Camilo Andrés Blandón Bautista.

25/03/2020

Las mujeres en el campo de la administración.

Desde la antigüedad el papel de la mujer se ha visto opacado en varias tareas y oficios; en el

campo del management o administración no ocurre una excepción a esta tendencia. A lo largo
de la historia se resalta el papel de grandes teóricos como Fayol, Weber, Taylor, entre otros.
Los cuales ayudaron a mejorar de una u otra forma la empresa, el management y la
organización. Pero muy pocas veces se habla de las contribuciones realizadas por las mujeres
en este campo; es por esto que este ensayo busca resaltar cuatro importantes protagonistas en
esta área, además de analizar la situación que enfrentan las mujeres, qué desafíos tienen desde
una perspectiva histórica y finalmente se busca crear conciencia de su papel en la dirección
empresarial.
La humanidad históricamente ha separado las labores de hombres y mujeres, siendo un
ejemplo de esto que los hombres predominan en campos como las ingenierías, ciencias
aplicadas, administración, economía, política, etc. Mientras que a la mujer se le resigno a
labores sociales o domésticas, a esto se le denomina la división sexual del trabajo (​Benería,
L.1981).
Una mujer que revolucionó el mundo y una de las primeras en lograr cosas inimaginables fue
Marie Curie, ganadora de dos premios nobeles y la primera en lograrlo (​Ron, J. M. S. , 2011)​,
pero a pesar de sus grandes logros la mujer siguió siendo opacada en sus labores diarias.
Jimenez & Beltrán (2015) Afirman que la mujer podía ejercer en pocas labores (maternidad,
cuidado, servicio, enfermería, docencia, telefonista, etc), además de esto debían cuidar su
buen nombre y moral así como se cita a Scott (1993), Yannoulas (1993) & Jiménez (2009)
en Jimenez & Beltrán (2015).
Esto evidencia la difícil coyuntura que vivía la mujer en esa época, tiempo después se
desarrolló un debate sobre el que habla Scott (1993), de los trabajos que no podía realizar la
mujer y como está sobrellevaba la carga de hacer labores domésticas y a su vez ser una
profesional. Poco después la mujer se fue integrando a las diferentes áreas laborales gracias a
las coyunturas sociales, económicas, políticas y a movimientos que resaltan su importancia,
sin embargo aún se ve nota una brecha entre los dos sexos.
Dichos problemas anteriormente mencionados fueron también parte de las organizaciones y
más específicamente en los altos cargos, agregado a esto, la mujer tenía un escaso acceso a la
educación y la mayoría de teóricos eran filósofos, ingenieros o graduados con algo a fin con
las ciencias sociales. Cabe resaltar que la primera mujer ingeniera fue ​Elisa Leonida
Zamfirescu (en 1912) tal como la referencia de Bergara & Jardunaldiak en el Cuaderno de
Cultura Científica. Es ​por todas estas variables que se resaltaron anteriormente que la mujer
no fue tan destacada en las teorías administrativas, ya que desde un principio tenía
limitaciones más que todo sociales.
Sin embargo surgieron varias exponentes de la administración, una de ellas es Rosabeth Moss
Kanter con su estudio Hombres y mujeres en la administración (1977) y otro libro sobre
Prosperar localmente en la economía global (2003). En Hombres y mujeres en la
administración (1977) Kanter realiza un estudio durante 5 años en donde identifica cómo se
desenvuelven los empleados en la oficina y cómo interactúan, claramente evaluando desde
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los dos géneros. En este estudio la autora identifica que las mujeres tienen muy pocas
