Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
AGROEXPORTADOR
1) En la segunda mitad del siglo XIX la economía mundial había sido casi
dominada por Gran Bretaña con un desarrollo en la industria pesada, química,
aceros, ferrocarriles, entre otras; además de ser principal exportadora de
manufacturas y centro financiero y de intercambio de las corrientes de
comercio mundiales.
Luego de la crisis europea en 1873 y de la finalización de la guerra civil en
EEUU, donde el norte capitalista derrota al sur esclavista, Francia, Alemania y
EEUU comenzaron a practicar una política proteccionista, a desarrollar sus
industrias y a incrementar su participación en el comercio mundial lo que
generó que el Reino Unido expanda sus exportaciones de capital (préstamos,
inversiones directas de ferrocarriles a largo plazo) y dirija su comercio hacia los
mercados protegidos de su imperio y hacia los del mundo subdesarrollado.
Este acontecimiento dio lugar a una nueva etapa en la economía internacional
que diversificó el poder económico mundial, generó una estructura comercial
con mayores restricciones y un nuevo creciente rol de los movimientos de
capital.
El comercio de exportación e importación británico experimentó importantes
modificaciones: disminuyeron las exportaciones a Europa y a los EEUU y se
incrementó la participación de los países periféricos. Como Gran Bretaña
dependía de esos productos primarios para su propio desarrollo industrial,
incorpora al mercado mundial a nuevos países, entre ellos la Argentina.
Estos países periféricos eran donde los factores de producción-el capital y la
mano de obra- se movilizaban, lo que acrecentaba la acumulación de capitales,
materias primas y alimentos, lo que estimulaba la exportación de
manufacturas.
En cuanto a la balanza de pagos, los ingleses financiaban una parte de sus
importaciones ya que era el “corazón” de la actividad financiera y bancaria
mundial. Exportaban capital a través de empresas ferroviarias y préstamos
gubernamentales, etc.
2)1853-1880 se establecen las bases político-institucionales y económicas del
proceso al cual se lo llama período de transición. Desde la sanción de la
constitución nacional (1853), y de los códigos civil y comercial hasta la
capitalización de Buenos Aires (1880), en el país comenzó a darse el marco
institucional y la estructura política propia de un estado nacional. En esta
época se elabora el cuerpo doctrinario de ideas, desarrolladas por estadistas y
políticos de la época (Alberdi, Sarmiento, etc.), que se llamo “proyecto del 80
´”, que constituyo una asociación entre un conjunto de ideas y hechos, que
pugnaba por reorganizar el país con criterios modernos y una visión más
liberal.-
Alberdi (liberalista), señalaba la superioridad del empresario privado sobre el
estado como promotor del proceso económico. A partir de estas ideas se
consolido el modelo agro-exportador basado en el libre cambio. Así surgieron
nuevos métodos de organización de la producción en el sector rural, de nuevas
perspectivas de inserción internacional y de la concreción de un nuevo orden
político (proyecto del ´80).-
Las bases del proyecto del ´80, fueron el fundamento del sistema
constitucional argentino y de los principios económicos sobre los cuales este se
asienta.-
Motivos que impulsaron el modelo agro-exportador:
1.- La constatación de que el desarrollo económico argentino solo
podía basarse en la inserción del país en el mercado mundial,
especializándose en actividades en las que se tenían ventajas
comparativas.-
2.- Para que las riquezas provenientes del sistema económico
pudieran aprovecharse, era necesario suplir dos carencias básicas que
sé tenia, la del capital y la de la mano de obra.-
3.- Para que sean posible ambas cosas, se debía expandir la frontera
agropecuaria, resolviendo el problema del indio y unificar el mercado
interno.-
Hasta 1870, predomino la colonización oficial tendiente a asentar en el campo
colonos que ayudados por el gobierno, pudieran llegar a ser propietarios
independientes y manejar sus tierras como empresarios. Luego comenzó a
prevalecer la colonización privada, para explotar tierras marginales, pero
ninguna recibo el impulso necesario y fueron abandonadas. Luego de la
conquista del desierto, las mejores tierras ya estaban repartidas, y el desarrollo
agrícola se baso en sistemas de tenencia precaria de las tierras, que marcaron
el proceso inmigratorio y la evolución del sector agropecuario.-
Desde el punto de vista político, Argentina se caracterizo a partir de 1880 por
la coexistencia de dos republicas, una república abierta (preámbulo), que
proclamaba el imperio irrestricto de las libertades civiles y la apertura más
amplia hacia todos lo hombres del mundo que quieran habitar el suelo
argentino (se buscaba un aumento poblacional proveniente de la inmigración),
y una república restrictiva, en las cuales las libertades políticas estaban
condicionadas por la estructura del poder (por ejemplo el fraude electoral para
mantenerse en el poder).
3) En un principio se produce un cambio en la composición de las
importaciones. Esos bienes de capital y materias primas que entraban a la
Argentina estaban ligados a la inversión extranjera realizada y estaban
destinados a desarrollar la infraestructura que el país requería para poder
incorporarse al mercado mundial como productor y exportador de alimentos y
otros bienes de origen agropecuario. Consistían principalmente en material
ferroviario y para la construcción de obras públicas-portuarias, sanitarias,
construcción de viviendas, desarrollo urbano, etc.; y en insumos, hierro, acero,
combustible, etc., que tenían como finalidad la formación del capital social
básico de la economía agroexportadora.
El uso del crédito externo y la inversión extranjera directa es lo que posibilita la
expansión de las importaciones y permite absorber los déficit comerciales.
La primera corriente de inversión extranjera contaba con capitales casi
exclusivamente británicos destinados a empréstitos gubernamentales
En principio, los empréstitos tuvieron por objeto cubrir las necesidades
presupuestarias, luego comenzaron a aplicarse a obras de infraestructura y a la
construcción de vías férreas.
Estas primeras inversiones no tenían por objeto obtener grandes beneficios,
sino expandir las exportaciones británicas y vender servicios ya que los
grandes inversores en esa época fueron comerciantes y contratistas
ferroviarios.
En la nueva etapa que se inaugura en 1880, la inversión externa, en especial la
británica, presenta características diferentes a las del período anterior. Los
inversionistas extranjeros obtenían una tasa alta de rentabilidad que no se
obtenía fácilmente en otras partes del mundo, a través de la posibilidad de
poner en producción los recursos de la pampa húmeda.
Otra inversión del capital extranjero, además de los empréstitos y los
ferrocarriles, fueron los bancos y las compañías de seguros, empresas de
servicios públicos, obras portuarias, empresas industriales y compañías de
tierras y explotaciones agropecuarias.
