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ISSN: 1794-9998 / Vol. 4 / No 2 / 2008 / pp.

427-441

Convivencia familiar: una lectura aproximativa desde


elementos de la Psicología Social

Familiar coexistence: a reading from elements


of Social Psychology

Erico Rentería Pérez* Resumen


Esperanza Lledias Tielbe
El artículo presenta una síntesis reflexiva basada en una in-
Alba Luz Giraldo vestigación realizada en Cali (Colombia) sobre convivencia fa-
miliar en un sector de escasos recursos de la ciudad. Se pro-
Universidad del Valle,
pone una lectura desde la Psicología Social, tomando como
Cali, Colombia
referencia algunos elementos del Interaccionismo Simbólico
Recibido: 30 de junio de 2008 como soporte interpretativo para un estudio cualitativo. Los
Revisado: 17 de julio de 2008 resultados muestran que existen una serie de lecturas de la
Aceptado: 4 de agosto de 2008 convivencia familiar que se cruzan y entrecruzan en la cons-
trucción de realidad por parte de las personas implicadas y
que tales versiones no necesariamente son coincidentes con
los discursos hegemónicos sobre convivencia y violencia. De
esta manera se abre la posibilidad de visiones más amplias
de cómo se construye la realidad y se puede abordar una
problemática tan importante como ésta.

Palabras clave: interaccionismo simbólico, psicología social,


convivencia familiar.

* Correspondencia: Erico Rentería Pérez. Grupo de Investigación en Psicología Organizacional y del Trabajo. Instituto de Psicología. Universidad del
Valle, Colombia. Correo electrónico: erenteri@univalle.edu.co. Esperanza Lledías Tielbe, Colombia. Correo electrónico: eslleti@yahoo.com. Alba Luz
Giraldo Tamayo. Correo electrónico: albadan@yahoo.com. Dirección postal: Apartado aéreo 32670 Cali, Colombia.

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Erico Rentería Pérez, Esperanza Lledias Tielbe, Alba Luz Giraldo

Abstract
The article presents a reflexive synthesis based on a research developed at Cali (Colombia) on Family Co-
habitation in a poor region of the city. It´s proposed a reading from Social Psychology, using as references
some elements from Simbolic Interacionism as an interpretative support for a qualitative research. Results
suggest the existence of a series of readings on Family coexistence that go across on the construction
of reality made by people imply, and that those versions not necessarily are coincident with hegemonic
discourses on cohabiting and violence. This way it´s opened the possibility of other wider versions on how
reality is being constructed, and how to board an important problematic as this.

Key words: simbolic interactionism, social psychology, family cohabitation.

Introducción explorar y determinar los elementos que facili-


taban la convivencia en el hogar o incidían en su
Una problemática social que actualmente genera deterioro. Debido al interés del equipo investiga-
múltiples interrogantes por las dinámicas que se tivo en privilegiar la intersubjetividad (Davies &
le atribuyen es la referida a la convivencia fami- Harré, 1990; Spink, 2000), como un elemento de
liar, que se constituye un fenómeno importante de la construcción de la realidad social se consideró
estudio, el cual, al ser analizado desde abordajes necesario plantear una aproximación de tipo cua-
interpretativos no hegemónicos usados tradicio- litativo para destacar las lógicas relacionales y la
nalmente para su comprensión, permite ampliar construcción de sentidos, privilegiando las voces
los repertorios interpretativos de realidades so- y las vivencias de los actores (Wertsch, 1993; We-
ciales. En el marco de los programas municipales therell & Potter, 1996; Arcury, 1988; Spink & Frez-
de gobierno de Santiago de Cali (Colombia), espe- za, 2000), lo que permite la comprensión de la
cíficamente el de “Apoyo a la Convivencia y Segu- convivencia familiar desde una ángulo diferente
ridad Ciudadana” financiados por el Banco Intera- al de la violencia y por esto se brinda una base re-
mericano de Desarrollo (BID), se llevó a cabo una flexiva y una mirada alternativa, construida desde
investigación tipo consultoría correspondiente a diversas fuentes que transcienden la mera expli-
un diagnóstico sobre elementos que facilitaban o cación unicausal y, al mismo tiempo, confronta
inhibían la convivencia familiar desde la percep- modelos ideales de familia.
ción de diferentes actores sociales implicados en
la problemática en las comunas 13, 14, 15 y 21 del Los participantes correspondían a personas que vi-
sector conocido como “Distrito de Aguablanca” vían en sectores de la ciudad considerados como
(Lledías, 2001). Los resultados de la investigación “marginales”; por tratarse principalmente de
se propusieron como insumo para el diseño pos- personas con historias de desplazamiento, se ge-
terior de intervenciones futuras y el perfeccio- nera estigmatización hacia dicha población con
namiento de las existentes, con el propósito de percepciones tales como que en estos sectores
buscar el mejoramiento de las relaciones de con- se “aumenta el riesgo de aparición de conflictos”
vivencia en los hogares del sector referido. por lo tanto, se “convierten, por sus condiciones
especiales, en un laboratorio para trabajar las di-
Si se parte del objetivo de la consultoría, se plan- ficultades de la “convivencia”.
teó la siguiente pregunta de investigación como
una primera aproximación: ¿cuáles eran los ele- Método
mentos que en la percepción de los habitantes
de las comunas 13, 14, 15 y 21 facilitan o inhi- Teniendo en cuenta el objeto del estudio y el enfo-
ben la Convivencia Familiar? Para dar respuesta que conceptual, se consideró que la metodología
a este interrogante, se elaboró una propuesta de de trabajo cualitativo permitía un acercamiento
investigación de tipo cualitativo, que permitiera más adecuado a los sujetos y a la información,

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

debido al reconocimiento de las personas como El segundo nivel de información corresponde a las
constructoras de sus propios saberes y explica- versiones de personas reconocidas como líderes
ciones de su situación y condiciones. En este por su trabajo en la comunidad, quienes aporta-
sentido, se buscó la “interpretación de la reali- ron “una mirada” desde el hacer en las comunas
dad social, estudiada en su forma natural y se- 13, 14, 15 y 21. En este nivel, la entrevista indi-
gún el dinamismo de la vida social” (Kielhofner, vidual en profundidad se constituyó en la técnica
1983; Schneider, Hastorf & Ellsworth, 1982). De que permitió conocer la forma en que los sujetos
tal manera se generó un proceso riguroso, en el construyen o se posicionan (Davies & Harré, 1990)
que se fue sometiendo a prueba el mismo proce- desde su subjetividad organizando su entorno y
so con los sujetos participantes. La investigación orientando su comportamiento. En este sentido,
constó de tres momentos: diseño y aprobación, las entrevistas fueron fundamentalmente una ex-
gestión de obtención de información y análisis periencia de compartir los sentidos que construye
de la información. Estos tres momentos, de ma- una persona (Spink, 2000) que deja de ser exter-
nera articulada, se constituyeron en componen- na y se involucra en la cotidianidad de la comu-
tes permanentes del proceso, aunque cada uno nidad, teniendo la posibilidad de reconstruir la
tenía un énfasis definido durante todo el hacer experiencia de la convivencia familiar desde una
investigativo. perspectiva organizada diferente.

