UN MINISTERIO EXCELENTE

JOHN MAC ARTHUR

John MacArthur ha tenido un ministerio largo, fiel y fructífero sin mancha por gran escándalo.
Durante décadas ha mantenido un fuerte enfoque en la enseñanza de la Biblia verso por verso y
libro por libro. En 2006 enseñó a través de 1 Timoteo 4 y allí vio a Pablo proporcionarle a su joven
protegido "un rico resumen de todas las instrucciones inspiradas del apóstol para aquellos que
sirven a la iglesia como ministros, como pastores. Y todo comienza con la declaración, un ministro
noble, un ministro excelente, un buen servidor de Cristo Jesús ". ¿Cuáles son las marcas de tal
hombre? MacArthur revela doce de ellos.

1. Un ministro excelente advierte a la gente del error.

Pablo insta a Timoteo a "instruir a ciertos hombres que no enseñen doctrinas extrañas ... en lugar
de promover la administración y la mayordomía de Dios" (versículo 3). Las mismas instrucciones se
dan dos capítulos más tarde y en 2 Juan, 3 Juan, Judas y 1 Tesalonicenses 5. Un ministro excelente
"comprende el potencial devastador de las mentiras" e instruye a su pueblo contra la enseñanza y
la creencia. "Cuando señalas un error, eres un noble siervo de Cristo".

2. Un excelente ministro es un fiel alumno de las Escrituras.

Este es un proceso continuo al que da su vida. “Pasarás toda tu vida dominando un libro, un libro,
el único libro que Dios ha inspirado y en el que ha puesto toda su verdad. La Biblia se convierte en
el único contenido de su ministerio, el único tema de su predicación y debe saturar su mente y su
alma. Usted hace un compromiso radical con la Biblia y con el estudio de la Biblia y con Jesús. Eso
se está perdiendo rápidamente en el ministerio ". Esa pérdida es evidente en una cultura en la que
la Biblia ya no tiene autoridad. Los editores, presionados para que las ventas de la Biblia vuelvan a
subir, sienten que deben "apelar a la necesidad sentida más que a la revelación de Dios". La Biblia
no es ficción, no es un libro de sugerencias, es la Palabra inspirada de Dios. "Debemos saturarnos
con la enseñanza de la Escritura, el contenido, las palabras de la fe y la dedoscalía, lo que la
Escritura afirma proposicionalmente".

3. Un ministro excelente evita la influencia de la enseñanza impía.

"No tiene nada que ver con las fábulas mundanas" (versículo 10). La palabra usada aquí es
Peritaomi, que significa separarse radicalmente de lo que es sagrado. Hay algunas cosas tan
malvadas que un pastor ni siquiera debe escucharlas. “Muchos jóvenes que comenzaron en el
ministerio se han arruinado, no al aprender el error como error, sino al sentarse bajo alguien que
enseña error como verdad. Ser seducido por el error de alguien que creía que el error era cierto ".
Un ministro excelente se separa de la "influencia corruptora de los maestros impíos".
4. Un ministro excelente es disciplinado en la piedad personal. “Disciplínate con el propósito de la
piedad” (versículo 4b). Esto implica un "entrenamiento extenuante, una disciplina abnegada y
moribunda en la dirección de la piedad: jalar los cabos sueltos, ceñir los lomos de su mente, como
lo diría Peter, golpear su cuerpo para someterlo, para no predicar a otros, te conviertes en un
documas, descalificado ". Mientras tanto, el excelente ministro necesita mantener su conciencia
limpia. Paul estaba hablando a una cultura que, como la nuestra, estaba obsesionada con la
vanidad y el ejercicio físico, pero "un ministro excelente, aunque responsable de su salud física,
está mucho más consumido por su piedad y las disciplinas que producen la piedad".

