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La Voz como una Herramienta Psicoterapéutica:


La perspectiva de los terapeutas
Alemka Tomicic, Susanne Bauer,
Claudio Martinez, Alejandro Reinoso y Marco Guzmán*

Resumen

Se estudió la importancia que los psicoterapeutas le asignan a los aspectos no verbales de


sus propias voces y las de sus pacientes. Se aplicó un cuestionario a 25 terapeutas de diferentes
orientaciones teóricas y niveles de experiencia. Sus respuestas fueron analizadas por medio de
procedimientos cualitativos-descriptivos que permitieron conceptualizar y categorizar diferentes
parámetros de la voz, relevantes para la psicoterapia. Emergieron dos categorías centrales: “Cualidad
vocal de los pacientes” y “Uso de la voz como herramienta”. Sus respectivos conceptos y propie-
dades se ilustran con fragmentos de dos entrevistas en profundidad realizadas a psicoterapeutas
expertos. Se discuten las implicancias y alcances de estos resultados y se presentan futuras líneas
de investigación relacionadas con la voz como una herramienta psicoterapéutica.

Palabras clave: voz en psicoterapia, psicoterapeuta, investigación cualitativa, investigación


de proceso.
key words: voice in psychotherapy, psychotherapist, qualitative research, process research.

Si bien la voz humana es considerada la principal vía 1995; Haskard, Williams, DiMatteo, Heritage & Rosenthal,
de materialización de la comunicación verbal oral, los 2008; Rosenthal, Blanck, & Vannicelli, 1984).
llamados parámetros suprasegmentales (e.g., melodía, En lo que respecta a la psicoterapia, la herramienta
acento, ritmo, etc.) que dan una determinada cualidad principal de los psicoterapeutas de diferentes orienta-
al habla, permiten considerarla simultáneamente como ciones teóricas es la palabra, el discurso verbal, expre-
un canal de comunicación no verbal. Es así como a través sado a través de frases como preguntas, afirmaciones,
de las diferentes cualidades de nuestra voz provocamos interpretaciones, indicaciones etc. Existen varias inves-
efectos que son emocionalmente significativos en cual- tigaciones en psicoterapia que analizan ese discurso y
quier interacción (Andersen, 1998). sus contenidos, el tipo y la cantidad de palabras usadas
La investigación básica en emociones ha mostrado durante un proceso psicoterapéutico (e.g. Buchheim &
asociaciones entre las diferentes cualidades vocales, la Mergenthaler, 2001; Czogalik & Russell, 1995; Elliot, et
expresión de contenidos afectivos y el reconocimien- al., 1987; Hölzer, Pokorny, Kächele, 1997; Krause, de la
to de emociones (Gobl & Ni Chasaide, 2003; Jonson, Parra, Arístegui & Strasser, 2008; Mergenthaler, 1996,
Emde, Scherer & Klinnert, 1986; Scherer, 1986; Scherer 2000; Stiles & Shapiro, 1995; Wiser & Goldfried, 1996).
& Bergmann, 1990; Bänzinger & Scherer, 2005). La Sin embargo, poco se ha investigado sobre la contraparte
misma asociación ha sido observada en contextos clí- material del discurso oral en psicoterapia, es decir, la
nicos (Kucharska-Pietura, Nikolaou, Masiak & Treasure, voz de terapeuta y paciente como un elemento que, de
2004). En estudios que han focalizado en la relación manera poco consciente, estaría siempre presente e
medico-paciente y enfermera-paciente se han observado influyendo en la interacción entre ambos.
correlaciones estadísticamente significativas entre el Quizás el primer abordaje empírico sobre la voz en
tono de la voz de los participantes y los resultados del psicoterapia sea de Rice y Wagstaff publicado en 1967.
tratamiento (e.g. Satisfacción de los pacientes, percep- Con el propósito de ganar comprensión sobre el proceso
ción de control, adherencia al tratamiento, salud física psicoterapéutico, estudiaron la relación entre la cualidad
y mental y satisfacción de los médicos) (Hall, Roter, de la voz de los pacientes y los resultados de la terapia.
Milburn & Daltroy, 1996; Hall, Harrigan & Rosenthal, Específicamente, examinaron la cualidad vocal y el estilo
expresivo de los clientes como indicadores de la produc-
* Alemka Tomicic, Susanne Bauer, Claudio Martinez, Alejandro Reinoso
tividad de la psicoterapia. Los autores clasificaron un
y Marco Guzmán. número limitado de patrones vocales que variaban entre
Pontificia Universidad Católica de Chile. los clientes, a través de las sesiones y que permitían
E-Mail: atomicic@uc.cl
REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICA XVIII p.p. 197-207 discriminar entre sesiones buenas o malas según eran
© 2009 Fundación AIGLÉ. categorizadas por los terapeutas. Describieron estos
patrones en términos de energía, tono, rango, tempo,

