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1 “Literatura e historia”
El hecho de formular una teoría estética era de menor interés para Marx y Engels, son
muy escasos los comentarios con respecto al arte y la literatura de ellos dos. De modo tal que
en perspectiva de Eagleton la crítica marxista “consiste en algo más que en la mera re
examinación de casos establecidos por los fundadores del marxismo. También consiste en
algo más que lo que en Occidente se conoce como “sociología de la literatura””. Dicha
afirmación consiste en que la sociología de la literatura se interesa principalmente por los
medios de producción, distribución e intercambio literarios que existen en una sociedad
determinada; como también examina textos literarios por su relevancia “sociológica”. En
cambio la crítica marxista no es una sociología de la literatura, sino más bien su objetivo es
explicar exhaustivamente una obra literaria, lo cual significa brindar una especial atención a
la forma, el estilo y sus significados como también comprender éstos aspectos como
productos de una historia determinada. Por esto último Eagleton llega a la conclusión que “la
originalidad de la crítica marxista no depende de la perspectiva histórica sobre la literatura,
sino de su concepción revolucionaria de la historia misma”.
Tal como formula Eagleton “las relaciones sociales entre los hombres están sujetas a
la forma en que estos producen su vida material” ya que dentro de la vida social de los
hombres se establecen ciertas relaciones necesarias e independientes de su voluntad, las
denominadas “relaciones de producción” que corresponde a sus fuerzas productivas
materiales. Este conjunto de relaciones entabla la estructura económica de la sociedad, en la
cual se proyecta la superestructura jurídica y política y a la que corresponde determinadas
formas de conciencia social (política, religión, ética, estética, las cuales el marxismo
denomina ideología). El cómo se lleve a cabo la producción en la vida material tiene
consecuencias en la vida social, política y espiritual en general. Por ello, Eagleton plantea que
no es la conciencia del hombre la que determina su ser sino que, por el contrario, el ser social
es lo que determina su conciencia.
La base material es el conjunto de fuerzas y de las relaciones de producción. De la
misma se edifica la superestructura: formas jurídicas y políticas, determinado tipo de Estado
cuya función principal es legitimar el poder de la clase social propietaria de los medios de
producción. También la superestructura engloba diferentes tipos de consciencia social
(política, religión, ética, estética), lo denominado en el marxismo como ideología. La
ideología debe legitimar el poder de la clase dominante en la sociedad; en última instancia,
las ideas dominantes de una sociedad son las de la clase dominante. Sólo cuando una clase
social tiene el poder sobre otras es percibida como “natural” por la mayoría de los miembros
de esa sociedad o directamente inadvertida.
Marx en la relación entre base y superestructura, el arte es complejo e indirecto en
esta relación. Dentro de la esfera del arte, algunas de sus creaciones insignes son posibles en
un estadio poco desarrollado del desarrollo artístico: La relación desigual del desarrollo de la
producción material y la producción artística postulada por Marx. De modo tal que el goce
por el arte griego es una regresión a la infancia, según la interpretación de Eagleton, a un
momento de sentimentalismo antimaterialista. Marx formula que los griegos fueron capaces
de producir grandes obras de arte no a pesar sino a causa del escaso desarrollo de su
sociedad. En las sociedades antiguas que no han sufrido la brutalidad de la sociedad
burguesa, por eso la conección de los griegos a cierto equilibrio o armonía que depende
precisamente de la condición limitada de su sociedad.
La literatura puede ser parte de la superestructura, pero no constituye un mero reflejo
pasivo de la base económica. Si bien los elementos de la superestructura reaccionan
constantemente con la base económica, dentro de la teoría materialista de la historia niega
que el arte pueda por sí mismo transformar el curso de la historia; pero sí ser un elemento
que contribuya al cambio.
Los niveles que median entre el texto literario y la economía son la posición de clase
del autor, las formas ideológicas y su relación con las formas literarias, el “espiritualismo” y
la filosofía, las técnicas de producción literarias, la teoría estética, son fundamentales para el
modelo base/estructura. Ninguno de estos elementos puede reducirse en otro ya que cada uno
tiene su relativa independencia. Por ello La tierra baldía (Eliot) puede explicarse como un
poema que surge de la crisis de la ideología burguesa, pero su correspondencia con esta crisis
o con las condiciones políticas y económicas que la producen no es tan simple y directa. La
relación de La tierra baldía con la historia de su tiempo se encuentra entonces intensamente
mediada; como ocurre con cualquier obra de arte.
El sentido exacto que el marxismo da al término de ideología: La ideología no es un
conjunto de doctrinas; es el modo en que los hombres viven su rol en una sociedad de clases,
los valores, las ideas, las imágenes que los sujetan a su función social y les impide un
verdadero conocimiento del conjunto de la sociedad.
