Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Los seres vivos están formados por sustancia que están presentes en la materia no viva, pero
dispuestos en una organización particular. Dicha organización y los procesos que caracterizan a los
organismos vivos, pueden ser abordados desde una perspectiva de estudio que se basa en el
concepto de sistema.
Se pueden distinguir dos tipos: los SISTEMAS ABIERTOS, que intercambian materia y energía con el
ambiente, y los SISTEMAS CERRADOS, que intercambian sólo energía.
Los SISTEMAS AISLADOS no intercambian ni materia ni energía con el medio, pero estas son
construcciones teóricas ideales ya que en la realidad no ha sido posible delimitar sistemas de este
tipo.
Todos los seres vivos pueden ser estudiados como sistemas abiertos y complejos. Abiertos porque
intercambian materia y energía con el entorno, complejos debido a su organización, dirigida por la
información contenida en el material genético.
entorno
LOS SERES VIVOS Y LOS INTERCAMBIOS DE MATERIA Y ENERGÍA: LOS SERES VIVOS SON SISTEMAS
ABIERTOS.
Los sistemas biológicos son sistemas abiertos que almacenan y procesan información.
Cuando no hay intercambios con el ambiente, los sistemas evolucionan hacia los estados más
estables, los cuales se denominan: estados de equilibrio interno.
En muchos sistemas, entre ellos los sistemas vivos, se producen intercambios de materia y energía
con el entorno en forma permanente. En estos sistemas también se pueden alcanzar situaciones
de equilibrio entre el organismo y el ambiente que lo rodea, llamado: equilibrio con el entorno.
Los sistemas abiertos pueden alcanzar también estados estables alejados del equilibrio, llamados
estados estacionarios. Los mamíferos mantienen una temperatura corporal de aproximadamente
37ºC de manera independiente de la temperatura del ambiente.
No es lo mismo alimentarse que nutrirse. Nuestro cuerpo necesita energía y sustancias que
obtiene de los alimentos, pero no es lo mismo un alimento que otro.
ALIMENTOS Y NUTRIENTES.
Los alimentos aportan diferentes nutrientes, pero no todos aportan la totalidad de los que el
cuerpo necesita. Por eso, para que el cuerpo esté sano debemos comer alimentos variados. La
“comida chatarra” tiene mucha grasa y, si se comen en exceso, ésta se acumula en el cuerpo y
puede afectar la salud.
TIPOS DE ALIMENTOS.
SEGÚN SU PRINCIPAL FUNCIÓN NUTRITIVA, los alimentos se pueden clasificar en tres grupos:
y calcio).
SEGÚN SU COMPOSICIÓN, los alimentos se pueden clasificar en siete grupos:
El agua es un componente fundamental de la alimentación de todo ser vivo. Por eso se ubica en el
centro de la rueda acompañando a todos los alimentos. También se incluye a personas que están
corriendo, porque, además de una buena alimentación, se recomienda la actividad física para
estar sanos.
Los principales nutrientes aportados suelen ser: carbohidratos o hidratos de carbono, proteínas,
lípidos (grasas, aceites), vitaminas, minerales, agua.
LAS VITAMINAS Y MINERALES SON NUTRIENTES QUE NO APORTAN ENERGÍA, PERO SE NECESITAN
PARA QUE EL CUERPO ESTÉ SANO Y FUNCIONE EN FORMA CORRECTA.
EL AGUA.
ALIMENTOS Y ENERGÍA.
Los componentes de la dieta que pueden aportar energía al organismo son los carbohidratos, los
lípidos y las proteínas. En general, la célula aprovecha los carbohidratos como fuente de energía.
Sólo en caso de que se agoten los carbohidratos, las células recurren a los lípidos almacenados en
el tejido adiposo, los depósitos de grasas bajo la piel; y, a las proteínas como fuente de energía.
UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE
La dieta es aquello que comemos diariamente. Una dieta equilibrada es la que aporta la cantidad y
la calidad adecuada de nutrientes que el organismo necesita para cubrir sus requerimientos de
materia y de energía, y mantener la buena salud. Una alimentación equilibrada debe cumplir con
las siguientes condiciones:
Incluye los diferentes grupos de alimentos, el consumo diario de agua y la actividad física.
Carnes, pescados, huevos, aportan proteínas, Lácteos aportan proteínas, lípidos y carbohidratos,
minerales (hierro y calcio), vitaminas y lípidos. vitaminas y calcio (esencial para huesos y dientes).
Los azúcares
contienen hidratos
de carbono.
El ÓVALO NUTRICIONAL muestra la variedad de alimentos y las proporciones necesarias para una
alimentación saludable. El óvalo se debe leer en sentido inverso a las agujas del reloj. El
componente primero es el agua, después sigue el consumo de hidratos de carbono complejos,
luego alimentos con menor cantidad de hidratos de carbono, pero que incorporan proteínas,
grasas y gran contenido vitamínico. Al finalizar el recorrido, se incluyen alimentos que contienen
proteínas y grasas. Y por último, los alimentos con mayor contenido de grasas y los azúcares.
LA PIRÁMIDE.
El agua está en la base de la pirámide porque es una de las sustancias más importantes para
mantener la salud del organismo.
EL PLATO.
Embarazo: La mujer embarazada necesita un aporte alto de proteínas para formar las
células del bebé, calcio y vitamina D para ayudar a formar sus huesos, hierro para formar
la hemoglobina de su sangre, y ácido fólico (vitamina B) para formar su sistema nervioso.
Lactancia: Aumentar el consumo de proteínas, vitaminas y calcio para producir leche en la
cantidad y la calidad adecuada. Le aporta al bebé defensas contra algunas enfermedades.
