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Abril 10
(Job 10:2).
Alma atribulada, quizás Dios obra contigo de esa manera porque desea desarrollar tus
dones espirituales. Si no hubiese sido por las pruebas que has atravesado, nunca hubiesen
descubierto algunos de tus mejores dones. ¿No sabes que nunca parece tan grande tu deben
tiempo de verano como en invierno?
Muy a menudo, el amor es semejante a un gusano de luz, que a no ser que se encuentre en
medio de la oscuridad, da muy poca luz. La esperanza es como una estrella, no es visible en la
luz del sol de la prosperidad, y solo se descubre en la noche de la adversidad. Con frecuencia,
las aflicciones son, por así decir, las plegaduras de vestidos de negro en que Dios coloca las
joyas de los dones espirituales de sus Hijos para hacer que resplandezcan mejor.
No hace mucho que estabas arrodillado y decías: temo que no tengo fe; permíteme que
sepa que tengo fe."
Aunque de una forma inconsciente, verdaderamente, ¿No es esto el orar por querer
atravesar por pruebas? Porque ¿Cómo puedes saber que tienes de hasta que no la ejercitas?
Confía en esto, a menudo, Dios nos envía pruebas para que nuestros dones sean descubiertos
y para que seamos confirmados de su existencia. Además, no es un descubrimiento
meramente, el verdadero crecimiento en gracia, es el resultado de luchas santificada.
Dios entrena sus soldados, no en tiendas de gran comodidad y lujuria, sino por marchas
forzadas y servicios difíciles. Él les hace que atraviesen arroyos, que naden por los ríos, que
escalen montañas y recorran muchas millas con las mochilas en sus espaldas. Pues bien,
cristiano, ¿No te dice esto algo sobre las tribulaciones que estás atravesando? ¿No es esta la
razón por la cual él está contendiendo contigo?
C. H. Spurgeon.
En Génesis
Es la simiente de la mujer.
En Éxodo
Es el cordero de la Pascua.
En Levítico
Es el sumo Sacerdote.
En Números
En Deuteronomio
En Josué
En Jueces
En Ruth
En 1 Samuel y 2 Samuel
En 1 y 2 Reyes, 1y 2 Crónicas
En Nehemias
Es nuestro restaurador.
En Ester
Es nuestro Mardoqueo
En Job
En Salmos
Es nuestro Pastor
En Proverbios y Eclesiastés
Es nuestro Sabiduría
En Isaías
En Jeremías
En Lamentaciones
En Ezequiel
Es el Hombre maravilloso de 4 rostros.
En Daniel
En Oseas
En Joel
En Amós
En Abadías
En Jonás
En Miqueas
En Nahún
En Habacuc
Es el Evangelista que llora, revive las horas de Dios atravez de los tiempos.
En Sofonías
Es nuestro Salvador.
En Hageo
En Zacarías
En Malaquías
NT
En Mateo
En Marcos
Es el Siervo.
En Lucas
En Juan
Es el hijo de Dios
En Hechos
En Romanos
Es la justicia de Dios
En 1 y 2 Corintios
En Efesios
Es la cabeza de la iglesia.
En Filipenses
Es tu alegría.
En Colosenses
Es tu Plenitud.
En 1 y 2 Tesalonisenses
Es tu Esperanza.
En 1 Timoteo
El es tu fe.
En 2 Timoteo
El es tu estabilidad.
En Tito
El es la Verdad.
En Filemón
El es tu Benefactor
En Hebreos
El es tu Perfección.
En 1 Pedro
El es tu Ejemplo.
En 2 Pedro
El es tu Pureza.
En 1 Juan
El es tu Vida.
En 2 Juan
El es quién te Exhorta.
En 3 Juan
El es tu Motivación.
En Judas
El es el fundamento de tu Fe.
En Apocalipsis
“¿No está escrito esto en el libro de Jaser? Y el sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró
a ponerse casi un día entero” (Josué 10:13)
Muy poco se sabe del libro de Jaser. Las Escrituras solamente hacen dos menciones sobre este
libro, hoy consideraremos la primera.
Jaser significa “justo” y este libro es llamado en la versión Vulgata (la traducción al latín de la
Biblia) “el libro de los justos”. Es posible que haya sido un libro en el cual se narraban eventos
importantes relacionados con batallas y héroes del pueblo de Israel.
El evento que se narra en Josué capítulo 10 sería, sin duda, digno de estar en este libro. Fue un
día sin precedente, ya que fue el día en que Israel peleaba contra cinco reyes de los cananeos y
Josué clamó a Dios para que el sol y la luna se detuvieran a fin de culminar la batalla. “No hubo
día como aquél, ni antes ni después de él, habiendo atendido Jehová a la voz de un hombre;
porque Jehová peleaba por Israel”.
Dios atendió al clamor de Josué y peleó por su pueblo. Es de ánimo para nosotros ya que “no
se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír” (Isaías 59:1).
