clase social, edad materna, ciudad 109X(17)30021-9.

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El uso de alcohol durante el embarazo es una causa di- por cada caso de FAS. Para obtener el intervalo de confianza
recta del síndrome de alcoholismo fetal (FAS). Los objetivos de la prevalencia puntual de FAS de cada país, se utilizaron
de este estudio fueron estimar en la población general la simulaciones de Monte Carlo. Se estimaron las prevalencias
prevalencia de uso de alcohol durante el embarazo y la pre- promedio de uso de OH durante el embarazo y de FAS, mun-
valencia de FAS; asimismo, y mediante la unión de estos dos dial y por regiones de la OMS, ponderando por el número de
indicadores, estimar el número de embarazadas que con- nacidos vivos de cada país.
sumen alcohol durante el embarazo por cada caso de FAS. Respecto a los resultados, de los 23.470 estudios identi-
Los autores inician el estudio realizando dos búsquedas ficados sobre prevalencia de uso de OH durante el embarazo,
sistemáticas e independientes de la literatura. Para ello, utili- se seleccionaron 328 para realizar la revisión sistemática y
zaron diferentes bases de datos electrónicas con el objetivo el metanálisis. Estos incluyeron a 50 países que representa-
de identificar estudios cuantitativos originales realizados en ron a seis regiones de la OMS (África, Mediterráneo Oriental,
la población general sobre la prevalencia de uso de OH en el Europa, América, Sudeste Asiático, Pacífico Oeste). La estra-
embarazo, y publicados en revistas peer-reviewed desde el tegia de búsqueda para la prevalencia de FAS obtuvo 11.110
1 de enero de 1984 hasta el 30 de junio de 2014; y también estudios, de los cuales 62 fueron utilizados para el análisis.
sobre la prevalencia de FAS publicados desde el 1 de no- En la población general, los cinco países con mayor pre-
viembre de 1973 hasta el 30 de junio de 2015. Cada estudio valencia de uso de OH durante el embarazo fueron Rusia,
sobre la prevalencia de uso de OH durante el embarazo fue Reino Unido, Dinamarca, Belgrado e Irlanda, todos ellos perte-
valorado de manera crítica utilizando un cuestionario para necientes a Europa. Los cinco países con menor prevalencia
estudios observacionales; así mismo, cada estudio sobre de uso de OH fueron Omán, Emiratos Árabes, Arabia Sau-
la prevalencia del FAS fue valorado críticamente utilizando dí, Qatar y Kuwait. Los cinco países con mayor prevalencia
un método diseñado específicamente para las revisiones de FAS por cada 10.000 habitantes fueron Belgrado, Italia,
sistemáticas que abordan cuestiones de prevalencia. Se Irlanda, Croacia, y Sudáfrica y los cinco países con menor
descartaron aquellos estudios que utilizaron muestras de prevalencia de FAS fueron Oman, emiratos Árabes, Arabia
población no extrapolables a la población general de cada Saudí, Qatar y Kuwait. La prevalencia mundial de uso de OH
país respectivo, informaron de una estimación agrupada durante el embarazo fue de 9,8% (IC 95%: 8,9-11,1) y la pre-
combinando varios estudios o fueron publicados en itera- valencia de FAS fue 14,6 por cada 10.000 habitantes (IC 95%:
ción. Posteriormente, realizaron un metanálisis de efectos 9,4-23,3). También se estimó que una de cada 67 mujeres
aleatorizados para cada país específico con objeto de es- que consumieron OH durante el embarazo tendría un hijo
timar la prevalencia agrupada de estos indicadores. Para con FAS, lo cual supone que a nivel mundial cada año nacen
los países con uno o ningún estudio empírico, se utilizó un 119.000 niños con FAS.
modelo de regresión de respuesta fraccional para predecir En conclusión, el uso de OH durante el embarazo es fre-
la prevalencia de uso de OH durante el embarazo; y para la cuente en muchos países y, por tanto, el FAS es un defec-
prevalencia de FAS se utilizó el cociente del número prome- to de nacimiento relacionado con el alcohol relativamente
dio de mujeres que consumieron OH durante el embarazo prevalente.

