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LA IMPORTANCIA DE LA DEMOCRACIA
ENSAYO
Presentado por:
ANGELA NATALIA VILLEGAS GUERRERO
Docente:
JOSE GILBERTO BELTRAN
Economía en Contexto
UNIVERSIDAD DE LA SALLE
FACULTAD DE ECONOMIA
BOGOTA
2014
INTRODUCCIÓN
Existen problemas en nuestro país actualmente que no han sido únicos en el mundo, por el
contrario que se han manifestado de diferentes maneras a lo largo y ancho de las
economías en todo el mundo y que han sido analizados por importantes economistas desde
puntos de vista distintos creando modelos y conclusiones muy interesantes que se pueden
contextualizar también.
Este ensayo lo hago con el fin de abordar algunos aspectos del sistema de mercado en
Colombia más específicamente, cómo operan sus bondades y restricciones a nivel general,
sin pasar por alto algunos efectos negativos que ha dejado en el transcurso de la historia
nacional al fortalecerse en medio de un sistema capitalista con rezagos de un anterior
feudalismo, tras una difícil independencia y parte de su actual crisis, esto con el fin de
entender más objetivamente que ha pasado en nuestro propio contexto, a partir del texto
del nobel en Economía Amartya Sen del año 2010.
Por otro lado tratamos el tema de la democracia, como una necesidad que se vuelve muy
beneficiosa cuando se trabaja con juicio y con la participación activa de todos los
integrantes de la comunidad, considerada como un derecho político y económico mucho
más valioso y aportante que cualquier incentivo.
MERCADOS, ESTADO Y OPORTUNIDAD SOCIAL
ENSAYO
El mecanismo de mercado que actualmente existe tiene abiertas fallas de las cuales es
consiente la sociedad, por lo cual siempre ha existido un rechazo hacia él y es por esta razón
por la cual se proponen nuevos métodos de organización. Poner en práctica estas ideas en
economías de países en vía de desarrollo como Colombia puede tener unas cargas fiscales
bastante altas, y unas metodologías a aplicar que no siempre serán del todo productivas
para el funcionamiento del mismo. Es normal que estos temas no atraigan la atención
suficiente y que se crearan propuestas para solucionar el problema.
La sociedad conoce las bondades de la existencia del mercado pero estas generalmente
están subvaloradas, participamos activamente en él sin conocerlas. Este hecho es cada vez
es más común con la globalización en la que se ve un fuerte nivel de importación y
exportación entre países de todo el mundo y esto se debe a que “tenemos buenas razones
para comprar y vender, para intercambiar y tratar de llevar una vida que pueda florecer
gracias a las transacciones”
Tanto el socialismo como el capitalismo son formas de gobierno buenas y malas en sus
diferentes contenidos, mientras algunos apoyan la primera con fuertes argumentos que otros
apoyan la segunda. Es claro que si un gobierno decide optar por una de las dos como
fundamento para cambiar sus políticas de manejo, si no tiene las precauciones pertinentes
puede no obtener los resultados esperados y por el contrario, desembocar en crisis fuertes e
inesperadas.
Otro avance importante en el tercer mundo es la libertad de la mujer para poder trabajar
fuera de casa. La posibilidad de acceder a un empleo remunerado aumenta su
independencia económica y mejora la distribución de recursos en el hogar. Podemos decir
que en Colombia vamos por buen camino en el tema, porque cada día aparecen más
mujeres liderando y participando activamente tanto en la sociedad como en el gobierno,
mientras que en países como Afganistán existe una prohibición “explicita y feroz” de este
derecho de la mujer.
Es importante someter a debate público cuestiones sociales como esta igual que las
ventajas que traen las actividades grupales con miras al cambio, en donde la mujer cumple
un papel “importantísimo para transformar varios países en el mundo”
Hemos tratado algunos temas acerca del mercado, ahora hablaremos de la eficiencia en
la distribución que representa: “El mercado de trabajo puede ser un libertador en muchos
diferentes contextos”.