Niñez: Los niños hasta los 12 años necesitan una mayor cantidad de alimentos en relación
con su peso que un adulto, ya que el ritmo de producción de nuevas células es muy alto
durante el crecimiento. Además requieren mayor aporte de calcio y vitamina D para la
formación de los huesos.
Adolescencia: Maduración sexual, aumento en la altura y el peso, y los cambios en la
composición corporal. Estos procesos exigen una elevada cantidad de energía y nutrientes,
especialmente vitaminas A, C y D, hierro y calcio, que deben incorporarse en la dieta.
CELIAQUÍA: es la enfermedad que sufren las personas celíacas, y provoca la inflamación intestinal
al exponerse al gluten, un grupo de proteínas presentes en las harinas de trigo, avena, cebada y
centeno (TACC).
MINERALES Y VITAMINAS: IMPORTANCIA EN LA ALIMENTACIÓN Y ENFERMEDADES ASOCIADAS.
La importancia de que las vitaminas estén presentes en toda dieta radica en la incapacidad del
organismo para sintetizarlas a partir de otras sustancias.
Existen diversas vitaminas, cada una de las cuales regula específicamente ciertos procesos
metabólicos.
Los minerales contenidos de los alimentos forman parte de las proteínas, ciertos lípidos y otros
compuestos carbonados, o están disueltos en los líquidos que conforman o rodean los tejidos
animales o vegetales.
Leche: provee de gran parte de los minerales que el cuerpo necesita: calcio, fósforo,
magnesio, sodio, cloro, potasio, azufre y cinc.
Leguminosas: las semillas de plantas leguminosas aportan diversos minerales como
fósforo, magnesio, potasio, azufre, hierro, cinc, cobre y manganeso.
Carnes: son alimentos ricos en varios minerales: la carne bovina aporta fósforo, hierro,
magnesio, sodio, cloro, azufre; el pescado y los mariscos contienen calcio, fósforo, sodio,
azufre, cinc; las aves aportan principalmente fósforo, azufre, cobre, cobalto.
Verduras: brindan principalmente magnesio, potasio, hierro, molibdeno. La espinaca
también aporta flúor.
EL AGUA EN LA DIETA.
Es un componente esencial de todos los tejidos del organismo. La proporción de agua en el cuerpo
siempre es mayor que la del resto de los componentes, aunque varía según la edad y el estado
nutricional de las personas.
El organismo humano no está preparado para almacenar agua. Por lo tanto, la cantidad que se
pierde cada día debe ser repuesta.
Los alimentos de origen vegetal y frutas tienen un mayor contenido de agua que los provenientes
de los animales.
LOS DIFERENTES REQUERIMIENTOS NUTRICIONALES.
Los requerimientos nutricionales de las distintas personas son diferentes, y varían a lo largo de la
vida de cada una. Además, cada actividad requiere de una cantidad de energía determinada.
La dieta de todas las personas debe ser variada, de tal manera que provea de todos los materiales
indispensables para la síntesis de biomoléculas y la cantidad de energía necesaria, según la edad,
el sexo y el tipo de actividades que realizan.
ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA DIGESTIVO.
OBESIDAD Y DESNUTRICIÓN.
DESNUTRICIÓN: Se puede definir como una enfermedad inespecífica, porque presenta síntomas
variados como adelgazamiento y palidez, afecta todos los órganos y sistemas del cuerpo y es,
potencialmente reversible. Esta enfermedad provoca disminución de la tensión arterial,
hipoglucemia y retardo del crecimiento en los niños.
Las siglas TACC corresponden a los nombres de cuatro cereales: trigo, avena, cebada y centeno.
Estos contienen gluten, conjunto de proteínas insolubles en agua, incapaces de ser digeridas por
quienes padecen la enfermedad celíaca. El factor tóxico de la harina de trigo es el gluten.
El hábito de fumar, el uso excesivo de analgésicos o calmantes del dolor, predisponen a contraer
tanto úlcera como gastritis.
Estas señales también estimulan la producción y liberación de gastrina en la sangre. Esta hormona
es producida en el estómago y por vía sanguínea estimula la liberación de jugo gástrico. Cuando la
concentración de este fluido llega a un nivel determinado, se inhibe la secreción de gastrina y, en
consecuencia, de la liberación de jugo gástrico.
Cuando el quimo llega al intestino delgado, la mucosa del duodeno produce y libera en la sangre
otras hormonas.
La acidez del quimo provoca la liberación de secretina. Esta hormona estimula la liberación de
bicarbonato que proviene del páncreas.
El peristaltismo del tubo digestivo es una respuesta refleja que se inicia cuando se distienden sus
paredes.
La frecuencia de las ondas peristálticas depende del tipo de alimentos ingeridos, la estimulación o
la inhibición realizada por el sistema nervioso autónomo y la acción de las hormonas
gastrointestinales.
Gastritis y úlceras.
Enfermedad celíaca.
Diarrea, colitis, estreñimiento y hemorroides: algunos virus, bacterias y otros
microorganismos o sus toxinas pueden provocar la inflamación e infección del colon, es
decir, colitis. La disminución en la absorción de agua y sales puede producir diarrea. El
fenómeno opuesto a la diarrea se denomina estreñimiento o constipación.
Apendicitis: es la inflamación del apéndice. A veces puede perforarse, vaciar el contenido
bacteriano en la cavidad abdominal y producir una infección generalizada con riesgo de
muerte.
Hepatitis: en la mayoría de los casos, la hepatitis o inflamación del hígado es producida
por distintos tipos de virus y, en menor porcentaje, por alcoholismo crónico. Los síntomas
incluyen fiebre, ictericia (color amarillo de la piel, mucosas, ojos y orina oscura) y dolor
abdominal. Pueden ser prevenidas mediante la vacunación.