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NOTICIAS
DE PSICOSOMÁTICA Nº 3

PSYCHOSOMATIC NEWS

Gemma Mestre, Iris Tolosa


Psicóloga H.U.D

LEER

ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:64-67.
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PERSONALITY AND MENTAL HEALTH y sustancias están mediando la asociación entre BN y conductas
BÚSQUEDA DE NOVEDAD antisociales.
Y COMPORTAMIENTO ANTISOCIAL El estudio de la BN puede ser un endofenotipo útil para investi-
gar la causalidad de comportamientos externalizantes.
HIGH NOVELTY SEEKING AS A PREDICTOR OF
ANTISOCIAL BEHAVIOUR IN EARLY ADULTHOOD
PERSONALITY AND MENTAL HEALTH
Elevada búsqueda de novedad como predictor de la
conducta antisocial en la adultez temprana BARRERAS INTERPERSONALES
Y TRASTORNO LÍMITE DE PERSONALIDAD
J. Foulds, J. Boden, J. Horwood, R. Mulder
INTERPERSONAL BARRIERS TO RECOVERY FROM
DOI: 10.1002/pmh.1393
BORDERLINE PERSONALITY DISORDER: A QUALITATIVE
Keywords: novelty seeking, ANALYSIS OF PATIENT PERSPECTIVES
antisocial behaviour, early adul-
A. Carmel, N.I. Torres, S. Chalker, K.A. Comtois
thood, alcohol, substance use
disorder DOI: 10.1002/pmh.1397
Palabras clave: búsqueda
de novedad, conducta antisocial, Keywords: borderline perso-
adultez temprana, alcohol, tras- nality disorder, patients, treatment
torno por consumo de sustancias Palabras clave: trastorno lí-
Diversos modelos teóricos y mite de la personalidad, pacien-
estudios científicos han conside- tes, tratamiento
rado las variables de personalidad En los últimos años, la comu-
como determinantes del compor- nidad científica ha determinado
tamiento delictivo. Según el mo- que los factores socioambien-
delo psicobiológico de la personalidad de Cloninger, la personalidad tales son una parte integral en
se distribuye en dimensiones de temperamento y de carácter. El el proceso de recuperación para
modelo revisado de Cloninger incluye 4 dimensiones de tempera- las personas con enfermedades
mento (búsqueda de novedad, evitación del riesgo, dependencia de psiquiátricas. Sin embargo, exis-
la recompensa y persistencia) y 3 dimensiones de carácter (autodi- ten pocos estudios que tengan como objetivo principal obtener las
rección, cooperación y trascendencia). Concretamente, el presente perspectivas de los pacientes sobre cómo su entorno social y de
estudio se focaliza en la dimensión temperamental de búsqueda de tratamiento facilita o impide el proceso de recuperación.
novedad (BN) con el objetivo de examinar la asociación entre ésta El presente estudio examinó las barreras interpersonales auto-
y los comportamientos antisociales en jóvenes entre 18 y 35 años. reportadas para la recuperación en una muestra de 31 participantes
La BN se midió a los 16 años utilizando el Cuestionario de con trastorno límite de la personalidad que recibían terapia dialéc-
Personalidad Tridimensional y los comportamientos antisociales, tico-conductual. El objetivo del estudio fue identificar el comporta-
consumo de alcohol y uso de substancias se midieron a través de miento problemático autoinformado que interfería en mayor medida
autoinformes a las edades de 18, 21, 25, 30 y 35. con los objetivos de recuperación, así como identificar los tipos de
Las puntuaciones más elevadas en BN se asociaron con una comportamiento de la familia, amigos y clínicos que aumentan la
mayor incidencia de todas las formas de comportamiento antisocial. probabilidad de que los pacientes lleven a cabo estas conductas
El asalto, robo, daño a la propiedad y deshonestidad continuaron problemáticas.
asociados con la BN después del ajuste por factores individuales, Tras un análisis de contenido se identificaron tres detonantes
en cambio, tras un ajuste adicional del trastorno por consumo de de comportamiento problemático: (1) conductas de evitación, (2)
alcohol y sustancias, la BN no se asoció con ningún comporta- estrategias de afrontamiento negativas y (3) comunicación de ex-
miento antisocial. Así pues, los trastornos de consumo de alcohol pectativas. En esta línea, una barrera central para la recuperación