Existen modelos clásicos de equilibrio general que se utilizan para mostrar las virtudes del
mercado cuando busca lograr eficiencia económica, lo cual se ha denominado
optimalidad, término utilizado por el economista italiano Vilfredo Pareto en sus estudios sobre
eficiencia económica y distribución de renta. Existe una realidad que se puede observar
fácilmente y es, que no puede mejorarse la renta de todas las personas al tiempo: la utilidad
de una persona no mejora sin que se empeore la de otra. Un país, por ejemplo debe ver en
qué gastar su presupuesto, si invertir en educación y salud o en guerra, porque si cuenta con
recursos limitados, difícilmente podrá cubrir las tres necesidades mencionadas que son
básicas aunque decida tomar créditos con bancos internacionales, sobre todo si se trata de
países como el nuestro con problemas de narcotráfico, guerrilla y corrupción en tal nivel.
Una persona naturalmente no está motivada a hacer algo, si no va a recibir algún beneficio
y se supone que esta es su única motivación. Pero los resultados de Arrow-Debreu son
bastante independientes a las motivaciones, si el objetivo es demostrar la eficiencia en la
satisfacción de preferencias o en las libertades individuales.
Existe un factor mucho más importante y es el hecho de combinar estos dos sucesos (falta
de renta y de desventaja para convertir la renta en capacidades) porque la hacerlo la
situación tendería a agravarse. A pesar de que el mecanismo del mercado se encamina a
la equidad por naturaleza, puede por sí solo empeorar los resultados sobre la eficiencia. Un
sistema capitalista funciona bajo este precepto, pero lo que vemos día a día es que la
distribución de renta no es para nada equitativa en las economías más fuertes y en las
débiles; mientras los ricos son cada día más ricos, los pobres son más pobres y no siempre
esto se ve justificado en el trabajo o en el uso del capital como herramienta de producción,
existen factores predominantes como la explotación entre otras expresiones simples del
feudalismo que en lugar de encaminar el mercado hacia el equilibro empeora los resultados
de la eficiencia.
Los mercados no son del todo independientes, por el contrario llegan hasta donde se les
permite y pueden verse influenciados por algunos grupos sobre otros, restringiéndolos aún
más. Un claro ejemplo es ver como en nuestra economía nacional, en donde existen
tratados de libre comercio que permiten el comercio de bienes internacionales que no son
del todo buenos para la población pero si surten beneficios en algunos aspectos políticos
particulares. Smith defendía el hecho de permitirle al mercado moverse libremente y sin
restricciones, porque casualmente y precisamente en algunas economías socialistas,
aquellas restricciones son ampliamente precapitalistas.
La política de un país debe estar sujeta a lo que necesita el pueblo, dejando el debate
abierto en una real democracia. Smith consideraba que las señales del mercado pueden
ser engañosas y que el libre mercado puede motivar el despilfarro de capital social que
puede ser productivo si es bien invertido, lo cual fue censurado por economistas como
Jeremy Bentham. Se puede entender que el beneficio privado va en contra de los intereses
sociales.
Es un hecho que el funcionamiento libre del mercado lleva al equilibrio y a su vez a resolver
los problemas económicos pero hay que cuestionar hasta donde llega dicho equilibrio. El
estado debe proporcionar bienes públicos que en realidad lleguen a todos de forma
equitativa, lo cual justifica que el estado intervenga en el mercado.
En Colombia hemos empezado a recibir diferentes clases de subsidios, pero vemos que se
enfrentan los mismos problemas que en otros países. Es difícil evitar que estas “ayudas” no
afecten el equilibrio del mercado desde diferentes puntos de vista.
Por otro lado tenemos la importancia de examinar la inversión del estado desde este punto,
porque la carga fiscal del gasto público puede aumentarse significativamente y el estado
debe ser prudente al análisis la importancia de los incentivos. Estos pueden afectar
considerablemente la economía, pero deben considerarse porque por ejemplo, conllevan
un alto grado de ayuda social a pesar de que dependan de los costos en incentivos.
