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Conceptos de Ley
El término Ley proviene de la voz romana Lex, que significa norma escrita, por
contraposición a la norma consuetudinaria, formada a través de la repetición de
formas de conductas, denominadas Mores. Con respecto de la proveniencia de la
locución lex no hay concordancia en los autores, pues algunos derivan del verbo
ligo-ligare, que significa ligar, en razón de que la ley establece un ligamen de los
hombres a su contenido, dado que están obligados a cumplirla, mientras otros, los
más, creen que deriva del latín lego-legere que significa leer.
En sentido jurídico bajo dos aspectos diferentes: Ley "latu sensu" -sentido amplio-
como categoría de la norma jurídica, y Ley "sctritu sensu" –sentido estricto- ,
como producto de la actividad legislativa.
2. Generalidades de la ley. "Análisis"
Primeramente habría que distinguir entre Constitución y Ley, para señalar lo que
en realidad son leyes de diferente rango, una de las cuales es fundamental con
respecto a la validez de la otra. La diferencia hace mención a leyes
constitucionales, por una parte, o más exactamente leyes fundamentales, y la otra,
a las llamadas leyes generales.
La constitución es la ley por excelencia, la ley fundamental de las otras leyes. Es
decir es de fundamento de toda organización legal: es el punto de referencia que
sustenta la validez de todas las normas que rigen las actividades de particulares y
organismos oficiales en la colectividad en la cual rige.
Esto plantea el problema del control constitucional, porque cuando las leyes no se
ajustan a los preceptos constitucionales, pueden ser declaradas nulas por los
organismos de control creados por el Estado para este fin.
Conclusiones
La Ley, tanto en sentido amplio como en un sentido estricto, es necesaria para la
convivencia humana; ya que no se concibe la subsistencia de una sociedad
organizada carente de normas jurídica, cualquiera sea la institución que la
establezca; si bien seria discutible hasta que punto podría ser denominada ley la
mera imposición por la violencia de una conducta determinada por la voluntad de
quienes ostentan la fuerza, y en contra de la de quienes la padecen.
En propugna del Bienestar de los venezolanos, se crean las LEYES necesarias
para desarrollo social y espiritual, todo ello en procura de la igualdad de
oportunidades para que todos los ciudadanos puedan desarrollar libremente
su personalidad, dirigir su destino, disfrutar los derechos humanos y buscar su
felicidad.
Los principios de solidaridad social y del bien común conducen al establecimiento
de ese Estado social, sometido a la Constitución y a la Ley, convirtiéndolo,
entonces, en un Estado de Derecho necesario para el bien común.
Cabe destacar que la Ley debe ser una expresión de la voluntad general, de la
voluntad legislativa abstractamente considerada, y no de la arbitrariedad de
determinadas personas.
.1
El derecho
es un orden normativo2 e institucional de la conducta humana en sociedad inspirado en
postulados de justicia y certeza jurídica.3 Su carácter y contenido está basado en las
relaciones sociales en un determinado lugar y tiempo. El concepto del derecho es estudiado
por la filosofía del derecho. A lo largo de la historia juristas, filósofos y teóricos del derecho
han propuesto definiciones alternativas y distintas teorías jurídicas sin que exista consenso
sobre su definición.
Definición de Derecho
El derecho es el conjunto de leyes, resoluciones, reglamentos creadas por un Estado, que pueden
tener un carácter permanente y obligatorio de acuerdo a la necesidad de cada una y que son de
estricto cumplimiento por TODAS las personas que habitan en esa comunidad para garantizar la
buena convivencia social entre estas y que la resolución de los conflictos de tipo interpersonal
lleguen a buen puerto
.
Que es el Derecho?
El Derecho es el conjunto de normas jurídicas generales positivas que surgen de la sociedad como
un producto cultural generada dentro de leyes y que tienen la finalidad de regular la convivencia
entre los miembros de esa sociedad—las personas—y de estos con el Estado.