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entre los pacientes con trastorno límite de la personalidad era la niños), un estudio prospectivo de cohortes. Una vez por trimestre, las
percepción de las personas del entorno. El estigma negativo aso- mujeres completaron cuestionarios sobre diferentes medidas psico-
ciado a la enfermedad mental afecta notablemente a las personas métricas, incluida la Escala de estrés percibido (PSS). Se observó una
diagnosticadas con una enfermedad mental, dificultando su inte- disminución significativa del estrés percibido a lo largo del embarazo.
gración social así como su recuperación clínica. Las mujeres que dieron a luz su primer hijo tenían puntuaciones de
Estos hallazgos explicitan la necesidad de concienciar a la estrés más bajas en comparación con las mujeres que ya tenían
población de la presencia de enfermedades mentales y desarro- uno o más hijos. Se observó una disminución de estrés significativa
llar programas de prevención con el objetivo de reducir el estigma durante el embarazo exclusivamente en mujeres primíparas. Tanto las
asociado a este tipo de trastornos. estrategias de afrontamiento positivas como un mayor apoyo social
percibido y recibido se asociaron de manera independiente con un
menor estrés percibido, mientras que las estrategias de afrontamiento
JOURNAL OF PSYCHOSOMATIC RESEARCH evasivas se asociaron con niveles más altos de estrés percibido.
ESTRÉS PRENATAL Y ESTRATEGIAS Mediante el presente estudio, se subraya la necesidad de estra-
DE AFRONTAMIENTO tegias de intervención con el objetivo de mejorar el apoyo social y las
estrategias de afrontamiento positivas, especialmente en mujeres
PRENATAL STRESS PERCEPTION AND COPING multíparas con el fin de reducir los riesgos de resultados adversos
STRATEGIES: INSIGHTS FROM A LONGITUDINAL durante el embarazo.
PROSPECTIVE PREGNANCY COHORT

La percepción del estrés prenatal y las estrategias JOURNAL OF SEX & MARITAL THERAPY
de afrontamiento: perspectivas de una cohorte de
embarazo prospectiva longitudinal ABUSO SEXUAL, DOLOR GENITO-PÉLVICO
J. Goletzke, J. Goletzke, J. Goletzke, Y ANSIEDAD
R.D. Kocalevent, G. Hansen, M. Rose, H. Becher, ANXIETY MEDIATES THE RELATION BETWEEN
K. Hecher, P.C. Arck, A. Diemert CHILDHOOD SEXUAL ABUSE AND GENITO-PELVIC
DOI: http://dx.doi.org/10.1016/j.jpsychores.2017.09.002 PAIN IN ADOLESCENT GIRLS

M. Santerre-Baillargeon, P. Vézina-Gagnon,
Keywords: Coping strategies,
I. Daigneault, T. Landry, S. Bergeron
Parity, Perceived stress, Pregnan-
cy, Social support. DOI: http://dx.doi.org/10.1080/0092623X.2016.1266539
Palabras clave: Estrategias
de afrontamiento, Paridad, Estrés Keywords: Childhood sexual
percibido, Embarazo, Apoyo social. abuse, Genito-pelvic pain, anxiety,
La angustia prenatal se ha adolescents, girls.
relacionado con complicaciones Palabras clave: Abuso sexual
en el embarazo y con una salud en la infancia, dolor genito-pélvico,
deficiente en el bebé. Aun así, se ansiedad, adolescentes, chicas.
requieren estudios que evalúen las Investigaciones previas han
diferentes dimensiones de estrés demostrado asociaciones entre el
de manera longitudinal durante el embarazo. Mediante el presente abuso sexual infantil, la ansiedad
estudio se ha evaluado el estrés percibido en el transcurso del em- y el dolor genito-pélvico, pero nin-
barazo y además se ha examinado el apoyo social y los estilos de gún estudio hasta la fecha ha exa-
afrontamiento, para poder estudiar si ambos están relacionados con minado si el abuso sexual puede
la trayectoria del estrés prenatal. Un total de 543 mujeres participa- estar asociado con el dolor genito-pélvico a través de la ansiedad
ron en el estudio PRINCE (Identificación prenatal de la salud de los elevada de las víctimas. Mediante el uso de autoinformes se recopi-