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patrones de acento, entre otros, distinguiendo cuatro & Bänninger-Huber, 2005; Krause & Merten, 1999), no
patrones de cualidad vocal: emocional, enfocado, exter- constituye aún un objeto de estudio que se indague de
nalizado y limitado. Luego, Rice y Kerr (1986) relacionaron manera sistemática (Tomicic, Martinez, Altimir, Bauer &
estos diferentes patrones vocales de los pacientes con Reinoso, 2009).
los resultados terapéuticos, y distinguieron siete pa- Fritz Perls (1972, en Schmidt-Rath, 1998) enfatizaba
trones de cualidad vocal en el habla de los terapeutas: que “el psicoterapeuta puede trabajar sin ojos, pero no
suave, irregular, natural, definido, restringido, modulado sin oído” haciendo referencia a la importancia que tiene
y limitado. el “Stimmklang” (sonido de la voz) como vehículo del ver-
Posteriormente, en un estudio que focalizaba en las dadero mensaje del paciente. Milton Erickson (1980), por
interacciones de terapeutas y pacientes en momentos su parte, hizo notar que los sonidos y pronunciaciones
de cambio, Wiseman y Rice (1989) encontraron efectos de las palabras o frases, se encuentran íntimamente liga-
significativos de la cualidad vocal del terapeuta sobre la das a la historia de los sujetos que las emiten, dejando
cualidad vocal del cliente. Específicamente observaron huellas a nivel de la memoria implícita. Es decir, dejando
que la cualidad vocal productiva del terapeuta podía un registro no como información almacenada, sino como
predecir un cambio en el paciente hacia un patrón vocal componentes “encarnados” de la experiencia verbal.
enfocado (de conexión con la experiencia). Asimismo, Knoblauch (2000, 2005) sostiene que la voz
Más recientemente, en un estudio de caso único, es el medio principal (aunque no el exclusivo) a través del
Osatuke, et al. (2005) demostraron la importancia de cual ocurre la comunicación verbal en el diálogo psicote-
la cualidad de la voz para distinguir y acceder a la com- rapéutico. Las cualidades vocales como el timbre, ritmo,
prensión de los estados internos de los participantes del tempo, resonancia, control y acento aportarían significa-
diálogo terapéutico. El estudio se basó en el modelo de do y contexto a las palabras habladas (Andersen, 1998) y,
asimilación que sugiere que las voces internas contie- en la interacción terapéutica, los elementos “musicales”
nen experiencias completas, que incluyen aspectos de del discurso pueden devenir una de las principales fuen-
significados y expresivos, entre estos últimos, caracte- tes de información sobre aspectos implícitos y sobre el
rísticas vocales distintivas. Los resultados del estudio sentido de los actos realizados en la comunicación entre
no sólo mostraron que la paciente presentaba voces sus participantes (Knoblauch, 2000).
psicológicamente distintas, sino que también “sonaban” Específicamente, algunos autores se han referido
diferente en función de la voz interna que se expresaba a la importancia de la voz para entender el proceso
en el diálogo terapéutico. Además, la clasificación de psicoterapéutico (Bady, 1985; Beebe, Jaffe, Lachmann,
los extractos realizadas por sujetos no entrenados y sin Feldstein, Crown & Jasnow, 2000), ya sea en la inferencia
experiencia clínica, a partir de las grabaciones de audio, de emociones en el intercambio relacional, como también
mostró mayor confiabilidad que aquellas realizadas a la influencia de las emociones sobre los sonidos del habla
partir de las transcripciones (sin audio) de los mismos (Scherer & Bergmann, 1990). En esta misma línea, se ha
extractos. planteado el potencial curativo de la voz en psicoterapia
La investigación sobre el silencio en el diálogo toda vez que esta es considerada como un reflejo del
psicoterapéutico, como un aspecto específico del es- estado emocional del hablante y como una forma de
tudio de la voz en psicoterapia, ha concitado un interés comunicación no-verbal que permite a quien escucha una
relativamente mayor por parte de los investigadores. comprensión empática del mismo (Bady, 1985).
Por ejemplo, Levitt (2001a, 2001b) investigó y clasificó De particular interés para esta investigación es la ma-
los silencios en psicoterapia reportados por pacientes nera cómo los psicoterapeutas reconocen y emplean en la
adultos y concluyó que el silencio en psicoterapia es un práctica clínica su propia voz y la de sus pacientes como
fenómeno heterogéneo que se manifiesta en pausas de una herramienta útil para la psicoterapia. La relevancia
desvinculación, emocionales, interaccionales, reflexivas, de explorar la perspectiva de los psicoterapeutas está
expresivas, asociativas y mnémicas. Por su parte, Hill, dada por la posibilidad de acceder a un conocimiento co-
Thompson & Ladany (2003), se interesaron por estudiar nectado con su propia experiencia profesional. Asimismo,
el uso que los terapeutas daban al silencio. Encontraron al considerar la perspectiva de los psicoterapeutas, este
que empleaban el silencio para expresar empatía, faci- estudio pretende relevar la importancia de reconocer y
litar reflexión, desafiar a sus pacientes para que tomen sistematizar este aspecto de la comunicación terapéutica
responsabilidades, facilitar la expresión de emociones en las diferentes dimensiones de aplicación de las que
y también para ganar tiempo para pensar sobre lo que dan cuenta los participantes.
iban a decir. En consecuencia, la finalidad de esta investigación
No obstante estos hallazgos, la investigación sobre consistió en profundizar el conocimiento sobre la aso-
el fenómeno de la voz en psicoterapia es insuficiente ciación entre la voz y la psicoterapia desde la perspectiva
y, a diferencia de lo que ocurre con el estudio de otras de los psicoterapeutas. Se buscó responder la siguiente
dimensiones de la comunicación no verbal: e.g. Movi- pregunta de investigación:
miento corporal (Ramseyer & Tschacher, 2006, 2008; ¿Cuál es la importancia y el uso que los psicotera-
Nagaoka & Komori, 2008; Nagaoka, Yoshikawa & Komori, peutas le asignan a la voz en el contexto de la psicote-
2006); Expresión facial (Bänninger-Huber, 1992, 2005; rapia?
Bänninger-Huber & Widmer, 1995; Bänninger-Huber &
Widmer, 2001; Benecke & Krause, 2005; Beneke, Peham