El Dios de Josué es también nuestro Dios. Un Dios poderoso y que escucha nuestra oración.
¡A la batalla y a la victoria
“Y endechó David a Saúl y a Jonatán su hijo con esta endecha... He aquí que está escrito en el
libro de Jaser. ¡Ha perecido la gloria de Israel sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes!”
(2 Samuel 1:17-19)
Aunque muy poco sabemos sobre este libro de Jaser, al menos tenemos la mención de dos
hechos registrados en este libro: la maravillosa victoria de Israel como resultado de que Dios
atendió a la voz de un hombre (Josué 10), y la trágica derrota de Israel como resultado de un
hombre que no quiso atender a la voz de Dios.
La derrota del pueblo de Israel fue producto de la desobediencia de Saúl a la voz de Dios,
dejándonos una clara advertencia en cuanto a la importancia de prestar atención a los
mandamientos divinos.
Más que hablarnos sobre Saúl y Jonatán, este cántico refleja mucho sobre el mismo David.
David, el hombre conforme al corazón de Dios, lamenta el hecho de que Saúl, quien le había
perseguido por muchos años, había muerto. Lamenta que los enemigos de Dios, los filisteos,
estaban ganando terreno al obtener la victoria, y que el ejército de Israel se había debilitado al
perder dos grandes valientes.
Para David el honor del nombre de Dios era de mayor importancia y, aunque Saúl había caído,
esta derrota no era para celebrarla, sino para endecharla. ¡Cómo han caído los valientes!
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El Salmo 89 fue escrito en un tiempo de crisis nacional. Los babilonios habían invadido Judá. La
familia real había sido llevada cautiva. El templo había sido arrasado por completo. La gente ya
no podía ir a la casa de Dios.
El autor de este salmo, Etán ezraíta, se quedó perplejo. ¿Acaso Jehová no había prometido un
rey sobre el trono de David para siempre? ¿Entonces por qué su rey estaba en el exilio? ¿Acaso
Dios no había prometido proteger a su pueblo? ¿Entonces por qué estaban bajo el control de
paganos idólatras?
¿Te esconderás para siempre? Estas palabras dejan entrever un tono de impaciencia. Etán
anhela que Dios se revele. Su modo de pensar era que Dios debería acabar con los babilonios.
Él quería ver al ejército de Dios descender por los montes para venir a rescatar a Jerusalén.
¿Qué pasó con la oración de Etán?
¿Hasta cuándo, oh Jehová? Dios contestó su oración en el tiempo que Él consideró oportuno.
Daniel reconoció la respuesta en las palabras de Jeremías (Dn 9.2). Dios había decretado un
exilio de setenta años para su pueblo (Jer 25.11-12; 29.10). Cuando este período llegaba a su
fin, Dios movió a un rey gentil, Ciro, para que dejara regresar a su pueblo (Is 45.1). Sólo
entonces Jerusalén sería reconstruida. Sólo entonces el templo sería restaurado.
¿Te esconderás para siempre? Dios contestó esta oración también. Pero pasaron quinientos
años antes que el Dios que “se había escondido” de Etán “se manifestara” en Cristo, el Mesías,
la verdadera simiente de David (Mi 5.2).
Pensamiento del día: Cuando Dios no contesta nuestras oraciones inmediatamente, tendemos
a dudar de Él. Cuando las cosas no son como pensamos que deberían ser, nos sentimos
inclinados a tomar las riendas del asunto. Que el Señor nos ayude a tener fe para esperar
pacientemente en Él (Sal 37.7).
conclusión
Recuerde que a Dios le place conducirnos por las dificultades, para que al llegar a la meta🏆
miremos atrás, y veamos de todo lo que el Señor nos guardó.
Y que de no ser por su infinita gracia, hubiésemos sucumbido en medio del mar.
Abordemos, pues ya estamos de salida a la capital del Imperio, a la Gran Ciudad de Roma 🛕.
1) Las personas del viaje :🛳️
El viaje iba compuesto por Pablo, nuestro personaje principal, lucas el médico amado; y
Aristarco, un fiel creyente.
Note que el preso⛓️era Pablo, era Él quien debía ir a Roma, y sólo él.
Pero el amor que Dios ha derramado en nuestros corazones por su Santo Espíritu (romanos
5:5), hace que veamos sacrificios como los de estos dos creyentes.😍
Lucas y Aristarco sacrificaron a sus familias, sacrificaron el bienestar propio, sacrificaron sus
empleos ( 👨🏻🔬El consultorio de Lucas quedó vacío); y todo por acompañar al Gran Apóstol
Pablo.
No hay una aplicación mas certera de la verdad expuesta en Heb 12:3 que aquí ;pues se nos
manda a "Acordarnos de los presos como si nosotros también estuviésemos presos".
Dijo el escritor ✏️Santiago "La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta:
Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo"
(1:27).