La recolección de información se trabajó en tres El tercer nivel de información contiene las percep-
niveles. El primero se basó en la revisión docu- ciones de grupos de personas que viven y compar-
mental (Spink, 2000) y en recolección de infor- ten su cotidianidad en las comunas ya menciona-
mación sobre la temática de convivencia familiar das. Estos niveles de información permitieron tener
en las comunas de interés y en Cali, en general. acceso a diferentes versiones de la convivencia
Este nivel brindó una mirada sobre el objeto de familiar para construir una percepción del asunto
estudio abordado desde instituciones que han ge- desde diferentes miradas que se complementan.
nerado documentos producto de investigaciones En este nivel se utilizó la técnica de grupos foca-
o de sistematizaciones de experiencias sobre el les, que permitió recolectar en poco tiempo y en
tema como, por ejemplo: Maldonado (1993), Uni- profundidad un volumen significativo de informa-
versidad Colegio Mayor de Cundinamarca. (1996), ción cualitativa sobre las percepciones o versiones
Alcaldía de Santiago de Cali (1998), Tenorio (1999) sobre la convivencia familiar que tenían habitantes
Arango y Campo (2000), Instituto Colombiano de de las comunas de interés, a partir de la discusión
Bienestar Familiar (2000), Moser y Shrader (2000), con grupos de ocho a doce personas, guiadas por
Presidencia de la República, República de Colom- dos o tres facilitadores en cada caso.
bia (2000), Profamilia (2000), Muñoz y Barreto
(1999), ABACOM (2001)1. Las fuentes para el aná- En cuanto al proceso de organización, análisis e
lisis documental fueron de tres tipos: documentos interpretación de la información, la técnica básica
que surgen como resultado de procesos de inves- utilizada en las diferentes fases y derivada de los
tigación, sistematización, informes institucionales tres frentes de trabajo fue el análisis de contenido
en cualquier nivel de producción; y textos resul- (Bardin, 1977). Como una forma de hermenéutica
tantes de visitas a instituciones que desarrollaban controlada basada en la inferencia, el análisis de
en ese momento actividades relacionadas con el contenido como esfuerzo de interpretación oscila
eje familia; y entrevistas a investigadores que por entre los dos polos del rigor de la objetividad y el
su grado de experticia en el tema aportaron lec- de la fecundidad de la subjetividad. El mayor inte-
turas actualizadas sobre la temática. rés de este instrumento polimorfo y polifuncional,
desde la perspectiva de Bardin, reside –más allá
de sus funciones heurísticas y verificativas– en el
1 Es de anotar que varios de los documentos consultados, a pesar de
ser referencia para quienes trabajan en el campo, no contaban con las
constreñimiento impuesto para alargar el tiempo
fichas técnicas completas, por ejemplo: Celener, G. (1999); García, et de latencia entre las intuiciones o hipótesis de par-
al. (1996) García, L. (s.f.); Guerrero y Londoño (1999); Ortiz (1999) y
Quiroz (1999).
tida y las interacciones definitivas. Al desempeñar

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el papel de técnica de ruptura, como proceso, lo social armónicos o dialécticos (Rentería, 2004).
obliga la observación de un intervalo de tiempo Es decir, no como la sumatoria de la experiencia
entre el estímulo-mensaje y la reacción interpre- individual de sujetos aislados o de colectivos uni-
tativa, lo que facilita el ir y volver sobre los textos formizados, sino como sistemas dinámicos en los
revisados o producidos con los entrevistados. que no es posible acceder a la comprensión de
un elemento aislado del proceso separándolo del
Marco de referencia conceptual contexto (Boissevain, 1987). Por el contrario, la
percepción de la totalidad es la que permite ac-
ceder a la construcción de sentido. De esta mane-
Algunos elementos del ra se estima que al hacer la lectura de dichos sen-
Interaccionismo Simbólico tidos y significados que circulan en la interacción
familiar se considera el contexto como fuente de
El estudio privilegió la ínterexperiencia, en la significados, siendo en la interacción de lo indi-
cual, a partir de la interacción y el intercambio vidual cotidiano en la que se crean y se recrean
de significados entre las personas, se configuran las significaciones de lo que constituye la convi-
los procesos y los objetos en función de los cuales vencia familiar. Se trata, entonces, de un proceso
se construyen las formas de dar sentido en el co- reflexivo derivado de la relación dialéctica entre
tidiano (Spink & Frezza, 2000); con base en esto lo individual cotidiano y el contexto.
se tomaron elementos del interaccionismo simbó-
lico desde la perspectiva de la Psicología Social Dichas reflexiones se construyen desde la expe-
(Bazilli, Rentería, Duarte, Simões, Feitosa & Rala, riencia inmediata de los individuos y se toman
1998), que centra su interés en la forma en que referentes del pasado y proyecciones futuras que
los seres humanos interactúan para dar cuenta en una situación presente por medio de las accio-
de sus propias construcciones y contextos. Este nes comunicativas (Habermas, 1987) organizan el
abordaje permitió ubicar la convivencia familiar sentido de la interacción desde el aquí y el ahora
como un espacio de construcción de vida en co- (sin quedarse en él), haciendo referencias inme-
mún (Boissevain, 1987) que no se puede calificar diatas desde la vivencia que se reflejan en las ac-
como positiva o negativa en sí misma, o imponer- ciones grupales y colectivas. Los seres humanos
le adjetivos sin tener una referencia generalmen- tienen una mente (Mead, 1993) que emerge en
te equivalente a la posición exclusiva del investi- la solución de problemas, lo que implica la po-
gador (Rentería, 2004). sibilidad de escogencia y la selección de cursos
de acción para lograr soluciones. Esta capacidad
En este sentido, el escenario amplio de indagación de elección hace parte de la condición huma-
eran las relaciones que surgen de la interacción na de alguna manera, en el sentido de acción
social de los miembros de la familia en la que se propuesto por Arendt (2002). El contenido de las
construyen e intercambian sentidos y significados escogencias está basado en las experiencias sub-
en un contexto particular, en aras de visibilizar jetivas de las personas.
elementos que facilitaban y que inhibían la con-
vivencia familiar. El espacio de dicha interacción Aunque gran parte de las experiencias humanas
e intercambio se focalizó hacia lo que se consti- se construyen y desconstruyen desde la interac-
tuye como convivencia familiar, entendiendo por ción no se puede afirmar que es ésta es la única
ésta el proceso cotidiano de interacción de los forma en que se configura la experiencia; vale
miembros de un grupo familiar en el que se reco- la pena anotar que el comportamiento humano
nocen, se fortalecen, se elaboran, se construyen mantiene un grado de indeterminación –que no
o se transforman sus vínculos creando un espacio incluye la presencia de hábitos o constancias en
común que posibilita la existencia. las interacciones–, por lo que se considera que
hay condiciones y factores previos a la interac-
Las relaciones familiares se consideran de forma ción, no siendo posible predecir totalmente cómo
sistémica en el sentido pluralista de abordajes de influyan en el transcurso de ésta.

