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básicos de tránsito
para la infancia
El niño: peatón, pasajero y conductor
COSETRAN
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un gradual alcance y familiaridad de
ámbitos, a los que accede paulatina-
mente de acuerdo a sus naturales posi-
Definiciones Conceptuales
bilidades de avance.
Vía Pública
Estos escalones o alcances son: en
primer instancia su vivienda y luego el
vecindario. Este marcará sin lugar a du-
das un hito: el primer “mandado” a dos
cuadras de la casa; luego seguirá con
el reconocimiento del barrio; el ir “solo”
a la escuela; el recorrer la localidad; la
ciudad; la región, etc.
El hombre y el medio
Sintetiza la compatibilización, en-
tre la sociedad que usa un ámbito y el
respeto del mismo, es decir, el cuidado
por el mantenimiento de los espacios
públicos.
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El Usuario
de la vía pública
T
odos los que utilizamos las calles En consecuencia, estas marca-
y caminos somos “usuarios” de das diferencias, han sido tenidas en
estas vías de comunicación. En el cuenta para crear normas y diseños de
caso de los niños, son usuarios vías que protejan a los distintos usua-
cuando transitan como peatón, pasa- rios, sobre todo a los peatones, y orde-
jero o conductor. De todas maneras, el nar el tránsito circulante. Así se estable-
hecho de ser usuario de la vía pública ció, por ejemplo, la acera para la circu-
nos determina derechos y responsabili- lación de los peatones, y la calzada
dades (obligaciones) contemplados por para los vehículos; las sendas peatona-
nuestro Código de Tránsito. les, los semáforos, etc.
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c.
El niño
Por lo anterior, no busca se-
ñales indicativas de riesgo.
L
tiva del tránsito, tal como la pue-
as mayores dificultades, y don- de tener un adulto desde la mis-
de se verifican los mínimos ma vereda donde se encuentran.
márgenes de seguridad, se ma- Generalmente cuando los niños
nifiestan en los comienzos del ven al vehículo, éste está dema-
desarrollo de cada etapa evolutiva, por siado cerca de ellos. Por otro
la inexperiencia ante el nuevo grado de lado, su altura dificulta la visuali-
complejidad y la avidez por pretender zación por parte de los conduc-
superarlas. tores.
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Como debemos
comportarnos como
peatones
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nir ningún vehículo. Solo lo haremos si te-
Recordemos tres reglas básicas: nemos luz verde. En ese caso, cruzar
siempre con cuidado; a veces los vehí-
1. Primero MIRAR, después cruzar. culos no pueden detenerse de repente
2. Cruzar por el LUGAR más SEGURO. y siempre hay algún conductor que no
3. NO SORPRENDER a los conductores. respeta la luz del semáforo.
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El niño pasajero
E
l niño desde que nace, inicia capacidad humana de conducción, las ca-
una etapa de aprendizaje del racterísticas del lugar por donde se tran-
mundo que lo rodea. Así, poco sita, la cantidad de vehículos circulantes,
a poco y en base a su experi- el clima, los imprevistos, etc.
mentación ira conociendo las leyes físi-
cas de su realidad inmediata como así Estas circunstancias exigen que
mismo ira desarrollando la capacidad el niño aprenda a adaptarse al despla-
de equilibrio y resolviendo situaciones zamiento de los vehículos, experimen-
que le permitirán comenzar a dar los tar nuevas percepciones y nuevos hábi-
primeros pasos. Esta experiencia tiene tos al mismo tiempo que la forma de
lugar en un marco, generalmente, muy protegerse de los serios peligros que
seguro y custodiado por los padres. Sus plantea el nuevo ámbito, pero esta vez
caídas y su torpeza, están controladas (en el caso, por ejemplo, del colectivo)
y casi nunca revisten peligros. Con el sin la tutela de sus mayores.