La temprana aparición de los frigoríficos en Argentina estuvo vinculada con las
necesidades de transformación de una industria basada, hasta ese entonces,
en la producción y exportación de lanas, cueros y carnes saladas en
condiciones de competir en los mercados mundiales con productos de calidad
superior. En la etapa inicial de instalación de los frigoríficos, los capitales
invertidos eran nacionales o del Reino Unido. Recién en 1907 comienza la
radiación de empresas norteamericanas estimuladas por la mayor baratura y
calidad de la materia prima y los menores costos de la mano de obra, y con el
propósito exclusivo de abastecer el mercado británico.
En conclusión, el capital extranjero tenía una fuerte incidencia en la vida
económica del país y contribuía a diseñar su perfil agroexportador. Estaba
relacionado con el comercio exterior, su financiamiento, la elaboración de
productos primarios, el transporte interno, las obras de infraestructura, los
servicios públicos y el transporte ultramar.
4) Argentina se transformó en una importante proveedora de alimentos en los
mercados mundiales y sus necesidades internas fueron cubiertas mediante la
importación de bienes y servicios de otros países del mundo.
El aumento de la potencial riqueza agropecuaria requirió la maduración de
inversiones (extensión de vías férreas, construcción de las obras de
infraestructura, etc.) respondiendo al incremento de la producción.
La composición de las exportaciones por grupo de productos testimonia el
incremento de las exportaciones agrícolas desplazando de la primacía a los
productos ganaderos.
En el caso de las exportaciones ganaderas predominan las lanares, pero luego
las carnes se convirtieron en el principal producto ganadero de exportación.
En lo que respecta a los productos agrícolas, los cereales representaron desde
que se inicia el boom agrícola entre en 90% y 95% del total de productos
exportados derivados de la agricultura.
Con respecto al comercio de la importación, dentro del conjunto de bienes de
consumo, los textiles tuvieron una participación dominante en todo el período.
Los bienes de capital dependieron del comportamiento de las importaciones
del material ferroviario. En el caso de las materias primas el aumento de su
participación se debió al fuerte crecimiento de los materiales para la
construcción (obras de infraestructura y urbanización) y de los combustibles y
carbón para los ferrocarriles.
Con respecto a la importación y exportación de bienes por países de origen y
destino, los mercados compradores y proveedores relativamente
diversificados, se concentraron en el Reino Unido. Francia, Bélgica fueron
importantes mercados de exportación. Grandes compradores de lana para la
fabricación de productos textiles y alfombras, su participación decae
rápidamente cuando el “ciclo de la lana” es reemplazado por el “ciclo de las
carnes” mientras crece de la Gran Bretaña llegando a tener un gran
predominio en las importaciones: más de un tercio del total de los bienes
importados.
La ecuación con Gran Bretaña se basaba en el intercambio de carnes y otros
productos agropecuarios en menor medida contra tejidos de algodón y lana,
carbón, material ferroviario y hierro.
La balanza comercial entre ambas naciones fue deficitaria para la Argentina a
lo largo del siglo XIX para equilibrarse luego empezando a arrojar un superávit
permitiendo financiar una parte de la deuda externa y del flujo de intereses y
dividendos de las inversiones británicas en el país.
5) Argentina se transformó en una importante proveedora de alimentos en los
mercados mundiales y sus necesidades internas fueron cubiertas mediante la
importación de bienes y servicios de otros países del mundo.
El aumento de la potencial riqueza agropecuaria requirió la maduración de
inversiones (extensión de vías férreas, construcción de las obras de
infraestructura, etc.) respondiendo al incremento de la producción.
La composición de las exportaciones por grupo de productos testimonia el
incremento de las exportaciones agrícolas desplazando de la primacía a los
productos ganaderos.
En el caso de las exportaciones ganaderas predominan las lanares, pero luego
las carnes se convirtieron en el principal producto ganadero de exportación.
En lo que respecta a los productos agrícolas, los cereales representaron desde
que se inicia el boom agrícola entre en 90% y 95% del total de productos
exportados derivados de la agricultura.
Con respecto al comercio de la importación, dentro del conjunto de bienes de
consumo, los textiles tuvieron una participación dominante en todo el período.
Los bienes de capital dependieron del comportamiento de las importaciones
del material ferroviario. En el caso de las materias primas el aumento de su
participación se debió al fuerte crecimiento de los materiales para la
construcción (obras de infraestructura y urbanización) y de los combustibles y
carbón para los ferrocarriles.
Con respecto a la importación y exportación de bienes por países de origen y
destino, los mercados compradores y proveedores relativamente
diversificados, se concentraron en el Reino Unido. Francia, Bélgica fueron
importantes mercados de exportación. Grandes compradores de lana para la
fabricación de productos textiles y alfombras, su participación decae
rápidamente cuando el “ciclo de la lana” es reemplazado por el “ciclo de las
carnes” mientras crece de la Gran Bretaña llegando a tener un gran
predominio en las importaciones: más de un tercio del total de los bienes
importados.
La ecuación con Gran Bretaña se basaba en el intercambio de carnes y otros
productos agropecuarios en menor medida contra tejidos de algodón y lana,
carbón, material ferroviario y hierro.
La balanza comercial entre ambas naciones fue deficitaria para la Argentina a
lo largo del siglo XIX para equilibrarse luego empezando a arrojar un superávit
permitiendo financiar una parte de la deuda externa y del flujo de intereses y
dividendos de las inversiones británicas en el país.
6) La eliminación del “problema indio”, con la última campaña de Roca, el fin
de las guerras civiles y la consolidación del gobierno nacional, contribuyeron a
acelerar las corrientes inmigratorias al estabilizar la vida política y económica
del país. En el orden internacional la causa principal puede ubicarse en la
depresión económica que en los años 80 y 90 afectó a los países europeos.
Estos factores internos y externos, sumados a la estructura latifundista de la
propiedad de la tierra (grandes extensiones de tierra en pocas manos) y al
predominio de la región del litoral y de sus ciudades portuarias, hacen posible
comprender el momento, magnitud y modalidades del proceso de inmigración
y de sus efectos sobre el desarrollo económico nacional.
La inmigración que llegaba al país no procedía de países anglosajones o
nórdicos como esperaban y muchos tampoco tenían hábitos o experiencia
agrícola. Los movimientos migratorios fueron muy fluctuantes y dependieron
de distintas variables: el bajo costo del transporte marítimo, las diferencias de
salario y las dificultades materiales existentes para una radiación definitiva,
originarios una importante inmigración golondrina. Las crisis económicas
también tuvieron su influencia al producir un descenso pronunciado en el
número de inmigrantes.