Concepto de Derecho
1. Etimologia
2. Concepto De Derecho
3. Definicion De Derecho
4. División Del Derecho O “Suma Divisio” Del Derecho
5. Contenido De La División Del Derecho
By JORGE MACHICADO
ETIMOLOGIA
CONCEPTO DE DERECHO
El Derecho es el conjunto de normas jurídicas generales positivas
que surgen de la sociedad como un producto cultural generada
dentro de leyes y que tienen la finalidad de regular la convivencia
entre los miembros de esa sociedad—las personas—y de estos con el
Estado.
DEFINICION DE DERECHO
Para Ulpiano el Derecho es el "arte de lo bueno y lo equitativo".
Definición de Ley
Una Ley es una regla, una norma que seguir, la cual tiene poder jurídico el cual es
conferido por la autoridad gubernamental a cargo. Por supuesto, no directamente el
Gobernante, sino la parte del gobierno que legisla del Congreso Nacional. Una Ley es
puesta en una sala plenaria, en la que los diputados, y expositores de la ley, que están
esperando que esta se apruebe hablan y debaten sobre lo que es la ley en esencia,
comparten sus ideas y analizan los efectos de la misma sobre la nación que sobre ellos
recae una responsabilidad muy importante.
Las leyes regulan todo lo relacionado al estilo de vida que una determinada tasa de
población pueda experimentar, para mantener un estado cívico en un país es necesaria la
creación de una constitución que contempla leyes generalizadas de respeto y consideración
en el país. A partir de las leyes, restricciones y derecho emanados de esta Constitución, se
considera la elaboración de más leyes que complementen la matriz inicial.
LAS FUENTES DEL DERECHO 1.- CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN El sistema fuentes en todo el
Ordenamiento Jurídico es único y a él se refiere el Código Civil en su art. 1.1. al señalar entre ellas
“la ley, la costumbre y los principios generales del Derecho ”.
A la hora de distinguir las diversas fuentes del Derecho , podemos hacer una distinción
entre: primarias, secundarias y aclaratorias.
Son las que contienen y nos dan un Derecho directamente aplicable. Como fuentes
primarias se encuentran en primer lugar, la Constitución Española y las Leyes que aprueba el
poder legislativo, o los Reglamentos que dicte la Administración
(Poder Ejecutivo). Las fuentes primarias son escritas y sus caracteres son:
b) Publicidad. No cabe normas secretas, han de ser publicadas en los diarios oficiales para
luego poder entrar en vigor (art. 9.3 CE).
d) Pervivencia hasta su derogación. Las normas se hacen para que duren en el tiempo
hasta que otra norma posterior de igual o superior rango la derogue, modifique o sustituya. Hay
casos, no obstante, en que es la propia norma la que determina cuándo desaparecerá si se dan
una determinadas circunstancias concretas (por ejemplo, cuando se prevé que la norma en
cuestión regirá hasta determinad fecha).
d) Vocación de futuro.
Las normas regulan circunstancias presentes y futuras, hacia adelante (son irretroactivas).
Excepcionalmente pueden regular situaciones pasadas (retroactividad), pero con los límites del
art. 9 de la Constitución, esto es, sólo si así se expresa en dichas normas o pueden ser favorables
para los derechos individuales.
Conviene añadir, por último, que los Tratados Internacionales, pueden ser considerados
también como fuentes primarias, ya que tienen vigencia y rango de ley interna cuando, previa
aprobación por el Parlamento, son ratificados y publicados en España, pasando entonces a formar
parte del Ordenamiento interno.
2.2. fuentes complementarias Las fuentes complementarias son aquellas cuya vigencia
deriva de los pronunciamientos de las fuentes primarias, de lo que dispongan éstas. Como fuentes
secundarias tenemos la costumbre y los principios generales del Derecho.
A) La costumbre La costumbre son las prácticas, los usos de la sociedad, que pueden tener
un carácter de haberse dado durante mucho tiempo, dando la impresión de que son verdadero
Derecho, de aplicación obligatoria. Ahora bien, en el Derecho Administrativo rige el principio de
legalidad, por lo que la costumbre sólo sirve o se aplica si una Ley la reconoce (por ejemplo el art.
29.2 de la LRBRL dice que en los Municipios que funcionen en régimen de Concejo abierto, su
funcionamiento se ajustará a "los usos, costumbres y tradiciones locales...").