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

La comunicación unifica en cierta medida el re- es fundamental en la construcción del self2, en


pertorio de escogencia. Esto no sería posible sin tanto entidad auto-reflexiva. El otro generaliza-
la presencia del lenguaje que se entiende como do es una construcción de significados colectivos
un conjunto de símbolos significantes (Bazilli et que permiten la estabilidad de las instituciones y
al., 1998), que son aquéllos que tienen sentido, de los imaginarios colectivos como por ejemplo:
tanto para el que habla como para el que escu- el matrimonio, la familia, los hijos, los hombres,
cha. De esta manera, a través del proceso de in- etc. Es decir, hay unas relaciones de doble vía en-
teracción, en el cual los individuos se comunican tre la persona y sus grupos sociales de referencia
simbólicamente, teniendo un conocimiento previo que en los que se generan sentidos y significados
de dichos símbolos, que requiere procesos men- a partir de la interacción en los contextos parti-
tales de comunicación y reflexión, las personas culares, a través de acciones comunicativas que
construyen su realidad social. Es decir, los objetos permiten entablar una conversación entre indivi-
están presentes en el mundo real y lo que impor- dualidades al tener acuerdos sobre símbolos signi-
ta es el modo en que los actores los definen, en ficantes validados en acuerdos colectivos.
que les asignan significados, según su utilidad, y los
aprehenden e interpretan en la socialización y en Lo anotado anteriormente se relaciona necesa-
la interacción. riamente con una concepción de lo social y con
la sociedad como contexto privilegiado en el que
En consecuencia, desde la perspectiva del inte- tienen cabida las interacciones y sus productos.
raccionismo simbólico, la interacción es posible a La sociedad es concebida como tejido de comu-
través del lenguaje como sistema de significados nicación, como sinónimo de interacción, siendo
compartidos que implican, al mismo tiempo, un resultante de influencias recíprocas entre las per-
sistema de comportamientos compartidos desde sonas, en la medida en que interactúan recono-
una perspectiva social amplia por implicar, valga ciendo las características reales o atribuidas en-
la redundancia, un sistema de símbolos significan- tre ellos. El hecho de reconocer la comunicación
tes (Bazilli et al., 1998). Por lo tanto, se parte del como elemento constituyente de lo social, obliga a
supuesto de que comunicación e interacción so- realizar consideraciones éticas con el propósito de
cial son virtualmente sinónimos, ya que el lengua- aclarar las condiciones o reglas que le rigen y con-
je se ve típicamente como el vehículo primordial sideran al ser humano como potenciador, creador
de la comunicación humana y la comunicación es y recreador de realidades.
el insumo de la relaciones.
Categorías relacionadas
Para Mead, considerado como el iniciador del In-
teraccionismo Simbólico (Blumer, 1969; Bazilli et con la convivencia familiar
al., 1998), el lenguaje tiene un papel fundamental
En aras de los aportes de este enfoque interpreta-
en la construcción de la realidad social. Para él
tivo se optó por la presentación de algunas cate-
la persona no sólo surge de un contexto social,
gorías relacionadas con la convivencia familiar a
sino que también es, en sí misma, una construc-
la luz de otras que tipifican el sistema explicativo
ción social y una estructura social. De tal modo
del interaccionismo simbólico, tales como las si-
que para constituirse como tal, además de asu-
guientes: por una parte, la familia se entiende
mir la actitud de los otros aisladamente, debe
como una forma organizativa (Rentería, 2004;
adoptar la actitud de la comunidad o grupo de
Rentería & Carvajal, 2006) particular en la que
la que forma parte como un todo. De esta mane-
es posible identificar interacciones e, igualmente,
ra, Mead (1993) sitúa el campo de la identidad no
experimentar e interpretar diversos tipos de pa-
sólo en el nivel de las relaciones interpersonales,
peles, normas, acuerdos de convivencia, así como
sino también en el de la organización social y la
el mantenimiento o la reproducción de la dinámi-
cultura. Aquí se introduce la categoría del otro
generalizado referida principalmente a los grupos
2 Término mantenido en inglés por no corresponder literalmente a
de referencia (Tajfel, 1984) de las personas y que otros como “sí mismo” o “yo” utilizados en Psicología.