oportunidades de ascenso, son más pasivas y los hombres asumen el liderazgo en su mayoría.
Kanter posteriormente desarrolla la teoría de la oportunidad la cual sirvió en varios estudios
de la organización, como en la burocracia (​Markham, W. T., South, S. J., Bonjean, C. M., &
Corder, J. 1985), en un estudio sobre la percepción del empoderamiento en el trabajo y el
compromiso organizacional (Wilson, B., & Laschinger, H. K. 1994), entre otros estudios.
El segundo libro habla de los nuevos criterios para el exito: liderazgo con una estrategia
global, reforzar el ciclo de desarrollo, mejorar la formación y educación, elevar los estándares
a través de la colaboración, localizar la economía global y llegar a tener categoría
internacional (Kanter, 2003). En estos dos estudios evidenciamos un enfoque variado, en
donde aporta cosas más valiosas en el segundo dirigidas a empresas no tan sistémicas y
globalizadas, sino más para comunidades como lo destaca en el texto “el artículo ilustra lo
que hace falta para que una economía local llegue a tener una categoría internacional”
(Kanter, 2003. p. 2) , además de esto en el texto destaca tres activos importantes para las
empresas: ideas, capacidades y conexiones. A partir de estas ideas desarrolla el texto y da una
especie de camino para que empresas locales pasen a ser internacionales.
La siguiente exponente es Joan Woodward, “docente e investigadora muy reconocida,
trascendió por sus relevantes y rigurosos estudios en la industria manufacturera de Inglaterra,
poniendo foco en el impacto de la tecnología en sus estructuras” (Denda, E. M., Paolini, N.
A., & Tirachini, B. 2016). Charles Perrow (1970) califica a la encuesta de Woodward como
el estudio más ambicioso y estimulante al utilizar la tecnología como una variable
independiente. Woodward buscaba saber si la aplicación de los principios organizacionales
tenían alguna relación con el éxito empresarial, por lo que estuvo a la cabeza de una
investigación que contaba con más de 100 empresas y según Denda, E. M., Paolini, N. A., &
Tirachini, B. (2016) los primeros resultados arrojaron que solamente la mitad de las empresas
aplicaban las teorías organizacionales de la época. De 20 empresas que estaban por encima
del promedio solamente 9 de ellas aplicaban conceptos clásicos en su organización. A partir
de esto las empresas se agruparon de acuerdo a sus métodos técnicos, a partir de esto se
encontró que las empresas que tenían métodos similares, así mismo tienen similitud en sus
estructuras.
Los segundos resultados mostraron que las 20 empresas que habían sido mejor que el
promedio tenían poca similitud entre ellas. El estudio mostró importantes diferencias en las
estructuras y modalidades de gestión, que a su vez, no guardaban relación con el tamaño de la
empresa, el tipo de industria o la performance empresarial. Cuando las empresas fueron
agrupadas teniendo en cuenta objetivos similares y técnicas de producción, y clasificadas en
cuanto a la complejidad técnica de sus sistemas productivos, cada sistema productivo parecía
estar asociado con un tipo de diseño organizacional.
Algunas conclusiones que desarrollaron Denda, E. M., Paolini, N. A., & Tirachini, B. (2016)
a partir de Woodward, J. (1958) fueron:
● La tecnología utilizada por la organización afecta profundamente el diseño
organizacional
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● En la tecnología de producción en masa, la forma burocrática de organización está