La estamos practicando?🤔
Cuánto apreció Pablo la compañía de sus dos hermanos en Cristo, y cuánto debemos nosotros
en agradecimiento a Lucas, por dejarnos esta joya de relato📜.
Todos ellos sumado al trío cristiano, hacían un total del 276 personas (37).
Llegar a Roma.
Dios le había dicho a Pablo acerca de la necesidad de dar testimonio en Roma.
El gran Apóstol iba a llevar el evangelio🗣️a la corte romana ; y quizás había entendido que la
mejor manera (quizás también la única) era el ir preso 🔗.
Ardía en él una pasión por las almas perdidas 💔; podía descubrir su corazón al decir que era
deudor a griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios ; deudor de llevarles el evangelio (Rom
1:14).
Y con gran gozo subió al barco 🚢 , haciendo lo que su corazón le pedía "ir a hablar de su
Salvador".
Cuántos viajes hemos realizado con el propósito de honrar y glorificar el nombre de Dios?
Podemos acostumbrarnos a vivir para nosotros⛱️, a viajar para la familia🏕️; pero será que
nuestro barco a Roma lleva tiempo esperando por nosotros para zarpar con el evangelio?.
El Apóstol no.
Él podía decir
Es decir "si voy vivir, mi vida será para Aquél que me salvó".
Con dificultad.
Narra Lucas
"haciéndonos a la vela desde Sidón navegamos a sotavento de Chipre, porque los vientos eran
contrarios" (4)⛵.
Cómo entender que Dios permita dificultades si lo que está por delante es el desarrollo de su
voluntad?
Pues, los caminos 🛣️de Dios son inescrutables
(Rom 11:33).
Eran tantos los peligros que los tripulantes perdieron toda esperanza de salvarse⚠️.
En medio de los peligros consuela saber cuál es el propósito de nuestro viaje ; cuál es el sentir
de nuestra vida.
Si logramos comprender que nuestra vida es para dar gloria de Dios, tengamos consuelo,
porque Dios está usando esos peligros para llevar Gloria a su nombre. 🙂
(Ex 1:22).
(1 Re 17:1) .
√ Daniel fue levantado en medio de la cautividad⛓️🎎 (Dn 1:6).
(Hch 6:5).
(Hch 15:40).
Y en la crisis en que vivimos Dios sigue levantando líderes, pues "Él no se ha dejado a sí mismo
sin testimonio"
(Hech 14:17).
Si el camino fuera fácil, con nuestras fuerzas💪🏼 nos bastan; pero como es difícil, nos basta es
con la gracia de Dios.
Vez tras vez necesitamos ir a su presencia humillados🙇🏻♂️para recibir fuerzas y poder seguir
adelante.
Pues es por medio de lo difícil, que podemos entender que lo hecho es por la gracia del Señor
y Él y solo Él es glorificado.
(Ex 4:1).
Pero el Señor en su compasión nunca nos expresa su promesa en una sola ocasión pues nos
preguntaríamos :
Y en el versículo (24) Dios lo hace con su siervo Pablo "No temas, es necesario que
comparezcan ante César" y añade
Como si Dios le dijera " Las cosas no han cambiado Pablo, saliste para Roma y vas a llegar a
Roma, no sólo tu ; sino todos".
Bendito sea el Señor que vez tras vez nos dice en su palabra📖
"No Temas".
Bendito sea el Señor que vez tras vez nos dice y nos demuestra que está con nosotros.
En ocasiones creemos que las dificultades son síntomas de que la cosa no está bien, y si la cosa
no está bien es porque Dios no está con nosotros ; no le vemos ni le sentimos.
Pero Él ha dicho " No temas, soy tu ayudador ; no te dejaré ni te desampararé ( Heb 13:5).
Pidamos al Señor que abra nuestros ojos👀, quizás estemos como el siervo de Eliseo, turbados
🥺 al ver todo lo que nos adversa ; y no logramos ver todo lo que está a nuestro favor.
Señor abre nuestros ojos pues más son los que están con nosotros que los que están con ellos.
( 2 Reyes 6:17)
Desde este lado decimos "es que siempre estuvieron a salvo" a pesar de tantos peligros.
Con el dólar así🤑, estamos aniquilados; cuando en realidad estamos a salvos pues estamos en
las manos del Señor, y nadie nos puede arrebatar de su mano ( Jn 10:29).
Dios les preservó de todos aquellos peligros y una vez más vieron la mano del Señor con ellos.
El viaje no fué como ellos hubiesen planeado, pero sí según el plan de Dios.
Pues sus pensamientos son más altos que los nuestros y sus caminos mas altos que los
nuestros
( Isa 55:9).
Por lo tanto, no busquemos entender el plan de Dios con razonamientos humanos y lógicos.
Al fin llegaremos, y haremos lo que Dios ha trazado para nosotros ; pero tengamos en cuenta
que el camino no será nada cómodo pues sufriremos amenazas⚔️(42);
nos mojaremos en alta mar, quizás el agua nos llegue al cuello, pero no nos ahogaremos🏊🏼♂️
(43-44).
