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OCTUBRE / 2011
BOGOTÁ, COLOMBIA ISSN- 2215-8332
Álvaro Vásquez del Real, Daniel Libreros Caicedo, César Giraldo Giraldo,
Frank Molano Camargo, Jorge Gantiva Silva, María Teresa Cifuentes Traslaviña,
Nelson Fajardo Marulanda, Patricia Ariza, Sergio De Zubiría Samper, Víctor
Manuel Moncayo Cruz Consejo editorial
DE LA MADRE TIERRA
EN EL TIPNIS Raúl Prada Alcoreza 52
“LA HORA
Editorial
DEL PUEBLO
PALESTINO HA
LLEGADO” Jesús
Gualdrón 74
Profundización de la crisis
sistémica y convocatoria
de Santos a su gestión
y concertación
a) Papandreu reconoce en gira por Alemania que
el plan de ajuste griego es un asunto de negocios
para los capitalistas
_4 Volver a contenido
Minería artesanal. Fotografía: CENSAT Agua Viva - Centro Nacional Salud Ambiente y Trabajo.
1 Ver nota periodística en El País.com. “Papandreu pide ante los empresarios alemanes
la ampliación del fondo de rescate”, 26 de septiembre de 2011.
_6 Volver a contenido
Beers fue más allá y adicionó las propuestas frente a la crisis en el largo
plazo. Argumentando que la salida a la misma dependerá del comportamiento
de los gobiernos anotó: “Esa respuesta debe ir más allá de la rebaja del déficit
y afrontar las preocupaciones de los mercados sobre los posibles hundimientos
de bancos y centrarse en los causantes del déficit, principalmente la sanidad
y las pensiones públicas...”5. Este es otro anuncio de la profundización de la
guerra social en contra de los trabajadores y las poblaciones por parte de las
elites financieras en el futuro inmediato.
_8 Volver a contenido
reestructuró deuda interna por un monto de $6.4
billones que debería pagarse en 2012, 2013 y 2014,
Minería artesanal. Fotografía:
llevándola, en fracciones de $1.67 billones, $2.22 CENSAT Agua Viva - Centro
billones y $2.49 billones a 2015, 2018 y 2026 con Nacional Salud Ambiente y Trabajo.
intereses del 6%, 6.8% y 7,56%7, respectivamente,
en momentos en que aún el crédito externo
se encuentra mucho más barato, con lo cual se
beneficia a los intermediarios financieros que
negocian con TES. Adicionalmente, al reducir la
oferta de estos títulos para los próximos años
aumenta el precio de los mismos y al colocar
un bono a 15 años por un monto superior a los
$2 billones expande el mercado de capitales,
anunciando nuevas transacciones especulativas
con soporte presupuestal de largo plazo.
Este tipo de operaciones evidencian la
implementación del modelo de especulación
que estamos padeciendo en las últimas décadas
en el contexto de la globalización financiera y
que ha significado un aumento considerable del
desempleo y la pobreza. Obligatoriamente surge,
entonces, la pregunta acerca de cuál es el soporte
de los llamados a la concertación entre el capital
y el trabajo. La respuesta es que estamos en
presencia de una retórica vacía que pretende el
abandono de las resistencias populares.
E
l proyecto hidroeléctrico El Quimbo,
concesionado por el Gobierno colombiano
a la empresa colombo-española Emgesa
(subsidiaria de Endesa y actual propiedad de la italiana
ENEL), está ubicado en la región central del Huila, en
el sitio denominado El Quimbo: 9000 hectáreas de 6
Miller A rMín Municipios, Reserva Forestal Protectora de la Amazonía
Dussán CAlDerón
y del Macizo Colombiano; con 300.000 habitantes de los
Profesor Investigador cuales aproximadamente 2.000 serían desplazados, la
Universidad mayoría vinculados a 8 empresas comunitarias en plena
Surcolombiana producción agropecuaria, (cacao, sorgo, maíz, arroz) que
Miembro de Asoquimbo producen unas 36.000 toneladas de alimentos por un
valor cercano a los $ 50.000 millones anuales. Cuenta
con 842 hectáreas de bosque ripario y tropical seco,
poblaciones de peces que son básicos para la seguridad
alimentaria, 103 especies de aves, 13 especies de
reptiles y tres especies en severo peligro: la pacaraná, el
mono nocturno de manos grises y la nutria neotropical.