B) Los Principios Generales del Derecho. Respecto a esta segunda clase de fuentes
secundarias, hay quien dice que se trata de unos principios que responden a un Derecho natural e
intemporal que ha existido siempre, y formulan como esos principios generales algunos muy
importantes: la presunción de inocencia, igualdad ante la ley, derecho a ser oído antes de ser
vencido, ppo. de equidad, de confianza legítima, etc. Ahora bien, en nuestro ordenamiento
jurídico se encuentran la mayor parte de ellos positivizados -recogidos en las Leyes e incluso en la
Constitución- por lo que forman parte de nuestro ordenamiento jurídico y salen de él (como
principios) para completarlo, darle sentido y unidad.
2.3. fuentes aclaratorias Son aquellas que nos orientan o pretenden indagar sobre el
verdadero sentido y alcance de lo que el legislador quiso con la aprobación de una norma, esto es,
de lo que la norma quiso decir. Entre ellas tenemos: A) La jurisprudencia Por jurisprudencia cabe
entender las decisiones de jueces y magistrados cuando aplican el Derecho al dirimir los conflictos.
Es decir, cuando se solventan los conflictos, los jueces van sentando criterios, reglas, sobre lo que
creen que el legislador quiso establecer con una norma. Ahora bien, en nuestro Ordenamiento
Jurídico y a diferencia del anglosajón, por ejemplo, el juez no innova el Derecho, sólo aplica la Ley.
No obstante, saber qué dijo un Tribunal en casos parecidos orienta sobre el posible fallo del
mismo. Cuestión distinta son las Sentencias del Tribunal Constitucional, bien cuando interpretan la
Constitución o cuando declaran la inconstitucionalidad de una Ley, por cuanto tienen un valor
mucho más fuerte ya que pueden eliminarlas del ordenamiento jurídico, como veremos. B) La
doctrina Por doctrina cabe entender las aportaciones de los estudiosos del Derecho , es decir, las
cuestiones que resuelven y analizan los especialistas en las distintas ramas jurídicas, pueden dar
pautas importantes a la jurisprudencia y a la Administración, para aclarar el contenido de las
normas o para justificar un fallo o resolución. 2. LA CONSTITUCION DE 1978. CARACTERISTICAS Y
PRINCIPIOS GENERALES. DERECHOS Y DEBERES CONSTITUCIONALES. Una Constitución en sentido
amplio, y en concreto la Constitución Española es la norma Suprema del Estado. Tras el largo
proceso constituyente que tuvo lugar tras el fin de la dictadura franquista, la Constitución de 1978
inaugura en España una nueva forma de ejercicio del poder. Como la práctica totalidad de las de
las Leyes Fundamentales contemporáneas, la nuestra se dirige fundamentalmente a : 1) Definir el
modelo de Estado (según el art. 1, España se constituye en una Monarquía parlamentaria cuyo
modelo de Estado es el Social y Democrático de Derecho). 2) Establecer un catálogo de derechos y
deberes fundamentales y libertades públicas de los ciudadanos. 3) Regular los poderes del Estado
(legislativo, ejecutivo y judicial) y establecer su plena separación como garantía de justicia y
libertad. 4) Regular ciertos órganos fundamentales del Estado ( Tribunal Constitucional, Tribunal
de Cuentas, Defensor del Pueblo, etc.). 5) Definir el modelo de organización territorial: Estado
Central, Comunidades Autónomas, Municipios y Provincias. 6) Establecer mecanismos de control
de la constitucionalidad de las leyes ordinarias El art. 9.1 de la Constitución deja claro el carácter
de fuente suprema del Derecho de la misma, al decir que los ciudadanos y los Poderes Públicos
están sujetos a la CE y al resto del Ordenamiento Jurídico. En cuanto a su carácter de Norma
Jurídica, la Constitución Española es: - Norma Suprema. La Ley ordinaria debe ser conforme a la
Constitución, de forma que la Ley contraria a la misma no debe ser aplicada y que debe existir un
mecanismo que permita determinar la constitucionalidad de las leyes y declarar la nulidad o la no
aplicación de las que vulneran la CE. - Norma de normas (porque determina la legitimidad y el
procedimiento de elaboración del resto de las normas estatales). - Norma directamente aplicable
que orienta la actuación de todos los Poderes Públicos (art. 53.1), aunque sólo pueden alegarse
directamente ante la jurisdicción ordinaria los derechos constitucionales y libertades públicas que