5. Un excelente ministro está comprometido con el trabajo duro.

"Si un hombre está dispuesto a pagar el precio por fatiga y cansancio, su ministerio no será
mediocre". Un ministerio excelente debería ser agotador. Pablo llama a Timoteo "para trabajar y
luchar" (versículo 10). La palabra para esto es agonidzimi, agonizar en la lucha. El evangelio es
digno de la agonía de un ministro porque su labor tiene un significado eterno. “Porque la leve
aflicción momentánea nos produce un peso eterno de gloria más allá de toda comparación;
mientras no miramos las cosas que se ven, sino las que no se ven ”(2 Corintios 4:17). MacArthur
continúa: "No hay un trabajo más importante, ni más glorioso, ni más maravilloso que como dijo
Pablo en 2 Corintios 4 ... agregando almas al coro del aleluya celestial para que sus voces puedan
redundar en la gloria de Dios".

6. Un ministro excelente enseña con autoridad.

El versículo 11 dice "ordena y enseña estas cosas". La Biblia no da recetas ni sugerencias, da

órdenes. "La autoridad viene de Dios a través de las Escrituras cuando manejas las Escrituras con
precisión, claridad y valentía".

7. Un ministro excelente es un modelo de virtud espiritual.

"El ejemplo es la retórica más poderosa". Pablo le ordena a Timoteo: "Que nadie menosprecie tu
juventud, sino que ... muéstrate un ejemplo de los que creen" (versículo 12). MacArthur, al
reflexionar sobre su primera semana en su iglesia, recuerda haber sido presentado de esta
manera: "No sabemos lo que este niño podrá decirnos". ¿Cómo volcó esto? Al vivir una vida santa:
“El mayor apoyo de la verdad en tu predicación es el poder de una vida ejemplar. Esta es tu arma
más confiable. Esto es lo que hace que todo sea creíble ".

8. Un ministro excelente mantiene un ministerio completamente bíblico.

El versículo 13 es un resumen de lo que un ministro está llamado a hacer: "Hasta que yo venga,
presta atención a la lectura de las Escrituras, a la exhortación y la enseñanza". Lea, explique,
aplique y sea consumido con las Escrituras. "Los grandes del pasado entendieron que toda su vida
fue dada integralmente a la palabra de Dios". MacArthur, cuando sus alumnos le preguntaron el
secreto de excelentes respuestas de predicación, “mantenga su trasero en la silla hasta que
termine su trabajo. Sal cuando tengas algo que decir.

9. Un ministro excelente usa su don espiritual y lo emplea.

"Es decir, él es fiel a la utilidad de ese regalo, ese llamado, esa ordenación, esa separación a largo y
largo plazo". El versículo 14 dice: "No descuides el don espiritual dentro de ti". El excelente
ministro sabe que el don que tiene, dado por el Espíritu Santo y confirmado en su vida, es un don
que tiene para toda la vida: "Te diriges a una vida larga. Y espero que sea largo, muy largo ".

10. Un excelente ministro es un apasionado de su trabajo.

La frase utilizada en el versículo 15 traducido literalmente significa "en estas cosas sé tú". Esto se
aplica a toda la vida: aquí no hay separación trabajo / vida. "En esto vives, te mueves y tienes tu
ser". En estas cosas sé tú.

11. Un ministro excelente está manifiestamente creciendo espiritualmente.

MacArthur ya estableció que la vida del excelente ministro debe ser de avance espiritual, pero una
palabra clave aquí es "manifiestamente". Esto debería mostrar! “Deja que tu progreso sea visto
por todos. La gente puede vivir con eso. Pueden amar a alguien así. Necesitan ver tu debilidad. Te
abrazarán por ello. Te amarán por eso. Y sabrán que entiendes su debilidad ".

12. Finalmente, un excelente ministro persevera en el ministerio.

Los once elementos prosperan en esto. Aquí, MacArthur reflexiona sobre 37 años de ministerio:
"He visto 37 años del trabajo de la palabra en su iglesia y qué alegría, qué bendición indescriptible
para mi vida. Y cuando haces todas estas cosas, te asegurarás la salvación tanto para ti como para
los que te escuchan ".

Esto es lo que hace un excelente pastor. y los solemnes compromisos que debe hacer. Para
terminar, MacArthur pregunta: “¿Quieres resultados? Esos son los mejores resultados que
obtendrás. El cielo, ese es el mejor resultado.