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Psicología de la Educación
Trabajo de Campo Final
(Profesorado de Letras)
Alumnas:
DUBAZ, Indira
REGONDI, Jesica
SPIZZO, Giuliana
Fecha: 08/12/15
El trabajo de campo que se propone desde la cátedra Psicología de la Educación, se llevó
a cabo en la escuela José Manuel Estrada N° 443 de la ciudad de Santo Tomé. La misma
es de gestión Pública, y en ella se dicta el Nivel Secundario Obligatorio en tres turnos:
turno mañana, turno tarde y turno noche. Entre estos tres turnos, la cantidad aproximada
de alumnos del establecimiento oscila entre 800 y 1000, lo que hace que la escuela sea
de Primera Categoría (esta cuestión se recupera de datos censales actualizados). Por
otro lado, la Institución referida ofrece a sus estudiantes (E) la posibilidad de optar por
formarse en dos modalidades (a partir del tercer año): Turismo y Economía. Teniendo
esto en cuenta, cabe aclarar que el grupo observado durante nuestra experiencia, está
compuesto por dieciocho E que conforman el cuarto año, quinta división del turno mañana
(Modalidad Economía).
Aparte de estas cuestiones de carácter estructural, procedimos a la obtención de
información que nos permita describir a la Institución desde los aportes que realiza
Dusckatshy (2001). Estos datos fueron obtenidos de comentarios significativos surgidos
dentro del aula, de la observación de un acto escolar y una charla a la que asistimos junto
al grupo observado y de los sentidos que pueden rescatarse de la cartelería que cubría la
institución al momento del desarrollo del trabajo de campo. Consideramos que la lectura
sobre esta información requiere agudizar la mirada de quienes investigamos, ya que son
datos de carácter indirecto que nos permiten reconstruir una descripción Institucional que
emerge del entrecruzamiento de los mismos.
De esta manera, decidimos comenzar describiendo escenas de un acto escolar y una
charla a la que asistimos junto con los E. En primer lugar, el acto al que hacemos mención
es que se celebró en conmemoración del Día de la Diversidad Cultural y en él, además de
los protocolos habituales (entrada y salida de banderas, entonación del himno patrio,
lectura de palabras alusivas a la fecha) se realizaron tres números en los que participaron
algunos alumnos del curso observado y la docente del área de Lengua y Literatura. En
estos espacios, se interpretaron canciones y se realizaron bailes, hechos sobre los cuales
surge un pequeño intercambio en una observación posterior:
(…)
E16 dice: “Profe, nada que ver con el tema pero yo no sabía que usted cantaba, canta re lindo.”
P: “Bueno, gracias. Lo hacemos para que ustedes se animen.”
Los E comentan sus actuaciones en el acto del día viernes 09/10 y P halaga esas participaciones.
Aquí observamos que en la respuesta de la profesora (P) hay una apelación a la que los E
se sumen a la participación en los actos escolares, que se involucren con los espacios
que dentro de la Institución se desarrollan por y para la comunidad educativa.
Por otro lado, el día en el que se realizaría nuestra última observación modalizada, los E
asistieron a una charla organizada con motivo de capacitar a los alumnos sobre la manera
en que se desarrollarían las elecciones presidenciales del mes de Octubre del 2015. Esta
actividad forma parte de un programa gubernamental que se implementa en todas las
escuelas secundarias de la provincia. La jornada estuvo dirigida por el P del área de
Historia que dicta clases en el grupo observado, y contó con la proyección de videos
instructivos y el intercambio de preguntas y respuestas que apelaron a resolver las dudas
que los estudiantes presentaron al respecto. Con esto, la actividad estuvo orientada a
instruir a los E y ofrecer un respaldo al momento en que emitan sufragios por primera vez.
