Generación de Josué 3

Este guerrero, este valiente del cual hemos venido hablando los últimos viernes es un
hombre el cual nos da mucho ejemplo en diferentes áreas de nuestra vida, y
conforme a este hombre el Señor levanta personas con esa misma disposición de ir
en post de las victorias que el Señor va a entregar, es mi deseo que muchos de
ustedes estén asumiendo estos mensajes con la responsabilidad debida, ya que son
como direccionamientos que el Señor nos esta dando, pido gente entendida y
entregada a la obediencia para asi ejecutar los diseños de nuestro Dios.

Josué 24:15 NTV

Esta es uno de los rasgos mas fuertes de esta generación que Dios esta escogiendo,
hombres y mujeres con una convicción muy certera de a quien desean servir,
hombres y mujeres con un carácter bien definido, gente que no es medias tintas,
gente que va con toda en post de hacer la voluntad de Dios, personas que entienden
que no deben y que no les conviene tener amistad con el mundo, hijos de Dios con tal
convicción que ningún problema los va a separar de su Dios.

Estas palabras que salen de la boca de Josué en verdad son palabras de compromiso,
palabras de grande responsabilidad, ya que el esta poniéndose por delante de su
familia dando el ejemplo de seguir y servir a Dios, pero algo muy curioso y a la vez
llamativo es que Josué dice estas palabras prácticamente a vísperas de su muerte,
entonces pensé cual era el propósito de estas palabras, este hombre ya había servido
a Dios prácticamente durante la mayoría de su vida, porque decir semejante frase…y
creo que es algo que hoy debe enseñarnos, creo que Josué estaba dando un mensaje
muy claro a sus generaciones, asi como yo serví, ustedes deben seguir haciéndolo.

Es decir que Josué primero sirvió y luego dijo que lo haría, preciosa iglesia, padres que
están en este lugar estamos frente a una responsabilidad muy fuerte, debemos ser
ejemplo de servicio para nuestros hijos, debemos ser nosotros quienes les marcan la
pauta a los hijos, es muy bueno que los hijos sirvan al Señor, pero es mejor que miren
el ejemplo de sus padres en el servicio.

El capítulo en mención es el ultimo capitulo de Josué, pero lo traigo a colación porque

aquellos que deseen alcanzar grandes hazañas para Dios como lo hizo este hombre
deben ser personas que tienen esta marca, solo serviremos a Jehová, solo serviremos
al Señor, depende de ti cuanto camino le dejas hallando a tus hijos para que sigan tu
legado, este hombre fue decidido conforme a la responsabilidad que Dios le entrego,
no se de los que estamos aquí que tan responsables estamos siendo con la
responsabilidad que Dios nos entregó, creo que llego la hora de despertar y tomar la
decisión de dejar toda excusa y empezar a cumplir la misión del Señor.

Esta es una época de tomar decisiones radicales, de definir quienes somos y a quién
servimos, si vamos en la dirección del mundo y sus deseos, o si vamos en la dirección
que nos indica el Señor. Esa es la cuestión fundamental, que define nuestra vida: a
quien servimos, en post de quién vamos, para qué o para quién hacemos lo que
hacemos. Esta es una decisión fundamental y concluyente, seguimos en
nuestras costumbres, o seguimos lo que dice la Palabra de Dios; también es
una decisión que nos confronta hoy, en este mismo día nos confronta a
escoger a quién servimos, este hombre fue radical, tajante en sus convicciones no
se permitió las cosas a medias, somos o no somos, esos hombres y mujeres son los
que verdaderamente marcaran una diferencia muy tremenda en medo de esta
generación.

Leamos ese verso en la RVR1960

15 
y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los
dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado
del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi
casa serviremos a Jehová.

En pocas palabras Josué esta mandando un reto, esta poniendo claras las cosas para
el pueblo de Israel y dice algo bien claro a quien van a servir…nótelo…no dice si van a
servir dice a quien van a servir, Cuando decidimos no servir a Dios, automáticamente
estamos tomando la decisión de servir a otro: a nosotras mismos, al dinero, a la
posición social, al pecado y, en última instancia, a Satanás.

No decidir servir a Dios, ya es tomar una decisión.

