Colombia en el futuro…

Para hablar de un futuro debemos empezar por hablar de lo que ha sido nuestro país estos últimos
años, Colombia se ha venido hundiendo en un mar de pesimismo. El peso de un conflicto de varios
años, Que no encuentra salidas pacíficas, pese a esfuerzos de negociación impulsados por los
Presidentes de la República y por diversas organizaciones de la sociedad civil, y a los efectos
acumulados de la enorme degradación que ha generado el narcotráfico en la sociedad colombiana
en general, se unió en años recientes la peor crisis económica desde los años treinta, al igual que
la degradación que ha venido sufriendo la salud. Ante esta realidad, nos vemos inmerso en una
catarsis colectiva, en múltiples formas de polarización y en esfuerzos inquisidores desconocidos en
varias décadas de vida nacional.

Por supuesto, cualquier análisis de la calidad de vida debe tener en cuenta un aspecto esencial de
ella, que tiene que ver con lo más volátil e impredecible de la sociedad: el cambio político. Se
deben hacer cambios que beneficien a todos y no a un solo sector, el país requiere cambios en el
congreso y reformas en la justicia, más derechos humanos, más participación popular, un sistema
judicial más eficiente y la modernización del sistema político.

Se deben plantear muchas alternativas que beneficien a toda la sociedad tanto en el campo
económico, de la salud y tal vez el más urgente la tolerancia que se debe tener para aceptar que
los tiempos que vienen no serán los mejores, debemos hacer sacrificios lo digo desde el punto de
vista de la paz, ya que si se llega a lograr lo que nos afectaría seria el postconflicto y que la mayoría
de la sociedad no está de acuerdo en aceptar la salida que el gobierno ofrece. Aunque también
creo que si el país logra reducir la inversión que se hace en el conflicto armado se podrá facilitar la
atención de problemas estructurales del país como son la desigualdad, la marginalización de
ciertas regiones y las debilidades legislativas.

Imaginarnos una Colombia en 10 años, tal vez siendo muy apresurada y optimista le diviso en una
terminación del conflicto duradero, sumada la reducción significativa de la violencia y el miedo,
para llegar a ser un país líder, libre del conflicto, con una sociedad que permita a todos ingresar a
la vida laboral sin ataduras ni rencores. Esa sería una primera parte porque se debe tener en
cuenta que una sociedad educada sabrá alimentarse, tener unos hábitos saludables y por ende
tendrá una mejor calidad de vida, por tal motivo la salud y la educación deben ir ligadas ya que un
mayor nivel educativo aumenta la eficiencia productiva.