Por último, al observar la cartelería presente en las paredes de los pasillos de la
Institución, advertimos que la misma gira en torno a temáticas como la lucha contra la
Violencia de Género; se reconocieron consignas correspondientes al movimiento
#NiUnaMenos organizado a nivel nacional en reclamo de la declaración urgente de una
Ley de Emergencia que ampare a las víctimas de violencia doméstica. Otro tópico
recurrente en los afiches es el de la Educación Sexual, haciendo especial énfasis en la
prevención de enfermedades de transmisión sexual (ETS) y las distintas formas de evitar
embarazos no deseados. A partir de estas imágenes que conforman el paisaje escolar
podemos reconocer un interés institucional por capacitar a los E no solo en las áreas
disciplinarias obligatorias sino también en problemáticas propias del contexto socio-
histórico en el que se insertan y que atraviesan a los E en tanto jóvenes que forman parte
de la estructura social que los contiene y determina. Es preciso tener en cuenta que la
confección de cartelería suele corresponderse con la realización de talleres o jornadas en
las que la comunidad escolar se ocupa de desarticular las prácticas áulicas tradicionales
en pos de informar, concientizar y capacitar a los sujetos, acerca de cuestiones que se
hacen partícipes de su vida cotidiana. En este sentido, la Escuela, como Aparato
Institucional del Estado lleva a cabo su función de formar ciudadanos que sean capaces
de insertarse en la sociedad que los contiene, pero de manera tal que estos cuenten con
las herramientas necesarias para poder decidir qué hacer con lo que la realidad les pone
delante de sí. De esta manera es que Dutchatsky (1999) habla de la necesidad de
considerar que la subjetividad se construye de manera contextualizada. Estos contextos
amplios de significación en el cual la subjetividad se construye, no son ni el grupo áulico ni
la escuela en su totalidad, sino que juega un papel muy importante el macro contexto
social, histórico, político y económico que atraviesa a cada sujeto en particular y hace que
las subjetividades se construyan determinadas por estos espacios. Lo central de nuestro
trabajo entonces será indagar los sentidos que los E en su condición de jóvenes, jóvenes-
estudiantes hacen con lo que la estructura social les pone enfrente, es decir, el valor
simbólico que imprimen a la realidad que les toca vivir.
Si retomamos entonces las variables analizadas más arriba acerca de la Institución
educativa, consideramos que el establecimiento con el que tratamos se caracteriza por
desarrollar una gestión como ética que se (pre)ocupa de crear condiciones para que los E
puedan erigirse como sujetos que inmersos en una sociedad, se enfrentan a problemas y
tiene la potencialidad de poder resolverlos. Esto impacta en la construcción de los jóvenes
como tales y como jóvenes-estudiantes que, dentro de la escuela, movilizarán las
matrices culturales propias de este espacio.
El carácter ético de la gestión está unido a la decisión, porque genera un “hacer” que se
apoya en la capacidad de “leer” distintas situaciones y decidir frente a su singularidad.
Esto quiere decir, que no se perseguirán utopías ni modelos de “deber-ser” (tal como se
haría en una gestión como fatalidad), sino que las problemáticas que alcanzan a los E se
visualizan como parte de una realidad que interpela y no debe ser desestimada. En este
sentido es que “la gestión como ética no elige la realidad en la que le toca actuar pero sí
elige la posición que decide tomar frente a ella.” (Dutchatsky, 2001:143)
Ahora bien, para adentrarnos en la interrelación entre los aportes teóricos desarrollados
en la cátedra y las situaciones empíricas registradas, es importante considerar primero
que nos situamos frente al grupo desde una perspectiva Etnográfica que supone “una
concepción y práctica de conocimiento que pretende comprender los fenómenos sociales
desde la perspectiva de sus miembros (entendido como “actores”, “agentes” o “sujetos
sociales”) (Guber, 2001:12). Desde este marco intentamos observar la manera en los E
construyen su experiencia escolar, es decir, cuáles son los significados que elaboran
durante su paso por la escuela media; cuestión que es influida por el carácter socio-
afectivo que revisten los sujetos E. Con esto queremos decir, que los sujetos de
observación, además de aprender, piensan y sienten, siempre inmersos en un contexto
determinado que en este caso es la Institución educativa.