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ca social “mayor” en la que está inmersa. Asu- ceso más que independientemente de él” (Bazi-
mir la familia de esta forma permite considerar lli et al., 1998). Si se considera lo anterior, “la
diferentes formas de agruparse, por parte de las realidad familiar” es construida por los miembros
personas para construir un espacio de existencia del grupo familiar; negocia por medio de accio-
compartido, mediado por vínculos afectivos y por nes comunicativas los significados, en un proceso
la construcción del compartir cotidiano. Lo ante- cotidiano de intercambio de informaciones y vi-
rior amplía el panorama sobre las concepciones vencias que construye y consolidan vínculos entre
hegemónicamente tipificadas de familia. los miembros de la familia, fortaleciendo o no las
relaciones y orientando las acciones de los pro-
La socialización es vista como un proceso conti- yectos en común.
nuo que ocurre a lo largo de toda la vida y el cual
considera que la interacción es en sí misma socia- Por ser un compartir constante de experiencia en
lización, aunque la socialización en los primeros que las personas se exponen como singularidades
años de vida tenga una significación particular. concretas, la realidad familiar también es un pro-
Para el Interaccionismo Simbólico a diferencia de ceso de construcción, de evaluación y de renova-
otros enfoques; esto significa que la socialización ción de las relaciones de los miembros de la fa-
acompaña toda la vida de la persona, en relación milia. Este proceso está “permeado” de intereses,
con diferentes grupos, circunstancias y contextos afectos, actitudes, roles y otros elementos que
en los que vive (Bazilli et al., 1998). dinamizan la convivencia cotidiana, por lo que for-
man alianzas, divergencias y tensiones. Esto hace
En la convivencia familiar las personas aprenden que la convivencia familiar sea un lugar de conflic-
algunos significados y gran parte de los símbolos to potencial y de diversas formas de manejarlo o
que les permiten ejercer su capacidad de pensa- solucionarlo, que permiten la formación de patro-
miento, por lo que es posible modificar su reper- nes que identifican la convivencia de determinado
torio al usarlo en la acción y en la interacción so- grupo familiar.
bre la base de la interpretación de la situación, ya
que en la interacción social las personas amplían En un enfoque como el interaccionismo simbólico
sus horizontes de sentido y así su capacidad de ac- la convivencia está relacionada con conceptos que
ción. En este sentido conocer las versiones (Spink, contribuyen a su explicación tales como: la socia-
2000) sobre convivencia familiar implicó, en la in- lización, el significado, la definición de situación
vestigación original y en las reflexiones posterio- y el concepto de papel. El proceso de socializa-
res, conocer sentidos y significados que circulan ción, como se mencionó anteriormente, se inicia
en las personas que participaron del estudio. cada vez que se hace parte de un nuevo grupo o
de alguna nueva forma de organización social, de
La interacción familiar es el proceso que posibi- nuevos patrones de interacción, así como cuando
lita un espacio común negociado de construcción se pretende alguna forma de cambio social. Con
de significados entre los miembros de forma in- base en este enfoque, la persona es socializada,
teractiva y simultánea. Para el interaccionismo en parte, por el hecho de responder a las expec-
simbólico la interacción es el espacio, la unidad tativas de los otros y en la experimentación de
que posibilita el self y la sociedad: por medio de papeles en el proceso general de interacción, que
la interacción y la simbolización se generan am- es en sí mismo una experiencia de socialización.
bos, se mantienen o cambian permanentemente.
La interacción social es pues lo que posibilita una En cuanto al concepto de significado, la comuni-
“realidad negociada”. cación humana, por ser simbólica necesariamente
implica abordar significados. En el espacio de in-
Uno de los postulados básicos del interaccionismo teracción familiar se construyen significados pro-
simbólico es que “en la medida en que el signifi- pios que permiten a los miembros de ésta “hacer
cado se deriva del proceso interpersonal implica lecturas de la realidad”, que otros miembros del
que la realidad es definida por medio de este pro- grupo pueden reconocer como significantes. Los

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

símbolos y los significantes son resultantes de la en familia”; se significan situaciones como ideales
interacción. Las personas reaccionan a los sím- que influyen desde el deber ser en el comporta-
bolos, en términos de los significados que llevan miento de los miembros del grupo familiar, por
como “predictores” de su propio comportamiento ejemplo, el diálogo, la comunicación, la armonía
y del comportamiento de otros. En este sentido, son referentes que se aprehenden como caracte-
el papel de los símbolos significantes es ayudar a rísticas obligadas de la cotidianidad.
organizar el comportamiento y permitir que los
actos se completen en el curso de la interacción, En cuanto a los papeles, como se mencionó ante-
en el contexto del grupo familiar al que pertene- riormente, en la interacción con el grupo familiar
cen. “Por definición el significado es comporta- se experimentan y se aprenden papeles básicos
miento más que puramente ideativo, inherente a que facilitan o dificultan la convivencia dentro y
alguna cosa, o residente en el sonido, movimien- fuera de la familia. Los papeles pueden ser defini-
to, o adorno que puede referirse a alguna cosa” dos como formas de categorizar comportamientos
(Bazilli et al., 1998, p. 38). sociales o como formas simbólicas de representar
la interacción y localizar el self. Para el interac-
La definición de situación es propuesta por el in- cionismo simbólico se trata de una forma parti-
teraccionismo simbólico para referirse a los pro- cular de lenguaje categorial ligada a la noción de
ductos del proceso de simbolización, en la me- posición, aplicable de manera amplia a cualquier
dida en que toda situación de interacción social categoría social de actores.
debe ser simbolizada, antes de generar cursos de Los papeles son sociales en el sentido especí-
acción, comportamientos, decisiones, etc. Según fico de que no es posible hablar sensiblemente
Striker y Statham (1985), para el interaccionismo sobre una posición sin, por lo menos hacer re-
simbólico, la definición de situación concentra su ferencia implícitamente a la posición de otros.
atención en aquello que sobresale de un conjunto No puede haber profesor sin alumno, rebelde
interactivo y permite la organización preliminar sin establecimiento. Cualquier posición asume
de acciones apropiadas a este conjunto. Si se par- la contra posición cualquier papel asume el
te de esta perspectiva, la cultura especifica lo contra papel [...] las personas son ciertamen-
que es relevante para el comportamiento orien- te, típicamente categorizadas, no en términos
tado a objetivos y también a lo que es significante de una posición única, sino en términos de
para la interacción; esto moldea su especificación múltiples posiciones, incluyendo algunos con-
en términos de lenguaje de símbolos. juntos que proveen significados no claros de
organización de respuestas debido a que con-
Está implícito el hecho de que algunas veces hay tienen expectativas contradictorias (Bazilli et
definiciones culturalmente dadas para ser aplica- al. 1998, p. 323).
das cuando las claves apropiadas sean percibidas.
El proceso de la definición de la situación, ocu- Es importante resaltar que el concepto de papel
rre, básicamente según los autores mediante la en el interaccionismo simbólico implica su exis-
generación de “categorías o términos de clase” tencia en grados diferentes de concretización y
que en verdad son símbolos con sentido y carac- consistencia. Un papel es significativo para una
terísticas compartidas y que al final sirven como persona, en la medida en que se sienta identifi-
claves y elementos para la organización del com- cado o atraído por él. La persona que asume un
portamiento. papel es porque de cierta manera ha entrado en
un proceso “empático” en el que desea asumir el
Lo cultural es un referente que marca la interac- papel del otro para ver el mundo de la manera
ción familiar, ya que permite identificar modelos en que él lo ve; he aquí la importancia de que los
o patrones de comportamientos relevantes para miembros de una familia tengan referentes claros
la convivencia familiar que se expresan con base y atrayentes que les permitan identificar papeles
en la experiencia individual como conceptos o que puedan asumir dentro del grupo familiar. A
juicios sobre la forma en que “se debe compartir

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través de la identificación de papeles significa- métodos cuantitativos apoyados en la estadística


tivos se perpetúan las diferentes estructuras fa- que les permita ser consecuentes con este tipo de
miliares, replicándose en la formación de grupos demandas, tal como se evidencia en la prolifera-
familiares con características similares. ción de los estudios epidemiológicos.