El arte tiene una relación más compleja con la ideología que la teoría política o el
derecho debido a que el arte surge de una concepción ideológica del mundo. Encarna de
manera mucho más transparente los intereses de una clase dominante.
La relación de arte con la ideología según Engels tiene dos posiciones posibles:
a. la literatura no es otra cosa que ideología bajo una determinada forma artística, que
las obras literarias son expresión de la ideología de su tiempo. Una obra es prisionera de la
“falsa conciencia”, incapaz de ir más allá de ella para acceder a la verdad.
b. La posición contraria se aprovecha del hecho de que gran parte de la literatura
cuestiona la ideología a la que se opone para hacer esto parte de la definición del arte
literario.
Ambas posiciones son muy simples según Eagleton, prefiere inclinarse por los
comentarios de Althusser y Macherey sobre la literatura e ideología. “Para ambos críticos la
ideología es un cuerpo amorfo de imágenes e ideas que flotan libremente: en toda la sociedad,
posee dicha coherencia, puede ser objeto de análisis científico; y desde el momento en que el
texto literario “pertenece” a la ideología, es susceptible de ser objeto de un análisis semejante.
Una crítica científica busca explicar la obra literaria en términos de la estructura ideológica
de la que forma parte, que a su vez se transforma por el tratamiento artístico que la obra hace
por ella: investiga los principios que ligan la obra a la ideología y que la distancian de ella.
Eso es precisamente lo que hecho la crítica marxista más sofisticada. Hacer esto significa
aprehender la obra literaria como una estructura formal.
Lukács, György: “Introducción a los escritos estéticos de Marx y de
Engels”. (hasta pág. 215)
En base de las ideas filosóficas de Marx y Engels se puede dar cuenta de la
naturaleza del sistema en una unidad orgánica y sistemática. Ello es posible mediante dos
puntos explicados por Lukács: La ciencia de la Historia y materialismo dialéctico.
En el primer punto, el sistema no se desliga del proceso uniforme de la Historia.
Según Marx y Engels la ciencia de la Historia es la única ciencia uniforme porque en ella se
encuentra el desarrollo de la naturaleza, la sociedad, el pensar, como un proceso histórico
uniforme en la cual el punto es dar cuenta de sus leyes generales y particulares. Pero eso no
significa un el relativismo histórico, sino más bien un método dialéctico en la cual está
presente lo absoluto como también lo relativo dentro de una totalidad. En este sentido la
verdad absoluta tiene sus elementos en co-dependencia del lugar, el tiempo y las
circunstancias, y por otra parte la verdad relativa, en cuanto que es una verdad real, en tanto
refleja la realidad en fiel aproximación, tiene una validez absoluta. En este sentido Marx y
Engels, sostienen la evolución relativamente independiente de los distintos campos de
actividad humana, también sostienen que el pensamiento filosófico se uno a otro anterior, lo
desarrolla, lo ataca, lo corrige, pero niegan la posibilidad de explicar el desarrollo de la
ciencia o del arte exclusivamente o primariamente a partir de sus relaciones inmanentes.
La formación y el desarrollo de la Literatura es parte del proceso histórico conjunto de
la sociedad. En este sentido, la esencia y valor estético de las obras literarias como también
sus efectos convergen al proceso social del hombre que se apropia del mundo a través de su
conciencia. Esto puede verse, desde la estética marxista, mediante la historia de la literatura y
el arte marxistas forman parte del materialismo histórico. Mientras que en el punto de la
aplicación del materialismo dialéctico Lukács afirma que la literatura tiene una “parte
especial” del todo que constituye el materialismo histórico: dentro de esta doctrina están
presentes los principios más comunes de la Estética y de la Historia de la Literatura
marxistas. Sólo con el materialismo histórico se puede llegar a comprender la formación del
arte y de la Literatura.
En relación con lo anteriormente expuesto, Lukács afirma que el desarrollo de las
ideologías no podría explicarse únicamente por su evolución inmanente, aunque esto no
signifique que exista una determinación mecánica, pasiva, como mera relación causa-efecto,
de la base material. Esta afirmación se puede justificar si se entiende que el materialismo
histórico interpreta los fundamentos económicos como principio rector y ley determinante del
desarrollo histórico. Por lo cual, las ideologías sólo figuran en el proceso evolutivo en calidad
de superestructura secundaria. Mientra que por otro lado, la dialéctica niega que en cualquier
parte del mundo existan relaciones puramente unilaterales de causa y efecto; en los más
simples hechos reconoce complicados efectos cambiantes de causa y efecto. Y el
materialismo histórico destaca primordialmente en un proceso polifacético y variado del
desarrollo de la sociedad, el proceso total del desarrollo social e histórico se realiza siempre
como un complicado tejido de efectos de cambio.