Dentro del grupo que observamos reconocemos una escena que es susceptible de
relacionarse con un método de enseñanza directa de las estrategias de comprensión que
los E activan para desarrollar aprendizajes en las diferentes áreas de conocimientos. De
acuerdo con Bauman (1990, citado en Solé, 1994) la enseñanza o instrucción directa se
desarrolla en cinco etapas: en un primer momento, durante la etapa de Introducción, se
les comunica a los alumnos los objetivos y sentidos del trabajo a realizar. Luego, se
ofrecen ejemplos que ilustran la futura actividad, esta es la etapa de Ejemplo. Seguido a
esto, viene una etapa de Enseñanza directa en la cual el profesor asume un papel de guía
mostrando, explicando y describiendo lo que se debe realizar, lo cual implica la
manifestación de una estrategia a utilizar. Más tarde, en la etapa de Aplicación dirigida
por el profesor, los alumnos realizan el trabajo sobre el cual se los ha instruido, bajo la
supervisión del docente. Por último, durante la Práctica individual, los alumnos deben
poder aplicar de manera independiente la estrategia desarrollada para trabajar sobre
materiales nuevos.
Teniendo en cuenta este modelo, ponemos énfasis sobre una situación que surge durante
una clase de matemática.1 P se encuentra copiando ejercicios en el pizarrón y comenta
que deben realizarlos durante esa misma clase (Etapa de Introducción); mientras tanto, la
mayoría de los E copia. Llegado un momento, uno de los E pide que se explique cómo
resolverlos, por lo cual P detiene su actividad y comienza a explicar al grupo cómo es que
han de resolver los ejercicios de factoreo, haciendo prácticas con los polinomios ya
escritos en el pizarrón (etapa de Ejemplo y Enseñanza directa). Una vez que los E
comprenden, la voz de P va siendo desplazada paulatinamente del centro de atención y
es reemplazada por las voces de los E, quienes resuelven de manera oral los ejercicios y
ayudan a quienes no logran manejar la estrategia. P alterna la participación de los E con
explicaciones propias que pretenden subsanar aquello que no se transmite de una
manera clara (etapa de Aplicación dirigida por el profesor). Al momento en que se logra
un consenso sobre el nivel de comprensión, P agrega más ejercicios para que los E
resuelvan en sus carpetas (etapa de Práctica individual).
Es oportuno destacar que durante el intercambio de explicaciones, surgieron comentarios
de los E que proponían cómo les resulta “más fácil” a cada uno, resolver los ejercicios
propuestos. Es decir que se dio lugar a un intercambio de opiniones sobre los
conocimientos que cada quien maneja, sobre los esquemas de conocimiento de los que
dispone y de las lagunas en la comprensión. Esto demuestra que aunque en un momento
previo, los E solicitaron ayuda para resolver la tarea, una vez comprendida la estrategia
1
Por cuestiones de extensión, en el desarrollo del presente trabajo se transcriben solo fragmentos de las
situaciones empíricas que no pueden recuperarse en toda su significación a través de la descripción.
Asimismo las situaciones a las que se aluda pueden encontrarse en los registros de observación ubicados en
la sección Anexo, señalados en color rojo.
de aprendizaje propuesta por P, estos pudieron autonomizarse en cierta medida y, sobre
todo, demostrar un control metacognitivo.
(…)
P: “¿Quién quiere comenzar? ¿Exequiel?”
E5: “Después.”
P: “Bueno, sino hacemos un párrafo cada uno.”
(…)
P: “¿Quién quiere seguir? ¿Delfina?”
E15: “No.” (Se recuesta sobre sus brazos)
(…)
P: “¿Queres seguir Exequiel? ¿Micaela? ¿Luciana? ¿Priscila? A ver quién no leyó nunca… Priscila, dale.”
