El fallo que llega a la Corte Suprema de Justicia es
sobre una acción judicial que inicio la señora Segunda manuela rea contra provincia de Santiago del estero con el objetivo de obtener un resarcimiento de los daños y perjuicios sufridos por la muerte del señor ramón contreras, Nancy paz y dos niñas, los cuales fallecieron ahogados en el canal de riego Contra López. Ane la negación de la corte provincial la actora interpone un recurso de queja.
La sala civil y comercial del superior tribunal de
justicia de la provincia de Santiago del estero por mayoría rechazó la demanda. Para decidir los jueces consideraron que no se debía responsabilizar al demandado por falta de servicio relacionado con el estado en que se encontraba el canal, si bien en el lugar no tenía carteles indicadores de la peligrosidad y profundidad del canal, ninguna norma imponía al demandado a proveer medidas de protección. También se tuvo en cuenta que el lugar en donde ocurrieron los hechos no era de fácil acceso, que el hecho tiene vinculación con la falta de prudencia de los niños y la falta de diligencia en el juicio y vigilancia de su tía, quien estaba a su guardia, también sostienen que el canal no era en esencia una cosa riesgosa sino que devino en peligroso por el accionar de las víctimas y hacen hincapié en que si hubiese habido carteles hubieran sido ignorado por los niños por la imposibilidad de lectura. El juez herrera indico que los padres de los menores incurrieron en un defecto de elección al delegar la custodia de sus hijos a una persona no apta ya que esta no tomo los recaudos, conociendo los riesgos del lugar.
La parte actora cuestiono la sentencia mediante
recurso extraordinario federal por estimar que el tribunal incidió en arbitrariedad en la fundamentación fáctica y jurídica de la decisión, por su parte señala que el lugar no es de fácil acceso, no había vallas, barandas o alambrado que impidieran el ingreso. Sostiene que el hecho de que la existencia de los carteles hubiese resultado inútil no tiene sentido ya que los niños eran alumnos regulares de escuela primaria por lo que sabían leer. Agrega la obligación de la provincia de velar por la seguridad de los habitantes ya que los lugareños se acercan a ese canal para refrescarse. También afirma que ya se habían ahogado otras personas allí. Principalmente que el tribunal incidió en contradicciones y que produciéndose dos pericias técnicas las cuales eran opuestas el tribunal solo tuvo en cuenta una.
Si bien según la jurisprudencia de la corte
considera que la tacha de arbitrariedad debe entenderse como potencialmente estricta en los casos en que la sentencia emanan de los superiores tribunales de la provincia, cabe una excepción en aquellos supuestos en los que median graves defectos de fundamentación. Los tribunales decidieron eximir de responsabilidad al demandado sin efectuar una aplicación razonable del derecho vigente y no valoraron adecuadamente las pruebas.
La sentencia omitió examinar a la luz de los
hechos comprobados en la causa y desestimo la existencia de responsabilidad del estado provincial con argumentos insuficientes, aun asi si el caso tuviera por acreditada la culpa de la persona encargada de la guarda de los niños, la sentencia impugnada no satisface el recaudo constitucional de fundamento suficiente, por lo que la situación debe ser objeto de examen de un nuevo pronunciamiento, se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se revoca la sentencia apelada.