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miloficios
Todo en el mundo tiene valor
una venta por internet. Hace dos años y medio, Paula runciman inició un negocio mediante el cual la gente que tiene artí-
culos antiguos o sin aparente valor logra venderlos a coleccionistas del extranjero
En el mundo del comercio
electrónico hay gente que
puede pagar 392 dólares
por la caja de un juguete.
Solo por una caja vacía.
Paula Runciman puso este
objeto en su tienda virtual
de Internet con un precio
base de US$20, diez perso-
nas pujaron por comprarlo,
y en una semana su valor
se multiplicó. En la caja se
ve un robot manejando un
auto a través de un terreno
espacial. No hay mayores
detalles, solo que fue hecha
en Japón. ¿Qué logró que
sea comprada? El gusto de
un extranjero por un objeto
hueco.
Durante los años que es-
tudió administración de em-
presas en la Universidad del
Pacífico, Paula ya vendía di-
versos artículos por Internet
a través de Ebay. En especial
artesanías peruanas. Al ver
en esta página de comercio
electrónico todas las cosas
que se ofertaban y se ven-
dían con buen precio (pese
a que a ojos de cualquiera
podrían parecer inservibles
y sin valor) pensó que de
todas maneras en el Perú
había gente que aún guar-
daba en cajas o armarios (en
sótanos o garages) objetos
similares, cachivaches con
historia y con posibilidad de
ser vendidos afuera a algún
nostálgico o coleccionista.
Pero quizá no sabrían cómo
hacerlo, por no tener tarjeta
de crédito, no conocer cómo
funciona Internet para ven-
der al extranjero o simple-
mente no tener tiempo.
Cuando abrió hace dos
años y medio una tienda en
el Centro Comercial Chaca-
rilla, Paula pensó que podía
vender de todo. Cualquier
objeto que alguien dejara en
sus manos, pero se dio cuen-
ta de que este deseo no iba
a funcionar con productos
vintaGe y nostalGia. en Lo traes lo Vendo se venden desde juguetes hasta objetos decorativos. (teléfono: 628-2242)
tecnológicos, por provenir
de mercados con precios
menores como China o Es-
tados Unidos, y donde, ade-
más, el costo de envío es más
barato.
Hoy su tienda en Ebay
llamada Lo Traes lo Vendo
ha funcionado co-
mo un canal pa-
ra ofertar artí-
culos antiguos
o muy buscados
por coleccionis-
tas (historietas,
juguetes o ador-
nos en bronce) .
El 30% de ellos
se pone en su-
basta en espera
del mayor precio.
Lo más raro que ha
vendido fue un instrumen-
tal quirúrgico para realizar
Lima sábado 18 de diciembre del 2010
Por
julIo crónica
escalante
rojas
VIDa y obras De una trabajaDora peruana
circuncisiones; lo más caro,
un libro con el autógrafo de
“Buscamos que Pablo Picasso, y los destinos
nuestro cliente gane lo más lejanos con los que ha
más posible por cosas hecho negocio fueron Chi-
que aquí nadie pagaría” pre, Groenlandia (adonde
envió un teléfono satelital)
y una isla cuyo nombre no
puede recordar, pero
que le hizo cuestio-
nar sus conoci-
mientos sobre
geografía.
venta
rápida
Al inicio de
su negocio, una
nota aparecida en
el periódico que decía que
ella vendía de todo le trajo
no solo un sinnúmero de
suBasta. caja vacía ven- llamadas telefónicas (hasta
dida en casi 400 dólares. le ofrecieron, por ejemplo,
fotos: dante piaggio
sangre) sino más de una
broma. Un tipo se presentó
en su local para decirle: “Te
vendo a mi suegra”. Lo dijo
y se fue. Pero de esa época,
la primera, aún se mantiene
en contacto con las personas
que más le traen productos.
Las fotos del objeto son co-
locadas en el espacio de Lo
Traes lo Vendo en Ebay con
una descripción de su proce-
dencia, antigüedad y costo.
Se puede partir de un pre-
cio base para iniciar una su-
basta con límite de tiempo y
que el mejor postor lo gane,
o dar un precio fijo. Según
el número de visitas, el obje-
to puede quedarse en venta
un mes y si nadie se interesa
por él ser devuelto a su due-
ño. Si la venta se concreta,
Paula obtiene como comi-
sión entre el 25% y el 40%
de lo pagado y el cliente un
cheque por el resto de la ven-
ta (sin haber hecho nada).
“Buscamos que nuestro
cliente gane lo más posible,
por cosas que aquí nadie
pagaría”. Hace poco una
persona le llevó a Paula un
paquete de historietas de la
antigua editorial Novaro que
había comprado, a un sol ca-
da una, a alguien que las iba
a botar a la basura. Al anun-
ciar la venta en Ebay solo una
se vendió en 200 dólares.
Para mantenerse en es-
ta plataforma de comercio
electrónico hay que gene-
rar confianza en quien la
visita: el fraude siempre es
una posibilidad. Por eso se
muestra un porcentaje de
satisfacción que debe llegar
al 99%. La calificación Pau-
la llega al 99,5% y con cinco
estrellitas de valoración. En
su tienda virtual hay ahora
un antiguo abanico francés
que ya llega a los 99 dólares
en la subasta, un sable a
700 dólares, cabezas de mu-
ñecas, sombreros. Casi 500
objetos.
Tener este negocio ha
logrado que Paula no esté
pegada todo el día a su ofi-
cina. Solo hay que esperar
que la venta se haga sola.
Solo la tercera parte de su
tiempo, dice, está dedicada
a Lo Traes lo Vendo, aunque
también está asociada a un
par de empresas dedicadas
al comercio electrónico. En
las mañanas está con su hijo
de 4 años y lo lleva al colegio,
en la tarde almuerzan jun-
tos y en la noche cuando él
se va a dormir, ella toma una
siesta nocturna antes de po-
nerse a trabajar en la compu-
tadora hasta la madrugada.
Sabe que cuando la apague,
en el mundo varios ojos bien
abiertos seguirán su tienda
virtual. π