E17: “¿Qué tengo que leer? ¿Mucho? A ver, pásame.” Luego comienza a leer y E1 dice:
“No escucho nada.”
Otro E: “¿Eh?”
E17: “No puedo leer más fuerte.” Risas.
E17: “No, no quiero leer.”
Aún situados en la observación de la clase de Lengua y Literatura, vemos que una de las
escenas es susceptible de ser abordada desde las categorías de jóvenes y adolescentes
que propone Kantor (2008). Esta autora plantea que la categoría de adolescencia es
históricamente asociada a lo escolar, por lo cual en el mismo surgimiento de esta se
reconoce una estrecha vinculación con la creación de la escuela secundaria. En estos
términos, adolescencia significa escuela, el adentro escolar, mientras que juventud
representa lo extraescolar, lo que se valora, lo que se pretende considerar.
(…)
Continúa la lectura hasta que un E pregunta cuándo terminan de las clases. P contesta diciéndole que la
evaluación de las lecturas que están desarrollando, iba a realizarse a través de un trabajo práctico escrito y
una lección oral del mismo. Frente a esto, los E preguntan cuántas palabras debería tener el trabajo escrito. P
responde:
“Y, setecientas por lo menos”
E: “Oh, profe pero estamos a fin de año, es un montón”
P: “Bueno, cuatrocientas.”
E: “Fo profe.”
E: “Hay un tema que dice: Yo no quiero trabajar, no quiero estudiar, no me quiero casar”
P: Bueno continuemos con la lectura, la vida es así, si yo no les pido esa cantidad no escriben nada. Ahora
porque es fin de año, en quinto porque están por terminar y en primero porque son chiquitos. Miren que en la
universidad van a tener que escribir mucho más.”
(…)
P avisa que el viernes próximo dará las consignas para la realización del trabajo práctico de la obra. Por lo
tanto la profesora dice: “Ya saben cómo son los trabajos así que no va a ser nada del otro mundo, va a ser
oral”. Ante esto los alumnos manifiestan que se ponen nerviosos ante esta metodología de trabajo. La
profesora responde: “La mayoría de las cosas en la vida la van a tener que hacer así, de frente. Así que van a
tener que acostumbrarse.”
De esta manera, P construye una categorización de jóvenes que se relaciona con los
aportes teóricos que relacionan la adolescencia con lo intraescolar y la juventud como lo
extraescolar, aquello que sobreviene una vez terminada la Educación Secundaria
Obligatoria (ESO). En palabras de su autora “el estado, la familia, la escuela, siguen
pensando a la juventud como una categoría de tránsito, como una etapa de preparación
para lo que sí vale; la juventud como futuro, valorada por lo que será o dejarán de ser.”
(Reguillo Cruz, 2000:28) En este caso, no sólo la adolescencia sería una etapa de
tránsito, sino también la misma escuela, entendida como un espacio que prepara a los
sujetos para enfrentarse luego a la vida adulta, lo cual concuerda con su función de
Aparato reproductor del Estado. A su vez, estas nociones se vinculan con los planteos de
Margulis (2008) acerca de que una de las variables que definen lo que es “ser joven”
sobre todo en períodos contemporáneos. Esta característica se relaciona con las
posibilidades que los sujetos tienen de disponer de una moratoria social, es decir, de un
tiempo entre la culminación de sus estudios secundarios y la asunción de
responsabilidades “adultas” como formar una familia o conseguir trabajo. En tiempos
actuales, este tiempo extra se ocupa generalmente para la formación profesional que
promete una inserción al mundo laboral; pero no se da de igual manera en todos los
jóvenes de una sociedad, sino que existen diferencias entre las maneras de ser joven.
Esto quiere decir que a pesar de que la disponibilidad de una moratoria vital, de un tiempo
de vida alejado de la muerte erige a los jóvenes como todos aquellos sujetos que son
parte de las generaciones más recientes (a los cuales preceden otras generaciones);
existe otro tipo de variables que definen al joven de hoy. La moratoria social de la que
hablábamos más arriba es una de esas variables, y ese es el plus de tiempo al que la P
de lengua se refiere cuando considera que sus E continuarán estudios superiores. Con
esto estimamos, que la concepción de jóvenes que asume P, se adecúa a los
lineamientos teóricos antes desarrollados.