enuncia el capítulo II del Título I. Pasamos ahora a detallar esta última, es decir, el catálogo de
derechos y deberes constitucionales, su distinto alcance y sus mecanismos de aplicación y
garantías. 2.1-DERECHOS CONSTITUCIONALES Y LIBERTADES PÚBLICAS El art. 10, con el que se
abre el Título I, proclama como fundamento del orden político y de la paz social “la dignidad de la
persona, los derechos humanos inviolables, el libre desarrollo de la personalidad, el respeto a la
ley y a los derechos ajenos”, remitiendo su interpretación a la Declaración Universal de los
Derechos Humanos y a los Tratados y Acuerdos Internacionales suscritos por España. Por su parte,
el art. 14 proclama la igualdad de los españoles ante la ley. Posteriormente, el Título I contiene
una diversidad de situaciones jurídicas de diferente valor jurídico que pueden clasificarse como
sigue: Capítulo II:”Derechos y libertades”: a) Derechos fundamentales y libertades públicas y b)
Derechos y deberes de los ciudadanos Capítulo III: c) Principios rectores de la política económica y
social, de la que se infieren algunas situaciones de poder a favor de los ciudadanos (derecho a una
vivienda digna, derecho a la salud) que no constituyen derechos individuales directamente
exigibles, sino que tienen que ser regulados por una ley (ordinaria) que será la que pueda alegarse.
a)-. Derechos fundamentales y libertades públicas (arts. 14 a 29 más la objeción de conciencia del
30). La característica común a todos ellos es que pueden alegrase directamente, que su desarrollo
está reservado a ley orgánica, y que su vulneración por los Poderes Públicos es susceptible de
recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.) Dentro de este apartado son derechos
individuales, además del derecho al libre desarrollo de la personalidad y a la igualdad ya citados: 1-
Derecho a la vida y a la integridad física y moral, con prohibición de tortura y de tratos humanos y
degradantes y abolición de la pena de muerte. 2- Derecho a la libertad y a la seguridad personales.
3- Derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen, inviolabilidad del
domicilio y secreto de las comunicaciones. 4- Derecho a la libre circulación y residencia dentro del
territorio del Estado, a su entrada y salida. 5- Derecho a la educación y a libertad de enseñanza. 6-
Derecho a la tutela judicial efectiva en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos y a la
defensa jurídica. Pueden considerarse libertades públicas: 7- Libertad ideológica, religiosa y de
culto. 8- Libertad de expresión y difusión de pensamientos ideas y opiniones mediante cualquier
medio de reproducción. 9- Libertad de ejercer el derecho de petición individual o colectivamente
ante los poderes públicos. 10- Libertad de reunión pacífica y sin armas. 11- Libertad de asociación,
con las limitaciones impuestas por las leyes. 12- Libertad de sindicación laboral. 13- Derecho de
huelga de los trabajadores. 14- Libertad de participación en asuntos públicos, directamente o por
medio de representantes. 15- Derecho a la objeción de conciencia, que aunque estaba previsto
para el desaparecido servicio militar, según el Tribunal Constitucional es aplicable a cualquier otro
deber social. b) Otros derechos constitucionales de los ciudadanos. La CE 1978 (art.s 30-38)se
refiere también a otros derechos no considerados como básicos y algunos deberes de los
ciudadanos. Los siguientes derechos tienen como característica común que su desarrollo está
reservado a ley ordinaria que habrá de respetar su contenido esencial, sin que puedan ser objeto
de recurso de amparo. 1- Derecho a contraer matrimonio con plena igualdad jurídica y a la
disolución del mismo. 2- Derecho al trabajo, a la promoción laboral y social y a la remuneración
digna 3- Derecho a la creación de empresas y fundaciones privadas de interés general. 4- Derecho
a la negociación colectiva. 5-. Derecho de los trabajadores y empresarios a adoptar medidas de
conflicto colectivo. 6-. Derecho a la propiedad privada y a la herencia, dentro de los límites de su
función social. Este derecho tiene como contrapartida los deberes fiscales del art. 31.1: todos
están obligados al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica.