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laron datos de 218 adolescentes sexualmente activas reclutadas de Se administraron el Barratt Impulsiveness Scale (BIS-11) y el
siete escuelas secundarias metropolitanas. Los resultados revelaron Inventario de Temperamento y Carácter (TCI-R). Asimismo, se
un efecto indirecto significativo del abuso sexual en el desarrollo recogieron datos sociodemográficos antes de iniciar el trata-
del dolor genito-pélvico a través de la ansiedad rasgo. Por lo tanto, miento ambulatorio cognitivo-conductual. Los pacientes en el
se sugiere que la ansiedad puede ser uno de los mecanismos por grupo de enfermedad de Parkinson eran mayores y presentaban
los cuales el abuso sexual infantil conduce a un mayor riesgo de un mayor prevalencia de trastornos del estado de ánimo que
desarrollar dolor genito-pélvico en esta población. los pacientes sin enfermedad de Parkinson. En términos de
características de personalidad y rasgos de impulsividad, los
pacientes con enfermedad de Parkinson parecían presentar
FRONTIERS IN PSYCHIATRY un perfil más funcional que aquellos que no padecían dicha
PARKINSON Y JUEGO PATOLÓGICO enfermedad.
Los resultados sugieren que los pacientes con enfermedad de
A COMPARISON OF TREATMENT-SEEKING BEHAVIORAL
Parkinson y adicciones conductales comórbidas podrían ser más
ADDICTION PATIENTS WITH AND WITHOUT
difíciles de detectar que aquellos pacientes sin enfermedad de
PARKINSON’S DISEASE
Parkinson en el entorno clínico debido a sus niveles reducidos de
A. Sauvaget, S. Jiménez-Murcia, F. Fernán- impulsividad y su perfil de personalidad estándar. En general, esto
dez-Aranda, R. Granero, M. Grall-Bronnec, C. sugiere que los pacientes con enfermedad de Parkinson y adicciones
Victorri-Vigneau, S. Bulteau, P. Derkinderen, J.M. comportamentales podrían tener diferentes necesidades de los pa-
Vanelle, A. Hakansson, G. Mestre-Bach, T. Steward, cientes sin comorbilidad y que podrían beneficiarse potencialmente
J.M. Menchón de intervenciones específicas.

doi: 10.3389/fpsyt.2017.00214.

Keywords: Parkinson’s disea-


se, personality, impulsivity, beha-
vioral addictions, gambling disor-
der, impulse control disorders.
Palabras clave: enfermedad
de Parkinson, personalidad, im-
pulsividad, adicciones conductua-
les, trastornos del juego, control
de los impulsos trastornos.
La administración de medi-
camentos dopaminérgicos para
tratar los síntomas propios de la
enfermedad de Parkinson puede ir asociada a la aparición tanto de
conductas adictivas como de trastornos del control de los impulsos.
Poco se sabe, sin embargo, sobre las diferencias a nivel clínico entre
los pacientes con enfermedad de Parkinson de otros pacientes que
buscan tratamiento para adicciones conductuales.
El objetivo de este estudio fue comparar las características
de pacientes con adicción conductual, con y sin enfermedad de
Parkinson. La muestra estuvo compuesta por 2.460 hombres
diagnosticados de adicción comportamental que acudieron
al Hospital Universitario de Bellvitge en busca de tratamiento.

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NOTÍCIAS SOBRE PSICOSOMÁTICA


INFANTO JUVENIL Nº 3

CHILDREN AND YOUTH PSYCHOSOMATIC NEWS

Anaïs Orobitg1, Míriam Sánchez2


1
Psicóloga. Consejo de Redacción (C:R). 2Colaboradora (C:R)

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ISSN 2565-0564
Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:68-71.
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Y PSIQUIATRÍA 3 / AÑO 2017
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Notícias de psicosomática infanto-juvenil Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:68-71 A. Orobitg, M. Sánchez