Para finalizar, otra situación que encontramos pertinente para el análisis se desarrolla
nuevamente durante la de Química, cuando P otorga el permiso a los E de realizar
fotografías al contenido del pizarrón, a fines de optimizar los tiempos de la clase. En este
contexto, una E se acerca al mismo y realiza una captura, momento en el cual otro E se
dirige hacia ella y le dice: “Vos sacas foto para decir que tenes un celular con cámara y
flash”.
Este comentario nos permite dilucidar que el consumo cultural representado aquí por el
hecho de poseer un celular con tales características tecnológicas, da cuenta de la
importancia que adquieren las industrias culturales y de consumo en la sociedad (a la que
no todos acceden) y cómo llegan a infiltrarse en los ámbitos escolares. En este caso la
posesión de un artefacto que se utiliza en el ámbito escolar en el cual se intenta que los E
adquieran un nivel uniforme de herramientas y conocimientos, nos lleva a pensar cómo
es que los estudiantes construyen sus identidades individuales y colectivas. “Cuando
decimos consumos y producciones culturales nos referimos, entonces, al universo cultural
de los pibes, que configuran también el territorio en y desde el cual reciben nuestras
propuestas, las auscultan, las aceptan, las rechazan o transforman”. (Kantor, 2008:34). La
propuesta del uso del celular para agilizar una tarea áulica termina en esta situación,
siendo objeto de diferencias entre los E. De esta manera se diluye el ideal del acceso y la
ilusión de estar incluidos, primero en un mercado de consumo, y luego, aquí en la porción
de E que podrán conservar apuntes de clase gracias a su dispositivo móvil, frente a los
que no dispondrán del material que pronto desaparecerá del pizarrón. Aquí vemos
entonces que la construcción de las identidades en esta situación gira en torno a la
posibilidad o no de formar parte de un mercado de consumo. En este sentido cabe
recuperar una expresión que plantea que “la conformación de agrupamientos en términos
de clase, de generación o estamentos dentro de ellas se sustenta en elecciones con eje
en ciertos consumos, ritos y prácticas, que constituyen claramente propuestas identitarias.
(Kantor, 2008:38) El impacto que provocan ciertos bienes materiales y el consumo de
ellos en la identidad de adolescentes y jóvenes remite no solamente a la diferencia que se
establece en el aula sino además “a identidades de segmentos poblacionales más
amplios, a la conformación de comunidades locales, nacionales y transnacionales”
(Kantor, 2008:38).
Conclusión
Para concluir entonces debemos señalar que la experiencia de trabajo de campo significó
el primer contacto que, como estudiantes, establecimos con un grupo de E en el interior
de una Institución Educativa. Este acercamiento al ámbito escolar que se realizó por
medio de las observaciones, nos permitió captar las estrategias y actividades que resultan
productivas para el desarrollar aprendizaje de los jóvenes, y cómo ellos se apropian de
estos contenidos dependiendo no sólo del grado de motivación que proponga el profesor
ante cada actividad, sino de su capacidad de relacionar esos conocimientos nuevos con
conocimientos ya adquiridos. Es decir que la actividad no solo nos permitió reflexionar
sobre la construcción de la categoría joven-estudiante, sino que nos dio lugar a pensar
acercar de nuestras propias, futuras, prácticas.