Los papeles que son asumidos tienen como ele- En este sentido, la violencia se ha convertido en
mento constitutivo imaginarios de papeles que el paradigma dominante desde el cual se intenta
se construyen en la interacción social y que se comprender la realidad familiar, y los diagnósticos
conceptualizan en el sentido de Mead como el y las estadísticas nos informan permanentemente
otro generalizado. Esto hace que no sea necesa- de ello; sin embargo, el predominio del enfoque
rio tener una persona dentro del grupo familiar general de la violencia tiene limitaciones para dar
que asuma el papel elegido para que cualquiera cuenta de la compleja realidad familiar e incluso
de los miembros de la familia se identifique con podría limitar las posibilidades no sólo de com-
“X” o “Y” papel. El papel se construye desde la prensión, sino también de acción sobre la familia.
interacción simbólica.
Los hallazgos muestran que muchos de los inte-
Los contextos familiares se refieren a los escena- rrogantes que guían los procesos de investigación
rios de relaciones y procesos exógenos a la familia en nuestro medio se circunscriben a lógicas del
que están en permanente comunicación en ella, análisis social, centradas en el diagnóstico y en
en una relación de doble vía. Dichos escenarios la detección de la anomia social. Es decir, des-
se crean y recrean en la familia como procesos de cierta distancia se observa la tendencia en los
sociales, económicos, culturales e históricos. Al estudios generales a identificar el conjunto de si-
igual que se considera el territorio como una ca- tuaciones problemáticas que se deben entrar a
tegoría relevante en los contextos familiares por corregir, mientras se deja de lado la posibilidad
ser el escenario en el cual los individuos se reco- de enfocar la lectura de la realidad familiar des-
nocen, se construyen y se identifican. de la perspectiva de los procesos complejos que
subyacen a ella. Sin embargo, la perspectiva del
Resultados conflicto abre la posibilidad de analizar las rela-
ciones que suceden en las familias como espacio
de construcción social y como un escenario en el
Respecto a la revisión documental cual los conflictos también se resuelven de mane-
ra positiva. Es decir, hay un desenvolvimiento de
En términos generales se puede observar que el los conflictos que hace que se produzcan diversas
tema de la convivencia familiar ha alcanzado un formas de fortalecer las relaciones que se movili-
estatus y una relevancia fundamental en el diseño zan en las familias. En esta misma línea se concibe
y en la ejecución de las políticas sociales en los la familia como parte del tejido social y el con-
países de América Latina. Esto se debe a varios texto como el marco de referencia en el que se
factores, entre los que se resalta generalmente el desarrollan las interacciones.
aumento vertiginoso e incontenible de la violen-
cia urbana en las ciudades del continente y el dra- Desde el punto de vista de los desarrollos jurídicos,
mático aumento de la pobreza. Se observa cierta se cuenta con un importante conjunto de normas
tendencia en los estudios de América Latina de que apuntan a garantizar la protección de los dere-
priorizar la relación entre pobreza y violencia chos de los miembros del grupo familiar. Estos pre-
como condiciones sociales que ocurren en rela- ceptos son tenidos en cuenta como marco global y
ciones de causalidad, mas no desde la perspec- son reportados en varios de los documentos anali-
tiva de las representaciones sociales. Lo anterior zados. Sin embargo, vale la pena preguntarse por
se ratifica cuando se encuentra que se privilegian el conocimiento, la comprensión, la apropiación y
los estudios de gran cubrimiento poblacional, lo la aplicación real que tienen de ellas los ciudada-
que obliga a los investigadores a hacer uso de los nos, los profesionales y los líderes quienes trabajan

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

sobre aspectos de protección y desarrollo familiar. nero, la dimensión étnica, la dimensión socio-
Igualmente, es importante preguntase sobre la económica, los procesos de urbanización, las
efectividad de estos marcos jurídicos y las repre- procedencias de la población, las representa-
sentaciones y los sentidos que los miembros de las ciones e imaginarios sobre la familia, los con-
familias hacen de ellos. El marco jurídico también flictos, lo generacional y la dimensión política.
se puede considerar como un elemento de presión
social que sustenta prejucios sobre los papeles for- Versiones de los especialistas
malizados de los miembros familiares, protegiendo
la familia como una institución que se debe pre- (elementos que facilitan
servar a pesar de los efectos y las manifestaciones la convivencia)
que los conflictos generan sobre los individuos.
Al igual que en la revisión documental y por in-
De una forma más detallada en la revisión docu- fluencia de los marcos referenciales que emplean,
mental se resaltan los siguientes aspectos: la convivencia se conceptualiza y se reporta des-
de “un ideal del deber ser para las familias”. Se
 Desde el punto de vista de las investigaciones
presentan dificultades para percibir los elementos
disponibles sobre el tema de la familia se con-
que, desde el cotidiano, brindan las realidades fa-
firma que aún no existen bibliotecas y centros
miliares, debido a que permanentemente se com-
de documentación especializados que reúnan
paran dichas realidades con el ideal referencial
toda la producción local sobre el tema de la
que tenga el profesional. De igual forma, la fami-
familia. Las instituciones no cuentan con docu-
lia es percibida desempeñando múltiples papeles
mentación sistematizada disponible sobre sus
ideales que involucran lo afectivo, la protección y
procesos de atención e intervención institucio-
la socialización, a través del aprendizaje de nor-
nal. A esto se suma que los objetos de la inter-
mas, valores, conductas. Esto genera una tensión
vención no son, en algunos casos, propiamente
entre la realidad vivida por los entrevistados en
la familia, sino algunos miembros de ella.
las comunidades y la expectativa de éstos frente
 Es notable la diferencia que existe entre la
al desempeño de los diferentes grupos familiares.
producción investigativa de los centros acadé-
micos universitarios y las organizaciones que
El elemento positivo que aporta la familia a la
desarrollan programas de intervención social
convivencia armónica es su funcionalidad, desde
familiar. En ambos cosas se resalta de manera
este punto de vista, la familia debe cumplir con
significativa las investigaciones sobre los lla-
su papel de normalizador de los individuos, lo cual
mados factores protectores3.
tiene impacto en la configuración de lo social. El
 Otro elemento de énfasis trabajado en los estu-
papel –asumido y esperado– del padre cuando se
dios es la violencia en general o algunas de sus
percibe como positivo se hace desde una concep-
formas de presentación. Esto se hace de mane-
ción ideal; en este sentido, el padre, como figura
ra detallada, puesto que se incluyen enfoques,
y como modelo, es permanentemente evocado en
conceptos, manifestaciones, víctimas y victima-
las descripciones del papel esperado, lo que es re-
rios, tipos de agresiones y proceso de atención.
ferido a través de los relatos sobre las búsquedas
 Finalmente, es importante mencionar que, en
de compañero, por parte de las mujeres, quienes
su mayoría, los estudios consultados no abor-
constantemente construyen pareja en función de
dan cualificadamente las relaciones entre la
formar familia. De igual forma, el papel de la ma-
convivencia familiar y las dimensiones como: el
dre, construido desde lo ideal, como la encargada
espacio socio-territorial, la perspectiva de gé-
de la socialización de los hijos, es percibido como
un elemento positivo que aporta a la conviven-
3 Los factores de riesgo son todas aquellas características o situacio-
nes propias del ser humano o de su entorno, que aumentan la posibi- cia familiar, a la estabilidad, por ser referente de
lidad de desarrollar desajuste psicosocial. Los factores potectores en afecto y cuidados necesarios para suplir las nece-
cambio son aquéllas que elevan la capacidad para hacer frente a las
adversidades o disminuyen la posibilidad de desarrollar desajuste psi- sidades básicas del grupo familiar. La claridad de
cosocial frente a la presencia de factores de riesgo en Evaluación de
factores de resiliencia intra-psíquicos y psicosociales (Celener, 1999).
los papeles de los diversos miembros de la familia,