Journal of American Academy of Child and Adolescent ficación de comunicación infantil (CCC) y el Cuestionario de
Psychiatry 2017 fortalezas y dificultades (SDQ).
BRAIN STRUCTURAL CORRELATES OF Los resultados no mostraron diferencias significativas a
SUBCLINICAL OBSESSIVE-COMPULSIVE nivel cualitativo entre el Trastorno de Comunicación Social
y TEA. Sin embargo, detalla aquellos rasgos autistas que no
SYMPTOMS IN HEALTHY CHILDREN
cumplen con los criterios para el diagnóstico TEA. De esta
M. Suñol, O. Contreras-Rodríguez, D. Macià, G. manera, el Trastorno de Comunicación Social puede ser de
Martínez-Vilavella, I. Martínez-Zalacaín, M. Subirà, utilidad clínica a la hora de identificar a menores con rasgos
J. Pujol, J. Sunyer, C. Soriano-Mas autistas que no son significativos para el diagnóstico de TEA,
La finalidad de este estudio es investigar las caracterís- pero que requieren de necesidades específicas.
ticas volumétricas del cerebro asociadas con los síntomas
obsesivos-compulsivos, así como también las variables sexo
y edad en una muestra de niños anos. Child Development 2017
Se obtuvo una muestra de 250 niños sanos, evaluados NONVERBAL EXECUTIVE FUNCTION IS
mediante el Inventario Obsesivo-Compulsivo versión infantil, MEDIATED BY LANGUAGE: A STUDY OF
y sometidos a una resonancia magnética estructural cerebral.
DEAF AND HEARING CHILDREN
Se correlacionaron los síntomas específicos con los volú-
menes de materia gris y blanca. También se vincularon los N. Botting, A. Jones, Ch. Marshall, T. Denmark,
factores sexo y edad con el objetivo de determinar el efecto J. Atkinson, G. Morgan
de estas variables en la morfometría cerebral. Distintos estudios han demostrado la clara asociación
Los resultados mostraron asociación entre los síntomas entre el lenguaje y las funciones ejecutivas (FE). Este último
obsesivos-compulsivos con características volumétricas concepto se define como el conjunto complejo de habilidades
específicas cerebrales (materia gris y blanca). Así pues, po- cognitivas que nos permiten coordinar procesos mentales
dría valorarse como factor de riesgo en el Trastorno Obse- y manipular información, resolver problemas novedosos,
sivo-Compulsivo. secuenciar información y generar nuevas estrategias para
lograr objetivos de una manera flexible (Elliolt, 2003; Funa-
hashi, 2001). El lenguaje también es una habilidad funda-
Journal of Child Psychology and Psychiatry 2017 mental para el desarrollo, y se constata que está altamente
EVALUATING SOCIAL (PRAGMATIC) interrelacionado con las funciones ejecutivas.
COMMUNICATION DISORDER El objetivo de este estudio fue determinar si una habilidad
es más dependiente de la otra. Por este motivo, la muestra se
W. Mandy, A. Wang, I. Lee, D. Skuse hizo comparando los resultados en la evaluación del lenguaje
El Trastorno de la Comunicación Social se ha incluido y de tareas de funciones ejecutivas no verbales de niños
como novedad en el DSM-5, y se caracteriza por dificulta- sordos (n=108) con niños que oyen (n=125). De esta manera,
des en la comunicación social (TCS), tanto verbal como no se evalúa la variable sordera ya que conlleva dificultades del
verbal. El presente estudio pretende determinar la validez lenguaje con base sensorial, y no cognitiva.
del Trastorno de la Comunicación Social (pragmático) a Los resultados mostraron que los niños sordos obtuvie-
través de la identificación y descripción de casos. Asimis- ron un rendimiento significativamente menor en las tareas de
mo, también procura investigar si los síntomas de este funciones ejecutivas, aun teniendo controladas las variables
trastorno son distintos a los del Trastorno del Espectro de inteligencia no verbal y velocidad de procesamiento.
Autista (TEA). En conclusión, las funciones ejecutivas están moderadas
Participaron un total de 1.081 niños y jóvenes de eda- por el lenguaje. No obstante, no hay evidencia significativa de
des comprendidas entre 4 y 18 años. Para su evaluación, se que el lenguaje esté mediado por las funciones ejecutivas. De tal
utilizaron diferentes cuestionarios a padres: Entrevista de manera que estos hallazgos sugieren que el lenguaje es la clave
desarrollo, dimensional y diagnóstica (3Di), la Lista de veri- para el rendimiento de las funciones ejecutivas, y no a la inversa.

