AL PATRIARCA DE AYACUCHO

JUAN ANDRES VIVANCO AMORIN

“Os… prometo mover cielo y tierra para que nunca queden desamparados”
dijo: el ángel de los niños.

Redacción: Carmen Aroni Salazar.

Fecha: 08 de julio 2018

Al conmemorarse los 31 años de fallecimiento de Juan Andrés Vivanco Amorín fundador del
Puericultorio, ayer 08 de Julio se dio realizó una misa solemne en las instalaciones del
albergue y a las 11:00 de la mañana Romería en el Cementerio General con la presencia
de los niños (a), ex albergados, trabajadores hermanas religiosas y público en general.

Biografía: Juan Andrés Vivanco Amorín nació el 23 de mayo de 1907, siendo sus padres,
don Gerardo Vivanco Velapatiño y doña Patrocinia Amorín Salas. Cursó estudios primarios
en el “Centro Sucre”, pasando después al Colegio Nacional “San Ramón”- conocido como la
GUE Mariscal Cáceres - donde compartió la orientación cristiana con los principios morales,
humanísticos y de servicio hacia los vilipendiados. La vocación de servicio y el amor al
prójimo fueron el permanente sustento de su formación. Contrajo nupcias en 1935 con la
profesora y escritora Olinda Chávez Callirgos autora de la literatura infantil y muchas piezas
teatrales. La pareja no tuvo hijos.

OBRAS: “Nadie muere mientras permanezca vivo en nuestras corazones más aún si han
dejado obras a su sociedad, manifiesta Luis Zerpa familiar del recordado personaje brinda
alcances que don Andrés ingresa a la vida pública prestando servicios en la Caja de
Depósitos y Consignaciones, Departamento de Recaudación (Hoy Banco de la Nación) hasta
1944, fecha en que se asume otra responsabilidad en el Sector Salud: la campaña de
vacunación Rural más grande jamás realizada en diversos pueblos de las provincias de
Huamanga y Cangallo, donde va conociendo la difícil realidad social que iría perfilando su
espíritu y fortaleciendo su carácter.

En 1947, cuando los servicios de saneamiento urbano se amplían en la ciudad de Ayacucho,

es llamado a participar en estas obras de desarrollo, que cumple con especial interés.

En abril de 1958 inicia otra importante labor relacionada con la educación y la cultura, como
jefe de la Biblioteca del Colegio donde cursó su secundaria, la Gran Unidad Escolar “Mariscal
Cáceres”. Reorganiza el servicio y promueve su implementación mediante actividades
diversas y gestiones ante la generosidad de instituciones públicas y privadas. Conociéndolo
en esa época como “El bibliotecario Mendigo”
03 de julio de 1980, emprende la conformación del “Comité Pro Pavimentación y
Ornamentación de la Alameda del Cementerio” y junto a un grupo de vecinos entusiastas
inicia la obra ante la incredulidad o burla de muchos que creían imposible y ante la negativa
de las autoridades locales.

La violencia política:

Acerca de este personaje y el inicio de su labor nos comentó el profesor Teodoro Atme
Huamán (ex trabajador del puericultorio) refiere que “ que junto a un grupo de personas
encabezado por Juan Andrés Vivanco, se funda el 30 de octubre 1980 como comité pro –
puericultorio, era un comedor infantil que asistía a los más pobres de la zona; su objetivo
era brindar alimentación, apoyar y acoger a menores en situación de abandono el 14 de
mayo de 1981 se puso la primera piedra en presencia de autoridades políticas, civiles,
militares y eclesiásticas”

Pero transcurridos los primeros años del 80, se desata el fenómeno de la violencia política,
en el que se enfrenta dos grupos: uno subversivo (sendero luminoso) y el otro, fuerzas del
orden) cuya causa fue sufrimiento de la pérdida irreparable de vidas humanas siendo el
saldo de cientos de niños inocentes abandonados, huérfanos y desamparados. Una de las
primeras internas del puericultorio, Zaida Jiménez Quispe natural de Acos vinchos, huérfana
de la violencia política narro: “somos cuatro hermanos a mis padres los asesinaron cuando
tenía 10 años al quedarnos solos, mi tía nos llevó a Huamanga a la Asociación pro
puericultorio al llegar encontramos un comedor que nos daba desayuno y almuerzo y un
pabellón inconcluso; pero no teníamos donde quedarnos a dormir y a si como nosotros
llegaban otros niños de provincias que sus padres fueron asesinados no teníamos techo,
papa Andrés vio la necesidad y casi de urgencia entra en funcionamiento el pabellón como
un internado” por esta obra filantrópica fue reconocido a nivel internacional como el
"personaje del año" en 1983, por el ex presidente de la República, Fernando Belaúnde Terry.

Petición: Cuando la guerra interna alcanzaba sus niveles insospechados el 28 de octubre en

1987, la Congregación Hijas De Santa Ana aceptaron el pedido del entonces arzobispo de
Ayacucho Juan Luís Cipriano para hacerse cargo de la obra que el fundador pidió a su muerte
a Juan Pablo II que la institución fuera administrada por la iglesia, no quería que el gobierno
la asumiera por que podía ser usado como un instrumento político e incluso caer en el
descuido. Se sabe que para Andrés no fue fácil conseguir apoyo para esta noble causa, sin
embargo hubo grandes hombres e instituciones que confiaron en Juan Andrés.

NOTA: También se sumó a este causa el ahora Premio Nobel de Literatura quién fue
galardonado en 1985 con el Ritz Paris Hemingway por la publicación de “La Guerra del Fin
del Mundo”, que incluyó un premio de 50 mil dólares el mencionado escritor lo destinó el
monto íntegro al puericultorio, que en aquellos años albergaba a decenas de huérfanos del
terrorismo en Ayacucho.
Muchos ayacuchanos quienes a un recuerden esta historia se habrán hecho la pregunta una
y mil veces ¿Que fueron de esos niños del ayer?

Se presume aproximadamente que desde 1980 hasta 2008, el puericultorio haya

albergado a más de 3500 infantes.

Algunos niños por suerte fueron adoptados, otros fueron destinados en colocación familiar,
algunos con residencia temporal, aunque parezca dura y nostálgica la realidad, pues algunos
jóvenes cayeron en el pandillaje, a temprana edad fueron madres solteras, algunos dejaron
los estudios por falta de apoyo y en los peores casos fueron privados de libertad (con justicia
o injusticia) otros se encuentran junto a las estrellas, pero como refiere el escritor Antonio
Sulca Effio… “No todo es triste en Ayacucho tenemos sonrisas que ofrecer… A pesar de la
penurias muchos tuvieron que sobre salir de tantas batallas valerse por sí mismas o con
apoyo del alguna persona de noble corazón hoy son grandes profesionales como: Docentes,
abogados, ingenieros, enfermeras, chef, artistas profesionales y sirven a la sociedad
contribuyendo a ese sueño anhelado de papá Andrecito que valió la pena haber creado una
casa hogar, él falleció el 08 de octubre de 1987 y como un hombre de bien fue enterrado
ante sus hijos y la multitud de la población,

El pedido es que el sector de educación debe dar a conocer la biografía del personaje a
asimismo los medios de comunicación difundirlos a la población y llevarlo al séptimo arte
realizar una película cuyo ejemplo transformaría a la reflexión humana.