Es importante mencionar que desde el primer contacto con el establecimiento se nos
caracterizó al grupo como “es un grupo lindo, participan y se puede trabajar”. Estos
comentarios contribuyeron a forjarnos una serie de expectativas sobre los E y sobre
nuestra propia tarea. Sin embargo, situadas desde un enfoque Etnográfico de
investigación, debimos alejarnos de nuestros pre-conceptos en plena formación y de
aquellos que traíamos de nuestra experiencia como E del nivel secundario acerca de qué
se supone que encontraríamos en un aula, a fines de poder aprehender los marcos
interpretativos desde los cuales los E dan sentido a sus prácticas. Fue en este momento
en que nuestra propia reflexividad como observadoras entró en tensión con los marcos de
interpretación propios de los sujetos observados, por lo cual debimos “dejar nuestra
subjetividad al costado” y premeditar una supuesta “ignorancia” para poder observar la
vida cotidiana de los E e interpretar su cultura. Creemos que lo que surgió aquí fue que, a
mitad del camino se solaparon nuestras representaciones y autopercepciones como
alumnas de una secundaria ya transitada, y de docentes en camino. Desde esta última
percepción creemos que lo esencial en una relación pedagógica es mantener la
esperanza acerca de que el alumno es un otro que efectivamente cuenta con capacidades
cognitivas que les permiten aprender, que tiene intereses y motivaciones, por lo que
pueden aprender; y que nuestro futuro espacio es el de un guía que ofrecerá estrategias
para enfrentar cada actividad, para formular problemas y modos óptimos de resolución;
que luego dará vía libre a los alumnos para que ellos mismos construyan sus propios
caminos; pero que, sobre todo, se esforzará por identificar las motivaciones que impulsan
a los E a aprender, es decir, que trabajará por desentrañar los universos de sentido que
atraviesan a los jóvenes, a fines de poder “leer” el aula desde sus propias perspectivas y
“poder hacer” a partir de allí.
BIBLIOGRAFÍA:
Anexo
Negociación Inicial
Registros
Día 1: 08/10/15
óxidos
Elemento + 02
Mo= óxido básico No metálico + o2
Mg (5)+ o2= 2 mg o c o2 + h20 = h2c o3 (ácido
de carbono)
mg 0(5)+ h20= mg (0h)2 Hidróxido de Magnesio
Fe o + h2o= fe (oh)2
Fe 2 o3 + h20= fe (oh)3 Hidróxido ferroso
Co+ h2o h2 c o2 Ácido carbónico
Oxigeno carbónico
so 3(g) s0 2(3) + h2o h2 5º3 Ácido sulfuroso
Oxígeno sulfurosos
Elemento+ h2 = hidruro
Metal +h2 no metal+ h2vb
Timbre.
Timbre.
P: “Bueno, las hojas.”
E: “Pero hicimos una nomás.”
P: “Bueno, para la semana que viene traen el trabajo escrito
11:20 AM terminado como para exponer individualmente.”
E12 ingresa a Whatsapp desde su celular mientras E13 se
coloca los auriculares y E7 enchufa el cargador de su
celular. Los E dialogan entre sí sobre la fecha de la
despedida de quinto y luego se retiran los sujetos que
habían llegado anteriormente. P se retira.
E11 a sus compañeros: “Buenos chicos, ahora vienen los
dos módulos más felices de nuestros viernes.”
E10, 11 y 16 dialogan con los observadores. Refieren que la
P de matemática que iría a continuación “es una
reemplazante, no está acostumbrada a nosotros porque por
ejemplo, acá si pedís para ir al baño, te dejan. Y yo le
pregunté a ella y me dijo que no sabía si podía dejarnos. Yo
estaba bordó. Es recansadora esta P, apenas toca el timbre
está parada en la puerta.”
Ingresa la P.
E13: “Profe, ¿trajo las pruebas?”
P responde negativamente, a lo que el E13 responde: “Fo.”
E6: “Profe corrija las pruebas.”
11:28 AM Los E mantienen la ubicación que formaron en el módulo
Materia: anterior, salvo E5 que se ubica en el banco donde antes se
Matemátic encontraba E6. En este momento dos E se acercan a hablar
a con P y acto seguido se retiran del aula. E13 se coloca los
auriculares mientras P interroga a los observadores sobre la
institución en la que realizan sus estudios y la cantidad de
jornadas a observar. Al momento ingresa al aula E14, E13
observa su celular y de acuerdo a la cantidad total de
alumnos, puede notarse que faltan tres que estaban
anteriormente. Luego ingresan los tres juntos.