Pues el ángel de Jehová estará con nosotros (23) ; ya que el Ángel de Jehová acampa alrededor
de los que le temen y los defiende
fin
E.S.C.
Solo pequeñeces
14-04-2020
Aconteció que, yendo de camino, entró en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en
su casa. Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús,
oía su palabra. Marta, en cambio, se preocupaba con muchos quehaceres y, acercándose, dijo:
—Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude.
Lucas 10:38-42
Reflexión
Una señora de edad había esperado toda la vida la oportunidad de viajar en un tren. Quería
contemplar, devorar cada paisaje con los ojos y disfrutar todo cuanto pudiera en los kilómetros
que iría a recorrer.
Entró muy decida en el vagón de pasajeros y cuando el tren partió, comenzó a acomodar los
paquetes y cestas que traía, trató de arreglar confortablemente su asiento y acomodar las
cortinas, de colocarse en situación cómoda pero, de repente, cuando ya estaba lista para
comenzar la contemplación del paisaje, el conductor gritó el nombre de la estación a la cual
iban, ¡ya habían llegado!.
"Qué pena", dijo ella, "si hubiese sabido que llegaríamos tan pronto no habría perdido el
tiempo en pequeñeces".
Mis queridos hermanos y amigos, de esta historia podemos aprender algo, a veces por mirar
los detalles… se nos va la vida.
No, no me refiero a comer en exceso mientras estamos en cuarentena, aunque esa es una
preocupación real.
David dijo: “Cuando estaba en angustia, tú me hiciste ensanchar” (Sal 4.1). Literalmente, él
estaba diciendo que creció bajo presión. Pensamos que en la esfera natural la presión hace
que algo disminuya de tamaño, pero en la esfera espiritual, la presión produce crecimiento.
Con todo, aunque pudiéramos pensar que todo esto es un impedimento para el progreso
espiritual, toda esta “presión” en realidad puede “ensancharnos” espiritualmente. Es un
tremendo consuelo tener siempre en mente que Dios nunca va a permitir una circunstancia en
la vida suya o en la mía que no tenga el potencial para hacernos crecer espiritualmente.
Incluso la pandemia actual, con las limitaciones que nos ha impuesto que nos imposibilita
reunirnos como creyentes, no puede impedir nuestro crecimiento. Pero el crecimiento no
ocurre automáticamente. Requiere un esfuerzo de nuestra parte. Con tiempo adicional,
¿puedo usarlo para estudiar la Palabra de Dios, escuchar ministerios, o para orar? ¿Puedo
aprovechar las largas horas del día para ponerme en contacto con otros creyentes, aquellos
que están solos, para animarlos?
El crecimiento espiritual no se trata de hacer sino de ser. No es lo que yo puedo lograr para
Dios (por valioso que pudiera ser), sino lo que conozco de Dios y lo mucho que puedo reflejar a
Cristo en mi vida.
David Livingston, el famoso misionero de África en los años 1800, en cierta ocasión se vio
impedido de ir río abajo. Tristemente, la obstrucción eran los cuerpos de esclavos muertos que
habían sido echados al río. Cuando sus asistentes vinieron para decirle que no iban a poder
navegar por el río y le preguntaron adónde quería ir, él les dio su famosa respuesta: “Adonde
sea, con tal que sea hacia adelante”.
Nosotros podemos seguir adelante a pesar de las barricadas en nuestros parques o vías
peatonales, los toques de queda, y ¡la miríada de otras restricciones que nos dicen que no nos
movamos! Podemos avanzar y ensancharnos aun en medio de las circunstancias actuales.
Permita que la presión lo haga un creyente más grande.
💥💥💥✝💥💥💥
14 DE ABRIL 2020
PALABRAS DE DIOS :
FUE POR ÉSO QUE PABLO le ESCRIBIO, ANIMANDO al JÓVEN TIMOTEO PASTOR DE EFESO *A
AVIVAR LA LLAMA de SU FE
ESTO COMIENZA CON FRECUENCIA CUANDO UNA TRAGEDIA o UNA DECEPCIÓN DESVIAN SU
ATENCIÓN.
El CRISTIANO QUE YA NO ESTÁ DISPUESTO a DEFENDER AQUELLOS QUE UNA VEZ CONSIDERO
IMPORTANTE, COMIENZA PRONTO A CLAUDICAR
PIENSELO. ¿ ES SU ENTUSIASMO POR LAS COSAS DE DIOS MAS FUERTE QUE ANTES o HA
DISMINUIDO CON el TIEMPO?
🙏 ORACIÓN :
SEÑOR, FORTALECEME EN LAS PRUEBAS PARA QUE NO DECAIGA MI PASIÓN y AMOR POR
SERVIRTE CADA DÍA.