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Erico Rentería Pérez, Esperanza Lledias Tielbe, Alba Luz Giraldo

especialmente del padre y de la madre, influye Versiones de los especialistas


positivamente en los logros de permanencia, ar-
monía y bienestar familiar.
(elementos inhibidores de
convivencia familiar)
Los elementos positivos de la convivencia son
interpretados como el repertorio de las familias Uno de los aspectos inhibidores ligados a procesos
para comprender, asumir, explicar y valorar las de socialización es el empleo de castigos fuer-
relaciones basadas en prácticas de diálogo, tole- tes, como medio para disciplinar a los hijos, y la
rancia y capacidad para tomar distancia del en- ausencia de acuerdos para la construcción del
torno violento en el contexto familiar. También convivir cotidiano entre los miembros de la fami-
en los relatos se encuentran interpretaciones del lia en términos de normas, transacciones y nego-
conflicto como un elemento que dinamiza la con- ciaciones. También se encuentra la significación
vivencia, no necesariamente desde su resolución e interpretación de situaciones cotidianas como
negativas o estresantes, debido a que no encajan
La situación, entendida como el deber ser de la en el ideal del modelo de familia nuclear o en las
familia, incluye el mejoramiento de las condicio- expectativas del otro, pasando a manifestaciones
nes de vida a través de la consecución de me- de agresión física o verbal en algunos casos.
tas. De igual forma, se destacan como elementos
facilitadores en este nivel las prácticas religiosas La definición de situación de convivencia se carac-
como referentes de códigos morales (contenidos teriza por la descripción de parejas sin proyecto
de orden ético), de un buen ejemplo y enseñanzas claramente definido o pactado, la construcción
por parte de los padres. real de familias distintas al modelo tradicional
y la promoción de actos violentos asociados en
Otro elemento positivo son los procesos de socia- muchas ocasiones al consumo de sustancias psi-
lización, por implicar la transmisión de hábitos de coactivas. La dificultad para asumir papeles re-
crianza, pautas de comportamiento y definición ferentes a la maternidad o a la paternidad (papel
e interpretación de situaciones, como organiza- esperado) implican abandonos, falta de responsa-
dores de la convivencia entendida como vida en bilidad y cumplimiento de deberes de los padres
común. En cuanto al contexto, la construcción (papel asumido), esto es referido como “no cum-
de redes de solidaridad y el establecimiento de plimiento de sus funciones”. En muchos casos,
pactos y acuerdos en el nivel comunitario para esta situación lleva a un papel pasivo de la mujer
la organización de actividades económicas (cade- frente al hombre, en términos de exigencia de
nas de dinero, recolección de mercado semanal cumplimiento de sus obligaciones como padre una
para una familia asignada por turnos) y eventos vez terminada la relación de pareja, así como la
de tipo social se perciben como claves para la suplantación de crianza por parte de familiares.
promoción de la convivencia. Este elemento se
complementa con actividades de acompañamien- Con respecto al contexto y ligado a procesos so-
to y soporte entre vecinos cuando algún miembro ciales se percibe la incidencia negativa de los
de “la cuadra” o cuando alguna familia presenta medios de comunicación que muestran modelos
una calamidad o problema grave. En el nivel de lo y costumbres familiares estereotipadas. Igualmen-
económico la vinculación laboral facilita la convi- te, el ambiente de violencia del entorno, como
vencia como agente estabilizador de la economía influencia y fuente de tensión en los niños, de-
familiar y como regulador del tiempo dedicado a bido a su asociación con formas inadecuadas
la familia. En cuanto a lo territorial se considera para resolver conflictos entre vecinos, tales como
clave la presencia de instituciones, organizacio- palabras “soeces”, negación de los otros e inva-
nes o agentes externos que han intervenido en la sión de espacios comunes a través del ruido son
conformación de los barrios, así como la asisten- identificados como elementos contextuales que
cia por parte de organismos estatales y privados dificultan la convivencia familiar. Las limitaciones
que trabajan en la comunidad. de recursos económicos que impidan acceder a

