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Asignatura

Procesos cognoscitivos

Tema
Modelos y Bases Neurales

Participante

Matricula

Facilitadora
Nagua, 23/06/2019
República Dominicana

 Portada
Índice

 Presentación
 Portada

 Índice

 Introducción

 Objetivo general y Objetivos Específicos

 Conclusión

 Bibliografía
 Anexos

Introducción

La psicología cognitiva es el estudio de la mente humana, estudia su


estructura, procesos y representaciones, trata del modo como las
personas perciben, aprenden, recuerdan y piensan sobre la
información, utilizando el lenguaje del procesamiento de la
información y tiene fundamentación empírica. La cognición es la
capacidad del ser humano reconocer por medio de la visión y los
órganos del cerebro, procesa la información a partir de la percepción,
el conocimiento adquirido y sus características subjetivas que
permiten valorar la información.
Objetivo General

Conocer y diferenciar los procesos cognoscitivos y las bases


neuronales y saber especificar las funciones de cada una.

Objetivos Específicos

 Investigar sobre los diferentes tipos de funciones


cerebrales que intervienen en la cognición de la mente
humana.

 Mostrar la importancia de cada unas de las funciones que


interceden en los procesos cognitivos y la prevención
sobre posibles trastornos relacionados al funcionamiento
de la mente y el cerebro.
MARCO TEÓRICO

EL CEREBRO DA LUGAR A LA MENTE

Los enormes conocimientos del último tiempo en el campo de las


neurociencias son importantes a la hora de entender las ventajas y
desventajas que otorga la relación entre la mente y el cerebro. Qué
hacer para convertir a la mente en una aliada.

A partir de los enormes avances que hizo la neurociencia en el último


tiempo, se pudo divulgar un importante aprendizaje sobre la mente y
el cerebro humano, más que en cualquier otro momento de la
historia. Ahora hay un mejor entendimiento de cómo funcionan y se
pueden utilizar estos nuevos conocimientos para adquirir un mayor
nivel de bienestar.

LA HISTORIA, LA ESTRUCTURA DE LAS TEORÍAS DE LA


COGNICIÓN,

La psicología cognitiva se preocupa del estudio de procesos tales


como lenguaje, percepción, memoria, razonamiento y resolución de
problema. Ella concibe al sujeto como un procesador activo de los
estímulos. Es este procesamiento, y no los estímulos en forma
directa, lo que determina nuestro comportamiento.

Bajo esta perspectiva, para Jean Piaget, los niños construyen


activamente su mundo al interactuar con él. Por lo anterior, este
autor pone énfasis en el rol de la acción en el proceso de aprendizaje.
La teoría del desarrollo cognitivo de Jean Piaget es una de las más
importantes. Divide el desarrollo cognitivo en etapas caracterizadas
por la posesión de estructuras lógicas cualitativamente diferentes,
que dan cuenta de ciertas capacidades e imponen determinadas
restricciones a los niños. Con todo, la noción piagetiana del desarrollo
cognitivo en términos de estructuras lógicas progresivamente más
complejas ha recibido múltiples críticas por parte de otros teóricos
cognitivos, en especial de los teóricos provenientes de la corriente de
procesamiento de la información.

EL CEREBRO COGNITIVO, ESTUDIO DE LA COGNICIÓN,

La neurociencia cognitiva tiene como objetivo principal la


comprensión de la mente humana; en particular, desde esta disciplina
se pretende identificar la relación entre los fenómenos cognitivos (así
como sus manifestaciones observables) y las estructuras cerebrales
en las que se asientan. Dicho de otro modo, esta ciencia busca las
bases biológicas de la cognición.
Para ello los estudiosos de la neurociencia cognitiva utilizan un
enfoque interdisciplinar que combina el análisis de imágenes del
cerebro, la neurofisiología, las matemáticas, la genética conductual,
las ciencias computacionales, la psiquiatría, la psicometría y la
psicología experimental, así como cualquier otro paradigma científico
que pueda resultar de utilidad.
El campo de estudio de esta disciplina se solapa en gran medida
con el de la psicología cognitiva. El desarrollo de métodos
avanzados para estudiar el cerebro ha favorecido el acercamiento
entre esta rama de la psicología y otras ciencias interesadas en la
anatomía y en las funciones del sistema nervioso, como la psiquiatría,
dificultando la distinción entre ellas.
Si analizamos la historia de la ciencia podemos encontrar múltiples
antecedentes de la neurociencia cognitiva. Entre estos destacan la
frenología de Franz Gal, que pretendía atribuir cada función mental a
un área distinta del cerebro, las teorías localizacioncitas de John
Hughlings Jackson o los estudios pioneros
de Broca y Wernicke sobre lesiones cerebrales.
Sin embargo, la consolidación de este paradigma tal y como hoy lo
conocemos ha sido atribuida fundamentalmente a la popularización
de la psicología cognitiva y de la neuropsicología,
estrechamente vinculada al desarrollo de técnicas de neuroimagen
como la resonancia magnética funcional o la tomografía por emisión
de positrones.

