Escritura de textos expositivos

Nathalia Agudelo Cuéllar.

El uso del punto y de la coma

El punto y la coma se comienzan a emplear por la necesidad de reproducir de una

manera clara la lengua hablada, evitando la ambigü edad y el equívoco. El gramá tico
Aristó fanes Bizancio (siglo II A. C.), trazaba signos para mejorar la comprensió n de los
textos: una línea alta indicaba final de frase, la línea medio indicaba una pausa equivalente
a los dos puntos o al punto y coma actuales; y finalmente estaba la baja, con un valor
parecido al de la coma (Benito, 1992). Esta modalidad heredada por los romanos, pasó al
latín y luego a las lenguas romances; pero nunca se empleó de una manera regular. Con el
transcurso del tiempo, la lengua escrita comenzó a adquirir cambios porque los signos de
puntuació n se han ido transformando. (Benito, 1992).

Es muy frecuente que las personas utilicen el punto y la coma de forma inadecuada. En el
siguiente texto, se explicará de manera clara el empleo de las tres clases de punto y tres
reglas del uso de la coma.

En cuanto al punto, es un signo que sirve para dar fin a una oració n gramatical o
periodo sintá ctico. Representa una pausa má s o menos larga, segú n el énfasis que le dé el
autor (Larousse, 2000). Existen tres clases de punto: el punto y seguido, el punto aparte y el
punto final.

Segú n la Real Academia Españ ola (2008), Escarpanter (1979) y Palacios (2010), se
establece que:
-El punto y seguido separa los enunciados que hacen parte de un pá rrafo. Después de
un punto y seguido se sigue escribiendo en la misma línea. Si el punto está al final de un
rengló n, se empieza en la siguiente sin dejar margen. Por ejemplo: Salieron a dar un breve
paseo. La mañana era espléndida.
 - Al cambiar de idea o de asunto se pone punto y aparte, y se inicia el nuevo pá rrafo en
distinta línea. Por ejemplo: El mar estaba embravecido aquel día. Los barcos bailaban sobre
el agua sorteando las olas con dificultad.
Miguel, sentado en el muelle, esperaba el regreso de su padre.

-El punto final indica la terminació n de un escrito. Un ejemplo es: Sr. Casanova, le
llaman del despacho del director.

Por otro lado, la coma corresponde a una pequeñ a pausa que se hace al hablar
(Palacios, 2010). La coma tiene tres reglas importantes:

- Nunca debe separarse el sujeto del verbo, por ejemplo:

Un camión de viguetas, chocó contra un árbol.

-Puede haber coma entre el sujeto y el verbo, si detrá s del sujeto hay un elemento
dependiente de él, o un inciso que aclara o amplía su sentido (Larousse, 2000). Por
ejemplo: Juan, distraído como de costumbre, no se enteró del mensaje.

-Pero si el sujeto tiene una extensió n excesivamente larga (Larousse, 2000), sería como
el siguiente ejemplo: ‘’La permeabilidad relativa de un cuerpo considerado como valor
diamagnético cuando su valor es menor que uno, (se usa la coma separando el sujeto del
verbo) se define como el cociente entre la permeabilidad de la sustancia del vacío. ’’

Finalmente, entre el sujeto y los complementos tampoco debe de colocarse coma, si es

que se mantiene el orden regular de la construcció n (sujeto, verbos, complementos)
(Larousse, 2000).Un ejemplo de esto es:
Miguel golpea, el balón con los dos pies.

Para concluir, el punto y la coma son una ayuda importante en el momento de escribir,
ya que estos dos signos de puntuació n permiten dar cohesió n y compresió n al texto que se
está escribiendo.
Referencias

Jesú s. P. (2010) Ortografía, Manual prá ctico para escribir mejor. (28-30)(35-36). México:
Alfaomega S.A.
Real Academia Españ ola. (1999) Ortografía de la lengua españ ola. (pp 56-58).Colombia:
Bogotá : S.A.
José. A. Escarpanter. (1979). Có mo dominar la ortografía. (pp 52). Españ a: Madrid. Playor,
S.A.
Larousse. (2000). Ortografía, lengua españ ola, reglas y ejercicios (pp 145-153). México:
Ediciones Larousse S.A.
Jose. A. Benito (1992). La puntuació n: Usos y funciones (pp 45). Madrid: Edinumen.