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POLITÉCNICA DE
CHIMBORAZO
FACULTAD DE CIENCIAS
ESCUELA DE CIENCIAS QUÍMICAS
INGENIERÍA EN BIOTECNOLOGÍA
AMBIENTAL
Nombre:
Joffre Niama
Código: ----
1. INTRODUCCIÓN.............................................................................................................1
2. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA........................................................................................2
3. CONCLUSIÓN..................................................................................................................9
4. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS..........................................................................10
Tabla de Ilustraciones
PALABRAS CLAVE
Hidrocarburos/Metales Pesados/Remediación/Enzimas
1. INTRODUCCIÓN
Lysinibacillus sphaericus, conocido antes como Bacillus sphaericus, fue aislado en 1904 por
Neide y Meyer en ambientes acuáticos. Es un microorganismo que tiene la capacidad de
formar una estructura especializada conocida como espora, que tienen una forma circular, en
posición terminal del esporangio, y vista por el microscopio tiene forma similar a una raqueta
(Hernández, 2011).
Su importancia a nivel mundial, y por lo cual es ampliamente conocida, quedó asentada en los
años ochenta, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó el control biológico
de mosquitos en países tropicales. En el año 2006 el grupo de Pollmann y colaboradores lo
aisló en una mina de uranio y encontró uranio acumulado en una proteína adherida a su pared
celular, hoy conocida como capa-S, así como también encontraron grandes cantidades de
Carbono a causa de Hidrocarburos (IAEA, 2018).
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Todo lo mencionado por la razón de que esta bacteria es un microorganismo esporulado, lo
cual le confiere la habilidad de persistir en el ambiente por tiempos prolongados, y así
remediar daños provocados de manera antropológica (Hernández, 2011).
2. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
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2012 contiene un registro de 1221 derrames de petróleo en todo el mundo de más de 200
toneladas cada uno, de los cuales 888 derrames fueron ocasionados por embarcaciones. En
este sentido la Antártida no es ajena a estos accidentes, pues ya han existido derrames de
hidrocarburos bien documentados en este lugar. Lastimosamente, dichos antecedentes
confirman la poca resiliencia que presenta este ecosistema al no contar con la suficiente
capacidad como para afrontar los pequeños derrames ya producidos, pues lo que sucede con
los hidrocarburos es que se alojan en el sedimento marino o en ciertos estratos de la capa de
hielo mas no llegan a ser degradados (Merino, 2015).
Debido a la latente amenaza de algún posible derrame de hidrocarburos muchos estudios han
optado por proyectar soluciones a través de la biorremediación aplicando bacterias,
específicamente Lysinibacillus sphaericus (Merino, 2015).
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concentraciones que van de 30 a 100 mg/l en periodos que van de 5 horas a 14 días (Tirado,
2015).
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encuentra en rocas sedimentarias de origen marítimo, cuyo desgaste gradual o meteorización,
añade el elemento al suelo. La única forma de fósforo inorgánico de importancia biológica es
el fosfato (PO4) que las plantas absorben, incorporan a sus moléculas biológicas y después
transfieren al ser ingeridas por consumidores (Rodríguez, 2017).
El
fósforo es un nutriente esencial para el crecimiento de las plantas. Dado que hace parte del
material genético y del enlace fosfodiéster, involucrado en las reacciones de transferencia de
energía, este nutriente participa en la división y crecimiento celular, fotosíntesis,
almacenamiento de energía y otros procesos celulares, afectando el desarrollo de los
diferentes órganos de las plantas y en consecuencia la productividad y calidad de cultivos
(Rodríguez, 2017).
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eliminar contaminaciones por petróleo, puesto que tiene rutas de metabolismo de
hidrocarburos aromáticos que permiten la degradación de crudos aceitosos (Rodríguez, 2017).
De esta forma, los residuos de hidrocarburos pueden ser tratados por medio de procesos de
biorremediación, con microorganismos, y fitorremediación, con plantas de rápido crecimiento
como Canavalia ensiformis (Rodríguez, 2017).
Sin embargo, ninguno de estos dos procesos ayuda a incorporar nutrientes como el fósforo a
la tierra. Por lo tanto, se han realizado estudios en los que L. sphaericus actúa como bacteria
solubilizadora de fósforo y, por tanto, podría ser usada en un consorcio bacteriano para
degradar crudos aceitosos. Esto demuestra que diferentes cepas de L. sphaericus pueden
contribuir al mejoramiento nutritivo de suelos áridos en proceso de biorremediación. Esto
quiere decir que, en suelos ácidos contaminados con crudo, el uso de este microorganismo
puede ser un complemento o eventualmente un sustituto de fertilizantes (Rodríguez, 2017).
