Estética y teoría del arte

Separación entre arte y verdad en la Antigüedad

El estudio de la estética, entendido como la reflexión sobre la esencia y percepción de la

belleza, se ha visto estrechamente relacionado con las corrientes filosóficas de cada
momento. A su vez, la concepción del arte a lo largo de la historia ha ido mutando,
abarcando diferentes ámbitos que en la actualidad no son considerados como tal.
Algunos filósofos han exaltado las artes como método apto de expresión de la realidad,
mientras que otros las han censurado y limitado. El objetivo del siguiente ensayo es
exponer la relación entre arte y verdad en la Antigüedad, centrándose en las ideas de
Platón y Aristóteles, quiénes sentaron las bases de la filosofía occidental.

Durante la Antigüedad, fueron muchos los filósofos que hablaron del concepto de
belleza, uniéndola de manera inseparable con los conceptos de bien y verdad. Así pues,
cualquier elemento considerado bello, era intrínsecamente bueno y verdadero, “Lo bello
se define por el deleite y por el bien”1. Por otro lado, no fue hasta la Edad Moderna que
se excluyeron las ciencias y la artesanía del concepto de arte y se empezó a entender
éste como lo conocemos hoy en día. Existieron diferentes divisiones del arte según su
utilidad (Sofistas), su grado de espiritualidad (Plotino) o dependiendo de si la finalidad
era productiva o bien imitativa, como veremos en los estudios de Platón y Aristóteles.
Platón, el pensador que introdujo la separación entre el mundo de las Ideas y el mundo
sensible, afirma que la belleza que podemos encontrar en la realidad sensorial, tiene su
origen en la Idea de Belleza. Ésta, de acuerdo con la teoría de las Ideas, existe por sí
misma, independientemente de la percepción humana y es objetiva.
Paralelamente, sostiene que existen dos tipos de artes, las imitativas y las productivas, y
afirma que el primer tipo de arte es una mala copia de una copia. Dado que el mundo
sensible ya es una copia del mundo de las Ideas, una representación del primero supone
un alejamiento mayor del segundo.
Según su teoría de las Ideas, el conocimiento (Episteme) es la forma más cierta de
sabiduría y verdad universal2. Así pues, únicamente es aceptable como bueno, el arte
que inclina al hombre hacia el conocimiento, siendo una concepción alejada de la
actual, en la que el arte es un elemento que nos otorga un placer sensorial. De hecho,
considera que el arte no es un fin en sí mismo, si no que está al servicio del bien y de la

1
Platón, Gorgias
2
Platón, República (598-601)
Estética y teoría del arte

verdad. Como podemos observar, Platón dibuja una línea de separación entre arte y
verdad, alegando que el primero pertenece al mundo sensible y por lo tanto no tiene
forma en el mundo ideal.

Por otro lado, de Aristóteles nos ha llegado una definición de belleza distanciada de la
de su maestro Platón, pero con reminiscencias de su teoría. Éste considera que es bello
aquello que reside en la esencia de las cosas, pero que se manifiesta a través de lo
sensible. No obstante, Aristóteles se refiere a una belleza universal, aquella que no está
restringida al tiempo o espacio y que es impersonal. Así pues, una de las grandes
diferencias entre ambos, es que mientras uno rechaza como verdadero o bueno todo
aquello que puede darse en la realidad sensible, el otro lo ensalza, justificando que es a
través de ésta realidad que el hombre puede percibir la belleza universal. Más adelante,
otros estudiosos como Tomás de Aquino, defenderán que la belleza es aquello que nos
otorga placer a través de los sentidos. La música, por ejemplo, la percibimos a través del
oído, por lo que no tiene una forma física concreta y por lo tanto es una cualidad
subjetiva.
Para Aristóteles, el arte es aquello creado por el ser humano a partir de unas habilidades
y una técnica que no solo es innata en el hombre, si no que requiere también de una
constancia y trabajo para su desarrollo. Aristóteles fue un gran defensor de la tragedia,
anteriormente rechazada por Platón por ser considerada inmoral. Gracias a la tragedia,
nos alejamos de un mundo platónico centrado en el intelecto, para acercarnos a una
realidad más humana, en la que los sentimientos y acciones de sus personajes no se
rigen por un código moral estricto. Observamos aquí como la belleza, siempre asociada
a la idea del bien en la teoría de Platón, se acerca a una perspectiva menos moralista con
Aristóteles. Por otro lado, concibe que es a través de la belleza que el espíritu humano
puede conmoverse y llegar a lo más hondo de sus sentimientos. Es aquí donde se
introduce el concepto de catarsis, experiencia a través de la cual el ser humano purifica
su alma3 a través de los distintos sentimientos que pueden darse en una tragedia.

Para poder entender mejor la concepción que ambos autores tenían respecto a la verdad
y el arte, creo necesario hablar sobre su visión de la imitación (mímesis) en la expresión
artística. Mientras que Platón considera que la imitación, al encontrarse en el mundo
sensible nos aleja del conocimiento de la verdad, Aristóteles considera que es gracias a
3
Aristóteles, Poética (1449)
Estética y teoría del arte

la imitación que podemos representar la naturaleza, considerada la esencia de todas las

cosas. Además, para este último, la mímesis no es una simple copia de la realidad, si no
que deja un espacio de creación para el artista, en el que incluye una interpretación
personal de aquello que imita.

A pesar de algunas ideas opuestas que puedan mostrar Platón y Aristóteles en sus
teorías, hay un punto común que las une y diferencia de otros filósofos posteriores como
puede ser Kant; la equiparación de la belleza, la verdad y el bien. En el siglo XVIII,
Kant separa éstos conceptos hablando del juicio moral, a partir del cual se podía
determinar si una cosa es buena, y el juicio estético centrado en la belleza y lo sublime.
Poder hacer un juicio sobre la belleza o la bondad de alguna cosa, conlleva aceptar que
éstas no son algo universal, que algo bello puede no ser bueno y viceversa, por lo que
no existe una única verdad al respecto.

A modo de conclusión me gustaría remarcar algunas ideas comentadas con anterioridad.

Tanto Platón como Aristóteles defienden que existe una relación entre belleza y arte,
pero mientras que Aristóteles defiende la veracidad del hecho que la esencia de las artes
se encuentra en la mimesis del mundo real, Platón discrimina esta imitación en tanto
que se aleja de la verdad. Así pues, el primero únicamente considerará como verdadero,
y por ende bueno, aquel arte que se apoya en el conocimiento intelectual, mientras que
Platón en el mundo sensible no encuentra relación alguna entre arte y verdad (o arte y
belleza), ya que el arte es algo inmoral, alejado de la tríada clásica de verdad, bondad y
belleza.

 
Estética y teoría del arte

BIBLIOGRAFIA

Bayer, Raymond. 1965. Historia de la estética. Fondo de cultura económica de México.

Beardsley, Monroe y Hospers, John. 1988. Estética, historia y fundamentos. Ed.Catedra

Grave Tirado, Crescenciano. 2002. Verdad y belleza. Un ensayo sobre ontología y

estética. Tesis de Doctorado, Instituto de Investigaciones Filosófica.

Valverde, José Mª. 2012. Breve historia y antología de la estética. Ed Ariel.

Valverde, José Mª. La estética antigua. Módulo 1, Estética y teoría del arte, UOC

Valverde, José Mª. La estética moderna. . Módulo 2, Estética y teoría del arte, UOC