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Journal of Abnormal Child Psychology(November), 1-9. TCA (100% mujeres, japonesas) se examinó los efectos del
https://doi.org/10.1007/s10802-017-0354-x terminar el grupo de TCC en su pronóstico. El BMI medio al
VICTIMIZACIÓN DEL GRUPO DE IGUALES inicio era de 17,7 ± 2,0. y se compararon la sintomatología, los
EN EDUCACIÓN PRIMARIA COMO estados de ánimo, los estilos de afrontamiento y autoestima
antes y después de la terapia (10 sesiones) y pasados 10
MARCADOR ATENUADO DE RIESGO
años. Al finalizar el tratamiento, decrecieron las puntuaciones
DE ARRESTO EN LA EDAD ADULTA del Eating Attitudes Test, las puntuaciones de depresión del
PEER VICTIMIZATION DURING MIDDLE CHILDHOOD AS A Profile Mood States, y del Coping Inventory en situaciones
MARKER OF ATTENUATED RISK FOR ADULT ARREST estresantes, mientras que las puntuaciones del Rosenberg’s
Self-Esteem Scale aumentaron. En cuanto al seguimiento
Schwartz, D., Lansford, J.E., Dodge, K.A. et al.(2017) de los 10 años, el grupo que completó la TCC tenía más pa-
Esta investigación longitudinal examinó las interacciones cientes con un buen pronóstico y, en concordancia, el grupo
entre agresión y victimización de los iguales en la infancia en de abandono tuvo pacientes con peores pronósticos. Con-
la predicción de arresto en la edad adulta en 388(198 hom- cluyendo, el grupo terapéutico de TCC da a los pacientes la
bres, 190 mujeres) participantes. La victimización de iguales y oportunidad de crear relaciones con sus iguales y les ayuda
la agresión fueron evaluados mediante “The peer nomination a desarrollar la comunicación y habilidades de socialización.
Inventory” en Educación Primaria, y los arrestos en la edad Además, en las sesiones grupales, los pacientes desarrollaron
adulta mediante cuestionarios autoadministrados y la revisión el insight mediante la escucha a los otros miembros del grupo
de los registros tribunales. Las agresiones tempranas fueron y el desarrollo de relaciones interpersonales. Y aunque el
vinculadas con el arresto, pero solo para aquellos jóvenes que efecto puede ser temporal, la experiencia de la terapia grupal
raramente eran victimizados por los compañeros. A pesar de aporta esperanza para el paciente y aumenta la probabilidad
que investigaciones anteriores hayan observado jóvenes que de que siga con el tratamiento.
son a la vez agresivos y victimizados como el subgrupo de
alto riesgo, los resultados del presente estudio sugieren que
los atributos comportamentales y psicológicos de estos niños Journal of Clinical Child & Adolescent Psychology,
puede atenuar trayectorias de problemáticas antisociales. (October), 1-11.
https://doi.org/10.1080/15374416.2017.1390755
INSATISFACCIÓN CON LA IMAGEN
Journal of Eating Disorders, (November) 5:52.
https://doi.org/10.1186/s40337-017-0182-y
CORPORAL Y LAS TRAYECTORIAS
DE LA ANSIEDAD EN LA ADOLESCENCIA
SEGUIMIENTO DE 10 AÑOS DE PACIENTES
QUE HAN TERMINADO Y ABANDONADO BODY IMAGE DISSATISFACTION AND ANXIETY
TRAJECTORIES DURING ADOLESCENCE
EL TRATAMIENTO INTEGRADO EN GRUPOS
DE TERAPIA COGNITIVO CONDUCTUAL PARA A. Vannucci, C. McCauley (2017)
TRASTORNOS DE CONDUCTA ALIMENTARIA El objetivo principal fue examinar las asociaciones entre la
A 10 YEAR FOLLOW-UP STUDY OF COMPLETERS insatisfacción base con la imagen corporal y la subsiguiente
VERSUS DROP-OUTS FOLLOWING TREATMENT WITH AN trayectoria de la ansiedad en una muestra variada de 581
INTEGRATED COGNITIVE-BEHAVIORAL GROUP THERAPY adolescentes (edad media 16,1, SD=0,7; 58% chicas; 65%
FOR EATING DISORDERS no-hispano blanco) procedentes de institutos públicos de
EE.UU. Se administraron cuestionarios autoadministrados
Y. Okamoto, Y. Miyake, I. Nagasawa, K. Shishida (2017) en 3 evaluaciones distintas. Una mayor insatisfacción con la
Se comparó la evolución del pronóstico a los 10 años imagen corporal en la línea base resultó significativamente
entre los pacientes que completaron los grupos contra los asociada con mayor sintomatología inicial del Trastorno de
que abandonaron. Con una muestra de 65 pacientes con Ansiedad Generalizada (TAG), Trastorno de Ansiedad (TA),

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Trastorno de Ansiedad Social (TAS), y evitación significativa de sintomatología TAS (p = 0,01) y mayor aumento en sin-
de la escuela, pero no se relacionó con la sintomatología del tomatología de Trastorno de Ansiedad (p = 0,02). No se en-
Trastorno de Ansiedad por Separación (TAS). contraron relaciones entre la insatisfacción con la imagen
Mayor insatisfacción corporal de base también fue corporal y los cambios en TAG, TAS, ni Evitación Significativa
asociada con reducción atenuada en la sintomatología del de la escuela (ps= 0,11-0,94). Los hallazgos sugieren que
Trastorno de Ansiedad Social (TAS) a lo largo del tiempo la insatisfacción con la imagen corporal está asociada con
(p = 0,001). Entre los adolescentes con únicamente baja sintomatología concurrente de múltiples trastornos de ansie-
sintomatología ansiosa de base, una mayor puntuación en dad y que pueden tener un vínculo con las sintomatologías
insatisfacción corporal se asoció con reducción atenuada de TAS y TA durante la adolescencia.