asociada con el éxito, pero en otros tipos de tecnologías el diseño organizacional más
viable no es el propuesto por la teoría clásica.
● Existe alta correlación entre la estructura organizacional y la previsibilidad de las
técnicas de producción en la producción en serie y baja correlación para la producción
unitaria o taller.
● Las empresas en condiciones estables necesitan estructuras diferentes de aquellas
organizaciones con tecnología cambiante. Las estables necesitan un sistema mecánico
y las innovadoras necesitan un sistema orgánico, con mayor capacidad de adaptación.
● La importancia de ventas, producción o ingeniería depende de la tecnología específica
empleada (funciones de la empresa).
● Un hallazgo adicional sugiere que normas y reglas aumentan la eficiencia de la
empresa, solamente cuando se trata de organizaciones organizadas por órdenes de
pedido o producción en masa. Se sugiere que conformidad a reglas y normas no
siempre acompaña la eficiencia organizacional para otro tipo de empresa.

En síntesis la obra más reconocida de Woodward se basó en el management, la tecnología y

cómo afecta esto al rendimiento, organización y ambiente de las empresas, otras obras que
realizó se basan en la organización industrial, el comportamiento en la organización,
comprensión de sí mismo y ​Discover Attachment Theory.
Otra mujer que dió un gran aporte al management es Mary Parker Follet (1868-1933), según
Denda, E. M., Paolini, N. A., & Tirachini, B. (2016) fue una mujer visionaria y pionera en el
campo de las relaciones humanas, destacándose también en el diseño de organizaciones
democráticas y la gestión de organizaciones en general. Su visión humana de los problemas y
conflictos organizacionales la diferenciaron de las “recetas” de sus contemporáneos. La
forma de analizar los fenómenos organizacionales que planteó Mary Parker Follett es de tal
profundidad que se encuentran vigentes en la literatura actual de la gestión de organizaciones.

Guido Stein nos dice que Mary Parker fue denominada por Peter Drucker como una profeta
del management. Tanto Mary como Drucker querían desarrollar una filosofía del
management que respondiese a la necesidad de una relación de cooperación y mutuo respeto
entre los trabajadores y la dirección, es por esto que Mary Parker defiende la sustitución de
instituciones burocráticas por un conjunto de grupos de redes formados por las mismas
personas que analizan en grupo sus problemas y crean e implantan sus soluciones. Una
democracia verdaderamente participativa.
Denda, E. M., Paolini, N. A., & Tirachini, B. (2016) nos dice que Mary Parker también nos
habla de grupos (un ser humano puede realizarse dentro de un grupo, en la familia, en el
trabajo, en las actividades sociales y políticas), liderazgo ( se debe tener un liderazgo
compartido, logrando mayor compromiso de todos y mayor eficacia), toma de decisiones
(superior y subordinado “obedecen” ambos a la “ley de la situación”. Explicita la diferencia
entre “hechos” y “opiniones”) , negociación (describe al conflicto como una “fricción” de la
cual pueden surgir eventos positivos para la organización) Las tres maneras de resolver un
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conflicto son: dominación (ganar-perder), acuerdo (perder-perder) e integración

(ganar-ganar), ética (Aboga por una ética empresarial, que implique tanto a las empresas,
como a los “profesionales del management”, para que junto al Estado y a la sociedad civil
resuelvan los graves problemas sociales), administración (lograr resultados a través de las
personas) y democracia (Aprendizaje de convivencia entre individuos).
Esta autora es una de las más reconocidas debido a su innovación en el campo, sus ideas y el
gran reconocimiento que le da Peter Drucker lo que hizo que no fuera tan opacada como las
dos mujeres que ya expusimos.
La última pero no menos importante es Lillian Moller que junto a su esposo Frank Gilbreth
aportaron estudios sobre movimientos, analizaron la forma en que los albañiles realizaban sus
trabajos y aplicando métodos científicos redujeron la fatiga de los trabajadores, y mejoraron
la productividad y el rendimiento de los obreros en la empresa. Definieron 17 movimientos
básicos de las manos lo que permitió representar la actividad en gráficos SIMO para
optimizar el trabajo tal como se cita a Hissom (2009) en Mejia. N, Machuca. V, Parra. A
(2016).

Estas son cuatro grandes exponentes mujeres que aportaron grandes cosas a la teoría y que en
su mayoría no han tenido gran relevancia, en este ensayo busco resaltar sus aportes y además
de esto hacer caer en cuenta que las mujeres han sido importantes para la administración, que
más allá de las limitaciones que puedan tener como la maternidad (Tomei, M., & Vega-Ruíz,
M. L. 2007), entre otras cosas, las mujeres realmente aportan al campo de la administración y
se debe tener en cuenta su labor como tal, así como lo hacen diferentes estudios tales como
los de Torres, F. C., Ortiz, J. E. P., & Restrepo, X. M. (2012), Valda, J. C. (2014). La Mujer y
su liderazgo, etc. En los cuales resaltan sus otras cualidades innatas y como estas ayudan a
tener un mejor panorama, y ayudan a dirigir mejor la empresa a pesar de las dificultades que
aún se viven por parte de ellas.

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