EL OCIO Y EL TIEMPO
Manolo Sánchez Concha
E
A partir de: ‘El Mundo’ Byung-Chul Han: "El ocio se ha convertido en un insufrible no hacer nada"
l tiempo en la actualidad casi
que se ha dividido según las
preferencias del individuo y
se ha perdido la esencia del
mismo y por consiguiente la forma con
la que se gasta en la vida. El filósofo y
ensayista surcoreano Byung Chul-Han,
añadió a la entrevista con el periódico
español ‘El mundo’ que, cito: “El
tiempo laboral se ha totalizado hoy
convirtiéndose en el tiempo absoluto.
Realmente deberíamos inventar una
nueva forma de tiempo. Si resulta que
nuestro tiempo vital o la duración de
nuestra vida coincide por completo con
el tiempo laboral, como en parte está
sucediendo ya hoy, entonces la propia
vida se vuelve radicalmente fugaz. Yo
contrapongo al tiempo laboral el tiempo
festivo. El tiempo festivo es un tiempo
de ociosidad, que hace posible recrearse
y permite una experiencia de la
duración.”, el tiempo debe dividirse y
desacondicionarse de la vida, la vida se
está tornando en una constante
autoflagelación de la libertad.
“Lo contrario de la sociedad del juego
es nuestra sociedad del rendimiento,
nuestra sociedad del cansancio, en la
que cada uno se explota voluntariamente
a sí mismo creyendo que así se está
autor realizando. Nos matamos a base
de autor realizarnos. Nos matamos a
base de optimizarnos. Pero el hombre
no es un homo laborans, sino un homo
ludens. El hombre ha nacido para jugar,
no para trabajar”. Dijo Han para
argumentar la autoflagelación y
esclavitud de la vida. El modo que la
vida ha perdido su esencia por el poco
disfrute de los momentos debido a la
pérdida del tiempo por la sociedad
neoliberal en la que el tiempo laboral
afecta el tiempo festivo auto flagelando
al individuo y la forma en la que
disfruta la vida. En una sociedad de
trabajo y de productividad, el tiempo
está esclavizado por el hecho de estar
comprometido, y el tiempo festivo se
hace una esclavización para el individuo
por el hecho de que este no realiza
alguna labor que lo haga sentir auto
realizado por lo que crea un sufrimiento
individual e insoportable que puede
terminar en una enfermedad.
“Las ganas que todos tenemos de jugar
se ponen al servicio del trabajo, que las
explota y saca partido de ellas.”, aunque
el tiempo festivo, es un tiempo dedicado
totalmente al ocio y donde la vida está
en su disfrute pleno, este tiempo se ve
coaccionado por el deseo y la necesidad
de trabajo creada por la sociedad de
trabajo, el objetivo ahora de la sociedad
es independizar este tiempo para crear
una sociedad festiva. Entra el ejemplo
de las redes sociales a crear una falsa
libertad de ocio, pero también se ve
coaccionada por el trabajo, de modo que
estas han polarizado sus objetivos al
trabajo, “Como todos los medios,
también el digital tiene un potencial
emancipador. Da más libertad. Pero lo
que sí me parece muy problemático es
que esta libertad se torne hoy de muchas
maneras una coerción (…) los medios
digitales es sobre todo porque generan
una ilusión de libertad (…) Por
Facebook o Instagram revelamos hoy
voluntariamente una enorme cantidad de
informaciones personales, incluso
detalles íntimos. Y al hacer eso nos
sentimos libres, aunque en realidad
estamos totalmente controlados.” Las
redes sociales usualmente se dedican a
un tiempo de ocio, sin embargo esta es
coaccionada, como dice Han por el
control que ejercen sobre nuestro
sentimiento de libertad y de desnudez
informática haciéndonos creer que
somos totalmente los que controlamos,
pero no es así.
Nos autorizamos a discutir, ¿Cómo
independizamos nuestro tiempo de la
sociedad?, creando una libertad del
tiempo a partir de una preocupación por
una construcción social por una
sociedad con tiempo independiente al
trabajo, para que los individuos sean
libres del manejo del tiempo y que el
tiempo de ocio no sea manejado por el
trabajo y que sea solo para el disfrute
del individuo y del desarrollo pleno de
su existencia.
Ello autoriza a concluir que, la vida está
determinada por tiempos en los que nos
dedicamos a ciertas actividades, estos
tiempos se ven limitados por factores
sociales como la sociedad de trabajo en
la que vivimos. La distribución y la
forma con la que adoptamos estos
tiempos ya sea para ocio o trabajo,
terminan perdiendo el sentido de gozo
de la vida, es primordial que la sociedad
deje de flagelar la vida con los tiempos,
pues deben independizar la necesidad
de la ocupación con el placer y gozo de
la vida.