El Quimbo no está destinado al abastecimiento interno
sino a la exportación de energía por las transnacionales
a las que Uribe Vélez entregó nuestras cuencas del río
E
n la presente campaña electoral el Polo
Democrático Alternativo no lucha solo por llevar la
conducción de la ciudad durante un nuevo período,
sino para enfrentar el efecto conjunto de las descalificaciones
orientadas desde la derecha dominante, por una parte, y, por
otra, desde las vertientes que se han ido desgranando del
cuerpo principal unitario hacia posiciones de centro derecha
Jaime CayCedo Turriago
alentadas desde el poder nacional y de régimen dominante.
Secretario general del PCC La pregunta es: dada la experiencia de dos
Concejal de Bogotá administraciones del Polo, con sus luces y sombras, y las
por el PDA formas de actuar de los gobernantes mandatarios, ¿es
posible, en medio de una política nacional hostil, profundizar
la perspectiva de cambio del modelo de ciudad hacia uno de
carácter democrático y humanizado que cambie de rumbo
al tenor de las políticas de autonomía, antiimperialismo y
búsqueda de nuevos horizontes de desarrollo, como reto que
está planteado hoy en América Latina?
Para responder a este interrogante, abordaremos
tres aspectos esenciales de la estrategia política de los
comunistas en el fortalecimiento y desarrollo del proceso
unitario representado en el Polo Democrático Alternativo.
1)
El primero consiste en el establecimiento preciso de una identidad de contrarios, es decir,
establecer según el delineamiento dialéctico los factores de dominación esenciales y los
obstáculos a la profundización de cambios avanzados y de reformas de fondo que favorezcan
el crecimiento popular, el mejoramiento de las condiciones materiales de existencia para
la gran mayoría de la población pobre de la ciudad y las opciones de intervención en las
decisiones que afectan directamente los derechos del pueblo.
Nuestra experiencia, conjugada con el legado de otras anteriores del Partido Comunista
y de la Unión Patriótica, nos ha permitido ubicar en el escenario de ese gobierno permanente
(ejercido por el poder del capital inmobiliario y financiero más la fuerza ideológica de los
medios de comunicación monopólicos) la expresión más directa de la que pudiéramos llamar
dictadura de clase en la ciudad de Bogotá y la reja de hierro que separa el ejercicio del poder
de los anhelos, intereses y preocupaciones mayoritarios de la población. Esta expresión
del poder gobierna con el apoyo de una burocracia tecnocrática que pasa de gobierno en
gobierno, sin adhesión ideológica o de principios a ninguna política de transformación real
del aparato distrital. La supuesta neutralidad técnica de la burocracia camufla en realidad la
contradicción principal con el gran capital que representa los sectores ya mencionados que
dirige, planifica, controla y publicita el desarrollo urbanístico. El clientelismo y la corrupción
funcionan a la sombra de este aparato que agencia, en las condiciones de la privatización
neoliberal del Estado, las relaciones con el mundo empresarial de constructores-contratistas
2)
Por eso podríamos decir, en un segundo momento del análisis, que el
efecto de esta identidad de contrarios se sitúa en la persistencia de las
desigualdades estructurales que caracterizan las condiciones de vida de la
inmensa mayoría de la población. Dichas desigualdades están en una neta
contradicción con el conjunto de derechos sociales y políticos escritos en la
Constitución nacional de 1991 y que han bautizado de manera rimbombante
con el título de Estado social de derecho. Tal contradicción entre la proclama
de dicha forma de Estado y las realidades y dificultades con que tropiezan los
ciudadanos y ciudadanas para poder acceder, garantizar, reclamar, protestar
y exigir el cumplimiento de los mismos, implica una brecha no solamente
no resuelta, sino que puede agravarse como efecto de la crisis económica
3)
Por último, un tercer enfoque para el análisis pregunta por
las posibilidades de profundización de las políticas sociales
y el desarrollo de un nuevo, democrático y humanizado
proyecto de ciudad, en el marco de una lucha frente al
régimen dominante, en contradicción con ese proyecto
nacional. La experiencia de Bogotá ha mostrado que no es