Los elementos metálicos juegan un rol fundamental en la vida, esto gracias a su papel como
catalizadores y estabilizantes de proteínas y paredes bacterianas, como es el caso del níquel, el
cobalto y el zinc; como también aquellos que, como el mercurio, el plomo y la plata, no tienen
ninguna función biológica (Osorio, 2016).
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De acuerdo con Osorio en el 2016, en su investigación denominada: Acumulación y desorción
de plomo en espora y célula vegetativa de Lysinibacillus sphaericus, varios de los metales
pesados no representan una amenaza inminente, pero todos si son tóxicos a partir de ciertos
niveles. En este sentido, tan solo la presencia de los metales no esenciales o para el caso de
aquellos que son cruciales para el funcionamiento de los procesos y estructuras celulares, una
concentración elevada de los mismos, es perjudicial para los organismos vivos (Osorio,
2016).
Lo anterior, se debe a que estos elementos tienen el potencial de inhibir la función de ciertas
enzimas, provocar cambios osmóticos, interferir con la fosforilación oxidativa y originar
alteraciones en la estructura de la membrana, proteínas y ácidos nucleicos, lo que provoca, en
términos de salud: cáncer, lesiones nefríticas y daños neurológicos; o a nivel microbiano, una
reducción en la actividad metabólica y la diversidad de las poblaciones (Osorio, 2016).
Dado que el plomo es un componente de alta ubicuidad, como respuesta a una constante
presión de selección en el ambiente a causa de su toxicidad, los microorganismos han
desarrollado múltiples estrategias para lidiar con este.
Esta es la razón por la que durante las últimas décadas se han realizado numerosos estudios
genéticos y moleculares, acerca de los mecanismos de interacción microbiana con este catión
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metálico, con el fin de comprender los procesos de detoxificación y de esta manera
aprovechar la capacidad de resistencia/tolerancia de hongos, algas y bacterias a dicho
elemento, para así implementar sistemas para su remoción/recuperación, procesos óptimos de
remediación de ambientes contaminados y técnicas de detección del mismo. (Córdoba, 2015).
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Figura 6. Cantidad de plomo presente en estudios realizados en
proteínas.
FUENTE: (Peña, 2013).
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3. CONCLUSIÓN
A lo largo del tiempo el ser humano ha tenido la necesidad de innovar para poder
desarrollarse y vivir de una manera más cómoda, los diferentes tipos de inventos han ayudado
a esto, sin embargo gran cantidad de los mismos han provocado y han sido los causantes de
daños al medio ambiente; así también el ser humano se ha visto en la necesidad (obligada) de
crear tecnologías para poder contrarrestar los daños causados por una o por otra circunstancia;
un claro ejemplo de lo mencionado es haber desarrollado la biotecnología como una potente
arma para remediar y/o mitigar en un gran porcentaje el daño realizado al ambiente.
Es menester acotar que, el mecanismo más conocido para la captación de estos potentes
contaminadores de suelo y agua es la adsorción a la Capa-S. Este microorganismo se alimenta
del petróleo y de metales pesados, los digiere en su interior y los expulsa al suelo y a las aguas
superficiales en forma de agua y de gases inofensivos; pero no se cumple siempre, hay
potentes contaminantes que no pueden ser eliminados; así los microorganismos únicamente
acumulan las concentraciones en su interior, e incluso la ciencia no ha encontrado
microorganismos para la eliminación de ciertos contaminantes.
Es por todo lo manifestado que se debe tomar conciencia por parte de las personas en ya no
contaminar el medio ambiente, al menos hablando de estos contaminantes tan fuertes, ya que,
si tanto personas como animales ingieren, tocan o inhalan, estos de forma gradual entran al
organismo y luego se da su bioacumulación, lo mismo que desencadena en enfermedades
catastróficas como es la difícil y repudiable enfermedad del cáncer.
4. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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España: Sevilla. Revista Internacional del Ambiente. 164(1). Pág 333-334.
Recuperado el 13 de Enero del 2020 de: https://eprints.ucm.es/46902/1/Córdoba
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Merino, F. (11 de Septiembre del 2015). Perfil degradativo sobre hidrocarburos de
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Osorio, L. (2016). Acumulación y desorción de plomo en espora y célula vegetativa de
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