LA PERCEPCIÓN, LA ATENCIÓN, EL LENGUAJE

Lo que nos diferencia de los animales es la capacidad de pensar y


utilizar el lenguaje para comunicarnos con los individuos de nuestra
especie. Esta capacidad, por su complejidad, ha dado lugar a
numerosos estudios. La explicación de nuestro comportamiento
o actuación como un simple mecanismo de respuesta a partir
de una estimulación es insuficiente.
Los individuos de la especie humana somos capaces de solucionar
problemas (en mayor o menor grado), razonar, recordar experiencias,
etc. Estas capacidades han sido estudiadas por lo psicólogos
cognitivos en lo que denominan funciones o procesos
cognitivos básicos al referirse a la atención, la percepción y la
memoria, y procesos cognitivos superiores o complejos al
explicar el pensamiento.

1.1 sensación y percepción

Introducción

Aunque es difícil separar la sensación de la percepción en la


experiencia diaria, algunos psicólogos hablan de ambas como
si fueran dos procesos claramente distintos. La distinción viene
de los primeros filósofos que decían que no hay nada en el
entendimiento que no haya pasado previamente por los sentidos. Por
eso distinguían dos fases en el impacto que producían los estímulos
sobre el organismo. En una primera fase, los estímulos caen sobre los
órganos de los sentidos-ojo, oído y tacto- y las estimulaciones son
reenviadas, a lo largo de rutas neuronales específicas, hasta los
centros del Obrero. En una segunda fase, y una vez que están dentro,
son interpretados sobre la base de la experiencia, y se emite la
respuesta apropiada. Los estímulos son primeramente sentidos y
luego interpretados. A la primera fase se la llama sensación y a
la segunda percepción.

Esta tradición ha sido recogida y aceptada por numerosos psicólogos,


según los cuales hay dos clases: de experiencias sobre el mundo. Una
experiencia simple, irreductible, representada por las sensaciones:
colores, olores y sonidos. Son elementos componentes de algo que
está más allá de ellos mismos. Pero hay también una experiencia
compleja en la que se revelan los objetivos a los que
pertenecen estas sensaciones, es decir, a la percepción. En la
percepción, por tanto, además de sensaciones, hay experiencias,
actitudes y valores propios del sujeto. Durante mucho tiempo se han
mantenido estos dos procesos como radicalmente separados, como
dos fases claramente distintas, y así aparecen en muchos manuales y
libros de texto. Sin embargo, la distinción entre ellos es cada vez más
pequeña y las diferencias menos claras y terminantes.

La percepción

La percepción, en general, puede interpretarse como un proceso de la


actividad humana que tiene una función primordialmente adaptiva y
se inscribe en el conjunto de los llamados procesos cognitivos, al
decir que es un proceso se quiere dar a entender el carácter dinámico
de la actividad perceptiva frente a otras concepciones estáticas que
entienden la percepción como una reacción puramente pasiva de la
información exterior entrante, es decir, un simple registro de datos.
Por el contrario, la percepción es una actividad que le
organismo realiza para extraer del medio ambiente la
información que necesita para su funcionamiento normal, el
sujeto que percibe es el auto de su propia experiencia.

Hay dos clases de pruebas que ilustran el carácter activo de


la percepción. La primera es de carácter fisiológico. De las
investigaciones realizadas por Huber y Diesel se sabe que los
mecanismos sensoriales y perceptuales responden selectivamente a
diferentes aspectos del mundo físico y juegan un papel importante en
la modulación y modificación del mensaje, en lugar de comportarse
pasivamente como lo hacen los hilos telefónicos que se limitan a
trasmitir la información recibida. La segunda prueba proviene de la
existencia de figuras ambiguas. La ambigüedad de la figura
demuestra que l configuración final del contenido depende del propio
observador y no de los datos estimuladores.

La segunda característica de la percepción, deriva de la


definición que dábamos más arriba, es que tiene una función
meramente adoptiva. Esto quiere decir que la percepción no es un
proceso ornamental, sino absolutamente necesario para que el
organismo pueda adaptarse al medio en el que tiene que hacer frente
a las múltiples problemáticas exigidas de la vida. Ahora bien, para
adaptarse al medio, necesita conocerlo, y la forma de conocerlo es
extraer información del inmenso conjunto de energías que estimulan
los sentidos.