Alrededor de 1880, cuando comenzó la inmigración masiva el acceso a la
propiedad de la tierra se había vuelto extremadamente difícil porque las
principales tierras ya estaban distribuidas y la valorización de su precio
imposibilitaba su adquisición debido a la especulación. Por el contrario, la
creciente demanda del sector urbano, especialmente en Bs As y otras ciudades
como consecuencia del desarrollo de la infraestructura y de las actividades
terciarias y de la ampliación del mercado interno, fue un polo de atracción para
el inmigrante aunque no coincidiera con los objetivos iniciales de la política
inmigratoria. Esto contribuyó a que la población urbana creciera a un ritmo
más sostenido que la rural.
7) Agricultura
El campo argentino experimentó grandes cambios. La expansión de la
agricultura fue notable. El sector ganadero, por su parte, tuvo también, aunque
más lentamente, transformaciones significativas. En realidad, los cambios en la
agricultura estuvieron estrechamente relacionados a la evolución de la
ganadería; ambos se condicionaron mutuamente.
En los años previos a 1880 la producción agrícola era muy escasa y el
mercado interno se abastecía importando trigo y otros cereales debido a la
falta de medios de transporte y su alto costo que obligaba a los colonos y
agricultores a mantenerse muy cerca del rio Paraná; la presencia del indio
impedía expandir la frontera agrícola-ganadera y la mano de obra y el capital
eran insuficientes. La introducción del ferrocarril, la derrota total del indio y la
llegada masiva de inmigrantes resuelven la mayoría de estos problemas y
hacia 1890 el sector agrícola comenzó a crecer aceleradamente.
La expansión de la frontera soluciono el problema de la escasez de tierra sino
que permitió también ampliar el tamaño de las parcelas haciéndolas más
rentables, aunque como consecuencia de la interrupción del proceso de
colonización; del aumento del precio de la tierra y de la introducción de la
agricultura en la zona ganadera, la explotación agrícola típica estará basada en
el arrendamiento: consistía en que existía un arrendatario que alquila las
tierras, hace cosechas por un tiempo y luego deja el campo sembrado para las
vacas con alfalfa debido al incremento de la exportación de carnes de buena
calidad. Cuyas condiciones de ese arrendamiento las ponían los terratenientes.
El ferrocarril disminuyó el costo de los fletes, facilitó la movilización de la
mano de obra y difundió a lo largo de las vías el cultivo de cereales, en
especial el trigo. Fueron apareciendo ciudades, pueblos y obras de
infraestructura que facilitaron la comercialización de los granos.
El aumento de la producción agrícola sólo sirvió para cubrir la demanda
interna pero luego comenzaron a existir saldos exportables y en poco tiempo la
Arg. Se transformó en una gran exportadora de cereales.
Lo que hace posible estas exportaciones y las vuelve competitivas son los
bajos costos de producción, logrados por la disminución de los gastos de
transporte, la amplia disponibilidad de tierras y el arrendamiento. La crisis
agrícola europea y la desvalorización del papel moneda también jugaron un rol
significativo.
El proceso de mecanización del agro contribuyó a suplantar la falta de brazos
y a aumentar el tamaño de las chacras. Las importaciones de maquinaria
agrícola cubrieron esta necesidad ante la carencia de una producción nacional.
Ganadería
La evolución de la ganadería reconoce 3 momentos fundamentales: la
“desmerinizacion” del ganado lanar, el comienzo del refinamiento del vacuno y
la exportación de ganado en pie y, la exportación de carnes vacunas
congeladas y enfriadas. La aparición del frigorífico fue la causa principal de
estos cambios.
Arg inició el llamado “ciclo de la lana”: basado en el reemplazo de la estancia
vacuna tradicional (productora de cuero y tasajo para la exportación) por la
estancia lanar y el predominio de la producción y exportación de lanas. La
industrialización de Ingl, Francia, Belgica y otros países del continente
incremento la demanda europea de lanas impulsando en Arg el desarrollo
ovino. Así, las lanas se convirtieron en el principal producto de exportación.
El éxito que tuvieron los primeros intentos para conservar las carnes en las
cámaras frigoríficas y la creación de establecimientos destinados a la
preparación de carnes congeladas produjo efectos casi inmediatos sobre la
producción ovina iniciando el proceso de “desmerinizacion”, que consistió en el
mestizaje del merino con animales de mejor rendimiento cárneo, o en su
reemplazo por otras razas con esa cualidad.
En esta etapa, el frigorífico prefiere la carne ovina, más pequeña y refinada,
a la vacuna. Pero el ganado vacuno encontró una salida gracias al desarrollo de
la exportación de ganado a Europa, para lo cual tenía ventajas sobre el ovino al
ser de traslado mas fácil y de mejor rendimiento. La disminución de los costos
de transporte, terrestre y marítimos hicieron factible esa exportación. Pero esto
obedeció también al mejoramiento del plantel ganadero con la introducción de
otros animales de calidad que contribuyeron a adaptar la carne vacuna al
gusto europeo.
El desarrollo de la producción agropecuaria tendría así por base la
concentración de la propiedad de la tierra y la explotación extensiva, la mejora
de los predios gracias al cultivos de los granos y alfalfa, el refinamiento del
ganado vacuno, y la aparición de la moderna industria frigorífica.
8) Antes de 1880 la industria Arg era muy rudimentaria. Los establecimientos
fabriles propiamente dichos prácticamente no existían. Pero una naciente
conciencia industrial comenzaba a revelarse. La crisis mundial de 1873, que
repercute enseguida en Argentina, puso de manifiesto la fragilidad del proceso
de apertura externa impulsado por el gobierno de Mitre y basado en el ingreso
de capitales extranjeros, y en el incremento de las exportaciones laneras. La
discusión de la Ley de Aduanas puso en discusión el modelo de país que se
quería; o una mayor integración a los mercados mundiales sobre la base del
desarrollo exclusivo de la economía agroexportadora o una estructura donde
pudiera existir una industria nacional que hiciera posible la aceleración del
crecimiento económico.
La ley de Aduanas establece derechos aduaneros del 40% para diversos
artículos de consumo y del 235% para muchos artículos alimenticios; medidas
que estimularon la creación o desarrollo de algunos importantes
establecimientos fabriles.