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Método no, Acuña, Fullerton & Castro, 1995; Rioseco, et al, 1994),
en esta segunda sección del cuestionario se incluyeron
El diseño del estudio fue exploratorio-descriptivo. preguntas específicas respecto de este tipo de pacientes.
Consecuentemente, empleando una metodología cua- Por ejemplo, “¿Existe, según usted, una particularidad
litativa, se indagó la perspectiva y experiencia de los en la voz del paciente depresivo? ¿Cuáles son las carac-
psicoterapeutas respecto del uso y la importancia de la terísticas de la voz del paciente depresivo?”;“¿Cree que
voz para la psicoterapia. la voz del paciente depresivo le influye afectivamente o
físicamente? ¿De qué manera?”.
Participantes Los participantes que respondieron los cuestionarios
fueron contactados por dos vías. Se envío el cuestionario
Los participantes correspondieron a 25 psicoterapeu- vía correo electrónico masivo a una lista de distribución
tas residentes en Chile, 18 mujeres y 7 hombres, con un del Instituto Chileno de Terapia Familiar, y se obtuvieron
promedio de 35,5 años de edad. Los criterios de selección 11 respuestas. Además, se repartieron cuestionarios
de los terapeutas fueron que contaran con al menos 3 en un congreso de investigación en psicoterapia, obte-
años de experiencia clínica (el promedio de experiencia niéndose de esta forma 14 respuestas que permitieron
como psicoterapeutas fue de 9 años) y, que en conjunto, completar una muestra de 25 cuestionarios.
representaran diversas escuelas psicoterapéuticas (32% Adicionalmente, con el propósito de profundizar en
Sistémica; 16% Cognitiva-Conductual; 32% Psicodiná- algunos de los resultados que emergieron en el análisis
mica; 8% Humanista-Existencial; 12% otras escuelas descriptivo de las respuestas de los cuestionarios, se rea-
psicoterapéuticas). lizaron dos entrevistas cualitativas semi-estructuradas
(Flick, 2004). Estas entrevistas fueron realizadas por
Técnica de Recolección de Datos e Instrumento uno de los miembros del equipo de investigación a dos
psicoterapeutas chilenos (un hombre y una mujer) de
Para la recolección de datos se utilizó un cuestionario largas y reconocidas trayectorias tanto en el ámbito clí-
de auto-reporte con una consigna de presentación y 26 nico como en el de la investigación en psicoterapia. Para
preguntas de respuestas abiertas. Después de la entre- realizar estas entrevistas se elaboró un guión temático,
vista número 12, el cuestionario fue revisado y se redujo cuya consigna invitaba a los entrevistados a responder
a 20 el número de preguntas pues algunas apuntaban desde su rol y experiencia como psicoterapeutas sobre
a un mismo tema. tres grandes temáticas: (a) “La cualidad de la voz”,
invitándolos a comentar la importancia que adquiere
En la consigna del cuestionario se invitó a los parti- en sus interacciones cotidianas la voz de los otros y la
cipantes a responder desde su rol de psicoterapeutas. propia; (b) “La voz en el contexto psicoterapéutico: El
Además, en esta sección se comprometió el resguardo terapeuta”, invitándolos a caracterizar sus voces como
de su anonimato y de la confidencialidad en el manejo terapeutas y en el proceso psicoterapéutico; y (c) “La voz
de la información otorgada. en el contexto psicoterapéutico: El paciente”, invitándo-
Las preguntas del cuestionario se organizaron en dos los a caracterizar las voces de sus pacientes y su impacto
áreas. El primer grupo de preguntas tenía el propósito de en el proceso y la relación terapéutica. Estas entrevistas
estimular la reflexión sobre la propia voz en contextos fueron grabadas en audio y luego transcriptas.
cotidianos, no psicoterapéuticos. Por ejemplo, “¿Qué
voces le gustan, por lo general? ¿Cuáles no le gustan?
¿Por qué?”; “¿Podría describir las voces agradables de Procedimiento de Análisis
las personas, las voces que le gustan? y ¿Podría describir
las voces desagradables, las que no le gustan?”; “¿Está A las respuestas de los cuestionarios se les aplicó
atento a su voz mientras habla? ¿En que situación/ un análisis cualitativo descriptivo. Específicamente, se
cuándo pone atención a su voz?”; “¿Cómo encuentra su realizó el procedimiento de codificación abierta descrito
propia voz? ¿le gusta – no le gusta? ¿Cómo describiría su en el método de la Teoría Fundada (Grounded Theory;
propia voz, qué calidad tiene?”; “¿Ha observado cambios Charmaz, 2006; Flick, 2004; McLeod, 2001; Strauss &
en su voz, según contexto, situación emocional, personas Corbin, 1990). El propósito de este análisis fue el de ge-
u otras? ¿Qué tipo de cambios?”. nerar conceptos y categorías, respecto a la valoración y
uso de la voz en psicoterapia, a partir de las respuestas
El segundo grupo de preguntas se propuso para in- aportadas por los participantes. Es decir, caracterizar
dagar la importancia asignada a la voz y su uso por parte sus respuestas a través de un proceso inductivo y por
de los participantes en su práctica como psicoterapeutas. medio de dos operaciones analíticas básicas: formularse
Por ejemplo, “¿Está atento a su voz mientras habla con preguntas (¿De qué ‘habla’ este extracto en el marco de
un paciente?”; “¿Qué tipos de voces distingue entre sus nuestra pregunta de investigación?) y hacer comparacio-
pacientes?”; “¿Ha pensado que la voz podría ser una nes (¿Este extracto ‘habla’ de lo ‘mismo’ que ya he con-
herramienta para el proceso psicoterapéutico? ¿Cómo ceptualizado en extractos anteriores?). Como resultado
cree que podría serlo?”; “Si usa la voz como herramienta de este análisis se obtuvieron conceptos y categorías
terapéutica, ¿de qué manera la usa?”. organizadas en esquemas de clasificación jerárquicos
Además, considerando la alta prevalencia de pacien- que se presentan a continuación.
tes con trastornos depresivos en Chile (véase: Florenza-