El rol que el marxismo concede a la actividad creadora del sujeto es el papel del
desarrollo histórico. Según el pensamiento histórico-evolutivo del marxismo define el
concepto de que gracias a su trabajo el hombre evolución de animal a hombre. Esta
concepción tiene importancia para dilucidar cómo interpreta el marxismo el desarrollo de la
cultura y de las diferentes esferas ideológico. Esto se debe a que el papel creador del sujeto se
manifiesta en el hecho de que el hombre se crea a sí mismo, se transforma él mismo en
hombre. Este concepto del desarrollo histórico se extiende a lo largo de toda la filosofía
social marxista, y por lo tanto de la Estética.
La convicción subjetiva de la independencia de las esferas ideológicas constituye una
“ilusión”, objetivamente fundada la división capitalista del trabajo: La actividad espiritual del
hombre tiene una determinada independencia relativa en el arte y la literatura de modo tal que
significa la negación de la prioridad de la base económica. Esto significa que la convicción
subjetiva de cada esfera de la vida espiritual continúa desarrollándose por sí misma creando
una “ilusión”. En cada uno de estos campos de actividad se desarrolla a través del sujeto
creador, el cual parte directamente de las creaciones propias anteriores y las continúa
desarrollando en forma crítica y polémica.
En este sentido, las personas que realizan esta actividad pertenecer a esferas
especiales de la división de trabajo, constituyen un grupo autónomo dentro de la división
social del trabajo. Sus producciones y errores ejercen influencia retroactiva sobre el
desarrollo social entero, incluso económico. Pero ellos mismo se encuentran bajo la
dominación del desarrollo económico, y por ende se crea una ilusión en la división capitalista
del trabajo.
Principio del “desarrollo desigual en el campo de la historia de las ideologías” tal
como la expone Lukács: Para la Historia de la Ideología el materialismo histórico reconoce
que el desarrollo de las ideologías no se produce de modo alguno de forma mecánica, y que
necesariamente ha de correr en paralelo a la superación económica de la sociedad.
La manifestación histórica del principio del desarrollo irregular es una “cuestión
histórica concreta” que requiere de un “análisis concreto de la situación concreta” ya que se
escapa del desarrollo esquematizado por analogías y paralelos mecánicos. En este sentido, el
desarrollo de las sociedades de clase el método capitalista forma el máximo nivel económico
pero el capitalismo es desfavorable para el desarrollo de la literatura y el arte.
La sociedad capitalista es anti-artística al no poder dar pie al desarrollo de igual
medida al arte y la literatura. La misma posee carácter de fetichista porque muestra un mundo
desfigurado en su estructura: la relación entre hombres es completamente distinta de como es
en realidad y arrancada de sus auténticas relaciones. Es primordial que el trabajo mental del
hombre capitalista pueda traspasar la fetichización de las categorías materializadas (tales
como la mercancía, dinero, precio, etc.) que determinan la vida cotidiana de los hombres
puedan comprender su auténtica esencia: las relaciones sociales de los hombres entre sí.
Si se entiende por humanidad a la constitución humana del hombre, ésta pertenece a
la esencia de toda Literatura y de todo arte. En una cercana relación todo arte bueno y toda
literatura buena es humanista en tanto estudie a fondo al hombre y su integridad humana del
hombre. Solamente estas tendencia de opresión y explotación del hombre por el hombre se
ver tan inhumanas como lo es en el capitalismo: todo verdadero artista y todo verdadero
escritor es un enemigo.
La fobia artística del orden de producción capitalista se manifiesta en la división del
trabajo del capitalismo ya que remite al estudio de la totalidad de la economía. La dirección
anti-artística y anti-cultural de la producción capitalista significa por el contrario la
desmembración del hombre, la desmembración de la totalidad concreta en especialidades
abstractas.
“La economía marxista lleva las categoría del ser económico, que constituye la base
de la vida social, de nuevo hacia donde se manifiestan en sus verdaderas formas, como
relaciones entre hombres y hombres y a través de ellos como relaciones de la sociedad con la
naturaleza” Quiere decir: el ser social determina la conciencia. La base material está regida
por las fuerzas productivas materiales y las relaciones de producción existentes, en las cuales
se instaura los diferentes núcleos ideológicos en última instancia (ej.: arte y literatura). El
hombre crea la obra de arte por necesidad histórica y social, y la misma está determinada por
lo histórico social. La creación de la misma es el proceso de transformación de la naturaleza,
mejor conocida como la actividad práctica social. En el marco de lo social, la relación de
hombre-naturaleza se da una transformación mutua: el trabajo-práctica del hombre es lo que
le posibilita a él tomar conciencia de él mismo como sujeto histórico social.
Althusser, Louis: “Carta sobre el conocimiento del arte (respuesta a
André Daspre)”.