Hay que hacerse una pregunta muy importante y es, ¿Cómo debe distribuirse la ayuda
pública? Porque generalmente los ingresos se toman como base para saber si una persona
debe recibir la ayuda que el estado le brinda o no; el verdadero problema radica en
conseguir información de los ingresos reales y que esto no tenga efectos negativos.
Para determinar si los incentivos se deben dar se plantean dos problemas adicionales: las
discapacidades físicas de las personas y sus circunstancias económicas. En los países
subdesarrollados sobre todo, es muy complejo encontrar información real sobre la renta, por
lo cual se debe caer en dar ayudas a personas quienes no lo necesitan, y esto es algo de lo
cual no están enterados los individuos que apoyan estos métodos de ayuda. Se puede
distorsionar la información, los incentivos, puede haber desutilidad y estigma, puede verse
costes administrativos, perdida y corrupción generales, y el gobierno puede ejercer
viabilidad política y calidad.
En pocas palabras, existen más motivos que defensas para dejar de apoyar este tipo de
políticas, porque existen varios motivos para desmantelarlos, así como para mantenerlos en
pie: “El enfoque correcto tendría que ser sensible a las circunstancias: tanto a la naturaleza
de los servicios públicos que se van a ofrecer como a las características de la sociedad a
quien van dirigidos”
Por otro lado el estado debe ser prudente, y mantener un conservadurismo financiero que
le permita vivir dentro de sus posibilidades esto para no entrar en déficit, el estado debe
negarse a un gasto público excesivo, “El radicalismo contra los déficit ha de distinguirse del
verdadero conservadurismo financiero”. Porque una irresponsabilidad fiscal puede poner a
la economía en serios problemas, por ejemplo la inflación, que se debe en su mayor número
de casos al déficit financiero del estado, y que se convierte en un problema persistente y
difícil de controlar en el tiempo; ni siquiera la inflación moderada es buena. “
LA IMPORTANCIA DE LA DEMOCRACIA
Los países del Tercer Mundo tienen acuciantes necesidades económicas en muchos
contextos, y su medio puede sacar ciertas ventajas de dicha pobreza. Debería darse
prioridad a la satisfacción de las necesidades aunque se comprometan las libertades
policitas.
Se considera que la democracia y la libertad política es un lujo que un país pobre no puede
darse, y se dijo que lo que habría de llamar la atención debía ser los derechos económicos
relacionados con las necesidades materiales importantes. Los primero que un estado debe
hacer es erradicar su pobreza y sufrimiento o garantizar las libertades políticas y los derechos
humanos que de poco le sirven a los pobres.
Existen diferentes conexiones entre las libertades políticas y la satisfacción de las necesidades
económicas, en tanto que dichas necesidades dependen de la discusión y debates políticos
abiertos. Los derechos políticos y liberales básicos tienen primacía por su importancia directa
en la vida humana, su papel instrumental en la mejora de las necesidades, y su papel
constructivo en la conceptualización de las necesidades.
En una economía subdesarrollada sus integrantes no optaran por tomar las libertades
políticas, por el contrario solo buscara satisfacer sus necesidades básicas por lo tanto “la
verdadera cuestión no es lo que eligen los individuos sino lo que tienen razones para elegir”,
pero no se dan cuenta que el problema no radica en satisfacer sus necesidades, sino
proyectarse un poco más que eso y entender que participar en la economía puede ser más
provechoso incluso que recibir un incentivo, “los individuos deben anteponer los derechos
del estado ante los suyos.
Existen economías buenas sin libertad de participar en su democracia pero esto no se puede
generalizar porque la supresión de los derechos políticos y humanos realmente no contribuye
al libre desarrollo económico.
Las personas deben entender que entre mayor sea su participación en el gobierno, mayores
serán los beneficios que reciban aunque sean a un más largo plazo, siempre serán más
duraderas y relevantes. En otras palabras, el pueblo debe participar vivamente en las
propuestas de gobierno de su propio país para resultar beneficiado a largo plazo y en gran
medida.
Se dice a que los ciudadanos del tercer mundo que son pobres no les interesan en absoluto
la democracia y ese es un hecho que se debe erradicar.
CONCLUSIONES