Esta Ley presentaba muchas incongruencias, como en el caso de los motores
diesel, que se fabricaban en el país en pequeña escala y pagaban un arancel
20 veces menor que el de los motores de combustión interna que se
importaban en su totalidad, o como en el de la hojalata, bronce, zinc y acero
que abonaban el 25% mientras que muchos artefactos fabricados con esos
metales no pagaban derechos. Estos y otros ejemplos fueron invocados como
un testimonio del denominado “proteccionismo al revés” que habría regido la
política aduanera y desalentado el desarrollo industrial.
Otro problema que contribuyó a agravar la desprotección fue que la Ley
arancelaria de 1906 fijaba un valor para cada producto que solo podría ser
modificado por otra ley, lo que provocó una seria reducción de las tarifas.
En un principio, la mayoría de las industrias existentes no eran verdaderas
fábricas sino talleres basados en el trabajo manual, con escasa o nula
mecanización. La mayoría de ellos se dedicaban a la transformación de
materias primas producidas en el país, y predominaban en especial las
industrias del cuero y de la madera. Prácticamente no existía una industria
textil y la metalúrgica, basada en talleres mecánicos, herrerías y hojalaterías.
En el interior existían industrias alimentarias basadas en productos locales
como el azúcar, la harina y diversos licores y en esos años se creaban los
primeros frigoríficos.
Más tarde, en Censo de 1914 muestra algunos progresos en ciertas ramas:
Las industrias alimentarias experimentaron un crecimiento significativo en
especial en el nro de establecimientos, la fuerza motriz y el personal empleado.
El desarrollo de esta rama se debió a la consolidación de la industria frigorífica
y a la aparición de establecimientos dedicados a la fabricación de lácteos,
galletitas, bebidas, etc., que satisfacían las necesidades del creciente mercado
interno.
En las demás ramas la evolución es más lenta. Las industrias mecánicas
progresaron por el desarrollo de los talleres ferroviarios, que ocupaban
numeroso personal y se distribuían en buena parte del territorio nacional. El
avance de la edificación, vías de comunicación y otras obras de mejoramientos
e infraestructura, explica los cambios en el sector de la construcción.
En la industria metalúrgica seguían predominando los pequeños
establecimientos y su grado de mecanización era muy bajo.
La industria textil tenía muy escasa envergadura, al punto de abastecer solo
el 23% del consumo interno. Se debía más que a problemas técnicos o
económicos a la fuerte competencia de los textiles importados y a la acción de
los intereses ligados a esa importación.
9) En un principio, en el sistema monetario argentino, las provincias usaban
monedas distintas de oro y plata que tomaban valores diferentes. También
existían monedas de papel, convertibles o inconvertibles, emitidas por el Banco
Nacional, provinciales o privados.
En 1867 se estableció en Bs As una Oficina de Cambios anexa al Banco de la
Provincia, cuya función era la de dar papel por oro y oro por papel.
En 1875 para terminar con el problema de la falta de una moneda uniforme,
el presidente Avellaneda creó una unidad monetaria de oro llamada “peso
fuerte”. Pero la falta de metálico impidió que esta medida pudiera concretarse.
Los intentos por establecer un sistema monetario nacional continuaron. Una
vez consolidado el país políticamente bajo el gobierno de Roca se dictó una Ley
con la intención de proporcionar una moneda nacional que circulara por todo el
país y con la cual se prohibía la circulación de monedas extranjeras. Además se
aseguraba el reemplazo de los billetes papel en circulación por los nuevos
billetes metálicos a la par con el oro. Los antiguos billetes habían sido retirados
de circulación y los nuevos eran convertibles en oro sin ninguna restricción,
pero la base no eran ahorros acumulados, sino el oro que entraba al país, o se
pensaba que iba a entrar, por los empréstitos extranjeros.
Por otra parte, la ausencia de un marco institucional solido en el terreno
financiero y bancario, y la existencia de intereses poderosos, como los
productores agropecuarios y los exportadores que no veían con agrado la
estabilidad de la tasa de cambio y preferían un papel moneda devaluado,
contribuía a impedir el éxito de una política monetaria basada en la plena
vigencia del patrón oro y la libre convertibilidad.
Luego, van a existir en Argentina dos sistemas monetarios: el papel moneda
nacional que se usaba internamente y el oro o libra esterlina, que se aplicaba a
las transacciones internacionales. Se iniciaba un periodo caracterizado por la
elevación de la circulación monetaria.
Se aplica una nueva Ley que establecía que cualquier banco estaba
autorizado a emitir billetes con la condición de realizar un depósito en oro en
las arcas del Tesoro Nacional por el cual recibiría una cantidad de bonos que
constituiría el respaldo de su emisión. De esta forma se procuraba tener la
suficiente cantidad de oro para hacer frente a los pagos de la creciente deuda
externa. Pero la solución dio lugar a una gran fiebre especulativa ya que
muchos bancos que no disponían de oro, comenzaron a vender bonos propios
en el exterior para obtenerlo y poder emitir.
Es decir, que mientras que el gobierno recibía oro del sistema bancario para
pagar la deuda externa, los bancos se endeudaban en el exterior provocando
un aumento de aquella: los préstamos se pagaban con nuevos préstamos.
Las exportaciones no lograron expandirse en la medida suficiente como
deseaban para hacer frente a los servicios de la deuda. En Arg los principales
bancos como el Banco Hipotecario y el Banco Nacional, se declararon en
bancarrota y cuando fracasaron los intentos para salvarlos entraron en
liquidación.
El gobierno argentino se vio obligado a llegar a un acuerdo con sus
acreedores extranjeros, en el cual el país quedaba dispensado de la necesidad
de remitir fondos a Europa por 3 años. Además, por 3 años el gobierno no
podía solicitar nuevos préstamos en el exterior.
Sin embargo, desde 1891 la Balanza Comercial comenzó a hacerse positiva
debido a la fuerte disminución de las importaciones pero también gracias al
aumento de las exportaciones.
10) década del 80 significó un punto de inflexión y el crecimiento se acelero en
esos años. Los indicadores utilizados no crecen en forma pareja. La expansión
de las vías férreas se realiza en dos periodos (1882-92 y 1905-14). Las
importaciones pegan un salto a partir del 80, en tanto que las exportaciones se
desarrollan al comenzar la década siguiente. El incremento de la población, en
especial de la población activa que dependía mas que nada de la inmigración,
tampoco se produjo en forma homogénea sino al vaivén de las oleadas
migratorias.