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

mejores condiciones de vida, se convierten en un En relación con el contexto, los líderes no lo per-
elemento que inhibe la convivencia, debido a sus ciben como espacios importantes a través de los
implicaciones reales en el cubrimiento de otras cuales se construye y se dinamiza la convivencia
esferas de la vida y desarrollo de las familias. familiar, sino que es visto como una estructura
permanente, establecida, semi-estática, que resta
Los procesos migratorios que alejan a las familias posibilidades de acción en cuanto a su uso como
de sus lugares de origen, así como las movilizacio- elemento potenciador e inhibidor de la conviven-
nes obligadas en busca de mejoramiento de la ca- cia familiar.
lidad de vida son el principal elemento histórico
percibido como inhibidor de la convivencia al no Versiones de personas que
encontrar lo esperado. Culturalmente los espacios
de recreación, mediados por el consumo de sus- conforman las familias (grupos
tancias psicoactivas y aceptados como normales, focales) elementos facilitadores
inhiben la convivencia. Adicionalmente, se per- de convivencia familiar
cibe la tensión producida por información sobre
las diversas formas de violencia, brindada por los Desde la perspectiva interaccionista, el proceso
medios de comunicación. La división territorial de socialización referido a partir de la función
está marcada por elementos de exclusión social social de los padres de cuidar, acompañar y vi-
hecha a otros por sus diferencias de hábitos, es- gilar a los hijos dentro de un modelo de relación
tilos de vida, formas de configuración de los es- unilateral. Adicionalmente, la convivencia es faci-
pacios en los cuales los habitantes de otros ba- litada a partir de espacios para compartir como,
rrios se perciben como perturbadores. Esto genera por ejemplo, las celebraciones en familia. En este
manifestaciones violentas como la conformación punto es interesante observar que los integrantes
de grupos de limpieza social y termina afectando de las familias perciben que los medios de comu-
negativamente la convivencia. nicación tienen elementos que inciden positiva-
mente en la educación de los hijos.
A manera de conclusión, las versiones y las per-
cepciones de las personas que trabajan en la co- La significación que facilita el proceso de convi-
munidad sobre convivencia familiar muestran a vencia familiar se fundamenta en el diálogo y en
través de su relato una tensión que se forma en- la comunicación entre los miembros de la familla,
tre “conocer la convivencia” por medio de textos, diálogos en los que se valoran de manera negativa
comunicaciones, capacitaciones y otras formas de los roles violentos. En este sentido los miembros
información al respecto y la vivencia de su traba- de las familias perciben que la situación de convi-
jo, como líderes que no escapan a los imaginarios vencia familiar se facilita cuando aparecen como
construidos desde el deber ser de modelos de fa- elementos característicos el afecto, la unión fa-
milia y convivencia ideales. Esto desencadena la miliar y la aceptación de los demás, elementos que
dificultad de los líderes de actualizar permanen- cuando caracterizan la interacción entre ellos, se
temente su mirada sobre su trabajo y sobre la co- convierte en una valoración positiva de la convi-
munidad, “desfigurando” su trabajo como agentes vencia familiar.
potenciadores de cambio. Vale la pena destacar
que en los relatos de los profesionales se obser- En cuanto los elementos que caracterizan los pa-
va la influencia y la aceptación de un discurso peles esperados que facilitan la convivencia fami-
hegemónico sobre el deber ser de la familia y la liar se perciben y se identifican la responsabilidad
distribución de los papeles que no cuestionan ni de los padres y el respeto a las figuras paternas.
logran trascender. Esto los pone en una posición En términos de la dinámica efectiva de los pape-
de actores sociales que pregonan y reproducen les asumidos, éstos se perciben como facilitado-
estereotipos o versiones rígidas sobre la convi- res de la participación de los hijos en actividades
vencia familiar. relacionadas con la ocupación o con el trabajo

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Erico Rentería Pérez, Esperanza Lledias Tielbe, Alba Luz Giraldo

de los padres, la preocupación por el futuro de se hace una asociación de estos elementos como
los hijos, el apoyo entre los miembros de la fami- “estímulo de las prácticas de consumo de drogas”.
lia, los comportamientos ejemplares, los padres En consecuencia, la situación de convivencia es
complacientes para que sus hijos no abandonen definida y caracterizada como inhibidora cuando
la familia, los padres protectores, la mujer como se acepta por parte del otro la violencia en las re-
mediadora de los conflictos familiares, el recono- laciones de pareja, como en los casos de violencia
cimiento del papel de mujer trabajadora y la va- física, verbal o psicológica. En esta situación se
loración de los hijos como compañía. significa como negativo el hecho de que el hogar
se vuelve una fortaleza, un centro de impunidad
En el plano contextual en el nivel de los proce- del maltrato familiar. El silencio, el maltrato hacia
sos sociales los miembros de las familias perciben los hijos por parte de la madre –quien a la vez es
que la presencia de instituciones de ayuda social golpeada por el padre– y la drogadicción son prác-
para las familias a través de préstamos, y que la ticas reportadas como comunes en los barrios. En
vinculación de las personas a instituciones para el caso particular de la drogadicción es preocu-
conocer sus deberes y sus derechos, inciden de pante que la perciban como algo “natural”.
manera importante en el trato a los hijos; asimis-
mo, la convivencia mejora cuando los padres es- En lo relativo a los papeles esperados y asumidos
tán vinculados a instituciones de ayuda o forma- que inhiben la convivencia, se perciben como ele-
ción. En el plano económico se percibe que tener mentos más destacados el abandono a los hijos
un negocio independiente en la casa o trabajar por problemas de la pareja, que los padrastros
en ella es un elemento que facilita la convivencia no asuman su papel de padres, asumirse como un
familiar. Por último, culturalmente la aceptación miembro dependiente económicamente del grupo
en común acuerdo de la pareja de recibir ayuda familiar, el rol diversificado de la mujer como mul-
y apoyo de la familia de origen y la confianza en tiplicadora de su función en la familia, la madre
ellos como multiplicadores de hábitos de crianza como única responsable de la crianza y educación
adecuada son los elementos más destacados. de los hijos, la utilización de los hijos por par-
te de padrastros como instrumento de venganza
Versiones de personas que contra la pareja y el fenómeno de “madresolteris-
mo”, cuando conlleva desplazar la figura paterna
conforman las familias (grupos o cuando la familia de origen asume la crianza
focales) elementos inhibidores de los hijos. Complementariamente se perciben
de convivencia familiar como elementos inhibidores no prestar suficiente
atención a los hijos por aspectos ligados al consu-
En el proceso de socialización los hábitos de mo de licor y la complicidad de los padres cuando
crianza, cuando se relacionan con la condescen- sus hijos son drogadictos.
dencia y los límites laxos en las normas impuestas
por los padres, las formas disciplinarias violentas, En el plano contextual se perciben como elemen-
el “lenguaje fuerte” para tratar a los hijos y la tos inhibidores los siguientes:
carencia de expresiones afectivas hacia los hijos  Entre los procesos sociales que más inciden se
se convierten en un inhibidor importante de la destacan el debilitamiento en el papel de las
convivencia. instituciones del Estado como mediadoras del
conflicto, las resultantes de la concentración
Los procesos de significación tienen como elemen- de familiares en un mismo espacio, el conoci-
tos referenciales, en la percepción de los miem- miento por parte de los hijos de las leyes que
bros de las familias, el abuso por parte de las hijas los protegen y la violencia verbal entre grupos
que son madres solteras de la protección que les de amigos.
brinda la familia, la incomprensión, la ausencia  En cuanto al nivel económico, el hecho de te-
de diálogo, el maltrato a los hijos y no recono- ner trabajos y ocupaciones consideradas como
cerles las virtudes. En ese marco de significación