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NOTÍCIAS SOBRE CONDUCTAS ADICTIVAS


COMPORTAMENTALES Nº 3

BEHAVIORAL ADDICTION NEWS

Vega González1, Susana Jiménez-Murcia2, Verónica Ferrer3


Psicóloga (UHD). 2Hospital Universitario de Bellvitge (HUB).
1

Psicóloga. Atención e Investigación de Socioadicciones (AIS)


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Notícias sobre conductas adictivas comportamentales Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:72-74 V. González, S. Jiménez, V. Ferrer

COMPARACIÓN DE PACIENTES QUE Los resultados del estudio sugieren que los pacientes con
BUSCAN TRATAMIENTO PARA enfermedad de Parkinson con una adicción comportamental
ADICCIONES COMPORTAMENTALES CON podrían ser más difíciles de detectar que los pacientes sin
Parkinson en el entorno clínico de adicción, debido a sus
Y SIN LA ENFERMEDAD DE PARKINSON
niveles reducidos de impulsividad y rasgos de personalidad
A COMPARISON OF TREATMENT-SEEKING BEHAVIORAL más estándar. En general, esto sugiere que los pacientes
ADDICTION PATIENTS WITH AND WITHOUT con enfermedad de Parkinson con una adicción al compor-
PARKINSON’S DISEASE tamiento pueden tener diferentes necesidades de pacientes
con adicción comportamental sin Parkinson y que podrían
A. Sauvaget, S. Jiménez-Murcia, F. Fernán- beneficiarse potencialmente de intervenciones específicas.
dez-Aranda, R. Granero, M. Grall-Bronnec, C. Palabras clave: Enfermedad de Parkinson; adicciones
Victorri-Vigneau, S. Bulteau, P. Derkinderen, J.M. conductuales; Trastorno Juego Patológico; trastornos de
Vanelle, A. Hakansson, G. Mestre-Bach, T. Steward, control de impulsos; impulsividad; personalidad.
J.M. Menchón Keywords: Parkinson’s disease; behavioral addictions;
Frontiers in Psychiatry. 2017 Nov 3;8:214. gambling disorder; impulse control disorders; impulsivity;
doi: 10.3389/fpsyt.2017.00214 personality.

La administración de me-
dicamentos dopaminérgicos ADICCIÓN A LA COMIDA Y ADICCIÓN
para tratar los síntomas de la A SUSTANCIAS EN MUJERES:
enfermedad de Parkinson, se
asocia con conductas adic-
CARACTERÍSTICAS COMUNES
tivas y trastornos del control FOOD ADDICTION AND SUBSTANCE ADDICTION
de los impulsos. Sin embargo, IN WOMEN: COMMON CLINICAL CHARACTERISTICS
se sabe poco sobre cómo di-
fieren los pacientes con Par- R. Hardy, N. Fani, T. Jovanovic, V. Michopoulos
kinson de otros pacientes que Appetite. 2018 Jan 1;120:367-373.
buscan tratamientos para las doi: 10.1016/j.appet.2017.09.026. Epub 2017 Sep 27
adicciones conductuales. El
objetivo de este estudio fué comparar las características de La adicción a la comida se
los pacientes con adicciones comportamentales con y sin caracteriza por una ingesta
la enfermedad de Parkinson. mal controlada de alimentos
N = 2.460 hombres en busca de tratamiento (diagnostica- altamente apetecibles y ca-
dos con una adicción comportamental) fueron reclutados en un lóricamente densos. Aunque
hospital universitario. Se tomaron medidas sociodemográficas, estudios previos indican que
de impulsividad [Barratt Impulsiveness Scale (BIS-11)] y de los factores de riesgo para la
personalidad [Temperament and Character Inventory-Revised adicción a la comida son simi-
(TCI-R)] al ingreso del tratamiento ambulatorio. lares a los trastornos por con-
Los pacientes del grupo con enfermedad de Parkinson eran sumo de sustancias (SUD), es-
más mayores y tenían una prevalencia más alta de trastornos tos estudios han analizado la
del estado de ánimo que los pacientes sin enfermedad de Par- adicción a la comida y el SUD
kinson. En términos de características de personalidad y rasgos en muestras independientes, limitando la capacidad de com-
de impulsividad, los pacientes con enfermedad de Parkinson parar directamente la adicción a los alimentos con el SUD.
parecían presentar un perfil más funcional que los pacientes sin El presente estudio se realizó para evaluar las tasas de
la enfermedad de Parkinson con una adicción comportamental. trastorno de estrés postraumático (TEPT), depresión, expo-

