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I. FINALIDAD.
Establecer los fundamentos doctrinarios para la conducción del Instrumento Militar Terrestre
(IMT)
II. BASES.
- Legales.
• Constitución Nacional.
- Antecedentes doctrinarios.
I
- Publicaciones diversas referidas a los últimos conflictos.
- Observaciones y experiencias de los Cornandos de Grandes Unidades de Batalla, Comando de
Institutos Militares y Jefaturas del EMGE.
- Reglamentación de la Ley de Seguridad Interior (24.059)
- ROD-11-01 "Reglamento de Inteligencia Táctica" Ed 1991.
A. Sostiene la necesaria coherencia conceptual entre la doctrina militar terrestre, la legislación que
regula el campo de la defensa nacional y la doctrina militar conjunta.
D. Abarca la totalidad de las operaciones que podrán ejecutar los distintos niveles orgánicos; no
obstante se tendrá en cuenta que determinadas operaciones serán privativas exclusivamente de
algunos de ellos. La doctrina derivada y de procedimientos definirá las particularidades correspon-
dientes, evitando repeticiones innecesarias.
E. Contempla que las organizaciones que se desenvuelven en el campo de la táctica deberán poseer
la aptitud de materializar las distintas operaciones que mejor sirvan a la concepción estratégica.
G. Puntualiza criterios orgánicos genéricos sólo para establecer la necesaria relación entre los
preceptos y los procedimientos de conducción y los medios.
H. Destaca la condición de aeroterrestre de los actos tácticos ejecutados en el campo de batalla. Las
características que el avance tecnológico han impuesto a la guerra moderna se reflejan en que todas
las acciones terrestres, aún aquéllas llevadas a cabo por los menores niveles de conducción sufren
en mayor o menor grado la influencia del empleo de sistemas de armas aerotácticos.
II
Bases para la conducción adecuadas a la evolución científica y tecnológica.
EL FACTOR ESPACIO
1. Además de la diversidad de ambientes geográficos en donde deberán operar los elementos del IMT
(y que son tratados en detalle en el Capítulo XIII de la presente publicación), existe en nuestra
realidad un factor que obrará como condicionante fundamental, tanto para los niveles de conducción
estratégicos, como para los niveles de conducción tácticos.
Tal factor es el espacio, cuya característica esencial estará dada por su gran amplitud en relación
a la magnitud de fuerzas que, normalmente, se dispondrán.
Establecer una organización territorial adecuada a los medios disponibles, evitando rela-
ciones espacio-fuerzas que induzcan a la dispersión descontrolada de los esfuerzos.
- Emplear el espacio para maniobrar, asegurando la necesaria reunión para combatir (privi-
legio de los principios de maniobra y masa).
III