posible desarrollar un plan democrático de gobierno sin que
se unan los factores y fuerzas que actúan en la administración
distrital y las corrientes avanzadas que actúan en el Concejo
G
ramsci llamaba en sus Cuadernos de la cárcel
“morfinismo político” al fenómeno del inmovilismo
Jorge ganTiva Silva
y letargo que caracteriza la “revolución pasiva”
Filósofo. Universidad que producen los procesos de transformación radical del
Nacional de Colombia capitalismo y que alteran la subjetividad de los movimientos
Profesor Titular. y partidos y los somete a letargo y confusión. Es sabido
Universidad del Tolima
que en medicina se aplica la morfina como analgésico
para bloquear los receptores de dolor. Tiene además la
característica de producir ciertos “paraísos” mentales y
despertar ilusiones y fantasías. Lo sorprendente es que
produce adicción y en modo alguno resulta ser curativa, sino
que es meramente sintomática. Así sucede con la actitud
del Polo Democrático Alternativo que reclamaba para
sí su condición de organización “única” de la oposición, y
actúa como si viviera en un mundo de ángeles y demonios.
La suspensión y posterior detención del Alcalde Samuel
forma de lucha”. La decisión de la derecha había sido desde los comienzos del Polo
no dejar prosperar una opción de izquierda democrática, nítidamente antisistema,
menos aún, permitir que tomara fuerza una opción contra el gran capital. Todos los
que se fueron hacia el despeñadero de la “unidad nacional” y del “progresismo” lo
confirman. Al día siguiente de haberse fundado el Polo, El Tiempo en su editorial y
los magnates del capital habían decidido qué tipo de izquierda era posible admitir por
parte del Establecimiento: el mercado, la democracia del statu quo, Wall Street. Su
gran adalid: el presidente de Brasil, el “compañero Lula”. Aunque parezca irónico, la
burguesía encontró la solución en la izquierda que tomó el rumbo socialdemócrata,
ligado al gran capital.
La crisis del capitalismo ha sido sorteada de varias maneras. Una de ellas es
la irrupción de la socialdemocratización como “cabeza de ratón” del capital. Desde
entonces se montó toda una satanización contra la izquierda social, contra los
movimientos de paz, contra las luchas no parlamentaristas, contra el pensamiento
crítico y alternativo. El propio Polo adoptó una suerte de actitud de “patria boba”
que permitió que sus adversarios de clase fueran torpedeándolo y socavando sus
posibilidades sistemáticamente. El haber desconocido el carácter “demofascista”
de la sacrosanta democracia colombiana ha sido una de las ingenuidades y errores
de las izquierdas desde Gaitán hasta nuestros días.
Los jóvenes encaran el futuro ante un presente decrépito que proviene del
pasado terriblemente injusto y violento. “Ir a contrapelo” del imperio y del capital:
confrontar las “entelequias” del poder que pretenden ensimismar y desactivar la
potencia creadora de los pueblos, comunidades, juventudes y territorios con el
discurso de desinstalar las falaces contradicciones entre la modernización liberal
y la reacción contra la modernidad; entre la locura del Imperio y la “racionalidad”
del capital nacional; entre las “bondades” de la democracia procedimental y la
desmesura del autoritarismo.
El Polo podrá volver a renacer si retoma su camino de construir un proyecto de
izquierda democrática, antisistema, que confronte el gran capital y la lógica de la
dominación imperial. Sus lugares de enunciación serán otros, no necesariamente
tienen que ser los convencionales. Tendrá que reconstruirse afuera, porque afuera
estamos todos, porque ese afuera es lo hoy podemos llamar la potencia de los
procesos de Puerto Gaitán, de las luchas contra los megaproyectos transnacionales,
de las mingas, de las marchas ciudadanas, de las movilizaciones por territorios,
paz y justicia y de las constituyentes universitarias. ¿Será capaz el Polo entonces
de emprender su camino y lograr conectarse con lo social, con el mundo de lo no
convencional? ¿Y podrá superar su aparatismo? ¿Podrá volver a empezar? ¿Podrá
hablar otros lenguajes, mirar otros espacios sociales, animar otras subjetividades,
mirar el mundo de los desterrados, de las víctimas, los mundos sin trabajo, sin
estudio, sin derechos?