Repatriación y hogar
Mientras muchos de nosotros por lo menos estamos en nuestras propias casas, hay muchas
personas que todavía están varadas en tierras lejanas. Esto ha generado la necesidad de los
llamados “vuelos de repatriación”, vuelos chárter especiales, organizados por los gobiernos
para traer a los ciudadanos de regreso a su país de origen. Estos vuelos especiales pueden ser
muy costosos (más de 1,000 dólares por pasajero, incluso en vuelos relativamente cortos). Los
vuelos de larga distancia pueden ser aún más caros. Por ejemplo, un asiento en un vuelo de
repatriación desde San Salvador hasta Houston (EE. UU.) se estaba vendiendo por 1,197
dólares a finales de marzo. Este tipo de vuelo no es algo nuevo. En 2019, el Reino Unido operó
el programa de repatriación más grande de la historia en tiempos de paz cuando la aerolínea
Thomas Cook cesó sus actividades de manera abrupta, dejando a ciudadanos británicos
varados alrededor del mundo. Esta operación, apodada “Operación Matterhorn” (¿quién
inventa estos nombres?), trajo a casa a 150,000 pasajeros.
“Casa” u “hogar” son palabras maravillosas. “Hogar, dulce hogar”. Pablo les escribió a los
corintios: “Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos
[presentes] en el cuerpo, estamos ausentes del Señor… confiamos, y más quisiéramos estar
ausentes del cuerpo, y presentes al Señor” (2 Co 5.6-8). Pablo usa aquí la misma palabra base
para “presente” y “ausente”, pero cambiándole el significado al usar un prefijo diferente. La
palabra “presente” (o, “en casa”) es “endeméo” y la palabra “ausente” es “ekdeméo”. Thayer
define la palabra griega “endeméo” como “estar entre su propio pueblo, morar en su propio
país”. Un día, quizás muy pronto, usted va a estar entre su propio pueblo. Usted va a estar en
casa.
Alguien ha dicho que la manera más segura de delatarse como visitante (alguien que está lejos
de casa) es parándose en una calle en lugares como Chicago o Nueva York y mirar hacia arriba
a las imponentes alturas de la Torre Sears o el Empire State Building. Estos edificios son
demasiado conocidos para los residentes locales, así que cualquiera que se impresione con
ellos probablemente es un visitante. Y en un sentido, un rasgo distintivo de nuestra vida que
debería diferenciarnos de los de este mundo, debería ser que nosotros estemos mirando hacia
arriba. Uno de los siervos más ocupados y productivos del Señor escribió: “Mas nuestra
ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo” (Fil
3.20). Sus palabras hacen que nos preguntemos: ¿Estamos realmente (y no solo
teológicamente) esperando al Salvador? ¿O se necesita un virus y el colapso de la economía
para que levantemos nuestra mirada hacia el cielo?
Habiendo recuperado la verdad del Rapto y de los eventos futuros, los creyentes de hace más
de siglo y medio se regocijaron al pensar que el cielo era su hogar. De hecho, la profecía era
parte del testimonio y la vida de la asamblea de tal forma que un famoso predicador bautista
dijo, burlándose de los creyentes de una asamblea: “Varones de Plymouth, ¿por qué estáis
mirando al cielo?” Sin embargo, esos creyentes que estaban “mirando al cielo” fundaron
orfanatos, evangelizaron comunidades, enviaron misioneros, ayudaron a educar a los niños en
las escuelas bíblicas, e hicieron muchas cosas más que honraron a Dios y ayudaron a la
humanidad. ¡Nada mal para ser simplemente personas “mirando al cielo”!
Yo sé que, como dijo el conocido locutor de radio Paul Harvey, “en tiempos así, es útil recordar
que siempre ha habido tiempos así”. Pero aun si esto no es más que un contratiempo temporal
en la historia del planeta, no nos hará daño ocupar nuestras mentes con el cielo, más de lo que
lo hemos hecho hasta ahora. Nos dirigimos a casa, y, sin importar lo que nos depare el futuro,
estamos yendo a casa mucho antes de lo que pensamos. Sería bueno si otros nos tildaran de
extranjeros y peregrinos por estar mirando hacia arriba con tanta frecuencia.
Stuart K. Hine, que sirvió al Señor en Ucrania Occidental, escuchó la versión rusa del himno
sueco “Cuán grande es Él” y lo tradujo al inglés. Él y su esposa estaban trabajando entre
europeos orientales desplazados que se habían visto forzados a regresar a sus patrias debido a
la Segunda Guerra Mundial. Aquellos a quienes los Hine estaban tratando de ayudar les
preguntaban incesantemente: “¿Cuándo volveremos a casa?” “¿Y qué de nuestra casa?”
“¿Cuándo podremos irnos a casa?” Con esas preguntas casi constantemente en su mente,
Stuart Hine añadió una estrofa a ese maravilloso himno:
cantando la grandeza
“Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos
de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos. Y por esto también
gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial” (2 Co 5.1-2). Como
hemos nacido de arriba, y como Dios es nuestro “Padre celestial”, no solo vamos a nuestra
patria celestial sino a la casa del Padre. Usted, mi querido hijo de Dios, va a ser parte de la
“repatriación” más grande de la historia. Usted está yendo a casa.