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Para asegurar la calidad de los resultados, fue em- te, la de los pacientes depresivos. Para ambos casos, los
pleada la estrategia de triangulación de interpretantes psicoterapeutas que participaron en este estudio hacen
(Patton, 1990), participando todos los investigadores en alusión a aspectos sonoros y a aspectos emocionales/
el proceso de análisis cualitativo de los datos, de manera relacionales de la voz.
que las categorías generadas fueron validadas a través Los aspectos sonoros de la voz fueron conceptuali-
de un acuerdo intersubjetivo. Asimismo, la generación de zados como la caracterización que hacen los terapeutas
categorías y subcategorías fue orientada por el criterio de de la voz de los pacientes en términos de ciertos pará-
descripción densa (Ponterotto, 2006), es decir, procuran- metros del sonido: tono (evaluación de lo agudo o grave
do comprender e interpretar contextualizadamente las de la voz), volumen (evaluación de la fuerza o energía
respuestas de los participantes de manera de describir con que se emite la voz), ritmo (caracterización de la
plausiblemente los diversos significados y valoraciones velocidad y fluidez del habla), prosodia (caracterización
que estos le atribuyen a la voz en el contexto psicote- de la melodía del habla) y timbre/color (caracterización
rapéutico. En este mismo sentido, no se buscó obtener del timbre de la voz).
resultados generalizables, sino más bien generativos,
Por su parte, los aspectos emocionales/relacionales
en el sentido de describir la diversidad de expresión del
de la voz fueron conceptualizados como la caracteriza-
fenómeno estudiado e inaugurar una línea de discusión
ción que hacen los terapeutas de la voz de los pacientes
e investigación.
en términos pragmáticos: efecto que suscita en el que
escucha (en el terapeuta en la mayoría de las menciones)
Resultados e intención que permite interpretar en el hablante (el
paciente en todas las menciones).
Del análisis descriptivo de las respuestas dadas por Para ambas dimensiones, sonora y emocional/relacio-
los participantes a los cuestionarios emergieron dos nal, se construyó una subcategoría, llamada no clasifica-
categorías centrales: Cualidad vocal de los pacientes y ble, para dar cuenta de aquellas caracterizaciones que
Uso de la voz como herramienta. correspondían a la definición general de cada dimensión,
pero que no era posible clasificar en las subcategorías
A continuación se expone en detalle cada una de
más específicas ya mencionadas (ver figura 1).
estas categorías con los conceptos y propiedades que
las conforman y se ilustran algunos de sus aspectos más La cualidad vocal de los pacientes en general. Con-
sobresalientes a través de extractos de las entrevistas siderando la dimensión sonora de la voz, los terapeutas
cualitativas realizadas a dos psicoterapeutas. distinguen en las voces de sus pacientes una gama tonal
que va desde tonos muy agudos, pasando por tonos me-
dios, hasta tonos muy graves. Lo mismo ocurre cuando
La Cualidad Vocal de Los Pacientes caracterizan la voz de sus pacientes en términos de la
energía con que suelen emitirla: distinguen voces de
La categoría central, Cualidad vocal de los pacientes, volumen muy bajo, medio/bajo y muy alto. Con respec-
hace referencia a la manera como los terapeutas caracte- to al ritmo, se menciona que el habla de los pacientes
rizan la voz de los pacientes en general y, particularmen- puede ser caracterizada como pausada, con velocidad

Figura 1. Esquema de Clasificación Jerárquico de la Categoría “Cualidad Vocal de los Pacientes”

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media o aumentada. En cuanto a la prosodia, el habla de En cuanto a la dimensión emocional/relacional, se