Aunque son muchos los estímulos que llaman a la puerta de los


sentidos y estimulan los órganos receptores, no todos tiene valor
informativo, en realidad, sólo los estímulos que provocan algún tipo
de conducta reactiva o adoptiva tiene trascendencia vital para el
sujeto. Esto pone de relieve otra cualidad de la percepción humana,
que es un proceso selectivo.

RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS Y RAZONAMIENTO,


REPRESENTACIÓN Y CONOCIMIENTO DE LA MEMORIA A LARGO
PLAZO.

Guitón & Hall (2006) expresan que un pensamiento deriva de un


"patrón" de estimulación en múltiples componentes del sistema
nervioso al mismo tiempo, que quizás implique por encima de todo a
la corteza cerebral, el tálamo, el sistema límbico y la parte superior
de la formación reticular en el tronco del encéfalo. Denominado
la teoría holística de los pensamientos.
Según Corcel &Shebilske (1998) definen al pensamiento como la
actividad mental de manipulación de los símbolos. Las palabras son
símbolos y a veces, casi nos podemos oír usándolas mientras
pensamos.
Naturaleza del pensamiento
Guitón (1987) y Guitón & Hall (2001): Las zonas estimuladas del
Sistema Límbico, el tálamo y la formación reticular determinan
la naturaleza general del pensamiento, atribuyéndole cualidades
específicas. Puede ser agradable o desagradable como placer, dolor,
comodidad, modalidades toscas de sensación, localización en grandes
zonas del cuerpo. Sin embargo las zonas específicas estimuladas de
la corteza cerebral condicionan los rasgos diferenciados del
pensamiento, tales como:
 La localización específica de las sensaciones en la superficie del
cuerpo y de los objetos en el campo visual.
 La sensación de la textura.
 El reconocimiento visual de objetos.
 Otras características individuales que entran a formar parte del
conocimiento global de un instante particular.
Fisiología del pensamiento – Estructuras cerebrales que intervienen
Cada pensamiento entraña unas señales simultáneas en muchas
porciones de la corteza cerebral, el tálamo, el sistema límbico y la
formación reticular del tronco del encéfalo. Algunos pensamientos
primitivos probablemente dependan casi por completo de los centros
inferiores; la idea del dolor puede ser un buen ejemplo debido a que
la estimulación eléctrica de la corteza humana rara vez suscita algo
más que un dolor leve, mientras que en el caso de ciertas regiones
del hipotálamo, la amígdala y el mesencéfalo puede provocar un
dolor atroz. Por el contrario, un tipo de patrón de pensamiento que
requiere una gran participación de la corteza cerebral es el de la
visión, debido a que la ausencia de la corteza visual genera una
absoluta incapacidad para percibir las formas visuales o
los colores (Guitón & Hall, 2001).

Conclusión

Los procesos cognoscitivos son los procedimientos que se llevan a


cabo el ser humano para incorporar dicho conocimiento, en dicho
procesos intervienen facultades muy diversas como la inteligencia, la
atención, la memoria, el lenguaje, pensamiento y percepción. El
objetivo es adquirir conocimiento, resolver problemas, regulas
nuestros propios procesos de memoria, de comprensión o de
aprendizaje, también tomando en cuenta los procesos con los cuales
se relacionan: atender, seleccionar información, elaborar esa
información, organizarla, integrarla, almacenarla, evocarla. Estas
estrategias se convierten en herramientas vitales que nos permiten
aprender a aprender ya que nos permiten comprender y desarrollar
eficiente y conscientemente las tareas que nos permiten aprender
cosas nuevas y usar nuestros conocimientos para resolver problemas.

Los procesos cognitivos nos permiten conocer, es decir captar o tener


la idea de una cosa, llegar a saber su naturaleza, cualidades y
relaciones, mediante las facultades mentales. Sin estas cualidades o
capacidades no podríamos tener contacto con el mundo exterior y por
ende, no podríamos conocer ni imaginar nada. Aunque parezca que
alguno es más importante que los demás, en realidad no lo es ya que
se complementan y de una u otra forma están entrelazados. Un
ejemplo de esto es el lenguaje que hace que los seres humanos
tengan la habilidad de comunicarse, pero el lenguaje como tal es la
suma de otros procesos como la cognición, la memoria el
pensamiento etc. que forman de manera conjunta la plataforma para
hacer posible la expresión de las ideas a través de la asociación de
palabras, el empleo de gestos, y signos.

Bibliografía
 Smith Edward E. y Kosslyn Stephen M. (2008), procesos
cognoscitivos, modelos y bases neurales. Madrid:
Editora Pearson Prentice Hall.

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