La “crisis de crecimiento” de los 80 y la expansión que se produjo revelaron
los limites del modelo agroexportador: ese crecimiento tenia por base el
endeudamiento externo y un continuo balance favorable del comercio exterior;
cualquier alteración en el sector externo o en la estructura productiva podría
producir rápidamente una interrupción del proceso.
Luego de 1908 la Arg era un país estatico, donde la zona pampeana habia
llegado a un limite en cuanto a sus posibilidades de expandir la producción
incrementando el area bajo explotación y Gran Bretaña entraba en un cono de
sombras como proveedora de los capitales y las manufacturas que nuestra
economía requería. La 1ra Guerra Mundial significo un primer toque de alerta
en cuanto a las perspectivas de continuidad del modelo y la crisis del 30 marco
su ocaso definitivo.
En el sector agropecuario los pilares básicos fueron la industria de la
construcción y los ferrocarriles.
Puede percibirse el predominio del sector rural, la débil participación de la
industria manufacturera y la notoria hipertrofia del sector terciario. Argentina
era un país que miraba hacia afuera, basado en el desarrollo de sus
supuestamente inagotables riquezas naturales –aprovechando su mejor
recurso, la fértil tierra de la pampa húmeda- captador de todo aquello que el
exterior podía darle (capitales, m.de obra y hasta ideologías), importante
proveedor de alimentos en los mercados mundiales y comprador de cualquier
bien que la estructura productiva existente y el consumo de habitantes
requerían. En otros términos, un país dependiente de las grandes potencias
industrializadas, sobre todo europeas, y con una base productiva unilateral y
precaria.
1) Tanto Alvear como Yrigoyen tenían el doble desafío de poner en pie las
instituciones democráticas y conducir, por los nuevos canales de
negociación y representación, las demandas de reforma de la sociedad,
que el radicalismo de alguna manera había asumido.
Esta orientación reformista no era propia solo de Arg.: En uruguay y Chile lo
habían encarado los presidentes, y en Mexico, con alternativas más drásticas,
habían emprendido una profunda transformación del Estado x la sociedad;
Mientras que otros movimientos reformistas, como el APRA peruano no
llegaron a triunfos, pero conmovieron a algunos regímenes oligárquicos o
dictatoriales que en general predominaban en A. Latina. Todos los reclamos de
participación política se relacionaban con mejoras en la situación de los
distintos sectores sociales.
Ese mandato y voluntad reformista, que caracterizó al radicalismo, se
desarrolla en circunstancias distintas y complejas. La 1ra guerra mundial
modificó todos los datos de la realidad: la economía, la sociedad, la política y la
cultura. Constituyó un desafío difícil de resolver. Yrigoyen en este contexto
mantiene neutralidad que si no lo enemistaba de los aliados europeos, lo
distanciaba de EE.UU.
Durante la década del 20, en América Latina hay un sentimiento creciente
nacionalista, ven a EE.UU. como una amenaza e Yrigoyen adopta esa idea.
América Latina miraba siempre a Europa, pero en la 1ra guerra mundial
empieza a mirar hacia adentro. Se empieza a gestar un sentimiento
nacionalista anti- imperialista. Este sentimiento anti-norteamericano venía
creciendo desde 1898, cuando surgieron los ideales socialistas por la situación
cubana.
Las condiciones que ya eran complicadas con el estallido de la 1era guerra
mundial, se agravaron x las dificultades del comercio exterior y la retracción de
los capitales: en las ciudades se sintió la inflación, el retraso de los salarios
reales y la fuerte desocupación.
Con el arribo de la inmigración hay un cambio cultural.
Se genera así un clima de conflictividad. Yrigoyen se acercó a los sindicatos
pero la actuación del Estado para regular los conflictos va a ser selectiva,
media en aquellos conflictos que le van a dar votos, y en este sentido, por
ejemplo, no dialogaba con los sectores anarquistas.
2) Tras la Rev. Soviética en 1917 y luego los movimientos revolucionarios
que estallaron apenas terminó la guerra en Alemania, Italia y Hungria
(Rev. Inminente), se empezaron a desarrollar huelgas de 1917 a 1918
impulsadas por los grandes gremios de transporte cuya fuerza se
incrementaba x su capacidad de paralizar el embarque de cosechas.
En este contexto, Yrigoyen abandonó la política de represión y obligó a las
compañías marítimas y ferroviarias a aceptar su arbitraje. Coincidieron un
actitud sindical que combinaba la confrontación y negociación y otra del
gobierno que creaba un nuevo equilibrio y se colocaba en posición de árbitro.
Sin embargo, la predisposición negociadora del gobierno no se manifestó en
todos los casos y parecía dirigirse especialmente a los trabajadores de capital
potenciales votantes de la UCR, pero no se extendía a los sindicatos (mayoría
extranjeros) ni a los trabajadores de la prov. De Bs. As.
Más adelante los métodos de represión se extendieron para los ferroviarios
cuando pasaron los límites de prudencia y amenazó el vital embarque de la
cosecha.
Tanto sindicalistas como el gob. Transitaban un equilibrio muy estrecho, que la
propia dinámica del conflicto termino x clausurar en 1919, cuando la ola
huelguista llegó a su culminación.
Luego hubo una protesta en un establecimiento metalúrgico, y la policía
reprimió, dejando muertos de ambas partes (obreros y policías). A raíz de esto,
una sucesión de breves revueltas no articuladas, espontaneas y sin objetivos
precisos hicieron q durante una semana la ciudad fuera tierra de nadie, hasta
que intervino el ejército con represión. El gobierno pudo apelar a sus contactos
con socialistas y dirigentes de la FORA para acordar el fin de la huelga.
A lo largo de 1919, se produjeron infinidad de movimientos, que fueron
protagonizados por trabajadores no agremiados pertenecientes a actividades
industriales y de servicios, llaman a la huelga general que ayudaba a la
unificación e identificación, y hubo un nuevo pico de movilizaciones rurales.
Los chacarreros, coincidieron con los jornaleros de los campos y pueblos
rurales, generalmente movilizados x anarquistas. Ante esto el gob. Fue poco
sensible con los reclamos y en 1919 encaró una fuerte represión.
En 1919 se marca una inflexión en la política gubernamentar con las protestas:
En la acción de Yrigoyen se ve una actitud más sensible a los problemas
sociales y una idea del papel arbitral que debía asumir el edo. Pero esta actitud
estuvo lejos de materializarse en instrumentos institucionales, pese a la actitud
negociadora de los sindicatos.
El poder ejecutivo no supo idear mecanismos para mejorar las condiciones.