Mi senda recorrida,
su mano la trazó.
Jesús, mi timonel.
en tierra de Emanuel.
Yo soy de mi Amado
y mío es Él también;
en gracia me ha invitado
al celestial Edén.
en tierra de Emanuel.
“Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la
tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza” (Romanos 5:3-4)
Muchas veces es difícil entender cómo es que las tribulaciones pueden ser una razón para
gloriarnos. El apóstol Pablo no dice esto como una manera liviana de tratar con un tema tan
profundo como las pruebas, sino más bien como uno que ha experimentado el calor del crisol
de la prueba en su propia vida.
El atleta sabe que la intensidad del ejercicio diario le ayuda a estar en forma para la carrera y el
escultor sabe que los golpes de martillo sobre la piedra producirán una hermosa pieza de arte.
Asimismo, las pruebas tienen como resultado formar en nosotros virtudes que de otra manera
no se verían.
La paciencia, la perseverancia (traducido en el versículo como prueba) y la esperanza son tres
virtudes que el creyente necesita en su vida cristiana y que reflejan el carácter de nuestro
Salvador. Para Dios producir estas virtudes es necesario que pasemos por la prueba. Esos
golpes de martillo producirán un carácter cada vez más semejante al de Cristo.
Dios también utiliza tres recursos para sostenernos en medio de la tribulación. “La paz por
medio de nuestro Señor Jesucristo” (Romanos 5:1); “la gracia en la cual estamos firmes”
(Romanos 5:2) y “el amor de Dios que ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu
Santo que nos fue dado” (Romanos 5:5).
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Un maestro llevó globos a su escuela y le regaló uno a cada alumno. Después ordenó que
anotasen sus nombres en sus globos, los dejaran en el piso y abandonaran el aula. Una vez
afuera les dijo: “Tienen 5 minutos para que cada uno encuentre el globo que lleva su nombre”.
Los alumnos entraron y buscaron, pero se acabaron los 5 minutos y casi nadie había podido
encontrar el suyo.
El maestro les dijo: “Ahora tomen cualquier globo y entréguenselo al dueño del nombre que
lleva anotado. En apenas un par de minutos todos los alumnos ya tenían el suyo en la mano.
Finalmente dijo el maestro: “Chicos, los globos son como la felicidad. Nadie la va encontrar
buscando la suya solamente. En cambio, si cada uno se preocupa por la del otro, encuentra
rápido la que le pertenece”.
En estos tiempos difíciles que nos toca atravesar, tengamos esto más presente que nunca. Que
nadie busque solo su propio beneficio, que nadie piense que de esto sale solo.
Si cada uno piensa en los demás y se ocupa del otro, lograremos avanzar hasta Vencer.
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╔═══❖•ೋೋ•❖ ═══╗
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No permitas que las circunstancias difíciles te llenen de temor y ansiedad. El Señor tiene el
control de la situación y te provee los recursos necesarios para mantenerte hasta el final.
_Los días malos tienen fecha de vencimiento, el Señor es quien te respalda, te fortalece y te
_Recuerda, no son las dificultades de la vida que nos llevan hacia abajo, sino cómo las
manejamos._
Isaías 40:31
_pero los que esperan en el Señor tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas
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╚═══❖•ೋೋ•❖═══╝
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2020-04-17
Leer: Hebreos 2:14-18
Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son
tentados (v. 18).
Las ocho semanas de «receso» de José de su trabajo para participar con una iglesia de Nueva
York en ayudar a personas en situaciones críticas no fueron vacaciones. Dijo: «Fue volver a
vivir entre los que no tienen un techo, ser uno de ellos, recordar cómo es tener hambre, estar
cansado y sentirse olvidado». Su primera experiencia en las calles había sido nueve años antes
cuando llegó sin trabajo ni lugar donde vivir. Durante trece días, vivió en la calle, con poca
comida y descanso. De ese modo, Dios lo había preparado para décadas de ministerio entre los
necesitados.
Cuando Jesús vino a este mundo, también decidió compartir las experiencias de aquellos a
quienes había venido a salvar: «por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también
participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la
muerte, esto es, al diablo» (Hebreos 2:14). Desde que nació hasta que murió, Jesús
experimentó todo como ser humano, excepto el pecado (4:15). Y por haberlo vencido, puede
ayudarnos cuando somos tentados a pecar.
El Señor que nos salvó sigue conectado con nosotros e interesado en nuestras circunstancias.
Sea lo que sea que vivamos, Aquel que nos rescató está dispuesto a ayudarnos en nuestras
necesidades. — Arthur Jackson
¿Cómo te alienta saber que Jesús tomó forma de hombre para identificarse con nosotros y
ayudarnos?