los pacientes es descrita como regular con inflexiones o identifican en los pacientes voces que concitan una escu-
como un habla monótona. También la caracterizan en tér- cha placentera y que se caracterizan por un color oscuro,
minos de su timbre/color, distinguiendo voces delicadas, por su suavidad y por formar parte de un habla pausada
matizadas y voces roncas. Finalmente, son mencionadas y que impresiona como espontánea. Asimismo, son men-
como características sonoras distinguibles en el habla cionadas voces que propician un habla que impresiona
de los pacientes (no clasificables), voces moduladas, a quien escucha como envolvente, difícil de interrumpir
versátiles y claras, voces con problemas de dicción y, y que permite coordinarse con el otro. Por su parte, el
voces nasales. sarcasmo es la única intención que interpretan, algunos
Además de caracterizar la voz de los pacientes en de los participantes, a partir de las características de la
términos de estos parámetros sonoros, los terapeutas voz en el habla de los pacientes. Como características
la evalúan en términos del agrado o desagrado que pragmáticas de la voz de los pacientes, no clasificables
ésta les provoca. Se aprecia coincidencia en la mención en las categorías de efecto e intención, se mencionan
de que les son desagradables las voces de pacientes voces congruentes con el contenido de lo hablado, voces
que hablan con tonos muy agudos o muy graves, con disociadas con el contenido, voces tristes y quejosas,
un volumen de voz muy alto o muy bajo, cuya velocidad ansiosas y angustiosas, agresivas y furiosas, pasivas y
de habla se encuentra aumentada, que presentan una calmadas y, voces alegres y dulces.
prosodia monótona y una voz con un color muy oscuro En términos de evaluación de agrado y desagrado,
(muy ronca). Asimismo, son mencionadas como caracte- los terapeutas coinciden en que les son desagradables
rísticas desagradables en las voces de los pacientes, los las voces de pacientes que impresionan como disociadas
problemas de dicción y las voces nasales. Por el contrario, con el contenido del habla y, que les resultan agradables
son mencionados como aspectos agradables en las voces las voces que concitan una escucha placentera y que
de los pacientes el tono medio y un volumen moderado, impresionan como coherentes con el contenido de lo
un ritmo de habla pausado, una prosodia regular y con hablado.
inflexiones, y un color de voz delicado y con matices. En el siguiente fragmento de la entrevista en profun-
También son mencionadas como agradables las voces didad realizada al psicoterapeuta, se desarrolla la idea
moduladas, versátiles y claras. de que la cualidad relacional y emocional del habla del
En el siguiente extracto, la psicoterapeuta entrevis- paciente puede ser caracterizada de acuerdo al grado
tada hace referencia a las características sonoras de de asociación o disociación entre la “cognición” y la
las voces de sus pacientes que, en sus términos, le son “emoción”:
“incómodas”: (…) las incongruencias también, sobre todo los
Tonos muy altos, muy agudos, chillones, no es contenidos del discurso y el tono de voz, me hacen
para el espacio terapéutico, de vez en cuando no, si pensar que hay disonancia entre lo que la persona
es entretenido, pero todo en ese tono, es lo único dice que le está pasando y lo que no. Me está con-
que me incomoda, lo otro no (EP I, p. 7). tando una pena y un dolor como quien me habla de
La breve aclaración que la entrevistada hace respecto un proyecto, no, no tiene probablemente los tonos
de que las voces de pacientes caracterizadas por un tono de la pena, ni del susto, “bueno, y esto me da mucho
muy agudo y un volumen muy alto (voces “chillonas”) le susto” dice, pero yo no lo veo ni en sus ojos ni en la
son incómodas en el espacio terapéutico, es interesante voz, ninguna parte el susto. Me pregunto, ¿cuánta
pues permitiría hipotetizar que en otros contextos no lo coherencia habrá entre las cogniciones y las emo-
son necesariamente y que, un cierto tipo de cualidad ciones? (…) (EP II, p. 6).
sonora podría ser más pertinente para la conversación Adicionalmente, destaca en este fragmento el hecho
psicoterapéutica. También, en este caso la terapeuta que el entrevistado distinga modalidades de comunica-
específica que no es el tono y el volumen per se los ción en función del tipo de contenido que transmiten.
que hacen que la voz del paciente le sea desagradable, Así, menciona al discurso, a la comunicación verbal,
sino más bien, la falta de variación en la gama tonal y el como transportadores de una cognición (“bueno, y esto
volumen, es decir, que “toda” el habla sea en ese tono me da mucho susto”) e identifica la expresión facial
de voz y con esa intensidad. (“sus ojos”) y la voz, la comunicación no verbal, como
Sin embargo, el psicoterapeuta entrevistado, men- transportadoras del contenido emocional.
ciona que la voz muy aguda y de volumen muy alto le es La cualidad vocal de los pacientes depresivos. Con
desagradable independiente del contexto de la conver- respecto a la dimensión sonora de la voz, son menciona-
sación e independiente de que quien la emite sea una das como características de la voz del paciente depresivo:
persona que en términos afectivos le sea agradable: tono grave, volumen bajo y susurrante, ritmo lento y
Las voces muy agudas y chillonas me producen pausado, y prosodia sin mayores inflexiones. Asimismo,
un desagrado, a pesar de que la persona en sí me se menciona como una característica del paciente depre-
agrade, pero tengo que hacer un esfuerzo de decir: sivo, variaciones en la sonoridad de su voz asociadas con
“bueno, esta persona me agrada a pesar de que esta una respiración interrumpida, escasa y con suspiros; por
voz me perturba” (EII, p. 1). una falta de energía y; por la emisión de frases cortas.