Seguidamente ingresa personal no docente de la institución
preguntando por dónde y quién guardó el mapa utilizado en
la hora de geografía. Mientras tanto, P anota en el pizarrón:
“Factor común” y dice “chicos, saquen la carpeta y
empiecen a copiar, esto es para hoy” Sigue copiando en el
pizarrón (las pausas y las acciones realizadas por los E en
este momento se señalan en letra cursiva):
Actividad:
1) 12X2 – 4X +… =… (… X2 – X + …)
2) X7 + … = (X2+1)
3) X7 +… X5 – 5X3 =… (…-3X2 +…)
4) 3X4 + … = … (X3 + 8)
5) -4X4 - … - 6X2 = … (X2 + 5X + …)
6) … + 48X4 = 3X4 (5X4 + …)
12:40 AM
Día 2: 14/10/15
Jornada modalizada. Área: Lengua y Literatura.
Timbre. E16 dice: “Profe, nada que ver con el tema pero yo
9:45 AM no sabía que usted cantaba, canta re lindo.”
P: “Bueno, gracias. Lo hacemos para que ustedes se
animen.”
Los E comentan sus actuaciones en el acto del día viernes
09/10 y P halaga esas participaciones.
E14 ve una mosca en la ventana y dice: “Ay no, matenla que
me da asco.” E4 abre la ventana, los demás hablan con voz
alta. Frente a esto, P toma la situación ocurrida con la
mosca y recuerda a los E un hecho ocurrido en la novela
que están leyendo. Así surge la temática acerca del
casamiento y de la virginidad y cómo luego de que la mujer
perdía esta condición al consumarse el matrimonio, el
marido sacaba las sábanas a la ventana como comprobante
de la consumación. Los E ríen y uno de ellos agrega:
“Imagínense todas las moscas volando por las sábanas.”
Risas. Continúa la lectura hasta que un E pregunta cuándo
terminan de las clases. P contesta diciéndole que la
evaluación de las lecturas que están desarrollando, iba a
realizarse a través de un trabajo práctico escrito y una
lección oral del mismo. Frente a esto, los E preguntan
cuántas palabras debería tener el trabajo escrito. P
responde:
“Y, setecientas por lo menos”
E: “Oh, profe pero estamos a fin de año.”
P: “Bueno, cuatrocientas.”
E: “Fo profe.”
E: “Hay un tema que dice: Yo no quiero trabajar, no quiero
estudiar, no me quiero casar”
P: Bueno continuemos con la lectura, la vida es así, si yo no
les pido esa cantidad no escriben nada. Ahora porque es fin
de año, en quinto porque están por terminar y en primero
porque son chiquitos. Miren que en la universidad van a
tener que escribir mucho más.”
P: “¿Quién quiere seguir? ¿Delfina?”
9:54 AM E15: “No.” (Se recuesta sobre sus brazos)
P: “Bueno Milagros, seguí.”
Continúa la lectura. P se acerca a E6 para indicarle la
página que se está leyendo, lo mismo hace con E4.
Identidad latinoamericana:
Personajes
Selva María= inocencia
Don Ignacio= Desidia
Abrenuncio= Ciencia
Obispo= poder
Bernarda= vicio
Olalla= virtud
dulce Olivia= amor
segunda= superstición
Día 3.
9:05 AM Timbre.
E8: “No.”
9:24 AM
P: “¿Quién quiere comenzar? ¿Exequiel?”
E5: “Después.”
P: “¿Por qué?”
P: “Usa la mía.”
P: “¿Qué es lo diferente?”
E al unísono: “Mmm...”
E: “mmm, sí.”
E5: “¿Sigo?”
P: “Dale.”
E6 cierra la carpeta.