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Convivencia familiar: una lectura desde la psicología social

informales y dentro “del rebusque” se perci- ciones como unilaterales, en las cuales los padres
ben como elementos de distanciamiento fami- asumen el papel activo en las relaciones, frente
liar, que afecta negativamente la convivencia a la percepción de los hijos como pasivos y como
familiar. Esta situación se agrava cuando se receptores de las acciones de sus padres, lo que
trata de desempleo. genera relaciones de desigualdad, las cuales, a su
 En nivel histórico se destaca el fenómeno de la vez, hacen que la convivencia familiar se torne
migración como elemento que altera la confor- violenta; esto es un elemento que facilita la cir-
mación de las familias. Esta situación es per- cularidad de la violencia doméstica en cualquiera
cibida como clave si se tiene en cuenta que la de sus manifestaciones.
convivencia en el sector es entre personas de
diversas “culturas” y es considerada negativa En todos los niveles de información se encontró
por el hecho de que se presentan conflictos. que los ideales de familia y de convivencia que
 Culturalmente se percibe la estigmatización de se trabajan en el imaginario no corresponden ne-
los espacios o de los barrios del distrito como cesariamente con las realidades cotidianas de las
violentos. En este sentido, el territorio, como familias participantes, lo que genera una tensión
elemento que promueve discriminación hacia entre su repertorio de elaboración, desde el de-
las familias –inclusive por parte de sus propios ber ser y su repertorio de actuación, desde las
familiares no moradores en el sector–, la con- prácticas construidas o posibles en sus contex-
centración de familiares por el espacio redu- tos de interacción. La versión de familia que se
cido de las viviendas, la existencia de lugares proyecta hacia la comunidad no necesariamente
comunes de recreación o celebración mediados corresponde a las realidades vividas, ya que su
por el consumo de alcohol o drogas y manifes- construcción se origina en la influencia de teo-
taciones de violencia que generan inseguridad rías sobre prácticas generalizadas, estereotipos
en el vecindario, se convierten en elementos y modelos no elaborados desde los diversos con-
percibidos como inhibidores de la convivencia textos históricos, culturales, políticos, sociales
aunque su manejo o control no dependa en que referencian una realidad particular. Al signi-
muchos aspectos de todos los miembros de las ficarse la familia de forma estereotipada se im-
familias. ponen papeles que al no corresponder con las
realidades vividas son difíciles de asumir; esto
Conclusiones aporta elementos negativos que dificultan la
convivencia familiar, por ejemplo, se asume que
Los relatos correspondientes a los diferentes miem- la familia “bien” constituida es la denominada
bros de las comunidades participantes evidencian nuclear, es decir, aquélla conformada por papá,
las tensiones que se forman entre los discursos mamá e hijos; sin embargo, en su devenir históri-
hegemónicos sobre convivencia y la vivencia co- co las miembros de la comunidad se han dado la
tidiana. Estos intentos de rupturas podrían ser posibilidad de construir otro tipo de grupos fami-
aprovechados como elementos reflexivos para liares, que aunque tienen otras configuraciones,
impulsar la movilización de las personas hacia la facilitan la vida en común.
construcción y la consolidación de nuevas formas
de convivencia. El nivel de respuestas brindado por las personas
que trabajan con la comunidad sobre la configura-
El principal referente empleado por parte de los ción de familia, la dinámica familiar, los papeles,
participantes para comprender, explicar o cons- el contexto familiar, pareciera que responden a la
truir la convivencia familiar se centra en “la vio- influencia de repertorios explicativos apropiados
lencia” como eje, debido a que la convivencia se desde instancias institucionales que realizan tra-
percibe como resultado de actos y no desde la bajos con familia de diversa índole. Los papeles
dinámica interaccional en la que se construye. asumidos en los grupos familiares se consolidan
Esto se ve reflejado en la concepción de las rela- más desde la perspectiva de díadas que de colec-

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Erico Rentería Pérez, Esperanza Lledias Tielbe, Alba Luz Giraldo

tivo en la medida en que se asumen en relaciones Arango, C. & Campo, D. (2000). Educación para la
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pero no como un agrupamiento social diferen- versidad del Valle, EDUPAR, Colciencias, BID.
te. La perspectiva de díadas no necesariamente
implica que los papeles se asuman de la manera Arcury, L. (1988). Conocimiento social y procesos
ideal esperada, pasando, por ejemplo, la referen- psicológicos (capítulo II). Barcelona: Herder.
cia “padre-madre” a “esposo-esposa” más que
como figuras de autoridad y orientación típicas Arendt, H. (2002). A condição humana. Rio de Ja-
o tradicionales, principalmente en el caso de los neiro: Forense Universitária.
hombres, llevando a los miembros de la familia a
ocupar otros lugares sociales. Bardin, L. (1977). Análise de Conteúdo. Lisboa:
Edições 70.
En general, la percepción de los elementos con-
textuales es muy limitada, lo cual hace que no se Bazilli, C.H., Rentería, E., Duarte, J., Simões,
aproveche su potencialidad, ni se detecten sufi- K.V, Feitosa, L. & Rala, L. (1998). Interacio-
ciente o sistemáticamente riesgos que inciden en nismo Simbólico e Teoría dos Papéis. Uma
la convivencia familiar. Es decir, la familia sigue Aproximação para a Psicologia Social. São
siendo percibida de manera “aislada” o separada Paulo: EDUC.
de su entorno inmediato lo que puede mantener
el problema de la explicación como endógeno, Blumer, H. (1969). Simbolic interactionism. Perspec-
principalmente. tive and method. New Jersey: Prentice-Hall.

Estas miradas sobre la familia obligan a construir Boissevain, J. (1987). Apresentando amigos de ami-
otros discursos que parten de enfoques interpre- gos: Redes sociais, manipuladores e coalizões.
tativos que ven la familia y a los individuos en un In Feldman Bianco B. (1987). Antropologia das
permanente movimiento en que van construyen- sociedades contemporâneas. São Paulo: Edito-
do su realidad y lo que permite unas lecturas de ra Global.
lo social desde perspectivas cualitativas, en las
cuales el discurso permite rescatar lo cotidiano. Davies, B. & Harré, R. (1990). Positioning: The
De esta forma se puede recuperar y significar lo Discursive Production of Selves. Journal for
cotidiano, no desde las relaciones violentas cosi- the theory of social behavior, 20 (1), 43-63.
ficadas, ni desde la visión tradicional de familia,
sino desde los elementos y las versiones de los in- Habermas, J. (1987). Teoría de acción comunica-
dividuos. Éstas son relevantes no sólo en el orden tiva. Crítica de la razón funcionalista (tomo
de la práctica, de lo cotidiano de los actores, sino II). Madrid: Taurus.
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