La pregunta está abierta. Si decide seguir instalando su proyecto en el atolladero
del posibilismo, estará asediado por los trapeadores sociales del capital como hace
el “progresismo”, o se mantendrá como un aparato electoral, parlamentario, de
caudillos y grupos. O, por el contrario, puede asumir la condición de imposibilidad
de su Ideario como la condición de la posibilidad para construir la potencia de una
alternativa, cimentada en la subjetivación plural que conjure el miedo y el fatalismo.
Ese es el punto: “aceptar con valentía la plena actualización de una Causa, incluido
el riesgo inevitable de un desastre catastrófico” (Zizek). He ahí el sentido de la
“condición de imposibilidad”: volver a empezar.
E
l proceso de neoliberalización que se ha venido
adelantando durante las últimas décadas en el
país ha transformado de manera sustancial el
Documento
concebido y panorama de la educación. El Estado colombiano, sin haber
elaborado en saldado su deuda educativa histórica con los niños, niñas
el marco del III y jóvenes, ni haber dado cuenta de las expectativas que
Congreso de en materia educativa despertó la Constitución de 1991 al
la Federación
de Estudiantes consagrar el derecho a la educación, emprendió el camino
Universitarios – de la mercantilización, la privatización y el alistamiento
FEU COLOMBIA–, del sistema educativo en dependencia creciente con los
realizado en Bogotá requerimientos de un modelo económico concebido para
del 15 al 17 de
septiembre de 2011 favorecer en lo esencial a las corporaciones transnacionales
y a los grandes grupos económicos. La política educativa
ha sido dispuesta de manera sistemática para atender esos
propósitos, y se ha subsumido, además, a los lineamientos de
la política económica neoliberal de la sostenibilidad fiscal y a
los dictámenes de los organismos multilaterales. Los diseños
de tal política indican, cada vez con mayor contundencia,
José Luis
E ste verano ha sido convulso para la economía
norteamericana.
Durante las últimas semanas del mes de julio
RodRíguez pareció como si las finanzas de Estados Unidos se
mecieran al borde del precipicio producto del posible
Asesor del Centro
de Investigaciones impago de su deuda pública, cuyo techo, fijado por el
de la Economía Congreso, amenazaba con desplomarse sobre la cabeza
Mundial de los acreedores.
Cuba
Sin embargo, detrás el escándalo mediático lo que
en verdad se dirimía era el costo de las vergonzosas
concesiones de Obama a Wall Street de cara a las
elecciones de 2012, de las cuales sacaban provecho las
grandes corporaciones norteamericanas gracias a la
redistribución de recursos públicos que obtendrían a
cambio de aprobar un nuevo techo para endeudar el país.
Los límites al endeudamiento público se
establecieron por el Congreso desde 1917, pero esto no
impidió que esos límites se elevaran cada vez que hizo
falta. De tal modo, solamente desde 1962 crecieron en
más de 74 ocasiones, siendo la aprobación más reciente
de una fecha tan cercana como febrero 12 de 2010, la cual -curiosamente- transcurrió
de forma intrascendente.
En el lenguaje de los políticos se atribuía un crecimiento desmedido de la deuda a los
“excesos” de la actual administración en los gastos, especialmente referidos a los costos
de los programas Medicare y Medicaid, basados en el incremento de los precios de las
medicinas y de las tarifas del seguro médico. En efecto, a partir de la desregulación del
mercado farmacéutico los costos de los servicios médicos pasaron de 714 mil millones
de dólares en 1990 a 2,3 billones en 2008, lo que representa un gasto por habitante de
7.681 dólares, el más alto del mundo y –al mismo tiempo‒ uno de los servicios de peor
calidad entre los países desarrollados.