Tampoco el congreso considero intervenir, pero si con los chacarreros, ya que
en 1921, sancionó una ley de arredramientos que tenía en cuanta la mayoría
de sus reclamos acerca de contratos, y sirvió para acallar los reclamos de
quienes se consideraban cada vez más pequeños empresarios rurales.
Luego de la experiencia de 1919, el gobierno retomo los métodos clásicos de
represión, con la colaboración de la liga patriótica.
La ola huelguística se expandió a zonas más alejadas, e hizo estallar en 1919 y
1921 fuertes movimientos huelguísticos. A raíz de esto el gobierno decidió que
fueran sometidos a métodos sangrientos de ejercicio militar.
1) Con la 1° guerra mundial y con la crisis de 1930 terminó una
etapa de la economía argentina: la del crecimiento relativamente fácil
sobre rumbos claros. La vulnerabilidad de la economía argentina cuyos
nervios motores eran las exportaciones, el ingreso de capitales, de mano
de obra y la expansión de la frontera agraria. La guerra afectó tanto las
cantidades como los precios de las exportaciones e inició una tendencia
a la declinación de los términos de intercambio. Las exportaciones
agrícolas sufrieron primero el problema de la falta de trasporte, pero
acabado el conflicto se planteó otro más grave: el exceso de oferta en
todo el mundo y la existencia de excedentes agrícolas permanentes, que
impulsó a cada gobierno a proteger a los agricultores.
Hubo una caída de las exportaciones ganaderas en 1921.
El país experimentó con violencia los efectos de la coyuntura europea: vivió
una fuerte crisis entre 1913 y 1917, se recuperó entre ese año y 1921,
especialmente porque regularizó su comercio de guerra, sufrió entre 1921 y
1924 el sacudón de la reconversión de posguerra y conoció un periodo de
tranquilidad durante los “años dorados” hasta 1929, que sin embargo bastó
para dar el tono general al periodo.
La fuerte presencia de EEUU. En 1920 se manifestó por un fuerte impulso
exportador de automóviles, camiones y neumáticos, para los que la argentina
se convirtió en uno de los principales clientes. Por otra parte, la vieja relación
especial con gran Bretaña se sostenía sobre las bases mínimas: las compras
británicas de cereales y carnes, que pagaban con los beneficios obtenidos por
la venta de material ferroviario, carbón, textiles y con las ganancias que daban
los ferrocarriles y otras empresas de servicios. Pero gran Bretaña no podría
satisfacer las nuevas demandas del consumo y el capital británico era incapaz
de promover las transformaciones que impulsaba el norteamericano. Pero, a la
vez, la arg. Carecía de compradores alternativos particularmente para la carne
después de 1921. Así la argentina era parte de un triángulo económico
mundial.
2) Según el autor, describa los aspectos principales del
gobierno de Alvear
La llegada al gobierno de Alvear en 1922, tranquilizo a las clases propietarias.
La mayoría volvió a confiar en la democracia liberal y patricia.
Fueron unificadas todas las instituciones católicas que actuaban en la
sociedad. Dentro de la unión popular católica argentina, un ejército laico
comandado por los obispos y los curas párrocos, organizaron una guerra contra
el socialismo. La iglesia clausuraba la posibilidad de crear un partido político. El
ejército empezó a interesarse en la marcha de los asuntos políticos.
Las direcciones y orientaciones más fuertes correspondían a los sindicalistas y
a los socialistas, ambos bregaban por reformas en un orden social, y por
encontrar mecanismos y ámbitos de negociación de conflictos. Los sindicalistas
apostaron a la negociación entre los sindicatos y el Estado. El partido socialista
estaba lejos de posiciones de ruptura y tenía fuerza electoral en capital. Los
socialistas apostaron a la acción legislativa y a la posibilidad de crear en el
congreso un ámbito de representación. Pero tenían una incapacidad para
establecer alianzas y acuerdos, por esta razón, no lograron dar a una fuerza
política vigorosa. Su otra tarea era la ilustración de la clase obrera, que se
esclarecería en contacto con la ciencia.
El fin de la lucha gremial, la reducción dela sindicalización y el debilitamiento
de la Unión Sindical Argentina dan testimonio de la atenuación de los conflictos
sociales. La unión ferroviaria marco la agenda sindical: Negoció con las
autoridades y descartó la huelga como instrumento y obtuvo éxitos
sustanciales. El estado avanzó en la idea de una legislación social, que
reconocía al actor gremial, con regímenes jubilatorios para empleados de
comercio y ferroviarios, regulación de trabajo de menores y mujeres y
establecimiento del 1° de mayo como feriado nacional.
La soc. arg. Venia experimentando cambios desde la guerra y que explican el
apaciguamiento, aunque luego del conflicto se reanudó la inmigración, la
población ya se había nacionalizado.
Se produce una expansión de la cultura letrada y forma parte del proceso de
movilidad social de una sociedad que expansiva y de oportunidades. Fruto de
ella eran los sectores medios: los chacarreros establecidos, pequeños
empresarios rurales, o los pequeños comerciantes o industriales urbanos. Junto
a ellos una nube de empleados, profesionales, maestras o doctores.
Las universidades que tenían el objetivo de formar futuros profesionales, eran
por entonces socialmente elitistas y académicamente escolásticas. Se produjo
una gran agitación estudiantil. El reformismo universitario fue un sentimiento y
expresión de un movimiento de apertura social e intelectual que servía de
aglutinante de ideologías más diversas.
Hubo una fuerte corriente reformista, confluyeron en ella diversas experiencias
de cooperación y cambio, que se alimentaron con las corrientes de
pensamiento social y progresista de Europa y dieron paso a una actitud
reflexiva acerca de la sociedad y sus problemas.
La aspiración al ascenso individual y a la reforma social son solo un aspecto de
esa nueva cultura que caracteriza a los sectores populares y medios.
Hubo cambios en las formas de vida. Así es que el acceso a la vivienda propia
cambio de idea del hogar y ubicó a la mujer en el centro de la familia. Por un
movimiento complementario las hijas aspiraron a trabajar, en una tienda u
oficina, a estudiar y también a una creciente libertad sexual. Una cierta holgura
económica y progresiva reducción de la jornada de trabajo.
El teatro había llegado a su apogeo ya hacia 1910.
Así los nuevos medios de comunicación multiplicaban su influencia sobre las
formas de vida y sobre las actitudes y valores de esta sociedad expansiva.
También operaron sobre la sensibilidad deportiva.
La tendencia a la homogeneización de la sociedad, se acompaño de un proceso
de diferenciación de funciones. Una de sus manifestaciones fue la constitución
de un mundo intelectual y artístico que definió una forma de funcionamiento
que le era propia.