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Para el caso de la caracterización sonora de la voz en el sentido más médico o más psiquiátrico, digo
del paciente depresivo, los participantes no evalúan en “esta persona puede estar deprimida”, entonces
términos de agrado o desagrado los parámetros sonoros probablemente empiezo a pensar en un diagnóstico
recién descriptos. y empiezo a preguntarle para ver y allí me desacoplo
Esta caracterización sonora de la voz del paciente (…) (EP II, p.7).
depresivo fue señalada en la mayoría de los cuestionarios Ambos entrevistados dan cuenta del desafío que
y, también, por los dos psicoterapeutas a los que se les implica para los psicoterapeutas este efecto de la voz
realizó la entrevista en profundidad: depresiva. En el primer fragmento, la terapeuta señala
(…) escucho una voz depresiva, [cuando escu- que es necesario e importante tener “una variabilidad en
cho] una voz apagada, de bajo volumen, voz como el manejo” y que esta variabilidad incluye las caracterís-
silábica, sobre todo de bajo tono, de bajo volumen, ticas de la voz del terapeuta: “si uno es monocorde, tiene
un discurso más enlentecido. A veces yo me he una misma voz (…) te puedes unir con el paciente y no
visto pensando en que tengo que explorar si es un pasa nada”. En el segundo extracto, el terapeuta señala
cuadro depresivo por el tono en que me habla. (EP que este “acople” con las características de la voz del
II, p.7). paciente depresivo, puede ser útil en un contexto de con-
versación psicoterapéutica en tanto posibilita la empatía
Diría que ellos [los pacientes depresivos] tienen
(“tener una resonancia”). Sin embargo, en el contexto de
un tono de voz que de repente puede, que tiene una
la evaluación psiquiátrica sería necesario desacoplarse
mezcla, porque de repente te vas metiendo y es como
para poder adoptar una actitud más directiva: “empiezo
una cosa media hipnótica, después tiende a ser una
a pensar en un diagnóstico y empiezo a preguntarle para
cosa media aburrida, porque tiene la misma, son más
ver y allí me desacoplo”.
monocordes (…) (EP I, p.5).
Respecto a la dimensión emocional/relacional, los
terapeutas distinguen y mencionan una variada gama El uso de la voz como herramienta.
de efectos que concita la voz del paciente depresivo en
quien escucha. Son mencionados efectos de adormeci- La categoría central, Uso de la voz como herramienta,
miento, aburrimiento, rabia y desesperación. Asimismo, describe las maneras como los terapeutas dicen emplear
se señala que en ocasiones puede concitar mayor aten- la voz como un instrumento para el trabajo psicoterapéu-
ción y empatía y, que en otras, puede provocar efectos tico: como una herramienta de comunicación y como una
de mimesis generando reacciones emocionales de herramienta para el cambio.
compasión, ansiedad, impaciencia y molestia. Además, Al referir el uso de la voz como una herramienta de
se indica que puede provocar que el tono de voz del comunicación, los participantes distinguen la manera
terapeuta se vuelva más claro y resolutivo, pudiendo como ésta es usada por el paciente y el terapeuta en el
incluso afectar su postura corporal. Por su parte, los contexto psicoterapéutico. Por su parte, al referir el uso
terapeutas coinciden en que la intención que la voz del de la voz como una herramienta para el cambio, los tera-
paciente depresivo permite interpretar, es la de denotar peutas distinguen entre su uso para generar, mantener,
tristeza y angustia. Finalmente, es mencionada una voz modificar y evaluar el clima emocional en la sesión, su
apagada, como característica pragmática de la voz del uso como un marcador de contexto durante el proceso
paciente depresivo no clasificable en las categorías de psicoterapéutico, y su uso como una técnica específica
efecto e intención. de intervención (ver figura 2).
En términos de evaluación de agrado y desagrado, Uso de la voz como una herramienta de comunica-
sólo son evaluados como desagradables los efectos de ción. Los participantes mencionan que tanto el paciente
somnolencia, aburrimiento, desesperación y rabia que como el terapeuta emplean la voz en la interacción psi-
concita la voz del paciente depresivo. coterapéutica como una herramienta de comunicación
En los siguientes extractos, los dos psicoterapeutas afectiva. Para el caso del paciente, es mencionado que
ilustran la manera como la voz del paciente depresivo, emplea su voz para comunicar sentimientos y emociones,
en su dimensión emocional y relacional, puede provocar para llamar la atención del otro y, para influir en el clima
en el terapeuta un efecto de mimesis: emocional y en la relación con el terapeuta. Para el caso
del terapeuta (es decir ellos mismos) se señala que la
Con ellos [los pacientes depresivos] siento que es
voz es empleada para posibilitar la sincronización con el
muy importante que el terapeuta tenga variabilidad
paciente; para calmar, contener y comunicar compren-
en el manejo, es decir, si uno es monocorde, tiene
sión al paciente; para reflejar los estados emocionales
una misma voz, siento que te puedes unir con el
del paciente; y para regular la duración de los silencios
paciente y no pasa nada, nos lateamos mutuamente
y las expresiones verbales del paciente.
y no se avanza nada. (EP I, p.5).
El siguiente fragmento de la entrevista en profundi-
Yo creo que [la voz depresiva] me hace cosas
dad realizada a la psicoterapeuta, ilustra la manera como
distintas, yo creo que si estoy en un contexto psico-
la voz es utilizada como una herramienta de comunica-
terapéutico probablemente voy a tener una resonan-
ción afectiva en la psicoterapia:
cia con esa voz y probablemente me influya, en el
sentido que empiezo a hablar con voz baja. Pero si (…) además he notado el impacto [de la voz] en
de repente en ese momento me encuentro pensando una relación terapéutica, lo significativo que tiene

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Figura 2. Esquema de Clasificación Jerárquico de la Categoría “Uso de la Voz como Herramienta”

en el paciente que uno adecue los ritmos, el tono, a variación intencional del volumen y el ritmo del habla
lo que él está sintiendo (…) que uno pueda cambiar como una forma de modificar el clima emocional en la
la inflexión de la voz en relación a lo que pasó (…) y sesión: una elevación del volumen y una velocidad au-
cuando eso no se da, cuando cada uno sigue en su mentada en el habla del terapeuta permitiría estimular
discurso, en su forma sin tener en cuenta, sin consi- la acción, mientras que una disminución del volumen y
derar que al otro le están pasando cosas, eso implica de la velocidad del habla promovería un clima relajado y
un quiebre de la relación, o sea no definitivo, pero un de reflexión. En este mismo sentido, se señala que la voz
impasse, que hay que manejarlo (EP I, p. 3). puede ser usada para evaluar el clima emocional de la
Adicionalmente, los participantes mencionan que sesión: un tono de voz medio, pausado y con inflexiones
el terapeuta emplea la voz como una herramienta de podría ser indicativo de una sesión relajada, mientras que
comunicación, en tanto constituye una fuente de infor- una voz firme y fuerte o insegura podría ser indicativa de
mación que permite la comprensión de ciertos aspectos una sesión tensa y hostil.
de relevancia implicados en el proceso psicoterapéutico. Por ejemplo, en los siguientes dos fragmentos de
De esta manera, se señala el uso de la voz como una la entrevista realizada al psicoterapeuta, se ilustra la
herramienta para comprender y obtener información manera como la voz puede ser una herramienta para
sobre el paciente. Específicamente, es mencionada la generar, mantener y modificar un determinado clima
evaluación de la congruencia o disociación del paciente emocional en la sesión:
atendiendo a la relación de las características de su voz Y una parte muy importante de este clima tendría
con su estado emocional. Asimismo, se menciona la que ver con la voz. De hecho a veces, en sesiones
valoración de las características de la voz del paciente como que escucho con el oído, sin saber mucho lo
como una fuente de información para tomar decisiones que se está diciendo, pero me fijo –no sé si puedo
sobre las intervenciones que el terapeuta considera aislar específicamente la voz- pero me fijo en la voz,
realizar, tal como es ilustrado en el siguiente fragmento la mirada, en los gestos, para ver como es la danza
de la entrevista a la psicoterapeuta: sin la música (…) me parece que la pena tiene una
(…) cuán apagada o cuán viva es una voz, me melodía, o la rabia tiene otra melodía, o el miedo
pude decir algo del tono afectivo, cuán matizado o tiene otra melodía y, esta melodía junto a la melodía
cuán monocorde, también me da información, sobre de otra, no? (…) (EP II, p.5).
todo del mundo afectivo, y por ejemplo, si [el pacien- (…) hay características de la voz que permiten
te] me está diciendo [algo] con voz apagada, enton- que uno pueda crear ciertos climas en los cuales
ces, le digo, con igual voz del paciente: “si, esto es es más posible que la persona se contacte con sus
interesante”. Si, pero la voz me está diciendo que emociones (…) una voz de bajo volumen, que es
no, no está resonando [con lo que dice]. Entonces lenta, cada vez más lenta, tiene bastante pausas y
los cambios de voz son para mí significativos antes silencios, consiste en arrastrar las vocales, cuando
de ir viendo el proceso de terapia (EP I, p.5). uno dice “uuuuuna y otra vez” o “capaz que hace
Uso de la voz como una herramienta para el cambio. muuuuucho tiempo”, eso en general, como una
Los terapeutas señalan emplear la voz en la psicoterapia perdida de la temporalidad, ¿no? (EP II, p.8)
como una herramienta para generar y mantener el clima Con respecto al uso de la voz como un marcador
emocional. Por ejemplo, es mencionado el uso de un de contexto durante el proceso psicoterapéutico, se
tono de voz relajado y apacible para generar y mantener menciona que algunas de las características de la voz
un clima emocional cálido. Asimismo, se menciona la del paciente y el terapeuta pueden variar, señalando