Otro E: “¿Eh?”
E18: “¿Sigo?”
P: “Después hablan.”
10:25 AM
Entrevistas
A continuación se transcriben dos encuentros con un E y con P de Lengua y Literatura,
los cuales terminaron por ser entrevistas informales. Estos encuentros no fueron previstos
por el equipo de trabajo, sino que se desarrollaron a partir de que un E se acercó a los
observadores y dio un relato acerca de algunos aspectos de su escolaridad. Lo mismo
sucedió con P de Lengua y Literatura, quien intercambió algunas opiniones con uno de los
observadores en minutos previos a la realización de una charla ofrecida a los E acerca de
la modalidad de votación de las próximas elecciones del día 25/10/15.
A: Ay chicas, yo no sé si esto de la charla les sirve pero a mi recién me avisan. De todas maneras
las clases son muy similares a la del miércoles pasado, sobre todo leemos acá, yo les dejo otra
lectura para la casa y después evalúo con algún trabajo práctico o lección oral.
B: No se preocupe profe, todo sirve, aparte está buena la temática de la charla, es algo que no pasa
hace mucho; lo de votar a los dieciséis digo.
A: No, claro.
A: ¡Si, bastante! Viste que participan, se interesan. Lo que más les cuesta es el realismo mágico.
Viste que Cortázar es complejo. Además, la teoría literaria les cuesta un poco también.
A: Si, además cuando la lectura es muy compleja ya no les gusta. Por eso yo trabajo con estas
novelas. El programa mucho no nos ayuda mucho tampoco. Lo que más les interesa a ellos es el
teatro, representar una escena o alguna partecita. Antes se daba el Mio Cid pero cuando tuvimos
reuniones por el nuevo programa, yo y otras chicas acordamos sacarlo.
A: Sí. Si para nosotros es aburrido, imaginate que los chicos lean eso. Ahora dan el Quijote.
Entrevista 2: E
Durante la que sería la última observación modalizada del trabajo de campo, un E del curso que
se observa se acerca al equipo de trabajo y comenta algunas cuestiones que se reconstruyen
aquí. En un primer momento contó sobre la charla que tendrían a continuación y que hubo
evaluación de Química en las dos primeras horas; pero alude que “la profesora terminó haciendo
la evaluación por nosotros porque era difícil y no entendíamos nada. Así que cuando alguien
preguntaba algo, servía para todos. Pasa que ella va muy rápido, nadie entiende nada y cuando
le pedís que vuelva a explicarte algo, te explica exactamente los mismo, osea…”. El E agrega
además que la profesora avisó sobre la evaluación dos días antes de la misma y que la
modalidad a la que se había referido era la de “trabajito práctico”. El sujeto agrega: “Nosotros
pensamos cuando nos dijo así que era a carpeta abierta o era algo tranqui, pero era evaluación a
carpeta cerrada”. El sujeto alude que todas las demás profesoras avisan con anticipación antes
de tomar evaluaciones. Ante la pregunta que le hacemos sobre cómo llevaba las demás materias
el sujeto dice que la materia más difícil es Derecho ya que la profesora evalúa con 5, 6 o 7,
“nunca pone más de esas notas” y casi todos por ese motivo se la llevan, objeta: ”somos cinco o
seis los que no nos llevamos la materia. Luego comienza a nombrar el resto de las materias
(economía, administración, lengua, geografía, historia, matemática, entre otras) y subraya que
durante el año le fue bien pero que ahora se le estaba complicando porque al finalizar el trimestre
tienen todas las evaluaciones y lecciones juntas, da el ejemplo de lecciones de materias como
Geografía y Administración. A continuación apunta que en Lengua tienen que leer Marina ya que
también le toman lección sobre la obra. Al finalizar agrega: “No sé cómo voy a hacer con todo,
nunca tuve que estudiar tanto, encima de Marina son como 300 páginas, ayer me lo compré”. El
timbre de finalización del recreo interrumpe la conversación y el E se aleja.