Con mucha razón varios especialistas han llamado la atención de que los gastos
por seguridad social ya se financiaron por impuestos sobre la renta del 15,4%, por lo
que se impugna la rebaja de estos gastos a partir de la Enmienda 14 de la Constitución
norteamericana que explícitamente plantea su carácter incuestionable.
En realidad el déficit fiscal ha venido creciendo fuertemente en los últimos años
como consecuencia en primer lugar del incremento de los gastos militares, que en 2010
alcanzaron los 698 mil millones, cifra que rebasa el 5% del PIB. No debe pasarse por alto
que el cómputo de estos gastos en el presupuesto norteamericano no incluye el pago
de las pensiones a veteranos, los pagos por concepto de deudas incurridas en conflictos
bélicos anteriores y tampoco las erogaciones extraordinarias de los conflictos en
Obama con el objetivo de presentarlo –de cara a las elecciones del 2012‒ como presunto
responsable de la situación de endeudamiento presente.
La posición del gobernante, que había previsto una rebaja de gastos pero también
un incremento de impuestos para negociar el nuevo techo de la deuda, cedió ante
la coyuntura electoral y aceptó una rebaja de gastos concentrada en el 15% de las
erogaciones del presupuesto en derechos de la red social y gastos discrecionales no
militares, lo que se traduce en rebajas en educación, salud, vivienda, transporte, medio
ambiente, ciencias, energía, desarrollo comunitario y otros gastos sociales.
El programa para aprobar la elevación del límite de la deuda norteamericana, acordado
por demócratas y republicanos y avalado por Obama, contempla de inmediato una rebaja
en gastos por 917 mil millones de dólares en diez años. De ellos inmediatamente se
rebajan 400 mil millones hasta septiembre. De esa fecha al 23 de diciembre se reducen
otros 500 mil millones, básicamente en gastos domésticos discrecionales que son los
que aprueba el Congreso.
Por otra parte, el 23 de diciembre tiene que haberse acordado una rebaja de entre 1,2
y 1,5 billones de dólares la que debe ser propuesta por una comisión de ambas cámaras
del Congreso. Curiosamente, si esta comisión no emite una propuesta aceptable, se
recortarían automáticamente gastos por 1,2 billones de la defensa y gastos domésticos
a partes iguales, cosa poco probable que ocurra, pero donde se anticipa una intensa
batalla política entre republicanos y demócratas para llegar a un acuerdo.
L
a determinación del gobierno de Bolivia de construir
la carretera que va de Villa Tunari a San Ignacio
de Moxos ha desatado una polémica en el país y
la reacción de las organizaciones indígenas del CIDOB y el
CONAMQ, que decidieron marchar el 15 de agosto para
Raúl PRada alcoReza evitar que el trazo de la carretera pase por el núcleo del
Parque Isiboro-Sécure, exigiendo además la consulta a los
Filósofo y sociólogo
Ex constituyente boliviano pueblos indígenas, como está establecida en la Constitución
Integrante del Política del Estado.
Grupo Comuna El Territorio Indígena del Parque Nacional Isiboro-Sécure
está protegido por leyes y la Constitución. Además de ser
parque, por lo tanto área protegida, es territorio indígena,
y exige el respeto establecido constitucionalmente de los
Derechos de las Naciones y Pueblos Indígenas Originarios.
Por otra parte, el TIPNIS tiene que ver con las Resoluciones de
Tiquipaya, con la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos
sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra
(CMPCC), las mismas que prohíben la explotación en bosques,
así como plantean claramente la defensa de los ecosistemas y
los ciclos vitales integrados.
En esa perspectiva, la Ley Marco de la Madre Tierra,
que se encuentra en la agenda de la Asamblea Legislativa
Plurinacional, concibe la defensa de los ciclos reproductivos de la vida, los ciclos del
agua, por lo tanto de las cuencas, los ciclos del suelo, los ciclos de los bosques, los
ciclos del aire, los ciclos de los seres, concebidos como componentes de la Madre Terra.