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diferentes momentos de la sesión y fases del proceso cálido, sino más firme probablemente, pero también
psicoterapéutico. Específicamente, se señala que el divertido (…) (EP II, p.11)
tono de la voz varía en concordancia con los diferentes Finalmente, respecto al uso de la voz como una
momentos de la sesión y que, incluso, a través de su herramienta para el cambio, los terapeutas mencionan
voz el terapeuta puede contribuir a generar el ritmo de emplear su propia voz como técnica específica de inter-
la sesión. También se menciona que la voz de los par- vención. Por ejemplo, es mencionado el uso combinado
ticipantes varía de acuerdo con el timing y la evolución de la voz con otras técnicas: para apoyar la realización
del proceso psicoterapéutico. de imaginerías y ejercicios corporales, para posibilitar la
En los siguientes fragmentos extraídos de la entrevis- regresión, y para apoyar otras técnicas psicoterapéuticas
ta realizada a la psicoterapeuta, es ilustrada la manera como la indicación, la clarificación, la confrontación, el se-
como ella utiliza su voz para señalar diferentes fases ñalamiento, la interpretación y la devolución, variando la
del procesos psicoterapéutico y diferentes momentos velocidad, el ritmo, la cadencia, el volumen y el timbre en
de la sesión. Específicamente, muestra que mediante el el habla. También es mencionado el uso de la voz como
apareamiento de su voz con la del paciente marca ciertas una técnica por si sola: variando características sonoras
características del inicio del proceso psicoterapéutico y, del habla del terapeuta para modificar estados mentales,
como mediante las variaciones en su voz puede anunciar para mostrar al paciente la cualidad emocional de su voz,
la finalización de la sesión: para animar al paciente a probar otros tonos de voz y,
(…) yo entiendo que muy frecuentemente con el para marcar momentos de insight a través de la entona-
paciente yo tengo que aparearme en las primeras ción y de esta manera reforzar el mensaje terapéutico. Y,
sesiones y a lo mejor de allí, a lo mejor cambiar el por último, se señala el uso de la voz como un contenido
ritmo, hay pacientes que son muy agudos o hablan a trabajar con una determinada técnica: para ayudar al
muy alto, entonces, claro, si empiezo a hablar muy paciente a reconocer la relación entre las características
bajito no más, no me va a escuchar, tengo que hablar de su voz y sus características relacionales.
en el mismo tono, pero una vez que estoy apareada En el siguiente fragmento, el terapeuta entrevistado,
yo voy bajando el tono y con eso voy regulando el explica la manera en que la voz puede constituir una
tono del paciente también (EP I, p.3). herramienta para el cambio psicoterapéutico, enten-
(…) para marcar el término de una sesión yo ten- diéndola como una técnica de apoyo y refuerzo en la
go cambios comportamentales y cambios de voz (…) dimensión afectiva de la intervención verbal realizada
subir un poquito, marcar distinto es como indicador en una dimensión más cognitiva:
que la sesión se está terminando (…) (EP I, p. 1). (…) cómo alguien me reciba lo que yo le digo, es
El uso de la voz como un marcador de contexto tam- fundamentalmente un código auditivo. Porque si yo
bién es señalado por los participantes, cuando este se le digo: “¿Qué le parece lo que yo le digo”? “Bueno,
refiere a la evolución de la relación terapéutica. En este sí”. Si no lo oyó como una conmoción emocional, yo
caso se menciona que la voz del terapeuta puede variar digo es una cosa que rebotó, en realidad, a pesar que
de acuerdo a las necesidades interaccionales particulares me lo diga por una cosa educativa: “no, es intere-
de cada paciente, que puede ser usada para establecer sante lo que usted me dice, no lo había pensado así”
límites, orden y llamar la atención del paciente, para etcétera, empieza una teorización respecto a eso.
modular la expresión vocal del paciente, para generar Pero probablemente, si yo hago una intervención y
confianza, empatía y transmitir neutralidad y, para lo primero que tengo es un silencio reflexivo, un rato
agradar al paciente. y después una voz que empieza lentamente y tal vez
errática, yo digo , yo digo, “aquí algo ocurrió (…) un
En los siguientes fragmentos, el psicoterapeuta en-
cambio, una sorpresa de la nueva perspectiva” (…)
trevistado, explica la manera como utiliza su voz como
(EP II, p.10).
una herramienta que contribuye a la relación terapéutica.
Específicamente, ilustra cómo la emplea y la varía para
ajustarse a las necesidades interaccionales de distintos Discusión
tipos de pacientes:
(…) Yo, cuando estoy con niños [en la terapia] Las y los psicoterapeutas que participaron en este
probablemente les hablo más juguetonamente (…) estudio, proveyeron una sólida fuente de información
Creo que es más rápido, me parece que con más sobre el uso de la voz en el contexto psicoterapéutico.
fluctuaciones probablemente, tanto en el tono como Junto con prestar atención y asignarle importancia a
en el volumen, me parece que cuando juego estoy sus propias voces y la de los otros, fueron capaces de
cambiando de tono, estoy cambiando frecuencia y distinguir matices en diferentes aspectos de la voz, dife-
volumen.(EP II, p.11) renciando su uso específico en el ámbito de la práctica
(… ) con hombres y mujeres tengo un tono [de profesional de la psicoterapia del uso atribuido a diversos
voz] probablemente distinto (…) con las mujeres un ámbitos de la vida cotidiana. Esto permitió la emergen-
tono más afectuoso, entre ternura y comprensión, en cia de las dos categorías centrales que constituyen los
cambio con los hombres un estilo más compadrado, resultados obtenidos.
como hablando entre hombres, que es como no tan Respecto a la primera categoría, la cualidad vocal
de los pacientes, y específicamente la cualidad vocal