correr del tiempo irá perfeccionando
sus movimientos hasta tener dominio Todo lo explicitado hasta aquí,
pleno de su actividad. sirve como un marco de comprensión
de la realidad del niño pasajero, y se-
Sin embargo cuando este niño co- ñala el punto de partida, sobre el que
mience a trasladarse como pasajero de- se han desarrollado las distintas pau-
berá necesariamente descubrir y hacer tas de comportamiento a seguir en la
frente a nuevas sensaciones físicas, ge- vía publica. Pautas que necesariamen-
neradas por el movimiento (mecánico) te deben adquirir los chicos, concientes
de los vehículos. A esto último debemos de su importancia y utilidad, a fin de
sumarle la incidencia de una variedad de desarrollar las aptitudes que les posibi-
factores que influyen, (en este movimien- liten integrarse de manera segura al
to) de diversas maneras, como ser: la sistema de tránsito.
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Como debemos
comportarnos en los
medios de transporte
En un transporte público:
Debemos ceder el asiento a quien
Antes del viaje más lo necesite.
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Después del viaje
E
vehículo se haya detenido, procuran-
sta es una de las etapas más
do hacerlo por detrás.
importantes del niño, dado que
No cruzaremos nunca por delan- es el inicio de un largo apren-
te, ni por detrás del vehículo del cual dizaje que lo llevará, el día de
nos hemos bajado, hasta que éste no mañana, a ser un conductor de auto-
se haya ido. Puede ocultar a otros vehí- móviles. La responsabilidad y los bue-
culos en marcha. nos hábitos que adquiera se traducirán,
sin lugar a dudas, no sólo en una capa-
Si tenemos que cruzar la calle, lo cidad individual de conducción, sino tam-
haremos por la senda peatonal más bién en un modelo social a imitar por
próxima.
otros.
En un automóvil: Hasta aquí el niño se había de-
sempeñado siempre como peatón de-
pendiente o eventual pasajero. Transi-
taba casi siempre los mismos recorri-
dos, por caminos y situaciones conoci-
das, que no le requerían la necesidad
de poner a prueba un juicio demasiado
elaborado. Por otra parte, el uso de la
bicicleta comenzó por ser un juego con
el cual recreaba su tiempo libre.
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El niño
conductor
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El hábito de
controlar la bicicleta
E
s importante aprovechar el enor- de bicicletas, sus distintos usos (deporti-
me interés, que sobre todo ma- vas, de montaña, de ciudad, etc.), sus
nifiestan los niños entre los 9 y los cualidades técnicas, etc. También en-
13 años, por interiorizarse de las señarles la periodicidad y cómo deben
cuestiones técnicas, para comenzar a verificar su “vehículo”.
trasmitirles el “hábito” de controlar su bi-
cicleta. De manera tal que cuando sean Tamaño de la bicicleta:
adolescentes y posteriormente adultos,
hagan lo propio con su ciclomotor, con La altura justa es la que permite
su moto o con el automóvil. Además al conductor poner los pies en el suelo,
permitirá que ellos empiecen a conside- estando situado sobre el cuadro del ve-
rar su bicicleta como un vehículo con el hículo (caño que va desde el asiento
cual se pueden trasladar, y dejar atrás hasta el manubrio). En este sentido tam-
el concepto de juguete con el cual se bién es importante señalar que el ma-
recreaban hasta ese momento. nubrio debe estar a la altura del asien-
to, lo que permitirá circular confortable-
Para ello es necesario hablar de mente y además tener un per fecto do-
las características de los distintos tipos minio de la bicicleta.
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Los elementos
que se deben controlar:
con la
goma en buen estado.
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ra con la presión adecuada.
ebemos partir de la idea, de que
Mariposas, tuercas y bulones: todo usuario de bicicleta sabe:
bien ajustados. subirse y bajarse con facilidad,
conducir bien en línea recta,
Pedales: completos y engrasa- doblar correctamente, y puede tam-
dos. bién dirigir con una mano y con la otra
efectuar, por ejemplo, la señal de giro a
Cadena: con la tensión ade- la izquierda.
cuada (ni muy, ni poco ten-
sada). El correcto dominio de este vehí-
culo es una de las condiciones elemen-
Rodamientos: limpios y bien tales para la seguridad de quien con-
engrasados. duce. La otra condición es saber como
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debe conducir en la vía pública. Para Las indicaciones de los semáforos
ello debemos tener en cuenta que: vehículares tienen total validez para los
ciclistas.