🏬 PERMANECEMOS EN CASA 🏬
Para el sensato no es suficiente saber de la palabra de Dios sino que quiere conocer a Dios por
medio de ella. Quiere experimentar su presencia. Quiere disfrutar de su amor.
Ahora, en segundo lugar el hombre sensato entiende que vendran peligros y tormentas.
Cuando las lluvias llegan en nuestra vida, parecería que la casa se va inundar, cuanto pánico
produce el ruido del río, el golpe de los vientos.
Ha sido tan triste no poder congregarnos.. no poder estar juntos... no poder ni aún visitarnos.
¿De qué manera podemos permanecer quietos y fuertes con nuestra familia mientras la
tormenta brama a nuestro alrededor?
He aquí un sencillo pensamiento que puede enseñarnos a permanecer quieto en los tiempos
de tormenta, de lluvia y reconocer el poder de Dios.
La palabra Quieto: implica estar libre del ruido y de la turbulencia; sin problemas.
Cuando estamos libres del ruido o de la turbulencia exterior, somos capaces de escuchar la voz
serena del espíritu de Dios, conforme viene a consolarnos y guiarnos en medio de las
tempestades. Si escuchamos mucha información externa, si el oído se inclina mas a las redes
sociales que a la Palabra de Dios, comenzaremos a experimentar ruidos, que podría opacar
nuestra fé, nuestra confianza con Dios. Nuestra propia preocupación, nos aíslan de la
presencia del Señor. Debemos permanecer en calma.
🌾 Meditemos
Wilmer Briceño
“Dios se mueve detrás de las escenas, pero Él mueve todas las escenas en las que Él está
detrás”. John Nelson Darby
El apóstol Juan fue un hombre excepcional. Un discípulo del Señor. Un testigo del Calvario. Un
apóstol de la Iglesia. Uno de los mejores hombres que este mundo ha tenido.
Al final de su vida fue exiliado por las autoridades romanas. Fue desterrado a una pequeña isla
llamada Patmos, cerca de la costa de Asia Menor.
No me cabe duda de que él se habrá parado de vez en cuando a la orilla del mar y habrá
mirado hacia el oriente. A la distancia se encontraba el continente. Y más allá estaba Éfeso, el
lugar que había llegado a ser su hogar. Habrá pensado en las asambleas entre las cuales
laboraba, y se habrá preguntado: “¿Por qué estoy aquí?” “¿Por qué mi servicio ha sido
acortado?”
Pero Dios no le había puesto fin a su servicio. Su exilio tenía un propósito. Fue en Patmos que
Juan prestó su mayor y último servicio para el Señor (Ap 1.9). Fue allí donde se le dio “la
revelación de Jesucristo” (Ap 1.1). “Dios se mueve detrás de las escenas”.
Hoy día el escenario de la historia humana es ocupado por políticos y científicos. Ellos dominan
los medios de comunicación y, como escribió Shakespeare, “se pavonean y se agitan una hora
en el escenario”. Pero ellos son actores en un escenario establecido por Dios. Él ha escrito el
guion. Cada edad sucesiva no es más que un acto en el gran drama de la redención que se está
desarrollando. Estos últimos días han demostrado cuán incapaz es el hombre para influir en los
acontecimientos. Sin ser visto y sin ser reconocido, Dios está obrando y cumpliendo sus
propósitos. “Dios se mueve detrás de las escenas”.
“Pero Él mueve todas las escenas en las que Él está detrás”. Darby estaba en lo cierto al
reconocer que Dios no sólo está detrás de las escenas, sino que Él es el que prepara los
escenarios. Dios no está confinado por la historia. A diferencia de los actores humanos, Él no
tiene que adherirse al guion. El dramaturgo divino escribe los diálogos, pone el telón de fondo,
y dispone las escenas.
Nosotros trabajamos con lo que se nos da, pero Dios no. “Él mueve todas las escenas en las
que Él está detrás”.
Seguramente María y José se habrán preguntado por qué Dios permitió que Augusto César
decretara que todo el mundo fuera censado (Lc 2.1). El momento era extremadamente
inoportuno para María, pues estaba embarazada, “había concebido del Espíritu Santo” (Mt
1.18). Pero Dios sabía lo que estaba haciendo (Mi 5.2). Dios estaba obrando.
Cuando los judíos y los soldados de Pilato quebraron las piernas del ladrón en la cruz,
pensaban que estaban cumpliendo la Ley (Jn 19.31-32). Los soldados tal vez pensaban que
solamente estaban acabando con su sufrimiento. Ignoraban que realmente estaban enviando
al ladrón al paraíso.
Pensamiento del día: No nos impacientemos. Aunque son tiempos difíciles, Dios está en
control. Él está haciendo que todas las cosas cooperen para bien (Ro 8.28).
“Dios se mueve detrás de las escenas, pero Él mueve todas las escenas en las que Él está
detrás. Tenemos que aprender esto, dejarlo obrar y no pensar mucho en los movimientos
ajetreados de los hombres; ellos llevarán a cabo los movimientos de Dios. El resto perecerá y
desaparecerá. Nosotros solo tenemos que hacer tranquilamente su voluntad”.