Por todas estas razones es inconcebible, desde el punto de vista de la Constitución
y desde la perspectiva del Vivir Bien, además del enfoque de los derechos de las
Naciones y Pueblos Indígenas Originarios, la determinación del gobierno de construir
la carretera que atraviese el TIPNIS.
El debate ha puesto en la mesa la dirección del proceso: ¿por dónde va?
¿Desarrollismo o Vivir Bien? ¿Extractivismo o alternativa al desarrollo? Discusiones
que deberían estar supuestamente resueltas desde la aprobación de la Constitución,
no lo están, pues el gobierno y sectores interesados en promover el nombrado
“desarrollo” parecen no comprender los contenidos y los alcances de la Constitución
y el sentido del proceso constituyente. Una visión nacionalista restaura el Estado-
nación, encaminando esta regresión hacia la ampliación del modelo extractivista,
fortaleciendo de este modo las cadenas de la dependencia, instaurada por la
expansión, consolidación e intensificación del colonialismo, método violento de
la expansión capitalista. Este debate debe ser tomado en cuenta plenamente,
considerando el momento del proceso, que se encuentra en crisis, el contexto del
proceso, su propia genealogía, el despliegue mismo del proceso, con todas sus
contradicciones y dinámicas moleculares. Sobre todo, el debate debe traer a colación
una reflexión profunda sobre los procesos en curso y sus enredos con los mapas
institucionales y la arquitectura estatal liberal, buscando evaluar las perspectivas de
las emancipaciones y las posibilidades de la descolonización.
Hipótesis
En el debate se han planteado algunas explicaciones del obsecuente
comportamiento del gobierno. El más conocido es el que tiene que ver con la
expansión de la frontera agrícola, haciendo entrever también las consecuencias de la
desforestación; esta ampliación está directamente conectada con la expansión de los
cultivos de coca. Ya se dio antes un avasallamiento del territorio indígena por parte
de productores de coca, ocasionando invasión y desforestación; esta expansión ya
era conocida el 2004. La contención ante este avance se estableció mediante una
línea roja dibujada en 2009, prohibiendo toda nueva expansión. Sin embargo, ante
la construcción de la carretera se esperan nuevos avasallamientos, desforestaciones,
expansiones de la frontera agrícola y del cultivo de coca.
Otra explicación manejada en el debate es la de la supeditación del gobierno
boliviano y de su proyecto desarrollista-extractivista al proyecto emergente de la
burguesía brasilera, en el momento de la urgencia energética de Brasil como potencia
regional. Esta supeditación explicaría el papel condicionante de Petrobras en la
explotación hidrocarburífera, la presencia de empresas brasileras constructoras de
caminos y de infraestructura, así como la participación de una empresa brasilera en el
proyecto de San Buena Aventura.
Un proceso contradictorio
¿Cómo hemos llegado a esta situación en el momento presente? La
primera hipótesis al respecto es que no se ha resuelto la cuestión estatal, no
se ha destruido el Estado-nación, que es la forma moderna del Estado liberal,
que es la forma de legitimación en la periferia del sistema-mundo capitalista
del Estado colonial. Se ha más bien restaurado toda esta maquinaria
sedimentada por capas, estratificada por formas administrativas, dándose una
acumulación geológica de las reformas institucionales modernas. Lo que hace
este Estado al ser restaurado es reproducir sus múltiples formas de dominación
y reencaminar la continuidad de las estructuras de poder, de los diagramas de
fuerza, que atraviesan los cuerpos induciendo determinados comportamientos
funcionales al sistema nacionalista, liberal y colonial. También se reproducen
las relaciones de dependencia y de supeditación del Estado-nación subalterno
al orden mundial de la dominación global del sistema-mundo capitalista. La
pertenencia al sistema financiero, que es el centro de la dominación imperial
y capitalista, el sometimiento a sus reglas, el entregar el ahorro nacional a los
bancos extranjeros, hablan de este sometimiento de la periferia al centro de
la economía-mundo capitalista.