c) En cuanto a los principios rectores de la Política económica y social arts. 39-52): derechos a la
salud, a una vivienda digna, etc. del Capítulo III): no constituyen verdaderos derechos individuales,
sino principios programáticos que requieren desarrollo legal, que sin dicho desarrollo no son
exigibles directamente ante los Tribunales y cuya vulneración no es susceptible de recurso de
amparo ante el Tribunal constitucional. 3.- LA LEY Y LAS NORMAS EQUIPARADAS A LA LEY 3.1. LA
LEY La ley es una norma escrita emanada del poder legislativo, por lo que es la norma por
excelencia del ordenamiento jurídico y prima sobre las demás. Dentro de esta categoría podemos
distinguir a su vez distintas clases de leyes: 3.1.1. Leyes Orgánicas y Leyes Ordinarias. Las Leyes
Orgánicas son aquellas que sólo puede promulgar el Estado, y están previstas para las materias
que señala el artículo 81 de la Constitución así como otras previstas en la Norma Fundamental.
Requieren su regulación por Ley Orgánica: -el desarrollo de los derechos fundamentales y de las
libertades públicas (Sección 1ª del Capítulo II del Título Primero). -la aprobación de los Estatutos
de Autonomía. -el régimen electoral general. -las demás que prevea la Constitución, como por
ejemplo: * regulación de los estados de alarma, excepción y sitio (art. 116) * regulación del
Defensor del Pueblo (art. 55) * regulación del Tribunal Constitucional (art. 165) Lo que diferencia a
esta Leyes es que el procedimiento de aprobación y modificación es más garantista que el previsto
para las leyes ordinarias (se exige mayoría absoluta del Congreso para su aprobación), y ello
porque las materias sobre las que versan se aspira a que no pueden verse afectadas por los
continuos cambios de gobierno y su regulación ha de ser fruto del mayor consenso posible. Por
contra, todo lo que no requiera Ley Orgánica, será una Ley Ordinaria, para cuya aprobación basta
sólo la mayoría simple. 3.1.2. Las Leyes de las Comunidades Autónomas Las Comunidades
Autónomas, en las materias objeto de su competencia pueden dictar leyes de igual rango que las
del Estado. Estas leyes de las Comunidades Autónomas, no son ni superiores ni inferiores a
aquéllas. Entre unos y otras rige el principio de separación de competencias (las que pueden
asumir las Comunidades Autónomas se enumeran en el art. 148 de la Constitución y las exclusivas
del Estado, en el 149)y no el de jerarquía. Ahora bien, como puede surgir algún conflicto, el texto
constitucional prevé mecanismos para decidir si es o no una ley legítima, que sólo puede ser
atacada ante el Tribunal Constitucional. 3.2. NORMAS NO PARLAMENTARIAS EQUIPADAS A LA LEY
En este caso, y cómo señala la rúbrica, se trastocan un tanto los postulados tradicionales de la
división de poderes, pues se trata de disposiciones de rango legal que emanan del Gobierno, del
poder ejecutivo. O dicho de otra forma, son normas con rango de Ley pero que no aprueba el
poder legislativo. El fundamento de este poder para el Ejecutivo es fundamentalmente de orden
práctico y lo encontramos en el gran número de materias existentes a regular; la urgencia en la
regulación de determinadas cuestiones y lo incompatible de ello con la lentitud del parlamento,
además de la necesidad de entrar a regular por el Derecho determinadas materias de un modo tan
detallado que al Parlamento le resultaría técnicamente muy dificultoso. En cuanto a las normas no
parlamentarias equiparadas a la Ley tenemos: 3.2.1. El Real Decreto-Ley El Decreto-Ley o Real
Decreto-Ley, es una norma con fuerza de ley, emanada del Gobierno en el ejercicio de una
facultad originaria que le es otorgada directamente por la Constitución (art. 86). Su fundamento
está en la necesidad de afrontar circunstancias excepcionales que hagan precisa la publicación
inmediata de determinadas disposiciones con rango de ley, cuya urgencia y apremio impide
esperar a la intervención del legislador ordinario y los trámites más pausados. Procede su
aprobación "en casos de extraordinaria y urgente necesidad” en los que “ el Gobierno podrá dictar