3) Describa el contexto político y económico que atravesó el
segundo gobierno de Yrigoyen y las causas de su derrocamiento
en 1930
Desde 1926, se desarrolló la discusión sobre la vuelta de Yrigoyen a todos los
ámbitos de la sociedad. El yrigoyenismo impulsado por nuevo dirigentes,
desarrollo su red de comités ampliadamente y fortaleció la imagen mítica del
caudillo. Utilizó la consigna de derrotar al “contubernio”, la bandera de
nacionalización del petróleo. En los años anteriores el tema petróleo se había
incluido en la agenda pública y la presencia extranjera era asociada con su
manifestación más agresiva: la norteamericana de la Estándar Oil. El petróleo
aparecía como la panacea que aseguraría la vuelta a la prosperidad, una
fuente de rentas tan abundante que con ellas podría asegurarse a la vez la
prosperidad de los sectores propietarios, del estado y de la sociedad. El
proyecto se aprueba en diputados y se frena en la cámara de senadores. Pero
mientras Yrigoyen se encarga de otro tema que afectaba su relación con los
sectores propietarios, firma un acuerdo con los británicos asegurándoles el
suministro de materiales a los ferrocarriles del estado, así como un arancel
preferencial a la seda artificial, a cambio de la garantía de que seguirían
comprando la carne argentina. Este tratado muestra a Yrigoyen fuerte entre la
elite, de robustecer las relaciones bilaterales con gran Bretaña, en desmedro
de las nuevas con eeuu.
Pero no bastaba frente al conflicto político. Lanzado a conquistar el último
baluarte el gob. Apeló a los clásicos mecanismos: amplio el reparto de puestos
públicos, así saldaba una deuda con el aparato partidario, y la intervención a
gobiernos provinciales.
En algunas provincias, se registraron hechos de violencia, como la muerte del
caudillo Carlos Washington Lencinas, un caudillo mendocino. Es probable que
la oposición asustada x los resultados electorales ya hubiera desesperado de
desalojar a Yrigoyen por métodos institucionales. La caída de las exportaciones
y el retiro de los fondos norteamericanos afectaron a las empresas ferroviarias
y marítimas, vinculadas con el comercio exterior y también el gobierno. La
fuerte inflación, las reducciones de sueldos y despidos, se reflejaron en los
resultados electorales: en marzo de 1930, y con el apoyo de la oposición toda,
los socialistas independientes ganaron en la capital tanto a radicales como
socialistas. Sin embargo a esa altura, todas las voces de la oposición desde la
crítica, a la liga republicana a los estudiantes universitarios reformistas,
clamaban por la caída del gobierno. La sensibilidad atribuida al presidente y su
lentitud para resolver problemas, así como la pública lucha por su sucesión
daba un nuevo y contunde argumento a los opositores.
Las discusiones giraban acerca de si buscarían una solución institucional o
apelarían a un golpe de intervención militar, hasta que se ponen de acuerdo
ambos sectores –los dirigentes políticos que seguían a Gral. Justo y otra por los
ideólogos nacionalistas que estaban con uriburu- y se produjo el golpe de
estado el 6 de septiembre de 1930. La resistencia de las instituciones fue casi
nula pero también las fuerzas movilizadas por los sublevados fueron escasas,
igualmente fue escasa la movilización a favor del presidente.
JUAN CARLOS KOROL LA ECONOMÍA
Entre fines del XIX y el ’30, hay altas tasas de crecimiento económico,
impulsado por las exportaciones; además hay una mejora en la calidad de
vida.
Con la crisis del ’29 la economía cambia su orientación, apuntando al desarrollo
industrial para el mercado interno. En dicho proceso interviene el Estado. La
Argentina agroexportadora se transformó en un país en el que efectivamente
la industria se convirtió en el principal motor de la economía consolidándose
un proyecto autárquico volcado hacia adentro.
La crisis implicó una disminución del comercio mundial y una retracción de la
inversión de capital fuera de los países que tradicionalmente invertían más
allá de sus fronteras, además hay alta desocupación. Los distintos países
responderían cerrando sus economías, imponiendo barreras proteccionistas,
además se abandona el patrón oro.
En la Argentina, la crisis se sintió en la caída de los valores de las
exportaciones tradicionales de carne y cereales, y en la obtención de divisas
para pagar las importaciones. El Estado buscará otras formas de
financiamiento, buscaría bajar las importaciones. La desocupación sería una de
las consecuencias más evidentes de la crisis.
Se buscarían fuentes de financiamiento que no estuvieran ligadas al comercio
exterior, hasta el mantenimiento de la inconvertibilidad monetaria. Se crea el
Banco Central, se disminuyen las importaciones, etc. Estas medidas (las
proteccionistas) se daban en el contexto del golpe de Estado que derrocó a
Yrigoyen en septiembre del ’30, el cual había colocado en el poder al general
Uriburu y en el ’32, a partir de “elecciones” en las que el radicalismo se
abstuvo de participar, el general Justo se hace con la presidencia.
Resumiendo, la baja del precio de las exportaciones, sumado al pago de la
deuda pública, y sumado a las pocas inversiones de capital, producirían saldos
negativos en el balance de pagos, además de la desocupación anteriormente
mencionada (28%). Estos saldos negativos se comenzarían a revertir a mitad
de la década.
Desde fines del XIX, la expansión de la economía argentina dependía de la
inversión de GB. Luego de la 1° GM, pierde el papel hegemónico y compiten
con USA (se refiere a GB).
Los productos industriales norteamericanos, ya sean los autos o la maquinaría
agrícola se adaptaban mejor a las necesidades de la Argentina, pero
paradójicamente la producción agraria yanqui competía con la argentina.
A fines del ’29, Argentina se comprometía a comprar en el mercado inglés,
durante dos años, los materiales e insumos para los ferrocarriles y Gb debería
seguir adquiriendo la carne argentina, este es un precedente del pacto Roca-
Runciman.
En 1933, se firma el pacto Roca-Runciman, en el cual se establecía que GB se
comprometía a permitir
la importación de la misma cantidad de carne que en el ’32, a menos que se
produjera una nueva y sigfnificaiva baja de sus precios en GB. También
establecía que el pool de frigoríficos anglonorteamericanos se reservaría el
85% de las exportaciones de carne, mientras el 15% restante sería cubierto
con la producción de los frigoríficos argentinos. A cambio de esto Argentina se
comprometía a su vez a reducir las tarifas de importaciones de varios
productos británicos al nivel que tenían en ’30 y no establecerlas en algunos
otros como el carbón. Dicho pacto tenía vigencias de tres años y en el ’36 el
tratado Eden-Malbrán se extienden dichas pautas. Como consecuencia de
ambos tratados, las exportaciones argentinas de carne se mantuvieron en un
gran porcentaje.
