ENSAYO SOBRE MI PROYECTO DE VIDA.

LINA MARIA RAMIREZ MOSQUERA

La sociedad en la que me desenvuelvo ha influido mucho en mí, como en la
mayoría de nosotros, me he adaptado a costumbres y formas de vida, me
considero una persona flexible a los cambios, tengo poder de decisión, si lo decido
no descanso hasta cumplirlo.

Siempre he tenido deseos de aprender, con una necesidad constante de seguir

comprendiendo mi entorno y a mí misma, me gusta la lectura, me encanta la
música y sobre todo bailar.

Mi carácter, bueno, eso es lo más trascendental de mi familia en general, un

carácter que se asemeja a una tempestad, soy orgullosa y de poca paciencia, no
perdono la mentira y la deslealtad, la vida me ha enseñado o por lo menos me ha
forjado como una mujer de valores, mismos que quiero transmitir a mis hijas, de
las cual he aprendido más que ellas que de mí, y sigo en la etapa donde no me
veo solo como mujer, si no con la responsabilidad de hacer el papel de madre.

Considero que YO no soy la misma que era hace años atrás, crecemos y
aprendemos de cada error de cada risa, de cada lágrima, las decisiones que me
han rodeado han tenido consecuencias buenas y malas que han cambiado mi
perspectiva y visión de mi presente y por contraste de mi futuro y de la personita
que me acompaña por el momento, hasta que cobre sus propias alas en esto que
llamamos ciclo de la vida.

Vivimos un proceso de cambios internos personales, así como a nivel externo o

social constante, influenciados por la economía, estatus, desigualdades,
complejos, así como recompensas esporádicas. Pero siempre prevalecerá nuestra
propia esencia como individuos, única en cada persona y es lo que considero que
significa el YO en cada uno.

Por lo qué, Yo, una mujer de 31 años de edad, forjada por la vida, con una
fortaleza innata, inteligente, decida, creativa, feliz por haber podido dar vida a
otras vidas, con mucho por aprender, defectos por pulir, y más, me considero un
ser humano único por lo que he construido a lo largo de mi vida.
 El emprendedor ¿nace o se hace?

Todas las personas pueden tener personalidad emprendedora, como algo dentro
de sí que falta explotar, justamente porque no hay el valor suficiente para hacerlo.
Entonces, la mayoría prefiere quedarse en su "zona de confort" (aunque no estén
del todo cómodos), antes de emprender algo nuevo que no saben cómo resultará.
Sin embargo, cuando la gente dice que no es emprendedora o creativa, está
mintiendo, porque puede aprender a serlo, todo está en la motivación que tenga
para ello. Y no hablamos solo de emprender algo propio. También se puede ser
emprendedor en el trabajo en el que estamos, dando iniciativas, teniendo buenos
proyectos, innovando permanentemente, etc. Lo importante es tratar de
renovarnos siempre, formando una cultura emprendedora en diferentes áreas.

Es el deseo y la pasión por ir tras los sueños hasta lograrlos. La inteligencia es el

razonar cómo llevar a cabo el proyecto deseado y usar las mejores herramientas
para lograrlo. Pero, nada funcionará si no se tienen las agallas suficientes.

En conclusión desde mi perspectiva, el emprendedor se hace.