disposiciones legislativas provisionales que tomarán la forma de Decretos-Leyes". Ahora bien, a
pesar de ser un poder originario del Gobierno, esta norma, el Decreto-Ley, tiene ciertas
limitaciones por cuanto no podrán afectar, no podrán regularse por Decreto-Ley: -el ordenamiento
de las instituciones básicas del Estado (por ejemplo Tribunal Constitucional). -los derechos,
deberes y libertades de los ciudadanos regulados en el Título I de la Constitución. -el régimen de
las Comunidades Autónomas. -el Derecho electoral general. La calificación de "provisionales" que
la Constitución da a estas normas es porque inmediatamente a su publicación deben ser
sometidas a debate y votación del Congreso de los Diputados como máximo en el plazo de 30 días,
y habrá de pronunciarse expresamente dentro de dicho plazo sobre la convalidación o derogación
del Decreto-Ley, pudiendo durante ese plazo tramitarse como proyectos de ley.Una vez publicados
en el BOE, pueden modificar y derogar Leyes u otros Decretos-Leyes. 3.2.2. Los Reales Decretos
Legislativos En este caso, y para esta clase de normas con rango de Ley, más que de poderes
previos y originarios reconocidos al Gobierno, se trata de un instrumento de colaboración entre el
Parlamento y el Gobierno. Se encuentran regulados en los artículos 82 a 85 de la Constitución, que
permiten que el Gobierno puede dictar leyes previa autorización expresa o delegación del
Parlamento, sobre materias concretas no reservadas a Ley Orgánica. De ahí, por tanto, que las
disposiciones del Gobierno que contengan legislación delegada reciben el nombre de Decretos
Legislativos (art. 85 CE). Lo que diferencia, sobre todo, a estas normas de los Decretos-Leyes es
que los primeros son un poder originario del Gobierno, que utiliza cuando sea oportuno, mientras
que los Decretos Legislativos sólo pueden aprobarse si existe una previa autorización de las Cortes,
que puede ser de dos formas: A) Mediante una Ley de bases, que contiene la autorización para
elaborar un texto articulado, con arreglo a los principios y con los límites que se fijan en la misma
Ley de Bases. B) Mediante una ley ordinaria, cuyo objeto sea elaborar un texto refundido, esto es,
una disposición legal sobre una materia cuya regulación anteriormente estaba esparcida en
diversas normas. 4.- EL REGLAMENTO De las anteriores fuentes del Derecho, la principal para el
Derecho penal es la Ley orgánica, para el Derecho privado (civil, mercantil) es la ley (ordinaria),
pero para el Derecho administrativo es, junto a la ley, aquella que tiene su origen en la propia
Administración. Grosso modo, nos estamos refiriendo al llamado Reglamento (Real Decreto si es
estatal y Decreto si es autonómico), en cuanto expresión de la facultad normativa atribuida por el
Ordenamiento Jurídico a la Administración, esto es, el poder de creación de Derecho a uno,
precisamente, de los poderes del Estado, el Poder Ejecutivo, la Administración latu sensu. El
Reglamento es una “disposición administrativa de carácter general y de rango inferior a la Ley”.
Son, pues, normas jurídicas, pero no hay que confundir con elDecreto-Ley o a los Decretos-
Legislativos, que tienen rango de Ley. El fundamento de esta potestad es muy variado. Y ante la
pregunta de por qué se otorga a la Administración la potestad de dictar normas jurídicas de rango
inferior al de la Ley, de Reglamento, se han ofrecido varias razones. Unas de ellas son de orden
práctico, por el rigor técnico que es necesario para realizar regulaciones de materias concretas, al
Parlamento le resulta imposible por su propio modus operandi, entrar en tantos detalles de una
materia. Por ello siempre existirá una necesidad de desarrollar y completar la tarea del legislador,
de las leyes. Pero en cambio existen razones formales, que son las más relevantes. Esto es, la
potestad reglamentaria se atribuye por la Constitución, sin perjucio de la legislación ordinaria, a la
Administración, según lo dispuesto en su artículo 97.