- Charles Spurgeon
● "El hombre que moviliza a la iglesia Cristiana para orar, hará la mayor contribución a la
evangelización del mundo en la historia".
- Andrew Murray
● "Nosotros tenemos que orar con nuestros ojos en Dios, no en las dificultades."
- Oswald Chambers
● "No hay ninguna otra actividad en la vida tan importante como la de la oración. Cualquier
otra actividad depende de la oración para su mejor eficiencia."
- M. E. Andross
● "El que huye de Dios en la mañana, difícilmente lo encontrará en el resto del día." - John
Bunyan
- Andrew Murray
● "Confiar en Dios es tener que empezar de nuevo cada día, como si nada se ha hecho".
- C. S. Lewis
● "Mientras más ores, menos tendrás pánico. Mientras más adores, menos te preocuparás.
Usted se sentirá más tranquilo y menos presionado".
- Rick Warren
● "Tengo tanto que hacer que voy a pasar las primeras tres horas del día en oración."
- Martin Luther
● "La oración no nos prepara para el trabajo mayor; la oración es la mayor obra."
- Oswald Chambers
- D. L. Moody
LA BUENA SEMILLA
Jueves
23
Abril
Yo hablaba lo que no entendía; cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía.
Oye, te ruego, y hablaré; te preguntaré, y tú me enseñarás. De oídas te había oído; mas ahora
mis ojos te ven.
Job 42:3-5
Job
La historia de Job, relatada en la Biblia en el libro que lleva su nombre, es extraña. Era un
hombre de una conducta ejemplar, recto, generoso y lleno de compasión por los pobres.
También era “temeroso de Dios y apartado del mal” (Job 2:3). Y súbitamente perdió no solo
todos sus bienes, sino también a sus hijos y su salud. A todos estos sufrimientos se añadieron
los causados por las insinuaciones y las acusaciones de sus amigos.
Hoy nuestras palabras también pueden ser habladurías para los que sufren. ¡Cuántas palabras
se dicen para romper el silencio! Job, herido en su espíritu, proclamaba su inocencia en medio
de sus desgracias. Sus amigos le repetían: Dios te castigó porque lo mereces, pues Dios
recompensa a los buenos y castiga a los malos. Job rechazó esta visión de las cosas. Él no solo
no había cometido una falta particular, sino que también constató que otros justos sufren (cap.
12:4), y que mucha gente mala tiene una vida próspera (cap. 12:6; 21:7-15).
Job sabía que Dios existe y trataba de obedecerle. Entonces, ¿por qué recibió este mal, este
sufrimiento? ¿Por qué Dios se mantuvo en silencio? Job interpeló a Dios y le pidió que le
mostrara el porqué de esta situación. Dios respondió personalmente a Job y le mostró que Él,
el Creador, se ocupa de cada una de sus criaturas. Job lo conoció más de cerca y experimentó
que Dios “es muy misericordioso y compasivo” (Santiago 5:11). A veces Dios guarda silencio,
pero no está ausente en nuestros días sombríos. ¡A veces hay que callar para conocerlo mejor!
“ Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi
corazón ” (Jeremías 15:16)
¿Qué "alimento" es el más importante para ti? La respuesta revelará mucho sobre tu presente.
Los que se centran en los alimentos, hablan de comida, piensan en la comida, ansían la comida
y viven sus vidas alrededor de la comida. Quienes se alimentan de información llenan sus
mentes con las últimas noticias sobre cualquier tema que les interesa. Luchan para obtener la
información más reciente porque es lo que los satisface, no están felices emocionalmente y en
sus relaciones sus emociones gobiernan.
Si bien todas estas áreas comprenden la realidad de nuestras vidas, no deben ser la fuente de
nuestras vidas .
Jesús dijo: " No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios
"
En otras palabras, Si bien debemos comer y relacionarnos con nuestro mundo y lo que nos
rodea, esas áreas no pueden ser el centro de nuestras vidas . Sólo Sus palabras pueden
satisfacernos y darnos fuerza y sabiduría para vivir por encima de la corrupción que hay en el
mundo.
Así que… ¿ de qué te estás alimentando ? Si tu enfoque y pasión no es la Palabra de Dios nunca
estarás satisfecho . Las otras áreas que he mencionado comenzarán a dominar tu vida y te
dejarán insatisfecho y estresado.
UN ESPÍRITU QUE SE NUTRE DE LAS PALABRAS DE DIOS PRODUCIRÁ VIDA Y PAZ. Romanos 8:6
Ahora bien al leer y meditar la Palabra e instruirnos en ella para encontrarnos con el Señor
(Cristo en nosotros) te llevará a cambiar tu manera de pensar, por tanto cambia tu manera de
vivir (Romanos 12:2)
Salmos 119:160