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de los pacientes en general, los terapeutas reportaron de la voz como marcador de cambios durante el proceso
preferir un nivel medio en todos los aspectos sonoros psicoterapéutico y uso de la voz para la realización de
de la voz y rechazar las manifestaciones extremas de intervenciones específicas.
cada uno de estos parámetros. Por su parte, la voz de De este segundo hallazgo, dos aspectos llaman es-
los pacientes depresivos fue calificada como más cercana pecialmente la atención. En primer lugar, los terapeutas
a uno de dichos extremos: voces muy graves y bajas, entrevistados parecen contar con un know how -un saber
enlentecidas, suspiradas y monótonas. Es claro que, hacer- respecto de cómo y con qué características sono-
aunque explícitamente los terapeutas no las evaluaron ras particulares del habla es posible producir cambios
en términos de agrado o desagrado, la coincidencia de tanto en el clima emocional como en el contexto de
estos aspectos de las “voces depresivas” con aquellos trabajo terapéutico, incluso en el mismo paciente. Esto
que fueron evaluados como desagradables en el caso es especialmente llamativo considerando que todos los
de las voces de los pacientes en general, sugiere que la entrevistados manifestaron explícitamente no haber
cualidad de la voz de estos pacientes no sería agradable tenido en su formación, aproximación específica alguna
para los terapeutas. a temáticas relacionadas con la voz en la conversación
Considerando la dimensión relacional y emocional de terapéutica. En segundo lugar, y cuando nos centramos
la cualidad de la voz de los pacientes en general y de los en las menciones sobre el uso de la cualidad vocal como
pacientes depresivos, en particular, es posible apreciar un marcador de contexto, en la mayoría de los casos los
que todas las características de la voz a las cuales los participantes del estudio refirieron emplear las variacio-
terapeutas les atribuyen efectos placenteros, fueron nes sonoras del habla para trabajar y desarrollar la rela-
evaluadas de manera positiva. Asimismo, la congruencia ción y la alianza terapéutica. Esto último es interesante
entre la cualidad vocal y el contenido del discurso del si se considera que algunos autores han planteado que
paciente también fue evaluada positivamente por los buena parte de la relación terapéutica se construye en
participantes de este estudio. un nivel subsimbólico y no verbal (Bucci, 2007).
Estos primeros hallazgos parecen de relevancia por Por último, aún cuando los resultados de este estudio
dos razones. En primer lugar, muestran que los tera- muestran que los terapeutas entrevistados dan cuenta
peutas entrevistados son capaces de distinguir matices de un conocimiento bastante consciente sobre cuándo y
sonoros entre la variedad de sus pacientes, y de manera cómo utilizar la voz en la psicoterapia como una forma de
específica y consensuada, características particulares comunicación no verbal y como una herramienta de inter-
en la voz de pacientes depresivos. Esto indica que los vención, lo cierto es que este conocimiento se encuentra
terapeutas no sólo prestan atención al contenido de lo en un nivel intuitivo y conectado principalmente con su
que sus pacientes dicen, sino también a la manera en experiencia y práctica profesional, no constituyendo un
que este discurso se materializa y adquiere un sentido saber-saber sistematizado. Por su parte, las escuelas
relacional y emocional a través de sus características psicoterapéuticas tradicionales y sus programas de
sonoras. En segundo lugar, la caracterización y evalua- entrenamiento académico no consideran la voz como
ción, en términos de agrado y desagrado, de la voz de una herramienta específica. En este sentido, resultados
los pacientes en general y de los pacientes depresivos como los aquí presentados muestran la importancia de
en particular, revela la importancia de algunos aspectos continuar investigando sobre la voz (y otros canales de
implícitos presentes en el espacio psicoterapéutico y su comunicación no verbal) en el espacio psicoterapéutico,
posible impacto en la generación de un vínculo positivo así como también, nos enseñan la relevancia de incor-
o negativo entre el terapeuta y el paciente. En este sen- porar estas reflexiones en la formación y supervisión de
tido, se hace evidente el peso que adquiere la cualidad los psicoterapeutas.
de la voz en la construcción relacional con los pacientes
y genera un interrogante respecto de la consciencia que
tienen o no los terapeutas de este poder.
Respecto a la segunda categoría, el uso de la voz
como una herramienta, los resultados muestran que los BIBLIOGRAFÍA
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