Entonces al decidir servir a Dios automáticamente estas dejando claro que no vamos
a servir a nadie más, Jesús lo dijo bien claro, no puedes servir a dos señores, entonces
si decidimos seguir y servir a nuestro Dios también estamos decidiendo dejar de
servir al mundo, al dinero, a nosotros mismos, al pecado, mire que en ocasiones
invertimos mucho tiempo sirviéndonos a nosotros mismos, nos interesamos tanto en
nuestras necesidades que invertimos nuestro dinero, esfuerzo y dedicación solo al
servicio de nosotros mismos y aun allí estamos fallando, los guerreros que van a ser
levantados son gente con claridad en su servicio a Dios.

Vs 23-24 NTV
La decisión que tomemos conlleva acciones, todos aquí podemos decir que si
queremos servir al Señor, pero esa es la primera parte para cumplir con el reto, de allí
debemos empezar a renunciar a todo aquellos que no es sano para nosotros y
nuestras familias, este hombre le dijo a el pueblo destruyan los ídolos, y en verdad a
esta hora del partido cuando han tenido grandes victorias como es que aun tienen
ídolos, pues por mas descabellado que parezca asi fue, aún estaban allí los ídolos, y
hoy día no es diferente, hoy día muchos aun tienen sus ídolos y va a ser necesario
destruirlos para poder servir a Dios como debe ser.

Dia a día estamos propensos a levantar ídolos en nuestra vida de allí la necesidad de
reconocer que es lo que esta robando el tiempo que podría estar entregando a Dios,
eso ya es un ídolo y es necesario destruirlo.
La decisión de servir al Señor solamente sobre la base de entusiasmo no va
a durar. La decisión de un cristiano depende de la integridad: “Ahora, pues,
temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad; y quitad de entre
vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres al otro lado del
río, y en Egipto; y servid a Jehová. (Josué 24:14). La decisión de seguir
a Dios implica una decisión formada con un compromiso de “sinceridad y de
verdad.” Esto significa servir de todo corazón, servir con integridad, o sin
culpa. Esto era cierto para los israelitas, como es cierto para todos nosotros
hoy.

Elijan hoy a quien van a servir, si a estos dioses que no han hecho nada por
ustedes, o a Jehová, si no quieren servirle, pues vayan detrás de sus dioses ahora
mismo, pero el día de hoy escojan a quién van a servir, ya basta de andar en dos
aguas, creyendo servir a Dios, pero sus corazones están detrás de otras cosas. Es
necesario tomar decisiones muy concretas, ya no podemos seguir a medias tintas, no
podemos decir que somos creyentes, pero seguir haciendo las cosas a nuestra
manera, llego la hora de hacer las cosas a la manera de Dios, en ocasiones nos
decimos ser creyentes pero no actuamos como tales, deja esos dioses ajenos y
entrega todo al Señor, a mi hay algo que me impresiona de los hombres de Dios,
vemos que estos hombres murieron bien entrados en años, con mas de cien años a
sus espaldas pero la gran mayoría murieron sirviendo a Dios, hoy dia muchos se
sienten viejos con 50, 60 años y no desean servir al Señor se limitan a la edad y en
vez de dejar que Dios haga como el quiere, no somos tan jóvenes como para no
comprometernos en el servicio u mucho menos tan viejos que ya no podamos
hacerlo, siempre hay tiempo para servirlo con todo amor y entrega.

Algunos hoy día pueden decir Pastor mi familia no quiere nada de Dios, bueno tengo
algo para decirles, Dios necesita de uno que se decida a servirle para empezar a traer
cambios como nunca antes, abra aquí uno, abra aquí uno que acepte el reto y diga,
pues lo voy a hacer, me voy a meter hasta las medias con el Señor y en su servicio y
el hará con el resto de mi casa, uno solo uno que sea entendido y cambie la historia
de su familia.

Vs 25-28 reto y compromiso serio, muchos aquí eso es lo que necesitan un voto, un
compromiso serio de servir al Señor, muchos como no sienten el peso de un
compromiso por eso no se comprometen a hacer lo correcto delante del Señor.

Quiero cerrar con esta palabra.

Juan 12:26

¡¡¡YO Y MI CASA SERVIREMOS A JEHOVA!!!