Siempre se debe circular por la de-
recha , previendo la eventual apertura Debemos asegurarnos ser vistos en
de puertas de vehículos estacionados, todo momento. En horas de oscuridad de-
o por las ciclovias . bemos tratar de no circular por calles sin
iluminación. De tener que hacerlo, es con-
No debemos tomarnos de otros veniente emplear ropas claras, y tener
vehículos. siempre en la bicicleta, elementos
retroreflectantes, además de la luz roja
Antes de cruzar una calle o ave- trasera. Hay que enseñarle al niño, que si
nida, tendremos que detener o dismi- no hay iluminación pública en la calle, los
nuir la marcha. El cruce lo debemos efec- conductores de automóviles lo han de
tuar siempre después de haber mirado distinguir sólo cuando se encuentre den-
bien hacia ambos lados. tro del haz luminoso de los faros. Si el auto-
motor se desplaza a mucha velocidad, la
Si transitan varios ciclistas, deben ir distancia de detención del mismo puede
uno detrás de otro, en fila india. No debe- superar al espacio iluminado. Situación
mos circular en grupos o en parejas. esta, que provocaría un accidente.
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Educar para transitar
crucijadas durante las diferentes horas,
en los distintos días y épocas del año,
etc.
E
vencia
l avance tecnológico ha traído
muchos beneficios para la huma- 4. Favorecer el desarrollo de há-
nidad, pero también ha plantea- bitos de responsabilidad del
do nuevos y peligrosos problemas.
usuario de la vía pública
Lo cierto es que por sí sola la tecnología
no puede elevar la calidad de vida de
una comunidad, puesto que necesita 5. Preservar la salud y las condi-
que el hombre esté capacitado para ha- ciones ambientales
cer uso correcto de la misma.
6. Promover el conocimiento de
Estudios de especialistas en esta las normas, reglas y principios
materia, arribaron a la conclusión que el de tránsito vigentes
hombre ha sido “diseñado” para transi-
tar como peatón a un promedio de 10 7. Desarrollar hábitos y conduc-
km./h, circunstancia que plantea un in-
tas para la prevención de ries-
terrogante: Cómo puede circular a velo-
gos de accidentes
cidades superiores sin que ocurra algún
accidente?
8. Propiciar y motivar la partici-
La respuesta es que para evitar los pación de la comunidad en la
mismos, el hombre necesita educarse y problemática vial.
adaptar sus sentidos a las complejas exi-
gencias de la vía pública. En consecuen- La síntesis de todo esto, es ense-
cia, no solo debe conocer y memorizar las ñar a transitar, favoreciendo en las au-
reglamentaciones sino también apren- las, el desarrollo de aptitudes y actitu-
der a mirar, calcular distancias, diferen- des positivas para que el niño se integre
ciar velocidades, apreciar zonas de pe- al sistema del tránsito como persona
ligro al transitar las calles, caminos y en- hábil, segura y responsable.
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Por una mejor
calidad de vida
Esta publicación que abarca pautas de
comportamientos y un marco de comprensión
de la realidad del niño peatón, pasajero y con-
ductor, está orientada a lograr una mayor
aproximación a su problemática vial, advir-
tiendo respecto a los riesgos más comunes y
cómo evitarlos.
En este sentido, las situaciones de tránsito
con riesgo deben ser presentadas teóricamen-
te -primero- para que los usuarios noveles se
familiaricen con ellas y después de muchas
prácticas y entrenamientos en la propia vía
publica, llegado el caso, sepan actuar.
Por último cabe señalar, que este mate-
rial no es la culminación de un trabajo empren-
dido, sino el comienzo de una actividad, que
contribuirá, con el esfuerzo de todos, a una
transformación positiva de la convivencia so-
cial en nuestra comunidad, en busca de una
mejor calidad de vida. Esa meta, sin lugar a
dudas, será el epílogo de nuestra tarea.