Una de las consecuencias del tratado Roca-Runciman consistía, en las
prioridades que se les otorgaba a las empresas británicas. Pero el sistema
también restringia importaciones e impulsaba la producción local de productos
que antes se adquirían afuera.
En el ’40, el “Plan Pinedo” viene a ser un plan de “reactivación económica”,
presentado por Federico
Pinedo al Congreso, aunque el plan nunca se aprobó. El plan consistía en el
fomento de la construcción y el sostén de los precios agrícolas, en especial el
del maíz. Además del impulso al a industrialización de las “industrias
naturales”, para el mercado interno. El proyecto se basaba en la convicción de
que las exportaciones agropecuarias seguirían siendo el motor principal de la
economía del país. Algunas de estas medidas se implementarían más
adelante, entre ellas la creación del Banco Industrial en ’44, y la regulación del
comercio exterior con el IAPI en el ’46.
Ante la crisis, Uriburu responde con políticas ortodoxas:
Reducir los gastos del Estado (baja de salarios de empleados públicos)
Reducir el gasto público (reducción de obras públicas)
Creación de Nuevos impuestos
El mayor problema en el presupuesto era la deuda pública. La Argentina no
suspendería los pagos, mientras que el resto de los países latinoamericanos lo
harían.
A partir de ’33, cuando Pinedo asumió como ministro de Hacienda, las medidas
tomadas en general profundizaron las anteriores, aunque también innovó. Se
crea el BC, (se encargaría de establecer el ivel
del circulante, supervisar el sistema bancario) el Estado intervendría más en el
comercio exterior,
sosteniendo los precios agropecuarios. La conducción del BC recayó en un
directorio de catorce miembros, de los cuales el gobierno nobraba tres,
incluyendo el presidente y el vice, los bancos, siete y otrs sectores de la
economía, independientes del bancario, cuatro. Prebisch sería el director del
banco. Se creó un impuesto que Yrigoyen anteriormente había intentado
imponer. Con este el Estado deja de
depender de los recursos obtenidos del comercio exterior. Dentro de las
medidas innovadores, podemos destacar el control de cambios y la
devaluación del peso, así como un sistema de restricciones a las
importaciones. Además se crean las juntas reguladoras. A partir de ’33 se
fueron organizando la Junta
Reguladora de Granos, la Junta Nacional de Carnes, la Junta Reguladora de
Vinos. El gobierno a través de estas medidas, logró mejorar las cuentas
públicas y consiguió que parte de la deuda externa fuera repatriada y pasara a
estar en pesos.
En el ’34 suben las exportaciones y mejoran los precios, pero en el ’37, la
economía entra en recesión y caen las exportaciones, comienzan problemas en
la balanza de pagos, y se recurre a la devaluación.
La guerra
Con el comienzo de la guerra en Europa, la Argentina comienza a sufrir las
divisiones entre los defensores de la neutralidad y los partidarios de los
aliados, decidió declarar la guerra al Eje poco antes del fin del conflicto. El
gobierno militar del golpe del ’43, debió soportar las continuas presiones de
USA, siendo estas las que llevaron a la declaración de guerra.
En el periodo de postguerra, se implanta el Plan Marshall, el cual consiste en
limitaciones impuestas a los países europeos beneficiarios de la ayuda
norteamericana, dichos fondos se utilizaron para comprar productos
agropecuarios argentinos.
La guerra produjo que la economía creciera, teniendo a fines del conflicto un
saldo de libras a favor. De todas formas por ese entonces, el crecimiento ya no
estaba basado en las exportaciones agropecuarias, sino en el desarrollo
industrial.
La industria argentina había crecido bajo el impulso de la economía
exportadora. Desde fines del siglo XIX se había desarrollado una industria
moderna ligada a la elaboración de productos agropecuarios de exportación,
ya sean los frigoríficos o los molinos harineros.
La textil fue durante la guerra, la rama industrial que más creció, por la
expansión del cultivo del algodón. De todas formas también comenzó a tener
importancia la metalmecánica, que incluía talleres de reparaciones y
fabricación de artefactos eléctricos. Parte del crecimiento industrial se
relacionó con la instalación de empresas norteamericanas, en especial en la
textil, las fábricas de neumáticos y de productos eléctricos.
El producto del crecimiento industrial al finalizar la guerra tendría como destino
principal el mercado interno. LA importancia de ese mercado también creció
para los productos agropecuarios, en la medida que aumentaba la población
urbana y por lo tanto disminuían las exportaciones agropecuarias, cuya
producción había comenzado un proceso de estancamiento que se reflejaba en
su participación en el PBI.
Balance
La Argentina se recuperó de la depresión relativamente rápido y comenzó
durante la crisis y con mayor fuerza durante la guerra, un proceso de
crecimiento basado en la industria. Este fue el resultado de las políticas de
aplicadas por el Estado durante la década del ’30 y la siguiente.
Con Pinedo se aplicarían medidas anticíclicas, apuntando a mantener la
relación con GB, controlando el control de cambios para desarrollar una
política de apoo a la industria, obras púbicas, bajando el desempleo y
atrayendo capitales extranjeros. Las políticas propuestas por Pinedo, buscarían
impulsar las industrias y que pudieran competir en el mercado internacional.
Al mismo tiempo proponía una estrategia de acercamiento a USA, aunque
tratando de no enfrentarse con la elite ganadera. Éste sería el significado del
plan presentado por el ministro en 1940.
Con Perón, la estrategia era diferente, se apuntaba a asegurar el pleno empleo
y el mejoramiento de los salarios reales. Se apoyaría la industria existente así
como el desarrollo del mercado interno y la industrialización por sustitución de
importaciones. A estos objetivos se sumaron los del Ejército: la meta era
construir una industria pesada que permitiera cubrir las necesidades de
armamento de las FA y asegurara la defensa nacional.
De todas formas, la recuperación se inició a partir de ’34 como consecuencia
de un aumento de las exportaciones y de un mejoramiento de los términos del
intercambio. Ante la crisis, las políticas de los gobiernos argentinos, siguieron
una línea económicamente ortodoxa: el equilibrio del presupuesto, el servicio
de la deuda externa y el privilegio a la defensa del mercado de carnes.