Lo mismo ocurre en lo que respecta a los engranajes y redes de las
empresas trasnacionales; por el condicionamiento de sus monopolios
tecnológicos, financieros, de mercados, de sus mecanismos, procedimientos
y agenciamientos de influencia, terminan imponiendo sus estrategias de
enajenación de los recursos naturales y de acumulación ampliada de capital,
convirtiéndolas de forma mediatizada en políticas de Estado del Gobierno.
_66
Fotografía: CENSAT Agua Viva - Centro Nacional Salud Ambiente y Trabajo
insurgencias y hallar la forma de proveer las armas apropiadas para la policía (…) La AID,
además de prestar asistencia a la policía debe coordinar con el Departamento de Defensa
programas de acción cívica que contribuyan a la seguridad interna”.
Fueron estos objetivos de la Alianza los que triunfaron, si se considera que se evitó
a sangre y fuego otra Cuba en América Latina. No sucedió lo mismo con las metas de
“desarrollo y progreso”, que no alcanzaron el protagonismo que sí tuvieron las políticas de
seguridad contra el “enemigo interno”.
Reflexiones finales
El rescate de la retórica de la Alianza por parte de la Administración Obama, desde
una visión superficial, implica revivir los ideales de diplomacia, democracia y desarrollo
como eje para mejorar las relaciones con América Latina, desgastadas durante las dos
presidencias de George W. Bush, tal como lo promueve la política de las “Tres D”. No
obstante, conociendo, por un lado, los intereses subyacentes a la Alianza para el Progreso
y teniendo en cuenta, por otro, las decisiones y acciones del establishment Obama con
respecto a América Latina, se sostiene que, en efecto, se están cumpliendo los designios
“no oficiales” de la Alianza para el Progreso al fomentarse, en nombre de la “democracia”,
la militarización y paramilitarización y el retorno a la seguridad interna en buena parte de
América Latina.
La reacción ante el golpe de Estado en Honduras, la presencia de bases militares
en territorio colombiano y el refuerzo a la Iniciativa Mérida como “solución” al crimen
organizado, entre otras cuestiones, deja a la vista que la administración de Obama, al igual
que la de Kennedy, no ha renunciado a los operativos de intervención e interferencia en los
asuntos internos de los Estados de América Latina, sea en nombre de la “democracia”, el
“desarrollo” o el “progreso”.
1 “As a musician he was outstanding because he was not only a good pianist but also a good improviser and I hired
him to become my assistant in the late 50s and he worked with me for over three years. I gave him work to do which
I have never given to any other musician, which means to work with me on the score I was composing. He was one
of the best examples that you can find among musicians because he was well informed about the latest theories of
composition as well as being a performer.” (http://en.wikipedia.org/wiki/Cornelius_Cardew)
años de vida compondría piezas basadas en música tradicional y música vocal con
textos que hacían referencia a la realidad política del mundo.
Durante este periodo se involucraría con el partido comunista británico y haría
una carrera fuerte como activista. En 1981, sin haber cumplido siquiera 50 años,
moriría al ser atropellado por un carro que huyó de la escena. Su pianista, Tilbury,
lanzaría posteriormente la hipótesis de que se trató de un crimen político.
El giro abrupto que sufrió el pensamiento musical de Cardew se ve representado
en estas dos piezas. La primera, The great learning, pertenece a su periodo avant-
garde. Influenciado por la escuela experimental norteamericana y basada en el texto
de Confucio, la pieza mezcla fragmentos recitados con partituras que ofrecen ciertas
instrucciones musicales, pero que brindan un amplio grado de libertad al intérprete.
En contraste, Smash the social contract, de su periodo marxista, es una pieza en la
que el compositor ha abandonado del todo las investigaciones formales musicales
para centrarse en el mensaje de conciencia social que pretende transmitir a través
del texto. Cualquier experimentación musical sería considerada, dentro de este
esquema de pensamiento, como una distracción de las problemáticas que afectan
al hombre en la “vida real”.
Más allá de las consideraciones estéticas o musicales de cada una de sus etapas,
encuentro la vida de Cardew bastante atípica y fascinante. Es una especie de
recordatorio de que nuestra historia personal es susceptible de verse transformada
en cualquier momento, toda vez que tengamos frente a nosotros suficientes razones
para hacerlo.