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Notícias sobre conductas adictivas comportamentales Psicosom. psiquiatr. 2017;(1)3:72-74 V. González, S. Jiménez, V. Ferrer

sición a traumas infantiles y adultos, así como la presencia y


severidad de la desregulación emocional, en una muestra de
mujeres (N = 229) que cumplen los criterios de no adicción,
adicción a la comida solamente o SUD solamente.
La prevalencia de adicción a los alimentos fue del 18,3% Objetivo: El objetivo de este estudio fue evaluar la preva-
y la prevalencia de SUD fue del 30,6% en esta muestra. Las lencia de pensamientos / comportamientos parafílicos (in-
mujeres con adicción a la comida y las mujeres con SUD cluidos los trastornos parafílicos) con y sin adicción sexual y
reportaron más depresión y síntomas de TEPT en compara- condiciones relacionadas con la sexualidad en una muestra
ción con las mujeres sin adicción. Las mujeres con adicción de pacientes con trastorno por consumo de sustancias.
a la comida y SUD tenían puntuaciones más altas de desre- Métodos: Fue un estudio transversal de sujetos depen-
gulación emocional total, específicamente con dificultades dientes a sustancias que buscaron tratamiento ambulatorio
en comportamientos dirigidos a objetivos, no aceptación de en São Paulo, Brasil. Los datos incluyeron información socio-
respuestas emocionales, control de impulsos, acceso limitado demográfica, fármaco de elección, respuestas a preguntas
a estrategias de regulación emocional y falta de claridad emo- sobre el comportamiento sexual y los siguientes cuestio-
cional, en comparación con las mujeres sin adicción (p < 0,05). narios estandarizados: (a) Prueba de detección de adicción
No hubo diferencias en los síntomas de TEPT y depresión sexual y (b) Cuestionario de trauma infantil.
y las puntuaciones de desregulación emocional entre los gru- Resultados: La muestra estuvo compuesta por 134
pos de adicción a la comida y SUD (p > 0,05). Sin embargo, personas que consumían drogas, predominantemente
las mujeres con adicción a sustancias mostraron niveles más hombres (76,1%), 39,6% tenían entre 18 y 29 años, y 54,9%
altos de niñez total (p < 0,01) y trauma en la adultez (p < 0,01) eran solteros. La mayoría eran personas que consumían
en comparación con las mujeres sin adicción o adicción a diferentes tipos de sustancias, el 73,9% eran consumidores
la comida. Estos resultados sugieren que las mujeres con de alcohol y cocaína, el 63,4% consumidores de marihuana,
adicción a la comida y las personas con adicción a sustancias el 81,1% consumidores de tabaco y el 5,2% consumían de
comparten características psicológicas y factores de riesgo esteroides. La prevalencia de pensamientos/conductas
similares, con la excepción de los historiales de trauma. Estos parafílica s (incluidos los trastornos parafílicos) con y sin
hallazgos tienen implicaciones para la detección del riesgo adicción sexual fue del 47%. Las tasas de VPH / herpes
y el tratamiento de estos trastornos. y hepatitis B fueron 7,9% (p = 0,021) y 6,3% (p = 0,046)
Palabras clave: Regulación emocional, Adicción a la co- respectivamente.
mida, Uso de sustancias, Trauma, Mujer. Pensamientos/conductas parafílicas y no parafílicas se
Keywords: Emotion regulation, Food addiction, Substance asociaron a la presencia de abandono físico infantil (odds
use, Trauma, Women. ratio [OR] = 4,7, intervalo de confianza [IC] del 95%: 1,0 a 21,9),
bajo nivel educativo (OR = 7,2, IC del 95%: 1,4 a 36 ), hetero-
PENSAMIENTOS PARAFÍLICOS, sexualidad (OR = 3,8, IC 95% 1,1 a 12,8) y juventud (edad 18
COMPORTAMIENTOS Y ADICCIÓN AL a 20 años) (OR = 5,6, IC 95% 1,4 a 11,8).
Conclusiones: La alta prevalencia de pensamientos /
SEXO EN UNA MUESTRA DE PERSONAS conductas parafílicas con o sin adicción al sexo en personas
CON TRASTORNO POR ABUSO DE que consumen drogas puede estar relacionada con la expe-
SUSTANCIAS: UN ESTUDIO TRANSVERSAL riencia de abandono físico y emocional durante la infancia,
PARAPHILIC THOUGHTS, BEHAVIORS AND SEX y esta posibilidad debería investigarse de forma rutinaria en
ADDICTION IN A SAMPLE OF PERSONS WHO USE la práctica clínica.
DRUGS: A CROSS-SECTIONAL STUDY

J. Clemente, S.C. Pillon, J.J. Mari,C.J. da Silva,


P.R.H. Santana, A. Diehl
Journal of Adicction Medicine. 2017 Sep/Oct;11(5):377-385.
doi: 10.1097/ADM.0000000000000337

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